Técnicas de Vendaje.1
Técnicas de Vendaje.1
Técnicas de Vendaje.1
Objetivos 5
contenido 6
Conclusión 12
Glosario de términos 13
Referencias bibliográficas 14
Introducción
El vendaje consiste en la aplicación de tiras de algodón u otro material sobre un segmento
corporal para distintos fines como la inmovilización o fijación de apósitos. Los vendajes, a
pesar de que en muchas ocasiones son realizados por profesionales como enfermeras o
fisioterapeutas, deben ser conocidos por todo traumatólogo.
Concepto.
Procedimiento o técnica consistente en envolver mediante vendas, gasas,
lienzos o materiales similares un miembro o región del cuerpo cubriendo
lesiones cutáneas e inmovilizando lesiones osteoarticulares con el objetivo
de aliviar el dolor y proporcionar el reposo necesario para favorecer la
cicatrización de los tejidos.
Objetivo.
Son muchas las situaciones por las que un vendaje está indicado, pueden
emplearse para proporcionar apoyo a un miembro, controlar la
inflamación, limitar el movimiento de una articulación, sostener otro
vendaje en posición (férulas), fijar apósitos en heridas.
Contenido:
Vendaje compresivo.
El vendaje compresivo lo utilizaremos para reducir o prevenir inflamación
después de un traumatismo, para proporcionar una inmovilización relativa
de un segmento corporal lesionado y para favorecer el retorno venoso.
Del mismo modo, podremos utilizarlo para ejercer presión sobre un punto
sangrante con el fin de cortar una hemorragia. Para ello, utilizaremos
vendas elásticas no adhesivas, adhesivas o cohesivas dependiendo del
grado de inmovilización que queramos proporcionar. Así, según el grado
de inmovilización y la durabilidad requerido las utilizaremos según el
siguiente orden (de menor a mayor grado): elástica no adhesiva, elástica
cohesiva y elástica adhesiva.
Procedimiento:
• Higiene de manos antes y después de cada vendaje.
• Impedir el contacto entre zonas dérmicas aislándolas con gasas.
• Proteger las prominencias óseas antes de vendarlas (venda de
algodón).
• Iniciar el vendaje sosteniendo el rollo de la venda en una mano y el
extremo inicial con la otra.
• No iniciar ni finalizar el vendaje directamente sobre una herida o un
área sobre la que sea posible que el paciente ejerza algún tipo de
presión.
• Vendar la parte distal a la proximal (de dedos a corazón).
• Vendar de manera uniforme y firme, cubriendo 2/3 del ancho de la
vuelta anterior. La tensión y la presión deberán mantenerse iguales
durante toto el proceso.
• En caso de colocar un apósito o férula, cubrirlo prolongando el
vendaje unos centímetros más en cada extremo.
• Dejar el extremo distal de la zona vendada libre para comprobar la
vascularización, movilidad y sensibilidad.
• Fijar el vendaje con esparadrapo.
Vendaje rígido.
Es el inmovilizador total de miembros fracturados. Su función es la de
proteger los huesos previamente tratados por fracturas, torceduras de
articulaciones y ligamentos. Su rigidez se basa en el yeso o escayola
impregnado en la venda que luego se solidifica. Provee de estabilidad total
a la posición durante el proceso de regeneración.
Materiales: Se empleará el vendaje impregnado de material de yeso.
Como preámbulo se utilizará un vendaje tubular que se colocará como
una media en el brazo o pierna, y la venda de algodón para el acolchado.
Procedimiento:
• Para el vendaje en la pierna de sitúa el tobillo en posición de 90
grados, empleando un vendaje tubular, para proteger la piel del
yeso.
• A continuación, se emplea un vendaje en 8 en el tobillo, con una
venda acolchada.
• Repetimos el proceso con vueltas en espiral a lo largo de la
extremidad, siempre desde la zona distal hacia la proximal, sin
ejercer presión.
• Luego se sumerge en agua el vendaje impregnado de material en
agua, esperar a que suelte todas las burbujitas y sacar para que
drene el exceso de agua.
• El tipo de vuelta será igual al vendaje acolchado. Empleando varias
capas en lo posible mientras vamos consolidando su forma con las
manos.
