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Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Derecho de Obligaciones – 2017-I

1. La relación obligatoria
I. Introducción
El derecho civil tiene dos grandes ramas: el derecho civil patrimonial y el
derecho civil no patrimonial.

El derecho civil patrimonial se define como ‘aquella parte del derecho civil
que comprende una serie de normas e instituciones que estudian y
regulan la actividad económica del hombre’. En el derecho civil patrimonial
se estudian dos grandes temas: 1. Derechos reales, que presta
observancia a la atribución de los bienes (derecho de propiedad y otros
anexos). 2. Derecho de obligaciones, que ve el intercambio de los bienes,
es decir, las prestaciones que unas personas realizan a favor de otras.
Por esta razón, se dice que en el derecho de obligaciones se lleva a cabo
la «colaboración social», donde las personas ayudan a otras a cumplir sus
intereses.

II. Concepto de derecho de obligaciones


El derecho de obligaciones es aquella rama del derecho civil patrimonial
que contiene una serie de principios y normas que van a estudiar la
constitución, modificación y la extinción de las relaciones jurídicas
obligatorias, es decir, de la obligación.

III. Ubicación en el Código Civil peruano


Las obligaciones se regulan a partir del Libro VI (artículo 1132) del Código
Civil de 1984. Dentro del Código Civil se comprende, respecto a derecho
de obligaciones, la parte general, la parte especial, la gestión de negocios,
el enriquecimiento indebido, la promesa unilateral y las relaciones
extracontractuales.

Todas las relaciones jurídicas que no sean susceptible de valoración


económicas serán reguladas por otras ramas del derecho.

IV. Concepto de obligación


La obligación desde el punto de vista coloquial se entiende como deuda.
Para el derecho, la obligación es una relación jurídica entre dos personas
en la que una de ellas, llamada acreedor o titular del derecho de crédito,
se encuentra facultada para exigir a la otra, llamada deudor o titular del
deber o la deuda, un determinado comportamiento, que recibe el nombre
de prestación. La prestación consiste en dar, hacer o abstenerse de hacer
una cosa; y de cuyo cumplimiento responde el deudor con todo su
patrimonio.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

El artículo 1132 del Código Civil regula la dación de bienes ciertos. De


este artículo no se puede inferir algún concepto de obligación.
Artículo 1132, Código Civil de 1984
El acreedor de bien cierto no puede ser obligado a recibir otro, aunque éste sea de mayor
valor.

Artículo 1529, Código Civil de 1984


Por la compraventa el vendedor se obliga a transferir la propiedad de un bien al comprador
y éste a pagar su precio en dinero.

Artículo 1969, Código Civil de 1984


Aquel que por dolo o culpa causa un daño a otro está obligado a indemnizarlo. El descargo
por falta de dolo o culpa corresponde a su autor.

V. Características de la obligación
A diferencia de los derechos reales, la obligación es un vínculo transitorio.
Además, la obligación es de tipo patrimonial, es decir, susceptible de
valoración económica. Por último, la obligación posee un respaldo en el
ordenamiento jurídico.

VI. Evolución del concepto de obligación


Para el derecho romano primigenio, la obligación no existía propiamente
como relación jurídica, sino se entendía como un vínculo de cautividad.
Por la obligatio, una persona, llamada obligatus, se encontraba sujeta a
otra de manera corporal. Si el acreedor no veía satisfecha su deuda, podía
ejercer la manus inectio y recuperar su dinero vendiendo al obligado. De
esto se desprende que deuda (pater familias) y responsabilidad
(obligatus) eran dos títulos diferentes. Hoy en día, deuda y
responsabilidad recaen en la misma persona.

Años más adelante, la lex poetilia papiria ordenó que el deudor


respondiera únicamente con sus bienes. Los conceptos de deuda y
responsabilidad se unifican por dicha ley. Asimismo, la acción a ejecutar
para satisfacer la deuda es la pignoris capio.

En la Edad Media, con el apogeo del comercio, nace la idea de que la


obligación puede nacer con el simple intercambio de voluntades. No se
exige más las solemnes formalidades del ius romanorum y, además, se
elimina la prisión por deudas. Para la Edad Moderna, esto se irradia hacia
el Code Civil y hacia los países influenciados por su legislación. No es
menos importante mencionar que en los siglos venideros y por el
descubrimiento de nuevos mundos, nace el derecho mercantil.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

VII. Fuente de las obligaciones


El reconocido jurista español Luis Díez-Picazo sostiene que la principal
fuente de las obligaciones es la autonomía de la voluntad. También,
pueden encontrarse otras que surgen de manera heterónoma o variada.
Por citar algunos ejemplos de las obligaciones que nacen de la autonomía
de la voluntad; están los contratos, testamentos, promesas, etc. Por su
lado, respecto de las obligaciones que surgen de manera heterónoma o
variada; están los actos ilícitos, enriquecimiento indebido, alimentos y
todas aquellas que pueden nacer de sentencias y laudos arbitrales.

El Código Civil peruano de 1984 recoge las fuentes de las obligaciones


en el libro VII: contratos en general (sección primera), contratos
nominados (sección segunda), gestión de negocios (sección tercera),
enriquecimiento sin causa (sección cuarta), promesa unilateral (sección
quinta) y responsabilidad extracontractual (sección sexta).

VIII. Distinción entre deuda y responsabilidad


Toda obligación genera una deuda y una responsabilidad, conceptos que
recaen sobre una misma persona. Pero ¿puede existir una obligación
donde exista una deuda y no una responsabilidad? ¿O puede existir una
obligación donde exista una responsabilidad, pero no una deuda? Ante
estas cuestiones han surgido algunas teorías.

i. Teoría del débito y la responsabilidad


Esta teoría alemana sostiene que tanto la deuda como la
responsabilidad pueden tener origen independiente, como en el
derecho romano. Por lo tanto, puede haber un deudor que no sea
responsable y un responsable que no sea un deudor.

Por ejemplo, la obligación natural genera una deuda sin


responsabilidad; así como también la deuda prescrita, en la que ya no
más existe la responsabilidad. Del otro lado, los fiadores son
responsables, pero no deudores.

ii. Teoría integradora


Esta teoría sostiene que no puede existir deuda sin responsabilidad ni
responsabilidad sin deuda. Ambos conceptos siempre están unidos.

La crítica a la teoría alemana que hace la teoría integradora versa


sobre lo siguiente: si bien es cierto que la obligación natural es una
deuda sin responsabilidad; sin embargo, no es una obligación jurídica
porque no está regulada en el ordenamiento jurídico. Por su parte, en
la deuda prescrita, el ordenamiento jurídico castiga al acreedor por su
inactividad y/o no tener interés en cobrar su crédito. Del otro lado, es
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

cierto que los fiadores son responsables, pero es porque asumen la


deuda; por lo tanto, son responsables y deudores.

2. El objeto de la relación obligatoria


I. Objeto de las obligaciones
Los doctrinarios del Derecho han identificado como objeto de la obligación
la prestación. La prestación consiste en dar, hacer o abstenerse de hacer
una cosa; y de cuyo cumplimiento responde el deudor con todo su
patrimonio. La prestación es la conducta que las partes proyectan y
prevén desde el inicio de la obligación.

El contrato tiene por objeto a la obligación, y la obligación tiene por objeto


la prestación, que tiene como contenido bienes y servicios. Por lo anterior
se puede concluir que el contrato por sí mismo no transmite la propiedad,
sino la ejecución de la prestación del contrato.

Los artículos 1402 y 1403 del Código Civil recogen la teoría del título y
modo de la adquisición de la propiedad.
Artículo 1402, Código Civil de 1984
El objeto del contrato consiste en crear, regular, modificar o extinguir obligaciones.

Artículo 1403, Código Civil de 1984


La obligación que es objeto del contrato debe ser lícita.
La prestación en que consiste la obligación y el bien que es objeto de ella deben ser
posibles.

i. Requisitos de la prestación
Los requisitos de la prestación son posibilidad, licitud y determinación
o determinabilidad.

A. Posibilidad
La posibilidad significa que nadie debe estar obligado a hacer lo
imposible.

a. Imposibilidades
a) Imposibilidades naturales e imposibilidades jurídicas
Las imposibilidades jurídicas vienen dadas por la propia
naturaleza de las cosas afectadas por instituciones jurídicas.

b) Imposibilidades absolutas e imposibilidades relativas


Las imposibilidades absolutas vienen dadas por la ley, como
el tráfico comercial de órganos humanos. Por su parte, las
imposibilidades relativas afectan a uno o determinados
sujetos.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

c) Imposibilidades totales e imposibilidades parciales


Las imposibilidades son totales cuando toda la conducta es
imposible, lo que conlleva a la nulidad de la relación
obligatoria. Por otro lado, las imposibilidades son relativas
cuando no toda la prestación es imposible; sin embargo,
puede devenir en nulidad parcial o anulabilidad de la
relación obligatoria.

d) Imposibilidades originarias e imposibilidades


sobrevenidas
Las imposibilidades originarias hacen de la prestación
imposible desde su constitución, por lo que se tiene como
nula. Por su parte, en las imposibilidades sobrevenidas la
obligación nace perfectamente válida; pero antes de que se
ejecute la prestación, deviene en imposible: por tanto, abre
paso a la ineficacia de la prestación.

B. Licitud
No se puede quedar legalmente vinculado a realizar lo que la ley
prohíbe, o lo que es contrario al orden público o a las buenas
costumbres. Respecto a realizar lo que la ley prohíbe, se tiene a
una prestación como ilícita únicamente cuando trasgrede normas
imperativas, mas no cuando trasgrede normas dispositivas porque
estas permiten pactar en contrario.

La imposibilidad jurídica se restringe a la naturaleza de las


instituciones jurídicas que pueden estar recogidas en una norma.
La licitud, en cambio, es más amplia.

C. Determinación o determinabilidad
El objeto de la obligación debe estar siempre determinado, es decir
que desde la constitución de la obligación el deudor sepa con
precisión la conducta a realizar.

Si el objeto de la obligación no está determinado, por lo menos


debe ser determinable. Esto significa que, si desde la constitución
de la obligación no se ha determinado la prestación, deben fijarse
los criterios que posibiliten la posterior ejecución de la prestación.
Estos criterios no deben implicar un nuevo acuerdo de voluntades,
sino la simple ejecución de la prestación.

Los criterios para la precisión de la obligación pueden ser


subjetivos (artículo 1544 del Código Civil) u objetivos (artículo 1545
del Código Civil).
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Artículo 1544, Código Civil de 1984


Es valida la compraventa cuando se confía la determinación del precio a un
tercero designado en el contrato o a designarse posteriormente, siendo de
aplicación las reglas establecidas en los artículos 1407 y 1408.

Artículo 1545, Código Civil de 1984


Es también valida la compraventa si se conviene que el precio sea el que tuviere
el bien en bolsa o mercado, en determinado lugar y día.

Aquella prestación que no está determinada ni se fijan los criterios


para su posterior determinación es una prestación indeterminada,
lo que conlleva a que la obligación devenga en nula.

ii. Patrimonialidad de la obligación


La doctrina se plantea si es que es realmente esencial la
patrimonialidad de la obligación.

A. Teoría tradicional
Esta teoría se basa en el Derecho romano. Así pues, sostiene que
la patrimonialidad sí es un elemento esencial de la obligación. Para
este sector de la doctrina, sin patrimonialidad no existe una
obligación que deba ser regulada por el Derecho de obligaciones.

B. Teoría de Ihering
Rudolf von Ihering afirma que la patrimonialidad no es un elemento
esencial de la obligación. El acreedor puede tener otros intereses
que puede introducir como reglas de conducta dentro de la relación
jurídico-patrimonial; tales como, en un contrato de arrendamiento,
que el arrendatario no genere sonidos estruendosos a partir de las
00:00 horas, etc.

C. Teoría de Scialoja
Vittorio Scialoja distingue entre la patrimonialidad de la prestación
y la patrimonialidad del interés del acreedor. Afirma que si bien la
teoría alemana hace énfasis en el interés del acreedor; esta no es
patrimonial sino moral, social, amical, o de cualquier otra índole.
Por otra parte, la prestación siempre es susceptible de valoración
económica, es decir que sí es patrimonial.

De ahí que para que una obligación sea regulada por el Derecho
de Obligaciones, debe ser patrimonial.
Artículo 1321, Código Civil de 1984
Queda sujeto a la indemnización de daños y perjuicios quien no ejecuta sus
obligaciones por dolo, culpa inexcusable o culpa leve.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

El resarcimiento por la inejecución de la obligación o por su cumplimiento parcial,


tardío o defectuoso, comprende tanto el daño emergente como el lucro cesante,
en cuanto sean consecuencia inmediata y directa de tal inejecución.
Si la inejecución o el cumplimiento parcial, tardío o defectuoso de la obligación,
obedecieran a culpa leve, el resarcimiento se limita al daño que podía preverse al
tiempo en que ella fue contraída.

De este artículo se puede deducir que la patrimonialidad en una


prestación sí es un elemento esencial.

3. Los sujetos de la relación obligatoria


Por ser la obligación una relación jurídica, siempre implica la existencia de
dos partes. La parte activa recae sobre la figura del acreedor, mientras que
la parte pasiva sobre la figura del deudor. El acreedor es el titular del derecho
de crédito y, además, quien exige al deudor la observancia de una
determinada conducta. Si esta última no fuera cumplida, el deudor responde
con todo su patrimonio.

Ser acreedor o deudor no implica tener cualidad jurídica. No se puede decir


que el acreedor ni el deudor tienen cualidad jurídica porque esta viene dada
por el status, que es una vocación de permanencia. La obligación es
esencialmente transitoria; por lo tanto, se dice que el acreedor o el deudor
tienen una posición jurídica.

La figura del acreedor y del deudor deben ser personas distintas. Lo que sí
es posible es que existan en cada una de las partes varias personas o que
una persona sea al mismo tiempo acreedor y deudor, pero de bienes
diferentes; como, por ejemplo, en el contrato de compraventa.

I. Capacidad de los sujetos


No se necesita ninguna capacidad especial para configurarse como
algunas de las partes de la relación obligatoria. Solamente por el hecho
de ser persona uno puede ser acreedor o deudor.

II. Determinación de los sujetos


Los sujetos deben estar perfectamente determinados, es decir, saber a
ciencia cierta quién es el acreedor y quién es el deudor en la relación
jurídica.

Sin embargo, puede suceder que, al momento de generarse la obligación,


haya cierta indeterminación en alguno de los sujetos. No obstante, es
posible su posterior determinación. Las promesas unilaterales y el cheque
al portador son algunos ejemplos de indeterminación relativa.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Normalmente la indeterminación relativa se da en la parte acreedora, pero


también es posible encontrarla en la parte deudora o en ambas. Por otro
lado, una indeterminación absoluta de los sujetos hace nula la obligación.

III. Unidad o pluralidad de los sujetos


Bien se sabe que toda obligación requiere pluralidad de sujetos. Y
respecto al concepto de unidad en la relación obligatoria, está referida a
que cada parte (acreedora o deudora) puede estar compuesta o integrada
por dos o más sujetos. Este último caso da pie a hablar de «parciaridad»,
«mancomunidad» y/o «solidaridad».

4. Clases de obligaciones por razón del objeto


I. Obligaciones positivas y obligaciones negativas
i. Obligaciones positivas
Las obligaciones positivas implican que el deudor debe realizar una
actividad (obligación de dar u obligación de hacer) en favor del
acreedor.

A. Obligaciones de dar
Las obligaciones de dar consisten en otorgar un bien determinado,
sea un bien cierto o un bien incierto. Este tipo de obligaciones son
las más importantes. Están reguladas por el Código Civil peruano
a partir del artículo 1132 y siguientes.

Las obligaciones de dar siempre son obligaciones de resultado, es


decir, el deudor cumplirá con la obligación únicamente al momento
de entregar el bien o la cosa al acreedor. Además, si el bien tiene
frutos naturales o civiles, la obligación conllevará consigo entregar
dichos frutos; lo mismo respecto de si el bien tiene accesorios. Por
otro lado, el deudor tiene el deber de conservar el bien hasta el
momento de la entrega.

a. Clasificación de las obligaciones de dar


a) Según los efectos de la obligación
1) Obligaciones con efecto traslativo
Respecto del deudor, al momento de entregar el bien
puede hacerlo con efectos traslativos; como es el caso
de una compraventa, por la cual se transfiere un derecho
real: la propiedad.

2) Obligaciones con efecto restitutivo


Respecto del deudor, al momento de entregar el bien
puede hacerlo con efectos traslativos, es decir, devolver
el bien a su dueño original. Tal es el caso del comodato.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

b) Según el bien que se entregue


1) Obligaciones pecuniarias
Las obligaciones pecuniarias consisten en entregar
dinero.

2) Obligaciones específicas o ciertas


Las obligaciones específicas consisten en entregar un
bien totalmente identificado e individualizado. El Código
Civil las denomina de «dar bienes ciertos». A partir del
artículo 1132 se puede apreciar su desarrollo.

De las obligaciones específicas se predica la «teoría del


riesgo», que parte del supuesto que desde que se
contrae la obligación y hasta la entrega del bien, este
último puede perderse sin culpa de las partes. Así, al
perderse el bien sin culpa del deudor, respecto de él se
extingue la obligación.
Artículo 1137, Código Civil de 1984
La pérdida del bien puede producirse:
1.- Por perecer o ser inútil para el acreedor por daño parcial.
2.- Por desaparecer de modo que no se tenga noticias de él o, un
teniéndolas, no se pueda recobrar.
3.- Por quedar fuera del comercio.

La teoría del riesgo ha generado tres posturas diferentes


por parte de la dogmática:
1. Periculum est debitoris
Teoría según la cual el acreedor no debe pagar el
precio del bien, por lo que el riesgo lo asume el
deudor.
Artículo 1138, Código Civil de 1984
En las obligaciones de dar bienes ciertos se observan, hasta su
entrega, las reglas siguientes:
[…]
5.- Si el bien se pierde sin culpa de las partes, la obligación del
deudor queda resuelta, con pérdida del derecho a la
contraprestación, si la hubiere. En este caso, corresponden al
deudor los derechos y acciones que hubiesen quedado relativos
al bien.
6.- Si el bien se deteriora sin culpa de las partes, el deudor sufre
las consecuencias del deterioro, efectuándose una reducción
proporcional de la contraprestación. En tal caso, corresponden al
deudor los derechos y acciones que pueda originar el deterioro
del bien.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

2. Periculum est creditoris


Teoría según la cual el acreedor sí debe pagar el
precio del bien, por lo que el riesgo lo asume él.

3. Teoría sincrética
Para esta teoría, ambas parten, acreedor y deudor,
comparten los gastos.

Tal y como se lee líneas arriba, en la teoría del riesgo el


bien se pierde sin culpa de las partes. Pero esto implica
también la actuación diligente por parte del deudor al
momento del acontecimiento del hecho fortuito que lleva
a la pérdida del bien, de manera que su conducta no
contribuya de ninguna forma a la pérdida del mismo.

Además, la teoría del riesgo únicamente se aplica


cuando la prestación del deudor sea de hacer, por lo que,
cumplido el supuesto anterior, se extinguirá. Sin
embargo y sin perjuicio de lo anterior, la contraprestación
del acreedor puede ser cualquier tipo de conducta.

Lo que se presenta aquí es la imposibilidad de la


prestación por imposibilidad sobrevenida. Si es
imposibilidad originaria, la obligación es nula.

Por último, si el bien se pierde por culpa del deudor, no


se aplicará la teoría del riesgo, sino que se tomará como
incumplimiento de las obligaciones; por lo que el deudor
quedará obligado a una indemnización a favor del
acreedor.
Artículo 1138, Código Civil de 1984
En las obligaciones de dar bienes ciertos se observan, hasta su
entrega, las reglas siguientes:
1.- Si el bien se pierde por culpa del deudor, su obligación queda
resuelta; pero el acreedor deja de estar obligado a su
contraprestación, si la hubiere, y el deudor queda sujeto al pago de
la correspondiente indemnización.
Si como consecuencia de la pérdida, el deudor obtiene una
indemnización o adquiere un derecho contra tercero en sustitución
de la prestación debida, el acreedor puede exigirle la entrega de tal
indemnización o sustituirse al deudor en la titularidad del derecho
contra el tercero. En estos casos, la indemnización de daños y
perjuicios se reduce en los montos correspondientes.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

2.- Si el bien se deteriora por culpa del deudor, el acreedor puede


optar por resolver la obligación, o por recibir el bien en el estado en
que se encuentre y exigir la reducción de la contraprestación, si la
hubiere, y el pago de la correspondiente indemnización de daños y
perjuicios, siendo de aplicación, en este caso, lo dispuesto en el
segundo párrafo del inciso 1. Si el deterioro es de escasa
importancia, el acreedor puede exigir la reducción de la
contraprestación, en su caso.
[…]

3) Obligaciones genéricas o inciertas


Las obligaciones genéricas consisten en entregar un
bien perteneciente a un género.

El Código Civil las denomina de «dar bienes inciertos».


Esta terminología no es acertada porque el bien no es
incierto, sino que pertenece a un género. El género las
identifica a través de la especie y la cantidad. Por tanto,
deben pasan por un proceso de especificación. Y una
vez individualizadas, se convierten en obligaciones
específicas.

B. Obligaciones de hacer
a. Clasificación de las obligaciones de hacer
a) Según la persona del deudor
1) Obligaciones personalísimas
En este tipo de obligaciones, la persona del deudor es
un elemento esencial para el cumplimiento de la
obligación. Por tanto, cuando el deudor no puede cumplir
con la obligación, se extingue. De ningún modo este tipo
de obligaciones puede ser cumplida por terceros.
Artículo 1149, Código Civil de 1984
La prestación puede ser ejecutada por persona distinta al deudor, a
no ser que del pacto o de las circunstancias resultara que éste fue
elegido por sus cualidades personales.

Por analogía puede comparárseles con las obligaciones


no fungibles, cuyo objeto de la obligación no puede
sustituirte por otro al ser único y no tener equivalencia
exacta con las demás cosas. Tal es el caso de un caballo
de carrera identificado con un código, una obra de arte
de cierto artista, etc.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

2) Obligaciones no personalísimas
En este tipo de obligaciones no importa la persona del
deudor, sino la actividad en sí. Por lo tanto, si el deudor
no puede llevarla a cabo, la harán terceros en nombre de
él.
Por analogía puede comparársele con las obligaciones
fungibles, cuyo objeto de la obligación será aquel que en
el tráfico jurídico vienen considerado según su número,
medida o peso; y puede ser sustituido por otro.

b) Según el tipo de conducta que se espera


1) Obligaciones de medios
La obligación es de hacer de medios cuando el deudor
cumple desplegando una actividad diligente, de modo
que la actividad en sí misma es lo que el acreedor debe
obtener.

Las obligaciones de medios también son llamadas


obligaciones de actividad diligente.

2) Obligaciones de resultados
En las obligaciones de hacer de resultados se cumple
con un resultado en concreto, que se integra en la
prestación.

c) Según la profesionalidad
1) Obligaciones profesionales
Respecto de las obligaciones profesionales, se toma en
cuenta la calidad del deudor y el servicio que presta en
virtud de su profesión o de los conocimientos que ha
adquirido.

b. Efectos de las obligaciones de hacer


a) En caso de cumplimiento
Artículo 1148, Código Civil de 1984
El obligado a la ejecución de un hecho debe cumplir la prestación en el
plazo y modo pactados o, en su defecto, en los exigidos por la naturaleza
de la obligación o las circunstancias del caso.

b) En caso de incumplimiento
Artículo 1150, Código Civil de 1984
El incumplimiento de la obligación de hacer por culpa del deudor, faculta
al acreedor a optar por cualquiera de las siguientes medidas:
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

1.- Exigir la ejecución forzada del hecho prometido, a no ser que sea
necesario para ello emplear violencia contra la persona del deudor.
2.- Exigir que la prestación sea ejecutada por persona distinta al deudor
y por cuenta de éste.
3.- Dejar sin efecto la obligación.

Este artículo se pone en el supuesto de:


1. El incumplimiento de la obligación de hacer por parte del
deudor.
2. Hay todavía posibilidad de llevarla a cabo.

En cualquiera de los tres supuestos recogidos por este


artículo, el acreedor puede solicitar además la
indemnización correspondiente.

