2023 Libro Poemario Interactua 21 Mar

II Concurs de
poesia de la
Plataforma
InteractUA
II Concurso
de poesía de
la Plataforma
InteractUA
2023
@culturaenlaUA
II Concurs Dia Mundial de la Poesia 2023
de poesia
de la Pla- Dins de la programació d’activitats al voltant
del Dia Mundial de la Poesia, i continuant amb
taforma l’aposta pel talent creatiu del nostre alumnat
InteractUA la Universitat d’Alacant i el Vicerectorat
de Cultura, Esport i Extensió Universitària
presenten el II Poemari de la Plataforma
InteractUA.
Aquesta plataforma pretén ser un espai en
què joves artistes i creadors de la Universitat
d’Alacant puguen potenciar les seues
inquietuds i capacitats creatives i artístiques
i des del qual el Vicerectorat n’afavorisca la
visibilitat de cara a la comunitat universitària i,
fins i tot, la ciutat.
Els textos ací recollits són el resultat del
II Concurs de Poesia de la Plataforma
InteractUA, un conjunt de creacions de
sensibilitat i veu poètica diferent, una mostra
dels diferents camins expressius escollits
pels autors i les autores però amb un element
comú: la potència de la mirada i l’escriptura.
Aquests poemes seran recitats en el Recital
de Poesia Jove de la Plataforma InteractUA
del Dia de la Poesia 2023.
Vicerrectorat de Cultura, Esport i Extensió

Universitaria
II Concurs de poesia de la
Plataforma InteractUA 2
II Concurso Día Mundial de la Poesía 2023
de poesía
de la Plata- Dentro de la programación de actividades
en torno al Día Mundial de la Poesía, y
forma Inte- continuando con la apuesta por el talento
ractUA creativo de nuestro alumnado, la Universidad
de Alicante y el Vicerrectorado de Cultura,
Deporte y Extensión Universitaria presentan el
II Poemario de la Plataforma InteractUA.
Dicha plataforma pretende ser un espacio
donde jóvenes artistas y creadores de la
Universidad de Alicante puedan potenciar
sus inquietudes y capacidades creativas y
artísticas y desde donde el Vicerrectorado
favorezca su visibilidad de cara a la
comunidad universitaria e, incluso, la ciudad.
Los textos aquí recogidos son el resultado
del II Concurso de Poesía de la Plataforma
InteractUA, un conjunto de creaciones de
distinta sensibilidad y voz poética, una
muestra de los diferentes caminos expresivos
escogidos por sus autores y autoras pero con
un elemento común: la potencia de la mirada
y la escritura.
Estos poemas serán recitados en el Recital de
Poesía Joven de la Plataforma InteractUA del
Día de la Poesía 2023.
Vicerrectorado de Cultura, Deporte y Extensión

Universitaria
3
II Concurso de poesía de la
Plataforma InteractUA
II Concurs
de poesia
de la Plata-
forma Inte-
ractUA
II Concurso
de poesía
de la Plata-
forma Inte-
ractUA
AUTORÍA TEXTOS POEMARIO
De camino al otoño. Eva Prats Torres.

Ganadora texto poético en castellano
Supose. Cristina Bernabeu López.

Ganadora texto poético en valenciano
Eat(me) at. Gema Clemente Reina.

Ganadora texto poético en inglés
A contracorriente. Claudia López Martínez.

Del Equinoccio al Solsticio. Laura Martínez Martínez.
El hostal eterno. Tatyana Guadalupe Vilaplana Pintos.
La memoria de la piel. Irene Sánchez Velasco.
Norepinefrina. David Castro Melián.
Diario de un corazón herido. María Arpa Pérez.
Pies negros caminan bajo el Bronx. Nahuel Curti Grau.
Quizás por la carretera de Sintra. Ximo Tro Martin.
Soneto final. Francisco Vicente García Irles.
Última voluntad. María Teresa Mateo Pastor.
Un día entre mayo y abril (tú y yo). Gema Clemente Reina.
Oroneta. Iker Navarro Camacho.
Pacific. Tatyana Guadalupe Vilaplana Pintos.
Sundaland. Álvaro Navarro López-Menchero.
5
Guanyadors
Ganadores
Supose
Cristina Bernabeu López.
Ganadora texto poético en valenciano
Mire al cel sense la urgència

