El Nacimiento-de-Jesus GUION
El Nacimiento-de-Jesus GUION
El Nacimiento-de-Jesus GUION
Narrador: Hace mucho tiempo, vivía en Nazaret, una Ángel Gabriel: Ni de ti ni de ningún otro hombre. El niño
joven llamada María un día recibió una extraña pero que espera maría es el hijo de Dios, el cual ha sido
grata visita. concebido por la gracia del Espíritu Santo.
(María está lavando la ropa cuando entra el Ángel José: ¿Del Espíritu Santo? ¿El hijo de Dios?
Gabriel)
Ángel Gabriel: ¡Si, el hijo de Dios! Y aun así, tu deberás
Ángel Gabriel: ¡Que la Paz sea contigo! Dios te ha criarlo, cuidarlo y quererlo como si fuera tu propio hijo,
bendecido y se ha complacido contigo. porque el salvara a tu pueblo de sus pecados.
María: (Sorprendida y asustada) ¿Quién eres?, no José: Pero… ¿Por qué María? ¿Por qué nosotros?
entiendo lo que quieres decir.
Ángel Gabriel: Simple, Dios los ha elegido a ustedes
Ángel Gabriel: (Sonriendo) María, no temas, porque has porque, tanto María como tú, han demostrado ser
hallado gracia delante de Dios, él ha sido muy buenas personas y obedientes a sus leyes.
bondadoso contigo y te ha concedido la más grande de
las bendiciones.
José: Pues siendo así, cumpliré la misión se me ha
María: ¿A mí?. encomendado y amaré a Jesús como mi hijo.
Ángel Gabriel: Si, en tu vientre está creciendo un niño Ángel Gabriel: (Saliendo de escena) Recuerda José,
que ha sido concebido por obra del Espíritu Santo. El María te ama y sigue conservando su pureza e inocencia.
será el Hijo de Dios y su reino nunca
tendrá fin. ACTO III (MARÍA Y JOSÉ BUSCAN POSADA)
María: Yo creo y confío en Dios. Yo soy solo una sierva Narrador: Pocos días antes de que Jesús naciera, José y
del Señor. Que se haga, en mí, su voluntad. María tuvieron que hacer un largo viaje desde Nazaret
hasta Belén de Judea, ciudad natal de José, ya que el
Ángel Gabriel: Escucha María, para Dios no hay nada emperador romano Cesar Augusto había ordenado
imposible. Tu prima Elizabeth, a quien todos creen muy hacer un censo para asegurarse que todos estaban
anciana para tener hijos, tendrá un hijo a quien Dios ha pagando los impuestos, por lo que cada familia debía
escogido para abrir el camino que conducirá hacia el viajar a la ciudad de origen del jefe de familia.
tuyo. Ve, y dile a Elizabeth que su nombre deberá ser
Juan. (José caminando, jalando del burro donde va montada
María)
María: (Sobando su vientre) Hoy mismo iré a ver a mi
querida prima. Soldado: Por edicto del emperador Cesar Augusto
ordeno que toda persona tiene que ir a su lugar de
origen para el censo.
ACTO II (JOSÉ ES VISITADO EN SUEÑOS)
José: María, ¿estás muy cansada?
María: Si José, un poquito. Bueno, bastante porque el José: Acuéstate María ¿Tienes frío?
camino a Belén es muy largo.
María: Un poquito, José.
José: La noche se va acercando y debemos buscar un
lugar donde descansar. José: Te taparé con la manta.
María: Mira, aquí cerquita hay una posada, (Se apaga la luz)
preguntemos si hay lugar para nosotros.
ACTO IV (PASTORES RECIBEN LA BUENA NUEVA)
(María se queda junto al burrito y José llama a la
puerta de la posada) Narrador: Esa noche José y María, vieron cumplida la
promesa del advenimiento del salvador, al escuchar el
Posadero: Buenas noches. llanto de su esperado niño, en el humilde pesebre. Cerca
del establo, se encontraban un grupo de pastores que
José: Buenas noches señor. Quisiera saber si hay lugar bajo el manto frio de la noche charlaban y cantaban
para que nosotros podamos pasar la noche, pues mientras vigilaban y cuidaban sus rebaños.
venimos de un viaje larguísimo y estamos muy cansados.
Posadero: Lo siento, no me queda ni una cama, por Juan: ¡Qué tranquila esta la noche!
culpa del censo la ciudad está llena de viajeros que
buscan donde dormir. Samuel: Si, hay algo en el ambiente que da una
sensación de paz.
José: Pero mi esposa está demasiado cansada; y está por
nacer su hijo. Leticia: ¡Miren! ¡Esa estrella brilla más que ninguna otra!
Posadero: Lo siento, la posada está llena, pero si quieren Juan y Samuel: ¡Es cierto!
pueden dormir en el establo. Es todo lo que les puedo
ofrecer. Leticia: Esa estrella debe de significar algo.
