Las Emociones

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 6

DEFINICIÓN Y FUNCIONES

Somos lo que sentimos


¿Qué son las emociones? ¿Cómo surgen? ¿Qué función desempeñan?
Se aportan nuevas respuestas a viejas preguntas

ALBERT NEWEN Y ALEXANDRA ZINCK

RESUMEN

Entre la teoría
y la práctica

1 Nuestras emociones
conjugan varios as- ¿H a contado el lector cuántas situaciones
emocionales vive a lo largo de un mismo
Las emociones no recibieron la atención debi-
da a lo largo de la historia de la filosofía, ni de la
pectos: excitación corpo- día? No se ha levantado y ya disfruta pensando investigación científica. Antes bien, interesaba
ral, evaluación intelec- en el café o té matinal que le espera. Se enfada, la razón y la capacidad deductiva. A las emocio-
tual, expresión y vivencia luego, si el metro se le escapa por segundos. Mira nes se las suponía procesos de segundo nivel,
subjetiva. de reojo, con envidia, el vistoso teléfono móvil «animales», si no perturbadores. La situación
de otro viajero o se siente acosado por el pitbull cambió en las postrimerías del siglo XIX, cuan-

2 Las emociones no en-


tran en contradicción
con el procesamiento
de su vecino de asiento. Va subiendo su tensión
cuando recuerda la larga lista de tareas que le
aguardan en el trabajo. Para turbar más su esta-
do entra en escena la teoría de las emociones
del psicólogo estadounidense William James
(1842-1910) y del danés Carl Lange (1834-1900).
mental de los estímulos do de ánimo se percata de que se ha olvidado del Ambos postularon, de forma independiente,
ambientales, sino que los cumpleaños de su amigo, que fue ayer. que la característica central de las emociones,
complementan en la vida Algunas emociones nos absorben por entero, es decir, nuestra vivencia subjetiva, dependía
cotidiana. otras asoman discretamente en un segundo pla- de procesos fisiológicos. Los sentimientos eran,
no. Unas son horribles, otras bellas. Pero todas en la tesis de James-Lange, las percepciones de

3 Según el grado de
complejidad, distin-
guimos entre protoemo-
van y vienen, sin que nosotros podamos hacer
nada. O al menos así nos parece. Ni podemos
especificar la razón de la presencia de un senti-
nuestros propios estados corporales: lisa y lla-
namente, lo que experimentamos cuando nues-
tro cuerpo se transforma en reacción ante los
ciones, emociones bási- miento determinado, ni solemos poder acotar acontecimientos del entorno. No lloramos por-
cas, emociones cognitivas lo que nos está sucediendo en realidad. Resulta que estemos tristes, sino que estamos tristes
primarias y emociones obligado, pues, inquirir sobre la naturaleza de porque lloramos. Lange, fisiólogo de formación,
cognitivas secundarias. las emociones, averiguar qué nos pasa cuando comprendió antes que nadie que las emociones
nos enamoramos o nos enfadamos, cuando llo- eran reacciones corporales elementales, del tipo
Artículo publicado en Mente y cerebro n.o 34
ramos de tristeza o saltamos de alegría. de la dilatación de los vasos sanguíneos. Sin

