El Buey

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El buey

El buey
Por el Hno. Fernando Pitra.

Queremos ver más allá de la enseñanza natural que


es muy rica acerca de este animal, que el santo
Espíritu nos muestre a través de la sabiduría de lo
alto las lecciones espirituales escondidas en el
andar de este precioso animal. Así como salomón
pudo apreciar más allá de la naturaleza a través de
los ojos espirituales y disertar sobre ella, de igual
forma nosotros entendemos que todo lo creado nos
cuenta la gloria, la maravilla de Dios, si tenemos
los ojos abiertos y un corazón henchido para
recibir tal enseñanza.
Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y el
firmamento anuncia la obra de sus manos.
Salmos 19:1.
Dios muchas veces uso la naturaleza para hablar e
instruir al hombre, mira a la hormiga nos es dicho
y se sabio, también se nos urge a ver al macho
cabrío en su porte, o al avestruz a quien Dios no
dio sabiduría, o al gorrión que haya casa, de todos
ellos aprendemos, pero en esta oportunidad
queremos detenernos en el buey, creo que aquí
encontramos una medida buena, apretada y
rebosante de enseñanzas.
Desde joven he escuchado acerca de este animal y
también lo he visto en el campo o campaña en
varios países como Paraguay, al verlos empecé a
apreciar más allá del animal en sí, primeramente,
observé la sabiduría que Dios le ah dado al
hombre, para domesticar a esta gran bestia
indómita, luego el Espíritu nos invita a ver a
nuestro Señor; así como Lucas y Juan Marcos le
presentan en sus evangelios. En Lucas vemos al
Hombre, pero en Marcos vemos al Siervo, de esta
manera se desprende cual es el propósito de Dios
para cada uno de nosotros, Dios quiere
transformarnos y formar en usted y en mí la
imagen de aquel verdadero y único hombre que se
hizo siervo, en este hombre vemos que su
humanidad fue menospreciada, menosprecio su
vida, vemos a aquel obediente buey que para el
sacrificio subió y se ofreció en la cruz.
Pareciera triste llegar a ser como un buey, pero no
lo es, en verdad nuestro anhelo debiera llegar a
tener las cualidades que veremos en este precioso
animal, estas no pueden ser imitadas ya que
pertenecen a su nueva naturaleza adquirida luego
del dolor, recuerdo a hermanos que hoy no están
entre nosotros, que hablaban de el fiel buey , estas
son algunas de las enseñanzas que aprendí
escuchándolos y también otras que el Espíritu
Santo me ha enseñado personalmente, en todo
caso la fuente es una, e inagotable.
Sin bueyes el granero está vacío; Más por la
fuerza del buey hay abundancia de pan.
Proverbios 14:4
El buey es el macho bovino (toro), dedicado al
engorde y sacrificio o a tareas de tracción,
especialmente en las faenas agrícolas y el
transporte de cargas. Para que un macho bovino se
transforme en buey, se requiere de su castración
después de la pubertad.
Este era el animal más valorado en la antigüedad,
ya que era extremadamente útil, tanto para la
labranza, como para trillar el trigo, o como
alimento, sus usos eran muchos, pero el más
elevado uso que se le daba a este animal era el de
ser ofrecido para la adoración. Este era el más alto
grado de ofrenda bajo el sacerdocio levítico, este
tenía más sangre y también mostraba más las
características de Cristo, ya que primeramente
debemos tener en cuenta que este animal no nació
buey, como dijimos al principio nació para ser toro,
pero llego a ser buey, se hizo buey.
Así encontramos nuestra primer y más hermosa
lección acerca de este animal, vemos a Jesús
ilustrado mejor por este animal, que, por cualquier
otro, aun mayor llega a ser su semejanza la del
cordero, que nos muestra una naturaleza en si
también mansa pero indefensa. Es propio del
carácter del cordero dejarse atar y llevar hasta el
matadero.
Angustiado él, y afligido, no abrió su boca;
como cordero fue llevado al matadero; y como
oveja delante de sus trasquiladores,
enmudeció, y no abrió su boca. Isaías 53:7.
Así fue el Señor, pero mirando solo al cordero,
pasamos por alto una verdad que da más valor a su
sacrificio y enriquece su obra, vemos que Él tenía
su voluntad propia, el mismo dijo:
Porque he descendido del cielo, no para hacer
mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.
Juan 6:38
Vemos que para hacer la voluntad de su Padre El
negó su voluntad, precioso tesoro aprendemos
aquí, vemos que se hizo obediente, hasta la muerte,
mostrando que él estaba más allá aun de la
naturaleza terrenal que había tomado, más allá de
los deseos inherentes a esta, le escuchamos decir
en sus últimos momentos Al hablar con su Padre
celestial:
"Padre, si es posible, que pase de mí esta copa;
mas no se haga mi voluntad sino la tuya"
(Mateo 26:39)
Estaba bajo pesada presión y agonía, la cruz ya
podía vislumbrarse al final del camino y por un
breve momento las emociones de un ser humano
son vistas en él, ya que su alma justa retrocedía a
la idea de hacerse pecado, está sufriendo y su sudor
eran como grandes gotas de sangre, allí vemos al
abnegado buey, llevando la carga, marchando al
matadero y le vemos resistiendo hasta la sangre,
hasta llegar a ganar una batalla en Getsemaní, no
puede pensar en sí mismo, no se agradó a sí
mismo, no vino a ello..
