El documento clasifica las drogas en cuatro categorías (depresores, estimulantes, alucinógenos y fármacos de uso médico) y describe sus efectos principales. También explica que la adicción se caracteriza por la pérdida de control, la búsqueda compulsiva de la sustancia y la presencia de tolerancia y síndrome de abstinencia. Durante la adolescencia existe un mayor riesgo de consumo de drogas debido a factores como la curiosidad y la falta de madurez.
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El documento clasifica las drogas en cuatro categorías (depresores, estimulantes, alucinógenos y fármacos de uso médico) y describe sus efectos principales. También explica que la adicción se caracteriza por la pérdida de control, la búsqueda compulsiva de la sustancia y la presencia de tolerancia y síndrome de abstinencia. Durante la adolescencia existe un mayor riesgo de consumo de drogas debido a factores como la curiosidad y la falta de madurez.
El documento clasifica las drogas en cuatro categorías (depresores, estimulantes, alucinógenos y fármacos de uso médico) y describe sus efectos principales. También explica que la adicción se caracteriza por la pérdida de control, la búsqueda compulsiva de la sustancia y la presencia de tolerancia y síndrome de abstinencia. Durante la adolescencia existe un mayor riesgo de consumo de drogas debido a factores como la curiosidad y la falta de madurez.
El documento clasifica las drogas en cuatro categorías (depresores, estimulantes, alucinógenos y fármacos de uso médico) y describe sus efectos principales. También explica que la adicción se caracteriza por la pérdida de control, la búsqueda compulsiva de la sustancia y la presencia de tolerancia y síndrome de abstinencia. Durante la adolescencia existe un mayor riesgo de consumo de drogas debido a factores como la curiosidad y la falta de madurez.
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LAS DROGAS
Las drogas o sustancias psicoactivas son compuestos de origen natural,
semisintético o sintético que producen modificaciones en una o más funciones del organismo, independientemente de la vía de administración. Actualmente, se clasifican en cuatro grandes familias según sus efectos: 1. Depresores: Suprimen, inhiben o reducen algunos aspectos de la actividad del Sistema Nervioso Central (SNC). Ejemplos de sustancias depresoras son el alcohol, la cannabis, los analgésicos, las benzodiacepinas y los opiáceos. 2. Estimulantes: Activan, potencian o incrementan la actividad del SNC. Suelen generar aumento de la frecuencia cardiaca, temperatura corporal y presión arterial, así como una sensación de energía y estado de alerta. Algunos ejemplos son la cafeína, la nicotina, la cocaína y la metanfetamina. 3. Alucinógenos: Inducen alteraciones en la percepción y el pensamiento, generando cambios en el estado de ánimo, ilusiones visuales y alteración de la percepción. Ejemplos de alucinógenos son el LSD, la psilocibina, la mescalina y el peyote. 4. Fármacos de uso médico: Son sustancias que afectan directamente al SNC y se utilizan en el tratamiento de trastornos mentales. Deben ser utilizados únicamente bajo indicación terapéutica y receta médica. Ejemplos de fármacos de uso médico son los ansiolíticos sedantes, antidepresivos y antipsicóticos. La adicción o dependencia es el conjunto de daños físicos y psicológicos provocados por el abuso en el consumo de sustancias psicoactivas. La adicción se caracteriza por la pérdida de control en el consumo, la búsqueda compulsiva de la sustancia y la presencia de tolerancia y síndrome de abstinencia. Durante la adolescencia, una etapa de cambios y búsqueda de nuevas experiencias, existe un mayor riesgo de inicio en el consumo de drogas debido a factores como la curiosidad, la necesidad de encajar socialmente y la falta de madurez en la toma de decisiones. Es importante brindar orientación sin juicios a los adolescentes, promover un estilo de vida saludable y fomentar actividades que estimulen el desarrollo de habilidades sociales y emocionales. El documento también destaca la importancia de promover relaciones sociales saludables, la práctica de actividades físicas, el desarrollo de habilidades artísticas y culturales, y la creación de entornos seguros y supervisados para los adolescentes. El fentanilo es una droga analgésica altamente peligrosa que se utiliza para aliviar el dolor. En México, su consumo ilícito ha causado graves daños a la salud de las personas y ha contribuido al aumento de la violencia en la región norte del país. Existen dos tipos de fentanilo: el de uso médico y el ilícito. El fentanilo médico se receta a pacientes con cáncer terminal o que se someten a cirugías para tratar el dolor crónico. Por otro lado, el fentanilo ilícito se produce en laboratorios clandestinos y su consumo causa serios problemas de salud y muertes por sobredosis. El fentanilo ilícito se consume de diversas formas, como vía oral, fumado e inyectado, siendo estas últimas las más riesgosas. Se distribuye en diferentes presentaciones, como polvo blanco, gotas vertidas sobre papel secante, pequeñas golosinas, goteros para los ojos, vaporizadores nasales, pastillas como analgésicos recetados y pastillas de colores con el sello "M30". Durante su consumo, el fentanilo ilícito produce efectos físicos, como somnolencia, adormecimiento, sopor y en casos de sobredosis, puede reducir las funciones vitales hasta causar la muerte. A nivel psicológico, provoca sedación, pérdida de interés en actividades cotidianas, aislamiento y pérdida de conciencia. Después de su consumo, se experimenta un fuerte estado de abstinencia que se manifiesta con dificultad para conciliar el sueño, irritabilidad, ansiedad, depresión, escalofríos, diarrea, náuseas, vómitos, dolor muscular, debilidad y fatiga. El fentanilo se mezcla con otras drogas ilícitas, como la cocaína o la metanfetamina, para potenciar sus efectos y reducir costos de producción. Esto aumenta los riesgos asociados al consumo de estas sustancias y hace que sean aún más peligrosas. El fentanilo causa daños irreversibles a la salud, como descoordinación de las extremidades, alteraciones musculares, problemas en la pronunciación y articulación, alteraciones del sueño, pérdida de memoria, trastornos de salud mental y problemas cardíacos. Es importante tener en cuenta que el fentanilo es la droga más potente y adictiva del mercado ilícito y su consumo no solo afecta a las personas individualmente, sino que también contribuye a la violencia y daña a las comunidades. En resumen, el fentanilo es una droga analgésica altamente peligrosa que causa graves daños a la salud y muertes por sobredosis en México. Su consumo ilícito ha llevado al aumento de la violencia y afecta tanto a nivel individual como comunitario. Es fundamental crear conciencia sobre los peligros asociados al fentanilo y promover la prevención y el tratamiento adecuado de la adicción a esta sustancia.