El documento habla sobre cómo la aflicción no es nuestro destino final. Aunque tendremos dificultades en la vida, nuestro destino es la victoria a través de Cristo. El documento alienta a mantener la mirada en Jesús y en la recompensa futura, no en las circunstancias temporales, porque Dios nos ha destinado a triunfar sobre el mundo.
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El documento habla sobre cómo la aflicción no es nuestro destino final. Aunque tendremos dificultades en la vida, nuestro destino es la victoria a través de Cristo. El documento alienta a mantener la mirada en Jesús y en la recompensa futura, no en las circunstancias temporales, porque Dios nos ha destinado a triunfar sobre el mundo.
El documento habla sobre cómo la aflicción no es nuestro destino final. Aunque tendremos dificultades en la vida, nuestro destino es la victoria a través de Cristo. El documento alienta a mantener la mirada en Jesús y en la recompensa futura, no en las circunstancias temporales, porque Dios nos ha destinado a triunfar sobre el mundo.
El documento habla sobre cómo la aflicción no es nuestro destino final. Aunque tendremos dificultades en la vida, nuestro destino es la victoria a través de Cristo. El documento alienta a mantener la mirada en Jesús y en la recompensa futura, no en las circunstancias temporales, porque Dios nos ha destinado a triunfar sobre el mundo.
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LA AFLICCIÓN NO ES TU DESTINO
- Juan 16:32-33>He aquí la hora viene, y ha venido ya, en que seréis
esparcidos cada uno por su lado, y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo. 33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo. - Pon tu mirada en la meta, no en el camino que puede estar lleno de dificultades. - Aprende a superar los fracasos, porque la aflicción es pasajera si creemos en nuestro futuro de bien. - Todos vamos en camino hacia nuestro destino y debemos superar etapas. - El hecho de perder en algo no nos hace perdedores. - Hay que diferenciar entre un evento y una actitud de vida. - El hijo pródigo se le perdió al Padre Eterno. Entonces, debemos notar que no todas las etapas son para ganar. Pero no debemos anticiparnos a la derrota, porque estamos hechos para ganar. - En Juan 16:32-33 vemos que Jesús estaba consciente que en algún momento de su vida se quedaría sin compañía, pero realmente no estaría solo, porque el Padre siempre lo acompañaría. - A veces sentimos que estamos sin compañía, pero no estamos realmente solos porque el Padre está con nosotros. - No debes ver lo que pierdes sino lo que sigues teniendo. Imitemos la actitud del Señor y no veamos la aflicción sino el triunfo que podemos lograr en Cristo Jesús. - En la vida tendremos aflicciones por hacer lo malo y por hacer lo bueno. La vida en Cristo es difícil pero sin Él es imposible. - Podremos tener aflicción por fumar y también por dejar de hacerlo, por hacer negocios lícitos o por hacer trampas, por decir la verdad o seguir mintiendo. 1Pedro 3:17NVISi es la voluntad de Dios, es preferible sufrir por hacer el bien que por hacer el mal. - En la vida hay que sumar y restar ya que la ganancia es la diferencia entre lo malo y lo bueno. - Si no hubiera algo malo, no podríamos ver lo bueno. Tú decides lo que ves en la vida y debes descubrir que jamás serás fortalecido si pones atención a la debilidad y no te enfocas en las promesas. - Si algo positivo viene, no preguntas, simplemente lo tomas. Esa también debe ser la actitud frente a lo negativo, tomarlo y procurar salir fortalecido de la prueba. - Recuerda que todo es un balance. Para ver el día debemos pasar por la noche, para disfrutar del verano hay que sobrevivir el invierno, para cosechar, primero debemos sembrar. No te quejes cuando pases una época difícil. Pon tu esperanza en el Señor que nunca te abandona. - Lucas 2:7>Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón. - Jesús nació en un pesebre porque no había lugar en el mesón. Mucha gente cree que Jesús nació allí porque era pobre y humilde, pero no fue así. Lo bueno y agradable no te quita humildad. - Nació en un pesebre por emergencia, su destino era el trono a la derecha del Padre. - Hay épocas de “pesebre” en nuestra vida, pero eso no quiere decir que ese sea nuestro destino. - Jesús, siendo el dueño de todo, era el más humilde y lo demostró con Su obediencia al Padre; no al nacer en un pesebre. - Tu destino es estar sentado junto al Padre, esa es Su voluntad. Somos más que vencedores y cualquier circunstancia adversa debemos verla como una etapa que es necesario superar. - Cada etapa debe alimentar nuestra experiencia y superarla si fue buena o mala. Hay que aprender de lo que nos sucede. No podemos quedarnos igual después de lo que vivamos. - Es necesario olvidar lo negativo para que no se repita y mejorar lo bueno para que lo venidero sea aún mejor. Al final el peor pecado es peinar canas y no ser sabio. - No pases la vida simplemente esperando la muerte. Aprende de tus éxitos y fracasos, anota tus aciertos y errores, porque la sabiduría es recompensa y la necedad es castigo. - Hebreos 12:1-2NVI>Por tanto, también nosotros, que estamos rodeados de una multitud tan grande de testigos, despojémonos del lastre que nos estorba, en especial del pecado que nos asedia, y corramos con perseverancia la carrera que tenemos por delante. 2 Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe, quien por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios. - Debemos correr la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús que está sentado a la diestra del trono de Dios. - Hebreos 11:24-27NVI>Por la fe Moisés, ya adulto, renunció a ser llamado hijo de la hija del faraón. 25 Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios a disfrutar de los efímeros placeres del pecado. 26 Consideró que el oprobio por causa del Mesías era una mayor riqueza que los tesoros de Egipto, porque tenía la mirada puesta en la recompensa. 27 Por la fe salió de Egipto sin tenerle miedo a la ira del rey, pues se mantuvo firme como si estuviera viendo al Invisible. - Aprende de Su ejemplo, valora las cosas en su justa medida para verlas como son. - La aflicción es momentánea y no se compara con la gloria venidera. - Por tu mirada en la meta, no te des por vencido, porque Dios tiene un buen futuro para ti y para quienes te rodean.