OVALLES
OVALLES
OVALLES
ISSN: 2531-1565
Alied Ovalles
Doctora en Criminología
Universidad Pontificia de Comillas (España)
Melissa Macuare
Doctora en Criminología
Universidad Isabel I (España)
RESUMEN
El artículo analizará las diversas motivaciones que pueden tener niños o adolescentes
al asesinar a alguien. La referencia documental sobre este tema, se tomó de algunos
titulares publicados vía online de sucesos nacionales e internacionales, con la finalidad de
hacer una comparación sobre las conductas delictivas, en especial el asesinato o sicariato, y
las motivaciones. Además, se explican las razones personales, ambientales, familiares o
intencionales, como causantes de esas conductas. Y se concluye, que para intervenir en la no
reincidencia, es necesaria la identificación y reducción de los factores de riesgo que generan
esos comportamientos, así como la prevención, especialmente, si el entorno social o familiar
es desfavorable, si el grupo de pertenencia es negativo o si hay problemas de salud mental.
Pero que en cualquiera de sus circunstancias, en comprensión del hecho y en razón de la
edad, legalmente hay que cumplir por el acto intencionalmente cometido.
ABSTRACT
The article will analyze the various motivations that children or adolescents may have
when murdering someone. The documentary reference on this subject was taken from some
headlines published online of national and international events, in order to make a
comparison of criminal behavior, especially murder or hired killer, and motivations. In
addition, the personal, environmental, family or intentional reasons are explained as causing
1
PALABRAS CLAVE
KEYWORDS
ÍNDICE
SUMMARY
En los últimos años en España y en otras partes del mundo, se han producido casos
de muertes violentas realizadas por personas menores de edad. A continuación, referiremos
algunas reseñas bajo la modalidad de asesinato y de sicariato cometidos por menores.
Año 2019, enero - Banyoles (Girona), una adolescente de 17 años degolló a su madre
porque estaba enfadada por una discusión entre ambas. En marzo, en México, una
adolescente de 16 años mata a sus padres como prueba para entrar a una banda de
narcotráfico; ese mismo mes en China, un menor de 13 años mata a su madre en venganza
por haber matado a su perro. Abril, Colombia, un adolescente de 17 años bajos los efectos
de drogas y alcohol mató a su madre luego de una discusión. En mayo, en Mallorca, un
adolescente de 16 años asesina a su madre porque le había castigado sin móvil, le golpeaba
y reñía constantemente. En junio, un adolescente de 16 años en Puerto Rico, asesina a su
madre a puñaladas por el reclamo de su conducta, amistades y novia. En septiembre, en
Estados Unidos, un adolescente de 14 años asesinó a su padre, madrastra y hermanos. Y en
agosto, en Rusia, un joven de 16 años mata con un hacha a su madre, hermanas y abuelos
por celos hacia sus hermanas.
Año 2018, enero - Bilbao, dos ancianos muertos con signos de violencia extrema. Sus
autores, dos adolescentes de 14 años y el motivo el robo de un reloj. En el mismo mes, un
adolescente de 16 años en New Jersey, asesinó con un fusil semiautomático a sus padres, a
su hermana y a una amiga de la familia. En mayo, en Texas, un adolescente de 17 años mata
con un arma de fuego a nueve compañeros y a un profesor en su instituto, había escrito en
un diario sus planes para matar.
En Barcelona, en 2015, un profesor del Institut Joan Fuster fue asesinado con una
ballesta por un estudiante de 13 años. En el año 2011, en Inglaterra, un joven de 14 años,
mató a su madre de siete martillazos, e incineró el cadáver para “no dejar ninguna prueba”.
Y en 2010, en Arizona, dos adolescentes de 12 y 15 años, acabaron a tiros con la vida del
padrastro de uno de ellos.
Y así pudiéramos incluir más casos de este tipo, señalando la cantidad principalmente
de adolescentes que causan la muerte a otra persona.
