LA ENERGiA FEMENINA DE LA DIOSA
LA ENERGiA FEMENINA DE LA DIOSA
LA ENERGiA FEMENINA DE LA DIOSA
DIOSA
¿Por qué, nunca, más que ahora, las mujeres manifiestan tantas enfermedades
en sus mamas?
¿Por qué salen tantos artículos y noticias sobre las nuevas formas de
manifestación de nódulos malignos en las mamas?
¿No será tal vez que, hay un llamado al despertar en nuestra conciencia, que
nos dice a veces sutilmente, y a veces con la terrible fuerza movilizadora de
una enfermedad, que ya es “hora de despertar”?
Esa que hemos relegado durante milenios, ”permitiendo” que nos despojaran
de ella?
¿Qué nos está mostrando todo esto hermanas queridas? ¿qué nos quieren
mostrar las circunstancias de tales enfermedades?
Y esa fuerza sale ahora disfrazada bajo la forma por ejemplo, de: “la mujer
ahora trabaja igual que el hombre”.
Y, aunque al principio, en ese danzar, y ese sentir surja alguna emoción no tan
bella, no tan hermosa como quisiéramos, permitámosle salir, y hagamos
primero, nuestro duelo, para que luego de ese duelo, desde allí mismo, donde
se encuentran todas las emociones, unidas como en un parentesco entrelazado
de buenos y malos sentimientos, se desprenda el aroma de la diosa, ese aroma
de jazmines, que nos recuerda el dulzor del alma, que nos dice que la era de
Kali Yuga se ha acabado, y renazca nuestra diosa, con la sabiduría, con el
amor, con la danza, con la nutrición interna, con la emoción femenina, que
tanto le hace falta a nuestra Gaia, y... para aquellas de nosotras... hermanas...
que, pareciera que... con una falta de un pecho, se nos ha quitado algo...
Sepamos hermanas que, siempre llevamos, quién más quién menos, algunas
cicatrices en el cuerpo, de esta u otras vidas, pero no es eso lo que realmente
ahora está en juego, son las cicatrices del alma las que ahora la diosa, viene a
sanarnos.
Y, cuando ella se presenta, hermanas, tengan la plena seguridad que por tener
hoy, un pecho de menos, o una violación de nuestras hijas, no nos han
quitado ¡¡¡¡“nada”!!!!! “tal es hermanas, la sacralidad del alma”.
Así se siente hermanas mías, así se siente la fuerza de la diosa, cuando luego
de una violación al cuerpo de una de nuestras hijas, la diosa habla por
intermedio de nuestras cuerdas vocales sin titubear siquiera un instante y
dice...
“Hija mía llevamos en el cuerpo cicatrices” pero el alma, hija mía, “esa sí
que sigue intacta” “nada la ha tocado hija querida”, y en ese decir que la
Diosa manifiesta a través de estos labios que tenemos, no les quepa duda
alguna hermanas mías, que es “la sanación” “de la diosa” la que se ha
manifestado en tales palabras.