DINERO
DINERO
DINERO
El dinero juega un papel fundamental en las economías. Si se piensa en la enorme cantidad de intercambios
comerciales que se realizan diariamente, se aprecia de inmediato su utilidad para que estas transacciones
sean satisfactorias.
La necesidad de intercambio de bienes y servicios tuvo lugar a medida que en el mundo se asentaba el
principio de especialización fruto de la vida social y las limitaciones propias del autoabastecimiento, es
decir, cada unidad económica priorizo la producción de un bien por encima de otro fomentando una
división del trabajo, así se posibilita una mayor producción de bienes y servicios y ese es el fundamento de
la economía de cambio, dado que nadie dedicara su tiempo a la producción de un bien o servicio que no
satisfaga sus propias necesidades a menos que pueda canjearlo por artículos deseados pero producidos por
otras personas.
Si no existiera el dinero nos veríamos obligados a intercambiar unos bienes por otros, es decir, a practicar el
trueque, este es un sistema de intercambio, que consiste en entregar una cosa por otra. Fue el primer modo
de ejercerse el comercio, cuando aún no existía la moneda. Sistema vigente pero en desuso.
El trueque como forma de intercambio presenta limitaciones, debido a que exige que coincidan las
necesidades de las personas: “yo necesito una puerta y tú necesitas una vaca”. Además obliga a establecer
las cantidades a intercambiar de una gran cantidad de bienes, por ejemplo, una puerta vale media vaca, o
un saco de maíz, o cinco cueros, etc.
Desde los comienzos de la historia los seres humanos han utilizado el dinero mercancía para realizar los
intercambios. Inicialmente se utilizó cualquier artículo considerado valioso, portable, divisible y escaso, con
la condición de que la sociedad tuviera confianza en que iba a ser aceptado como medio de cambio.
Dependiendo de las culturas, los bienes utilizados fueron diversos: conchas, ganado, arroz, metales o sal.
Entre las mercancías usadas como dinero, pronto destacaron los metales por su idoneidad, especialmente el
oro y la plata.
Pero la incomodidad de pesar el metal en cada transacción dió origen a la acuñación de monedas, cuyo sello
garantizaba la fiabilidad de su peso, otorgándole un valor específico, intrínseco o de canje. El valor de las
monedas coincidía con el valor del metal que contenía
Durante la Edad Media apareció el dinero papel, que supuso otro gran avance para el comercio. Fueron los
orfebres, encargados de la acuñación y custodia de los metales preciosos, los que iniciaron esta práctica: a
cambio del oro que recibían en custodia, entregaban a los depositantes un recibo de papel que garantizaba
su devolución en cualquier momento. Los comerciantes rápidamente se dieron cuenta de que era más
cómodo entregar estos recibos como pago de sus compras que transportar el metal, por lo que su uso se
generalizó.
Hasta la mitad del S.XX el dinero era convertible en oro, de ahí que se calificara al sistema monetario como
"patrón oro", fijando su valor en términos de una determinada cantidad de ese metal. El emisor de
la divisa garantiza que pueda dar al poseedor de sus billetes la cantidad de oro consignada en ellos. Pero
esta convertibilidad tenía sus limitaciones, debido a que la cantidad de dinero de una economía estaba
condicionada por la existencia de este o por el descubrimiento de nuevas minas.
En la actualidad el dinero de curso legal se considera fiduciario porque su valor en sí mismo es nulo. Los
billetes por ellos mismos carecen de valor y el metal con el que se fabrican las monedas no posee el valor
que representan.
Las monedas y billetes fiduciarios no basan su valor en la existencia de una contrapartida en oro, plata o
cualquier otro metal noble o valores, ni en su valor intrínseco, sino simplemente en su declaración como
dinero por el Estado y también en el crédito y la confianza (la fe en su futura aceptación) que inspira. Sin
esta declaración, la moneda no tendría ningún valor: el dinero fiduciario sería entonces tan poco valioso
como el pedazo de papel en el que está impreso.
Un billete actual es una clara representación de dinero fiduciario, por cuanto objetivamente considerado
carece de valor. Su valoración viene dada por la autoridad monetaria que lo emitió, que goza de confianza
entre los sujetos que la aceptan.
