“LAZARILLO DE TORMES”

Tratado Primero
Cuenta Lázaro su vida, y cuyo hijo fue
Pues sepa vuestra merced ante todas cosas que a conversación, mi madre
mí llaman Lázaro de Tormes, hijo de Tome vino a darme un negrito
González y de Antonia Pérez, naturales de muy bonito, el cual yo
Tejares, aldea de Salamanca. Mi nacimiento fue brincaba y ayudaba a
dentro del río Tormes, por la cual causa tome el calentar. Y acuerdome
sobrenombre, y fue desta manera. Mi padre, que que, estando el negro de
Dios perdone, tenía cargo de proveer una mi padre trebejando con
molienda de una acena, que esta ribera de aquel el mozuelo, como el niño veía a mi madre y a mí
río, en la cual fue molinero más de quince años; y blancos, y a él no, huía del con miedo para mi
estando mi madre una noche en la acena, madre, y señalando con el dedo decía: "¡Madre,
preñada de mí, tomole el parto y pariome allí: de coco!". Respondió él riendo: "¡Hideputa!"
manera que con verdad puedo decir nacido en el Yo, aunque bien muchacho, note aquella palabra
río. Pues siendo yo niño de ocho años, achacaron de mi hermanico, y dije entre mí:
a mi padre ciertas sangrías mal hechas en los "¡Cuantos debe de haber en el mundo que huyen
costales de los que allí a moler venían, por lo que de otros porque no se ven a sí mesmos!"
fue preso, y confeso y no negó y padeció Quiso nuestra fortuna que la conversación del
persecución por justicia. Espero en Dios que está Zaide, que así se llamaba, llegó a oídos del
en la Gloria, pues el Evangelio los llama mayordomo, y hecha pesquisa, hallose que la
bienaventurados. En este tiempo se hizo cierta mitad por medio de la cebada, que para las
armada contra moros, entre los cuales fue mi bestias le daban, hurtaba, y salvados, lena,
padre, que a la sazón estaba desterrado por el almohazas, mandiles, y las mantas y sabanas de
desastre ya dicho, con cargo de acemilero de un los caballos hacia perdidas, y cuando otra cosa
caballero que allá fue, y con su señor, como leal no tenía, las bestias desherraba, y con todo esto
criado, feneció su vida. acudía a mi madre para criar a mi hermanico. No
Mi viuda madre, como sin marido y sin abrigo se nos maravillemos de un clérigo ni fraile, porque
viese, determino arrimarse a los buenos por ser el uno hurta de los pobres y el otro de casa para
uno dellos, y vinose a vivir a la ciudad, y alquilo sus devotas y para ayuda de otro tanto, cuando a
una casilla, y metiose a guisar de comer a ciertos un pobre esclavo el amor le animaba a esto. Y
estudiantes, y lavaba la ropa a ciertos mozos de probosele cuanto digo y aún más, porque a mí
caballos del Comendador de la Magdalena, de con amenazas me preguntaban, y como niño
manera que fue frecuentando las caballerizas. respondía, y descubría cuanto sabía con miedo,
Ella y un hombre moreno de aquellos que las hasta ciertas herraduras que por mandado de mi
bestias curaban, vinieron en conocimiento. Este madre a un herrero vendí. Al triste de mi
algunas veces se venía a nuestra casa, y se iba a padrastro azotaron y pringaron, y a mi madre
la mañana; otras veces de día llegaba a la puerta, pusieron pena por justicia, sobre el
en achaque de comprar huevos, y entrabase en acostumbrado centenario, que en casa del
casa. Yo al principio de su entrada, pesabame sobredicho
con él y habiale miedo, viendo el color y mal Comendador no
gesto que tenía; más de que vi que con su venida entrase, ni al
mejoraba el comer, fuile queriendo bien, porque lastimado Zaide
siempre traía pan, pedazos de carne, y en el en la suya
invierno leños, a que nos calentábamos. De acogiese.