8 CUADERNOS MyC n.o 2 / 2012


© FOTOLIA / PAVEL LOSEVSKY (foto); GEHIRN & GEIST / STEFANIE SCHMITT (liustración)
esa vinculación, la emoción quedaría en algo Stanley Schachter y Jerome Singer demostra- ORGULLOSO COMO ÓSCAR
etéreo y frío. ron en 1962, a través de un experimento hoy Poder percibir y nombrar los
clásico, que los pensamientos desempeñaban un propios estados emocionales
Quien quiera sentir, debe pensar papel decisivo en la formación de las emociones. es una parte importante del
Sin embargo, la teoría de James-Lange tiene un Administraron a los voluntarios un cóctel de desarrollo infantil.
punto débil: nuestro estado corporal persiste adrenalina, sin que estos lo supieran, convenci-
invariable pese a experimentar sentimientos dos de que se trataba de una bebida vitaminada
dispares. Estos se hallan asociados con frecuen- cuyo efecto debía ser investigado en un test vi-
cia a lo que ocupa nuestra mente, ya sea la mujer sual consecuente. La toma, sin embargo, provo-
que amamos o la tarea que odiamos. Semejan- có una excitación corporal en los probandos. A
te observación llevó a los psicólogos a la tesis continuación se les llevó a una sala de espera,
opuesta. Ahora, las emociones dependían del donde se encontraba un colaborador del investi-
contenido de nuestros pensamientos. gador que se comportó de forma inestable, unas
Supongamos que el lector se encuentra guar- veces alegre y dicharachero, otras mostrándose
dando cola en la caja del supermercado. De re- nervioso por la larga espera.
pente, la persona que está detrás le empuja y Los probandos interpretaron su propia excita-
le lanza contra la señora mayor que tiene de- ción corporal ora como alegría ora como enfado,
lante. Aunque él no ha provocado el empujón, según hubiesen estado junto a una persona ale-
recibe la mirada indignada de la señora, con el gre o fastidiosa. Otros sujetos experimentales,
consiguiente embarazo. En su nuevo estado de a los que se les había ilustrado sobre la dosis de
desagrado interior, el lector piensa incluso que adrenalina y sus efectos, no expresaron, en cam-
habría podido impedir el choque si hubiese te- bio, las emociones mencionadas. Parece, pues,
nido más cuidado; sentirá vergüenza y se apres- que los estímulos internos, el conocimiento
tará a disculparse. personal y la atribución de causas representan

EMOCIONES 9
De las muchas posibles combinaciones de las En una perspectiva temporal, conviene dis-
tinguir además controles de valoración, que
valoraciones intelectuales resulta la enorme revistan especial interés para el individuo. Por
ejemplo, examinar la novedad de un aconteci-
diversidad de nuestros estados emocionales miento, pues lo desconocido podría encerrar
un peligro potencial. Luego, preguntarse si el
factores importantes para nuestra vivencia de evento en cuestión ha de considerarse positivo
los sentimientos. (agradable o útil) o negativo (peligroso, doloro-
La doctrina que funda los eventos emociona- so o desagradable). En tercer lugar, valorar si el
les en pensamientos se denomina teoría cogniti- suceso encaja con los propios objetivos (en qué
va de las emociones. Pero las emociones pueden medida se es responsable del mismo o puede in-
originarse también fuera del pensamiento. Lo fluir posteriormente) o si armoniza con la propia
puso de manifiesto Joseph LeDoux, de la Uni- autoimagen y las normas sociales.
versidad de Nueva York. En experimentos con
animales, demostró que el instinto de miedo Alegría por hacer bien el pino
se transformaba con suma celeridad en una vía Las muchas combinaciones que surgen de tales
cerebral de señales que corre por la corteza, sede criterios condicionan la ingente diversidad de
de la conciencia. Este atajo posibilita, en caso de nuestros estados emocionales. A fin de cuentas
emergencia, una reacción extremadamente rá- resulta, según Klaus Scherer, psicólogo y direc-
pida, por ejemplo ante el olor a quemado o ante tor del Centro de ciencias afectivas de Ginebra,
la visión de un depredador potencial. un complejo modelo procesual de las emociones
Las dos teorías clásicas de las emociones —«la que, grosso modo, se resumiría en la imagen si-
que acentúa lo corporal» de James y Lange, y guiente: con un nuevo suceso —la primera vez
la cognitiva de Schachter y Singer— coinciden que hace el pino con éxito— aumenta en un
en su extremada unidimensionalidad. Los psi- principio solo su excitación interna, cuya va-
cólogos optan ahora por un modelo de las emo- loración nos indica que para el sujeto el éxito
ciones con varias componentes y características: alcanzado es agradable y queda positivamente
sorprendido. Advierte luego que el suceso se
1. modificaciones fisiológicas típicas (taquicar- integra en sus propósitos y en su autoimagen,
dia, sudoración o agitación motora); para acabar sintiéndose orgulloso de la hazaña.
2. modos de comportamiento característicos, Desde la perspectiva de la psicología del de-
así en la expresión mímica; sarrollo, las emociones pueden dividirse en cua-
3. vivencia subjetiva de hallarse en un determi- tro niveles: protoemociones, emociones básicas,
nado estado emocional; emociones cognitivas primarias y emociones
4. contenidos mentales conectados con esa vi- cognitivas secundarias. Las protoemociones
vencia, tales como son protoformas de las emociones; en ellas se
5. un objeto intencional; es decir, un objeto ac- encuentran ya establecidos la mayoría de los
tual al que se refiere la emoción. aspectos, desde la excitación fisiológica hasta la
sensación subjetiva correspondiente y la orien-
tación interactiva, pasando por la rápida eva-
Sin sentimientos perderíamos la base luación de la situación y la expresión mímica.
para una vida cotidiana con éxito Pero aún permanecen de modo inespecífico y no

¿Control inconsciente de los sentimientos?

