Tesis Martha Agrario

Descargar como doc, pdf o txt
Descargar como doc, pdf o txt
Está en la página 1de 76

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL

DE LOS LLANOS OCCIDENTALES


“EZEQUIEL ZAMORA”

VICERRECTORADO DE PLANIFICACIÓN Y
La Universidad que Siembra DESARROLLO REGIONAL
COORDINACION DE AREA DE POSTGRADO
EN DERECHO AGRARIO Y AMBIENTE

ALTERNABILIDAD PARA LA RESOLUCIÓN DE LOS


CONFLICTOS AGRARIOS

Trabajo Especial de Grado para Optar al Título de Especialista en


Derecho Agrario y Ambiente

Autora: Martha Isabel Valencia Carrillo


C.I.: 23.162.212
Tutora: MSc. Jairo Alex Archila Bolaños

Barinas, Septiembre de 2022


UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL
DE LOS LLANOS OCCIDENTALES
“EZEQUIEL ZAMORA”

VICERRECTORADO DE PLANIFICACIÓN Y
La Universidad que Siembra DESARROLLO REGIONAL
COORDINACION DE AREA DE POSTGRADO
EN DERECHO AGRARIO Y AMBIENTE

ALTERNABILIDAD PARA LA RESOLUCIÓN DE LOS


CONFLICTOS AGRARIOS

Trabajo Especial de Grado para Optar al Título de Especialista en


Derecho Agrario y Ambiente

Autora: Martha Isabel Valencia Carrillo


C.I.: 23.162.212
Tutora: MSc. Jairo Alex Archila Bolaños

Barinas, Septiembre del 2022


Planilla de Inscripción
Proyecto de Trabajo Especial de Grado y Trabajo de Grado

Programa de Postgrado: Especialización. __________________________________


Mención: Derecho Agrario y Ambiental. _____________________________________
Título del Proyecto: Auditoría Jurídica Ambiental como Herramienta para el Alcance
del Mejoramiento del Ambiente.
Tutor: MSc. Jairo Alex Archila Bolaños. Cedula de Identidad: 11.193.149
Número de Teléfono del Tutor: 0416- 6764421______________________________
Correo Electrónico del Tutor: [email protected] _________________________
DATOS DEL AUTOR

Cedula de Identidad: 23.162.212


Apellidos y Nombres: Martha Isabel Valencia Carrillo
Correo Electrónico: [email protected]
Número de Teléfono: 0414-5680760
RECAUDOS

El proyecto de investigación debe contener como anexos:


 Planilla de inscripción.
 Carta de aceptación del tutor.
 Síntesis curricular del tutor (máximo 3 folios carta).
 Fondo negro de título (s) académico (s) del tutor.
 Situación académica (UC completas, índice académico acumulado)
 Recibo de pago del trabajo de grado. (Exoneración por Pandemia Nacional)

Firma de Autor: Recibido por:


_______________________

Fecha: _______________

“La ciencia y la tecnología al servicio de la liberación permanente de la humanización del


hombre”
DIRECCION: AV. 23 DE ENERO, FRENTE A REDOMA DE PUNTO FRESCO, FINAL MODULOS BARINAS II, BARINAS EDO.
BARINAS TELEFONO: 0273-5302141 EXT: 2797 CORREO: programadeestudios
AGRADECIMIENTO

Dedico este trabajo principalmente a Dios, por haberme dado la vida y


permitirme el haber llegado hasta este momento tan importante de mi
formación profesional. A mi madre, por ser el pilar más importante y por
demostrarme siempre su cariño y apoyo incondicional sin importar nuestras
diferencias de opiniones, a la UNELLEZ, por cobijarme para mi crecimiento
profesional a por su apoyo incondicional. A mis compañeros de clase por el
trabajo en equipo, la amistad y el apoyo que me han dado en todo momento.
A mis compañeros de trabajo, a mi hijo, mi familia por apoyar cada proyecto,
cada meta y estar conmigo para culminar con éxito, a mi tutor, MSc. Jairo
Alex Archila Bolaños: gracias por compartir sus conocimientos, su paciencia,
su dedicación; a todos gracias, gracias y que Dios me los bendiga.
EPÍGRAFE

En este continuo y
consuetudinario desaprender
para aprender nos vemos
sorprendidos siempre, y
cuando tenemos sed de
conocimientos más todavía.
Se nos hace fácil contamos
con un buen maestro o
amigo que nos haga
agradable el sendero a
recorrer…
AUTOR: BENITO RAMON
CARBALLO JIMENEZ
Tabla de contenido

INTRODUCCIÓN
MOMENTO I.
Planteamiento del problema
1.1        El problema
1.2        Propósito
1.2.1        Propósito General
1.2.2   Propósitos Específicos
1.3        Justificación.
MOMENTO II
Marco teórico
2.1 Antecedentes
2.1.1. Internacionales.
2.1.2. Nacionales.
2.2        Bases teóricas.
2.2.1. El Derecho Ambiental
2.2.2. Derecho y Ecología
2.2.3. Derecho Humano al Ambiente
2.2.4. Derecho Humano y Desarrollo Sostenible
2.2.5. Naturaleza jurídica del Derecho Ambiental.
2.2.6. Derecho ambiental como ciencia informativa.
2.2.7 Derecho Ambiental como disciplina académica
.2.2.8. Derecho Ambiental como rama autónoma del derecho.
2.2.9. Derecho Ambiental como rama del Poder Público
2.3    Características del Derecho Ambiental
2.3.1 Especialidad Singular.
2.3.2. Énfasis preventivo.
2.3.3. Distribución equitativa del costo
2.3.4. Vocación redistributiva.
MOMENTO III.
Marco Metodológico
Recorrido Metodológico
3.1. Contextualización del paradigma
3.2. Método,
3.3. Sujetos o informantes claves.
3.4. Técnicas e instrumentos de recolección de datos.
3.5. Técnicas de análisis de datos: Categorización. Estructuración, contestación y teorización
Bibliografía
Anexos

Nota: las Bases teóricas se desarrollan según el título de cada trabajo de grado. Este es el modelo a seguir para la primera entrega. Como
Proyecto de grado.
INDICE GENERAL

Pp.
INTRODUCCIÓN
MOMENTO I.
Planteamiento del problema
1.1        El problema
1.2        Propósito
1.2.1        Propósito General
1.2.2   Propósitos Específicos
1.3        Justificación.
MOMENTO II
Marco teórico
2.1 Antecedentes
2.1.1. Internacionales.
2.1.2. Nacionales.
2.2        Bases teóricas.
16
Reseña Histórica del Derecho Agrario ……………………………. 16
Comportamiento del Derecho Agrario venezolano a partir del
año 1960 ……………………………………….……………………... 17
Concepto del Derecho Agrario……………………………………... 19
Objeto del Derecho Agrario ………………………………………... 20
Características del Derecho Agrario……………………......……... 21
Medios Alternativos de Resolución de Conflictos en Venezuela. 23
Concepto de Medios Alternativos de Resolución de Conflictos. 26
Caracterización de los Medios Alternativos de Resolución de
Conflictos…………………………………..………….……………... 27
Ventajas de Medios Alternativos de Resolución de Conflictos…. 28
Clases de medios alternos de resolución de conflictos…….……. 32
La Mediación como mecanismo alterno de resolución de
Conflictos …..…………………………………………..……………... 41
Fundamento legal de los Medios Alternativos de Resolución de
Controversias .………..………………………………………………. 44
Relevancia de los Medios Alternos de Solución de Conflictos
para solucionar los problemas entre particulares ……….......…. 47
Papel de las Defensoría Agraria como ente conciliador en los
Conflictos agrarios…………………………………………………….. 53
Bases Legales………………..…………..…………………………… 56

Momento III Metodología de la Investigación.……………..………….……….… 61


Tipo de Investigación…………………………………….…………… 61
Técnicas e Instrumentos de Recolección de Información ………. 62
Fases de la Investigación.……………………………………………. 63

Momento IV Análisis de Resultados…………………………………. 64

Momento V Conclusiones y Recomendaciones…………………………………. 64


Conclusiones……………………………………………..……………... 64
Recomendaciones……………………………………………………….. 66

REFERENCIAS................................................................................................... 69
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL
DE LOS LLANOS OCCIDENTALES
“EZEQUIEL ZAMORA”

ALTERNABILIDAD PARA LA RESOLUCIÓN DE LOS CONFLICTOS


AGRARIOS

Autora: Martha I. Valencia

Tutora: MSc. Jairo Alex Archila


Año: 2021

RESUMEN

El propósito principal de este trabajo, fue Analizar los medios


alternativos
como vía para la resolución de conflictos Agrarios. Para darle respuestas a
las interrogantes planteadas, se hizo necesario formularse los siguientes
objetivos Específicos: Identificar la base doctrinaria de la figura de los medios
alternos de solución de conflictos en Venezuela, investigar los antecedentes
históricos y legales del derecho agrario en Venezuela y examinar la
relevancia de los medios alternos de solución de conflictos para dirimir los
problemas presentados en el derecho agrario. En cuanto a la metódica
empleada, se puede decir que fue documental de carácter jurídico-dogmático,
en la cual se aplicaron las diferentes fases del proceso, lo que permitió
concluir que los medios alternos de solución de conflictos en el derecho
agrario, pueden utilizarse solamente si las partes acceden al empleo de los
mismos, para lo cual se pueden emplear tanto por la vía administrativa
(defensoría agraria) o por la vía jurisdiccional (El Tribunal Agrario). Es de
destacar que los medios alternativos, vienen a ser una especie de métodos
de resolución convenidos e igualitarios acorde con los postulados de la
Constitución venezolana. Permitiendo recomendar que es necesario efectuar
una mayor difusión de las ventajas de los medios alternos de solución de
conflictos, a todo nivel, incluyendo programas teórico prácticos en las
escuelas, universidades, institutos técnicos, organizaciones públicas y
privadas, y en general a toda la población, a fin de ir creando una nueva
cultura en las relaciones interpersonales e inter-organizacionales, basada en
principios de colaboración, participación y entendimiento, como cimientos de
una “Cultura de Paz”.

Descriptores: Resolución, medios, procesos, conflictos, agrario.


INTRODUCCIÓN
La Defensa Pública, se inicia en Venezuela en la década de los años
50, cuando las innumerables violaciones a los derechos del individuo
producen en los legisladores, la inquietud de reformar las leyes no acordes
con las necesidades de la sociedad en general. Por no existir acuerdo en
la doctrina con respecto a la evolución del soberano, se consideró la
misma como incierta, siendo notorio que se desarrolla como tal, con la
entrada en vigencia de la Constitución de 1961, adquiriendo carácter
autónomo e institucional con la promulgación de la Carta Magna
Venezolana de 1999, que de manera expresa ordena la creación del
Servicio Autónomo de la Defensa Pública y el texto legal que la normalice.

Por mandato constitucional, la Defensa Pública es un derecho


garantizado por el Estado, debe proveer de un abogado defensor al
interesado, en cumplimiento del debido proceso establecido no sólo en la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, sino también en los
tratados y convenios suscritos y ratificados por la República, los cuales
gozan de supremacía en el orden jerárquico de aplicación de las leyes.
Debiendo decir, que la defensa pública se ramifica en diversas materias,
tales como: De niños, niñas y adolescentes, laboral, penal especial y adultos
y en el área agraria, la cual es estudiada en la presente investigación.
La Defensa Pública presta un servicio a las personas que lo requieran,
sin distinción de clase y condición socio económica, es de señalar que la
atención brindada es gratuita, sin fines de lucro y todo basado en los
principios constitucionales y en el principio de la igualdad ante la ley. En las
oficinas de la defensa pública, se atiende a todos aquellos ciudadanos o
ciudadanas a nivel de todo el territorio nacional siempre y cuando la persona
esté inmersa en cualquier situación que requiera sus servicios.
Los campesinos y trabajadores de las tierras en Venezuela, ahora
cuentan con la figura de la Defensa Pública Agraria, para asesorarlos y
representarlos ante cualquier situación legal que se les presente, esta
potestad la otorga la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario, publicada en
Gaceta Oficial Nº 5.771, del 18 de Mayo de 2005; dicha ley suprimió la
Procuraduría Agraria Nacional, y ordenó al Tribunal Supremo de Justicia, por
órgano de la Dirección Ejecutiva de la Magistratura, la creación de una
Defensoría Especial Agraria. Es así, como nace esta competencia especial
para la Defensa Pública.
La Defensa Pública Agraria garantiza, orienta, asiste y asesora de
manera gratuita, a todos aquellos trabajadores del campo y de la pesca que
soliciten sus de servicios en cualquier momento determinado. Los defensores
públicos agrarios, también tienen dentro de sus funciones: solicitar
inspecciones, avalúos e informes del campo, estudios aerotécnicos y
cualquier otra diligencia y/o práctica que sirvan de apoyo en la búsqueda de
la solución del problema planteado en un momento determinado.
Ahora bien, los defensores tienen la potestad de tratar de dirimir los
conflictos agrarios de la mejor manera, utilizando para ello los medios
alternos de resolución de conflictos, por ello ponen en práctica lo estipulado
en la parte in fine del artículo 258 de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela, con ello lo que se busca es que las partes no
lleguen a un litigio judicial donde van a gastar tiempo, dinero y a acumular
más expedientes en los archivos de los tribunales, que hoy por hoy están
abarrotados de causas paralizadas, bien sea por inactividad de las partes o
por los retardos procesales por parte del Estado inoperante.
El trabajo se encuentra dividido en cinco (5) momentos, en el primero
se muestra la descripción del objeto de estudio, en el segundo se plasma el
marco teórico, por su parte el tercero señala la metodología aplicada y para
el cuarto se realiza el análisis de los resultados respectivos, finalmente en
el quinto se finaliza con las conclusiones y recomendaciones.
(
MOMENTO I

Descripción del Objeto de Estudio

La doctrina ha clasificado los sistemas jurisdiccionales en dos tipos, el

de derecho y el de equidad. Según el primer tipo, el juez en el ejercicio de


sus diferentes funciones, debe tomar en cuenta sólo lo señalado en el
ordenamiento jurídico positivo, sin salirse de esos parámetros. Dentro del
marco del segundo tipo, es decir, la equidad, el juez debe crear y aplicar la
norma jurídica para el caso concreto, las cuales deben ser usadas de
acuerdo a la legalidad. (Que autor sustenta esto)
En la jurisdicción de derecho, la creación de la norma jurídica es
limitada ya que la sentencia deviene como un acto de derivación formal,
teniendo como plano superior la constitución, luego las leyes, después los
reglamentos, y así sucesivamente, en el orden de la pirámides de Hans
kelsem. (Febres, 2012, Pág. 88). En tanto, para la jurisdicción de equidad,
la creación del derecho es absoluta porque en la sentencia se establece la
solución al caso planteado.
Es de referir, que con de la entrada en vigencia de la Constitución de

la República Bolivariana de Venezuela (1999), la forma de concebir el


sistema de justicia, teniendo la jurisdicción de derecho como la regla y la
equidad como la excepción, ya no es la única vía; en efecto, con la Carta
Magna, se abrió una puerta para que las partes involucradas en un conflicto

resuelvas sus controversias de la mejor manera y si es evitando llegar a los


estrados judiciales sería mejor, en virtud de que se ahorrarían tiempo y
dinero.
Al respecto García, L. (2012), refiere que los medios alternos de
resolución de conflicto juegan un papel relevante en todo proceso. En
efecto, se tiene la constitucionalizarían de los Medios Alternativos de
Resolución de Conflictos (M.A.R.C.), calificadas así todas las formas de
resolución de controversias que no terminen en sentencia judicial o
abandono del litigio.

De igual manera, hay que destacar que el artículo 258 de la


Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, establece que: la ley
promoverá el arbitraje, la conciliación, la mediación y cualesquiera otros
medios alternativos para la solución de conflictos, señalando
categóricamente que lo que se busca es la descongestión de los despachos
judiciales y la búsqueda de alternativas para lograr una justicia más eficaz,
más real u objetiva. Nadie más que las propias partes pueden buscar la
solución del conflicto que puedan tener.