manera que, continuando con la posada y Por no echar la
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soga tras el caldero, la triste se esforzó y cumplió Pareciome que en aquel instante desperté de la
la sentencia; y por evitar peligro y quitarse de simpleza en que como niño dormido estaba. Dije
malas lenguas, se fue a servir a los que al entre mí:
presente vivían en el mesón de la Solana; y allí, "Verdad dice este, que me cumple avivar el ojo y
padeciendo mil importunidades, se acabó de avisar, pues solo soy, y pensar como me sepa
criar mi hermanico hasta que supo andar, y a mí valer."
hasta ser buen mozuelo, que iba a los huéspedes Comenzamos nuestro camino, y en muy pocos
por vino y candelas y por lo demás que me días me mostró jerigonza, y como me viese de
mandaban. En este tiempo vino a posar al mesón buen ingenio, holgabase mucho, y decía:
un ciego, el cual, pareciendole que yo sería para "Yo oro ni plata no te lo puedo dar, más avisos
adestralle, me pidió a mi madre, y ella me para vivir muchos te mostrare."
encomendó a él, diciendole como era hijo de un Y fue así, que después de Dios este me dio la
buen hombre, el cual por ensalzar la fe había vida, y siendo ciego me alumbro y adestró en la
muerto en la de los Gelves, y que ella confiaba en carrera de vivir. Huelgo de contar a vuestra
Dios no saldría peor hombre que mi padre, y que merced estas niñerías para mostrar cuanta virtud
le rogaba me tratase bien y mirase por mí, pues sea saber los hombres subir siendo bajos, y
era huérfano. Él le respondió que así lo haría, y dejarse bajar siendo altos cuanto vicio.
que me recibía no por mozo sino por hijo. Y así le Pues tornando al bueno de mi ciego y contando
comencé a servir y adestrar a mi nuevo y viejo sus cosas, vuestra merced sepa que desde que
amo. Dios crío el mundo, ninguno formo más astuto ni
Como estuvimos en Salamanca algunos días, sagaz. En su oficio era un águila; ciento y tantas
pareciendole a mi amo que no era la ganancia a oraciones sabia de coro: un tono bajo, reposado
su contento, determino irse de allí; y cuando nos y muy sonable que hacia resonar la iglesia donde
hubimos de partir, yo fui a ver a mi madre, y rezaba, un rostro humilde y devoto que con muy
ambos llorando, me dio su bendición y dijo: buen continente ponía cuando rezaba, sin hacer
"Hijo, ya sé que no te veré más. Procura ser gestos ni visajes con boca ni ojos, como otros
bueno, y Dios te guíe. Criado te he y con buen suelen hacer. Allende desto, tenía otras mil
amo te he puesto. Valete por ti."Y así me fui para formas y maneras para sacar el dinero. Decía
mi amo, que esperandome estaba. Salimos de saber oraciones para muchos y diversos efectos:
Salamanca, y llegando a la puente, está a la para mujeres que no parían, para las que estaban
entrada della un animal de piedra, que casi tiene de parto, para las que eran malcasadas, que sus
forma de toro, y el ciego mandome que llegase maridos las quisiesen bien; echaba pronósticos a
cerca del animal, y allí puesto, me dijo: las preñadas, si traía hijo o hija. Pues en caso de
"Lázaro, llega el oído a este toro, y oirás gran medicina, decía que Galeno no supo la mitad que
ruido dentro del."Yo simplemente llegue, él para muela, desmayos, males de madre.
creyendo ser ansí; y como sintió que tenía la Finalmente, nadie le decía padecer alguna
cabeza par de la piedra, afirmo recio la mano y pasión, que luego no le decía: "Haced esto,
diome una gran calabazada en el diablo del toro, haréis estotro, cosed tal yerba, tomad tal raíz."
que más de tres días me duró el dolor de la Con esto andabase todo el mundo tras él,
cornada, y dijome: especialmente mujeres, que cuanto les decían
"Necio, aprende creían. Destas sacaba él grandes provechos con
que el mozo del las artes que digo, y ganaba más en un mes que
ciego un punto cien ciegos en un ano.
ha de saber más Mas también quiero que sepa vuestra merced
que el diablo", y que, con todo lo que adquiría, jamas tan
rió mucho la avariento ni mezquino hombre no vi, tanto que
burla.
