Pareja Moderna Exitosa 11-17

PAREJA
MODERNA
EXITOSA
Guzmán, Santiago
Todos somos iguales
2da Edición Ecuador : 133 p.
20x15 cm.
1ra. Edición Buenos Aires Noviembre 2006
©2007 Santiago Guzmán

©2007 Express Color
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www.guzmanasociados.com
Impreso en Ecuador en el mes de Abril de 2007

PAREJA
MODERNA
EXITOSA
Valores útiles para tu relación
SANTIAGO GUZMÁN LEÓN

DEDICADO:
A mi familia, Angela y Benjamin
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN ................................................................. 12
LA SOCIEDAD ...................................................................... 19
LA SOLEDAD ....................................................................... 23
MIEDOS............................................................................................ 28
CULPA ............................................................................................... 31
EL HOMBRE Y LA MUJER ................................................... 34
GANAR Y PERDER .......................................................................... 37
CONOCERNOS Y ACEPTARNOS ................................................ 39
PODEMOS SER AMIGOS ............................................................... 41
CRECER ............................................................................................ 42
EL MACHISMO ............................................................................... 44
EL FEMINISMO ............................................................................... 45
EL AMOR ............................................................................. 48
EL AMOR NO ES TODO ................................................................50
EL TIEMPO PARA AMAR ...............................................................50
AUTOESTIMA...................................................................... 53
DIGNIDAD ....................................................................................... 54
LA PERSONALIDAD .............................................................57
EL CARÁCTER ................................................................................. 58
EL PASADO ......................................................................... 63
EL PASADO PERSONAL ................................................................ 66
EL PASADO FAMILIAR .................................................................. 67
EL PASADO GENERACIONAL ...................................................... 67
LA CONQUISTA.............................................................................. 68
EL RECHAZO ................................................................................... 75
PAREJA IDEAL .................................................................................. 77
RECONOCER A TU PAREJA .......................................................... 79
EL ESPACIO PERSONAL ...................................................... 81
EL RESPETO ..................................................................................... 85
RESPETO AL TIEMPO .................................................................... 87
IMPUNTUALIDAD .......................................................................... 88
RESPETO A LOS PENSAMIENTOS .............................................. 88
RESPETO A LOS SENTIMIENTOS Y EMOCIONES ...................90
RESPETO A LA ESPIRITUALIDAD ................................................. 91
LA LIBERTAD ................................................................................... 92
COMPROMISO DE POR VIDA ..................................................... 95
COMPATIBILIDAD.......................................................................... 96
LA COMUNICACIÓN .......................................................... 98
COMUNICACIÓN AFECTIVA ..................................................... 102
CONTEXTO DE COMUNICACIÓN ............................................ 103
LOS DETALLES ............................................................................. 104
LA FIDELIDAD ....................................................................108
FIDELIDAD SEXUAL....................................................................... 113
LOS CELOS ...................................................................................... 114
LA CONFIANZA .............................................................................. 117
EL SEXO............................................................................... 121
POSESIVIDAD ................................................................................ 123
TIEMPO DE CALIDAD ........................................................ 132
ACTIVIDADES DE CRECIMIENTO .................................... 134
NUESTRO CUERPO....................................................................... 137
NUESTRA MENTE .......................................................................... 138
ELIMINAR LOS PENSAMIENTOS QUE NOS PERJUDICAN .... 138
ELIMINAR MITOS .......................................................................... 143
NUESTRO EQUILIBRIO ................................................................ 145
Este libro fue inspirado en la maravillosa sensación que
tenemos cuando nos enfrentamos a nuestro primer amor, a ese
hormigueo que sentimos en el estómago, a esa inocencia que
permite a todos los hombres y mujeres del planeta,
expresarnos libre y espontáneamente.
12 | S A N T I A G O G U Z M Á N L E Ó N
INTRODUCCIÓN
M
uchas veces nos preguntamos cuáles son las
causas por las que actualmente, vemos que existe
un mayor número de divorcios y separaciones que
antes y por el contrario aumenta la cifra de personas que
deciden vivir solteras pero no necesariamente solas.
Hay una disminución significativa de gente, que entre sus

objetivos de vida ha establecido el casamiento o la convivencia.
¿Cuáles son los motivos? Qué hace que los hombres y mujeres
de hoy en día, se sientan insatisfechos con las relaciones
afectivas que llevan.
Este trabajo hace hincapié en los factores culturales y sociales

que inciden en la actitud de las personas hacia las relaciones de
pareja.
Desde adolescentes empezamos a llevar una vida de pareja

cuando nos relacionamos afectivamente con otras personas,
pero aún hoy vemos que esta expresividad es reprimida; por
esta razón el siguiente trabajo procura incluir a los adolescentes
dentro de lo que a parejas se refiere.
P A R E J A M O D E R N A E X I T O S A | 13
Hemos ido experimentando relaciones afectivas, que son el

reflejo directo de la vida que llevaron nuestros padres, lo que
provocó… que vivamos vidas ajenas, muchas veces con un
sentimiento de frustración por la información no recibida y que
supuestamente nos la debieron dar generaciones anteriores a la
nuestra.
No recibimos la información suficiente para entender que la

vida que llevamos cada uno de nosotros, es el producto de las
circunstancias actuales y ya no más… un modelo que nos
presentaron nuestros abuelos y padres.
Pese a que vemos la inaplicabilidad de esta forma de vida,

queremos a toda costa retroceder a otras épocas y socialmente
somos inducidos a repetir los mismos errores.
En la sociedad actual persiste el miedo a exponer sobre la mesa

temas tales como la drogadicción, alcoholismo, promiscuidad,
sexualidad, pornografía, suicidios; por este motivo, a lo largo de
esta obra, desmitificaremos muchos temas relacionados con la
pareja y que servirán de soporte claro y directo, sobre temas
que nadie quiere hablar.
Cuántas frustraciones y fracasos se evitarían, simplemente con

permitir a cada persona ser responsable de las decisiones de su
vida.
Por esta misma razón, quiero brindar una guía, para que cada
persona tenga una óptica diferente que le sirva para reconocer
conductas y/o actitudes de vida que son dañinas, para de esta
forma hacernos una autocrítica y optar por escoger una vida
más sana de acuerdo con nuestra realidad personal.
Este trabajo, considera al ser humano como un ser

inagotablemente afectivo, solidario, generoso, sociable que
procura la paz para sí y para los demás, en permanente
transformación y cambio, con la posibilidad de aprender
siempre algo nuevo y llegar a donde sus sueños le guíen;
requiere indispensablemente expresar su esencia de amor para
los demás seres.
Tal vez para muchos esta temática será algo sorpresiva e

incluso inaplicable, pese a que vivimos en el siglo XXI, donde
supuestamente hay libertad de expresión y donde la
comunicación parecería que es lo más avanzado y
desarrollado…
Por paradójico que parezca, desde niños se nos enseñó a

sumar, a restar, la historia del mundo, su geografía, pero no se
nos informó como reconocer nuestras propias emociones o
sentimientos, entonces cómo podemos cuidar algo que
desconocemos y peor aún, cómo valorar más a quién sera
nuestra pareja.
Al hablar de pareja, me referiré a las relaciones donde

participen dos personas, con un vínculo fundamentado en el
único interés mutuo de compartir una relación, más allá de una
amistad. Generalmente, denominadas relaciones de novios,
enamorados, amigos con derechos, esposos, comprometidos,
etc.
Para la explicación de ciertos temas, hago referencia a aquellas

relaciones que tienen como objetivo llegar a un compromiso
estable y las denominé "Parejas Formales".
Y por otro lado, están aquellas relaciones que tienen muchas

denominaciones y son aquellas donde las personas no tienen la
intención de convivir ni de llegar a casarse. Las que denominé
"Parejas Informales".
En el desarrollo de los temas, procuré dar respuesta para

aquellas dudas específicas que cada persona dice tener.
En sí, la obra presentará una positiva visión de lo que hoy en día

es la expresión afectiva de las personas en lo que a pareja se
refiere, brindando la motivación necesaria para asumir ciertos
cambios, que nos procurarán beneficios enormes para disfrutar
de una vida de pareja sana, disfrutando del placer que nos
brinda el amor y permitirnos mejorar como personas,
especialmente en sociedades occidentales donde los logros
superficiales y los resultados cuantificables, son el referente del
éxito. Es necesario percatarnos qué es lo que nos hace
verdaderamente felices y optar por la mejor alternativa para

romper viejos e inaplicables paradigmas, utilizados para las
parejas.
Tan poca conciencia se hace hoy de nuestra expresividad

afectiva, que la lucha de géneros… mujeres contra hombres y
viceversa, es una real problemática que no ayuda a una mejor
convivencia social, competimos contra nuestros aliados
naturales, nos diferenciamos inútilmente para conquistar el
poder y el dominio, asumir el mando en la persona que es la
pareja, dominarla y someterla, es la lucha más cruel provocada
por los mensajes sociales, que nos enemistan y confunden
nuestra naturaleza de seres esencialmente afectivos, iguales y
perfectos.
Este machismo malentendido, provocó que hombres y mujeres

nos hayamos replegado en nuestros cuarteles, defendiendo
nuestras posiciones y derechos, considerándonos diferentes.
El final del distanciamiento entre los géneros, deberá ser

marcado por la igualdad de ambos, permitirnos ser libres y no
actuar con sigilo, manteniendo relaciones adaptadas y nada
espontáneas, donde por cumplir los roles sociales no se
permitió a las personas inventar las relaciones que más se
acomoden a sus necesidades personales.
Entender que somos iguales, pero que no desarrollamos

algunas características que desarrolló el otro, significa que para
entendernos debemos crecer como personas y procurar
ampliar nuestras capacidades perceptivas, expresivas,

comunicativas, sensitivas y emotivas; capacidades que nos
engrandecen y nos facilitan el entendimiento de pareja,
creernos diferentes nos inmoviliza y desmotiva para lograr ser
personas completas y para entender que en lo esencial somos
iguales, hace que el camino hacia la felicidad sea más corto y
que gustosos trabajemos por conocer aquello que nos falta,
que nos hace incompletos como seres de la naturaleza.
Quien no supera los conflictos y errores que vio en sus padres,

está condenado a repetirlos. Salvo que se tomen cartas en esto,
entendiendo que nuestros padres y sus hábitos de pareja, son
nuestro referente directo.
Los seres humanos, deberíamos aprender a vivir nuestros

propios destinos, debemos aprender a vivir desde dentro de
nosotros hacia fuera y no al revés, aceptar que los tiempos
cambiaron, que hay muchas cosas nuevas que debemos
aprender, permitirnos ver lo nuevo desarrolla nuestra
capacidad de adaptación. Es necesario reconocer que la falta
de información y de cultura, nos hace más vulnerables e
inútiles para sobrellevar los problemas cotidianos, adoptando
actitudes incongruentes y disfuncionales, que generan
infelicidad en las sociedades.
Está en cada persona el hacerse responsable de buscar la

información necesaria para evitar situaciones difíciles, tales
como embarazos no deseados, abortos, enfermedades y

matrimonios forzados.
Cada persona tiene en sus manos el camino hacia la felicidad y

no deberíamos depender de la suerte ni del dinero, ni de los
demás para encontrar nuestro bienestar; ya en muchos lugares
los jóvenes procuran no comprometerse en relaciones difíciles,
porque de alguna manera se está haciendo conciencia de la
importancia que conlleva tener una relación de pareja.
En todo caso, creo que si nos damos cuenta de que la práctica

del amor es nuestro principal alimento, cada día será más fácil
vivir y entenderemos que la comunicación es el método más
importante para relacionarnos con los demás.
Aprendamos a hablar, para brindar amor con cada palabra,

inclusive los gestos se van desarrollando con el habla y llegará
el momento en que seamos verdaderos promotores de
relaciones sanas.
Por eso, no creo que sea conveniente dejarnos manipular por la

tecnología, como Internet o el teléfono. Más exitosos seremos,
mientras más capacitados estemos para mantener contacto
físico con las personas y lógicamente con nuestras parejas.
Usemos a la tecnología sólo porque no hay otra forma de

comunicarnos y no por facilidad, sino… posiblemente nos dará
ganas de besar un monitor o un teléfono celular.
LA SOCIEDAD
E
s nuestro entorno físico y social, que en gran medida
regula el estilo de vida de las personas, es el hábitat de
cada persona determinado por la ubicación geográfica,
la época, la historia, los recursos naturales, las tradiciones, la
alimentación, el idioma, el clima, el tipo de gobierno, la religión
y la economía de cada Estado.
Entonces… la sociedad de alguna manera nos induce a seguir un

manual de vida que lleva en el bolsillo cada ciudadano, cada
integrante de una comunidad, sin que tengamos alguna
oportunidad de criticarlo o por lo menos compararlo y menos
en la niñez o adolescencia. En la adultez posiblemente y luego
de un fracaso afectivo, tendremos la oportunidad de darnos
cuenta, que algo falló en nuestros esquemas de vida, que
dejamos que otros nos impongan, ya que salir del rebaño nos
parece una misión imposible, y que sólo los valientes lo logran,
nos da miedo incumplir o corregir el manual de vida impuesto.
Pero el manual de vida, en muchos quedó desactualizado,

especialmente en lo que a parejas se refiere, hoy en día… la
mayoría de las parejas terminan su relación con una mala
experiencia y muy pocas llegan a mantenerse por toda la vida.
Las personas deberíamos tener la capacidad de percatarnos de

lo que verdaderamente buscamos de una persona, con quién
queremos tener una relación de pareja y qué tipo de vínculo, a
pesar que esto parece que es tan fácil, puede terminar siendo
algo que nunca aprendamos y dejaremos que las circunstancias
y las experiencias personales se sobrepongan a nosotros, sin
que podamos objetarlas ni preveerlas.
Lo social es tan difícil de evitar y es una influencia tan fuerte

para nosotros, que muchas personas, aun sabiendo… que el ser
con el que se involucran no es de su total agrado o
conveniencia, llegaron incluso a casarse y tener hijos para no
defraudar a sus padres; o por no poder soportar la presión de
ser tachados de malas personas, irresponsables, a quienes la
moral social y religiosa, castiga y condena a vivir una vida que
no debían llevar, es por esto que las opciones son obvias, o
hacemos todo lo que nos enseña la sociedad o vivimos lo que
sentimos nosotros mismos, lo último definitivamente te
ayudará a ser libre y a cumplir tus propios sueños.
Pero hacer lo que sentimos, así porque sí, no es algo mágico ni

fácil de decidir, lo principal es saber si estamos en capacidad
de reconocer nuestros propios sentimientos y reconocer si
tenemos en claro nuestros objetivos de vida, o por lo menos
saber qué es lo que no queremos y después tener la
oportunidad de decidir nosotros mismos, cual es el camino
adecuado para procurarnos una relación de pareja.
La presión generada por las costumbres sociales, provocó

consecuencias como las infidelidades, el desmembramiento
familiar, hijos desprotegidos, huérfanos, abortos, etc. y es que
los seres humanos debemos aprender a aceptar que no solo
hay una forma de vivir la vida, cada uno debe ser sensato
consigo mismo y atreverse a vivir su propia vida, de lo
contrario, pasarán muchas generaciones que heredarán y
vivirán atemorizadas, por no sentirse aceptadas por los demás.
Se puede conseguir la vida que uno quiere, si en realidad nos lo

proponemos y luchamos por ello, sin que debamos
convertirnos en desadaptados sociales, ermitaños o
extraterrestres.
La sociedad hizo que veamos a la pareja como una adquisición,

en la que mientras mejor presentado el producto, más
habremos ganado, se nos vende como objetos de vitrina,
devaluando lo magníficos que somos cada uno de nosotros,
provocandonos incluso enfermedades como la anorexia,
bulimia o depresión. De hoy en adelante, tratemos de
valorarnos en nuestra real dimensión, la expresión del amor del
universo, seres afectivos y sensibles, con capacidades
ilimitadas, seres de naturaleza afectiva que buscamos por todos
los medios dar y recibir amor sin condicionamientos.
Somos seres que instintivamente buscamos agruparnos con

otros, (el macho con la hembra), pero sin miedos, sin prejuicios,
ni jerarquías, simplemente por el hecho de encontrarnos,

reconocernos de la misma especie y valorarnos.
La sociedad actual desnaturaliza a las personas haciéndolas

seres domesticados sin poder de decisión, incapaces de
reaccionar frente al entorno.
Hoy en día, las personas nos hemos convertido en seres

reprimidos en lo afectivo, en lo sexual y en lo comunicativo, no
somos libres para expresar naturalmente el amor, lo que
incluso se somatiza físicamente y nos hacemos dependientes
de pastillas, médicos, gimnasios, drogas, etc.
Liberarnos nos permitirá expresarnos con amor, valorar a las

personas en su real dimensión y sentir que somos capaces de
decidir nuestros destinos, sin necesidad de que alguien más
conduzca nuestra vida.
Nuestra vida no es lo que vemos en la televisión ni en las

películas, nuestra vida es lo que sentimos que debería ser.
LA SOLEDAD
U
no de los factores que a veces nos influye para buscar
una pareja, es el sentimiento de tristeza por pensar
que estamos aislados de otras personas.
Nos incomodamos con la presencia de otros. En los buses y en

los metros, hay gente a la que le incomoda hasta el cruce de
miradas, somos casi autómatas que nos dirigimos sin rumbo,
aislados de las demás personas, ya que nuestra comunicación
se hizo disfuncional, es una cuestión que con los años se
agravó, porque que cada vez es menor el contacto entre los
seres humanos, el tipo de comunicación que utilizamos nos
hace escapar del contacto físico, que es mucho más poderoso
al momento de expresar el amor a las personas, antes que
hacerlo por medio de los artefactos eléctricos.
Hoy en día se está perdiendo el contacto hasta en la familia y

no sólo entre padres e hijos, también en la pareja es menor la
cantidad de relaciones íntimas. Y de continuar esta tendencia
tendremos que contactarnos pronto sólo por Internet, celulares
o cartas.
Está haciéndose muy común que las personas, en muchos

países del mundo, compren mascotas como perros o gatos
para no sentirse solas, de esta forma los animales reciben la
parte más afectiva del contacto de los humanos,
sustituyendose inclusive esas caricias que deberían
corresponder a otro ser humano y no necesariamente a una
mascota, la pregunta es: ¿Por qué el hombre se aísla del
hombre? Y la respuesta es, porque no entregamos afecto de
forma adecuada y en vez de amarnos, nos herimos y
destruimos mutuamente.
Como reacción a esta situación o para empeorar la situación,

hoy las personas al perder la capacidad de comunicarse entre
sí, deben acudir a la tecnología para provocarse sentimientos y
emociones, inclusive para mantener relaciones sexuales.
Creer que porque somos miembros de un club, de una secta o

hinchas de un equipo de fútbol, nos situamos en una burbuja
donde perdemos el contacto unos con otros. Y eso interfiere en
nuestra naturaleza comunicativa, ya que, por sobre todo, las
personas somos seres afectivos y debemos a toda costa
reaprender a comunicarnos, a hablar con cualquier persona sin
que pensemos que esto nos perjudicará en algo; aquellos que
practican todos los días hablar con cualquier persona
espontáneamente, pocas veces habrán sentido soledad en sus
existencias.
A pesar de esto, el sentirnos solos puede ser producto de

muchos factores, como son la falta de actividades organizadas,
como por ejemplo el no planificar nuestro tiempo libre; es
lógico, ya que la mayoría de las personas sabemos que
estaremos haciendo dentro de nuestros horarios normales de
trabajo, estudios u otros; pero los días en los que más nos
damos cuenta de nuestro estado afectivo es el sábado y el
domingo, cuando nos quedamos en nuestras casas, esperando
a ver qué hacemos; en este tiempo nuestro cerebro juega con
nosotros y nos puede llegar a atormentar con miles de ideas,
tales como el creernos solos.
Si queremos salir a algún lado y no está a mano algún amigo,

podemos sentir la necesidad de encontrar una pareja con quien
ocupar nuestro tiempo libre; esto, por supuesto, que no tiene
nada de malo sino todo lo contrario, porque nos servirá para
darnos cuenta que es por esto y por otras cosas, que podemos
necesitar compartir con una pareja, para llevar una vida sana
donde la comunicación sea de calidad.
La soledad es el síntoma que nos permite concienciar lo valioso

que es encontrar una persona con quien intercambiar nuestras
aficiones, nuestras inquietudes, nuestros miedos, dudas, etc.,
pero tomando en cuenta que esta compañía recibirá y
entregará amor físico, mental y espiritual.
La soledad es uno de los aspectos que más nos afecta en

nuestra existencia y que se agrava por la falta de comunicación
de calidad entre los seres humanos, yo puedo asegurar, que