Además el artículo 253 de la Carta Magna, en su último parágrafo


deja por sentado que el Sistema de Justicia está constituido por el Tribunal
Supremo de Justicia, los demás tribunales que determine la ley, el Ministerio
Público, la Defensoría Pública, los Órganos de Investigación Penal, los y las
auxiliares y funcionarios o funcionarias de justicia, el sistema penitenciario,
los medios alternativos de justicia, los ciudadanos y ciudadanas que
participan en la administración de justicia conforme a la ley y los abogados y
abogadas autorizados y autorizadas para el ejercicio.

Desde que el órgano jurisdiccional es activado para dirimir las


controversias suscitadas entre las partes, éstas se consideran personas
activas del proceso, y lo que buscan es que los actos del procedimiento
deben realizarse en la forma conocida en el ordenamiento jurídico; con lo
cual, se consagra el principio de legalidad de las formas procesales, en
cuya aplicación se encuentra la estructura del proceso, su secuencia y
desarrollo en la manera preestablecida en la ley; el Juez después de
cumplir con todas las etapas se debe pronunciar a través de la sentencia.
Pero se ha llegado a demostrar que la sentencia, es el momento de mayor
retardo judicial, donde las partes ven pasar varios meses y, en ocasiones,
hasta años sin que se pueda lograr la misma, en virtud de que el
Juez no emite su pronunciamiento.

Este inefable retardo suele ocurrir constantemente es allí donde las


partes tienen una alternativa o una vía más expedita; tienen la opción de
utilizar los medios alternos de resolución de conflictos. Se puede decir que a
partir de la década de los 80 en los países de América Latina y el Caribe se
generó una toma de conciencia en la opinión pública sobre la necesidad de
modernizar el sistema de administración de justicia para darle mayor
credibilidad, transparencia, celeridad e imparcialidad. Entre las medidas
diseñadas para realizar estas reformas se han adoptado los "Medios
Alternativos de Solución de Conflictos" también conocidos como
"Mecanismos Alternativos de Resolución de Conflictos".

En tal sentido, al hablar de Mecanismos Alternativos de Resolución


de Conflictos, se está haciendo referencia a procesos de
negociación, mediación, conciliación, arbitraje, e inclusive a la
equidad, como procedimientos para la resolución de conflictos,
tanto judicial como extrajudicialmente, lo que necesariamente implica
cambios de paradigmas fundamentales. En primer lugar, la promoción de
estos mecanismos involucra la formación de una nueva concepción
acerca de la justicia por parte de los ciudadanos, en cuanto éstos
participan en la administración de justicia. En segundo lugar, la
concepción de estos mecanismos amplía la oferta de las formas de cómo
resolver diferentes tipos de conflictos, de manera más adecuada a la
naturaleza de las partes y de los problemas.
Formulación del Problema
(Hacer párrafos en referencia Macro, meso y micro)
Para nadie es un secreto la (Recomiendo hacer diagnóstico previo,
informantes) inmensa crisis que tiene el poder judicial en virtud de que
existen causas que tienen más de veinte años paralizados sin que le hayan
dictado una sentencia definitiva, bien sea por la inactividad procesal de las
partes, porque han recusado a los jueces que han conocido el juicio o por la
inhibición planteada por algún magistrado; lo cierto es que los accionantes
no han podido obtener del órgano jurisdiccional una respuesta
satisfactoria.
Esto ha traído como consecuencia que las partes que se encuentran
envueltas en algún problema, busquen las manera de llegara un acuerdo, es
allí donde debe aparecer la manera de solucionar los conflictos a través de
medios alternos, los cuales van en contraposición a la justicia tradicional (la
de los jueces), es un movimiento que ha venido cobrando fuerza en los
últimos veinticinco años, con mayor avance en países desarrollados como
Estados Unidos, Inglaterra, Francia, Italia, Australia, entre otros. En el
continente americano sus principales exponentes son Argentina, Chile,
Paraguay, Bolivia, Puerto Rico, Costa Rica, Perú y México, entre los medios
alternos encontramos la mediación, la conciliación y el arbitraje.
Asimismo, para Núñez, E. (2013), con estos se recoge la experiencia
en medios no violentos de resolución de conflictos y la replantea agregando
nuevos conocimientos para lograr un mejor resultado. La resolución
alternativa de conflictos engloba una serie de mecanismos no judiciales,
pacíficos y participativos para solucionar conflictos. Los medios alternos de
solución de conflictos se basan en filosofías democráticas y
descentralizadas.
Los medios alternos de resolución de conflictos propone, en contraste
con los sistemas convencionales, el uso de enfoques no adversariales y no-
violentos. Los mismos buscan encontrar soluciones donde no haya ni
ganadores, ni perdedores y modos de entender el conflicto tomando en
cuenta las necesidades de ambas partes de manera holística. Este enfoque
se basa en un entendimiento integral de las raíces de los conflictos,
incluyendo la violencia misma.
Los mencionados medios de resolución de conflictos traen consigo
un contenido moral de muy similar forma y tono. Por ello, se dice que
las intervenciones del mediador-conciliador permiten equilibrar el poder
entre las partes para así dialogar de igual a igual o de la manera más
igualitaria posible. De allí se tiene que la mediación y la conciliación en
este mundo globalizado es un nuevo paradigma y una herramienta
estratégica que junto con los otros métodos alternos de resolución de
conflictos, permite cambiar la forma de abordar, procesar y resolver las
diferencias por parte de los ciudadanos, los cuales pueden llegar a
administrar positivamente el conflicto para llegar a acuerdos mutuamente
satisfactorios, sin acudir al juicio o a la violencia como instancias
resolutivas. Asimismo, puede actuar como un mecanismo de regulación
y acompañamiento de cambios sociales y de fortalecimiento de la
ciudadanía.
Es de señalar que en el país, desde que entró en vigencia la Carta
Magna del año 1999, se ha permitido los acuerdos entre las partes a
través de los medios alternos de solución de conflictos, buscando
con ello solventar la enorme crisis que existe en el sistema de
administración de justicia venezolana, de allí posiblemente las diversas
reformas que se han venido haciendo a nivel institucional y legal donde
han incluido los medios alternos de solución de conflictos.
Por consiguiente se han derogado leyes que iban en contra del
artículo 258 constitucional, específicamente en materia agraria, fue
eliminada la Ley de reforma agraria, entrando en vigencia la Ley de Tierra y
Desarrollo Agrario, donde se han incluido los medios alternos de resolución
de conflicto, como una forma de llegar a feliz término, el problema
presentado entre los particulares que tienen predios rústicos, ganado,
rublos comestibles o cualquier otra materia que tenga que ver con el área
agraria.
Es por ello, que en la Ley de Desarrollo Agrario, los legisladores
incluyeron los medios de resolución de conflictos para que el Juez o
primeramente los representantes de las defensorías agrarias instaran a las
partes a la mediación o conciliación, con el fin de llegar a una transacción,
tal como lo señala el artículo 195 ejusdem, al señalar que “Las partes
podrán celebrar transacción en cualquier estado y grado de la causa…”
Con esto lo que se busca es que las parte puedan llegar de forma
sensata a un acuerdo, porque la experiencia actual ha demostrado que
las personas que se han visto envueltas en problemas no han podido
llegar a un acuerdo amigable y lo que ha ocasionado es que el litigio se
alargue más al intentar una demanda por querer solucionar los
desacuerdos y por costumbre se somete a la vía tradicional, que es la
judicial, sin pensar en el colapso en que se encuentran los tribunales por
el cúmulo de expedientes que están paralizados esperando por una
sentencia definitiva, lo que trae como consecuencia que en lugar de
solucionar el problema, este se le agrave, ya que el Juez no dicta
sentencia a tiempo por cúmulo de trabajo ocasionando esto gastos
monetario y tiempo entre los justiciables.
De toda la problemática anteriormente planteada, está la necesidad
de formularse las siguientes interrogantes:
¿Cuál es la base doctrinaria de la figura de los medios alternos de
solución de conflictos en Venezuela?
¿Cuáles son los antecedentes históricos y legales del derecho agrario
en Venezuela?
¿Qué relevancia tienen los medios alternos de solución de
conflictos para dirimir los problemas presentados en el derecho agrario?
Propósitos de la Investigación

Propósito General
Analizar la importancia de los medios alternativos como vía para la
resolución de los conflictos agrarios.

Propósitos Específicos
Identificar la base doctrinaria de la figura de los medios alternos de
resolución de conflictos en Venezuela.
Investigar los antecedentes históricos y legales del derecho agrario en
Venezuela. (Revisar Taxonomía de Bloom)
Examinar la relevancia de los medios alternos de resolución de
conflictos para dirimir los problemas presentados en el derecho agrario
venezolano.

Importancia de la Investigación
La investigación tiene su importancia, por una parte, desde el punto de
vista teórico por cuanto a través de ella se incrementaran los conocimientos
sobre los medios alternos de solución de conflictos como forma de que las
partes lleguen a un acuerdo amistoso, y por la otra, desde un punto de vista
práctico ya que permitirá a los estudiantes de derecho, a los abogados en
ejercicio, a los operadores de justicia y a los jueces en general conscientes
que la decisión que se debe tomar no se traduzca en una violación de los
derechos de las partes envueltas en un problema. El estudio se enmarca en
el área de conocimiento de las Ciencias Políticas y Jurídicas, así como en el
área de investigación del Derecho Agrario y Ambiental.
Desde el punto de vista de la institución jurídica como tal, se torna
importante para la investigadora, porque los medios alternos de resolución
de conflictos según Duque, R. (2001), son figuras que sirven para solventar
en gran parte la crisis de la administración de justicia, ocasionada,
mayormente por la cantidad de causas sin decisión, esto ha llevado a una mayor
reflexión sobre el uso de los diferentes medios alternos de resolución de conflictos
para acelerar el mismo y de una manera menos traumática entre las partes; claro,
sin perder la perspectiva de que ésta no es herramienta suficiente para poner
fin a la crisis, de allí el desarrollo de la temática se justifica por la importancia y
relevancia que tiene en el tema.
En cuanto al aporte de la investigación, es precisamente tratar de lograr
atribuirle a los diferentes medios alternos de solución de conflictos mayor
importancia y consideración de parte de todos los estudiosos y profesionales
del derecho, con respecto a su práctica y uso en los procedimientos previstos
en las leyes. Si bien, es una materia de interés para todos aquellos involucrados con el
derecho, en especial con el agrario donde las personas que viven en el sector agrícola
se encuentran muy distantes de los órganos tribunalicios para solucionar sus
problemas, se puede inferir que tendría un beneficio y mayor significación; así como
para la investigadora y también; para otros estudiantes y profesores que quieran
documentarse un poco sobre la materia.
Lo dicho anteriormente permite afirmar que con la investigación se busca
darles respuestas a las interrogantes planteadas para que de una u otra forma se
aclaren las incertidumbres formuladas en el planteamiento del problema. En este
sentido, la relevancia, viene dada porque presenta de manera transparente, con
claridad, precisión y nitidez, la terminología y aspecto relevante de mayor
calificativo de una problemática enmarcada en las ciencias jurídicas del derecho
agrario, ya que trata un tema importante.
MOMENTO II
Marco Teórico

El marco teórico referencial señala las diversas teorías en las que se


enmarca la investigación sobre los medios alternos de resolución de
conflictos para solucionar conflictos agrarios. A tal efecto, se plantea
algunos de los aspectos a desarrollar en el tema.

Antecedentes de la Investigación
Es relevante señalar que todo trabajo de investigación debe contar con
valiosos aportes de estudios realizados anteriormente que sirvan de
soporte al mismo, la cual de esta manera dará tenacidad a la investigación,
seguidamente se presenta una serie de investigaciones con un enfoque
semejante al problema planteado. Entre los estudios realizados se pueden

mencionar:
Perdomo, R (2013); en su trabajo de investigación para optar al título de
Magister en Derecho procesal Civil, en la Universidad de Carabobo,
titulado: “La Mediaciyn en Venezuela”, aplicy una metodología
documental con un nivel jurídico dogmático, en la que señaló: Que la
atención al conflicto que desarrolla el mediador se encuentra dirigida por
unos principios rectores que dan perfil a su actuación, unos de carácter
deontológico, tales como, la imparcialidad, neutralidad o equidistancia
funcional, confidencialidad y voluntariedad; (P. 89).
La autora refiere el hecho que, la Mediación es una institución
procesal que requiere la concurrencia de una serie de elementos para su
eficaz aplicación, esto es, además del procedimiento previsto en la ley,
depende de las personas que intervienen y de las habilidades que emplee el
Juez mediador con sus diferentes fórmulas de conciliación. La mediación
es una herramienta estratégica que junto a los otros métodos alternos de
solución de conflictos, permiten cambiar la forma de abordar procesos y
resolver las diferencias por parte de los ciudadanos, quienes pueden llegar a

administrar positivamente el conflicto, para lograr acuerdos mutuamente


satisfactorios, sin acudir al juicio o violencia como instancias resolutivas.
Por su parte Sánchez, J. (2014), en su trabajo de grado para optar al
título de Especialista en Derecho Civil en la Universidad Bicentenaria de
Aragua, titulada: La Conciliación como mecanismo apropiado para la
solución de los conflictos en el núcleo familiar, concluyó que: La
conciliación es un medio de autocomposición procesal que sirve para
resolver los conflictos, y tiene su basamento constitucional en el artículo 258

de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999). (P. 94)


Este trabajo guarda relación con el problema planteado en esta
investigación, por lo tanto se tomó como base para realizar los momentos
de trabajo especial de grado, de la que se tomaron las reseñas más
importantes en cuanto a la conciliación se refiere, ya que la Conciliación
viene a ser la acción de un tercero cuya función es avenir a las partes,
proponer fórmulas de arreglo, sin sujetarse a ninguna forma y conservando
las partes el poder de decisión sobre la solución en conflicto; de allí se
tiene que permitió aportar los datos necesarios para el desarrollo
capitular, sobretodo en la base constitucional del artículo 258 de la Carta
Magna.
Es de destacar la referencia que hizo Lara, C. (2015) en su tesis para
optar al título de Especialista en Derecho Procesal Civil en la Universidad
Bicentenaria de Aragua titulada: “Diferentes modos de autocomposiciyn
procesal y los medios alternos de resolución de conflictos como una
alternativa de culminación del proceso según el ordenamiento civil
venezolano”, en la que concluyó que: Con la autocomosición procesal y los
medios alternos de resolución de conflictos, sirven para disminuir el
monto de los litigios, las autoridades encargadas de administrar la justicia
podrán resolver sus graves problemas de rezago y lentitud en sus
procedimientos.
(P.78)
Este último trabajo arrojó resultados interesantes que motivó a la
investigadora a revisar para seleccionar la base doctrinaria y
constitucional en materia de los medios alternos de resolución de
conflictos, permitiendo complementar el desarrollo capitular.