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me mataba a mí de hambre, y así no me oración no acababa, porque me tenía mandado
demediaba de lo necesario. que en yendose el que la mandaba rezar, le tirase
Digo verdad: si con mi sotileza y buenas manas por el cabo del capuz. Yo así lo hacía. Luego él
no me supiera remediar, muchas veces me finara tornaba a dar voces, diciendo: "¿Mandan rezar tal
de hambre; mas con todo su saber y aviso le y tal oración?", como suelen decir. Usaba poner
contaminaba de tal suerte que siempre, o las más cabe si un jarrillo de vino cuando comíamos, y yo
veces, me cabía lo más y mejor. Para esto le hacía muy de presto le asía y daba un par de besos
burlas endiabladas, de las cuales contaré algunas, callados y tornabale a su lugar. Más durome
aunque no todas a mi salvo. poco, que en los tragos conocía la falta, y por
Él traía el pan y todas las otras cosas en un fardel reservar su vino a salvo nunca después
de lienzo que por la boca se cerraba con una desamparaba el jarro, antes lo tenía por el asa
argolla de hierro y su candado y su llave, y al asido; mas no había piedra imán que así trajese
meter de todas las cosas y sacallas, era con tan así como yo con una paja larga de centeno, que
gran vigilancia y tanto por contadero, que no para aquel menester tenia hecha, la cual
bastaba hombre en todo el mundo hacerle metiendola en la boca del jarro, chupando el vino
menos una migaja; mas yo tomaba aquella lo dejaba a buenas noches. Mas como fuese el
lacería que él me daba, la cual en menos de dos traidor tan astuto, pienso que me sintió, y dende
bocados era despachada. en adelante mudo proposito, y asentaba su jarro
Después que cerraba el candado y se descuidaba entre las piernas, y atapabale con la mano, y ansí
pensando que yo estaba entendiendo en otras bebía seguro. Yo, como estaba hecho al vino,
cosas, por un poco de costura, que muchas veces moría por él, y viendo que aquel remedio de la
del un lado del fardel descosía y tornaba a coser, paja no me aprovechaba ni valía, acorde en el
sangraba el avariento fardel, sacando no por tasa suelo del jarro hacerle una fuentecilla y agujero
pan, más buenos pedazos, torreznos y longaniza; sotil, y delicadamente con una muy delgada
y ansí buscaba conveniente tiempo para rehacer, tortilla de cera taparlo, y al tiempo de comer,
no la chaza, sino la endiablada falta que el mal fingiendo haber frío, entrabame entre las piernas
ciego me faltaba. Todo lo que podía sisar y del triste ciego a calentarme en la pobrecilla
hurtar, traía en medias blancas; y cuando le lumbre que teníamos, y al calor della luego
mandaban rezar y le daban blancas, como él derretida la cera, por ser muy poca, comenzaba
carecía de vista, no había el que se la daba la fuentecilla a destillarme en la boca, la cual yo
amagado con ella, cuando yo la tenía lanzada en de tal manera ponía que maldita la gota se
la boca y la media aparejada, que por presto que perdía. Cuando el pobreto iba a beber, no
el echaba la mano, ya iba de mi cambio hallaba nada:
aniquilada en la mitad del justo precio. espantabase, maldecía, daba al diablo el jarro y el
Quejabaseme el mal ciego, porque al tiento vino, no sabiendo que podía ser.
luego conocía y sentía que no era blanca entera, "No diréis, tío, que os lo bebo yo -decía-, pues
y decía: no le quitáis de la mano."