Hay otro grupo de menores que causan la muerte a otra persona, bajo la promesa de
un beneficio monetario, conocidos como “los niños sicarios”. Algunos casos que reseñar son:
Y existe un tercer grupo de niños y adolescentes1 que pueden causar una muerte, y
son aquellos que son raptados y/o enrolados dentro de los conflictos armados, ahí son
entrenados y educados para matar. Son conocidos como “los niños soldados o los niños de la
guerrilla”. Su objetivo es el mismo, matar a otro, la diferencia está, en que estos niños y
jóvenes son adoctrinados en una educación basada en el odio, la amargura y la venganza.
Nada comparable a la impulsividad o la gratificación monetaria que se aprecia en las
anteriores formas de participación. Tampoco es semejante la magnitud de sus actos, pues
estos niños y adolescentes suelen estar implicados en grandes masacres o en atentados
suicidas. Hemos querido mencionar este grupo de menores, para visibilizarlos como
fenómeno a estudiar. Sin embargo, su análisis es muy complejo desde el punto de vista
criminológico lo que demandaría solo un apartado para ello.
1
Para que la lectura del texto resulte más sencilla se ha evitado utilizar conjuntamente el género masculino y
femenino en aquellos términos que admiten ambas posibilidades. Así cuando refiere a niños se entiende que
hablamos de niños y niñas. Igualmente con los y las adolescentes.
La niñez es ese período de la vida humana que se extiende desde el nacimiento del
individuo hasta la llegada de la pubertad, y pasa por tres etapas: lactancia, primera infancia y
segunda infancia, es en esta última etapa cuando les llamamos niños, ubicada entre los seis
años y la pubertad. Durante la infancia se consolida la personalidad, como lo indica Freud
(1973), y a partir de los seis años es cuando el entorno ejerce influencia, se afianzan las
normas y las reglas para vivir en sociedad.
Para entender lo que ocurre a nivel cognitivo debemos prestar especial importancia a
la etapa de operaciones concretas formulada por Piaget (1975). Entre los 7 y 11 años niños y
niñas son capaces de razonar de forma inductiva, es decir, pueden hacer inferencias a partir
de una observación, con el fin de hacer una generalización. Sin embargo, se les dificulta
predecir el resultado de un evento (razonamiento deductivo), y son capaces de ver las cosas
desde la perspectiva de otra persona, incluso si piensan que la perspectiva es incorrecta.
Esto quiere decir que, desde el punto de vista psicológico - evolutivo, un niño entre 7
y 11 años, distingue lo bueno de lo malo, pero no sabe qué es moralidad, ni lo que
representa la muerte, no tiene conciencia del peligro, pero sí sabe, que la muerte es un
suceso definitivo. Así que en cara de aplicarle responsabilidad penal por sus actos, la
discusión no debe centrarse únicamente en si comprende o no el daño causado, sino
también en el resultado, la muerte misma (Cohen, 2017).
Estas referencias nos permiten tener una percepción más cercana sobre el
pensamiento cognitivo de niños y adolescentes. Requisito necesario para determinar su
responsabilidad penal, y fundamental para la intervención de los mecanismos de control
formal a la hora de controlar, prevenir y evitar la reincidencia de estos comportamientos en
el futuro.
2.1 La violencia.
La violencia es “el uso intencional de la fuerza física, amenazas, contra uno mismo,
otra persona, un grupo o una comunidad que cause o tenga muchas probabilidades de
causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o privaciones” (OMS,
5
Consideramos que para que se produzcan alguno de estos dos hechos delictivos,
deben existir razones que nos permitan entender ese comportamiento en el niño o
adolescente.
Todos los seres humanos tenemos la capacidad de responder ante las influencias que
percibimos como negativas, esa capacidad la llamamos agresividad (Corsi, 1994). Es decir,
instintivamente todos somos agresivos, eso nos ayuda a estar alerta, defendernos,
afirmarnos frente a alguien o algo dependiendo de la situación, pero no somos violentos. La
violencia es una conducta que se encuentra dentro del marco social de cada individuo, por
tanto es aprendida en ese ámbito.
En este sentido, tenemos que afirmar que los niños no nacen con la predisposición de
ser violentos, hay que tener presente que, en cada uno de ellos la respuesta de su conducta
será única y sus motivaciones muy diferentes. Por lo tanto, hay factores de riesgo; ya sean
condiciones personales, familiares, sociales o culturales; cuya presencia aumenta la
probabilidad de que se produzcan determinados comportamientos violentos (Mina, 2008).
