6000-22-8 Documento Ain Medidores Energía Eléctrica
6000-22-8 Documento Ain Medidores Energía Eléctrica
6000-22-8 Documento Ain Medidores Energía Eléctrica
COMPLETO
Diciembre de 2022
1 Antecedentes y contexto
1.1 Marco normativo de la medición del consumo de los usuarios del servicio público de
energía eléctrica
1 Análisis de Impacto Normativo ex ante Completo. Documento en el cual se desarrollan las siete (7) etapas del
AIN, y se utiliza cuando se trata de un reglamento técnico nuevo o una modificación que hace más gravosa la
situación en los términos establecidos en el numeral 105 del Decreto 1468 de 2020.
2 Ley 142 de 1994, artículo 144: Los contratos uniformes pueden exigir que los suscriptores o usuarios
adquieran, instalen, mantengan y reparen los instrumentos necesarios para medir sus consumos. En tal caso,
los suscriptores o usuarios podrán adquirir los bienes y servicios respectivos a quien a bien tengan; y la empresa
deberá aceptarlos siempre que reúnan las características técnicas a las que se refiere el inciso siguiente.
La empresa podrá establecer en las condiciones uniformes del contrato las características técnicas de los
medidores, y del mantenimiento que deba dárseles.
No será obligación del suscriptor o usuario cerciorarse de que los medidores funcionen en forma adecuada;
pero sí será obligación suya hacerlos reparar o reemplazarlos, a satisfacción de la empresa, cuando se
establezca que el funcionamiento no permite determinar en forma adecuada los consumos, o cuando el
desarrollo tecnológico ponga a su disposición instrumentos de medida más precisos. Cuando el usuario o
suscriptor, pasado un período de facturación, no tome las acciones necesarias para reparar o reemplazar los
medidores, la empresa podrá hacerlo por cuenta del usuario o suscriptor.
usuario la reparación o el remplazo de los medidores, a satisfacción de las empresas
prestadoras del servicio público, cuando se determine que el instrumento no permite
determinar adecuadamente el consumo o cuando el desarrollo tecnológico ofrezca
instrumentos más precisos.
Por el papel que juega el medidor en la facturación y el cobro del consumo de electricidad,
se evidencian situaciones de desconfianza mutua frente a la lectura entre usuarios y
prestadores de los servicios públicos. Para el usuario, el prestador podría estar interesado
en obtener lecturas de altos consumos para cobrar valores elevados por la prestación del
servicio, mientras que el distribuidor evidencia que algunos usuarios tienen incentivos a
manipular la medida para disminuir el valor de su factura.
Con el ánimo de resolver estas diferencias, la ley 142 de 1994 establece una serie de
medidas para aumentar la confianza en la medición. Por ejemplo, el derecho de los usuarios
a obtener de las empresas la medición de sus consumos reales a través de instrumentos
tecnológicos apropiados, dentro de plazos y términos que para los efectos fije la comisión
reguladora3, o la posibilidad de que el usuario y el prestador verifiquen el estado de los
instrumentos, o la facultad del prestador de retirar los instrumentos temporalmente para
realizar dicha verificación y la obligación de ambas partes de adoptar precauciones para
evitar su alteración4.
Este marco normativo no necesariamente ha blindado al sistema del surgimiento de
controversias entre prestadores y usuarios con respecto a la medición del consumo. Los
prestadores del servicio de energía eléctrica han observado que en el mercado existen
instrumentos de diversas calidades metrológicas, a los cuales pueden recurrir los usuarios.
No todos estos instrumentos permiten asegurar la calidad de las mediciones y algunos
facilitan la alteración de sus condiciones de medida. Expertos consultados por la Delegatura
en 2017 manifestaron que se ha identificado una amplia variedad de métodos para alterar
los medidores de energía eléctrica. Estas adulteraciones del medidor, y la facilidad con la
que se producen, ocasionan pérdidas no técnicas para los prestadores (es decir pérdidas
no atribuibles al funcionamiento de las redes de distribución), cuando no es posible
demostrar la calidad de los medidores instalados frente a requisitos técnicos, ni la
confiabilidad de las mediciones con procedimientos de control adecuados, particularmente
para los prestadores de menor tamaño por sus limitadas capacidades técnicas y
económicas.
Además, los expertos entrevistados reconocieron que los usuarios perciben que existen
riesgos de abuso de posición de dominio y conflictos de interés por parte de las empresas
prestadoras del servicio cuando fungen como laboratorios de calibración de estos
instrumentos, dadas las facultades otorgadas a los prestadores por la Ley 142 y la asimetría
de información en cuanto a la regulación y al conocimiento técnico sobre los instrumentos
y procedimientos de medición.
En lo relacionado específicamente con el servicio de energía eléctrica en Colombia, la
asimetría presente entre usuarios y prestadores ha sido objeto de intervención regulatoria.
3 Ibid. Art. 9.
4 Ibid, Art. 145.
La CREG dispuso que cuando el medidor sea suministrado por la empresa, ésta deberá
asumir la garantía de buen funcionamiento del equipo por un período no inferior al que
establezcan las normas o a la que otorga el fabricante.
En lo que respecta a la calidad del medidor, la CREG impuso una serie de requisitos en el
Código de Medida contenido en la Resolución CREG-038 de 2014. En tal sentido el
instrumento de medición debe ser diseñado y especificado teniendo en cuenta las
características técnicas y ambientales de los puntos de conexión (considerando nivel de
tensión y transferencia de energía); ser bidireccional si se espera flujo en ambos sentidos;
contar con mecanismos de seguridad física e informática; permitir la lectura de los datos y
registrar la medida en kW/h; ser calibrado por un organismo acreditado antes de ser puesto
en servicio; cumplir con los índices de clase, clase de exactitud y error máximo permisible
establecidos en las normas NTC 2147, NTC 2288 y NTC 405215.
