Ensayo PA4 Feminismo

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Informe sobre movimientos feministas, ecofeministas y reivindicación social

Con el pasar de los años, el rol de la mujer ha ido cambiando poco a poco, han pasado de ser simples amas de casa a levantar la
voz para exigir sus derechos, vivir por sí mismas trabajando y disfrutando de privilegios que antes solo los hombres
podían gozar. Sin embargo, aún existen excepciones en ciertos países donde las mujeres dependen de sus esposos y
no tienen la oportunidad de ni siquiera educarse, es por ello que ha surgido el feminismo, que busca “eliminar la
discriminación de género y promover el respeto hacia las mujeres como seres humanos iguales en valor y dignidad a
los hombres” (Cidón, 2023). El presente informe tiene como objetivo analizar la situación de las mujeres desde la
antigüedad, cual fue el origen y la finalidad de los movimientos feministas, ecofeministas, y, por último, cuáles son
las consecuencias que ha traído la reivindicación social.

Hace varios años atrás, la mujer era discriminada por el simple hecho de ser del género opuesto, se la consideraba inferior y en
casos mucho más puntuales un ser repulsivo (por menstruar, por ejemplo). De acuerdo a la concepción de Gimeno de
Flaquer (1850-1919), esta exclusión se debía al principio de que el fuerte usurpaba la justicia, razón y derechos ante
el débil; asimismo cuenta que la realidad de las mujeres en el pasado era muy triste, pues se le negaba todo respeto y
consideración, esto se ha visto reflejado incluso en la Antigua Grecia, donde se sabe nació la democracia que rige los
derechos de ciudadanos.

Es importante analizar la evolución que ha tenido el rol de la mujer a través de los años, como fue el rol de la mujer en la época
de la prehistoria y las diferentes etapas de la historia: Edad Antigua, Media y Moderna; siglos XIX, XX y la
actualidad.

Según Reyes (2021), la prehistoria tiene algo en común con la realidad del siglo XXI, la igualdad. En aquellos tiempos la mujer
era igual de importante que el hombre, ambos trabajaban en equipo para poder pervivir cultivando y cazando; por el
hecho de estar en contacto con la naturaleza es que tenían como objetivo sobrevivir y reproducirse, conservar la
especie era fundamental, mutuamente se cuidaban entre ellos y es por ello que no había distinción alguna.

Asimismo Reyes (2021) menciona que en la Edad Antigua la mujer pierde todo derecho y comienza a estar bajo el mando
masculino (padre, marido e hijos), de esta época no se tiene mucha información por lo complicado que resulta para
historiadores y arqueólogos conseguirla pero, gracias a algunos escritos se sabe que la mujer en aquellos años
despojaba al acto sexual y disfrute, esto quiere decir que únicamente sus esposos decidían y podían mantener
relaciones sexuales con ellas, de no ser así eran brutalmente castigadas; la figura femenina, por lo que algunas
esculturas romanas reflejan, tenían su estándar con los vientres abultados y generosos pechos (símbolo de fertilidad,
importancia de reproducción, señal de clase social). Existían tres clases sociales: la mujer noble, la campesina y la
monja; se tiene entendido que a pesar de la estabilidad económica las mujeres eran descartadas de la política y
opinión, para aquellas que carecían de dinero la realidad era mucho más dura, pues no tenían ninguna oportunidad de
mejora ni respeto alguno.

La Edad Media lamentablemente fue una era difícil debido a la sobrepoblación, el hambre, peste y muertes; la opinión de la
mujer era invisibilizada y dentro de otro contexto, estaba la creencia de las mujeres que simbolizaron la tentación y
seducción: Eva y Lilith, que fueron representadas y tachadas como brujas; y la prostitución se dio a conocer por
primera vez durante esos años, aquellas mujeres involucradas eran despreciadas, constituía la clase más baja que era
juzgada en público. Participar como monja era una salida a la vida oscura y entrada a un lugar donde no fueran
juzgadas, para ese entonces era parecido a estar en un refugio.