¿Pueden los sentimientos ser inconscientes? Absolutamente. El fenómeno de las emociones


ocultas lo describió Sigmund Freud (1856-1939). En estudios de los años noventa, Daniel Wein-
berger, en la Universidad Stanford, observó que las personas «represoras» mostraban todos
los síntomas corporales del miedo, aunque decían sentirse del todo tranquilas. Al parecer,
no entra en la autoimagen de estas personas atribuirse miedo a sí mismas. La represión es
suficientemente fuerte, por lo que tales sujetos no serán conscientes de su emoción. Por eso
no saben que tienen miedo, aunque les corra un sudor frío por la frente.

10 CUADERNOS MyC n.o 2 / 2012


están dirigidas de modo claramente intencional
hacia un objeto. Una situación parece positiva o
negativa, sin que haya sido analizada en detalle.
En este estadio solo hay dos posibilidades: bien-
estar o malestar.
Las protoemociones positivas y negativas,
muy simples, se acentúan en las emociones bá-
sicas. Paul Ekman, de la Universidad de San Fran-
cisco, mostró, en investigaciones pioneras, que
la expresión emocional del rostro era la misma
en todas partes, cualquiera que fuera la cultura.
Se discute cuántas emociones básicas hay. Par-
timos por economía de cuatro: miedo, alegría,
tristeza y enfado, que caracterizan a nuestras
reacciones ante los desafíos básicos de la vida
(peligro, autoeficacia, separación y pérdida, así
como las expectativas frustradas). Se encuen-
tran en todos los pueblos.
Las emociones básicas, independientes del
procesamiento intelectual consciente, posibili-
tan una rápida polarización de la atención. Antes
incluso de que sepamos si este o aquel objeto es
un palo o una serpiente, reaccionamos. ¿Cómo?
El estímulo almacenado como peligroso provoca
un comportamiento de huida. Sentimos miedo.
Junto a estos procesos rápidos hay otra reela-
boración parsimoniosa y consciente de los es-
tímulos visuales. Desarrollada en la corteza
cerebral, conduce a una representación exacta

© FOTOLIA / BILDERBOX (foto); GEHIRN & GEIST / STEFANIE SCHMITT (liustración)


del objeto; la serpiente o el palo se reconocen
entonces como tales. Esto produce una confir-
mación o un cese de la alarma para el primer
impulso inconsciente de miedo. Para nuestra
fortuna, por precaución, nos hemos apartado
de un salto.
En los estadios siguientes, el contenido del
pensamiento recibe cada vez más peso. En las
emociones cognitivas primarias interviene una
convicción típica que caracteriza a la emoción de
marras. Mientras la emoción básica del miedo
se produce sola, pues la situación se califica de
peligrosa, la emoción cognitiva primaria agrega
el convencimiento de que tales situaciones son
peligrosas. Hablamos entonces de la sensación
de amenaza. Tras un convencimiento conscien- MANTENER LA SERENIDAD
te, viene la valoración minuciosa de la situación. El grado de diafanidad con que damos a conocer
En el caso de la emoción básica de la alegría, nuestra vida emocional interior depende de la cultu-
por ejemplo, significaría una emoción cogniti- ra y de la propia personalidad.
va primaria, la satisfacción; así, cuando alguien
comprueba que un diálogo con el jefe transcurre
de manera positiva y puede abrigar esperanza
de un aumento de sueldo.
En la emoción cognitiva secundaria no está en
juego solo una convicción, sino toda una teoría
sobre las relaciones sociales. Una manifestación

