PERDON Y LIBERTAD Desfogue

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PERDON Y LIBERTAD

Cerramos los ojos ( las tres repiraciones) , concentrándonos en nuestra


respiración escucha, siente y visualiza con atención la siguiente reflexión:

Al escuchar esta reflexión, está alerta por si surgen frases, palabras, imágenes,
partes del texto, que resuenen en tu cuerpo. Si encuentras algo, detente y permite
un momento de quietud para notar esta valiosa conexión hacia tus sentimientos,
ya que esto tiene el poder de revelarte cuestiones inconscientes en tu propia vida.

Todos alguna vez nos hemos sentido lastimados, traicionados o decepcionados,


con alguien; causando estos sentimientos, heridas abiertas y sin sanar, las cuales
con el tiempo siguen doliendo, lastimando, supurando, creciendo, y en algunos
casos, esas heridas llegan a arruinarnos la vida, al ser somatizadas en los
diferentes órganos del cuerpo, trayendonos esto; enfermedades psicológicas,
físicas o espirituales, las cuales no sanaran hasta que se alcance el perdón, y nos
deshagamos de esa carga pesada, que nos impide vivir en paz..

Podemos descubrir que en este camino todas las experiencias nos enriquecen y
nos hacen mejores seres humanos, que el que nos lastima, es maestro para
nosotros, ya que nos enseña a crecer, a ser humildes y a ser mejores personas, y
que el perdón es el liberador del alma; y sobre todo, que si perdonamos con la
ayuda de Dios, habremos convertido ese obstáculo aparentemente insalvable, en
un escalón que nos permitirá crecer en misericordia, en comprensión y en
tolerancia hacia los demás, y subir un grado, para asomarme al interior de la
naturaleza humana y la propia evolución espiritual.

La falta de perdón te ata a las personas desde el resentimiento, te tiene


encadenado, ¿ Que es el perdón ¿ - Perdonar es un acto de amor, un gesto de
generosidad; es no guardar rencor, odio , resentimiento , no tener coraje ni
desearle mal a nadie. Es poder ofrecer a los demás el amor que ellos no esperan
o que no son capaces de ofrecer.

Perdonar no es señal de debilidad ni mucho menos de justificar a quien sentimos a


creemos que no ha hecho daño, no significa que estés de acuerdo con lo que
paso ni mucho menos que lo apruebes, perdonar es liberarnos de sentimientos
negativos que nos estorban en nuestra vida, que nos roban la paz y la tranquilidad
interior y que además nos provocan muchas enfermedades incluso físicas.

El perdón aparentemente se opone a la justicia pero no es así ya que la verdadera


justicia es divina y ella nos sentencia a practicar el perdón con todos. En la biblia
nos encontramos a cada paso con historias de personas que sufrían por el
resntimiento y que, al encuentro con Jesús salieron renovadas, transformadas y
viviendo la ambrosía del corazón.

Mateo 6, 12 “Perdona nuestras deudas como también nosotros perdonamos a


nuestros deudores”.

Mateo 6,14-15 “Porque si ustedes perdonan a los hombres sus ofensas,


también el padre celestial los perdonará a ustedes. Pero si ustedes no
perdonan a los demás, tampoco el padre les perdonará a ustedes”.

Mateo 18, 21- 22 “Entonces pedro se acercó con esta pregunta: “ señor
cuantas veces tengo que perdonar las ofensas de mi hermano? ¿hasta siete
veces?” Jesús le contestó: no te digo siete, sino setenta y siete veces.”

Mateo 18, 35 y Jesús añadió “Lo mismo hará mi padre celestial con ustedes, a
no ser que cada uno de ustedes perdone de corazón a su hermano.”

Lucas 6, 27. 32-35


Yo digo a los que me escuchán:
“Ama a vuestros enemigos, haz el bien a los que te odien....si amás a los
Que te aman, ¿qué merito tiene esto? Pues también los pecadores aman a los
que los aman. Si haces bien a los que lo hacen a vosotros, ¿qué merito tienes?
¡También los pecadores hacen otro tanto! Si das a aquellos de quienesz el bien, y
da sin esperar nada a cambio; y tu recompensa será grande y seras hijo del
altísimo, porque igual que el, eres bueno con los ingratos y los perversos…..”

El perdón sobreviene cuando existe una conjugación de lo humano con lo divino al


poner en juego la voluntad; y la parte espiritual del ser humano a través de la fe y
la gratitud que se tenga en Dios, en el campo espiritual.

Cuando estas fuerzas espirituales se entrelazan con las humanas se inicia el


verdadero proceso de perdonar. El plano espiritual, permite que el trabajo
psicológico se haga presente, esto es perdonar con el corazón no sólo con la
mente.
“Para que se realice el perdón se necesitan movilizar todas las facultades: la
sensibilidad, el corazón, la inteligencia, el juicio, la imaginación, la fe.” ; Pero no
sólo con los demás sino también con nosotros mismos.

Perdonar es una decisión que tomamos cuando el ofensor no esta presente y


buscamos las herramientas y los actos que nos llevarán a perdonar, es tomar
acción para sanarnos a nosotros mismos. …. El perdón es curativo ya que el
rencor y el resentimiento nos afectan física, mental y espiritualmente al ser
humano.

