Ensayo de Columnas
Ensayo de Columnas
Ensayo de Columnas
MATERIA:
MATERIALES Y PROCESOS CONSTRUCTIVOS
DOCENTE:
I.C. MAYRA GONZALEZ ORTIZ
ALUMNOS:
CARBAJAL REBOLLAR GUSTAVO ADOLFO
GARCIA FLORES LESLY ANDREA
TELLEZ SALGADO MARIA FERNANDA
TOLA LEON REGINA
VARGAS CALDERON KAREN
TRABAJO:
PROCEDIMIENTO CONSTRUCTIVO
5.2 COLUMNAS
INGENIERIA CIVIL
SEMESTRE 300
FECHA DE ENTREGA: 07/02/23
MATERIALES Y PROCESOS CONSTRUCTIVOS
INTRODUCCION
Las columnas son aquellos elementos verticales que soportan fuerzas de compresión y flexión, encargados de transmitir
todas las cargas de la estructura a la cimentación; es decir, son uno de los elementos más importantes para el soporte de la
estructura, por lo que su construcción requiere especial cuidado.
Las columnas son parte importante de una construcción, a menos que sean ornamentales o conmemorativas. Constituyen
un elemento arquitectónico vertical que soporta la estructura. Normalmente son circulares o acanaladas, pues cuando
tienen figura cuadrangular reciben el nombre de pilar.
Toda columna está formada por tres elementos: basa, fuste y capitel. Se cree que originalmente fueron creaciones que
imitaron a los árboles con su base, tronco y ramas. Atendiendo a los clásicos órdenes arquitectónicos se distinguen
principalmente la columna dórica (la más sencilla en su capitel), jónica (con dos volutas o espirales) y la corintia (con
adornos de hojas de acanto).
Los grandes templos, palacios y construcciones se edificaron sobre colosales columnas de diverso material. Los templos
egipcios de Luxor y Karnak son ejemplo de ellas, así como se pueden observar las naves de todas las basílicas; el
Partenón, en Atenas; el Panteón, en Roma, o la iglesia de la Magdalena, en París.
También existen columnas conmemorativas que se erigieron como monumentos para celebrar alguna gesta o victoria,
como la columna de la Independencia, de la ciudad de México; columnas de Trajano y Marco Aurelio, en Roma; columna
de Napoleón, en la Plaza Vendome de París; columna de Nelson, en la Plaza de Trafalgar de Londres.
Columna de hierro fue una obra que escribió la autora Taylor Caldwell sobre Cicerón, y que lleva como epígrafe un texto
de Jeremías (1,17-18): “Yo te he puesto hoy como ciudad fortificada, como columna de hierro y como muro de bronce
contra toda esta tierra”.
DESARROLLO
El proceso constructivo de las columnas es una parte importante de la construcción de un edificio. La columna es un
elemento estructural vertical que transmite la carga del techo y del piso a los cimientos. Hay varios materiales
comúnmente utilizados para hacer columnas, incluyendo mampostería, acero y concreto.
Las columnas son indispensables en la gran mayoría de las obras o proyectos de construcción. Por eso
en CEMIX queremos hablarte sobre su importancia, el papel que ejercen y los tipos de columnas que existen en la
actualidad.
Aunque no seas una persona experta en la materia, seguro sabes que las columnas de cualquier tipo de construcción son
muy importantes, ya que sin este elemento simplemente la edificación no se puede sostener en pie.
Por eso, este elemento es clave, ya que la columna en construcción es la que va a soportar toda la carga de la edificación.
En ese caso, las columnas son diseñadas con una sección y refuerzo según los esfuerzos que debe resistir, generalmente
distribuyendo el esfuerzo longitudinal en la cara de la sección, para de esa forma no causar excesos de carga.
¿Qué es la columna en construcción?
En el ámbito de la construcción, la columna se considera como un soporte vertical y alargado que tiene la propiedad de
sostener el peso de la estructura a construir.
En este caso, la columna puede ser de forma cuadrangular o circular.