Si el incumplimiento de la obligación de hacer viene de parte


del acreedor, esta se deja sin efecto; sin perjuicio del
derecho del deudor a exigir la contraprestación, además de
la indemnización correspondiente.

En caso de concurrencia de culpas, la obligación también se


extingue.

c) Imposibilidad de la prestación
1) Imposibilidad de la prestación por culpa del deudor
Artículo 1154, Código Civil de 1984
Si la prestación resulta imposible por culpa del deudor, su obligación
queda resuelta, pero el acreedor deja de estar obligado a su
contraprestación, si la hubiere, sin perjuicio de su derecho de exigirle
el pago de la indemnización que corresponda.
La misma regla se aplica si la imposibilidad de la prestación
sobreviene después de la constitución en mora del deudor.

2) Imposibilidad de la prestación por culpa del acreedor


Artículo 1155, Código Civil de 1984
Si la prestación resulta imposible por culpa del acreedor, la obligación
del deudor queda resuelta, pero éste conserva el derecho a la
contraprestación, si la hubiere.
Igual regla se aplica cuando el cumplimiento de la obligación depende
de una prestación previa del acreedor y, al presentarse la
imposibilidad, éste hubiera sido constituido en mora.
Si el deudor obtiene algún beneficio con la resolución de la
obligación, su valor reduce la contraprestación a cargo del acreedor.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Además y aunque no lo dice el artículo, el deudor puede


solicitar la indemnización correspondiente.

3) Imposibilidad de la prestación sin culpa de las partes


Cuando la prestación se torna imposible sin culpa de las
partes, la prestación del deudor y la contraprestación del
acreedor se extinguen. Además, ninguno de ambos
puede solicitar indemnización.

ii. Obligaciones negativas


Por su parte, las obligaciones negativas implican que el deudor se
abstiene de realizar una actividad lícita material o jurídica (obligación
de no hacer) en favor del acreedor. De igual manera, puede consistir
en tolerar la actuación del acreedor en la esfera jurídica del deudor.

Como bien se ha dicho, la conducta negativa por parte del deudor


también consiste en tolerar una actividad del acreedor.
Artículo 1673, Código Civil de 1984
Si en el curso del arrendamiento el bien requiere reparaciones que no pueden diferirse
hasta el fin del contrato, el arrendatario debe tolerarlas aun cuando importen privación
del uso de una parte de él.

Artículo 1681, Código Civil de 1984


El arrendatario está obligado:
[…]
8.- A no introducir cambios ni modificaciones en el bien, sin asentimiento del
arrendador.
[…]
Artículo 1820, Código Civil de 1984
El depositario no puede usar el bien en provecho propio ni de tercero, salvo
autorización expresa del depositante o del juez. Si infringe esta prohibición, responde
por el deterioro, pérdida o destrucción del bien, inclusive por caso fortuito o fuerza
mayor.

A. Clasificación de las obligaciones de no hacer


a. Según su duración
a) Obligaciones instantáneas
La abstención o la tolerancia del deudor se agota en un acto.

b) Obligaciones duraderas
La abstención o la tolerancia del deudor se extiende en el
tiempo. Estas obligaciones a su vez pueden subclasificarse
en ininterrumpidas o de tracto sucesivo.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Sin embargo, todas las obligaciones duraderas deben tener


un límite ya que no se puede suprimir la libertad del deudor
por un tiempo ilimitado.

B. Incumplimiento de las obligaciones de no hacer


En este tipo de obligaciones, el incumplimiento consiste en una
actividad positiva del deudor, que en principio debía abstenerse de
hacerlo.

a. Incumplimiento
a) En las obligaciones instantáneas de no hacer
En este tipo de obligaciones de ninguna manera cabe la
mora de deudor cuando ha incumplido el contrato. Por tanto,
la obligación se da por resuelta, sin perjuicio del derecho del
acreedor de reclamar una indemnización.

b) En las obligaciones duraderas de no hacer


Por su parte, en este tipo de obligaciones, cuando hay un
incumplimiento del deudor debe verse el interés del
acreedor para analizar si se trata de un incumplimiento de
obligación o mora del deudor.

Artículo 1158, Código Civil de 1984


El incumplimiento por culpa del deudor de la obligación de no hacer, autoriza
al acreedor a optar por cualquiera de las siguientes medidas:
1.- Exigir la ejecución forzada, a no ser que fuese necesario para ello emplear
violencia contra la persona del deudor.
2.- Exigir la destrucción de lo ejecutado o destruirlo por cuenta del deudor.
3.- Dejar sin efecto la obligación.

Artículo 1159, Código Civil de 1984


En los casos previstos por el artículo 1158, el acreedor también tiene derecho
a exigir el pago de la correspondiente indemnización de daños y perjuicios.

Artículo 1160, Código Civil de 1984


Son aplicables a las obligaciones de no hacer las disposiciones de los
artículos 1154, primer párrafo, 1155, 1156 y 1157.

b. Imposibilidad

II. Obligaciones específicas y obligaciones genéricas


El Código Civil peruano las denomina obligaciones ciertas y obligaciones
inciertas respectivamente. Sin embargo, la terminología usada por el
cuerpo legislativo peruano es confusa e inadecuada.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

i. Obligaciones específicas
Las obligaciones específicas consisten en entregar un bien totalmente
identificado e individualizado. Y al no necesitarse ningún proceso de
individualización, el deudor cumple con la prestación entregando dicho
bien. De ninguna manera cumple con la prestación de la obligación
entregando otro bien, aunque sea este último de mayor valor.
Artículo 1132, Código Civil de 1984
El acreedor de bien cierto no puede ser obligado a recibir otro, aunque éste sea de
mayor valor.

La regla general dice que se entrega el bien con sus accesorios,


aunque las partes pueden pactar en contrario. Asimismo, se entrega
con sus frutos si acaso fuera un bien fructífero, aunque se permite de
igual modo pacto en contrario.
Artículo 888, Código Civil de 1984
Son accesorios los bienes que, sin perder su individualidad, están permanentemente
afectados a un fin económico u ornamental con respecto a otro bien.
La afectación sólo puede realizarla el propietario del bien principal o quien tenga
derecho a disponer de él, respetándose los derechos adquiridos por terceros.
Los accesorios pueden ser materia de derechos singulares.
El aprovechamiento pasajero de un bien para la finalidad económica de otro no le
otorga la calidad de accesorio.
La separación provisional del accesorio para servir a la finalidad económica de otro
bien, no le suprime su calidad.

Siempre surgirá una obligación de conservación del bien cuando se


entregue en un momento distinto y posterior de haberse firmado el
contrato. Por lo tanto, se podrá hablar de obligaciones positivas, por
las cuales el deudor deberá realizar todo lo necesario para entregar el
bien en buen estado; como de obligaciones negativas, por las que
deberá evitar poner en riesgo el buen estado del bien.

Huelga mencionar que las obligaciones específicas también pueden


recaer sobre la entrega de bienes inmateriales, como las acciones de
una empresa; en cuyo caso no se entregará el bien inmaterial en sí,
sino el título que lo representa.

A. Pérdida de un bien cierto o específico


Artículo 1137, Código Civil de 1984
La pérdida del bien puede producirse:
1.- Por perecer o ser inútil para el acreedor por daño parcial.
2.- Por desaparecer de modo que no se tenga noticias de él o, aun teniéndolas,
no se pueda recobrar.
3.- Por quedar fuera del comercio.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Respecto del inciso 1. Debe distinguirse entre bienes orgánicos y


no orgánicos. Respecto de los bienes orgánicos, perecen cuando
fallecen y; respecto de los bienes no orgánicos, cuando se
destruyen o devienen en inútiles, esto es que no sirve para el fin
para el que están destinados.

Respecto del inciso 2. La desaparición implica tanto el no tener


noticias del bien como el que sí teniendo noticias del él, no se
pueda recuperar.

Respecto del inciso 3. El bien se convierte en un bien ilícito.

B. Concurrencia de acreedores
La concurrencia de acreedores parte del supuesto donde existen
varios acreedores que deben recibir un mismo bien cierto. Por esta
regla no se determinará quién es el propietario (artículos 948 y 949
CC), sino a quién corresponde entregar el bien.
Artículo 1135, Código Civil de 1984
Cuando el bien es inmueble y concurren diversos acreedores a quienes el mismo
deudor se ha obligado a entregarlo, se prefiere al acreedor de buena fe cuyo título
ha sido primeramente inscrito o, en defecto de inscripción, al acreedor cuyo título
sea de fecha anterior. Se prefiere, en este último caso, el título que conste de
documento de fecha cierta más antigua.

Del anterior artículo se desprenden dos reglas:


1. Le corresponde el bien al acreedor de buena fe cuyo título ha
sido primeramente inscrito.
2. En defecto de la regla 1, le corresponde el bien al acreedor cuyo
título sea de fecha cierta más antigua.

El documento de fecha cierta es indubitable frente a terceros y evita


cualquier suspicacia. Ejemplo de ello son los documentos
notariales; la copia legaliza o fedateada por quien corresponda o
los documentos adjuntados como pruebas en un proceso, en cuyo
caso se tendrá por fecha cierta el día de recepción de los mismos.
Artículo 235, Código Procesal Civil
Es documento público:
1. El otorgado por funcionario público en ejercicio de sus atribuciones;
2. La escritura pública y demás documentos otorgados ante o por notario público,
según la ley de la materia; y
3. Todo aquel al que las leyes especiales le otorguen dicha condición.
La copia del documento público tiene el mismo valor que el original, si está
certificada por auxiliar jurisdiccional respectivo, notario público o fedatario, según
corresponda.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Artículo 1136, Código Civil de 1984


Si el bien cierto que debe entregarse es mueble y lo reclamasen diversos
acreedores a quienes el mismo deudor se hubiese obligado a entregarlo, será
preferido el acreedor de buena fe a quien el deudor hizo tradición de él, aunque
su título sea de fecha posterior. Si el deudor no hizo tradición del bien, será
preferido el acreedor cuyo título sea de fecha anterior; prevaleciendo, en este
último caso, el título que conste de documento de fecha cierta más antigua.

Del anterior artículo se desprenden dos reglas:


1. Le corresponde al bien al acreedor de buena fe a quien el
deudor hizo tradición de él.
2. En defecto de la regla 1, le corresponde el bien al acreedor cuyo
título sea de fecha cierta más antigua.

Artículo 1670, Código Civil de 1984


Cuando se arrienda un mismo bien a dos o más personas, se prefiere al
arrendatario de buena fe cuyo título ha sido primeramente inscrito o, en defecto
de inscripción, al que ha empezado a poseerlo. Si ninguno ha empezado a
poseerlo, será preferido el arrendatario cuyo título sea de fecha anterior, salvo
que el de alguno conste de documento de fecha cierta.
Del anterior artículo se desprenden tres reglas respecto del
arrendamiento:
1. Le corresponde el bien mueble o inmueble al arrendatario de
buena fe cuyo título ha sido primeramente inscrito.
2. En defecto de la regla 1, le corresponde el bien al arrendatario
que ha empezado a poseerlo.
3. En defecto de la regla 2, le corresponde el bien al arrendatario
cuyo título sea de fecha cierta más antigua.

C. Publicidad registral
En el Perú, ningún derecho tiene que ser inscrito para existir, pero
es importante hacerlo por cuestiones de seguridad jurídica, ya que
la publicidad registral es oponible a terceros.

Como bien se mencionó, la inscripción en Registros Públicos no es


constitutiva de derechos, sino declarativa; salvo en el caso de la
hipoteca, ya que si no se inscribe o registra no existirá. Es el único
derecho real que se inscribe.

ii. Obligaciones genéricas


Obligaciones cuyos bienes pertenecen a un género, pero están
determinadas por su cantidad. Para su entrega, debe hacerse un
proceso de individualización o especificación.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Se entiende por «género» aquel ‘conjunto amplio de bienes y objetos


que comparten características comunes’. Lo más importante en una
obligación genérica es el proceso de individualización de un bien, por
el cual se convierte en específica.

Este tipo de obligaciones tienen que estar determinadas por su


especie y cantidad, no por un género generalísimo. Si se tratase de
una casa, debería especificarse su ubicación.

i. Concentración o individualización
La concreción, elección, especificación o individualización es la
operación indispensable para que la obligación genérica pueda ser
cumplida.

A. Sujeto encargado de la concentración


Artículo 1143, Código Civil de 1984
En las obligaciones de dar bienes determinados sólo por su especie y cantidad,
la elección corresponde al deudor, salvo que lo contrario resulte de la ley, del título
de la obligación o de las circunstancias del caso.
[…]

Esta norma es dispositiva, es decir que las partes, la ley y las


circunstancias del caso pueden determinar lo contrario.

Además, se logra observar la aplicación de la regla implícita del


favor debitoris, que siempre busca favorecer al deudor por ser la
parte más débil de la obligación. En tal sentido, el hecho de que el
Código Civil determine que sea el deudor el que determine la
concreción es una aplicación de la regla implícita del favor
debitoris.

B. Límite a la concentración
Artículo 1143, Código Civil de 1984
[…]
Si la elección corresponde al deudor, debe escoger bienes de calidad no inferior
a la media. Si la elección corresponde al acreedor, debe escoger bienes de
calidad no superior a la media. Si la elección corresponde a un tercero, debe
escoger bienes de calidad media.

Este segundo párrafo en especial establece los parámetros para la


concreción de la prestación. Pero como bien se mencionó antes,
todo el artículo 1143 —como la mayoría de los artículos del libro de
Obligaciones— es dispositivo, por lo que vale pactar en contrario.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

C. Momento a realizarse la concentración


Artículo 1144, Código Civil de 1984
A falta de plazo para la elección, corresponde al juez fijarlo.
Si el deudor omite efectuar la elección dentro del plazo establecido o el fijado por
el juez, ella corresponde al acreedor. Igual regla se aplica cuando la elección debe
practicarla el acreedor.
Si la elección se confía a un tercero y éste no la efectúa, la hará el juez, sin
perjuicio del derecho de las partes de exigir a aquél el pago de la indemnización
que corresponda por su incumplimiento.

En principio, el plazo para la elección debe ser establecida por las


partes. Si no hubiese sido así, se aplica lo establecido en el
presente artículo.

D. Comunicación de la concreción
La elección de la prestación no es la única acción importante en
una obligación genérica, sino también la comunicación de la
individualización.

La elección debe ser comunicada para que despliegue sus efectos.


Y aunque puede comunicarse de cualquier manera, es preferible la
utilización de medios que produzcan seguridad jurídica.

Por otro lado, una vez ejecutada la prestación, la elección deviene


en irrevocable. Por tanto, si la elección no se ajusta a lo pactado
por las partes, no habrá opción a la retroactividad, sino que se
tomará por incumplida. Este incumplimiento de la obligación dará
a su vez paso a la indemnización por daños y perjuicios a quien
corresponda.
Artículo 1145, Código Civil de 1984
La elección es irrevocable luego de ejecutada la prestación. La elección,
comunicada a la otra parte, o a ambas si la practica un tercero o el juez, surte
iguales efectos.

E. Efectos anteriores a la concreción


Antes de la elección, los bienes todavía pertenecen al género. Por
lo que de ninguna manera el deudor podrá alegar la desaparición
de dichos bienes para no cumplir con la obligación. Lo anterior
obedece a la regla de que el género nunca perece.
Artículo 1146, Código Civil de 1984
Antes de la individualización del bien, no puede el deudor eximirse de la entrega
invocando la pérdida sin su culpa.
[…]
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

F. Efectos posteriores a la concreción


El deudor al haber efectuado la concreción, convierte
inmediatamente la obligación genérica en específica. Esto porque
una vez elegidos los bienes del género correspondiente, se
individualizan y se tienen por únicos e insustituibles.

Huelga decir que para los casos de pérdida de los bienes ahora
específicos e individualizados, se aplica la teoría del riesgo.
Además, a manera de conclusión también vale decir que el tema
de la elección o concreción de la prestación es importante porque
de ella se genera la responsabilidad del deudor.

ii. Obligaciones de género limitado


En las obligaciones de género, las partes no solo han designado el
género al que pertenece el bien, sino que además lo han circunscrito
o reducido a una parte más o menos amplia del mismo en virtud de
una serie de circunstancias, tales como lugar, tiempo, procedencia,
pertenencia, etc.

En estas obligaciones no se puede aplicar la regla del género nunca


perece porque, al ser tan limitado, sí corre el riesgo de desaparecer.
Por tanto, si así sucediese, la responsabilidad del deudor se extinguirá
y la obligación se resolverá por imposibilidad.
Artículo 1146, Código Civil de 1984
Antes de la individualización del bien, no puede el deudor eximirse de la entrega
invocando la pérdida sin su culpa.
Esta regla no se aplica cuando la elección debe efectuarse entre determinados bienes
de la misma especie y todos ellos se pierden sin culpa del deudor.

III. Obligaciones simples y obligaciones compuestas


El criterio de unidad o multiplicidad del comportamiento del deudor define
a las obligaciones en simples y compuestas respectivamente.

i. Obligaciones simples
Las obligaciones simples tienen prevista una sola actividad o un
determinado comportamiento por parte del deudor.

A. Obligaciones facultativas
Son aquellas en las que el deudor está obligado a una determinada
prestación que constituye el objeto de la obligación. Pero el deudor
tiene la facultad de cumplir con otra prestación previamente
establecida distinta a la prestación debida, mientras que el
acreedor únicamente puede exigir el objeto debido.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Hay una obligación principal y una obligación facultativa por parte


del deudor. Esta última es una concesión que hace el acreedor en
favor del deudor, esto es, una facultad de sustitución que el
acreedor concede a su deudor. Por tanto, el deudor podrá cumplir
con una u otra obligación; pero el acreedor solo podrá reclamar la
obligación principal, mas no la facultativa. Si se extingue la
obligación principal, se extingue la prestación de la obligación y
consecuentemente la obligación misma.
Artículo 1168, Código Civil de 1984
La obligación facultativa se determina únicamente por la prestación principal que
forma el objeto de ella.

Artículo 1169, Código Civil de 1984


La obligación facultativa se extingue cuando la prestación principal es nula o
imposible, aunque la prestación accesoria sea válida o posible de cumplir.

Las obligaciones facultativas son obligaciones simples con una


característica especial, de ahí su nombre. Sin embargo, si la
prestación facultativa resulta imposible de cumplir, la obligación
facultativa pierde su característica especial y deviene en simple,
por lo que se somete a su régimen.
Artículo 1170, Código Civil de 1984
La obligación facultativa se convierte en simple si la prestación accesoria resulta
nula o imposible de cumplir.

Como bien se ha mencionado anteriormente, el Código Civil aplica


implícitamente el principio de favor debitoris. Puede comprobarse
en el artículo 1171.
Artículo 1171, Código Civil de 1984
En caso de duda sobre si la obligación es alternativa o facultativa, se la tiene por
facultativa.

ii. Obligaciones compuestas


Las obligaciones compuestas comprenden varias actividades parte del
deudor. Además, pueden subdividirse en conjuntivas y disyuntivas.

A. Obligaciones conjuntivas
En las obligaciones conjuntivas, el deudor debe cumplir todas y
cada una de las prestaciones a las que se ha obligado.

B. Obligaciones disyuntivas
En las obligaciones disyuntivas, habiendo varias prestaciones, el
deudor puede cumplir solo una de ellas.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

a. Obligaciones alternativas
Artículo 1161, Código Civil de 1984
El obligado alternativamente a diversas prestaciones, sólo debe cumplir por
completo una de ellas.

En las obligaciones alternativas, el deudor tiene una prestación


con diferentes posibilidades de cumplimiento. Por tanto, el
interés del acreedor se satisface cuando el deudor cumple con
solo un comportamiento, pero de manera completa.

Vale hacer la precisión de que dichos comportamientos pueden


ser un abanico de posibilidades, por lo que la prestación no
devendría en nula si se comprendieran indistintamente
obligaciones de dar, de hacer y de no hacer.

Además, al igual que en las obligaciones genéricas, hay un


momento crucial para las obligaciones alternativas, que es la
elección del comportamiento o conducta de la que prestará
observancia el deudor.
Artículo 1162, Código Civil de 1984
[…]
Quien deba practicar la elección no podrá elegir parte de una prestación y
parte de otra.
Son aplicables a estos casos las reglas del artículo 1144.

Una vez que se ha determinado la manera de cumplimiento de


la prestación, puede decirse que la obligación alternativa
deviene en una obligación simple.

En las obligaciones alternativas, desde el inicio de la prestación


están fijados los criterios de selección para su posterior
determinación sin necesidad de un nuevo acuerdo de
voluntades. Si no es así, la obligación alternativa deviene en
indeterminada y por tanto nula.

a) Naturaleza jurídica
La doctrina suele preguntarse por la naturaleza jurídica de
las obligaciones jurídicas. Así, se tienen estas teorías:
1. Las obligaciones alternativas son distintas
obligaciones
La variedad de comportamientos a los que se ve
obligado el deudor en realidad corresponde a distintas
obligaciones. Sin embargo, si fuera así, se estaría frente
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

a obligaciones conjuntivas ya que, al ser obligaciones


distintas, todas son de obligatorio cumplimiento.

2. La obligación alternativa es una obligación con


varias prestaciones
De esta segunda teoría también se logra advertir una
pluralidad de prestaciones que no se corresponden con
la esencia de este tipo de obligaciones. Si tal fuera el
caso de varias prestaciones, cada una de ellas debería
cumplirse de manera obligatoria.

3. La obligación alternativa tiene una prestación con


distintas posibilidades de cumplimiento
Teoría actualmente vigente.

b) Utilidad práctica
La utilidad práctica de las obligaciones alternativas es su
mayor posibilidad de cumplimiento por parte del deudor;
además, en lo que respecta al acreedor, la garantía de
cumplimiento se ensancha al haber mayores posibilidades
de llevarlas a cabo. En resumen, poseen flexibilidad de
contratar y cumplir.

c) Determinación de la prestación
1) Sujeto encargado de la elección
La elección de la prestación le corresponde al deudor,
pero también puede hacerlo el acreedor y un tercero. La
doctrina sostiene que incluso la elección puede quedar
al azar, siempre y cuando ese criterio aleatorio se haya
fijado desde la constitución de la obligación.
Artículo 1162, Código Civil de 1984
La elección de la prestación corresponde al deudor, si no se ha
atribuido esta facultad al acreedor o a un tercero.
Quien deba practicar la elección no podrá elegir parte de una
prestación y parte de otra.
Son aplicables a estos casos las reglas del artículo 1144.

Huelga decir que entre varias posibilidades de


cumplimiento, pueden plantearse algunas que sean
imposibles y/o ilícitas. Sin embargo, el deudor no puede
decantarse por ninguna de ellas porque la obligación
sobrevendría en nula.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

2) Manera a realizarse la elección


Artículo 1163, Código Civil de 1984
La elección se realiza con la ejecución de una de las prestaciones, o
con la declaración de la elección, comunicada a la otra parte, o a
ambas si la practica un tercero o el juez.

La elección puede realizarse con la declaración


comunicada a la otra parte. Y si la elección debía hacerla
un tercero, se entenderá realizada cuando ha sido
comunicada a ambas partes. El Código Civil no
establece ninguna forma solemne para comunicar la
declaración, pero se aconseja utilizar medios que
brinden seguridad jurídica.

La declaración como tal es una manifestación de la


voluntad unilateral y recepticia, porque si bien es cierto
que está dirigida a la otra parte, no requiere de su
aceptación. Sin embargo, para que sea válida tiene que
ser conocida por la otra parte en cuanto a su recepción
y no a su cognición en sentido estricto.
Artículo 1373, Código Civil de 1984
El contrato queda perfeccionado en el momento y lugar en que la
aceptación es conocida por el oferente.

Artículo 1374, Código Civil de 1984


La oferta, su revocación, la aceptación y cualquier otra declaración
contractual dirigida a determinada persona se consideran conocidas
en el momento en que llegan a la dirección del destinatario, a no ser
que este pruebe haberse encontrado, sin su culpa, en la imposibilidad
de conocerla.
Si se realiza a través de medios electrónicos, ópticos u otro análogo,
se presumirá la recepción de la declaración contractual, cuando el
remitente reciba el acuse de recibo.

