Apuntes Química

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 51

Tema 1

1) Magnitudes atómicas

1) Magnitudes atómicas
Los átomos, básicamente, están compuestos por tres partículas elementales:
protones, neutrones y electrones. El número de estas partículas sirve para caracterizar los
átomos.

Partícula Carga eléctrica (C) Masa (Kg)


Protón + 1,6022 10-19 1,6726 10-27
Electrón - 1,6022 10-19 9,1094 10-31
Neutrón 0 1,6749 10-27

El número atómico, Z, de un elemento químico representa la carga nuclear positiva


de sus átomos, es decir, el número de protones que posee un átomo. Cada elemento
químico tiene un número atómico distinto y característico (el número de protones presente
en el núcleo es lo que determina de qué elemento químico se trata). En un átomo
eléctricamente neutro, el número atómico indicará también el número de electrones.

¿Un mismo elemento puede tener átomos de masas distintas?. Experimentalmente


pudo demostrarse que el neón natural contiene dos clases de átomos con el mismo número
atómico, pero diferente masa.
Así, deducimos que los átomos de un mismo elemento pueden tener un número
variable de neutrones y como consecuencia, una masa variable, de ahí la importancia de
conocer tanto el número atómico de un átomo como su número másico.

El número másico, A, indica el número de nucleones, de partículas subatómicas


que constituyen el núcleo atómico, es decir, la suma de los protones y neutrones que lo
forman. A = Z + N, siendo N el número de neutrones.

Conocidos el símbolo químico de un elemento, X, su número atómico, Z y el número


másico, A, el elemento puede simbolizarse así:
𝐴
𝑍
X
Isótopos
Las distintas formas atómicas de un mismo elemento que difieren en su número
másico debido a que poseen distinto número de neutrones, se denominan isótopos.
De los 90 elementos químicos naturales conocidos, más de las tres cuartas partes
tienen dos o más isótopos, sólo elementos como el Be, F, Na, Al, I o el Tulio (Tm) están
constituidos por una sola clase de átomos.

1
Tema 1
1) Magnitudes atómicas

Masa atómica y masa isotópica


La masa atómica de un elemento químico es la masa media de un átomo de ese
elemento, expresada en unidades de masa atómica (por eso nunca son números enteros).
En realidad, no se toma como masa atómica del elemento la de ningún átomo real, la
de ningún isótopo, sino la masa media de estos, en función de su abundancia.
Normalmente, se determinan experimentalmente las masas atómicas de los
diferentes isótopos naturales del elemento, las llamadas masas isotópicas y su frecuencia
relativa, la llamada abundancia isotópica relativa o abundancia isotópica, el porcentaje,
referido al número de átomos, que corresponde a cada isótopo de un elemento tal y como
se encuentra en la naturaleza.
Así, para obtener la masa atómica de un elemento, multiplicamos la masa isotópica
de cada isótopo por su abundancia isotópica sumar lo resultados correspondientes a todos
los isótopos.

Iones
Un átomo puede ganar o perder electrones, quedando así cargado eléctricamente,
ándose en un ion. Cuando gana electrones adquiere carga negativa y se conoce como anión.
Cuando pierde electrones adquiere un defecto de carga negativa y se transforma en un ion
positivo o catión. La carga eléctrica puede calcularse como la diferencia entre el número de
protones y electrones.
Los iones pueden simbolizarse así:

𝐴
𝑍
X𝑞

Ejercicios
En este apartado podemos tener dos tipos de ejercicios, de caracterización del
elemento químico, de algún isótopo o ion concreto, para indicar de qué elemento se trata o
de qué número de partículas está compuesto o de determinación de la masa atómica o
derivado.

De ambos tipos tenéis en el libro ejemplos resueltos, problemas y actividades varias


en las páginas 8, 10, 32, 33 y 34. La mayoría son de mero cálculo, sin dificultad.

Añadamos alguno:

2
Tema 1
1) Magnitudes atómicas

Tipo 1
Determinar el número atómico, Z, el número de neutrones, N, el número másico, A; y
el número de electrones del isótopo
239
𝐏𝐮
94

Nos han dado el número atómico, Z = 94, de donde ya podemos dar nombre a
nuestro elemento, se trata de Plutonio, y el número másico A = 239, de donde deducimos
que el isótopo tiene un número de neutrones igual a la diferencia entre ambos datos:
N = (A – Z)
de donde N = 239-94=145
y como en un átomo neutro debe haber el mismo número de electrones que de
protones para mantener la carga “a cero”, sabemos que en el isótopo hay 94 electrones.

Z = 94, N = 145, A = 239 y hay 94 electrones

Tipo 2
Calcula la masa atómica del argón, sabiendo que las masas isotópicas de los isótopos
36
18
Ar, 38
18
Ar y 40
18
Ar son, respectivamente, 35,968 u, 37,963 u y 39,962 u, y las abundancias
relativas correspondientes 0,337 %, 0,063 % y 99,600 %.

La masa atómica del argón será:

Ar (Ar) = 35,968 u (0,337/100) + 37,963 u (0,063/100) + 39,962 (99,600/100)


Ar (Ar) = 0,121 u + 0,024 u + 39,802 u = 9,947 u

Ejercicios propuestos
Indicar el número atómico y el número másico y calcular el número de protones,
neutrones y electrones que contiene cada uno de los siguientes átomos:
35 37 235 65 210 214 18 200 12 13 14
17
Cl 17
Cl 92
U 29
Cu 81
Tl 82
Pb 8
O 80
Hg 6
C 6
C 6
C

A partir de los datos siguientes, calcular la masa atómica de los elementos galio y sicilio
69 71
31
Ga: 68,95 u; 60,16% 31
Ga: 70,95 u; 39,84% Sol.: 69,75 u

28 29
14
Si: 27,985792 u; 93,05% 14
Si: 28,990654 u; 3,90% 30
14
Si: 29,986320 u; 3,05%
Sol.: 28,08 u

3
Tema 1
1) Magnitudes atómicas

¿Un isótopo de carbono puede tener el mismo número másico que un isótopo de
nitrógeno? ¿Y el mismo número atómico?

4
Tema 1
3) Orígenes de la teoría cuántica

3) Orígenes de la teoría cuántica


La ciencia avanza cuestionando lo establecido. A finales del siglo XIX tres hechos
experimentales, que podían reproducirse en el laboratorio, pero que no podían ser
explicados por la física clásica:
- la radiación del cuerpo negro,
- el efecto fotoeléctrico y
- los espectros atómicos.

El estudio de estos tres fenómenos y la atrevida propuesta formulada para


explicarlos, la llamada teoría cuántica, dieron paso a la física moderna, abriendo una nueva
época en el estudio y comprensión de la estructura atómica de la materia, materializada en
la llegada de nuevos modelos atómicos, el modelo de Bar y el modelo actual.
Aunque el modelo de Rutherford explicaba con éxito las evidencias experimentales
observadas hasta el momento de su formulación, era, en sí mismo, inconsistente.
En aquella época ya era conocido que cuando una carga eléctrica se movía con un
movimiento acelerado, perdía energía en forma de radiación electromagnética. Por lo tanto,
un electrón girando en una órbita circular alrededor del núcleo atómico, esto es, sometido a
una aceleración centrípeta, debía perder energía en forma de radiación electromagnética.
De esa forma, la pérdida de energía conduciría a que la trayectoria del electrón fuera
cada vez más cercana al núcleo, hasta que el electrón terminara por precipitarse sobre él y
desapareciera, pero sabemos que el átomo es un sistema estable, por lo que era necesario
establecer otro modelo atómico que, además de ofrecer una explicación a los fenómenos
observados, no vulnerase las leyes físicas.

3.1 Radiación del cuerpo negro. Hipótesis de Planck. (1858-1947 Nobel 1918)
A finales del siglo XIX, Planck llevó a cabo un estudio experimental de la radiación
electromagnética que emitía un cuerpo negro.
Un cuerpo negro es un cuerpo que “idealmente” absorbe toda la radiación que le
llega, de modo que su interior se encuentra a una temperatura muy elevada. En la práctica
se simulaba un cuerpo negro con un cuerpo hueco, pintado de negro, en el que se practicaba
un pequeño orificio para asegurar que la energía que entrara fuera absorbida totalmente.

1
Tema 1
3) Orígenes de la teoría cuántica

Todos podemos observar que cuando un cuerpo sólido se va calentando, va


emitiendo luz de diferentes colores, de diferentes longitudes de onda, desde el infrarrojo en
cuerpos fríos, hasta el rojo de un hierro candente o el blanco del filamento de una lámpara
de incandescencia, dependiendo esa radiación y su color, de la temperatura del sólido.
Sin embargo, a pesar de que era algo “evidente”, tampoco los intentos por relacionar
la temperatura del cuerpo con la longitud de onda de la radiación emitida, habían alcanzado
el éxito esperado.

Cuando Planck estudió la radiación del cuerpo negro, descubrió que estaba formada
por radiaciones de diferentes longitudes de onda y, por tanto, con diferentes energías
asociadas. Dicho de otro modo, la energía NO era emitida de una forma continua, esto es, en
todo el espectro, sino de una forma discontinua, que NO podía ser explicada completamente
por la física clásica, que suponía que esa emisión era continua.

Para explicar el comportamiento del cuerpo negro en relación con los procesos de
emisión de energía, Planck propuso que la energía que emitía el cuerpo negro estaba
relacionada con la energía de los átomos que lo formaban, quienes se comportaban como
osciladores armónicos, oscilando cada uno de ellos con una frecuencia determinada, f. De
esta manera, la energía emitida o absorbida en un solo proceso de interacción entre el
átomo oscilador y la radiación, sería proporcional a esa frecuencia de oscilación e
independiente de la temperatura.

Recogiendo esa última afirmación, la hipótesis de Planck establece que para una
radiación de frecuencia f, la energía correspondiente es múltiplo de esa frecuencia
E=hf

siendo h la constante de Planck h = 6,626 10 -34 J s

2
Tema 1
3) Orígenes de la teoría cuántica

En consecuencia, y dependiendo del número de interacciones, la energía sólo puede


tomar valores que sean múltiplos de esa cantidad E = h f, que denominó quantum (cuanto
de energía), unos “paquetes” de energía que se trasmiten de forma discontinua.
¿Por qué decimos que la energía se transmite de forma discontinua?, Porque sólo
puede tomar valores proporcionales a h: E = h f; E = 2 h f; E = 3 h f; E = 4 h f; ... E = n h f,
un cuanto, dos cuantos, tres cuantos...

La energía está cuantizada, tomando sólo una serie de valores determinados, que
aunque proporcionales a f, han de ser múltiplos del cuanto de energía. Así, cuando emite
radiación de frecuencia f, la energía de esa radiación será múltiplo entero del cuanto de esa
frecuencia: hf, 2hf, 3fh, ...

La energía No es una magnitud continua sino que está formada por múltiplos enteros
de cantidades elementales: el cuanto de energía.

Estas afirmaciones, curiosamente, no se las creía ni el propio Planck, quien pasó


mucho tiempo tratando de encontrar su error. Le dieron el Premio Nobel y hoy día su
hipótesis está plenamente aceptada, conociéndose los pequeños paquetes de energía o
cuantos como fotones a los que se les reconoce una naturaleza corpuscular y la capacidad de
transportar una cantidad de energía de radiación.

3.2 Efecto fotoeléctrico


En 1888 Hertz descubrió que determinados metales eran capaces de emitir
electrones cuando se exponían a la luz. Esta emisión cumple determinadas condiciones:
La frecuencia de la luz incidente debe superar un determinado valor conocido como
frecuencia umbral, f0 y cuya cuantía depende del metal del que se trate. Si la frecuencia no
alcanza ese valor mínimo, no hay emisión de electrones.
La velocidad de los electrones emitidos sólo depende de la frecuencia de radiación
incidente, no de su intensidad, de esta depende el número de electrones emitidos. (ojo a la
relación velocidad-energía).
No existe tiempo de retraso entre la incidencia de la radiación y la emisión de
electrones.

3
Tema 1
3) Orígenes de la teoría cuántica

Cuando el cátodo se ilumina con luz de una energía mayor que la correspondiente a
la frecuencia umbral, se arrancan de la placa metálica electrones que llegan al ánodo e
inmediatamente el miliamperímetro indica el paso de corriente, siendo la intensidad de la
corriente producida, proporcional a la intensidad de la radiación incidente, pero si la
frecuencia de la radiación incidente no alcanza el mínimo exigido, la frecuencia umbral, da
igual la intensidad de la radiación incidente: no hay corriente.

