LOS PROCEDIMIENTOS ESPECIALES en Materia Penal Ignamar
LOS PROCEDIMIENTOS ESPECIALES en Materia Penal Ignamar
LOS PROCEDIMIENTOS ESPECIALES en Materia Penal Ignamar
Son ocho los procedimientos contemplados y tienen como característica común, el que presentan
variantes respecto al orden de las fases que contempla el procedimiento ordinario (PO),
suprimiendo una o varias de las fases del PO ya conocidas por nosotros (preparatoria o de
investigación, intermedia, de juicio, de impugnación, de ejecución).
Estos son:
1) El procedimiento abreviado
4) El procedimiento de faltas
5) El procedimiento de extradición.
El COPP prevé en su artículo 372, tres supuestos para la aplicación de estos procedimientos, el cual
se ventilará ante el tribunal de juicio unipersonal:
1) Que se trate de delitos flagrantes, sin importar el quantum de la pena. Recordar que el
tribunal de juicio unipersonal atiende delitos con penas inferiores a cuatro años.
2) Que se trate de delitos menores, con penas privativas de libertad inferiores a cuatro años en
su límite máximo.
Procede la aplicación del procedimiento por admisión de los hechos cuando el imputado consiente
en ello y reconoce su participación en el hecho que se le atribuye, esto puede conllevar a la
imposición inmediata de la pena con una rebaja desde un tercio a la mitad, atendidas todas las
circunstancias y considerados el bien jurídico afectado y el daño social causado.
Esta institución, el procedimiento por admisión de los hechos, supone un acto de disposición de la
parte acusadora y, como aspecto trascendental, el arrepentimiento del imputado; cuyos
antecedentes a nivel de derecho comparado, se ubican en la "conformidad" española y el plea
guilty americano, y a nivel de derecho interno, en “el corte de la causa en providencia”. Este
último dentro de la LEY DE BENEFICIOS EN EL PROCESO PENAL (Gaceta Oficial N° 4.620 del 25 de
agosto de 1993), la cual permitía la conmutación de penas menores para ser cambiadas por multas
o trabajo comunitario.
Se podría justificar porque, tal admisión evita al Estado el desarrollo de un proceso judicial que
siempre resultará costoso.
A diferencia de la exigencia de la legislación española que limita la conformidad con los hechos a
aquellos que constituyan delitos menos graves, el COPP no hace reserva alguna, en consecuencia,
procede la admisión respecto de cualquier hecho punible.
Oportunidad procesal
El COPP, prevé en el art. 376 que la admisión puede concretarse "en la audiencia preliminar" y, tal
acto tiene lugar durante la fase intermedia.
Según el art. 49.1 Constitucional "toda persona tiene derecho a ser notificada de los cargos por los
cuales se le investiga", tales "cargos" se corresponden en la terminología del COPP con la
acusación, por tanto si la admisión de los hechos puede conllevar a la imposición inmediata de la
pena, tal admisión sólo puede efectuarse una vez admitida la acusación, por ello es la acusación el
acto procesal que fija los hechos objeto del proceso, en consecuencia, permitir la admisión en una
oportunidad anterior a la de la audiencia preliminar supondría una violación constitucional. Por las
mismas razones, en el caso de flagrancia, la admisión de los hechos puede verificarse una vez
formulada la acusación y antes del inicio del debate.
Requisitos de la admisión
La admisión que de los hechos haga el imputado debe ser:
a. Voluntaria: Dado que esta admisión supone una renuncia a derechos y garantías judiciales, el
imputado debe conocer el alcance de su aceptación y, en consecuencia, debe voluntariamente
renunciar a esos derechos.
b. Expresa: No cabe una tácita admisión de los hechos. La renuncia a cualquier derecho debe ser
expresa; más aún tomando en consideración que como consecuencia de tal admisión puede
generarse para el imputado una sentencia condenatoria.
Artículo 381 COPP. Altos funcionarios. A los efectos de este Título, son altos funcionarios los
miembros de la Asamblea Nacional, los Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, los
Ministros, el Fiscal General, el Procurador General, el Contralor General de la República, los
Gobernadores y los Jefes de Misiones Diplomáticas de la República.