El Aporte Filosófico
Toda investigación requiere de teorías y conceptualizaciones que la
soporten, a esta situación no escapa el trabajo a realizar, para ello se han
tomado diferente autores, siendo conocedores del tema, con amplia
trayectoria en el ámbito penal, permitiendo así a la investigadora, tener una
visión de la temática más clara y sustentada dándole de esta manera
confiabilidad a esta investigación
De lo anterior se desprende que, el tema objeto de la presente
investigación se relaciona con un derecho agrario que viene a ser
fundamental en la vida del ser humano, por lo tanto la misma se debe
enmarcar dentro de las corrientes Iusnaturalista, Positivista y Neopositivista,

por cuanto existen rasgos de suma importancia de cada una de ellas, pues
los derechos humanos se debaten entre estas corrientes filosóficas, sin
excluir ninguna.
Con relación a lo anterior, Fernández (1994:41), en su libro “Filosofía
del Derecho” define el Iusnaturalismo como la doctrina o movimiento que
sustenta la existencia de un derecho natural, y que comprende las Teorías

del Derecho Natural, según las cuales existen ideas generales de derecho no
creadas por el hombre, que imperan en todas partes y en todas las épocas,
son inherentes a la naturaleza humana y que el hombre reconoce como tales
aceptando su plena validez. El Iusnaturalismo considera que el hombre nace
libre e independiente y que en principio vivió aislado, como en una selva, en
un estado de pureza, feliz, sin apremio, guiado por la razón.
Más adelante el mismo autor, manifiesta que el Iusnaturalismo
Moderno surge a comienzo del siglo XX, reaparecen las teorías del derecho

natural, después de haber sido negado por las escuelas historicistas en el


siglo XIX, pero dejando a un lado el exagerado individualismo, poniendo
énfasis en un contenido de carácter social. También hace referencia al
Iusnaturalismo objetivista, el cual pretende deducir que el Derecho y el
Estado tienen cierta naturaleza inmutable del hombre, asumiendo una

posición antihistórica y mecanicista, por lo que la sociedad y el Estado son el

resultado de una unión mecánica de diversas fuerzas y de la unión de


fuerzas de diversos individuos que se integran como un todo, el Esta surge a

consecuencia de un contrato.
De igual manera, Bautista F. (1997:142), en su obra “Historia de la
Filosofía del Derecho” sostiene que Ciceryn había adoptado la teoría
estoica y consideraba la justicia como una emanación del Derecho Natural,
de allí que define a éste como la recta razón conforme a la naturaleza;
es de aplicación universal inmutable y eterna, llama al hombre al bien
con sus mandatos y lo aleja del mal con sus prohibiciones.
En otro orden de ideas, el Centro de Estudios Culturales (agregar
bibliografía) (2002) en su publicación “Corrientes Clásicas y Corrientes
Contemporáneas de la Sociología”, define el Positivismo como un
sistema filosófico basado en la experiencia y el conocimiento empírico de
los fenómenos naturales, en el cual la metafísica y la teología son sistemas
de conocimientos imperfectos e inadecuados. El término positivismo fue
utilizado por primera vez por el Filósofo y matemático francés del siglo XIX
Auguste Comte, pero algunos de los conceptos positivistas se remontan al
filósofo británico David Hume, al filósofo francés Saint-Simón, y al filósofo
alemán Emmanuel Kant. Muchas delas doctrinas de Comte fueron más
tarde adaptadas y desarrolladas por los británicos John Stuart Mill y Herbert
Spencer, y por el austriaco Ernst Mach.
De lo anterior se deduce que, Comte eligió la palabra positivismo sobre
la base de que señalaba la realidad y tendencia constructiva que él reclamó

para el aspecto teórico de la doctrina. En general, se interesó por la


reorganización de la vida social para el bien de la humanidad a través del
conocimiento científico, y por esta vía, del control de las fuerzas naturales.
Los dos componentes principales del positivismo, la filosofía y el Gobierno (o

programa de conducta individual y social), fueron más tarde unificados por


Comte en un todo bajo la concepción de una religión, en la cual la
humanidad era el objeto de culto. Numerosos discípulos de Comte
rechazaron, no obstante, aceptar este desarrollo religioso de su
pensamiento, porque parecía contradecir la filosofía positivista original.
Se puede inferir que, luego de haber realizado un esbozo de las
corrientes filosóficas, las mismas están concatenadas y relacionadas con el
objeto de la investigación, toda vez que existe una estrecha relación con el
tema bajo estudio, ya que lo que en realidad el hombre busca es vivir en
paz con sus semejantes, que no exista rivalidades o problemas, ya que
todos tienen los mismos deberes y derechos; y esos derechos son propios
de un ser humano que vive jurídicamente en una sociedad.
Evidentemente las teorías antes mencionadas, van a permitir tener
una visión clara de la temática a desarrollar, y de esta manera dar
respuestas cónsonas a los objetivos específicos y por ende al objetivo
general propuesto, y de esta manera cubrir satisfactoriamente las metas
planteadas, que han buscado los legisladores y los ciudadanos a lo largo de
los años, que es la paz y convivencia social.

Bases Teóricas

Reseña Histórica del Derecho Agrario


Según Andujar, S. (2012), la existencia del Derecho Agrario como
fenómeno histórico no ha existido siempre; esta aparece a partir del
momento en que se dan una serie de condiciones económicas, políticas,
sociales e incluso culturales, lo que permite su nacimiento. Al no ser el
Derecho Agrario un fenómeno constante en el mundo jurídico, y al encontrar

su razón de ser en virtud de una serie de condiciones extrajurídicas,


resulta un Derecho Histórico.
Un primer acercamiento desde el punto de vista histórico permite
afirmar el origen del Derecho Agrario como ciencia. Se ubica
fundamentalmente en Italia a principios del siglo XIX y en las décadas sub-
siguientes en España, Francia y América Latina; para mayor precisión, se
debe indicar que las primeras manifestaciones de la ciencia que estudia el
Derecho Agrario tienen su origen en las investigaciones realizadas en Italia
a finales del siglo XVIII y principios del XIX, por un grupo que se dieron
al estudio profundo de la normativa agraria, dictada en la época, llamados,
por las características comunes y homogeneidad de planteamientos, la
Escuela Toscaza que se diferencia de la Escuela Napolitana en que
ésta se estudiaba la materia civilista.
Dichas investigaciones, planteadas por la doctrina italiana, tienen su
origen con la aparición en el mundo jurídico de la Revista "Di Diritto Agrario",
cuyo primer ejemplar vio la luz pública en el año 1922, gracias a la labor
tesonera de Giangastone Bolla, con la creación de la primera Cátedra de
Derecho Agrario que se inauguró en Pisa, en el otoño de ese mismo año y
cuyo titular fue el mismo Bolla.
Los estudios realizados en gran aparte del siglo XVIII no se tomaron
como origen del Derecho Agrario como ciencia, todas las acciones tomadas

hasta el momento fueron desvirtuadas por el Código Napoleónico de 1804 y

como representación jurídico- política de las ideas revolucionarias de la


época, es decir, la instauración del derecho de libertad del individuo y de la

tierra como símbolo del Feudalismo, las consecuencias fueron negativas.


Para la doctrina, durante la revolución francesa el individuo era el centro de

toda riqueza y la propiedad de la tierra se encontraba ligada a la voluntad de

éste.
El factor determinante para considerar el derecho como una rama
autónoma se circunscribe en determinar si ésta puede producir sus propios

principios generales o si debe mantenerse dentro del derecho común


(Derecho Civil). No fue sino entre los años 1928 y 1931 cuando en Italia el
debate cobró mayor significación, en esta época, algunos se manifestaron a

favor y otros en contra sobre la debida autonomía; el planteamiento era


demostrar si el Derecho Agrario era autónomo en los planos legislativos,
didácticos y científicos.

Comportamiento del Derecho Agrario venezolano a partir del año


1960
A partir del año 1960 tienen lugar para la agricultura venezolana una
serie de acontecimientos que la caracterizan y condicionan para su
desarrollo futuro. La creciente aceleración y expansión de la actividad de
los grupos empresariales, es lo que constituye la línea principal de su
desarrollo ya iniciado antes, pero ahora afianzado y con una capacidad de
crecimiento aun mayor.
La promulgación y ejecución de la Reforma Agraria acapara la atención
hacia el sector agrícola en los primeros años de la década. Sin embargo, su

incidencia en el comportamiento de la agricultura ha sido en realidad mucho

menor de lo que pudiera haberse esperado hace quince años, y lo que es


aún más claro, su papel dentro de la actualidad agrícola y al menos en un
futuro próximo, es y será más marginal. Tanto las incidencias del proceso de

la Reforma Agraria, como sus logros y sus principales limitaciones han sido

recientemente evaluados llegándose a conclusiones como las siguientes:


1. Los niveles de ingreso alcanzado dentro del sector reformado, están
entre los más bajos del sector rural productor.
2. La incorporación de las masas campesinas al proceso de Reforma
Agraria ha sido lenta, existiendo en la actualidad un contingente significativo

de sujetos del mismo, que conforman el grueso de los jornaleros agrícolas y

los desempleados y sub-empleados estaciónales del campo que aun carecen

de tierra"
3. A pesar de que ha habido un proceso de Reforma Agraria, iniciado
hace 45 años, la propiedad de la tierra continúa concentrada en pocas
manos la estructura de la propiedad de la tierra ha sufrido variaciones poco

significativas.
Es de señalar, que las conclusiones de la Comisión creada por la
Presidencia de la República de Venezuela son elocuentes. El mismo informe

señala lo que a su juicio es una de las causas que permite explicar la actual

situación de la Reforma Agraria: la ausencia de una firme determinación por

parte del Estado, a modificar radicalmente la injusta distribución de


la tenencia de la tierra que ha caracterizado al campo venezolano.
Paralelamente a la reforma agraria a ocurrido una fuerte expansión de tipo
empresarial, fundamentalmente en tierras públicas, en la cual es
bastante preocupante la presencia de capital extranjero. De esta manera se
han fortalecido los mecanismos de desarrollo de la gran propiedad. Es decir,
el proceso de desarrollo agrícola de tipo empresarial ha arrollado y aun se ha
servido del proceso de Reforma Agraria, para consolidarse como el factor
dinámico y claramente predominante del agro venezolano, y ha sido la base
de la expansión de la agricultura los últimos quince años.

Concepto de Derecho Agrario


El Derecho Agrario solía definirse como el Derecho de la Agricultura; otros
lo identificaban como la actividad agraria. Para los autores Salas-
Salas-Barahona (1981), definen el Derecho Agrario como:

El conjunto de normas y principios particulares que rigen a las


personas, los predios y bienes de otra clase, las explotaciones y la
empresa que, aprovechando de cualquier modo la actividad
fructífera de la tierra, se dedican a la creación u obtención de
animales y vegetales, gobiernan entre los factores que intervienen
en la producción de tales bienes y, dado el caso, disponen
cambios en las estructuras que determinan estas relaciones e
imponen determinado tipo de planificación económica. (p. 134)
De lo anteriormente señalado se evidencia que el Derecho Agrario,
vienen a ser el conjunto de normas jurídicas que establecen y regulan el
derecho del hombre a la propiedad de la tierra y las facultades y las
obligaciones que para el individuo y para el Estado se derivan del mismo. Por

su parte el dominicano Roques, E. (1981) refiere que gran intérprete del


Derecho Agrario, lo define como: El conjunto de normas de orden jurídico
que organizan u ordenan la explotación de las labores sistemáticas, para la

obtención de productos derivados de la tierra, en bien del auge económico


de la industria agrícola. (P. 328)
La investigadora considera que el derecho agrario, es el conjunto de
las normas, los reglamentos, las leyes y las disposiciones que regulan la
propiedad y organización territorial rústica y las explotaciones agrícolas. En

otras palabras, el derecho agrario es una rama del derecho que incluye las
normas reguladoras de las relaciones jurídicas relacionadas a la agricultura.
Esto supone que, en sus formas más básicas, los orígenes del derecho
agrario se remontan mucho tiempo atrás.
De todas maneras, el avance de la industria y de la tecnología
aplicada a la agricultura ha hecho, que en las últimas décadas, el derecho
agrario cobre mayor importancia en todo el país. Las explotaciones agrícolas
suponen un movimiento de millones de bolívares, lo que implica que cada
parte involucrada en el proceso quiera defender sus intereses, es allí donde
entrarías los medios alternos de solución de conflictos, quienes va a servir de
puente a los fines de dirimir las diferencias existentes entre las partes.

Objeto del Derecho Agrario


La doctrina agrarista ha determinado al fundo agrario, la empresa
agraria, la propiedad agraria y la reforma agraria como objetos de la materia.
En Epistemología jurídica se afirma que dicho objeto se divide en dos: El
objeto material y el objeto formal. En el Objeto material el Derecho Agrario se
debe ubicar dentro de la actividad agraria, la cual resulta ser hecho, pero
también norma, y el objeto formal va a ser el fin de la actividad agraria, que
tiene un hondo sentido social. Pero lo real es que el objeto del Derecho
Agrario existe sólo a partir del momento en que aparece la disciplina, la cual
se ubica temporalmente a finales del siglo XIX y principios del siglo XX,
producto de una serie de factores de carácter tanto económicos, sociales,
políticos y jurídicos.
Es importante señalar que el Derecho Agrario, se encuentra presente
en todo el mundo, es natural por tanto que si no como sistema de leyes
positivas y doctrina, al menos como leyes se le encuentre en prácticamente
todo el mundo. La agricultura cambia según las diferentes zonas geográficas
y conforme el estado de la técnica; pero en esencia se trata de un mismo
fenómeno económico.

Características del Derecho Agrario venezolano


El Derecho Agrario para Salas-Barahona, (1981), constituye una de las
partes fundamentales dentro de los problemas de ámbito económico -
social, dentro del marco de la sociedad actual. En este sentido, señala las
siguientes características:
a) El derecho agrario es realista y objetivo, el primero porque sitúa y examina
al hombre dentro del marco de su realidad social y pretende resolver
sus problemas que surgen de la actividad agropecuaria. El segundo
porque las cuestiones que ya existen y las que emanen con motivo de
su aplicación, tiende a resolverlas con base en hechos objetivos.
b) El Derecho Agrario es Democrático, porque sus normas van dirigidas a
lograr el propósito de que la tierra sea para las masas trabajadoras que
la laboran.
c) El Derecho Agrario es de naturaleza económico-social, porque sus normas
se orientan a dar solución a problemas de esta naturaleza, especialmente
lo relacionado con la tenencia y explotación de la tierra.
d) El Derecho Agrario es tutelar del trabajador campesino, ya que esta
inspirado en principios de justicia social y ejerce un papel de protección
y amparo para las masas que laboran en el campo.
e) El Derecho Agrario constituye un cuerpo de garantías mínimas para el
trabajador campesino, que tienen carácter irrenunciable para el y
su formulación no excluye otras.
De lo antes expuesto, se puede decir que el derecho agrario en
Venezuela data del siglo IXX y está constituido, por las normas relativas a la
propiedad rústica, a la agricultura y a la ganadería, al crédito rural, al
aprovechamiento de las aguas, a los bosques, a la colonización y a los
seguros agrícolas. El derecho agrario no es el mismo en todos los países,
varía de acuerdo con los antecedentes históricos, sociales y jurídicos de la
legislación respectiva de cada uno de éstos.
El derecho agrario es una rama relativamente moderna dentro del
mundo del derecho, aunque cabe citar que la agricultura lleva más de 10.000
años acompañando al hombre, y las disputas y negociaciones por dichos
temas agrarios son tan viejos como la vida misma, tanto que desde la Biblia
se habla de problemas de tierras. Pero hoy día ante los posibles problemas
que se puedan presentar en el derecho agrario, se encuentran los medios
alternos de solución de conflictos como vía para solucionar las diferencias,
ya que sólo se necesitaría una tercera persona como lo es el mediador entre
las partes, el cual es una persona imparcial que va a ayuda a las partes a
conseguir una resolución pacífica del conflicto que sea aceptada por todas
ellas.
Todo esto lo logra sin intervenir demasiado, es decir, sin necesidad de
decir a las partes que es lo que deben o no hacer, sino que simplemente se
limita a escucharlas, aconsejarlas y en lenguaje coloquial “calmar los ánimos”
para ayudar a lograr la respuesta al problema. El mediador no decide, ni
resuelve el asunto, no es necesario porque el mismo es resuelto por las
personas en conjunto, éste se dedica a servir de “facilitador” durante el
proceso.
Se puede decir que el rol del mediador tiene como ventajas o
beneficios, ser particularmente útil, cuando las partes quieren conservar su
relación entre sí, puesto que, al resolver las partes en consenso el conflicto y
por lo tanto, quedar todas satisfechas, la relación entre ellas no se ve tan
perjudicada. Por otra parte, es una excelente manera para resolver las
disputas de manera rápida y económica, porque las partes sólo necesitarán
de un poco de tiempo para sentarse a discutir son conflicto entre sí y con su
mediador.
Ahora bien, es estrictamente necesario que todas las partes
involucradas en el litigio estén dispuestas a cooperar, de no ser así, todo
resultaría en una gran pérdida de tiempo. Suele ser poco eficaz cuando una
parte tiene cierto poder o influencia sobre la otra. Por último, es un método
que no debe ser aplicado a cualquier conflicto, sino que se deben estudiar
las condiciones del mismo y de las partes. Sin embargo, esto se puede
resolver con un simple análisis detenido de la situación, luego del cual se
determinará cual es el método que más se adecue al caso en concreto.
Pero si las partes no quieren utilizar a una tercera persona, en el
problema agrario que presentan pueden utilizar la negociación como medio
de resolución de conflictos, mediante el cual las partes se sientan a
conversar acerca del problema y lo resuelven otorgándose mutuas
concesiones, sin necesidad de la intervención de un tercero. Esto lo hacen
de forma voluntaria buscando la mejor forma de solucionar el conflicto.

