Grosléziat, C

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Grosléziat, C. (2007). Voix et corps. Dans : , C.

Grosléziat, Les bébés et la musique:


Premières sensations et créations sonores (pp. 71-75). Toulouse, France: Érès.
https://www.cairn.info/les-bebes-et-la-musique--9782865866434-page-71.htm#no4
Voz y Cuerpo, En Los bebés y la música: primeras sensaciones y creaciones
sonoras.

1 Cuando escuchamos un sonido, no solo nuestro oído está funcionando, sino que todo
nuestro cuerpo también está vibrando. Cuando hablamos y cantamos, esta vibración es doble,
vibración de nuestro cuerpo y del cuerpo del otro.

2 Por eso la música se transmite, se comparte, a veces incluso invade y ejerce poder sobre los
hombres. Puedes cerrar tus párpados, no puedes hacer impenetrables tus oídos y tu cuerpo.

3 Profundamente única - ningún sonido, ninguna voz humana, ninguna interpretación musical
se repite de forma idéntica - la música es esencialmente colectiva. Toca y permite a las
personas comunicarse, incluso comulgar en la medida en que acompaña todos los momentos
de la vida.

4 "Así que la voz no es solo un sonido enviado por una boca y recibido por un oído. Mediante
la voz, la palabra se convierte en una especie de cuerpo a cuerpo. La voz actúa por simpatía
vibratoria (sun-pathos). Es vibración conjunta y afín a dos cuerpos ”[1]
[1]
Louis-Jacques Rondeleux, Encontrar tu voz. Pequeña guía práctica…, confía Louis-Jacques
Rondeleux. En su excelente guía práctica para el trabajo vocal, Finding Your Voice, nos
recuerda que el oído externo no es nuestro único medio de control por voz. El acto vocal
desencadena toda una serie de fenómenos musculares y vibratorios dentro de nuestro cuerpo.

5 La mecánica vocal se compone de tres partes:


Un fuelle (el sistema respiratorio) que suministra la energía necesaria para el sonido en forma
de corriente de aire;
Un generador de sonido (las cuerdas vocales, o para las consonantes, la lengua, los labios, los
dientes…) que transforma esta energía aérea en energía sonora;
Resonadores (faringe, boca…) que amplifican el sonido.
1. Si la respiración es inseparable de la voz, su dominio es fundamental para expresarse y
comunicarse a través de la voz. Distinguimos varias etapas del desarrollo vocal del bebé, la
primera de las cuales es la fonación, donde el bebé aprende a controlar y coordinar la
respiración y la fonación. Durante los primeros meses, el bebé juega muy a menudo a sonar
su respiración, tanto inhalando como exhalando. Juegos de risas, suspiros, modulaciones de
un sonido hasta que sale el aliento; su exploración vocal es inseparable de la de la respiración
y desde el principio de lo que constituye el soporte energético de la respiración, el diafragma.
Su respiración es abdominal y su juego vocal a menudo requiere un apoyo significativo de la
respiración. Cuando grita, llama, modula un sonido de bajo a agudo, moviliza su energía y
aprende a regular la presión necesaria para obtener el sonido. Dialécticamente, la calidad del
sonido atestigua el esfuerzo realizado.
6. Respecto al aparato fonatorio, Louis-Jacques Rondeleux nos recuerda que sólo el hombre
es capaz, desde el nacimiento, de tensar sólo las cuerdas vocales y así producir ondas sonoras
mantenidas regularmente, sonidos armónicos puros, al mismo tiempo. Origen de la canción,
música, pero también vocales […]. Pero el empuje del flujo de aire hacia afuera no solo
produce sonidos armónicos. Cualquier constricción del tubo respiratorio entre la tráquea y los
labios puede producir ruidos puros (p. Ej., Las consonantes s, ch, p, f, t, k).

El hombre también puede emitir ruidos mezclados con vibraciones laríngeas en las llamadas
consonantes sonoras, sonidos armónicos mezclados con ruidos en la risa y llanto,
esencialmente sonidos armónicos en las vocales.

