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COLEGIO HONDUREÑO DE PROFESIONALES UNIVERSITARIOS

EN CONTADURÍA PÚBLICA (COHPUCP)


CÓDIGO DE ÉTICA PROFESIONAL

CONTENIDO

PREÁMBULO

CAPÍTULO I
Principios Fundamentales

CAPÍTULO II
Del Alcance y Aplicación de este Código

CAPÍTULO III
Aceptación de Tareas y Ejercicio Profesional

CAPÍTULO IV
Conflictos Éticos

CAPÍTULO V
Competencia Profesional

CAPÍTULO VI
Secreto Profesional

CAPÍTULO VII
Publicidad

CAPÍTULO VIII
Retribución de Servicios. - Honorarios y Comisiones

CAPÍTULO IX
Independencia

CAPÍTULO X
Relaciones entre Contadores Públicos

CAPÍTULO XI
Relaciones con la Sociedad y el Estado

CAPÍTULO XII
Comunicaciones

CAPÍTULO XIII
El Contador Público en la Docencia

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CAPÍTULO XIV
De las Sanciones

CAPÍTULO XV
Disposiciones Finales

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COLEGIO HONDUREÑO DE PROFESIONALES UNIVERSITARIOS
EN CONTADURÍA PÚBLICA (COHPUCP)
CÓDIGO DE ÉTICA PROFESIONAL

PREÁMBULO

El código de Ética Profesional tiene como función sensibilizar al Contador Público para que el
ejercicio profesional se desenvuelva en un ámbito de honestidad, legitimidad y moralidad, en
beneficio propio, familiar y de la sociedad.

Sin perjuicio de las normas jurídicas y técnicas plasmadas en las leyes, reglamentos, resoluciones
y manuales que regulan el ejercicio de la profesión y el cumplimiento de las obligaciones surgidas
de los contratos de prestación de servicios profesionales, es deseable que prevalezca la ética en
el ánimo de quienes tienen el privilegio de poseer los conocimientos y habilidades propias de
una profesión. Para alcanzar este objetivo, se debe contribuir solidariamente al reencuentro de
nuestra identificación con los valores que propician una vida digna, justa e igualitaria, pero
también se debe estar convencido del compromiso que se contrae al recibir la investidura que
acredita para el ejercicio profesional.

La voluntad de adherirse a un código ético de conducta se determina por el valor que se atribuye
y se reconoce a la razón de la norma, quien no es otra que el bien cultural y social que resguarda.
Así la opinión o valoración respecto de este bien es indispensable para formar la voluntad de
aceptar o rechazar la norma ética y comprometerse a cumplirla.

La fuente de la norma ética es entonces, la propia conciencia del individuo o del grupo que a ella
se adhiere, formada por los valores heredados de la tradición y asimilados en la vida, que inspiran
actitudes de comportamiento congruentes con la dignidad, con lo que es virtuoso, trascendente
y honorable.

El artículo 51 de la Ley Orgánica del Colegio Hondureño de Profesionales Universitarios en


Contaduría Pública (COHPUCP), dispone que El Tribunal de Honor es el órgano del Colegio
encargado de conocer la conducta profesional de los miembros de éste conforme con el Código
de Ética, debiendo dictar las sanciones correspondientes; razón por la cual se emite el presente
Código de Ética.

Colegiados son los profesionales universitarios descritos en el Artículo 04 de la Ley Orgánica


del Colegio.

CAPÍTULO I
PRINCIPIOS FUNDAMENTALES

Artículo 1.- Los Contadores Públicos deben:


I. Mantener y elevar la integridad, el honor y la dignidad de la profesión, así como el
decoro en su vida privada.
II. Utilizar sus conocimientos y sus habilidades, para mejor su bienestar personal,
familiar y de la sociedad.

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III. Ser honestos e imparciales y servir con fidelidad al público, a sus empleados, y
clientes.
IV. Esforzarse para mejorar su capacidad, y el prestigio de la profesión.

Artículo 2.- Además de los indicados en el artículo precedente, los principios que se detallan a
continuación son de carácter general y obligatorio, y determinan un conjunto de
comportamientos que los contadores públicos deben observar rigurosamente en su desempeño
profesional y en su vida privada.

1. Ética:

Es la conducta humana extendida al ámbito profesional, expresada en conceptos como


lo correcto y lo incorrecto, lo bueno y lo malo, lo permitido, la virtud y el deber.

2. Integridad

El Contador Público deberá mantener intacta su integridad moral en el ejercicio


profesional. De él se espera: rectitud, probidad, honestidad, dignidad y sinceridad en toda
circunstancia.

3. Objetividad

Que implica para el Contador Público, ser imparcial, intelectualmente honesto y que
carezca de conflictos de interés al cumplir sus responsabilidades profesionales. La
objetividad es indispensable para lograr la credibilidad.

