ANECDOTA

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Hace cuatro años, un día como hoy, una semana antes de la tragedia compre un

concentrado de horchata. Me estuve tomando ese concentrado durante de esa semana


porque se me hacía de buen sabor. El jueves por la noche me empezó a doler el estómago
y le comente a mi mamá que me dolía y ella me dijo que me acostara un rato y me dio un
ibuprofeno para el dolor.

Ya era viernes de nuevo y el dolor aún no se me quitaba, mi mama de nuevo me dio otro
ibuprofeno y me dijo que de nuevo me fuera a dormir. Se dio el sábado y aun me dolía y
me dolía solo que mi mamá pensaba otras cosas, se dio el domingo y el estómago AUN ME
DOLIA y mi mamá cada vez dudaba más si eran las cosas las cuales pensaba. Se dio el
lunes y mi mamá se fue a trabajar a las 4 de la mañana solo que para este entonces el
dolor ya era insoportable, desde que se fue mi mama no pude dormir en toda la noche
porque de verdad ya no aguantaba el dolor, para este entonces solo había tomado un
suero que me dejo mi mamá, pero lo vomite todo.

Mi mamá llego a las 11 de la mañana y ahora si preocupo porque vio que no me pare
desde que se fue y mucho menos dormí, le dije que de verdad ya no aguantaba y del dolor
no podía ni respirar, mi mamá le marco a una doctora que es compañera suya y le dijo que
donde me dolía y yo le señale la boca del estómago y mi mama de dijo que era y la
doctora le dijo que tenía apendicitis.

Mi mamá le marco a mi papá su actual pareja, él estaba trabajando pero apenas escucho y
paso por nosotras. Recuerdo ese día como si hubiera sido ayer ya que mi papá pasó en su
camioneta del trabajo y yo sentía en el estómago cada bachecito en la calle, yo sentía el
movimiento de la camioneta en el estómago y no podía respirar nada. Cuando llegamos al
hospital estaba muy estricto el higiene ya que estábamos en pleno año del covid-19 y
como llegue sin poder respirar, mi mama me dijo que tratara de respirar tranquila porque
me iban a asociar a las pacientes con covid y que no me atenderían rápido. Me acostaron
en una camilla en el área de pediatría y enfrente de mi había una niña la cual estaba toda
sangrada y vendada de la cara, escuche que a ella la mordió un perro.

A mí solo llegaban y me apretaban el estómago, me atendieron al día siguiente y esa


noche fue la peor pero no como las noches que estaban por venir, al día siguiente en el
día de la operación me pusieron anestesia de la que es inalada y solo recuerdo que me
empezaron a amarrar ala camilla en la que estaba me amarraron los brazos y los pies y
recuerdo que quería ver que sucedía y lo último que escuche fue a una mujer decirme te
vamos a poner tantita anestesia y cuando apenas le iba a contestar empecé a ver todo
borroso y de un minuto a otro todo daba vueltas, recuerdo que en ese cuarto había un
cristal tipo de color negro y de la nada al estar dando vueltas ese color negro se hizo rosa,
y de la nada comencé a ver tipo unas escaleras ,pero todo daba vueltas muy rápido y
salían figuras y colores que en un principio no estaban, abrí los ojos y sentí muchos
foquitos que alumbraban muy fuerte y sentí como tiraban un cordoncito en mi estómago,
que era el que me estaba operando jalando el hilo con el que cerro lo que me hizo, solo
que me asuste porque lo primero que hice fue intentar moverme, pero como estaba
amarrada no podía hacer nada . Una mujer me empezó a acariciar el cabello y le pregunte
que cuanto tiempo tenia allí y me dijo que dos horas y media y eso me asusto más porque
yo al ver las imágenes esas sentí que duro muy poco y me asusto saber que llevaba hay
mucho tiempo, lo raro fue que sentí como me caía una lagrima del ojo y fue muy raro
porque yo no recuerdo haber llorado, fue muy extraño.

Cuando Salí de esto me llevaron a otro cuarto justo saliendo del de la operación y vi a un
señor alado de mí que supongo que igual lo acababan de operar solo que estaba muy
cocido de toda la cara y los brazos y no tenía parte del cabello solo se veía una parte roja y
eso me dio mucho asco y a la vez mucha tristeza por él.

Ya saliendo de ahí lo primero que vi fue a mi mama que estaba toda cansada por que no
durmió nada desde el tiempo que estábamos allí. Me llevaron a otro cuarto donde había
otros niños, solo que me toco justo enfrente de la puerta de salida, recuerdo que todo el
tiempo que estuve allí me daban una gelatina horrible que sabía horrible y me dijeron que
era de soya y no tenía azúcar. Mi mama me daba de comer la comida que daban allí, me
daban huevito con papas sin sal, uvas, y una sopa que también sabia horrible. Me comí
todo menos la gelatina y mi mama me estaba obligando a comérmela y le dije que sabía
horrible y me dijo que no y le dije pruébala, y en eso la probo y solo se le vio en los ojos el
asco y me dijo está bien ya no te la comas.

Después de ya no sentir dolor, me acorde en la mañana que era 2 de noviembre y 2 de


noviembre y en un hospital no es una muy buena idea, hice todo lo posible por salir ese
día y que no me tocara quedarme otro día, me tuve que comer la gelatina horrible, me
comí la sopa horrible y un agua de sandía SIN AZUCAR, todo con tal de que me dejaran
salir temprano y si, si lo logre.

Consecuencias que me trajo esta anécdota. ODIO LA GELATINA, LA HORCHATA Y LA


COMIDA SIN SAL.

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