Es por ello que las columnas son elementos muy resistentes que soportan fuerzas de compresión y flexión, transmitiendo
todas las cargas desde la estructura a la cimentación.
Características destacadas de la columna en construcción
Las columnas pueden realizarse tanto en fábrica como en el propio terreno.
Presentan una zapata, que es la cimentación superficial sobre la cual se estructuran las columnas.
Tienen un pedestal que conforma la parte inferior de la columna y le sirve de soporte.
Poseen una placa que constituye el núcleo de la columna.
¿Cómo se clasifican las columnas en construcción?
En la construcción existen básicamente 3 tipos de columnas, siendo estas las siguientes:
Columnas de madera: aquí se incluyen distintos subtipos (madera laminada, compuesta, maciza y ensamblada).
Columnas de acero: son las más sencillas, y emplean perfiles únicos o compuestos, e incluso se pueden usar
diferentes combinaciones.
Columnas de concreto: en este tipo de columna predomina el cemento, utilizando diversas técnicas de vaciado
de concreto, siendo la más utilizada actualmente en construcción.
Al ser la columna de concreto la más usada hoy en día, debemos indicar algunos detalles de interés:
Acero de refuerzo: son varillas que se colocan de manera longitudinal y sirven para reforzar la estructura de
cemento.
Encofrado: es un armazón que puede ser de madera o planchas metálicas las cuales van a recibir el hormigón que
posteriormente formará la estructura.
Vaciado del concreto: se humedecen las caras interiores de la formaleta para no perder las propiedades de la
mezcla y luego se realiza el vaciado con mucho cuidado.
Curado del elemento: se usan recubrimientos de plástico para evitar el escape de humedad.
Para una columna de acero, primero se cortan las piezas de acero necesarias para la columna. Luego, se ensamblan las
piezas de acero mediante soldadura o conectores metálicos. La columna se coloca en su lugar y se asegura mediante
pernos o clavo.
Para una columna de concreto, primero se colocan formas de madera alrededor del lugar donde se desea construir la
columna. Luego, se coloca un refuerzo de acero en el interior de las formas. Se vierte el concreto en las formas y se nivela
antes de que se asiente y se cure. Después de que el concreto esté seco, se desmontan las formas de madera y la columna
está lista para ser utilizada.
Es importante tener en cuenta que todas las columnas deben ser diseñadas y construidas de acuerdo con los códigos y
normas locales de construcción para asegurar su seguridad y durabilidad.
Las columnas son diseñadas con una sección y refuerzo según los esfuerzos que debe resistir, generalmente repartiendo
el esfuerzo longitudinal simétricamente en la cara de la sección, para no causar excentricidades en el elemento.
Los cambios bruscos de sección deben hacerse siempre en los entrepisos. El doblado de las varillas longitudinales debe
hacerse según los requerimientos del Reglamento Colombiano de Construcción Sismo Resistente NSR-10, en el que se
establecen las condiciones para estas modificaciones.
El acero de refuerzo debe colocarse en la longitud y con el diámetro estipulado en el diseño estructural. La longitud y
lugar de los traslapos en el refuerzo longitudinal no debe exceder más de la mitad de las varillas a una misma altura, tal
como lo indica la NSR – 10 y debe quedar fuera y no muy cerca de los apoyos.
Los estribos se distribuirán de acuerdo al diseño, respetando las zonas de confinamiento e iniciando a una distancia
respecto al nudo, establecida en el capítulo, C.21.3.5.6 de la NSR.10.
La zona de confinamiento es una distancia en la cual se colocan los estribos con menor espaciamiento entre sí para
mejorar la resistencia del concreto. Una vez están amarrados todos los estribos, sobre la placa se cimbra el perímetro de
todas las columnas demarcando la sección con total exactitud, evitando así que la columna genere excentricidades no
contempladas en el diseño, afectando la rigidez del conjunto.
Para garantizar que las varillas queden en su lugar, basta colocar un par de estribos encima del tramo a vaciar.