EMOCIONES 11
del miedo como emoción cognitiva secunda- la persona tiene la intención de ser amable con
El «analista de ria sería, por ejemplo, los celos, el miedo ante nosotros) y, en cuarto lugar, para el control de
las emociones» la amenaza de pérdida de la pareja. Al mismo las relaciones sociales.
¿Hasta qué punto conoce tiempo interviene una «miniteoría» sobre las El último aspecto importa para un desenvol-
usted sus propios sentimien- expectativas y normas sociales, sobre cómo se vimiento adecuado de la convivencia. El amor,
tos? Examínese en la página imaginan las expectativas con la pareja o un la envidia, los celos y otras emociones comple-
web de Internet de un gru- futuro común. Eso depende de la naturaleza del jas sientan las relaciones entre las normas y las
po de investigadores de las trasfondo cultural y de la experiencia personal. barreras, estabilizando nuestras relaciones so-
emociones de la Universidad Así, vergüenza y orgullo en la cultura occidental ciales. Cuando nos sentimos atraídos hacia una
de Ginebra www.unige. difieren de vergüenza y orgullo en la del extre- persona y reflexionamos si este sentimiento es
ch/fapse/emotion/demo/ mo oriente, lo mismo en los motivos que en las amor, entonces comenzamos a sopesar en la vi-
demostart.html valoraciones de los comportamientos. En occi- vencia emocional el comportamiento, los deseos
dente cuenta más la independencia y el trabajo y las convicciones de los otros y a compararlos
personales, mientras que entre los chinos son con los propios.
más populares la armonía mutua y la modestia. Las emociones complejas determinan el mar-
Imagínese que un niño de diez años interpre- co para la acción correcta. Mediante las emo-
ta con éxito una sonata para piano de Frédéric ciones evaluamos las situaciones, y regulamos,
Chopin. Tras la actuación su madre le elogia con motivamos y coordinamos los comportamien-
fervor, con el orgullo consiguiente del pequeño. tos. Se trata de un factor imprescindible en la
La misma situación, en otro contexto cultural: vida cotidiana. Lo sabemos por experiencia, si
una madre china le indicaría a su hijo que aún el procesamiento emocional está perturbado, las
debería practicar más, para evitar ciertos fallos consecuencias resultan fatales. Hanna y Antonio
cometidos; el pequeño se sentirá avergonzado. A Damasio y Antonio Becchara, de la Universidad
pesar del mismo resultado, la valoración difiere de Iowa, demostraron en los años noventa que
y, con ello, la reacción emocional. Hay en algu- las decisiones humanas, los planes a largo plazo
nas culturas sentimientos que no conocemos: y las consecuencias de los planes dependían del
el amae de los japoneses designa un agradeci- sistema emocional de evaluación.
miento especialmente hondo. A pesar de los recuerdos, del patrimonio lin-
güístico intacto y de la buena inteligencia, algu-
Ningún capricho de la naturaleza nos pacientes neurológicos toman decisiones sis-
Las emociones no son caprichos de la natura- temáticamente erradas, incapaces de convertir
leza, sino que cumplen funciones de máxima conclusiones racionales en las conductas corres-
significación. En primer lugar, como evaluación pondientes. Semejante tránsito requiere la eva-
rápida de los estímulos ambientales para ha- luación emocional en la corteza prefrontal del
TEORÍA DEL ESCALONAMIENTO cernos cargo de la situación; en segundo lugar, lóbulo frontal. Los afectados toman decisiones
Según la evaluación intelectual, como preparación y para la motivación de las insensatas, pues les falta la memoria emocional
nuestras emociones se dividen acciones (cuando tenemos miedo, podemos huir necesaria de las situaciones anteriores equipara-
—comenzando por las pura- mejor aumentando la circulación, y la tensión bles, que constituyen una parte importante de
mente «agradables» frente a las muscular); en tercer lugar, como formas típicas nuestro tesoro emocional de experiencias.
«desagradables»— en ramifica- de expresión, que señalan a otros su disposición Antonio Damasio propuso esa idea, ya hace
ciones cada vez más sutiles. a la acción (si alguien nos sonríe, sabemos que años. La llamó teoría de los marcadores somá-

Taxonomía de los sentimientos


Protoemociones Bienestar Malestar

Emociones
Alegría Miedo Enfado Tristeza
básicas

Emociones cognitivas Buen


Satisfacción Amenaza Angustia Disgusto Frustración Decepción Abatimiento
primarias (ejemplos) humor

Vergüenza
Emociones cognitivas Amor Cólera
Celos Luto
secundarias (ejemplos) Suerte Desprecio
Envidia