Como la física clásica no explicaba este fenómeno, sobre todo, la existencia de un


umbral mínimo, Einstein trató de justificar este comportamiento diciendo que la luz está
constituida por una serie de partículas elementales, llamadas fotones, cuya energía viene
dada por la ecuación de Planck, E = h f, siendo f la frecuencia de la luz incidente.

De esta manera, los electrones serán arrancados de la placa cuando se les suministre
suficiente energía como para liberarse de su interacción con el resto del átomo. Esta energía
mínima necesaria, o trabajo de extracción, es la que relacionamos con la frecuencia umbral.

Así tenemos tres posibilidades

Si la energía de la radiación incidente E = h f, es menor que la energía asociada a la


frecuencia umbral, E0 = h f0, no hay emisión de electrones. Si ambas energías se igualan, E =
E0 = h f0, se emiten electrones, aunque no haya corriente, sólo existe esta corriente, cuando
la energía de la radicación incidente E es mayor que E0 = h f0, ya que en ese caso, la energía
incidente E permite aportar el trabajo de extracción y dotar al electrón de una cierta energía
cinética, de movimiento, siendo E = E0 + Ec ;
siendo E = h f E0 = h f0 Ec = ½ m v2
4
Tema 1
3) Orígenes de la teoría cuántica

De esta afirmación se deduce que, como se observó, es necesario que la radiación


incidente alcance un valor mínimo, que la mayor intensidad de radiación incidente implicará
mayor número de electrones movilizados, pero no una mayor velocidad de estos y que el
efecto es inmediato.

5
Tema 1
3) Orígenes de la teoría cuántica

3.3 Espectros atómicos


Los cuerpos calientes emiten energía en forma de radiacióni y lo hacen de forma
continua, es decir, la radiación emitida está formada por todas las frecuencias, desde las
muy pequeñas hasta las muy grandes.
Por el contrario, cuando estudiamos el espectro de emisión de los gases,
descubrimos que no es continuo.

Todos hemos visto la descomposición de la luz blanca a través de un prisma,


comprobando que se forma una banda continua de colores que corresponde a todas las
longitudes de onda, desde el rojo hasta el violeta, es lo que se denomina un espectro
continuo.

Sin embargo, cuando sometemos a un gas a baja presión y temperatura a una


descarga eléctrica y conducimos la luz emitida a un prisma, observamos que la luz emitida se
descompone en una serie de líneas discontinuas sobre fondo negro. Evidentemente, cada
una de estas líneas se corresponde con una longitud de onda diferente,

i
Una radiación electromagnética es un modo de trasmisión de energía, la cual se propaga en forma de
onda. Las ondas electromagnéticas se caracterizan por:
Amplitud (A): Desplazamiento máximo de un punto respecto de la posición de equilibrio.
Longitud de onda (ƛ): Distancia entre dos puntos análogos consecutivos (normalmente dos crestas). Su
unidad en el SI es el metro.
Frecuencia (f ó γ): Número de crestas que pasan por un punto dado por unidad de tiempo o número
de vibraciones por unidad de tiempo. Su unidad en el SI es el hercio (Hz) o inverso del segundo.
Período (T): Tiempo invertido en efectuar una vibración completa.
Velocidad (v): Velocidad con la que se propaga la onda (v= ƛ / T).

El período y la frecuencia son inversos y se relacionan mediante la expresión:


T=1/γ γ=1/T

La frecuencia (γ ó f), la longitud de onda (ƛ) y la velocidad (v) se relacionan mediante la expresión:
V=ƛγ

Siendo la velocidad de propagación de las ondas electromagnéticas en el vacio igual a la velocidad de


la luz (c = 3 108 m/s), en el vacío se cumple que:
c=ƛ γ ƛ=c/γ γ=c/ƛ

6
Tema 1
3) Orígenes de la teoría cuántica

7
Tema 1
5) Mecánica cuántica

5) Mecánica cuántica
Una década después del trabajo de Bohr (que sólo explicaba los átomos de
hidrógeno y que, en realidad no suponían un verdadero modelo teórico, sino un conjunto de
modificaciones empíricas destinadas a reproducir matemáticamente los resultados
experimentales, sin un verdadero fundamento teórico), dos ideas claves de la mecánica
cuántica surgida a partir de la hipótesis de Planck, propiciaron la creación de un nuevo
modelo atómico, el llamado modelo mecano-cuántico, que supera esas deficiencias,
explicando el átomo, todos los átomos, sus partículas constituyentes, la formación de los
enlaces químicos e incluso, prediciendo una serie de fenómenos físico-químicos que
posteriormente se comprobaron experimentalmente. Estas dos ideas clave de la mecánica
cuántica bases del nuevo modelo fueron:
- la dualidad onda corpúsculo y
- el principio de incertidumbre.

5.1 Dualidad onda-corpúsculo


Einstein, con su explicación del efecto fotoeléctrico, puso de manifiesto que la luz,
considerada tradicionalmente como una onda, una radiación con un comportamiento
ondulatorio (de lo contrario es muy difícil explicar ciertos fenómenos como la reflexión, la
refracción o la difracción), en determinadas ocasiones podía comportarse como un conjunto
de partículas, los llamados fotones, con un comportamiento corpuscular. Pero, ¿podía darse
el caso contrario, que unas partículas como los electrones se comportaran como ondas?

La respuesta, afirmativa, fue expuesta por Louis De Broglie, quien sugirió que los
electrones se podían comportar como ondas y dedujo, unificando las ecuaciones de Einstein
de la energía con la de Planck, relacionando la masa de la partícula con la longitud de onda,
que la longitud de onda asociada a ese movimiento ondulatorio vendría dada por la
ecuación:
Λ = __h___
m·v

donde: λ es la longitud de onda de la radiación (m)


h es la constante de Planck (J·s)
m es la masa de la partícula (kg)
v es la velocidad de la partícula (m/s)
(ver ejercicios)

Este hecho fue comprobado experimentalmente por diferentes autores, quienes


pudieron observar con electrones fenómenos ópticos como la reflexión y la difracción,
prueba inequívoca de su naturaleza ondulatoria.

1
Tema 1
5) Mecánica cuántica

Esta dualidad onda-corpúsculo se da en toda la materia, aunque experimentalmente


está comprobado que cuanto menor es la masa de la partícula que se mueve, mayor es su
comportamiento ondulatorio y viceversa, llegando el caso a que, para los objetos con una
masa considerable, la longitud de onda asociada es tan pequeña que no puede detectarse y
sus propiedades van a describirse mejor considerándolas como partículas materiales que
como ondas. En cambio, en el caso de partículas muy pequeñas, como por ejemplo, los
electrones, su comportamiento se describe mejor considerando su carácter ondulatorio.

Así, si asumimos que cualquier partícula de masa m que se desplace a una velocidad v
debe considerarse asociada a una onda cuya longitud de onda, ƛ, venga dada por la
expresión:
ƛ=h/mv

el electrón, en su movimiento alrededor del núcleo atómico, estará asociado a una


onda, cuya longitud de onda cumplirá esa ecuación, pero, además, esa longitud de onda
tendrá que ser múltiplo de la longitud de la órbita para que esta pueda ser estacionaria
puesto que una órbita sólo será posible si la onda asociada es estacionaria y para eso debe
cumplirse la proporcionalidad entre longitud de onda y longitud de órbita

a) La longitud de la circunferencia de la órbita es igual a un número entero de veces la


longitud de onda asociada al electrón: Es una órbita permitida
b) La longitud de la circunferencia de la órbita NO es igual a un número entero de veces la
longitud de onda asociada al electrón, de tal manera que la onda del electrón no se
“cierra”. Esta es una órbita no permitida.

Así, las únicas órbitas permitidas son las que dan lugar a una onda estacionaria, esto
obliga a que:
2 πr=nƛ
de donde, si
ƛ=h/mv
entonces
m v r = n h /2 π
llegando a la misma ecuación del segundo postulado de Bohr.
2
Tema 1
5) Mecánica cuántica

De esta manera puede explicarse la exigencia del segundo postulado de Bohr de que
“Sólo son posibles las órbitas en las que electrón tiene un momento angular que es múltiplo
entero de h/2 π”.

5.2 Principio de indeterminación o de incertidumbre de Heisenberg


La nueva concepción del electrón como partícula y onda abrió el debate sobre una
cuestión hasta entonces indiscutible: la posición del electrón.
De la misma forma que carece de sentido hablar de la posición de una onda, ya
que se trata de una perturbación que se desplaza en el espacio, es igualmente absurdo
referirse a la posición del electrón, ya que está asociado a una onda.
Así, Heissenberg estableció su Principio de indeterminación o de incertidumbre
que establece la imposibilidad de determinar simultáneamente y con precisión
arbitraria, ciertos pares de variables físicas, como son la posición y el momento lineal, o
la energía y el tiempo.
“Es conceptualmente imposible determinar simultáneamente el momento lineal, p
= m v, y la posición, x, de una partícula en movimiento.”

Matemáticamente se puede enunciar como:

Δx Δ p ≥ h / 4 π
Interpretación del principio de incertidumbre: Este principio establece que es
imposible conocer simultáneamente la posición y la velocidad de un electrón, y por tanto
es imposible determinar su trayectoria. Cuanto mayor sea la exactitud con que se
conozca la posición, mayor será el error en la velocidad, y viceversa. Solamente es posible
determinar la probabilidad de que el electrón se encuentre en una región determinada.
Podemos entenderlo pensando en cómo determinaríamos la posición de un
electrón. Para observarlo habría que utilizar una luz de una longitud de onda menor que
el tamaño del electrón. Al proyectar la luz, algún fotón chocaría con el electrón y al ser la
energía de los fotones similar a la de los electrones, alteraría considerablemente su
velocidad. Así, al intentar determinar su posición habríamos modificado su velocidad.

Al no poder conocer simultáneamente posición y velocidad, no puedo determinar


la trayectoria del electrón dentro del átomo, lo que hace inviable el modelo atómico de
Bohr – Sommerfeld.
Necesitamos pues un nuevo concepto para hablar de la localización del electrón,
por lo que surge la idea de orbital, definido como la región de espacio alrededor del
núcleo atómico en la que máxima la probabilidad de encontrar un electrón con una
energía determinada.

3
Tema 1
5) Mecánica cuántica

5.3 La mecánica ondulatoria


La mecánica cuántica u ondulatoria fue desarrollada por Schrödinger, Heisenberg y
Dirac y se basa en la ecuación de ondas que Schrödinger propuso para describir el
comportamiento de pequeñas partículas como el electrón:

La ecuación tiene en cuenta la naturaleza dual del electrón: masa y función de onda
ψ, e incorpora las condiciones que debe cumplir cada electrón para que el átomo sea un
sistema estable y al resolverla, las incógnitas, la función de onda ψ, y la energía, dependen
de una serie de números enteros, los llamados números cuánticos, es decir, ambas están
cuantizadas y sólo están permitidos una serie de valores concretos: sólo pueden existir
determinados valores energéticos y la variación de uno a otro conlleva la emisión o
absorción de energía con la consiguiente emisión o absorción de un fotón.

Además, la solución* aparece como una función de ondas, ψ, que no suministra ni la


posición, ni la velocidad exacta del electrón, siguiendo el principio de incertidumbre de
Heisenberg y aunque la función de onda Ψ carece de significado físico, Ψ2 nos indica la
probabilidad de encontrar el electrón en una región determinada del espacio alrededor del
núcleo con un estado energético determinado, esto es, la información necesaria para
conocer el orbital que ocupa un electrón en el átomo.

Para el electrón del átomo de hidrógeno, la solución de la ecuación de Shrödinger


viene en función de tres números enteros, tres números cuánticos, n, l y ml. El número ms
no se deduce de la ecuación, fue introducido para explicar ciertas características de los
espectros atómicos.

Cada grupo de tres valores permitidos de n, l y m l definen un orbital, región del


espacio donde existe la máxima probabilidad de encontrar el electrón.

