Tatuajes, Pintaderas y Espiritualidad de Los Antiguos
Tatuajes, Pintaderas y Espiritualidad de Los Antiguos
Tatuajes, Pintaderas y Espiritualidad de Los Antiguos
El tatuaje es uno de los ritos más ancestrales de la cultura amazigh. Sus orígenes se
remontan a la época pre-islámica y hunden sus raíces en la noche de los tiempos. Dentro
del mundo amazigh, el tatuaje está vinculado a un conjunto de ritos paganos y mágicos.
Estas creencias perduran todavía en las costumbres del mundo rural de la Tamazgha.
Desde el Neolítico, en el norte de África, las tribus nómadas amazigh han usado los
tatuajes para identificar a los miembros de las distintas tribus por sus diseños, a menudo
en la cara, además de otros tatuajes con simbolismo mágico-religioso o curativo.
Los antiguos libios aparecen tatuados en las representaciones que se hace de ellos en las
tumbas egipcias. Entre los tatuajes que aparecen está el símbolo de la Diosa guerrera
Neith. Una diosa que luego pasaría a Grecia con el nombre de Atenea. El tatuaje en el
muslo del primer libio es dicho símbolo, dos arcos entrecruzados
Guerreros libios representados en una tumba egipcia. Las cruces son tatuajes
protectores y el tatuaje en la pierna del primer libio es el primitivo símbolo de la diosa
Neith.
Los tatuajes amazigh se colocan frecuentemente cerca de los orificios del cuerpo (ojos,
boca, nariz, ombligo, vagina) o en sitios vulnerables a las maquinaciones del mal. Los pies
de las mujeres, por ejemplo, se protegen con tatuajes para impedir que los jenum intenten
entrar en el cuerpo a través de la tierra.
Tatuajes amazigh para las piernas (ahdjdjdam eddarr) de Marruecos, ca. 1920. Una anciana contaba que una mujer sin un tatuaje que marcara
su talón izquierdo no tendría hijos. Las mujeres amazigh tambien se tatuaban ellas para salvaguardar contra las influencias malignas que podían afectar la
vida de sus hijos.
Las mujeres eran las madres y guardianas, estaban obligadas a hacer "todas las tareas que
tienen que ver con proteger las cosas que crecen y florecen, y que son verdes y tiernas. Es la
obligación de la mujer velar por el crecimiento de los niños y de las crías de animales". Por
ello son vistas como susceptibles a las influencia de los espíritus malignos que podían
robar la vida de sus hijos tan fácilmente como la de su marido.
El tatuaje llamado "el-Ayacha" ("que da la vida") todavía se practica en las zonas rurales.
Las mujeres protegen a sus hijos de la mala suerte y la desgracia pintándoles de negro la
frente con carbón. Solemos encontrar esta práctica cuando el día del nacimiento del niño
coincide con un evento adverso.
Pinturas protectoras contra los jenum
Dentro de la complejidad de los diseños, algunas formas particulares, como cruces u otras
puntiagudas, son mágicas y tienen el poder de acabar con el mal de ojo. El tatuaje de una
cruz en la nariz, debajo de los labios o en el dedo índice de la mano derecha, se hace para
preservar la vida del niño cuando los hermanos mayores habían muerto poco después de
nacer.
Pero el elemento cruciforme tiene un significado mucho mas profundo asociado a la idea
de que el símbolo dispersa la energía maligna en las cuatro direcciones del viento, y
previene, de esta forma, que el sujeto sea agredido por dicha energía. Este tatuaje
cruciforme puede apreciarse en los brazos de los antiguos guerreros libios representados
en los monumentos Egipcios de hace 10.000 a 12.000 años.
Históricamente la función del tatuaje entre los imazighen ha sido múltiple: puede tener
tanto un efecto protector y mágico, como decorativo, identitario o médico. Tatuajes con
características muy geométricas o de virtudes mágicas en los tobillos, manos y caras alejan
el mal y atraen la buena suerte y éxito. En el Sahel, el tatuaje tiene virtudes curativas
contra enfermedades como el dolor de cabeza o la artritis, actuando a medio camino entre
el exterior y el interior del cuerpo, o para proteger a los niños de los demonios jinn.