El dinero es todo medio de cambio generalmente aceptado por la sociedad y que sirve como
contraprestación por productos o servicios. Para tener valor debe ser reconocido, aceptado, usado por la
sociedad y avalado o certificado por una entidad emisora.
Puede decirse que el dinero es uno de los elementos más importantes del proceso económico y constituye
la herramienta principal del sistema monetario que, cuando función en forma adecuada, alimenta
eficazmente la corriente circular de la renta y el gasto conduciendo al pleno empleo y a la máxima
producción de bienes y servicios. Pero si el sistema monetario funciona de forma indebida puede producir
serias fluctuaciones en los niveles de producción, empleo y precios que produzcan un desequilibrio en la
economía.
Clases de dinero
Dinero de curso legal: Está constituido por las monedas y billetes emitidos por el Banco Central,
institución competente para ello. Se denomina también efectivo o metálico. Las monedas metálicas
se hacen de metal, cobre, estaño, zinc (anteriormente eran de oro o de plata) y su valor intrínseco
(de sus componentes) es siempre inferior a su valor de circulación. Los billetes, al ser de papel,
nadie pretende que posean un valor intrínseco importante, no obstante, se elaboran con papel de
gran calidad y con marcas de agua, tomándose gran cuidado en su impresión, la cual constituye un
trabajo muy especializado.
Dinero bancario: Es el dinero creado por los bancos a partir de los depósitos, que se convierten en
nuevos depósitos, es decir, nuevo dinero.
Por otra parte existe el llamado dinero electrónico o plástico: las tarjetas de débito y de crédito, que
sirven como medio de pago pero no constituyen dinero en sí mismas. De ahí que también se las
califique como cuasi dinero.
LA OFERTA DE DINERO
En macroeconomía se entiende por oferta de dinero o masa monetaria a la cantidad de dinero disponible
“stock” en una economía para comprar bienes, servicios y títulos de ahorro, en un momento determinado.
El dinero puede considerarse como un bien más que se intercambia por un precio, el tipo de interés.
En cualquier momento del tiempo existe una demanda y una oferta de dinero, por lo que tenemos los
elementos fundamentales de cualquier mercado. Hablar de un incremento de la oferta de dinero, no
significa la venta de dinero por parte de quienes la poseen sino un incremento en el stock de dinero que
poseen. Sin embargo, el mercado de dinero está regulado por el Estado a través del Banco Central, que
emite en exclusiva el dinero de curso legal y establece el coeficiente de reservas mínimas que deben
mantener los bancos privados. Estas dos acciones determinan en buena medida la cantidad de dinero en
circulación en una economía, es decir, la oferta de dinero.
Agregados Monetarios
Los agregados monetarios son elementos representativos del dinero, de acuerdo a las posibilidades de su
utilización como medios de pago y en función de su liquidez.
En una economía desarrollada no es fácil establecer una línea que diferencie entre los activos que pueden
ser denominados dinero y los demás. Puesto que se entiende que dinero es cualquier cosa que pueda ser
usada en pago por una deuda. Hay una variedad de formas de definir o medir la oferta del dinero; las más
restrictivas tienen en cuenta sólo las formas de dinero disponibles para transacciones inmediatas, mientras
que definiciones más amplias consideran dinero el almacenamiento de algo de valor. Las medidas más
comunes son M0, M1, M2, M3, M4.
M0 “Base Monetaria”, total de moneda física + cuentas bancarias depositadas en los Centrales
M1: M0 + depósitos en cuentas corrientes
M2: M1 + depósitos en cajas de ahorros
M3: M2 + todos los demás tipos de depósito y depósitos en moneda extranjera
M4: M3 + el cuasi-dinero y otros instrumentos financieros muy poco líquidos
LA DEMANDA DE DINERO
Es la cantidad de dinero que los agentes económicos desean mantener en efectivo en cada momento,
"preferencia por la liquidez". Mantener dinero en efectivo no produce intereses, por lo que quién desee
tener dinero líquido asume un coste de oportunidad, medido por los intereses a los que renuncia.
Demanda de dinero por precaución: Otro motivo por el que los agentes económicos desean
mantener efectivo es la incertidumbre acerca del momento exacto de sus cobros y pagos futuros.
Las empresas normalmente cobran y pagan a plazo, pero no tienen seguridad sobre sus ventas
futuras, ni tampoco sobre el cobro de las mismas; ello les obliga a ser precavidas y mantener una
cantidad de liquidez superior a la estrictamente necesaria para hacer frente a sus pagos más
inmediatos.