Porque el Hijo del Hombre no vino para ser
servido, sino para servir, y para dar su vida en
rescate por muchos. Marcos 10:45, él se está
mostrando como el Siervo perfecto de Jehová,
aquel del cual hablo Isaías, este estuvo aquí entre
nosotros y aunque no lo estimamos eso no le
importó, allí peso más el amor a su Padre, con
gran respeto le habla y así vemos que se rindió
completamente, cuando Pedro quiso evitarle la
cruz, saco su espada, Jesús aun tenia autoridad y
poder, doce legiones intervendrían a una sola
palabra suya, más el no abrió su boca.
Y cuando Él les dijo: Yo soy, retrocedieron y
cayeron a tierra. Juan 18:6
Aquí vemos al buey, al poderoso y obediente buey
hacedor de la voluntad de su Padre, cuanta
majestad y poder estaban en El, pero él se sometió,
no uso su fuerza, se rindió a la voluntad de otro,
esto es lo que muestra el buey, un animal que es
fuerte, pero manso, esta es la imagen que no
podríamos ver en un débil cordero, la imagen de
uno fuerte, pero que decidió sujetarse por amor.
Me han rodeado muchos toros; fuertes toros de
Basán me han cercado. Abrieron sobre mí su
boca
Como león rapaz y rugiente. Salmos 22:12-13.
La carne siempre es vista como un toro fuerte, la
carne religiosa estaba en oposición al Señor aun
cuando él estaba en la cruz, no lo dejaron, seguían
siendo crueles, murmurando, espíritus fuertes
dominaban a estos hombres, oprimiéndole más y
más. Como podemos observar los toros son un
símbolo de oposición así cómo fuerza y vitalidad.
Para el hebreo es considerado como una potestad o
principado de poder, satanás opera en y por medio
de la carne, que contrario es a nuestro Señor
Ya no hablaré mucho con vosotros, porque
viene el príncipe de este mundo; mas no tiene
nada en mí.
Juan 14:30.
Para llegar ser buey es necesario como primera
medida, pasar por el capado, la castración. Esto
debe ser hecho por manos experimentadas, así
vemos que este animal pierde la capacidad de
reproducirse, de ser un gran semental y dejar una
importante descendencia recordamos:
De cierto, de cierto os digo, que, si el grano de
trigo no cae en la tierra y muere, queda solo;
pero si muere, lleva mucho fruto. El que ama su
vida, la perderá; y el que aborrece su vida en
este mundo, para vida eterna la guardará. Juan
12:24-25
Su descendencia no será contada entre los hijos del
primer adán, no dejo descendencia como algunos
en su imaginación dicen, él no se ocupó de su vida
como todos, pero en su resurrección el dio
comienzo a una nueva raza, a una nueva creación,
el grano de trigo llevo mucho fruto, como las
estrellas de los cielos, ¿su generación quien la
contara?
Él nos lleva hoy en sus manos eternas, tiene poder
para no perdernos, así como fue para Israel en su
peregrinar, el lleva su carga, también nuestras
cargas, solo debemos depositarla sobre su fuerte
espalda.
Escuchadme, casa de Jacob, y todo el
remanente de la casa de Israel, los que habéis
sido llevados por mí desde el vientre, cargados
desde la matriz. Aun hasta vuestra vejez,
yo seré el mismo, y hasta vuestros años
avanzados, yo os sostendré. Yo lo he hecho, y
yo os cargaré; yo os sostendré, y yo os libraré.
Isaías 46:3-4
Somos llevados en sus hombros fuertes, como el
sumo sacerdote llevaba a los hijos de Israel, a la
misma presencia de Dios y allí sostenidos por su
perfecta justicia, el aroma del obediente hijo, llena
los cielos, el fiel buey es nuestra propiciación
Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no
pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado
tenemos para con el Padre, a Jesucristo el
justo. 1 Juan 2:1
Precioso es su nombre en los cielos, es llamado EL
Justo, aquel que intercede en el poder, en virtud de
su justicia perfecta, el llego a cumplir toda justicia,
negándose a sí mismo, en el cielo hoy es visto
como El Justo, su rostro es de buey, es el mismo
rostro que se formó en aquellos que le siguieron en
sus pisadas, su aroma todo en él es distinguido.
Nosotros somos llevados y recibidos, ceñidos de su
coraza fuerte de justicia, su pecho nos sostiene, el
buey ha crecido en tamaño, él siempre nos
sostendrá con su diestra de justicia. ¡Aleluya!
Así también en nosotros, Dios empezó un proceso,
en el cual Todo orgullo o vanagloria carnal debe
perderse y quedar atrás, somos llevados a perder lo
más preciado, las ambiciones mundanas y propias
no pueden gobernarnos. Si vamos a seguirle,
debemos dejarnos gobernar por otro, para eso el
creyente es invitado a tomar la victoria de la cruz,
así el creyente pasa también por la cortadura,
donde la carne fue cortada, es una cortadura
dolorosa para nuestra antigua naturaleza, trae
lloro y tristeza perder las aspiraciones que antes
tanto nos enorgullecían, ellas nos hacían algo en
este mundo, éramos mirados con aprobación por
los demás, pero si queremos llegar a ser útiles
debemos definir las prioridades desde el principio,
empezar a acomodar que es lo primero
Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya
no vivo yo, más vive Cristo en mí; y lo que
ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo
de Dios, el cual me amó y se entregó a sí
mismo por mí. Gálatas 2:20.