A diferencia de la Edad Media, en la Edad Moderna la mujer tuvo más consideración respecto a sus gustos, aunque no podían
actuar libremente. La belleza empezaba a cobrar importancia, pues aquellas mujeres con rasgos bellos y piel blanca
recibían un mejor trato. La cultura patriarcal era imponente, pero a pesar de ello a las mujeres se les daba la
oportunidad de leer, aquellas de clase alta podían participar en actividades de música, cocina, literatura y escritura
(siempre y cuando estuvieran resguardadas por un hombre). El matrimonio era arreglado por los padres para que sus
hijos se comprometieran pronto, pues servía como un instrumento de la diplomacia para sellar alianzas políticas,
resolver conflictos y asegurar la paz. En el Renacimiento, la mayoría se dedicaba a la maternidad, creando un ciclo
continuo de embarazo y crianza.

El siglo XIX, ya para ese entonces la mujer era libre de leer y escribir, aunque seguían siendo excluidas en el voto y
participación política por el hecho de cumplir su rol como madres y amas de casa. Algunas mujeres ya se habían
revelado para ese entonces, la liberación era una realidad, aquellas que se oponían al estándar de matrimonio,
trabajaban y decidían por ellas mismas, por lo que tenían fama de traicioneras, mentirosas y perdidas, incluso eran
tachadas como prostitutas. A pesar de todo, la mujer era vista y tratada como un objeto por la falta de razonamiento,
según los hombres en ese entonces. A inicios del siglo XX, la mujer seguía obedeciendo a la figura patriarcal,
dependía aun de su esposo para cualquier actividad que necesitara de una iniciativa como: vender propiedades, firmar
contratos y comprar. En los años veinte era más notoria la libertad, se hacía referencia a la moda: "la ondulación
permanente", peinado popular. En los años cincuenta empezaba a surgir la lucha por la libertad e igualdad, pero solo
podían participar en eventos y actividades religiosas. Cambios bastante notorios se vieron en los años setenta, pues
ahí se considera a la mujer como una persona libre, cosmopolita y elegante que no necesitaba de un varón para
complementarse.

Actualmente la mujer goza de la libertad e igualdad que por siglos ha luchado, tiene la ventaja de elegir entre ser o no ser
madre, tema que no podía ser discutido tiempo atrás por la importancia de la procreación. En la educación mujeres
han demostrado que tienen más capacidad que un hombre, lo mismo ocurre en el trabajo, pues pueden ocupar cargos
importantes y aspirar un salario alto, aunque esta es una expectativa que por el momento no está determinada por
completo. Se puede definir a una mujer del siglo XXI como: libre, dichosa, libre de elegir la maternidad,
independiente y trabajadora.

Por desgracia, en ciertos lugares la mujer aun es discriminada y tratada como un objeto manipulable, Gonzales (2017) cataloga
a los siguientes países como los peores del mundo para ser una mujer: Egipto, Líbano, Marruecos, Irán, Afganistán,
Chad, Jordania, Yemen, Pakistán, Mali y Siria; la situación es tan grave que, hablando del salario laboral se sabe que
equivale solo al 25% de lo que un hombre gana normalmente, y esto si una mujer logra conseguir un trabajo; en estos
lugares la vestimenta es clave, pues la mujer debe estar bien tapada la mayor parte del tiempo, caso contrario, es
castigada sin compasión.

Después de este largo análisis respecto a la situación de las mujeres en la antigüedad, podemos pasar a los movimientos
feministas y ecofeministas. El feminismo, como Cidón (2023) menciona, tiene como finalidad promover el respecto y
eliminar la discriminación de género, que ni hombres ni mujeres sean infra valorizados, que entre ambos existan y se
pongan en práctica los valores morales. Todo esto ya que, como se ha detallado anteriormente, la mujer ha sido
tratada como un objeto, despreciada y maltratada, por ende, desde aproximadamente el año 1848 ha empezado la
lucha por la igualdad y respeto, exigen que una mujer no sea acosada ni violada por su forma de vestir o ser, que haya
un salario justo que no de preferencia a los hombres, sino que sea igualitario, y reducir la tasa de feminicidios que, en
el año 2021, fue del 56% de forma intencional.