También estableció que:
5 Artículo 1 numerales 47 y 55
encontramos ante un instrumento de medición, que deberá entonces, acogerse a lo
establecido en el Decreto 1595 de 2015 en virtud de lo previsto en el artículo 2.2.1.7.14.2.-
.
En la misma línea y de manera especial, el artículo 2.2.1.7.14.3 del Decreto, enumera
algunas actividades en las que se usan los instrumentos de medida, incluyendo la
prestación de servicios públicos domiciliarios, esto enmarcado en la noción de consumidor
o usuario de que trata la Ley 1480 de 2011.
Quiere ello decir que, los instrumentos de medida utilizados para la prestación del servicio
público domiciliario de energía están sometidos a control metrológico bajo la competencia
de la Superintendencia, al tener una finalidad relacionada con el consumidor concebido en
el contexto de la Ley 1480 de 2011.
De lo anterior también se desprende que, la regulación a expedir tiene como alcance los
medidores de energía eléctrica utilizados para la prestación del servicio público domiciliario
residencial, es decir, en los hogares o núcleos familiares, incluyendo las áreas comunes de
los conjuntos habitacionales.
La delimitación del alcance del RTM a aquellos medidores de energía eléctrica para uso
residencial, emerge ante la innegable asimetría existente en las relaciones de consumo de
bienes y servicios. Así lo precisó la Corte Constitucional al señalar que, “Sin perjuicio de los
diferentes esquemas o modelos de responsabilidad que puede consagrar la ley, no puede
entonces en modo alguno ignorarse la posición real del consumidor y del usuario, puesto
que justamente su debilidad en el mercado ha sido la circunstancia tenida por el
constituyente para ordenar su protección” (Corte Constitucional, 2000)
Por su parte, la Corte Suprema de Justicia en relación con la materia, recogió las siguientes
consideraciones:
"(...) En ese orden de ideas, para estos efectos estima la Corte que, con estrictez, siempre
será forzoso indagar en torno a la finalidad concreta que el sujeto - persona natural o
jurídica- persigue con la adquisición, utilización o disfrute de un determinado bien o servicio,
para reputarlo consumidor solo en aquellos eventos en que contextualmente, aspire a la
satisfacción de una necesidad propia, privada, familiar domestica o empresarial - en tanto
que no esté ligada intrínsecamente a su actividad económica propiamente dicha, aunque
pueda estar vinculada, de algún modo al objeto social- que es lo que constituye el rasgo
característico de una verdadera relación de consumo. Este punto de vista cabe resaltar, es
el que puede identificarse en numerosos ordenamientos jurídicos que, como adelante se
examinara, catalogan únicamente como consumidor a quien sea destinatario final del bien
o servicio, o, por otro lado, exigen que la adquisición o utilización este ubicada por fuera de
la esfera de la actividad profesional o empresarial de quien se dice consumidor (...)” (Corte
Suprema de Justicia, 2005)
En relación con el concepto de destinatario o consumidor final, la doctrina también ha
manifestado (Rusconi, 2011):
"(...) el destino final implica que el acto de consumo se encuentre desprovisto de la intención
de reinsertar el bien en el mercado, ya sea mediante su reventa o transformación.
Su análisis casuístico, implicara juzgar, como dijimos, el equilibrio de la relación de acuerdo
con un examen integral que abarque no solamente las circunstancias de carácter objetivo
(el acto de consumo) sino también las condiciones de orden subjetivo (características de
las partes, manejo de la información, conocimientos técnicos, necesidad a satisfacer, etc.).
Tal entendimiento permitirá abarcar categorías especiales de consumidores, tales como los
subconsumidores, (…) no consumidores o los consumidores - empresarios, excluidos por
regla general del Estatuto protectivo pero tutelados en casos especiales en los que
intervienen en el mercado no como intermediarios sino como destinatarios finales de los
bienes y servicios de consumo.
Claro está que la extensión del ámbito de aplicación del estatuto del consumidor a sujetos
que intervienen habitualmente en el mercado como productores o proveedores, deberá ser
excepcional, puesto que conceptualmente y por regla axiológica, los 'profesionales del
mercado' estarán excluidos de aquella tutela legal equilibrante. (…)”
Sin controversia alguna a la definición de consumidor de la Ley 1480 de 2011 que
expresamente la enfila hacía quien se repute destinatario final, adquiera, disfrute o utilice
un determinado producto, cualquiera que sea su naturaleza para la satisfacción de una
necesidad propia, privada, familiar o doméstica y empresarial. Se quedan fuera de dicho
alcance, los usuarios de medidores comerciales o industriales, teniendo en cuenta que, la
determinación de una relación de consumo implica indagar la finalidad concreta que las
personas naturales o jurídicas perseguirán con la adquisición, utilización o disfrute del bien,
en este caso, el medidor de energía.
En conclusión, las competencias legales de la SIC en el control metrológico de los
medidores del servicio público de energía eléctrica, y en general en los medidores de los
servicios públicos domiciliarios en Colombia, corresponden a la primera fase de control
metrológico de aquellos instrumentos que tendrán como destino los usuarios o suscriptores
residenciales. Este alcance determina la definición del problema que motiva la intervención
regulatoria que se presenta en este análisis de impacto normativo.