(*) La solución de la ecuación de Schrödinger sólo puede obtenerse en los casos más
sencillos, el átomo de hidrógeno y en cationes dotados de un sólo electrón, por ejemplo, Li 2+,
en el resto de los casos (átomos polielectrónicos), se recurre a aproximaciones, como
suponer que el átomo cuenta sólo con un electrón y un núcleo con una carga nuclear
llamada carga nuclear efectiva, resultado de considerar el debilitamiento que sobre la
atracción entre núcleo y electrón supone la existencia de más electrones, el llamado,
apantallamiento.

4
Tema 1
5) Mecánica cuántica

A recordar:
El modelo mecano-cuántico del átomo es, en la actualidad, la mejor forma de
concebir el átomo. Se basa en tres principios:
- El átomo y las moléculas sólo pueden existir en determinados estados
energéticos. La variación del estado energético se produce con emisión o absorción de
energía.
- El cambio de energía de un átomo o molécula, ΔE, se lleva a cabo por emisión o
absorción de un fotón de energía igual al cambio energético experimentado, y su
frecuencia γ, y la longitud de onda, ƛ, corresponden a:
ΔE = h γ = h c / ƛ
- Los estados energéticos permitidos para el átomo y la molécula se distinguen
entre sí mediante cuatro valores determinados llamados números cuánticos.

5.4 Orbital y números cuánticos


No todas las soluciones derivadas de la aplicación de la ecuación de Schrödinger
conducen a resultados reales; para ello es preciso condicionarla con unos parámetros
restrictivos (condiciones de contorno) a fin de que el problema tenga significado físico.
Estos parámetros reciben el nombre de números cuánticos.

Los números cuánticos solo pueden tomar ciertos valores para que la solución de
la ecuación de Schrödinger sea aceptable. Así, sólo son permitidos los siguientes:

Posibles
Número Descripción Significado
valores
n Número cuántico principal Tamaño y energía del orbital 1, 2, 3, 4, 5, ...
l Número cuántico secundario o azimutal Energía y forma del orbital 0, …, n-1
ml Número cuántico magnético Orientación del orbital −l , ... ,0, ... ,+l
ms Número cuántico de spin Sentido d giro del electrón +1/2 -1/2

Los 4 primeros valores del número cuántico secundario, l se representan por letras:
l = 0 → orbital s, de simetría esférica
l = 1 → orbital p, lobular, son tres
l = 2 → orbital d, lobular, son cinco
l = 3 → orbital f, lobular de mayor multiplicidad, son siete

Según la mecánica cuántica, un orbital atómico es la zona del espacio donde existe
una gran probabilidad de encontrar el electrón. Este valor de probabilidad se cifra
arbitrariamente en, al menos, el 90%.

5
Tema 1
5) Mecánica cuántica

Este concepto probabilístico surge del desarrollo matemático de la ecuación de


Schrödinger. La función de onda (ψ) no tiene significado físico real, pero su cuadrado
(ψ2) sí, siendo una medida directa de la probabilidad de encontrar el electrón en una
determinada zona del espacio. Si en dicho punto alcanza un valor por encima del 90%
podemos encontrar con bastante seguridad el electrón, por lo que podemos representa
dicha función mediante un contorno volumétrico al que llamamos orbital atómico.

La representación de esos orbitales es la siguiente:

Las reglas de relación entre números cuánticos nos indican los grupos de valores
permitidos. Estos grupos, junto con el tipo de orbital, el número de cada orbital y el número
máximo de electrones que puede alojar cada uno vienen reflejados en la tabla de la pág. 24.

6
Tema 1
5) Mecánica cuántica

Ejercicios

Sobre dualidad – onda corpúsculo

Sobre orbitales y números cuánticos


Ver ejemplos resueltos 15 y 16

7
Tema 1
5) Mecánica cuántica

ACTIVIDADES (página 24)

15. Para un átomo en su estado fundamental, razona sobre la veracidad o falsedad


de las siguientes afirmaciones:
a) El número máximo de electrones con número cuántico n = 3 es 6.
b) En el subnivel 2p solo puede haber 2 electrones.
c) Si en los orbitales 3d se sitúan 6 electrones, no habrá ninguno desapareado.

a) Falso. El máximo número de electrones de cualquier nivel n, es 2n2. Por tanto, para
n = 3, el número de electrones es 2 · 32 = 18 (2 en el subnivel 3s, 6 en el subnivel 3p y 10 en
el subnivel 3d).
b) Falso. El subnivel 2p está compuesto por tres orbitales p (2px, 2py y 2pz), en cada
uno de los cuales puede haber 2 electrones. Entonces, en total en el subnivel 2p puede
haber 6 electrones.
c) Falso. Los orbitales d tienen los siguientes números cuánticos magnéticos posibles
ml = [-2, -1, 0, 1, 2]. Existen, por tanto, cinco posibles orbitales d en los que podrían entrar 5
electrones desapareados. El sexto electrón que entra ha de aparearse en cualquiera de los
cinco orbitales. Quedan, por tanto, 4 electrones desapareados.

16. Dados los siguientes grupos de valores de números cuánticos, indica cuáles son
posibles y cuáles no.
a) (3, 2, -2, +1/2) b) (4, 0, 1, +1/2) c) (2, 2, -1, -1/2) d) (2, -1, 0, 0)

a) Sí es posible.
b) No es posible. Al ser l = 0, el único valor posible para ml es 0. No puede ser ml = 1.
c) No es posible. Al ser n = 2, los valores posibles para l son 0 y 1. No puede ser l = 2.
d) No es posible. El número cuántico secundario l ha de tener un valor positivo.
Además, el número cuántico de espín para un electrón es un número fraccionario, ms = [-
1/2, +1/2], no puede ser cero.

17. Escribe el valor de los números cuánticos n, l y ml para los orbitales del subnivel
5d. Indica, de forma razonada, el número máximo de electrones que pueden ocupar el
citado subnivel.

Para un orbital 5d:


- El número cuántico principal, n = 5.
- Como se trata de un orbital tipo d, el número cuántico secundario, l = 2.
- Los valores posibles del número cuántico magnético son, ml = [-2, -1, 0, 1, 2].
Hay 5 orbitales posibles en el subnivel 5d.
En cada uno de los orbitales pueden alojarse dos electrones. Por eso, el número
máximo de electrones que pueden ocupar el subnivel es 10.

8
Tema 1
6) Configuración electrónica

6) Configuración electrónica
Conocemos como configuración electrónica de un átomo la distribución de los
electrones entre los diferentes orbitales. Cuando esta es la de menor energía, se trata de la
configuración electrónica fundamental. La importancia de la configuración electrónica radica
en que determina muchas de las propiedades físicas y químicas de los elementos.

6.1 Energía relativa de los orbitales


La energía de los orbitales depende, principalmente, del valor del número cuántico
principal, n, pero también del valor del número cuántico secundario o azimutal, l. Esto quiere
decir que dentro de un mismo nivel, n, los diferentes orbitales s, p, etc., poseen niveles
energéticos diferentes, es decir, aparecen subniveles de energía. Sin embargo, dentro de cada
uno de estos subniveles o tipo de orbital, los diferentes orbitales tienen el mismo nivel de
energía. A este tipo de orbitales se les denomina orbitales degenerados y son, por ejemplo,
los orbitales px, py y pz.

A mayor n, mayor tamaño, mayor nivel de energía. Dentro de cada nivel n, existen
subniveles, siendo mayor la energía según sea mayor l, por la forma del orbital. Dentro de cada
subnivel l, la energía no varía por la orientación del orbital, los orbitales que sólo se diferencian
por su número cuántico magnética, ml, se llaman orbitales degenerados y tienen el mismo nivel
de energía.

Nivel energético de los orbitales atómicos (establecido experimentalmente mediante


estudios espectroscópicos y magnéticos)

6.2 Proceso de Aufbau, regla de la construcción o principio de mínima energía


Se conoce por este nombre al proceso de llenado de electrones de los distintos
orbitales de un átomo. El orden de llenado es el de energía creciente ocupándose primero
los orbitales de menor nivel energético.

1
Tema 1
6) Configuración electrónica

El proceso de llenado se basa en dos principios:


Principio de exclusión de Pauli y
Principio de máxima multiplicidad de Hund.

Principio de exclusión de Pauli: Dos electrones de un mismo átomo NO pueden tener


los cuatro números cuánticos iguales.
Esto determina que en cualquier subnivel y con un mismo número cuántico
magnético, ml, sólo puede haber dos electrones, que se diferencian en el valor de su
número cuántico magnético, ms. De acuerdo con este principio, el número máximo de
electrones que puede ocupar un nivel n, será: 2 n2.

Principio o regla de máxima multiplicidad de Hund: los electrones que entran en


orbitales degenerados, con igual energía (p, d y f), lo hacen ocupando el mayor número
posible de ellos y con espines paralelos, de tal forma que los electrones se coloquen lo más
desapareados posible.
Como los electrones se repelen entre sí, la configuración de mínima energía es
aquella que los mantiene lo más alejados posible entre ellos y por eso se distribuyen
separados antes de ocupar dos electrones el mismo orbital para compartirlo.
Esto determina que los electrones van ocupando los orbitales degenerados (con un
mismo nivel de energía) sin completar ninguno mientras sea posible.

Paramagnetismo y diamagnetismo: las sustancias paramagnéticas son atraídas por


un imán, mientras que las diamagnéticas no. Esta propiedad responde a la regla de máxima
multiplicidad de Hund, ya que si los electrones se encuentran desapareados, presentan el
mismo espín y, por tanto un campo magnético que puede interactuar con el del imán,
mientras que cuando los electrones se encuentran apareados, presentan espines opuestos
que anulan el campo magnético neto, por lo que no hay interacción con el imán.

6.2.b Notación de las estructuras electrónicas


La forma abreviada de notación será
n xy
donde “n” es el número cuántico principal,
“x” es la designación del tipo de orbital, s, p, d y f
e “y” es el número de electrones que hay en el subnivel

De esta forma, para realizar “el proceso de llenado”, debemos comparar la energía
de los orbitales, pero no es necesario desarrollar el orden de energías desde el orbital 1s,
sino que puede aplicarse la conocida como regla n+l:

2
Tema 1
6) Configuración electrónica

- dados dos orbitales, será de menor energía aquel cuya suma de los valores de los
números cuánticos principal, n y secundario, azimutal u orbital, l, sea menor
- en caso de igual valor de n+l, será de menos energía el de menor valor de su
número cuántico principal.

Para ayudarnos podemos utilizar también el llamado diagrama de Möeller, una


regla nemotécnica que nos permite visualizar los diferentes niveles y subniveles
energéticos de los orbitales atómicos.

Para evitarnos escribir toda la configuración electrónica, habitualmente suele


recurrirse a una notación abreviada, donde se emplea el símbolo del gas noble anterior
entre corchetes y, a continuación, los orbitales que faltan hasta completar la configuración.
Por ejemplo, para el calcio, Z = 20, la configuración electrónica es:
2 2 6 2 6 2 2
20Ca: 1s 2s 2p 3s 3p 4s → 20Ca: [Ar]4s

6.2.c Configuración electrónica de un ión


Para obtener la configuración electrónica de un anión, se adicionan a los orbitales
menos energéticos vacíos tantos electrones como cargas negativas tenga el ión, así, por
ejemplo:
Cl: [Ne] 3s23p5 + 1 e- → Cl-: [Ne] 3s23p6

Si se tratara de un ión positivo (catión), se retirarán electrones, comenzando por los


de los orbitales más energéticos, por ejemplo:
Ca: [Ar] 4s2 - 2 e- → Cl2+: [Ar]

Ojo: La energía de los orbitales puede variar al formarse un ión, por lo que los
electrones pueden perderse de orbitales más energéticos, aunque no hayan sido los
últimos en ocuparse.
(Ver ejemplos pág. 26).
3
Tema 1
6) Configuración electrónica

6.3 Estado excitado


Se conoce como estado excitado a cualquier ordenación posible de los electrones que
NO siga el llenado de electrones con secuencia energética de mínima energía. Estos estados
excitados corresponden a configuraciones electrónicas en las que se han producido
transiciones de electrones, aunque estas transiciones suelen producirse, habitualmente, entre
orbitales de un mismo nivel. (Ver ejemplo pág. 27).