De acuerdo a National Women’s History Museum (2021), los eventos que han marcado el feminismo se pueden dividir en tres
olas o etapas: La Revolución Francesa, el movimiento por la Templanza y el movimiento Abolicionista. En un
principio se creía que todo había comenzado en 1848, pero siguiendo los sucesos en orden, se encontraría la
Revolución Francesa en 1789, donde las mujeres en esa marcha fueron llamadas “ciudadanas pasivas” y buscaban en
el Palacio de Versalles que el Rey priorice sus necesidades; Olympe de Gouges fue una escritora francesa que tuvo un
papel muy importante, pues escribió “La Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana”, justo después
de que sacaran la declaración que solo beneficiaba a los hombres, lastimosamente fue asesinada por su acto.

Alrededor del año 1826, empiezan a surgir las primeras organizaciones para la Promoción de la Templanza en Boston,
Massachussets; National Women’s History Museum (2021) de igual forma sostiene que la Unión Cristiana de
Mujeres por la Templanza fue la que más desarrollo tuvo en medio de todo este proceso. El objeto que tuvo el
Movimiento por la Templanza fue exigir a los hombres que dejen de consumir alcohol, ya que ponía en peligro la
estabilidad del hogar, se procuraba que el gobierno de ese entonces prohibiera el alcoholismo, por lo que se crearon
caricaturas, canciones, guías y discursos para informar sobre los daños del consumo de alcohol.

Las mujeres africanas fueron la cabeza del Movimiento Abolicionista, luchaban por tener derechos humanos básicos ya que en
el siglo XIX gran parte de la población afroamericana de Estados Unidos estaba esclavizada, por ello lo que impulsó
a este movimiento fue dar fin a la esclavitud. Entre 1820 y 1830 se crearon organizaciones sociales, literarias
(difusión del conocimiento y la supresión del vicio e inmoralidad) y religiosas para apoyar a la comunidad. Se
realizaban conferencias por todo el país para luchar y abolir la condición en la que se encontraban, algunos personajes
que destacan son: Jarena Lee, Sarah Mapps Douglass, Sarah Louise Forten y María Stewart; todas ellas y más han
aportado para mediar y conseguir la educación y derechos de ciudadanía. Y así siguió la lucha por el respeto y
liberación, mujeres latinas exigían la reforma social y, tanto africanas como asiáticas, la derogación del racismo,
sexismo y clasismo.

La ecofeminismo tiene un objetivo parecido al feminismo, solo que, a diferencia de este, lucha por el bienestar del medio
ambiente. Consiste en: "una corriente de pensamiento y de activismo que analiza críticamente las creencias que
señalan el modelo de vida ecocida, patriarcal, capitalista y colonial. Denuncia los riesgos a los que somete a las
personas y al resto del mundo vivo y propone alternativas para revertir todo este daño causado" (Ecologistas en
Acción, 2018). Cuenta con algunos objetivos interesantes, María Mies y Vandana Shiva (1993) describen a uno de
ellos como: el desarrollo de la abogacía por prácticas sostenibles y justas que protejan tanto al medio ambiente como
los derechos humanos, promoviendo la equidad social y económica; Warren (1997) considera que promover una ética
de cuidado y preocupación por el medio ambiente son cualidades importantes que se necesitan para tener una relación
sana con la naturaleza; y por último, Shiva (1988) rescata la idea de reconocer la importancia de las perspectivas y
experiencias de las mujeres en la comprensión de los problemas ambientales, pues son conscientes de los impactos
que dan los problemas ambientales en la vida social.