4. Independencia

El Contador Público en el ejercicio profesional deberá tener y demostrar absoluta


independencia intelectual y de criterio con respecto a todo interés particular que lo
vincule con el contratante, para garantizar que cumplirá sus servicios sin ningún tipo de
impedimentos de tipo personal, organizacional o externa, evitando con ello toda
conducta que pudiera considerarse incompatible con los principios de integridad y
objetividad.

5. Competencia y Cuidado Profesional

El Contador Público deberá contratar solamente trabajos para los cuales él o sus
asociados o colaboradores cuenten con la capacidad necesaria para que los servicios
comprometidos se realicen en forma eficaz y satisfactoriamente, por lo cual, está
obligado a actualizar los conocimientos necesarios para su actuación profesional y
especialmente aquellos requeridos para el bien común y los imperativos de progreso
social y económico. El Contador Público actuará con la intención, cuidado y diligencia
de un profesional responsable consigo mismo y con la sociedad asumiendo siempre una
responsabilidad personal indelegable por los trabajos por él ejecutados o realizados bajo
su dirección.

6. Confidencialidad o Secreto Profesional

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El Contador Público tiene la obligación de guardar el secreto profesional, en tal sentido,
no revelará por ningún motivo los hechos o circunstancias de que tenga conocimiento
mediante documentos e información recibida durante el curso de la prestación de sus
servicios profesionales, a menos que sea autorizado por el o los interesados, o, sea
requerido para ello por autoridad competente. En estos casos deberá salvaguardar su
responsabilidad en forma que no deje lugar a duda. Sin embargo, podrá consultar o
intercambiar impresiones con otros miembros del Colegio sobre cuestiones de criterio,
de carácter general y doctrinario, sin identificar a las personas o negocios de que se trate.

7. Observancia de las Disposiciones Normativas

El Contador Público debe realizar su trabajo cumpliendo las leyes vigentes del país, la
Ley Orgánica del Colegio, estatutos, reglamentos, este código y demás documentos
oficiales aplicables promulgados por el Estado o el COHPUCP. En ausencia de
disposición legal aplicable para algún caso específico, éste deberá actuar de conformidad
con las normas técnicas y profesionales promulgadas por la Federación Internacional de
Contadores (IIFAC); además, deberá observar las instrucciones recibidas de su cliente o
de los funcionarios componentes del ente que requiere sus servicios, en el marco de la
ley, siempre que éstas sean compatibles con los principios de integridad, objetividad e
independencia, así como los demás principios, normas de ética y reglas formales de
conducta y actuación aplicables a las circunstancias.

8. Difusión y Colaboración

El Contador Público tiene la obligación de contribuir, de acuerdo con sus posibilidades


personales, de procurar el desarrollo, superación y dignificación de la profesión;
promoviendo buenas prácticas, brindando asesorías en el mantenimiento y proyección
de la imagen del profesional, y denunciando cualquier acto que vaya en contra de la ética
profesional.

9. Comportamiento Profesional

El Contador Público deberá abstenerse de realizar actos que afecten negativamente la


reputación de la profesión; para ello el Contador Público debe tener la plena conciencia
de que la sinceridad, buena fe y lealtad para con sus colegas, son las condiciones básicas
para el ejercicio libre y honesto de la profesión y para la convivencia pacífica, amistosa y
cordial de los agremiados, así como también para con sus clientes, trabajadores, con
terceros y público en general.

CAPÍTULO II
DEL ALCANCE Y APLICACIÓN DE ESTE CÓDIGO

Artículo 3.- Dado que de conformidad con el artículo 9 de la Ley Orgánica, los miembros del
Colegio Hondureño de Profesionales Universitarios en Contaduría Pública, que por razones de
brevedad, en lo sucesivo se denominará en el presente Código, simplemente por sus siglas
“COHPUCP”, podrán desempeñar en el ejercicio de la práctica profesional, una diversidad de
actividades en el sector público y privado, se requiere definir el ámbito de aplicación de este

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Código con el objeto de establecer que estarán sujetos al cumplimiento de este instrumento
legal:

a) Los contadores;
b) Los auditores internos;
c) Los auditores externos;
d) Los profesionales en el ejercicio de la docencia; y,
e) Cualquier otro profesional que ostente el título universitario de Contador Público.

Artículo 4.- El objeto de este Código es velar por la buena imagen y el prestigio del ejercicio de
la profesión de contaduría pública, y su aplicación es de obligatorio cumplimiento para todos los
profesionales universitarios en la materia e inscritos en el COHPUCP, que se encuentren en el
ejercicio de la profesión, sea en el sector público o privado, de forma dependiente o
independiente.

Artículo 5.- El COHPUCP gestionará y coordinará con las Universidades del país que brindan
la carrera de contaduría pública, la incorporación de este Código en adición a las demás
normativas que regulan el ejercicio de la profesión, como parte del contenido académico en la
formación de sus estudiantes, a fin de promover el buen comportamiento que deben observar
en el ejercicio de la profesión al momento en que sean titulados y acreditados para ejercer la
misma.