Los Medios Alternos de Solución de Conflictos en Venezuela


La estructura actual del sistema judicial venezolano que todos
conocen adolece de males como congestionamiento de causas o excesiva
judicalización de los asuntos, unas infraestructuras inadecuadas a los nuevos
procedimientos, una justicia demasiado formalista y costosa, que deriva en
desconfianza de los justiciables en el sistema.
Desde hace más o menos dos décadas, además, se le cuestiona
seriamente como sistema para resolver satisfactoriamente los conflictos entre
particulares. Ello ha conducido a la necesidad de buscar fórmulas
alternativas de resolución de esos conflictos, en base a esquemas distintos,
que se aparten del esquema de perdedores - ganadores propios de la
justicia ordinaria.
La doctrina ha clasificado los sistemas jurisdiccionales en dos tipos, el
de derecho y el de equidad. De acuerdo al primer tipo, el juez en el ejercicio
de sus funciones, debe tomar en cuenta sólo lo señalado en el ordenamiento
jurídico positivo. Dentro del marco del segundo tipo, el juez crea la norma
jurídica para el caso concreto.
En la jurisdicción de derecho, la creación de la norma jurídica es
limitada ya que como se ha dicho "La sentencia entonces deviene como un
acto de derivación formal, teniendo como plano superior la constitución,
luego las leyes, después los reglamentos, entre otros." (Brinz, J. (2006:88).
En tanto, para la jurisdicción de equidad, la creación del derecho es absoluta
porque en la sentencia se establece la solución al caso planteado.
En el ordenamiento jurídico venezolano, y muy especialmente en el
Código de Procedimiento Civil de 1987 dispone en sus artículos 12 y 13:
...En sus decisiones el Juez debe atenerse a las normas del derecho, a
menos que la Ley lo faculte para decidir con arreglo a la equidad... y El Juez
decidirá el fondo de la acusa con arreglo a equidad, cuando las partes de
común acuerdo así lo soliciten y la controversia se refiera a derechos
disponibles. Lo que significa que Venezuela tiene una jurisdicción de
derecho, aceptando la aplicación de la equidad por vía excepcional.
Sin embargo, como consecuencia de la entrada en vigencia de la
actual Constitución, Brinz, J. (2006), ha señalado que "...esta forma de
concebir el sistema de justicia, teniendo la jurisdicción de derecho como la
regla y la de equidad como la excepción, ya no está muy clara. En efecto, ya
la equidad no se asume en un segundo plano, sino, por el contrario, pasa a
ocupar un papel protagónico en la administración de justicia. De ello, no nos
cabe la menor duda." (p. 89).
En este sentido se hace necesario traer a colisión el artículo 26 de la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, ya que en su parte in
fine, establece que “El Estado garantizará una justicia gratuita, accesible,
imparcial, idónea, transparente, autónoma, independiente, responsable,
equitativa y expedita, sin dilaciones indebidas, sin formalismos o
reposiciones inútiles.”
De lo anterior se evidencia que el estado protege a todos los
ciudadanos brindándole una tutela judicial efectiva, y con ello la posibilidad
de reclamar ante los órganos judiciales la apertura de un proceso para
obtener una resolución motivada y argumentada sobre una petición
amparada por la ley. Pero es bueno decir que no basta con que el Estado
busque las maneras de acercar al ciudadano a la justicia y la obtención de
una pronta respuesta. No es cuestión de abrir al ciudadano las puertas de la
justicia y después abandonarlo a su suerte. Es necesario abordar el
problema del costo de la justicia, el cual es hoy, uno de los mayores
obstáculos al libre acceso a los tribunales y un supuesto de denegación de
justicia.
El hecho de carecer de recursos económicos suficientes para litigar no
puede impedir a nadie el acceso a los órganos del poder judicial, por eso hoy
por hoy se ha flexibilizado la justicia y se ha ido buscando formas alternativas
para lograr una justicia más eficaz y más real u objetiva, es ahí donde las
partes juegan un papel fundamental, porque nadie más que ellas para
determinar la solución del conflicto que puedan tener, y es mejor que los
ciudadanos que se encuentran envueltos en un conflictos agrario busquen
las vías para solucionar sus problemas entre ellos mismos a tener que
esperar que sea resuelto por una tercera persona, el cual puede ser un
defensor agrario o en caso extremos el juez especialista en la materia
agraria.
En este sentido, se destaca la parte final del artículo 258 de la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela La Ley promoverá el
arbitraje, la conciliación, la mediación y cualesquiera otros medios
alternativos para la solución de conflictos. En efecto, se tiene la
constitucionalización de los Medios Alternativos de Resolución de Conflictos
(M.A.R.C.) o Métodos de Resolución Alternativa Disputas (R.A.D.),
calificadas así todas las formas de resolución de controversias que no
terminen en sentencia judicial o abandono del litigio.
Concepto de Medios Alternativos de Resolución de Conflictos
Los medios alternativos de resolución de controversias pueden ser
definidos como aquellos mecanismos que sustituyen la decisión del órgano
jurisdiccional por una decisión que puede ser producto de la voluntad
concertada de las partes en conflicto o de una sola de ellas. Es necesario
resaltar que los medios alternativos de resolución de conflictos representan
una posibilidad cierta, para contribuir a que los diferentes miembros de la
sociedad puedan ejercer el principio de autodeterminación, que les permite
alcanzar soluciones propias a sus disputas. El poder judicial ha sido, es y
seguirá siendo elemento fundamental de sustentación de los sistemas
democráticos.
De lo anterior, se tiene que los Medios Alternativos de Resolución de
Conflictos son un conjunto de métodos, procedimientos, o técnicas que,
tiene por objeto solucionar las desavenencias o dificultades, entre personas,
tratando que las partes no recurran a los tribunales, ni a la decisión impuesta
por un juez. En ellos la solución del conflicto nace, de la confrontación y
armonización de los valores e intereses contrapuestos de las partes, no de la
imposición de valores impuestos por el juez, porque no pretende mirar
exhaustivamente las normas existentes, costumbres y jurisprudencia, sino
que más bien se dirige al conflicto en sí, y sus posteriores consecuencias
hacia el futuro, viendo las reacciones que tiene en las mismas partes.
Por lo tanto los medios alternativos, para la investigadora, vienen a ser
un sistema en sí mismo que puede actuar complementariamente con la
justicia. Algunos autores como Andujar, S. (2012), afirman que son un
sistema circular en donde no existe juez, no hay principio, ni final, y tiene
como propósito entonces juntar a las partes y que ambas se escuchen
mutuamente. Existen diferentes sistemas que actualmente están siendo
utilizados por personas y compañías para solucionar sus diferencias,
permitiendo así un ahorro de tiempo y dinero. Como bien dicen algunos
autores, cualquier método de negociación debe ser juzgado por tres criterios:
debe producir un sabio acuerdo (siempre que sea posible el arreglo), debe
ser eficiente y debe mejorar o por lo menos no dañar la relación entre las
partes. Los medios alternativos permiten entonces que las facciones tengan
mayor control respecto a la disputa siendo el medio más directo y simple la
negociación.

Caracterización de los medios alternos de solución de conflictos


Para Linares, J. (2004), afirma que si se parte de una caracterización
de que el manejo de los conflictos para su resolución esta dada por las
partes, es decir son estas las que por sí mismas las que arriban a la solución
de su conflicto y no es un tercero el que puede dictar la resolución o decisión
del mismo, este tercero actúa como un nexo para que las partes puedan
entrar en un principio de acuerdo entonces, se está frente a un forma que se
denomina autocomposición. En la autocomposición, las partes están
plenamente habilitadas para la decisión de fondo sin la intervención de un
tercero, ya que son las partes que en forma activa son los actores para
resolver conflicto excluyendo de toda forma de decisión al tercero.
De igual manera, se encuentran los otros procesos donde el tercero no
define y es el caso de la negociación y la mediación. En la negociación, al
decir de Julio Sergio Ramírez, citado por Linares, J. (2004): "en toda
negociación entre dos partes, cada una de las partes, es el aliado potencial
de la otra, para lograr algo mejor de lo que esta tiene. Ganar o anular a la
otra parte, no es el propósito de la negociación sino la obtención por las
partes de una mejor situación de la que tenían al momento de entrar en la
negociación, bajo el conocido axioma "ganar-ganar."
En general es difícil dar una sola definición que pueda abarcar todos
los aspectos y detalles que de lo que es la negociación por lo que puede
resultar incompleto o general. Sin embargo, la negociación es un proceso en
el que dos o más partes intentan buscar un acuerdo para establecer lo que
cada una de ellas debe dar, recibir, llevar a cabo o tolerar en una transacción
entre ellas". Sin embargo, las partes cuando dejan a un tercero la decisión de
fondo del conflicto están hablando de una forma denominada
heterocomposición. A diferencia de la anterior, la heterocomposición es la
decisión que viene de afuera, de un tercero extraño, neutral al que las partes,
han confiado la resolución del conflicto.
La decisión viene no del ámbito o manifestación externa de cualquiera
de las partes, sino siempre viene de un tercero. Se dice que la conciliación
no puede ser nunca una forma heterocompuesta pues las partes son las que
dan solución al conflicto por ellas mismas, sin intervención de un tercero. En
cambio en el Arbitraje coincidiendo con la autoridad que reconoce el Estado
a los jueces, siempre son heterocompuestos ya que su decisión no depende
de las partes sino de un tercero.

Ventajas de Medios Alternativos de Resolución de Conflictos


Gómez, D. (2006); ha señalado que existe ventajas que van en
función de poner en uso los medios alternos de resolución de conflictos en los
procesos agrarios, entre ellos se encuentran:
1) Control: En la mediación del problema las partes involucradas en el
litigio son las que establecen las reglas del juego. Hay que ver la
resolución de conflictos como un proceso continuo con control máximo de
las partes en el proceso con la intención del logro de un fin común.
Aunque el grado de control sobre el resultado varía de un medio a otro,
en todos los medios el control de partes el proceso es mayor que en
los sistemas formales de justicia. Ellos tienen que estar de acuerdo con
los procedimientos. Las partes pueden estar de acuerdo para el uso de
un proceso o combinación de procesos especialmente apropiado al
conflicto entre ellos.
2) Celeridad: A pesar de los esfuerzos de los sistemas judiciales para
mejorar el tiempo de procesamiento de conflictos civiles, laborales
y mercantiles, las cargas de casos y el abarrotamiento de expedientes
hacen imposible la tarea de procurar celeridad en el sistema formal de
justicia. Si se suma a esto la parte criminal, los presupuestos apretados, y
otros factores se puede ver como se crean atrasos de años para la
resolución de un caso.Asimismo, los presupuestos para mejorar se hacen
escasos y el aumento poblacional hace que cualquier esfuerzo quede
corto. A pesar de que parezca que el sistema venezolano de justicia es
insalvable, si se logra la desjudicialización de muchos conflictos y la
conformación de nuevos sistemas se podría dar mejor respuesta a la
necesidad permanente de resolución de conflictos de una sociedad
moderna. En la mayoría de países del mundo aplican mecanismos
alternativos de solución de conflictos como una vía efectiva para aligerar la
carga procesal y encontrar soluciones expeditas a los conflictos.
En el uso de medios alternativos de resolución de conflictos no hay
lista de causas pendientes, tampoco hay que hacer una cola eterna o
esperar para acceder a los tribunales. El elemento de velocidad que
gobierna
los procesos alternativos es el anhelo de las partes en conflicto para
terminar la disputa en el menor tiempo posible y resolver lo mejor posible
los casos, aquí jugaría un papel muy importante el defensor en materia
agraria, pues servirá como mediador entre las partes para evitar que
lleguen a los estrados judiciales.
3) Uso de Árbitros y Mediadores expertos e imparciales: En
diferentes países se conforman asociaciones de arbitraje y mediación;
así como también las asociaciones de abogados conforman grupos
arbitrales.
En el caso de Venezuela en la actualidad existen diversas
personas entrenadas en procedimientos alternativos de resolución de
controversias, asimismo profesionales de diversas áreas están
plenamente capacitados para conformar una importantísima red de
negociadores y árbitros. De igual forma existen agrupaciones como es el
caso de la Asociación Civil Consorcio Justicia, que brinda capacitación y
asesoría para la resolución alternativa de conflictos. También se cuenta
las oficinas de defensorías agrarias en todas las capitales de los estados,
que se encuentran muy bien preparados en los conflictos agrarios.
Para resolver una disputa por medio de procedimientos alternativos se
necesita de la ayuda de personas entrenadas y expertas en la materia.
Resolver una controversia requiere cierta pericia y entrenamiento.
Regularmente en mediación se utiliza a uno o varios mediadores con
conocimientos en técnicas de mediación y con capacidad de asesoría. En el
caso del arbitraje normalmente el o los árbitros deben ser personas con
profundo conocimiento de la materia en conflicto y además un entrenamiento
en resolución de conflictos.
El uso de mediadores y árbitros previamente capacitados garantiza la
seguridad jurídica, el éxito de los procedimientos y una resolución efectiva de
los conflictos suscitados entre las partes. Por ejemplo, un conflicto en el área
de la construcción probablemente sea más útil la selección de un
ingeniero civil, arquitecto, un contratista, o un abogado con una práctica en el
área para servir como su mediador o arbitrador.
En el caso de conflictos agrarios probablemente sea más útil un
abogado especialista en esa área agraria. La pericia del neutral en el área
del conflicto reduce el tiempo típicamente requerido para tratar de educar a
un juez acerca de los elementos técnicos de un conflicto, y levantar el nivel
de confianza de las partes que el resultado del proceso será bien decidido.
4) Menos formalidades y flexibilidad: En el sistema formal de
administrar justicia la rigidez de los lapsos y la formalidad de los
procesos generan muchas injusticias procesales, porque hay que tener
presente que una justicia tardía no es justicia; asimismo la estructura
formal del derecho venezolano y su base en leyes y códigos escritos
atan de manos a jueces para una humanización de los procesos. En
cambio con los medios alternos de resolución de conflictos, se evita
procesos llenos de formalismos, ya que las partes con la ayuda de un
tercero imparcial buscan la posible solución, por lo que el trato es directo
y las mismas partes deciden los lapsos y el tipo de documentos y
acciones permitidas. En el caso de la Ley de Tierras y Desarrollo
Agrario, la figura de los medios alternos de resolución de
conflictos fue incluida en sus capítulos, buscando con ello minimizar
el problema entre los agricultores.
5) Privacidad: Las diferentes formas de resolución alternativa de
conflictos no son abiertas al público general como si lo son ciertos
casos llevados y resueltos en los tribunales. Los procedimientos y
resoluciones pueden ser mantenidos de forma privadas y
confidencialmente, que solamente la conocen las partes involucradas en
el litigio, lo cual ayuda para preservar las relaciones de funcionamiento
positivas y evitar la confrontación de salvado de imagen.
6) Economía: Tiempo ahorrado es dinero ahorrado. Los procesos
alternativos están diseñados para ser rápidos, más económicos y
más informales que cualquier proceso en la justicia formal. El solo hecho
de no obtener una solución expedita hace de los procesos en los
tribunales muy costosos, si a eso se le suma las costas procesales
y honorarios de abogados por todo el tiempo del conflicto el costo se
vuelve exorbitante. A todo lo anterior se suma la existencia de eternas
apelaciones y trucos procesales que alargan los procedimientos en los
procesos formales. En cambio con el uso de los medios alternos de
resolución de conflictos las partes son las dueñas del proceso y la
solución es casi siempre definitiva.
7) Resolución definitiva y amistosa: Todos los convenios obtenidos
a través del uso de los medios alternos de resolución de conflictos
son definitivos, son el final del procedimiento y del conflicto, además
son obligatorios y aplicables. Pueden estar sujetos solamente a revisión
limitada de los tribunales, pero en ciertos casos específicos donde errores
numéricos o de estructura se encontrarán en una resolución arbitral.
Los tribunales no pueden hacer nuevas conjeturas de la decisión en
cuanto a los hechos o la ley, salvo que se encuentre un caso de violación
a una norma constitucional o de orden público. Por supuesto, las
partes también podrían estar de acuerdo de antemano en que partes de
la decisión podrían ser revisados en un tribunal. La regla de oro es que la
negociación, al contemplar el consentimiento de las partes, agota el
procedimiento y no debe tener revisión.
8) Poder en las partes: Las partes que revisan los resultados están
satisfechos generalmente más con las soluciones que se han convenido
en mutuamente, en comparación con las soluciones que son impuestas
por un tercero. Los acuerdos mediados cubren a menudo los aspectos
procesales y psicológicos que no son necesariamente susceptibles a la
determinación legal.
El mayor grado de control y de previsibilidad de las partes del
resultado que negocian, estableciendo sus propias reglas iniciales sienten
que tienen más control del conflicto una vez concluido los procedimientos y
normalmente están felices del resultado y trato que se le ha dado a su
conflicto y a ellos el trato justo por el acuerdo logrado.

