Autoestima
Autoestima
Autoestima
Es la idea que tenemos de nosotros mismos. Es la imagen que cada persona tiene de sí
mismo. Y es esa imagen la que proyectamos hacia los demás. Es el conjunto de ideas que
tenemos de nuestras capacidades, nuestras cualidades, fortalezas, nuestros talentos, pero
también la importancia que le damos a nuestras debilidades, nuestras fallas, nuestras
falencias.
La autoestima puede fluctuar entre niveles altos o bajos a lo largo de la vida, y también
variar entre los diferentes espacios sociales de la persona. Lo cierto es que tener autoestima
baja o alta nos condiciona fuertemente en la vida y en la manera en la cual encaramos
nuestros objetivos. Es así como una persona con autoestima alta se animará a emprender
nuevos desafíos, creerá en sus potencialidades, se propondrá objetivos más desafiantes, etc.
En cambio, una persona con autoestima baja posiblemente evite ciertas situaciones sociales
por miedo a que sus debilidades queden al descubierto. Es por esto que verse de forma
positiva o negativa condiciona mucho cómo te relacionas con los demás y la manera en la
cual elijes vivir tu vida. Esta es la razón por la cual es importante fortalecer una autoestima
baja, para mejorar nuestro bienestar emocional.
¿Cómo se construye?
¿Cómo mejorarla?
1) Detén los pensamientos negativos sobre ti mism@: No pienses en tus defectos, mejor
enfócate en tus fortalezas. Escribe, cada día, 3 aspectos que te gustan de ti.
2) Ponte objetivos realistas, no seas perfeccionista y disfruta del proceso: Proponte
objetivos paso a paso y no te bloquees por buscar la perfección (lo bueno es enemigo de lo
perfecto), haz lo que te propones con compromiso y responsabilidad pero disfrutando del
proceso.
3) Los errores son oportunidades de aprendizaje: También tienes derecho a equivocarte
(nadie es perfecto) y de estos errores salen los aprendizajes más significativos y para toda la
vida. ¡Atrévete a equivocarte!
4) Date tiempo para probar nuevas actividades: Si quieres ampliar tu repertorio de
competencias proponte hacer nuevas actividades que llamen tú atención y que siempre has
querido hacer.
5) Fíjate metas realistas: Define metas realistas que te gustaría alcanzar, y luego diseña un
plan para hacerlo para que de esta manera tomes acción. Recuerda ir anotando tus procesos.
6) Expresa con orgullo y respeto tus opiniones e ideas: No te reprimas por temor a no
agradar a los demás, exprésate con confianza y asertividad (respetando las opiniones de
tod@s).
7) Comprométete con una labor social: Ingresa de voluntari@ a una fundación (por
ejemplo: de perritos abandonados), da clases de lo que dominas y comparte tus
conocimientos, ayuda a limpiar tu barrio, etc. Sentir que contribuyes significativamente en
algo hace maravillas para mejorar la autoestima y bienestar.
8) Mueve tu cuerpo y haz ejercicio: Tu estrés va a disminuir y estarás más san@, con
energía y más feliz.
9) Pásalo bien con tus seres queridos: Date espacio y tiempo para compartir actividades que
te agradan con las personas que son relevantes para ti.
El árbol de mi autoestima
Haz una lista de logros (aprender un idioma, vivir en el extranjero…) y otra de tus
cualidades (simpatía, amabilidad, creatividad). Después, dibuja un árbol, incluyendo las
raíces y los frutos.
Pon tus logros en los frutos y las cualidades que los han hecho posible en las raíces. Por
ejemplo: un logro puede ser sacar buena nota en un examen y la fortaleza que lo hizo
posible, el esfuerzo.
Este ejercicio nos permite comprobar el papel que jugamos en las cosas que nos salen bien.
Nos recuerda que son nuestras fortalezas y no sólo la suerte o el azar. Nos hace sentirnos
capaces y motivados para seguir intentando cosas nuevas.
2. El anuncio publicitario
Es una actividad divertida en la que cada uno debe “venderse” destacando sus cualidades y
logros. Pueden acompañarlo de fotos, dibujos, vídeos… La idea es que tengan presentes sus
fortalezas por eso una buena idea es que coloquen su spot publicitario en un espacio visible.
Recordar de vez en cuando nuestras cualidades, es motivador.
Una vez que todos hayan terminado, se intercambian las estrellas con el
compañero que tiene al lado. Cada uno leerá en voz alta lo que al otro compañero
le gusta hacer pero sin decir el nombre. El maestro preguntará a quien
corresponde esa estrella.
