Derecho Procesal Civil y Mercantil III
Derecho Procesal Civil y Mercantil III
Derecho Procesal Civil y Mercantil III
La competencia objetiva
Concepto y naturaleza
Criterios determinantes
TÍTULO PRIMERO
JURISDICCIÓN Y COMPETENCIA DE LOS TRIBUNALES
CAPÍTULO PRIMERO
JURISDICCIÓN
A este propósito, el legislador nacional estableció fueros exclusivos, adaptando el texto del
artículo 22, 1° de la Ley Orgánica del Poder Judicial español (LOPJ), que a su vez es una
copia del articulo 16 de Convenio de Bruselas sobre la Competencia Judicial
, Reconocimiento y Ejecución de Decisiones Judiciales (de 1968 entre los países de la
Art. 22.- Además de los casos del artículo anterior, los tribunales salvadoreños podrán
conocer:
Comentario
Conforme al primer criterio, los tribunales salvadoreños serán competentes si las partes se
someten expresamente a ellos. Se refiere al sometimiento a los tribunales salvadoreños, con
exclusión de los de otro país o tribunales arbitrales nacionales o extranjeros; por lo que no
debe confundirse con el sometimiento a la competencia territorial (párrafo 2° del Art. 33).
La forma de este sometimiento no se expone, pero no cabe duda que el mismo está regido
por las normas sustanciales aplicables al acto, contrato o negocio que se trate; por ejemplo,
si es un negocio que la ley exige para su validez el requisito de la escritura, solamente por
ese mismo medio se puede expresar e l sometimiento, aunque sea en un acto o contrato
distinto o posterior al documento objeto de la pretensión. De igual manera, en cuanto a la
prueba de este sometimiento, se rige también por las normas sustanciales respectivas; para
el caso, si se trata de una obligación civil mayor de doscientos colones, la prueba debe
constar por escrito (Art. 1580 Párrafo 2° del Código Civil), mientras que tratándose de una
obligación mercantil la prueba puede hacerse por medio de testimonio sin perjuicio de su
cuantía (Art. 1003 Párrafo 1° del Código de Comercio). Tampoco cabe duda que el
sometimiento debe ser expresado por todas las partes involucradas, ya que textualmente la
disposición se refiere a “las partes” (en plural).
SECRETARÍA GENERAL
COMPETENCIAS EN MATERIA PENAL
Por ello, se ha dicho con mucha propiedad que la competencia constituye un conjunto de
procesos en que un tribunal puede ejercer, con forme a la ley, su jurisdicción o, desde otra
perspectiva, la determinación precisa del tribunal que viene obligado, con exclusión de
cualquier otro, a ejercer la potestad jurisdiccional.
En los casos en que se advierta que el hecho punible responde al modo de operar propio del
crimen organizado o asociado, conocerán los jueces de las cabeceras Departamentales, a
solicitud de la representación fiscal.
Según explica Moreno Catena, los criterios para adscribir territorialmente el conocimiento
de un proceso a un concreto órgano jurisdiccional se denominan fueros y ponen en relación
a un determinado juzgado o tribunal con los hechos delictivos por los que se procede. El
lugar donde se cometió el delito forum commissi delicti es el criterio determinante y la
regla general que nos ayuda a determinar la competencia territorial en cada caso concreto;
no obstante, en cumplimiento al principio del juez predeterminado por la ley, dicho criterio
no es dispositivo, ya que las partes no pueden modificarlo; por lo que tampoco resulta
difícil establecer, en todo los casos y desde un principio, el lugar en el que el delito se
hubiere cometido, que dicho lugar aparece como un dato más de la investigación, el cual
habrá de tomarse con carácter provisional y a los solos efectos de fijar la competencia por
razón del territorio, sin que se llegue a prejuzgar cual sea el órgano jurisdiccional
competente.