8 Esta extrema diversidad de tonos vocales está presente en el balbuceo infantil. Suele tocar
sonidos graves colocados en la garganta, conteniendo la respiración, un juego de gruñidos,
raspaduras, pura vibración de las cuerdas vocales sin buscar melodías. Estos mismos sonidos
tomados con la boca abierta revelan, mediante la modificación de la resonancia, sonidos más
modulados que ya invocan el juego de vocales. Esta vibración sónica del cuerpo se encuentra
en los rollos de la lengua que adoran los bebés y que muchos adultos han perdido. Estos
sonidos casi mecánicos recuerdan a un motor y resultan extremadamente dinámicos en la
búsqueda de oleadas cromáticas que todavía se llaman sirenas. Hacer que sus labios vibren es
el resultado más evidente de estas dos primeras búsquedas vocales. Los zumbidos y varios
sonidos de labios persistirán durante años en el juego de los niños.

9 Estos sonidos siguen siendo el mundo sagrado, el secreto de la infancia, donde los adultos
favorecen el uso de vocales, sonidos armónicos destinados al habla y al canto. Esta selección
conduce a una primera diferenciación entre la cultura musical "materna" y la de la infancia.

10 Sabemos que el niño durante los primeros seis meses desarrolla un repertorio de
vocalizaciones que incluye todos los sonidos de todos los lenguajes humanos [2]
[2]
Ver Bower, El desarrollo psíquico de la primera infancia,…. También podemos pensar que la
cultura musical, su carácter tradicional, popular, inventivo, puede proporcionar a los niños
una extensión de sus propias exploraciones. Prueba de ello es una canción de cuna cantada
por las madres del pueblo Banda en la República Centroafricana. Aya Ketene se grabó en
aldeas a trescientos kilómetros de distancia, la primera se canta, la segunda se "arrulla" [3]
[3]
Disco de 33 rpm, Banda Music. República Centroafricana.…. La letra tranquilizadora de la
canción de cuna da paso a la melodía simple, el arrullo muy exitoso denota la capacidad
lúdica del adulto para acercarse al mundo de los niños.

11. Como la caja de resonancia de la guitarra, los resonadores de la voz aumentan la


intensidad del sonido primitivo y cambian su color imponiendo más o menos sus frecuencias
naturales. Estos son la faringe y la boca, en parte responsables de las diferencias entre las
vocales. Pero entran en juego muchos otros resonadores; dependiendo de su altura, los
sonidos vibrarán en distintas regiones del cuerpo, por eso hablamos de voces de cabeza,
voces de pecho ...

12 Louis-Jacques Rondeleux explica cómo resuena el cuerpo: “Los resonadores en sentido


estricto son necesariamente cavidades abiertas que desarrollan el sonido y, en particular,
algunos de sus armónicos.
Pero una vez que se produce el sonido, puede hacer vibrar cualquier cuerpo que tenga
resonancias similares a las suyas: por ejemplo, hablando en voz alta, puedo hacer vibrar las
ventanas de mi habitación, sin que esta vibración externa actúe como un resonador adecuado
para mi voz. Lo mismo ocurre con nuestro cuerpo. El sonido de nuestra voz es creado por los
propios resonadores del tracto vocal, pero luego hace vibrar todo el cuerpo de la cabeza a los
pies "[4]
[4]
Op. Cit., P. 169 ..

13 Según el autor, las sensaciones vibratorias pueden ser extremadamente fuertes y jugar un
papel muy importante en el control de nuestra propia voz, porque nuestros cuerpos no vibran
de la misma manera ante los sonidos que emiten. Los italianos que cantaban el bel canto
afirmaron que el canto de la garganta debería ser "como un gran agujero sin nada". Lo que se
llama "apertura de la garganta" es el foco esencial de la voz.