Aquí está la cortadura, la cortadura hecha en la
cruz, es aquí en donde empieza la vida, la
verdadera vida del creyente y también donde la
antigua vida murió. La nueva creación nace de una
escena de dolor allí es donde nuestro “YO” muere,
y donde la vida nueva empieza a prevalecer en
nosotros, el carácter del Fiel buey empieza a tomar
lugar en nuestra vida, vamos a necesitar
permanecer aquí de ahora en más, si queremos que
la vida de Cristo se manifieste, la fe estará más
activa y nos llevara por lugares desconocidos y
gloriosos al tranco de un buey , hasta mirarnos y
observar también a nuestro alrededor y decir, todo
es vanidad, es basura.
Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz
de nuestro Señor Jesucristo, por quien el
mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.
Gálatas 6:14
¿Quienes quisieran vivir la vida del buey hermano?
Ninguno que milita se enreda en los negocios
de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó
por soldado.2 Timoteo 2:4
En el mundo ya no queda nada más para esta fiel
bestia que lleva la carga, desde ahora en más esta
tiene su mirada puesta abnegadamente en el surco,
también llega a poseer un oído atento a la voz de
su amo. Ahora que está en el campo de su Señor,
debe prestar atención a sus instrucciones, nada
debe estorbarle o desviar su atención, de Israel se
dice que fue un siervo sordo, pero del Señor dice:
Jehová el Señor me abrió el oído, y yo no fui
rebelde, ni me volví atrás. Isaías 50:5.
Mientras trabaja El amo va haciendo diferentes
ruidos con su boca mientras este interpreta,
fielmente lo que este dice, precioso ejemplo para
nosotros, recibimos durante nuestro servicio la
fortaleza de uno solo, él nos conmueve y constriñe
paso a paso con su palabra, a hacer en fe su
perfecta voluntad, siempre que le escuchemos,
estaremos yendo bien.
Es necesario que los siervos estén atentos a la voz
de su amo, para hacer y cumplir solo su voluntad
A ti alcé mis ojos, A ti que habitas en los
cielos. He aquí, como los ojos de los siervos
miran a la mano de sus señores,
Y como los ojos de la sierva a la mano de su
señora, Así nuestros ojos miran a Jehová
nuestro Dios, Hasta que tenga misericordia de
nosotros. Salmo 123:1-2
Para entender estos versos debemos remitirnos a
la vieja cultura hebrea.
En el oriente, a los siervos que atendían a sus
amos, se les dirigía casi enteramente por señales,
lo que requería que prestaran la mayor atención a
las manos de éstos. Los siervos de Dios, solo ellos
aprenden a mirar a los cielos, allí está la mano de
Dios que dirige y señala la tarea, asi esperamos
que Su mano providente, nos indique su voluntad
en el tiempo oportuno. “Mirar la mano del amo” es
una figura gráfica de gran dependencia de Dios. La
expresión, “la mano de Dios” se usa varias veces en
Esdras y en Nehemías,
“la mano de nuestro Dios es para bien sobre
todos los que le buscan”. Esdras 8:22
Esto alienta nuestro corazón, fuera del campo cada
uno sigue por su camino, el buey es llamado y
enseñado de ahora en más a atender donde pisa,
por donde va.
Todos nosotros nos descarriamos como
ovejas, cada cual se apartó por su camino; más
Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.
Isaías 53:6
Al que ya ha puesto su mano en el arado, mirar a
los costados o a atrás solo le es pérdida de tiempo,
los bueyes nunca miran hacia atrás, olvidan lo que
queda atrás para extenderse Hacia adelante, son
fieles en cumplir sus ministerios, ¡aleluya!
Este animal adquiere la capacidad de no salir del
surco demarcado por el amo, camina despacio y
paciente, día tras día, No traspases los linderos
antiguos” Proverbios 22:28
Los antiguos como Josué, repartieron la herencia
con gran celo, delimitando hasta donde cada uno
tenía correspondencia. El apóstol Pablo nos ha
dejado linderos, que no debemos traspasar, y no
usar diferentes métodos, no salir del surco por
donde el paso, sigamos la línea de la Gracia como
lo hizo Timoteo, a quien Pablo dijo:
Pero tú has seguido mi doctrina, conducta,
propósito, fe, longanimidad, amor,
paciencia, persecuciones, padecimientos, como
los que me sobrevinieron en Antioquía, en
Iconio, en Listra; persecuciones que he sufrido,
y de todas me ha librado el Señor. 2 Timoteo
3:10-12
que gozo habrá llenado el corazón del apóstol por
este hombre de Dios y a la vez, que
responsabilidad sintió seguramente Timoteo, para
seguirle todo el camino en las enseñanzas de su
apóstol, en cambio los corintios querían reinar sin
Pablo, menospreciaban sus palabras de tan alto
valor, muchos hoy tienen este mismo pensamiento,
hacia el lugar que el apóstol Pablo ocupa en el plan
divinamente ordenado, pero Timoteo entendió que
seguir la doctrina que Pablo le formaría
enteramente como un hombre en Cristo, también
le haría un día recibir una corona, la misma corona
que recibirá nuestro apóstol, para reinar con
Cristo. Timoteo quiso reinar con Pablo que es lo
equivalente a reinar con Cristo, por eso siguió sus
mismos pasos, tomo su mismo yugo, sufrió sus
mismas persecuciones, se asoció sin límite a su
apóstol.