sólo depende de nosotros si queremos sentirnos solos, te
planteo una experiencia que es muy satisfactoria, cuando
empieces tu día, vayas donde vayas, inicia una charla con la
primera persona que veas, aún sin que tenga sentido, sólo con
la idea de sentirte identificado y conectado con ella, no te fijes
en lo que ésta diga, sino sólo valora que puedas establecer un
contacto; por ejemplo, si subes en el bus, saluda al chofer; si
hay alguien al lado tuyo, lo mismo en la calle con el lustrabotas,
en la tienda con quien vende, en el colegio o en la universidad
con quien nunca hablaste, y poco a poco te irás dando cuenta
que con cada persona tienes algo de que conversar y al final
del día, es casi imposible que te sientas solo; pero sucede que
las personas poco a poco nos estamos aislando de nosotros
mismos, nos llama la atención cuando la gente se expresa,
cuando se ríe y cuando alguien es diferente a nosotros.
Estamos haciéndonos individualistas, sin darnos cuenta que
todos buscamos ser felices y que vivimos dentro del mismo
mundo, en el que nos membretamos y etiquetamos,
disfrazándonos y perdiendo nuestra autenticidad y creatividad.
No estamos solos cuando no tenemos amigos o cuando no

tenemos familia o cuando no tenemos pareja, estamos solos,
cuando no podemos comunicarnos con esas personas.
Si aprendiste a ser feliz solo, es seguro que lo puedas hacer con

alguien más, no depende nuestra felicidad de alguien sino de
nosotros mismos, de igual manera si llegaste a ser feliz con otro
lo puedes hacer estando solo, ya lo dice el dicho "Es mejor

estar solo que mal acompañado", si no te sientes bien con una
persona y estás junto a ella por sentirte acompañado, puede
esto dar paso a que te sometas a cosas que no estás conforme
y desviando tu atención de lo que verdaderamente buscas en
una persona; por ejemplo, en aquellas relaciones donde la
pareja se mantiene solamente por la atracción física, a pesar
que uno o ambos saben que emocionalmente no conviene el
vínculo y sin embargo se mantiene esa relación dañina, no
quiere decir que por esto sea malo sentir atracción, pero si es
necesario ser lo suficientemente sensatos como para darnos
cuenta que esa persona no nos equilibra totalmente, pero que
puede ocupar un lugar importante en nuestra existencia, ya que
la pasión que por esa persona sentimos, no tiene que ser un
compromiso o una pareja formal.
Sin ningún problema se puede compartir con esa persona

afectividad física, pero conduciendo adecuadamente nuestros
sentimientos, para que se compartan positivamente. Esa
atracción que nos provoca una persona nos confunde y nos
puede hace sentir culpables, porque no entendemos que la
atracción física es parte del amor.
Este es el peligro que se corre al dar nombre a las relaciones de

pareja. Sería mejor comunicarnos por lo que queremos
específicamente de una relación y no suponer que los títulos…
"Novios", "Esposos" o "Amigos" presuponen una determinada
conducta; es posible hacer el amor con alguien con el que no
quisimos entablar una relación estable y que al encontrar una

conexión física y espiritual con ella, pudimos expresar nuestro
amor o que una pareja para unirse y convivir, no tenga que
estar atraída físicamente como algo obligatorio.
Entre dos personas que se gustan y se comunican sincera y

afectivamente, es posible que se sientan acompañados
mutuamente. Tener una relación atípica informal no impide ni
quiere decir que no tiene valor frente a las tradicionales y
convencionales, cada persona conoce su necesidad afectiva y
casi nunca será igual a la de otra persona.
Con poca edad las personas cambiamos, nacemos sin

prejuicios y somos capaces de entablar amistad y hablar
naturalmente con cualquier otra, pero de grandes somos
desconfiados y solo hablamos con quienes creemos que vale la
pena hacerlo, por esto una necesidad más fuerte de suplir es el
vacío en la soledad de los adultos.
MIEDOS
El miedo es una motivación que tenemos para reaccionar o

tomar determinadas actitudes o decisiones, por lo tanto no es
tan malo sentir miedo, lo que sería malo es que el miedo nos
inmovilice y nos deje incapacitados para ejecutar una acción o
necesidad para poder superar un prejuicio o idea, tenemos
como ejemplo el miedo a los ratones, seguramente cuando nos
enfrentemos a este animalito, nos daremos cuenta que el
supuesto miedo, fue sólo un invento de la percepción que

tuvimos.
Cada persona tiene miedos diferentes, como a las alturas, a los

ratones, al agua, a los perros, a las arañas; hay miedos de
carácter social como el miedo a la pobreza, miedo al
desempleo, miedo al matrimonio, en las mujeres un miedo de
tipo común es el miedo al embarazo, o en el hombre a
embarazar.
Entonces diremos que los miedos son reales o irreales, los

primeros se distinguen porque los podemos identificar
claramente y por lo tanto enfrentarlos, los irreales son ficticios,
imaginarios y por ende no los podemos enfrentar.
En fin… los miedos sociales que influyen en las parejas, hay que
reconocerlos y si son reales se deben tomar medidas, una
mujer con miedo a embarazarse, no debería evitar mantener
relaciones, debería aprender a cuidarse con los métodos
anticonceptivos que existen en el mercado, en todo caso este
miedo es real y presupone que su causa es directa, ya que por
medio de las relaciones sexuales se puede embarazar la mujer.
Pero hay miedos infundados o como el miedo al matrimonio,

ya que no existe algo negativo en éste, de pronto la persona
tiene miedo a algo que desconoce o algo que vio en sus padres,
en ese caso la persona deberá averiguar cuál es el miedo real
para poder enfrentarlo, tal vez con una relación más liberal,
podría mantener una convivencia sin matrimonio, porque la

idea es lograr llevar una vida adecuada a las convicciones
personales, superando los obstáculos.
Otros miedos irreales, generales y personales en la pareja, son

el miedo a la infidelidad, el miedo a recibir violencia, miedo a
no ser correspondido por el ser amado y en última instancia,
estos miedos solo se superan siendo específicos a una
circunstancia real, vívida del presente y vivir esa situación, será
la manera de llegar a superarlos.
Permitirnos sentir miedo es tan natural como sentir frío o calor,

tristeza o alegría y adoptar la actitud de bienvenida al miedo, es
el primer paso para tomar medidas que solucionen el reto
presentado. Muchos ocultan información a sus hijos o a los
estudiantes en las escuelas, con la idea que se producirá miedo
y esto es lo que perjudica, tomando en cuenta que siempre
será más fácil enfrentar un miedo… que enfrentar un problema.
Cuando fuimos estudiantes de escuela, muchos carecimos de

información, en especial en temas de sexualidad y drogas.
Provocando que no tengamos capacidad de enfrentar muchas
situaciones serias como embarazos no deseados, abortos,
enfermedades venéreas, suicidios y demás.
La falta de prevención en estos aspectos causa que las

decisiones que se tomen no sean las correctas y es
imprescindible que aprendamos a comunicar los miedos a la
pareja para que nos apoye y así, dar la confianza para que
ambos se expresen.
No hay que ocultar los miedos ni los defectos personales,

porque tarde o temprano éstos aparecen y pueden dañar una
relación y será mejor empezar a aceptarnos mutuamente, no
soñar despiertos en un príncipe azul o una bella durmiente,
siempre lindos, bien presentados y sin defectos.
Cuando alguien enfrenta un miedo, pasa a un plano más amplio

de seguridad y confianza en sí mismo, sabiéndose capaz de
lograr todo lo que se propone en beneficio de su felicidad.
CULPA
Otro efecto, causado externamente por la sociedad y la familia,

es la culpa, o sea, el sentimiento que tenemos cuando en
nuestro esquema mental no está permitido algo, de esta
manera se bloquea la intuición y el instinto sano que tenemos.
Así, por ejemplo, si a una persona la convencieron que tener

relaciones prematrimoniales es malo, seguramente cuando lo
haga, se sentirá culpable. De modo que tendrá dos caminos, o
se casa y deja de sentir culpa o elimina la culpa y vive sin
remordimientos.
La culpa hay que enfrentarla amistosamente y sin

resentimientos, porque es el efecto de los mensajes que
recibimos toda la vida y que no dependieron de nosotros, no se
nos pidió opinión alguna para oponernos a las ideas que nos
provoca la culpa.
Nuestros padres sufrieron con esto y no quisieron causarnos

inconvenientes en decirnos… que la mujer virgen es mejor, que
la no virgen o viceversa, está en nuestras manos decidir si eso
era o no verdad.
En todo caso, es importante referirnos a lo que el instinto y la

intuición nos guía, ya que el amor es natural al ser humano y
casi todo lo natural es beneficioso, los prejuicios vienen de las
épocas y de las tendencias sociales imperantes, con darnos
cuenta de esto ya casi se superó la culpa.
Cuando la culpa proviene de un hecho específico, es necesario

que sepamos que ese hecho que causó ese estado emocional,
nunca lo vayamos a repetir, de lo contrario la culpa se
convierte en un circulo vicioso, en el que hacemos algo
supuestamente incorrecto, sentimos culpa y repetimos ese tipo
de situación y si esto pasa… habrá que encontrar una solución.
Por ejemplo, si alguien en la pareja agredió físicamente a la otra,

se siente culpable. Pero no sabe esa persona si lo volverá a
hacer, esta situación o se supera o la relación se pone en riesgo,
o a su vez una persona que lo hace periódicamente y no siente
culpa, tendrá que analizar como anda su autoestima, lo único
que le queda a quien es agredido es reconocer que algo está
mal y procurar salir de ello.
No pensemos que la culpa es un castigo justo, porque si la

entendemos así, será más bien una justificación a todo aquello
que nuestra conciencia nos decía como malo y lo hacemos
pese a esto, ya que sabemos que de todas formas seremos
castigados, es decir la culpa nos hace irresponsables de
nuestros actos, hacemos algo que sabemos que no está bien,
pero como nos sentiremos culpables, el precio está pagado con
el castigo.
En una pareja sana, se procurara evitar todo aquello que

produzca culpa y desmoronar los esquemas que produzcan
culpa, en especial en los jóvenes que empiezan su vida afectiva
y que son quienes empiezan con un cúmulo de prejuicios y
valores ambiguos que ellos no inventaron.
La culpa es un sentimiento innecesario, es algo que no nos sirve

para nada, sólo nos bloquea nuestra espontaneidad.
Definitivamente, sin culpa, se disfruta más y mejor la relación
de pareja.
EL HOMBRE
Y LA MUJER
L
os roles, impuestos a los hombres por la sociedad, son
diferentes a los impartidos a la mujer, comprender que
somos iguales los hombres y las mujeres en lo
intelectual, emocional y espiritual, eliminará cientos o miles de
conflictos producidos por la diferenciación que se pretendió
dar.
Esta hipótesis de alejar a los hombres de las mujeres y

viceversa por supuestas diferencias, provocó que hoy en día
compitamos los géneros de forma inmisericorde, lo que
podemos denominar una guerra de sexos, dificultándose el
acto de dar y recibir amor.
Hay un síntoma de pugna generado por esta división y para

lograr hoy en día reconciliar las posiciones, habrá que aclarar
que la diferencia entre hombres y mujeres en primer lugar, es
lo físico y biológico, determinado por la capacidad de la mujer
de concebir y dar a luz a un hijo, por esto es posible afirmar que
solamente son nuestros cuerpos los que nos diferencian entre
géneros.
No es, por lo tanto, importante resaltar las diferencias, si no

procurar que las semejanzas nos unan más, es decir… al
contrario de lo que hizo el machismo y el feminismo, ya que es
mejor luchar porque los hombres y mujeres seamos felices en
última instancia y dejemos de discutir posiciones que nos
separan o nos enemistan.
Hagámonos esta pregunta ¿Si los hombres y las mujeres

tenemos la misma capacidad intelectual y emocional, además
un mismo objetivo espiritual, para qué discutimos las
diferencias? La respuesta es que no hay motivo, lo que sucede
es que, aún en estos tiempos, no fue superado el machismo
social y aún hay hombres y mujeres que lo defienden
ferozmente. Hombres y mujeres tenemos intuición, instintos,
sentimientos y es el estilo de vida de cada uno y la educación
que recibimos, lo que hace que utilicemos ciertos aspectos más
que otros y que desarrollemos, en más o en menos, algunos de
los potenciales humanos.
El conflicto de hoy en día, se presenta en que los roles están

cambiando y por lo tanto los hombres exigen mujeres más
independientes y la mujer pide hombres más sensibles, es
decir, queremos que nuestras parejas se parezcan más a cada
uno de nosotros, en vez de procurar crecer personalmente,
para reconocer en nosotros esa parte que aún no
desarrollamos.
¿Y por qué están fracasando instituciones como el matrimonio?

Es en mucho, la culpa por no querer aceptarse los nuevos roles
y rebelarnos a ellos. "La lucha por los espacios".
El peligro es que la raza humana adoptó el egoísmo y el rencor

como formas de vida, que en la pareja se refleja claramente y
en vez de construir núcleos, se compite por espacio y poder,
como bandos y no como equipo.
Los cambios de roles, son un problema de hombres y mujeres,

nos afecta a ambos, pero aún no somos capaces de unirnos y
conciliar posiciones e intereses.
No hay culpables, porque las sociedades de hoy en día

cambian a una velocidad tan vertiginosa, que ni siquiera nos
damos cuenta de todos los cambios que se dan, pero que de
una u otra manera, nos exigen mayor agilidad en nuestra toma
de decisiones.
La pareja y la familia, fueron las empresas más perjudicadas

con las reglas del juego social. Está en nuestras manos evitar
que continuemos con esta decadencia y más bien, que
aprendamos a amarnos de forma inteligente y sana.
GANAR Y PERDER
En el amor nunca deberíamos jugar a ganar o perder, esto está

bien en el deporte, en la política, en los juegos de azar, pero en
el amor ¡No!
La pareja se conforma por individuos independientes que se

unen para ganar ambos, en equipo, para crecer como personas
y evolucionar.
La mayor parte de las personas sufrió decepciones en las

primeras experiencias amorosas, lo que les permitirá más
tarde, disfrutar más intensamente en futuras relaciones.
Toda experiencia pasada es una ganancia en nuestra vida, no

fracasa una relación de pareja porque se termina, nuestras
experiencias son la medida justa y necesaria que requerimos
para procurarnos un mejor presente.
En definitiva, el ser humano se encuentra en transformación, no

existe una sola forma de vida en pareja. Quienes así lo creen,
tratan de imponerse rompiendo la base principal del amor, que
es la libertad.
Mientras más cerrada es la mente y la perspectiva de una
persona, mayor será la fuerza con que quieran imponerse a los
demás con sus ideas. Y si observamos, veremos que esto dio
como resultado que en nuestras sociedades se vea mucha
violencia familiar, matrimonios obligados, abortos clandestinos
y millares de divorcios. De modo que no fue la imposición, la

mejor forma de mantener relaciones positivas.
Un concepto de nuestra sociedad actual, es creer que los

resultados son la medida del éxito de una persona, pero este
concepto no es aplicable en las relaciones de pareja; aquí, la
finalidad es que ambos se procuren una experiencia positiva de
corto o de largo plazo, de por vida o mientras dure, nadie que
se respete a sí mismo, mantendrá un pensamiento de servirse
de una relación sin aportar algo; la pareja, más que cualquier
otro proyecto, incluye a dos personas con emociones y por lo
tanto, merece toda la concentración y esfuerzo por respetarla,
aunque no haya de por medio un compromiso.
Hoy en día es muy común que se relate una historia de amor a

modo de contienda con vencedores y vencidos, esto es parte
de la lucha de géneros, las mujeres apoyan a su género y los
hombres al suyo, aún no podemos encontrar el punto de
equilibrio que concilie nuestros mutuos intereses.
Las decepciones amorosas deben entenderse como

experiencias enriquecedoras, que nos permitirán aprender más
y a futuro nos permitirán disfrutar más con nuestras relaciones
y no de una forma pesimista o derrotista, ni de modo
egocéntrico; revisar nuestra propia conducta es el paso
correcto para aprender en la vida a no culpar a los demás de
nuestros errores.
CONOCERNOS Y ACEPTARNOS
Las experiencias afectivas son la oportunidad que tenemos

para conocernos entre los seres humanos, hacer de esta
experiencia algo grandioso y no algo convencional, depende de
nosotros.
Conocer, significa investigar a fondo los sentimientos y

pensamientos de una persona sin juzgarla, aceptándola por el
hecho de ser lo que es. Sólo se puede amar lo que se conoce,
por lo tanto aprendamos a conocer paso a paso a quienes
están junto a nosotros, evitemos etiquetar a las personas con
títulos que ya vienen prefabricados, novio, amigo, amante,
enamorado, prometido y esposa, son títulos prefabricados que
por lo general se adaptan al mandato social y no nace de cada
persona, son enunciados que describen conductas que se
deben cumplir estrictamente.
Si nos permitimos aceptar a alguien, no por lo que queremos

de ella, sino por lo que es realmente, ampliaremos totalmente
nuestra capacidad de conocer a un ser humano y amarlo de
verdad, esta aceptación hará mucho más interesante el camino
para tener éxito en cualquier relación que se nos presente y
evitar así que nos acomodemos a una unión social, en vez de
procurarnos una relación personal.
Algo muy frustrante es que nos quieran por lo que no somos,

eso significa que no nos quieren de verdad y una gran causa del
fracaso en las relaciones es que nos enamoramos de una idea,

de una imagen y no de una persona.
Sucede, con mucha frecuencia, que las personas en su

incapacidad por aceptar las diferencias en sus parejas, quieran
transformarlas a su imagen y semejanza; la realidad es que
nadie tiene el poder de cambiar a nadie, a lo mucho…
podremos cambiarnos nosotros mismos, para dejar de lado las
costumbres negativas, hábitos perniciosos y en general las
conductas que nos hacen daño y empezar a amar
inteligentemente.
En la práctica aceptar es útil, cuando empezamos una relación

de diferente tipo a la que tuvimos anteriormente, donde cambia
todo el contexto de ese vínculo, como el pensamiento, el
entorno social, las aficiones, los defectos y la historia personal
de la otra persona.
Saber que cada relación es una experiencia nueva y que

empieza de cero, nos dará la oportunidad de conocer y adaptar
de mejor manera nuestra escala de valores y seguramente vivir
nuevas situaciones con esa persona.
Sólo porque no encontramos un estereotipo perfecto de la

relación que queremos y de acuerdo a lo que nuestra
imaginación creó, no significa que debamos limitar nuestra
capacidad de comunicarnos con otras personas, con intereses
distintos a los nuestros; menos aún, si tenemos en nuestra
naturaleza el permanente deseo de expresar amor.
No es fácil entender que hoy en día haya mucho aislamiento e

individualismo en las personas, las sociedades han construido
conceptos negativos, como el que no pueden ser amigos
hombres y mujeres o que son ilegítimas las relaciones entre
hombres y mujeres si no están casados, los prejuicios culturales
y mentales, son el límite que tenemos y que nos impide ser
más felices y libres.
Si buscamos complementarnos con lo que carecemos desde

fuera de nosotros, estamos perdiendo la oportunidad de crecer
en nosotros mismos, para ser completos en forma individual.
PODEMOS SER AMIGOS
Es perfectamente aceptable que entre hombres y mujeres se

construyan amistades. Lógicamente, que el vínculo no deberá
ser la atracción física, sino la empatía de caracteres entre
ambos, aun más, tomando en cuenta que a causa de este mito,
tampoco nos permitimos intimar positivamente con el sexo
opuesto, aumentando más el conflicto entre hombres y
mujeres.
Parece algo tan sencillo, sin embargo en pleno siglo XXI,

mantenemos prejuicios tan fuertes que no nos dejan desarrollar
nuestra sociabilidad natural con otras personas, por el solo
hecho de vernos diferentes en el género, quienes rompieron
este límite experimentaron relaciones totalmente satisfactorias
e incluso tuvieron la oportunidad de conocer aquellas

características que no desarrollaron aún, esa parte emocional o
esa parte racional, que supuestamente pertenecían solamente
al otro.
Si espiritualmente somos iguales hombres y mujeres, quiere

decir que la emotividad y sensibilidad, no es sólo parte de la
mujer ni tampoco la racionalidad es sólo parte de los hombres,
quiere decir… que todos tenemos el potencial necesario para
lograr desarrollarnos en estos ámbitos de igual forma y hacerlo
será un objetivo de las parejas concientes.
CRECER
Una persona que decidió experimentar algo diferente a lo que

su entorno social manda como lo correcto, tendrá muchas más
oportunidades de crecer como tal; así, por ejemplo, conocer a
una persona diferente a nosotros, nos dará una referencia más
real sobre otras, ampliando nuestra mente y desarmando los
prejuicios.
Relacionarnos con personas de otras nacionalidades o