De acuerdo con el análisis adelantado por la SSPD en 2021 sobre el estado de la medición
de energía eléctrica en el Sistema Interconectado Nacional (SIN) el país cerró el año 2021
con 16.594.726 usuarios de energía conectados a este sistema, de los cuales el 97,1%
cuenta con un medidor. El medidor electromecánico es el más utilizado, seguido del
medidor electrónico. (Figura 1).
Figura 1. Distribución de los medidores de energía eléctrica en el SIN
Instalados Instalados
Instalados Instalados
entre 1995 y entre 2005 y Total
antes de 1995 desde 2014
2004 2013
1.601.557 3.723.218 5.044.372 3.703.726 14.072.873
11,38% 26,46% 35,84% 26,32%
Fuente: SSPD (2020)
En cuanto al precio de los medidores, de acuerdo con los valores reportados por las
empresas prestadoras del servicio público domiciliario a la SSPD, el equipo de menor precio
promedio es el medidor electromecánico monofásico bifilar, con un precio de $92.089, y el
equipo con el precio promedio más alto es el medidor electrónico trifásico tetrafilar con un
precio de $443.919. La entidad también evidenció alta dispersión en los precios de los
medidores electrónicos, con precios que varían entre $900.000 y $1.700.000. (¡Error! No
se encuentra el origen de la referencia.)
De acuerdo con información recopilada por la SIC en el año 2016, a partir de una muestra
193.106 medidores nuevos a los que se les realizó la verificación inicial en un laboratorio
acreditado se observó que el 99,91% conformes metrológicamente con base en las normas
técnicas exigidas a través del Código de Medida (índices de clase, clase de exactitud y error
máximo permisible establecidos en las normas NTC 2147, NTC 2288 y NTC 4052)7. Sin
embargo, un análisis más detallado revela la prevalencia entre dichos medidores de las
menores clases permitidas por los prestadores en los contratos de condiciones uniformes.
El 88,49% son clase 1 y no hay ninguno de clase 0.2 o 0.2s, siendo éstas las de mayor
precisión8.
Veinte años después de expedirse la Ley 142 de 1994, a través de la Ley 1715 de 2014 se
definieron las primeras reglas para promover el desarrollo y la utilización de las Fuentes No
Convencionales de Energía, principalmente renovables, y promover la gestión eficiente de
la energía, que comprende la eficiencia energética y la respuesta de la demanda.
En desarrollo de este mandato legal, el Ministerio de Minas y Energía (MME) estableció los
mecanismos de implementación de la AMI. Esta infraestructura fue definida como aquella
que “permite la comunicación bidireccional con los usuarios del servicio de energía
eléctrica. Esta infraestructura integra hardware (medidores avanzados, centros de gestión
de medida, enrutadores, concentradores, antenas, entre otros), software y arquitecturas y
redes de comunicaciones, que permiten la operación de la infraestructura y la gestión de
los datos del sistema de distribución de energía eléctrica y de los sistemas de medida.”9
6
Otros tipos de fallas, conforme a lo que reportan las empresas, se trata de las siguientes: display dañado,
medidor no registra, registrador en mal estado, sin sello principal, carcaza principal rota, bobina aislada, LED
no pulsa, bornera quemada, inconsistencias en la lectura, error de medida, fase y carga en el mismo borne,
líneas directas, medidor frenado, medidor sulfatado, medidor oxidado, medidor quemado, numerador en mal
estado, tapa principal quemada, tapa principal perforada, tapa principal en mal estado, circuito de tensión en
mal estado. (SSPD, 2021)
7El 7 de abril de 2017 se realizó una vista al laboratorio Servimeters S.A., acreditado para verificar
medidores de agua y medidores de energía. Se requirió a este laboratorio información sobre las
verificaciones iniciales a ambos tipos de medidores para el desarrollo paralelo de dos documentos.
8
Estas NTC clasifican los medidores según su precisión en clases que van de la clase 2 a la que pertenecen
los medidores de menor precisión, a clase 0,2s que corresponde a aquellos con precisión más alta. Para
información más detallada se sugiere consultar las normas técnicas NTC2147, NTC 2288 y NTC 4052.
9 Resolución 40072 de 2018 del Ministerio de Minas y Energía
De acuerdo con la norma técnica NTC-6079, la infraestructura de un sistema AMI incluye:
1) la unidad de medida, 2) la unidad concentradora, 3) el sistema de gestión y operación,
4) las comunicaciones.
Con la implementación de AMI, la política pública busca10:
i) Facilitar esquemas de eficiencia energética, respuesta de la demanda, y modelos de
tarificación horaria y/o canastas de tarifas.
ii) Permitir la incorporación en los sistemas eléctricos, entre otras, de tecnologías de
autogeneración, almacenamiento, generación distribuida y vehículos eléctricos.
iii) Mejorar la calidad del servicio a través del monitoreo y control de los sistemas de
distribución.
iv) Dinamizar la competencia en la comercialización minorista de energía eléctrica y generar
nuevos modelos de negocio y servicios.
v) Gestionar la reducción de las pérdidas técnicas y no técnicas.
vi) Promover la eficiencia en los costos de prestación del servicio de energía eléctrica y
facilitar que se alcancen niveles de pérdidas eficientes.
En este sentido, definió como meta que para 2030 al menos el 75% de los usuarios
conectados en un mercado de comercialización cuenten con AMI11, y que la CREG
establezca las metas de implementación de AMI para las Zonas No Interconectadas (ZNI).