Estas reservas de efectivo cumplen una función de precaución disminuyendo el riesgo de no poder asumir
los pagos futuros. Pero simultáneamente suponen un coste de oportunidad, por lo que a medida que se
incrementa el tipo de interés, los agentes estarán más dispuestos a aumentar su riesgo y reducir sus
reservas de liquidez. Otra vez encontramos una relación inversa entre demanda de dinero y precio.
Demanda de dinero para la especulación: Este tipo de demanda se deriva de la función del dinero
como depósito de valor, mientras que las anteriores son consecuencia de su función como medio de
pago. La especulación es la posibilidad de ganancia como consecuencia de las variaciones
temporales o geográficas de los precios, de su valor.
Preferencia de liquidez
Las tres características de la demanda de dinero a que nos hemos referido son agrupadas por Keynes en un
concepto que se llama la preferencia por la liquidez. Sostiene al efecto que la cantidad de dinero mantenida
por el motivo transacción y por el motivo precaución depende del nivel de renta, en tanto que la cantidad
de dinero mantenido por el motivo especulación depende del tipo de interés.
Motivo transacción
Nivel de renta
STOCK DE DINERO Motivo precaución
Se puede observar que la cantidad de dinero (D*) no ha variado, debido a su determinación directa por
parte del banco central. Este determina la oferta de dinero u oferta monetaria mediante diversos
mecanismos, entre ellos la fabricación de dinero de curso legal, monedas y billetes, y la fijación del
Coeficiente de Reservas Mínimas que deben mantener los bancos. Pues bien, cuando el Banco Central
quiere modificar el tipo de interés, lo que hace es variar la cantidad de dinero en circulación, la oferta de
dinero, que al interactuar con la demanda, dará lugar a un nuevo tipo de interés.
En los gráficos siguientes se representan dos ejemplos: en el primero se baja el tipo de interés aumentando
la oferta monetaria; en el segundo ocurre al contrario, el tipo de interés se incrementa al reducir la oferta
de dinero.
Samuelson resume las mismas diciendo que la inflación imprevista tiende a favorecer a los deudores a expensas de los acreedores,
mientras la deflación produce efectos opuestos.
Todos los que invierten su dinero en inmuebles, acciones o casos de harina obtienen grandes beneficios durante la inflación, pues el
volumen de ventas comerciales sube enormemente, y los precios se elevan entre el momento en que el comerciante compra su
mercancía y la venta de la misma. Además los gastos fijos y generales apenas aumentan, y aunque algunos crezcan, no lo hacen tan
a prisa como los precios. En tales periodos la aguda inflación puede convertir a cualquier audaz en un gran financiero.
En las épocas de deflación, si los precios bajan en el espacio de tiempo comprendido entre el momento de un préstamo y el de la
devolución, el acreedor cobra una cantidad con mayor poder adquisitivo que la que presto. Entre los momentos en que un
comerciante compra y vende las mercancías sufrirá una perdida, mientras que el trabajador en relación de dependencia que
conserva su empleo, y cuyo sueldo no ha sido reducido excesivamente, se encuentra con sus ingresos reales aumentados
En la deflación, por lo contrario, el creciente paro provoca un descenso del bienestar general, de modo que los que ganan con la
situación perciben un beneficio menor de lo que pierden los demás. En realidad, en las grandes depresiones casi todo el mundo
(incluso el acreedor- que se queda sin cobrar sus deudas) puede llegar a pasarlo mal.
Sistema Bancario
El sistema bancario, es el conjunto de entidades o instituciones que, dentro de una economía determinada,
prestan el servicio de banco. Un banco es una empresa financiera que se encarga de captar recursos en la
forma de depósitos, y prestar dinero o servicios financieros.
Su función genérica es la intermediación profesional en el comercio del dinero y del crédito. En una
economía siempre hay personas o empresas que por alguna razón tienen ingresos mayores a sus gastos
generando así un excedente que ahorran para un consumo o inversión posterior. La administración de una
parte importante de los ahorros de todas esas personas y empresas es responsabilidad de la banca; de ahí la
relevancia de que los bancos asignen especial cuidado a quién le prestan, pues en última instancia no son
sus recursos, sino los de la sociedad. También por ello existen leyes y regulaciones que indican qué se puede
hacer con ese dinero y autoridades que supervisan que se cumplan dichas disposiciones
Se puede decir que los bancos nacieron con la necesidad de realizar simples operaciones de cambio y
crédito a niveles personales, pero pronto se comenzaron a desarrollar funciones más amplias, a abarcar más
personas y pasaron a contar con organizaciones más complejas.