Clases de medios alternos de resolución de conflictos


Entre las diferentes medios alternos de resolución de conflictos que
existen y se ponen en práctica en Venezuela se encuentran:
Transacción:
La transacción es definida en el artículo 1713 del Código Civil que
dispone que “la transacción es un contrato por el cual las partes, mediante
recíprocas concesiones, terminan un litigio pendiente o precaven un litigio
eventual”. Existen por tanto, dos tipos de transacciyn, a saber: (i) la
extrajudicial mediante la cual las partes se ponen de acuerdo con el fin de
evitar un litigio, y (ii) la judicial, donde las partes manifiestan su mutuo
consenso para poner fin a un juicio ya iniciado y es llevado ante los
tribunales.
La transacción para Calvo, E. (1999), constituye una especie del
negocio de declaración de certeza (negocio di acertamento), que es una
convención celebrada por las partes con el objeto de establecer la certeza de
sus propias relaciones jurídicas, o regular relaciones precedentes,
eliminando ciertas faltas de certeza, al amparo del principio general de la
autonomía de la voluntad privada, en aquellas zonas del derecho en que las
partes pueden disponer del objeto que desean regular. Así, cuando ese
negocio jurídico tiene por objeto poner fin a un litigio ya existente, mediante
la recíproca voluntad de las partes, se está en presencia de la transacción.
El arbitraje.
El arbitraje es referido por Roques, E. (1981), como un mecanismo de
resolución de controversias que tiene su origen en un acuerdo de voluntades
de las partes involucradas mediante el cual convienen en someter al
conocimiento de terceras personas, denominadas árbitros, la resolución de
los conflictos que hayan surgido o puedan surgir entre ellas. Es un medio
alterno que permite la resolución de sus conflictos a través de un
procedimiento más práctico, sencillo y de forma expedita, donde intervengan
terceros ajenos que sean imparciales, que se denominan árbitros, facultados
por el estado para juzgar esas controversias, evitando de esa manera mayor
congestionamiento en los órganos operadores de justicia.
De allí se tiene que el arbitraje es un método privado para la solución
de disputas en el que las partes interesadas se someten voluntariamente a la
tutela de un tercero de su confianza y que esté desprovisto de la condición
de yrgano judicial, llamado “arbitro” para que les escuche y finalmente,
resuelva sus diferencias de criterio, esto es lo que conocemos como
“encomendar la soluciyn a un tercero”.
El arbitraje tiene una serie de ventajas, que se hace propicio señalar:
Es ideal cuando las partes quieren someter su conflicto a la decisión de un
tercero, distinto al órgano jurisdiccional. Es mucho más simple y económico
que un proceso judicial. Mientras que sus desventajas son que al igual que
en todos los otros métodos, las partes deben estar dispuestas a aceptar el
resultado, más aún si se trata de un arbitraje “no vinculante”, en el cual las
partes no renuncian a su derecho a una acción judicial. Se solucionaría de la
misma manera que los anteriores, aplicándose sólo en aquellos casos en los
que las partes estén dispuestas a aceptar el método sin mayores
inconvenientes.
La Conciliación.
Cuando las partes recurren a un tercero neutral, quien además de
convocar a las partes y facilitar el reinicio del diálogo, puede, de considerarlo
necesario, hacer sugerencias de alternativas de solución para que sean
evaluadas por las partes y de ser el caso, acordadas libremente. Las
propuestas del conciliador, son sólo propuestas y por tanto las partes pueden
no aceptarlas. La decisión está en las partes.
La conciliación en opinión de Escobar, R. (1993), es un acto procesal
en que las partes en presencia y con intervención de un juez o de un tercero
investido transitoriamente de la función de administrar justicia, buscan la
composición de un conflicto de intereses para terminar anticipadamente el
proceso. De esta forma, la conciliación puede ser definida por el investigador
como el acuerdo a que llegan la Administración y el particular con la
intervención del juez durante el proceso con el objeto de poner fin al litigio
instaurado entre ellos.
Por su parte Escobar, R. (1993) señala que la conciliación tiene la
estructura de la mediación, ya que se traduce en la intervención de un
tercero entre los portadores de los dos intereses en conflicto, con objeto de
inducirles a la composición contractual; con la distinción que la mediación
persigue una composición contractual cualquiera, sin preocuparse de su
justicia, mientras que la conciliación aspira a la composición justa. En este
sentido, refiere la investigadora que la conciliación se encuentra en medio de
la mediación y de la decisión: posee la forma de la primera y la sustancia de
la segunda.

Naturaleza Jurídica de la Conciliación


La conciliación adquiere sus elementos de algunos aspectos de otras
instituciones, haciéndola una institución compleja. Por tal motivo, tiene
relación en su forma, proceso de elaboración, efecto y sujetos que
intervienen con algunas instituciones como la negociación, amigable
composición, transacción y arbitraje, entre otros.
La conciliación según Parili O. (1.992), aparece en la vida del Derecho
como un acto jurídico de estirpe compleja, donde intervienen sujetos con
distintos intereses y donde el consentimiento y la voluntad están dirigidos a
crear, novar o dar por terminada una obligación o una relación jurídica que
interesen a las partes conciliantes.

Principios Éticos que regulan la Conciliación


Están regulados en la Ley de Conciliación y su Reglamento, y son los
siguientes:
1. Equidad. La Conciliación debe orientarse a lograr acuerdos justos y que no
afecten derechos de terceros ajenos a las partes.
2. Veracidad. La conciliación debe orientarse a la búsqueda de los reales
intereses de las partes.
3. Buena Fe. Las partes deben proceder de manera honesta y leal.
4. Confidencialidad. El conciliador y las partes deben guardar absoluta
reserva de todo lo sostenido o propuesto. Nada de lo que se manifieste en
una audiencia puede ser revelado, ni puede ser utilizado como prueba en un
proceso judicial o arbitral, salvo hechos delictivos.
5. Neutralidad e imparcialidad. Son garantías de seguridad y justicia. En el
proceso el conciliador no podrá parcializarse con los intereses de ninguna de
las partes.
6. Legalidad. El acuerdo a que arriben las partes debe respetar el
ordenamiento jurídico.
7. Celeridad y Economía. El proceso conciliatorio debe permitir una solución
pronta y rápida del conflicto, permitiendo a las partes un ahorro de tiempo,
costos y otros que le demandaría un proceso judicial.

Razones para recurrir a la Conciliación


Balzar (1986) afirma en relación a las partes que no conocen este
procedimiento y que se preguntan cuáles son las ventajas que pueden
derivar de la conciliación, deberán considerar atentamente dos factores:
La experiencia de la conciliación demuestra que tiene un alto índice de
éxito habida cuenta de su naturaleza no vinculante. Para unos, la
conciliación nunca falla, aun cuando las partes no logren llegar a una
solución, puesto que al terminar el procedimiento han obtenido una mayor
comprensión de la controversia o, por lo menos, han logrado circunscribir la
controversia a su verdadera dimensión;  Iniciar un procedimiento de
conciliación supone pocos riesgos. Las partes siempre tienen el control de la
controversia. Cada parte puede poner término a la mediación en cualquier
momento, aun cuando estime que no avanza el procedimiento, que el
procedimiento es muy oneroso o que la otra parte no actúa de buena fe. Por
lo tanto, el compromiso de las partes con la conciliación es revocable en
cualquier momento.
La mediación
Cuando las partes no pueden solucionar directamente una
controversia y se interrumpen las conversaciones, pueden recurrir a un
tercero neutral para que promueva nuevas reuniones y el reinicio del diálogo
a fin de que las partes desplieguen sus mejores esfuerzos en encontrar una
solución. El tercero no plantea alternativas de solución, únicamente se limita
a ser un facilitador del diálogo. Un ejemplo se encuentra en las
negociaciones colectivas cuando se rompen los tratos directos con su posible
consecuencia de un plazo de huelga. La autoridad de trabajo convoca a las
partes y les invoca reinicien el diálogo y el planteamiento de propuestas
viables que posibiliten un acuerdo.
En la doctrina más especializada se conceptúa a la mediación como un
método alternativo de resolución de conflictos, no adversarial, en el cual, un
tercero, ajeno al problema, procura el acercamiento entre las partes
facilitando su comunicación, para que, en forma cooperativa, arriben a un
acuerdo que les satisfaga.
Es definida la mediación como un procedimiento en el cual dos partes
de un conflicto se reúnen con un tercero, ajeno e imparcial, que facilita la
comunicación entre aquellas para que puedan delimitar el conflicto y
encontrar su solución. El tercero no hace propuesta de arreglo.
Para la investigadora, la mediación es una negociación facilitada
donde un tercero imparcial asiste. A las partes en la búsqueda de un
acuerdo. En conclusión la mediación es un medio legal de solución de con-
flictos a través del cual las partes resuelven sus disputas en forma pacífica
con la intervención de un tercero capacitado profesionalmente que facilita la
comunicación entre ellas para que logren solucionarlo mediante un convenio
escrito. Desglosando el concepto jurídico de la mediación se puede deter-
minar que los elementos que lo integran son los siguientes:
Es un método alternativo que tiene como finalidad auxiliar la Justicia
estatal en todos aquellos supuestos en que dos partes iguales pueden
disponer de tal forma sus bienes y derechos para lograr poner fin a la lucha
que los enfrenta de una forma pacífica y sin un proceso traumado.
Es un método alternativo no adversarial porque según los es-
pecialistas su cometido principal es que no haya vencedores ni vencidos, de
que se acabe con el litigio pero sin litigar, es decir, no se trata de que una
parte triunfe y la otra sea derrotada, sino que lo importante es lograr que los
respectivos intereses salgan a la luz permitiendo luego, a partir de su
interrelación, la posibilidad de una solución satisfactoria.
También se entiende por no adversarial, la ausencia de confrontación
litigiosa, circunstancia por lo que algunos autores la denominan" medios
alternativos de resolución de conflictos" (o de disputa), en el sentido de
alternativa a un proceso judicial (o arbitral). La diferencia básica entre los
procedimientos adversariales (procesos judiciales y arbitrajes) y lo no
adversariales consiste en que, en los primeros, la decisión es dictada por un
tercero (juez o árbitro), a modo de decisión independientemente de la
voluntad de las partes, en tanto que, en los segundos, son las mismas partes
las que adoptan voluntariamente una resolución respecto del conflicto en el
que están involucradas.
De aquí se desprende un concepto técnico de la mediación como una
estrategia destinada a la resolución de conflictos, de la mejor manera posible y
por la vía pacífica, mediante la negociación directa entre las partes
involucradas en la controversia, eludiendo litigio y favoreciendo la creatividad
en busca de resoluciones posibles. Se realiza con la intervención de un
profesional capacitado al efecto: el mediador) que es un tercero neutral sin
capacidad de decidir, en un ámbito de confidencialidad.
Se justifica la intervención de un tercero ajeno al problema porque no
se confunde con ninguna de las partes; es ajeno al problema que enfrenta a
las partes, o sea) es neutral; y, actúa confidencialmente en el desempeño de
su misión, que legalmente significa:
a) Que ninguno de los participantes en las reuniones de mediación
pueda ser citado para que declare procesal o extra procesalmente sobre las
actuaciones y opiniones emitidas en el trámite de la mediación.
b) Que las actas de las reuniones, los acuerdos estipulados o
cualesquiera otros documentos que se redacten corno consecuencia de la
mediación, se limitarán a recoger los términos del convenio o la ausencia de
los mismos; y,
c) Que, en sus relaciones con las partes, el mediador deberá regirse
siempre por dicho principio, sin ''fugas de confesiones" de una a otra parte
respecto a las audiencias o reuniones privadas.
Es importante señalar que los métodos alternativos al litigio judicial de
solución de conflictos más conocidos y usuales son la negociación directa, la
negociación asistida (mediación) y la adjudicación privada (arbitraje en sus
diversas formas) y las combinaciones de los dos últimos.
La negociación y la mediación constituyen métodos de
autocomposición, es decir, el tercero no es quien decide la solución de la
controversia. En cambio, el arbitraje es un método de heterocomposición,
aquí sí del árbitro emana un laudo arbitral, el cual contiene la decisión que
debe ser acatada de manera vinculante.

Naturaleza Jurídica de la Mediación


Según la doctrina procesalista más calificada, la resolución de
conflictos por las propias partes se puede originar por dos tipos de
decisiones.
 Por la decisión parcial: La cual depende de la voluntad de una o de
ambas partes en conflictos y

 Por una decisión imparcial: Suscitada por un tercero ajeno al


conflicto. Ubican esta toma de decisión desde dos puntos de vista:
a) Decisión Parcial:
1) La autotutela o autodefensa: Se produce cuando una parte
impone su solución a la otra con lo que se está ante de tomarse
justicia por sus propias manos, lo que está abolido y prohibido en los
sistemas jurídicos contemporáneos.
2) La autocomposición: Las dos partes en conflictos ponen
solución al mismo de modo pactado, sin que una se imponga a la otra y
sin que se acuda a un tercero que decida coercitivamente. Dentro de las
formulas de autocomposición, se citan como ejemplos, el
allanamiento del demandado o la transacción y ocupando el grado de
aceptación más privilegiado la mediación.
b) Decisión Imparcial:
1) La heterocomposición: Consiste en la existencia de un tercero,
es decir, alguien que no es ni primero (demandante, acusador), ni
segundo (demandado, acusado), que no es parte, que impone su
decisión. La critica más acérrima de este sistema se basa en que la
solución, viene impuesta por un tercero imparcial, bien elegido por las
partes (árbitro) bien designado por la ley (juez).
De todo esto, la investigadora deduce que la mediación es, en
definitiva, un proceso de resolución de conflictos, un proceso de dialogo que
intenta terminar con un contrato de transacción impropia y que depende de
su iniciación, trámite y finalización enteramente de la voluntad de las partes
en persistir en el mismo.

La Mediación como mecanismo alterno de resolución de conflictos.