Fuente: BACEX
Estos medidores provienen casi en su totalidad de China, país del que se importaron el
79% de estos instrumentos de medición entre 2019 y 2021. El segundo país de procedencia
es Eslovaquia, con el 7% de los instrumentos.
Teniendo en cuenta las competencias legales de la SIC, así como el marco normativo
presentado en la sección anterior, el problema a resolver mediante la intervención
regulatoria de la SIC se define de la siguiente forma (Figura 6):
Existe el riesgo de una comercialización de medidores de energía eléctrica sin suficientes
garantías metrológicas para medir el consumo, facturar el servicio y cumplir los
compromisos de implementación de AMI contenidos en la política pública.
12 El Regulador aceptará temporalmente que los equipos cumplan únicamente con la norma técnica
colombiana, hasta cuando la SIC expida el RTM.
La facturación del servicio de energía eléctrica se fundamenta en la posibilidad de medir el
consumo de cada uno de los suscriptores. Esta facturación corresponde al precio que debe
pagar el usuario por el suministro de energía, su transporte, distribución y comercialización.
En tanto el medidor que utilice un usuario no proporcione mediciones confiables de la
cantidad de energía consumida, el usuario puede pagar más por el servicio de lo que está
establecido tarifariamente por cuenta de una medida que excede su consumo real, o
subremunerar al distribuidor a cuya red está conectado y al comercializador que lo atiende
cuando su consumo es mayor al que registra el medidor.
Por otra parte, como lo señala la CREG en la Resolución CREG 101 001 de 2022, el
cumplimiento de los objetivos de política energética y la puesta en funcionamiento de AMI,
exigen que los medidores sean capaces de servir para la gestión comercial, la planeación
y operación del sistema, la gestión de pérdidas, facilitar esquemas de eficiencia energética,
respuesta de la demanda, nuevas tecnologías, entre otros. Además, en el mediano y largo
plazo, la medición avanzada permitirá que los usuarios, incluyendo los residenciales,
cuenten con la información suficiente para gestionar su consumo de energía, de tal forma
que definan el momento del día en el que consumen electricidad con base en las señales
tarifarias.
Adicionalmente, en un contexto de redes inteligentes los usuarios tienen la potencialidad
de convertirse en proveedores de energía eléctrica a través de tecnologías de generación
a pequeña escala como los paneles solares, o de recursos distribuidos como los vehículos
eléctricos, con lo cual los datos de medición de la energía no solamente tienen relevancia
en la medición del consumo de electricidad sino también en la medición del suministro de
energía del usuario a la red de distribución. De hecho, esta situación empezó a ser
reconocida regulatoriamente a través de la Resolución CREG-030 de 2018, y se espera
que la figura regulatoria sea de uso frecuente por parte del suscriptor residencial del servicio
público de energía eléctrica, como lo señala la Hoja de Ruta para la Energía del Futuro,
construida a partir de los resultados de la Misión de Transformación Energética adelantada
por el MME. (MME, 2021)
Esta medición avanzada requiere que los medidores funcionen bajo las condiciones
tecnológicas requeridas por el nuevo esquema de prestación del servicio, lo cual implica la
necesidad de cambiar gran parte de los medidores actuales.
De acuerdo con la información consignada en el Sistema Único de Información (SUI) de la
Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios (SSPD), del total de suscriptores del
SIN los residenciales representaron en 2021 el 89,8% es decir 14,7 millones (Tabla 2) y
cada uno de estos suscriptores cuenta con un medidor de energía activa. Esto significa que
la sustitución de los medidores tradicionales por medidores inteligentes se concentra
fundamentalmente en los usuarios residenciales.
Tabla 2. Número y participación de los suscriptores residenciales en el total nacional
2020 2021
Tipo de suscriptor Suscriptores % Suscriptores %
(000) (000)
Residenciales 14.044 88,2% 14.700 89,8%
Resto13 1874 11,8% 1.660 10,2%
Fuente: SUI
Inteligente Electromecánico
unidireccional 42%
2%
Inteligente
bidireccional
1%
Electrónico
30%
Fuente: SUI-SSPD
13 Incluye suscriptores comerciales, industriales, sector oficial, provisional, alumbrado público, especial
asistencial, especial educativo, áreas comunes, distritos de riego, áreas comunes y otros usuarios sin definir.
Figura 6. Árbol de problema
El tiempo máximo de uso de un medidor no es un parámetro que haya sido objeto de
definición regulatoria. La Ley 142 de 1994 en su artículo 144, y la Resolución CREG-108
de 1997, únicamente señalan que es obligación del usuario reparar o remplazar el medidor,
a satisfacción de la empresa, cuando su funcionamiento no permita determinar
adecuadamente el consumo. Para determinar si la medición es adecuada o no, la empresa
prestadora del servicio público puede retirar el medidor para enviarlo al laboratorio, siempre
y cuando este procedimiento esté contenido en el Contrato de Condiciones Uniformes
(CCU), garantizando el debido proceso y el derecho de defensa del usuario como se
consigna en SSPD (2021). En el contexto de la medición avanzada, los medidores deben
ser sustituidos por el distribuidor de energía, o por el usuario si así lo desea.
Si se considera que en 2019 el 38% de los medidores instalados en el país tenían una
antigüedad de al menos 15 años, es posible que la confiabilidad de su lectura haya
disminuido, y que sea requerido su remplazo, incluso por otro medidor electromecánico.