14 Esta sensación tan buscada por los cantantes y tan natural en los niños pequeños es la de
relajación muscular. La velocidad vocal se basa en estas muy finas relaciones que se
establecen entre la naturaleza de los sonidos, los lugares de resonancia y la actividad de los
músculos implicados (movimiento del diafragma, laringe, paladar blando, mejillas, etc.).

Notes
[1]
Louis-Jacques Rondeleux, Trouver sa voix. Petit guide pratique de travail vocal, Le Seuil,
1977, p. 173.
[2]
Voir Bower, Le développement psychique de la première enfance, Bruxelles, Mardaga, 1978
[3]
Disque 33 tours, Musiques Banda. République Centrafricaine. Coll. Musée de l’homme.
[4]
Op. cit., p. 169.
Grosléziat, C. (2007). Voix et corps. Dans : , C. Grosléziat, Les bébés et la musique:
Premières sensations et créations sonores (pp. 71-75). Toulouse, France: Érès.
https://www.cairn.info/les-bebes-et-la-musique--9782865866434-page-71.htm#no4

Lorsque nous entendons un son, non seulement notre oreille fonctionne, mais aussi tout notre
corps, par mise en vibration. Lorsque nous parlons et chantons, cette vibration est double,
vibration de notre corps et du corps de l’autre.
2C’est pourquoi la musique se transmet, se partage, parfois même envahit et détient un
pouvoir sur les hommes. On peut fermer les paupières, on ne peut rendre impénétrables ses
oreilles et son corps.

3Profondément singulière — aucun son, aucune voix humaine, aucune interprétation


musicale ne se répète à l’identique — la musique est par essence collective. Elle touche et
permet aux hommes de communiquer, voire de communier dans la mesure où elle
accompagne tous les moments de la vie.
4« Ainsi la voix n’est pas seulement un son envoyé par une bouche et reçu par une oreille.
Par l’intermédiaire de la voix, la parole devient une sorte de corps à corps. La voix agit par
sympathie (sun-pathos) vibratoire. Elle est vibration ensemble et semblable de deux corps
» [1]
[1]
Louis-Jacques Rondeleux, Trouver sa voix. Petit guide pratique…, nous confie Louis-Jacques
Rondeleux. Dans son excellent petit guide pratique de travail vocal, Trouver sa voix, il nous
rappelle que l’oreille externe n’est pas notre seul moyen de contrôle vocal. L’acte vocal
déclenche à l’intérieur de notre corps, toute une série de phénomènes musculaires et
vibratoires.
5La mécanique vocale est formée de trois parties :

Un soufflet (l’appareil respiratoire) qui fournit l’énergie nécessaire au son sous forme de
courant aérien ;
Un générateur sonore (les cordes vocales, ou pour les consonnes, la langue, les lèvres, les
dents …) qui transforme cette énergie aérienne en énergie sonore ;
Des résonateurs (pharynx, bouche …) qui amplifient le son.
1. Si le souffle est inséparable de la voix, sa maîtrise est indispensable pour exprimer et
communiquer par la voix. Nous distinguons plusieurs stades du développement vocal du bébé
dont le premier serait celui de la phonation, où le bébé apprend à contrôler et à coordonner
la respiration et la phonation. Au cours des premiers mois, le nourrisson joue très souvent à
sonoriser sa respiration, tant l’inspire que l’expire. Jeux de rire, de soupirs, modulations
d’un son jusqu’à l’extinction du souffle ; son exploration vocale est inséparable de celle du
souffle et d’emblée de ce qui constitue le support énergétique du souffle, le diaphragme. Sa
respiration est abdominale et son jeu vocal sollicite très souvent un appui important du
souffle. Lorsqu’il pousse un cri, appelle, module un son du grave au suraigu, il mobilise son
énergie et apprend à doser la pression nécessaire à l’obtention du son. De façon dialectique,
la qualité du son est témoin de l’effort entrepris.
62. Concernant l’appareil phonatoire, Louis-Jacques Rondeleux nous rappelle que seul
l’homme est capable, dès la naissance, de resserrer uniquement les cordes vocales et de
produire ainsi des ondes sonores régulièrement entretenues, des sons harmoniques purs, à
l’origine du chant, de la musique, mais aussi des voyelles [ …]. Mais la poussée du flot
aérien vers l’extérieur ne produit pas que des sons harmoniques. Tout resserrement du tube
respiratoire entre la trachée et les lèvres peut produire des bruits purs (par exemple, les
consonnes s, ch, p, f, t, k).