regiones, nos permitirá incluso conocer otras formas de vida y
cultura, ya dicen que los polos opuestos se atraen, los estilos
de vida no nos hace diferentes, es la forma de pensar la que
nos puede unir con los demás, es decir… que en general una
persona no es el producto de sus actividades, profesiones o
nacionalidades, ella es producto de lo que su ser le dispone y

de lo que sus pensamientos construyeron.
En teoría, cualquier persona puede convertirse en una pareja,

aunque para nosotros dependiendo del objetivo de vida que
hayamos planteado.
Entonces, experimentar algo diferente es útil, cuando nuestra

experiencia anterior fracasó y ya estamos en capacidad de
reconocer la causa que lo produjo y no repetirlo.
El instinto y la intuición de las personas hacen que evitemos

repetir los errores del pasado, no volver a tropezar dos veces
con la misma piedra. Decidirnos a crecer y no congelarnos en
el tiempo, repitiendo relaciones enfermizas del pasado con
otras personas o incluso con la misma, nuestra sabiduría
interna sabrá guiarnos para escoger lo que nos conviene, si esta
voz está acallada, caminaremos a ciegas por la vida.
Si imaginamos a Adán y a Eva en el Paraíso, nos daremos

cuenta de que ellos tuvieron la oportunidad de presentarse sin
máscaras, sin clases sociales y de forma natural, con este
ejemplo quiero decir… que la mejor forma de conocer a una
persona, será fuera de nuestro entorno condicionante, donde
podamos ser espontáneos, libres y auténticos.
No quiere decir un lugar físico necesariamente, sino un espacio

en la mente, que nos permita ser libres de todo prejuicio, para
presentarnos a los otros, desde lo que somos de forma

objetiva.
Las diferencias entre hombres y mujeres, estarán relacionadas

al mayor o menor desarrollo de ciertas aptitudes; crecer,
significa entonces, desarrollar las aptitudes que están en
nosotros y que no hemos potencializado.
Por motivos culturales y sociales, le corresponde entonces a

cada persona, asumir la decisión de cambiar, para disfrutar más
las relaciones humanas y ampliar nuestra conciencia
emocional, para amarnos de forma eficiente.
EL MACHISMO
Para explicarlo de alguna manera, esta palabra es utilizada de

forma negativa para poder describir un rol encargado en
algunas sociedades, para que el hombre decida y gobierne,
esto como tal, no tiene nada de malo.
Si el hombre decidiera sabiamente en justicia y gobernara con

honestidad, no habría ningún problema, la cuestión radica en
que en la mayoría de los países, la decadencia moral,
intelectual y espiritual viene en boga y no es culpa del hombre,
ni de la mujer, es sólo la falta de un enfoque social que se base
en las necesidades innatas del ser humano, como son las
emocionales y afectivas. Por lo tanto, echar la culpa de los
errores sociales y la problemática mundial al hombre no sería
justo, sino también, nos tocaría culpar a la mujer de la
educación impartida a los hijos y así sucesivamente buscando

culpables de la infelicidad de las personas.
En un mundo desarrollado, quienes deberían gobernar son las

personas más capacitadas en lo intelectual y espiritual, cosa
que con tanto conflicto entre religiones, entre política y
economía, lejos está de aplicarse en el presente.
Las cosas negativas y determinantes en el machismo, son el

autoritarismo de hombres y mujeres en la sociedad, la pésima
educación que se imparte a las personas desde niños, los roles
enfermizos que nos encargan a cada género, la vanidad, el
consumismo, etc.
Por lo tanto, el machismo es un efecto de estas circunstancias

históricas, que seguramente fueron aplicables en su momento,
pero hoy en día no sirven, son inaplicables y perjudican el
desarrollo del ser humano.
EL FEMINISMO
El feminismo busca que los roles de los géneros se

transformen. Que las mujeres decidan y gobiernen y esto no
garantiza que se dejen de repetir los errores del pasado
cometidos por los hombres.
La lucha de roles, generó entre el hombre y la mujer un

distanciamiento muy fuerte, una lucha competitiva por ocupar
los espacios de cada uno, lo que es parte de la ruptura familiar

en esta época.
Debemos reconciliar las posiciones, basados en que somos

seres afectivos que sobrevivimos con el amor; las diferencias
sociales deben ocupar un papel secundario entre las personas,
debemos ubicarnos en nuestra verdad existencial y entender
que lo que varía es lo externo y no lo interno.
Según Antoine de Saint Exupéry, en su libro El Principito, "Lo

Esencial es invisible a los ojos". Empecemos a buscar el lado
fundamental de las personas y dejemos de luchar contra
nosotros mismos.
No es el machismo ni el feminismo la fuente real de la

problemática de las parejas. Artificialmente se manipulan las
circunstancias, debemos enfocarnos en lo de fondo, es decir…
la formación del ser humano a nivel social y espiritual.
El machismo fue una tendencia de una época pasada. Hoy en

día, nos encontramos en la fase transitoria, en la cual no sólo el
hombre es protagonista de los cambios sociales, sino también
la mujer, el hecho en sí puede tener importancia, pero más allá
de esto, se debería procurar mejorar los niveles de vida en las
personas y en las relaciones humanas de forma indistinta, ya
que por este tipo de disputas se aletargan los procesos a
hombres y mujeres en el crecimiento humano.
Diría que el feminismo y el machismo tienen los mismos rasgos,

la lucha por el poder, la riqueza, el mando y el gobierno y de
por medio la violencia, el egoísmo y el conflicto.
EL AMOR
E
sta palabra aún encierra misterio, todo el mundo la
puede interpretar, el amor se puede reconocer
fácilmente en la familia, padres a hijos, entre hermanos,
hijos a padres, pero cómo podemos explicarnos esta palabra
tan compleja, que se nos presenta sin que nadie nos haya
explicado su significado, el amor es la conciencia de sentirnos
relacionados todos los seres, para dar y recibir los unos a los
otros y sentirnos parte de la naturaleza y del universo.
En la vida diaria, restringimos nuestra expresividad natural del

amor, lo expresamos sólo con quienes creemos que lo
merecen, esto es por el auto aislamiento que adoptamos los
seres humanos, sólo pensando que nos debemos a nuestra
familia o a nuestra pareja, la verdad es que cuando falta nuestra
familia o cuando no tenemos pareja, nos damos cuenta que
aparecen en nuestro entorno personas que nos brindan su
compañía, lo que significa que el amor es para todos los seres
que habitan el universo y para el planeta, con mayor razón, los
de iguales características como lo somos los seres humanos.
En la pareja, ese sentimiento aparece como expresión natural

entre dos personas, siendo por lo tanto una forma más de
expresar amor.
En la pareja, el amor es el combustible que pone en

movimiento la relación; así como el vehículo necesita gasolina
para moverse, también necesita llantas, ejes, volante, etc., de
igual forma el amor de pareja, necesita de otras cosas para
poder manejarse sin chocar; entre estas cosas, la
compatibilidad de las personalidades, el control del carácter
para comunicarnos bien, el aspecto económico y cultural, el
estilo de vida y costumbres, y muchas otras cosas más que no
pueden dejarse de lado. En la pareja el amor no es todo, es una
parte importante, pero no por esto se garantiza el equilibrio de
ella. Lo bueno de esto, es que este motor nos permite ir
desarrollándonos como personas y aprendiendo a vivir una
vida de calidad y además, nos motiva para crecer todos los
días.
El amor nunca termina, nunca se acaba, somos seres de amor

que nacimos para dar amor, somos producto del amor del
universo y lo que puede cambiar, en última instancia, es la
decisión de estar en una relación de pareja.
Las personas confunden la fantasía del romance c

EL AMOR NO ES TODO
Pese a que las personas pensaron que las relaciones funcionan

en un ciento por ciento gracias al amor, no se dieron cuenta
que una relación de pareja tiene otras partes que la conforman
y, posiblemente, sea sólo un pequeño porcentaje de amor lo
que se necesite para llevar una relación sana, más otro
porcentaje de buena comunicación, más otro de un acuerdo
económico, más otro de afinidad, más otro porcentaje de
tolerancia, más otro de crecimiento personal, más una dosis de
detalles mutuos, etc.
De esta forma, sabremos que hay otros aspectos que deben ser
tomados en cuenta, cuando decidamos mantener una relación
de pareja, especialmente cuando éstas sean formales y
fundamentadas en un compromiso de las personas.
EL TIEMPO PARA AMAR
Definitivamente, no existe una edad cronológica para que el ser

humano ame a otra persona, desde que nacemos, estamos en
permanente expresión del amor y debemos entender que la
necesidad del amor es tan imperiosa, que el objetivo es tener la
predisposición para que brindemos amor todo el tiempo,
porque de lo contrario, si esperamos amar solo a nuestra
pareja, la tengamos o no, el tiempo en que mantengamos
reprimido nuestro amor nos producirá frustración y odio, el
amor es una energía que debe circular de unos a otros, no debe
permanecer estática, debe brindarse permanentemente entre

todos los seres humanos.
La expresión del amor debe convertirse en el modo de vivir

nuestra vida, a todos nos enseñaron desde pequeños, que solo
la propia familia es buena, que solo nuestro país es lindo, etc.,
qué pasaría si todo el mundo adopta la mentalidad de igualdad,
afecto mutuo y sin fronteras; lógicamente desaparecerían las
divisiones, las distinciones de colores, razas y sexos.
Cuál es la ventaja de esperar el momento más apropiado para

amar, si son años los que estaremos sin esa supuesta persona a
la que debemos esperar, la respuesta es ninguna, amar no es
solo a la pareja, sino a todos los que nos rodean, aunque suene
difícil, es la forma más sana de convivir en sociedad
compartiendo nuestro afecto y recibiendo el de los demás.
De esta forma, se facilitaría la convivencia social.
Ahora tal vez se explique el motivo de tantas riñas en pareja, si

esperamos de esa persona tanto, como no nos vamos a
decepcionar con cualquier pequeñez que ocurra en el proceso
de conocerla.
Tenemos que descubrir que para el amor no debería haber

categorías de personas y si comenzamos a querer al prójimo,
será más sencillo. Porque al momento de conocer a nuestra
pareja nos acoplaremos mucho mejor.
Como todas las cosas en la vida, la práctica de amar al prójimo

es lo que nos enseña a vivir mejor y en armonía.
El tiempo para amar a una pareja, en especial si queremos

tener un compromiso de por vida, será cuando en el proceso
personal de madurez exista un pleno convencimiento en tomar
esa decisión, decisión que inclusive, repercutirá en terceros, ya
que aun en muchos casos, habrá descendencia de esta
relación.
Por eso mismo, una persona que llegó a tomar conciencia del
significado de una vida en pareja, de forma libre, espontánea y
sin presiones, asumirá uno de los más grandiosos retos del ser
humano… que es lograr amar a otro de por vida y en constante
crecimiento personal.
Hoy, la vida se mide mucho por etapas o facetas sociales, tales

como la etapa de estudiar, la etapa de trabajar, la etapa de
casarse. Lo que no benefició mucho a las parejas, ya que
podemos darnos cuenta que los resultados son no tan
positivos, las relaciones no se proyectaron de acuerdo a la
realidad de cada persona, como lo son sus valores, su
personalidad, sus defectos, sus costumbres, su cultura, sus
creencias, etc.
AUTOESTIMA
L
a medida de respeto y valoración que tenemos de
nosotros mismos, se entiende como autoestima. Es por
eso que debemos cuidarla mucho en todas nuestras
relaciones con los demás.
Ninguna persona es tan imprescindible como lo pensamos y

para comprender esto, es necesario aprender a desprendernos
de algunos sentimientos esclavizantes, como la codicia. Que
significa poseer a cualquier costo, a cualquier precio, pensando
que el fin justifica los medios y con respecto a las personas no
es necesario hacer esto, la libertad es imprescindible en
cualquier relación y más vale estar solo pero integro, que
acompañado y desintegrado, pero tampoco es necesario estar
solos como última alternativa.
El concepto de autoestima esta íntimamente ligado al respeto

por uno mismo y por los demás, respeto a nuestro valor
intrínseco como seres del universo, valor que no está sujeto a
ninguna prueba.
Debemos comprender que desde el nacimiento somos seres

que nos merecemos todo el amor de los demás, solo por
existir, y los demás, también merecen nuestro amor.
En las culturas machistas, al hombre se le impone el objetivo de

conquistar a una mujer, no porque sea la que le conviene, sino
porque el objetivo es obtener una victoria pagana.
A la mujer, los mandatos sociales dispusieron que sea la

conquistada, inutilizándose por esto el natural proceso de
reconocimiento de dos personas y de esta forma, uno y otro, se
pone siempre por encima o por debajo de su par, perdiéndose
la valoración mutua, que se merece cada uno.
DIGNIDAD
Existe un límite donde la comunicación entre las personas

puede o no afectar la autoestima, la noción de una persona
sobre su dignidad, hace que procuremos en determinado
momento de una relación o incluso anterior a ésta, que
evitemos hacer algo que repercuta en nosotros de forma
negativa.
La dignidad se la puede entender como un sentimiento propio

de autovaloración, de sabernos importantes, iguales y útiles a
los demás, de auto aceptarnos como seres completos y
merecedores de amor.
Para clarificar mejor el tema, tomaré como ejemplo a una mujer

que quiere tener un vínculo afectivo con un chico o viceversa, y
uno de ellos propone llevar una relación y él o ella, la rechazó.
De modo que recibieron una negativa por parte de quien
esperaba aceptación.
En una persona que sepa su valía intrínseca, esto no significará

ofensa ni desvaloración personal, es claro que en la vida
podemos ser rechazados por otros, sin que ello signifique una
afectación a nuestra autoestima.
Por lo general, una persona con una sana autoestima, evitará

dedicar demasiado tiempo para convencer a otro de algo, ya
que saben perfectamente, que no deben dar falsas
expectativas a nadie, porque ellos y ellas tienen en claro que
tampoco les gusta caer en ruegos y al contrario, una persona
con una baja autoestima, verá con buenos ojos y vanidad
inclusive, que alguien suplique por su amor. Considerando que
el sufrimiento y dolor de esa persona sea algo a valorar.
Por otro lado, en relaciones donde la valoración es reciproca no

existe lo indigno, prácticamente todo fluye de mejor manera,
procurándonos el mayor respeto posible, idolatrándonos y
apreciándonos mutuamente. Recordándonos siempre, que la
persona que esté junto a nosotros representa algo grandioso y
por lo tanto jamás podremos humillarla o degradarla.
La dignidad es un recurso no renovable y debe cuidarse

sagradamente, es un valor que nos hace merecedores de lo
mejor que pueda ofrecernos la vida.
Si no reconocemos nuestra propia dignidad, es necesario

revisar que está pasando con nuestra autoestima.
En síntesis, las relaciones de pareja se hacen más simples y

cómodas cuando dejamos de actuar bajo la influencia del ego,
el ego altera nuestra capacidad de percibir y de sentir.
LA PERSONALIDAD
C
ada persona es una entidad totalmente diferente, tanto
física como mentalmente, ni siquiera los seres
clonados repetirán su personalidad, ya que cada
persona tendrá sus propias experiencias de vida y aunque dos
o más personas tuvieran iguales experiencias, ninguna de ellas
percibirá el entorno de igual manera, cada uno capta desde su
valoración intelectual propia, de acuerdo a las influencias
familiares y sociales de cada uno y si aun esto fuere parecido,
las personas serán diferentes por las influencias emocionales y
espirituales con las que cada uno llegó al mundo.
De esta manera, queda claro que las personas debemos tratar

de ser lo que somos y no lo que quieran los demás, entender
para qué hemos nacido y así encontrar nuestro propio destino.
Ser sincero consigo mismo, es un acto de valentía que nos

ayuda a aceptarnos como somos, conocer nuestras
capacidades, debilidades y saber que desde nuestra propia
realidad somos capaces de lograr los objetivos para los cuales
existimos y posiblemente aún no los hayamos reconocido.
Desde pequeños nos hicieron creer que poseemos

características que nos diferencian de las otras personas y sin
que nosotros lo decidamos, nos pueden catalogar como
tímidos, de mal genio, extrovertidos, etc., y al final, ninguno de
estos conceptos podría definir el universo de expresiones que
tiene una persona.
Si podemos liberarnos de esos condicionamientos que le

imponen a uno los amigos, la familia y la sociedad, seremos
quienes queremos ser sin más, sin necesidad de que los demás
sean como nosotros.
Esto brinda una amplia variedad de opciones, de las que te

puedes servir para ir construyendo lo que a tú criterio, es la
mejor forma de tener tus relaciones de pareja.
Cuando una persona llega a conocerse a sí misma, le será más

fácil escoger si le conviene una relación de pareja formal, una
relación informal o simplemente estar sola; en general puede
decidir cualquier forma de relacionarse, pero siempre con
autonomía para hacerlo, sin influencia de la familia, ni del
entorno, sino basada en su autoconocimiento.
EL CARÁCTER
Aunque el carácter es parte de la personalidad, es un elemento

adaptado también a las costumbres del medio cultural donde
uno se desenvuelve, en sociedades donde predomina el
machismo, se encuentra que el carácter del hombre está

diseñado para ser más fuerte que el de la mujer, como parte
del rol que es el de poseer la fuerza, la agresividad y el
autoritarismo.
El carácter es un termómetro que se interpone en la

comunicación, ya que en la pareja una de las dos personas con
carácter fuerte, como quienes gritan, rompen cosas o quienes
amenazan, van impidiendo que la comunicación sea sana,
como también aquellas personas que reaccionan con silencio,
indiferencia o huyendo, impiden que la comunicación sea
funcional.
Es importante que cada persona reconozca su propio carácter,

para que de esta forma tratar de prevenir reacciones negativas
y con el tiempo comunicarse mejor; cambiar el carácter es algo
que lleva muchos años, es posible pero es más sencillo
aprender a canalizar las reacciones, si una persona utiliza la
indiferencia como reacción, será difícil el diálogo, pero las
personas concientes de esta reacción, a futuro pueden adoptar
actitudes de comunicación, antes o luego de una posible
confrontación.
Muchas relaciones se frustran y terminan por una falta de

manejo adecuado a las reacciones muy propias de cada uno, el
carácter es una causa muy alta de divorcios y rupturas, pese a
que muchas de esas parejas, en teoría tienen los mismos
intereses y objetivos de vida.
No se justifica el carácter de una persona para inutilizar la

comunicación, no es una actitud de resignación la que se debe
asumir por el mal carácter pasivo o activo de una persona; con
decir soy agresivo o resentido, no se soluciona un conflicto, no
se justifica agredir a la pareja físicamente ni psicológicamente,
el objetivo a alcanzar es que las reacciones sean medidas y
manejables.
Tampoco se justifica el carácter de alguien, que supuestamente

por huir del problema, va donde sus padres o amigos, esta
conducta disfuncional debe ser corregida también.
La comunicación funcional como objetivo de pareja, va

haciendo que el carácter de cada uno se domine y equilibre,
transformando a las personas brindándoles amplias
posibilidades de arreglar los conflictos.
Por la cultura autoritaria de la mayoría de las sociedades, aún

se valora a las personas prepotentes, intransigentes, bulliciosas,
gente que abusa de los demás; es hora de valorar a las
personas objetivas, con amplios recursos de comunicación,
que tengan libertad y también la sepan respetar, con una sana
autoestima y que busquen vivir en paz. Como dije
anteriormente, el carácter es producto de influencias del
entorno, "Quien con lobo se junta a aullar aprende".
Está en nuestras manos mejorar el tipo de influencias externas,

como procurar alejarnos de personas ruidosas, de personas
egocéntricas, de personas abusivas, en general de aquellas que
sean negativas para nosotros.
De la misma forma, mejorar nuestro entorno físico,

procurándonos lugares donde haya equilibrio con la naturaleza
y si no es posible esto, por lo menos en nuestro tiempo libre
estar en contacto con lo verde, árboles, paisajes, montañas,
etc., que es lo que automáticamente nos equilibra.
Otra influencia, que por lo general es negativa, es la televisión;

así que leer un libro interesante o escuchar música agradable,
ayudará a estar mejor, el carácter puede variar muchísimas
veces en el transcurso del día, sólo depende de que tan
sensibles estamos, lo perjudicial… es que el carácter es nuestra
presentación hacia el mundo exterior, a mayores influencias
positivas que recibamos, mejor carácter mantendremos.
Hay otras influencias más directas como la salud, el sueño, el