6.4 Anomalías en la configuración electrónica


Las principales anomalías se deben a que los orbitales degenerados semillenos o
llenos tienen mayor estabilidad. Por ejemplo, Cromo, Cobre, Molibdeno y Plata, que son
más estables con los orbitales d llenos (d10) o semillenos (d5) o Gadolinio, Lutecio, Platino,
Oro o Curio, más estables con los orbitales f llenos (f14) o semillenos (f7). (Ver ejemplos pág.
27).

Ejercicios

4
Tema 2 Sistema periódico

Tema 2: Sistema periódico

1) Historia del sistema periódico


1.1 La tabla periódica de Mendeleiev. La ley periódica

2) Sistema periódico actual


2.1 El número atómico como base de la ley periódica
2.2 Descripción de la tabla periódica moderna
2.3 Las configuraciones electrónicas de los elementos a lo largo de la tabla periódica

3) Apantallamiento y carga nuclear efectiva


3.1 Apantallamiento
3.2 Carga nuclear efectiva
3.3 Variación de la carga nuclear efectiva a lo largo de la tabla periódica

4) Propiedades periódicas
4.1 Radio atómico
4.2 Radio iónico
4.3 Energía de ionización
4.4 Afinidad electrónica
4.5 Electronegatividad

5) Las propiedades fisicoquímicas y la posición en la tabla periódica

Ejercicios

Problemas de EvAU

1
Tema 2 Sistema periódico

1) Historia del sistema periódico (pág. 41)


Aunque en un principio no parecía necesaria una ordenación de los elementos químicos, en
el siglo XIX, cuando ya se conocían un gran número de elementos, sus propiedades y también sus
masas atómicas relativas, se vio la necesidad de una clasificación que permitiera agrupar los
elementos que presentaran similitudes en sus propiedades, para poder comparar las propiedades de
los nuevos elementos con las de los ya conocidos y predecir propiedades todavía no caracterizadas o
la existencia de elementos aún por descubrir, produciéndose diversos intentos de agrupar y clasificar
los elementos químicos por las similitudes en sus propiedades físicas y químicas, todos ellos usando
la masa atómica como criterio de ordenación.

El primer intentó de clasificación fue realizado en 1829 por Johan Döbereiner, las llamadas
Tríadas de Döbereiner, que se basaban en la existencia de grupos de tres elementos, tríadas, en las
que se observaban ciertas analogías en sus propiedades físicas y químicas, comprobando que si los
colocaba en orden creciente de masa atómica, la masa del elemento intermedio era, prácticamente,
la media aritmética de la masa de los otros dos. Así, se encontraron las siguientes tríadas:
S, Se y Te;
Ca, Sr y Ba;
Cl, Br y I;
Li, Na y K;
La idea fue desechada porque sólo se podía aplicar a unos pocos de los elementos conocidos.

El siguiente intento de clasificación fue el de Chancourtois, en 1862, quien propuso un anillo


o tornillo telúrico, en el que colocaba los diferentes elementos en orden creciente de sus masas
atómicas sobre una espiral descendente, encontrando que los elementos con propiedades
semejantes se situaban sobre las mismas generatrices del cilindro.

En 1864 John Newlands elaboró su propia clasificación periódica, al observar que si ordenaba
los elementos en orden creciente de sus masas atómicas en líneas horizontales de siete, las
propiedades de los elementos de las líneas verticales que coincidían eran semejantes, ya que el
octavo elemento a partir de uno dado era una especie de repetición del primero, como en las escalas
musicales, reflejando lo que llamó la “ley de las octavas”. Estas octavas vienen a coincidir con los
períodos segundo y tercero de la tabla actual y englobaban también a las tríadas de Döbereiner, pero
no tuvieron mucha aceptación, porque no funcionaban con elementos con unas masas atómicas
mayores.

2
Tema 2 Sistema periódico

1.1 La tabla periódica de Mendeleiev. La ley periódica (pág. 42)


En 1869 los científicos Lothar Meyer y Dimitri Mendeleiev, trabajando por separado, llegaron
a las mismas conclusiones, proponiendo un sistema de clasificación de los elementos químicos
materializado en una tabla basada en la llamada ley periódica:
“Cuando los elementos se organizan en orden creciente de sus masas atómicas, algunas
propiedades se repiten periódicamente”.

La diferencia entre ambos trabajos estaba en que la tabla periódica de Meyer se organizaba
realmente en orden creciente de volúmenes atómicos, mientras que la de Mendeleiev, se organizaba
en orden creciente de masas atómicas, pero los resultados fueron los mismos.

La base del éxito de los trabajos de Mendeleiev estuvo en su capacidad de anticipación,


dejando espacios en blanco para elementos químicos aún por descubrir (escandio, galio, al que llamó
eka-alumino, germanio, al que llamó eka-sicilio y tecnecio), de los que fue capaz de predecir
numerosas propiedades, incluyendo sus masas atómicas y porque también permitió corregir algunos
valores de la masa atómica de elementos ya conocidos como el indio o el uranio.

Sin embargo, la tabla periódica de Mendeleiev presentaba tres problemas:


- No previó los gases nobles (incluso se negó a aceptar la existencia de unos elementos que
no fueran capaces de reaccionar con otros y de formar compuestos), aunque finalmente no le quedó
más remedio que aceptarlos, puesto que la inclusión del helio y el argón, los primeros descubiertos,
entre los halógenos y los alcalinos ayudó a predecir la existencia de otros como neón, kriptón, xenón
o radón, lo que reforzaba su propuesta.
- No ofrecía un sitio adecuado ni al hidrógeno, ni a los lantanoides y actinoides.
- Había casos en los que la ordenación por masa atómica provocaba desajustes en el orden
de las propiedades, Te - I, Ar - K, Co - Ni, que Mendeleiev atribuyó a errores en la determinación de
las masas atómicas, optando por dar prioridad al orden por propiedades, lo que llevó a acertar en el
orden correcto, aunque lo hizo por un razonamiento errado.

3
Tema 2 Sistema periódico

2) Sistema periódico actual (pág. 43)


Como se ha explicado en el apartado anterior, la tabla periódica de Mendeleiev tenía algunas
dificultades para explicar la ubicación y como se reordenan algunos elementos, en especial la
colocación de lantanoides y actinoides.

2.1 El número atómico como base de la ley periódica


Todos esos problemas se solventaron a principios del siglo XX, gracias a los estudios de
Moseley sobre los espectros de rayos X de los elementos.

Los rayos X son ondas electromagnéticas de alta frecuencia y energía cuya emisión, según el
modelo de Bohr, se produce a consecuencia de saltos electrónicos hasta órbitas cercanas al núcleo.
Moseley razonó que como la energía de las órbitas dependía de la carga del núcleo, las frecuencias
de estos rayos X también debían depender de esa carga, encontrando una correlación entre las
frecuencias de las líneas espectrales y los números equivalentes a las cargas de los núcleos, lo que
conocemos como número atómico.

Con este descubrimiento se vio que las propiedades de los elementos químicos no dependían
realmente de su masa atómica, sino de su número atómico, lo que permitía explicar las alteraciones
del orden de determinadas parejas de elementos propuestas por Mendeleiev (Te - I, Ar - K, Co – Ni) y
la posición de lantanoides y actinoides y de los gases nobles.

De esta forma, podemos reformular la llamada ley periódica, de la siguiente forma:


“Cuando los elementos se organizan en orden creciente de sus números atómicos, algunas
propiedades se repiten periódicamente”.

2.2 Descripción de la tabla periódica moderna


La tabla periódica actual, conocida como tabla periódica larga o de Werner y Paneth, es una
representación de todos los elementos conocidos, ordenados por el valor creciente de izquierda a
derecha y de arriba a abajo, de su número atómico Z, que representa el número de protones de su
núcleo, cifra que coincide con su número de electrones en estado neutro.

En esta tabla, los 118 elementos conocidos hasta ahora se colocan en filas, llamadas
periodos, que van del 1 al 7, de acuerdo con el valor más alto del número cuántico principal (n)
donde hay electrones, y en columnas, llamadas grupos, que van del 1 al 18, en función del número
de electrones de valencia o número de electrones en su última capa.

Períodos
En el primer período sólo encontramos dos elementos, hidrógeno y helio. El segundo y tercer
períodos están formados por ocho elementos cada uno, mientras que el cuarto y quinto cuentan con
18 elementos. El sexto y séptimo períodos están formados por 32 elementos, ya que en la tercera
casilla se agrupan 15 elementos, los lantanoides en el sexto período (nombre recomendado por la
IUPAC frente a la antigua denominación de lantánidos) y actinoides en el séptimo períodos (antes
conocidos como actínidos), algunos de ellos recientemente sintetizados y aún a la espera de nombre.
4
Tema 2 Sistema periódico

Grupos (pág. 44)


La importancia de los mismos radica en el hecho de que engloban a elementos con
propiedades químicas semejantes.

Aunque se aconseja usar los números 1 al 18 para identificarlos, están fuertemente


asociados a los nombres clásicos de familias:
1: Alcalinos, 2: Alcalinotérreos, 3 al 12: Metales de transición, 13: Térreos, 14: Carbonoideos,
15: Nitrogeneideos, 16: Anfígenos, 17: Halógenos y 18: Gases Nobles.

El hidrógeno, aunque aparezca en el primer grupo, no es un metal alcalino, de hecho, por


sus especiales propiedades, muchas veces se representa fuera de la tabla, por encima de los
elementos de transición.
Los dos primeros grupos son los metales, buenos conductores de calor y electricidad,
dúctiles y maleables, tienen puntos de fusión moderados o altos y forman iones positivos.
Los grupos del 3 al 12 son los llamados elementos de transición o metales de transición. Es
importante destacar que en el grupo 3 de los períodos 6 y 7 se agrupan 15 elementos, los llamados
elementos de transición interna, lantanoides en el sexto período y actinoides en el séptimo, algunos
de ellos recientemente sintetizados y aún a la espera de nombre.
Metales y no metales suelen separarse mediante una diagonal escalonada, los llamados
semimetales (metaloides en la imagen anterior) con un aspecto metálico, pero propiedades
metálicas y no metálicas.
Los no metales presentan unas propiedades opuestas a las de los metales, no conducen ni
el calor ni la electricidad, son frágiles dúctiles y maleables, muchos son gases a temperatura
ambiente y forman iones negativos.
El grupo 18 está formado por los llamados gases nobles, un grupo de elementos muy
singular por su especial comportamiento químico, incapaces de reaccionar y de formar compuestos
con otros elementos.

5
Tema 2 Sistema periódico

2.3 Las configuraciones electrónicas de los elementos a lo largo de la tabla periódica (pág. 45)
En la tabla periódica original la posición de los elementos se decidía en función de las
propiedades químicas de los elementos, pero a día de hoy sabemos que esas propiedades dependen
de su configuración electrónica, en especial de la del nivel más externo, el llamado nivel de valencia,
por lo que realmente es esta configuración la que decide la ordenación, como podemos comprobar
con esta tabla donde se desglosan los diferentes bloques por configuración electrónica:

En la tabla actual los elementos se han ordenado en función de su número atómico, de forma
que de una casilla de la tabla a la siguiente el número atómico se incrementa en una unidad, lo que
implica que el núcleo del elemento tiene un protón más y también hay un electrón más en la corteza,
el llamado electrón diferenciador, cuya colocación en los diferentes orbitales o subniveles de energía
se produce siguiendo las reglas de Aufbau. Por ello, conociendo la posición de un elemento en la
tabla periódica, podemos conocer su configuración electrónica y viceversa.

Notar que, en el mismo grupo, los elementos tienen la misma configuración electrónica en su
nivel de valencia, por ejemplo, todos los gases nobles terminan en p6; aunque también hay
colocaciones por convenio como el helio, He, que se pone en el grupo 18 de los gases nobles por
tener su capa completa, aunque debiera estar en el bloque s, o el hidrógeno, H, que se pone a veces
aislado, ya que tiene propiedades intermedias entre el grupo 1 y el grupo 17.
También es variable la colocación de los primeros elementos del bloque f, que a veces son,
como en la imagen, cerio, Ce y torio, Th, colocando al lantano, La y al actino, Ac, en el bloque d; al
contrario de como se hace en el libro, aunque la colocación correcta sería con el lantano, La y el
actinio, Ac, como primeros elementos bloque f y el lutecio, Lu y el laurencio, Lr, en el bloque d (los
lantanoides y actinoides del bloque f se ponen en la parte inferior simplemente para dar un formato
más compacto a la tabla: si se intercalara el bloque f entre el s y el d como ocurre con el d entre el s y
el p, la tabla sería muy ancha.