Deben incluirse, según la doctrina, a los jueces superiores de la Corta de Apelaciones y a los
Presidentes de los Circuitos Penales.
Cuando quiera que el Presidente se ausente, dejará encargado otro funcionario de las
responsabilidades presidenciales. En estas circunstancias, los delitos por éste cometidos, lo serán
con la investidura de Presidente de la República. De igual forma, la muerte intencional del
Presidente Encargado, se calificará como MAGNICIDIO.
Se protege, mas que a la persona, el cargo que desempeñan. De allí el nombre de personas
AFORADAS, las que gozan de un fuero especial. De allí también la necesidad de solicitar un
ANTEJUICIO DE MÉRITO para el enjuiciamiento.
En desarrollo de las atribuciones conferidas por la Constitución en los numerales 2 y 3 del art. 266
al Máximo Tribunal de la República, regula el COPP, entre los arts. 377 y 381, el trámite previo a
seguir para el enjuiciamiento del Presidente de la República, de quien haga sus veces y de los altos
funcionarios del Estado. En estos casos se requiere que el Fiscal General de la República presente
querella ante la Corte Suprema de Justicia; sin embargo, mediante sentencia N° 1331 del 20 de
junio de 2002, la Sala Constitucional del Máximo Tribunal estableció que la víctima puede solicitar
el antejuicio de mérito, pero no puede formalizarlo sin la intervención del Ministerio Público, pues
a este corresponde "con base en lo que investigue, la proposición formal del antejuicio de mérito o
los demás actos conclusivos del proceso penal establecidos en el Código Orgánico Procesal
Penal..." Posteriormente, mediante sentencia del 24 de septiembre del mismo año asentó que
la cualidad de víctima se debe analizar en el caso concreto.
Una vez recibida la querella, la Corte Suprema de Justicia debe convocar, dentro de los treinta días
siguientes, a una audiencia oral y pública para que el imputado dé respuesta a la querella. Abierta
la audiencia, el Fiscal General de la República debe explanar la querella y de inmediato el defensor
exponer los alegatos correspondientes. En estos casos se admite réplica y contraréplica y el
imputado tiene la última palabra.
Concluido el debate la Corte debe declarar, dentro de los cinco días siguientes, si hay o no mérito
para el enjuiciamiento.
Artículo 379 COPP. Procedimiento. Recibida la querella, el Tribunal Supremo de Justicia convocará
a una audiencia oral y pública dentro de los treinta días siguientes para que el imputado dé
respuesta a la querella. Abierta la audiencia, el Fiscal General de la República explanará la querella.
Seguidamente, el defensor expondrá los alegatos correspondientes.
No será posible, por el peligro que atañe a este tipo de personas, el ser colocados junto a
delincuentes comunes, motivo por el cual se designarán locales ad hoc, y en los casos donde
corresponda por motivos de edad, la casa por cárcel.
Si el Tribunal Supremo de Justicia declara que hay mérito para el enjuiciamiento del Presidente de
la República, debe continuar conociendo de la causa hasta sentencia definitiva, previa autorización
de la Asamblea Nacional, a tenor de lo dispuesto en el numeral 2 del art. 266 Constitucional (vide
supra).
Si se trata de los otros altos funcionarios del Estado y se declara que hay méritos para el
enjuiciamiento, deben distinguirse dos supuestos:
c. Si se tratare del Defensor o Defensora del Pueblo, funcionario que goza de inmunidad conforme
a lo establecido en el art. 282 de la Constitución, debe procederse al allanamiento de tal
inmunidad, sin embargo, no establece la Constitución ni la ley cuál es la autoridad competente
para efectuar el allanamiento; no obstante por ser la Asamblea Nacional el órgano del poder
público a quien compete la designación del Defensor del Pueblo, estimamos que será tal órgano
legislativo el legitimada
Cumplidos los requisitos anteriores, la causa seguida al alto funcionario debe tramitarse conforme
a las reglas del proceso ordinario, es decir, procede la convocatoria para el juicio oral y público,
pues la función que en el procedimiento ordinario ejerce el juez de control respecto de la
acusación, en este caso la desempeña el Tribunal Supremo de Justicia; por tanto, la declaratoria de
haber méritos para el enjuiciamiento equivale al auto de apertura a juicio.