tipo de alimentación, la rutina personal, el trabajo, los estudios,
el tránsito, el ruido, el deporte, la cultura, etc., hacer algo por
nosotros mismos significa algunas prácticas como meditar,
hacer ejercicios, caminar, leer y compartir con personas
positivas. Es la mínima obligación que deben tener las personas
responsables de su felicidad y que hará que nuestro carácter
automáticamente mejore.
Hoy en día, las parejas exitosas, serán aquellas que tengan una
buena comunicación por encima de la supuesta
complementariedad basada en gustos, cultura, edades,
profesiones, clase social, etc. Es decir, la pareja exitosa será la
que tenga compatibilidad por medio de la comunicación.
EL PASADO
G
ran parte de nuestra forma de vivir en el presente, es
el reflejo de nuestras experiencias pasadas y que nos
dieron una visión e intereses de nuestra vida. Por
ejemplo, si en nuestros padres vimos violencia o separación, no
es verdad que tenga que sucedernos esto a nosotros; o si en
una relación anterior fuimos traicionados, tampoco es verdad
que estemos condenados a que se repita aquello.
Si no hacemos un balance justo de nuestras experiencias

pasadas, estaremos condenados a vivir en un circulo vicioso sin
salida y repitiendo en todas nuestras relaciones los mismos
errores. Debemos aprender también a valorar lo bueno y no
sólo ver lo malo, valorar el tiempo que pudimos compartir con
una persona.
Lo que ocurre, es que aprendimos a desconfiar y a vivir a

medias, por mantener una actitud defensiva frente a los demás,
y esto, sin duda, repercute en la calidad de las relaciones que
llevamos, es muy común en algunas sociedades latinas que
seamos posesivos, celosos y mal pensados, lo que
internamente sabemos que no es positivo, pero que es la
actitud supuestamente adecuada, para no ser los tontos de la

película y para salir ganadores en una relación.
Lo cierto es que, aún teniendo bajo nuestro control a una

persona, nunca vamos a disfrutar ciento por ciento de ella, ya
que nuestros temores no nos dejarán en paz y pese a que una
relación de este tipo, puede inclusive llegar a durar años, no
significa que las personas involucradas se hayan superado, a lo
mucho… se acomodaron el uno al otro. Generalmente
ubicándose el uno como dominante y el otro como dominado,
lo malo de esta actitud de vida, es que si hay hijos de por
medio, ellos heredarán ese estereotipo que les causará
conflictos en un mundo que ha cambiado el estilo de vida de
hombres y mujeres.
El pasado no debe servir sino como la experiencia más

adecuada para entender que todo lo ocurrido servirá para
llegar a ser personas felices, con libertad y seguridad de amar;
nada es tan grave como para que nos afecte el resto de nuestra
vida, ya que para que algo entre en nuestros sentidos, depende
de cuánto nosotros lo dejemos ingresar.
Es más sencillo aceptar a una persona cuando tiene los mismos

objetivos básicos de vida, y que las enseñanzas del pasado le
ayudaran a percatarse de los parámetros importantes para
lograr el éxito en sus relaciones. Tomar el pasado como un
conjunto de enseñanzas para pulir nuestras conductas y
realizarnos en lo afectivo, es una gran forma de aceptarnos a

nosotros mismos.
Hoy en día, los jóvenes tienen muchas más oportunidades de

experimentar, que en las anteriores generaciones. Ya que los
objetivos de vida cambiaron y la edad cronológica para llegar a
un compromiso también, antes las parejas se comprometían
antes de los treinta años, muchos antes de los veinticinco y
muchos antes de los veinte años, fue por esta razón que el
esquema de pareja era muy radical y autoritario, las personas
no tenían la opción de escoger otro estilo de vida, sino el que
se acostumbraba en la época.
En estos días y pese a que la familia se vio afectada por este

rompimiento generacional, nace a la vida una gama muy amplia
de tipos de relación de pareja, muchos de estos juzgados por la
sociedad. Tales como la vida de soltero, la vida sin pareja
estable, las relaciones liberales o informales y otras categorías
que rompen con los antiguos esquemas.
Se encuentra que los jóvenes buscan por todas las vías

acoplarse a sus necesidades, muchos repitiendo el ejemplo de
sus padres y muchos inventando relaciones de acuerdo a su
personalidad.
Aceptar que las cosas cambiaron, es el primer paso para

entender qué tipo de relación será la mejor para cada uno.
Pero, por suerte, no varió en ninguna persona la necesidad de
amar y de ser amado; así, que sigue en cada persona el deseo

de sentir que su amor vale para entregarlo a alguien.
Quién se atreve hoy en día a vivir de acuerdo a sus

pensamientos, es alguien que además de valiente, es
inteligente. Ya que se adapta de mejor manera a la época y se
procura relaciones de mayor calidad. Son las personas que se
enfrentan a la crítica familiar y social, pero que a largo plazo
conseguirán un verdadero bienestar para sí mismos.
EL PASADO PERSONAL
El pasado personal es el conjunto de experiencias de pareja

vividas por una persona, que mal o bien, serán el referente para
sus percepciones en el presente.
Un pasado correctamente evaluado, nos brindará las

alternativas y opciones necesarias para mejorar nuestras
relaciones a presente y futuro. Y un pasado mal evaluado nos
puede provocar que nunca corrijamos los errores del pasado, y
ubicarnos de forma defensiva ante otras personas con quienes
nos relacionamos o quienes, en determinado momento,
puedan ser nuestras parejas, por lo que actuaremos con miedo
y desconfianza.
El pasado personal tiene que entenderse como la medida justa

y necesaria que nos permitirá emprender y lograr un nuevo
estilo de vida en pareja, en presente y futuro, fue el pasado lo
que nos llevó al hoy. Y por lo tanto, fue valioso y habrá que
agradecerlo y venerarlo.
EL PASADO FAMILIAR
Es una influencia de las relaciones que tuvieron nuestros padres

y abuelos, de tíos, primos, etc., es decir, los modelos de pareja
que encontramos en nuestra familia, como referente a la
nuestra, sin que estemos obligados a seguir esos esquemas,
que en gran medida nos influyen, pero nunca nos condicionan.
EL PASADO GENERACIONAL
Es manifiesta la actitud en los adultos de que supuestamente

los de antes hacían mejor las cosas. Pero no es lo que piensan
las nuevas generaciones, la sociedad de hoy, no es la de hace
cinco años, ni la de hace diez, ni la de hace veinte años.
La sociedad de hoy, cambia cada día y los modelos de vida se

desactualizan, sin que esto signifique que son mejores o peores
que antes.
Nadie tendría las herramientas necesarias para adaptarse a la

realidad actual, usando el estilo de vida pasado, al contrario los
adultos deben preocuparse por actualizar su ainformacón con
respecto a los nuevos tiempos y así poder entender a la nueva
generación.
LA CONQUISTA
En nuestra sociedad actual, la mayor parte de las veces, aún

somos los hombres los que proponemos una relación
romántica a las mujeres, con lo que establecemos roles que
hoy en día están cambiando y dando lugar a que esto sea en
igualdad de condiciones.
Las conquistas de antes eran heroicas, sacrificadas e intensas,

totalmente machistas; hoy las cosas cambiaron y encontramos
que la tendencia es ser iguales hombres y mujeres, ambos, con
la capacidad de proponer una relación al otro y del tipo que
sea.
Es obvio que alguien debe tomar la iniciativa en una relación,

cuántos hombres tímidos se quedaron solos solamente por no
tener la decisión de acercarse a una mujer, o cuántas mujeres
valientes se quedaron solas por no poder dar el primer paso
según los mandatos sociales, pues hoy es el momento de
empezar a decidir nosotros mismos, seamos hombres o
mujeres, ya que la ambigüedad por la que atraviesan los roles,
confundió el estilo de vida actual.
Lo claro es que alguien debe tomar esta decisión y es, en este

campo, mayor la responsabilidad de la mujer por desarrollar su
capacidad para tomar la iniciativa de proponer al hombre una
relación y por qué no, conquistarlo.
Son pocas aún las mujeres que dieron el paso de buscar a un

hombre y lograr una relación que cambie sus vidas, el miedo a
cambiar los roles es una de las razones por las que las parejas
de hoy en día, están en un gran conflicto de poder, la solución
más sencilla es adoptar la equidad en todos los aspectos.
Anteriormente, la conquista se entendía como el proceso por el

cual una persona lograba romper el muro que le imposibilitaba
mantener una relación con otra persona. Lo cual genera
desigualdad desde el comienzo de una relación, ya que sólo
una de las dos personas se esfuerza por mantener un vínculo y
la otra, adopta el papel de sujeto pasivo de esa relación.
La conquista se basó en un orden donde uno promueve la

relación, pero a la vez impone las reglas de la misma, sin que la
persona conquistada tenga la opción de opinar o participar del
tipo de relación que se iba a construir. Ya que al aceptar uno de
los dos la conquista, prácticamente perdía la capacidad de
decidir, en la práctica, es esta la causa por la que la mujer fue
relegada al rol de obediencia y sumisión y el hombre al de
decisión, cambiar estos hábitos facilitará la comprensión y
convivencia en igualdad de condiciones.
Por estos motivos, la conquista ya no debe corresponder más

solamente al hombre, sino a las dos personas. Luchar
mutuamente por construir una relación es deber de ambos, y la
palabra que deberíamos usar para lo que antes se llamaba
conquista, sería "promover" una relación.
Eliminando estas costumbres machistas nos permitiremos más

igualdad, porque las relaciones no deben estar fundamentadas
en dominante (conquistador) y dominado (conquistado), sino
en personas que comparten su tiempo entre sí, para expresar
amor y convivir en paz, respetando el espacio de cada uno y
conocerse en permanente “conquista” mutua, donde ambos
procuren mantener la armonía y el afecto para cuidar de la
relación.
La verdadera conquista se basa en poder descubrir a una

persona con intereses parecidos a los nuestros, o sea que
ambos estén dispuestos a llegar a entablar un tipo de relación
similar.
Qué pasa si una chica está atraída por un chico solamente en el

aspecto físico y no tiene intención de formalizar nada, será que
esto es malo y no debe pasar. De ninguna manera, más bien
esto es lo más bonito del amor y es que las personas nos
suelen atraer espontáneamente, sin que estemos pensando en
lo que va a pasar, nos acostumbramos a pensar que es malo
expresar nuestro afecto con las personas, ya que no se entabló
una relación socialmente aceptada, en esto son expertos los
colegiales y universitarios que viven muchas experiencias
esporádicas, y lo hacen porque lo sienten y sin ningún interés
especifico.
Si una persona no se siente a gusto estando encasillada en un

concepto de relación como, por ejemplo, el de novios, esta
puede vincularse desde otra perspectiva donde predomine el

interés en común sin que sea necesario dar un título a esa
relación, o simplemente denominarla pareja formal o informal.
Estoy seguro que hay formas más saludables de mantener
nuestras relaciones de pareja, sin que cumplamos al pie de la
letra los estereotipos sociales.
Acuérdate si alguna vez estuviste con alguien que sólo te gustó

y en realidad no encontraste otra forma de mantener su
contacto, y decidiste llevar una relación convencionalmente
aceptada por el miedo a lo que pensarán los demás si haces
algo diferente a lo acostumbrado.
Muchas personas que se percataron de la dificultad de llevar,

hoy en día, un compromiso formal de pareja, están empezando
a manejar relaciones más livianas y des complicadas o como
las he denominado "relaciones informales".
Todavía en la actualidad, por el cambio generacional, los

jóvenes actúan por rebeldía al pasado y con un sentimiento de
culpa por sus acciones, creyendo que lo que hacen está
prohibido y viven aceleradamente, e irresponsablemente si
piensas en las repercusiones que puedan suceder.
Enseñar a los adolescentes que expresar sus sentimientos es

correcto y sano, que el deber del adulto es informarles y no
condicionarlos o asustarlos, es parte de una reconciliación
generacional.
Si bien es cierto que entre dos personas que se involucran, es

muy difícil saber cuál será el destino de esa relación, por lo
menos, para no generar falsas expectativas, será mejor no
ofrecer más allá de lo posible.
No es real que alguien ofrezca amor eterno a otra, si ni siquiera

conocemos lo que viviremos el día de mañana.
Ser sincero con uno mismo es saber que no es real inventar

relaciones que no tenemos, como cuando creamos en nuestra
mente un prototipo de pareja con ciertas características físicas,
intelectuales y económicas y con quien solamente se vivirán
momentos felices, o cuando tomamos modelos de telenovelas
o películas, para grabarlos en nuestros subconscientes.
El fracaso en las parejas, en gran medida, es por la

contradicción generada entre la vida real en pareja y lo que
inventamos en nuestros pensamientos; la contradicción entre la
vida real y las reglas sociales de pareja.
Aceptar la realidad no significa que es mala, significa… que el

aprendizaje se inicia desde cero, con cualquier persona que nos
involucremos afectivamente, entendiendo que cada relación se
la aprende viviendola y no imaginándola.
Por estos motivos, la persona que ofrece algo imposible y

como quien cree en eso, está condenado al autoengaño mutuo.
La referencia más directa que tenemos para saber cuál será,

más o menos, nuestro referente de vida en pareja, es la de
nuestros padres.
Así, que si no nos gusta… habrá que procurar hacer conciencia

de cómo queremos que sea nuestra vida en pareja y trabajar
por ello.
Ya en pareja, ser sincero significa aceptar nuestros errores,

hacernos responsables de nuestros defectos y reconocerlos
para cambiarlos.
Por lo general, quien se acepta a sí mismo, es sincero y esto le

permite, con mayor solidez, solucionar los inconvenientes de
pareja.
El miedo a ser rechazados hace que las personas adoptemos

imágenes, porque pensamos que siendo nosotros mismos,
nadie nos va a querer o aceptar, pero que lo quieran a uno por
lo que no es, es peor, es una mentira que tarde o temprano se
va a descubrir.
Presentarnos como somos, da la oportunidad a la otra persona

que haga lo mismo, porque sólo nos aceptamos cuando somos
auténticos.
Debemos estar dispuestos a romper con ese círculo vicioso,

empezando a cultivar relaciones que nos sirvan para crecer
como personas y que si terminan, por lo menos dejen un buen

recuerdo.
La libertad y espontaneidad son los elementos indispensables

para que se llegue a inventar una gran relación, de hecho, la
idea que el amor se debe conquistar, creo que está caduca. Ya
que aunque ésta sea de manera pacífica, dejó de ser
espontánea.
Si sólo una de las personas quiere alcanzar la meta

conquistada, es decir… el uno conquista y el otro es
conquistado, el mérito es de uno y no de los dos, en cambio si
nace de las dos personas, el llegar a algo, sea como se llame el
resultado, generalmente será duradero, no necesariamente en
el tiempo, pero si en nuestra experiencia vital.
Por ejemplo, lo más típico en nuestras sociedades latinas es

que el hombre sea quien tome la iniciativa de empezar una
relación, de invitarlas a salir, de regalar flores, de darles
serenatas, de escribirles poemas o cartas. Es el momento que
más allá que la costumbre te ordene, seas tú mismo, tus
intenciones deben ser más importantes. Toma la iniciativa y
disfruta de esta aventura, no temas, porque si antes hubo
mujeres que se arriesgaron por otras causas, por qué no
hacerlo en este milenio, que nos da cada día más sorpresas.
Donde las personas que luchan por sus convicciones, se hacen
conocer por ellas y nos dejan grandes lecciones.
Ser sincero en la pareja, es manifestar de forma auténtica las

intenciones de una persona hacia otra, para poder entablar una
relación del tipo que sea, ninguna de ellas es mala si las cosas
son claras y directas, quien propone la relación como quien
recibe la propuesta, debe estar en capacidad de considerar que
cualquier vínculo presupone un beneficio psíquico y emocional
en ambas personas, por lo que depende de cotejar los intereses
mutuos para acordar una vivencia sana.
EL RECHAZO
Uno de los temores por el cual en ocasiones evitamos
arriesgarnos a conocer una persona, es el rechazo al que nos
exponemos; pero este supuesto sentimiento de derrota,
cuando alguien no aceptó conocernos, sea con la finalidad que
sea, no es una medida con la que podemos definir nuestro
éxito en el amor de pareja, ya que como cualquier relación
humana, no siempre somos el cien por ciento aceptados en
todos los ámbitos, lo que ocurre es que a nadie le agrada
sentirse rechazado.
En lo que a la pareja se refiere, es muy difícil que a una persona

le seamos compatible en un cien por ciento, si esto fuera así no
sería lo común, en todo caso, de vez en cuando, a todos nos
hace falta darnos cuenta que las personas no tienen la
obligación de aceptarnos; esto nos hace un poco más
comprensivos y maduros, lo que puedo afirmar, es que solo le
podemos gustar a una persona, cuando nos puede ver tal y
como somos, ya que si no somos auténticos y somos
aceptados, nos convertimos en esclavos de la mirada ajena y si

atraemos a una persona que le gusta lo que no somos, tarde o
temprano nos sentiremos tan presionados, que nos
revelaremos por ser nosotros mismos.
Por lo que… aunque suene lo más lógico el actuar tal y como

somos, no es lo común en nuestras sociedades. Que nos
estigmatizan y nos enseñan estereotipos de vida, que
difícilmente se adecuan a la realidad, es por esto que ser tú
mismo siempre, es la única libertad que conozco y que sólo así,
sabes quién te quiere y quién no, hay personas que por culpa
de su miedo a no ser aceptados tal y como son, nunca
pudieron cambiar una mentira y vivirla por mucho tiempo.
Las personas de las que más aprendemos, son con las que
menos cosas en común tenemos, ya que nos abren la mente
haciéndonos entender que no es la única forma de vivir, la que
cada uno de nosotros aprendimos; permitámonos vivir de
modo distinto al que estuvimos acostumbrados.
En sí, el rechazo no es un buen estímulo para nadie, entonces

no es necesario exponernos con todas las personas, porque
definitivamente está en riesgo nuestra autoestima, y puede
generar resentimiento en nosotros. Es mejor evitar el rechazo,
la idea es entenderlo pero no exponer nuestra dignidad por
cualquier persona.
Una de las formas para procurar no ser rechazados o

expuestos, es el contexto donde vamos a conocer a alguien;
muchas parejas se han conocido esporádicamente y han sido
buenas relaciones. Es diferente la apertura psicológica en las
personas, cuando se la conoce mediante un tercero que nos la
presenta, en comparación con alguien a quien contactamos en
un bar, o es diferente conocer a alguien que contactamos en la
calle, que a alguien que acude al mismo gimnasio que nosotros,
o que está en nuestra clase del colegio o de la universidad.
El contexto inicial influye pero no determina el futuro de una

relación.
Con la edad las personas nos vamos haciendo complicadas en

algunos aspectos, mientras más grandes, más prejuicios
tenemos, así… que más requisitos pediremos sobre quién sería
un candidato o candidata para ser nuestra pareja.
PAREJA IDEAL
La pareja ideal es aquella que acepta como tú eres, la que

respeta lo que tú crees y quién respeta lo que tú aspiras en la
vida, con la que llegas a ser tú mismo en libertad y con la que
compartes tiempo de calidad.
En ocasiones ocurre que nos obsesionamos con una persona

que no nos conviene, nos cegamos y nos involucramos, sin
pensar en las consecuencias que esto nos puede acarrear.
Todas las personas, en determinado momento podemos ser

compatibles en algunos aspectos, por eso es necesario saber si
existen intereses en común de por medio, no debemos creer,
que una persona que nos guste, sólo puede ser nuestra pareja;
esa misma persona, puede convertirse en un amigo o amiga, un
o una confidente, un o una socia, un o una compañera de
tiempo libre, etc.; es importante aprender a conocer a las
personas a fondo, o por lo menos intentarlo.
La pareja ideal es aquella que se encuentra en una sintonía

similar a la nuestra, con la que nos sea posible llevar
normalmente nuestra vida y con quien sintamos que estamos
fuertemente conectados, sin perder nuestra estabilidad
emocional y nuestra individualidad.
Quiero decir que pareja no es solo la que vivirá con nosotros el

resto de la vida, pareja es la persona con la que uno puede
compartir algunos o muchos momentos y por la que sentimos
atracción, no vamos a referirnos solo a la pareja casada, mi
interés es acercarme a todas las relaciones que tenemos con
esas personas que conocemos y que nos atraen para algo; ya
se les ha puesto nombres a muchas relaciones, como son, los
enamorados, los novios, los casados, entonces el criterio de
pareja es más amplio, pero de todas formas, la meta es
trascender con cualquier persona que compartamos nuestro
tiempo, crecer y ser más felices.
RECONOCER A TU PAREJA
Dependiendo de la capacidad intuitiva de las personas, hay