Teniendo en cuenta que no todos los responsables del remplazo de estos equipos,
usuarios, distribuidores o comercializadores tienen los mismos incentivos, conocimientos
metrológicos o capacidades económicas para adquirir e instalar los medidores
metrológicamente más adecuados, existe el riesgo de que se comercialicen, adquieran, y
posteriormente se instalen, medidores que no cumplen con los requerimientos metrológicos
necesarios para medir el consumo e inyección de electricidad de manera confiable. Esta
baja confiabilidad ocasionaría que usuarios y prestadores del servicio vean afectado su
pago o su remuneración, dependiendo del tipo de desviación que ofrezca la lectura. En el
contexto de la medición inteligente, las medidas no confiables tampoco permitirían
cuantificar los aportes de electricidad de los usuarios, gestionar de manera eficiente la red
de distribución, facturar adecuadamente la gestión de consumo con base en los incentivos
regulatorios -como la respuesta de la demanda-, y en últimas materializar todos los
beneficios de las redes inteligentes.
Causa 2: Los beneficios individuales de contar con redes inteligentes son menores a los
beneficios sistémicos. Existe el riesgo de que algunos usuarios prefieran comprar su propio
medidor y optar por uno que no ofrezca medidas suficientemente confiables.
Dado que el usuario sigue estando facultado para adquirir el medidor, si escoge adquirirlo
puede preferir un medidor inteligente económico, pero de baja calidad metrológica si
percibe que el cambio de medidor no le reporta beneficios inmediatos que se reflejen en su
14
Resolución 038 de 2014, Artículo 10. Certificación de conformidad de producto para los elementos del sistema
de medición. A partir de la entrada en vigencia de la presente resolución los elementos señalados en los literales
a) al g) y m), del Anexo 1 de esta resolución, de los nuevos sistemas de medición y de aquellos que se adicionen
o remplacen en los sistemas de medición existentes, deben contar con un certificado de conformidad de
producto expedido por una entidad acreditada por el Organismo Nacional de Acreditación de Colombia (ONAC).
Las normas técnicas de referencia que deben emplearse para la certificación de conformidad son las indicadas
en esta resolución o, en ausencia, las normas técnicas internacionales aplicables al elemento del sistema de
medición o las normas técnicas colombianas expedidas por el Icontec.
La certificación de conformidad del producto debe abarcar la totalidad de los requisitos establecidos en la norma
de referencia y demás condiciones reglamentarias y legales aplicables.
El representante de la frontera comercial debe tener disponible para los agentes interesados o la autoridad
competente, copias de dichos documentos.
factura de electricidad. Como lo menciona la Resolución 4072 de 2018 del MME, la
medición inteligente no sólo busca que el usuario pueda optimizar su perfil de consumo
eléctrico y participar en el mercado de energía, sino también mejorar la calidad del servicio
y la gestión de la red de distribución, gestionar las pérdidas técnicas y no técnicas, facilitar
la incorporación de tecnologías de autogeneración, almacenamiento, generación distribuida
y vehículos eléctricos, entre muchos otros beneficios.
Si bien este riesgo se reduce con la política pública de sustitución del medidor por parte del
distribuidor, y de la facultad que conserva el distribuidor de instalar únicamente los equipos
que sean interoperables con su red, la existencia en el mercado de medidores de calidades
metrológicamente pobres puede inducir al usuario a adquirir el medidor a precios más bajos,
lo que puede generar posteriormente insatisfacción de los usuarios ante la negativa del
distribuidor a instalar estos medidores.
15 https://www.wradio.com.co/2022/06/30/empresa-de-energia-en-santa-marta-detecto-el-robo-del-servicio-en-
varias-viviendas/
16 https://www.elespectador.com/bogota/robo-de-energia-practica-ilegal-y-peligrosa-que-crece-en-bogota/
De permitirse que el usuario pueda encontrar en el mercado medidores que registran de
manera dudosa el flujo de energía, se configura un escenario propicio para que surjan
prácticas de inducción a error a los usuarios, en tanto utilizarían instrumentos que no miden
con suficiente precisión la energía consumida o inyectada a la red, afectando las
transacciones que se efectúen con base en esta lectura.
4 Definición de objetivos
Los medidores que cumplen con estándares metrológicos reconocidos y exigibles a todos
los agentes del mercado también facilitan que los usuarios, comercializadores de
electricidad y distribuidores de energía cuenten con un nivel aceptable de confianza en las
mediciones arrojadas por los aparatos de medición que se exigen y que se instalan, con
independencia de quién los haya suministrado para su instalación.
17
Parágrafo 1 del Artículo 15, Resolución CREG 101-001 de 2022: Mientras se expide el reglamento técnico
metrológico, se deberá cumplir lo dispuesto en el numeral 6.1.1.3 de la Norma Técnica Colombiana NTC 6079
expedida por ICONTEC.
La vigilancia y el control del cumplimiento de la normatividad técnica por parte del
distribuidor está a cargo de la SSPD, quien deberá verificar que los medidores inteligentes
que instalen los distribuidores acojan la NTC 6079 como lo estableció el Regulador.
La NTC 6079 es una norma técnica que contiene los requisitos para sistemas AMI en redes
de distribución de energía eléctrica. Incluye características técnicas tanto del medidor como
de los demás componentes de la arquitectura de AMI, y por tanto no se concentra en
establecer la totalidad de los requerimientos metrológicos del instrumento de medición. Su
intervención en asuntos metrológicos permite establecer las referencias normativas para
cinco requisitos metrológicos contenidas en otras normas técnicas colombianas tanto para
energía activa como reactiva.