de qui busca alguna cosa.
No igual al pit. Al cim n’és
gran, una,
després
del
plor.
Fins i tot l’hivern passava,

recordes? Els noms prohibits
o els símptomes o ja els dies
que s’auguraven els últims.
Però no trobe la forma

de fer físiques raons
però tu encara m’escoltes
i la urgència s’assimila.
I hui se’m promet un riu

al fons d’una nit molt fosca
on a cada passa tempte
la sort de ser en verb i or.
I ho sent i em cega el cresol que

eres tu
en esta nit tan fosca que
soc jo.
7
De camino al otoño
Eva Prats Torres
Ganadora texto poético en castellano
De camino al otoño
las bandadas de estorninos
compiten con el ruido de la
ciudad y llaman la atención
de los transeúntes,
acercándose cada vez más.
De camino al otoño
los atardeceres se agolpan
y hacen cola para refulgir
y juegan a inventar los colores.
Al tiempo que muestran la sangre
de las batallas, de las heridas que
se curan bajo las sábanas del invierno.
De camino al otoño
las especies que habitan
en los bosques recónditos
saben lo que es la velocidad,
saben lo que es crearla
y pasar a través y verlo todo borroso.
Y ver, percibir el ligero cambio día a día;

y ver las partículas de oro
que se instalan en las hojas,
que se instalan como escamas pesadas.
De camino al otoño
la despedida se hunde
cada vez más, y duele más,
y grita más, y lloro más.
El abismo del adiós incondicional
cada vez es más grande,
y tengo miedo de caer, ¡que no quiero!
De camino al otoño
las emociones sienten el mismo
miedo que las gotas de lluvia precoces, que
saben que condensarán ipso facto con el sol del
mediodía, con el sol de la rutina.
De camino al otoño, primer verano.

De camino al otoño, sigo buscando
9
Eat (me)at
Gema Clemente Reina
Ganadora texto poético en inglés
I invite you to dinner

in my little house
at the corner of a river
beyond the green clouds.
If I show you my bug collection,

will you show me yours?
Mine lives in the ground,
yours in vast commodious towns.
We can talk about the future,

what’s your opinion about the war?
Dreams and debenture,
you can tell me everything you want.
I’m not following your campaign, after all.
I keep a part of the world

as my father told me to do so.
He used to hate people like you,
he never trusted your work.
He grew his own food

and planted his own bills
and drank his own water
and wore his own beliefs.
So, I’ll serve you lamb from my garden
and you may bring people tear’s wine.
I bet you can’t wait to try mine,
but I’m too little to feed you for dine.
Oh, big and in a suit man,

what are you really thinking
with all this lives in your hands?
I wish I could grasp
where your regrets are.
Meanwhile, we would dance

on the red carpet of the tax.
The cries of my own people
is the music of the siècle
because I want it to be so.
And I’ll pay for the shoes

and I’ll pay for the dress
and I’ll pay for the blood
and I’ll pay for the rest
and I’ll pay.
11
A contracorriente
Claudia López Martínez
Pájaro del campo, pájaro libre,

Desde que naciste,
Siempre supiste lo que quisiste.
Veo un rayo de sol en una mente inquieta,
Un alma libre se esconde,
Llena de fuerza interna responde.
Coge vuelo,
Le tiemblan las piernas en senda abierta,
No habrá quien le frene ni ordene,
Llueva o truene,
Se opongan o te condenen,
Vuela alto que tú puedes.

No te entienden,
No comprenden ese loco sueño que tienes.
Lo desvalorizan, lo infravaloran,
Pero paciencia y ganas te caracterizan,
Y eso me tranquiliza.
Siéntete agradecido de lo que tuviste,
Lo que tienes
Y lo que está por llegar.
Sabes de sobra que,
Tu constancia,
Te hará brillar.

