Incas y Diaguitas

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Los pueblos diaguitas.

Para contar la historia de los diaguitas vamos a ubicarnos en el año 1200. Muchos pueblos vivían en los cerros,
valles y quebradas del noroeste del actual territorio argentino, en tierras que hoy corresponden a las provincias de
Jujuy, Salta, La Rioja, parte de Tucumán y Catamarca. Eran los Quilmes, los tolombones, los pulares y muchos más.
Cuando los incas los invadieron, los llamaron “diaguitas”. A los diaguitas les gustaba contar que habían rechazado al
Imperio Inca en dos oportunidades, allá por el 1300. Pero en una tercera avanzada los incas finalmente quebraron la
resistencia de los diaguitas y ocuparon su territorio. Es así que los Incas se expandieron desde Perú, Ecuador, Chile,
gran porción de Colombia, Bolivia y parte de Argentina.
La presencia de los Incas produjo cambios en la vida de los diaguitas y en su cultura. Algunas tradiciones Incas se
mantienen actualmente en los pueblos originarios del noroeste argentino (En las provincias de Jujuy, Salta y Tucumán)
como, por ejemplo, honrar al Sol (Dios supremo de los Incas). El ritual se realiza el 24 de junio de cada año. Forman
un círculo, las personas se preparan para recibir los primeros rayos solares en los días que el hermano mayor Sol se
aleja más del planeta tierra. Es un momento de reflexión para corregir nuestra conducta. Consiste en pedir al sol que
vuelva porque en este nuevo ciclo haremos todo lo posible para ser mejores personas.

Palermo, Miguel Ángel y de Hoyos, María (1998), Diaguitas. Colección Gente americana. Buenos Aires, AZ editora. (Fragmento).

Los pueblos diaguitas.


Para contar la historia de los diaguitas vamos a ubicarnos en el año 1200. Muchos pueblos vivían en los cerros,
valles y quebradas del noroeste del actual territorio argentino, en tierras que hoy corresponden a las provincias de
Jujuy, Salta, La Rioja, parte de Tucumán y Catamarca. Eran los Quilmes, los tolombones, los pulares y muchos más.
Cuando los incas los invadieron, los llamaron “diaguitas”. A los diaguitas les gustaba contar que habían rechazado al
Imperio Inca en dos oportunidades, allá por el 1300. Pero en una tercera avanzada los incas finalmente quebraron la
resistencia de los diaguitas y ocuparon su territorio. Es así que los Incas se expandieron desde Perú, Ecuador, Chile,
gran porción de Colombia, Bolivia y parte de Argentina.
La presencia de los Incas produjo cambios en la vida de los diaguitas y en su cultura. Algunas tradiciones Incas se
mantienen actualmente en los pueblos originarios del noroeste argentino (En las provincias de Jujuy, Salta y Tucumán)
como, por ejemplo, honrar al Sol (Dios supremo de los Incas). El ritual se realiza el 24 de junio de cada año. Forman
un círculo, las personas se preparan para recibir los primeros rayos solares en los días que el hermano mayor Sol se
aleja más del planeta tierra. Es un momento de reflexión para corregir nuestra conducta. Consiste en pedir al sol que
vuelva porque en este nuevo ciclo haremos todo lo posible para ser mejores personas.

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Palermo, Miguel Ángel y de Hoyos, María (1998), Diaguitas. Colección Gente americana. Buenos Aires, AZ editora. (Fragmento).

Los pueblos diaguitas.


Para contar la historia de los diaguitas vamos a ubicarnos en el año 1200. Muchos pueblos vivían en los cerros,
valles y quebradas del noroeste del actual territorio argentino, en tierras que hoy corresponden a las provincias de
Jujuy, Salta, La Rioja, parte de Tucumán y Catamarca. Eran los Quilmes, los tolombones, los pulares y muchos más.
Cuando los incas los invadieron, los llamaron “diaguitas”. A los diaguitas les gustaba contar que habían rechazado al
Imperio Inca en dos oportunidades, allá por el 1300. Pero en una tercera avanzada los incas finalmente quebraron la
resistencia de los diaguitas y ocuparon su territorio. Es así que los Incas se expandieron desde Perú, Ecuador, Chile,
gran porción de Colombia, Bolivia y parte de Argentina.
La presencia de los Incas produjo cambios en la vida de los diaguitas y en su cultura. Algunas tradiciones Incas se
mantienen actualmente en los pueblos originarios del noroeste argentino (En las provincias de Jujuy, Salta y Tucumán)
como, por ejemplo, honrar al Sol (Dios supremo de los Incas). El ritual se realiza el 24 de junio de cada año. Forman
un círculo, las personas se preparan para recibir los primeros rayos solares en los días que el hermano mayor Sol se
aleja más del planeta tierra. Es un momento de reflexión para corregir nuestra conducta. Consiste en pedir al sol que
vuelva porque en este nuevo ciclo haremos todo lo posible para ser mejores personas.

Palermo, Miguel Ángel y de Hoyos, María (1998), Diaguitas. Colección Gente americana. Buenos Aires, AZ editora. (Fragmento).

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