Los Volcanes y Otras Actividades Ígneas

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TEMA 3B

LOS VOLCANES Y OTRA ACTIVIDAD ÍGNEA


La mayor erupción volcánica fue Santa Elena, perdió 400 metros de altura.

1 NATURALEZA DE LAS ERUPCIONES VOLCÁNICAS


La actividad volcánica es un proceso que produce una estructura pintoresca en forma de cono que, Santa Elena,
hace erupción de manera violenta con cierta periodicidad. Algunas erupciones pueden ser muy explosivas. Los
principales factores que influyen son la composición del magma, su temperatura y la cantidad de gases disueltos
que contiene. Estos factores afectan a la viscosidad del magma. Un magma asociado con una erupción explosiva
puede ser cinco veces más viscoso que el magma expulsado de una manera tranquila.

Factores que afectan a la viscosidad


La movilidad de la lava está muy influida por la temperatura. Conforme la lava se enfría y empieza a congelarse, su
movilidad disminuye y el flujo acaba por pararse.

Un factor más significativo que influye en el comportamiento volcánico es la composición química del magma. Una
diferencia importante entre las diversas rocas ígneas es su contenido en sílice (SiO2).

La viscosidad de un magma está directamente relacionada con su contenido en sílice. Cuanta más sílice tenga un
magma, mayor será su viscosidad. El flujo magmático se ve impedido porque las estructuras de sílice se enlazan
formando largas cadenas antes de que empiece la cristalización. Debido a su elevado contenido en sílice, las lavas
riolíticas (félsicas) son muy viscosas y tienden a formar coladas gruesas, comparativamente cortas. Las lavas
basálticas (máficas), que contienen menos sílice, tienden a ser bastante fluidas.

Importancia de los gases disueltos


El contenido gaseoso de un magma afecta a su movilidad. Los gases disueltos tienden a incrementar la fluidez del
magma. Los gases que escapan proporcionan fuerza suficiente para impulsar la roca fundida desde una chimenea
volcánica.

Las cimas de los volcanes empiezan a dilatarse, meses o años antes de la erupción. El magma se está desplazando
hacia un depósito poco profundo situado en el interior del cono. Durante esta fase, los volátiles (componente
gaseoso está formado por agua) tienden a desplazarse hacia arriba y a acumularse cerca de la parte superior de la
cámara magmática. La porción superior de un cuerpo magmático está enriquecida en gases disueltos.

Cuando empieza la erupción, el magma cargado de gases sale de la cámara magmática y asciende por el conducto
volcánico. Conforme el magma se aproxima a la superficie, disminuye su presión de confinamiento. Esta reducción
de la presión permite la liberación súbita de los gases disueltos. A temperaturas de 1.000ºC y presiones, bajas, los
gases disueltos se expandirán hasta ocupar centenares de veces su volumen original.

Los magmas basálticos, muy fluidos, permiten que los gases en expansión migren hacia arriba y escapen por la
chimenea. Conforme escapan, los gases pueden impulsar la lava incandescente a centenares de metros en el aire,
produciendo fuentes de lava. Dichas fuentes son inocuas y no suelen ir asociadas con episodios explosivos.

Los magmas muy viscosos expulsan de manera explosiva chorros de gases calientes cargados de cenizas que
evolucionan a plumas con gran fuerza ascensional denominadas columnas eruptivas que se extienden a miles de
metros en la atmósfera. Antes de una erupción explosiva, se produce un largo período de diferenciación
magmática en la cual cristalizan y se depositan los minerales ricos en hierro, dejando la parte superior del magma
enriquecida en sílice y gases disueltos. Este magma rico en volátiles asciende por la chimenea volcánica hacia la

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superficie, esos gases empiezan a reunirse en forma de diminutas burbujas. A una cierta altura del conducto esta
mezcla se transforma en un chorro gaseoso que contiene diminutos fragmentos de vidrio, los cuales son
expulsados del volcán de manera explosiva.