No te dejes engañar,
No te dejes ilusionar,
No te dejes atrapar.
Si yo fuera tú, si tuviese tu edad,
Eso es lo que te diría, echa a volar.
Cuando sientas vértigo en tu vuelo,

Recuerda que eres como aquellos que un día fueron al cielo.
Visualiza, arriesga, experimenta,
Como te decían pajarillo, la vida es nuestra,
Y no sabemos cuánto tiempo tenemos extra.
Sé feliz, se tú.
13
Del equinoccio (I)
Laura Martínez Martínez
Me vive el silbo imperioso

del color espeso, ensimismado;
la retórica del gesto doloso,
la lírica en un verso tiznado.
Me vive el rojo en el olvido,
la marca del dolor silenciado;
la voz de un testimonio perdido,
el hervor de un día abandonado.
Pues en la fuerza del desaliento
me vive estática su mirada;
el pasaje cotidiano, lento,
su figura triste, atormentada.
Me vive un rojo que no es color.
Me vive olvido que no olvida.
Me vive marca que no es dolor.
Fuerza que, ni es fuerza, ni es vida.
Martínez Martínez Laura
Al solsticio (II)
Junto a la calidez más radiante

mi viaje descubre su destino.
Aguardas solo y aterido,
al encuentro de mi luz cambiante.
Bajo la materia del olvido
toda mi música apremiaba.
Mientras él, que al compás danzaba,
perseguía un sueño perdido.
Yo viviendo el luto de soñar;
tú, el responsable de mi suerte.
Por nosotros no pasó la muerte,
pues contigo me he de salvar.
Y allí, nombrando sinfonía,
velando retórica emoción;
pedía susurrante al corazón
de su iluminada armonía.
15
El hostal eterno
Tatyana Guadalupe Vilaplana Pintos
No la encontré en mi mochila ayer

ni hoy en mi maletín...
¿Y tendrá un agujero mi bolsillo?
No noto la llave que abre mi infancia,

y sin candado, se me vuela y se me escapa...
No me siento atada
a nada
de lo que fui.
Solo juego a hacer apuestas,

intentando adivinar, a ciegas,
qué puertas atravesé
y en qué pasillos me perdí.
¿Dónde están todos mis cuentos?

¿Qué fue de mis malos sueños?
¿Se me fugaron las nanas y los monstruos
cuando me di la vuelta?
¿Adónde han ido las hadas blancas?
¿Y las negras?
¿Adónde van las niñas a morir?
Vivo por tumbarme al lado de ellas

—calladita, tan ausente—,
a recuperar lo mío
mientras arde el maletín.
Mientras me hielan la sangre, en silencio,
las canciones favoritas que ya no recuerdo…
Dibujos, regazos, mascotas, promesas, palabras:
La rabia.
Porque me faltan las llaves y el candado

y me he quedado sola en el hostal,
eternamente apostando,
y nunca sabré lo que perdí.
¿De dónde vienen las mujeres

cuando van las niñas a morir?
17
La memoria de la piel
Irene Sánchez Velasco
Ella sabe todos los caminos

que llevan a tu nombre
y reconocería tus caricias
entre mil manos distintas.
Los pelos de punta

también son lenguaje
pero el idioma de la conexión
es algo que solo el roce conoce.
Descifrar enigmas con las yemas

no pasa con cualquiera,
y aquí estás tú,
leyéndome como si estuviera
hecha de braille.
Se equivocan,
la piel también tiene memoria,
y estoy segura
de que a la mía le sería imposible
olvidarse de tu tacto.
Norepinefrina
David Castro Melián
Tengo tu soplo en el corazón…