La universalización del intercambio, la apertura de las fronteras, la
circulación de la población, los flujos migratorios, y la manifestación del uso
de tecnologías, son un desafió para nuestras sociedades e impactan el
funcionamiento político, social, cultural, económico y familiar y les exigen
nuevas respuestas a los ciudadanos, al conjunto de los Estados y a las
organizaciones internacionales. La profundidad y complejidad de estos
cambios genera resistencia y conflictos a todos los niveles del quehacer
humano, trayendo como consecuencia el incremento de los índices de
violencia familiar, comercial laboral, empresarial, social, política, etc.,
especialmente en los estratos de la población económicamente mas
desasistidos: Muchos niegan que se puedan crear espacios positivos de
cooperación y desarrollo de otras posibilidades creativas para la ganancia
mutua.
En este contexto, la mediación en este mundo globalizado es un
nuevo paradigma y una herramienta estratégica que -junto con los otros
métodos alternos de resolución de conflictos- permite cambiar la forma de
abordar, procesar y resolver las diferencias por parte de los ciudadanos, los
cuales pueden llegar a administrar positivamente el conflicto o a la violencia
como un mecanismo de regulación y acompañamiento de cambios sociales y
de fortalecimiento de la ciudadanía.
A pesar de su notorio desarrollo en los últimos años, la mediación
tiene una larga historia y tradición en otras culturas. En países como China y
Japón tiene una raigambre milenaria. También en África existe una fuerte
base cultural propicia para la resolución de disputas a nivel de la comunidad.
En Occidente es de más reciente creación. De hecho, en los Estados Unidos
su práctica abarca un poco mas de cien años, durante los cuales se ha
producido una abundante y rica experiencia, mientras que en América Latina
las experiencias mas exitosas apenas llegan a los quince años de tradición,
destacando países como Argentina y México y su incorporación a los
procesos de Reforma Judicial en América Latina. En la actualidad, en el país
la utilización de los métodos alternos de resolución de conflictos forma parte
del Sistema de Administración de Justicia, previsto en la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela.
La mediación se ha convertido en un espacio para asumir la
resolución de conflictos de una manera constructiva y efectiva, que
promueve una nueva cultura de cooperación y sinergia. Para su adopción y
proliferación es necesario generar una serie de cambios a distintos niveles:
1) Transformar la mentalidad, el manejo emocional, las actitudes y conductas
del mediador y de las partes involucradas, ya que se pretende atacar al
problema y no a las personas, como lo hacemos usualmente. Este cambio
requiere un marco conceptual y práctico basado en nuevas competencias que
permita implantar estas nuevas prácticas para la resolución de conflictos de
manera productiva y desarrollar un definido espíritu de servicio en pro de
relaciones armónicas y democráticas.
2) Reconocer el conflicto como inherente a la vida cotidiana, que proporciona
información sobre las cosas que no están funcionando y representa la
posibilidad de asumir la responsabilidad de resolver disputas de menare
oportuna y creativa en beneficio mutuo de las partes involucradas. En efecto,
en nuestras realidades han predominado comportamientos que tienden a
negar, evadir, posponer, controlar, reprimir o luchar contra el conflicto,
asumiendo respuestas parciales, coyunturales y violentas. En el mejor de los
casos, se ocurre a las instancias judiciales con las consecuencias que ello
tiene en términos de tiempo, costos y su impacto en la calidad de la relación.
3) Constatar que la acumulación de tensiones es el reflejo de la existencia de
problemas encubiertos y/o estructurales que - de no resolverse- pueden
escalar el conflicto, el cual debe ser abordado a través de un sistema
progresivo de señales. Que permita asumir una actitud productiva de gestión
temprana del mismo y utilizar métodos específicos de acuerdo a su
naturaleza, nivel de complejidad y en el contexto de su integralidad.

La Negociación
Es aquel medio de resolución de conflictos, mediante el cual las partes
se sientan a conversar acerca del problema y lo resuelven otorgándose
mutuas concesiones, sin necesidad de la intervención de un tercero. Tiene
como ventajas que durante un proceso de negociación las partes aprenden
a dominar sus sentimientos, de manera tal que el objetivo ya no sea
imponerse sobre el otro, sino lograr un mutuo acuerdo que resulte en una
mutua satisfacción de intereses.
La forma natural de enfrentar y resolver cualquier discrepancia o
conflicto, es por lo general, primero, encarar el problema “cara a cara”,
comunicándonos con la otra parte para lograr algún resultado que satisfaga
nuestros intereses; sólo cuando este procedimiento falla es que recurrimos a
otros métodos como la violencia (verbal, gestual o física), la adaptación o
sumisión, o evasión.
Este proceso “cara a cara”, que existe entre dos o más
partes que enfrentan un conflicto, se conoce con el nombre de Negociación o
Transacción, y se caracteriza, entre otros aspectos, porque son las partes
quienes, directamente, sin la intervención de un tercero, resuelven “su
problema”.
Por ello es que se dice que la forma más antigua de resolución de
conflictos, es la Negociación o Transacción; incluso más que la forma
violenta, pues antes que ésta se manifieste, las partes normalmente tienen
oportunidad de efectuar transacciones, que la gran mayoría de las veces
permiten una solución pacífica.
En este orden de ideas, se debe tomar lo señalado por Linares, J.
(2004), quien ha señalado que la negociación bien hecha conlleva consigo
un resultado justo para ambas partes de modo tal que, se logre un bien
común. Ayuda a establecer prioridades, puesto que generalmente las partes
deben renunciar a parte de sus intereses en la búsqueda de una satisfacción
común a todos.
Mientras que las desventajas que presenta es que con dicho método
de negociación, ambas partes tienen que estar dispuestas a discutir y a
sacrificar parte de sus intereses, si alguna de ellas no lo está, o pretende
imponerse sin escuchar los argumentos del contrario, la negociación no será
efectiva. En tal sentido, recomendamos este método sólo a aquellas partes
que estén conscientes de que la negociación no es fácil y que deben ceder
un poco para lograr finalmente, un acuerdo que resulte satisfactorio para
todas las partes.

Elementos de una Negociación


Para que se dé una negociación deben concurrir algunos elementos
básicos. Entre los más importantes, podemos citar a los siguientes:
1. Existir dos o más partes.
2. Existir intereses comunes e intereses opuestos
3. Las partes deben tener alguna dosis de poder (algo que dependa de una
de las partes y que interese a la otra parte)
4. Las partes deben buscar directamente, sin la intervención de terceros, una
solución a sus problemas.

Fundamento Legal de los Medios Alternos de Solución de Controversia


Los Medios Alternativos de solución de Conflictos en Venezuela, a
pesar de no haber contado con un rango constitucional sino hasta 1999,
están previstos en diversos textos legislativos, tales como el Código de
Procedimiento Civil que prevé tanto la conciliación como el arbitraje; la Ley
Orgánica del Trabajo, que regula la Conciliación y Arbitraje como
mecanismos para solucionar los conflictos colectivos; la Ley Sobre el
Derecho de Autor (1993), que se refiere al arbitraje institucional ante la
Dirección Nacional de Derecho de Autor, es un arbitraje voluntario y se
tramita conforme a las previsiones sobre arbitraje del Código de
Procedimiento Civil;
De igual manera, la conciliación está consagrada en otros dispositivos
legales tales como en la Ley sobre el Derecho a la Mujer a una Vida Libre de
Violencia y en el Código Orgánico Procesal Penal (2009), en el cual ésta es
usada como medio para llegar a los acuerdos reparatorios, que sirven como
medida compensatoria para el agraviado por parte del agraviante en hechos
punibles que afecten bienes materiales, poniendo fin al procedimiento penal.
Así como en la Ley Orgánica Procesal del Trabajo (2002), eso por nombrar
algunas.
En ese mismo orden de ideas se encuentra en la Asamblea Nacional
un Proyecto aprobado ya en su primera discusión, de "Ley de Convivencia y
Solución de Conflictos en las Comunidades" en la cual se establecen de igual
manera los medios alternativos de solución de conflictos a los fines de hacer
más armónica la convivencia en la sociedad. La Mediación, sin embargo, es
un procedimiento poco conocido en Venezuela.
No obstante en los últimos meses se ha despertado gran interés por el
tema, realizándose seminarios dictados por profesionales en la materia,
provenientes de Colombia y Estados Unidos. Existe en el país instituciones
encargadas de administrar estos procesos de arbitraje, conciliación y
mediación tales como el Centro de Arbitraje y Mediación perteneciente a la
Cámara de Comercio de Caracas y el Centro Empresarial de Conciliación y
Arbitraje (CEDCA) perteneciente a la Cámara Venezolano Americana
(VenAmCham). Ambos centros tienen como objetivo el arbitraje, la mediación
y la conciliación. En el ámbito internacional, nuestro país es parte de un buen
Número de acuerdos internacionales que promueven la resolución alternativa
de controversias.
En este sentido Venezuela es parte de los siguientes acuerdos; entre
otros: La Convención sobre el Reconocimiento y Ejecución de las Sentencias
Arbitrales Extranjeras, celebrada en Nueva York el 10 de junio de 1958
(Convención de Nueva York), el Convenio sobre Arreglo de Diferencias
Relativas a Inversiones entre Estados y Nacionales de Otros Estados
(Convenio de CIADI), también forma parte de Convención Interamericana
sobre Arbitraje Comercial Internacional, fumada en Panamá el 30 de enero
de 1975 (Convención de Panamá); y de la Convención Interamericana sobre
Eficacia Extraterritorial de las Sentencia y Laudos Extranjeros, suscrita en
Montevideo el 8 de mayo de 1979.
Aparte especial merece la Justicia de Paz ideada para resolver
conflictos comunitarios, y que poco a poco, ha tomado auge, con muy
buenos resultados. La Constitución de 1999 da sustentación expresa en el
artículo 258 para que por ley se organice "la justicia de paz en las
comunidades". Constituye la Justicia de Paz una nueva forma de administrar
justicia que produce una ruptura de paradigmas en comparación al modelo
de administración de justicia conocida, por cuanto ésta se encuentra
orientada hacia la conciliación como primer peldaño en la resolución de
conflictos interpersonales, vecinales, enrumbándose a la consecución de
soluciones aportadas por las partes en conflicto, en aras de la convivencia
pacífica.
Es uno de los procedimientos alternativos que buscan superar la
insuficiencia del sistema de administración de justicia, cuya importancia y
utilidad tienen reconocimiento en las sociedades que han comprendido el
efecto positivo que generar al mejorar el clima de armonía entre los
miembros de la comunidad.
De todo lo plasmado se puede decir que los medios alternativos de
resolución de conflictos (MARC), son un sistema en sí mismo que puede
actuar complementariamente con la justicia. Algunos autores afirman que
son un sistema circular en donde no existe juez, ni demandado, no hay
principio, ni final, y tiene como propósito entonces juntar a las partes y que
ambas se escuchen mutuamente.
Tanto la mediación, conciliación y el arbitraje son procedimientos
alternativos para la resolución de conflictos que tienen un papel fundamental
en los esfuerzos por mejorar no sólo el funcionamiento de los sistemas
judiciales, sino también la convivencia y paz social que pueda verse alterada
ante un problema agrario, bien sea por causa de invasión de tierras,
expropiación, entre otros.
Existen diferentes sistemas que actualmente están siendo utilizados por
personas y compañías para solucionar sus diferencias, permitiendo así un
ahorro de tiempo y dinero. En el ámbito mundial, se comenta que “el 95 % de
los casos se resuelven en negociaciones antes o durante el juicio, por lo que
sería lygico pensar en solucionarlo sin tener que ir a juicios.”

Relevancia de los Medios Alternos de Solución de Conflictos para Solucionar


los Problemas entre Particulares

La Justicia, debe ser entendida como un conjunto de principios éticos


mínimos que el Estado debe asegurar a todos los habitantes de un país, en
sus distintos ámbitos y aspectos sociales requeridos, lo que permitiría el
logro de una convivencia pacífica y acorde con la dignidad humana.
Partiendo de esta afirmación, ésta es la función primordial e irrenunciable del
Estado en cualquier sociedad civilizada y humanizada, realmente
democrática y pluralista.
Por esta razón y en asuntos de Justicia, la sociedad no puede transigir
ni ser tolerante, pues se trata de mandatos legales que garantizan la
igualdad de las personas entre sí, ante la ley y el derecho, que solo es
legítimo si están orientados hacia la búsqueda de la Justicia.
Pero tradicionalmente la sociedad venezolana ha visto al proceso
judicial como la forma natural que deben emplear las personas cuando
enfrentan un conflicto, esto no está mal, sin embargo esta alternativa con el
tiempo, poco a poco ha ido perdiendo eficiencia en su respuesta a las
necesidades y expectativas de la sociedad, entre otras causas, por el
aumento de la población a un ritmo mayor que el experimentado por el Poder
Judicial, que cada día enfrenta mayores limitaciones, frente a una demanda
cada vez mayor, con casos de diversas naturaleza y complejidad.
Es de acotar que la calidad del servicio que presta el Poder Judicial, aún
mejorando sustantivamente, no resuelve un problema de fondo: la
necesidad de promover una “cultura de paz” en nuestra sociedad, que
cambie nuestra “cultura litigiosa” por una “cultura de entendimiento”. El
conflicto es parte natural en la vida de las personas, por lo que no debe
preocupar su existencia. Lo preocupante no es la existencia del conflicto,
sino la falta de vías adecuadas para resolverlo.
El proceso judicial no deja en manos de las partes la solución creativa y
responsable de la controversia. Sus resultados, por centrarse sólo en
posiciones (demandas y exigencias de las partes) enfrentan aún más a las
personas, aumentando sus discrepancias y por tanto, afectando sus
relaciones. El litigio, como problema de fondo, no siempre se resuelve con
una sentencia. Por ello la sociedad progresivamente va comprendiendo que
los métodos adversariales como el proceso judicial, resultan ineficientes, y se
comienza a sentir manifestaciones concretas para abrir las puertas a nuevos
modelos que satisfagan mejor sus necesidades.
Es de señalar que la Ley limita el poder hegemónico de los gobiernos
e impone el estado de derecho, pero como medio para resolver conflictos
provee limitadas opciones. Los medios alternos de solución de controversias
revisten de gran importancia, ya que vienen a ser una manera de
proporcionar respuestas rápidas y accesibles a los conflictos sociales que se
presentan en el día a día de los ciudadanos que conviven dentro de un
estado democrático, puesto que, la existencia de instituciones capaces de
regular y facilitar la resolución de conflictos debe ser un punto fundamental
existente y además, normal dentro de toda sociedad que adopte dicha teoría
política.
En toda sociedad democrática, en la cual como es de esperarse,
existe una pluralidad de sujetos, los cuales actúan libremente y por ende, de
manera distinta unos de otros, se presentarán conflictos con cierta
frecuencia, el derecho agrario no escapa de esta realidad, por eso es que las
partes deben buscar las formas eficaces de resolver los mismos. Esto es lo
que se ha intentado hacer desde antaño, cuando se creó por primera vez el
sistema judicial, con valores de justicia y equidad, sin embargo, en una
sociedad como la Venezolana, en la cual esos conflictos comunes y
corrientes, tales como, falta de presupuesto y falta de tiempo, se entrelazan
con una situación social deplorable, es altamente complicado por no decir
imposible para un ciudadano común recurrir a un litigio, activando así el
aparato jurisdiccional.
Por ello es que hace relevante la utilización de los llamados Métodos
Alternativos de Solución de Conflictos, como una respuesta fácil y eficaz,
pero por encima de todo accesible a la ciudadanía, al momento en que se
vean envueltos en algún problema que pudiera tener una solución más
sencilla y rápida que la de un juicio. Para Páez, (2007), refiriéndose a un
modelo funcional de solución de conflictos es un elemento crucial para el
desarrollo económico, señala que

“El orden económico de mercado solo es posible si sus


participantes conocen con certeza el alcance e importancia de
sus
respectivas asignaciones (derechos) sobre los recursos sociales
así como las condiciones de su transmisión a terceros. En otras
palabras, si los individuos cumplen lo que prometen y conocen
anticipadamente su acceso a los recursos sociales.
Ello reduce la incertidumbre acerca del futuro que de otro
modo inhibiría la interacción humana pues impediría a los
individuos predecir cuándo sus expectativas pueden coincidir
con las de los demás, y de ese modo intentar el intercambio. Es
de allí que genera la importancia de los medios alternos de
resolución de conflictos ya que con ellos se busca
eliminar los gastos procesales que acarrea un conflicto llevado
por ante los tribunales”. (p. 39)