El paso de buey
Mi padre me hablo en varias ocasiones acerca de la
lentitud característica del buey, él es un hombre de
campo, en su niñez veía frecuentemente trabajar a
estos animales y ser reemplazados por maquinarias
modernas, el tractor hoy a sustituido al buey, un
buey puede arar muy pocas hectáreas en un día,
este no parece estar apurado al empezar su trabajo
temprano, bajo los fuerte rayos del sol. En
comparación el tractor no tiene entrenamiento
previo, de tantos años, como lo es con un Buey, el
paso lento del Buey no es agradable al bolsillo de
muchos, algunos se desaniman al seguir la doctrina
de Pablo, porque no ven resultados rápidos,
entonces cambian al buey por un tractor, quieren
trabajar rápido y cosechar rápido, no pueden ver
que segaremos un día más allá del sol, sino
desmayamos, si somos fieles en escuchar y dar
todo el concejo de Dios, aunque no seamos tan
populares.
Me volví y vi debajo del sol, que ni es de los
ligeros la carrera, ni la guerra de los fuertes, ni
aun de los sabios el pan, ni de los prudentes las
riquezas, ni de los elocuentes el favor; sino que
tiempo y ocasión acontecen a todos.
Eclesiastés 9:11.
La obra y su avance le pertenecen al Señor, si no
edificamos con las nuestras ideas, fuerza, dinero,
preparación universitaria, experiencia, antigüedad
son vanas y no dejaran resultado permanente en la
eternidad. Cualquier cosa muchos están dispuestos
a cambiar en su apuro, nuestra carne no sabe
esperar y no puede servirle a Dios.
Lo espiritual y la verdad son cambiados
descuidadamente por el error, los linderos que los
antiguos señalaron no son respetados. Hermanos
que fueron fieles son levantados y luego los
sucesores desvían sin pesar, ellos al principio se
ven a sí mismos, como revolucionarios, pero
terminan siendo más bien agitadores, confundidos
y confundiendo con sus doctrinas extrañas y
mezcladas, cambian la doctrina a su conveniencia ,
ellos no tienen el celo de Dios por la iglesia Vemos
la razón de porque algunos de sus compañeros
abandonaron a pablo, el camino popular parece
más rentable y productivo, pero hermano el buey
es lento, no está apurado, en cada paso se fija si ha
pisado bien, sabe que el que cree estar firme, mire
que no caiga, atiende bien su caminar, sabe que de
su caminar bien y recto, dependen otros que serán
alimentados y también su recompensa.
Por tanto, es necesario que con más diligencia
atendamos a las cosas que hemos oído, no sea
que nos deslicemos. Hebreos 2:1.
La obra de Dios no se puede acelerar, es una obra
para el diligente y constante, solo Dios nos puede
capacitar, hacernos ministros competentes
dependientes en cada segundo de su gracia. por eso
el Señor debe formar nuestro carácter al de un
buey, hay muchas modas que hoy, prometen atajos,
pero no son conforme a la doctrina de esta
maravillosa gracia, no son de fe, parecen mejores,
son más populares, atraen a la multitud, queremos
ser distinguidos teólogos, hablar y que se nos
reconozca, poco se habla de la preparación para
reinar con Cristo como su esposa, de la simplicidad
en Cristo, de las luchas necesarias para llegar a
reinar, la humillación requerida, pero el buey tiene
un camino necesario y aprende a andar por él ,paso
a paso sin desviar, sin elegir su propio camino. El
buey no busca el éxito a sus propios ojos, el busca
agradar a su Señor, Dios quiere bueyes, no
tractores grandes y rápidos, él tiene cuidado de sus
bueyes, el los sostendrá, hasta que den el último
paso.
Nuestro amo nos describe el camino lento que
lleva a alcanzar lo mejor, el buey marcha en vista
de una meta por la cual trabaja incansablemente,
su fuerza es el Señor sabe que todo lo puede en El
y el final de un buey es ser sacrificado, luego de
una larga vida de servicio. El camino es
inconcebible para algunos, que se sentirán
ofendidos con aquellos que prediquen acerca de
semejante vida, el buey trabaja incansablemente y
también vive para agradar a su Señor hasta llegar
a ser semejante a él en su muerte, estos no
quedarán sin recompensa.

El buey viejo y el novillo.


Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de
mí, que soy manso y humilde de corazón; y
hallaréis descanso para vuestras almas. Mateo
11:29
Que preciosas palabras, aprended de mí, dice el
Señor, él nos llama a llevar un yugo fácil, a su lado,
si confiamos en él, el hará toda la fuerza por
nosotros, tendremos seguro descanso en nuestro
caminar, aprenderemos a su lado por amor,
reposando en sus misericordias fieles, el hará más
de lo que pedimos y entendemos mientras
transitamos aprendiendo a llevar y a tirar con
fuerza del yugo de amor, su yugo.
Él les dice esto a los que estaban allí, que eran los
judíos, que aún estaban bajo la ley.