6
Tema 2 Sistema periódico

Atención, no debemos confundir el periodo con el nivel de llenado. Por ejemplo, el hierro, Fe,
(Z = 26), está en el cuarto período, por eso sabemos que posee cuatro niveles electrónicos (su
configuración es 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 3d6 4s2), pero aunque los electrones del último nivel son los dos
del s (4s2), está llenando el orbital d del penúltimo nivel, 3d. (y en los lantanoides y actinoides, se está
llenado el antepenúltimo nivel, 4f o 5f).

Recuerda que, para no tener que escribir toda la configuración electrónica, habitualmente se
recurre a una notación abreviada, donde se emplea el símbolo del gas noble anterior entre corchetes
seguido de los electrones del nivel de valencia. A esta estructura interna que se corresponde con la
configuración electrónica del gas noble anterior se la conoce como kernel.

Las configuraciones electrónicas reales tienen excepciones (subcapas semillenas). En EvAU


exigen conocer hasta el 4º periodo. Cr no es 4s2 3d4, sino 4s1 3d5 y Cu no es 4s2 3d9, sino 4s1 3d10.

Ojo: ¿Qué debes memorizar de la tabla periódica? Tienes que poder identificar los elementos
(símbolo, nombre, “coordenadas” en la tabla: periodo y grupo) a partir de Z y viceversa, hasta el
tercer periodo.

Ver los ejemplos resueltos nº 2, 3,4 y 5 de la página 46


Ver las actividades nº 3, 4 y 5 de la página 46

7
Tema 2 Sistema periódico

3) Apantallamiento y carga nuclear efectiva (pág. 47)


La variación periódica de las propiedades de los elementos químicos a lo largo de la tabla que
descubrió Mendeleiev se debe a la evolución de la configuración electrónica y el número atómico de
estos elementos, siendo la magnitud que combina a ambas la carga nuclear efectiva, de ahí su
importancia para conocer y entender la variación periódica de las propiedades.

3.1 Apantallamiento
El núcleo atómico ejerce una fuerza de atracción sobre todos y cada uno de sus electrones,
pero esta fuerza no es la misma para los electrones internos que para los externos, ya que los
internos van a proteger o apantallar de la fuerza atractiva del núcleo a los electrones externos.
Así, el apantallamiento (a) es la reducción de la fuerza atractiva del núcleo sobre los
electrones externos a causa de la repulsión eléctrica existente entre los electrones del átomo.
El efecto del apantallamiento lo sufre el último electrón del nivel energético más externo y
diferenciaremos dos tipos de apantallamiento: el que ejercen los electrones del kernel o electrones
internos y el que ejercen los electrones que están en el mismo nivel energético que el último
electrón (nivel de valencia). De esta forma, consideraremos que:
- los electrones del kernel (electrones internos) producen un apantallamiento máximo: a = 1.
- los electrones del nivel de valencia ejercerán un apantallamiento menor: a < 1. (Slater’s rules)

Ej.: Be: 1s2 2s2 → 2 < aBe < 3

3.2 Carga nuclear efectiva


Como consecuencia del apantallamiento, en los átomos polielectrónicos, los protones del
núcleo no atraen con la misma intensidad a cada electrón del átomo, puesto que a la fuerza de
atracción que ejercen los protones sobre un electrón determinado hay que restar la acción repulsiva
de los electrones que están entre el núcleo y el electrón en cuestión.
Así pues, teniendo en cuenta el apantallamiento de la fuerza atractiva sobre los electrones
externos que producen los electrones internos, el electrón del último nivel se verá sometido a una
fuerza atractiva menor que la que correspondería por la carga total de los protones del núcleo, por lo
que parece más correcto hablar de carga nuclear efectiva Z* que de carga del núcleo.
Se define como carga nuclear efectiva (Z*) la diferencia entre la carga nuclear neta (Z) y la
constante del efecto pantalla a, y se puede entender como la fuerza real de atracción del núcleo
sobre un electrón en concreto (en nuestro caso, el último electrón del nivel energético más externo).
Z* = Z − a

Ej.: Be → Z* = Z – aBe → 4 - aBe Ejemplo resuelto nº 6 → pág. 47

3.3 Variación de la carga nuclear efectiva a lo largo de la tabla periódica


En un período el número atómico crece a medida que avanzamos (nos desplazamos hacia la
derecha) de forma que vamos añadiendo cargas positivas al núcleo, pero el kernel sigue siendo el
mismo, por lo que los electrones que se añaden aportan un apantallamiento menor que 1, de tal
forma que la carga nuclear efectiva aumenta al avanzar en el período.
En un grupo como la configuración electrónica del nivel de valencia es la misma, la carga real
y el apantallamiento aumentan por igual, de manera que la carga efectiva se mantiene constante.
8
Tema 2 Sistema periódico

4) Propiedades periódicas
4.1 Radio atómico (pág. 49)
Tratando de dar una idea aproximada del tamaño del átomo, se define como radio atómico
de un elemento a la mitad de la distancia internuclear mínima, d, que presenta una molécula
diatómica de ese elemento en estado sólido.
Se habla de definición porque, a pesar de la tecnología disponible hoy día, es muy difícil
“medir” el radio atómico, ya que la nube de electrones que rodea al núcleo no presenta unos límites
bien definidos.

Dentro de un mismo período todos los elementos incorporan su último electrón, el electrón
diferenciador, en el mismo nivel de energía, el valor máximo de n es el mismo, por eso ya vimos que
la carga nuclear efectiva aumenta a lo largo del periodo (de izquierda a derecha), ejerciendo una
mayor atracción sobre los electrones del nivel de valencia, disminuyendo el radio atómico.
Esto no sucede así en los metales de transición, puesto que, en este caso, los electrones
diferenciadores se incorporan a orbitales d de niveles internos, por lo que la carga nuclear efectiva
permanece casi constante a lo largo del periodo, de forma que los radios atómicos son bastante
similares.
En los lantanoides la disminución del radio a lo largo del período es mucho más acentuada,
ya que los electrones se añaden a los orbitales 4f, sin compensar lo suficiente el aumento de carga
nuclear, es lo que se conoce como contracción lantánida y es responsable de gran parte de su
comportamiento químico.
Dentro de un mismo grupo, con una configuración electrónica equivalente, la carga nuclear
efectiva no varía, pero sí el nivel del orbital de llenado, por lo que el radio atómico irá aumentando.

4.2 Radio iónico (pág. 50)


En el caso de los cationes, al perder electrones, habrá un menor apantallamiento para un
mismo número atómico, con lo que la carga nuclear efectiva en los cationes será mayor que en el
elemento neutro. Esta mayor atracción hará que la nube electrónica se contraiga y el catión tenga un
menor tamaño (un radio menor) que el átomo neutro. Esta contracción será tanto mayor cuanto
mayor sea la carga positiva del ion.
En el caso de los aniones se producirá el efecto contrario, aumentan los electrones y el
apantallamiento, por tanto, para un mismo número atómico la carga nuclear efectiva disminuye, por
lo que se produce una expansión de la nube electrónica y aumenta el radio. Esta expansión será
tanto mayor cuanto mayor sea la carga negativa del ion.

Para iones derivados de elementos de diferentes grupos, la comparación solo tiene


significado si se trata de iones isoelectrónicos (mismo número de electrones); en este caso, dentro de
un periodo, tanto los radios catiónicos como los aniónicos disminuyen a medida que aumenta Z, pues
para el mismo número de electrones hay más protones en el núcleo y la contracción de la nube
electrónica es mayor.

Ver ejemplo 8, pág. 50

9
Tema 2 Sistema periódico

4.3 Energía de ionización (pág. 51)


La energía o potencial de ionización, EI, se define como la energía mínima que hay que
suministrar a un átomo neutro, gaseoso y en su estado electrónico fundamental para arrancarle el
electrón más externo, transformándolo en un catión gaseoso monopositivo.
A(g) + EI → A+(g) + 1 e-

Variación de la energía de ionización.


En un período, conforme aumenta el número atómico, también lo hace la carga nuclear
efectiva y disminuye el radio, lo que implica que la atracción sobre los electrones externos sea mayor
y se necesite mayor energía (de ionización) para arrancar el electrón.

En un grupo, aunque aumente el valor de Z, la carga nuclear efectiva se mantiene, y como


los electrones entran cada vez en niveles más alejados del núcleo, por lo general, se necesita menos
energía para arrancar el electrón. (En la ley de Coulomb, influye más la distancia que la carga porque
la contribución de la distancia está al cuadrado).

Energías de ionización sucesivas


La energía necesaria para arrancar un segundo electrón al átomo ya ionizado se denomina
segunda energía de ionización EI2 y de una manera análoga podemos definir las sucesivas energías de
ionización (EI3, EI4 ...). Estas energías son cada vez mayores, puesto que a medida que desaparecen
los electrones más externos, la atracción del núcleo hacia los electrones restantes aumenta y por lo
tanto se necesita más energía para arrancarlos.
A(g) + EI → A+(g) + 1 e-
A+(g) + EI2 → A2+(g) + 1 e-
A2+(g) + EI3 → A3+(g) + 1 e-

Ver ejemplo 9 de la página 52

4.4 Afinidad electrónica (pág. 53)


La afinidad electrónica o electroafinidad se define como la energía liberada cuando un átomo
gaseoso, neutro y en su estado electrónico fundamental captura un electrón, transformándose en un
ion mononegativo también en estado gaseoso y fundamental.
A(g) + 1 e- → A- (g) + AE

Este proceso generalmente es exotérmico (se libera energía al capturar el electrón), pero, en
ocasiones, puede ser endotérmico. Cuanto más exotérmico sea el proceso, mayor propensión tendrá
el elemento en la captura del electrón y mayor estabilidad mostrará el anión formado.

En torno al signo de la afinidad electrónica hay cierta confusión: según convenio


termodinámico IUPAC, la energía liberada es negativa y la aportada positiva (criterio que sigue el
libro), pero al mismo tiempo IUPAC indica para su cálculo que Einicial - Efinal, para que su valor sea
“siempre” positivo, ya que se libera para la mayoría de elementos y cationes y se aporta para pocos
elementos (grupos 2 y 18) y aniones, pero en función de dónde se consulte se pueden ver mayoría de
AE negativas, y alguna excepción positiva, o justamente al contrario.
10
Tema 2 Sistema periódico

Hay una definición cualitativa simple y menos confusa, que es la “tendencia a captar un e-“,
pero el signo influye al razonar su variación, ya que con números de signo opuesto la tendencia de
variación para los mismos módulos es la opuesta. Por ejemplo, el flúor, F, libera energía al captar un
electrón, si la consideramos negativa, tendríamos (AE≈-328 kJ/mol) y su AE sería menor que la del
berilio, Be, en el mismo periodo, que requiere aportar energía y por tanto la consideraríamos positiva
y tendríamos (AE≈19 kJ/mol), pero realmente el flúor tiene menor radio atómico y más tendencia a
captar un electrón (libera más energía al captarlo), tiene mayor |AE|, por lo que “convendría”
considerar positiva la energía liberada, para que fuera mayor que la del berilio, ya que 328 > -19.

Por eso, lo ideal al hablar de variación de la afinidad electrónica es referirse a la tendencia a


ganar electrones y hacerlo en relación a valores absolutos.

Variación de la afinidad electrónica (en valor absoluto).


La variación de la afinidad electrónica a lo largo de la tabla no es tan regular como en otras
propiedades y los valores experimentales obtenidos son bastante caóticos y desordenados, aunque
se aprecian algunos patrones:
En los períodos, al ir avanzando se da una cierta tendencia al incremento, pues la atracción
núcleo-electrón aumenta por el aumento de la carga efectiva y la disminución del radio y también
porque se tiende a completar la configuración electrónica de gas noble.
En los grupos, en muchos casos se observa que disminuye a medida que se baja en los
grupos, pues al aumentar la distancia al núcleo, permaneciendo constante la carga nuclear efectiva
es menor la atracción de este sobre el electrón libre y disminuye la tendencia del núcleo a atraer el e-
y captarlo.

