Gluck Louise - El Iris Salvaje
Gluck Louise - El Iris Salvaje
Gluck Louise - El Iris Salvaje
Cuando lees algo que merece recordarse, liberas una voz humana:
devuelves al mundo un espíritu compañero.
Yo leo poemas para escuchar esa voz. Escribo para hablar a
aquellos a quienes he escuchado.
Louise Glück, Proofs and Theories
EL IRIS SALVAJE
Terrible sobrevivir
como conciencia
sepultada en tierra oscura.
Tú que no recuerdas
el paso de otro mundo, te digo
podrías volver a hablar: lo que vuelve
del olvido vuelve
para encontrar una voz:
del centro de mi vida brotó
un fresco manantial, sombras azules
y profundas en celestes aguamarina.
MAITINES
Creo entenderlo.
Desperté ignorante en un bosque;
hace apenas un momento desconocía mi voz,
si me dieran alguna
estaría tan llena de dolor, mis frases
se ensartarían todas juntas, como gritos.
Ni siquiera supe si sentí dolor
hasta que vino la palabra, hasta
que sentí la lluvia
fluyendo desde mí.
LAMIUM
No esperaba sobrevivir,
la tierra me asfixiaba. Jamás esperé
despertar de nuevo, sentir
en la húmeda tierra mi cuerpo
capaz de responder otra vez, recordando
después de tanto tiempo cómo abrirme
de nuevo en la fría luz
de la temprana primavera:
OS he mirado suficiente,
ahora puedo hablaros como quiera.
zarcillos
de la enredadera azul, el brillo
vuestras bocas,
pequeños círculos de miedo.
No puedo continuar
limitándome a imágenes
queriendo expresaros
como si fueseis algo nuevo,
Aunque lo anhelaseis,
no os hallaríais jamás en el jardín,
entre las plantas que crecen.
Vuestras vidas no son como las suyas, circulares:
ALGO
llega al mundo sin ser bienvenido
y se llama al desorden, al desorden.
Si tanto me odias
no te molestes en buscar
un nombre para mí: ¿necesitas
acaso un desdoro más
en tu lenguaje, otra
manera de culpar
a la tribu por todo?
Ambos lo sabemos,
si adoras a un dios, necesitas
sólo un enemigo.
Yo no soy el enemigo.
Solo soy una treta para ignorar
lo que ves que sucede
aquí mismo en esta cama,
un pequeño paradigma
del fracaso. Una de tus preciosas flores
muere aquí casi a diario
y no podrás descansar
hasta enfrentarte a la causa, es decir,
a todo lo que pueda,
a todo aquello que es más fuerte
que tu pasión personal.
No estaba escrito
permanecer para siempre en este mundo.
Pero por qué admitirlo, si puedes seguir
haciendo lo de siempre,
lamentándote y culpando,
las dos cosas a la vez.
Y yo conformaré el campo.
VALERIANA AZUL
ATRAPADA en la tierra,
¿no querrías tú también
ir al cielo? Vivo
en el jardín de una dama. Perdóname, dama;
el anhelo ha robado mi gracia. No
soy aquello que querías. Pero
igual que los hombres y mujeres
parecen desearse unos a otros, yo también
deseo conocer el paraíso. Y tu lamento
ahora, un tallo desnudo
que asoma en la ventana del portal.
¿Y finalmente, qué? Una pequeña flor azul
como una estrella. ¡Y nunca
abandonar el mundo! ¿O no es eso
lo que dicen tus lágrimas?
MAITINES
GRAN cosa
carecer
de mente. Sentimientos:
oh sí; ellos
me gobiernan. Tengo
un señor en el cielo
llamado sol, y me abro
para él, le muestro
el fuego de mi propio corazón, fuego
igual que su presencia.
¿Qué podría ser tal gloria
sino un corazón? Oh hermanos y hermanas,
¿fuisteis como yo alguna vez, hace tiempo,
antes de ser humano? ¿Os permitisteis
abriros una sola vez, vosotros
que nunca volveríais a hacerlo? Porque en verdad
estoy hablando ahora
como lo hacéis vosotros. Hablo
porque estoy destrozada.
TRÉBOL
Deberías hacerte
a ti mismo esas preguntas,
no dejarla
para tus víctimas. Deberías saber
que cuando tú presumes
escucho hablar dos veces:
una es tu espíritu, la otra
lo que hacen tus manos.
MAITINES
Y os preguntáis
por qué desespero,
pensáis que algo podría fundiros en un todo;
y en su nombre os estranguláis
unos a otros
en el campo abierto.
No os propusisteis
ser únicos. Fuisteis
mi encarnación, la diversidad misma,
Hay un límite
en el placer que obtuve de las formas;
no necesito
protección fuera de mí.
Y tan inflexibles;
queréis cobrar por adelantado
vuestra ausencia,
cobrar con alguna parte de la tierra,
algún recuerdo, del mismo modo que una vez
fuisteis premiadas por vuestra labor,
y el escriba recibió su pago
en plata y el pastor en cebada
aunque la tierra no dure
eternamente, ni estos minúsculos
trocitos de materia.
La creación os ha traído
grandes emociones, lo sabía,
así ocurre siempre en los comienzos.
Y ahora soy libre de hacer lo que me plazca,
atender otros asuntos, con la certeza
de que nunca más necesitaréis de mí.
VÍSPERAS
AMOR de mi vida,
estás perdido y yo
soy joven otra vez.
PARA mí la felicidad
es el sonido de tu voz
cuando me llamas, aun cuando
está desesperada; mi dolor lo aceptas
como mío cuando no puedo
responderte con palabras.
la oscuridad y el silencio.
EL LIRIO DE PLATA
COMO siento
que estoy agonizando y sé
que no volveré a decir palabra, que no
sobreviviré a la tierra, que no seré
convocada de nuevo, que no soy flor aún,
sino una espina, y el áspero polvo
se instala en mis costados; yo te invoco,
padre y maestros: a mi alrededor
mis compañeros se marchitan, piensan
que no ves. ¿Cómo pueden
saber que ves
si no nos salva?
En el crepúsculo de verano ¿estás
lo bastante cerca para oír
el terror de tu criatura?, ¿o
no eres tú mi padre,
aquel que me cultivó?
LIRIOS BLANCOS