Ahora pues, ¿por qué tentáis a Dios poniendo
sobre el cuello de los discípulos un yugo que ni
nuestros padres ni nosotros hemos podido
llevar? Hechos 15:10
Note que diferente es este yugo, el cual es muy
pesado, la persona honesta se da cuenta que no
puede llevarlo, la ley exige obediencia a una
naturaleza desobediente, que no va a cambiar, no
puede cambiar, por eso Dios pone en nosotros una
nueva naturaleza, en esa naturaleza es que somos
invitados a llevar este yugo, el yugo de Gracia, si
la persona no nace de nuevo, jamás experimentara
este yugo suave de amor y ternura. Jesús llevo este
yugo hasta la cruz por amor, no por miedo u
obligación, los judíos sentían temor de las
consecuencias de desobedecer la santa ley de Dios,
esto es totalmente diferente al yugo del Espíritu de
Gracia, que nos rebela ya no la ira de Dios, si no su
gran perfecto amor.
En el amor no hay temor, sino que el perfecto
amor echa fuera el temor; porque el temor
lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha
sido perfeccionado en el amor.1 Juan 4:18
Es nuevo caminar el que comenzamos cuando
venimos a la gracia, debemos prestar atención,
aprender en cada paso que damos del Señor, poco a
poco el quita el temor o tormento legal de nuestros
corazones, nos va perfeccionando a cada instante
en el amor divino, cuanto reposo y descanso
hallamos, tirando con su yugo, hasta hacernos
bueyes también, si , él tiene sus bueyes, quienes
llevan la carga, impulsados y constreñidos de ese
amor, estos aman la reproducción de la vida de
Cristo en los santos, porque ya son perfeccionados
en el amor. Aman al Señor sobre todas las cosas y
a todo lo que le pertenece.
y además de otras cosas, lo que sobre mí se
agolpa cada día, la preocupación por todas las
iglesias. 2 corintios 11:28
Aquí vemos a un buey llevando la carga de su
ministerio recibido, pero no se quejó, esta es su
tarea, día tras día, semana tras semana, a veces los
obreros más jóvenes, creen que solo es saber
predicar, no toman real dimensión de lo que es la
obra de Dios. Muchos toman el yugo por un
tiempo, no quieren aprender al lado de otro, ni
estar sujetos.
Dios aún tiene bueyes reales en su obra, siempre
los abra, son necesarios. El conocimiento viene por
el estudio, pero el carácter se forma a través de las
experiencias estando en el yugo, Dios en las
escrituras uso a otros hombres, para la formación
de los más hermosos instrumentos, el novillo es
apurado, fuerte joven, indómito, orgulloso, nadie
puede decirle nada, quiere ser respetado, no sabe
que toda su vida tendrá que agachar la cabeza si
quiere ser buey
Escuchando, he oído a Efraín que se lamentaba:
Me azotaste, y fui castigado como novillo
indómito; conviérteme, y seré convertido,
porque tú eres Jehová mi Dios. Jeremías 31:18
Que experiencia la de Efraín, fui indomable dice,
solo Dios puede cambiar el corazón del hombre,
pero que precioso fue escucharle, Dios no está
lejos, por eso le escucho, cuando el novillo es
nuevo, le molesta el yugo, quería ser buey, pero no
entendía lo que es llevar el yugo, por eso el amo
tiene una vara con el que azota en ocasiones a este
animal,
El siervo no se corrige (solo) con palabras;
Porque entiende, mas no hace caso. Proverbios
29:19
Dios sabe cómo corregirnos, oímos, pero no está
en nuestro corazón obedecer, por eso vemos que
hermosa la manera perfecta de nuestro amado amo
celestial. Efraín dice:
Porque después que me aparté tuve
arrepentimiento, y después que reconocí mi
falta, herí mi muslo; me avergoncé y me
confundí, porque llevé la afrenta de mi
juventud. Jeremías 31:19.
Dios sabe cómo tratar con sus novillos y también
con sus bueyes.
Y a ellos les dijo: "¿A quién de ustedes, si se le
cae un hijo o un buey en un hoyo en día de
reposo, no lo saca inmediatamente?" Lucas
14:5.
Siempre la gracia de Dios está para levantarnos,
por más grande que sea la caída, el justo cae siete
veces cada vez que se levanta, tiene más cuidado al
caminar, Dios provoca de esa manera en nosotros
un reconocimiento de nuestro error, allí estamos
listos para seguir adelante.
Como venimos diciendo el mismo carácter de
Cristo, Dios por medio de su Santo Espíritu lo está
formando en nosotros, en aquellos que se rinden,
por eso encontramos que Dios utiliza a otros, usa a
otros bueyes experimentados para nuestra
bendición, los verdaderos siervos de Dios son
contados como bueyes en las escrituras. Porque
en la ley de Moisés está escrito: No pondrás
bozal al buey que trilla. ¿Tiene Dios cuidado
de los bueyes, o lo dice enteramente por
nosotros? Pues por nosotros se escribió;
porque con esperanza debe arar el que ara, y el
que trilla, con esperanza de recibir del fruto. 1
corintios 9:9-10.
Pablo y Bernabé son vistos aquí como los bueyes.
En el comienzo Saulo fue un novillo, fue al lado de
Bernabé quien le tomo Cuando llegó a Jerusalén
que dios sus primeros pasos, trataba de juntarse
con los discípulos; pero todos le tenían miedo, no
creyendo que fuese discípulo.
Entonces Bernabé, tomándole, lo condujo ante
los apóstoles, y les relató cómo Saulo había
visto en el camino al Señor, el cual le había
hablado, y cómo en Damasco había hablado
valerosamente en el nombre de Jesús. Y estaba
con ellos en Jerusalén; y entraba y salía.