La otra forma de realizar la elección es con la ejecución


de la prestación.

Una vez declarada la elección o ejecutada la prestación,


la obligación alternativa se convierte en simple. Por lo
tanto, si desde la comunicación de la elección hasta la
efectiva ejecución de la prestación pasase algo, la
obligación se guiará por el régimen de las obligaciones
simples.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

d) Imposibilidad de la prestación
La causa de la imposibilidad de cumplimiento de una
obligación alternativa debe ser sobrevenida, porque si fuera
originaria, la obligación sería nula.

1) Cuando la elección correspondía al deudor


Artículo 1165, Código Civil de 1984
Cuando la elección corresponde al deudor, la imposibilidad de una o
más prestaciones se rige por las reglas siguientes:
1.- Si todas las prestaciones son imposibles por causas imputables
al deudor, la obligación queda resuelta y éste debe devolver al
acreedor la contraprestación, si la hubiere, y asimismo debe pagar la
correspondiente indemnización de daños y perjuicios referidos a la
última prestación que fuera imposible.
2.- Si algunas prestaciones son imposibles, el deudor escoge entre
las subsistentes.
3.- Si todas las prestaciones son imposibles por causas no
imputables al deudor, se extingue la obligación.

Respecto del inciso 1. Como todas las posibilidades de


cumplimiento de la prestación devinieron en imposibles,
la consecuencia necesaria es la resolución de la
obligación. Si el deudor ya recibió la contraprestación,
deberá devolverla al acreedor. Además de pagar la
sustitución de la prestación, es decir, la última prestación
que resultó en imposible. El Código Civil se equivoca al
hablar de indemnización porque su propia naturaleza
obliga a la intervención de un juez.

Respecto del inciso 2. El Código Civil no obliga al deudor


a pagar una indemnización al acreedor porque todavía
tiene alternativas de cumplimiento de la prestación.

Respecto del inciso 3. A pesar de que no hay culpa del


deudor, si ya se hubiese dado contraprestación, tendrá
que devolverla. Por otro lado, el acreedor no tendrá
derecho a solicitar una indemnización.

2) Cuando la elección correspondía al acreedor o un


tercero
Artículo 1166, Código Civil de 1984
Cuando la elección corresponde al acreedor, a un tercero o al juez,
la imposibilidad de una o más prestaciones se rige por las reglas
siguientes:
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

1.- Si todas las prestaciones son imposibles por causas imputables


al deudor, la obligación queda resuelta y éste debe devolver al
acreedor la contraprestación, si la hubiere, y asimismo debe pagar la
correspondiente indemnización de daños y perjuicios referidos a la
prestación imposible que el acreedor señale.
2.- Si algunas prestaciones son imposibles por causas imputables al
deudor, el acreedor puede elegir alguna de las subsistentes;
disponer, cuando ello corresponda, que el tercero o el juez la escoja;
o declarar resuelta la obligación. En este último caso, el deudor
devolverá la contraprestación al acreedor, si la hubiere, y pagará la
correspondiente indemnización de daños y perjuicios referidos a la
prestación imposible que el acreedor señale.
3.- Si algunas prestaciones son imposibles sin culpa del deudor, la
elección se practica entre las subsistentes.
4.- Si todas las prestaciones son imposibles sin culpa del deudor, se
extingue la obligación.

Respecto del inciso 1. Dada la culpa del deudor, la


obligación queda resuelta y si hubiera recibido la
contraprestación, deberá devolverla. Además, tendrá
que pagar el monto que el acreedor señale en referencia
a una de las prestaciones devenidas en imposibles.

Respecto del inciso 2. El acreedor posee varias


alternativas de elección. La primera de ellas es elegir
entre las subsistentes o disponer que el tercero la escoja,
cuando fuere el caso. También puede resolver la
obligación, solicitar la repetición del pago y la sustitución
de la prestación imposible que él mismo señale.

Respecto del inciso 3. Al no haber culpa del deudor, el


acreedor tendrá que escoger entre las subsistentes.

Respecto del inciso 4. La obligación se resuelve por


imposibilidad. El deudor, al no tener culpa, no estará
obligado a pagar alguna indemnización.

Una lectura rápida del Código Civil llevará a la


observación de que no prevé la culpa del acreedor en el
caso de las obligaciones alternativas. Sin embargo,
podrá establecerse tal cuando fuera necesario a través
de la interpretación sistemática de todas las normas que
componen su cuerpo legislativo.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

IV. Obligaciones divisibles y obligaciones indivisibles


i. Obligaciones divisibles
Son aquellas obligaciones cuyo objeto o prestación será susceptible a
un fraccionamiento. Debido a ello, su cumplimiento puede realizarse
mediante la acumulación de prestaciones parciales. Huelga decir que
las prestaciones parciales son cuantitativamente diferentes, pero
cualitativamente iguales.

También es importante mencionar que el hecho de que una obligación


sea divisible por naturaleza no implica el cumplimiento parcial de la
obligación, es decir, no autoriza al deudor a realizar la prestación en
partes. El Código Civil protege el interés del acreedor.
Artículo 1221, Código Civil de 1984
No puede compelerse al acreedor a recibir parcialmente la prestación objeto de la
obligación, a menos que la ley o el contrato lo autoricen.
Sin embargo, cuando la deuda tiene una parte líquida y otra ilíquida, puede exigir el
acreedor el pago de la primera, sin esperar que se liquide la segunda.

A. Clasificación de las obligaciones divisibles


a. Según la forma de obligarse
Según la forma de obligarse (con más de un acreedor o más de
un deudor), se clasifican en obligaciones parciarias,
mancomunadas y solidarias.

a) Obligaciones parciarias
La obligación parciaria consiste en que la prestación se
divide en tantas deudas o créditos como acreedores y
deudores haya. Cada sujeto es deudor o acreedor solo de
parte de la prestación, que debe ser divisible para que la
parciariedad pueda operar.

Si hay varios deudores, cada deuda se convierte en una


prestación independiente. La consecuencia necesaria de
ello es que cada deudor responde por su parte, por lo que la
insolvencia de uno no obliga a los otros. Además, todas las
concesiones que el acreedor haga a un deudor no afectan
su relación con los demás; así como la constitución en mora
de un deudor tampoco los afectará, salvo que se haya
pactado la mora automática.

Del otro supuesto, si hay varios acreedores, el deudor


deberá pagar en partes iguales a cada acreedor. Cada
crédito es independiente.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Además, el Código Civil presume la parciariedad cuando no


se establece expresamente la solidaridad.
Artículo 1172, Código Civil de 1984
Si son varios los acreedores o los deudores de una prestación divisible y
la obligación no es solidaria, cada uno de los acreedores sólo puede pedir
la satisfacción de la parte del crédito que le corresponde, en tanto que
cada uno de los deudores únicamente se encuentra obligado a pagar su
parte de la deuda.

Artículo 1183, Código Civil de 1984


La solidaridad no se presume. Sólo la ley o el título de la obligación la
establecen en forma expresa.

Cabe hacer la precisión de que el legislador peruano


considera a parciariedad o divisibilidad igual a la
mancomunidad.

b) Obligaciones mancomunadas
La obligación mancomunada consiste en que un grupo en
su conjunto es acreedor o deudor de la prestación.

c) Obligaciones solidarias
La obligación solidaria opera cuando entre todos los
deudores y acreedores existe una sola obligación, que es
exigible íntegramente por cualquier de los segundos
(acreedores) a los primeros (deudores).

ii. Obligaciones indivisibles


Serán obligaciones indivisibles aquellas cuya prestación no es
susceptible a un fraccionamiento. La indivisibilidad de las obligaciones
deriva por naturaleza, por contrato (las partes pueden convertir una
obligación divisible en indivisible) y por ley. Cuando la obligación es
indivisible por naturaleza no cabe pacto en contrario. Por tanto, en
estos casos la naturaleza de la prestación es un límite objetivo a la
voluntad de las partes.

Artículo 1175, Código Civil de 1984


La obligación es indivisible cuando no resulta susceptible de división o de
cumplimiento parcial por mandato de la ley, por la naturaleza de la prestación o por el
modo en que fue considerada al constituirse.

Muchas de las obligaciones de dar son indivisibles, pero algunas de


hacer son indivisibles, específicamente aquellas que se realizan en un
solo acto. Lo mismo puede decirse de las obligaciones de no hacer.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

En la copropiedad, la división es ideal, mas no real. Únicamente se


divide el derecho de propiedad, mas no la cosa. Una obligación es
divisible porque materialmente se puede dividir. La divisibilidad del
derecho no conlleva a la divisibilidad de la prestación.

V. Obligaciones líquidas y obligaciones ilíquidas


Artículo 1221, Código Civil de 1984
[…]
Sin embargo, cuando la deuda tiene una parte líquida y otra ilíquida, puede exigir el
acreedor el pago de la primera, sin esperar que se liquide la segunda.

i. Obligaciones líquidas
Son líquidas cuando el monto de la obligación de dar se encuentra
determinado numéricamente, es decir que se conoce con exactitud la
cantidad de cosas o unidades monetarias debidas, o cuando bastaría
una simple operación aritmética para saber u obtener su cuantía
exacta.

Es importante esta clasificación porque únicamente cuando la


obligación es líquida se puede constituir en mora al deudor y, además,
porque puede solicitarse al juez la ejecución forzosa.

ii. Obligaciones ilíquidas


Las obligaciones ilíquidas son aquellas cuya cuantía no se conoce.
Verbigracia, la indemnización por daños y perjuicios; en donde la
obligación existe, pero no el monto, que será liquidado posteriormente
por el juez.

Dado que las obligaciones ilíquidas son inexigibles, muchas veces el


deudor puede valerse de este argumento para no cumplir con su
prestación o deuda. Frente a ello, el Código Civil dice lo siguiente:
Artículo 1221, Código Civil de 1984
[…]
Sin embargo, cuando la deuda tiene una parte líquida y otra ilíquida, puede exigir el
acreedor el pago de la primera, sin esperar que se liquide la segunda.

El anterior artículo rompe el principio de indivisibilidad de la prestación


en favor del interés del acreedor.

VI. Obligaciones pecuniarias


Esta clasificación es una de las más importantes que existen en el tráfico
jurídico porque la economía está basada en el intercambio de dinero.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

El régimen de las obligaciones de dar suma de dinero se puede encontrar


entre los artículos 1234 y 1237, y 1242 y 1250 del Código Civil.

i. Introducción
A. Función económica y el sistema monetario
Desde el punto de vista económico, el dinero sirve para medir el
valor de las cosas. Concretamente, es un medio de intercambio de
bienes. Y desde el punto de vista jurídico, es el medio de pago por
excelencia.

B. Curso monetario
De manera acertada se ha dicho que una de las funciones de la
moneda es servir como medio de intercambio. Y para tales efectos,
debe tener circulación en el tráfico económico: el curso de la
moneda o curso monetario, la manera en cómo circula la moneda.

a. Curso fiduciario
Está referido a aquellos instrumentos o medios que circulan en
el ámbito económico y entre las personas, quienes tienen fe en
que son convertibles en dinero. Ejemplo de estos medios son
los cheques, pagarés, títulos valores, etc.

b. Curso legal
Está referido a las monedas que el Estado acepta como
posibles vehículos o medios para extinguir obligaciones. En
términos simples, son las monedas con las que se puede pagar
servicios, adquirir bienes, etc.

c. Curso forzoso
Está referida a la moneda impuesta a los particulares por el
Estado para extinguir obligaciones. Generalmente se identifica
con la moneda nacional.

C. Dinero
a. Dinero metálico
Es aquel dinero cuyo valor intrínseco coincide con el valor de la
moneda. Corresponde a economías muy antiguas, en las que
la moneda valía por su peso.

b. Dinero fiduciario
Dinero cuyo valor intrínseco no se corresponde con el valor del
material con el que está hecho la moneda o los billetes.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

a) Dinero corriente
Es el billete o la moneda acuñada en un determinado país
por la institución encargada.

b) Dinero escriturario, bancario o de giro


Documentos u órdenes de pago girados hacia bancos y que
se convertirá en dinero.

c) Dinero inteligente o de plástico


Dinero representado por las tarjetas de crédito.

D. Sistema monetario
Es el conjunto de reglas al que se somete la moneda de un país.

ii. Deudas de dinero


A. Deudas de moneda individual
Deudas donde el dinero formará parte de la obligación, pero no
como valor intrínseco sino como bien o cosa. Verbigracia, que el
objeto de la prestación sea entregar la moneda conmemorativa por
la Independencia del Perú.

B. Deudas de especie monetaria


El deudor se compromete a entregar un dinero que forma parte de
un género monetario. Verbigracia, la entrega de veinte monedas
acuñadas entre 1900 y 1930.

C. Deudas de suma de dinero


El dinero es considerado como unidad de valor, de intercambio de
bienes.

A manera de crítica, en las deudas de moneda individual el dinero


no funciona como un medio de intercambio, sino como un bien
específico; por lo que correspondería a una obligación de dar
bienes ciertos. Por otro lado, en las deudas de especie monetaria
tampoco el dinero se toma como unidad de valor, sino como un
bien; de lo que se sigue que correspondería a obligaciones de dar
bienes inciertos o genéricos limitados. Por último, las deudas de
suma dinero son verdaderas obligaciones pecuniarias porque el
dinero es considerado como unidad de valor.

a. Características del dinero


Como parte de la obligación pecuniaria, el dinero es un bien un
bien mueble; fungible, porque se puede remplazar, incluso la
insolvencia y quiebra no extinguen la obligación; consumible,
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

en el sentido de gasto o desaparición del patrimonio de deudor;


fructífero, cuyos frutos civiles son los intereses.

b. Distinción entre las deudas de dinero y las deudas de valor


Las deudas de dinero son también conocidas como deudas de
valuta y están referidas al dinero como medio de intercambio.
Es decir que el pago de la prestación será en la unidad
monetaria que se pactó en la constitución de la obligación. Su
ventaja, por tanto, estará relacionada con la seguridad jurídica,
puesto que se tendrá conocimiento de cuanto se va a obtener
o devolver, según sea el caso.

Por su parte, con las deudas de valor se busca mantener el


poder adquisitivo del dinero. De lo que se concluye que su
ventaja será que mantendrá su valor a pesar de la devaluación
de la moneda.

c. Principios del dinero


De antemano es correcto precisar que en el Perú se aceptan
ambas teorías.

a) Principio nominalista
El deudor debe devolver al acreedor la misma cantidad de
unidades monetarias pactadas al momento de la obligación.
Se corresponde con las deudas de dinero o de valuta.
Artículo 1234, Código Civil de 1984
El pago de una deuda contraída en moneda nacional no podrá exigirse
en moneda distinta, ni en cantidad diferente al monto nominal
originalmente pactado.

b) Principio valorativo
El deudor debe devolver al acreedor un valor adquisitivo de
la moneda o dinero, pues no se ha establecido cuántas
unidades monetarias se deben devolver. Ejemplo de ello
son las deudas de valor.
Huelga decir que una vez que una deuda de valor se vuelve
líquida, su nueva denominación corresponderá a la de
deuda nominal.
Artículo 1235, Código Civil de 1984
No obstante lo establecido en el artículo 1234, las partes pueden acordar
que el monto de una deuda contraída en moneda nacional sea referido a
índices de reajuste automático que fije el Banco Central de Reserva del
Perú, a otras monedas o a mercancías, a fin de mantener dicho monto en
valor constante.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

El pago de las deudas a que se refiere el párrafo anterior se efectuará en


moneda nacional, en monto equivalente al valor de referencia, al día del
vencimiento de la obligación.
Si el deudor retardara el pago, el acreedor puede exigir, a su elección,
que la deuda sea pagada al valor de referencia al día del vencimiento de
la obligación o al día en que se efectúe el pago.

d. Medidas correctoras para el principio nominalista


a) Medidas legales
Son aquellas medidas impuestas por el legislador o el
Estado ante una situación económica determinada.

b) Medidas judiciales
Son aquellas medidas impuestas mediante una resolución
judicial en función del principio rebus sic stantibus. Este
principio sostiene que cualquier alteración sustancial de las
circunstancias concurrentes en el momento de la
celebración del contrato puede dar lugar a la modificación
de las estipulaciones. Tal es el caso de la excesiva
onerosidad de la prestación.
Artículo 1440, Código Civil de 1984
En los contratos conmutativos de ejecución continuada, periódica o
diferida, si la prestación llega a ser excesivamente onerosa por
acontecimientos extraordinarios e imprevisibles, la parte perjudicada
puede solicitar al juez que la reduzca o que aumente la contraprestación,
a fin de que cese la excesiva onerosidad.
Si ello no fuera posible por la naturaleza de la prestación, por las
circunstancias o si lo solicitara el demandado, el juez decidirá la
resolución del contrato. La resolución no se extiende a las prestaciones
ejecutadas.

c) Medidas convencionales
Son aquellas medidas impuestas por las partes en la
constitución de la relación obligatoria. A través de ellas se
busca actualizar el valor adquisitivo de la deuda. Estas
cláusulas, llamadas también estabilizadoras, antes eran
consideradas ilícitas porque desestabilizaban el sistema
monetario. No obstante, la doctrina ha dejado de
catalogarlas así.

1) Cláusula de valor oro o valor plata


Esta cláusula, como las demás, busca mantener el valor
adquisitivo de la deuda en el tiempo.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Al momento del vencimiento de la obligación, el deudor


deberá pagar una cantidad de dinero que permita
adquirir la misma cantidad de oro, plata u otro metal
precioso que se podía obtener al constituirse la
obligación.

Bien se ve aquí que el precio del metal precioso sobre el


que se base la cláusula servirá como medio de
actualización del monto de la deuda.

2) Cláusula de valor en especie o de pago en especie


Cláusula por la cual la obligación —el monto de la
deuda— irá en función de una determinada mercancía.

3) Cláusula de valor en moneda extranjera


Cláusula de cuyo mismo nombre se entiende que la
obligación irá en función de una moneda extranjera.
Dicho de otra manera, el deudor devolverá el monto de
la deuda aplicando la actualización con una moneda
extranjera.

4) Cláusula de los índices


Cláusula según la cual la obligación irá en función de un
índice para actualizar mensualmente la cuota de pago.
Esto ser ve en España, mas no en Perú.

e. Obligaciones en moneda extranjera


Son obligaciones pecuniarias pactadas en una moneda distinta
a la moneda oficial de un país.

No obstante, se puede convertir el monto de la moneda


extranjera en un monto de moneda nacional, salvo pacto en
contrario.

VII. Obligaciones de intereses


El interés es la compensación económica que recibe el acreedor por
el hecho de haber prestado capital al deudor. Si bien es cierto que es
una obligación pecuniaria; no obstante, su carácter esencial es el de
ser accesoria. En tal sentido, debe existir un contrato principal.

El interés normalmente se pacta en dinero, pero también puede


estipularse en otra especie. Huelga decir que todo préstamo de dinero
se presume con intereses. Es decir que los intereses no se establecen
según pacto en contrario, sino que presumen legalmente.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Ahora bien, el pacto entre las partes es importante porque permite


establecer el monto del interés o eximir al deudor del pago del mismo
y hacer del préstamo en gratuito.
Artículo 1247, Código Civil de 1984
En la obligación no pecuniaria, el interés se fija de acuerdo al valor que tengan los
bienes materia de la obligación en la plaza donde deba pagarse al día siguiente del
vencimiento, o con el que determinen los peritos si el bien ha perecido al momento de
hacerse la evaluación.

Artículo 1663, Código Civil de 1984


El mutuatario debe abonar intereses al mutuante, salvo pacto distinto.

i. Clases de intereses
A. Legales
Es el establecido por la ley o por el Estado. Es el más bajo del
mercado y, si las partes no pactan respecto de él, se presume.
Artículo 1245, Código Civil de 1984
Cuando deba pagarse interés, sin haberse fijado la tasa, el deudor debe abonar
el interés legal.

B. Convencionales
Son los establecidos por las partes. Pueden ser compensatorios o
moratorios y pueden pactarse en simultáneo en un contrato.

a. Intereses compensatorios
Su finalidad es compensar el monto prestado al deudor.

b. Intereses moratorios
Su finalidad es recuperar la demora del pago de la deuda.

ii. Tasa de interés


La tasa de interés es el porcentaje del interés legal o convencional que
debe pagar el deudor. El Banco Central de Reserva del Perú establece
la tasa de interés legal y el tope máximo del interés convencional, por
lo que se deduce sobre esto último que busca evitar la usura. La tasa
de interés se aplica para las obligaciones entre particulares. Huelga
mencionar que actualmente se presencia una liberalización de
intereses respecto de las instituciones registradas en el sistema
financiero, que se rigen por su ley especial (Ley de Bancos).
Artículo 1243, Código Civil de 1984
La tasa máxima del interés convencional compensatorio o moratorio, es fijada por el
Banco Central de Reserva del Perú.
Cualquier exceso sobre la tasa máxima da lugar a la devolución o a la imputación al
capital, a voluntad del deudor.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

iii. Anatocismo
Es un interés compuesto. Es la capitalización del interés, es decir que
el interés no extinguido se convierte en nuevo capital. Desde la
posición del deudor, esto resulta perjudicial para él porque puede
derivar en usura.

No puede pactarse en todas las obligaciones, salvo se trate de cuentas


corrientes bancarias, mercantiles u otras determinadas por la ley.
Artículo 1249, Código Civil de 1984
No se puede pactar la capitalización de intereses al momento de contraerse la
obligación, salvo que se trate de cuentas mercantiles, bancarias o similares.

También puede pactarse entre las partes siempre y cuando cumpla


con ciertos requisitos.
Artículo 1250, Código Civil de 1984
Es válido el convenio sobre capitalización de intereses celebrado por escrito después
de contraída la obligación, siempre que medie no menos de un año de atraso en el
pago de los intereses.

VIII. Obligaciones de tracto único y obligaciones de tracto sucesivo


En función de la duración de las obligaciones a lo largo del tiempo pueden
clasificarse en de tracto único y de tracto sucesivo.

i. Obligaciones de tracto único


La obligación se agota en un solo acto del deudor.

ii. Obligaciones de tracto sucesivo


La obligación se agota en una serie de actos del deudor. Es correcto
sostener además que la obligación del deudor puede variar cada cierto
tiempo o, en algunos casos, devenir en duradera. Asimismo, si hubiera
circunstancias que impidiesen el desarrollo de la obligación, puede
aplicarse el principio de rebus sic stantibus y así someterse a revisión,
ajuste o resolución el contrato.

Estas obligaciones pueden subclasificarse en obligaciones continuas


y obligaciones periódicas.

A. Obligaciones continuas
Estas obligaciones se desarrollan de forma ininterrumpida.
Verbigracia, el suministro de agua y luz.

B. Obligaciones periódicas
Estas obligaciones se desarrollan cada cierto tiempo. Verbigracia,
el pago del arrendamiento por parte del inquilino o arrendatario.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

5. Clases de obligaciones por razón del sujeto


En la relación jurídica-obligatoria puede existir pluralidad de sujetos en cada
o ambas partes. Si es respecto de los acreedores, se hablará de pluralidad
activa; respecto de los deudores, pluralidad pasiva; o de ambos, pluralidad
mixta. Esto generará como consecuencia los fenómenos de la fragmentación,
mancomunidad y solidaridad. Y de cada uno de ellos se predica un tipo de
relación obligatoria; siendo respectivamente la obligación parciaria, la
obligación mancomunada y la obligación solidaria.

La precisión anterior plantea la cuestión de que si por haber varios sujetos en


una parte, hay varias obligaciones o en realidad se trata de una sola. Una
respuesta acertada dirá que en cualesquiera de las obligaciones anteriores
siempre se encontrará una prestación única, que se dividirá —según
corresponda a cada régimen— para su pago o cumplimiento.

I. Mancomunidad y solidaridad
i. Obligaciones parciarias
Se le denomina también obligación divisible y consiste en que la
prestación se divide en tantas deudas o créditos como acreedores y
deudores haya. Cada sujeto es deudor o acreedor solo de parte de la
prestación, que debe ser divisible para que la parciariedad pueda
operar. La división puede ser en partes iguales o desiguales.