José: ¡Gracias, bueno hombre! Eso estará bien Juan: Tienes razón ¿Pero qué?
Posadero: (Sorprendido) ¿Cómo? Señor, era una broma, Samuel: Siento que algo ocurrirá pronto que cambiara
ese es el establo de los animales. las cosas para siempre.
José: No importa señor, lo que necesitamos es un lugar Leticia: Mmm… recuerdo que nuestro padre comentaba
donde descansar y resguardarnos del frio. algo sobre una profecía.
Posadero: Bueno, si usted insiste pasen adelante, es allá Leticia: Oye Samuel, ¿Que sabes tú de la profecía del
al fondo. No es mucho, pero el buey les dará calor. redentor?
(José, María y el Posadero se dirigen al establo) Samuel: Bueno, los que mis abuelos me contaron es que
vendrá un Mesías que será la esperanza del pueblo de
José: Gracias señor, ¿Cuánto le debo? Israel.
Posadero: Nada señor ¿Cómo se le ocurre? No puedo Juan: ¿Será acaso él, el rey que expulsará a Roma de
cobrarles nada, pasen adelante. (A María) Tenga mi Israel?
señora, tome esta lámpara y esta manta para que se
cubra del frio. Samuel: Pues para que lo sepas Juan, el profeta
Malaquías dijo: “Y tu Belén, no eres la menor de las
María: Gracias señor, es muy amable, Dios le bendiga y ciudades de Judea, puesto que de ti ha de salir el que ha
le premie por su ayuda. de gobernar a mi pueblo”.
(El posadero se va y el burrito se tumba junto al buey) Juan: ¿En Belén? ¿En nuestra ciudad? No lo creo.
Leticia: ¿Cuándo creen que llegara el Mesías? Juan: El bebé esta recostado en un pesebre, tal como lo
dijo el Ángel.
Samuel: Ojala que sea pronto, ya que Herodes y los
romanos nos tratan cada vez peor. Leticia: ¡Que hermoso es!
Juan: Es cierto, necesitamos que alguien se acuerde de (Todos los pastores se arrodillan a adorar al niño)
los pobres y desposeídos como nosotros.
Leticia: Tenemos que dar la Buena nueva a todos. Todos
Samuel: Vamos a disfrutar de esa maravillosa estrella deben de saber que Dios envío a su Hijo para ser nuestro
que nos ha regalado la noche. Salvador.
Leticia: ¡Algo pasa, la estrella brilla más que nunca y ha ACTO V (TRES REYES DEL ORIENTE SIGUEN UNA
iluminado ese establo abandonado que está cerca de ESTRELLA)
aquí!
Narrador: Los pastores regresaron a sus rebaños,
Samuel: ¡Miren… Miren… algo se acerca! alabando a Dios por enviar a su hijo a salvar a su pueblo.
Después, tres reyes magos de oriente vieron la brillante
Juan: ¡Parece algo que vuela! estrella.
Leticia: ¿Será un ángel? 1 Rey Mago: ¡Miren, esa estrella brillante en el cielo!
Leticia: ¡Oh, que hermoso es, todo lleno de luz! 3 Rey Mago: Si, las antiguas profecías comentan que
cuando el niño Rey nazca, aparecerá una brillante
(Todo el escenario se ilumina y los pastores tratan de estrella en el firmamento.
correr)
1 Rey Mago: ¡Sigámosla!
Ángel Gabriel: Gloria a Dios en las alturas y paz en la
tierra a los hombres de buena voluntad. No teman, no 2 Rey Mago: Si, tenemos que encontrar al nuevo Rey, la
huyan. Les tengo una buena noticia que traerá alegría estrella guiara nuestro camino.
para todo el pueblo.
Narrador: Los tres Reyes Magos siguieron la estrella
Juan: ¿Cuál es esa buena noticia? hacia el país de Judea y cuando llegaron a la capital,
Jerusalén, empezaron a preguntar a la gente. Pero
Ángel Gabriel: Que ha nacido el Salvador del Mundo. El cuando Herodes, el rey de Judea, escucho esto, mando
Rey de Reyes. El Hijo de Dios. a buscar a los tres reyes magos para hablar con ellos.
Ángel Gabriel: Sigan esa estrella grande y luminosa, y Tres Reyes Magos: ¿Dónde está el niño que ha nacido
ahí encontraran al Niño envuelto en pañales y para ser el Rey de los Judíos? Hemos venido desde el
descansando en un pesebre en compañía de sus padres, lejano oriente para adorarlo.
un buey y un pequeño burrito.
Herodes: (Pensando) No puedo dejar que alguien más
Samuel: Vamos a buscarlo, y vayamos a adorar al Niño ocupe mi lugar. ¡Yo soy el único rey de esta tierra! Tengo
Dios que ha nacido ya. que hacer algo !Soldado!