quienes han podido reconocer a quien lo acompañará toda su
vida solo mirándola, son pocos casos pero los hay, la persona
que nos corresponda, puede que la encontremos como puede
que no, depende de muchas cosas, pero no significa que
quienes no encuentren la pareja de toda su vida deban estar
solos, ni frustrados. Convivir en pareja no es la única forma de
vivir, y hoy en día, son más y más las personas que viven solas,
generándose un cambio drástico en las sociedades, es
necesario entender que hoy en día, hay un tipo de vida distinto
al tradicional y quienes optaron por un tipo de relación menos
comprometida, y de acuerdo a sus necesidades, habrán
logrado encontrar un equilibrio en su vida afectiva.
Si las personas estuvieran más conectadas con su ser interno y

espiritual, estarían en mejor capacidad de reconocer a la pareja
que les conviene, pero los parámetros actuales se basan en la
posición social y económica, la apariencia física y la profesión u
ocupación de la persona, esto hace que la búsqueda sea muy
complicada, buscamos por fuera lo que está dentro de
nosotros.
Actualmente muchas personas decidieron llevar sus vidas sin

vínculos de pareja, conduciendo sus necesidades afectivas
hacia otras personas conocidas como la familia, amigos, y
también hay quienes lo hacen con desconocidos, tal es el caso
de quienes brindan ayuda solidaria a enfermos, huérfanos,

mendigos, etc., y hay quienes conducen su energía hacia
proyectos como estudios, trabajo, viajes, etc., sin que ninguna
de estas personas deban sentirse incompletas por no tener una
pareja.
EL ESPACIO PERSONAL
C
omo el pez necesita del agua para sobrevivir, el ser
humano tiene un hábitat que cuidar, un entorno que
posiblemente sea más complejo que el del pez.
Nuestras sociedades nos enseñan a ser generosos, compasivos,

solidarios, caritativos, cariñosos, pero no nos educan para
reconocer y respetar nuestro espacio de independencia frente
a las demás personas.
El espacio personal es la determinación que tenemos nosotros

como personas independientes, autosuficientes y autónomas;
es decir, comprender que aun siendo niños no es sano crear
dependencia de los padres, no es sano que la mujer dependa
del hombre ni el hombre de la mujer, no es bueno que entre
hermanos ninguno dependa del otro, ni tampoco es bueno que
entre amigos uno dependa del otro, es necesario comprender
que compartir tiempo con las otras personas, no significa que
obtuvimos el derecho para interferir en las decisiones de los
demás.
Si conoces una persona, sea hombre o mujer, sea que te guste

o no, sea que tiene tu misma condición económica o no, sea
una persona de otra raza, sea de otro país u otra cualquier

persona, sólo el respeto a ella, nos permitirá mantener una
buena comunicación y de ser el caso, crear un vínculo sano
para construir una relación.
En nuestras sociedades, todo el tiempo la gente invade nuestro

espacio y nosotros invadimos el de los demás, provocándose
con esto, una cadena de abusos constantes en todo ámbito,
que pueden incluso desencadernar en conflictos.
El espacio personal, se distorsiona dependiendo de cada

sociedad; así, el machismo es una tara que entorpece el
respeto entre las personas.
Las personas que creen que el hombre tiene derecho sobre la

vida de la mujer, empieza una relación defectuosa; si ellas
creen que el hombre paga siempre, es otro defecto; porque
permiten con esto que el hombre tenga derecho a decidir sobre
sus intereses o su tiempo; además, pierden el derecho a decidir
por sí mismas. Del padre al hijo sucede algo muy simpático, el
padre da permiso como si tuviera el poder de determinar la
vida de otra persona que es su hijo; esta actitud es insana, el
problema es que posiblemente el padre se preocupe por su
hijo y éste no tiene el derecho de interferir en el tiempo de su
padre, o sea… si el hijo sale de la casa de su padre, es lógico
que entienda que su padre tiene derecho a descansar
tranquilamente y no que es una imposición que tiene como
derecho. Y si el padre no se molesta por que salga su hijo, sería
más sano que la relación se base no en imposiciones, sino en

comunicación y acuerdos mutuos.
El resultado de relaciones respetuosas, es la construcción de

relaciones duraderas, llenas de amor y donde la equidad sea
expresada en la consideración y afecto al prójimo.
En la pareja esta lucha es muy fuerte y en especial en las

sociedades actuales, por lo tanto, lo importante es empezar a
construir el respeto hacia la otra persona, el ser pareja no nos
da derecho a interferir en el tiempo, intereses, pensamientos y
decisiones de nuestro par; claro que tenemos que buscar
consensos y negociar nuestros espacios y empezar por ser
concientes y así ir limando las asperezas poco a poco, porque
tan responsable es quien abusa del espacio ajeno, como el que
lo permite. Así, que con rebelarnos esporádicamente, nada
cambia y culpando al otro peor, es una cuestión cultural y
personal, que demora en convertirse en una relación
productiva y retro alimentante.
No siempre la pareja llenará todas nuestras necesidades, por lo

que no es lógico que debamos dejar todo por ella, las
costumbres sociales nos enseñaron que, supuestamente, una
pareja suple todas nuestras necesidades, pero en la práctica no
es así, el espacio vital de cada uno es imprescindible para
equilibrar nuestra relación; así, por ejemplo, si te gusta el
deporte, la farra, salir de excursión, etc., y esto te hace
verdaderamente feliz, quiere decir que fue algo valioso en ti
para vivir con calidad y que posiblemente si lo dejas, afectara

tu equilibrio personal y tu relación; por eso es necesario estar
atentos y percibir a nuestra pareja, para que no nos llegue a
afectar su estilo de vida, su ocupación, su forma de vestir y su
forma de hablar. Se supone que si estás con esa persona es por
el amor que los unió, mas no por los detalles personales que
con el tiempo irás conociendo y que si se sobreponen al amor,
pueden poner en peligro tu relación, nada en pareja no tiene
solución si estamos decididos a negociar las diferencias en pro
de una buena relación.
Entonces, el primer elemento que te permitirá construir una

buena relación humana, sea amistad, romance, familia,
vecindad, colega, socio, será el aprendizaje del respeto como
valor inicial en las relaciones humanas.
El respeto consiste en entender, que uno no tiene derecho a

interferir en el tiempo de otra persona, uno no tiene derecho a
interferir en los pensamientos de otra persona, uno no tiene
derecho a interferir en las emociones de otra persona, uno no
tiene derecho a interferir en los intereses de otra persona; en
general, uno no tiene derecho a interferir en la vida de otros,
tampoco ellos, tienen derecho a interferir en nuestras vidas,
salvo que nosotros lo permitamos, esta consideración es el
principio del respeto.
Muchas veces se malentiende el respeto; por ejemplo, cuando

alguien insulta a otra persona, se toma al insulto como
irrespeto, esto depende, puede ser sólo una mala

comunicación, pero en el fondo puede ser que alguien se creyó
con derecho a opinar sobre nosotros, entonces no es el
irrespeto el insulto, sino el interferir respecto a nuestra
identidad, porque nadie tiene el derecho de opinar respecto a
nosotros, excepto cuando nosotros lo autoricemos y viceversa.
Para entender mejor esto, es bueno entrar en una práctica

permanente, hasta manejar el respeto con todo el mundo, te
recomiendo que practiques con cualquier persona que no
conoces, bajo los parámetros de tu tiempo, de tus opiniones,
de tus intereses, etc., y podrás percatarte, que si tú no infieres
en el espacio de otra persona, esa persona no tendrá derecho
sobre ti, y estar en capacidad de comunicárselo es una de las
experiencias más gratificantes que hay.
EL RESPETO
Respeto, es permitir que una persona crezca y se desarrolle

libre y autónomamente, aceptándola como es; cuando una
persona logró ser independiente, se le hará muy fácil respetar
al otro.
Defino al respeto como el requisito más importante para iniciar

cualquier relación, sea de amistad, romance eventual, noviazgo
o matrimonio, es la base fundamental, para permitir dar un
segundo paso en el conocimiento de una persona, si no damos
el primer paso no pasamos al segundo y se entorpece una
relación.
En el orden de prioridades, para construir relaciones sanas e

importantes, el respeto es el camino más importante y seguro.
Debemos comprender que todas las personas, en un momento

dado, tienen la posibilidad de mantener algún tipo de relación
con nosotros, digo esto porque incluso con quienes no
tenemos un contacto físico, como cuando hablamos por
teléfono o por medio de la computadora, estamos generando
una relación de conocidos en última instancia, pero relación al
fin.
Relación, será entonces, cualquier tipo de vínculo que

generemos con otra persona, teniendo a la comunicación como
el enlace que nos habilita para desarrollar las relaciones.
Por lo general, las personas, hoy en día, nos relacionamos

teniendo como punto de partida el interés de una persona a
otra, viéndonos de esta forma obligados a discriminar a
aquellos que supuestamente nada nos pueden dar.
Este parámetro interés, dificulta una próspera y sana forma de

convivir socialmente, que nos aísla a unos de otros,
segregándonos y creando una valoración subjetiva y material
en las personas.
Si una persona quiere tener éxito en sus relaciones, deberá

empezar cambiando el parámetro interés, por el parámetro
respeto y automáticamente se eliminará ese bloqueo de

comunicación.
Para desarrollar cualquier tipo de relación, sea de amistad,

noviazgo, romance, familia, vecinos, colegas, socios,
empleados, jefes o simplemente entre conocidos, se empieza
con el respeto a esa persona.
El respeto, significa en primer lugar, entender que nadie tiene

derecho a interferir en:
Nuestro tiempo
Nuestros pensamientos y opiniones.
Nuestras emociones y sentimientos
RESPETO AL TIEMPO
Respeto al tiempo de los demás, significa que sólo somos libres

de disponer de nuestro propio tiempo y por más cercana que
sea una relación, no estamos en la potestad de creer que el
tiempo de los demás no tiene valor.
Aprendemos a valorar el tiempo de los demás cuando

aprendemos el valor del nuestro, difícilmente alguien
productivo y emprendedor abusará del tiempo de los demás,
una persona con una sana autoestima, sabe que el tiempo vale
mucho porque es un recurso no renovable.
IMPUNTUALIDAD
Un efecto directo de la poca o ninguna valoración que las

personas tienen de su tiempo, hace que la impuntualidad sea
un estilo de vida, basado en un sentimiento de desgano por la
vida que se lleva, una falta de motivación, que se superará
cuando comprendamos que inclusive el tiempo de ocio,
descanso, diversión y vacaciones son muy importantes, no sólo
es importante el tiempo por la actividad, sea de trabajo o
estudio, el tiempo es un recurso no renovable y es parte de la
vida de las personas, por lo tanto vale.
Si comprendes que la base de una buena relación es el respeto,

empezarás procurando ser puntual.
RESPETO A LOS PENSAMIENTOS
Es necesario entender que cada persona tiene toda la libertad y

el derecho de pensar de cualquier manera, nadie por más
estudioso o erudito, obtuvo permiso para imponerse a los
pensamientos de otros, lo que no significa que las personas
mantengan sus pensamientos estáticos, los pensamientos
siempre están transformándose, ya que las personas
aprendemos cada día algo nuevo, los pensamientos se
alimentan cada día.
Comprender esto es importante cuando se educan los hijos, ya

que los padres deben entender que desde niños tenemos
pensamientos propios que se deben respetar; ser adultos, no
significa tener derecho a imponer ideas a nadie, a lo sumo

brindar información, para que de igual manera los hijos
aprendan a respetar los pensamientos de los padres.
En la pareja, la comunicación permite que compartamos los

pensamientos y que sepamos con esto, los límites que presenta
la relación que tenemos, en el mejor de los casos aceptándolos
o tratando de aceptarlos.
Pese a que entre dos personas los pensamientos puedan ser

contradictorios, el respeto permite que de todas formas se
pueda construir algún tipo de relación, tal es el caso de
quienes, luego de un romance, se convierten en amigos, o de
quienes son enemigos en el campo político, puedan salir juntos
a ver el fútbol.
Una forma positiva de pensar, es saber que cada persona tiene

algo en común con nosotros, descubrir qué cosa es la que nos
puede unir a cada persona que contactemos, nos hará mucho
más sociables y exitosos en nuestra vida cotidiana.
Respetar el pensamiento ajeno no significa aceptación, es más

bien, entendernos como seres con experiencias distintas y con
quienes podemos crear vínculos, sin juzgarlas sólo por sus
pensamientos, sino también por sus sentimientos, estilo de
vida, etc.
Cuando nos percatamos que nuestros pensamientos son

valiosos, que son parte integrante de nuestra personalidad y
autoestima, sabiendo que son producto de nuestra experiencia
propia de vida y que nos identifican de las demás personas,
estaremos listos a respetar el pensamiento de los demás.
RESPETO A LOS SENTIMIENTOS Y EMOCIONES
Sea que estemos acostumbrados a aceptar nuestros

sentimientos o a avergonzarnos de ellos, cabe entender que
cada persona expresa de forma distinta sus sentimientos y
emociones, o simplemente no los expresan, nadie percibe la
vida de la misma manera.
En general, si podemos aceptar nuestras propias emociones

como normales, no habrá problema alguno en aceptar las de
los demás, pero hoy en día, los mensajes externos de familia y
sociedad, hacen creer que sonreír es la única alternativa de
vida, el que llora y expresa sufrimiento es una persona anormal
y rechazada socialmente.
Más fuerte todavía es la enseñanza machista en que los

hombres no tienen derecho a expresar emociones,
haciéndonos reprimidos afectivos y extremadamente
razonadores, incluso en lo que a sentimientos se refiere.
RESPETO A LA ESPIRITUALIDAD
Cada persona tiene una conciencia diferente respecto a la parte

intangible de nuestro ser, a aquel concepto que en última
instancia, es donde todos deberíamos llegar para realizarnos
como humanos.
Es un elemento tan importante en las personas, pero al mismo

tiempo tan ignorado, como los parámetros de valoración entre
las personas.
La espiritualidad, sin ahondar en el tema, es la valoración que

tenemos hacia nuestra existencia y a la de los demás seres, una
valoración que nos permitirá aceptar en su real dimensión, el
funcionamiento del universo.
Pese a que este aspecto parecería algo obvio, es algo que en

nuestros días no lo valoramos como parte de una persona y
que incluir esto en nuestra percepción, nos facilitará la
interrelación con los demás.
Percatarnos de este aspecto nos permite ampliar la visión hacia

las personas, y esto nos facilitará para entender que todos
estamos unidos y entrelazados de una u otra forma.
Respeto es comprender y preocuparnos para que cada persona

crezca como es, con sus dotes propias y no como los demás
quieren.
La fórmula para una relación sana será… Respeto más

comunicación. Si saltamos este paso, sería como manejar un
automóvil sin frenos, tarde o temprano chocará.
LA LIBERTAD
La mayoría de las luchas sociales en el transcurso de la historia,

fueron para conseguir libertad y creo que lo seguirán siendo de
una u otra forma.
En la pareja tiene otras connotaciones, como el espacio

personal y la independencia, comenzando por el primer
elemento, el espacio es un recurso tan indispensable para la
pareja, como lo es el agua para los peces, es el camino por el
cual uno conduce sus intereses personales, respetando el
camino de los demás y entendiendo que este camino no
interfiere en el éxito de una relación amorosa.
Por lo que si aún no delimitamos el camino de nuestra vida, lo

debemos ir construyendo paralelamente al de nuestra relación,
ya que si nuestro único camino está basado en otra persona, tal
vez podamos inferir en su espacio personal; debemos entender
que el hecho de que cada persona tenga un conjunto de
actividades importantes en su vida, no significa que ellas sean
más importantes que nosotros en la relación de pareja; a una
persona lo puede resentir que su pareja se dedique
apasionadamente a sus estudios, a la música, al deporte o a su
trabajo, pero tal vez sea la oportunidad para buscar actividades
complementarias que enriquezcan a esa persona y encuentre

su propio camino, sin que uno interfiera en el camino del otro.
Difícilmente la felicidad de una persona será otra persona, uno

primero es feliz y puede compartir esa felicidad con alguien
más; para ilustrar mejor, diría que uno tiene un camino en la
vida, la misión por la cual existe y ese camino, se lo puede
transitar en compañía de la pareja, obviamente, tomando en
cuenta que ella tiene un camino propio, lo ideal es que sean
caminos paralelos… para ir de la mano los dos.
Pensar que la felicidad está en encontrar una pareja, nos crea

una dependencia tan fuerte hacia el objetivo de crear una
relación, que perdemos de vista las innumerables formas en
que una persona puede realizarse y ser feliz; ya que si alguien
no encuentra la persona adecuada, no tiene porque ser infeliz y
tan cierto es esto, que hoy en día, son pocos los países donde
la gente se compromete y convive en pareja cuando es muy
joven. En general, las personas están tratando de asumir un
compromiso cuando ya empezaron a reconocer su propio
camino, es positivo decidir recorrer un camino con una persona
que no interrumpa el propio.
Es mejor tener una relación informal que nos guste, a un

compromiso que no nos guste; es decir, más práctica es la
persona que reconoce la posibilidad de estar sin pareja, que
una persona que por no permitirse estar sola, se involucra
incluso con alguien que no le conviene y que no le ayudará a

crecer como persona.
Hoy los tiempos son diferentes y se tiene que aceptar de mejor

manera a un numeroso grupo de personas solteras y no
necesariamente solos, que se encuentran en todas las
sociedades actuales y que como mérito tienen no aceptar
compromisos disfuncionales como forma única de vida; sino,
que decidieron por sí mismos, adecuar su estilo de vida a sus
propias necesidades.
Cuando nos reconozcamos como individuos independientes

con objetivos propios, sabremos que al compartir nuestro
tiempo con una persona, no deben truncarse nuestras
aspiraciones de vida.
Mantener una relación de pareja es una decisión, lo que quiere

decir… que de forma conciente y libre, tomamos la decisión de
contar en nuestra vida con otro ser humano y en el tipo de
relación que las dos personas acuerden, considerando que hoy
en día y por un sinnúmero de circunstancias sociales, como
horarios de trabajo, edad, profesión, etc., se hace más
complicado mantener un solo esquema de vida de pareja, lo
que automáticamente anula la posibilidad de dejar en manos
del destino nuestra vida, esta decisión implica el crecer y
conocerse a uno mismo y junto a nuestra pareja, se supone que
la conocimos y aceptamos como correcta para nosotros antes
de decidir; es decir, desde esa decisión todas las circunstancias
que se presenten deben ser resueltas por la pareja, si las

personas decidieron estar juntas, la aceptación mutua debe ser
total y aceptarnos con defectos y virtudes.
Ninguna persona está en capacidad de cambiar a otra, ninguna

persona puede dar lo que no tiene, sólo uno mismo puede
decidir cambiar o mejorar por propia decisión.
COMPROMISO DE POR VIDA
A pesar de que ninguna persona sabe lo que sucederá en el

futuro, todavía muchas parejas se unen bajo el criterio que sus
compromisos durarán para toda la vida, lo que en la práctica
vemos que no sucede, parecería que esta meta hoy en día es
inalcanzable, basándonos en las estadísticas.
Un compromiso asumido con intención de perdurar para toda

la vida, tendrá que tomar en cuenta, que como entrenamiento a
este largo trecho, habrá que irse preparando día a día de
manera inteligente, las dos personas, con predisposición a
crecer y aprender por cualquier camino, sean libros, guías
profesionales o espirituales, etc., ya que los inconvenientes que
se vayan presentando no se solucionarán sin el esfuerzo de las
dos personas.
Tomar esta decisión de tener una relación de por vida con otro
ser humano, es sublime y trascendente; de tal forma, que si
alguien toma esta decisión, asume un compromiso de vida, en
el que tiene como objetivo crecer como personas para

construir una relación fuerte y sana.
A diferencia de las parejas que se conocen por "amor a primera

vista", o las que se enamoran por simple atracción, o las que se
relacionan por obligación, la oportunidad de decidir nos hace
concientes de nuestros actos y de alguna manera este
sentimiento de libertad para escoger, garantizará la satisfacción
mutua de las personas y el camino de la vida será mucho más
liviano y lleno de amor.
COMPATIBILIDAD
La libertad permite que haya muchos tipos de parejas, algunas

basadas en simbiosis, tales como las personas que les gusta
dominar y otras que les gusta ser dominadas, unas son
posesivas y otras dependientes, en unas manda el hombre y en
otras la mujer; es decir, muchas parejas se sostienen en base a
concesiones, imposiciones, sometimiento y no en todos los
casos compatibilidad.
Compatibilidad, sería la mejor forma en que dos personas se

unen como pareja, sin que por esto ninguna de las dos deban
perder su identidad y autonomía, donde ambos se permitan
desarrollarse y apoyarse en la búsqueda por realizarse a
plenitud como personas y como resultado, trascender.
Las parejas del siglo XXI se caracterizarán por ser compatibles

más que complementarias, cada persona puede lograr estar
completa sin necesidad de una pareja, por lo tanto no siempre
debemos sentirnos carentes si estamos solos.
LA COMUNICACIÓN
D
efino a la comunicación como la forma particular del
hombre, para transmitir sentimientos, necesidades,
afectos y pensamientos.
La comunicación en el ser humano es gestual, corporal, verbal

y sonora, y nos permite acortar la distancia entre el amor
inherente de las personas y el como expresarlo mutuamente.
Dar y recibir es lo que da sentido a la comunicación.
En la pareja, ayuda en gran forma a cultivar relaciones, mientras

mejor nos comuniquemos, mayor será la satisfacción en el
intercambio de dar y recibir; se dan ideas, se dan
pensamientos, se dan opiniones, se da amor, se da objetos
materiales, se da tiempo y de la misma forma se recibe todo
esto, por lo tanto, en síntesis, comunicar es dar o recibir.
El secreto para mejorar la comunicación, está en entender que

siempre que incluimos el amor como parte de nuestras vidas,
siempre se facilitará el intercambio del dar y recibir.
Visualizar más allá de una palabra, más allá de un gesto, más

allá de una opinión y estar predispuestos a ver más alla de lo
que las personas pueden presentar, ya que la mayoría de las
personas se expresan como creen que supuestamente lo
deberían hacer, de acuerdo a costumbres, normas y hábitos; no
nos comunicamos desde lo que somos, esto hace que no nos
conozcamos verdaderamente en nuestra real dimensión, la
comunicación que hoy en día, utilizan las personas, no es ni un
diez por ciento, de lo eficiente que podría llegar a ser.
Toma en cuenta, que como te expreses es como pides que te

traten; haz la prueba, si vas a un lugar y te presentas
delicadamente gestual y verbalmente, difícilmente las
personas te responderán de mala manera, pero si sucede lo
contrario, es porque aquella persona está fuera de su equilibrio
y no está en capacidad de controlar sus emociones.
Cuando una persona aprende a comunicarse correctamente,

sabe que no hay ningún tema prohibido ni oculto, no hay
misterios que se deban guardar; la gente que tiene miedo a
expresarse sabe que no está en capacidad de hacerlo
adecuadamente y por lo tanto adopta una actitud secretista y
reservada sobre temas que generalmente competen a otros.
Tales como sexualidad, drogadicción, violencia, etc., creemos
que al no hablar de ciertos temas estamos protegidos, lo que
provoca que nos relacionemos con miedo y sigilosamente, para
que supuestamente no nos hagan daño; aquí, la importancia de
la comunicación, si supiéramos comunicarnos con afecto,
desintegraríamos todos los mitos, tabúes y obscurantismos

absurdos, que limitan la calidad de vida en las personas.
El tipo de comunicación al que nos vemos expuestos en esta

