Sistema Respiratorio
Sistema Respiratorio
Sistema Respiratorio
El sistema respiratorio humano, asi como de otros vertebrados que respiran aire, está
formado por los pulmones y el sistema de tubos a través de los cuales llega el aire hasta
ellos. El aire ingresa al cuerpo a través de las fosas nasales externas,que desembocan en
las cavidades nasales, pares,las cavidades nasales pares se encuentran separadas por una
pared de cartílago, del tabique nasal.Desde las paredes laterales de cada una de las
paredes nasales,asoman tres protuberancias, llamadas cornetes, cuya función es
incrementar el área superficial por la que pasa el aire en su trayecto hacia los pulmones. El
epitelio olfatorio,que es el órgano del olfato, se localiza en el techo de la cavidad nasal.
Las cavidades nasales están recubiertas por un epitelio ciliado completo con células
secretoras de moco. Dichas células producen más de 400 ml de moco al día,con lo que el
epitelio siempre está recubierto por una delgada capa de moco en la que son atrapadas
partículas de polvo presentes en el aire inhalado. La actividad de los cilios mueve una
banda continua de moco hacia la garganta, desde donde se deglute junto con la saliva. De
esa manera, las partículas de polvo se envían al aparato digestivo, que dispone de ellas, y
la delicada región inferior del aparato respiratorio que queda protegido del contacto con
tales partículas.
Las cavidades nasales se comunican con los senos, pequeñas cavidades de los huesos del
cráneo. El moco los huesos del cráneo . El moco producido por el recubrimiento epitelial de
los senos escurre hacia la nariz. Cuando los capilares de los senos o las cavidades nasales
se dilatan durante una infección o reacción alérgica, el líquido se acumula en los tejidos,
que se hinchan. Esto último, junto con la secreción de cantidades extra de moco, produce la
sensación de congestionamiento que acompaña a los resfriados y la fiebre de heno.
El aire pasa a través de las fosas nasales internas hasta la faringe. Ya sea que el aire
ingrese a través de la nariz o la boca, finalmente llega hasta la faringe. Sin embargo, la
respiración nasal es más adecuada que la bucal, ya que el aire que pasa por la nariz se
filtra, humedece y tibia.
Un orificio situado en el piso de la faringe conduce hacia la laringe, que se observa
extremadamente como la manzana de Adan. En casi todos los mamíferos, la laringe
contiene cuerdas vocales, pliegues del epitelio que vibran y producen sonidos conforme el
aire pasa sobre ellos. Ciertos músculos ajustan la tensión de las cuerdas, con lo que se
logra producir sonidos de agudeza o gravedad (tono) variables.
La epiglotis es un pliegue de tejido que cierra en forma automática la laringe en el momento
de la deglución, de modo que ni el agua penetra en el conducto respiratorio. De vez en
cuando ese mecanismo falla y el alimento entra en la laringe. Cuando cualquier materia
extraña se pone en contacto con la laringe, se inicia un reflejo de tos. La tos sirve para
expulsar del aparato respiratorio los materiales extraños. Si la tos no empuja hacia fuera el
alimento o lo que haya entrado, cabe la posibilidad de que la laringe se ocluya, lo que da
por resultado un atragantamiento.
Desde la laringe, el aire entra en la traquea.Al igual que la laringe, la tráquea se sostiene
por anillos del cartílago en sus paredes. Dichos anillos son necesarios porque la presión
traqueal es menor que la presión atmosférica durante la inhalación. A nivel de la primera
costilla, la tráquea se ramifica para originar dos bronquios cartilaginosos, uno para cada
pulmón. Dentro del pulmón, cada bronquio se ramifica en conductos cada vez más
pequeños, los cuales, después de varias ramificaciones dan origen a los delgados
bronquiolos. Estos últimos se ramifican muchas veces hasta convertirse en conductos cada
vez más pequeños, los cuales terminan en racimos de alvéolos.
Las delgadísimas paredes de los alvéolos (que solo tienen una célula de espesor) permiten
que los gases se difunden a través de ellos con gran facilidad.
Los alvéolos están cubiertos por una delgada película de una proteína lipídica, parecida a
los detergentes, a la que se denomina tensoactiva, lo que facilita su expansión al reducir la
tensión superficial. Cada alveolo está envuelto por una red de capilares. Así sólo hay dos
membranas separando el aire del interior de los alvéolos de la sangre: el epitelio de la pared
alveolar y el endotelio de los vasos capilares.