Conforme el magma de la parte superior de la chimenea es expulsado, disminuye la presión en la roca fundida
situada directamente debajo. Las erupciones volcánicas son una serie de explosiones sucesivas. En un magma
viscoso los gases solubles migran hacia arriba con bastante lentitud. En la parte superior del cuerpo magmático el
contenido en gases aumenta lo suficiente como para desencadenar erupciones explosivas. Una vez se termina esta
fase eruptiva, el proceso de acumulación gaseosa vuelve a empezar.

La viscosidad del magma, junto con la cantidad de gases disueltos y la facilidad con la que pueden escapar,
determina la naturaleza de una erupción volcánica.

2 MATERIALES EXPULSADOS DURANTE UNA ERUPCIÓN


Los volcanes expulsan lava, grandes volúmenes de gases y rocas piroclásticas.

Coladas de lava
Más del 90% del volumen total, tiene una composición basáltica. Las andesitas constituyen el resto. Las coladas
riolíticas ricas en sílice representan 1% del total.

Debido a su menor contenido en sílice, las lavas basálticas calientes suelen ser muy fluidas. Fluyen formando
láminas delgadas y anchas o cintas semejantes a torrentes. Lavas basálticas que han viajado 150 km. El
movimiento de las lavas ricas en sílice (riolíticas) puede ser demasiado lento. La mayoría de las lavas riolíticas son
gruesas y rara vez se desplazan más de unos pocos kilómetros. Las lavas andesíticas, con una composición
intermedia, exhiben características que se encuentran entre los extremos.

Coladas cordadas. Cuando se solidifican las lavas basálticas fluidas, suelen formar una corteza lisa que se arruga a
medida que la lava situada debajo de la superficie, todavía fundida, sigue avanzando. Estas lavas se conocen como
lavas cordadas. Las coladas cordadas solidificadas suelen contener túneles que antes fueron los conductos
horizontales por donde se transportaba la lava desde la chimenea volcánica hasta el frente de la colada. Estas
cavidades se desarrollan en el interior de una colada donde las temperaturas se mantienen elevadas durante
bastante tiempo después de que se solidifique la superficie. La lava todavía fundida del interior de los conductos
continúa su movimiento hacia delante, dejando atrás las cavidades, se denomina tubos de lava. Permiten que las
lavas fluidas avancen grandes distancias desde su fuente.

Coladas aa. Lava basáltica, denominada aa, tiene una superficie de bloques ásperos y desiguales con bordes
afilados y rugosidades. Las coladas aa activas son relativamente frías y gruesas y avanzan a velocidades lentas. Los
gases que escapan de la superficie producen numerosos huecos y agudas rugosidades en la lava que se solidifica.
Avanza el interior fundido, la corteza exterior se va rompiendo, lo que proporciona a la colada el aspecto de masa
uniforme. Las coladas cordadas son más calientes, más ricas en gases y más rápidas que las coladas aa en
pendientes comparables. Coladas hawaianas empiezan como cordadas, pero pueden convertirse en coladas aa
conforme descienden.

Coladas de bloques. Los magmas andesíticos y riolíticos tienden a generar coladas de bloques. Las coladas de
bloques consisten en gran medida en bloques separados con superficies curvadas que cubren la lava no rota del
interior. Estas lavas están formadas por bloques con superficies comparativamente lisa.

Coladas almohadilladas. Erupciones pueden darse a lo largo de las dorsales oceánicas (divergentes). Cuando la
lava entra en el océano, las zonas superiores de las coladas se enfrían rápidamente. La lava puede moverse hacia
delante rompiendo la superficie endurecida y el proceso es sucesivo. El resultado es una colada de lava compuesta
por estructuras alargadas parecidas a almohadas grandes pegadas unas encima de las otras.

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Gases
Los magmas contienen cantidades variables de gases disueltos (volátiles) que se mantienen en la roca fundida por
la presión de confinamiento. En cuanto se reduce la presión, los gases empiezan a escapar.

La porción gaseosa de la mayoría de los magmas constituye del 1 al 6% del peso total, y la mayor parte es vapor de
agua. El porcentaje puede ser pequeño, la cantidad real de gases emitidos puede superar varios miles de toneladas
por día.