Así es como, a partir del siglo IV A.C. en varias ciudades griegas se constituyen bancos públicos,
administrados por funcionarios especialmente destinados a esta labor. Estas instituciones, además de su rol
propiamente bancario (ligado a operaciones de cambio y crédito), recaudaban impuestos y acuñaban
moneda. En el siglo VI se reglamentan con precisión los usos y costumbres del mundo romano en materia
bancaria y se fija la tasa de interés en un 6% al año, con algunas excepciones, considerando el riesgo de las
operaciones. Los préstamos marítimos, por ejemplo, pueden alcanzar al 12% al año y los acordados a las
iglesias no pueden superar el 3%.
Entre el siglo XII y XIV los bancos conocieron un renacimiento importante, ya que los hombres de negocios
de Italia del norte desarrollaron notablemente las operaciones de cambio.
En el siglo XIX, los bancos conocen una época de crecimiento y estabilidad, marcada por el desarrollo de los
institutos de emisión, la multiplicación de las casas de "alta banca", que actúan como consejeros,
corredores o mandatarios en grandes operaciones financieras; la creación de los grandes bancos
comerciales, cuyo capital estaba altamente distribuido en el público, y el nacimiento de las instituciones
para-bancarias, destinadas a responder a las necesidades específicas de la clientela.
Funciones:
administrar el ahorro (operaciones de captación)
transformar el ahorro en créditos para apoyar proyectos productivos (operaciones de colocación)
administrar el sistema de pagos que permite la liquidación de las operaciones comerciales
(operaciones accesorias)
Operaciones Bancarias
Pasivas: Conformadas por aquellas operaciones por las que el banco capta, recibe o recolecta dinero
de las personas. Las operaciones de captación de recursos se materializan a través de los depósitos.
- Depósitos a la vista (cuenta Corriente y cajas de ahorro)
- Depósitos a plazo
Activas: Implica la colocación de fondos, poner dinero en circulación en la economía; es decir, los
bancos generan nuevo dinero de los recursos que obtienen a través de la captación y, con estos,
otorgan créditos a las personas, empresas u organizaciones que los soliciten
- Créditos (prestamos, descuento de documentos, adelantos en cuenta corriente)
- Otorgamiento de garantías
Servicios o accesorios: A diferencia de las anteriores por estas operaciones la banca no cobra ni
paga intereses sino comisiones.
- Alquiler de cajas de seguridad
- Fideicomisos
- Pagos de sueldos y Jubilaciones
- Transporte de caudales y valores
- Cobranzas de documentos
Cuenta Corriente Contrato mediante la cual una persona física o jurídica deposita en
un banco cantidades en metálico, que puede ir retirando en cualquier momento por medio de cheques,
mientras que el banco utiliza dichas cantidades en sus demás operaciones bancarias.
Caja de Ahorro El objeto de este producto bancario es la disponibilidad de los fondos por parte del
depositante y una pequeña renta en concepto de interés. Como todo deposito a la vista se pueden retirar
los fondos en cualquier momento, sin límites, pero solamente mediante extracciones o débitos de tarjeta.
Los depósitos bajo esta forma solamente pueden realizarlo personas físicas y ha adquirido importancia
debido a la implementación del sistema nacional de pagos.
Depósitos a plazo Por medio de este contrato se busca la obtención de intereses a cambio de
inmovilizar una suma de dinero por determinado tiempo. El depositante será entonces un inversor en el
mercado monetario y la renta serán los intereses. Estos fondos depositados permiten a los bancos obtener
otra fuente de captación de fondos, con la característica de tener plazo de devolución permitiéndoseles
usarlos por ese lapso.
Descuento de documentos Esta operación es clásica de empresas que financian sus ventas por medio
de documentos y visto que la fecha de cobro de los mismos es futuro, los llevan al banco para que les
adelante el monto a cambio de una tasa de descuento. El descuento se diferencia del préstamo visto que
en el descuento existe una operación previa que dio origen al documento a descontar y en el mismo consta
el derecho de cobrar determinada suma en cierto momento.