Tanto la tráquea como los bronquios están recubiertos internamente por un epitelio ciliado,
el cual contiene células secretoras de moco. Las partículas de polvo y las bacterias quedan
atrapadas por la película de moco que recubre las células. Luego el movimiento de los cilios
empuja el moco lleno de polvo hacia la faringe, desde donde es deglutido. Este mecanismo
impide que las materia extrañas entren a los pulmones y podría describirse como un
elevador de moco impulsado por cilios.
Sin embargo, no hay moco ni células ciliadas en los bronquiolos mas delgados ni en los
alvéolos, por lo que las partículas extrañas más finas, como las del humo del tabaco,
ingresan hasta los alvéolos y permanecen ahí por tiempo indefinido o hasta que son
fagocitados por los macrogafos. Esos macrogafos se acumulan en los nódulos linfáticos de
los pulmones, ennegreciendolos de manera permanente.
Los pulmones son grandes órganos esponjosos pares que ocupan la cavidad toráxica. Cada
pulmón, así como la cavidad en la que se encuentran, está cubierto por una delgada capa
de epitelio liso llamada pleura. El espacio potencial entre la pleura que reviste los pulmones
y la que recubre la cavidad torácica, recibe el nombre de cavidad pleural. La presencia de
una delgada película de líquido sobre la pleura, mantiene húmeda esa membrana y permite
que el pulmón se mueva con libertad dentro de la cavidad torácica durante los movimientos
respiratorios y con fricción mínima. La inflamación de la pleura, llamada pleuresía, tiene
como consecuencia la secreción de líquido hacia la cavidad pleural, ocasionando mucho
dolor cuando la persona respira.
La cavidad torácica está cerrada y no se comunica de ninguna manera con la atmósfera
exterior ni con cavidad alguna. Se encuentra delimitada por arriba y los lados por la caja
torácica, formada por las costillas, mientras que por debajo la limita el diafragma, que es
muy fuerte y tiene forma de un domo.
Por dentro, cada pulmón consta de bronquiolos,alvéolos y grandes redes de vasos
capilares, todo sostenido por tejido conectivo rico en fibras elásticas. También están
presentes tejidos linfáticos y nervios. El área superficial disponible para la respiración en los
pulmones es increíble: más de 50 veces el área de la piel, lo que equivale aproximadamente
a la superficie de una cancha de tenis
medida que el volumen en los pulmones aumenta, la presión del aire disminuye e
ingresa el aire. Durante la exhalación normal, los músculos se relajan. Los pulmones
se vuelven más pequeños, la presión del aire aumenta y este se expele.
● La respiración externa intercambia gases entre los pulmones y el torrente sanguíneo
Dentro de los pulmones, el oxígeno se intercambia por dióxido de carbono de
desecho a través del proceso denominado respiración externa. Este proceso tiene
lugar en cientos de millones de sacos microscópicos denominados alvéolos. El
oxígeno del aire inhalado difunde de los alvéolos a los capilares pulmonares que los
rodean. Se une a las moléculas de hemoglobina en los glóbulos rojos y es
bombeado por el torrente sanguíneo. Mientras tanto, el dióxido de carbono de la
sangre desoxigenada difunde de los capilares a los alvéolos y es eliminado mediante
la exhalación.
● La respiración interna intercambia gases entre el torrente sanguíneo y los tejidos del
cuerpo
El torrente sanguíneo lleva oxígeno a las células y elimina el dióxido de carbono de
desecho a través de la respiración interna. En este proceso, los glóbulos rojos
transportan oxígeno absorbido de los pulmones por todo el cuerpo, a través de la
vasculatura. Cuando la sangre oxigenada llega a los capilares estrechos, los
glóbulos rojos liberan el oxígeno. Este difunde por las paredes de los capilares hacia
los tejidos del cuerpo. Mientras tanto, el dióxido de carbono difunde de los tejidos a
los glóbulos rojos y el plasma. La sangre desoxigenada transporta el dióxido de
carbono de regreso a los pulmones para ser eliminado.
● El aire que hace vibrar las cuerdas vocales crea sonidos
La fonación es la creación de sonido mediante estructuras que se encuentran en las
vías respiratorias superiores. Durante la exhalación, el aire pasa de los pulmones
por la laringe. Cuando hablamos, músculos en la laringe mueven los cartílagos
aritenoides. Los cartílagos aritenoides juntan las cuerdas vocales, o pliegues
vocales. Cuando las cuerdas se unen, el aire que pasa entre ellas las hace vibrar, lo
que crea sonidos. Una mayor tensión de las cuerdas vocales crea vibraciones más
rápidas y sonidos más agudos. Con una tensión menor, la vibración es más lenta y
el sonido es más grave.