La composición de los gases volcánicos contribuye a configurar los gases que forman la atmósfera de nuestro
planeta. El 70% vapor de agua, 15% CO2, 5% N, 5% SO2 y cantidades menores de Cl, H y Ar. Los volcanes son una
fuente natural de contaminación del aire.

Impulsar el magma desde los volcanes, los gases desempeñan un papel importante en la creación del estrecho
conducto que conecta la cámara magmática con la superficie. Las temperaturas elevadas y la capacidad de
flotación del cuerpo magmático rompen la roca que está por encima. Las ráfagas de gases calientes a gran presión
amplían las fracturas de la roca y abren un camino hacia la superficie. Los gases alientes junto con los fragmentos
de roca que arrastran erosionan sus paredes, ensanchan el conducto. Después de una fase eruptiva, la tubería
volcánica suele obturarse con una mezcla de magma solidificada y derrubios que no fueron lanzados por la
chimenea.

Estas erupciones pueden tener un impacto en el clima terrestre por los gases emitidos.

Materiales piroclásticos
Cuando se expulsa lava basáltica, los gases disueltos escapan libremente y continuamente. Impulsan gotas de lava
a grandes alturas. Material expulsado puede caer cerca de la chimenea y construir una estructura en forma de
cono, mientras que las partículas más pequeñas serán arrastradas a grandes distancias por el viento. Los magmas
(riolíticos) están muy cargados de gases; tras su liberación, se expanden miles de veces conforme lanzan rocas
pulverizadas, lava y fragmentos de vidrio desde la chimenea. Las partículas producidas en estas dos situaciones se
denominan material piroclástico. El tamaño de estos fragmentos expulsados oscila entre un polvo muy fino y
cenizas volcánicas de tamaño de arena y trozos que pesan más de una tonelada.

Las partículas de ceniza y polvo se producen a partir de los magmas viscosos cargados de gases durante una
erupción explosiva. El magma asciende por la chimenea, los gases se expanden rápidamente generando una
espuma en el fundido. Los gases calientes se expanden de manera explosiva, la espuma se rompe en fragmentos
vítreos muy finos. Las cenizas calientes caen, las sartas vítreas se funden para formar una roca llamada toba
soldada.

Los piroclastos cuyo tamaño oscila entre nuez denominada lapilli (2-64 mm). Estos materiales expulsados se
llaman cenizas. Las partículas con un tamaño superior a 64 mm se denominan bloques cuando están formados por
lava solidificada y bombas cuando son expulsados como lava incandescente. Tras su expulsión, las bombas están
semifundidas, a menudo adoptan una forma aerodinámica conforme viajan por el aire.

Se puede identificar materiales piroclásticos basados en el tamaño de los fragmentos. Su textura y composición. La
escoria son los materiales expulsados vesiculares (que contienen huecos) producto del magma basáltico. Estos
fragmentos de color negro se encuentran en el intervalo de tamaños de los lapilli y cenizas. Cuando un magma con
una composición intermedia o rica en sílice genera erupciones vesiculares, se llama pumita. La pumita suele tener
un color más claro y es menos densa que la escoria. Algunos fragmentos de pumita tienen tal cantidad de vesículas
que pueden flotar en el agua durante períodos prolongados.

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3 ESTRUCTURAS VOLCÁNICAS Y ESTILOS DE ERUPCIÓN
Un volcán es la de un cono solitario, elegante, cubierto de nieve (Fujiyama de Japón). Estas montañas cónicas se
producen por la actividad volcánica que tuvo lugar con intermitencias durante miles de años. Algunos volcanes
miden pocos metros de altura y se formaron durante una única fase eruptiva. El valle de los Diez Mil Humos, en
Alaska, un depósito de superficie plana consiste en 15 km cúbicos de ceniza que se expulsaron y que cubrió una
sección del valle hasta una profundidad de 200 metros.