Mujer Tuareg con pinturas rituales nupciales. La cruz del rostro representa la diosa y su
carácter creador. El símbolo es conceptualmente el mismo que se encuantra en el
Bentaiga en Gran Canaria y representa a la estrella Canopo conceptualizando el mito de
la creación
Grabado del Bentayga en el que aparece el símbolo de la creacion, es decir del caracter
creador de la divinidad. El simbolo hace referencia al mito de la creación en el que surgen
los cuatro elementos, fuego, tierra, agua y aire. Es el mismo concepto que se pintan las
mujeres tuareg como pintura nupcial en la imagen de arriba
En la región del Aures, en Argelia, los Chaouian tatúan pequeñas formas romboidales entre
los ojos de los niños para impedir el mal de ojo. Un tatuaje en forma de rueda es usado
contra el cáncer. Este tipo de formas romboidales reflejan el mal de vuelta a la persona que
lo envió y era tatuado en los brazos o en la frente de las mujeres. También se usaban
bordadas en las mantas que se colocan debajo de las sillas de montar, muchas veces
formando hileras en los bordes rodeando la pieza, o en las alfombras.
Dos mujeres amazigh Chaouian de Argelia, ca. 1916. Algunos de los motivos tatuados son la "estrella", el "sol", "cadenas de hierro", "palmera" y la "boca
del estomago". Este último motivo mantiene la fertilidad y protege alombligo de los jenum.
Además de su carácter mágico y curativo el tatuaje también se usaba para señalar el estatus
social de la persona. Cuando la chica alcanzaba la pubertad, generalmente entre los 11 y los
14 años - al tiempo de venirle la primera regla - sus madres, tias y amigas de la familia
comenzaban a tatuarla marcando la transición a su condición de mujer. En el Rif se
practicaba el tatuaje como un requisito previo para el matrimonio. Cuando una
chica estaba segura de que se iba a casar y cuando todos los arreglos para su boda
habían sido hechos, la familia llamaba a una anciana del mismo Aduar o de la tribu, que
era experta en el arte del tatuaje.
Entonces la vieja tatuadora empezaba a preparar el pigmento líquido con negro de carbón
y el jugo de hojas de haba. La tatuadora rompía la monotonía de los preparatorios
conversando y aconsejando a la novia. La tatuadora hablaba de los chismes locales, eventos
de interés, y sus propios puntos de vista sobre los hombres y la institución del matrimonio
que había adquirido a lo largo de su vida laboral con otras mujeres.
Tatuajes rifeños, ca. 1930. Cuando los tatuajes faciales consistían en formas cruzadas en la barbilla, el cuerpo también era tatuado, hasta el cuello o hasta
el abdomen, en un diseño continuo.
Por otro lado, el dolor por la muerte del marido en la guerra y la viudez de la mujer se
simboliza con un tatuaje en la barbilla que conecta cada oreja. De esta forma se simboliza
la muerte de la barba del marido. La barba, a su vez, simboliza la frondosidad, el vigor y la
abundancia. Este significado figurado de barba está recogido en el topónimo Tinamar, el
nombre nativo del pueblo de San Mateo en Gran Canaria, que significa la barba por la
abundante frondosidad de las tierras de aquella zona cubiertas de laurisilva en tiempos
precoloniales.
Los imazighen tatúan la frente, la barbilla, las mejillas, el dorso de las manos y las sienes
con pigmentos a partir de sustancias de origen vegetal, de carbón mezclado con agua o con
sangre. Uno de los pigmentos vegetales usados son las hojas de las habas. Las habas
también tienen un fuerte significado espiritual para los kabilios en Argelia. La semilla,
ancha y seca, es un símbolo masculino semejante a los huesos humanos. La semilla
desecada, después de enterrada en el suelo húmedo, se hincha y germina otra vez en
primavera. Simboliza el refugio del alma en espera de la resurrección o la reencarnación.
La mano humana - denominada khamsa es símbolo de la actividad creativa, el poder y la
dominación - también tiene propiedades mágicas para defender a los individuos del mal de
ojo y de los jenum. Las manos tienen cinco dedos, por tanto el número cinco tiene
propiedades mágicas para la protección contra las fuerzas del mal. La kahmsa tiene
muchas formas, especialmente en lo que a joyería y tatuaje se refiere, y puede ser
representada tanto de forma realista como abstracta, con sus dedos abiertos, desplegados o
cerrados. En Túnez, se tatúan en el dorso de la mano diseños abstractos reproduciendo
cuernos o proyecciones de los dedos para doblar su potencial protector.
Tatuajes para aumentar la capacidad protectora de las manos, Túnez, ca. 1920.
Dentro del tatuaje amazigh cada detalle tiene su propio simbolismo. El punto simboliza el
hogar, que es el centro de la casa. La luna creciente la materia que nace, crece y muere. La
espiral simboliza la armonía eterna. El círculo representa lo absoluto. El símbolo de la
palmera tatuada en la frente de la mujer Amazigh invoca a la diosa madre. La primera
línea vertical simboliza a Dios y la vida, así como la primera herramienta en la tierra
cultivada por el hombre. Dos líneas simbolizan la dualidad entre el bien y el mal que yace
latente en cada uno. El cuadrado es la representación de la casa.