12 CUADERNOS MyC n.o 2 / 2012


educación
Pruebe usted: el juego de riesgo

Reparta las cartas de una baraja, basándose en los cuatro colores, en las
ciencia
a filosofía
opinión
op
universidad
siguientes categorías: cartas con un alto valor de ganancia (50 euros), con comunicación historia
poco valor de ganancia (5 euros), con alto valor de pérdida (desde 50 hasta ética cuestionar
conocimiento
200 euros) y con poco valor de pérdida (de a 10 euros).
Prepare entonces dos mazos: distribuya las cartas con altos valores de reflexiónblo
20
blog
experimento
ti ió d diálogo
ganancia y de pérdida sobre todo, en un montón, y las cartas con bajo
valor de ganancia y de pérdida prioritariamente, en el otro. Pida ahora a investigación
un amigo, al que da un saldo de partida ficticio de 200 euros, que tome
una carta detrás de otra. Después de pocos pasos, preferirá el montón con
las ganancias y pérdidas bajas, pero solo más tarde comprenderá esta regla
también de modo consciente.
El paciente con alteraciones emocionales, por el contrario, raramente logra
esto. Después de muchos pasos podría, cierto, especificar qué montón es
más arriesgado. A pesar de todo, no deja de coger cartas de este.
SciLogs
Ciencia en primera persona
PABLO GONZÁLEZ CÁMARA
Y FERNANDO M ARCHESANO
ticos: todas las experiencias de un individuo Física de altas energías
se marcan emocionalmente. Si se debe tomar
una decisión, ello permite una evaluación rá-
pida e inconsciente de la situación dada. Las
ÁNGEL GARCIMARTÍN MONTERO
personas con la corteza prefrontal dañada, por
Física y sociedad
el contrario, no pueden recurrir a las marcas
previas y, por tanto, han de evaluar de nuevo
cada situación. También otros procesos cog-
nitivos dependen del procesamiento de los CRISTINA MANUEL HIDALGO
sentimientos. Se recuerdan mejor los sucesos Física exótica
ligados a emociones. El aprendizaje le resulta a BIBLIOGRAFIA
uno más fácil cuando se encuentra en un buen COMPLEMENTARIA
estado de ánimo. JOSÉ MARÍA VALDERAS
Por el contrario, las emociones negativas du- DESCARTES’ IRRTUM. FÜHLEN, De la sinapsis a la conciencia
raderas perjudican gravemente la vida de una DENKEN UND DAS MENSCHLI-
persona. Los psicólogos clínicos consideran CHE GEHIRN. A. Damasio.
trastornos afectivos la depresión o la manía, así dtv, Múnich, 1997. MARC FURIÓ BRUNO
como las fases intermedias de cambio de ánimo. Los fósiles hablan
Los afectados no pueden llevar una vida normal, DAS NETZ DER GEFÜHLE. WIE
porque su sensibilidad general se halla hundida EMOTIONEN ENTSTEHEN.
o hiperexcitada. J. LeDoux. dtv, Múnich,
JOSÉ MARÍA EIRÍN LÓPEZ
Las emociones son, pues, indispensables para 2001.
Evolución molecular
la acción y la interacción interpersonal: sin ellas
perderíamos el sustrato fundamental de una GEFÜHLE LESEN. WIE SIE
vida cotidiana exitosa. Las emociones guardan, EMOTIONEN ERKENNEN UND
además, una estrecha relación con los procesos RICHTIG INTERPRETIEREN.
YVONNE BUCHHOLZ
cognitivos; son indispensables para la capaci- P. EKMAN. SAV, Heidelberg, Psicología y neurociencia al día
dad de aprendizaje implícito e inconsciente, así 2007.
como para la decisión racional. En otras pala-
bras, nuestros sentimientos determinan quiénes CLASSIFYING EMOTION: A LUIS CARDONA PASCUAL
somos y qué hacemos. DEVELOPMENTAL ACCOUNT. Ciencia marina
A. Zinck, A. Newen en
Albert NewenGURTQHGUQTFGƂNQUQHÉCGPNC7PKXGTUKFCF Synthese, vol. 161, n.o 1,
Y MÁS...
FGN4WJTGP$QEJWOAlexandra ZinckGUEQNCDQTCFQTC págs. 1-25, 2008. www.investigacionyciencia.es/blogs
EKGPVÉƂECGPNCOKUOCKPUVKVWEKÏP

EMOCIONES 13

También podría gustarte