época, hace que nos olvidemos de llevar una comunicación
afectiva y utilizamos la violencia como forma habitual de
relacionarnos, utilizamos la ironía y el sarcasmo para justificar
nuestra incapacidad en decir las cosas directa y
espontáneamente.
¿Te preguntaste? Por qué es en la familia donde más conflicto

se genera al manejarse la comunicación, la respuesta es que es
en la familia donde se establecieron los roles sociales más
fuertes y por lo tanto, con reglas extremadamente rígidas, que
no nos permiten a los miembros, hijos o padres, expresarnos
libremente.
Recordemos que cuando niños no pensábamos negativamente

sobre ningún tema y expresarnos era lo más natural, los adultos
son quienes generaban la vergüenza y las prohibiciones y en
esta etapa es donde presentamos tantos bloqueos y posturas
rígidas que hasta llegan a enfermarnos físicamente, provoca
que los adultos lleven vidas contradictorias en lo que piensan y
lo que hacen.
Hoy en día, la opción de vida individual, sin compromisos de

pareja, de alguna forma promueve que las personas puedan
escoger ser auténticas consigo mismos, vivir de una manera
que no límite la expresividad existencial de cada sujeto; en sí, el

gran conflicto sería vivir doble, llevar una vida doble que
desequilibra la familia y la sociedad; más satisfactorio será que
cada persona tenga la alternativa de escoger su propio estilo de
vida, consecuente con lo que piensa y cree; así, evitamos que
se presente la infidelidad, la violencia, y la opresión en la
familia.
Hoy en día, una persona para acoplarse a la vida de adulto,

debe estar preparada para traicionar amigos, para ser infiel,
promiscuo, ser agresivo; y en el transcurso de esa vida, la
persona irá recibiendo mensajes para que tenga miedos y
límites en sus relaciones humanas.
La confusión entre lo que somos y lo que la realidad nos

presenta, nos confunde y nos reprime, nos hace sujetos
adaptados inconformes, y por lo tanto, nos rebelamos
justamente cuando hacemos algo contrario a nuestros
principios o valores.
Comunicar, significa canalizar flexiblemente la expresividad

humana de forma sutil y certera. Es la capacidad de
expresarnos adecuadamente, desarrollando la capacidad de
entender al prójimo para satisfacer sus necesidades. Es un
medio y es un fin también y se convierte en la más elevada
fórmula para vincular a los seres humanos.
Saber hablar y expresarnos es una cuestión muy compleja, aun

siendo una actividad que realizamos la mayor parte del día,
suele ser frecuente que las palabras sean mal entendidas. De
modo que prácticamente, es un arte comunicarse
adecuadamente.
La práctica de la palabra es uno de los conductos por el que

estamos acostumbrados a transmitir nuestros pensamientos y
sentimientos; todos nosotros, en ocasiones, nos bloqueamos y
no sabemos como expresarnos, peor… si tenemos
pensamientos y sentimientos que nos atormentan, como es
posible, que siempre la comunicación sea perfecta, si todo lo
que decimos no es ni para nosotros exactamente lo que
pensábamos. Deberíamos ser sabios en lenguaje, para al
menos aproximarnos al real sentido de nuestra expresión, por
suerte no es la única forma de comunicarnos, el amor es un
lenguaje que no tiene una dimensión cuantificable y que en
ciertos casos, puede ser lo único necesario para armonizar
nuestras relaciones.
COMUNICACIÓN AFECTIVA
Al involucrarnos física, psíquica y emocionalmente con una

persona, es más que razón suficiente, para entender que esa
persona es digna de nuestra consideración y respeto.
Por lo mismo y ante las desavenencias que se produzcan entre

las dos personas, es imperioso saber… que para no hacer de
nuestra comunicación algo ofensivo, deberemos en primer

lugar valorar la experiencia que compartimos con esa persona
y agradecerle de corazón. Pese a que, tal vez, no era una
persona adecuada para compartir nuestro tiempo.
La comunicación afectiva se basa en la premisa que toda

persona merece consideración, que nadie merece un trato
ofensivo y degradante y que en última instancia, dar un trato
cariñoso a nuestra pareja, nos ayudará a conciliar de mejor
forma las posiciones e intereses en conflicto o inclusive, para
tomar la decisión de romper una relación.
CONTEXTO DE COMUNICACIÓN
En lo posible, debemos procurar comunicarnos de forma

adecuada en el espacio y tiempo, donde las dos personas estén
dispuestas a escuchar y a expresarse, es inútil la comunicación
de uno, tienen que participar como mínimo dos, lo importante
es la actitud para lograr conciliar posiciones de forma
ordenada, inclusive ordenando el tema a tratar, para que se
cumpla el objetivo de llegar a acuerdos satisfactorios para las
personas.
En privado, es la primera forma de afrontar algún tema, si no se

puede solucionar algo de esta forma, buscar a un tercero
imparcial, puede servir.
Dependiendo de la compatibilidad, hay parejas que necesitan

hablar más o menos que otras, si hay más incompatibilidad,
habrá que comunicarse mucho más y con mejores técnicas
para proteger los límites y los espacios. Y no romper con el
respeto y afecto como base de un entendimiento; es decir,
establecer reglas de comunicación entre las personas.
LOS DETALLES
Nuestra inventiva puede hacer mucho más interesante el día a

día en la pareja. Y para que el detalle tome fuerza es, por lo
general, necesario que exista un deseo de dar y que no sea por
obligación o por simple compromiso, ya que la verdadera
motivación tiene que ver con el cariño o amor que se siente por
la otra persona.
Los detalles pretenden llegar a la otra persona y expresarle

certeramente, con un gesto original, los sentimientos que
provoca en nosotros.
El conocimiento que se tiene de la persona con la que estamos

compartiendo nuestro tiempo, es fundamental y más aún,
cuando de los detalles se trata, es muy común que éstos se
presenten en ocasiones calendarias, como la fecha de
cumpleaños, el día de san valentín, navidad, fin de año, cuando
la pareja cumpla un mes o un año de salir juntos, pero sin que
nos convirtamos en sujetos convencionales que lo hacemos
por compromiso u obligación; lo que ocurre es que en estas

fechas somos mucho más susceptibles y concientes.
Ya que sabemos que nuestra necesidad de recibir amor se

agudiza y pensamos mucho más en nosotros mismos; lo que
quiero expresarte, es que el contagio del amor es ilimitado y
una forma de desarrollar nuestra expresividad es con los
detalles, sean materiales o no, siempre habrá una formula
creativa para poder hacer sentir a alguien que se le toma en
cuenta aún, sin que esta persona lo esté requiriendo y aunque
esa persona no necesariamente deba ser nuestra pareja formal.
Para ilustrar de mejor manera el tema de los detalles, es

necesario tomar en cuenta que toda relación humana se puede
enriquecer con ellos. Como cuando los padres nos daban algo,
que sólo ellos entendían que necesitábamos o cuando un
padre, que no sabe cómo explicarle a su hijo la existencia de
papá Noel, lo que hace es pedirle que escriba una carta y
enviarla al cielo con un globo, para que su hijo sepa que el
deseo será cumplido.
El arte de expresar amor con detalles existió siempre; pero con

el tiempo y la tecnología, estos fueron evolucionando y los
típicos de pareja son la serenata, las flores, los chocolates, los
regalos en las fechas importantes, las cartas de amor, el dedicar
canciones, las declaraciones, etc.
Las reglas para expresar los detalles no existen, pero podemos

decir que todos los días son buenos para darlos, que el miedo
ha expresarlos es normal, pero la satisfacción posterior lo
puede justificar, se puede convertir en una adicción
interminable, lo que es muy saludable en el amor,
desarrollamos nuestro poder creativo y nos hacemos felices
dando y recibiendo.
La intención de dar es lo más importante del detalle y si éste

busca llegar a la parte más delicada y sutil de la otra persona,
será mucho más interesante. Porque significa que tomamos en
cuenta alguna particularidad de la persona.
El secreto para expresar eficazmente un detalle, es conocer a

nuestra pareja en todos los ámbitos, el detalle busca que
reconozcamos a la otra persona en su individualidad, hacerle
saber que valoramos sus características, cualidades y
personalidad.
Un detalle adecuado nos sirve para reafirmarnos como seres

de amor, para sentirnos valorados y queridos, por lo tanto
nunca están demás.
Cuando tienes algo bueno que dar, no lo pienses dos veces,

hazlo y deja que fluya el amor que llevas en tu interior, porque
el amor contagia y engendra mucho más amor en quienes lo
reciben.
Los detalles no buscan únicamente un resultado o ganancia, lo

importante es que fluyan nuestros sentimientos de amor. Los
detalles, en definitiva, son la forma más sencilla de dar y recibir
amor, permitir que fluyan nuestros sentimientos y dedicarlos a
las demás personas y a la pareja.
Como todo hábito, los detalles con el paso del tiempo se van
haciendo parte de nosotros y a la larga conseguimos ser
personas de amor, sin condición para con otras, los detalles
son un ejercicio diario y con el tiempo serán una costumbre tan
natural que conseguiremos como resultado que nuestra
presencia signifique impregnar amor en las otras personas,
como dice el dicho, hay que dar para recibir. Lo que quiere
decir que si invertimos en los detalles, pronto o
inmediatamente estaremos recibiendo en pago el amor de los
demás, espontáneamente y por contagio.
Para expresar un detalle, no hay momento más adecuado… que

siempre, hombres y mujeres deben hacerlo para enriquecer sus
relaciones y no solamente cuándo hay algún interés de por
medio.
LA FIDELIDAD
S
i en una relación de tipo formal nos proponemos
trabajar por la sinceridad, la transparencia y la
comunicación afectiva, pronto irán desapareciendo los
fantasmas que suelen aparecer, que asustan y destruyen, de lo
contrario viviremos en permanente zozobra, imaginando todas
las posibilidades, para que ocurra un rompimiento de pareja.
La fidelidad es una decisión de las personas que se involucran

en una relación de pareja, es especial de la pareja formal,
cuando convive en un mismo lugar y quien llega a ser infiel, lo
hace por decisión propia.
Una persona con personalidad sana, cuando ve que su relación

de pareja no funciona en ningún camino, decide terminar su
vínculo; una persona con personalidad disfuncional, es infiel
como un escape a su incapacidad de comunicarse.
En las sociedades actuales se cree que la capacidad de mentir,

fingir y traicionar significa ser más astutos e inteligentes. Nada
más alejado de la realidad, más valor tiene el ser auténtico,
sincero y leal a uno mismo y a los demás, ser congruentes
entre lo que sentimos, pensamos y hacemos, porque en última

instancia, solamente nos engañamos a nosotros mismos.
Es que un símbolo de éxito actualmente es no sólo un auto

deportivo, ropa de moda, dinero o fama, también la pareja es
parte de este concepto y debe ésta adecuarse a ciertas normas
sociales. Entonces la infidelidad, antes que ser una
desvalorización, se convirtió en un supuesto valor moderno,
que lleva consigo un significado negativo de actuar a la
defensiva ante la vida, creyendo que es una nueva moda de
relacionarnos, de auto destruirnos, sin ver que somos seres
irrepetibles, admirables y de energía, sensibles y delicados.
Somos seres que debemos procurar realizarnos espiritualmente

como meta máxima de la vida, la búsqueda de plenitud
personal también se enfoca en la pareja, aunque no lo sea todo
en la vida, es una parte importante de búsqueda de realización
personal y espiritual para muchas personas.
Muchas influencias recibimos del entorno, convirtiendo exitoso

al hombre que experimenta con muchas mujeres o a la mujer
que es más deseada, estos conceptos son aplicables en
personas con un desarrollo personal muy limitado.
Para que no te afecten estos conceptos de telenovela y no ser

parte de las estadísticas, entérate, desde ya, que estas modas
descritas son los ingredientes necesarios para llevar una vida
frustrante e infeliz de pareja. La fidelidad es la lealtad que se
tienen dos personas dentro de una relación sana, libre y

espontánea.
La fidelidad, no sólo incide en el hecho de mantenerse

involucrado físicamente con una sola persona, también incide
respecto a ser auténticos con nosotros mismos, respecto a la
relación que tenemos; aquella transparencia con que
manejamos nuestros sentimientos hacia nosotros mismos y
hacia los demás.
La fidelidad es un valor innato en personas sanas, que llegaron

al convencimiento de que el tipo de relación que decidieron
llevar, es tan valiosa que no se permitirían destruirla por la
influencia de la sociedad.
Sabernos merecedores de afecto y ser capaces de

desarrollarnos en plenitud en cualquier circunstancia, da la
seguridad necesaria a una persona para nunca permitirse
contrariar sus propios principios, ser consecuente con uno
mismo, vivir como pensamos es la medida en que nos
respetamos; si no llevamos una vida de acuerdo a lo que nos
manda nuestra conciencia, estamos siendo infieles a nosotros
mismos, ni que decir respecto a terceros.
La convicción que tenemos en cumplir nuestras metas y

objetivos personales apreciándolos, nos permiten entender que
ninguna persona debe interferir en que llevemos a cabo
nuestros proyectos de vida.
En general es infiel la persona que no tiene autoestima, que no

encontró un objetivo en la vida que le permita desarrollarse
como ser humano; por lo tanto, la responsabilidad de una
ruptura por infidelidad en la relación es suya y de nadie más,
aunque los efectos sean para los dos.
En nuestros días, en que todo se evalúa en base a los

resultados, podemos preguntarnos en que nos beneficia la
fidelidad, y la respuesta es, la fidelidad es algo que nos
beneficia en primera y última instancia a nosotros mismos; ser
fieles, no es algo que lo hacemos como premio a la conducta
de nuestra pareja, ya que de ser así, estamos a expensas de
que al mínimo error de ésta, dejemos de mantener este
compromiso de lealtad.
Mantenernos fieles no es algo que lo hacemos simplemente

porque la sociedad nos lo manda, es algo más importante que
esto, es el deseo de una persona por trascender su existencia
junto a otro ser humano, sentirnos capaces de lograr
conectarnos a otra persona con devoción y entrega, porque la
aceptamos como es y nos acepta como somos.
Inclusive, cuando mantenemos una relación de pareja con la

que no tenemos ningún compromiso, es viable construir una
relación fiel, siempre y cuando podamos comunicar a la otra
persona nuestras intenciones y nuestros pensamientos propios
sobre la relación.
Hoy en día, muchas personas son infieles en pareja por la

frustración producida porque no encuentran la felicidad
existencial; lógicamente, si creemos que nuestra felicidad la
encontraremos en otra persona, cuando no lo conseguimos,
seguiremos pensando que esa persona no era la correcta para
nosotros, y así sucesivamente seguiremos buscando otra y
otra.
En relaciones del tipo informal y sin compromiso donde no

existen ataduras, la fidelidad significa llevar una relación de
acuerdo a nuestras necesidades, o por último mantenernos
solos sin que esto signifique infelicidad.
Los miedos y prejuicios mentales nos provocan accidentes en

pareja, como enfermedades, embarazos, abortos, etc., las
personas podemos ser claras en nuestras necesidades y
procurarlas en cualquier relación, comunicarnos ayuda a
procurarnos experiencias sanas y positivas, aun si buscamos
formar una pareja porque nos sentimos solos, por eso es
importante reconocer este motivo y comunicarlo a la otra
persona.
A largo plazo, siempre será mejor que se digan las cosas como
son, en vez de construir relaciones de arena que se lleva el
viento, de inventar relaciones que no tienen bases fuertes, que
se sostienen en base a mentiras y fantasías, habrá que ser
sinceros y empezar a construir relaciones reales.
No es una decisión simple elegir establecer una relación, es una

decisión sumamente importante, con efectos que pueden
cambiar drásticamente nuestra vida.
FIDELIDAD SEXUAL
Definitivamente en una pareja estable de tipo formal, es un

requisito primario y fundamental para construir la relación.
Una persona que tenga claro el valor de la fidelidad como

forma de conocerse y amar a otra persona, sabe que es un
requisito indispensable para cumplir un proyecto de vida en
pareja, es parte de la decisión de tener pareja.
En las parejas informales, de igual manera se entiende que las

personas involucradas conocen el valor y la importancia del
contacto físico y por lo tanto serán fieles, además del respeto a
la salud y a la energía de nuestros cuerpos, entonces lo que
diferencia a una relación formal de una informal, es la decisión
de compromiso que hay en las primeras, acompañadas de la
permanente comunicación mutua entre las personas, no sólo
en lo físico, sino en el día a día.
En ambos tipos de expresiones de afecto y amor en pareja,

debe haber respeto. No vale más o menos ningún estilo de
vida, pero si vale nuestra capacidad de estimar lo que damos y
recibimos de y para otras personas.
LOS CELOS
Éste es uno de los elementos más nocivos en las relaciones de

pareja y demuestra ser el enemigo número uno de la libertad,
los celos se caracterizan por la necesidad de posesión, pero
como lo demuestran muchas parejas esto se puede sobrellevar,
es algo que con un manejo adecuado, se podrá controlar y
eliminar.
Los celos pueden llegar a ser muy peligrosos en hombres y

mujeres, llegándose a provocar conflictos y riñas, y hasta
divorcios y separaciones en las parejas.
La obsesión de los celos, nos puede llevar a desconfiar de

todos quienes rodean a nuestra pareja, algunos se convierten
en detectives, desarrollando el don de la suspicacia y viviendo
para perseguir a la otra persona, lo normal es que esto no
ocurra y si ocurre, es necesario que se quiera superar.
Los celos, además de ser un sentimiento de inseguridad de

cada persona, es el producto de la pérdida de valores como la
honestidad, la sinceridad, la humildad, la fe y autoestima.
Los celos son un problema que se debe aceptar y transformar,

la persona que los produce deberá entender que tiene que
corregirlos, aunque no necesariamente eliminarlos, de todas
formas, es mejor aceptarlos que negarlo, y si no los corregimos,
pueden afectar la individualidad que debería tener cada

persona, en la pareja.
El espacio vital de cada persona, se debe proteger sea cual