Por otra parte, la NTC 6079 establece ensayos de rutina, es decir exigibles a los
instrumentos antes de su instalación, más no define ensayos o pruebas exigibles a
fabricantes de medidores para establecer la conformidad del instrumento con parámetros
metrológicos mínimos, como sí lo hace la reglamentación técnica que se propone en las
Alternativas 1 y 2 que pasarán a describirse.
Por último, la NTC 6079 adopta el estándar procedente de las normas IEC, de origen
norteamericano, sin hacer referencia a normas equivalentes de otras procedencias.
Para evaluar el desempeño de cada una de las alternativas ya descritas, así como del statu quo
frente a los objetivos de la intervención regulatoria, se propone implementar la metodología de
Análisis Multi-Criterio (AMC).
Esta AMC permite establecer preferencias entre varias opciones con base en un conjunto
explícito de objetivos que deben ser alcanzados, para lo cual se eligen criterios evaluables o
medibles que conduzcan a identificar, ya sea cualitativa o cuantitativamente, en qué medida
cada alternativa alcanza los objetivos de la intervención.
Un representante de la CREG
Un representante del Ministerio de Minas y Energía
Un representante de los distribuidores de energía eléctrica
Tres representantes de empresas fabricantes e importadoras de medidores de
electricidad
La opinión de estos expertos fue solicitada en dos etapas, la primera con el objeto de conocer
su posición sobre los criterios que se utilizarían para evaluar las alternativas de intervención, y
la segunda para definir las ponderaciones de estos criterios y evaluar el desempeño de las
alternativas frente cada criterio.
La retroalimentación sobre los criterios se recibió a través de correo electrónico. Para el ejercicio
de definición de ponderaciones y evaluación de alternativas se adelantaron sesiones virtuales
a través de la plataforma MSTeams en las que se explicó a los representantes la metodología
de evaluación y los resultados esperados del ejercicio. En algunos casos las respuestas de
estos expertos fueron remitidas unos días después, a través de correo electrónico.
A continuación se presentan los resultados obtenidos del procedimiento de evaluación.
6.4 Criterios de evaluación a tener en cuenta para comparar las alternativas propuestas
En la segunda etapa de interacción con los expertos, se jerarquizaron los criterios de evaluación
siguiendo la metodología “Analytic Hierarchy Process” desarrollada por Saaty (2008). Esta
metodología emplea matrices de importancia relativa como método de construcción de
ponderadores, como se esquematiza en la Tabla 3. Aquí al comparar el criterio A contra el B, el
evaluador le otorgó un valor “x”, y al comparar A con C otorgó un valor “y”.
Tabla 3 Matriz de comparación de criterios
Criterio Y
A B C D
Criterio X
A 1 x y
B 1/x 1
C 1/y 1
D 1
Tabla 4 Escala de evaluación para asignar la importancia relativa entre parejas de criterios
Con base en las calificaciones individuales, se procedió a calcular la media geométrica para
obtener una calificación consolidada de los seis expertos (Tabla 5):
Tabla 5 Matriz Simétrica Inversa Consolidada
Criterio Y
A B C D
A 1,0 0,8 4,1 3,4
B 1,2 1,0 5,6 4,8
Criterio X
C 0,2 0,2 1,0 1,5
D 0,3 0,2 0,2 1,0
Total
2,74 2,22 10,89 10,64
columna
Partiendo de esta matriz, se realizó el proceso de normalización con el fin de encontrar las
ponderaciones relativas para cada uno de los criterios, mediante la división de cada celda sobre
el total de la suma de su respectiva columna (Tabla 6):
Criterio Y
A B C D
A 0,36 0,37 0,38 0,32
Criterio X
Finalmente, para calcular la importancia relativa de cada uno de los criterios, se calculó el
promedio por fila obteniendo los siguientes resultados (Tabla 7):
Tabla 7 Ponderaciones resultantes
6.5.2 Evaluación del desempeño de las alternativas frente a los criterios seleccionados
De manera individual los expertos también evaluaron el desempeño de las alternativas frente a
cada uno de los criterios.
Esta escala refleja el desempeño de cada una de las alternativas si se le compara con el statu
quo, o escenario base. Así, si en un criterio la alternativa reporta altos beneficios comparada
con el escenario base, se adjudica una calificación de +10. Si no presenta beneficios ni costos
frente al escenario base, su calificación es 0. Si por el contrario la alternativa representa altos
costos comparada con el escenario base su calificación es -10. Valores intermedios en
beneficios y costos pueden ser utilizados, para graduar el valor incremental de las alternativas
ante el statu quo.
Cada experto calificó el desempeño de las alternativas utilizado esta escala y luego estas
calificaciones individuales fueron promediadas para llegar a una evaluación consolidada del
grupo de expertos. La evaluación del criterio de costos fue adelantada por la SIC con base en
información obtenida de entrevistas con expertos. La Tabla 9 muestra el resultado de la
consolidación.
En el caso del criterio de costos, tanto la alternativa 2 como la 3 comparadas con el statu quo
representan un bajo incremento en los costos de cumplimiento para los agentes fabricantes e
importadores de medidores de energía, por las siguientes razones:
Hoy el Código de Medida exige que los medidores que se instalen cuenten con
Certificación de Producto y esta exigencia es trasladada por los distribuidores a los
fabricantes e importadores en los procesos de compra de medidores.
La certificación de producto actual implica la ejecución de ensayos en laboratorios
acreditados por el ONAC con las normas IEC.
En tanto las alternativas regulatorias planteadas aquí contemplan que las normas IEC
sean consideradas normas equivalentes para propósitos metrológicos en Colombia,
tanto para energía activa como reactiva, no se esperarían grandes modificaciones en los
procedimientos de certificación de producto y demostración de la conformidad.
