13 74 1 1398 Retos PDF
13 74 1 1398 Retos PDF
13 74 1 1398 Retos PDF
■ ■ ■■■ ■ ■
S
i bien no sabemos con certeza cuántas especies biológicas han existido en
la Tierra, sí tenemos claro que ninguna ha dejado una huella tan grande y
profunda como la nuestra, Homo sapiens. Sobre todo en el transcurso de los
últimos 300 años, la actividad humana ha tenido un impacto significativo en el
estado de salud del planeta. Hemos explotado los recursos naturales de una ma-
nera descuidada e irresponsable, al tiempo que hemos caído en prácticas dañinas,
incongruentes y con resultados devastadores.
Estamos viviendo el primer cuarto del siglo xxi y el panorama para la huma-
nidad es complicado. Enfrentamos numerosos y complejos problemas que no sólo
afectan nuestra vida, sino que incluso ponen en riesgo nuestra existencia. Entre
ellos, hay algunos que resultan particularmente relevantes y que constituyen los
temas medulares del presente artículo.
y hoy está por encima de 400 ppm. El CH4 también timos años el planeta ha sufrido una pérdida ace-
ha aumentado sus niveles de manera importante: de lerada de hábitats y especies debido a la actividad
0.5 ppm (antes de la Revolución Industrial) a 1.8 ppm humana.
(en la actualidad). Por su parte, la acumulación de Entre los principales factores que han provocado
cfc en la estratósfera es responsable de la destruc- esta pérdida de ecosistemas se encuentran el cam-
ción de la capa de ozono. Estos cambios han con- bio de uso de suelo –para tener más zonas urbanas,
tribuido, entre muchas otras cosas, al aumento de agrícolas o ganaderas– y la sobreexplotación de los
la temperatura media del planeta (calentamiento recursos. Se estima que desde 1990 se han perdido
global). más de 1.5 millones de km2 de bosque en el mun-
El cambio climático ha tenido fuertes repercu- do, lo que representa 46% de este ecosistema. El
siones ambientales –la acidificación de los océanos, caso más conocido es el de la región del Amazonas,
el retroceso de los glaciares, el deshielo ártico, las la cual ha perdido casi 20% de su extensión en los
inundaciones, la desertificación y el aumento del ni- últimos 50 años. En México, se ha perdido 30% de
vel del mar–, así como sociales –cambios en la pro- la vegetación y sólo la mitad del país mantiene su
ducción agrícola, pérdida de cosechas, aumento de diversidad vegetal original.
la desigualdad y la pobreza, migraciones y expansión Por otra parte, los manglares están desaparecien-
de enfermedades–. Las estimaciones recientes indi- do de tres a cinco veces más rápido que los bosques,
can que al final del presente siglo la temperatura y en los últimos 40 años se ha reducido a la mitad
promedio de la Tierra aumentará entre 2 y 4 °C con su cobertura original. Los arrecifes de coral y otros
respecto a la actual. Esto es grave, pues repercutirá ecosistemas marinos tampoco son ajenos a estos
de forma negativa en todos los aspectos de nuestra impactos. La Gran Barrera de Coral de Australia
vida y hará que más fenómenos meteorológicos ex- ha perdido más de la mitad de sus corales desde
tremos se presenten con mayor frecuencia. 1995, por lo que hoy tiene zonas que son auténticos
De mantenerse la tendencia actual, en tan sólo cementerios coralinos.
unas cuantas décadas el hielo ártico será escaso du- En el caso de la diversidad de especies, el panora-
rante el verano; grandes extensiones de bosques y ma es similar. Se estima que aproximadamente 40%
selvas serán consumidas por incendios naturales; de las especies vegetales se encuentran en peligro de
huracanes y tornados azotarán con más fuerza; las extinción, y que cerca de 30% de las especies de
sequías serán cada vez más frecuentes y prolonga- vertebrados e invertebrados están en la misma situa-
das. Científicos prominentes, como el sueco Johan ción. En los últimos 50 años, hemos perdido más de
Rockström, consideran que hemos alcanzado un es- 65% de las poblaciones silvestres y el planeta está
tado ambiental crítico a nivel global y que los próxi- siendo dominado por especies domesticadas (sólo
mos diez años serán fundamentales para determinar el 30% de los individuos de aves son silvestres, mien-
futuro del planeta y, sobre todo, el nuestro como espe- tras que sólo son silvestres 4% de los mamíferos).