Adelantos en cuenta corriente En esta operación el banco pone a disposición del cliente una
determinada suma de dinero, la cual podrá disponer hasta el plazo fijado, y por la que pagara una tasa de
interés fijada. La disposición de fondos se realiza a través de la cuenta corriente, y no existirá adelanto hasta
tanto la cuenta no arroje saldo deudor, es decir, hasta la utilización efectiva.
Los bancos obtienen su beneficio prestando el dinero (operaciones activas) a un tipo de interés (tasas
activas) superior al que pagan por los depósitos de los ahorristas (operaciones pasivas) (tasas pasivas).
Actualmente el porcentaje que deben mantener los bancos de dinero en efectivo, del total de sus depósitos,
lo fija el Banco Central, y se denomina coeficiente de reservas mínimas. Esta cantidad de dinero que
obligatoriamente deben mantener los bancos en metálico es improductivo, no genera intereses ni, por
tanto, rentabilidad. La existencia legal de este pequeño porcentaje de reservas, y la posibilidad de prestar el
resto de dinero depositado, da lugar a la creación de dinero bancario.
Veamos este proceso mediante un ejemplo, suponiendo un coeficiente de reservas del 10%:
La Sra. Arriola deposita en una cuenta del Banco Universal $1000. Para cumplir con los requisitos legales, el
banco mantiene en efectivo $100 y presta los $900 restantes al Sr. Ramírez, que lo necesita para comprar
un ordenador en la empresa de su amigo, Gutiérrez. Una vez hecha la transacción, el Sr. Gutiérrez deposita
en el Banco Occidental el dinero recibido, $900. Este banco actúa de la misma forma que el Universal:
mantiene en su poder el 10% ($90) y presta los $810 restantes, que irán a parar a otra cuenta bancaria.
Observa que hasta este momento se ha creado dinero a partir de los 1000 iniciales: hay tres depósitos por
un total de $2710 (1000+900+810), de los cuales sólo existen en metálico $1.000, y el resto, $1.710, son
anotaciones contables.
De estos $10.000 existentes finalmente, sólo los $1.000 iniciales son dinero creado físicamente (monedas y
billetes). Los $9.000 restantes son lo que se denomina dinero bancario, que no tiene un soporte real en
monedas/billetes, sino que lo han creado los bancos en forma de préstamos, de deudas que tendrán que
devolver los agentes deficitarios. En resumen, por cada $1 suministrado al sistema bancario, los bancos
crean finalmente $9 de depósitos adicionales o dinero bancario, procedente de los préstamos concedidos.
(Siempre en función del coeficiente de reservas mínimas)
Este efecto se conoce como multiplicador bancario, y resulta del cociente entre la unidad y el coeficiente de
reservas mínimas (CRM)
Multiplicador Bancario= Mm= 1/CRM
En cualquier caso, cuanto menor sea el valor del CRM, mayor será el Multiplicador Monetario y, por tanto,
mayor la cantidad de dinero que se crea a partir de un depósito inicial en metálico. Para obtener esta
cantidad de dinero que se obtiene finalmente (D1) a partir de una cantidad inicial (D0), se opera de la
siguiente forma: D1 = D0 x Mm
El proceso de creación de dinero bancario, de depósitos, tiene lugar sólo si todos los agentes que en él
participan depositan el dinero que reciben en algún banco, y además los bancos sólo mantienen en efectivo
el mínimo legal (CRM).
Balances Bancarios
Etapa 1:
ACTIVO PASIVO
reserva legal $ 100,00 depósitos $ 1.000,00
fondo prestable $ 900,00
Etapa 2:
ACTIVO PASIVO
reserva legal $ 100,00 depósitos $ 1.000,00
reserva legal $ 90,00 depósitos $ 900,00
fondo prestable $ 900,00
fondo prestable $ 810,00
Etapa 3:
ACTIVO PASIVO
reserva legal $ 100,00 depósitos $ 1.000,00
reserva legal $ 90,00 depósitos $ 900,00
reserva legal $ 81,00 depósitos $ 810,00
fondo prestable $ 900,00
fondo prestable $ 810,00
fondo prestable $ 729,00
El banco central es la institución que en la mayoría de los países, ejerce como autoridad monetaria y como
tal suele ser la encargada de la emisión del dinero legal y en general de diseñar y ejecutar la política
monetaria del país al que pertenece
Funciones:
Preservar el valor de la moneda y mantener la estabilidad de precios. Para ello su principal
herramienta es el manejo de las tasas de interés.