La reivindicación social hace referencia a "la lucha de las mujeres por participar en la sociedad en condiciones igualitarias con
los hombres de la mujer" (Ministerio de Educación, s.f.). De acuerdo a Fernández-Asperilla et al. (2021), ha tenido
insondables consecuencias en todas las esferas de la vida, desde la política hasta la cultura popular. La lucha por la
igualdad de derechos y oportunidades ha dado frutos, pues la educación y oportunidades están al alcance de la mujer.
No obstante, todavía hay mucho por hacer para lograr una verdadera igualdad de género y eliminar la discriminación
y la violencia contra las mujeres. Un informe realizado por la ONU en 2020 indica que aun están subrepresentadas las
mujeres en la política y cargos directivos, a pesar de que la mujer puede educarse, no alcanza el máximo que puede
por la falta de acceso que existe todavía y por desgracia en el trabajo es igual, dificultando poco a poco el pasar de la
vida cotidiana, sin olvidar el hecho de que sigue expuesta a la violencia y discriminación en ciertos espacios.

Resumiendo lo planteado, se tiene que debido a la condición que ha tenido la mujer años atrás, que ha estado regida del
maltrato y dominio masculino, es que surgen los movimientos feministas, donde se exige libertad y respeto entre los
dos géneros; la ecofeminismo busca aparte de eso, el respeto hacia el medio ambiente para tener una relación sana
con la naturaleza. La reivindicación, que en resumen es la lucha hacia la igualdad, ha tenido tanto resultados positivos
como negativos, por una parte, la mujer es más libre y respetada, puede participar en distintas actividades, pero aun
así es privada de algunos aspectos fundamentales como la calidad de educación y trabajo que a la larga termina
afectando su vida cotidiana.

Bibliografía
Cidón, M. (07 de 03 de 2023). Amnistía Internacional. Obtenido de Amnistía Internacional:
https://www.es.amnesty.org/en-que-estamos/blog/historia/articulo/razones-por-las-que-el-mundo-necesita-
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Ecologistas en Acción. (12 de 02 de 2018). Ecologistas en Acción. Obtenido de Ecologistas en Acción:


https://www.ecologistasenaccion.org/areas-de-accion/ecofeminismo/

Fernández-Asperilla, A. (2021). Feminismo y educación en América Latina. Polisemia, 15(27), 22-37.


https://doi.org/10.11606/issn.2594-4971.polisemia.2021.177735

Flaquer, G. d. (s.f.). Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. Obtenido de Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes:
https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/la-mujer-en-la-antiguedad-y-en-nuestros-dias-997457/html/
e1d5ce8d-80bd-4274-a287-5f7d8b14adcb_2.html#I_0_

Gonzalez, C. (24 de 10 de 2017). Enfemenino. Obtenido de Enfemenino: https://www.enfemenino.com/feminismo-


derechos-igualdad/los-10-peores-paises-para-ser-mujer-s1177483.html

Guzmán, C., & Jaramillo, J. (2021). Desigualdad de género y violencia contra las mujeres en América Latina y el
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América Latina (pp. 107-122). Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha.
https://doi.org/10.18239/atenea.12.2022.06

Mies, Maria y Shiva, Vandana. (1993). Ecofeminismo. Ediciones Cátedra.

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de Estudiantes dialogaron sobre la reivindicación de los derechos de la mujer:
https://educacion.gob.ec/estudiantes-dialogaron-sobre-la-reivindicacion-de-los-derechos-de-la-mujer/
#:~:text=Refiere%20la%20lucha%20de%20las,condiciones%20igualitarias%20con%20los%20hombres.

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Recuperado de https://www.unwomen.org/-/media/headquarters/attachments/sections/library/publications/
2020/gender-equality-in-the-wake-of-covid-19-en.pdf?la=en&vs=5142

Reyes, L. I. (16 de 06 de 2021). Issuu. Obtenido de Issuu:


https://issuu.com/helladelcoyote/docs/lhdc_71_completa/s/12860854
Shiva, Vandana. (1988). Staying Alive: Women, Ecology and Development. Zed Books.

Warren, Karen J. (1997). Ecofeminismo: Mujeres, Cultura y Naturaleza. Ediciones Cátedra.

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