CAPÍTULO III
ACEPTACIÓN DE TAREAS Y EJERCICIO PROFESIONAL

Artículo 6.- Los Contadores Públicos, como responsables de sus actos ejercerán su labor
apegados a los principios fundamentales y demás disposiciones éticas contempladas en este
Código, además con la obligación de ser justo y honesto intelectualmente, evitando cualquier
indicio de conflicto de intereses.

Artículo 7.- Teniendo en cuenta la diversidad de funciones que pueden desempeñar los
Contadores Públicos, con la obligación de demostrar su objetividad bajo cada circunstancia; que
para el caso los profesionales en el ejercicio independiente, además de asumir obligaciones de
realizar informes pueden también prestar servicios de asesoramiento fiscal sobre otras materias
gerenciales; otros preparan estados financieros en la empresa que los contrata laboralmente,
realizan servicios de auditoría interna y externa o emplean su capacidad de dirección financiera
en la industria, en el comercio, en el sector público o en la educación, también educan y adiestran
a quienes aspiran a formar parte de la profesión; todos ellos tienen en común el deber de proteger
con esmero la integridad y excelencia de sus servicios profesionales, manteniendo en todo caso
la objetividad y evitando subordinar su criterio al de terceras personas.

Artículo 8.- Los Contadores Públicos, al seleccionar las situaciones y prácticas a ser tratadas por
los requerimientos éticos referente a la objetividad, deben tener en cuenta los siguientes factores:

a) Que pueden estar expuestos a situaciones que incluyen la posibilidad de presiones


ejercidas sobre ellos; pero ante tal eventualidad, deben evitar que la presión externa

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lesione la objetividad a la que ineludiblemente están obligados en su ejercicio
profesional.

b) Cuando el profesional colegiado sea objeto de presiones indebidas en el ejercicio de


sus atribuciones, éste deberá poner en conocimiento del Tribunal de Honor del
Colegio tal situación, y si llegara a firmar bajo coacción o amenaza algún documento,
además de notificarlo al Tribunal de Honor, también deberá poner la denuncia ante
autoridad competente; situación que el órgano disciplinario tratará con la debida
consideración y moderación.

c) Evitar las relaciones que puedan implicar prejuicios o influencias de terceros que
lesionen o afecten la objetividad a que ineludiblemente están obligados.

d) Cumplir con la obligación de asegurar que todo el personal involucrado en la


prestación de servicios profesionales cuente con el correspondiente título y
colegiación, y se adhiera a todos los principios fundamentales de este Código.

Artículo 9.- Cualquier profesional que preste servicios de carácter fiscal, contable, financiero,
auditoría o servicios afines a la Contaduría Pública, está en la obligación de procurar los mejores
beneficios para su cliente o para quien lo emplea laboralmente, siempre que rinda su servicio con
competencia profesional, no afecte su ética e integridad, objetividad y sea congruente con la ley.
En tal sentido, las posibles dudas puede resolverlas a favor de su cliente o de quien lo ha
contratado, si existen argumentos legales y razonables para apoyar su criterio profesional.

Artículo 10.- Los Contadores Públicos, sin perjuicio de su obligación ineludible de observar y
cumplir las normas contables y de auditoría, y demás marcos rectores, no pueden ni deben
garantizar a sus clientes o a quienes le emplean laboralmente, que las declaraciones fiscales que
preparen y la asesoría fiscal que les ofrecen es incuestionable. Por el contrario, deben asegurarse
de que sus contratantes sean conscientes de las limitaciones inherentes a los servicios y asesorías
fiscales, de modo que no confundan una expresión de opinión con una afirmación o hecho
categórico.

Artículo 11.- El profesional que se encargue de preparar, o asesorar en la presentación de una


declaración fiscal, debe advertir a su cliente o a quien le emplea, que la responsabilidad por su
contenido es primordialmente de dicho cliente. Asimismo, el Contador Público debe disponer
de los medios necesarios para asegurar que la declaración se prepara correctamente, con base a
la información recibida y examinada.

Artículo 12.- Los asesoramientos de carácter fiscal, contable, financiero, auditoría y cualquier
relacionado con la Contaduría Pública y las opiniones que puedan tener consecuencias
significativas, que se preparen para el cliente o para quien emplea laboralmente al Contador
Público, deben documentarse y archivarse durante los plazos contemplados en las respectivas
leyes.

Artículo 13.- Ningún Contador Público debe involucrarse en un trabajo profesional, si tiene
dudas significativas de que la información:

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a) Contiene declaraciones falsas o engañosas.

b) Contiene afirmaciones o información suministrada precipitadamente, sin verificación o


sin conocimiento real de lo que es verdadero o falso.

c) Omite o disimula información que deba ser incluida, de manera que tal hecho puede
confundir a las autoridades fiscales y otros usuarios de la información.