Hechos 9:26-27
Que preciosa actitud la de Bernabé, como
necesitamos hermanos con esta actitud en la obra,
vemos que dice tomándole, le condujo, sin duda
Saulo necesito a Bernabé, Bernabé no sabía el
lugar especial que Saulo ocuparía en el propósito
divino, pero Dios en su providencia guio los pasos
de Saulo a los Apóstoles, esto era necesario, Saulo
aquí es todavía un novillo, pero puesto al lado de
Bernabé, un levita, él está empezando, aun es
Saulo, luego será llevado a la escuela del Señor
mismo donde aprenderá del Maestro de los
Maestros, hasta superar en cuanto a revelación,
crecimiento y labor a todos los apóstoles, como el
luego dice:
Pero por la gracia de Dios soy lo que soy, y su
gracia para conmigo no resultó vana; antes
bien he trabajado mucho más que todos ellos,
aunque no yo, sino la gracia de Dios en mí.
1 corintios 15:10.
Dios tenía preparado un instrumento, para su
comienzo en el camino, de la misma manera
nosotros hemos necesitado de otros, a los cuales
Dios a puesto en nuestro camino, para guiarnos,
luego Pablo hace lo mismo, con Timoteo.
Después llegó a Derbe y a Listra; y he aquí que
había allí cierto discípulo llamado Timoteo,
hijo de una mujer judía creyente, pero de padre
griego; y daban buen testimonio de él los
hermanos que estaban en Listra y en
Iconio. Quiso Pablo que éste saliera con él; y
tomándole, le circuncidó por causa de los
judíos que había en aquellos lugares; porque
todos sabían que su padre era griego.
Hechos 16:1-2.
Para llegar a ser buey , luego del castrado el
novillo que empieza es traído para que tire el yugo,
a lado un buey más viejo, aquí el novillo aprenderá
primeramente a agachar la cabeza, para que el
Amo ponga el yugo, el novillo, aún no sabe mucho
del trabajo en la chacra, al principio tira bien,
empieza con toda su fuerza, se adelanta incluso al
buey, parece que este buey más viejo, es lento y no
tan fuerte, se ve importante en el yugo, se ve a sí
mismo grande en la obra, quiere y exige que se le
respete porque se ve tirando el arado, mide sus
fuerzas con las del buey más viejo, aún no sabe que
está trabajando y que diariamente será llamado
cada vez que sale el sol , a trabajar, a levantarse a
orar, a dedicarse al estudio de la palabra, a velar
por otros por el resto de su vida, al principio el
novillo, atropella, pero pronto se cansa. Al otro día
cuando el amo quiere volver a usar su servicio,
pone su cerviz dura
Y me habló Jehová, diciendo: He observado a
ese pueblo, y he aquí que es pueblo duro de
cerviz. Deuteronomio. 9:13
Este pueblo había entendido que Dios estaba
enseñándoles por cada circunstancia, pero ellos
orgullosamente no querían aprender, eran de dura
cerviz, no aceptaban la manera de Dios, muchas
veces es así con nosotros, no aceptamos el trato de
Dios en nuestras vidas, él quiere formarnos y
nosotros creemos que hay que hacer de otra
manera, así retrasamos su obra en nuestra vida,
quizás por años no hay un verdadero avance,
aunque exteriormente tengamos el crédito de otros
y las cosas aparentemente adelanten. Pensamos
que somos imprescindibles, que sabemos y
podemos saber todo, nos vemos muy inteligentes,
capaces, fuertes, hasta que agachamos la cabeza y
empezamos a llevar verdaderamente el yugo,
aceptamos su voluntad, que es fácil a la nueva
creación, pero intolerable a la antigua naturaleza,
Dios quiere formar a muchos obreros, para que
sean aprobados, muchos desechan estar bajo
autoridad o aprender de otros, por eso nunca
llegan a formarse bien, Dios quiere obreros que
sepan agachar sus cabezas, ¿para que Dios hace
así? ¿Cómo ejercerá autoridad sobre un pueblo
rebelde, como muchas veces pasa, si el mismo
obrero es rebelde?, somos puestos al lado de otros
muchas veces, antes de que Dios nos confié más
responsabilidad, Pablo antes de dejar a Timoteo en
Éfeso le probo en pequeñas responsabilidades, en
las cuales se mostró ser fiel, hasta llegar a ser el
pastor de esa asamblea y luego también su sucesor.
No impongas con ligereza las manos a ninguno,
ni participes en pecados ajenos. Consérvate
puro. 1 Timoteo 5:22.
Este es el peligro, de levantar obreros
apresuradamente, antiguamente se ponían las
manos de otros siervos sobre aquellos aprobados
por Dios para la obra del ministerio, en modo de
respeto a la aprobación divina, Dios formará a
aquellos hermanos que quieran dejarse formar y
necesariamente les pondrá al lado de otro aquí en
la tierra, muchas veces seremos alentados,
fortalecidos y corregidos por esos hermanos de
más experiencia, aprovechemos de ellos para luego
un día seguir nosotros también en su mismo
servicio.
no un neófito, para que inflándose no caiga en
juicio del diablo. 1 Timoteo 3:6
No sea que se enorgullezcan y se inflen con el
mismo orgullo de satanás y así caigan y arrastren
tras sí a otros, como ocurrió en el cielo mismo, si
no están bien establecidos en la doctrina y en su
carácter, caerán con la misma caída de satanás,
estos producen luego de su caída las divisiones,
porque están envanecidos.