El Código Civil peruano, en un evidente error terminológico, las


denomina «mancomunadas» y les proporciona el tratamiento de tales.

ii. Obligaciones mancomunadas


La obligación mancomunada consiste en que un grupo en su conjunto
es acreedor o deudor de la prestación. Es decir que todos pagan o
todos cobran en común. Sin embargo, el Código Civil les ha otorgado
el tratamiento propio de las obligaciones parciarias.
Artículo 1182, Código Civil de 1984
Las obligaciones mancomunadas se rigen por las reglas de las obligaciones divisibles.

El término mancomunidad proviene de «mano en común». Huelga


decir que este tipo de obligaciones son muy utilizadas por los bancos
porque tienen como finalidad asegurar la deuda contraída.

iii. Obligaciones solidarias


La obligación solidaria opera cuando entre todos los deudores y
acreedores existe una sola obligación, que es exigible íntegramente
por cualquier de los segundos (acreedores) a los primeros (deudores).
Además, un deudor puede pagar a cualquiera de los acreedores y así
liberar a todos aquellos que se encuentran en la posición pasiva de la
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

relación jurídica-obligatoria. Asimismo, si un deudor es insolvente, la


deuda puede ser soportada por los otros deudores.

El Código Civil peruano tiene como regla general la no presunción de


la solidaridad. En realidad, se presume la mancomunidad por ser
menos gravosa para el deudor.
Artículo 1183, Código Civil de 1984
La solidaridad no se presume. Sólo la ley o el título de la obligación la establecen en
forma expresa.

Del artículo previamente visto se puede señalar que la solidaridad se


establece expresamente por pacto entre las partes (solidaridad
voluntaria) y así romper la presunción de la mancomunidad; o por la
ley (solidaridad legal).
Artículo 1800, Código Civil de 1984
Si son varios los mandantes, sus obligaciones frente al mandatario común son
solidarias.

Artículo 1886, Código Civil de 1984


Siendo varios los fiadores de un mismo deudor y por una misma deuda y todos ellos
se hubieran obligado a prestaciones iguales, cada uno responde por el íntegro de su
obligación, salvo que se haya pactado el beneficio de la división.

La mayoría de relaciones jurídicas-obligatorias actuales establecen la


solidaridad porque proporciona mayor seguridad jurídica al acreedor y
facilita el cobro de la prestación.

II. Régimen de las obligaciones mancomunadas


Con acierto se ha dicho anteriormente que las obligaciones
mancomunadas se rigen por las reglas de las obligaciones divisibles. El
Código Civil les atribuye el fenómeno de la fragmentación y las trata
erróneamente como obligaciones parciarias.
Artículo 1182, Código Civil de 1984
Las obligaciones mancomunadas se rigen por las reglas de las obligaciones divisibles.

En este tipo de obligaciones, la prestación se fragmentará o dividirá en


tantos deudores o acreedores existan. Además, se clasificarán en
obligaciones mancomunadas activas (varios acreedores), obligaciones
mancomunadas pasivas (varios deudores) y obligaciones
mancomunadas mixtas (varios deudores y acreedores).

Por este régimen, se refutan créditos o deudas totalmente


independientes. En tal sentido, solo se puede cobrar lo que a cada deudor
le corresponde. Además, toda acción judicial que se interponga en contra
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

de un deudor no afecta a los otros, es decir que la situación de un deudor


no afecta a los demás. Tales son los casos que si un deudor incurre en
mora, insolvencia o se le perdona la deuda; la situación de los otros
deudores seguirá siendo la misma frente al o los acreedores.

Con anterioridad también se ha mencionado que salvo pacto en contrario,


se presume la mancomunidad y la prestación o el objeto se divide en
partes iguales. Sin embargo, respecto a esta segunda presunción debe
prestarse atención a la naturaleza de las cosas. Aun así, en cualquier
obligación mancomunada se dará una ruptura al principio de integridad
del pago.

Ahora bien, las verdaderas obligaciones mancomunadas son indivisibles.


Su régimen se deriva del tratamiento que el Código Civil prevé para las
obligaciones indivisibles con pluralidad de sujetos, pues también puede
presentarse la mancomunidad activa, pasiva o mixta. A diferencia de la
solidaridad, es un régimen menos utilizado.

III. Régimen de las obligaciones solidarias


Las obligaciones solidarias pueden clasificarse en activas, pasivas o
mixtas. De ello dependerá su régimen, pues se establecerá que cualquier
acreedor podrá cobrar la integridad del pago o cualquier deudor deberá
pagar la totalidad de la deuda respectivamente. Tienen mucha utilidad
práctica.

Además, en cada una de ellas pueden presentarse relaciones internas,


referidas a la distribución del pago ante los acreedores; y relaciones
externas, referidas la manera en cómo se ejecuta el pago y cómo se
realiza el cobro.

Con el pago, la solidaridad se extingue. No obstante, una vez realizado,


surgen las relaciones internas de la solidaridad.

i. Obligaciones solidarias activas


A. Relaciones externas
En caso de solidaridad activa, cualquier acreedor puede cobrar
íntegramente la prestación al deudor.
Artículo 1185, Código Civil de 1984
El deudor puede efectuar el pago a cualquiera de los acreedores solidarios, aun
cuando hubiese sido demandado sólo por alguno.

Además, como un acto conservativo de la obligación solidaria, el


acreedor tiene la facultad de ejercer una acción sin intervención de
los otros acreedores. Verbigracia, la acción pauliana.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

El deudor tiene derecho a pagar la deuda y si un acreedor se niega


injustificadamente a recibirla, entra él en mora, pero respecto de
los demás no surte efecto.
Artículo 1194, Código Civil de 1984
La constitución en mora de uno de los deudores o acreedores solidarios no surte
efecto respecto a los demás.
La constitución en mora del deudor por uno de los acreedores solidarios, o del
acreedor por uno de los deudores solidarios, favorece a los otros.

Asimismo, el deudor puede elegir a cualquier acreedor para hacer


el pago de la prestación porque cualquiera de ellos tiene la
capacidad de recepcionar el pago y liberar al deudor de la
obligación. La solidaridad se da por concluida mediante el pago o
cualquier modalidad de extinción de obligaciones, tales como
dación en pago, condonación, compensación, etc.
Artículo 1188, Código Civil de 1984
La novación, compensación, condonación o transacción entre el acreedor y uno
de los deudores solidarios sobre la totalidad de la obligación, libera a los demás
codeudores.
En estos casos las relaciones entre el deudor que practicó tales actos y sus
codeudores, se rigen por las reglas siguientes:
1.- En la novación, los codeudores responden, a su elección, por su parte en la
obligación primitiva o por la proporción que les habría correspondido en la nueva
obligación.
2.- En la compensación, los codeudores responden por su parte.
3.- En la condonación, se extingue la obligación de los codeudores.
4.- En la transacción, los codeudores responden, a su elección, por su parte en la
obligación original o por la proporción que les habría correspondido en las
prestaciones resultantes de la transacción.

Artículo 1189, Código Civil de 1984


Si los actos señalados en el primer párrafo del artículo 1188 se hubieran limitado
a la parte de uno solo de los deudores, los otros no quedan liberados sino en
cuanto a dicha parte.

Artículo 1190, Código Civil de 1984


Cuando los actos a que se refiere el artículo 1188 son realizados entre el deudor
y uno de los acreedores solidarios sobre la totalidad de la obligación, ésta se
extingue respecto a los demás coacreedores. El acreedor que hubiese efectuado
cualquiera de estos actos, así como el que cobra la deuda, responderá ante los
demás de la parte que les corresponda en la obligación original.
Si tales actos se hubieran limitado a la parte que corresponde a uno solo de los
acreedores, la obligación se extingue únicamente respecto a dicha parte.

Artículo 1191, Código Civil de 1984


La consolidación operada en uno de los acreedores o deudores solidarios sólo
extingue la obligación en la parte correspondiente al acreedor o al deudor.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

B. Relaciones internas
Una vez efectuado el pago, la solidaridad se extingue. Sin
embargo, subyacen relaciones internas entre los acreedores. Así,
se tiene entendido que el acreedor que recibe el pago debe
encargarse de la notificación a los demás acreedores para repartir
la prestación según lo pactado. Si tal no fuese el caso, los
acreedores restantes poseen una acción de regreso contra el
acreedor que ha cobrado la totalidad de la deuda. En caso de
perjuicio a los primeros, el segundo debe indemnizarlos.
Artículo 1201, Código Civil de 1984
Si el acreedor renuncia a la solidaridad respecto de uno de los deudores, y alguno
de los otros es insolvente, la parte de éste se distribuye a prorrata entre todos los
codeudores, comprendiendo a aquél que fue liberado de la solidaridad.

ii. Obligaciones solidarias pasivas


A. Relaciones externas
Cualquiera de los deudores puede pagar la totalidad de la deuda.
De la misma manera, el acreedor puede exigir el pago íntegro de
la prestación a cualquiera de los deudores. Además, puede cobrar
de manera sucesiva o simultánea hasta ver satisfecha la deuda. A
esta facultad por parte del acreedor se denomina ius variandi.

En caso de interpelación por parte del acreedor a cualquier deudor


solidario, se pueden interponer contra el primero excepciones
personales o las que emanen de la obligación solidaria.
Artículo 1192, Código Civil de 1984
A cada uno de los acreedores o deudores solidarios sólo pueden oponérseles las
excepciones que les son personales y las comunes a todos los acreedores o
deudores.

Las excepciones solidarias se interponen, por ejemplo, cuando el


acreedor cobra la prestación antes de haberse vencido el plazo.
Por su parte, las excepciones personales se interponen, por
ejemplo, cuando de la deuda total se rebaja una parte por
compensación, ya que el deudor poseía un derecho de crédito
anterior respecto del acreedor.

El acreedor puede condonar la deuda, permitir una compensación


o dación en pago para extinguir la obligación. O bien el deudor
hacer el pago íntegro de la prestación. En cualquiera de las formas
antes mencionadas, siempre se extinguirá la obligación solidaria.

B. Relaciones internas
El deudor que paga la totalidad de la deuda puede dirigirse contra
el resto de deudores para cobrarles la parte de la deuda que les
corresponde. Si tal fuera el caso, tiene a su disposición la acción
de reclamación, que se rige por las normas correspondientes a las
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

obligaciones mancomunadas, es decir, obligaciones parciarias o


divisibles según el Código Civil peruano.

También puede presentarse un caso de subrogación legal,


supuesto en el que una vez efectuado el pago, automáticamente el
deudor pagante se subroga en la posición del antiguo acreedor con
las mismas garantías que poseía respecto de los otros deudores.
Artículo 1260, Código Civil de 1984
La subrogación opera de pleno derecho en favor:
1.- De quien paga una deuda a la cual estaba obligado, indivisible o
solidariamente, con otro u otros.
[…]

En caso de insolvencia de uno de los deudores, la deuda deberá


ser soportada por los otros codeudores y su cuota —del deudor
insolvente— se reparte entre los demás de acuerdo con sus
intereses en la obligación o en porciones iguales. Además, los
codeudores que soportaron la cuota del insolvente pueden
recobrar lo gastado sin necesidad de esperar que la insolvencia
sea declarada judicialmente.

iii. Obligaciones solidarias impropias


Este tipo de relaciones guardan apariencia de solidaridad, pero en
realidad no lo son, pues la solidaridad no emana de una sola obligación
jurídica o no tiene una única causa obligacional.

6. Clases de obligaciones por razón del vínculo


I. Obligaciones principales y accesorias
Dependiente de su relación a una obligación principal puede darse esta
clasificación. En tal sentido, las obligaciones principales son autónomas;
mientras que las obligaciones accesorias necesitan de una obligación
principal porque por sí solas no existen. Tal es el caso de una hipoteca,
fianza o garantía.

II. Obligaciones unilaterales y bilaterales


En las obligaciones unilaterales surgen obligaciones por una sola parte o
para una sola parte, mientras que en las obligaciones bilaterales surgen
obligaciones para ambas partes.

III. Obligaciones puras, condicionales y a término


Las obligaciones puras son aquellas que su eficacia no depende de
ninguna modalidad (condición, término o plazo); las obligaciones
condicionales son aquellas que su eficacia está sometida a una condición,
sea suspensiva o resolutoria; y las obligaciones a término, aquellas que
su eficacia está sometida a un plazo, sea inicial o final.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

7. El cumplimiento de la obligación
I. El pago o cumplimiento
En sentido lato, el pago es una forma de extinguir obligaciones. No
obstante, aceptar tal concepto implicaría también incluir medios en los que
el acreedor podría no ver satisfecho su interés, como la condonación, la
compensación, etc.

Por otro lado, desde una acepción restringida de pago, se puede sostener
que es la entrega de una suma de dinero o de un bien. Sin embargo, no
siempre es así porque las obligaciones pueden ser de diferentes tipos a
las de dar, como las de hacer y las de no hacer.

Por tanto, el pago es el cumplimiento exacto de la prestación o, dicho de


otra manera, el desarrollo del comportamiento al que el deudor se ha
comprometido.
Artículo 1220, Código Civil de 1984
Se entiende efectuado el pago sólo cuando se ha ejecutado íntegramente la prestación.

Por analogía al verdadero concepto de pago, ciertas veces se habla del


cumplimiento forzoso, pero tal es un término erróneo. El cumplimiento
siempre es voluntario, nunca obligado o utilizando medios coercitivos. Por
tanto, hablar de cumplimiento forzoso es afirmar, contrario sensu, un
incumplimiento de la obligación.

i. Requisitos objetivos del pago


A. Identidad
Este principio está referido al cumplimiento exacto de la prestación
pactada en la constitución de la obligación. Es importante recordar
que la identidad abarca tanto los aspectos principales como
accesorios de la obligación.

Aplicado este principio a una obligación de dar bienes ciertos.


Artículo 1132, Código Civil de 1984
El acreedor de bien cierto no puede ser obligado a recibir otro, aunque éste sea
de mayor valor.
Si el acreedor recibe un bien diferente, entonces se habrá dado un
caso de dación en pago.

Aplicado este principio a una obligación genérica.


Artículo 1143, Código Civil de 1984
En las obligaciones de dar bienes determinados sólo por su especie y cantidad,
la elección corresponde al deudor, salvo que lo contrario resulte de la ley, del título
de la obligación o de las circunstancias del caso.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Si la elección corresponde al deudor, debe escoger bienes de calidad no inferior


a la media. Si la elección corresponde al acreedor, debe escoger bienes de
calidad no superior a la media. Si la elección corresponde a un tercero, debe
escoger bienes de calidad media.

Artículo 1148, Código Civil de 1984


El obligado a la ejecución de un hecho debe cumplir la prestación en el plazo y
modo pactados o, en su defecto, en los exigidos por la naturaleza de la obligación
o las circunstancias del caso.

Aplicado este principio a obligaciones pecuniarias.


Artículo 1237, Código Civil de 1984
Pueden concertarse obligaciones en moneda extranjera no prohibidas por leyes
especiales.
Salvo pacto en contrario, el pago de una deuda en moneda extranjera puede
hacerse en moneda nacional al tipo de cambio de venta del día y lugar del
vencimiento de la obligación.
En el caso a que se refiere el párrafo anterior, si no hubiera mediado pacto en
contrario en lo referido a la moneda de pago y el deudor retardara el pago, el
acreedor puede exigir, a su elección, que el pago en moneda nacional se haga al
tipo de cambio de venta en la fecha de vencimiento de la obligación, o al que rija
el día del pago.

B. Integridad
También se denomina principio de indivisibilidad y está referido al
cumplimiento íntegro de la prestación. En tal sentido, si el bien
posee accesorios y/o frutos, tendrán que darse junto a él.
Artículo 1220, Código Civil de 1984
Se entiende efectuado el pago sólo cuando se ha ejecutado íntegramente la
prestación.

Pese a este principio, el acreedor posee la facultad de recibir pagos


parciales, pero tal acción no significa que la obligación se extingue.
Artículo 1221, Código Civil de 1984
No puede compelerse al acreedor a recibir parcialmente la prestación objeto de
la obligación, a menos que la ley o el contrato lo autoricen.
[…]

Por otro lado, este principio posee una excepción en cuanto al pago
de obligaciones líquidas e ilíquidas.
Artículo 1221, Código Civil de 1984
[…]
Sin embargo, cuando la deuda tiene una parte líquida y otra ilíquida, puede exigir
el acreedor el pago de la primera, sin esperar que se liquide la segunda.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

ii. Requisitos subjetivos del pago


Los sujetos del pago son las personas hábiles para realizar y recibir el
pago, es decir, los mismos sujetos de la obligación: el deudor y el
acreedor respectivamente.

Sin embargo, al momento del pago pueden intervenir terceros. Así, se


abren paso las figuras de pago hecho por tercero, pago hecho al
acreedor aparente y pago hecho a tercero.

A. Solvens
El solvens es el sujeto activo del pago y debe poseer capacidad de
ejercicio. Es, pues, aquel que realiza el pago, bien el deudor o un
tercero.

El deudor puede realizar el pago de manera personal, a través de


un representante o de sus herederos, salvo se trate de una
obligación personalísima. Si quien realiza el pago es un tercero, lo
hará, generalmente, por tener interés en la relación obligatoria (v.
gr. el deudor del deudor), aunque de manera necesaria. Huelga
decir que del consentimiento del solvens —para que el tercero
efectúe el pago— dependerá la producción de ciertas figuras
jurídicas, tal y como se verá más adelante.

B. Accipiens
El accipiens es el sujeto pasivo del pago, es decir, quien recibe el
pago o la prestación. Lo normal es que sea el acreedor, pero
también puede ser una persona distinta a él, como el acreedor
aparente o un tercero.

Según el artículo 1224 del Código Civil, es válido el pago efectuado


al acreedor; o la persona designada por el juez, la ley o por el
propio acreedor. Si el pago se ha realizado a una persona no
autorizada para recibirlo, será válido siempre y cuando el acreedor
lo ratifique o el deudor demuestre que el acreedor se ha
aprovechado efectivamente de él.
Artículo 1224, Código Civil de 1984
Sólo es válido el pago que se efectúe al acreedor o al designado por el juez, por
la ley o por el propio acreedor, salvo que, hecho a persona no autorizada, el
acreedor lo ratifique o se aproveche de él.

Artículo 1227, Código Civil de 1984


El pago hecho a incapaces sin asentimiento de sus representantes legales no
extingue la obligación. Si se prueba que el pago fue útil para el incapaz, se
extingue la obligación en la parte pagada.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

C. Pago hecho por tercero


El pago hecho por un tercero siempre es válido, tenga o no
asentimiento del deudor, y trae consigo la extinción de la obligación
como también la liberación del deudor.
Artículo 1222, Código Civil de 1984
Puede hacer el pago cualquier persona, tenga o no interés en el cumplimiento de
la obligación, sea con el asentimiento del deudor o sin él, salvo que el pacto o su
naturaleza lo impidan.
[…]

Luego de extinta la relación entre el acreedor y el deudor saldrá a


la luz la relación subyacente entre el este y el tercero. Así, tendrá
que estudiarse el asentimiento del deudor y el interés del tercero
para determinar su relación jurídica. Así, se tienen los siguientes
casos:
1. Si el tercero realiza el pago con consentimiento del deudor,
podrá solicitar el reembolso del mismo. Si se añade un interés
legítimo, la ley le subroga (subrogación legal) en la posición del
anterior acreedor automáticamente.

2. Si el tercero realiza el pago con asentimiento del deudor, pero


sin interés; podrá subrogarse en la posición del antiguo
acreedor si así lo ha pactado con el deudor (subrogación
convencional). Si no hay pacto alguno, no operará la
subrogación y solo tendrá derecho al reembolso.

3. Si el tercero realiza el pago sin asentimiento o con la oposición


del deudor, pero alega un interés en el pago, el Código Civil le
permite la subrogación legal.

4. Si el tercero realiza el pago sin asentimiento del deudor y sin


interés, no podrá subrogarse; pero tendrá la opción de
reembolso siempre y cuando el pago le haya sido útil al deudor.
Artículo 1222, Código Civil de 1984
Puede hacer el pago cualquier persona, tenga o no interés en el cumplimiento
de la obligación, sea con el asentimiento del deudor o sin él, salvo que el
pacto o su naturaleza lo impidan.
Quien paga sin asentimiento del deudor, sólo puede exigir la restitución de
aquello en que le hubiese sido útil el pago.

D. Pago hecho al acreedor aparente


En este caso, el deudor realiza el pago a un tercero con apariencia
de acreedor, que en la mayoría de casos tiene un título aparente.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

En cualquier caso, el pago hecho al acreedor aparente extingue la


relación obligatoria y libera al deudor. El acreedor real no podrá
reclamarle la prestación al deudor, sino al acreedor aparente a
través de la acción de enriquecimiento indebido.
Artículo 1225, Código Civil de 1984
Extingue la obligación el pago hecho a persona que está en posesión del derecho
de cobrar, aunque después se le quite la posesión o se declare que no la tuvo.

Artículo 1226, Código Civil de 1984


El portador de un recibo se reputa autorizado para recibir el pago, a menos que
las circunstancias se opongan a admitir esta presunción.

E. Pago hecho a tercero


Supuesto en el que el deudor le paga no al acreedor ni al acreedor
aparente, sino a un tercero totalmente extraño a la relación jurídica-
obligatoria. Por este pago el deudor no se libera; sin embargo,
aquel puede reputarse válido si el acreedor lo ratifica o el deudor
demuestra que le ha sido de utilidad.
Artículo 1224, Código Civil de 1984
Sólo es válido el pago que se efectúe al acreedor o al designado por el juez, por
la ley o por el propio acreedor, salvo que, hecho a persona no autorizada, el
acreedor lo ratifique o se aproveche de él.

II. Pago mediante ingreso en cuenta bancaria del acreedor


El pago hecho en la cuenta bancaria del acreedor será válido siempre y
cuando lo haya pactado de esa forma con el deudor. En caso de no haber
sido así, el pago solo se reputará válido si el acreedor lo ratifica o si guarda
silencio, puesto que este último es considerado asentimiento. Es preciso
mencionar que cualquier oposición del acreedor al pago recibido en su
cuenta cuando no ha sido estipulado así en la obligación es totalmente
válida y no lo hace incurrir en mora. De lo anterior se concluye que
siempre debe respetarse el lugar de pago.

Ahora bien, si el deudor realiza el pago en la cuenta bancaria del acreedor,


debe depositar la totalidad de lo adeudado, puesto que si el pago es
parcial, no extinguirá la obligación.

III. Tiempo y lugar del pago


i. Tiempo del pago
Las partes tienen la facultad de establecer en qué momento se llevará
acabo la obligación. Sin embargo, cuando no hayan establecido nada,
el acreedor podrá solicitar el pago de manera inmediata, salvo
excepciones como el comodato, etc.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Artículo 1240, Código Civil de 1984


Si no hubiese plazo designado, el acreedor puede exigir el pago inmediatamente
después de contraída la obligación.

Si el deudor no cumple la obligación en el tiempo establecido, nada


impide que cumpla con posterioridad. No obstante, en las obligaciones
de término esencial y en las de no hacer de término instantáneo no
cabe de ninguna manera la mora.

ii. Lugar del pago


El lugar del pago es establecido por las partes, la ley, la naturaleza de
la obligación o las circunstancias del caso. Si no se ha estipulado nada
al respecto, actuará la norma dispositiva que prescribe que el pago
deberá realizarse en el domicilio del deudor. El acreedor válidamente
podrá oponerse a recibir el pago siempre y cuando el deudor no haya
cumplido lo establecido en la obligación.
Artículo 1238, Código Civil de 1984
El pago debe efectuarse en el domicilio del deudor, salvo estipulación en contrario, o
que ello resulte de la ley, de la naturaleza de la obligación o de las circunstancias del
caso.
[…]

Artículo 1553, Código Civil de 1984


A falta de estipulación, el bien debe ser entregado en el lugar en que se encuentre en
el momento de celebrarse el contrato. Si el bien fuera incierto, la entrega se hará en
el domicilio del vendedor, una vez que se realice su determinación.

A. Pluralidad del lugar de pago


a. Lugares de pago acumulativos
El pago deberá realizarse en todos los lugares establecidos en
la obligación.

b. Lugares de pago disyuntivos


En este caso se plantean varios lugares de pago, pero el
acreedor escoge uno de ellos.
Artículo 1238, Código Civil de 1984
[…]
Designados varios lugares para el pago, el acreedor puede elegir cualquiera
de ellos. Esta regla se aplica respecto al deudor, cuando el pago deba
efectuarse en el domicilio del acreedor.