Artículo 14.- El profesional estará exento de responsabilidad cuando presente la declaración


fiscal u otros informes contables, financieros, auditoría o relacionados con la Contaduría Pública,
con base a la confianza que le merezca la información suministrada por su cliente o por quien lo
emplea laboralmente, siempre que dicha información parezca razonable.

Artículo 15.- Aunque no sea necesario el examen o revisión de documentos u otras evidencias
que apoyan la información, el profesional debe solicitar, cuando lo estime necesario, que se le
faciliten tales soportes.

Además, el profesional, con respecto a su contratante sea cliente o patrono, debe:

a) Comunicarle cuanto antes cualquier error u omisión identificado.

b) Informarle que no puede continuar a su servicio en relación con el trabajo en cuestión o


con la información relacionada, si el contratante no acepta y procede a corregir los
errores u omisiones encontrados, si éstos fueren relevantes.

c) Continuar la relación con el contratante si ésta es consistente con su responsabilidad


profesional.

d) Adoptar todas las medidas razonables necesarias, para asegurarse que no se repita el error
en trabajos posteriores.

Artículo 16.- Cuando el colegiado sea requerido para actuar como auditor externo, fiscalizador,
perito judicial o árbitro en controversias de índole contable, se abstendrá de aceptar tal
designación si tiene alguna incompatibilidad o cualquier otro motivo que pueda afectar su
objetividad e independencia.

CAPÍTULO IV
CONFLICTOS ÉTICOS

Artículo 17.- Constituyen conflictos éticos o conflictos de intereses de los Contadores Públicos,
los siguientes:

1. Faltar al honor y a la dignidad profesional quien directa o indirectamente intervengan en


asuntos que atenten contra la moral y las buenas costumbres.

2. Utilizar sus conocimientos profesionales para fines que atenten contra la moral y las
buenas costumbres.

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3. Faltar a su obligación de recomendar a la persona con la que esté vinculado por una
relación laboral o de servicios profesionales, la mejor opción o términos para el
desarrollo del trabajo profesional que le sea requerido.

4. Aprovecharse en beneficio propio o ajeno, de situaciones que puedan perjudicar a quien


haya contratado sus servicios.

5. Cuando al expresar su opinión sobre el asunto que haya examinado o sobre cualquier
información de carácter profesional, incurre en actos de descrédito de la profesión, como
ser:

a) Encubrir un hecho importante a sabiendas que es necesario revelarlo para que su


opinión no induzca a conclusiones erradas;

b) Dejar de manifestar expresamente cualquier dato importante que deba mencionarse


en los estados financieros o en sus informes y del cual tenga conocimiento o deba
tenerlo por constar en la información examinada;

c) Incurrir en negligencia grave al emitir el informe correspondiente a su trabajo, sin


cumplir el marco contable aplicable y vigente exigido por las normas y las
circunstancias, para sustentar su opinión profesional sobre el asunto examinado;

d) Cuando siendo de su conocimiento, no informe sobre cualquier desviación


substancial del marco contable vigente o de cualquier omisión importante aplicable
en las circunstancias del caso del que él ocupa; y

e) Aconseje o contribuya a falsear los estados financieros o cualquier otra información


contable financiera de su cliente o de la dependencia donde labora.

En suma, es imperativo que las opiniones, informes o documentos que presente el


Contador Público deban contener la expresión de un juicio bien fundado, sin ocultar o
desviar los hechos de manera que pueda inducir a error.

CAPÍTULO V
COMPETENCIA PROFESIONAL

Artículo 18.- En la presentación de servicios, el Contador Público debe realizar su trabajo


profesional en forma competente, teniendo siempre presente las disposiciones normativas
aplicables al trabajo que ejecute.

Artículo 19.- Cualquier tipo de informe que emita el Contador Público con su firma,
necesariamente deberá ser el resultado del trabajo por él practicado o por algún colaborador
suyo bajo su supervisión; también podrá suscribir informes que se deriven de trabajos en
colaboración con otros colegiados.

Artículo 20.- Si el Contador Público no tiene competencia para ejecutar una parte concreta del
servicio que se le ha encomendado, por ser ajena a su formación, deberá buscar asesoramiento
técnico adicional de expertos, como por ejemplo otros profesionales de la contabilidad,

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abogados, actuarios, ingenieros, geólogos, peritos tasadores y de cualquier otra carrera que
corresponda.

Artículo 21.- El Contador Público es responsable de los estados financieros e informes que
firme, por consiguiente, no deberá aceptar tareas para las cuales no está capacitado.

Artículo 22.- La atención de la adecuada competencia profesional requiere inicialmente un alto


nivel de formación general seguida de formación específica, adiestramiento y aprobación de
exámenes en materias relevantes desde un punto de vista profesional, esté regulado o no, y
también respaldado por un periodo de trabajo práctico, que deben ser los criterios objetivos para
el desarrollo de un perfil profesional.

Artículo 23.- El profesional requiere capacitación continua para el desarrollo en la profesión,


incluida la actualización en las normas de contabilidad, las de auditoría, marcos rectores y otros
pronunciamientos significativos, así como regulaciones relevantes y requerimientos legales.