De allí que a los referidos medios de solución de controversias se


consideren un bien querido e implementados por la sociedad a los fines de
que los procesos se agilicen y que la justicia sea rápida y efectiva., ya que
para el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela es prioritario para
dar solución a las controversias ancestrales que devienen del derecho
agrario; en virtud de que quiere preservar la paz y estabilidad social en las
zonas donde se presenten conflictos agrarios, con el fín de preservar los
principios rectores y las garantías constitucionales y legales.
Es relevante señalar, que ante la existencia de un gran número de
litigios en los que la sociedad se ve inmersa y, ante la posibilidad de que los
particulares en mérito a la autonomía de la voluntad puedan establecer una
forma de juzgamiento sustraído de la jurisdicción estatal-ordinaria, se puede
afirmar que los métodos alternativos de solución de controversias, son útiles
para la pacífica convivencia de las personas en sociedad.
Sin duda, la importancia de ellos viene por las ventajas que ofrecen,
ya que los tribunales no satisfacen la verdadera necesidad de proporcionar
una justicia rápida y de lo posible gratuita, sus procedimientos son lentos y
complicados que permiten que los juicios se alarguen con mil incidentes y mil
dificultades; los jueces no tienen siempre la competencia jurídica que las
partes desean en la persona a cuyo fallo someten y carecen, por regla
general, de conocimientos especiales.
De allí se puede afirmar que los Medios Alternativos de Solución de
Controversias, desde su efectiva implementación están representando para
las personas un alivio en sus disputas, principalmente en lo referido a la
utilización intensiva del Arbitraje, que como se sabe existen en este momento
varios Centros de Arbitraje y Conciliación. Una intensa divulgación de los
medios de Resolución Alternativa de Disputas, y la conformación de una
conciencia de resolución de los conflictos estoy seguro que llevarán a una
disminución de las desavenencias, y si estas existen la solución estará dada
precisamente por la utilización de estos métodos.
En síntesis, se tiene que luego de hacer un estudio de los métodos
alternativos de resolución de conflictos, se puede decir que son sumamente
importantes, sobretodo en una sociedad minada de problemas de todo tipo,
en la cual el acceso a la justicia se hace sumamente difícil por razones de
comodidad, economía e incluso moralidad, ya que, los mismos se presentan
como una excelente alternativa para resolver de manera pacífica y sencilla
cualquier disputa que se presente. De lo que se trata, en definitiva, es de
hacer que las controversias se expresen dentro de unas determinadas
coordenadas de racionalidad. Lo cual, pasa necesariamente por la
institucionalización del conflicto, es decir, por su regulación.
Uno de los objetivos de recurrir a los medios alternos de solución de
conflictos, según Escobar, R. (1993) es aliviar al órgano del Poder Judicial
de la pesada carga procesal que soporta. Por ello se buscan filtros que
eviten que todos los conflictos lleguen al órgano jurisdiccional, procurando
que exclusivamente aquellas controversias que así lo requieran, por su
complejidad o por los bienes jurídicos que estén de por medio, sean
conocidas por el Poder Judicial.
La carga procesal excesiva hace que el Poder Judicial descuide —sin
quererlo— asuntos de suma importancia y que no administre justicia de
manera adecuada, oportuna y eficiente. Aliviarlo de ese exceso de carga
podría ayudar, en alguna medida, a que este Poder del Estado pueda
dedicarse a sus tareas primordiales de mejor manera, con los
correspondientes réditos en favor de su propia imagen.
Evidentemente, los medios alternativos son una práctica milenaria. Sin
embargo, su relevancia actual se debe en gran medida a la
reconceptualización de los conflictos y del proceso pacificador para que
proporcione mayores beneficios para los involucrados y se adecue más a las
exigencias y posibilidades del mundo contemporáneo.
Generalmente los medios alternativos consisten en diversos
procedimientos mediante los cuales las personas pueden resolver sus
controversias sin necesidad de una intervención jurisdiccional. De esta
argumentación se afirma que el litigio debe ser la última escala en la solución

de la controversia; y que los tribunales sean la última instancia a la cual


acudir; el proceso, el último de los instrumentos con que combatir.
En tanto que, de acuerdo con la concepción tradicional, los medios
alternativos son un proceso de regateo o un enfrentamiento mediante el cual
se trata de someter a la contraparte, pues las ganancias de uno se obtienen
a expensas del otro, cuando se repiensa el tema como un proceso conjunto
de resolución de problemas, se percibe que eso no es necesariamente el
caso: que es posible que ambas (o todas las) partes "ganen" en la medida en
que logren satisfacer sus principales intereses. De hecho, cuando ello ocurre,
cuando no hay vencedores ni derrotados, las partes ganan doblemente.
La misión fundamental de los medios alternos de solución de conflicto
está en procurar de manera permanente la resolución de los problemas cuya
competencia le corresponda, por vía principalmente de la Conciliación, la
Transacción o el Arbitraje y en caso de agotamiento de estas vías, resolver
de acuerdo a la equidad, tratando de ejercer un control social positivo,
mediante la búsqueda de un arreglo entre las partes involucradas en algún
conflicto.

Papel de la Defensoría Agraria como ente conciliador en los conflictos


agrarios
La defensa agraria tiene las facultades que la antigua Ley Orgánica de
Tribunales y Procedimientos Agrarios otorgaba a los Procuradores Agrarios.
Entre ellas, el artículo 37, literal b, mencionaba el intervenir en los actos
judiciales o extrajudiciales donde fueren solicitados para la defensa de los
sujetos protegidos por esa Ley. La vigente Ley Orgánica de la Defensa
Pública establece que corresponde a los Defensores o Defensoras con
competencia en materia Agraria actuar en los procedimientos administrativos
y extrajudiciales para asistir en tales procedimientos a los beneficiarios o
beneficiarias de la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario y, especialmente, para
la solución de conflictos a través de los medios alternativos. Esto lo establece
el artículo 51, ordinales 4 y 5, de la Ley en comentario.

En este sentido, se debe señalar que la transacción, la mediación y la


conciliación son medios alternativos de solución de conflictos, tal como lo
señala la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, por cuya
razón la Defensoría Agraria tiene competencia para promover la solución de
los conflictos de intereses en los cuales por lo menos unos de los
interesados sea un sujeto beneficiario de la Ley de Tierras y Desarrollo
Agrario.
Por tanto, los defensores agrarios están facultados sin necesidad de
acudir ante los Tribunales de la República para componer tales conflictos
intersubjetivos mediante uno cualquiera de tales medios alternativos y
cuando logran tal cometido el acta que recoge el acuerdo, conciliación o
transacción tiene la naturaleza de un documento autentico, es decir, un
documento público administrativo porque en su formación intervino un
funcionario público en ejercicio de una competencia que le está legalmente
atribuida y al ser homologado dicho instrumento por una autoridad judicial
adquiere la misma fuerza que la cosa juzgada como lo dispone el artículo
1718 del Código Civil y el artículo 262 del Código de Procedimiento Civil para
el caso de la conciliación.
En materia civil la conciliación se hace ante el Juez de la causa y su
efecto es extinguir el proceso; en materia agraria la conciliación puede
hacerse ante la oficina de la Defensoría Agraria en cuyo caso su efecto es
poner fin al conflicto intersubjetivo precaviendo un futuro litigio, largo y
dispendioso por la estructura natural que genera todo proceso judicial.
La conciliación en principio no requiere de homologación del Tribunal y
ello se infiere de las normas del Código de Procedimiento Civil relativas a la
conciliación que, a diferencia de las que regulan la transacción, el
convenimiento y el desistimiento, nada dice de un acto de homologación
judicial. A la misma conclusión se llega al comparar la redacción de los
artículos 194 y 195 de la Ley de Tierras; el primero exige la aprobación de la
transacción por el Juez Agrario; el segundo, en cambio, simplemente prevé
una instancia a las partes por el juez para que concilien sin prevenir que el
acuerdo deba homologarse.
Comoquiera que únicamente es posible conciliar en materias en las
cuales sea posible transigir si una de las partes del acuerdo incumple sus
obligaciones la otra puede pedir su ejecución ante el Juez Agrario el cual
antes de admitir verificará que la conciliación trate de materias no prohibidas
por el legislador. Por ejemplo, un acuerdo mediante el cual el adjudicatario
de tierras del Instituto Nacional de Tierras (INTI) acuerde traspasar ese
predio a otra persona a cambio de una suma de dinero sería contrario al
artículo 12 de la Ley de Tierras por lo que la conciliación o transacción
extrajudicial que pretendiera ejecutarse no sería admisible.
Es importante señalar que la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario, dá
los mecanismos para que las partes puedan llegar a un acuerdo amistoso, en
este sentido, se encuentra el artículo 153 de la citada ley que invoca lo
siguiente:

…El juez agrario competente, de oficio o a instancia de parte,


podrá acordar en cualquier estado y grado del proceso, la
realización de una audiencia conciliatoria como mecanismo de
solución alternativa del conflicto, quedando a salvo el
cumplimiento previo de las formalidades y requisitos que la
legislación exige para la homologación de acuerdos sobre los
intereses públicos.
Ahora bien, y dado que le fue conferido rango constitucional a los
medios alternos para la resolución de conflictos, medios ampliamente
desarrollados por distintas legislaciones, fundamentalmente las atañen al
denominado fuero social, como el agrario y laboral; la audiencia conciliatoria
resulta una clara manifestación de los principios de inmediación, celeridad y
economía procesal, se observa como la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario,
le confirió al Juez Agrario la potestad para aproximar a las partes en
conflictos a la posibilidad de resolver sus divergencias mediante el alcance
de un acuerdo o transacción.
El objeto de una audiencia oral, cuyo requisito fundamental es la
previa citación de ambas partes para que comparezcan antes el juez y
lógicamente su disponibilidad de llegar a una solución; radica en restablecer
el equilibrio jurídico que pudo verse alterado entre las mismas, sin que dicho
acuerdo prive sobre el interés social y colectivo, que en todo caso deberán
privar sobre los intereses particulares en contención.
De igual manera es importante advertir, que el rol del juez agrario
debe circunscribirse a simplemente facilitar la celebración de la audiencia y
mediar en todo lo posible el avenimiento suscitado entre las partes, como
una parte imparcial y de buena fe, estándole vedado emitir opinión sobre
aquellos aspectos que constituyan el fondo de la controversia, ya que
inadvertidamente pudiera adelantar opinión sobre el mérito de la causa.
Asimismo, se debe señalar, que es potestativo del juez agrario, acordar la
celebración de la audiencia oral y pública en cualquier estado y grado del
procedimiento.

Bases Legales

Constitución de la República Bolivariana de Venezuela


La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela en el último
parágrafo del artículo 253 deja por sentado que

El Sistema de Justicia está constituido por el Tribunal Supremo de


Justicia, los demás tribunales que determine la ley, el Ministerio
Público, la Defensoría Pública, los órganos de investigación penal,
los y las auxiliares y funcionarios o funcionarias de justicia, el
sistema penitenciario, los medios alternativos de justicia…,

De la cita anteriormente mencionada se tiene que la Carta Magna,


señala la constitución del Sistema de Justicia venezolana, donde menciona
los órganos jurisdiccionales, los órganos penales, los funcionarios que la
integran e incluyen a los diferentes medios alternativos de justicia, los cuales
trabajando de forma coordenada y concatenada se puede hacer una mejor
justicia, para que exista la armonía entre los particulares así como en los
órganos judiciales y administrativos. Se puede decir, que hay una tendencia
positiva para evitar el conflicto o al menos a aminorar sus consecuencias.
Cada día menos personas quieren verse envueltos en pleitos. Los litigios
pueden traer atrasos prolongados, costos altos, publicidad no deseada y
enemistad.
Por su lado el artículo 258 aparte único de la referida Carta Magna,
dice: La Ley promoverá el arbitraje, la conciliación, la mediación y
cualesquiera otros medios alternativos para solución de conflictos. Esto
demuestra que los medios alternos de resolución de conflictos se encuentran
consagrado definitivamente en todos los procedimientos existentes en el país
y dejando ya por sentado constitucionalmente que deben ser utilizados por
las partes, los jueces y principalmente por los defensores los referidos
medios alternos.
Por otro lado, el artículo 268 de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela indica:

“La ley establecerá la autonomía y organización, funcionamiento,


disciplina e idoneidad del servicio de defensa pública, con el
objeto de asegurar la eficacia del servicio y de garantizar los
beneficios de la carrera del defensor o defensora”
El citado artículo, consagra la existencia del Sistema Autónomo de la
Defensa Pública y de una ley que lo rija de manera exclusiva para que
pueden defender los intereses individuales, colectivos o difusos, por lo que
se ordena formalmente su promulgación en la Disposición Transitoria
Cuarta, Ordinal Quinto, Párrafo Segundo, de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela que establece:

“Dentro del primer año contado a partir de su instalación, la


Asamblea Nacional aprobará: Quinto: Una ley orgánica sobre
la defensa pública. Hasta tanto no se sancione dicha ley, la
comisión de funcionamiento y reestructuración del sistema
judicial estará a cargo del desarrollo y operatividad efectiva
del Sistema Autónomo de la Defensa Pública, a los fines de
garantizar el Derecho a la Defensa.
De lo anteriormente citado se observa que la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela, plasma el deber de la creación de una
Ley Orgánica Sobre la Defensa Pública, era un compromiso
constitucional que fue hecha ley en el año 2008, cuando entra en vigencia la
norma legal y que hoy por hoy ha servido de gran ayuda para aquellas
personas que no tienen como costear un litigio judicial.

Ley Orgánica de la Defensa Pública (2008)


Esta norma jurídica entro en vigencia el 22 de septiembre del 2008 y
nace para llenar el vacío legal que existía en la materia objeto de estudio,
y establece los principios, normas y procedimientos para el desarrollo y
garantía del derecho constitucional de toda persona de acceder a los
órganos de administración de justicia para hacer valer sus derechos e
intereses legítimos y garantizar el derecho a la defensa en cualquier
procedimiento judicial o administrativo. Es por ello que otorga amplias
competencias a los defensores públicos. En materia agraria el artículo 51
establece:

Artículo 51 Atribuciones de los Defensores Públicos o Defensoras


Públicas con competencia en materia Agraria para actuar en los
procedimientos administrativos y extrajudiciales Son atribuciones
de estos funcionarios o funcionarias las siguientes:
1. Orientar y asesorar en la materia de su competencia.
2. Garantizar el derecho a la defensa de los destinatarios y
destinatarias de la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario, las leyes
especiales referidas a la materia para proteger a quien solicite
expresamente la asesoría legal, o cualquier otra actividad de
apoyo jurídico.
3. Asesorar y atender a los beneficiarios o beneficiarias de la Ley
de Tierras y Desarrollo Agrario, en todo lo referente a la materia
agraria y afines con ésta.
4. Asistir en los procedimientos administrativos o extrajudiciales a
los beneficiarios o beneficiarias de la Ley de Tierras y Desarrollo
Agrario.
5. Asistir a los beneficiarios o beneficiarias de la Ley de Tierras y
Desarrollo Agrario, ante lo s órganos administrativos y
extrajudiciales, para la solución de conflictos a través de medios
alternativos.
6. Practicar inspecciones de campo y de la agronomía en los sitios
requeridos, y levantar las actas correspondientes, con apoyo de
profesionales calificados en la materia agrónoma, cuando la
complejidad del caso lo requiera

Este artículo muestra de manera detallada la amplia competencia y


atribuciones que le otorga la Ley Orgánica de la Defensa Pública a los
Defensores Públicos o Defensoras Públicas con competencia en materia
Agraria, esto con la idea que los derechos de los ciudadanos y ciudadanas
no se vena violentados o amenazados. En el numeral 5 de la citada norma se
observa que tienen la potestad de utilizar los medios alteros de resolución de
conflictos para solucionar los problemas presentados bien sea en el ámbito
administrativo o en el ámbito judicial.

Ley de Tierras y Desarrollo Agrario


En ella el legislador previó los medios alternos de resolución de
conflictos tales como la conciliación, la mediación y arbitraje. Cuando se
habla de conciliación se está en presencia de un acto donde se pone de
manifiesto el acuerdo de voluntades entre las partes en conflicto incitados
por el Juez o un mediador. La mediación consiste en la búsqueda de una
solución al conflicto existente con la ayuda de un tercero; el cual funge como
facilitador no pudiendo éste intervenir directamente.

Al hablar del arbitraje se hace referencia a la capacidad que tienen los


individuos de resolver sus propios conflictos con la intervención de un tercero
solicitando y consentido por ellos acatando la decisión del mismo. Ahora
bien, en la disposición finales de la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario,
ordinal tercero dispone de la creación de la Defensoría Especial Agraria, la
cual es ejercida por la Defensa Pública, Institución ésta que defiende los
derechos del campesino y campesina y que entre sus atribuciones de
conformidad con los artículos 51 y 52 de la Ley Orgánica de la Defensa
Pública permite a dichos funcionarios ejercer actividades de mediador para a
través de este mecanismo lograr la solución de los problemas del sector
campesino de una manera pacífica y extrajudicial permitiendo la agilización
de la justicia y el acceso a la misma de un mayor número de personas.
MOMENTO III

Metódica de investigación
Naturaleza o Enfoque de la Investigación

Falta

Diseño de Investigación
Falta

Tipo de Investigación
En relación, a la investigación planteada se estudió siguiendo los
lineamientos propios de la investigación documental descriptiva, por ser
éstos los más apropiados para plasmar el estudio de los problemas jurídicos-
sociales. En las ciencias sociales, la investigación documental es de gran
relevancia para el estudio de los problemas de tipo jurídico con la
incorporación de un diseño de tipo bibliográfico y así lograr analizar el
objetivo general, utilizando para el logro de los objetivos planteados. En este
sentido, se debe tomar en cuenta lo señalado por Arias (2011), que la define
como:

“Un análisis detallado de una situación específica, apoyándose


estrictamente en documentos confiables y originales. El análisis
debe tener un grado de profundidad aceptable; ámbito del tema,
criterios sistemáticos-críticos, resaltar los elementos esenciales
que sean un aporte significativo al área del conocimiento”. (p.79).