"¿Que diablo es esto, que después que conmigo Tantas vueltas y tiento dio al jarro, que hallo la
estas no me dan sino medias blancas, y de antes fuente y cayó en la burla; mas así lo disimulo
una blanca y un como si no lo hubiera sentido, y luego otro día,
maravedí hartas teniendo yo rezumando mi jarro como solía, no
veces me pagaban? pensando en el daño que me estaba aparejado ni
En ti debe estar esta que el mal ciego me sentía, senteme como solía,
desdicha." estando recibiendo aquellos dulces tragos, mi
También él cara puesta hacia el cielo, un poco cerrados los
abreviaba el rezar y ojos por mejor gustar el sabroso licor, sintió el
la mitad de la desesperado ciego que agora tenía tiempo de
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tomar de mi venganza y con toda su fuerza, daño: si había piedras, por ellas, si lodo, por lo
alzando con dos manos aquel dulce y amargo más alto; que aunque yo no iba por lo más
jarro, le dejo caer sobre mi boca, ayudandose, enjuto, holgabame a mí de quebrar un ojo por
como digo, con todo su poder, de manera que el quebrar dos al que ninguno tenía. Con esto
pobre Lázaro, que de nada desto se guardaba, siempre con el cabo alto del tiento me atentaba
antes, como otras veces, estaba descuidado y el colodrillo, el cual siempre traía lleno de
gozoso, verdaderamente me pareció que el cielo, tolondrones y pelado de sus manos; y aunque yo
con todo lo que en él hay, me había caído juraba no lo hacer con malicia, sino por no hallar
encima. Fue tal el golpecillo, que me desatino y mejor camino, no me aprovechaba ni me creía
saco de sentido, y el jarrazo tan grande, que los más: tal era el sentido y el grandísimo
pedazos del se me metieron por la cara, entendimiento del traidor.
rompiendomela por muchas partes, y me quebró Y porque vea vuestra merced a cuanto se
los dientes, sin los cuales hasta hoy día me extendía el ingenio deste astuto ciego, contare
quede. un caso de muchos que con él me acaecieron, en
Desde aquella hora quise mal al mal ciego, y el cual me parece dio bien a entender su gran
aunque me quería y regalaba y me curaba, bien astucia. Cuando salimos de Salamanca, su motivo
vi que se había holgado del cruel castigo. fue venir a tierra de Toledo, porque decía ser la
Lavome con vino las roturas que con los pedazos gente más rica, aunque no muy limosnera.
del jarro me había hecho, y sonriendose decía: Arrimabase a este refrán: "Mas da el duro que el
"¿Qué te parece, Lázaro? Lo que te enfermo te desnudo." Y venimos a este camino por los
sana y da salud", y otros donaires que a mi gusto mejores lugares. Donde hallaba buena acogida y
no lo eran. ganancia, deteniamonos; donde no, a tercero día
Ya que estuve medio bueno de mi negra trepa y hacíamos Sant Juan.
cardenales, considerando que a pocos golpes Acaeció que llegando a un lugar que llaman
tales el cruel ciego ahorraría de mí, quise yo Almorox, al tiempo que cogían las uvas, un
ahorrar del; mas no lo hice tan presto por hacello vendimiador le dio un racimo dellas en limosna, y
mas a mí salvo y provecho. Y aunque yo quisiera como suelen ir los cestos maltratados y también
asentar mi corazón y perdonalle el jarrazo, no porque la uva en aquel tiempo esta muy madura,
daba lugar el maltratamiento que el mal ciego desgranabasele el racimo en la mano; para
dende allí adelante me hacía, que sin causa ni echarlo en el fardel tornabase mosto, y lo que a
razón me hería, dandome coscorrones y él se llegaba. Acordó de hacer un banquete, ansí
repelandome. Y si alguno le decía porque me por no lo poder llevar como por contentarme,
trataba tan mal, luego contaba el cuento del que aquel día me había dado muchos rodillazos
jarro, diciendo: y golpes. Sentamonos en un valladar y dijo:
"¿Pensareis que este mi mozo es algún inocente? "Agora quiero yo usar contigo de una liberalidad,
Pues oíd si el demonio ensayara otra tal hazana." y es que ambos comamos este racimo de uvas, y
Santiguandose los que lo oían, decían: "¡Mira, que hayas del tanta parte como yo.