fuere el tipo de relación que llevemos, tomando en cuenta que
en los matrimonios todo es compartido por la convivencia o en
la unión libre, esto es muy necesario. Si invadimos este espacio,
provocamos un estado de defensiva en nuestra pareja, por lo
que se deben respetar sus decisiones, sus gustos e
inclinaciones.
La sexualidad es un factor importantísimo, puede generar

dependencia y obsesión en los celosos, puede ser un elemento
determinante para controlar o no la relación, en primer lugar
deberemos saber si reconocemos cuando una relación se basa
en el sexo; si lo reconocemos, es porque la relación que
llevamos tiene como base lo corporal y no debemos por esto
rechazarla, sino procurar evitar confusiones psicológicas y
afectivas, ya que suele ocurrir que en una de estas relaciones
basadas en lo sexual, las confundimos con relaciones donde
hay amor y compromiso; o sea, no hemos delimitado nuestros
espacios ni los intereses.
En estos casos, será preferible no involucrarse demasiado, con

alguien que por más gusto y atracción que nos cause, no debe
ser con quien establezcamos un vínculo tan cercano como es
una pareja formal, que se interrelaciona afectiva y
psicológicamente. Hay personas que consideran que si su
pareja no les cela, esta no los quiere. Habrá incluso quienes

provoquen situaciones de celos hacia la otra persona, esto es
muy peligroso, porque no todas las personas reaccionan igual y
esta actitud puede atentar contra el respeto.
Los celos, sin duda, son el talón de Aquiles de ciertas personas

que no se permiten desarrollar sus capacidades a plenitud con
su pareja, bloqueando su personalidad y expresividad y
sufriendo por la impotencia que esto genera en la relación.
En relaciones de tipo informal, los celos no deberían existir, ya

que la persona con quien estemos involucrados no tiene ningún
compromiso ni obligación de ningún tipo, excepto el respeto de
persona.
Para evitar sentirnos celosos, habrá que manejar una

comunicación adecuada, en la que no se invadan los espacios.
En relaciones formales, en gran medida los celos dependen de

una buena comunicación, pero en especial del trabajo
psicológico y emocional de la persona que los produce, luego
de la aceptación a los celos, ya que generalmente negamos
nuestros sentimientos y los disfrazamos con otros, o culpamos
a la pareja de lo que nosotros sentimos.
En una pareja formal, la persona que sepa que el otro tiene este
problema, deberá apoyarlo hasta que se supere y desaparezca
del todo, ya que es una más de las situaciones que se pueden
presentar en pareja y hoy en día, una de las causas más fuertes

que perjudican las relaciones; los celos, en definitiva, son un
ancla que nos detiene en nuestro crecimiento personal y por lo
tanto conocerlos, aceptarlos y manejarlos, es el camino más
corto para que no nos estorben.
LA CONFIANZA
A lo largo de la historia, la desconfianza generalizada, hizo que

el mundo adopte una actitud defensiva, armamentista y
guerrera, sin duda la primera y segunda guerra mundial, fueron
producto de la desconfianza entre razas, religiones, ejércitos,
etc., incluso la guerra fría fue una demostración de
desconfianza entre países.
Cuando se siente confianza en una persona, no se puede sentir

celos, entonces deberemos empezar a construir confianza en
nuestras relaciones de pareja.
Desarrollar confianza es algo que se debe trabajar con mucho

esfuerzo, lo importante en realidad, es promover nuestra
confianza con relación a las demás personas, que son con
quienes permanentemente nos desenvolvemos y
comunicamos, es un trabajo que se va cristalizando en el
tiempo con resultados muy agradables.
La mayoría de los prejuicios y actitudes que adoptamos, son

producto de la desconfianza hacia nosotros en primera
instancia y luego hacia los demás.
La desconfianza surge cuando experimentamos algo en contra

de nuestros principios o valores, algo que nos produjo
desencanto, muchos automáticamente se bloquean
predisponiendose para evitar que a futuro, les vuelva a suceder
algo similar, adoptamos una actitud defensiva ante los demás.
La actitud que favorecerá para que fluya nuestro amor por los
demás, haciéndonos libres, es la confianza en las personas,
porque entender a las personas como seres con debilidades, es
comprender que no necesariamente son malos o buenos, sino
que a veces, somos inconcientes de nuestras emociones y
sentimientos, y por lo tanto, en ocasiones nos comunicamos de
manera no funcional.
La confianza nos permite percibir las cosas positivas y

negativas de una persona, de manera objetiva y sin prejuicios,
sin catalogar y sin estereotipar, procurando captar y observar la
mayor cantidad de detalles que expresa alguien, tratando en
principio de suponer que esa persona tiene los mejores deseos
para con nosotros, abierta y sinceramente.
Más fácil es visualizar y encontrar las debilidades de una

persona, cuando desde el comienzo nos disponemos de forma
positiva a confiar en ella; y al contrario, si iniciamos nuestras
relaciones bajo el principio de que las personas no son
confiables, difícilmente veremos lo bueno en ellas.
Entonces la desconfianza es sinónimo de ceguera, o por lo

menos miopía, de una realidad gigante que conlleva la
existencia de cada ser humano.
A veces creemos que son confiables sólo quienes tienen

pensamientos parecidos a nosotros, o una vestimenta parecida,
o gustos parecidos, o un tipo de vida parecido, por lo cual con
personas diferentes a nosotros no nos permitimos
comunicarnos y automáticamente generamos desconfianza,
tenemos miedo a lo desconocido.
Desconfiar nos pone en un plano tan vulnerable, que cuando

realmente estemos en peligro, no lo podremos reconocer por
haber bloqueado nuestra sana intuición de creer en los demás
y depositar nuestra confianza.
En parejas de tipo formal, la confianza produce seguridad, nos

hace sentir que nuestra pareja sabe casi de manera exacta, las
mejores maneras de cuidar del compromiso.
Ya que se construyó en base a un mutuo proceso de

conocimiento personal, donde aprendimos qué tipo de valores
tiene la persona en los cuales fundamentaremos nuestra
confianza; es decir, la confianza no llega automáticamente, sino
que es producto de la comunicación mantenida entre las
personas, para percatarnos mutuamente de la forma de pensar,
de sentir y de vivir de alguien, con lo que luego de este
proceso, tendremos una visión que nos sustente paz interior,
para estar seguros que la actuación de una persona es en

general acertada y produce bienestar a los dos.
La confianza verdadera se desarrolla entre las personas cuando

comparten su tiempo de diversas formas y en muchos ámbitos,
la persona en soledad, en público, en lo laboral, en lo
académico, en lo deportivo, en lo físico, en las costumbres, en
la espiritualidad, en lo moral, en lo cultural y en lo económico; o
sea, conocer a una persona en sus múltiples facetas, nos
permitirá ir construyendo una confiable percepción, de todo lo
que vivamos a los largo de la relación, atender estos aspectos
sirve además, para manejar una comunicación más respetuosa
y afectiva.
En relaciones de tipo informal, esporádicas o temporales, se

puede conocer a la persona a fondo y confiar en ella, la
confianza en las personas con quienes llevamos este tipo de
relación puede ser sencilla, tomando en cuenta que no nos
involucramos totalmente con todos los aspectos de esa
persona, entonces lo mínimo que aspiraremos será poder
contar con la confianza, para acceder a una relación de este
tipo, al menos si uno de los dos es sincero, se puede concretar
la relación de forma sana y sin mentiras.
EL SEXO
E
ste tema involucra concepciones morales, sociales y
religiosas, que irán determinando gran parte de la
conducta de las personas en cada país.
El contacto físico demuestra la expresividad de nuestros

cuerpos, el instinto sexual es una cuestión con la que nacimos,
pero que con los años irá desarrollándose de diferente forma
en cada persona de acuerdo a la influencia familiares y
culturales que recibamos.
Ya en el transcurso de una relación de pareja, el sexo puede

presentarse en varios momentos, puede ser como
manifestación inicial del conocimiento de pareja, lo que en
cierta forma contradice los esquemas generales del
enamoramiento; es decir, si conocemos a una persona que nos
ha atraído físicamente, sería ilógico que en un principio esta
atracción signifique el éxito en la interacción de pareja; lo que
ocurre es que las dos personas tuvieron una química de
atracción espontánea e instintiva, que si llega a expresarse, no
quiere decir que posteriormente nos impida conocer a la
persona y darnos cuenta si esa es la que nos conviene o no
para establecer un vínculo mayor; pero si nos ponemos a
evaluar la mentalidad de cada persona, entramos en un

problema muy complejo por el que discutiremos largo tiempo,
el hecho… que si es mejor o peor iniciar un acercamiento de
pareja con el sexo.
Si mantenemos una relación de este tipo, en la que el

conocimiento e interés mutuo de construir una pareja
prevalece, el sexo será una manifestación implícita y natural, no
será una preocupación en ninguno de los dos, por el momento
en que se presente dentro de una relación.
Estar dentro de una relación de pareja formal, significa

entonces varias cosas; compartir los problemas, las
debilidades, los logros, el entorno personal, sean los amigos, la
familia, el trabajo, los estudios, las caricias, las enfermedades,
los hijos, etc.
Quiero entonces decir que cada relación debe ubicarse en la

dimensión en la que se encuentra y no mas allá, no todas las
relaciones deben ir necesariamente encaminadas a hacer una
familia y a tener hijos.
Es nuestra inteligencia y nuestra naturaleza humana, la que nos

lleva a sentir amor por el prójimo. Es lo más sublime y lo que
nos debería llenar por completo, pero sucede que como
vivimos en un mundo donde los resultados superficiales son un
objetivo, distorsionamos nuestra naturaleza, queremos que las
personas sean nuestra posesión personal; o sea, que cuando no
logramos esto nos sentimos fracasados y nos dejamos

desmoralizar.
Nos sentimos rechazados porque dejamos que nuestra

expresión de amor dependa de los demás en vez de ser
nosotros mismo los que tomemos la iniciativa de amar sin
esperar de los demás.
POSESIVIDAD
Que pasa si observamos un rosal con varias flores, y de ellas

hay una que sobresale de las demás, con más color y tamaño,
la mayoría quisiera cortarla y llevársela, aún sabiendo que se
morirá más rápido y nadie más la podrá ver; que vas a hacer si
se marchita, no vas a sentirte bien porque no dejaste que viva
por más tiempo; lo que te quiero decir, es que si dejamos fluir
el amor naturalmente, porque lo estamos alimentando, de igual
forma, cuando una persona te atrae le puedes decir todo lo que
sientes, de una manera muy libre y sin que debas esperar
respuesta; por ejemplo, escribirle una carta en la que no le
digas tus intenciones de poseerla, sino que te causa alegría
verla y despierta tus mejores sentimientos de cariño, o si te has
decidido a declarar ese amor con una propuesta de unión,
debes saber que sea afirmativa o no la respuesta, no tiene
porque desaparecer ese sentimiento inicial de afecto sincero y
en caso que formes una pareja, deberás entender que ambos
son libres.
El sexo no solo debe ser el elemental contacto de los cuerpos,

debe ser la íntima conexión entre dos personas con
pensamiento, emociones y espíritu, para evitar el estado de
vacío que se suele producir, cuando se mantienen relaciones
con otra persona en lo físico y nada más, haciéndonos sentir
más solos que antes.
Hoy el sexo es un producto más de consumo masivo y

adquirirlo, incluso pagando por él, hace que se pierda el sentido
de unidad entre los seres humanos.
Es claro que mantenemos relaciones sexuales no sólo con fines

reproductivos, el placer también es un objetivo por el cual
algunas personas utilizan la sexualidad como un desahogo a las
angustias, al stress, a la neurosis y a la paranoia.
Tanto se ha manipulado el tema del sexo, que hoy en día, es

difícil decir que es lo normal en el sexo, pero el fin que se busca
es que el sexo sea provechoso en nuestro equilibrio emocional,
psicológico, físico y espiritual, por esto el objetivo de la
sexualidad sana, será brindar amor a otra persona de forma
conciente y adecuada.
Las manifestaciones que encontramos, como el fetichismo,

sadomasoquismo, pornografía, etc., hacen del sexo un
producto aún misterioso, del cual opina todo el mundo,
políticos, religiosos, médicos, abogados, deportistas, etc., lo
malo de esto, es que no se desarrolló el tema en un ámbito
humano científico, donde se haga una sana diferenciación
entre la sexualidad netamente instintiva y la sexualidad emotiva

y espiritual.
Aunque pareciera que todos dominamos el tema, es una

cuestión que aún no se desarrolló con prolijidad en la actual
sociedad, debemos empezar a educarnos, a informarnos
abiertamente, rompiendo con los mitos y dogmas sobre este
tema.
Pensando que los adultos ya sabemos de la problemática

sexual, nos olvidamos que fuimos adolescentes con dudas al
respecto, habiendo tenido cada uno de nosotros, que aprender
del tema en las calles, hoy en día, la mayor tecnología permite
hacerlo por Internet, en un chat, etc., pero en realidad hay un
vacío cultural no asumido por quienes tienen la responsabilidad
de educarnos sobre esto.
Tan importante es el tema, que puede inclusive incidir

decisivamente en nuestro bienestar personal o el de una
sociedad entera.
Las personas buscamos compartir nuestra afectividad física

con alguien que nos atrae y eso es muy satisfactorio, ya que
hace que muchas personas que no quieren llegar a una relación
con mayores responsabilidades y compromisos, asuma
relaciones de tipo informal de acuerdo a sus necesidades
emocionales y espirituales.
Es importante que quienes se vean inmersos en relaciones

informales, tengan presentes los límites, para evitar confundir el
tipo de relación que llevan, mantener la distancia entre una
relación sencilla y un compromiso.
La energía que se intercambia en el sexo, es tan amplia que

permite desarrollar mucho más los sentimientos, emociones y
deseos, de los que realmente nos imaginamos, además del
placer físico, no es fácil conocer la dimensión y la fuerza que
tiene el involucrarnos físicamente con una persona, las
personas que por propia decisión llevan una relación informal,
saben que puede llegar a ser algo muy importante compartir
con una persona, y por lo tanto, es importante que ambos lo
tengan presente, para no confundir las experiencias con los
roles de la pareja formal.
Tan serio es involucrarse físicamente, que en cierta forma para

prevenir embarazos no deseados o enfermedades, las personas
deben expresarse y comunicarse al respecto
permanentemente, cualquier cosa que imposibilite una buena
comunicación, puede tener repercusiones a futuro.
Sin duda, hoy en día suena ridículo que se prohíban los

métodos anticonceptivos y que el sexo siga siendo un tema
prohibido, cuando un alto porcentaje de los problemas sociales
y económicos, derivan de una falta de información en este
tema.
Al ser el sexo parte de la naturaleza humana y expresión

afectiva de nuestro amor al prójimo, canalizado por nuestros
cuerpos, es el impulso espontáneo que fue reglamentado por la
sociedad y esto nos ha creado conflictos, miedos y prejuicios
que alteran nuestra espontánea expresividad y libertad.
Dificultándose la construcción de parejas sanas y funcionales.
Ser concientes de la sexualidad es sabernos libres, es saber que

el sexo produce satisfacción y auto aceptación, no tiene culpa,
significa estar concientes que con una buena comunicación, la
expresión sexual será un ciento por ciento segura, sin
enfermedades y sin embarazos no deseados, sin
arrepentimiento y sin fustración.
Entender que el sexo es la forma en que se llega a tener hijos y,

por lo tanto, las dos personas deben aprender a concienciar lo
que esto significa, y más que un concepto biológico, es
necesario entender que concebir no sólo es la fecundación que
hace un espermatozoide a un óvulo, es mucho más que eso, es
reproducir la vida, como canales que nos permiten seguir
expresando amor por medio de nuestra descendencia, es dar
significado a la existencia que cada persona tiene en otra, es
permanencia en este planeta.
En las parejas donde existe igualdad, ambas personas están

concientes de la responsabilidad que significa tener un hijo y,
por lo tanto, deberán de preferencia planificar el momento para
tenerlos, preparándose inteligentemente para educar a otra
persona y saber que ambos deberán participar en la crianza de

esa nueva persona.
Es importante recalcar, que no toda pareja tiene que tener hijos

como única forma de relacionarnos entre hombres y mujeres.
En la pareja informal, hay conflictos cuando en cada persona se

presenta un interés distinto de la otra, uno queriendo una
relación formal y otro, buscando una informal, esto provocará
que las personas choquen y confundan los intereses propios,
ya que al verse atraídos por la otra persona, se puede perder la
perspectiva personal sobre lo que cada uno busca.
Las personas, en la búsqueda de acomodar sus afectos,

pretenden que la otra se acople a sus necesidades, lo que
nunca ocurrirá, ya que tarde o temprano los intereses propios
de cada uno prevalecerán.
Cuando la sexualidad nos brinda placer, tratamos de confundir

esa expresión hacia una relación de pareja para procurar cuidar
esa fuente de satisfacción, inclusive cambiando nuestras
convicciones personales y haciendo cosas con las que no
estamos de acuerdo.
En relaciones formales, donde el interés mutuo de construir una

pareja prevalece al sexo, será una manifestación implícita,
espontánea y natural, parte del conocimiento mutuo de ambos.
Cuando la pareja no tiene interferencias por concepciones de

tipo moral, no es aceptable que se regule o se determine un
momento específico de la relación para expresar la sexualidad,
esto no determina absolutamente nada en quienes buscan una
pareja estable y formal; el orden de los factores no altera el
producto.
Si en las creencias o valores de alguien, se encuentran

restricciones o límites a la sexualidad, corresponde a una
problemática que deberá enfrentar la pareja, pero sobre todo
quien mantenga los prejuicios pondrá en riesgo la relación,
porque bloquea la expresividad mutua, y sera necesario buscar
ayuda.
A diferencia de las relaciones informales, la problemática

sexual que se da en la pareja formal se resuelve entre las dos
personas, ya que influye directamente en el compromiso
cualquier situación física o psicológica respecto al sexo
compete a ambos.
Tan importante es la sexualidad en las personas, que por evitar

darle la importancia que se merece, muchas personas optan
por llevar en silencio, generándose conflictos, rompimientos,
dudas o prejuicios.
Es decir .... al no estar preparados para ir descubriendo el

potencial saludable que nos brinda el sexo, nos quedamos
estancados y a veces buscamos otra persona que pueda suplir
nuestra confusión, por lo que en la práctica, las personas

infieles ni siquiera saben porque lo son, creyendo que es por
culpa de sus parejas, lo cierto es que no pueden entender
concientemente, el significado de la sexualidad, como el más
elevado nivel de expresividad física, psicológica y espiritual,
entre las personas.
Cuando dos personas tienen claro que dar y recibir funciona

perfectamente en el amor y en la sexualidad, con el tiempo irán
desarrollando su vínculo con la otra persona y elevando su
conciencia, hará que potenciemos nuestra experiencia sexual y,
difícilmente una persona que logró esto, estará dispuesta a
intercambiar su energía con cualquier otra.
En general, este proceso de descubrimiento sexual y espiritual

toma tiempo y la pareja deberá ser responsable de irse
preparando, para acceder a estados más elevados de
conciencia.
La falta de información y la distorsión hizo del sexo un producto

de consumo masivo como símbolo de éxito, lo que las
personas no se dieron cuenta, es que hemos comercializado al
ser humano bajo la palabra sexo, se da valor a la supuesta
"belleza externa", inhibiéndonos de lograr mejorar la calidad de
vida de cada uno, por buscar símbolos vanales y carentes de
conciencia.
De esta forma, la persona se siente satisfecha cuando consume

el producto "personas", inclusive la satisfacción mayor se logra
por el resultado de poseer a alguien y no por comunicarnos con
alguien, se utiliza por lo tanto a la sexualidad como una
descarga física y psicológica de una persona sobre otra.
La prostitución es un ejemplo de cómo las personas se han

convertido en productos, el hombre o la mujer, hoy en día,
utilizan la prostitución basados en la ilusión de adquirir el
producto que supuestamente representa el objetivo que la
publicidad y la moda disponen, es esta una deformación más
que tiene la sexualidad en la actualidad.
La violación, el sexo con animales, la pedofília, son el resultado

de la falta de conciencia sobre la finalidad sexual.
El reto de cada persona está en descubrir a la sexualidad como

algo grandioso y sublime, totalmente sano cuando la
expresamos con amor.
TIEMPO DE CALIDAD
Q
uien no sintió que la rutina le empieza a agobiar, que
las llamadas telefónicas no son sino un momento de
inseguridad por las que uno se siente obligado a
mantener el contacto, por miedo a que la otra persona se sienta
mal, ese contacto muchas veces pierde el sentido, ya que cada
oportunidad de contacto con nuestras parejas debería ser
intenso, es por esto que es tan necesario que tengamos la
suficiente imaginación para inventar toda una agenda de
actividades, que nos permita compartir con esa persona, el
tiempo de calidad que tengamos en común.
La mayoría de las personas nos dejamos llevar por hábitos, que