Por otro lado, muchas veces se le niega a los
hermanos más jóvenes la necesaria formación,
muchas veces la carne gobierna en muchos
obreros, el celo carnal, no les permite, dar lugar a
otros, estos tienen apariencia de buey, pero no el
carácter de los tales, el buey es manso, aunque a
veces tenga que acomodar y corregir al novillo que
tira a su lado, Pablo no quiso que Juan Marcos
vuelva a salir con él a la obra, pero no destruyo a
Juan Marcos hablando o chismoseando mal de Él,
como muchos de los obreros hoy tienen por mala
costumbre, cegados por la envidia y personalismo,
Dios tenía preparado otro buey para terminar su
obra en Juan Marcos, le vemos en el final de la
carrera de Pedro, a su lado.
Pero si sabía que el buey tenía desde antes el
hábito de acornear y su dueño no lo había
encerrado, ciertamente pagará buey por buey,
y el buey muerto será suyo. Éxodo 21:36.
Cuando el buey tiene su cornamenta más grande,
mejor es, más fuerte y manso es. En el proceso y
formación los cuernos que antes apuntaban para
adelante y que eran usados para pelear con fuerza
por su derecho con otros, poco a poco, ahora
apuntan hacia atrás, ya no pueden ser usados para
dañar a otros, es evidente que ya no están hechos
para pelear, así también en lo espiritual, el cuerno
nos habla de señal de fuerza y poder, pero estos
bueyes son débiles en Cristo, evitan la lucha
carnal, para ser fuertes también en Cristo en la
lucha espiritual.
Y aquel varón Moisés era muy manso, más que
todos los hombres que había sobre la tierra.
Números 12:3.
Manso y fuerte, dos características del buey que van
juntas. De este saco Dios, virtud para fortalecer a
setenta, esto en el momento que él se pensó más
débil.
El buey es muy fuerte, en una ocasión escuche de
hermanos de campo que este, cuando está arando,
en ciertas ocasiones el arado queda clavado en
tierra, de tal forma que parece imposible sacarlo, es
allí donde se ve al buey arrodillarse sobre sus dos
patas delanteras y con el mismo peso de su cuerpo
tirado hacia adelante, saca y destraba el arado para
continuar su avance, hay situaciones que llevan a
arrodillarse a estos bueyes, ahí contemplan ellos y
otros su verdadera fuerza, tienen un poco de
potencia celestial, no usan su fuerza natural, saben
pelear y empujar de rodillas,
Entonces Moisés, apresurándose, bajó la
cabeza hacia el suelo y adoró. Y dijo: Si ahora,
Señor, he hallado gracia en tus ojos, vaya ahora
el Señor en medio de nosotros; porque es un
pueblo de dura cerviz; y perdona nuestra
iniquidad y nuestro pecado, y tómanos por tu
heredad. Éxodo 34:8-9.
Vemos la postura de este hombre que fue fiel en
toda la casa de Dios, Bajó la cabeza, sin duda este
fue el resultado de los 40 años en el desierto de
Madián, mucho más tendría que hacer esto por 40
años, junto a este pueblo rebelde.
Cada vez que este pueblo se quería volver a Egipto
o se rebelaban a Dios, vemos esta actitud en
Moisés
Entonces Moisés y Aarón se postraron sobre
sus rostros, delante de toda la congregación de
los hijos de Israel Números 14:5.
No se postran para pedir juicio, si no para
interceder, para que otros avancen.
Pero Moisés y Aarón se postraron en tierra,
delante del SEÑOR: ―Oh Dios, Dios de toda
la humanidad, ¿has de enojarte con todo el
pueblo cuando es un solo hombre el que ha
pecado? Números 16:22
Así vemos en Samuel, Daniel, en nuestro Señor
Jesucristo, la incredulidad del pueblo en todos los
tiempos solo sale por medio de la oración eficaz. La
apostasía y religiosidad reinante es grande, vemos
al apóstol Pablo doblando sus rodillas en la carta a
los efesios, para que nosotros podamos
comprender, la anchura, la altura y profundidad de
la gracia inescrutable que fue exhibida en la cruz,
le encontramos orando por todas las iglesias,
sufriendo interiormente y visiblemente por los
santos. Muchos oran solo fervientemente por la
humanidad perdida, pero Pablo oro especialmente
por los ya salvados, intercedió por el crecimiento
de los ya hijos de Dios, esto es lo más necesario e
importante, el entendió primeramente todo el
propósito divino y lo que podemos alcanzar por la
obra de cristo en la cruz. El verdadero buey
aprende en qué dirección orar para ser efectivo en
su ministerio, estos a su vez forman bien a otros en
su mismo sentir, que es verdaderamente espiritual.
Muchas veces estos bueyes parecen un poco duros
con otros, pero el buey sabe lo duro que es el
camino, entiende lo que implica la formación, a
veces contemplo a Elías diciéndole a Eliseo: ve
vuelve ¿Qué te eh hecho yo? Elías que le había
echado el manto a este señalándole como su
sucesor, sabiendo que el manto sería suyo (de
Eliseo) más adelante. Que preciosa sabiduría, lo
mismo vemos en el Señor con sus discípulos
preguntándoles, ¿Queréis acaso iros también
vosotros?