quien pensara de un muchacho tan pequeño tal Partillo hemos desta manera:
ruindad!", y reían mucho el artificio, y decianle: tú picaras una vez y yo otra; con tal que me
"Castigaldo, castigaldo, que de Dios lo habréis." prometas no tomar cada vez más de una uva, yo
Y él con aquello haré lo mesmo hasta que lo acabemos, y desta
nunca otra cosa suerte no habrá engaño."
hacía. Y en esto yo Hecho ansí el concierto, comenzamos; mas luego
siempre le llevaba al segundo lance; el traidor mudo de propósito y
por los peores comenzó a tomar de dos en dos, considerando
caminos, y adrede, que yo debería hacer lo mismo. Como vi que él
por le hacer mal y quebraba la postura, no me contente ir a la par
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con él, más aun pasaba adelante: dos a dos, y comida y cena”. “No le comeré yo -dije- y no me
tres a tres, y como podía las comía. la dará."
Acabado el racimo, estuvo un poco con el "Yo te digo verdad; si no, verlo has, si vives."
escobajo en la mano y meneando la cabeza dijo: Y ansí pasamos adelante hasta la puerta del
"Lázaro, engañado me has: jurare yo a Dios que mesón, adonde pluguiere a Dios nunca allá
has tu comido las uvas tres a tres.""No comí -dije llegáramos, según lo que me sucedía en él.
yo- más ¿por qué sospecháis eso? "Respondió el Era todo lo más que rezaba por mesoneras y por
sagacisimo ciego: bodegoneras y turroneras y rameras y ansí por
"¿Sabes en que veo que las comiste tres a tres? semejantes mujercillas, que por hombre casi
En que comía yo dos a dos y callabas." , a lo cual nunca le vi decir oración.
yo no respondí. Yendo que ibamos ansí por Reime entre mí, y aunque muchacho note mucho
debajo de unos soportales en Escalona, adonde a la discreta consideración del ciego.
la sazón estábamos en casa de un zapatero, Mas por no ser prolijo dejo de contar muchas
había muchas sogas y otras cosas que de esparto cosas, así graciosas como de notar, que con este
se hacen, y parte dellas dieron a mi amo en la mi primer amo me acaecieron, y quiero decir el
cabeza; el cual, alzando la mano, toco en ellas, y despidiente y con el acabar.
viendo lo que era dijome: Estábamos en Escalona, villa del duque della, en
"Anda presto, muchacho; salgamos de entre tan un mesón, y diome un pedazo de longaniza que
mal manjar, que ahoga sin comerlo." la asase. Ya que la longaniza había pringado y
Yo, que bien descuidado iba de aquello, mire lo comidose las pringadas, saco un maravedí de la
que era, y como no vi sino sogas y cinchas, que bolsa y mando que fuese por el de vino a la
no era cosa de comer, dijele: taberna. Pusome el demonio el aparejo delante
"Tío, ¿por qué decís eso?"Respondiome: los ojos, el cual, como suelen decir, hace al
"Calla, sobrino; según las mañas que llevas, lo ladrón, y fue que había cabe el fuego un nabo
sabrás y veras como digo verdad." pequeño, larguillo y ruinoso, y tal que, por no ser
Y ansí pasamos adelante por el mismo portal y para la olla, debió ser echado allí. Y como al
llegamos a un mesón, a la puerta del cual había presente nadie estuviese sino él y yo solos, como
muchos cuernos en la pared, donde ataban los me vi con apetito goloso, habiendome puesto
recueros sus bestias. Y como iba tentando si era dentro el sabroso olor de la longaniza, del cual
allí el mesón, adonde él rezaba cada día por la solamente sabía que había de gozar, no mirando
mesonera la oración de la emparedada, asió de que me podría suceder, pospuesto todo el temor
un cuerno, y con un gran suspiro dijo: por cumplir con el deseo, en tanto que el ciego
"¡Oh, mala cosa, peor que tienes la hechura! !¡De sacaba de la bolsa el dinero, saque la longaniza y
cuantos eres deseado muy presto metí el sobredicho nabo en el asador,
poner tu nombre el cual mi amo, dandome el dinero para el vino,
sobre cabeza ajena y tomo y comenzó a dar vueltas al fuego,
de cuan pocos queriendo asar al que de ser cocido por sus
tenerte ni aun oír tu deméritos había escapado.