Algunos pasos o herramientas que nos pueden ayudar son las siguientes:

-El reconocer que perdonar no es algo fácil.


- Se necesita trabajo espiritual, tiempo y paciencia.
- El Reconocer que el primer beneficiado es uno mismo.
- Quererse a uno mismo y reconocer que con el perdón sobreviene la
liberación de todos los elementos adversos que perjudican la salud.
- Necesitamos saber Reconocer “la naturaleza de ser humano” con sus fallas,
imperfecciones y debilidades. (doce pasos)
- Desechar el complejo de creernos Dios, en nuestra persona queriendo ser
perfectos, sin errores, infalibles y sin debilidades.
- Confiar en nuestra humildad para que en caso de no poder superar el dolor
se acuda a personas capacitadas que ayuden a sanar esa herida y de esa
manera sobrevenga la paz a través del perdón.
- Reconocer que todo lo que sucede en nuestra vida siempre es para
aprender y que esas experiencias nos llevarán inevitablemente a ser
mejores personas.
- Confiar en Dios, como único ser que nos ayudará y apoyará con su gracia
divina, a atravesar las etapas del perdón y de esa manera curar las heridas.
-Hay varias maneras de pedir perdón, puede ser de manera verbal, escrita,
(carta, poema, canción) a través de la música….

Te invito a hacer esta oración para poder perdonar, puedes decirla interiormente

Señor: Como me cuesta recorrer la distancia


Que me separa de quienes me han lastimado
Atravesar esos abismos de silencios tormentosos que hay en mi corazón,
Tender un puente Entre las dos orillas y animarme a ir por el.
No dejes que me resigne al desencuentro, entre el amor y el perdón
Que me haga especialista en justificaciones, para no sanar las heridas de mi
corazón, Inquiétame, háblame, hazme salir de mi trinchera de dolor.
Vence mis resistencias, líbrame de estas cadenas, ayúdame a practicar la
humildad igual que tú, perdonando a los que me ofenden y lánzame sin
armaduras al valle del amor y el perdón a caminar junto a ti Amor en mano
Al encuentro de ese alguien que solo necesita nuestra ayuda
Para reconstruir su corazón…….Amen.
Bien compañero ahora, en este momento trae a tu mente a esa o esas personas
que hayas decidido perdonar, imagina como viene caminando hacia a ti, ¿Ya estas
sintiendo todas las emociones encontradas? Ya estas sintiendo el calor
en el cuerpo ¿Sientes como fluye en tu columna vertebral una energía, ya no tan
desconocida para ti, de odio, de resentimiento, de coraje, de frustración e
impotencia? … mientras llega contigo , ….piensa……¿Cómo es su vida, habrá
sufrido, lo habrán lastimado también, que lo llevo a ofenderte, fue o es conciente
de lo que te hizo sentir y si es así, el porqué, crees que merece ser perdonado
¿………………………………………..

Bien ya lo tienes frente a ti. Pero ahora te pido que veas en él, más que el daño,
la agresión; a una persona inconsciente. Que trates de ver a tu niño interior
fracturado, preso en un cuerpo de adulto; trata de ver sus circunstancias, sus
recursos, su desamor, y que te preguntes honestamente que hubieras hecho en
su lugar. Si a estas alturas contestas que no hubieras llegado a tanto, es que
seguramente sigues pensando como tú y no como él. Trata de verlo más que
como tu enemigo, tu agresor, trata de verlo como una persona más enferma y más
ciega que tú.
Y si eres honesto ante la misma pregunta de ¿qué hubieras hecho tú en su lugar?
Contestarás, sin duda: seguramente lo mismo y tal vez, peor...

Te voy a dar unos momentos……………………………………………………………..

…………..Muy bien compañero, ahora despídete de esa persona, envía


bendiciones a su vida………….. Mientras se aleja siente como liberas de esa
pesada carga que antes traías a cuestas, ve como una luz emana desde de tu
interior , como tu corazón vuelve a llenarse de amor y comprensión…. Por ti… y
por cuantos te rodean,….. Siente….disfruta esta maravillosa sensación de libertad
y de amor que hay en ti………….. Guárdala siempre en tu corazón y tu
alma…….Usalá cada vez que necesites perdonar ………………………….

Cuando el perdón se convierte en un estilo de vida entonces se hace un hábito y


la vida se hace más ligera, menos atormentada y “no cargaremos maletas que no
son nuestras.”.
El amor siempre es la repuesta para la curación de cualquier tipo……y el camino
hacia el amor es el perdón.
Tu decides vivir en la esclavitud del resentimiento o en la libertad del perdón

“Vive solo por hoy, que el ayer sea tu fuente de aprendizaje, ya nunca más tu
tortura, tu infierno, o la causa de tu dolor y soledad”. “al vivir tu hoy, te pones cara
a cara con la vida y te pones frente a Dios”

( 3 respiraciones ) y poco a poco a tu propio ritmo puedes ir abriendo tus ojos

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