Artículo 24.- Todo Contador Público debe adoptar un programa diseñado para asegurar el
control de calidad en el cumplimiento de servicios profesionales, congruentes con los
pronunciamientos nacionales e internacionales.

CAPÍTULO VI
SECRETO PROFESIONAL

Artículo 25.- El Contador Público tiene la obligación de respetar la confidencialidad de la


información sobre las actividades y documentos de sus clientes o de quienes le emplean
laboralmente, adquirida en la ejecución de sus servicios profesionales, por consiguiente, él debe
guardar el secreto profesional continuamente, incluso después de la finalización de sus relaciones
con su contratante.

Artículo 26.- El secreto profesional, siempre debe ser observado por el Contador Público, a
menos que alguna autoridad legítima le ordene brindar o entregar la información, o cuando exista
la obligación legal o profesional de hacerlo.

Artículo 27.- El Contador Público tiene la obligación de asegurar que su personal, así como las
personas que le brindan asesoramiento o asistencia, también estén obligados a respetar el secreto
profesional, por lo tanto, deberá instruirlos sobre esa obligación y de las consecuencias de su
indebida divulgación.

Artículo 28.- El secreto profesional no es solamente una cuestión de guardar la confidencialidad


de la información, requiere también que cualquier Contador Público que obtenga una
información en ocasión de la realización de un servicio profesional, no la utilice, en beneficio
propio o ajeno.

Artículo 29.- Todo Contador Público tiene acceso a un volumen considerable de información y
documentación sobre las actividades y situación financiera de sus clientes o de quien lo emplea
laboralmente, la que por ser de naturaleza privada no está a disposición del público por otros
medios; razón por la cual, la ley orgánica, así como los usos y costumbres obligan a no revelar

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esa información a terceros sin autorización del contratante, o sin que medie obligación fundada
en ley.

No obstante, esta obligación no es aplicable a los casos en que la información se hace pública
por otros medios ajenos al Contador Público, a objeto de descargar la responsabilidad de éste,
de acuerdo con las normas profesionales.

Artículo 30.- Por ser de interés público, y particularmente de los profesionales en contaduría
pública, que se establezcan normas profesionales relativas al secreto profesional, así como de
que se dicten criterios de la naturaleza y alcance del deber de confidencialidad y confiabilidad
sobre las circunstancias en las que se puede permitir o requerirse la revelación de información
adquirida durante la realización de servicios profesionales, con el objeto de darle transparencia a
los actos y contratos que suscriban, los contadores deberán contemplar una cláusula con el
siguiente texto u otro similar:

“Las Partes acuerdan mantener confidencial este Contrato, así como su objeto, términos,
condiciones, documentos e informaciones derivados del mismo, por lo que no podrán revelar
ninguno de sus aspectos a ninguna persona natural o jurídica distinta de las que integren su
órgano de administración o su alta dirección, o de quienes participen profesionalmente en su
ejecución, a no ser que sean requeridas para ello por cualquier órgano administrativo o judicial
facultado por la ley; y a no utilizar para su propio beneficio o para beneficio de un tercero, la
información recibida y la generada durante la vigencia del presente contrato. En el caso de que
cualquiera de las Partes resulte legalmente obligada a revelar la totalidad o parte de la información
confidencial, la Parte obligada notificará por escrito tal circunstancia a la otra Parte en un plazo
razonable y, en todo caso, con anterioridad a la entrega de la información confidencial para que
la otra Parte pueda adoptar las medidas que considere apropiadas para proteger sus derechos”.

CAPÍTULO VII
PUBLICIDAD

Artículo 31.- El Contador Público deberá cimentar su reputación en la honradez, laboriosidad y


capacidad profesional, observando en sus actos las reglas de ética más elevadas y evitando toda
publicidad en su propio elogio con o sin fundamento, con carácter propagandístico y la
competencia desleal.

En los concursos por la prestación de servicios profesionales de un colegiado o firmas


contables, es legítima la competencia, en la medida que la adjudicación se deba a la calidad de
los servicios y experiencia del oferente.

Artículo 32.- Por ser de interés para el público y la profesión, conocer los nombramientos o
hechos similares que hayan recaído sobre el profesional en asuntos de importancia nacional o
local, o bien premios o distinciones similares recibidos, estos extremos pueden ser objeto de
publicidad, con la siguiente mención del profesional que se destaque.

Artículo 33.- Los Contadores Públicos en el ámbito de su competencia profesional, pueden


organizar e impartir cursos o seminarios de formación, bajo su conducción directa o por
intermedio de personal a su cargo, dirigidos a sus clientes, otros profesionales, estudiantes y
público en general.

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CAPÍTULO VIII
RETRIBUCIÓN DE SERVICIOS. - HONORARIOS Y COMISIONES

Artículo 34.- El Contador Público no podrá tener ventajas económicas ilícitas, directas o
indirectas en el desarrollo de su profesión, por lo que deberá evitar cualquier tipo de soborno
para obtener los trabajos que realiza o pueda realizar. La remuneración debe ser únicamente la
negociada en condiciones normales con la persona o entidad que lo contrata.