nombre, por ninguna Yo fui por el vino, con el cual no tarde en
veía!"Como le oí lo despachar la longaniza, y cuando vine halle al
que decía, dije: pecador del ciego que tenía entre dos rebanadas
"Tío, ¿qué es eso que apretado el nabo, al cual aún no habia conocido
decís?" por no lo haber tentado con la mano. Como
"Calla, sobrino, que tomase las rebanadas y mordiese en ellas
algún día te dará pensando también llevar parte de la longaniza,
este, que en la mano hallose en frío con el frío nabo. Alterose y dijo:
tengo, alguna mala "¿Qué es esto, Lazarillo?"
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"¡Lacerado de mí! -dije yo-. ?¿Si queréis a mi aunque yo estaba tan maltratado y llorando, me
echar algo? ?¿Yo no vengo de traer el vino? parecía que hacia sinjusticia en no se las reír.
Alguno estaba ahí, y por burlar haría esto." Y en cuanto esto pasaba, a la memoria me vino
"No, no -dijo él-, que yo no he dejado el asador una cobardía y flojedad que hice, porque me
de la mano; no es posible " maldecía, y fue no dejalle sin narices, pues tan
Yo torne a jurar y perjurar que estaba libre de buen tiempo tuve para ello que la mitad del
aquel trueco y cambio; mas poco me aprovecho, camino estaba andado; que con solo apretar los
pues a las astucias del maldito ciego nada se le dientes se me quedaran en casa, y con ser de
escondía. Levantose y asiome por la cabeza, y aquel malvado, por ventura lo retuviera mejor mi
llegose a olerme; y como debió sentir el huelgo, estómago que retuvo la longaniza, y no
a uso de buen podenco, por mejor satisfacerse pareciendo ellas pudiera negar la demanda.
de la verdad, y con la gran agonía que llevaba, Pluguiera a Dios que lo hubiera hecho, que eso
asiendome con las manos, abriame la boca más fuera así que así. Hicieronnos amigos la
de su derecho y desatentadamente metía la mesonera y los que allí estaban, y con el vino que
nariz, la cual el tenia luenga y afilada, y a aquella para beber le habia traído, lavaronme la cara y la
sazón con el enojo se habían aumentado un garganta, sobre lo cual discantaba el mal ciego
palmo, con el pico de la cual me llego a la gulilla. donaires, diciendo:
Y con esto y con el gran miedo que tenía, y con "Por verdad, mas vino me gasta este mozo en
la brevedad del tiempo, la negra longaniza aun lavatorios al cabo del ano que yo bebo en dos. A
no habia hecho asiento en el estómago, y lo más lo menos, Lázaro, eres en mas cargo al vino que a
principal, con el destiento de la cumplidísima tu padre, porque él una vez te engendro, mas el
nariz medio cuasi ahogandome, todas estas vino mil te ha dado la vida."
cosas se juntaron y fueron causa que el hecho y Y luego contaba cuantas veces me habia
golosina se manifestase y lo suyo fuese devuelto descalabrado y arpado la cara, y con vino luego
a su dueño: de manera que antes que el mal sanaba.
ciego sacase de mi boca su trompa, tal alteración "Yo te digo -dijo- que si un hombre en el mundo
sintió mi estómago que le dio con el hurto en ha de ser bienaventurado con vino, que seras tú."
ella, de suerte que su nariz y la negra Y reían mucho los que me lavaban con esto,
malmascada longaniza a un tiempo salieron de aunque yo renegaba. Mas el pronóstico del ciego
mi boca. no salio mentiroso, y después aca muchas veces
¡Oh, gran Dios, quien estuviera aquella hora me acuerdo de aquel hombre, que sin duda
sepultado, que muerto ya lo estaba! Fue tal el debía tener espíritu de profecía, y me pesa de los
coraje del perverso ciego que, si al ruido no sinsabores que le hice, aunque bien se lo pague,
acudieran, pienso no me dejara con la vida. considerando lo que aquel día me dijo salirme
Sacaronme de entre sus manos, dejandoselas tan verdadero como adelante vuestra merced
llenas de aquellos pocos cabellos que tenía, oirá.