Anatomía de un volcán
La actividad volcánica suele empezar cuando se desarrolla una fisura (grieta) en la corteza a medida que el magma
fuerza su camino hacia la superficie. Conforme el magma rico en gas asciende hacia esta fisura linear, se halla en
un conducto circular, o tubo, que termina en una apertura en la superficie denominada chimenea. Las sucesivas
erupciones acaban formando la estructura que llamamos volcán.

En la cima de muchos volcanes hay una depresión de paredes empinadas llamada cráter. Los cráteres son rasgos
estructurales que se fueron construyendo paulatinamente a medida que los fragmentos expulsados se
acumulaban alrededor de la chimenea formando una estructura en forma de donut. Mientras que otros tienen
depresiones muy grandes, más o menos circulares, denominadas calderas. Las calderas son grandes estructuras de
hundimiento que pueden o no formarse en asociación con un volcán.

Durante los primeros estadios del crecimiento, descargas volcánicas proceden de la chimenea central. A medida
que un volcán madura, se producen fisuras que se desarrollan a lo largo de los flancos. La actividad continuada de
una erupción del flanco puede producir un pequeño cono parásito. Muchas de las chimeneas sólo emiten gases y
se denominan fumarolas.

La forma de un volcán en particular está determinada en gran medida por la composición del magma que
contribuye a su formación. Las lavas de tipo hawaiano tienden a producir estructuras amplias con pendientes
suaves, las lavas ricas en sílice más viscosas tienden a generar conos con pendientes de moderadas a empinadas.

Volcanes en escudo
Los volcanes en escudo se producen por la acumulación de lavas basálticas fluidas y adoptan la forma de una
estructura abovedada. La mayoría de volcanes en escudo han crecido a partir del suelo oceánico profundo y
forman islas o montes submarinos. Algunos volcanes en escudo tienen lugar en los continentes.

Cada escudo se formó a partir de una miríada de coladas de lava basáltica de unos pocos metros de grosor. Un uno
por ciento de erupciones piroclásticas.

Los escudos jóvenes, emiten lava muy fluida desde una chimenea en el centro de la cima y tienen laderas con
pendientes suaves. Los escudos maduros, tienen pendientes más empinadas en las secciones centrales, mientras
que sus cimas y sus flancos son comparativamente planos. Durante el estadio de madurez, las lavas salen desde las
chimeneas de la cima, así como de las zonas hendidas que se desarrollan a lo largo de las pendientes. Las lavas
cordadas, se convierten en coladas aa.

Una vez una erupción se ha establecido bien, una gran fracción de la lava fluye a través de un sistema bien
desarrollado de tubos de lava, lo que aumenta en gran medida la distancia que la lava puede recorrer antes de
solidificar. La lava emitida cerca de la cima suele alcanzar el mar y se añade a la anchura del cono a expensas de su
altura.

Una gran caldera con paredes empinadas que ocupa su cima. Las calderas se forman al hundirse el techo del
volcán conforme el magma procedente del depósito magmático central migra hacia los flancos. En las últimas

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etapas de crecimiento, la actividad en los escudos maduros es más esporádica y las erupciones piroclásticas, más
frecuentes. Aumenta la viscosidad de las lavas, lo que provoca coladas más cortas y potentes.

Kilauea, Hawaii: erupción de un volcán en escudo. Se encuentra en el costado del Mauna Loa, más de 50
erupciones desde 1823. Los síntomas fueron que se dilata (meses antes), acumulación en depósito y 24h antes
hubo terremotos. La mayor parte de la actividad a lo largo de los flancos orientales (rift oriental). La erupción
fisural más larga empezó en 1983 y continúa hasta hoy. Formó una “cortina de fuego” de 100 metros de altura
conforme la lava era expulsada hacia el cielo. Se formó un cono de ceniza y salpicaduras al que se dio el nombre
hawaiano Puu Oo.