Artículo 35.- El monto de la retribución a que tiene derecho el Contador Público, será el
acordado libremente con el contratante, de acuerdo con la importancia de las labores a
desarrollar, el tiempo que se designe a la labor y el grado de complejidad y especialización
requeridas.

Artículo 36.- El Contador Público, al fijar sus honorarios, deberá tener presente que la
retribución por su trabajo no constituye el objeto fundamental ni la razón de ser del ejercicio de
la profesión, sino la de satisfacer las necesidades de información contable financiera de las
instituciones públicas, privadas y particulares, de manera confiable.

Artículo 37.- La retribución que perciba el Contador Público podrá fijarse en relación a los
resultados que se obtengan de su intervención, según la negociación que se realice con la persona
o entidad que lo contrate.

Artículo 38.- Cuando un Contador Público en el ejercicio de la auditoría pública acepta prestar
sus servicios a un cliente, asume la responsabilidad de realizar su trabajo con integridad y
objetividad y de acuerdo con los demás principios fundamentales y las normas técnicas
apropiadas. Esta responsabilidad se satisface aplicando los conocimientos y técnicas
profesionales que ha adquirido a través de su formación y experiencia; por ello es merecedor de
una justa remuneración por los servicios que presta.

Artículo 39.- Los honorarios profesionales deberán ser un justo reflejo del valor del trabajo
realizado para el cliente, teniendo en cuenta:

a) Los conocimientos y técnicas requeridos para el tipo de servicios profesionales


prestados;

b) El nivel de formación y de experiencia de las personas necesarias para llevar a cabo el


trabajo;

c) El tiempo, así como los recursos humanos y materiales necesarios para llevar a cabo los
servicios contratados; y,

d) El grado de responsabilidad que conlleva la prestación de esos servicios.

Artículo 40.- Corresponde a cada profesional el determinar los honorarios, salarios, comisiones
o tarifas adecuadas, no obstante, estos pueden ser influenciados por las circunstancias legales,
sociales y económicas del país, pero sin menoscabar la dignidad de la profesión.

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Artículo 41.- Con el fin de evitar malentendidos, es de interés, tanto para el cliente como para
el profesional, definir por escrito, antes del comienzo del trabajo, la base de cómputo de los
honorarios, salarios, comisiones o tarifas y las condiciones de pago de los mismos.

CAPÍTULO IX
INDEPENDENCIA

Artículo 42.- El Contador Público no deberá aceptar tareas en las que se requiera su
independencia, si ésta se encuentra limitada por presiones o intereses externos.

Artículo 43.- Para evitar cualquier conflicto de intereses, se considera que no hay independencia
ni imparcialidad al expresar una opinión que sirva de base a terceros para tomar decisiones,
cuando en el caso de los que ejerzan cargos de auditoría interna o externa, el profesional:

a) Sea cónyuge o compañero de hogar, o pariente dentro del cuarto grado de


consanguinidad o segundo de afinidad, con el propietario o socio principal de la empresa
o de algún director, administrador que tenga intervención importante en la
administración del contratante.

b) Sea o haya sido, durante el ejercicio anual que dictamina o en relación al cual se le pide
su opinión, o tenga tratos verbales o escritos encaminados a ser: director, miembro del
consejo de administración o empleado del cliente o de una empresa relacionada,
subsidiaria o que está vinculada económica o administrativamente, cualquiera fuese la
forma en que se designe y se retribuyan sus servicios.

c) Tenga o haya tenido, durante el ejercicio anual que dictamine o con relación al que se le
pide su opinión, o tenga cierta injerencia o vinculación económica con la empresa, en un
grado tal que puede afectar su libertad de criterio.

d) Reciba en cualquier circunstancia o por cualquier motivo participación directa sobre los
resultados del asunto que se le haya encomendado por la empresa que contrató sus
servicios profesionales y exprese una opinión sobre estados financieros en circunstancias
en las cuales su gratificación depende del éxito de cualquier transacción o del ejercicio
anual.

e) Realice auditorías sobre la información en la cual trabaje o haya trabajado como contador
o ejecutivo con influencia sobre la contabilidad.

f) Desempeñe un cargo público en un organismo o dependencia que tenga injerencia en la


revisión de las declaraciones o dictámenes para fines fiscales.

Artículo 44.- La permanencia en la prestación de servicios profesionales se regirá por las leyes,
normativas, reglamentos y políticas vigentes de acuerdo a la naturaleza de la entidad, negocio o
giro de que se audite.

Artículo 45.- Aunque la función de contabilidad no se mencione en disposiciones anteriores de


este capítulo, es indispensable que el profesional que ejerza funciones de contabilidad,

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administración, finanzas y cualquier cargo relacionado, debe mantener la independencia de
criterio, libertad en la toma de decisiones de tipo contable o la amplitud para sugerir el mejor
tratamiento de la labor que le compete.