Electroafinidades positivas
Los gases nobles no tienen tendencia a captar e-, por lo hay que aportar energía y tienen
todos ellos EA > 0.
También presentan afinidades electrónicas positivas (hay que aportar energía) algunos
elementos de los grupos 2 (ns2), 12 (ns2 (n-1)d10) y 15 (ns2 np3), configuraciones especialmente
estables y en las que el nuevo electrón tendría que incorporarse a subcapas p.
Otros pocos elementos como el manganeso, Mn, (4s 2 3d5) con la subcapa d semillena que
confiere una especial estabilidad, también tiene electroafinidad positiva por su poca tendencia a
captar un nuevo electrón.

Algunos elementos no tienen aniones estables, por lo que “no tienen” AE o la tienen teórica.

También existen las afinidades electrónicas sucesivas. En el caso de la adquisición de un


segundo electrón, es evidente que el anión inicial no mostrará ninguna tendencia a captar un nuevo
electrón, experimentándose una fuerza de repulsión entre el anión y el electrón.

11
Tema 2 Sistema periódico

4.5 Electronegatividad (pág. 54)


Se define como la tendencia o capacidad que tiene un átomo de un elemento químico para
atraer hacia sí el par de electrones que comparte con otro átomo al que está unido por un enlace.

Esta capacidad está relacionada con la energía de ionización y la afinidad electrónica y no


puede medirse si no es de forma comparativa entre los diferentes elementos. Por eso existen varias
escalas relativas, desde la de Mullikan, que estableció su escala a partir de la expresión:
𝐸𝐼 + 𝐴𝐸
𝐸𝑁 =
2
hasta la más empleada actualmente, la de Pauling, que relaciona la electronegatividad con
las energías de enlace y donde la electronegatividad varía entre el 0,7 del cesio, el elemento menos
electronegativo, hasta los 4,0 del flúor, el elemento más electronegativo.
La electronegatividad determina el carácter metálico o no metálico de los elementos , cuanto
menor sea el valor de la En, más metálico será el elemento y viceversa.

Variación de la electronegatividad
Todo elemento con afinidad electrónica elevada, tendrá también el valor de su
electronegatividad alto, pues intentará ganar electrones para conseguir tener el octeto completo;
por tanto, esta aumentará en un periodo al aumentar el número atómico y disminuirá en un grupo al
aumentar Z.

Ver ejemplos 10 y 11 pág. 55


12
Tema 2 Sistema periódico

5) Las propiedades fisicoquímicas y la posición en la tabla periódica


Las posiciones de los diferentes elementos químicos en la tabla periódica responden a su
número atómico, lo que condiciona su estructura electrónica externa, cuestión que determina
finalmente sus propiedades físicas y químicas, reflejando la tan comentada regularidad de sus
propiedades periódicas a lo largo de los diferentes grupos periódicos.

Carácter metálico:
Metal: tendencia a ceder electrones: baja Ei y baja AE; poco electronegativo.
No metal: tendencia a captar electrones: alta Ei y alta AE; muy electronegativo.
Variación: (excluyendo los gases nobles) los elementos en la parte superior derecha de la
tabla son los de más carácter no metálico, y los de la parte inferior izquierda son los de más carácter
metálico. La frontera es difusa (metaloides/semimetales): suele usarse diagonal que va de elementos
B a At por su parte inferior.

Reactividad química: Tendencia un elemento a combinarse, y está asociada al carácter


metálico/no metálico y la tendencia a ceder/captar electrones.
Variación; ser muy reactivo en no metales es ser muy electronegativo, y en metales tener una
energía de ionización muy baja.
Se pueden hacer razonamientos para iones (2ºEi, 3ª Ei, etc.) pero con la configuración
electrónica del ion de partida antes de la nueva ionización.

Se pueden razonar estados de oxidación, “valencias”, de ciertos grupos, asociado a los iones
más estables cuando tienen configuraciones electrónicas de gas noble.

Asociado a configuración electrónica y spin, se pueden razonar propiedades ferromagnéticas


de materiales.

También pueden estudiarse propiedades de los elementos como sustancias, no como


átomos.

Ver tablas páginas 56 a 59

Hidrógeno
No metal, puede formar iones H- y H+, puede formar compuestos iónicos, covalentes y
metálicos por electrólisis o por acción del HCl sobre metales.

Metales alcalinos ns1 (n≥2)


Bajas energías de ionización y electronegatividad, buenos reductores, son los metales más
reactivos de la tabla, con apariencia metálica son blandos y forman compuestos iónicos al reaccionar
con oxígeno, agua y halógenos.

Metales alcalinotérreos ns2 (n≥2)


Son más electronegativos que los anteriores, con menor actividad. Salvo el berilio forman
compuestos iónicos, al reaccionar con agua producen hidróxidos, salvo el magnesio, que produce su
óxido.
13
Tema 2 Sistema periódico

Metales de transición (grupos del 3 al 12)


Los que completan orbitales d suelen presentar gran variedad de números de oxidación, los
que completan orbitales f, lantanoides y actinoides tiene propiedades muy semejantes.

Grupo 13, boroideos ns2 np1 (n≥2)


El boro es semimetálico, el resto, metales. La reactividad es menor que los alcalinos y suelen
formar compuestos covalentes o también iónicos mediante iones x3+.

Grupo 14, carbonoideos ns2 np2 (n≥2)


Transición gradual, tres no metales, C, o semimetales, Si y Ge y dos metales, Sn y Pb, poco
reactivos, reaccionan con oxígeno, halógenos, ácidos fuertes y ácidos oxidantes.

Grupo 15, nitrogenoideos ns2 np3 (n≥2)


Aumenta el carácter metálico con el número atómico, muy poco reactivos en condiciones
normales, el nitrógeno suele combinar con hidrógeno oxígeno y metales, los demás con oxígeno y
halógenos.

Grupo 16, anfígenos ns2 np4 (n≥2)


Menos metales que los anteriores, sólo teluro y polonio son semimetales, son muy reactivos,
el oxígeno prácticamente con cualquier elemento y los demás con muchos metales y halógenos.

Grupo 17, halógenos ns2 np5 (n≥2)


Son los menos metálicos, presentan altas energías de ionización y electronegatividades son
agentes oxidantes y se combinan prácticamente con cualquier elemento formando halogenuros y
oxoácidos (salvo el flúor).

Grupo 18, gases nobles ns2 np6 (n≥2), excepto helio, 1s 2


Gases monoatómicos, muy estables, prácticamente inertes, forman muy pocos compuestos,
tal vez con oxígeno y flúor.

14
Tema 2 Sistema periódico

Ejercicios

20. Describe la configuración electrónica de los elementos aluminio, cobre, fósforo


y potasio en su estado fundamental.
Indica su localización en la tabla periódica (grupo y periodo) y los electrones de
valencia de cada uno de ellos.
Datos: Al (Z = 13), Cu (Z = 29), P (Z = 15), K (Z = 19).

Al: [Ne] 3s23p1. Dada su configuración tiene 3 electrones en la capa de valencia. Se encuentra
en el grupo 13. Llena el nivel 3, por lo que es un elemento del periodo 3.
Cu: [Ar] 4s13d10. Se trata de una de las excepciones; el presentar el subnivel 3d completo le
confiere una estabilidad adicional que hace que promocione un electrón del subnivel 4s al 3d. El ser
una excepción y que presente un subnivel 3d10 no debe confundirnos, ya que pertenece al grupo 11.
Al ser su último nivel el 4s1 pertenece al periodo 4. Presenta 1 electrón en su capa de valencia.
P: [Ne] 3s23p3. Dada su configuración tiene 5 electrones en la capa de valencia. Se encuentra
en el grupo 15. Llena el nivel 3, por lo que es un elemento del periodo 3.
K: [Ar] 4s1. Dada su configuración tiene 1 electrón en la capa de valencia. Se encuentra en el
grupo 1, el de los alcalinos. Llena el nivel 4, por lo que es un elemento del periodo 4.

21. A partir de las siguientes configuraciones electrónicas de los niveles de energía


más externos, identifica el grupo de la tabla periódica al que pertenece. Indica el símbolo y
el periodo del primer elemento de cada grupo.
a) ns2np4 c) ns2np1
b) ns2 d) ns2np5

a) Al tener seis electrones en la capa de valencia, se trata del grupo 16. El primer elemento
de este grupo es el oxígeno, O, que se encuentra en el periodo 2. Su configuración electrónica es: 1s 2
2s22p4.
b) Al tener dos electrones en la capa de valencia, se trata del grupo 2. El primer elemento de
este grupo es el berilio, Be, que se encuentra en el periodo 2. Su configuración electrónica es: 1s2 2s2.
c) Al tener tres electrones en la capa de valencia, se trata del grupo 13. El primer elemento
de este grupo es el boro, B, que se encuentra en el periodo 2. Su configuración electrónica es: 1s 2
2s22p1.
d) Al tener siete electrones en la capa de valencia, se trata del grupo 17. El primer elemento
de este grupo es el flúor, F, que se encuentra en el periodo 2. Su configuración electrónica es: 1s 2
2s22p5.

15
Tema 2 Sistema periódico

25. Las tres primeras energías de ionización de un elemento químico son 738, 1450
y 7730 kJ/mol. Sabiendo que se trata de un elemento del tercer periodo de la tabla
periódica, indica razonadamente a qué grupo pertenece y su configuración electrónica.

La relación entre primera y segunda energía de ionización es aproximadamente el doble:


EI2/EI1 = 1450kJ/mol / 738kJ/mol = 1,965 ≈ 2

Observa el aumento importante entre la segunda energía de ionización y la tercera:


EI3/EI2 = 7730kJ/mol / 1450 kJ/mol = 5,331 > 5

Esto hace pensar en un elemento del segundo grupo (alcalinotérreos). Al encontrarse en el


tercer periodo su configuración es:
1s2 2s22p6 3s2

Las sucesivas extracciones de electrones son:


X: 1s2 2s22p6 3s2 + EI1 → X+: 1s2 2s22p6 3s1 + 1 e−
X+: 1s2 2s22p6 3s1 + EI2 → X2+: 1s2 2s22p6 3s0 + 1 e−
X2+: 1s2 2s22p6 3s0 + EI3 → X3+: 1s2 2s22p5 3s0 + 1 e−

Al pasar de X2+ a X3+ pierde la estructura de gas noble, lo que justifica el aumento tan elevado
de EI2 a EI3.

27. Los números atómicos del oxígeno, O, el flúor, F, y el sodio, Na, son,
respectivamente, 8, 9 y 11.
a) Razona cuál de los tres elementos tendrá un radio atómico mayor.
b) Razona si el radio del ion fluoruro será mayor o menor que el radio atómico del
flúor.

a) O y F se encuentran en el segundo periodo, y Na, en el tercer periodo. El radio atómico


disminuye de izquierda a derecha en el periodo pues la carga nuclear efectiva aumenta en el periodo.
Y aumenta de arriba abajo en el grupo, pues la cantidad de capas del kernel es cada vez mayor y esto
apantalla la atracción del núcleo.
El sodio está más a la izquierda y más abajo. Es el sodio, Na, el que tiene mayor radio
atómico.

b) En los aniones aumentan los electrones de la capa de valencia, aumentando el


apantallamiento para un mismo número atómico, disminuyendo Z* y aumentando el tamaño del
radio. Por tanto:
radio(F-) > radio(F)

16
Tema 2 Sistema periódico

30. Se tienen dos elementos, uno de Z = 35 y otro cuyos electrones de mayor


energía poseen la configuración 4s2.
a) Indica la posición de cada uno de ellos en la tabla periódica y la valencia
covalente más probable de cada uno.
b) Justifica cuál tiene mayor potencial de ionización.

a) La configuración del primero es: 1s2 2s22p6 3s23p6 4s23d104p5. Se trata de un elemento del
grupo 17 situado en el periodo 4 (Br). Tendrá tendencia a captar un electrón, luego su covalencia más
probable será −1.
En el caso del otro elemento nos indican que los electrones de la capa de valencia (mayor
energía) están en el subnivel 4s2. Por tanto, se trata de un elemento del grupo 2, periodo 4 (Ca).
Tendrá tendencia a perder dos electrones, por lo que su covalencia más probable será +2.

b) Ambos son elementos del cuarto periodo. La energía de ionización aumenta de izquierda a
derecha dentro de un mismo periodo, el elemento con mayor energía de ionización es el elemento
con Z = 35, situado más a la derecha.