También, aquellos factores relacionados con los cambios físicos y orgánicos de tipo
hormonal propios de la edad, causantes del mal humor y comportamientos agresivos
6
Y desde el punto de vista psicológico, hay que valorar la presencia de algún tipo de
trastorno de personalidad, sea antisocial, de personalidad inmadura o de psicopatía.
Pueyo (1995), señala tres elementos temperamentales que favorecen las conductas
violentas en niños y adolescentes, como son:
1. La dureza emocional, esto es, que niños y adolescentes se conducen con frialdad, no
muestran empatía, presentan carencias emocionales, inhiben sus emociones, no sienten
miedo y no sufren.
A nuestro juicio, hay situaciones que favorecen que estos comportamientos violentos
pasen desapercibidos ante la ciudadanía. Entre ellas:
2. La reacción y el rechazo social sólo es visible cuando el hecho cometido obtiene una
amplia difusión pública por parte de los medios de comunicación.
3. La no denuncia de estos delitos, que terminan como parte de la cifra negra de casos
reales.
Respecto a este último punto, el debate que hay entre la mayoría de los países que
han ratificado los principios de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño
(1989) y los tratados internacionales que consideran fundamental la protección de las
personas menores de 18 años, como las Reglas Mínimas de Naciones Unidas para la
Administración de Justicia de Menores de 1985 (Reglas de Beijing); las Reglas de las Naciones
Unidas para la Protección de los Jóvenes Privados de Libertad de 1990; y las Directrices de
Naciones Unidas para la Prevención de la Delincuencia Juvenil de 1990 (Directrices de Riad),
consiste en centrar la edad en que los menores de 18 años deben ser sancionados
penalmente por sus actos, cuánto debe durar esa sanción y si deben ser tratados como
adultos.
1. Respecto a las edades, básicamente en ambos tipos delictivos todos son adolescentes, van
desde los 12 hasta los 17 años, la edad promedio 15 años.
3. Las motivaciones son muy diversas, en los sicarios no es más que la compensación
económica. Y en los asesinatos, destacan las discusiones, los celos con otros integrantes de
la familia, la venganza, el robo, y/o la prueba para entrar a una banda de narcotraficantes.
En el resto de los países de Europa, varía la edad penal mínima, en Suiza va desde los
7 a 18 años, en este país manejan el criterio de que ningún menor debe ser considerado
inimputable, sus medidas son de reinserción, terapéuticas y educativas. En Francia, la
responsabilidad penal comienza a los 13 años, ahí no hay una legislación específica para los
menores, se les aplica medidas educativas con fuerte enfoque rehabilitador. Alemania,
España, Austria e Italia, tienen en común que la responsabilidad penal es a partir de los 14
años. En los Países Escandinavos son 15 años, 16 años en Portugal y Rusia, y con 18 años en
Luxemburgo y Bélgica (Abad, 2018). Austria, Francia e Italia imponen las penas que dicte
para los adultos, aunque atenuadas. En Rusia y Portugal, los infractores juveniles pueden
ser ingresados como criminales adultos en el sistema de justicia criminal (Dünkel y Castro,
2014).
En resumen, podemos decir, o por lo menos confiar que hay garantía jurídica de que
los delitos cometidos por los menores imputables serán procesados según lo que pauten sus
respectivas leyes, y que algunos de ellos; de acuerdo a planes individualizados, correctivos y
educativos; logren su correcta reinserción.
A) Semejanzas.
1. Viven con al menos uno de sus padres, generalmente, con la madre. Sus relaciones son
distantes, con comunicación deficiente o ausente.
3. Sus familias son disfuncionales, con poca o ninguna supervisión y control, despreocupados
por su escolarización, y en ellas hay episodios repetitivos de violencia.
11
1. Suelen vivir de forma alternada entre su casa, la calle y la tutela del Estado.
3. Son atraídos al crimen organizado por el poder, las drogas, el dinero y las armas, sumado a
los problemas familiares, la pobreza, la marginación y la falta de acceso a la educación.
4. Forman parte de un grupo subcultural que les brinda estatus, sensación de pertenencia,
protección y solidaridad.