Artículo 46.- El simple hecho que un Contador Público realice simultáneamente labores de
auditoría externa y consultoría en administración dentro de la misma empresa, implica falta de
independencia.

CAPÍTULO X
RELACIONES ENTRE CONTADORES PÚBLICOS

Artículo 47.- Todo Contador Público evitará esmeradamente que, en sus relaciones con sus
colaboradores, así como con sus colegas y con las instituciones que los agrupa, se menoscabe la
dignidad profesional.

Artículo 48.- Ningún Contador Público podrá ser simultáneamente socio de más de una
sociedad mercantil que se dedique profesionalmente a la misma actividad de prestación de
servicios de contabilidad, auditoría o consultoría, dentro del territorio nacional.

Artículo 49.- El Contador Público se abstendrá de hacer comentarios negativos infundados


sobre otros colegas, para evitar que dichos comentarios perjudiquen la reputación de éstos y el
prestigio de la profesión en general, salvo cuando declare ante el Tribunal de Honor o en
instancias judiciales o administrativas. Las desavenencias técnicas entre colegiados serán
dirimidas por el Colegio, a través de las comisiones que se formen para tal fin.

Artículo 50.- El Contador Público podrá consultar o intercambiar criterios con otros colegas en
cuestión de doctrina e interpretación, pero nunca proporcionar datos que identifiquen a las
personas o negocios de que se trate, a menos que sea con el consentimiento de los interesados.

Artículo 51.- El Contador Público deberá otorgar a sus colaboradores el trato digno que les
corresponde como profesionales y vigilará su adecuado entrenamiento, superación y justa
retribución según su categoría, teniendo en cuenta las leyes del país y la capacidad económica del
contratante.

Artículo 52.- El Contador Público no deberá ofrecer trabajo, directa o indirectamente a


empleados o socios de otras entidades del rubro contable, si no es con el previo consentimiento
de las respectivas entidades, pero podrá contratar libremente a aquellas personas que por
iniciativa o en respuesta a un anuncio de necesidad de contratar, le soliciten empleo
voluntariamente.

Artículo 53.- Cuando un Contador Público sustituya a otro en su trabajo profesional, está
obligado a informárselo a dicho sustituido, y colaborar a que el contratante le pague a aquel la
remuneración justa de honorarios ya devengados que el cliente le adeuda. En tal caso, el
profesional sustituido no podrá negarle información a su sucesor cuando ésta le sea requerida.

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CAPÍTULO XI
RELACIONES CON LA SOCIEDAD Y EL ESTADO

Artículo 54.- Constituye falta grave en el marco del presente Código de Ética, sin perjuicio de
las sanciones administrativas, civiles o penales que correspondan, la presentación de documentos
alterados o el uso de medios o documentos irregulares para la obtención del registro del título
profesional de Contador Público, y de otros actos y documentos necesarios para el ejercicio de
la profesión.

Artículo 55.- Para garantizar la confianza pública en sus certificaciones, dictámenes y opiniones,
los Contadores Públicos deberán cumplir estrictamente las disposiciones legales y profesionales
y proceder en todo tiempo en forma veraz, digna, legal y de buena fe, evitando actos simulados,
así como participar en operaciones fraudulentas o de cualquier otro tipo, que tiendan a ocultar
la realidad financiera de sus clientes, en perjuicio de los intereses del Estado y del patrimonio de
particulares, sean éstas personas naturales o jurídicas.

CAPÍTULO XII
COMUNICACIONES

Artículo 56.- La comunicación de información por los Contadores Públicos en el ejercicio, es


aceptable cuando:

a) Tenga por objeto la notificación al público, a sectores interesados del mismo, de


cuestiones o hechos de manera que tal notificación no resulte falsa, errónea o engañosa.
b) Sea de buen gusto.
c) Evite repeticiones frecuentes, así como la utilización preeminente y no justificada del
nombre del Contador Público.
d) Los documentos formales sean de aceptable calidad y cumplir con los requisitos legales,
al igual que las normativas del COHPUCP

CAPÍTULO XIII
EL CONTADOR PÚBLICO EN LA DOCENCIA

Artículo 57.- El Contador Público que desempeña un cargo docente o de alguna otra manera
imparta enseñanza, deberá instruir en forma técnica y útil la materia de su especialidad,
adecuando a sus educandos para que en el futuro ejercicio profesional actúen con estricto apego
a las reglas de la ética y capacidad profesional.

Artículo 58.- Es obligación permanente del Contador Público, mantenerse actualizado mediante
programas adecuados de educación continua mientras se mantenga en el ejercicio activo de la
profesión.

Artículo 59.- Los Contadores como profesionales de la educación, deben estar conscientes que,
para conseguir objetivos elevados, el mejor método de educación es ser un buen ejemplo para
sus alumnos, su autoridad moral y, por los valores que ellos representan, deben transmitir una
imagen digna de su profesión.