Para precisar una metodología capaz de abordar una investigación en


el campo del Derecho, requiere tomar en cuenta las diferentes circunstancias
de la citada ciencia, representada por un aspecto normativo, de tal forma que
el problema jurídico se fundamentó en las fuentes formales, por tanto, se
utilizaron basamentos legales referidos al objeto de estudio y para ello, el
nivel de investigación, estuvo basado en una Investigación Descriptiva, la
cual consiste en la caracterización de un hecho, fenómeno, individuo o
grupo, con el fin de establecer su estructura o comportamiento. Los
resultados de este tipo de investigación se ubican con un nivel intermedio en
cuanto a la profundidad de los conocimientos se refiere.
El Área de Estudio se encontró fundada en Doctrinas Vigentes,
Textos, Constitución, Legislación, Jurisprudencias, Trabajos Especiales de
Grado, Informes, Registros Anecdóticos, Leyes y Códigos que contribuyan a
la adquisición de información valiosa (aportes) para la investigación,
utilizados para recolección de datos y verificación de su validez. De igual
manera, será de gran utilidad al acceso a los medios electrónicos como
herramienta fundamental para la obtención de informaciones recientes
alusivas al tema de investigación.

Población y Muestra

Falta

Informantes Claves

Falta

Técnica de Procesamiento y Análisis de la Información

Falta
Triangulación e Interpretación

Falta

La Validez y la Confiabilidad o Fiabilidad de la Investigación (Rigor)

Falta

Credibilidad de los Resultados

Falta

Técnicas e Instrumentos de Recolección de Información

En este tipo de investigación existen numerosas técnicas para


obtener información acerca del problema propuesto. Tomando las palabras
de Arias, F. (2011) señala que: La aplicación de una técnica conduce a la
obtención de información, la cual debe ser guardada de manera que los
datos puedan ser recuperados, procesados y analizados e interpretados
posteriormente. A dicho soporte se le denomina instrumento. (P. 69). Es por
esto, en el presente estudio se utilizaron las siguientes:
a) Recolección de Información Relacionado con el Tema.
b) Técnica del Subrayado, para resaltar los aspectos más importantes.
c) Técnica del Fichaje, para obtener los datos bibliográficos de los textos
utilizados.
d) Análisis de los Datos obtenidos a través del subrayado y del fichaje.
Con relación a los instrumentos, se utilizaran los siguientes: La
entrevista, libretas, computadoras, dispositivos como pendrive, grabadora de
audios, cámaras, textos legales, leyes, códigos, entre otros instrumentos que
se hicieron necesarios para el desarrollo del trabajo.

Fases de la Investigación

De acuerdo con la modalidad de la presente investigación, ésta se


cumplió a través de las siguientes fases:
Fase I, Se realizó una revisión y recolección de información
bibliográfica de documentos tales como: textos, leyes, códigos,
jurisprudencias, doctrinas, documentos, revistas, tratados internacionales,
internet y todos aquellos que ofrezcan información referente al tema de
estudio; para ello se utilizaron la técnica de fichaje para almacenar las
fuentes consultadas las cuales darán fundamento a la investigación.
Fase II, Una vez recolectada la información relacionada con el tema
objeto de la investigación, se procedió a organizar dicha información para su
debida organización.
Fase III: La autora mediante una lectura reflexiva, sistemática, se
orientó con los componentes en que se presentaron el objeto de estudio,
determinándose el enfoque de la investigación.
Fase IV, Finalmente se realizó el esquema de contenido del Trabajo
de Investigación. Para terminar plasmando las conclusiones,
recomendaciones y si es posible los anexos relacionados con la investigación.
MOMENTO V

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

Conclusiones
Con base a las consideraciones esgrimidas en el desarrollo capitular,
se hace preciso concluir que:

La participación directa de la gente en la toma de decisiones para la


solución de sus problemas, crea una nueva relación ciudadana que en el
ámbito de los derechos sociales, desarrolla la triada solidaria entre sociedad y
el Estado, lo que coloca al legislador y a los órganos que integran el sistema de
justicia, en un nuevo espacio de interpretación de la democracia social y del
estado de Derecho y de Justicia. Es así como se incorpora de forma activa a la
nueva normativa legal, los Medios Alternativos para la Resolución de
Controversias, todo ello con el objeto de que el Estado los fomente y
promueva sin perjuicio de las actividades que en tal sentido puedan desarrollar
las academias, universidades, cámaras de comercio y la sociedad civil en
general.

Con la vigencia del nuevo orden constitucional, en Venezuela


cambiaron los conceptos y principios procesales establecidos, estos son un
conjunto de reglas mínimas a las que debe estar sujeto un procedimiento
judicial, que garantice a las partes dirimir sus conflictos y reclamar sus
intereses legítimos, atendiendo a la norma jurídica procesal, asegurando a
los actores del litigio los derechos como el debido proceso, la legítima
defensa, la igualdad de las partes, la economía procesal, entre otros. Es por
ello que el artículo 258 de la carta magna establece en su parte in fine que la
ley promoverá el arbitraje, la conciliación, la mediación y cualesquiera otros
medios alternativos para la solución de conflictos.

En cuanto a los medios alternos de solución de conflictos en el


derecho agrario venezolano, se tiene que ellos son medios de resolución,
que pueden utilizarse solamente si las partes acceden al empleo de los
mismos y si con ellos se llega a una solución que no sea impuesta por
ninguna de ellas. Se trata pues de métodos de resolución convenidos e
igualitarios acorde con los postulados de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela que en su artículo 257 prevé la simplificación,
uniformidad y eficacia de los trámites y la adopción de un procedimiento
breve, oral y público no sujeto a formalidades rigurosas y reposiciones
inútiles y el artículo 258 ejusdem, promueve el uso en los procesos del
arbitraje, la conciliación, la mediación y demás medios alternativos de
solución de conflictos, esto demuestra que es la propia Constitución la que
ampara y reconoce el uso de éstos mecanismos.

Los medios alternos de solución de conflictos guardan su importancia


ya que permiten acelerar los procesos, que sean menos traumáticos, y se dá
por cumplido lo establecido en la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela en cuanto la brevedad, sin limitaciones, sin restricciones
indebidas, cuidando los principios de la prioridad absoluta, el debido proceso
y el derecho a la defensa. Ya que al utilizar los medios alternos de resolución
de conflictos, todo se resolvería de forma expedita y por supuesto pacífica,
ahorrándose así un proceso tardío, lleno de formalidades, lo que se
convertiría en una injusticia, en virtud de que un juicio lento se convierte en
una injusticia lleno de vicios.
Los métodos o medios alternativos de solución de conflictos son
mecanismos que surgen como una herramienta paralela a la administración
de justicia estatal para resolver los conflictos que se presentan en la
sociedad. La jurisdicción agraria prevé medios de resolución de conflictos,
así como la creación de las Defensorías Especializadas en Materia Agraria, a
los fines de brindar protección a los pequeños y medianos productores
garantizándoles la defensa gratuita a todos los ciudadanos y ciudadanas que
se encuentren dentro del territorio venezolano y que realicen una actividad
agroproductiva.

Recomendaciones

Después de plasmadas las conclusiones, la investigadora cree


necesario recomendar lo siguiente:

Se recomienda que se le dé el uso y realce a los medios de resolución


de conflictos, a los fines de que las partes puedan llegar a un mejor acuerdo
y no tengan que esperar un proceso en vía judicial que por lo general son
lentos, llenos de formalidades y traumáticos para la parte perjudicada.

Que los defensores y defensoras agrarias al presentársele un caso en


su materia o área, se avoquen a poner en práctica los diferentes medios
alternos de resolución de conflicto, con el fin de que las partes lleguen a un
feliz acuerdo sin que tengan que pasar por un litigio judicial que va es a
causarles gastos innecesarios.

Que los estudiantes y profesionales del derecho, revisen las


sentencias emanadas el Tribunal Supremo de Justicia, para estar al día con
las mismas, para conocer los cambios o reformas que pudieran beneficiarlos
en cuanto al tema mencionado y estudiado anteriormente; todo ello con la
finalidad de mantenerse actualizado con la doctrina y las jurisprudencias del
país.
Es necesaria la buena voluntad existente entre las partes, es muy
difícil conseguir una manera de contrarrestar esto porque en términos
generales, si los ciudadanos no ponen de su parte los conflictos terminarían
inevitablemente en las salas de los tribunales o peor aún las partes tomarían
justicia por sus propias manos. Una solución posible a este hecho, sería que
se propagara mayor información acerca de los centros que presten este tipo
de ayuda y que se asesorara a los ciudadanos de manera tal que, pongan
de su parte y comprendan que dichos medios alternativos resultan
beneficiosos para todos.

Debe quebrarse la errónea creencia de que la vía judicial es la única


manera de resolver las disputas, pues solamente variando esa manera de
pensar el Poder Judicial dejará de ser el lugar por donde comienza el
proceso de solución, para pasar a ser el reducto final al que pueda recurrirse
cuando las alternativas (no judiciales) no sean viables. La idea es que la vía
judicial se reserve para los conflictos que no admitan soluciones total o
parcialmente consensuales.

Se hace necesario cambiar la cultura de litigio que tienen todos los


ciudadanos y ciudadanas en el país. Por eso se hace necesario que en todas
las escuelas desde los más pequeños hasta los más adultos en las
universidades apliquen técnicas de negociación, conciliación, y mediación
con carácter especializado y así hacerlo saber a aquellas personas que se
encuentran en el campo trabajando la agricultura.

A los colegios de abogados de cada estados, se les insta a que dicten


cursos, talleres, jornadas y diferentes charlas dirigidos a las comunidades,
para que sus integrantes tengan el conocimiento que dentro del proceso
puedan llegar a una conciliación y así no tener que esperar una Sentencia
Definitiva.

Es necesario efectuar una mayor difusión de las ventajas y grandes


beneficios que proporcionan los medios alternos de solución de conflictos, a
todo nivel, incluyendo programas teórico prácticos en las escuelas,
universidades, institutos técnicos, organizaciones públicas y privadas, y en
general a toda la población, a fin de ir creando una nueva cultura en las
relaciones interpersonales e inter-organizacionales, basada en principios de
colaboración, participación y entendimiento, como cimientos de una “Cultura
de Paz”.
Que la institución agraria se dedique a formar funcionarios
conciliadores especializados que se adscriban no sólo en Oficinas centrales
sino en delegaciones y residencias. No se propone que se contrate más
personal, sólo que se identifique y seleccione al mismo, que reúna el perfil
más adecuado, para después de un programa de capacitación amplia y
continua, se les incorpore como mediadores conciliadores de tiempo
completo.
REFERENCIAS

Arias, F. (2011). El Proyecto de Investigación. Guía para su elaboración.


Caracas: Editorial Episteme Orial Ediciones.

Andujar, S. (2012). Cosas, bienes y derechos reales. Derecho Civil I.


Universidad Católica Andrés Bello. Caracas. Venezuela.

Balzar (1986). El Nuevo Proceso Agrario Venezolano. Editorial hermanos


Vadell. Valencia Venezuela.

Bautista, F. (1997). Historia de la Filosofía del Derecho. Tercera Edición.


Editorial Hermanos Vadell.

Brinz, J. (2006). Derecho Civil. Teoría Práctica. Tomo II. Derechos de Cosas.
Caracas - Venezuela.

Calvo, E. (1999). Código Civil Venezolano Comentado y Concordado.


Caracas: Ediciones Libra.

Código Civil de Venezuela. (1982) Gaceta Oficial Nº 2990 extraordinario. 26


.de Julio de 1982.

Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999). Gaceta Oficial


Nro. 36.680. 30 de diciembre de 1999.

Duque, R. (2001). Aportes para la Ley de tierras. Editora y Distribuidora “El


Guay”. S.R.L. Caracas. Venezuela.

Duque, R. (2001). Derecho Agrario. Instituciones. Tomo II. Editorial Jurídica


Alva, S.R.L. Caracas. Venezuela.

Escobar, R. (1993) La Conciliación en el Proceso Contencioso


Administrativo en La Protección Jurídica del Ciudadano. Estudios en
homenaje al Profesor Jesús González Pérez. Tomo III. Civitas. Madrid

Febres. (2012) El Derecho Agrario, publicaciones ONAP, PP.24-25.

Fernández, (1994) Para qué sirven los filósofos y sus teorías. Editorial
Cataratas. Madrid.

Gaceta Oficial Nro. 37.475. de Fecha 01-07-2002. Ley de Expropiación por


Causa Utilidad Pública o Social (LEXP)
Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N°. 5.930.
Extraordinaria del 04 de Septiembre (2.009), “Ley de Reforma Parcial del
Código Orgánico Procesal Penal”. Caracas-Venezuela.

Gaceta Oficial Nº 39.021, de fecha 22 de septiembre de 2008. Ley Orgánica


de la Defensa Pública. Caracas Venezuela

Garcia, L. (2012). Curso sobre juicios de la posesión y de la propiedad.


Editorial “El Guay” S.R.L. Caracas. Venezuela.

Gómez, D. (2006). Legislación Agraria Venezolana. Instituto Agrario


Nacional. Compilación e Índice Temático elaborado por su autor.
Gráficas Kemprolit, C.A.

Linares, J. (2004); El Proceso Civil como Instrumento de Justicia, de acuerdo


a lo establecido en el artículo 257 de la Constitución de la república
Bolivariana de Venezuela. Trabajo de grado para optar al titulo de
Abogado. Universidad Bicentenaria de Aragua. Apure - Venezuela.

Lara, C. (2015) Diferentes modos de autocomposición procesal y los medios


alternos de resolución de conflictos como una alternativa de culminación
del proceso según el ordenamiento civil venezolano. Tesis para optar al
título de Especialista en Derecho Procesal Civil. Universidad Bicentenaria
de Aragua. Maracary-Aragua.

Ley de Tierras y Desarrollo Agrario. Gaceta Oficial N° 37.323 del 13 de


Noviembre de 2001.

Núñez, E. (2013), El Arbitraje Civil como Medio Alternativo para la Solución


de Conflictos entre Particulares. Trabajo de grado para optar al título de
Abogado. Universidad Bicentenaria de Aragua. Apure - Venezuela.

Páez, (2007), Los Medios Alternos de Resolución de Conflictos. Editorial


Jurídica Alva, S.R.L. Caracas. Venezuela.

Parili O., (1.992) El Contrato de Transacción y otros Modos Extraordinarios


de Terminar el Proceso. Mobilibros, Caracas - Venezuela.

Perdomo, R (2013); La Mediación en Venezuela. Universidad de Carabobo


Trabajo de grado para optar al título de Magister en Derecho procesal
Civil. Valencia - Venezuela.
Roques (1981). Importancia de la Conciliación como Alternativa pata Dirimir
Conflictos Civiles. Trabajo de grado para optar al título de Abogado.
Universidad Bicentenaria de Aragua. Apure - Venezuela.

Sánchez, J. (2014). La Conciliación como mecanismo apropiado para la


solución de los conflictos en el núcleo familiar. Trabajo de grado para
optar al título de Especialista en Derecho Civil. Universidad Bicentenaria
de Aragua. Apure - Venezuela.

Salas-Barahona, (1981) El Derecho Agrario y las ciencias afines en Derecho


Agrario, 2da. Edición.

Solano, (2015) El Positivismo, ideología de la Sociedad Industrial. Editorial


Libra. Valencia Venezuela.

También podría gustarte