En caso de que se vayan a construir columnas de sección circular, se utiliza una espiral como refuerzo transversal, que, a
diferencia de los estribos que se figuran en planta, generalmente se fabrica en obra. El refuerzo en espiral es sumamente
importante y no debe reemplazarse con igual efectividad por estribos circulares individuales no establecidos en la NSR-
10. Dicho espiral otorga al núcleo de concreto un confinamiento adicional.
Encofrado
Las formaletas que van a conformar el encofrado de la columna, deben limpiarse y engrasarse como preparación de la
fundida de concreto. Antes de colocar las formaletas de cada columna, se debe revisar que el armado, traslapos y
distribución de estribos se haya realizado de acuerdo a los planos estructurales. Posteriormente se procede a
la colocación de los tableros con la base en la cimbra que se ha trazado sobre la placa, alineándolos lo mejor posible según
la sección de la columna. Para darle soporte inicial a las formaletas se clavan los tableros con puntillas hasta que éste se
soporte solo; en este momento se colocan las mordazas o abrazaderas que son las encargadas de ajustar la formaleta y
mantener la sección constante evitando abombamientos y desalineamientos. Las mordazas deben quedar horizontales y
muy bien ajustadas a los tableros.
Después la columna debe ser apuntalada y plomada. Los puntales se apoyan en tablas clavadas en los taches dejados para
este fin durante la fundida de la placa y nunca debe romperse esta última para dar apoyo a los parales. Los tensores, que
son alambres trenzados, se amarran del encofrado y de la placa, gracias al tache propuesto anteriormente. Es importante
apuntalar tres caras del encofrado, para que la columna quede plomada por todas sus caras.
Una manera de verificar la verticalidad de la formaleta es empleando cilindros que se toman para medir
la resistencia del concreto(aquellos que no son utilizados en el ensayo de resistencia a la compresión), y un hilo. En el
extremo superior, el hilo se amarra a uno de los elementos horizontales de la formaleta. En el extremo inferior se amarra a
un cilindro de concreto, generando así una referencia vertical durante el proceso de vaciado del concreto. De esa manera,
se puede revisar constantemente la verticalidad de la formaleta, para evitar desplomes en la misma.
Antes de realizar el vaciado del concreto, se deben humedecer completamente las caras interiores de las formaletas para
evitar que le quiten humedad al concreto, ya que esto puede afectar las propiedades de la mezcla. Al verter el concreto en
la formaleta, se recomienda vaciar con alturas inferiores a 1,2 metros, si no es posible, se pueden utilizar tubos o canaletas
procurando que el concreto no golpee el refuerzo ni la formaleta para evitar la segregación durante
la colocación del concreto.
A medida que se realiza el vaciado del concreto en la columna, este debe ir consolidándose con vibradores
convencionales, con el fin de retirar el aire que queda atrapado durante el proceso y lograr la reacomodación de los
agregados para una distribución uniforme. También es importante golpear la base de las formaletas con un martillo de
caucho -también llamado chapulín- para lograr sacar burbujas de aire atrapado y evitar la formación de hormigueros.
Para finalizar el proceso de vaciado, se debe sobrepasar el nivel de la columna en 2 cm aproximadamente, con el fin de
prever la pérdida de volumen del concreto durante el proceso de fraguado. Una vez terminado el vaciado, se debe volver a
plomar la columna de inmediato, para garantizar que ha quedado en la posición exacta definitivamente.
Las formaletas no pueden ser removidas antes de que el concreto haya alcanzado entre el 15% y el 20% de la resistencia a
los 28 días. Después de desencofrada la columna, se procede a revisar que no hayan quedados hormigueros, los cuales
FECHA DE ENTREGA: 07/02/23
MATERIALES Y PROCESOS CONSTRUCTIVOS
deben ser analizados para saber si se hacen reparaciones con epóxicos o se debe demoler por completo la estructura para
volverla a fundir.
Para el curado del concreto, se pueden usar varias técnicas, aunque generalmente se usan recubrimientos de plásticos para
evitar el escape de humedad y la reacción del cemento se lleve a cabo satisfactoriamente. Otro método puede ser cubrirlas
con costales y mojarlas con manguera constantemente.