Conos de cenizas
Los conos de cenizas (conos de escoria) están construidos con fragmentos de lava proyectada que adoptan el
aspecto de cenizas o escorias cuando empiezan a solidificarse durante su vuelo. Tienen un tamaño que oscila entre
la ceniza fina y las bombas, lapilli. Producto de magma basáltico rico en gas, los conos de cenizas están formados
por fragmentos redondeados a irregulares marcadamente vesiculares (escoria). Una erupción de magma rico en
sílice generará un cono de cenizas de color claro compuesto por fragmentos de ceniza y pumita. Los conos de
ceniza están formados mayoritariamente por material piroclástico suelto, también expulsan lava. Las descargas
producen de las chimeneas situadas en la base.

Los conos de cenizas tienen una forma condicionada por el ángulo de reposo del material piroclástico suelto. Las
cenizas tienen un gran ángulo de reposo, los conos de cenizas jóvenes tienen pendientes empinadas, con laderas.
Los conos de cenizas exhiben cráteres grandes y profundos en relación con el tamaño total de la estructura.
Generalmente simétricos, muchos conos de cenizas son alargados y más altos por el lado por el que descendían los
materiales durante las erupciones.

Los conos de cenizas son fruto de un único episodio eruptivo que a veces dura sólo unas pocas semanas y en raras
ocasiones supera unos pocos años. Como consecuencia, los conos de cenizas son pequeños. Los conos de cenizas
se encuentran situados en campos volcánicos, que está formado por unos 600 conos. Son conos parásitos de
volcanes más grandes.

Parícutin: vida de un cono de cenizas de variedad jardín. En 1943, empezó su fase eruptiva en un campo de maíz.
Empezaron a salir gases sulfurosos de una pequeña depresión ya existente. Por la noche, fragmentos de roca
incandescente y caliente lanzados al aire. Hasta 6.000 metros de altura, los bloques cayeron cerca, pero las cenizas
destruyeron la ciudad próxima. El primer día, el cono creció hasta 40 metros y el quinto día 100 metros de altura.
Primer año, más del 90% del total del material proyectado. Una colada de escorias de tipo aa de 10 metros de
grosor cubrió el pueblo. Después de nueve años de explosiones piroclásticas intermitentes, la actividad cesó.

Conos compuestos
Los volcanes más peligrosos son los conos compuestos o estratovolcanes. La mayoría se encuentra en una zona
relativamente estrecha, denominada anillo de fuego. Las regiones más activas del Anillo de Fuego se encuentran a
lo largo de cinturones curvados de islas volcánicas adyacentes a las fosas oceánicas profundas.

El cono está compuesto por lava y depósitos piroclásticos. Los conos compuestos reflejan la naturaleza del
material que expulsan. Los conos compuestos son fruto de magma rico en gas con una composición andesítica. En
relación con los escudos, los magmas ricos en sílice típicos de los conos compuestos generan lavas viscosas y
gruesas que recorren distancias cortas. Los conos compuestos pueden generar erupciones explosivas que expulsan
grandes cantidades de material piroclástico.

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El crecimiento de un cono compuesto “típico” empieza con la emisión de material piroclástico y lava de la
chimenea central. Conforme la estructura madura, las lavas tienden a fluir de las fisuras que se desarrollan en los
flancos inferiores del cono.

Una forma cónica, con un área de la cima empinada y flancos más gradualmente inclinados, típica de conos
compuestos grandes. Los fragmentos gruesos expulsados desde el cráter de la cima tienden a acumularse cerca de
su origen. Las emisiones más finas se depositan como una capa delgada por encima de un área extensa. Durante
las primeras etapas del crecimiento, las lavas tienden a ser más abundantes y a fluir a distancias más largas de la
chimenea que las lavas posteriores. EL volcán madura, las coladas cortas procedentes de la chimenea central
sirven para blindar y fortalecer el área de la cima.

4 VIVIR A LA SOMBRA DE UN CONO COMPUESTO


Últimos 200 años, han entrado en erupción más de 50 volcanes en EEUU.

El continente perdido de la Atlántida


Una erupción catastrófica en la isla de Santorini contribuyó al hundimiento de la avanzada civilización minoica,
centrada en torno a Creta (mar Egeo). Según Platón, fue absorbido por el mar en un día y una noche.