Artículo 1239, Código Civil de 1984


Si el deudor cambia de domicilio, habiendo sido designado éste como lugar
para el pago, el acreedor puede exigirlo en el primer domicilio o en el nuevo.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Igual regla es de aplicación, respecto al deudor, cuando el pago deba


verificarse en el domicilio del acreedor.

IV. La prueba de pago


La prueba por excelencia del pago es el recibo emitido por parte del
acreedor a favor del deudor o del tercero que paga. El recibo debe tener
unos requisitos mínimos que son, entre otros, señalar la integridad del
pago y su fecha y lugar, además de la firma del acreedor.

Es derecho del deudor exigir el recibo al acreedor y deber de este último


emitirlo al deudor una vez efectuado el pago. Tal exigencia no está
regulada de manera expresa, pero puede deducirse del artículo 1229 del
Código Civil.
Artículo 1229, Código Civil de 1984
La prueba del pago incumbe a quien pretende haberlo efectuado.

Artículo 1226, Código Civil de 1984


El portador de un recibo se reputa autorizado para recibir el pago, a menos que las
circunstancias se opongan a admitir esta presunción.

El hecho de que el acreedor no otorgue un recibo es como si se negara


de manera expresa a recibir el pago, por lo que se constituye en mora. El
deudor, por su parte, puede retener el pago.
Artículo 1230, Código Civil de 1984
El deudor puede retener el pago mientras no le sea otorgado el recibo correspondiente.
Tratándose de deudas cuyo recibo sea la devolución del título, perdido éste, quien se
encuentre en aptitud de verificar el pago puede retenerlo y exigir del acreedor la
declaración judicial que inutilice el título extraviado.

Artículo 1231, Código Civil de 1984


Cuando el pago deba efectuarse en cuotas periódicas, el recibo de alguna o de la última,
en su caso, hace presumir el pago de las anteriores, salvo prueba en contrario.

V. La imputación del pago


Son las normas que señalan la aplicación o inversión de la prestación que
en concepto de lago lleva a cabo el deudor.

i. Requisitos de la imputación del pago


A. Deben existir varias deudas
La imputación del pago se aplica en los casos en los que entre el
deudor y el acreedor existen varias deudas, bien sean provenientes
de distintas relaciones jurídicas obligatorias o de una misma sola.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

B. Las deudas deben ser homogéneas


Las deudas deben ser homogéneas, es decir, del mismo género o
especie.

C. Las deudas deben estar vencidas


Las deudas deben ser exigibles y líquidas, aunque las partes
pueden pactar en contrario respecto de esta primera característica.

D. El pago debe ser insuficiente


Si el pago por parte del deudor fuera suficiente para cumplir con
todas las deudas, entonces no se configuraría un supuesto de
imputación del pago.

ii. Tipos de imputación del pago


La imputación del pago puede ser convencional o legal, según lo fijen
las partes o una norma dispositiva.

A. Imputación convencional del pago


En este supuesto, la imputación del pago le corresponde en primer
lugar al deudor. Si no lo hace, el acreedor puede realizarla y la
emisión del recibo al deudor será la constancia de tal acción.
Artículo 1258, Código Civil de 1984
Cuando el deudor no ha indicado a cual de las deudas debe imputarse el pago,
pero hubiese aceptado recibo del acreedor aplicándolo a alguna de ellas, no
puede reclamar contra esta imputación, a menos que exista causa que impida
practicarla.

Para ambos casos debe tenerse en cuenta el artículo 1257 del


Código Civil y, de tratarse de una garantía mobiliaria, el artículo 3.3
de la ley 28677.
Artículo 1257, Código Civil de 1984
Quien deba capital, gastos e intereses, no puede, sin el asentimiento del acreedor,
aplicar el pago al capital antes que a los gastos, ni a éstos antes que a los
intereses.

Artículo 3, ley 28677 (Ley de la Garantía Mobiliaria)


[…]
3. El pago derivado de la ejecución de la garantía mobiliaria se imputará al capital,
los intereses que devengue, las primas del seguro pagadas por el acreedor, las
costas y costos procesales, las penalidades, la indemnización por daños y
perjuicios, los gastos y las comisiones, en ese orden, salvo pacto en contrario.
[…]
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

B. Imputación legal del pago


La imputación legal del pago se da en los supuestos en los que el
deudor paga, pero no dice cuál deuda está pagando; y el acreedor
recibe el pago, pero no dice cuál deuda está dando por extinguida.
Se presenta pues un problema de confusión o equivocidad.
Artículo 1259, Código Civil de 1984
No expresándose a qué deuda debe hacerse la imputación, se aplica el pago a la
menos garantizada; entre varias deudas igualmente garantizadas, a la más
onerosa para el deudor; y entre varias deudas igualmente garantizadas y
onerosas, a la más antigua. Si estas reglas no pueden aplicarse, la imputación se
hará proporcionalmente.

El artículo 1259 establece las siguientes reglas:


1. Si no se expresa a qué deuda debe hacerse la imputación del
pago, se aplica el pago a la menos garantizada.

2. En defecto de la regla 1, se aplica el pago a la más onerosa


para el deudor, es decir, la que le implica un mayor sacrificio.

3. En defecto de la regla 2, se aplica el pago a la más antigua en


cuanto fue constituida.

4. En defecto de todas las anteriores, el pago se hará


proporcionalmente entre todas las deudas, que se supone que
están igualmente garantizadas, además de ser todas igual de
onerosas y antiguas.

8. Sustitutivos del pago


Antes se ha estudiado que las funciones del pago son la satisfacción del
interés del acreedor y la liberación del deudor de la prestación. Ahora bien,
existen mecanismos que sustituyen al pago y que cumplen sus mismas
funciones. La doctrina los ha denominado mecanismos subrogados del pago.

I. El pago con títulos valores


Un título valor es un documento mercantil en el que está incorporado un
derecho privado patrimonial, por lo que el ejercicio del derecho está
vinculado jurídicamente a la posesión del documento. En las
compraventas que se realizan dentro del tráfico mercantil está muy
extendida la utilización de algunos títulos valores como medio de pago.

Para el tema que ahora compete, la entrega de títulos valores como


órdenes o promesas de pago extinguirán la obligación primitiva cuando
hubiesen sido entregados al acreedor o él hubiese realizado el cobro de
ellos o por su culpa se hubiesen perjudicado.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Tal es el caso de cualquier compraventa, en la que siempre habrá una


relación jurídica causal (obligación primitiva), correspondiente al ámbito
del derecho civil. Y si se utilizase cualquier título valor (cheque, pagaré o
letra de cambio) como medio de pago, adicionalmente y en paralelo
aparecerá una relación jurídica cambiaria, perteneciente al ámbito del
derecho mercantil. Es necesario anotar la precisión de que la relación
cambiaria está relacionada únicamente con el título valor, toda vez que
nace por la entrega de este.
Artículo 1233, Código Civil de 1984
La entrega de títulos valores que constituyen órdenes o promesas de pago, sólo extinguirá
la obligación primitiva cuando hubiesen sido pagados o cuando por culpa del acreedor se
hubiesen perjudicado, salvo pacto en contrario.
Entre tanto la acción derivada de la obligación primitiva quedará en suspenso.

i. Efectos del título valor


A. Pro soluto
Cuando se extingue la obligación con la sola entrega del título
valor. Este efecto no forma parte del artículo 1233.

B. Pro solvendo
Cuando se extingue la obligación no con la entrega, sino con el
cobro del título valor, de manera que ambas relaciones jurídicas
(causal y cambiaria) permanecen hasta el cobro del cheque.

ii. Extinción de la obligación con el título valor


El Código Civil peruano señala que no cualquier título valor extinguirá
la obligación primitiva, sino solo aquellos que representan órdenes o
promesas de pago y que han sido dados con efectos pro solvendo. Es
decir que si un cheque ha sido dado con efectos pro soluto, ya no
formará parte de la relación jurídica-obligatoria su cobranza porque se
habrá configurado una novación.

Por tanto, el cobro de un título valor con efectos pro solvendo extingue
las dos obligaciones. Huelga mencionar que el perjuicio originado por
culpa del acreedor al título valor también traerá como consecuencia la
extinción de las obligaciones. Este último supuesto es un castigo que
el Código Civil impone al acreedor negligente.

Es importante mencionar también que mientras no se extinga la


obligación, las acciones civiles de la relación originaria o primitiva
estarán en suspenso, esto es, las acciones para lograr el cumplimiento
de la obligación. Puede darse el caso asimismo de un título valor sin
fondos, en el que la única salida será ejercitar una acción por
enriquecimiento indebido.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

II. El ofrecimiento del pago y la consignación


Es un medio supletorio del pago consistente en depositar o poner a
disposición de la autoridad judicial las cosas debidas, pero con reserva
del acreedor de negar o discutir la deuda.

La consignación solo será útil para las obligaciones de dar y de hacer de


resultados; y, a través de ella, el ordenamiento jurídico reconoce el
derecho del deudor de liberarse de la obligación, aun sacrificando la
satisfacción del acreedor.

i. Fases del ofrecimiento de pago y la consignación


A. Ofrecimiento de pago
El ofrecimiento del pago es el acto previo a la consignación, por el
cual el deudor ofrece el pago al acreedor, comunicándole que la
prestación está lista para ser cumplida. Esta declaración es
unilateral y recepticia, realiza por el deudor con el fin de intimar al
acreedor para que reciba el pago.

El Código Civil establece una forma específica para realizar el


ofrecimiento del pago, por lo que el deudor tiene libertad para
llevarlo a cabo. No obstante, al momento de solicitar la
consignación, deberá demostrar al juez el ofrecimiento de pago,
por lo que sería ideal que utilice medios que ofrezcan seguridad
jurídica. Respecto de esto último, existen dos clases:

a. Ofrecimiento judicial
Es pactado por las partes, de manera que, si el deudor en algún
momento deseara pagar, deberá realizar el ofrecimiento de
pago de manera judicial. El Código Civil también establece
supuestos legales de ofrecimiento de pago que deben
tramitarse, por consiguiente, a través de esta vía.
Artículo 1252, Código Civil de 1984
El ofrecimiento puede ser judicial o extrajudicial.
Es judicial en los casos que así se hubiera pactado y además: cuando no
estuviera establecida contractual o legalmente la forma de hacer el pago,
cuando por causa que no le sea imputable el deudor estuviera impedido de
cumplir la prestación de la manera prevista, cuando el acreedor no realiza los
actos de colaboración necesarios para que el deudor pueda cumplir la que le
compete, cuando el acreedor no sea conocido o fuese incierto, cuando se
ignore su domicilio, cuando se encuentre ausente o fuera incapaz sin tener
representante o curador designado, cuando el crédito fuera litigioso o lo
reclamaran varios acreedores y en situaciones análogas que impidan al
deudor ofrecer o efectuar directamente un pago válido.
[…]
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

b. Ofrecimiento extrajudicial
Es el ofrecimiento que se da fuera de un procedimiento legal,
por lo que el deudor tiene que hacerse con una prueba de que
ha realizado el ofrecimiento de pago, como la carta notarial.
Artículo 1252, Código Civil de 1984
El ofrecimiento puede ser judicial o extrajudicial.
[…]
El ofrecimiento extrajudicial debe efectuarse de la manera que estuviera
pactada la obligación y, en su defecto, mediante carta notarial cursada al
acreedor con una anticipación no menor de cinco días anteriores a la fecha
de cumplimiento debido, si estuviera determinado. Si no lo estuviera, la
anticipación debe ser de diez días anteriores a la fecha de cumplimiento que
el deudor señale.

B. La consignación o el depósito de los bienes


La consignación siempre será un mecanismo judicial iniciado por
el deudor (demandante) contra el acreedor (demandado), que
culminará con el depósito de los bienes y la liberación de deudor.

El depósito a consignación que realice el deudor deberá cumplir


con los requisitos objetivos del pago, en otras palabras, tiene que
ser íntegro e idéntico al pactado al constituirse la obligación. Si la
prestación consiste en una suma de dinero, el juez ordenará su
depósito en una cuenta del Banco de la Nación. Si, por el contrario,
fueran bienes corporales, ordenará su depósito en un almacén.

ii. Supuestos de ofrecimiento de pago y consignación


1. Negativa injustificada del acreedor de recibir el pago, por lo que a
su vez se constituirá en mora.

2. Imposibilidad del acreedor de recibir el pago, bien sea por


encontrarse ausente, en cuyo caso se efectuará el pago a su
representante; por estar incapacitado; o por ser su situación
incierta, como haber muerto y no conocerse a sus herederos.
Artículo 1251, Código Civil de 1984
El deudor queda libre de su obligación si consigna la prestación debida y concurren
los siguientes requisitos:
1.- Que el deudor haya ofrecido al acreedor el pago de la prestación debida, o lo
hubiere puesto a su disposición de la manera pactada en el título de la obligación.
2.- Que, respecto del acreedor, concurran los supuestos del Artículo 1338 o
injustificadamente se haya negado a recibir el pago. Se entiende que hay negativa
tácita en los casos de respuestas evasivas, de inconcurrencia al lugar pactado en el
día y hora señalados para el cumplimiento, cuando se rehusé a entregar recibo o
conductas análogas.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

III. El pago con subrogación


Todo pago con subrogación es hecho por tercero, pero solo operará en
supuestos especiales: cuando la ley así lo establezca o las partes lo hayan
convenido. No suele considerarse como un medio ideal de pago puesto
que no supone una liberación para el deudor, toda vez que solo cambia la
persona del acreedor.

i. Tipos de subrogación
A. Según su origen
a. Subrogación legal o unilateral
Artículo 1260, Código Civil de 1984
La subrogación opera de pleno derecho en favor:
1.- De quien paga una deuda a la cual estaba obligado, indivisible o
solidariamente, con otro u otros.
2.- De quien por tener legítimo interés cumple la obligación.
3.- Del acreedor que paga la deuda del deudor común a otro acreedor que le
es preferente.

Respecto del inciso 1. En el caso de solidaridad, el deudor


pagante se subroga en la posición del acreedor con las mismas
garantías que poseía respecto de los otros deudores. El mismo
criterio habrá de aplicarse para el solvens que paga una deuda
indivisible, pues se subrogará también en la posición del
antiguo acreedor.
Artículo 1263, Código Civil de 1984
En los casos del artículo 1260, inciso 1, el subrogado está autorizado a
ejercitar los derechos del acreedor contra sus codeudores, sólo hasta la
concurrencia de la parte por la que cada uno de éstos estaba obligado a
contribuir para el pago de la deuda, aplicándose, sin embargo, las reglas del
artículo 1204.

Artículo 1204, Código Civil de 1984


Si alguno de los codeudores es insolvente, su porción se distribuye entre los
demás, de acuerdo con sus intereses en la obligación.
Si el codeudor en cuyo exclusivo interés fue asumida la obligación es
insolvente, la deuda se distribuye por porciones iguales entre los demás.

Respecto del inciso 2. Este supuesto se refiere al tercero con


legítimo interés que realiza el pago al acreedor. En tal caso, es
de importancia nimia si cuenta con el consentimiento del
deudor, ya que lo fundamental es su interés, que puede ser
jurídico, patrimonial, etc.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Respecto del inciso 3. El pago con acreedor preferente está


referido para casos de mancomunidad activa, concretamente
para la concurrencia de acreedores hipotecarios. Este supuesto
quiere decir que existe un deudor con varios acreedores en
orden sucesivo y excluyente, de manera que un acreedor que
se encuentra en el tercer rango no cobrará antes su deuda que
el acreedor que se encuentra en el primero. Ahora, si aquel de
rango tercero paga lo que se le adeuda al de primer rango, se
subrogará en su posición de manera automática.
Artículo 1011, Código Civil de 1984
Si el usufructuario paga la deuda hipotecaria o el interés que ésta devenga,
se subroga en el crédito pagado.

b. Subrogación convencional o bilateral


Artículo 1261, Código Civil de 1984
La subrogación convencional tiene lugar:
1.- Cuando el acreedor recibe el pago de un tercero y lo sustituye en sus
derechos.
2.- Cuando el tercero no interesado en la obligación paga con aprobación
expresa o tácita del deudor.
3.- Cuando el deudor paga con una prestación que ha recibido en mutuo y
subroga al mutuante en los derechos el acreedor, siempre que el contrato de
mutuo se haya celebrado por documento de fecha cierta, haciendo constar tal
propósito en dicho contrato y expresando su procedencia al tiempo de
efectuar el pago.

Respecto del inciso 1. Es un supuesto de cesión de crédito, que


exige la existencia de un acuerdo previo al momento del pago
—o como mucho en el mismo instante.

Respecto del inciso 2. Supuesto en el cual el tercero no tiene


interés legítimo alguno, pero realiza el pago con el
consentimiento del deudor.

Respecto del inciso 3. Este supuesto es respecto de un caso


muy específico. El deudor paga al acreedor con la prestación
que ha recibido en mutuo, por lo que el mutuante se subroga en
la posición del antiguo acreedor con las mismas garantías que
tenía aquel. Sin embargo y para ello, el contrato de mutuo debe
cumplir con los siguientes requisitos: 1. Ser un documento de
fecha cierta. 2. Que conste en el contrato el propósito del mutuo.
3. Que se le exprese al todavía acreedor la procedencia del
pago al momento de efectuarlo.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

B. Según el pago de la prestación


a. Subrogación total
Se da cuando el tercero cancela la totalidad de la deuda.

b. Subrogación parcial
Se da cuando el tercero solo paga parte de la deuda.
Artículo 1264, Código Civil de 1984
Si el subrogado en lugar del acreedor lo fuese sólo parcialmente, y los bienes
del deudor no alcanzasen para pagar la parte restante que corresponda al
acreedor y la del subrogado, ambos concurrirán con igual derecho por la
porción que respectivamente se les debiera.

ii. Efectos del pago con subrogación


Al ser solo un cambio en la persona del acreedor, la obligación no se
extingue, por lo que podría definírsele como una modificación subjetiva
activa. De lo que se sigue que el nuevo acreedor podrá cobrar la deuda
con todos los derechos y excepciones que tenía el subrogado.
Artículo 1262, Código Civil de 1984
La subrogación sustituye al subrogado en todos los derechos, acciones y garantías
del antiguo acreedor, hasta por el monto de lo que hubiese pagado.

Sin embargo, tal efecto no opera cuando se trata de una subrogación


parcial, supuesto en el que se configuraría un régimen de
mancomunidad activa.

IV. La dación en pago


Bien se ha estudiado anteriormente que los requisitos objetivos del pago
son identidad e integridad. Sin embargo, la dación en pago supone la
ruptura del principio de identidad, toda vez que es el acto por el cual el
deudor ejecuta en concepto de pago una prestación distinta a la debida
que el acreedor acepta. Aun sí, surte el efecto de extinguir la relación
jurídica-obligatoria constituida entre ellos.
Artículo 1265, Código Civil de 1984
El pago queda efectuado cuando el acreedor recibe como cancelación total o parcial una
prestación diferente a la que debía cumplirse.

i. Requisitos de la dación en pago


1. Existencia de una relación jurídica-obligatoria entre el acreedor y el
deudor.
2. Imposibilidad, por parte del deudor, de cumplir con la prestación
debida. Sin embargo, ofrece una distinta.
3. Aceptación, por parte del acreedor, de la prestación distinta en
concepto de pago.
4. Cumplimiento objetivo de la nueva prestación.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Artículo 1266, Código Civil de 1984


Si se determina la cantidad por la cual el acreedor recibe el bien en pago, sus
relaciones con el deudor se regulan por las reglas de la compraventa.

V. Pago indebido
El pago indebido no es un sustitutivo del pago, pero constituye un caso
especial. Así, tiene como premisa la existencia previa de una relación
jurídica-obligatoria, que, sin embargo, ya no genera ningún tipo de
obligación de pago. En tal sentido, el solvens paga por error —de hecho
o de derecho— una deuda cuando haya sido ya pagada o cuando ha sido
declarada nula.
Artículo 1267, Código Civil de 1984
El que por error de hecho o de derecho entrega a otro algún bien o cantidad en pago,
puede exigir la restitución de quien la recibió.

El pago indebido es un supuesto especial y concreto del enriquecimiento


sin causa. Huelga mencionar que la acción para solicitar la restitución de
lo pagado tiene su origen en el derecho romano, que en aquel entonces
se denominó condictio indebiti. Actualmente dicha acción no solo abarca
a las obligaciones de dar, sino también de hacer y de no hacer.
Artículo 1276, Código Civil de 1984
Las reglas de este capítulo se aplican, en cuanto sean pertinentes, a las obligaciones de
hacer en las que no proceda restituir la prestación y a las obligaciones de no hacer.
En tales casos, quien acepta el pago indebido de buena fe, sólo está obligado a indemnizar
aquello en que se hubiese beneficiado, si procede de mala fe, queda obligado a restituir
el íntegro del valor de la prestación, más la correspondiente indemnización de daños y
perjuicios.

i. Requisitos del pago indebido


A. Inexistencia de una relación jurídica-obligatoria
En este requisito pueden admitirse dos posibilidades: la
inexistencia de una relación jurídica-obligatoria; o, si existe, la
inexigibilidad de la conducta debida.

B. Solvendi causa
Que el deudor haya realizado el pago con solvendi causa significa
que tenía la idea de estar cancelando una deuda válida y exigible.

C. Error en el solvens
Se entiende «error» como ‘la falta de adecuación entre el
pensamiento de la persona y la realidad’. Puede ser error de hecho
o error de derecho. Si el solvens paga de manera consciente, en
realidad habrá hecho una donación, en cuyo caso no procede la
repetición del pago.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

ii. Requisitos para la repetición del pago


Para solicitar la devolución del pago, el solvens deberá demostrar el
pago y el error. Pero si el accipiens negara haber recibido el pago, el
deudor solo deberá demostrar el pago.
Artículo 1273, Código Civil de 1984
Corre a cargo de quien pretende haber efectuado el pago probar el error con que lo
hizo, a menos que el demandado negara haber recibido el bien que se le reclame. En
este caso, justificada por el demandante la entrega, queda relevado de toda otra
prueba. Esto no limita el derecho del demandado para acreditar que le era debido lo
que se supone recibió.
Sin embargo, se presume que hubo error en el pago cuando se cumple con una
prestación que nunca se debió o que ya estaba pagada. Aquel a quien se pide la
devolución, puede probar que la entrega se efectuó a título de liberalidad o por otra
causa justificada.

Del anterior artículo también se desprende que, en caso el accipiens


no quiera devolver el pago, tendrá que demostrar una causa justificada
de la entrega, como que se efectuó a título de liberalidad, etc; o que el
solvens pagó una deuda válida y exigible. Además, el deber de
restitución del accipiens variará según haya recibido el pago de buena
o de mala fe.
Artículo 1268, Código Civil de 1984
Queda exento de la obligación de restituir quien, creyendo de buena fe que el pago
se hacía por cuenta de un crédito legítimo y subsistente, hubiese inutilizado el título,
limitado o cancelado las garantías de su derecho o dejado prescribir la acción el
verdadero deudor. El que pagó indebidamente sólo podrá dirigirse contra el verdadero
deudor.

Artículo 1269, Código Civil de 1984


El que acepta un pago indebido, si ha procedido de mala fe, debe abonar el interés
legal cuando se trate de capitales o los frutos percibidos o que ha debido percibir
cuando el bien recibido los produjera, desde la fecha del pago indebido.
Además, responde de la pérdida o deterioro que haya sufrido el bien por cualquier
causa, y de los perjuicios irrogados a quien lo entregó, hasta que lo recobre.
Puede liberarse de esta responsabilidad, si prueba que la causa no imputable habría
afectado al bien del mismo modo si hubiera estado en poder de quien lo entregó.

A. Improcedencia de la repetición del pago


Artículo 1275, Código Civil de 1984
No hay repetición de lo pagado en virtud de una deuda prescrita, o para cumplir
deberes morales o de solidaridad social o para obtener un fin inmoral o ilícito.
Lo pagado para obtener un fin inmoral o ilícito corresponde a la institución
encargada del bienestar familiar.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

B. Plazo de prescripción de la acción de repetición del pago


Artículo 1274, Código Civil de 1984
La acción para recuperar lo indebidamente pagado prescribe a los cinco años de
efectuado el pago.