Teniendo en cuenta que los medidores inteligentes serán principalmente importados, la
incorporación de normas equivalentes aplicables en mercados como el estadounidense
y el europeo, permiten que se demuestre conformidad acudiendo a estas equivalencias
del RTM con otros referentes metrológicos. De esta forma el importador no deberá
ejecutar ensayos o pruebas adicionales, sino reportar la documentación que prueba que
sus equipos ya cumplen con referentes metrológicos aceptados en el RTM colombiano.
Los fabricantes e importadores deberán incluir en sus actividades el registro del
certificado de conformidad ante la VUCE y ante el sistema de información que establezca
la SIC para la vigilancia de este RTM.
8 Implementación y monitoreo
8.1 Se define la estrategia, los recursos y el apoyo de otras entidades y las estrategias
necesarias para hacer efectiva la implementación de la alternativa
Adicionalmente, se incorporará una segunda medida transitoria que permita poner en marcha
el reglamento aun cuando no exista un organismo de certificación de la conformidad acreditado
ante el ONAC con alcance a este RTM. En este caso se aceptará como medio para demostrar
la conformidad de los medidores la Declaración de Primera Parte del productor y/o importador
con las pruebas y ensayos contenidos en la Recomendación OIML R46 o en las normas IEC ya
mencionadas en este documento.
Mientras no existan en Colombia laboratorios de ensayo acreditados para adelantar los ensayos
contemplados en la recomendación OIML R46 para la verificación inicial, se permitirá que la
declaración de conformidad se soporte en los ensayos contenidos en la NTC 4856 efectuados
sobre una muestra de medidores que pretendan comercializarse en el país.
8.3 Análisis exhaustivo sobre la tasa de cumplimiento esperada, así como los objetivos de
cumplimiento en el corto y mediano plazo, y cómo estos pueden afectar o beneficiar los
objetivos y metas propuestos para la solución del problema identificado.
Teniendo en cuenta que se optó por una alternativa regulatoria de comando y control, para
incentivar su cumplimiento la SIC cuenta con una facultad sancionatoria. De conformidad con lo
previsto en la Ley 1480 de 2011 –Estatuto del Consumidor- y el Decreto 4886 de 2011, la
Superintendencia en su rol de control y vigilancia podrá impartir medidas cautelares ordenando
la suspensión de la comercialización de los medidores de energía cuando estos no hubieren
superado el proceso de evaluación de la conformidad, o se tenga indicios graves de que se ha
puesto en riesgo el objetivo legítimo que se pretende proteger con el reglamento técnico. En
simultánea, ante el eventual incumplimiento por parte de productores de medidores de
electricidad la SIC podrá imponer, previa investigación administrativa, las sanciones previstas
en el artículo 61 del referido Estatuto del Consumidor. El seguimiento a esta labor de vigilancia
y control se podrá efectuar a través del registro de licencias de producto tramitadas por año en
la Ventanilla Única de Comercio Exterior - VUCE, y del registro de investigaciones
administrativas frente a la demostración de conformidad.
La SIC espera una elevada tasa de cumplimiento en tanto los distribuidores, como primeros
interesados en que los instrumentos de medida ofrezcan lecturas confiables, no tienen
incentivos a permitir que se instalen medidores que no cumplan con mínimos estándares
metrológicos, y por esta vía los productores verán reducido el mercado dispuesto a comprar
instrumentos que no estén alineados con el RTM.
Para monitorear el nivel de implementación del RTM se utilizará un conjunto de indicadores que
se alimentan de la información de la VUCE y en SIMEL que están contenidos en la Tabla 11.
Estos indicadores de periodicidad anual de cálculo pueden ser calculados por la SIC de manera
autónoma, con información de estos sistemas y de los registros internos de sus campañas de
vigilancia y control y de los procesos administrativos por posibles incumplimientos. En tal
sentido, la Delegatura deberá adelantar al menos una campaña anual para el control dirigida a
fabricantes e importadores de medidores de energía.
INDICADORES DE PROCESO:
Estos indicadores buscan hacer seguimiento al desempeño del proceso de demostración de la
conformidad como elemento central de la Fase 1 de control metrológico.
El primer indicador hará seguimiento al número de modelos de medidores de electricidad
registrados en SIMEL. Permite monitorear el cumplimiento y avance del proceso de
demostración de la conformidad del instrumento con el RTM.
El segundo contabilizará el nivel de licencias o registros de importación tramitados a través de
la VUCE, como indicador del nivel de implementación de este procedimiento, que también
evidencia la entrada efectiva de instrumentos de medición al mercado nacional, y por ende la
amplitud y la diversidad de la oferta de medidores en el mercado.
Periodic Entidad
Indicador Fórmula Unidad Fuente
idad responsable
Modelos de Número de modelos de
medidores de medidores de
# Anual SIMEL SIC
energía electricidad registrados
registrados en SIMEL
Número de licencias
Licencias y/o y/o registros de
registros de importación de
Soporte
importación medidores de energía # Anual SIC
VUCE
tramitados a eléctrica que fueron
través de la VUCE tramitados a través de
la VUCE.
INDICADORES DE RESULTADOS
Lo que busca el RTM a través de las disposiciones allí contenidas es que usuarios residenciales
y agentes del servicio público de energía eléctrica puedan tener mediciones confiables del flujo
de energía activa y reactiva de estos suscriptores del servicio. Este objetivo se logra en la
medida en que estos suscriptores utilicen medidores fabricados para ofrecer medidas
confiables. Con este indicador de resultados se busca monitorear el comportamiento de la
cantidad de medidores que demuestran la conformidad con el RTM, en la medida en que a
mayor cantidad de medidores conformes con el Reglamento se entiende que existe una oferta
más amplia y mayores posibilidades de que usuarios, comercializadores y distribuidores de
energía puedan adquirirlos para su posterior instalación.