Tengo un suspiro tuyo.
Creando arritmias en el músculo del amor.
¿Por qué te quiero con el corazón si amar se ama con
la mente?
¿Por qué te deseo con la mente si desear se desea con
el corazón?
Junto a la glándula de las
pesadillas y el órgano del
placer paradisíaco.
¿Por qué me late el
corazón?
¿Estarán tus recuerdos
encasillados entre mis costillas?
Recorriendo mi espina un reflejo que,
condicionado
se activa ante tu presencia.
El arsénico fluyendo por mis venas.
Crisol, de cuerpos
sudorosos,
exaltados,
alcoholizados,
el humo de tus besos inhalado
apretando mi pecho,
apretando lo que por ti
siento.
19
Diario de un corazón herido
María Arpa Pérez
Una vez decidí amar

sin que me importaran las consecuencias.
Una vez decidí amar con el corazón.
Amé cada una de sus sombras,
de sus caras,
de sus defectos.
Fui desmontando cada una de sus capas

hasta conocer cada rincón de su piel,
hasta curar cada herida,
hasta descubrir por qué sus ojos no brillaban
y su corazón no latía.
Entonces, me di cuenta de que

no se puede salvar
a quien no quiere ser salvado,
de que el tiempo no siempre cura
y de que el amor no lo puede todo.
Una vez me lancé al vacío

cargando una mochila de recuerdos
con la esperanza de olvidar.
Y me olvidé de que los recuerdos
pesan más que las ganas de volar.
___________________
Fuimos dos rectas

que se encontraron en un mismo espacio
pese a estar en coordenadas distintas.
Fuimos dos rectas
con ganas de cortarse en un mismo punto
y a la vez de ser infinitas,
un idílico oxímoron
que estaba fuera de nuestro alcance.
Fuimos partícipes de una historia efímera

donde la luna fue testigo
de cada caricia,
de cada beso.
Fuimos estrellas fugaces

en un cielo demasiado oscuro
como para apreciar el brillo
de nuestros ojos.
Fuimos nómadas
en la orilla de una playa virgen
que hicimos nuestra cada noche.
Pero el verano murió

y a nosotros todavía
nos quemaba el corazón.
Por eso te diré que

fuimos las ganas de serlo todo
sin saber que la prisa por desnudarnos
acabaría matándonos.
Y ahora tan solo somos canciones

llenas de polvo y recuerdos hundidos
que luchan cada noche por salir a flote.
21
Pies negros caminan bajo el Bronx
Nahuel Curti Grau
¿Estáis jugando a que no me escucháis?
Entra al vagón,
chanclas de cartón y pelo negro,
pies negros,
ojos negros.
¿Alguien puede escucharme?

No hay respuesta, nadie.
Mira a la gente.
No le miran.
Habla y no le escuchan.
Llora y no le ayudan.
Por favor, hablad conmigo,
Ayudadme,
gritan sus ojos mojados por una lluvia solitaria.
Y cambia de vagón.
¿Estáis jugando a que no me escucháis?
Pantalón rajado por la espalda,
— columna de cartón — .
Escuchadme, por favor.
¡Silencio!
Que alguien me escuche.

¿Por qué todo el mundo juega?
Por qué mi mente juega.
¡Para!
¡Espera!
¡Calla!
Soneto final
Francisco Vicente García Irles.
Es este un vasto mundo ambivalente

en aras de una lujuria inmolada.
Es esta una realidad desalmada
en pos de una verdad inexistente.
Fugitivo y de mi presencia ausente,

cavilando bajo una luz dorada,
es mi vano pensar muerte y espada,
es criminal y también confidente.
Ya es la quimérica hora del final,

ya no escucho la melodiosa orquesta.
Se acabó la sinfonía fatal.
Sumido en mi última y mayor gesta

rememoro mi existencia frugal:
yo viví una frágil existencia impuesta.
23
Quizás por la carretera de Sintra…
Ximo Tro Martin
Conduzco solo,
otra vez mano a mano,
la carretera y yo, después de tanto
todavía me da miedo.
Pienso en los viajes que me quedan,

algunos sin saber el camino,
siguiendo un dispositivo
como quien sigue a un profeta.
Y eso me da miedo.
Ir por donde no he ido,
incluso más que ir por donde fui.
Pero el destino me espera.
El destino del camino

o el de la vida.
Pienso, mientras conduzco,
que soy un cobarde.
Tengo miedo a las alturas,

a los caminos inexplorados,
a los animales, en fin,
tengo miedo a la muerte.
Aún así aumento mi mapa,

pero siempre con miedo.
Si la vida oliese el miedo,
me habría atacado hace años.
Espero que me quede una larga vida,
sólo tengo 23 años.
Pero luego caigo en que si vivo mucho,
muchos de esos años no habré vivido.
Así que acelero, piso fuerte.