31. Dados los elementos A (Z = 13), B (Z = 9) y C (Z = 19).


a) Escribe sus configuraciones electrónicas.
b) ¿Cuál será la configuración electrónica del ion más estable de cada uno?
c) Define el concepto de electronegatividad e indica cuál de los elementos
anteriores se espera que tenga el valor más alto y cuál el más bajo.

a) A: [Ne] 3s23p1; B: [He] 2s22p5; C: [Ar] 4s1.

b) A: Tiende a perder 3 electrones, formando el ion A 3+ y adquiere la configuración del neón:


1s2 2s22p6.
B: Tiende a ganar 1 electrón, formando el ion B− y adquiere la configuración del neón: 1s2
2 6
2s 2p .
C: Tiende a perder 1 electrón, formando el ion C + y adquiere la configuración del argón: 1s2
2s22p6 3s23p6.

c) La electronegatividad es una medida de la capacidad de un átomo para competir por el par


de electrones que comparte con otro átomo al que está unido.

Los mayores valores de electronegatividad se encuentran en el grupo de los halógenos. El


elemento B presenta la configuración de un halógeno y, por tanto, será el de mayor
electronegatividad.

Los valores menores se encuentran en los alcalinos de mayor número atómico. Al ser el
elemento C un alcalino, será el que presente menor electronegatividad.

17
Tema 2 Sistema periódico

32. Las siguientes configuraciones electrónicas corresponden a átomos neutros


cuyas configuraciones son:
X: 1s2 2s22p6 Y: 1s2 2s22p5 3s1
Indica cuál de las siguientes afirmaciones es incorrecta:
a) El elemento con la configuración Y pertenece al tercer periodo.
b) El elemento con la configuración X es un gas noble.
c) Las configuraciones X e Y pertenecen a un mismo elemento.
d) La energía de ionización asociada a la configuración Y es más pequeña que la de
la configuración X.

X es un elemento del grupo 18, gases nobles, del segundo periodo, y presenta su
configuración en estado fundamental.

En el caso de Y se trata del mismo elemento, pero con una configuración excitada.

Por tanto, la afirmación incorrecta es la a), ya que Y, al igual que X, se encuentra en el


segundo periodo.

33. La configuración electrónica de la capa de valencia de un elemento A es 3s 23p5.


a) Justifica si se trata de un metal o un no metal.
b) Indica, razonadamente, un elemento que tenga mayor potencial de ionización
que A.
c) Indica, razonadamente, un elemento que tenga menor potencial de ionización
que A.

a) El elemento tiene 7 electrones en la capa de valencia, por lo que pertenece al grupo 17,
periodo 3, y tendrá tendencia a captar un electrón, formando aniones. Se tratará, por tanto, de un no
metal.

b) El potencial de ionización disminuye al bajar en el grupo. Un elemento del grupo 17,


situado en el periodo 2, tendrá mayor potencial de ionización que él. Es el flúor.

c) El potencial de ionización aumenta de izquierda a derecha en el periodo, por lo que


cualquier elemento del tercer periodo situado más a la izquierda que nuestro elemento tendrá
menor potencial de ionización que él; por ejemplo, el azufre.

18
Tema 2 Sistema periódico

Problemas de EvAU
1. Dados los elementos químicos A, B, C, D y E, cuyos números atómicos son,
respectivamente: 2, 11, 9, 12 y 13, justificar cual es el elemento que:
a) Es más electronegativo
b) Es un gas noble
c) Es un metal alcalino
d) Presenta valencia 3
e) Puede formar un nitrato cuya fórmula es X (NO 3)

Primero hallamos la configuración electrónica de los distintos elementos porque la


necesitaremos para contestar a las preguntas:
A (Z=2) → 1s2
B (Z=11) → 1s2 2s2 2p6 3s1
C (Z=9) → 1s2 2s2 2p5
D (Z=12) → 1s2 2s2 2p6 3s2
E (Z=13) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p1

Seguidamente identificaremos la posición de cada elemento en la tabla periódica por


el ultimo electrón o electrón diferenciador: su número cuántico principal (n) nos indicará el
periodo; el número cuántico secundario (l) el grupo: s para los 2 primeros (a excepción del
1s2 que se corresponde con el helio, grupo 18) y p para los 6 últimos (del 13 al 18) y el
superíndice la posición: s1 primer grupo, s2 segundo, p1 grupo 13, p2 grupo 14 y así
sucesivamente hasta p6 que se corresponde con el grupo 18.
A (Z=2) → 1s2, primer periodo, segundo* grupo: Helio, He
B (Z=11) → 3s1, tercer periodo, primer grupo: Sodio, Na
C (Z=9) → 2p5, segundo periodo, decimoséptimo grupo: Flúor, F
D (Z=12) → 3s2, tercer periodo, segundo grupo: Magnesio, Mg
E (Z=13) → 3p1, tercer periodo, decimotercer grupo: Aluminio, Al

a) La electronegatividad en los grupos disminuye a medida que aumenta el número


atómico (Z) pues el electrón entra a mayor distancia del núcleo y, por lo tanto, la atracción
que siente por este es menor. Al ir aumentando Z en los periodos la atracción núcleo-
electrón aumenta, porque el electrón entra prácticamente a la misma distancia, pero la
carga del núcleo aumenta.

Teniendo en cuenta lo anterior, el más electronegativo va a ser el elemento C, flúor,


F, que es el que está situado en la zona de máxima electronegatividad.
No se tiene en cuenta el elemento A, helio (He), porque es un gas noble.

19
Tema 2 Sistema periódico

b) El A es el gas noble, su configuración electrónica se corresponde con el helio (He).

c) Los alcalinos son la familia de elementos que se encuentran en el primer grupo,


por lo tanto, el B, sodio (Na), es el metal alcalino.

d) Decir que un elemento tiene valencia 3 quiere decir que si pierde 3 electrones
adquiere configuración de gas noble (1s2 o ns2 np6). En este caso sería el elemento E,
aluminio (Al), el cual, al perder los 3 electrones situados en los orbitales 3s y 3p adquiere la
configuración electrónica del neón: 1s2 2s2 2p6

e) Atendiendo a la fórmula del nitrato, el elemento tiene que ser un metal con estado
de oxidación +1, porque el del nitrato es -1: NO3
Razonando de la misma manera que en el caso anterior, el único elemento que al
perder un electrón adquiere configuración de gas noble es el B, sodio (Na).

2. De las siguientes configuraciones electrónicas en su estado fundamental:


1) 1s2 2s2 2p7
2) 1s2 2s3
3) 1s2 2s2 2p5
4) 1s2 2s2 2p6 3s1
a) Indique, razonando la respuesta, cuales cumplen el principio de exclusión
de Pauli.
b) Deduzca el estado de oxidación más probable de los elementos cuya
configuración sea correcta.

a) El principio de exclusión de Pauli establece que en un átomo no pueden existir dos


electrones que tengan los cuatro números cuánticos iguales entre sí, por lo que en un orbital
puede haber como máximo 2 electrones. Así, en el subnivel s podría haber como máximo 2
electrones, en el p 6, en el d 10 y en el f 14. Teniendo en cuenta esto, sólo cumplen este
principio las configuraciones 3 y 4.

b) El estado de oxidación más probable, es aquel que genere una configuración de


gas noble (el octeto completo). Teniendo en cuenta esto:
3) 1s2 2s2 2p5 → ganando un electrón adquiere la configuración del neón, por lo que
el estado de oxidación más probable será -1 (se trata del flúor, F).
4) 1s2 2s2 2p6 3s1 → perdiendo un electrón adquiere la configuración del neón, por lo
que el estado de oxidación más probable será +1 (se trata del sodio, Na).

20
Tema 2 Sistema periódico

3. Defina afinidad electrónica y justifique por qué los metales alcalinos


tienen mayor afinidad por los electrones que los metales alcalinotérreos.

La afinidad electrónica es la energía liberada cuando un átomo gaseoso neutro y en


su estado fundamental captura un electrón y forma un ion mononegativo.
A (g) + e- → A- (g) + A E

Los alcalinos tienen mayor afinidad por los electrones que los alcalinotérreos porque
ganando un electrón tendrían todos los orbitales llenos, lo que les conferiría una elevada
estabilidad; mientras que en los alcalinotérreos se pasaría de una situación con todos los
orbitales llenos a otra en la que el electrón que se ganase entraría en un nuevo orbital que
comenzaría a llenarse, rompiendo la situación de estabilidad que tenía el alcalinotérreo.

4. Escribir las configuraciones electrónicas de los elementos oxigeno,


magnesio, escandio y hierro y las de sus iones más frecuentes. Datos: Números
atómicos: 0 = 8; Mg = 12; Sc = 21; Fe = 26.

Las configuraciones electrónicas de los elementos son:


O (Z=8) → 1s2 2s2 2p4
Mg (Z=12) → 1s2 2s2 2p6 3s2
Sc (Z=21) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 4s2 3d1
Fe (Z=26) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 4s2 3d6

Las configuraciones de los iones más frecuentes serán aquellas configuraciones


electrónicas que generen orbitales llenos o semillenos:
O2- → 1s2 2s2 2p6 (los ocho electrones suyos, más los dos que gana en el 2p)
Mg2+ → 1s2 2s2 2p6 (pierde los dos electrones del orbital 3s)
Sc+ → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 4s2 (pierde un electrón en el orbital 3d)
Sc3+ → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 (los 21 e- del elemento menos los 3 que pierde)
Fe+3 → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 3d5 (pierde los dos electrones del orbital más externo,
el 4s y uno del 3d)
Fe+2 → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 4s1 3d5 (pierde un electrón del orbital 4s y otro del 3d)

21
Tema 2 Sistema periódico

5. Escribir las configuraciones electrónicas de los átomos e iones siguientes: N3-,


Mg2+, Fe y Si, indicando además cuales de ellos son isoelectrónicos. Números atómicos: N =
7; Mg = 12; Fe = 26; Si = 14.

Para hacer la configuración electrónica, hay que tener en cuenta todos los electrones
del átomo o del ion: la carga del catión representa electrones que ha perdido el átomo de
origen y la del anión los electrones ganados.

N3- (Z=7) → 1s2 2s2 2p6 (los siete del N, más los tres que gana)
Mg2+ (Z=12) → 1s2 2s2 2p6 (los doce del Mg, menos los dos que pierde)
Fe (Z=26) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 4s2 3d6
Si (Z=14) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p2

Son isoelectrónicas aquellas especies que tengan el mismo número de electrones (y


por ello también la misma configuración electrónica), en este caso, lo son los dos iones, ya
que tienen ambos 10 electrones.

6. a) Indicar el grupo y periodo del sistema periódico en el que se encuentran


los siguientes átomos neutros:
1) 1s2 2s2 2p1; 2) 1s2 2s2 2p5; 3) 1s2 2s2 2p6 3s2.
b) Definir electronegatividad de un elemento y, razonadamente, ordenar los
elementos anteriores de menor a mayor electronegatividad.
c) Definir energía (o potencial) de ionización y razonar cual de los tres
elementos anteriores es el de mayor energía de ionización.

a) Para identificar la posición de cada elemento en la tabla periódica observamos el


orbital en el que entra el ultimo electrón (electrón diferenciador): el numero cuántico
principal (n) nos indica el periodo; el numero cuántico secundario (l) el grupo: s para los 2
primeros (a excepción del 1s2 que se corresponde con el helio, grupo 18) y p para los 6
últimos (del 13 al 18) y el superíndice la posición: s1 primer grupo, s2 segundo, p1 grupo 13,
p2 grupo 14 y así sucesivamente hasta p6 que se corresponde con el grupo 18.
1) 1s2 2s2 2p1 → periodo 2, grupo 13 (boro, B)
2) 1s2 2s2 2p5 → periodo 2, grupo 17 (flúor, F)
2 2 6 2
3) 1s 2s 2p 3s → periodo 3, grupo 2 (magnesio, Mg)

b) Se define electronegatividad como la tendencia que tiene un elemento para atraer


hacia sí el par electrónico del enlace compartido con otro.