Mantener la estabilidad del sistema financiero, ya que el banco central es el banco de los bancos,
sus clientes no son personas comunes y corrientes o empresas particulares, sino el Estado y los
bancos estatales o privados existentes dentro del territorio de la nación a la cual pertenece. El
banco central toma los depósitos de sus clientes (estado y bancos) y los guarda en cuentas que
éstos tienen en él. Con dichas cuentas los clientes realizan transacciones con otros bancos a través
de los sistemas de pagos y compensación. A su vez, el banco central también otorga préstamos a
bancos con dificultades de liquidez, o incluso a otros Estados.
Custodios y administradores de las reservas de oro y divisas;
Monopolio en la emisión de dinero de curso legal y encargados de retirar las monedas y billetes
deteriorados
Ejecutores de políticas cambiarias y monetarias.
Prestadores de los servicios de Tesorería y agentes financieros de la Deuda Pública de los gobiernos
nacionales;
Todas estas características y funciones llevan a que los bancos centrales tengan gran influencia en la política
económica de los países y a que sean una pieza clave en el funcionamiento de la economía. Éstos controlan
el sistema monetario, es decir, el dinero que circula en la economía, procurando evitar que se produzcan
efectos adversos como los altos niveles de inflación o de desempleo, así como situaciones negativas en el
sistema crediticio.
Política Monetaria:
La política monetaria o política financiera es una rama de la política económica que usa la cantidad de
dinero como variable para controlar y mantener la estabilidad económica. La política monetaria comprende
las decisiones de las autoridades monetarias referidas al mercado de dinero, que modifican la cantidad de
dinero o el tipo de interés. Cuando se aplica para aumentar la cantidad de dinero, se le denomina política
monetaria expansiva, y cuando se aplica para reducirla, política monetaria restrictiva.
El coeficiente de reservas mínimas: Proporción de los depósitos que las entidades tienen que
guardar en forma de activos líquidos (efectivo en caja o depósitos en el banco central) Si a este
porcentaje se lo eleva, la cantidad de dinero que se dispone para prestar disminuirá, disminuyendo
la oferta monetaria y es probable que se produzca una elevación de la tasa de interés.
Los redescuentos: mediante estos el Banco Central actúa como un banco de bancos,
suministrándoles dinero con garantías reales por plazos cortos para que estos puedan cubrir
deficiencias de efectivo mínimo, es decir, deficiencias transitorias de caja.
Las operaciones de pase: son otra forma de obtener crédito por parte de las entidades financieras.
El prestatario (un banco) le vende al BCRA un activo (por lo general títulos públicos y divisas) con el
compromiso de recomprarlo pocos días después pagando el precio al que hizo la venta inicial más el
interés pactado.
las operaciones de mercado abierto: es otro procedimiento para manipular la cantidad de dinero.
Son la compra y venta de títulos públicos o moneda extranjera por parte del BCRA. Si este considera
que debe aumentar la cantidad de dinero y no cree oportuno bajar el coeficiente de reservas
mininas, una posibilidad es comprar letras de tesorería a las instituciones financieras y a los
particulares. Esto implica que la cantidad de dinero en la economía aumenta (inyección de liquidez).
Si lo que pretende es disminuir la cantidad de dinero (drenaje del mismo), lo que hará es vender
títulos públicos a las entidades financieras, de forma que reducirá la cantidad de dinero en
circulación.
Para que este esquema funcione, es necesaria la existencia de una red de comunicaciones eficientes e
instantáneas.
También requiere una infraestructura jurídica, contable y fiscal que permita a los potenciales inversores el
acceso a asesores, profesionales y especialistas que les informen sobre las ventajas que ofrece el paraíso
fiscal y gestionen las inversiones.