Esta actividad exige que el niño reflexione acerca de lo que más disfruta hacer. El
hecho de leer en voz alta los gustos de otro compañero, favorece la integración de
sus preferencias con la de los demás.
Seguidamente hacer una lista con las profesiones elegidas y organizar un día de
“representación teatral”. Cada uno hará el trabajo que ha seleccionado, por
ejemplo el bombero simulará apagar un incendio, la enfermera curar a un
enfermo, etc. Después de cada representación pedir que todo el grupo aplauda al
compañero.
Esta es una buena oportunidad para que el maestro destaque frente al grupo las
fortalezas y el talento que cada uno ha demostrado en su rol.
La finalidad de este juego es mostrarle a cada uno, que si bien tienen defectos,
también tiene muchas virtudes. De hecho cada compañero reconoce distintas
virtudes, quizás algunas coincidentes. Pero en cualquier caso serán más que los
defectos que él ha identificado.
El pedir que mencionen tres aspectos que les gusten, les ayudará a ver que todos
tienen algo positivo y agradable. Además, se darán cuenta que no todo pasa por
lo físico. A su vez, cuando a cada uno le llegue el turno de escuchar sus cualidades,
se sentirá muy contento. Incluso sorprendido de conocer aspectos de sí que otros
valoran como positivos.
Actividades de autoestima
Sin embargo, cuando le pides por favor algo a alguien, le transmites respeto. Eso
le hará sentir que tiene valor y por tanto reforzará su autoestima.
¿Qué significa y que objetivo persigue este ejercicio? Sencillamente darle a tú hijo
el espacio suficiente para que se exprese. Estimularlo mediante preguntas más
exigentes, como por ejemplo “¿qué fue lo que más te gusto de lo que hicieron hoy
en la escuela?”. De esa forma “obligarás” a que tenga que describir sensaciones o
pensamientos. Cuando lo haga escúchalo con mucha atención. Si el televisor está
encendido por ejemplo, entonces baja el volumen para escucharlo. De esa forma
el entenderá que lo que tiene para decir es importante.
Nunca interrumpas su conversación por atender el móvil. Lo que tu hijo tiene para
contarte es más importante, y ese mensaje es el que tienes que transmitirle
exactamente.
1. Yo soy
Cualidades
Logros
Destrezas
Conocimientos
Capacidades
Ante cada mensaje identificado, tiene que pararse ante el muñeco para conversar con él y
pensar argumentos en su contra. Esta es una de las mejores actividades de autoestima para
adolescentes porque pretende atacar con razones de peso los pensamientos negativos
acerca de sí mismos.
Para hacer el ejercicio aún más efectivo, el adolescente puede escribir en una hoja los
mensajes negativos frente a las razones de peso que pensó para afrontarlos. ¡Poco a
poco verás cómo esta dinámica de autoestima tendrá resultados positivos que se
verán reflejados en una mejor autopercepción!
3. La caja de las caricias
Recuerda que es muy importante reconocer cómo tener más amor propio y manifestarlo
en cada una de nuestras acciones o actitudes ante cada situación. Esto mejorará
notablemente nuestra calidad de vida.
4. El árbol
Según El País, la etapa de la adolescencia resulta fascinante en cuanto a los cambios que
implica en los jóvenes, que se encuentran en plena búsqueda de la que será su identidad
adulta. Es por esto que las actividades de autoestima para adolescentes deben enfocarse en
el reconocimiento de su identidad innata.
Este es, precisamente, el objetivo de este ejercicio. La identidad debe ser como un árbol
compuesto por diferentes aspectos como nuestros gustos, pasiones, principios no
negociables, etc. Reconocerlos es el punto inicial para mejorar la autoestima en
adolescentes.
Para este ejercicio se dibujará un árbol con sus raíces, tronco, ramas, hojas y frutos. Este
árbol representará los siguientes aspectos:
Estas actividades de autoestima para adolescentes son siempre más efectivas si los
resultados se comparten con un grupo o con personas de mucha confianza como
padres, hermanos, amigos, profesores o tutores. ¡Compartirlas es una excelente forma
de fortalecer el amor propio!
5. Querido yo, merezco que me trates mejor
Escribir una carta para nosotros mismos siempre será una de las mejores actividades de
autoestima para adolescentes. ¡Un ejercicio que, sin duda, fortalecerá el amor propio!