● La olfacción, u olfato, es una sensación química
El proceso de la olfacción comienza en las fibras olfatorias que recubren las
cavidades nasales dentro de la nariz. A medida que el aire ingresa en las cavidades,
algunas sustancias químicas del aire se unen a receptores del sistema nervioso en
los cilios y las activan. Este estímulo envía una señal al encéfalo: las neuronas
llevan la señal desde las cavidades nasales a través de orificios en el hueso
etmoides, hasta los bulbos olfatorios. La señal luego viaja desde los bulbos
olfatorios, a lo largo del nervio craneal 1, al área olfatoria de la corteza cerebral.
Mecánica de la respiración:
La respiración es el proceso mecánico por el cual se introduce aire en los pulmones(
inhalación) y se extrae de ellos( exhalación). el oxígeno se está moviendo continuamente
desde el aire que llena los alvéolos hacia la sangre, mientras que el dióxido de carbono se
mueve en el sentido contrario. Para que la cantidad de oxígeno presente en los pulmones
se mantenga relativamente constante, es necesario reemplazar de manera continua el aire
alveolar por aire fresco. En el adulto un reposo, el ciclo normal de respiración se repite
unas 12 veces por minuto. En los humanos y otros mamíferos, las costillas, músculos del
pecho y diafragma se mueven con facilidad, lo que permite incrementar o reducir el
volumen torácico a voluntad. Durante la inhalación, los músculos de las costillas se
contraen, tirando de los extremos frontales de las costillas hacia arriba y afuera, una
acción que es posible gracias a la articulación tipo bisagra entre las costillas y las vértebras.
El diafragma se contrae a sí mismo, volviéndose menos convexo, lo que también
incrementa el volumen de la cavidad toráxica. Conforme el pecho se expande, la capa de
líquido de la pleura tira de las paredes membranosas de los pulmones hacia afuera, junto
con las paredes torácicas lo que incrementa el espacio que hay dentro de cada pulmón. las
moléculas de aire presentes en el interior del pulmón, ahora disponen de más espacios
donde moverse, de modo que la presión pulmonar interna se reduce hasta alcanzar dos o
tres milímetros Hg por debajo de la presión atmosférica. En ese momento, el aire
proveniente de fuera del cuerpo penetra por las vías respiratorias y llena los pulmones hasta
que las presiones se vuelven a igualar.
La exhalación se verifica cuando el diafragma y los músculos torácicos se relajan. Cuando
los músculos intercostales se relajan, las costillas regresan a su posición original. El
relajamiento simultáneo del diafragma permite que los órganos abdominales lo empujen
hacia su posición original convexa. El volumen de la cavidad torácica disminuye de esa
manera y, por tanto, la presión dentro de los pulmones aumenta dos o tres milímetros Hg
por encima de la presión atmosférica. Los alvéolos( elásticos) distendidos recuperan su
tamaño normal, expulsando el aire que fue inhalado y llevando la presión pulmonar al nivel
atmosférico normal. Así, al inhalar, los millones de alvéolos microscópicos se llenan de
aire como si fueran globos, mientras que al exhalar el aire escapa de ellos, desinflándose
parcialmente.
Video: https://www.youtube.com/watch?v=VFL9NTfSLSs
Volumen respiratorio:
La cantidad de aire que entra y sale de los pulmones en cada respiración normal, se
denomina volumen de ventilación pulmonar. El volumen de ventilación pulmonar normal de
un varón adulto joven es de unos 500 ml la capacidad vital es la máxima cantidad de aire
que una persona es capaz de exhalar después de haber llenado sus pulmones al máximo.
puesto que la capacidad vital Es mayor que el volumen de ventilación pulmonar, los
pulmones no se vacían por completo para llenarse otra vez con aire nuevo en cada
respiración. Por ese motivo, el aire alveolar contiene menos oxígeno y más dióxido de
carbono que el aire atmosférico. el aire exhalado sin embargo, tan solo perdió una cuarta
parte de su oxígeno, por lo que puede inhalarse nuevamente, una verdadera fortuna para
quienes necesitan respiración artificial boca a boca.