7. Tienen desapego por la vida, tienen su propio código de vida y son conscientes que
tendrán una vida corta.
13. Tienen una visión inmediatista de su actividad, que es recibir la recompensa (dinero) de
forma rápida.
14. La víctima puede ser cualquier persona, no tiene razones personales ni relación alguna
con ella, sólo ofrece un servicio para el que ha sido contratado. En el otro, los
niños/adolescentes asesinos, el tipo de víctima puede ser la madre, el padre o profesores.
12
16. Usan generalmente armas de fuego por su efectividad. En el otro tipo delictivo, es más
frecuente el uso de arma blanca.
17. Operan en lugares abiertos y públicos, facilitando sus vías de escape. En el otro tipo
delictivo, generalmente el lugar es cerrado y huir no les caracteriza.
Como podemos apreciar y aunque ambos tienen en común su objetivo final, hay
características que nos ayudarán a orientar sobre las formas de reeducar o evitar la
reincidencia en este tipo de conducta, y guiar las políticas preventivas necesarias para
plantarle cara a estos delitos violentos en menores.
Podemos decir que, los niños están bajo la supervisión constante de sus padres que
les impide en menor medida cometer estos delitos, mientras que los adolescentes son más
independientes y se alejan más de ellos. Sin embargo, observamos que tanto niños como
adolescentes, suelen elegir de víctimas a sus padres, es posible que esta selección responda
a que los primeros están más saturados y “obligados” a cumplir órdenes e imposiciones por
parte de ellos; y para los segundos, sea la respuesta a su búsqueda por la independencia con
menor tolerancia al control parental. También, hay que agregar que, posiblemente a un
adolescente le sea más fácil cometer el delito porque presenta características físicas
particulares, complexión, tamaño, fuerza, destreza o agilidad que aún no ha desarrollado un
niño.
13
También podemos mencionar la relación que hay entre edad – frustración (Dollard,
et al., 1939), que es “una reacción emocional interna que surge ante una contrariedad”
(Garaigordobil y Oñederra, 2010: 76) y la agresión surge cuando la consecución de la meta es
bloqueada, o interferida (Agnew, 1992). La frustración genera un estado emocional que
predispone a actuar de forma agresiva ante situaciones específicas (Ovalles, 2016). Son los
adolescentes principalmente, quienes en la búsqueda de su independencia están
mayormente expuestos a diferentes fuentes de frustración, lo que aumenta la probabilidad
de que cometan estas conductas agresivas, pues no tienen buen dominio de autocontrol de
sus reacciones emocionales y poca tolerancia a las mismas.
Por último, es importante destacar, que en estos delitos también hay una relación
criminológica cognitiva que dependerá de la situación en concreto, es decir, la escogencia de
una u otra conducta violenta estará en función de la elección o evaluación que hace el
adolescente sobre el éxito en su propósito; esto es, que de forma consciente selecciona la
alternativa más adecuada para su propio beneficio a pesar de conocer los costes y
consecuencias (Teoría de la elección racional). Además, de la valoración que hacen referente
al contexto y a la confluencia de factores específicos en un mismo espacio-tiempo que les
facilita la comisión del delito (Teoría de la oportunidad).
8. CONCLUSIONES.
Finalmente, nos queda por reflexionar si estos niños o adolescentes son víctimas de
un conflicto en el control de sus emociones e impulsos, de un sistema que no les brinda
iguales oportunidades, de una familia que le abandona o que deja de ejercer sus funciones,
de unos amigos nocivos, de una comunidad que les expulsa y excluye, de una sociedad que
15
9. BIBLIOGRAFÍA.
Abad, C. (2018). La responsabilidad penal del menor. (Trabajo Final de Master). Universidad
de Alcalá. Disponible en:
https://ebuah.uah.es/dspace/bitstream/handle/10017/33424/TFM%20C%C3%A9sar%20A
bad.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Agnew, R. (1992). Foundation for a General Strain Theory of Crime and Delinquency.
Criminology, 30, 47 – 87.
Akers, R. (1988). Social learning and social structure: A general theory of crime and deviance.
Boston: Northeastern University Press.
Cohen, S. (1995). Delinquent boys. The culture of gang. Nueva York: The free press.