cie. Debemos tomar medidas, globales e individuales, ¿Cómo nos afecta esta situación? La respuesta es
para revertir la contaminación y el cambio climático; simple: sin biodiversidad no podemos vivir. Los eco-
por ejemplo, una de las más importantes es reducir sistemas y las especies que los habitan tienen bene-
la emisión de gases de efecto invernadero: a la mitad ficios fundamentales para la humanidad. Pensemos,
dentro de una década y a casi cero para el año 2050. nuevamente, en los bosques. Ellos proveen un sinfín
de recursos naturales, como alimentos y productos
maderables, y brindan servicios al planeta, como la
La pérdida de ecosistemas y la biodiversidad producción de oxígeno, el secuestro de CO2, la regu-
La Tierra cuenta con una gran variedad de ecosis- lación de la temperatura ambiental, la generación de
temas y en cada uno de ellos existe una diversidad lluvia, además de que constituyen el hábitat de miles
biológica específica. Desafortunadamente, en los úl- de especies.
responsable del calentamiento global, junto con la muy grande. Esto nos lleva a uno de los obstá-
industria del transporte. culos para ser sostenibles en materia energética:
Hoy, el reto más grande no es lograr abastecer encontrar sistemas de almacenamiento que sean
nuestro consumo eléctrico, sino hacerlo de manera eficientes y asequibles. Actualmente contamos
sostenible. En las últimas décadas, entre la comuni- con diversas formas de almacenamiento, como
dad científica se ha hablado de las redes eléctricas las baterías, pero son una tecnología cara. De
del futuro, las cuales buscan integrar las llamadas hecho, aun cuando la luz solar es “gratuita”, hoy
energías limpias –solar y eólica– para reemplazar la resulta más barato producir un kilo vatio (kW) a
generación a partir de la quema de petróleo, carbón partir de una turbina de gas natural que producir-
y –en menor medida– gas natural. Si bien, en teoría, lo a partir de energía solar y almacenarlo en una
esta meta es plausible debido a la infinita capacidad batería. Más aún, las baterías tienen un ciclo de
de las energías renovables, hay dos retos importantes vida corto, debido a la degradación química que
que abordar: sufren por su uso.
■ El segundo problema que enfrentamos con res-
■ El primero concierne a un asunto técnico y se pecto al consumo sostenible de energía es de ín-
refiere a la disponibilidad de las energías reno- dole social. A la fecha sigue habiendo una lucha
vables. La luz solar y el viento se presentan de por parte de gobiernos y empresas privadas por no
manera intermitente; en cambio, nuestro con- disminuir el uso de energías contaminantes. De-
sumo de electricidad es continuo y bajo demanda. bemos entender que, por encima de intereses po-
A diferencia de otros bienes básicos, la electri- líticos y lucrativos, es necesario priorizar la salud
cidad se genera y se consume aproximadamente del ambiente. Poco a poco nos hemos dado cuen-
en el mismo instante, por lo tanto, el almacena- ta de que nuestra manera actual de generar elec-
miento de energías intermitentes es un desafío tricidad ha contribuido de manera significativa al
cambio climático. En 2015, 196 países firmaron
el Acuerdo de París con el objetivo de establecer
metas para reducir y, eventualmente, eliminar la
emisión de gases contaminantes. Este esfuerzo in-
ternacional es fundamental; sin embargo, exige
una inversión económica significativa por parte
de los gobiernos y sólo tendrá éxito si se lleva a
cabo de una manera global y coordinada, y si se
acompaña de un cambio social.
xx, la esperanza de vida era de alrededor de 30 años, pecialistas han estimado que en la naturaleza deben
mientras que hoy es superior: 65 años en promedio existir cientos de millones de tipos de virus que toda-
en el mundo. Esto se ha debido al desarrollo de va- vía no se descubren, muchos de los cuales tendrían
cunas, antibióticos, programas de salud pública, nue- el potencial de infectar a los seres humanos. Es indu-
vas técnicas quirúrgicas, quimioterapia, radioterapia dable que habrá futuras pandemias, por lo que debe-
y grandes avances en diversos métodos diagnósticos, mos prepararnos para enfrentarlas, aunque no sa-
entre otros. bemos cuándo ni dónde aparecerán.
Hoy se han controlado muchas enfermedades in- Adicionalmente, debido a que la gente vive
fecciosas que en otros tiempos provocaron la muerte más años, la incidencia de enfermedades asociadas
de millones de personas. Sin embargo, hay enfer- al envejecimiento –cardiovasculares, metabólicas,
medades emergentes causadas por agentes infec- neoplásicas y neurodegenerativas– ha aumentado
ciosos que recientemente se han identificado y que de manera significativa. Por ello, también debemos
ponen en riesgo a las poblaciones vulnerables. El emprender programas estratégicos de prevención e
ejemplo más reciente es COVID-19, la enfermedad investigación en estas áreas, para combatir de una
causada por el virus SARS-CoV-2. A tres años desde forma más eficaz estos padecimientos.
