El Secreto y El Juramento Masónico
El Secreto y El Juramento Masónico
El Secreto y El Juramento Masónico
Es común que las personas ajenas a la masonería se pregunten por qué se trata
con tanta discreción lo que hacemos dentro los trabajos masónicos, uno de los
motivos es el juramento masónico.
EL SECRETO Y EL JURAMENTO
Siempre se nos dice que no se debe jurar en vano y mucho menos en nombre de
Dios. Al final todo se reduce a la calidad del humano, ya ni siquiera del masón,
sino de la persona que se inclina ante el Ara.
No, si existe una consecuencia por incumplir con lo que se jura en este templo;
alejada tal vez de la pena que se representada en el ritual pero que es igual de
fuerte.
Se carecerá de credibilidad, se tachará en el subconsciente de cada hermano y a
la larga se alejará como muchos otros que le han precedido.
Sin encontrar lo que en un inicio vino a buscar en el seno de nuestra fraternidad.
Somos un grupo cerrado de personas de diferentes creencias, de diferentes
procedencias, con diferentes formas de ver la vida, pero con una forma de
unificar criterios y conductas.
Con un juramento que sin diferencia alguna todos los aquí presentes hemos
prestado; en razón de esto, debemos cumplirlo para que nuestra obra en verdad
tenga obreros de calidad.
Un acto solemne
La globalización e internet han roto lo que algunos llamaban “secreto masónico” porque
cualquiera que quiera es libre de indagar. “Incluso en ese caso, se aburrirán porque un
rito tiene un sentido distinto para cada uno”.
Por tanto, parece normal no arriesgarse a poner en peligro a los miembros y por eso
pedimos a nuestros hermanos y hermanas de la máxima discreción.
En cuanto a los rituales y los símbolos simplemente hay que consultar un diccionario o
Internet para estar plenamente informados. En la masonería actual existe una apertura
de diversas logias en todo el mundo, mostrando incluso los ritos que se consideraban
secretos.
No hay verdadero secreto masónico tal y como podría tener un secretario de Estado,
secretario de defensa o una agencia de inteligencia militar... La Francmasonería es
simplemente una asociación que disfruta trabajando en un ambiente tranquilo y pacífico,
al abrigo de agitaciones y emociones. El trabajo de los masones no es nada secreto,
diabólico, ni sulfuroso o ilegal. No hay grupos siniestros, o sacrificios rituales.
Sin entrar en detalles porque así lo estipula la Gran Logia, los hermanos presentes
describen sus ritos como una especie de ambiente de “psicodrama” que permite a cada
uno sumergirse en su interior y concibe a la persona como una ser grupal, social, y no
como un individuo aislado. Las personas nacemos en grupo y nos relacionamos en
grupos. ¿Y esto se hace? Trabajando con símbolos muy antiguos. Cada uno los
interpreta de forma distinta. Por eso no tiene sentido explicar qué es lo que hacemos.
Cada persona le encuentra una motivación diferente.
-Tú eres Piedra, y sobre esta piedra es que se construye. Sé tu propio arquitecto, el
obrero de tu Gran Obra. A ti fueron dadas las llaves del Reino. El Reino que tu propia
voluntad se atreva a construir.
El secreto masónico, es que no hay ningún secreto.