a la corta o a la larga, nos afectan y no le dan sentido a nuestras
relaciones, el tiempo libre es la mejor forma de organizar un
contacto fructífero para conocernos mutuamente y disfrutar de
los momentos en pareja, con esto evitamos pensar que el sexo
es la única actividad que nos puede generar placer,
definitivamente, la falta de inventiva es el motivo por el cual no
desarrollemos nuestras capacidades para descubrir
experiencias diferentes a las que vivimos en el pasado.
Es a veces muy difícil poder concentrarse en el tiempo libre.
Por lo que en algún momento de tranquilidad, recomiendo que
tomes un papel o una agenda y escribas todo un calendario de

actividades que quisieras realizar, estés o no con pareja, ya que
este cronograma ayudará a que sirva como una guía para
inventar un estilo de vida lleno de aventuras y experiencias
originales; por ejemplo, dedicarse a viajar cada semana fuera
de la ciudad, hacer deporte, leer juntos, pintar, armar
rompecabezas, hoy en día los medios de comunicación, no nos
permiten ser muy originales, tenemos que tener dinero para
hacer lo mismo de siempre y nada más, el típico cine o la típica
pizza, nos hacen perder nuestro genio inventivo.
ACTIVIDADES DE
CRECIMIENTO
H
e tocado hasta aquí, algunos aspectos de la
problemática que se vive en el entorno afectivo y
relacional de las personas actualmente, no es mi
intención dejar hechas las observaciones sin poder contribuir,
de alguna manera, al mejoramiento de la calidad de vida de las
personas.
Aunque parece que en estos momentos nos damos cuenta que

el ser humano, con la educación que adquiere, con los sistemas
de formación aplicados, aun no consiguió sentirse totalmente
realizado y feliz.
¿Será que los métodos de aprendizaje están fallando, o quienes

dirigen las sociedades no fueron correctamente capacitados?
Porque parece que los profesores enseñan a sus alumnos cosas
que no son útiles, los psicólogos se convirtieron en
diagnosticadores de enfermedades y algunas personas se han
convencido de que utilizar pastillas es la mejor alternativa.
Algo hace que las personas no potenciemos una mejor calidad

de vida, más feliz y sana.
Si entendimos que una de las causas del fracaso de las

relaciones de pareja, son los roles desiguales de hombres y
mujeres, por lo tanto quienes están interesados en mejorar su
calidad de vida tendrán, obligatoriamente, que modificar sus
conductas para llevar a la práctica una vida de pareja sana y
pacífica.
En la mayoría de las sociedades machistas de hoy, se

entorpece el crecimiento de las personas por los límites
impuestos, haciendonos sujetos incompletos que no
alcanzamos a desarrollarnos y peor a realizarse, llenos de
miedos e inseguridades, llenos de disfunciones no superadas.
Los supuestos roles de hombre y mujeres siguen hoy tan

presentes como antes, sólo que confusos y distorsionados,
antes la pareja funcionó bajo estrictas regulaciones diferentes
entre hombres y mujeres, y hoy nos damos cuenta que en los
países donde más fracasos de pareja existe, es donde los roles
están más confundidos; por lo tanto, la alternativa que surge a
todo este proceso de reunificación familiar en las sociedades,
es la igualdad absoluta entre hombres y mujeres, como
premisa obvia para eliminar diferencias innecesarias.
La confusión de roles es lo que determinó el fracaso de la

pareja, no hay culpables, sólo que el tránsito que estamos
viviendo es difícil, pero a futuro se prevé una mayor

comunicación entre las personas, gracias a eliminar los roles
entre hombres y mujeres, cooperando por lograr sociedades
más pacíficas, haciendo conciencia que, cada uno en su
espacio, es responsable del equilibrio de la familia, del planeta
y sus recursos.
Hasta ahora, encontrar respuestas a la problemática de pareja,

desde la perspectiva de la convivencia y de los roles sociales,
lo único que hizo es que nos alejemos más del equilibrio
perfecto, conocernos en nuestra real dimensión de seres
humanos nos eliminara fácilmente de este encierro y
problemática social.
Entender que los seres que habitamos este planeta nos

merecemos el respeto y consideraciones en igualdad de
condiciones, no en base a conceptos o categorías inventadas,
que nos dividen y discriminan a unos de otros.
Ante todo, las personas somos seres espirituales, producto del

amor del universo, hijos de Dios; luego somos seres del planeta
tierra, como lo son los árboles y los animales. Luego somos
hombres y mujeres, luego lo demás, en este orden, empezamos
a entender que somos iguales en esencia.
Cuando pensamos como iguales, podemos ponernos en lugar

de la otra persona, solucionando cualquier tipo de
inconveniente y perdonando de corazón cualquier situación, si
nos creemos diferentes nunca nos podemos poner en lugar del

otro y los problemas parecen un oscuro abismo sin solución.
Hay muchas formas de crecer como personas y como parejas,

entre las que puedo recomendar están las siguientes:
NUESTRO CUERPO
Créanlo o no, nuestro cuerpo es el único bien material que

poseemos en nuestra existencia; por lo tanto, debe ser el bien
que más cuidemos y respetemos, si nuestro cuerpo es
respetado, nos ayudará a mantener un mejor equilibrio mental
y emocional, día a día, el cuerpo está totalmente conectado con
la mente y las emociones por medio de la respiración, la
flexibilidad, la fuerza y la armonía.
La diferencia entre una persona que hace habitualmente

ejercicio y una que no, es que la primera siempre está más
predispuesta a enfrentar los problemas y los retos de la vida de
forma positiva, inclusive al mantenerse una persona sin toxinas,
esto le permite potenciar su salud y aumentar sus defensas.
Entonces, será útil tener uno o varios hábitos de cuidado del
cuerpo, tales como:
Hacer ejercicios como caminar, correr, trotar, escalar, gimnasia,

etc., también deportes como fútbol, tenis, etc., o rutinas tipo
yoga, taichi, etc., y si no, terapias como reiki, masajes, etc., más
una alimentación balanceada no excesiva.
NUESTRA MENTE
Nuestro cerebro, funciona en base a las influencias que recibe,

desde que nacemos vamos recibiendo información, la misma
que con los años debe ser revisada para eliminar aquella que
limita nuestro bienestar.
ELIMINAR LOS PENSAMIENTOS QUE NOS PERJUDICAN
Para cambiar los pensamientos que nos perjudican, hay que

empezar cambiando las ideas que los causaron, que hoy nos hacen
daño, muchos de estos hábitos fueron adquiridos por contagio
social. Así, por ejemplo, algunas personas utilizan a los celos como
una forma de llamar la atención de sus parejas. Lo que puede ser
útil en ciertos casos y en otros no, esta conducta se basa en la
hipótesis que el grado de valoración que nos brinda la pareja,
depende del cuidado y protección que nos presten, pese a que esa
conducta aparentemente parecería no ser dañina, con el transcurso
del tiempo, esto puede generar dependencia obsesiva, provocando
que en la pareja se desarrollen miedos e inseguridades innecesarias.
Lo negativo de este hábito, además del sufrimiento que puede

llegar a producir, influye, en que los miembros de la pareja se
convierten en prisioneros entre sí, coartándose la libertad de cada
uno para desarrollarse normalmente; para erradicar esto, habrá que
empezar a valorarse de mejor manera y valorar al otro, con una
perspectiva más profunda de lo que es una pareja.
Otro hábito muy típico, es comparar a las parejas presentes

con las anteriores o incluso compararlas con un ideal fantástico
que las personas acostumbran llevar en mente, este hábito
produce de igual manera un sentimiento de desvaloración de
uno o ambos miembros de la pareja.
Otro hábito típico que solemos utilizar, es ocultarnos en

generalizaciones ridículas, tales como: "Todos los hombres o
todas las mujeres son iguales", lo que nos inmoviliza y confunde
impidiéndonos comprender que cada relación será diferente,
que no se repite. Es algo que nos llena de prejuicios, por los que
seguramente actuaremos ciegos ante cualquier tipo de relación
personal que intentemos; generalizar significa teorizar un
hecho, conceptuar una situación sin que nos permitamos
vivenciar una circunstancia diferente a la preconcebida,
creyendo que por esto prevenimos un supuesto
acontecimiento.
La fórmula para superar esta costumbre, sería cambiar aquella

frase generalizadora, por una frase que permita que existan
excepciones a la regla, por ejemplo en vez de decir "todas las
mujeres son iguales" decir "no todas las mujeres son iguales",
quiere decir que poner duda sobre un juicio generalizador, nos
da la libertad de elegir una oportunidad diferente, que nos
permita experimentar algo nuevo y flexibilizar nuestra visión
sobre las cosas, las personas somos piedras angulares que todo
el tiempo nos estamos puliendo, hasta lograr algo que se
asemeje a nuestros pensamientos positivos y perfectos.
Una costumbre muy utilizada, es valorar a una persona desde

lo que esperamos de ella y no desde lo que la persona es; o
sea, evaluamos a los demás bajo la idea que hemos inventado
en nuestra mente de lo que debería ser una pareja, sin
permitirnos conocer a alguien tal cual es; así, muchas personas
han inventado en su imagen mental un prototipo de mujer o de
hombre perfecto, basándose en el ideal físico, estatura, peso,
color de piel, etc.
Por lo general, la mujer busca un hombre caballero, con

profesión, con dinero, con clase, con humor, y los hombres
piden una mujer dulce, de casa, decente, educada, profesional.
Entonces, ambos se concentran en sus ideas prefabricadas,

para escoger a una persona irreal, producto de la imaginación,
impidiendo que las personas aprendan a conocerse como son
y no como deberían ser. Esto provocó que cada vez más las
personas luchen por cumplir con esa ilusión de hombre y mujer
moderno, adecuado a la moda, lleno de inseguridades y
esclavo de sí mismo.
Por lo tanto, nos centramos en un objeto de adoración irreal,

que en algún momento desaparecerá ya que nunca existió
auténticamente.
Lo correcto será desarrollar la capacidad de conocer a una

persona, sin que nuestros juicios previos entorpezcan el
proceso de presentación mutua entre quienes se relacionan
como pareja, manteniéndonos flexibles y permeables a
conocer y aprender algo nuevo en cada persona que se

encuentre en nuestro camino.
Una causa importante de fracasos en pareja, es producto de

que ellas, cuando encuentran que la persona con la que
comparten su tiempo no se adecua a lo que su mente
construyó, generan un sentimiento de soledad y decepción.
Otro hábito que afecta a las personas y en la pareja, es culpar al

otro de los problemas, sin hacernos responsables de nuestras
fallas propias, es importante que recuerdes que en cada
relación de pareja, la responsabilidad del éxito o fracaso en ella,
es de mitad y mitad cada uno.
Si aceptamos que siempre tenemos la mitad de la

responsabilidad en las situaciones difíciles, no será tan
complicado solucionar los problemas, porque entre dos
personas es más fácil arreglarlos.
Un hábito también común que utilizan muchas personas, es el

exponer la privacidad de sus relaciones a terceras personas,
inclusive sobre la intimidad, ésta, además de una forma de
irrespeto a sí mismos, afecta a la relación, ya que permitimos
que otros intervengan en ella y muchas veces con voz y voto,
ante nuestra incapacidad de acudir a metodologías más
seguras de solución de conflictos, como libros o gente
especializada que nos solucione una cierta dificultad;
obviamente, si es que la pareja no pudo comunicarse para
arreglar algo, la última alternativa a la que debería acudir una

persona inteligente es a personas no calificadas para opinar
sobre su relación.
Otra causa importante de los fracasos de pareja, es porque

adoptamos el rol de parejas; es decir, perdemos nuestra
identidad autónoma y adoptamos la nueva personalidad de
pareja desde el inicio de una relación, lo que es ilógico
considerando que el tiempo es el factor determinante para
establecer si dos personas pueden ser una pareja sana, ya sea
del tipo formal o informal, porque dos personas hayan decidido
ser pareja, no significa que exista una pareja sana.
Es muy importante que las personas aprendamos a conocernos

como seres independientes en primer lugar, luego como pareja,
en este orden no perdemos nuestra autonomía pese a luego ser
pareja, es decir, debemos relacionarnos inicialmente como
personas y luego de construida esta experiencia, relacionarnos
como pareja.
Si te relacionas desde tu yo hombre, o desde tu yo mujer, estás

obligando al otro que se comunique desde su rol social de
acuerdo a su género.
Si empiezas a salir con alguien y desde el primer día la

catalogaste como "posible pareja". En esa persona, ya no
podrás ver sus verdaderas virtudes y defectos, empezaste una
relación con una ilusión irreal producida por tu mente.
Las relaciones humanas sanas son producto espontáneo y

casual, no se hacen por estrategia o conquista, es más bien un
reconocimiento natural y mutuo entre dos personas que se
conocieron de forma completa, incluyendo sus defectos para
aceptarse como una pareja.
No todas las parejas deben tener hijos, esto es una decisión que
se debe tomar en consenso mutuo y no debe ser un capricho,
debe esto ser un acto conciente y objetivo de las personas.
ELIMINAR MITOS
La pareja debe ser para toda la vida; lo cierto es que no toda

relación dura para siempre.
Hay que encontrar la media naranja o el amor de la vida. No es

seguro que encontremos a la persona que nos llene totalmente,
pero es importante saber que cualquier relación que
mantengamos merece todo el respeto y valoración, cualquier
persona que comparta nuestro tiempo nos da la oportunidad
de amar, toda persona se merece lo mejor de nosotros y
nosotros también lo merecemos. Ya que con cualquier pareja,
podemos construir relaciones significativas e importantes.
Los hombres son insensibles… tal vez cambie la forma de

comunicarse de los hombres pero no significa que sean
insensibles.
Los hombres deben ser caballeros… si eres una persona que

buscas relacionarte desde la igualdad, hay que entender que
cualquiera puede tomar la iniciativa en una relación, cualquiera
puede invitar, pagar, proponer al otro, hoy en día el hombre
también prefiere la igualdad.
Los hombres son fuertes… el concepto de fuerza no tiene un
parámetro que se pueda medir, es una idea imaginaria que se
tiene, ser fuerte o débil no significa nada, cuando nos
aceptamos, nos aceptamos con las debilidades también.
Los hombres deben ser seguros y exitosos… esto depende de

cada persona, no es algo que deba importar al momento de
escoger a una persona
Los hombres no lloran… lo que no quiere decir que no sientan ni

que no tengan emociones, por el rol social se reprimió las
emociones del hombre más que de la mujer.
Las mujeres deben ser dulces… aquello no depende del género,

el carácter es propio de cada persona.
La mujer es el sexo débil… la debilidad o fortaleza no es

característica de género, es una interpretación social de un rol.
La mujer necesita de un hombre… esto es una mentira, una

mujer que se perciba igual nunca se sentirá menos que un
hombre y peor dependiente.
La mujer debe estar en casa… posiblemente hayan muchas

mujeres más capaces que los hombres con quienes viven,
desperdiciando sus capacidades en casa.
Las mujeres son sensibles… esta definición está basada en el rol

maternal que se les dio a las mujeres.
La mujer obedece al hombre… y por qué no el hombre a la

mujer, si es con respeto y consideración, no hay problema.
NUESTRO EQUILIBRIO
Las personas, además de ser cuerpo y mente, somos espíritu y

por lo tanto estar conectados con nuestro entorno esencial, nos
permitirá mantener un equilibrio energético sano y fuerte.
Hay muchos recursos que sirven para desarrollar nuestra

conciencia espiritual, sin duda el cuidado físico y mental ayuda,
pero es muy importante entender que somos parte de la
naturaleza y por lo tanto, estar en contacto con ella es
imprescindible; entonces, recomiendo como terapia personal,
procurar la mayor cantidad de veces encontrarnos con lugares
llenos de verde, de ríos, lagos, el mar, montañas, cascadas,
valles, etc., estos espacios nos brindan salud automática, por el
solo hecho de verlos.
Hoy en día, es muy utilizada la meditación como parte del

desarrollo espiritual de las personas, creo que es una muy
buena forma de volver hacia nuestro centro, que se pierde por

los constantes mensajes sociales a los que estamos expuestos.
Si a pesar que a lo largo de este trabajo, se explicó los
beneficios de aprender a manejar nuestras relaciones de pareja
desde la igualdad, y hay quienes están convencidos o
convencidas de sus roles diferentes, lo sano será aceptarlo y
comunicarlo a quienes puedan convertirse en parejas, para que
desde el inicio las cosas sean claras, no tiene porque ser mala
una relación donde las personas interactúen desigualmente,
siempre y cuando se mantenga como base el respeto y la
consideración mutua, esto no impide, de ninguna manera, que
ambas puedan llevar un proceso de crecimiento juntas, pero
posiblemente sea un poco más lento y doloroso.
El proceso de readaptación social puede demorar, pero dar el

primer paso para desarrollar relaciones concientes y claras, es
decisión de cada uno; hoy tenemos las herramientas necesarias
para acceder a una mejor calidad de vida, sin tanta crisis
familiar y social, es elección de cada persona transformarse y
evolucionar.
"Nos pueden romper un brazo,
nos pueden romper una pierna,
incluso nos pueden romper el corazón,
pero nadie nos podra quitar la fuerza
para seguir amando".

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PAREJA

1ra. Edición Buenos Aires Noviembre 2006

©2007 Santiago Guzmán

Contacto con el autor: [email protected]

Impreso en Ecuador en el mes de Abril de 2007

SANTIAGO GUZMÁN LEÓN

Hay una disminución significativa de gente, que entre sus

Este trabajo hace hincapié en los factores culturales y sociales

Desde adolescentes empezamos a llevar una vida de pareja

Hemos ido experimentando relaciones afectivas, que son el

No recibimos la información suficiente para entender que la

Pese a que vemos la inaplicabilidad de esta forma de vida,

En la sociedad actual persiste el miedo a exponer sobre la mesa

Cuántas frustraciones y fracasos se evitarían, simplemente con

Este trabajo, considera al ser humano como un ser

Tal vez para muchos esta temática será algo sorpresiva e

Por paradójico que parezca, desde niños se nos enseñó a

Al hablar de pareja, me referiré a las relaciones donde

Para la explicación de ciertos temas, hago referencia a aquellas

Y por otro lado, están aquellas relaciones que tienen muchas

En el desarrollo de los temas, procuré dar respuesta para

En sí, la obra presentará una positiva visión de lo que hoy en día

verdaderamente felices y optar por la mejor alternativa para

Tan poca conciencia se hace hoy de nuestra expresividad

Este machismo malentendido, provocó que hombres y mujeres

El final del distanciamiento entre los géneros, deberá ser

Entender que somos iguales, pero que no desarrollamos

ampliar nuestras capacidades perceptivas, expresivas,

Quien no supera los conflictos y errores que vio en sus padres,

Los seres humanos, deberíamos aprender a vivir nuestros

Está en cada persona el hacerse responsable de buscar la

como embarazos no deseados, abortos, enfermedades y

Cada persona tiene en sus manos el camino hacia la felicidad y

En todo caso, creo que si nos damos cuenta de que la práctica

Aprendamos a hablar, para brindar amor con cada palabra,

Por eso, no creo que sea conveniente dejarnos manipular por la

Usemos a la tecnología sólo porque no hay otra forma de

Entonces… la sociedad de alguna manera nos induce a seguir un

Pero el manual de vida, en muchos quedó desactualizado,

Las personas deberíamos tener la capacidad de percatarnos de

Lo social es tan difícil de evitar y es una influencia tan fuerte

Pero hacer lo que sentimos, así porque sí, no es algo mágico ni

La presión generada por las costumbres sociales, provocó

Se puede conseguir la vida que uno quiere, si en realidad nos lo

La sociedad hizo que veamos a la pareja como una adquisición,

Somos seres que instintivamente buscamos agruparnos con

ni jerarquías, simplemente por el hecho de encontrarnos,

La sociedad actual desnaturaliza a las personas haciéndolas

Hoy en día, las personas nos hemos convertido en seres

Liberarnos nos permitirá expresarnos con amor, valorar a las

Nuestra vida no es lo que vemos en la televisión ni en las

Nos incomodamos con la presencia de otros. En los buses y en

Hoy en día se está perdiendo el contacto hasta en la familia y

Está haciéndose muy común que las personas, en muchos

Como reacción a esta situación o para empeorar la situación,

Creer que porque somos miembros de un club, de una secta o

A pesar de esto, el sentirnos solos puede ser producto de

Si queremos salir a algún lado y no está a mano algún amigo,

La soledad es el síntoma que nos permite concienciar lo valioso

La soledad es uno de los aspectos que más nos afecta en