AC Guzmán HKV
AC Guzmán HKV
AC Guzmán HKV
DOI: https://doi.org/10.46925//rdluz.41
El objetivo del presente artículo fue describir resultados de la investigación sobre las
competencias interpersonales para favorecer el quehacer investigativo en docentes de una
universidad particular de Guayaquil, en el 2022. Al respecto, el ejercicio del profesional como
formador e investigador se entiende a partir de los procesos reflexivos de la realidad social para
entenderla y transformarla. La metodología aplicada respondió a un enfoque cuantitativo, no
experimental y de tipo descriptiva. La población estuvo conformada por cincuenta docentes,
con una muestra no probabilística y se utilizó como instrumento, el cuestionario. Desde esta
mirada, el análisis estadístico fue realizado con el software SPSS para recopilar datos para
lograr la información requerida. Como parte de los hallazgos, se encontró la necesidad de
fortalecer la dimensión del autoconocimiento y la conciencia social para que, el docente se
identifique como un aprendiz que busca el mejoramiento continuo en la visibilidad de las
competencias científicas.
The objective of this article was to describe the results of the research on interpersonal skills
to promote the research work in teachers at a private university in Guayaquil, in 2022. In this
regard, the professional exercise as a trainer and researcher is understood from the reflective
processes of social reality to understand and transform it. The applied methodology responded
to a quantitative, non-experimental, and descriptive approach. The population consisted of fifty
teachers, with a non-probabilistic sample and the questionnaire was obtained as an instrument.
From this point of view, the statistical analysis was carried out with the SPSS software to collect
data to achieve the required information. As part of the findings, the need to strengthen the
dimension of self-knowledge and social awareness was found so that the teacher identifies
himself as a learner who seeks continuous improvement in the visibility of scientific
competences.
En concordancia con lo expuesto, Vladimir (2021) destaca que se debe tener presente
que el ejercicio del docente investigador es una tarea profesional que reviste de importancia
histórica y, por tanto, las competencias de interacción particularmente en la educación aseguran
estrechar relaciones en la convivencia para que observe los ambientes en que se gestan los
comportamientos.
Frente a lo expuesto, a nivel nacional, el Consejo de Aseguramiento de la Calidad en la
Educación Superior, CACES (2020) considera que la gestión investigativa marca la necesidad
de reflexionar nuevas metodologías que pongan de manifiesto las competencias interpersonales
y se aborden necesidades de la academia en el ámbito superior. Otro antecedente en Guayaquil
hace énfasis que el 45% de los docentes favorecen a medias con su quehacer investigativo al
problematizar la realidad y en vincular los procesos pedagógicos con la práctica. Asimismo,
ante los niveles altos de exigencia científica, se recoge que, un 41% de docentes requieren
mejorar sus niveles de empatía y de resiliencia para controlar los índices del estrés en las tareas
científicas (León & Guzmán, 2019).
Precisamente, cada día el docente universitario asume compromisos y es garante de la
transmisión de los saberes: su difusión, transferencia del conocimiento científico, tecnológico
y humanístico. Con lo expuesto, se resalta que cada investigador tiene sus motivaciones y el
proceso clave es la docencia que al ser consciente de ser el capital humano promueve su
quehacer investigativo y el desarrollo tecnológico permite la innovación social y como agente
de emprendimiento (Fragoso-Luzuriaga, 2019).
Además, las acciones que ejecute el docente deben asegurar habilidades digitales y una
mirada que observa su entorno y profundiza en las acciones para poder investigar de forma
reiterada como parte de su identidad profesional (Al-harthy, 2021). De este modo, al
incrementar el intercambio de saberes, se impulsa la autoformación para propiciar las
competencias en internet para fomentar la producción científica (Padilla et al., 2016).
Por consiguiente, se debe actuar con transparencia para que se exprese de forma que se
comunique con la coherencia de principios y valores. Quizá desde la narrativa de los tiempos
actuales, es complejo pensar que cada persona sea ejemplar y atractiva; sin embargo, ante la
responsabilidad social, se deja un llamado a la conciencia para construir emociones estables.
Precisamente, resulta imprescindible que los docentes aprendan no solo con la teoría, sino con
la práctica que hace referencia a las emociones. De hecho, los docentes universitarios deben
estar capacitados y desarrollar competencias interpersonales para generar una participación que
redunde en el bien común(Rivera-Vargas et al., 2022).
Complementando los argumentos revisados, el quehacer docente es consecuencia del
ejercicio profesional y la actitud y voluntad por investigar, es un desafío que lo interpela para
que responda a los compromisos investigativos. De igual manera, en el transcurso de la
investigación, se expresa que el alma de la universidad se concibe en la conexión de docencia
con investigación para llevar el conocimiento y contemplar la ciencia de forma sustancial
(Russell, 2015).