7L’homme peut également émettre des bruits mêlés de vibrations laryngées dans les
consonnes dites sonores, des sons harmoniques mélangés de bruits dans les rires et les
pleurs, des sons essentiellement harmoniques dans les voyelles.
8Cette extrême diversité de sonorités vocales est à l’œuvre dans le babil du nourrisson. Il
joue fréquemment de sons graves placés dans la gorge, en retenant son souffle, jeu de
grognement, de raclement, pure mise en vibration des cordes vocales sans recherche de
mélodies. Ces mêmes sons repris bouche ouverte font apparaître par la modification de la
résonance, des sonorités plus modulées qui font déjà appel au jeu des voyelles. On retrouve
cette mise en vibration sonore du corps dans les roulades de la langue que les bébés
affectionnent et que beaucoup d’adultes ont perdues. Ces sons quasi mécaniques rappellent
celui d’un moteur et se révèlent extrêmement dynamiques dans la recherche de montées
chromatiques que l’on appelle encore sirènes. Faire vibrer ses lèvres est la résultante plus
apparente de ces deux premières recherches vocales. Les vrombissements et divers bruitages
des lèvres persisteront des années durant dans le jeu des garçons.
9Ces sons restent le monde sacré, secret de l’enfance, les adultes privilégiant l’usage des
voyelles, sons harmoniques destinés à la parole et au chant. Cette sélection entraîne une
première différenciation entre la culture musicale « maternelle » et celle de l’enfance.

10On sait que l’enfant pendant les six premiers mois, développe un répertoire de vocalises
qui comprend tous les sons de toutes les langues humaines [2]
[2]
Voir Bower, Le développement psychique de la première enfance,…. On peut aussi penser que
la culture musicale, son caractère traditionnel, populaire, inventif, peut apporter à l’enfant
un prolongement de ses propres explorations. Ainsi en témoigne une berceuse chantée par les
mamans du peuple Banda en République centrafricaine. Aya Ketene a été enregistré dans des
villages distants de trois cents kilomètres, la première est chantée, la seconde « roucoulée
» [3]
[3]
Disque 33 tours, Musiques Banda. République Centrafricaine.…. Les paroles rassurantes de
la berceuse font place à la simple mélodie, le roucoulement très réussi dénote la capacité
ludique de l’adulte à se rapprocher du monde des enfants.
113. Comme la caisse de résonance de la guitare, les résonateurs de la voix augmentent
l’intensité du son primitif et changent sa couleur en imposant plus ou moins ses fréquences
propres. Il s’agit du pharynx et de la bouche, responsables en partie des différences entre les
voyelles. Mais bien d’autres résonateurs entrent en jeu ; selon leur hauteur, les sons vont
faire vibrer différentes régions du corps, c’est pourquoi on parle de voix de tête, de poitrine

12Louis-Jacques Rondeleux nous explique comment le corps résonne : « Les résonateurs au


sens strict, sont des cavités nécessairement ouvertes qui développent le son et
particulièrement certaines de ses harmoniques. Mais une fois le son fabriqué, il peut faire
entrer en vibration tout corps qui comporte des résonances semblables à la sienne : par
exemple en parlant fort, je puis faire vibrer les vitres de ma chambre, sans que cette vibration
extérieure joue comme résonateur propre de ma voix. Il en va de même pour notre corps. Le
son de notre voix est créé par les résonateurs propres du conduit vocal, mais ensuite il met en
vibration l’ensemble du corps des pieds à la tête » [4]
[4]
Op. cit., p. 169..