arañada la cara y rascuñado el pescuezo y la Visto esto y las malas burlas que el ciego burlaba
garganta; y esto bien lo merecía, pues por su de mí, determine de todo en todo dejalle, y
maldad me venían tantas persecuciones. como lo traía
Contaba el mal ciego a todos cuantos allí se pensado y lo tenía en
allegaban mis desastres, y dabales cuenta una y voluntad, con este
otra vez, así de la del jarro como de la del racimo, postrer juego que me
y agora de lo presente. Era la risa de todos tan hizo afirmelo más. Y
grande que toda la gente que por la calle pasaba fue ansí, que luego
entraba a ver la fiesta; mas con tanta gracia y otro día salimos por
donaire recontaba el ciego mis hazanas que, la villa a pedir
limosna, y habia
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llovido mucho la noche antes; y porque el día sobre la cual y sobre otros cargaban saledizos de
también llovía, y andaba rezando debajo de unos aquellas casas, y digole: "Tío, este es el paso más
portales que en aquel pueblo habia, donde no angosto que en el arroyo hay."
nos mojamos; mas como la noche se venía y el Como llovía recio, y el triste se mojaba, y con la
llover no cesaba, dijome el ciego: priesa que llevábamos de salir del agua que
"Lázaro, esta agua es muy porfiada, y cuanto la encima de nos caía, y lo más principal, porque
noche más cierra, más recia. Acojámonos a la Dios le cegó aquella hora el entendimiento (fue
posada con tiempo." por darme del venganza), creyose de mí y dijo:
Para ir allá, habíamos de pasar un arroyo que con "Ponme bien derecho, y salta tú el arroyo."
la mucha agua iba grande. Yo le dije: Yo le puse bien derecho enfrente del pilar, y doy
"Tío, el arroyo va muy ancho; más si queréis, yo un salto y póngome detrás del poste como quien
veo por donde travesemos más aína sin nos espera tope de toro, y dijele:
mojar, porque se estrecha allí mucho, y saltando "¡Sus! Salta todo lo que podáis, porque deis
pasaremos a pie enjuto."Pareciole buen consejo y deste cabo del agua. "Aun apenas lo habia
dijo: acabado de decir cuando se abalanza el pobre
"Discreto eres; por esto te quiero bien. Llevame a ciego como cabrón, y de toda su fuerza
ese lugar donde el arroyo se ensangosta, que arremete, tomando un paso atrás de la corrida
agora es invierno y sabe mal el agua, y más llevar para hacer mayor salto, y da con la cabeza en el
los pies mojados." poste, que sonó tan recio como si diera con una
Yo, que vi el gran calabaza, y cayo luego para atrás, medio
aparejo a mi muerto y hendida la cabeza.
deseo, "¿Cómo, y oliste la longaniza y no el poste? ¡Ole!
saquele ¡Ole! -le dije yo. Y dejele en poder de mucha
debajo de gente que lo habia ido a socorrer, y tome la
los portales, puerta de la villa en los pies de un trote, y antes
y llevelo que la noche viniese di conmigo en Torrijos. No
derecho de supe más lo que Dios del hizo, ni cure de lo saber
un pilar o poste de piedra que en la plaza estaba,

FICHA DE ANÁLISIS
I. LOCALIZACIÓN DEL TEXTO:
Título de la obra: ............................................................................................................
Parte leída: ........................................................................................................................
Autor:..................................................................................................................................