9. El incumplimiento de la obligación
I. Introducción
Si por cumplimiento de una obligación se entiende realizar la prestación
de manera idéntica e íntegra; el incumplimiento supondrá cumplir con la
prestación de una manera distinta a lo pactado o no cumplirla.

La doctrina distingue dos clases de incumplimiento: propio o absoluto e


impropio o relativo. Así, será absoluto cuando el deudor no pueda cumplir
con posterioridad la prestación según lo pactado con el acreedor. Por su
parte, será relativo cuando haya posibilidad de cumplimiento posterior de
la prestación de la misma manera a lo establecido por las partes.

II. La mora del deudor


La mora del deudor siempre implica un retraso en el cumplimiento de la
prestación o, dicho de otra manera, toda vez que el deudor no cumpla con
la prestación —y por ello sea interpelado por el acreedor— según lo
pactado en la obligación. Sin embargo, nada impide un posterior
cumplimiento, salvo en las obligaciones de término esencial y de no hacer
instantáneas.

i. Características de la mora del deudor


A. Posibilidad de constitución en mora
La constitución en mora del deudor puede darse en la mayoría de
obligaciones, como las de dar, de hacer y de no hacer duraderas;
salvo las de no hacer instantáneas y de término esencial.

B. Exigibilidad de la prestación
La prestación de la obligación debe estar vencida y ser líquida.

C. Imputabilidad al deudor del retraso en el cumplimiento


El retraso en el cumplimiento de la obligación debe serle imputable
al deudor, bien por dolo o por culpa. Es necesario precisar que los
casos fortuitos o de fuerza mayor exceptúan al deudor de entrar en
mora, salvo se convenga en aumentar su responsabilidad. Así, de
presentarse cualquiera de los anteriores dos supuestos, tales lo
constituirían en mora.
Artículo 1315, Código Civil de 1984
Caso fortuito o fuerza mayor es la causa no imputable, consistente en un evento
extraordinario, imprevisible e irresistible, que impide la ejecución de la obligación
o determina su cumplimiento parcial, tardío o defectuoso.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

El Código Civil presume que todo retraso en el cumplimiento de


una obligación se le imputa al deudor por culpa leve.
Artículo 1329, Código Civil de 1984
Se presume que la inejecución de la obligación, o su cumplimiento parcial, tardío
o defectuoso, obedece a culpa leve del deudor.

D. Posibilidad de cumplimiento posterior


La mora del deudor exige la posibilidad de cumplimiento posterior
de la prestación; no obstante, debe tenerse en cuenta siempre el
interés del acreedor.

E. Interpelación en mora al deudor


El Código Civil establece como regla general que la mora no es
automática sino ex persona, es decir que el acreedor deberá
interpelar o intimar al deudor para que proceda la mora. Por tanto,
el retraso en el cumplimiento de la prestación no siempre será un
supuesto de mora.

Sin perjuicio de lo anterior, las partes pueden pactar para que la


mora sea automática.
Artículo 1333, Código Civil de 1984
Incurre en mora el obligado desde que el acreedor le exija, judicial o
extrajudicialmente, el cumplimiento de su obligación.
No es necesaria la intimación para que la mora exista:
1.- Cuando la ley o el pacto lo declaren expresamente.
2.- Cuando de la naturaleza y circunstancias de la obligación resultare que la
designación del tiempo en que había de entregarse el bien, o practicarse el
servicio, hubiese sido motivo determinante para contraerla.
3.- Cuando el deudor manifieste por escrito su negativa a cumplir la obligación.
4.- Cuando la intimación no fuese posible por causa imputable al deudor.

Artículo 1334, Código Civil de 1984


En las obligaciones de dar sumas de dinero cuyo monto requiera ser determinado
mediante resolución judicial, hay mora a partir de la fecha de la citación con la
demanda.
Se exceptúa de esta regla lo dispuesto en el artículo 1985.

Artículo 1335, Código Civil de 1984


En las obligaciones recíprocas, ninguno de los obligados incurre en mora sino
desde que alguno de ellos cumple su obligación, u otorga garantías de que la
cumplirá.

Artículo 1337, Código Civil de 1984


Cuando por efecto de la morosidad del deudor, la obligación resultase sin utilidad
para el acreedor, éste puede rehusar su ejecución y exigir el pago de la
indemnización de daños y perjuicios compensatorios.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

ii. Efectos de la intimación en mora del deudor


A. Indemnización
Si el retraso en el cumplimiento de la obligación le causa algún
daño al acreedor, el deudor estará obligado a indemnizarlo. La
indemnización, no obstante, varía si es por culpa leve, culpa grave
o dolo.
Artículo 1321, Código Civil de 1984
Queda sujeto a la indemnización de daños y perjuicios quien no ejecuta sus
obligaciones por dolo, culpa inexcusable o culpa leve.
El resarcimiento por la inejecución de la obligación o por su cumplimiento parcial,
tardío o defectuoso, comprende tanto el daño emergente como el lucro cesante,
en cuanto sean consecuencia inmediata y directa de tal inejecución.
Si la inejecución o el cumplimiento parcial, tardío o defectuoso de la obligación,
obedecieran a culpa leve, el resarcimiento se limita al daño que podía preverse al
tiempo en que ella fue contraída.

Si se trata de una obligación pecuniaria, los intereses moratorios


tienen concepto de indemnización.

B. Perpetuatio obligationis
Si el contenido de la prestación es un bien que se destruye o
inutiliza, aun por causa inimputable, estando el deudor en mora, se
agravará su responsabilidad. Es decir que la teoría del riesgo no
podrá aplicarse en los casos de un deudor moroso.
Artículo 1336, Código Civil de 1984
El deudor constituido en mora responde de los daños y perjuicios que irrogue por
el retraso en el cumplimiento de la obligación y por la imposibilidad sobreviniente,
aun cuando ella obedezca a causa de que no le sea imputable. Puede sustraerse
a esta responsabilidad probando que ha incurrido en retraso sin culpa, o que la
causa no imputable habría afectado la prestación; aunque se hubiese cumplido
oportunamente.

Sin embargo, el deudor podrá liberarse de la perpetuatio


obligationis si demuestra que no estaba constituido en mora o
prueba que, aun si hubiera cumplido con la prestación a tiempo, la
causa no imputable igual hubiera afectado la prestación.

iii. Cesación en la mora del deudor


A. Cumplimiento tardío
La mora cesa cuando el deudor cumple con la prestación, esto es,
hay un cumplimiento tardío de la prestación.

Habrá que tener en cuenta que el deudor debe cumplir con lo


principal y lo accesorio, es decir que si por el retraso se ha
generado una indemnización o se han producido intereses, deberá
cumplir con ambos conceptos. En caso de que el deudor solo
cumpla con la prestación original y no cancele el monto
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

indemnizatorio o los intereses, la obligación con el acreedor no se


extinguirá; sin embargo, el monto accesorio no generará más
intereses.

B. Compensación de la mora
La mora del acreedor compensa la mora del deudor. Dicho de con
otras palabras, al momento de entrar en mora el acreedor cesará
la mora del deudor con efectos ex nunc.

C. Moratoria
Por la moratoria, el acreedor perdona la demora en el cumplimiento
de la prestación al deudor y le concede un nuevo plazo, por lo que
la mora quedará excluida la deuda. En resumidas cuentas, la
moratoria es la condonación de la mora y, por tanto, tiene efectos
ex tunc, es decir, retroactivos.

Puede presentarse moratorias convencionales y legales.

III. La mora del acreedor


El acreedor se constituye en mora cuando se niega de manera
injustificada a recibir la prestación, a entregar el recibo de pago al deudor
o cuando no realiza los actos de colaboración a los que se había
comprometido para el cumplimiento de la prestación. La negativa
justificada no lo constituye en mora.
Artículo 1338, Código Civil de 1984
El acreedor incurre en mora cuando sin motivo legítimo se niega a aceptar la prestación
ofrecida o no cumple con practicar los actos necesarios para que se pueda ejecutar la
obligación.

El fundamento de la mora del acreedor es el derecho del deudor a


liberarse de la obligación.

i. Requisitos de la mora del acreedor


A. Obligación vencida
La obligación debe estar vencida para que se pueda constituir en
mora al acreedor. Ahora bien, ambas partes deben guardar respeto
por los plazos de cumplimiento de la prestación, toda vez que si el
deudor cumple con anterioridad la prestación y el acreedor la
rechaza, este no incurrirá en mora.

B. Ofrecimiento de pago por parte del deudor


La negativa del acreedor ante el ofrecimiento de pago del deudor
una vez cumplido el plazo de la prestación lo hará incurrir en mora.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

C. Negativa injustificada
Tal y como se ha visto anteriormente, cualquier tipo de negativa
injustificada incurre en mora al acreedor. No sucederá ello si es
justificada, como en los casos de rechazo de la prestación por no
ser la pactada, por no haberse cumplido el plazo, por no ser el lugar
convenido, etc.

ii. Efectos de la mora del acreedor


A. Compensación
La mora del acreedor compensa la mora del deudor o la evita.

B. Traslado del riesgo


El riesgo de la imposibilidad en el cumplimiento de la prestación
por pérdida del bien pasa al acreedor.
Artículo 1340, Código Civil de 1984
El acreedor en mora asume los riesgos por la imposibilidad de cumplimiento de la
obligación, salvo que obedezca a dolo o culpa inexcusable del deudor.

C. Indemnización
Si la mora del acreedor le genera daños al deudor, deberá
indemnizarlo. En cualquier caso, el deudor deberá probar los daños
que se le han ocasionado.
Artículo 1339, Código Civil de 1984
El acreedor en mora queda obligado a indemnizar los daños y perjuicios derivados
de su retraso.

D. Consignación
El deudor podrá liberarse de la obligación a través del pago por
consignación.

IV. El cumplimiento defectuoso o inexacto de la prestación


Habrá cumplimiento defectuoso del deudor cuando la prestación no
coincida con la pactado. Esto es que la inexactitud verse sobre el lugar de
entrega, por razón del objeto o equivocación en los sujetos.

El cumplimiento defectuoso no está regulado de manera específica en el


Código Civil; sin embargo, es fácil deducirlo a partir de artículos que lo
mencionan. Así, aquel deudor que, por causa imputable a él, realiza un
cumplimiento defectuoso, deberá responder por los daños y perjuicios que
le haya ocasionado al deudor.
Artículo 1321, Código Civil de 1984
Queda sujeto a la indemnización de daños y perjuicios quien no ejecuta sus obligaciones
por dolo, culpa inexcusable o culpa leve.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

El resarcimiento por la inejecución de la obligación o por su cumplimiento parcial, tardío o


defectuoso, comprende tanto el daño emergente como el lucro cesante, en cuanto sean
consecuencia inmediata y directa de tal inejecución.
Si la inejecución o el cumplimiento parcial, tardío o defectuoso de la obligación,
obedecieran a culpa leve, el resarcimiento se limita al daño que podía preverse al tiempo
en que ella fue contraída.

El Código Civil presume que el cumplimiento defectuoso se debió por


culpa leve del deudor, aunque si este quiere eximirse de la
responsabilidad, deberá demostrar que actuó con diligencia o que se
produjo un caso fortuito o de fuerza mayor. Por otro lado, si el acreedor
desea obtener una indemnización mayor, deberá probar que el deudor
actuó con dolo o culpa inexcusable.
Artículo 1329, Código Civil de 1984
Se presume que la inejecución de la obligación, o su cumplimiento parcial, tardío o
defectuoso, obedece a culpa leve del deudor.

Artículo 1314, Código Civil de 1984


Quien actúa con la diligencia ordinaria requerida, no es imputable por la inejecución de la
obligación o por su cumplimiento parcial, tardío o defectuoso.

Artículo 1317, Código Civil de 1984


El deudor no responde de los daños y perjuicios resultantes de la inejecución de la
obligación, o de su cumplimiento parcial, tardío o defectuoso, por causas no imputables,
salvo que lo contrario esté previsto expresamente por la ley o por el título de la obligación.

V. El incumplimiento no imputable al deudor


Es aquel que se debe a causas ajenas a la voluntad del deudor y, por lo
tanto, el ordenamiento le exonera de responsabilidad, salvo pacto en
contrario; es decir que si las partes convienen en aumentar la
responsabilidad del deudor, de presentarse cualquiera de los siguientes
dos supuestos no lo eximirán de ella.

i. Supuestos de incumplimientos no imputables al deudor


A. Caso fortuito o fuerza mayor
Son los hechos y circunstancias que, siendo extraños a la voluntad
del deudor, hacen que este no pueda llevar a cabo la prestación,
pero con la consecuencia de exonerarlo de la responsabilidad.
Doctrinal y conceptualmente son dos conceptos diferentes; no
obstante, el Código Civil peruano los equipara.
Artículo 1315, Código Civil de 1984
Caso fortuito o fuerza mayor es la causa no imputable, consistente en un evento
extraordinario, imprevisible e irresistible, que impide la ejecución de la obligación
o determina su cumplimiento parcial, tardío o defectuoso.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

a. Requisitos del caso fortuito o fuerza mayor


a) Hecho no imputable
El hecho debe ser externo a su voluntad del deudor.

b) Hecho extraordinario, imprevisible e irresistible


El hecho en el que consiste el caso fortuito o de fuerza
mayor debe salir de lo común, surgir de lo impensado (no
hubo indicios de que podía suceder) y ser inevitable,
respectivamente.

c) Hecho como causa directa del incumplimiento


El hecho debe ser la causa directa del incumplimiento de la
obligación o, dicho de otra manera, que tal acontecimiento
realmente imposibilite cumplir la prestación.

B. Ausencia de culpa
Supuesto en el que, pese a la actuación diligente del deudor, se
presente un hecho que impida cumplir de manera definitiva la
prestación, sin necesidad de tratarse de un caso fortuito o fuerza
mayor.
Artículo 1314, Código Civil de 1984
Quien actúa con la diligencia ordinaria requerida, no es imputable por la
inejecución de la obligación o por su cumplimiento parcial, tardío o defectuoso.

ii. Efectos del incumplimiento no imputable al deudor


A. Extinción de la obligación
Como no es posible cumplir con la obligación, esta se extingue. Sin
embargo, si acaso se pudiera cumplirse parcialmente la prestación,
tal dependerá del interés del acreedor.

Además, si la causa es temporal, pese a ser un caso fortuito o


fuerza mayor, es posible el cumplimiento de la obligación. Pero si
la causa temporal se extiende en el tiempo, la obligación se
extingue.

B. Exoneración de responsabilidad
Se exonera de la responsabilidad correspondiente al deudor, por lo
que no se hará cargo de los daños y perjuicios ocasionados al
acreedor.
Artículo 1317, Código Civil de 1984
El deudor no responde de los daños y perjuicios resultantes de la inejecución de
la obligación, o de su cumplimiento parcial, tardío o defectuoso, por causas no
imputables, salvo que lo contrario esté previsto expresamente por la ley o por el
título de la obligación.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

VI. El incumplimiento imputable al deudor


Es aquel que depende exclusivamente de la voluntad del deudor. Es
importante diferenciar si el incumplimiento se debe a dolo o culpa porque
cada uno tiene una repercusión inmediata en el resarcimiento de los
daños ocasionados al acreedor.
Artículo 1321, Código Civil de 1984
Queda sujeto a la indemnización de daños y perjuicios quien no ejecuta sus obligaciones
por dolo, culpa inexcusable o culpa leve.
El resarcimiento por la inejecución de la obligación o por su cumplimiento parcial, tardío o
defectuoso, comprende tanto el daño emergente como el lucro cesante, en cuanto sean
consecuencia inmediata y directa de tal inejecución.
Si la inejecución o el cumplimiento parcial, tardío o defectuoso de la obligación,
obedecieran a culpa leve, el resarcimiento se limita al daño que podía preverse al tiempo
en que ella fue contraída.

i. Supuestos de incumplimientos imputables al deudor


A. Culpa contractual
Es la conducta del deudor que, por no observar la diligencia debida
y sin propósito deliberado de hacerlo, da lugar al incumplimiento de
la obligación. Cabe resaltar que la culpa es negligencia o
menosprecio, mas no la intención de incumplir; esto significa que
el deudor ha querido cumplir con la prestación, pero lo ha hecho de
manera descuidada y por ello ha devenido en imposible su
cumplimiento.

a. Elementos de la culpa contractual


a) Elemento subjetivo
Falta de diligencia con la que actúa el deudor. No puede
incluirse en este criterio la intencionalidad de incumplir o de
causar daños.

b) Elemento objetivo
Imposibilidad en el cumplimiento de la prestación.

b. Clases de la culpa contractual


a) Culpa leve
Es la falta de diligencia ordinaria. Habiendo culpa leve, la
indemnización es por los daños previsibles.
Artículo 1320, Código Civil de 1984
Actúa con culpa leve quien omite aquella diligencia ordinaria exigida por
la naturaleza de la obligación y que corresponda a las circunstancias de
las personas, del tiempo y del lugar.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

La culpa leve se presume, por lo que si el acreedor desea


obtener una mayor indemnización, deberá probar la culpa
grave.
Artículo 1329, Código Civil de 1984
Se presume que la inejecución de la obligación, o su cumplimiento
parcial, tardío o defectuoso, obedece a culpa leve del deudor.

b) Culpa grave
Es la falta de diligencia grave e inexcusable. Se equipará al
dolo en cuanto se refiere a la indemnización.
Artículo 1319, Código Civil de 1984
Incurre en culpa inexcusable quien por negligencia grave no ejecuta la
obligación.

B. Dolo contractual
Es una actuación consciente y deliberada del deudor que,
malévolamente o de mala fe, se resiste a cumplir con la obligación.
No obstante, no debe incluirse en este concepto la intención de
causar daño al acreedor, sino solamente la intención de incumplir.

No se puede exonerar al deudor por dolo o culpa grave. Esta


prohibición responde a dos fundamentos:
1. Porque no se desea fomentar el incumplimiento de las
obligaciones ni conductas irresponsables en los deudores.
2. Porque la renuncia o exclusión anticipada limitaría el derecho
de los acreedores a solicitar la indemnización correspondiente.
Artículo 1328, Código Civil de 1984
Es nula toda estipulación que excluya o limite la responsabilidad por dolo o culpa
inexcusable del deudor o de los terceros de quien éste se valga.
También es nulo cualquier pacto de exoneración o de limitación de
responsabilidad para los casos en que el deudor o dichos terceros violen
obligaciones derivadas de normas de orden público.

VII. La responsabilidad indirecta del deudor en obligaciones ejecutadas


por terceros
El deudor responde por las acciones de los terceros, de los que se sirve
para realizar la prestación, si el incumplimiento se ha debido a hechos
culposos o dolosos atribuibles a ellos; sin embargo, en caso fortuito o de
fuerza mayor, no responderá ninguno. Eventualmente, el deudor podrá
exigir la repetición de lo indemnizado a los terceros. No serán imputables
al deudor los daños ocasionados a la prestación por terceros ajenos a él.
Artículo 1325, Código Civil de 1984
El deudor que para ejecutar la obligación se vale de terceros, responde de los hechos
dolosos o culposos de éstos, salvo pacto en contrario.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

VIII. Las cláusulas de modificación de responsabilidad del deudor


i. Agravación de la responsabilidad
En principio, el incumplimiento que se deba a causas ajenas a la
voluntad del deudor lo exonera de responsabilidad, salvo que ambas
partes convengan en aumentar su responsabilidad. Así pues, de
presentarse un caso fortuito o de fuerza mayor o ausencia de culpa,
estos supuestos no lo eximirán de su responsabilidad de indemnizar
al acreedor.
Artículo 1317, Código Civil de 1984
El deudor no responde de los daños y perjuicios resultantes de la inejecución de la
obligación, o de su cumplimiento parcial, tardío o defectuoso, por causas no
imputables, salvo que lo contrario esté previsto expresamente por la ley o por el título
de la obligación.

ii. Renuncia anticipada


Es nula la renuncia anticipada de la responsabilidad que se genere por
el incumplimiento de la prestación por dolo o culpa inexcusable. No
obstante, una vez incumplida la obligación, corresponderá al acreedor
solicitar o no la indemnización correspondiente.

Contrario sensu, el acreedor sí podrá exonerar anticipadamente al


deudor de los daños que le fuera a ocasionar —por el incumplimiento
de la obligación— por culpa leve.
Artículo 1328, Código Civil de 1984
Es nula toda estipulación que excluya o limite la responsabilidad por dolo o culpa
inexcusable del deudor o de los terceros de quien éste se valga.
También es nulo cualquier pacto de exoneración o de limitación de responsabilidad
para los casos en que el deudor o dichos terceros violen obligaciones derivadas de
normas de orden público.

IX. La responsabilidad del acreedor por incumplimiento de la obligación


El incumplimiento de la obligación también puede deberse a un
comportamiento doloso o culposo del acreedor.

i. Concurrencia de culpas
Si el incumplimiento de la obligación es atribuible tanto al deudor como
al acreedor, la indemnización por daños se reducirá a favor de este
último. No obstante, la concurrencia de culpas legitima a ambas partes
a solicitar la indemnización correspondiente, quedando a discreción
del juez su graduación.
Artículo 1326, Código Civil de 1984
Si el hecho doloso o culposo del acreedor hubiese concurrido a ocasionar el daño, el
resarcimiento se reducirá según su gravedad y la importancia de las consecuencias
que de él deriven.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

ii. Daños excesivos por falta de actuación diligente del acreedor


Este supuesto se sitúa en los daños ocasionados al acreedor por el
incumplimiento de la obligación, que no obstante han devenido en
excesivos por negligencia de su actuar ordinario. Así pues, estos
daños evitables no serán indemnizables, sino únicamente los que se
hubieran producido al momento del incumplimiento de la obligación.
Huelga decir que admite pacto en contrario.
Artículo 1327, Código Civil de 1984
El resarcimiento no se debe por los daños que el acreedor habría podido evitar usando
la diligencia ordinaria, salvo pacto en contrario.

iii. Responsabilidad absoluta del acreedor


Aunque el Código Civil no recoge expresamente esta figura, según las
circunstancias y el actuar del acreedor puede darse el caso.

X. La reparación
Todo incumplimiento que sea imputable al deudor o al acreedor trae como
consecuencia una indemnización. Además, para los supuestos de
incumplimiento impropio de la obligación —mora y cumplimiento
defectuoso o inexacto—, el acreedor, si todavía tiene interés en la
prestación, podrá solicitar su cumplimiento forzoso.

i. Cumplimiento forzoso
Supuesto en el que el juez, a pedido del acreedor, ordena la ejecución
forzosa de la prestación por parte el deudor o de un tercero (el propio
juez), según corresponda.

A. Clases de cumplimiento forzoso


a. Ejecución específica o in natura
La prestación se cumplirá tal y como fue planteada al momento
de la constitución de la obligación.

b. Ejecución genérica
La prestación no se cumplirá como fue pactada en su momento,
sino a través de un equivalente económico. Si el acreedor ha
solicitado además una indemnización, esta se suma al
componente económico.

ii. Indemnización
La indemnización siempre es una suma de dinero que, en principio, el
deudor entrega al acreedor que se ha visto perjudicado por el
incumplimiento de la prestación, bien por retraso (mora), por
cumplimiento defectuoso o por la imposibilidad del cumplimiento.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Si las partes así lo convienen, pueden establecer una cláusula penal


para que la indemnización sea distinta a una suma de dinero, como
por ejemplo en especie. Si no lo han convenido y el acreedor solicita
al juez tal indemnización, este no podrá declararla.

El fundamento de la indemnización es el principio romano del alterum


non laedere (no dañar a otro). El derecho no protege entonces a quien
causa un daño a otro, sino que muy por el contrario hace nacer una
obligación —en sentido jurídico— de dejar a esa persona en una
situación lo más parecido posible a como se encontraba antes de sufrir
el daño, que muchas veces será posible, pero otras no. Esto es lo que
se llama «responder» o «ser responsable» o «tener responsabilidad»
por el daño padecido por otra persona a causa de una acción propia.