Una vez que se han cumplido los trámites necesarios para el enjuiciamiento, el funcionario queda
suspendido e inhabilitado para ejercer cualquier cargo público durante el proceso.
Si el Tribunal declara que no hay lugar para el enjuiciamiento debe pronunciar el sobreseimiento.
Si se tratare de un delito de instancia privada, el trámite ante el Tribunal Supremo de Justicia debe
iniciarlo la víctima, por ser ésta en esos casos la titular de la acción penal.
Este procedimiento se establece ante el Juez de Juicio Unipersonal, por ser las penas
contempladas menores de 4 años en su límite máximo. En este caso no procede la admisión de los
hechos y no procede la apelación. No cabe recurso alguno contra la decisión (387) y se permite la
defensa material; es pues optativa, facultativa, la presencia del ius puniendis, del defensor (389).
Artículo 382. Solicitud. El funcionario que haya tenido conocimiento de la falta, o aquel que la ley
designe para perseguirla, solicitará el enjuiciamiento indicando lo siguiente:
4. Señalamiento de los datos pertinentes, agregando los documentos y los objetosentregados por
el infractor o que se incautaron;
¿QUIEN ES EL FUNCIONARIO?
Artículo 383. Citación a juicio. El funcionario actuante o la persona legitimada, con el auxilio de la
policía, citará a juicio al contraventor, con expresión del tribunal y del plazo dentro del cual deberá
comparecer.
Artículo 386. Debate. En caso contrario, el tribunal llamará inmediatamente a juicio al imputado y
al solicitante; en el mismo acto librará las órdenes necesarias para incorporar en el debate los
medios de prueba cuya producción dependa de la fuerza pública.
Las partes comparecerán a la audiencia con todos los medios probatorios que pretendan hacer
valer.
Artículo 388. Supletoriedad. En todo lo demás, se aplicarán las reglas comunes, adecuadas a la
brevedad y simpleza del procedimiento.
Artículo 389. Defensa. El imputado podrá ser asistido por un defensor, si lo nombrare.
Artículo 390. Proporcionalidad. Las medidas cautelares serán proporcionales a la falta imputada
La Extradición es la institución jurídica que regula, tanto la forma en que un estado determinado,
llamado requirente, debe solicitar a oro estado, llamado requerido, la entrega de una persona que
se ha refugiado, para juzgarla por la presunta comisión de delitos en el territorio del estado
requirente, como las formalidades que debe observar el Estado requerido, para autorizar o no la
entrega. La extradición comprende entre su presupuestos teóricos y en cuanto a la practica tres
Ramas del Derecho:
· El Derecho Procesal Penal. Por definición pertenece a esta rama, ya que el estado requirente
debe acompañar un principio de prueba sobre el delito cometido por la persona solicitada, para
señalar los elementos, la participación del solicitado en el delito imputado y el cumplimiento de
los requisitos para tomar en consideración si la extradición procede.
· El Derecho Internacional Publico. Amerita la colaboración forzosa entre dos Estados
distintos, no es necesario un tratado sobre extradición para que se pueda realizar la solicitud, es
una norma consagrada por el uso internacional. Los tratados internacionales pueden facilitar los
tramites para la extradición entre las partes.
El Artículo 391 del COPP establece como fuentes de la extradición sus propias normas, los
tratados, convenios y acuerdos internacionales, suscritos por la republica.
Los gobiernos extranjeros podrán designar un abogado de libre ejercicio en Venezuela, para que
defienda los intereses en este procedimiento, pero no pueden representarse con abogados
extranjeros conforme a lo establecido por nuestra excluyente Ley de abogados.
Este procedimiento esta destinado al enjuiciamiento de aquellos delitos cuya persecución esta
reservada únicamente a la partes agraviada por la ley penal sustantiva. Por la misma razón, no
podrá procederse al enjuiciamiento de los hechos que pudieran constituir este tipo de delitos, sino
mediante acusación privada de la victima ante el tribunal competente conforme a lo dispuesto en
el artículo 400 y siguientes del COPP.
El artículo 400 del Código Orgánico Procesal Penal establece expresamente lo siguiente: “No podrá
procederse al juicio respecto de delitos de acción dependiente de acusación o instancia de
parte agraviada, sino mediante acusación privada de la víctima ante el tribunal competente
conforme a lo dispuesto en este Título.”