Él sabía que no se irían, el mismo los había
escogido, lo mismo encontramos en Pablo
tomando y circuncidando a Timoteo en sus
primero pasos, también enseñándole en su segunda
carta que le escribió a que esté dispuesto a sufrir y
también dándole instrucciones hasta el final de su
vida.
Bueno le es al hombre llevar el yugo desde su
juventud. Que se siente solo y calle, porque es
Dios quien se lo impuso; Lamentaciones 3: 27-
28.
Es bueno llevar el yugo, por lo menos para a aquel
que siente el llamado de ser buey, si no, la carne
sentirá el peso de la voluntad de Dios y no
soportara, no está calificada para tal formación. El
buey de joven es escogido, para tal servicio. Este
animal cuando es bien formado no se revela jamás
contra su amo y siempre está dispuesto. Muestra el
carácter del mismo Cristo. Cuantas cualidades
preciosísimas encontramos en este animal, es
Cristo, manifestándose en aquellos que se rinden.
El buey conoce a su dueño, y el asno el pesebre
de su señor; Israel no entiende, mi pueblo no
tiene conocimiento. Isaías 1:3
Conoce a su Señor, también el pesebre de su señor
y solo come allí, este animal cuando come y bebe se
toma su tiempo, carga mucho hasta 50 litros de
agua y hasta 70 kilos de pastaje. Luego del trabajo,
debe saciar su hambre y su sed, sabe dónde ir para
ello, para él hay una sola fuente. No busca otras
comidas, confía que su amo en su bendita palabra
preparo la comida adecuada para sostenerlo en su
ardua labor, solo los que conocen suficientemente
al Señor pueden ir con libertad comer y beber para
recibir fuerzas de la provisión que el Señor nos
preparó.
También encontramos que el buey tiene un andar
destacado por causa de la pezuña hendida, que
tiene en sus patas, esto representa la verdad y la
justicia, esto le da firmeza y estabilidad, era un
animal comestible para Israel, Dios le había
señalado como un animal limpio, por esta
característica
Porque nuestra exhortación no procedió de
error ni de impureza, ni fue por engaño, sino
que según fuimos aprobados por Dios para que
se nos confiase el evangelio, así hablamos; no
como para agradar a los hombres, sino a Dios,
que prueba nuestros corazones. Porque nunca
usamos de palabras lisonjeras, como sabéis, ni
encubrimos avaricia; Dios es testigo; ni
buscamos gloria de los hombres; ni de
vosotros, ni de otros, aunque podíamos seros
carga como apóstoles de Cristo. 1
tesalonicenses 2:3-6.
Dios sigue aprobando a los tales para que sean una
fuente de alimentos a otros.
El buey llego a ser tan valioso que muchas veces el
pueblo cambio a Dios, abandono a su Dios para
adorar a estos animales, la adoración al becerro
que practico Israel nos habla de la adoración a la
carne.
Un buey jamás se dejará adorar, jamás tomara un
lugar sobre su amo, pero un becerro si, la carne es
alimentada por la lisonja, por la vana gloria que
muchos ejercen sobre algunos obreros que
necesitan de tales carnales y lambiscones a su
alrededor, estos hacen un altar alrededor de este
inflado becerro, un altar paralelo, como el que
edifico Jeroboán, tras dividirse el reino de Israel en
dos, Y habiendo tenido consejo, hizo el rey dos
becerros de oro, y dijo al pueblo: Bastante
habéis subido a Jerusalén; he aquí tus dioses,
oh Israel, los cuales te hicieron subir de la
tierra de Egipto. Y puso uno en Bet-el, y el
otro en Dan. Y esto fue causa de pecado;
porque el pueblo iba a adorar delante de uno
hasta Dan. Hizo también casas sobre los
lugares altos, e hizo sacerdotes de entre el
pueblo, que no eran de los hijos de Leví. 1
Reyes 12:29-31
El hombre carnal está inclinado a adorar a otro
carnal, nunca pondrían su atención en un buey,
estos se ponen con un sacerdocio paralelo, no
escritural, no espiritual, nosotros debemos
reconocer a los bueyes y no adorar a los becerros,
por la fuerza de los bueyes aún hay grano limpio,
para hacer pan, en los graneros, debemos orar por
ellos, colaborar en su trabajo, pero no hacer de
ellos becerros, ellos están felices siendo bueyes,
¿hermano usted tiene a un buey trillando para
usted, a su favor? Anímele, respételo, sujétese en
amor, reciba el alimento, la exhortación, el
consuelo, la edificación a través de la obra del
espíritu Santo que usa tales instrumentos, pero
mire al Señor Jesús en él, no ponga la vista en el
obrero, si el obrero es fiel él mismo se encargara de
guiarle a mirar solo al Señor. No dejara que con
sus maneras se haga vano el mismo Señor
Jesucristo. En el buey encontramos a la vida
nueva entregándose, sirviendo, hasta que llegue el
día en que terminara su labor.
Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona
de la vida. Apocalipsis 2:10.
Gracias al Dios por el fiel buey, nuestro amado y
perfecto Señor Jesucristo, bendito y engrandecido
sea su nombre por la eternidad. Amen.

Gracia y Gloria Buenos Aires

Fournier 1312, Lomas de Zamora, Bs As.


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