Intercambio de gases en los pulmones:
Después de que los pulmones fueron ventilados, el oxígeno presente en los alvéolos debe
pasar a los capilares pulmonares, Mientras que el dióxido de carbono presenta en la sangre
debe pasar hacia los alvéolos. puesto que suele haber una mayor concentración de
oxígeno en los alvéolos pulmonares que en la sangre de los capilares. Por lo contrario, la
concentración de dióxido de carbono suele ser mayor en la sangre de los capilares que en
los alvéolos, de modo que este gas se difunde en el sentido opuesto de la sangre al aire
alveolar.
El factor que determina el sentido y la velocidad de la difusión, es la presión parcial del
gas. Conforme a la ley de Dalton de las presiones parciales, en de la mezcla es igual a la
suma de las presiones de los gases individuales. cada gas ejerce, independientemente de
los demás, la misma presión que ejercería si estuviera solo. La presión de la atmósfera de
la Tierra, es decir, la presión barométrica, al nivel del mar, es capaz de sostener una
columna de Mercurio(Hg) de 760 mm de altura. puesto que la atmósfera contiene
aproximadamente 0,21 x 760 mm Hg= 160 mm Hg. De ese modo, 160 mm Hg es la presión
parcial del oxígeno, lo que se abrevia PO2.
La sangre pasa a través de los capilares pulmonares con tan rapidez, que no es posible
equilibrarla por completo con el aire de los alvéolos. Así, la presión parcial del oxígeno en
la sangre arterial es de unos 100 mm Hg. La PO2(presión parcial del oxígeno) en los
tejidos, varía desde 0 hasta 40, por lo que ese gas se difunde desde los capilares hacia los
tejidos. no todo el oxígeno sale de la sangre, sin embargo, ya que el tránsito de esta a
través de los capilares de los tejidos, es demasiado rápido para que se alcance un
equilibrio; Por ese motivo, la presión parcial del oxígeno en la sangre venosa que regresa
a los pulmones es de unos 40 mm Hg.
Ave
Las aberturas nasales externas, comunican con las aberturas nasales internas, o coanas,
que se hallan en la parte superior de la cavidad bucal. En el suelo de la faringe está la
glotis, que consiste en una hendidura, la cual se continúa con la tráquea, flexible pero
reforzada por cartílagos de forma anular, parcialmente calcificados. La tráquea desciende
por el cuello hasta la siringe, dentro de la cual están los músculos vocales. desde la siringe
un corto bronquio conduce a cada pulmón. En el pulmón hay numerosas cámaras
pequeñas e interconectadas que se abren a otras cámaras mayores, los bronquiolos, los
cuales permiten que el aire atraviese todo el pulmón. Los bronquiolos se comunican con los
bronquios y con los sacos aéreos, que se extienden entre el órgano en la cavidad del
cuerpo, a los espacios que rodean a las vértebras cervicales y a los huesos mayores. El
aire es inspirado por movimientos de los músculos intercostales (el esternón se desplaza
hacia abajo y las costillas se arquean lateralmente) y de los músculos abdominales, la
contracción del tórax invierte el flujo de la corriente de aire. En la inspiración un poco de
aire entra en el bronquio y en su mayor parte pasa de largo del pulmón y penetra en los
sacos aéreos posteriores. En la inspiración el aire penetra en el pulmón. En la inspiración
siguiente, cuando vuelve a entrar otro poco de aire y llena los sacos posteriores, el aire
que ya había de la primera inspiración pasa a los sacos anteriores. Luego con la segunda
aspiración, el aire de los sacos anteriores es expedido hacia los bronquios y al exterior al
tiempo que la segunda porción de aire pasa de los pulmones a los sacos anteriores. De
esta forma se mantiene un flujo de aire continuo de una sola dirección a través del pulmón.
Esta dirección es opuesta a la del flujo sanguíneo con lo que se crea una contracorriente.
Esto explica la eficacia de las aves para la extracción de oxígeno y su capacidad de volar a
grandes alturas. Los sacos aéreos tienen además otra función. Son el medio principal de
disipación del calor producido por la contracción muscular y otras actividades metabólicas.
El canto y las notas de reclamo de las aves son producidos por el aire que es forzado a
través de las membranas existentes en las paredes de la siringe, que vibran y pueden
variar de tensión para dar notas de diferentes tonos.