Pero es un acto momentáneo,
un intento de gritar:
“quiero vivir”.
Entonces bajo el ritmo,

varios coches me adelantan.
Algunos conducen como locos
y yo conduzco locamente.
Locamente porque conduzco aún con miedo,

sabiendo que me dirijo a un fin, a un destino,
¿no vale la pena disfrutar de la conducción?
En la carretera ...o en la vida.
Alguien cercano murió hace unos meses,

y yo todavía no lo creo. No lo acepto.
En mis memorias con ella
yo iba en el asiento de atrás.
Ahora conduzco, solo,

y pronto alguien irá detrás.
Quizás no, pero sé que el volante
es lo último que me queda.
25
Última voluntad
María Teresa Mateo Pastor
Moriré cautiva de mis propias represiones

Moriré sin llegar a confiar jamás
Desearía haber aprendido a arriesgarme
Desearía no haber tenido que arriesgar
Si tras la muerte hay algo nuevo y diferente

Lloraré y gritaré
Allí por fin declararé mi libertad
Oroneta
Iker Navarro Camacho
La saviesa pinta les plomes de verd oliva, però al món encara es

sent captiva. A la reunió el balancí no es mou, encara que tothom
l’observa quan l’oroneta cau. En l’iris blau de qui no veu, les ombres
són fugaces, però el record és etern com el cigne blanc de vides
passades. Quan la ploma cau, la vida l’arreplega, i quan l’oroneta ja
no controla el vol, l’arquer la soterra i resa per l’ànima, sempre amb
la ullada invisible d’aquell que al voltant camina. Amb una palmada
i el so d’un tocadiscos d’altra dècada, el que recorda reviu la ploma i
el que plora la soterra per segona vegada. L’esquelet ressorgeix en-
tre les herbes color sépia i una floridura cobreix l’os que anys arrere
no es diferenciava d’una branca, la carícia de la pluja decora el cel
de cendra i mentre el somiador demana un bes d’or, la cançó conti-
nua sonant a través de les notes del vent ensordidor. En l’eternitat
de l’efímer, l’ombra ja no reconeix què és cel i què és terra, el que
passeja pel camí que es parteix en tres troba la pedra blanca que
en negra es convertirà, i quan la cançó es mor, el tocadiscos enca-
ra gira per despertar el record que s’enfonsa en la nota eterna que
s’amaga en el cor.
27
Un día entre mayo y abril (tú y yo)
Gema Clemente Reina
Un día entre mayo y abril (tú y yo)

Un día me sonrió la hoja en blanco
y como si fueran tus dientes
y las palabras fueran tus labios
me llené la boca con papel para ver si podía vomitar al besarte.
Un día perdí un poema

y qué importa si fueron más
y lo hice queriendo que no los leas
puedes tragarte mi lengua para ver si algo de la tinta te envenena.
Un día fui mariposa

y más bien fui mantequilla
y tú la mosca que duró dos días
del mes de febrero que me tiraron a la basura porque me rozaste.
Y un día mi hermana pequeña

habló de salir con sus amigos
recordé los amigos de tus amigos que nunca quise cerca
y respondí que odio a los niños.
Porque un día estaba nublado