Así, frente a los argumentos planteados, el objetivo del artículo es describir resultados
del estudio de las competencias interpersonales para que el docente potencie su quehacer
investigativo en una universidad particular de Guayaquil. Por tanto, es en la esencia de
investigar donde el docente se prueba ante los desafíos del contexto y requiere de competencias
que lo lleven a relacionarse de forma que sus habilidades y valores para su desempeño reflexivo
conc arcaterísticas como: capacidad de asombro, espíritu de observación, capacidad analítica,
capacidad inventiva y sistematice los resultados con creatividad.
1. Métodos
Para dar cumplimiento al objetivo planteado, se revisan los resultados que se obtuvieron
del diagnóstico de las dos variables y se presentan en la tabla 1 problemas que arrojaron en la
encuesta aplicada para perfeccionar el quehacer docente investigativo:
Tabla 1
De esta información, se registra similitud con lo expresado con Rincón & Mujica (2021)
que buscan que la plana docente promuevan actitudes de reflexión personal y se relacionan
con las competencias del saber ser, saber hacer y saber convivir. También se necesita formación
en las funciones intelectual y volitiva para que el docente se sensibilice y de forma positiva
gestiones el conocimiento. De la misma manera los resultados muestran que el docente debe
incrementar estrategias metacognitivas para que asegure que en su formación profesional se
privilegie el desarrollo personal y social; su capacidad de observación y escucha empática, le
permiten relacionarse con sus consideraciones individuales y grupales para atender razones
antes de intervención en el quehacer investigativo (Piñas & Alfonzo, 2019).
La resolución de conflicto es otro indicador que se presenta como uno de los problemas
que refleja que apenas el 28% de los docentes encuestados son los consideran que siempre
tienen el control del estrés en el quehacer investigativo. En este sentido, Gardner (1994) y
Goleman ( 2002) sustentan el cuidado que debe tener la persona en relación a sus emociones y
actitudes para asegurar que sus relaciones interpersonales sean positivas. De estos resultados,
se discute en cómo en docente siempre se cuestiona al ver sus niveles de conocimientos lo
interpelan ante los desafíos de la ciencia. Por ello, el miedo es parte del proceso y se ven
superados ante las motivaciones y preparaciones que se trabajen de forma armónica (Valentín
Melgarejo et al., 2022).
Otro resultado que se presenta en la tabla 1, es el indicador del aprendizaje y refleja que
el 14 % de los docentes encuestados siempre realizan un quehacer investigativo de forma
autónoma para responder a sus motivaciones personales y profesionales. En esta línea, los
aportes de Lores Agirre ( 2022) concuerdan con las contribuciones que relaciona la historia
del docente que actúa con responsabilidad social y pueda atender a la persona de forma integral
en la gestión investigativa. También conviene señalar que los resultados se encuentran en
concordancia con lo expresado que el hombre debe encontrar la felicidad en el conocimiento
(Russell, 2015).
En esta línea, el 14 % es la población de docentes que siempre indican que de la práctica
investiga, se esfuerzan en sistematizar informes de investigación. De ello, se analiza la teoría
de Sanabria (2017) quien explica que el ser humano debe ser educado y está llamado a
esforzarse para lograr el autodesarrollo y asegurar caminos de mejoramiento para perfeccionar
su quehacer docente y propicien en su práctica controles rigurosos que se encuentran
articuladas estrechamente con el accionar docente. En este sentido, Logaña (2020) refiere que
se debe tener presente los valores éticos del docente y solo se concibe a partir de la convivencia.
Por su parte, Ramos (2021) afirma que la educación superior precisa que los docentes íntegros
y que su actuar ético sea un referente siempre.
Además, de lo expuesto, en la tabla 1, se pone de manifiesto el tomar en consideración
la dimensión del autoconocimiento y en el indicador del autoconocimiento presenta que el 30%
de los docentes son los que siempre se identifican con voluntad para autoperfeccionamiento y
su práctica investigativa responde a las necesidades del contexto social. Estos resultados
coinciden con lo expuesto por Carrascal & Sánchez-Paulete( 2022) quienes exhortan que la el
quehacer docente requiere del desarrollo de competencias para concretar habilidades
innovadoras y ser profesionales que tengan experiencias académicas e investigativas.
Conclusiones
Así entre los resultados obtenidos del diagnóstico de las variables de estudio, se pone
de manifiesto la escasa reflexión en la identidad docente y se debe considerar como un aprendiz
que lo mantienen en la búsqueda de información científica.
Referencias
CONSTANCIA
Hacemos constar que el artículo: Competencias interpersonales para el quehacer
investigativo docente, cuya autoría corresponde a: Kennya Verónica Guzmán
Huayamave & Mario Napoleón Briones Mendoza, ha sido aceptado para su
publicación en la Revista de la Universidad del Zulia, Año 15, Número 41,
Septiembre - Diciembre de 2023, dedicado a las Ciencias Sociales y Arte.
Maracaibo (Venezuela), 27 de diciembre de 2022.