La citada disposición legal no indica otra cosa sino que el procedimiento establecido en el Título VII
del Libro Tercero del Código Orgánico Procesal Penal es el que ha de aplicarse para el
enjuiciamiento de aquellos delitos cuya persecución la ley penal sustantiva reserva únicamente a
la parte agraviada. En este punto la objetividad de este procedimiento es absoluta, ya que no
depende de situaciones sujetivas como la ausencia o la flagrancia, sino exclusivamente de la
determinación que el legislador establezca en la ley penal sustantiva sobre cuáles delitos son
perseguibles exclusivamente por acción de parte agraviada. Así lo reconoce el legislador, cuando
en el artículo 25 del Código Orgánico Procesal Penal estableció que “…solo podrán ser ejercidas
por las víctimas, las acciones que nacen de los delitos que la ley establece como de instancia
privada…”
Ello indica que efectivamente es el legislador el que establece expresamente cuáles delitos son los
que dependen para su enjuiciamiento de la instancia de la parte agraviada. Así, los delitos más
comunes, universalmente considerados como delitos privados son los llamados delitos contra el
honor, es decir, la Difamación y la Injuria, aun cuando el Código Penal reconoce como tales a
algunos otros, como la Apropiación Indebida, los Daños Genéricos a cosa ajena.
Procedencia: Art. 410 COPP. Cuando el Ministerio Público, en razón de la inimputabilidad de una
persona estime que sólo corresponde aplicar una medida de seguridad, requerirá la aplicación de
este procedimiento. La solicitud contendrá, en lo pertinente, los requisitos de la acusación. Ver.
Art. 62 y 63 CP y 128 CPC.Reglas Especiales: Art. 411 COPP. El procedimiento se regirá por las
reglas comunes, salvo las establecidas a continuación:
➢ Cuando el imputado sea incapaz será representado, para todos los efectos por su defensor en
las diligencias del procedimiento, salvo los actos de carácter personal;
➢ El juicio se realizará sin la presencia del imputado cuando sea conveniente a causa de su estado
o por razones de orden y seguridad;
Aplicación del Procedimiento Ordinario cuando elTribunal estime que el investigado es imputable:
Artículo 412 COPP. Cuando el tribunal estime que el investigado no es inimputable, ordenará la
aplicación del procedimiento ordinario
La observación que se señala en este procedimiento, descrito en los artículos 422o. al 431o. del
Código Orgánico Procesal Penal constituye una alternativas cuya opción se deja exclusivamente en
manos del demandante. Esto es, si el demandante opta por proponer la demanda ante los órganos
de la jurisdicción penal, con el rito establecido en los referidos en los artículos del Código Orgánico
Procesal Penal, se seguirá el proceso que más adelante se describe; por el contrario, si el
demandante optare por ejercer su acción ante los órganos de la jurisdicción civil, el proceso a
seguir será el ordinario. En uno y en otro caso la posición del demandado es diversa y depende,
como se ha dicho, únicamente de la voluntad del demandante.
También se debe señalar en que el sistema para el ejercicio de la acción ante los órganos de la
jurisdicción penal terminado el juicio no tiene justificación alguna y constituye un caso excepcional
en el derecho comparado.
El proceso instituido por las antes citadas normas del Código Orgánico Procesal Penal se inicia por
demanda que habrá de proponerse por escrito. La norma del artículo 422o. establece que la
competencia corresponde "al juez unipersonal o el juez presidente del tribunal que dictó la
sentencia".
El artículo 423o. señala los requisitos que ha de cumplir la demanda. Llama la atención que no se
exija al autor la presentación de la sentencia de condena firme cuya existencia constituye un
presupuesto procesal para el ejercicio de la acción civil en sede penal. La ley utiliza por lo demás
términos impropios como, por ejemplo, cuando se refiere a la "reparación deseada y en su caso, el
monto de la indemnización reclamada". A mi manera de ver toda reparación consiste en el pago
del valor de la cosa, a tenor de lo dispuesto en el artículo 121o. del Código Penal.