Esta erupción generó una columna eruptiva alta y ondulante compuesta por grandes cantidades de materiales
piroclásticos. Llovieron ceniza y pumita procedentes de esta pluma. Tras la emisión de esta gran cantidad de
material, la cima de Santorini se hundió. En la actualidad este volcán, consiste en cinco pequeñas islas. La erupción
y el hundimiento del Santorini generaron grandes olas marinas (tsunamis) que provocaron la destrucción
generalizada de las poblaciones costeras.

Erupción del Vesubio 79 d.C.


Los conos compuestos pueden entrar en erupción inesperadamente. Antes de esta erupción, el Vesubio había
estado dormido durante siglos. En menos de 24 horas, la ciudad de Pompeya desapareció.

Cronología de la destrucción: a primeras horas de la tarde las cenizas finas y los fragmentos de pumita formaron
una nube eruptiva alta que emanaba del Vesubio. Los derrubios de esta nube empezaron a caer. Muchas personas
huyeron. Las horas siguientes, cayeron sobre Pompeya fragmentos de pumita de hasta 5 cm. Una oleada de polvo
y gas ardientes descendió con rapidez por los flancos del Vesubio. Murieron de asfixia como consecuencia de la
inhalación de gases cargados de cenizas.

Nubes ardientes: una colada piroclástica mortal


Las coladas piroclásticas, constituidos por gases calientes infundidos con cenizas y fragmentos rocosos más
grandes incandescentes pueden ser incluso más devastadores. Los flujos calientes más destructivos, llamados
nubes ardientes son capaces de correr grandes velocidades, de hasta 200 km/h.

La parte basal de una nube ardiente próxima al suelo es rica en materia particulada suspendida en chorros de
gases que circulan a través de la nube. El aire alcanzado se calienta y transmite capacidad de flotación. Estas
corrientes, que pueden incluir fragmentos de roca más grandes, carecen de fricción. Esto explica algunos depósitos
de nubes ardientes que se extienden a más de 100 km.

Algunas coladas piroclásticas aparecen cuando una erupción potente expulsa lateralmente material piroclástico de
la ladera de un volcán. Las nubes ardientes se forman a partir del colapso de columnas eruptivas altas que se
forman encima de un volcán durante un acontecimiento explosivo. Cantidades masivas de bloques
incandescentes, cenizas y fragmentos de pumita que caen sobre el área de la cima empiezan a caer en cascada,
vertiente bajo por la influencia de la gravedad.

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La destrucción de San Pedro. En 1902 una nube ardiente procedente de la montaña Peleé destruyó la ciudad.

Lahares: corrientes de barro en conos activos e inactivos


Los grandes conos compuestos pueden producir un tipo de corriente de barro, lahar. Estas coladas destructivas se
producen cuando los derrubios volcánicos se saturan de agua y se mueven rápidamente pendiente abajo por las
laderas volcánicas. Algunos lahares se desencadenan cuando grandes volúmenes de hielo y nieve se funden
durante una erupción. Se producen cuando una lluvia intensa satura los depósitos volcánicos meteorizados.
Pueden aparecer lahares aun cuando un volcán no esté en erupción.

5 OTRAS FORMAS VOLCÁNICAS


La estructura volcánica más obvia es el cono. Pero hay también otros relieves distintos de la actividad volcánica.

Calderas
Las calderas son grandes depresiones de colapso con una forma más o menos circular. La mayoría de calderas se
forman por uno de los procesos siguientes:

• El hundimiento de la cima de un volcán compuesto después de una erupción explosiva de


fragmentos de pumita rica en sílice y cenizas.
• El hundimiento de la parte superior de un volcán en escudo provocado por un drenaje subterráneo
desde una cámara magmática central.
• El hundimiento de una gran área, independientemente de cualquier estructura volcánica
preexistente, provocado por la descarga de volúmenes colosales de pumita rica en sílice y cenizas a
lo largo de fracturas en anillo.