y me mentiste que amabas la lluvia
y descubrí que la amabas como a mí
desde la ventana de tu cuarto donde ninguna de las dos ensucia.
Otro día te quise tocar
y como si fueras un piano de cola
y yo una guitarra española
ninguno tocó a nadie y los dos somos de cuerda.
Pero un día,
y un solo día,
te canté una canción
de esas que bailan las amapolas,
de esas que suenan en el viento de verano,
de esas que no se dedican.
Y fue ese día
que sin flor
sin euforia
sin piano
sin brisa
escuché, olí y sentí nuestra última poesía.
Y que puedes dar todos los besos que quieras

y que puedes ser el mejor bailando
y que puedes ser mi agua de mayo,
pero yo, tu abril, ya pasó mi amado,
y ya no nos queda primavera
ni hojas...
ni blanco.
29
Pacific
Tatyana Guadalupe Vilaplana Pintos
I know what this is.

times change and the minds changed
conjure up several ways to go astray.
And it tastes like salt, but it’s inevitable.
I know all the words ever spoken

of lost youth and ships sunk.
I know the lure of universal despair,
of being born forever a bit too late.
I know what this is.

the cross-armed young bodies
surely lying on the shore
only to be eaten up by the midnight tide
of rushed and bored?
Surely everyone has seen this,
surely everybody knows.
And it stains like oil, but it’s inevitable.
There are no names there by the sea;

no further paths when innocence is lost and wonder calcified.
How did the ages get us here?
All the young men that go West end up tired of what they find—
there is no truce in the Pacific
And I know why this is.

Times change and limbs get rusted and wills do too.
But I hope I’ll raise up from the grave every so often
and cross my fingers before I do my arms,
never one too many times
(and I hope it’s inevitable).
Sundaland
Álvaro Navarro López-Menchero
Everything happens,
everybody runs.
This is the life’s paradox,
I suppose.
When you have time,
you have no knowledge.
When you have knowledge,
you have less time go make use of it.
Life’s hard, life’s Gof, life’s gone, life’s closed.
We cannot take advantage,
we cannot cheat time,
we cannot bite life,
we cannot be God.
As the rain in Sundaland,
every day it crashes,
anytime, the water will come for us.
31
@culturaenlaUA

2023 Libro Poemario Interactua 21 Mar

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Vicerrectorado de Cultura, Deporte y Extensión

De camino al otoño. Eva Prats Torres.

Supose. Cristina Bernabeu López.

Eat(me) at. Gema Clemente Reina.

A contracorriente. Claudia López Martínez.

Mire al cel sense la urgència

Fins i tot l’hivern passava,

Però no trobe la forma

I hui se’m promet un riu

I ho sent i em cega el cresol que

Y ver, percibir el ligero cambio día a día;

De camino al otoño, primer verano.

I invite you to dinner

If I show you my bug collection,

We can talk about the future,

I keep a part of the world

He grew his own food

Oh, big and in a suit man,

Meanwhile, we would dance

And I’ll pay for the shoes

Pájaro del campo, pájaro libre,

Pájaro del campo, pájaro libre,

Pájaro del campo, pájaro libre,

Cuando sientas vértigo en tu vuelo,

Me vive el silbo imperioso

Junto a la calidez más radiante

No la encontré en mi mochila ayer

No noto la llave que abre mi infancia,

Solo juego a hacer apuestas,

¿Dónde están todos mis cuentos?

Vivo por tumbarme al lado de ellas

Porque me faltan las llaves y el candado

¿De dónde vienen las mujeres

Ella sabe todos los caminos

Los pelos de punta

Descifrar enigmas con las yemas

Tengo tu soplo en el corazón…

Una vez decidí amar

Fui desmontando cada una de sus capas

Entonces, me di cuenta de que

Una vez me lancé al vacío

Fuimos dos rectas

Fuimos partícipes de una historia efímera

Fuimos estrellas fugaces

Pero el verano murió

Por eso te diré que

Y ahora tan solo somos canciones

¿Estáis jugando a que no me escucháis?

¿Alguien puede escucharme?

Que alguien me escuche.

Es este un vasto mundo ambivalente

Fugitivo y de mi presencia ausente,

Ya es la quimérica hora del final,

Sumido en mi última y mayor gesta

Pienso en los viajes que me quedan,

El destino del camino