CLASE 1 La Comunicación Humana
CLASE 1 La Comunicación Humana
CLASE 1 La Comunicación Humana
Concepto de comunicación
Es complejo, no se puede definir simplemente por el significado que aparece en los
diccionarios. Por eso es que desde distintas disciplinas (psicología, sociología, lingüística,
etc.) se ha trabajado el concepto de comunicación: cómo se la concibe, en qué consiste, y
qué casos se pueden llamar comunicativos.
Una primera aproximación para tener en cuenta es pensar el acto comunicativo como un
circuito básico emisor-mensaje-receptor. Por ejemplo, cuando un profesor realiza una
exposición sobre los primeros pobladores de lo que hoy llamamos territorio argentino. En
esta situación, el profesor es el emisor, los alumnos son los receptores y la exposición, el
mensaje.
Desde esta perspectiva, podríamos considerar actos de comunicación algunos fenómenos
del reino animal. Es un hecho que los animales se comunican: el perro ladra cuando tiene
hambre, marca su territorio con orina, etc.
Un ejemplo interesante para muchos investigadores es el de las abejas. El fenómeno que
llamó la atención es la manera en que la abeja descubre el alimento. En las colonias de
abejas, cuando una de ellas descubre dónde está el alimento informa la ubicación mediante
una danza a las demás abejas, sin guiarlas directamente. Transmite datos: la distancia y la
dirección en la que se encuentra el alimento. En este caso, la abeja que vuelve a la colmena
es el emisor, su danza es el mensaje y las otras abejas, los receptores.
La comunicación humana
Para ampliar el concepto de comunicación, se pueden comparar el sistema de las abejas con
el sistema de la comunicación humana. El lingüista francés Emile Benveniste1 plantea
semejanzas y diferencias entre comunicación animal y humana. Para Benveniste, el mensaje
es un conjunto de signos que se refieren a determinados objetos. Los signos no están
1 Emile Benveniste. (Alepo, 1902-París, 1976) Lingüista francés. Su obra, centrada en la indoeuropeística y en la
sintaxis general, es una de las más fértiles de la escuela lingüística francesa. En el campo de la semántica, ha
elaborado una obra pionera en el estudio de los aspectos extralingüísticos. Sus estudios más notables son Orígenes
de la formación de los nombres en indoeuropeo (1935), El vocabulario de las instituciones indoeuropeas (1969) y
los dos volúmenes de Problemas de lingüística general (1968 y 1974).
relación necesaria con aquello que representan. Los signos son entidades diferentes creadas
para la comunicación. La danza de las abejas (mensaje) es muy diferente a la ubicación del
alimento (lo que se comunica). Esto es aplicable a la comunicación humana. La palabra
“casa” no tiene nada que ver con el objeto casa.
Los signos, además, pueden ser comprendidos porque pertenecen a un código. Tanto los
hablantes de una lengua como las abejas utilizan un sistema de convenciones (que puede
ser muy simple o extremadamente complejo) mediante el cual los miembros de una
comunidad se entienden
Cuando aprendemos a hablar, aprendemos el código de nuestra lengua, que utilizamos en la
vida cotidiana junto con otros códigos (señales de tránsito, gestos, etc.).
Sin embargo, existen ciertas características que diferencian la comunicación de los humanos
y de los insectos. Las abejas envían mensajes, pero no dialogan. Sus mensajes generan
conductas, pero no otros mensajes como respuesta. En cambio, los humanos hablamos a
otros que hablan.
Sólo el lenguaje que utilizan los humanos puede funcionar como metalenguaje. Las abejas
no pueden comunicar a otras abejas lo que otra abeja les comunicó. El metalenguaje es la
capacidad de hablar sobre el lenguaje. Es fundamental porque permite estudiar, discutir,
cuestionar los mensajes de otras personas.
Comunicación humana: diálogo. Discusión. Matices. Capacidad creadora. Hablamos a otros
que hablan.
El código de la comunicación humana es mucho más complejo y permite generar múltiples
mensajes, inclusive decir cosas que hasta el momento no habían sido dichas. Entre las abejas
siempre se transmitirá el mismo mensaje con el mismo significado.
Complejidad: a partir de un código finito las personas pueden crear infinitos mensajes.
Estos términos, pasaron a formar parte de la jerga comunicacional y aún del lenguaje
corriente, desarrollando una existencia propia, con independencia del marco explicativo en
que tuvieron origen. Así se comenzó a hablar de fuente, emisor, mensaje, canal, destinatario
o receptor. Su representación gráfica, se ha usado una y otra vez, agregando o quitando
algún elemento, pero siempre manteniendo su apego a una estricta causalidad lineal.