Calderas de tipo Crater Lake. Diámetro 10 km y 1.175 m de profundidad. Esta caldera se formó hace 7.000 años.
Cono compuesto, expulsó de una manera violenta. Con la pérdida de soporte, se hundieron 1.500 m de la cima de
este cono, que había sido prominente. El agua de la lluvia llenó la caldera. La actividad volcánica posterior
construyó un pequeño cono de cenizas en el lago.

Calderas de tipo hawaiano. Se produce por hundimiento después de una erupción explosiva. Cada caldera se
formó por subsidencia gradual de la cima conforme el magma drenaba de una manera lenta y lateralmente desde
la cámara magmática central hacia una zona de fisuras, produciendo a menudo erupciones laterales.

Calderas de tipo Yellowstone. Ocurrió hace 630.000 años en Yellowstone. Se expulsaron alrededor de 1.000 km
cúbicos de materia piroclástica. La formación de una gran caldera empieza cuando un cuerpo magmático rico en
sílice (riolítico) se sitúa cerca de la superficie, empujando hacia arriba las rocas suprayacentes. Se desarrollan
fracturas de anillo en el techo, abriendo una vía hacia la superficie para el magma rico en gas y muy viscoso. Estos
de inicio a una erupción explosiva de proporciones colosales que expulsa grandes volúmenes de materiales
piroclásticos. Forman una colada piroclástica que se extiende a través del paisaje. Después de detenerse, los
fragmentos calientes de cenizas y pumita se funden, formando una toba soldada muy parecida a una colada de
lava solidificada. Con la pérdida de apoyo, el techo de la cámara magmática se hunde, generando una gran caldera.
Otro rasgo, la mayoría de las grandes calderas es un lento levantamiento, o resurgencia, del suelo de la caldera
después de una fase eruptiva. Todavía existe un depósito de magma debajo de Yellowstone.

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Erupciones fisurales y llanuras de lava
El mayor volumen de material volcánico es extraido por fractura de la corteza denominadas fisuras. Esta grietas,
largas y estrechas, permiten la salida de lavas basálticas de baja viscosidad que recubren amplias áreas.

La llanura de Columbiaa, numerosas erupciones fisurales expulsaron lava basáltica muy líquida. Coladas sucesivas,
enterraron el relieve previo conforme iban construyendo una llanura de lava (plateau). La naturaleza fluida de la
lava es evidente, ya que la lava permaneció fundida durante el 150 km desde su origen. La expresión basalto de
inundación describe de manera apropiada estas coladas.

Domos de lava
Las lavas ricas en sílice, próximas al extremo félsico (riolítico) del espectro composicional, son tan viscosas que
apenas fluyen. Conforme la lava es extraida fuera de la chimenea, puede producir una masa en forma de domo
con paredes empinadas de lava solidificada denominada domo de lava.

Los domos de lava caracterizan los últimos estadios de actividad de conos compuestos maduros andesíticos. Estas
estructuras riolíticas se forman en el cráter de la cima y conforme se forman estructuras parásitas en los flancos de
estos conos después de una erupción explosiva de un magma rico en gases. Esto viene ilustrado por el domo
volcánico que sigue “creciendo” desde la chimenea que produjo la erupción del volcán. La mayoría de los domos
volcánico se forman en asociación con conos compuestos preexistentes o volcanes en escudo, algunos se forman
de manera independiente.

Chimeneas y pitones volcánicos


La mayoría de los volcanes se alimentan de magma a través de cortos conductos, denominados chimeneas, que
conectan la cámara magmática con la superficie. Pueden extenderse 200 km. Cuando esto ocurre, los magmas
ultramáficos que migran hacia arriba por estas estructuras producen rocas que se consideran muestras del manto
que han experimentado muy pocas alteraciones durante su ascenso.

Son “ventanas” al interior de la Tierra, ya que nos permiten ver rocas que normalmente se encuentran sólo a gran
profundidad. Conocidas por las estructuras sudafricanas cargadas de diamantes. Es un continente cuando se
produce erosión de cono volcánico queda conducto solidificado y duro. Se denomina pitón volcánico.

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