Presentada la demanda, el juez debe emitir pronunciamiento sobre su admisión o rechazo dentro
de los tres días siguientes a su presentación y deberá para ello examinar la legitimación ad causan
del actor, la correcta representación o personería del representante de la parte actora y el
cumplimiento de los requisitos establecidos en el artículo 423o.
Conforme a lo establecido en la ley, en caso de que no se haya dado cumplimiento a los requisitos
exigidos, así lo resolverá el juez quien deberá fijar el plazo dentro del cual el demandante deberá
cumplirlo. La inadmisión de la demanda no impide que ésta se presente una vez más ni tampoco el
ejercicio de la acción por ante los órganos de la jurisdicción civil.
El artículo 426. del Código Orgánico Procesal Penal dispone que, admitida la demanda, el juez
ordenará la reparación del daño o la indemnización de perjuicios mediante providencia que
contendrá, además de la identificación de las partes y de sus representantes, "la orden de reparar
los daños, con su descripción concreta y detallada, la clase y extensión de la reparación o el monto
de la indemnización" y "la intimación a cumplir la reparación o indemnización o, en caso contrario,
a objetarla en el término de diez días". De modo pues que se entiende que el demandado resulta
condenado al pago del monto de la reparación o de la indemnización que corresponda en sus
respectivos casos, e intimado a reparar o indemnizar en el término de diez días o, en caso
contrario, a objetar la condena, dentro del mismo término.
Si la parte demandada opone objeciones, como hemos dicho, hay lugar al acto de la conciliación
que convocará el juez conforme a los establecido en el artículo 428o. La inasistencia del
demandante a este acto de conciliación produce como efecto el desistimiento de procedimiento,
con la consecuencia de que en lo adelante la acción deberá ser deducida ante los órganos de la
jurisdicción civil. En cambio, la contumacia del demandado que no comparece a la audiencia de
conciliación produce como efecto que la intimación adquiera fuerza ejecutoria y pueda procederse
a la ejecución forzosa. La sanción parece extemporánea, porque ha debido unirse a la contumacia
de comparecer a la intimación y no a la audiencia conciliatoria, y no sólo extemporánea sino
excesiva ya que el control del alcance la de la indemnización está de hecho inclusive sustraído a la
competencia del juez y queda al arbitrio del demandante. Los resultados pueden ser francamente
inequitativos y deberían concederse recursos al condenado.
Cuando habiendo habido lugar a las "objeciones" y por ende a la conciliación, sin que ésta se
hubiere producido, en cuyo caso el juez deberá ordenar la continuación del procedimiento como
lo establece el citado artículo 428o., se citarán las partes para la audiencia probatoria que deberá
realizarse en un término no menos de diez días ni mayor de treinta. En dicha audiencia se
incorporarán las pruebas y concluida la evacuación de la mismas se dictará un fallo inapelable.
Si no hay objeciones por falta de oportuna proposición por el demandado de tales defensas, no
hay lugar, como hemos dicho, a la audiencia de conciliación y al no celebrarse la conciliación es
imposible que se produzca el efecto previsto en el primer aparte del artículo 429., por lo que debe
disponerse, también en ese caso, la continuación del procedimiento -sin que la ley fije entonces la
oportunidad para ello- y la apertura de la audiencia que será, en definitiva un juicio
ordinario. Este procedimiento a pesar de ser naturaleza netamente civil se lleva a cabo ante el
Juez de la Jurisdicción Penal que dictó la decisión condenatoria.
Para que proceda la acción debe existir sentencia condenatoria definitivamente firme y
ejecutoriada que es la prueba fundamental.
Puede intentar esta acción la víctima siempre y cuando haya sido acreditada como tal en el
proceso penal, en el entendido de víctima a todas aquellas personas que el mismo código
establece como tal; pero no todas las víctimas pueden hacerse parte en la acción.
En lo relativo al sujeto pasivo de esta acción el COPP y la jurisprudencia establecen dos cosas
totalmente distintas. Según lo que prescribe el COPP esta acción puede interponerse en primer
lugar contra el condenado y contra el tercero responsable civilmente. Acorde a lo previsto en el
artículo 1.185 CCV, relativo al hecho ilícito: "El que con intención, o por negligencia o por
imprudencia, ha causado un daño a otro, está obligado a repararlo.