13Selon l’auteur, les sensations vibratoires peuvent être extrêmement fortes et jouent un rôle
considérable dans le contrôle de notre propre voix, car notre corps ne vibre pas de la même
manière selon les sons qu’il émet. Les Italiens chantant le bel canto affirmaient que le chant
de la gorge doit être « comme un grand trou avec rien dedans ». Ce que l’on appelle «
l’ouverture de la gorge » constitue le foyer essentiel de la voix.
14Cette sensation si recherchée par les chanteurs et si naturelle chez le jeune enfant est celle
de la détente musculaire. La vélocité vocale repose sur ces relations très fines qui
s’établissent entre la nature des sons, les lieux de résonance et l’activité des muscles mis en
jeu (mouvement du diaphragme, du larynx, du voile du palais, des joues …).

CUERPO

VOLUMEN : Magnitud física que expresa la extensión de un cuerpo en tres


dimensiones, largo, ancho y alto. Intensidad del sonido.

VOZ
per-sonar ⟹ 1. Presentarse personalmente en una parte.
2. prnl. Dicho de una persona: Reunirse con otra para
tratar algo.

“La voz es el aspecto corporal del lenguaje verbal. Cuando muestro la voz pongo el
cuerpo. Jugar con la voz es jugar con el cuerpo” (Calmels, 2011).

Cuando escuchamos un sonido, no solo nuestro oído está funcionando, sino que
todo nuestro cuerpo también está vibrando. Cuando hablamos y cantamos, esta
vibración es doble, vibración de nuestro cuerpo y del cuerpo del otro [...] Así que la
voz no es solo un sonido enviado por una boca y recibido por un oído. Mediante la
voz, la palabra se convierte en una especie de cuerpo a cuerpo. La voz actúa por
simpatía vibratoria (syn-pathos). Es vibración conjunta y afín de dos cuerpos [...] El
sonido de nuestra voz es creado por los propios resonadores del tracto vocal, pero
luego hace vibrar todo el cuerpo de la cabeza a los pies

Calmels, D.(2011). La gesta corporal: El cuerpo en los procesos de comunicación y


aprendizaje. Recuperado de
http://www.desenvolupa.net/index.php/Ultims-Numeros/Numero-32-2011/La-gesta-c
orporal-El-cuerpo-en-los-procesos-de-comunicacion-y-aprendizaje-Daniel-Calmels

Grosléziat, C. (2007). Voz y cuerpo. En Los bebés y la música: primeras


sensaciones y creaciones sonoras. Francia: Érès. Recuperado de:
https://www.cairn.info/les-bebes-et-la-musique--9782865866434-page-71.htm#no4

Muchas cosas atravesaron por mi cabeza cuando osé tomar la posta de la Apertura
Corporal; agradecimiento y admiración por quienes me precedieron, fue la primera.
Mi propuesta no surge tanto de una zona de confort, como del deseo de compartir
algunas preguntas, reflexiones que voy atesorando.

Una frase en la portada de un libro de poemas, que por casualidad


encontré en los cajones de una librería de usados, me llamó mucho la
atención durante cierto tiempo: “sólo una voz de tus ojos y nada más”... la
mirada, la escucha, ¡la voz!... producciones del cuerpo, según González,
manifestaciones del cuerpo, según Calmels, quien escribe: “Cuando
muestro la voz pongo el cuerpo. Jugar con la voz es jugar con el cuerpo”
(2011). Entonces, saliendo un poco de mi zona de confort, quise transitar
por esta experiencia con la voz, lo sonoro... sonar, personar, vibrar,
movimiento…
Pensé en la definición de cuerpo que da la física al referirse a la
tridimensionalidad, al volumen… pero no sólo al externo, visible, sino
también al interno, algo así como “nuestra caja de resonancias”.
Moverse en silencio, que la propia voz inspire el movimiento, que la voz de
un otro me mueva…

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