Por medio de la teoría de la actividad, el juez deberá tomar en cuenta, para saber si es
competente, el lugar donde aparezca o se exteriorice la voluntad delictiva; según la teoría
del resultado, el juez deberá tomar en cuenta el lugar donde se ha consumado el delito.
Y por último, según la teoría de la ubicuidad o unitaria, el delito se comete tanto en el lugar
donde se realizaron los actos de la ejecución como en el lugar se produce el resultado,
debiéndose apreciar la estructura, naturaleza y presupuestos dinámicos y jurídicos de la
infracción. Para establecer la competencia territorial en cada caso concreto, es necesario
acudir al desarrollo que hace de la misma el artículo 146 de la Ley Orgánica Judicial, donde
se establece la división territorial de los jueces con competencia penal, si con esto no
resulta fácil establecer la competencia, entonces puede utilizarse los tres criterios señalados
en la doctrina, así como los criterios o reglas subsidiarias o especiales establecidas en el
artículo 60 del Código Procesal Penal.
En caso de delito imperfecto o tentado, será competente tanto el juez del lugar en donde se
inició el hecho como el lugar en donde se realizó el último acto de ejecución.
Esta excepción a la regla general establecidas en el párrafo primero de este mismo artículo,
se refiere de los llamados delitos a distancia, que se ajustan a la teoría de la unidad, puesto
que será competente tanto el juez del lugar donde se inicio el delito como el lugar donde se
realizó el último acto de ejecución. Debe recordarse que aunque no existe consumación, el
agente, con el fin de perpetrar un delito, da comienzo a todos los actos tendientes a su
ejecución por medio de los actos directos o apropiados para lograr su consumación, según
el artículo 24 del Código Penal, estos actos son los determinantes para saber cuál será el
juez competente.
La competencia material en esta sección nos puede llevarnos confusión al interpretar que sé
está refiriendo a las diversa ramas del derecho que regulan o protegen diversos intereses en
materia civil, penal, familia, etc., lo cual vendría a perjudicar el verdadero sentido de la
norma, ya que es claro que los órganos penales conocen de materia penal.
Por ello, muchos autores la llaman «competencia objetiva o material» por ser la
competencia establecida por la ley para cada órgano judicial, es decir, la materia sobre la
cual debe de actuar. Para Moreno Catena, la competencia objetiva es la distribución que
hace el legislador entre los distintos tipos de órganos jurisdiccionales integrados en el orden
penal para el enjuiciamiento en única instancia de los hechos delictivos por los que
procede.
• Sí los hechos imputados han sido cometidos simultáneamente por varias personas
reunidas, o, aunque hayan sido cometidos en distintos lugares o tiempo, cuando ha mediado
acuerdo entre ella.
• Cuando a una persona se le imputen varios hechos, aun cuando hayan sido cometidos en
diferentes lugares o sean en distinta gravedad, siempre que no se trate de un hecho de
competencia privativa.
La regla general es que, para cada delito que conozca la autoridad judicial, debe existir un
proceso. La conexidad es un criterio que opera como excepción a esta regla, ya que, si se
dan los supuestos de conexidad establecidos en el artículo 63 del Código Procesal Penal,
corresponderá a la autoridad judicial hacer de varias causas un solo proceso.
EFECTOS DE LA CONEXIÓN
Cuando se sustancien procedimientos conexos por delitos de acción pública, se acumularán
y será competente:
• Sí los hechos están sancionados con al misma pena, el juez del lugar en que se cometió el
primero; y,
• Sí los hechos son simultáneos o no constan debidamente cuál se cometió primero, el juez
que haya prevenido.
Cuando un mismo órgano judicial es competente para conocer de todas las infracciones por
enlazar, no es necesario aplicar las reglas de conexidad. Incluso, cuando en un mismo
partido judicial existen diferentes órganos competentes, el asunto se resuelve mediante las
normas de reparto de terminadas en la Ley Orgánica Judicial, o en acuerdos emanados por
el Órgano Judicial.