su aparición, más de 640 millones de personas se Por lo tanto, los retos actuales y futuros en ma-
han infectado y más de 6.5 millones han fallecido. teria de salud son abrumadores y complejos. Por un
COVID-19 nos ha recordado que, a pesar de los gran- lado, hay varias enfermedades que sin ser transmi-
des avances en la medicina, no estamos exentos de sibles se han convertido en verdaderas pandemias,
sufrir los estragos provocados por nuevos agentes como la obesidad. Por otra parte, las desigualdades
infecciosos, los cuales se han vuelto más frecuentes sociales tienen una fuerte influencia en el acceso a
debido al deterioro que estamos ocasionando en el los sistemas de salud, de tal suerte que en muchas
ambiente. regiones del planeta y en varios sectores de la socie-
Ahora tomemos como ejemplo el cáncer, una
devastadora enfermedad no contagiosa que consti-
tuye la segunda causa de muerte en el mundo. Hace
tan sólo 70 años, la palabra cáncer era sinónimo de
muerte, pero esto ya ha cambiado. En 1955, la su-
pervivencia a cinco años en pacientes con cáncer
de próstata era de 38%, pero hoy es de 94%; para pa-
cientes con cáncer de mama, la supervivencia era de
54%, mientras que hoy es de 86%; en el caso de me-
nores con leucemia, la supervivencia era de 20% y
actualmente supera 90%. Los datos anteriores dejan
ver los importantes avances en cuanto al diagnóstico
y tratamiento del cáncer; no obstante, son ciertos
sólo para los países con un alto índice de desarrollo,
mientras que para otras naciones las cifras no son tan
alentadoras. De hecho, de los 10 millones de per-
sonas que cada año mueren en el mundo por algún
tipo de cáncer, alrededor de 70% viven en países en
vías de desarrollo.
Lo expuesto en los párrafos anteriores nos deja
ver que la lucha contra las enfermedades es una
batalla continua para la que no hay tregua. Los es-
dad, el acceso a tratamientos médicos de calidad se en todos los niveles, desde el individual, en el que
ha vuelto un lujo del que sólo goza una minoría. Es, todas y cada una de las personas cambiemos nues-
pues, necesario emprender un cambio sustancial en tros hábitos por prácticas más responsables y salu-
las políticas de todos los países, para buscar dar más dables, hasta el gubernamental y el global, con
apoyo a la investigación en temas médicos y fomen- políticas y presupuestos enfocados a frenar la conta-
tar acciones que fortalezcan la salud pública. minación ambiental, la sobreexplotación de los
recursos naturales y la desigualdad social, para pro-
mover e impulsar la conservación, la salud, la educa-
Reflexiones finales ción y la ciencia.
En los últimos 300 años, la actividad humana ha
llevado al planeta a un estado crítico. Sin embar-
go, la historia evolutiva del mundo nos ha enseña- Fernando Mayani
do que, ante los cambios drásticos y catastróficos, Instituto de Biología, Universidad Nacional Autónoma de México.
la vida en la Tierra siempre encuentra nuevas vías, [email protected]
nuevos caminos. Durante los cambios ambientales,
se extinguen especies y surgen nuevas; siempre ha- Mareldi Ahumada
brá formas de vida que permanezcan y evolucionen. Clean Energy Institute, University of Washington, Seattle.
La pregunta es si nuestra especie podrá resistir y so- [email protected]
breponerse a los cambios ambientales que nosotros
mismos hemos provocado. Héctor Mayani
Si bien la situación es muy delicada, todavía es- Unidad de Investigación Médica en Enfermedades Oncológicas,
tamos a tiempo de revertir el estado de fragilidad y Instituto Mexicano del Seguro Social.
riesgo en el que nos encontramos. Pero debemos ac- [email protected]
tuar de inmediato. Las acciones deben emprenderse
Referencias específicas
Bradshaw, C. J. A. et al. (2021), “Underestimating the cha- Latina y el Caribe (LC/G.2681-P/Rev.3), Santiago,
llenges of avoiding a ghastly future”, Front Conserv Sci. ONU.
Disponible en: ‹doi.org/10.3389/fcosc.2020.615419›, Mayani H. y P. Piña-Sánchez (2021), “Covid-19: fortale-
consultado el 28 de noviembre de 2022. zas y debilidades”, Ciencia, 72(2):87-90.
Dirzo, R. et al. (2014), “Defaunation in the Anthropoce- Piña-Sánchez, P. et al. (2021), “Cancer biology, epide-
ne”, Science, 345(6 195):401-406. miology, and treatment in the 21st century: current
Guerra Martínez, F. (2021), “Cambio climático, calenta- status and future challenges from a biomedical perspec-
miento global y efecto invernadero, ¿cuál es cuál?”, tive”, Cancer Control, 28:10732748211038735. Dispo-
Ciencia, 72(2):48-55. nible en: ‹doi.org/10.1177/10732748211038735›, con-
Naciones Unidas (2018), La Agenda 2030 y los Objetivos sultado el 28 de noviembre de 2022.
de Desarrollo Sostenible: una oportunidad para América