A. Requisitos o presupuestos de la indemnización


a. Inejecución de la obligación
La prestación de la obligación no la llevó a cabo el deudor.

b. Imputabilidad al deudor
El incumplimiento de la prestación debe ser por causa
imputable al deudor.

c. Daños
La indemnización no es automática, por lo que los daños deben
probarse.

d. Nexo causal
El incumplimiento del deudor tiene ser la causa de los daños
originados al acreedor.

B. Alcance de la indemnización
a. Respecto de un deudor culposo
El deudor con culpa leve solo responde de los daños previsibles
al tiempo de constituir la obligación.
Artículo 1321, Código Civil de 1984
[…]
Si la inejecución o el cumplimiento parcial, tardío o defectuoso de la
obligación, obedecieran a culpa leve, el resarcimiento se limita al daño que
podía preverse al tiempo en que ella fue contraída.

b. Respecto de un deudor doloso


El deudor doloso, al igual que el deudor con culpa inexcusable,
responde de los daños previsibles e imprevisibles que se han
originado a causa del incumplimiento de la prestación.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Artículo 1321, Código Civil de 1984


[…]
El resarcimiento por la inejecución de la obligación o por su cumplimiento
parcial, tardío o defectuoso, comprende tanto el daño emergente como el
lucro cesante, en cuanto sean consecuencia inmediata y directa de tal
inejecución.
[…]

C. Daño
Detrimento o perjuicio que sufre el acreedor por el incumplimiento
o la inejecución de la prestación.

a. Tipos de daño
a) Daños patrimoniales
1) Daño emergente
Aquel que surge inmediatamente ante el incumplimiento
de la prestación.

2) Lucro cesante
Aquello que el acreedor deja de ganar por el
incumplimiento de la prestación. Debe probarse, toda
vez que puede confundirse con la probabilidad o chance.

b) Daños morales
Afectación psicológica en la persona o en los derechos de
una persona. Al igual que el lucro cesante, debe probarse.
Artículo 1322, Código Civil de 1984
El daño moral, cuando él se hubiera irrogado, también es susceptible de
resarcimiento.

10. Las garantías de la obligación


I. El principio de responsabilidad patrimonial
Desde el derecho romano ha existido la figura de la responsabilidad que
si bien en un principio fue personal, hoy en día es patrimonial universal;
esto es que el deudor responderá del cumplimiento de la obligación con
todo su patrimonio. Por tanto, el patrimonio del deudor se constituye como
la principal garantía de la obligación que tiene el acreedor. No obstante,
puede darse el caso de resultar deficitario, por lo que, además del
principio de responsabilidad patrimonial, el acreedor buscará otros medios
para garantizar y afianzar el cumplimiento de su deuda. A esto último
propiamente se le llama garantía.
Artículo 1911, Código Civil español
Del cumplimiento de las obligaciones responde el deudor con todos sus bienes, presentes
y futuros.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

La garantía es aquel derecho o facultad que se añade a la relación


jurídica-obligatoria para aumentar o asegurar el cumplimiento por parte
del deudor. Pueden clasificarse en garantías reales y personales,
recayendo las primeras sobre bienes específicos, mientras que la fianza,
la cláusula penal y las arras son ejemplos de las segundas.

II. La cláusula penal


Para evitar ir a un proceso judicial por el incumplimiento de la obligación,
las partes pueden establecer una determinada indemnización a través de
una cláusula penal.
La cláusula penal es una estipulación que se incorpora dentro de la
relación jurídica-obligatoria para agravar la responsabilidad del deudor en
caso de incumplimiento. Es decir que es una sanción, normalmente
pecuniaria, que el deudor pagará frente al incumplimiento de la obligación.

La cláusula penal es una regla de responsabilidad contractual


perteneciente al derecho de daños, que se activa ante el incumplimiento
de la obligación.

i. Características de la cláusula penal


A. Medio de garantía personal
Es una estipulación que asegura y protege al acreedor contra el
incumplimiento de la obligación por parte del deudor.

B. Accesoriedad
Se integra a una obligación principal, por lo que no existe de
manera independiente.
Artículo 1345, Código Civil de 1984
La nulidad de la cláusula penal no origina la de la obligación principal.

C. Subsidiariedad
Si el acreedor ejecuta la cláusula penal, verá satisfecho su derecho
de indemnización y, por tanto, no podrá ejercitarlo nuevamente en
vía judicial. No obstante, las partes podrán pactar en contrario, lo
que supone una agravación de la responsabilidad del deudor.
Artículo 1341, Código Civil de 1984
El pacto por el que se acuerda que, en caso de incumplimiento, uno de los
contratantes queda obligado al pago de una penalidad, tiene el efecto de limitar
el resarcimiento a esta prestación y a que se devuelva la contraprestación, si la
hubiere; salvo que se haya estipulado la indemnización del daño ulterior. En este
último caso, el deudor deberá pagar el íntegro de la penalidad, pero ésta se
computa como parte de los daños y perjuicios si fueran mayores.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Artículo 1342, Código Civil de 1984


Cuando la cláusula penal se estipula para el caso de mora o en seguridad de un
pacto determinado, el acreedor tiene derecho para exigir, además de la penalidad,
el cumplimiento de la obligación.

ii. Tipos de cláusula penal


A. Cláusula penal sustitutiva
Es aquella que sustituye la indemnización por daños y perjuicios
en caso de un incumplimiento del deudor. Huelga decir que no
deben probarse los daños toda vez que ya se ha establecido la
indemnización por incumplimiento definitivo.
Artículo 1341, Código Civil de 1984
El pacto por el que se acuerda que, en caso de incumplimiento, uno de los
contratantes queda obligado al pago de una penalidad, tiene el efecto de limitar
el resarcimiento a esta prestación y a que se devuelva la contraprestación, si la
hubiere […].

B. Cláusula penal cumulativa


Es aquella que, además de ser exigida, también permite solicitar la
indemnización por vía judicial. Las partes tienen que pactarla
expresamente.
Artículo 1341, Código Civil de 1984
El pacto por el que se acuerda que, en caso de incumplimiento, uno de los
contratantes queda obligado al pago de una penalidad, tiene el efecto de limitar
el resarcimiento a esta prestación y a que se devuelva la contraprestación, si la
hubiere; salvo que se haya estipulado la indemnización del daño ulterior. En este
último caso, el deudor deberá pagar el íntegro de la penalidad, pero ésta se
computa como parte de los daños y perjuicios si fueran mayores.

De igual manera, se configura como aquella que puede ser exigida


junto con el cumplimiento de la prestación en caso de haber sido
defectuoso o tardío.
Artículo 1342, Código Civil de 1984
Cuando la cláusula penal se estipula para el caso de mora o en seguridad de un
pacto determinado, el acreedor tiene derecho para exigir, además de la penalidad,
el cumplimiento de la obligación.

iii. Requisitos para la constitución de la cláusula penal


A. Existencia de una obligación principal válida
La cláusula penal es una estipulación accesoria que se inserta en
una obligación principal válida.
Artículo 1345, Código Civil de 1984
La nulidad de la cláusula penal no origina la de la obligación principal.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

B. Acordada por las partes


La cláusula penal debe ser pactada expresamente desde la
formación de la obligación principal o celebración del contrato,
aunque nada obsta para que también sea establecida de manera
posterior.

C. Libertad de forma
La cláusula penal no requiere de alguna forma especial, pero se
aconseja que se utilice un medio que otorgue seguridad jurídica.

D. Libertad de contenido
Generalmente es introducida como una obligación pecuniaria,
aunque también puede consistir en cualquier otra obligación de
dar, de hacer o de no hacer.

iv. Exigibilidad de la cláusula penal


A. Exigibilidad de la obligación principal
La obligación principal debe ser exigible y líquida.

B. Incumplimiento de la obligación principal


La obligación principal debe haber sido incumplida por el deudor.

C. Incumplimiento imputable al deudor


Para cobrar la cláusula penal, el incumplimiento de la obligación
debe ser imputable al deudor. Sin embargo, las partes pueden
convenir que el caso fortuito o fuerza mayor o ausencia de culpa
no eximen al deudor de responsabilidad.

v. Efectos de la cláusula penal


A. Respecto de una cláusula sustitutiva
Únicamente el acreedor podrá cobrar la cláusula, sin posibilidad de
solicitar una indemnización vía judicial.

B. Respecto de una cláusula cumulativa


Si la cláusula es cumulativa, pueden consentirse tres posibilidades:
1. Si las partes han estipulado la indemnización del daño ulterior,
el acreedor podrá solicitar la cláusula penal y la indemnización
vía judicial. Asimismo, si el daño generado al acreedor por el
incumplimiento de la obligación es de mayor cuantía al del
monto de la cláusula penal, tendrá expedito su derecho a
solicitar la indemnización correspondiente por la vía judicial.
Artículo 1341, Código Civil de 1984
El pacto por el que se acuerda que, en caso de incumplimiento, uno de los
contratantes queda obligado al pago de una penalidad, tiene el efecto de
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

limitar el resarcimiento a esta prestación y a que se devuelva la


contraprestación, si la hubiere; salvo que se haya estipulado la indemnización
del daño ulterior. En este último caso, el deudor deberá pagar el íntegro de la
penalidad, pero ésta se computa como parte de los daños y perjuicios si
fueran mayores.

2. Si la cláusula penal se ha estipulado para el caso de mora —


por incumplimiento tardío o defectuoso de la obligación— o en
seguridad de un pacto determinado, el acreedor podrá solicitar
la cláusula penal y el cumplimiento de la obligación.
Artículo 1342, Código Civil de 1984
Cuando la cláusula penal se estipula para el caso de mora o en seguridad de
un pacto determinado, el acreedor tiene derecho para exigir, además de la
penalidad, el cumplimiento de la obligación.

3. Si se reúnen las dos posibilidades anteriores, el acreedor podrá


solicitar la cláusula penal, la indemnización y el cumplimiento
de la obligación.

III. Las arras. Remisión


Las arras constituyen un elemento accidental del contrato de compraventa
y consisten en una cantidad de dinero u otra cosa fungible que una de las
partes entrega a la otra al celebrar el contrato.

i. Clases de arras
A. Arras confirmatorias
Las arras confirmatorias prueban la celebración del contrato y
fungen, a su vez, como parte de pago o cuota inicial del precio total,
ya que se descuentan de la prestación principal cuando el deudor
la ejecuta.
Artículo 1477, Código Civil de 1984
La entrega de arras confirmatorias importa la conclusión del contrato. En caso de
cumplimiento, quien recibió las arras las devolverá o las imputará sobre su crédito,
según la naturaleza de la prestación.

Si una de las partes no cumple, la otra puede exigirle el


cumplimiento del contrato o su resolución y la indemnización de los
daños y perjuicios ocasionados. Bien dichas las cosas, las arras
confirmatorias se convertirán en penales si se retienen por
concepto de indemnización ante el incumplimiento de la obligación.

B. Arras penales
Las arras penales actúan como garantía del cumplimiento de la
obligación y se acuerdan en concepto de indemnización; de
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

manera que, incumpliéndose con la prestación, quien las entregó


las perderá o quien las recibió las devolverá dobladas.
Artículo 1478, Código Civil de 1984
Si la parte que hubiese entregado las arras no cumple la obligación por causa
imputable a ella, la otra parte puede dejar sin efecto el contrato conservando las
arras. Si quien no cumplió es la parte que las ha recibido, la otra puede dejar sin
efecto el contrato y exigir el doble de las arras.

No obstante, el que desistió en la ejecución del contrato no se


desliga de la obligación incumplida que podrá ser exigida
forzosamente. Huelga decir que al existir e indudable analogía con
la cláusula penal, se le aplicará su normativa.
Artículo 1479, Código Civil de 1984
Si la parte que no ha incumplido la obligación prefiere demandar la ejecución o la
resolución del contrato, la indemnización de daños y perjuicios se regula por las
normas generales.

C. Arras de arrepentimiento o retractación


Las arras penitenciales son la forma lícita de resolver
unilateralmente el contrato ante el incumplimiento de alguna de las
partes o por propia voluntad, de manera que si quien resuelve el
contrato es el que las entregó, pierde la cantidad abonada; o quien
las recibió, las devuelve por duplicado. Huelga decir que la parte
que recibe las arras puede renunciar al derecho de retractación.
Artículo 1481, Código Civil de 1984
Si se retracta la parte que entrega las arras, las pierde en provecho del otro
contratante.
Si se retracta quien recibe las arras, debe devolverlas dobladas al tiempo de
ejercitar el derecho.

Artículo 1482, Código Civil de 1984


La parte que recibe las arras puede renunciar al derecho de retractación.

El Código Civil peruano las regula únicamente para los contratos


preparatorios, de manera que, si se celebra el contrato definitivo,
surten el mismo efecto que las arras confirmatorias.
Artículo 1480, Código Civil de 1984
La entrega de las arras de retractación sólo es válida en los contratos
preparatorios y concede a las partes el derecho de retractarse de ellos.

Artículo 1483, Código Civil de 1984


Si se celebra el contrato definitivo, quien recibe las arras las devolverá de
inmediato o las imputará sobre su crédito, según la naturaleza de la prestación.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

IV. El derecho de retención. Remisión


Es la facultad que el ordenamiento jurídico otorga en cierto tipo de
relaciones jurídicas a los acreedores para retener una cosa que tiene en
su poder en virtud de la obligación que le une con el deudor hasta que
éste cumpla la prestación que le corresponde o pague lo debido con
relación a la cosa. En España el referente más claro y didáctico del
derecho de retención se halla relacionado con la prenda; mientras que en
el Perú lo es la garantía mobiliaria.

11. La defensa del derecho de crédito


I. La protección del crédito
Por el principio de responsabilidad patrimonial, el deudor conoce que la
principal garantía de cumplimiento de la obligación que posee el acreedor
es su patrimonio, por lo que en ciertas ocasiones emprende acciones u
omisiones que tienen como finalidad disminuirlo. Así, frente a los actos de
desprendimiento de bienes o abstenciones por parte del deudor, el
ordenamiento jurídico otorga al acreedor una serie de acciones que le
permitirán proteger y cobrar su crédito.

II. La acción subrogatoria, indirecta u oblicua


Es la facultad que la ley concede al acreedor para asumir la defensa de
los derechos y ejercitar las acciones que tuviera el deudor contra un
tercero, con el objetivo de cubrir los créditos a su favor y extinguir la
deuda; y siempre que tales acciones no sean personalísimas o inherentes
a la persona del deudor.

Para ejercitar la acción subrogatoria, el acreedor deberá demostrar que


en el patrimonio del deudor no existen bienes suficientes para cubrir su
acreencia, de lo que se sigue que su carácter es subsidiario, ya que, como
se mencionó con anterioridad, se ejercitará ante la insuficiencia
patrimonial del deudor. La doctrina considera además que el acreedor
actúa en interés propio y no en interés del deudor porque no asume su
representación, sino que el ordenamiento jurídico le concede
directamente la acción para proteger su crédito. Así, lo que se lleva a cabo
es la sustitución procesal, por la cual quien interpondrá la demanda será
el acreedor en defecto de la actuación del deudor.

i. Requisitos de la acción subrogatoria


A. Deuda exigible
El crédito debe ser exigible, esto es, vencido y líquido.

B. Insolvencia patrimonial del deudor


Al contrario de lo que pueda entenderse, el acreedor no necesita la
declaración de insolvencia del deudor —expedida por Indecopi—,
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

toda vez que tal requisito obstaculizaría su derecho de crédito. Por


tanto, debe entenderse únicamente la falta de liquidez o escases
de bienes en su patrimonio para cancelar la deuda al acreedor.

C. Existencia de derechos ejercitables


El deudor debe ser a su vez acreedor de otra persona que será,
respecto del acreedor, deudor del deudor.

D. Utilidad de la acción subrogatoria


El acreedor deberá ejercitar aquellos derechos que sean útiles para
el cobro de su crédito, es decir que signifiquen un aumento del
patrimonio del deudor.

ii. Ejecución de la acción subrogatoria


La acción indirecta se ejercita de forma judicial y con notificación al
deudor para que tome conocimiento del juicio que promueve el
acreedor. No obstante lo anterior, un sector de la doctrina considera
que también puede ejercitarse de manera extrajudicial, notificando al
deudor vía carta notarial.
Artículo 1219, Código Civil de 1984
Es efecto de las obligaciones autorizar al acreedor para lo siguiente:
[…]
4.- Ejercer los derechos del deudor, sea en vía de acción o para asumir su defensa,
con excepción de los que sean inherentes a la persona o cuando lo prohíba la ley. El
acreedor para el ejercicio de los derechos mencionados en este inciso no necesita
recabar previamente autorización judicial, pero deberá hacer citar a su deudor en el
juicio que promueva.
[…]

Huelga mencionar que por la acción oblicua el acreedor no verá


satisfecho su crédito de manera automática, sino que la prestación del
tercero deudor se integrará al patrimonio de su deudor. Por tal razón,
esta acción tiene poca utilidad, puesto que el acreedor no solo trabaja
para él, sino para el resto de acreedores de su deudor si los hubiera.

iii. Efectos de la acción subrogatoria


A. Frente al acreedor
La acción que ejercitará el acreedor no solo será por el concepto o
monto de su acreencia, sino por la totalidad del crédito de su
deudor.

B. Frente al deudor demandado


El deudor demandado podrá oponer al acreedor demandante todas
las excepciones que habría podido oponerle a su acreedor.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

C. Frente al deudor
El ejercicio de la acción indirecta por parte del acreedor no conlleva
la pérdida del derecho de crédito del deudor, ya que es el titular del
mismo; por lo que podrá ejercitar todas las acciones
correspondientes a su crédito.

D. Frente al resto de acreedores


El ordenamiento jurídico no otorga ningún privilegio al acreedor
demandante en cuanto al cobro de la prestación que ha ingresado
al patrimonio del deudor producto de la acción oblicua. En tal
sentido, todos los acreedores del deudor se verán beneficiados y
cobrarán en el orden que les corresponda.

III. La acción directa


La acción directa se encaja en el mismo panorama que permite ejercitar
la acción subrogatoria. Sin embargo, se diferencia de esta última en
cuanto su efecto no es general, sino única y exclusivamente en beneficio
del acreedor demandante. Además, solo se puede ejercitar en algunos
contratos.
Artículo 1693, Código Civil de 1984
Tanto el subarrendatario como el arrendatario están obligados solidariamente ante el
arrendador por las obligaciones asumidas por el arrendatario.

Artículo 1772, Código Civil de 1984


El contratista no puede subcontratar íntegramente la realización de la obra, salvo
autorización escrita del comitente.
La responsabilidad frente al comitente es solidaria entre el contratista y el subcontratista,
respecto de la materia del subcontrato.

IV. La acción revocatoria o pauliana. Remisión


La acción pauliana o revocatoria es un mecanismo de defensa de los
acreedores mediante el cual éstos pueden solicitar la revocación de actos
reales de disposición —a título gratuito u oneroso— llevados a cabo por
el deudor en su perjuicio, esto es, con la finalidad de defraudarlos.
Artículo 195, Código Civil de 1984
El acreedor, aunque el crédito esté sujeto a condición o a plazo, puede pedir que se
declaren ineficaces respecto de él los actos gratuitos del deudor por los que renuncie a
derechos o con los que disminuya su patrimonio conocido y perjudiquen el cobro del
crédito. Se presume la existencia de perjuicio cuando del acto del deudor resulta la
imposibilidad de pagar íntegramente la prestación debida, o se dificulta la posibilidad de
cobro.
Tratándose de acto a título oneroso deben concurrir, además, los siguientes requisitos:
1.- Si el crédito es anterior al acto de disminución patrimonial, que el tercero haya tenido
conocimiento del perjuicio a los derechos del acreedor o que, según las circunstancias,
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

haya estado en razonable situación de conocer o de no ignorarlos y el perjuicio eventual


de los mismos.
2.- Si el acto cuya ineficacia se solicita fuera anterior al surgimiento del crédito, que el
deudor y el tercero lo hubiesen celebrado con el propósito de perjudicar la satisfacción del
crédito del futuro acreedor. Se presume dicha intención en el deudor cuando ha dispuesto
de bienes de cuya existencia había informado por escrito al futuro acreedor. Se presume
la intención del tercero cuando conocía o estaba en aptitud de conocer el futuro crédito y
que el deudor carece de otros bienes registrados.
Incumbe al acreedor la prueba sobre la existencia del crédito y, en su caso, la concurrencia
de los requisitos indicados en los incisos 1 y 2 de este artículo. Corresponde al deudor y
al tercero la carga de la prueba sobre la inexistencia del perjuicio, o sobre la existencia de
bienes libres suficientes para garantizar la satisfacción del crédito.

i. Diferencias del fraude con otras instituciones


A. Fraude y simulación
El fraude es un acto real, verdadero y querido por el fraudator. El
fraudator dispone de sus bienes, los afecta, los grava, renuncia a
derechos; con la finalidad de perjudicar el derecho de sus
acreedores. Por su parte, el acto jurídico simulado es un negocio
en apariencia.

Asimismo, en el negocio jurídico fraudulento, la otra parte —el


tercero adquirente— no es necesario que sepa de la conducta
ilícita. Así pues, el fraudator puede o no actuar en concilio con el
sujeto a cuyo favor dispondrá los bienes. En la simulación, se
necesita del consentimiento de ambas partes.

Además, en la simulación, los simulantes no se engañan entre sí


porque el engaño va dirigido a los terceros. En cambio, el negocio
jurídico fraudulento el fraudator busca engañar a su acreedor, que
es la otra parte de la relación jurídica. Por último, el negocio jurídico
fraudulento solo está referido a actos de disposición de bienes;
mientras que el negocio jurídico simulado es más amplio.

B. Fraude y fraude a la ley


El fraude consiste en la enajenación de bienes a título oneroso o
gratuito que realiza el deudor para evitar que su acreedor pueda
ejecutar su derecho de crédito haciéndose pago con dichos bienes.
Por otro lado, el fraude a la ley consiste en eludir una norma, o sea,
en la violación del ordenamiento jurídico y puede no producir daño
a nadie. Por tanto, el fraude, como se ha conceptuado, está dirigido
a los acreedores e importa una lesión a un derecho creditorio: es
un malicioso y desleal obrar en daño ajeno.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

ii. Plazo de prescripción de la acción pauliana


Artículo 2001, Código Civil de 1984
Prescriben, salvo disposición diversa de la ley:
[…]
4.- A los dos años, la acción de anulabilidad, la acción revocatoria, la acción
indemnizatoria por responsabilidad extracontractual y la que corresponda contra los
representantes de incapaces derivadas del ejercicio del cargo.
[…]

12. El reconocimiento de la relación jurídica-obligatoria


El reconocimiento es una declaración de voluntad unilateral por la cual una
persona manifiesta que es el sujeto pasivo en una relación jurídica-
obligatoria. Así, el deudor constituye un medio de prueba a favor del acreedor
de una relación anteriormente constituida. La doctrina lo asemeja a una
confesión.
Artículo 1205, Código Civil de 1984
El reconocimiento puede efectuarse por testamento o por acto entre vivos. En este último caso,
si para constituir la obligación primitiva se hubiera prescrito alguna forma determinada, el
reconocimiento deberá practicarse en la misma forma.

I. Supuestos del reconocimiento


El reconocimiento comporta la existencia una obligación primitiva de la
cual no hay pruebas de su existencia; o habiendo pruebas, se inutilizaron
o destruyeron.

II. Características del reconocimiento


i. Unilateralidad
El acto de reconocimiento de la relación obligatoria es unilateral, toda
vez que interesa que el deudor la reconozca sin la necesaria
intervención del acreedor. La participación del acreedor, si así se diera
el caso, no lo lleva a convertirse en bilateral.

ii. Declarativo de derecho


El reconocimiento de la obligación no implica una novación. Es decir
que solo reconoce la obligación, sin dar lugar a una nueva.

III. Efectos del reconocimiento


i. Medio probatorio
El reconocimiento actúa como medio probatorio para que el acreedor
pueda cobrar la deuda.

ii. Interrupción del plazo de prescripción


El reconocimiento interrumpe el plazo de prescripción, por lo que se
reiniciará el cómputo de tal.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Artículo 1996, Código Civil de 1984


Se interrumpe la prescripción por:
1.- Reconocimiento de la obligación.
[…]

iii. Exigibilidad de la deuda


Si la deuda estaba prescrita, el reconocimiento la hace exigible.