En el caso de países más pobres o políticamente inestables, suelen ofrecer, en virtud de sus propias
limitaciones para otorgar seguridad y como forma de contrarrestar el temor al riesgo por parte de los
posibles inversores, garantías en cuanto al mantenimiento del régimen fiscal en que se realiza la inversión
hasta determinada fecha, o el traslado automático e instantáneo del capital depositado hacia países más
fiables, en el supuesto caso que se plantee una situación interna que pueda afectarlos.
En estas zonas, lo importante no es la procedencia del dinero sino la captación del dinero en sí mismo.
Éste constituye la base para el propio desarrollo y el bienestar de sus habitantes. Es así que “estas zonas
conocidas como “paraísos fiscales” constituyen un lugar donde se entremezclan los altos ejecutivos de las
corporaciones financieras e industriales más importantes del planeta, con personajes del jet set artístico o
social, junto a multimillonarios que compaginan sus ingresos con el ocio, todos ellos codeándose con
personajes más o menos oscuros y que utilizan los mismos recursos e instrumentos financieros con los que
poder aflorar y utilizar unos capitales conseguidos no sólo a costa de la legalidad vigente, sino muchas veces
a costa del asesinato, la extorsión, el narcotráfico o el tráfico de armas”. (Ordóñez Gonçalves)
A pesar de las connotaciones negativas que suelen plantearse acerca de quienes invierten en los paraísos,
es necesario tener en cuenta que no están cometiendo ningún fraude fiscal dentro del mismo, sino que
están aprovechando las ventajas que estos territorios ofrecen.
Dinero legal y dinero ilegal se combinan en los flujos que llegan a los paraísos y esto genera conflictos
importantes con las intenciones de Organismos nacionales e internacionales de lucha contra actividades
delictivas. De allí que, en forma creciente, la existencia de los paraísos fiscales ha sido puesta en cuestión y,
desde la Organización Mundial del Comercio, por ejemplo, se proponen estudios y medidas para que las
zonas de baja tributación frenen la recepción de flujos de dinero de procedencia dudosa.
Compilación realizada por Cdor. Cristina M. Werle Página 15
Uso didáctico
Los paraísos fiscales o territorios de baja o nula tributación, debido a sus particulares características reciben
flujos financieros procedentes de lugares muy distintos del mundo y obtenidos de modos muy diversos. Se
trata de sumas abultadas que llegan vía electrónica.
•Legal (dinero obtenido por una persona o grupos de personas en el marco de las leyes de los diferentes
países: Por ejemplo, a partir del trabajo en la economía productiva, de inversiones financieras, de la venta
de objetos, de propiedades de mucho valor, de herencias).
•Ilegal (capital reunido a partir de actividades consideradas ilegales, por ejemplo el comercio de armas, de
drogas, la actuación de los grupos mafiosos, las “coimas” de funcionarios corruptos).
El dinero de origen delictivo, obviamente, no va a ser declarado. Por ello su titular/titulares incurre, además
en evasión fiscal. Es dinero “opaco”, “sucio”. Para incorporarlo a la economía real, su titular/ titulares
deberán recurrir a alguna forma de “lavado”.
El dinero de origen delictivo en efectivo se va reuniendo en el sistema bancario (en bancos grandes,
transnacionales) de diferentes maneras. Por ejemplo:
En la Argentina los bancos tienen la obligación de informar al Banco Central cuando observan en la cuenta
de algún cliente movimientos múltiples de pequeñas sumas en forma constante, o de un determinado
importe o valores que no coinciden con los montos generados por la actividad declarada por el cliente.
Además, el Banco Central periódicamente inspecciona los bancos y revisa todo tipo de documentación.
Sin embargo, resulta bastante complejo el control por parte del Estado, dada la fugacidad y diversidad de
modos de operar.
Etapa 2: De Inversión
•Los inversores recuperan el dinero para organizar sociedades o comercios “pantalla”, poco o nada
rentables, en su país o en otros países. Llevan contabilidad, simulan compras y ventas no realizadas. Pagan
los impuestos correspondientes (son bajos, la ganancia es mínima o no existe; pagan impuestos sobre la
actividad). El dinero ya está blanqueado.
•Los inversores organizan una sociedad en el mismo TBT y desde allí realizan inversiones en el extranjero
exentas de impuestos en el TBT. Realizan inversiones inmobiliarias reales o fraguadas en su país o en
cualquier lugar del mundo. Hacen figurar que realizan préstamos o donaciones, exentas de impuestos.