Saltamontes
Los espiráculos, pares comunican con un sistema de tubos aéreos elásticos ectodérmicos,
o tráqueas que se ramifican por todas las partes del cuerpo. Las ramas más finas o
traqueolas, llevan oxígeno a las células de los tejidos y eliminan de las mismas el anhídrido
Carbónico. La pared de las tráqueas está formada por una capa única de células delgadas
que secreta un revestimiento de cutícula ( que se desprende de las mudas) y los tubos
mayores están reforzados por un filamento en espiral que impide que se cierren. unos
troncos aéreos longitudinales comunican con el espiráculo de cada lado. El saltamontes A
diferencia de otros insectos posee en el abdomen varios sacos aéreos de paredes delgadas
donde la contracción y relajación alternada de la pared del cuerpo sirve para inspirar y
espirar el aire. En la inspiración los cuatro primeros pares de espiráculos están abiertos y
los seis posteriores están cerrados, y en la inspiración la situación es inversa de manera
que la circulación del aire está las tráqueas se verifica en un sentido definido. Las
traquéolas más finas contienen un líquido en el cual se disuelve el oxígeno antes de llegar a
las células de los tejidos. Algunos insectos perjudiciales se pueden matar empleando
películas de aceite, emulsiones o polvos que cubren u obturan los espiráculos impidiendo la
respiración.
Respiración branquial
Las branquias son estructuras respiratorias que se observan sobre todo en animales
acuáticos, ya que se sustentan por medio del agua y tienden a colapsar en el aire. Se trata
de estructuras delgadas y húmedas que se proyectan hacia afuera de la superficie del
cuerpo. En muchos animales, la superficie externa de las branquias está expuesta al agua,
mientras que el lado interno se encuentra en contacto íntimo con las redes de vasos
sanguíneos.
Peces óseos:
Cada una de las branquias de los peces óseos consta de muchos flamencos, los cuales
tienen una enorme área superficial para el intercambio gaseoso.
Los filamentos se extienden hacia el agua, la cual fluye sobre ellos de manera continua.
Existe también una red capilar que envía sangre hacia las membranas capilares, facilitando
la difusión del oxígeno y del dióxido de carbono entre la sangre y el agua. El sentido del flujo
sanguíneo incrementa la eficacia del sistema: la sangre fluye en sentido contrario al del
agua. Esta disposición, llamada sistema intercambio a contracorriente, maximiza la
diferencia en la contracción de oxígeno entre la sangre y el agua.
La perca respira mediante branquias, que son cuatro en una cámara branquial común a
cada lado de la faringe y están cubiertas por el operculo.
Una branquia consiste en una doble hilera de largos filamentos branquiales: cada filamento
posee numerosas placas transversas, pequeñas, cubiertas por un fino epitelio y que
contienen capilares entre las arterias branquiales y aferentes y eferentes. Cada branquia
está sostenida por un arco branquial cartilaginoso, y en su borde interno posee rastrillos
branquiales que la protegen contra las partículas duras e impiden el paso del alimento por
las aberturas branquiales.
Al “respirar”, los opérculos se cierran y la cavidad bucal se agranda, con lo que el agua fluye
hacia dentro de la boca. Simultáneamente las cámaras branquiales se ensanchan y se
produce una presión inferior a la de dentro de la boca, y el agua fluye por encima de las
branquias. entonces la cavidad bucal se contrae y fuerza el agua a través de las aperturas
operculares. De esta forma la cavidad bucal y la cámara branquial funcionan
alternativamente como bomba de aspiración y bomba de presión para mantener un flujo
constante de agua a través de las branquias. Cada branquia tiene una doble hilera de
filamentos que, durante la respiración se curvan hacia fuera, separándose y tocando los
filamentos de la branquia vecina. la dirección del flujo sanguíneo en las láminas branquiales
eso cuesta a la del flujo del agua a través de ellas, mecanismo que asegura una completa
oxigenación de la sangre. La sangre pobre en oxígeno que penetra en las láminas se cruza
con la corriente del agua, que tiene un mayor contenido de oxígeno, mientras se dirige hacia
el lado opuesto. así la sangre se oxigena durante todo su camino a través de las branquias.
El pez necesita un suministro constante de agua, portadora de oxígeno, y pronto muere por
asfixia si se le saca el agua o si el agua está desoxigenada. en cambio, los. algunas sí. Un
gran saco de paredes delgadas, la vejiga natatoria, ocupa la parte dorsal de la cavidad del
cuerpo. En algunos peces peces está conectada con la faringe por un conducto neumático,
especialmente las especies de radios blandos, pero no en la Perca o en formas de radios
espinosos. La vejiga natatoria está llena de gases (O, N, CO2) y funciona como órgano
hidrostático para ayudar el peso específico del cuerpo al del agua a distintas profundidades.
mediante la expulsión o absorción de gases por los vasos sanguíneos la pared de la vejiga.