Etapa literaria: ( ) Clásica ( ) Medieval ( ) Siglo de oro
Género literario: ( ) lírico ( ) épico – narrativo ( ) dramático
Especie literaria: ( ) cuento ( ) fábula ( ) novela ( ) leyenda
Forma del lenguaje: ( ) prosa ( ) verso
II. COMPRENSIÓN:
1. ¿Dónde nació Lazarillo?
a. En Tejares b. En la aldea de c. En el río San Lázaro
d. En el río de Tormes
Salamanca
2. ¿Quién fue su padre?
a. Un ex convicto de b. Un negrito de la c. Un proveedor de d. Un comendador de
la guerra mina una molinera Magdalena
3. ¿Tuvo hermanos? ¿Quién fue?

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a. Un hermanito b. Dos hermanitos c. Un negrito bonito d. Una negrita
blanquito graciosita
4. ¿Quién fue el primer amo de Lázaro?
a. Un carpintero b. Un ciego c. Un bulero d. Un consejero
5. ¿Quién tuvo la primera mala acción?
a. El ciego b. Lázaro c. La madre de Lázaro d. TA
6. ¿Por qué la madre se Lázaro lo entregó a un “amo”?
a. Ella no podía educarlo c. Su padrastro le pidió a su madre
b. Lázaro estaba aburrido de vivir en esa casa d. El ciego le enseñaría a ganarse la vida
7. Qué quiso decir el ciego con la frase: “…el mozo del ciego un punto ha de saber más que el
diablo?
a. Que conocía todas las cosas del mundo c. Que era más inteligente que el diablo
b. Que era astuto e inteligente d. Que el ciego era más astuto que Lázaro
8. ¿Qué suceso no le ocurren a Lázaro junto al ciego?
a. Lázaro es entregado a un ciego por su c. El ciego le asesta un golpe contra una roca a
madre. Lázaro.
b. El ciego engaña a Lázaro cuando comen uvas d. Lázaro conoce a su hermanito
9. ¿Cómo era el ciego?
a. ciego y anciano b. astuto y cruel c. viejo e ingenuo d. pobre y astuto
10. ¿Quién rompe el pacto sobre cómo comerán las uvas, por qué?
a. Lázaro, al ver que el ciego comía más. c. Lázaro, porque le gustaban las uvas.
b. El ciego, porque siempre era así. d. El ciego, para probar la honestidad de Lázaro.

11. ¿Qué quiere decir el refrán “Más da el duro, ¿que el desnudo”?

a. Que es más fuerte el viejo que el niño. c. Que el tacaño da más que el sin ropa.
b. Que el rico puede pagar más que el pobre. d. Que el ciego puede pagar más que Lázaro
12. ¿Qué aprenderá Lázaro del ciego?
a. A ser astuto y cruel b. A vivir como un c. Valores y virtudes d. Muchas gratas
mendigo experiencias

III. JUZGA LA CONDUCTA DE LOS PERSONAJES: (En tu cuaderno responde las preguntas)
13. ¿Qué opinas del comportamiento de Lázaro con el ciego? ...........................................................................
14. ¿Cómo trata el ciego a Lázaro? ¿Crees que el ciego cumplió con la promesa que le hizo a su
madre? ...............................................................................................................................................................................
15. ¿Te parece que Lázaro tiene características de un héroe o de un antihéroe? ¿Por qué? ....................
16. ¿Qué valores y antivalores encuentras en Lázaro? ............................................................................................
17. ¿Qué valores y antivalores encuentras en el ciego? ..........................................................................................
18. Actualmente también hay personas que viven marginalmente, ¿crees que pueden devaluarse?
¿Por qué? ..........................................................................................................................................................................
19. ¿Lo ético-moral en las personas está relacionado directamente con el poder económico? ............
20. Crea o copia un refrán que se relacione con el texto .......................................................................................
IV. CREATIVIDAD:
21. IMAGINA Y DESCRIBE el aspecto físico y la personalidad de Lázaro.
Cerca de Salamanca vivía un niño de aproximadamente 14 años, era de aspecto delgado como
un sorbete de refresco, tenía unos cabellos color bronce, oxidado por el tiempo, su……
22. ANIMACIÓN: Dibuja a Lázaro y al ciego.

Prof. Danitza Ruiz Cano