22
Tema 2 Sistema periódico

La electronegatividad en los grupos disminuye a medida que aumenta el número


atómico (Z) pues el electrón entra a mayor distancia del núcleo y, por lo tanto, la atracción
que siente por este es menor. Al ir aumentando Z en los periodos la atracción núcleo-
electrón aumenta, porque el electrón entra prácticamente a la misma distancia, pero la
carga del núcleo aumenta.
Teniendo todo lo anterior en cuenta, el más electronegativo va a ser el elemento 2),
que es el que está situado en la zona de máxima electronegatividad (“arriba y a la derecha”
del sistema periódico).

c) La energía o potencial de ionización, se define como la energía mínima que hay


que suministrar a un átomo neutro, gaseoso y en estado fundamental para arrancarle el
electrón más externo, transformándolo en un catión gaseoso monopositivo.
La variación de esta energía de ionización es la siguiente:
Acorde va aumentando el número atómico en un periodo, los electrones van
entrando en el mismo nivel energético pero su distancia al núcleo disminuye ligeramente,
puesto que la atracción electrostática núcleo-ultimo electrón va siendo cada vez mayor al
presentar el núcleo cada vez mas carga. Debido a esa mayor atracción, se necesita mayor
energía (de ionización) para arrancar el electrón.
Si en un grupo nos desplazamos aumentando el valor de Z, los electrones entran cada
vez en niveles más alejados del núcleo, por lo que se necesita menos energía para arrancar
el electrón.
Teniendo en cuenta lo anterior, otra vez el elemento 2) es el de mayor energía de
ionización, porque se sitúa en la zona de mayores valores de esta propiedad periódica.

7. Los números atómicos de cinco elementos desconocidos son los


siguientes: A: 3, B: 36, C: 22, O: 9, E: 13. Razonar:
a) Cual de los cinco tendrá la mayor electronegatividad?
b) Cual será un gas noble?;
c) Que elemento es un metal de transición?
d) Que elemento forma un clorato de tipo X(ClO3)3?

Primero realizaremos la configuración electrónica de los distintos elementos porque


necesitamos conocerlas para contestar a las preguntas:
A (Z=3) →1s2 2s1
B (Z=36) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 4s2 3d10 4p6
C (Z=22) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 4s2 3d2
D (Z=9) → 1s2 2s2 2p5
E (Z=13) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p1

23
Tema 2 Sistema periódico

Seguidamente identificaremos la posición de cada elemento en la tabla periódica por


el orbital en el que entra el ultimo electrón: el mayor numero cuántico principal (n), aunque
no corresponda con el orbital en el que entra el ultimo electrón, nos indica el periodo y el
numero cuántico secundario (l) el grupo: s para los 2 primeros (a excepción del 1s2 que se
corresponde con el helio, grupo 18), d para los 10 siguientes (del 3 al 12) y p para los 6
últimos (del 13 al 18) y el superíndice la posición: s1 primer grupo, s2 segundo, d1 tercer
grupo, d2 cuarto grupo hasta llegar a d10 el decimosegundo grupo, p1 grupo 13, p2 grupo 14 y
así sucesivamente hasta p6 que se corresponde con el grupo 18.

A (Z=3) → periodo 2, grupo 1: litio, Li


B (Z=36) → periodo 4, grupo 18: kriptón, Kr
C (Z=22) → periodo 4, grupo 4: titanio, Ti
D (Z=9) → periodo 2, grupo 17: flúor, F
E (Z=13) → periodo 3, grupo 13: aluminio, Al

a) La electronegatividad en los grupos disminuye a medida que aumenta el número


atómico (Z) pues el electrón entra a mayor distancia del núcleo y, por lo tanto, la atracción
que siente por este es menor. Al ir aumentando Z en los periodos la atracción núcleo-
electrón aumenta, porque el electrón entra prácticamente a la misma distancia, pero la
carga del núcleo aumenta.
Teniendo en cuenta lo anterior, el más electronegativo va a ser el elemento D, el
flúor, que es el que está situado en la zona de máxima electronegatividad.
No se tiene en cuenta el B (Kr) porque es un gas noble.

b) A excepción del He, todos los gases nobles presentan los orbitales s y p llenos. El B
es el gas noble, correspondiendo su configuración electrónica con el kriptón.

c) El último electrón que entra en los metales de transición lo hace en un orbital d,


por lo que el elemento C, el titanio, es un elemento de transición.

d) Atendiendo a la fórmula del clorato, el elemento tiene que ser un metal con
estado de oxidación +3, para que el balance de cargas del compuesto sea 0, compensando el
valor -1 del clorato multiplicado por 3, que es el número de grupos ClO3- que hay en la
formula. De todos los elementos, aquel que al perder 3 electrones adquiera configuración de
gas noble será el que estamos buscando. En nuestro caso será el elemento E, el aluminio, Al,
ese elemento, pues al perder tres electrones adquiere la configuración electrónica del neón,
Ne: 1s2 2s2 2p6.

24
Tema 2 Sistema periódico

8. a) Definir primera afinidad electrónica de un elemento.


b) Razonar cómo evoluciona esta propiedad en el sistema periódico.
c) Ordenar por valores crecientes de afinidad electrónica los siguientes
elementos: Zn, Mn, P, Cl y Rb.
Números atómicos: P = 15, Cl = 17, Mn = 25, Zn = 30, Rb = 37.

a) La afinidad electrónica se define como la energía liberada cuando un átomo


gaseoso neutro y en su estado fundamental captura un electrón y forma un ion
mononegativo. La primera afinidad electrónica se refiere a la energía liberada al capturar el
primer electrón desde el estado neutro.

b) De forma general se puede decir que disminuye a medida que aumenta Z en un


grupo, pues al aumentar la distancia al núcleo es menor la atracción de este sobre el
electrón libre. Al ir aumentando Z en los periodos se incrementa la energía requerida en este
proceso, pues la atracción núcleo-electrón aumenta.

c) Teniendo en cuenta lo explicado en el apartado b) se puede establecer que cuanto


más arriba y hacia la derecha en la tabla periódica esté un elemento, mayor va a ser su
afinidad electrónica.
Teniendo eso en cuenta y atendiendo a la colocación en la tabla periódica de los
elementos del problema, el orden creciente sería: Rb < Mn < Zn < P < Cl.

9. Los tres elementos E1, E2 y E3 tienen números atómicos consecutivos. El


elemento E2 es argón (Z=18).
a) Indicar el grupo de la tabla periódica en el que se encuentran los
elementos E1 y E3. Justificar cuál de ellos tendrá una mayor energía de ionización.
b) Indicar el periodo (nivel) al que pertenecen los elementos E1 y E3.
Justificar cual de ellos presentará un radio atómico menor.
c) Cuál es el estado de oxidación más probable (según la regla del octeto)
para los elementos E1 y E3?
d) Como cambia el radio de los iones resultantes respecto del radio atómico
de los elementos E1 y E3? Justificar las respuestas.
e) Proponer el compuesto más probable que se forme con E1 y E3, indicando
el tipo de enlace que se formara.

25
Tema 2 Sistema periódico

Para poder contestar a las preguntas, debemos determinar la configuración


electrónica de los elementos E1 y E3. Como son consecutivos y E2 tiene como número
atómico (Z) 18, E1 tendrá como número atómico, Z = 17 y E3 el Z = 19.
E1 (Z=17) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p5
E3 (Z=19) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 4s1

a) El grupo en la tabla periódica viene determinado por el orbital en el que entra el


ultimo electrón: s1 el primer grupo, s2 el segundo, p1 el decimotercero, p2 el decimocuarto y
así sucesivamente hasta el p6, el decimoctavo. Por lo tanto:
E1 → grupo 17
E2 → grupo 1

La energía de ionización, se define como la energía mínima que hay que suministrar a
un átomo neutro, gaseoso y en estado fundamental para arrancarle el electrón más externo,
transformándolo en un catión gaseoso mono positivo y su variación es la siguiente:
Conforme va aumentando el número atómico en un período, los electrones van
entrando en el mismo nivel energético pero su distancia al núcleo disminuye ligeramente,
puesto que la atracción electrostática núcleo-último electrón va siendo cada vez mayor al
presentar el núcleo cada vez más carga. Debido a esa mayor atracción, se necesita mayor
energía (de ionización) para arrancar el electrón.
En un grupo, cuando nos desplazamos aumentando el valor de Z, los electrones
entran cada vez en niveles más alejados del núcleo, por lo que se necesita menos energía
para arrancar el electrón.
Teniendo en cuenta lo anterior, entre estos dos elementos es el E1 es el de mayor
energía de ionización, porque se sitúa en la zona de mayores valores de esta propiedad
periódica.

b) El período lo determina el mayor número cuántico principal que aparece en la


configuración electrónica, por lo tanto:
E1 → periodo 3
E2 → periodo 4

El radio de los elementos disminuye en un periodo al aumentar el número atómico,


pues aumenta el numero de protones en el núcleo y por lo tanto los electrones más
externos, que están prácticamente a la misma distancia porque van ocupando el mismo nivel
energético, se ven más atraídos por el núcleo. En un grupo, el radio aumenta al aumentar Z,
pues los electrones entran en niveles energéticos más externos.
Teniendo en cuenta lo anterior, va a tener menor radio el elemento E3, pues el
ultimo electrón entra en el nivel energético 3, mientras que en el E1 entra en el 4.

26
Tema 2 Sistema periódico

c) El estado de oxidación más probable es aquel en el que el elemento adquiera


configuración de gas noble (ns2 np6), ganando o perdiendo electrones. Teniendo en cuenta
esto, el E1 ganando un electrón adquiere esta configuración, por lo que su estado de
oxidación es -1 y el E3 perdiendo uno también, por lo que sería el +1.

d) Como el E1 gana un electrón los protones atraen con menos fuerza a los
electrones puesto que la fuerza de atracción se ejerce sobre mas electrones, por lo que el
radio del anión es mayor que el del átomo neutro de procedencia.
En el caso del catión, ocurre lo contrario. Al perder un electrón, la fuerza atractiva del
núcleo sobre los electrones es mayor pues presenta un electrón menos, por lo que el radio
del catión es menor que el del átomo neutro del cual proviene.

e) Como E1 es un no metal y E3 un metal, el compuesto se va a formar mediante un


enlace iónico. Así, la unión de los dos iones dará como resultado: E3E1, que si tenemos en
cuenta los elementos a los que corresponden E3 y E1, sería: KCl.

10. b) Mediante las correspondientes configuraciones electrónicas, razonar la


valencia +1 para el sodio, +2 para el calcio y -1 para el cloro.
Números atómicos: Na = 11, Cl = 17, Ca=20.

Las configuraciones electrónicas de los elementos químicos son:


Na (Z=11) → 1s2 2s2 2p6 3s1
Cl (Z=17) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p5
Ca (Z=20) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6 4s2

Las de los iones:


Na+ (Z=11) → 1s2 2s2 2p6
Cl- (Z=17) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6
Ca2+ (Z=20) → 1s2 2s2 2p6 3s2 3p6

Las configuraciones electrónicas que adquieren los iones son todas de gases nobles,
que es la situación más estable debido a que tienen todos los orbitales llenos.

27
Tema 2 Sistema periódico

11. Dadas las siguientes configuraciones electrónicas: A)1s2 2s1; B)1s2 2s2 2p5;
C) 1s2 2s2 2p7 3s2 3p4; D) 1s2 2s2 2p6 2d2; E) 1s2 2s2 2p6 3s2 4s1.
a) Indicar, razonadamente, qué configuraciones son imposibles y cual
representa un estado excitado.
b) De las configuraciones posibles, indicar el grupo y nivel del elemento.
c) Para las configuraciones posibles, razonar, cuál será el ion más probable.

12. (2019 E) Sean los elementos químicos Se, Br, Kr, Rb y Sr


a) Ordenar los cinco elementos por su radio atómico.
b) Razonar cual es el ion más estable que pueden formar cada uno de estos
elementos.
Números atómicos (Z): Se = 34; Br = 35; Kr = 36; Rb = 37; Sr = 38.

13. Dados los elementos A, B, C, D y E cuyos números atómicos son 20, 26,
29, 31 y 34, respectivamente, indicar, razonando la respuesta:
a) La configuración electrónica de sus respectivos estados fundamentales, y
el grupo y nivel al que pertenecen.
b) Indicar, razonadamente, cual es el elemento de mayor radio atómico y el
de mayor energía de ionización.

28

También podría gustarte