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Artículo 60.- El Contador Público en funciones debe mostrar vocación de servicio a la profesión
y no utilizar su cargo únicamente con fines personales o en provecho para vinculaciones de tipo
político, o algún otro interés que este reñido con la ética y las buenas costumbres.

CAPÍTULO XIV
DE LAS SANCIONES

Artículo 61.- El Contador Público que viole las prescripciones de este Código o cualquier otra
obligación establecida en las leyes, reglamentos y normativas del país que le son aplicables, se
hará acreedor a las sanciones que le imponga la Junta Directiva, con base al dictamen que emita
previamente el Tribunal de Honor del Colegio.

La pluralidad de faltas cometidas por un mismo colegiado no será considerada como leve,
aunque cada una de ellas considerada individualmente pudiera merecer esa calificación.

Artículo 62.- La expulsión definitiva, conforme a las regulaciones de las leyes sobre el ejercicio
profesional, podrá ser determinada solamente cuando los tribunales de justicia competentes,
hubiese dictado sentencia ejecutoria contra el profesional encausado.

Artículo 63.- Para la imposición de sanciones, el Tribunal de Honor tomará en consideración la


gravedad de la violación cometida, evaluando la trascendencia que la falta tenga para el prestigio
y estabilidad de la profesión.

Artículo 64.- Según la gravedad de la falta, la sanción podrá consistir en:

a) Amonestación privada;
b) Amonestación pública;
c) Sanción económica o multa conforme se establece en el Reglamento Interno del
Tribunal de Honor;
d) Recomendar a la Asamblea General la suspensión temporal en el ejercicio de la
profesión; y,
e) Recomendar a la Asamblea General la expulsión definitiva conforme a lo establecido al
Artículo 62 de este Código.

Artículo 65.- La facultad de la interpretación y de exigir el cumplimiento de los principios, reglas,


normas y sanciones establecidas en este código, corresponde exclusivamente al Tribunal de
Honor del COHPUCP.

Artículo 66.- El procedimiento a seguir para la aplicación de las sanciones, es el siguiente:

a) Denuncia por escrito ante el Tribunal de Honor, o por seguimiento de oficio derivado
de información o noticia pública; una vez se confirme la actuación inapropiada del
colegiado;
b) Sumario informativo y dictamen del Tribunal de Honor; y,
c) Sanción ejecutiva por la Junta Directiva.

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CAPITULO XV
DISPOSICIONES GENERALES

Artículo 67.- Los practicantes y cualesquiera otras personas que participen en la preparación y
elaboración de información contable y financiera, están igualmente obligados a cumplir estos
principios éticos, en lo que haga relación a sus funciones.

Artículo 68.- Sin perjuicio de las disposiciones contenidas en la Ley Sobre Normas de
Contabilidad y Auditoría, para la efectividad de este Código, el COHPUCP vigilará la actuación
de los Contadores Públicos, en cualquier esfera que actúen y de cualquier jerarquía que sean,
para hacer las oportunas gestiones, a fin de obtener la enmienda de los que ejecuten actos
irregulares, hasta obtener la sanción del culpable en el ejercicio de la profesión, si fuere necesario.

Artículo 69.- Todo lo que se dice en el presente Código, con respecto a la conducta del Contador
Público en su condición personal, se entenderá aplicable a las entidades mercantiles o firmas
profesionales que se dediquen al ejercicio de la contaduría pública.

Artículo 70.- Las violaciones a las disposiciones de este Código, se penalizarán de


acuerdo con las sanciones establecidas en el Capítulo IX de la Ley Orgánica del COHPUCP y
de conformidad con las normas que de manera especial se consignen en el Reglamento Interno
del Tribunal de Honor.

Artículo 71.- Lo no previsto en este Código de Ética se resolverá de conformidad a lo que


establecen la Ley Orgánica del COHPUCP, sus reglamentos, la Ley de Colegiación Profesional
Obligatoria, Ley sobre Normas de Contabilidad y Auditoría, y demás leyes del país que le sean
aplicables, asimismo por el Código Internacional de Ética para Profesionales de la Contabilidad,
emitido por el Consejo de Normas Internacionales de Ética para Contadores (IESBA).

Artículo 72.- Las designaciones contenidas en este Código, como “COHPUCP” y “Colegio”,
son equivalentes y están referidas al Colegio Hondureño de Profesionales Universitarios en
Contaduría Pública. Asimismo, las menciones que dicen “colegiado”, “profesional” y “contador”
se refieren a los Contadores Públicos que son objeto de este instrumento.

Artículo 73.- También, las designaciones de “Contador Público”, “profesional” y “docente” se


entenderán aplicables a ambos sexos.

Artículo 74.- Este Código entrará en vigencia después de su aprobación por la magna Asamblea
General, y publicado en el Diario Oficial La Gaceta.

Tegucigalpa, M.D.C., xx de _____ de 2020.

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