Comunicación Mediada
2
Umberto Eco (Alessandria, Piamonte, 1932). Semiólogo y escritor italiano. Se doctoró en Filosofía en la
Universidad de Turín, con L. Pareyson. Su tesis versó sobre El problema estético en Santo Tomás (1956), y su
interés por la filosofía tomista y la cultura medieval se hace más o menos presente en toda su obra, hasta emerger
de manera explícita en su novela El nombre de la rosa (1980). Desde 1971 ejerce su labor docente en la
Universidad de Bolonia, donde ostenta la cátedra de Semiótica.
simultáneamente a gran cantidad de receptores que no se conocen entre sí y que viven en
lugares muy distantes. Por eso es que algunos pensadores sostienen que los medios masivos
son fundamentalmente de difusión más que de comunicación.
El uso de tecnología digital como internet permite que cualquiera pueda poner en
circulación determinada información y utilizar la disponible en forma selectiva. Esto
cuestiona el carácter difusor de los medios y la imposibilidad de los receptores de dar
respuesta, como sucede en los medios masivos tradicionales, no digitales.
Los productos de la comunicación mediática son muy diversos, Podemos advertir que están
hechos sobre distintos materiales, que se denominan soportes. Algunos mensajes son
visuales o audiovisuales, otros gráficos, otros sonoros. Desde otro punto de vista, difieren en
sus temas, en sus destinatarios o en las estructuras de sus discursos, diferencias que nos
permiten habar de distintos géneros. Por ejemplo, son evidentes las diferencias entre un
programa infantil, una telenovela y un noticiero.
El receptor hace las veces de transmisor invertido que cambia la señal transmitida en un
mensaje y pasa este mensaje a su destinatario. "Cuando yo hablo con usted, mi cerebro es la
fuente de información, el suyo el destinatario, mi sistema vocal es el transmisor, y su oído,
con su octavo par de nervios craneanos, es el receptor".
"Los problemas que han de estudiarse en un sistema de comunicación, tienen que ver con la
cantidad de información, la capacidad del canal de comunicación, el proceso de codificación
que puede utilizarse para cambiar el mensaje en una señal y los efectos del ruido" (1.984,
pag.36).
Estos términos, pasaron a formar parte de la jerga comunicacional y aún del lenguaje
corriente, desarrollando una existencia propia, con independencia del marco explicativo en
que tuvieron origen. Comenzó a ser común hablar de fuente, emisor, mensaje, canal,
destinatario o receptor. Su representación gráfica, se ha usado una y otra vez, agregando o
quitando algún elemento , pero siempre manteniendo su apego a una estricta causalidad
lineal.
A partir de su concepción, Weaver, expresa: "El trabajo se aplica en primera instancia sólo al
problema técnico, pero la teoría tiene una significación más amplia. Para comenzar, el
significado y la efectividad están inevitablemente restringidos por los límites teóricos de la
exactitud en la transmisión de símbolos. Más aún, el análisis teórico del problema técnico
pone en evidencia que éste se superpone a los problemas semánticos y de efectividad más
de lo que se podría sospechar"
Weaver, alude concretamente a los tres niveles en que tradicionalmente se abordan los
problemas de la comunicación: técnico, semántico y pragmático. Cada nivel, se abre en una
dimensión de análisis e interpretación diferentes.
También, muy entusiasta agrega “La teoría matemática de la comunicación es tan general
que no es necesario decir qué clase de símbolos se consideran: Si se trata de palabras o
letras escritas, de notas musicales, de palabras habladas, de música sinfónica o de imágenes.
Las relaciones que la teoría revela se aplican a todas estas formas de comunicación y a
muchas otras. La teoría está tan imaginativamente motivada que se ocupa del núcleo
interior mismo del problema de la comunicación”.
Todo esto ocurre en circunstancias de que el propio Shannon, en su escrito original, había
establecido expresamente el carácter restringido de su posición, atendiendo a su particular
orientación profesional: "El problema de la comunicación, consiste en reproducir en un
punto, sea exacta o aproximadamente, un mensaje seleccionado en otro punto.
Frecuentemente el mensaje tiene significado; este se refiere o está relacionado con algún
sistema con ciertas entidades físicas o conceptuales, estos aspectos semánticos de la
comunicación son irrelevantes para los problemas ingenieriles. El aspecto significativo es
que el mensaje actual, es seleccionado de un conjunto de posibles mensajes. El sistema
debe ser activado para operar cada posible selección, no sólo de la que fue elegida, sino
también desde una desconocida en el momento de ser activada".
Esta distinción e interacción entre estas 3 áreas sirve de base para la formulación de 5 los
axiomas de la Teoría de la Comunicación Humana (Watzlawick et al., 1985):
El nivel de contenido en este caso podría ser evitar que pase algo
malo y el nivel de relación sería de amistad-paternalista. Por ello,
toda comunicación tiene un aspecto de contenido o semántico y
un aspecto relacional, tales que el segundo clasifica al primero y es,
por ende, una metacomunicación (Watzlawick et al., 1985 p.52).
“Es decir no se reduce explícitamente a una causa - efecto. Puesto que, la naturaleza de la
relación depende de la puntuación (organización) de las secuencias de comunicación entre
los comunicantes”. (Watzlawick et al., 1985 p.56).