Metabolismo de Los Carbohidratos

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Metabolismo de los carbohidratos

Cuando nuestro organismo digiere, absorbe y metaboliza los carbohidratos, éstos


se transforman en glucosa que es transportada por el torrente sanguíneo hasta
llegar a los tejidos, como músculo esquelético y cardíaco, tejido adiposo y otros;
cuyo transporte al interior de la célula para generar energía es facilitado por la
hormona insulina. La insulina es secretada por la glándula pancreática para
controlar los niveles de glucosa en sangre. Así, un exceso de glucosa se
transforma en glucógeno que es almacenado en el hígado o en forma de grasa en
el cuerpo. Cuando nuestro cuerpo necesita más energía –en situaciones de estrés
o déficit de glucosa en sangre-, entran en juego otras dos hormonas: la adrenalina
que actúa en músculo e hígado y el glucagón –sólo en hígado-, que estimulan la
degradación de glucógeno a glucosa e inhiben a la vez su síntesis, pasando así la
glucosa al torrente sanguíneo para ser utilizada por las células. Así, cuanto más
lenta sea la liberación de hormonas y glucosa, más estables y eficientes serán los
niveles de energía de nuestro organismo.

Clasificación
Atendiendo a la complejidad de las moléculas que componen su estructura, los
carbohidratos se pueden clasificar en: 1) monosacáridos: azúcares que
contienen entre 3 y 7 átomos de C y no pueden transformarse -mediante
hidrólisis-, en otros más simples. Por ello, se les denomina en ocasiones azúcares
simples; 2) oligosacáridos: formados por unión de 2 a 10 monosacáridos. Los
más importantes tienen sólo dos unidades de monosacáridos y se designan como
disacáridos; 3) polisacáridos: constituidos por más de 10 unidades de
monosacáridos y pueden llegar a contener varios miles. Si están formados por la
misma unidad se designan como homopolisacáridos, siendo los
heteropolisacáridos los formados por diferentes monosacáridos. El panel de
Productos Dietéticos, Nutrición y Alergias (NDA) de la Autoridad Europea de
Seguridad Alimentaria (EFSA), atendiendo a conceptos nutricionales clasifica los
carbohidratos en dos categorías: 1) carbohidratos glicémicos, aquellos que se
absorben y digieren en el intestino delgado y; 2) fibra dietética, incluyendo en
este grupo los carbohidratos que pasan a lo largo del tracto digestivo sin ser
digeridos
VR EN SANGRE (GLUCEMIA): 0,70 a 1,10 g/l o 70 a 110 mg/dl

Importancia de los carbohidratos en el mantenimiento de la Salud


Como se ha comentado anteriormente, los carbohidratos glicémicos ingeridos en
la dieta se transforman en glucosa, proporcionando al organismo la energía
necesaria para el correcto desarrollo de las funciones vitales. A pesar de su
importancia como nutriente, para el seguimiento de una alimentación saludable
debemos diferenciar entre aquellos alimentos que contienen hidratos de carbono
complejos -legumbres, cereales, etc- ya que suministran además otros nutrientes
esenciales como minerales, vitaminas y fibra; y los que sólo aportan calorías
vacías denominados hidratos de carbono simples –azúcares-, como el azúcar de
mesa, caramelos y similares. Así, la naturaleza de los carbohidratos ingeridos es
importante.

Se define como metabolismo de los glúcidos a los procesos bioquímicos de formación,


ruptura y conversión de los glúcidos en los organismos vivos. Los glúcidos son las principales
moléculas destinados al aporte de energía, gracias a su fácil metabolismo. La
glucosa se oxida por glucólisis, una vía que genera energía, que la convierte en
piruvato. En ausencia de oxígeno, el piruvato se convierte en lactato. Cuando
se encuentra presente el oxígeno, el piruvato se degrada más para formar acetil-
CoA.
El glúcido más común es la glucosa: un monosacárido metabolizado por casi todos los
organismos conocidos. La oxidación de un gramo de glúcidos genera aproximadamente 4 kcal
de energía; algo menos de la mitad que la generada desde lípidos.
La glucólisis o glicolisis (del griego glycos, azúcar y lysis, ruptura), es la vía
metabólica encargada de oxidar la glucosa con la finalidad de obtener energía para la célula.
Consiste en 10 reacciones enzimáticas consecutivas que convierten a la glucosa en dos
moléculas de piruvato, el cual es capaz de seguir otras vías metabólicas que pueden ser
aeróbicas (presencia de oxigeno) produciendo energías ATP y dióxido de carbono o vía
anaeróbica (sin oxígeno) produciendo ácido láctico.

ando energía al organismo.


La gluconeogénesis es la producción de nueva glucosa. Si la molécula no es necesitada
inmediatamente se almacena bajo la forma de Glucógeno. Generalmente en personas con
requerimientos de glucosa bajos (poca actividad física), el glucógeno se encuentra
almacenado en el hígado pero este puede ser utilizado y metabolizado por 2 enzimas: la
enzima desramificante y la glucógeno fosforilasa. El proceso de gluconeogénesis se hace de
muchas formas posibles, siendo las tres más importantes.

La glucogenólisis es un proceso catabólico y hace referencia a la degradación


de glucógeno a glucosa o glucosa-6-fosfato. Se da cuando el organismo requiere un aumento
de glucosa y, a través de este proceso, puede liberarse a la sangre y mantener su nivel
(glucemia). Tiene lugar en casi todos los tejidos, aunque de manera especial en el músculo y
en el hígado debido a la mayor importancia del glucógeno como combustible de reserva en
estos tejidos.

La ruta de la pentosa fosfato, también conocida como lanzadera o shunt de las pentosa
fosfato, es una ruta metabólica estrechamente relacionada con la glucólisis, durante la cual se
utiliza la glucosa para generar ribosa, que es necesaria para
la biosíntesis de nucleótidos y ácidos nucleicos. Además, también se obtiene poder
reductor en forma de NADPH que se utilizará como coenzima de enzimas propias
del metabolismo anabólico.
De esta manera, este proceso metabólico, el cual es regulado por insulina, tiene una doble
función, ya que la glucosa se usa para formar NADPH, mientras que también se puede
transformar en otros componentes del metabolismo, especialmente pentosas, utilizadas para
la síntesis de nucleótidos y de ácidos nucleicos. Así, se forma un puente entre rutas
anabólicas y catabólicas de la glucosa.
La ruta de la pentosa fosfato tiene lugar en el citosol
Degradación de la glucosa anaeróbicamente

Degradación de la glucosa aeróbicamente


EN LA CELULA

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