IV. Formas del reconocimiento


En cualquiera de los casos, la deuda tendrá que reconocerse de forma
expresa.

i. Acto inter vivos


Se deberá practicar la misma forma que hubiera sido exigida para la
constitución la obligación primitiva.
Artículo 1205, Código Civil de 1984
El reconocimiento puede efectuarse por testamento o por acto entre vivos. En este
último caso, si para constituir la obligación primitiva se hubiera prescrito alguna forma
determinada, el reconocimiento deberá practicarse en la misma forma.

ii. Acto mortis causa


Si en testamento posterior se revoca uno anterior que reconocía la
relación obligatoria, dicha cláusula se integra al nuevo testamento. El
problema respecto del testamento, concretamente del ológrafo, es que
su destrucción acarrearía el desconocimiento total de dicha cláusula.

V. Diferencias del reconocimiento con otras instituciones


i. Novación
El reconocimiento de una relación jurídica primitiva es declarativa de
derecho, esto es que solo se reconoce una relación jurídica ya
existente. En cambio, por la novación se extingue una relación jurídica
anterior para crearse una nueva.

ii. Confirmación
Por la confirmación se convalida un acto jurídico anulable o que
adolecía de algún vicio. Por otro lado, el reconocimiento exige de una
obligación primitiva válida, que no esté sujeta a ninguna causal de
anulabilidad.
Artículo 221, Código Civil de 1984
El acto jurídico es anulable:
1.- Por incapacidad relativa del agente.
2.- Por vicio resultante de error, dolo, violencia o intimidación.
3.- Por simulación, cuando el acto real que lo contiene perjudica el derecho de tercero.
4.- Cuando la ley lo declara anulable.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

13. La modificación de la relación jurídica-obligatoria


I. Introducción
La modificación de la obligación puede ser objetiva, si se presenta en su
objeto como en las circunstancias que lo rodean; o subjetiva, si se da en
la parte del acreedor —supuestos de transmisión de créditos— o del
deudor —supuestos de transmisión de la deuda.

La modificación objetiva no presenta mayores problemas, toda vez que


no alteran esencialmente la obligación y, por tanto, no implica su extinción
para dar paso a una nueva. Sin embargo, en la modificación subjetiva sí
se presentan dificultades, referidas a la transmisión del crédito o la deuda.

II. La trasmisión del crédito


De manera pacífica y unánime la doctrina acepta el principio de libre
transmisión del crédito, que respalda a todo acreedor y le faculta a ceder
su crédito libremente sin necesidad del consentimiento del deudor.

En líneas generales, la trasmisión del crédito supone la sustitución de la


persona del acreedor sin que varíe la identidad de la obligación, esto
significa, sin que se produzca una novación. Además, de ninguna manera
el tercero que se constituye como nuevo acreedor podrá variar
unilateralmente alguna característica objetiva de la obligación.

i. Cesión del crédito


La cesión del crédito es un negocio jurídico bilateral entre el acreedor
originario y un tercero que lo sustituirá en su posición. Es impulsado
únicamente por voluntad del acreedor y no requiere del consentimiento
del deudor para su validez; no obstante, sí es importante hacerle de
conocimiento porque de ello dependerán sus efectos.
Artículo 1206, Código Civil de 1984
La cesión es el acto de disposición en virtud del cual el cedente trasmite al cesionario
el derecho a exigir la prestación a cargo de su deudor, que se ha obligado a transferir
por un título distinto.
La cesión puede hacerse aun sin el asentimiento del deudor.

La trasmisión de la posición del acreedor puede darse por acto inter


vivos como mortis causa, aunque generalmente se lleva a cabo
mediante cualquier negocio jurídico bilateral entre el cedente y el
cesionario. En cuanto a su forma, es solemne: debe hacerse por
escrito, bajo sanción de nulidad.
Artículo 1207, Código Civil de 1984
La cesión debe constar por escrito, bajo sanción de nulidad.
Cuando el acto o contrato que constituye el título de la transferencia del derecho
conste por escrito, este documento sirve de constancia de la cesión.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Con acierto se ha señalado anteriormente que el único requisito para


que la cesión del crédito despliegue todos sus efectos es el de
comunicar al deudor la transferencia; pues si no habiéndose hecho la
comunicación respectiva y habiendo el deudor cumplido con la
prestación al cedente, se tendrá el caso de pago al acreedor aparente,
por lo que se reputará válido su pago y se liberará de la deuda.
Artículo 1215, Código Civil de 1984
La cesión produce efecto contra el deudor cedido desde que éste la acepta o le es
comunicada fehacientemente.

Artículo 1216, Código Civil de 1984


El deudor que antes de la comunicación o de la aceptación, cumple la prestación
respecto al cedente, no queda liberado ante el cesionario si éste prueba que dicho
deudor conocía de la cesión realizada.

El ordenamiento jurídico impide la cesión del crédito si se opone a la


ley, a la naturaleza de la obligación o el pacto con el deudor. Así, el
acreedor no podrá transmitir una obligación personalísima, como
tampoco si figura en la constitución de la obligación la prohibición
expresa de hacerlo.
Artículo 1210, Código Civil de 1984
La cesión no puede efectuarse cuando se opone a la ley, a la naturaleza de la
obligación o al pacto con el deudor.
El pacto por el que se prohíbe o restringe la cesión es oponible al cesionario de buena
fe, si consta del instrumento por el que se constituyó la obligación o se prueba que el
cesionario lo conocía al momento de la cesión.

Sin perjuicio de lo anterior, el Código Civil peruano sí contempla la


posibilidad de trasmitir un crédito litigioso o controvertido, siendo el
cesionario quien asume el riesgo de tal. También permite ceder el
derecho a participar en un patrimonio hereditario ya causado, pero
quedando el cedente obligado a garantizar su calidad de heredero.
Artículo 1208, Código Civil de 1984
Pueden cederse derechos que sean materia de controversia judicial, arbitral o
administrativa.

Artículo 1209, Código Civil de 1984


También puede cederse el derecho a participar en un patrimonio hereditario ya
causado, quedando el cedente obligado a garantizar su calidad de heredero.

A. Relaciones en la cesión del crédito


a. Relaciones entre el cedente y el cesionario
El cedente transmite al cesionario el crédito con todos los
privilegios, garantías y accesorios que tuviere.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Artículo 1211, Código Civil de 1984


La cesión de derechos comprende la trasmisión al cesionario de los
privilegios, las garantías reales y personales, así como los accesorios del
derecho trasmitido, salvo pacto en contrario.
En el caso de un bien dado en prenda, debe ser entregado al cesionario si
estuviese en poder del cedente, mas no si estuviese en poder de un tercero.

Al transmitir su crédito, el cedente garantiza la existencia y la


exigibilidad del mismo, salvo cuando se haya trasmitido un
derecho de crédito litigioso. En cualquier caso, el cedente no
garantizará al cesionario el cobro efectivo del crédito, esto es,
el cumplimiento de la obligación por parte del deudor.
Artículo 1212, Código Civil de 1984
El cedente está obligado a garantizar la existencia y exigibilidad del derecho
cedido, salvo pacto distinto.

Ahora, si bien de la propia naturaleza de este negocio jurídico


no puede presumirse como garantía la solvencia del deudor, las
partes sí que pueden pactarlo expresamente, de tal manera que
el cedente estará obligado a garantizar la suficiencia patrimonial
del deudor, lo que supone agravar su responsabilidad.
Artículo 1213, Código Civil de 1984
El cedente no está obligado a garantizar la solvencia del deudor, pero si lo
hace, responde dentro de los límites de cuanto ha recibido y queda obligado
al pago de los intereses y al reembolso de los gastos de la cesión y de los
que el cesionario haya realizado para ejecutar al deudor, salvo pacto distinto.

b. Relaciones entre cedido y el cesionario


El cesionario, siendo el principal interesado en obtener la
prestación del cedido, generalmente será quien se encargue de
comunicarle que se ha llevado a cabo la trasmisión del crédito,
ya que tal acción —la comunicación de la cesión del crédito—
es el único requisito para que despliegue sus efectos.
Artículo 1215, Código Civil de 1984
La cesión produce efecto contra el deudor cedido desde que éste la acepta o
le es comunicada fehacientemente.

Si el cedido no conoció de tal y paga al antiguo acreedor, el


pago se reputará válido y se liberará de la deuda (pago al
acreedor aparente). Además, la doctrina considera que si el
deudor —que sí conoce— rechaza la trasmisión del crédito, a
pesar de que esta igual será válida, aquel podrá oponer al
cesionario la compensación de créditos que hubiera podido
oponer al cedente.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

Artículo 1216, Código Civil de 1984


El deudor que antes de la comunicación o de la aceptación, cumple la
prestación respecto al cedente, no queda liberado ante el cesionario si éste
prueba que dicho deudor conocía de la cesión realizada.

B. Efectos de la cesión del crédito


a. Modificación subjetiva activa en la relación jurídica-
obligatoria
Por la trasmisión del crédito siempre se sustituirá la persona del
acreedor.

b. Inalterabilidad del crédito


El crédito se transmite en las mismas condiciones. Asimismo,
el cesionario no podrá variar unilateralmente alguna
característica objetiva de la obligación.

c. Inalterabilidad de las garantías del acreedor


El cedente transmite al cesionario el crédito con todos los
privilegios, garantías y accesorios que tuviere.
Artículo 1211, Código Civil de 1984
La cesión de derechos comprende la trasmisión al cesionario de los
privilegios, las garantías reales y personales, así como los accesorios del
derecho trasmitido, salvo pacto en contrario.
En el caso de un bien dado en prenda, debe ser entregado al cesionario si
estuviese en poder del cedente, mas no si estuviese en poder de un tercero.

ii. Subrogación del crédito


La subrogación del crédito es el pago con subrogación. Por tal, en una
relación jurídica-obligatoria un tercero se sustituye en la posición del
acreedor en virtud de un pago. Bien se ve entonces su principal
diferencia con la cesión del crédito, que se lleva a cabo mediante un
negocio jurídico. No obstante, los efectos de ambas figuras son los
mismos. Además, no se produce una novación, sino únicamente una
modificación subjetiva activa en la misma obligación.

III. La transmisión de la deuda


En la transmisión de la deuda siempre habrá un cambio en la persona del
deudor; y, a diferencia de la cesión del crédito, la voluntad del acreedor
se constituye como requisito de validez del negocio jurídico, ya que tiene
interés en satisfacer acreencia o, dicho de otra manera, en asegurar el
cumplimiento de la obligación. La doctrina considera de manera unánime
a la asunción de la deuda como una simple modificación de la persona
del deudor, mientras que a la expromisión y delegación las trata como
supuestos de novación.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

i. Asunción de la deuda
La asunción de la deuda es un convenio que se realiza entre el tercero
—que asumirá la deuda— y el deudor primitivo, que necesita además
del consentimiento del acreedor para su validez. Su única finalidad es
liberar al deudor primitivo de la prestación; y, por regla general, todas
las garantías —personales y reales— que acompañan a la obligación
se extinguen, salvo sus titulares las ratifiquen expresamente. Sin
perjuicio de lo anterior, el tercero que se constituye como nuevo
deudor podrá oponer al acreedor todo lo relacionado con la relación
jurídica-obligatoria.

De manera unánime la doctrina la cataloga como una modificación


subjetiva pasiva de la obligación; no obstante ello, no ha sido recogida
por el Código Civil peruano. Así, de celebrarse tal contrato, sería
atípico, pero nominado.

Huelga decir que es un negocio jurídico trilateral porque necesita de la


aprobación del acreedor. Dicho consentimiento puede darse antes, al
mismo tiempo o con posterioridad al acuerdo entre el deudor y el
tercero. Y si bien el Código Civil tampoco sanciona forma alguna para
el consentimiento, se entiende que debe ser expreso. Por tal razón, se
sugiere que se dé a través de una forma que brinde seguridad jurídica.

ii. Expromisión
La expromisión es el acuerdo entre el acreedor y un tercero —que
asumirá la deuda— sin el consentimiento del deudor; y cuya finalidad
es liberar a este último de la prestación.
Artículo 1282, Código Civil de 1984
La novación por expromisión puede efectuarse aun contra la voluntad del deudor
primitivo.

Entre los motivos por los que el tercero asume la obligación del deudor,
caben señalar el animus donandi, esto significa, como un acto de mera
liberalidad, que produce un enriquecimiento en el patrimonio del
deudor, en perjuicio del caudal del tercero, y que podría ser objeto de
una acción de enriquecimiento indebido; la solvendi causa, es decir,
por una deuda previa existente entre el primitivo deudor y el tercero
que aparece y cumple; y el animus credendi, esto es, para subrogarse
en la posición del acreedor.

El Código Civil ha regulado la expromisión como un supuesto de


novación; sin embargo, su aplicación debe verse en el caso concreto
porque bien podría ser solo una modificación subjetiva pasiva de la
relación jurídica-obligatoria.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

iii. Delegación
Para la doctrina, la delegación es una operación jurídica compleja, en
la cual el delegante ordena al delegado realizar una prestación o una
promesa de pago a favor del delegatario, entendiéndose esta como si
la hubiera hecho el delegante. Así, el delegado, al recibir la orden del
delegante, toma el papel del nuevo deudor, operándose un cambio en
la parte subjetiva pasiva de la obligación.
Artículo 1281, Código Civil de 1984
La novación por delegación requiere, además del acuerdo entre el deudor que se
sustituye y el sustituido, el asentimiento del acreedor.

Bien vistas las cosas, el delegante es el deudor primitivo y quien


autoriza el pago. A su vez, el delegatario es el acreedor, esto es, quien
ve cubierto su interés con la orden o promesa de pago. Por último, el
delegado es el tercero que, sin formar parte de la relación jurídica-
obligatoria, recibe la orden de pago por parte del delegante.

A. Relaciones y fases en la delegación


a. Relaciones entre el delegatario y el delegante
Esta relación corresponde a la primera fase: la observancia de
la relación jurídica-obligatoria existente entre el acreedor y el
deudor, respectivamente.

b. Relaciones entre el delegante y el delegado


Esta relación corresponde a la segunda fase: la orden o
promesa de pago. Entre ellos existirá un contrato de mandato,
de tarjeta de crédito o de título valor; en virtud del cual luego el
delegado podrá cobrarle al delegante.

c. Relaciones entre el delegado y el delegatario


Esta relación corresponde a la tercera fase: el pago. Ahora bien,
si el tercero no paga al acreedor, entonces se creará una
relación jurídica —antes inexistente— entre el delegado y el
delegatario. Además, el acreedor también podrá ir en contra del
delegante cuando la insolvencia del delegado hubiese sido
anterior y pública o conocida por el deudor al momento de
delegar su deuda, así como también cuando las partes lo fijen.
Artículo 1283, Código Civil de 1984
En la novación no se trasmiten a la nueva obligación las garantías de la
obligación extinguida, salvo pacto en contrario.
Sin embargo, en la novación por delegación la obligación es exigible contra
el deudor primitivo y sus garantes, en caso de que la insolvencia del nuevo
deudor hubiese sido anterior y pública, o conocida del deudor al delegar su
deuda.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

14. La extinción de la relación jurídica-obligatoria


Es conveniente recordar que las relaciones jurídicas-obligatorias nacen para
extinguirse, a diferencia de los derechos reales que tienen vocación de
permanencia.

I. Causas de extinción de la relación jurídica-obligatoria


Si bien el pago es la forma normal e ideal de extinguir una obligación,
existen otros mecanismos que tienen la misma finalidad. Asimismo, cabe
anotar desde un principio que la nulidad, anulabilidad, resolución y
rescisión, al ser vicios del negocio jurídico, originarios o sobrevenidos, no
serán vistos en este capítulo.

i. La compensación
Es un modo de extinguir las obligaciones entre dos personas que son
recíprocamente acreedoras y deudoras. Consiste pues en dar por
pagada la deuda de cada uno en cantidad igual a la de su crédito que
se da por cobrado en otro tanto.
Artículo 1288, Código Civil de 1984
Por la compensación se extinguen las obligaciones recíprocas, líquidas, exigibles y
de prestaciones fungibles y homogéneas, hasta donde respectivamente alcancen,
desde que hayan sido opuestas la una a la otra. La compensación no opera cuando
el acreedor y el deudor la excluyen de común acuerdo.

A. Clases de compensación
a. Compensación legal
La compensación legal se aplica automáticamente, sin
consentimiento de la otra parte. Generalmente la utilizan los
bancos.

b. Compensación convencional
Como su nombre lo indica, es la pactada por las partes.
Artículo 1288, Código Civil de 1984
[…] La compensación no opera cuando el acreedor y el deudor la excluyen
de común acuerdo.

B. Requisitos de la compensación
a. Deudas personales
Ambas partes deben ser acreedoras y deudoras de manera
recíproca.
Artículo 1291, Código Civil de 1984
El garante puede oponer la compensación de lo que el acreedor deba al
deudor.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

b. Deudas homogéneas
Este requisito responde al principio de identidad del pago. En
tal sentido, los bienes a compensar deben ser de la misma
especie, aunque las partes pueden pactar en contrario. Si así
fuese el caso, entonces se estaría frente a un contrato atípico o
doble dación en pago.

c. Deudas vencibles
Las deudas deben ser exigibles y líquidas.

Artículo 1289, Código Civil de 1984


Puede oponerse la compensación por acuerdo entre las partes, aun cuando no
concurran los requisitos previstos por el artículo 1288. Los requisitos para tal
compensación pueden establecerse previamente.

C. Supuestos prohibidos de compensación


Artículo 1290, Código Civil de 1984
Se prohíbe la compensación:
1.- En la restitución de bienes de los que el propietario haya sido despojado.
2.- En la restitución de bienes depositados o entregados en comodato.
3.- Del crédito inembargable.
4.- Entre particulares y el Estado, salvo en los casos permitidos por la ley.

ii. La condonación
La condonación es un contrato bilateral en virtud del cual el acreedor,
sacrificando la satisfacción de su crédito, perdona o deja sin efecto la
prestación del deudor; esto es, extingue la obligación.
Artículo 1295, Código Civil de 1984
De cualquier modo que se pruebe la condonación de la deuda efectuada de común
acuerdo entre el acreedor y el deudor, se extingue la obligación, sin perjuicio del
derecho de tercero.

Artículo 1296, Código Civil de 1984


La condonación a uno de los garantes no extingue la obligación del deudor principal,
ni la de los demás garantes.
La condonación efectuada a uno de los garantes sin asentimiento de los otros
aprovecha a todos, hasta donde alcance la parte del garante en cuyo favor se realizó.

La condonación no opera de manera automática, sino que es requisito


indispensable el consentimiento del deudor —presupuesto también de
la donación— toda vez que nadie puede ver enriquecido su patrimonio
sin su consentimiento. El Código Civil no sanciona una forma especial
para la condonación, como sí lo hace respecto de la donación, a la que
le prescribe una forma solemne.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

A. Presunciones de la condonación
a. Cuando el acreedor entrega el título o recibo al deudor
Artículo 1297, Código Civil de 1984
Hay condonación de la deuda cuando el acreedor entrega al deudor el
documento original en que consta aquella, salvo que el deudor pruebe que la
ha pagado.

El legislador no ha tomado en cuenta que esta se configura más


bien como una presunción del pago y no de condonación; pues
si el acreedor entrega el título o recibo, se entiende que el
deudor ha satisfecho la prestación a la estuvo obligado.

b. Cuando el acreedor devuelve voluntariamente la prenda


Artículo 1298, Código Civil de 1984
La prenda en poder del deudor hace presumir su devolución voluntaria, salvo
prueba en contrario.

Artículo 1299, Código Civil de 1984


La devolución voluntaria de la prenda determina la condonación de la misma,
pero no la de la deuda.

Antes no existía el Registro de Bienes Muebles, por lo que la


prenda —hoy garantía mobiliaria— consistía también en su
entrega física. Así, puestos en contexto, puede señalarse la
misma crítica que en el anterior supuesto: la entrega voluntaria
de la prenda del acreedor al deudor debe tomarse como una
presunción de pago, mas no de condonación.

iii. La consolidación o confusión


Se está frente a un caso de consolidación cuando recae sobre una
misma persona al mismo tiempo la condición de acreedora y deudora
de la misma obligación. Su efecto principal es la extinción de la
obligación; aunque ciertas veces se extinguirá parcialmente si la
consolidación se produce en parte de ella.
Artículo 1300, Código Civil de 1984
La consolidación puede producirse respecto de toda la obligación o de parte de ella.

Asimismo, si por alguna causa la consolidación cesa, la obligación


primitiva vuelve a surtir efectos ipso iure.
Artículo 1301, Código Civil de 1984
Si la consolidación cesa, se restablece la separación de las calidades de acreedor y
deudor reunidas en la misma persona.
En tal caso, la obligación extinguida renace con todos sus accesorios, sin perjuicio del
derecho de terceros.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

iv. La novación
Por la novación se extingue una relación jurídica anterior para crearse
una nueva.
Artículo 1279, Código Civil de 1984
La emisión de títulos valores o su renovación, la modificación de un plazo o del lugar
del pago, o cualquier otro cambio accesorio de la obligación, no producen novación.

A. Clases de novación
a. Novación objetiva
En la novación objetiva se producen cambios profundos en la
causa, objeto o circunstancias principales de la obligación; pero
las partes siguen siendo las mismas. Además, el fenecimiento
de la obligación principal acarrea consigo la extinción de las
garantías.
Artículo 1278, Código Civil de 1984
Hay novación objetiva cuando el acreedor y el deudor sustituyen la obligación
primitiva por otra, con prestación distinta o a título diferente.

b. Novación subjetiva
a) Novación subjetiva activa
En la novación subjetiva activa se mantiene la relación
jurídica-obligatoria, pero el acreedor es otro con el mismo
deudor. Se diferencia de la simple modificación subjetiva
activa porque esta novación siempre tendrá como requisito
de validez el consentimiento del deudor.
Artículo 1280, Código Civil de 1984
En la novación por cambio de acreedor se requiere, además del acuerdo
entre el acreedor que se sustituye y el sustituido, el asentimiento del
deudor.

b) Novación subjetiva pasiva


En la novación subjetiva pasiva también se mantiene la
relación jurídica-obligatoria, pero el deudor es otro con el
mismo acreedor. Será un caso de expromisión o delegación
según se analice el caso concreto.
Artículo 1281, Código Civil de 1984
La novación por delegación requiere, además del acuerdo entre el deudor
que se sustituye y el sustituido, el asentimiento del acreedor.

Artículo 1282, Código Civil de 1984


La novación por expromisión puede efectuarse aun contra la voluntad del
deudor primitivo.
Apuntes de Derecho de Obligaciones – Nicolás Obando Gutiérrez

c. Novación mixta
En la novación mixta cambia una de las partes, así como
también se produce una alteración profunda en la propia
obligación.

B. Requisito de la novación
a. Existencia de una obligación primitiva
La obligación primitiva debe ser válida o, al menos, anulable. Si
fuese nula, no existirá la novación.
Artículo 1286, Código Civil de 1984
Si la obligación primitiva fuera nula, no existe novación.
Si la obligación primitiva fuera anulable, la novación tiene validez si el deudor,
conociendo del vicio, asume la nueva obligación.

Artículo 1287, Código Civil de 1984


Si la nueva obligación se declara nula o es anulada, la primitiva obligación
revive, pero el acreedor no podrá valerse de las garantías prestadas por
terceros.

b. Animus novandi
Debe existir un ánimo de novar, esto significa, una voluntad
encaminada a modificar profundamente la obligación.
Artículo 1277, Código Civil de 1984
Por la novación se sustituye una obligación por otra.
Para que exista novación es preciso que la voluntad de novar se manifieste
indubitablemente en la nueva obligación, o que la existencia de la anterior sea
incompatible con la nueva.

c. Surgimiento de una obligación nueva


Inmediatamente a la extinción de la obligación primitiva, deberá
surgir una nueva.

v. El mutuo disenso
El mutuo disenso es el contrato entre acreedor y deudor a través del
cual ambos manifiestan su voluntad de extinguir la obligación.
Artículo 1313, Código Civil de 1984
Por el mutuo disenso las partes que han celebrado un acto jurídico acuerdan dejarlo
sin efecto. Si perjudica el derecho de tercero se tiene por no efectuado.

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