Tatuajes faciales amazigh de Túnez, ca. 1920. La representación de Palmeras (nahla), a menudo en el mentón (siyâla), inducen la fertilidad. El origen
del símbolo es identificado con la diosa madre Tanit - Neith
Las ancianas amazigh todavía son capaces de saber la región de origen de una persona en
función del número de líneas en sus tatuajes. En la frente o en las sienes, representa una
identidad que puede asociarse a una tribu. Un mismo símbolo pueden tener significados
diferentes según el origen de la persona, o un mismo concepto puede ser representado por
diferentes símbolos.
Las mujeres amazigh son las guardianas y herederas de las costumbres de una civilización
milenaria. Una costumbre que se ha mantenido a lo largo de los siglos a pesar de ir en
contra de la corriente principal del Islam tal y como es interpretado en muchos países.
Para los musulmanes el tatuaje ha estado prohibido durante mucho tiempo. En la cultura
musulmana es el símbolo de brujería, de tradiciones paganas, del pecado y de la
mutilación, ya que modifica de la obra de Dios.
Aunque haya perdido su antiguo significado mágico y social, el tatuaje actual retiene una
noción de compromiso con la comunidad, permitiendo a los amazigh otra forma más de
diferenciarse culturalmente de los árabes.
Aunque la parte ornamental ha sustituido desde hace algún tiempo el antiguo significado
mágico, el tatuaje siempre ha sido una costumbre entre las mujeres amazigh, lo mismo que
el adornarse con joyas, lo cual las diferencias también de otras mujeres musulmanas. El
tatuaje se usa como ornamento para hacerse más bella y deseable, ya sea con un sutil toque
de erotismo sugerente o para expresar sentimientos.
Algunas de las historias recuerdan a las historias de curanderas en Canarias. Por ejemplo
en Meknes, en el alto Atlas Marroquí, una mujer estaba en avanzado estado de embarazo.
Paso el día esperado del nacimiento sin dar a luz. Pasaron unas semanas y seguía sin dar a
luz. Para resolver el "problema" una mujer preparó una mezcla negra raspando el fondo de
un caldero, escupió en la mezcla y tatuó una cruz con una aguja en el tobillo de la mujer
para alejar al jenum que estaba impidiendo que diera a luz.
Otras creencias son que el olor de la sangre menstrual excita a los jenum, o que la vista de
un bebe hermoso los hace celosos, o que la reina de los jenum merodeaba a las mujeres
embarazadas para hacerlas abortar, o que Lalla Kandicha, un espíritu maligno, merodeaba
para hechizar a sus maridos. Algunas tatuadoras escupían en los tatuajes o en la mezcla
porque la saliva contenía "baraka" y el tatuaje no se infestaría. Algo que incluso la ciencia
moderna confirma, ya que la saliva humana es un poderoso desinfectante y cicatrizante.
Del libro "Tribal Tattoo Designs" de Maarten Hesselt van Dinter
Pero los jenum también tienen sus debilidades y pueden ser combatidos, entre otras
formas por medio de los tatuajes y la "baraka". El equivalente de los jenum continentales
en la tradición oral canaria es el concepto de abesan, o espíritus oscuros que se alimentan
del sufrimiento. La baraka también tiene un concepto equivalente en nuestra tradición oral
dentro del mundo espiritual de los antiguos.
La tradición oral también recoge que los antiguos canarios utilizaban símbolos para proteger los
distintos ámbitos de su sociedad, aunque la simbolizaría es más arcaica que la utilizada en el
continente. Es decir, aquí se puede rastrear el origen de los motivos que se utilizan en el
continente. En el papel de determinadas piedras, o el de determinadas aves, también encuentran una
correlación con la espiritualidad del continente y el significado otorgado a esos símbolos.
Símbolos de Marruecos
Algunos cronistas hablan de como los antiguos canarios se decoraban la piel y se pintaban.
La abundancia de pintaderas y su potencial interpretación como representación decorada
de signos del alfabeto líbico-bereber (tifinagh) fue recientemente apuntada por algunos
Tuareg y podemos relacionarla también con el uso mágico-decorativo de estas pintaderas
que concuerda con los tatuajes continentales "literales" que hemos mencionado.
Al igual que el tatuaje, la escarificación también es una forma de "marcar" el cuerpo con
sentido mágico-espiritual. Esta práctica que también esta documentada en el continente,
por ejemplo entre los kabiles. El cronista Martin y Cubas en 1694 apunta al uso de la
escarificación entre los antiguos canarios "labranle los brazos y pecho con pedernal
sajando la carne, y tal vez el rostro".