Debe igualmente reparación quien haya causado un daño a otro, excediendo, en el ejercicio de su
derecho, los límites fijados por la buena fe o por el objeto en vista del cual le ha sido conferido ese
derecho".
El Código Civil comprende todas las formas de comisión del delito: intención, culpa, negligencia,
inobservancia (omisión), etc.
En resumen el COPP nos establece que puede interponerse la acción contra el condenado y los
terceros responsables civilmente, incluyendo entre estos a:
· Incapaces
· Inimputables
· Empleados y subalternos
· Curadores especiales
· Menores, etc.
La audiencia preliminar habrá siempre de ser privada, por cuanto de esta forma se evita el llamado
JUICIO DE BANQUILLO, mediante el cual la simple publicidad del caso, puede llevar a enjuiciar al
imputado solo en base a la opinión pública.
En los casos de delitos menores, aquellos con penas privativas de libertad menores de 4 años en
su límite máximo, o delitos que no merezcan penas privativas de libertad, el FMP, puede solicitar
dentro de los 15 días siguientes al primer acto del procedimiento, la aplicación del procedimiento
abreviado. El juez oirá al imputado y dictará la decisión que corresponda.
Artículo 248. Definición. Para los efectos de este Capítulo se tendrá como delito flagrante el que se
esté cometiendo o el que acaba de cometerse. También se tendrá como delito flagrante aquel por
el cual el sospechoso se vea perseguido por la autoridad policial, por la víctima o por el clamor
público, o en el que se le sorprenda a poco de haberse cometido el hecho, en el mismo lugar o
cerca del lugar donde se cometió, con armas, instrumentos u otros objetos que de alguna manera
hagan presumir con fundamento que él es el autor.
Recordar que el investigado o imputado solo puede ser aprehendido mediante orden judicial,
solicitada por el FMP y debidamente justificada. El encontrado en flagrante delito en cambio
puede ser aprehendido por cualquier autoridad policial y cualquier particular, (vide supra, artículo
248).
Caso practico
Caso: “El 10 de junio de 2021, la abogada Doris González Araujo, inscrita en el Instituto
de Previsión Social del Abogado bajo el N° 21.946, quien adujo actuar en su carácter de
defensora del ciudadano “MELANEO JOSÉ MONASTERIOS RODRÍGUEZ”, titular de la
cédula de identidad N° 18.930.345, interpuso ante la Secretaría de esta Sala
Constitucional solicitud de revisión constitucional de la decisión N° 021-21 dictada el 17 de
febrero de 2021, por la Sala N° 2 de la Corte de Apelaciones del Circuito Judicial Penal
del Estado Zulia, mediante la cual se declaró la nulidad de oficio del fallo dictado el 22 de
julio de 2019, por el Juzgado Séptimo de Primera Instancia en Funciones de Juicio del
Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, el cual a su vez condenó, bajo el procedimiento
de admisión de los hechos, al ciudadano “Melaneo José Monasterios Rodríguez”, a
cumplir la pena de cinco (5) años y diez (10) meses de prisión por la comisión del delito
de “homicidio calificado” en perjuicio de la ciudadana Stefany Luz González.”
Decisión: “Por las razones que anteceden, este Tribunal Supremo de Justicia, en Sala
Constitucional, administrando justicia en nombre de la República, por autoridad de la ley,
declara: NO HA LUGAR la solicitud de revisión constitucional ejercida por la abogada
Doris González Araujo, actuando en su carácter de defensora del ciudadano “Melaneo
José Monasterios Rodríguez”, de la decisión N° 021-21 dictada el 17 de febrero de 2021,
por la Sala N° 2 de la Corte de Apelaciones del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia,
mediante la cual se declaró la nulidad de oficio del fallo dictado el 22 de julio de 2019, por
el Juzgado Séptimo de Primera Instancia en Funciones de Juicio del Circuito Judicial
Penal del Estado Zulia, el cual a su vez condenó, bajo el procedimiento de admisión de
los hechos, al ciudadano “Melaneo José Monasterios Rodríguez”, a cumplir la pena de
cinco (5) años y diez (10) meses de prisión por la comisión del delito de “homicidio
calificado” en perjuicio de la ciudadana Stefany Luz González.”