Tabla 12. Indicadores de resultados
Entidad
Indicador Fórmula Unidad Periodicidad Fuente
responsable
[(# de licencias de
medidores de energía
que demuestran
Incremento del conformidad en el
número de periodo actual - # de
licencias de licencias de importación
importación de de medidores de
medidores de energía que demuestran % Anual VUCE SIC
energía eléctrica conformidad en el
que demuestran periodo anterior) / #
su conformidad licencias de importación
con el RTM de medidores de
energía que demuestran
conformidad en el
periodo anterior] X 100
INDICADORES DE CUMPLIMIENTO
Estos indicadores pretenden cuantificar el nivel de cumplimiento de las obligaciones contenidas
en el RTM, a través de indicadores que señalan, o bien la tasa de cumplimiento frente al total
de trámites o indicadores de aperturas de investigación y sanciones impuestas.
Tabla 13. Indicadores de cumplimiento
Periodi- Entidad
Indicador Fórmula Unidad Fuente
cidad responsable
[# de registros de
importación de
medidores de energía
Registros de
aprobados por la
importación % Anual Soporte VUCE SIC
VUCE / # de registros
aprobados
de importación de
medidores de energía)
X 100
[# de lotes de
medidores importados
que cumplieron con la
Demostración de la
Medidores de Registros de
conformidad a través
energía con visitas a
de ensayos a la % Anual SIC
declaración de importadores
muestra de
conformidad de medidores
instrumentos/ # de
lotes de medidores
importados) X 100
Total, de aperturas de
investigación por
Base de datos
incumplimiento al RTM
del grupo de
Aperturas de de medidores de
# Anual apoyo jurídico SIC
investigación energía producto de
de la Dirección
requerimientos a
de RT y ML
importadores o
productores.
[Total de sanciones por
incumplimiento al RTM
DE medidores de Base de datos
Sanciones por energía / Total de del grupo de
incumplimiento aperturas de % Anual apoyo jurídico SIC
al RTM investigación por de la Dirección
incumplimiento al RTM de RT y ML
de medidores de
energía] X 100
9 Consulta pública
La primera versión de este AIN fue adelantada en el año 2017, en un contexto en el que la
medición avanzada empezaba a ser objeto de discusión regulatoria. Esta primera versión
del Análisis incorporó los resultados de procesos de participación que convocaron a
expertos sectoriales, el ONAC, un laboratorio de calibración, la CREG, la SSPD y Andesco.
Una vez reformulado el AIN con base en las recomendaciones del DNP y con el objeto de
incorporar el nuevo contexto de política pública en materia de medición inteligente, una
nueva versión de la definición de problema fue publicada entre el 1 de junio de 2022 en la
página de la SIC, de conformidad con el procedimiento establecido en el Decreto 1468 de
2020 para la elaboración de AIN completo. Sólo un agente remitió comentarios a esta
definición y su comentario fue tenido en cuenta en la elaboración de este documento para
dar claridad sobre la necesaria articulación interinstitucional a la que hizo referencia en su
intervención.
Posteriormente, se evaluaron las alternativas con la participación de representantes de
diferentes grupos de interés, expertos en asuntos metrológicos. Esta evaluación se efectuó
entre el 22 de julio y el 19 de agosto por medios electrónicos, intercambiando información
a través de correo electrónico y sosteniendo reuniones de discusión y explicación de la
metodología de evaluación utilizando la plataforma MSTeams.
Este documento AIN contiene los resultados finales del análisis y será sometido a consulta
de todos los grupos de interés a través de la página de internet por un período de quince
días, al cabo de los cuales la SIC procederá a analizar los comentarios recibidos para
evaluar la necesidad de hacer ajustes y modificaciones tanto al AIN como al proyecto de
RTM.
10 Bibliografía
DNP (2021) Guía Metodológica para la Elaboración de Análisis de Impacto Normativo (AIN)
Versión 2.0. Departamento Nacional de Planeación. Marzo de 2021. Disponible en:
https://colaboracion.dnp.gov.co/CDT/ModernizacionEstado/EReI/Guia_Metodologica_AIN.
pdf
Department for Business, Energy and Industrial Strategy. (2016) Impact Assessment IA IA
No: BEIS030(F)-16-RD. Simple Pressure Vehicles (2014/29 EU); Electromagnetic
Compatibility (2014/30 EU); Non-Automatic Weighing Instruments (2014/31 EU); Measuring
Instruments (2014/32 EU); Lifts and their safety components (2014/33 EU); ATEX (2014/34
EC); Low Voltage (2014/35 EU); Pressure Equipment Directive (2014/EU). Disponible en:
https://www.legislation.gov.uk/ukia/2016/240/pdfs/ukia_20160240_en.pdf
Saaty, T.L. (2008). Relative measurement and its generalization in decision making why
pairwise comparisons are central in mathematics for the measurement of intangible factors
the analytic hierarchy/network process. Rev. R. Acad. Cien. Serie A. Mat. 102, 251–318
(2008). [Consultado el 17 de marzo de 2021].
https://rac.es/ficheros/doc/00576.PDF
UIT (2014). Using Regulatory Impact Analysis to improve decision making in the ICT sector.
2014.