En la Argentina, la DGI realiza la inspección de los contribuyentes. Cuando determinados contribuyentes
manifiestan una capacidad económica alta, coteja la declaración jurada. Si no coincide, comienza a indagar
acerca del origen del dinero.
Activos financieros
Los activos son derechos y bienes tangibles o intangibles que posee una persona. Se los distingue entre
activos reales y financieros, los primeros son aquellos bienes que tienen valor por sí mismos, y los segundos
son los que tienen valor por lo que representan, y por lo tanto significan una deuda para quien los emita.
Titulo representativo de un derecho sobre un futuro flujo de fondos, que puede negociarse o no en los
mercados financieros. Son intangibles, se refieren al futuro y contablemente aparecen como créditos.
Sujetos
El emisor o prestatario: Es la institución (Estado, empresa) que se compromete a realizar pagos en
el futuro a cambio de vender/emitir un activo financiero por dinero
El inversor o prestamista: Es el comprador del activo financiero que, a cambio de entregar dinero al
emisor, obtiene el derecho a recibir una cantidad monetaria futura. Por supuesto, los inversores
también pueden revender los activos financieros que previamente habían adquirido.
Clasificación:
Bonos: títulos de deuda, con plazo de duración, que no generan derecho a voto. Dependiendo de
sus características de emisión pagan rentas (intereses y/o capital) en cuotas anticipadas y el capital
al vencimiento o ambos al vencimiento
Acciones: títulos de capital, sin plazo de duración, que podrían generar derecho a voto. La
retribución está dada por los dividendos que podría tener, siempre que se autorice su distribución.
Commodities: activo financiero representativo de un producto estandarizado y fungible. (oro,
petróleo, soja, trigo…)
Derivados financieros: Son activos financieros que se negocian complementariamente a las
operaciones principales de compra y venta para cobertura de riesgos. (futuros, fowards, swaps,
opciones)
Todo activo financiero viene caracterizado por tres variables: RENTABILIDAD, RIESGO Y LIQUIDEZ.
Cuando hablamos de rentabilidad, nos estamos refiriendo al beneficio que se espera genere al inversor el
activo financiero que ha adquirido, a lo largo de un periodo de tiempo.
Para calcular el rendimiento se deben conocer todos los flujos de caja que el activo financiero promete
generar y su precio de compra actual.
Debido a que los activos financieros prometen generar unos rendimientos futuros, pero no pueden asegurar
que cumplan lo prometido, surge el concepto de riesgo. Esto no es más que la posibilidad de que el activo
financiero al final genere un rendimiento diferente al prometido.
Cuanto menos riesgo tenga el activo más se aproximara al rendimiento prometido; y por lo contrario, alto
riesgo implica baja probabilidad de coincidencia. Así, por ejemplo, un activo tendrá un riesgo bajo si
La tercera característica de los activos financieros es la liquidez, que implica tanto la posibilidad de convertir
en dinero líquido un activo como el que sea innecesario rebajar su precio para poder venderlo.
Por ejemplo, vender cien acciones de Telefónica es algo muy fácil que se hace instantáneamente sin pérdida
de valor (luego, este es un activo muy liquido), pero, si quisiéramos vender una casa por su precio de
mercado deberíamos esperar unos meses, si no pudiéramos esperar deberemos rebajar su precio. Cuanto
más haya que rebajarla para venderla menos liquida será. Los activos financieros que cotizan en mercados
financieros organizados son más líquidos que los que no cotizan.
Estas tres características, RENDIMIENTO, LIQUIDEZ Y RIESGO se relacionan entre sí de la siguiente manera:
Cuanto mayor sea el rendimiento, mayor serán las ganas de hacerse con este activo, así que será
más fácil deshacerse del mismo, es decir, su liquidez aumentara.
Al mayor riesgo, mayor rendimiento esperado; esto generalmente implica una caída del precio y/o
un aumento de los flujos de caja prometidos.
Por lo general, a mayor liquidez, menor riesgo.
Mercado Financiero
Un mercado financiero forma parte del mercado de factores y en él se negocian activos financieros. Se
compone de mecanismos institucionalizados que permiten la negociación, como reglas de juego conocidas
por los operadores permitiendo las transacciones.
INTERESES
Factores
Mercado de factores Factores
- Tierra
Contraprestación
- Trabajo
Contraprestación
- Capital