Corsi, J. (1994): Violencia Familiar. Una mirada interdisciplinaria sobre un grave problema
social. Buenos Aires: Paidós.
Dollard, J., Doob, L., Miller, N., Mowrer, O. y Sears, R. (1939). Frustration and aggression.
New Haven: Yale University Press.
16
Luaces, A., y Velásquez, C. (2008). Justicia penal de menores en España: Aspectos sustantivos
y procesales. Madrid: UNED.
Quetelet, A. (1833). Research on the propensy for crime at differents ages. 2a edición. (trad.
S.F. Silvestre). Cincinnati: Anderson.
Tierno, B. (2013). Educar en familia hoy: Guía para padres. Madrid: San Pablo.
Adolescente asesina a sus padres, su hermana y otra persona en Nueva Jersey. Disponible
en: https://www.efe.com/efe/espana/sociedad/adolescente-asesina-a-sus-padres-su-
hermana-y-otra-persona-en-nueva-jersey/10004-3480955 [Consultado el 10/07/2018]
17
Aparecen muertos con signos de violencia dos ancianos en su casa de Bilbao. Disponible en:
http://www.elmundo.es/pais-vasco/2018/01/18/5a60c6d0468aeb64188b464f.html
[Consultado el 10/07/2018]
Cuando los adolescentes quieren ser sicario, así la realidad de los menores de edad en
México. Disponible en:https://www.huffingtonpost.com.mx/2018/03/13/cuando-de-
adolescente-quieres-ser-sicario-asi-la-realidad-de-los-menores-de-edad-en-
mexico_a_23383852/ [Consultado el 12/07/2018]
Joven de 16 años mata a su madre, abuelos y hermanos gemelos de cuatro años antes de
suicidarse. Disponible en: https://vanguardia.com.mx/articulo/joven-de-16-anos-mata-
su-madre-abuelos-y-hermanos-gemelos-de-cuatro-anos-antes-de [Consultado el
14/08/2019]
La menor detenida por matar a su madre en Banyoles confiesa los hechos. Disponible en:
https://www.lavanguardia.com/sucesos/20190110/454068644540/asesinato-banyoles-menor-
madre-confiesa.html [Consultado el 14/08/2019]
La policía investiga si el hijo de la mujer asesinada se enfureció con ella porque le había
castigado sin móvil. Disponible en:
https://www.ultimahora.es/sucesos/ultimas/2019/05/17/1080665/policia-investiga-
hijo-mujer-asesinada-enfureciocon-ella-porque-habia-castigado-movil.html [Consultado
el 14/08/2019]
18
Nacido para matar: el asesino de Texas, un adolescente callado que no llamaba la atención.
Disponible en:
http://www.elmundo.es/internacional/2018/05/19/5aff741a268e3e3d4a8b45d2.html
[Consultado el 11/07/2018]
Niño sicario de 14 años habría matado a dos personas en Medellín. Disponible en:
https://cnnespanol.cnn.com/2019/04/02/nino-sicario-de-14-anos-habria-matado-a-dos-
personas-en-medellin/ [Consultado el 14/08/2019]
Perú: sicario de unos 15 años asesinó a vicepresidente regional de Amazonas. Disponible en:
http://www.gentetuya.com/peru-sicario-de-unos-15-anos-asesino-a-vicepresidente-
regional-de-amazonas/ [Consultado el 13/07/2018]
Sicario juvenil: “Asesiné a un policía para no deberle 300 soles a mi tío” Disponible en:
https://peru21.pe/lima/sicario-juvenil-asesine-policia-deberle-300-soles-mi-tio-151277
[Consultado el 13/07/2018]
Un alumno mata con una ballesta y un machete a un profesor en Barcelona. Disponible en:
https://elpais.com/ccaa/2015/04/20/catalunya/1429517734_522794.html. [Consultado el
10/07/2018]
Un menor de 14 años mata a su madre adoptiva en Cádiz: detenido dos anos después.
Disponible en: https://www.elespanol.com/sociedad/sucesos/20190412/menor-anos-
madre-adoptiva-cadiz-detenido-despues/390461184_0.html [Consultado el 13/08/2019]
19