• Hay que moldear con cuidado la rodilla para evitar que queden
espacios vacíos.
• Cualquier flexión y ajuste en su forma se aconseja hacerlo antes de
que solidifique el material.
Vendaje circular.
Se realiza envolviendo un segmento a manera de anillo. Se utiliza para
sostener un apósito en una región cilíndrica del cuerpo (frente, miembros
superiores e inferiores) y para controlar un sangramiento.
Procedimiento:
Comenzaremos desenrollando la venda cubriendo la zona, de manera que
cada vuelta vaya cubriendo a la anterior por completo. Nunca se debe
iniciar ni terminar el vendaje sobre una lesión, hay que dejar un margen
de al menos 5 cm.
Vendaje espiral.
Se emplea una venda elástica o semi-elástica porque se puede adaptar a la
zona que se va a vendar, se utiliza para sujetar gasas, apósitos o férulas en
brazos, mano, muslo y piernas.
Procedimiento:
• Seleccione el tamaño y ancho de la venda, el de 6 pulgadas podría ser
lo mejor para los muslos adultos. (En niños y adultos más pequeños,
el ancho del vendaje será elegido en función del tamaño del niño).
• inicie el vendaje desde la parte más distal en dirección a la circulación
venosa, la parte superior del pie, justo debajo de los dedos de los
pies, coloque la punta de la venda en forma oblicua en relación con
el eje longitudinal del miembro y dé una vuelta, doble la parte
saliente de la punta sobre la venda y dé otra vuelta sobre ella para
sujetar la punta doblada.
• Envuelva sobre la parte superior del pie y alrededor de la parte
posterior (zona plantar) del pie. Esto asegurará el as del vendaje y
evitará que el vendaje suba por la pierna.
• Tire de la envoltura generando un as en diagonal, NO en ángulo recto
con la pierna.
• Envuelva el pie en diagonal, invirtiendo la dirección con cada giro.
Recuerda que las vueltas de la venda ascienden en espiral, de tal
manera, que cada vuelta cubra dos tercios de la vuelta anterior
• Siga envolviendo en un patrón entrecruzado, agregando la mayor
presión a medida que enrolla el pie, hacia el tobillo.
• Sigue envolviendo el muslo y asegura el extremo del as con un nudo,
esparadrapo o un gancho.
• Verifique los dedos de los pies para ver si son rosados y cálidos. No
debe haber entumecimiento ni hormigueo. Si los dedos de los pies se
vuelven más pálidos, fríos, entumecidos o hormiguean, el vendaje del
as puede estar demasiado apretado. Si detecta problemas retire y
vuelva a envolver el vendaje hasta aplicar la presión correcta sin
cortar la circulación.
Vendaje en 8.
Esta técnica se aplica en las articulaciones (codo, rodilla, tobillo, rodilla,
etc.). Útil para sujetar apósitos e inmovilizar.
Procedimiento:
• Colocar la rodilla en un ángulo cómodo para el paciente.
• Colocamos el vendaje de algodón para proteger la piel.
• Se entrecruza por detrás de la rodilla y se desciende para dar una
vuelta por debajo de la rodilla.
• Volvemos a entrecruzar por detrás de la rodilla de forma
alternativa.
• Se repiten los pasos las veces que sea necesario.
• Seguimos con la venda de crepé dando dos vueltas circulares por
encima de la rodilla.
• Repetimos los mismos pasos que con la venda de algodón.
• Al finalizar, sujetar con un esparadrapo.
Vendaje espiga.
Se usa para vendar partes cilíndricas del cuerpo que tienen circunferencia
variable, como la pierna y en ocasiones el antebrazo.
Procedimiento:
Se inicia con dos vueltas circulares. Después, por cada vuelta de venda hacia
arriba se hace otra hacia abajo, cubriendo en cada vuelta dos tercios de la
anterior. Se irá dibujando la forma de espiga.
Vendaje velepeau.
Es un vendaje que inmoviliza de forma completa toda la cintura escapular.
Las indicaciones más frecuentes son: Fractura de escápula, luxación gleno-
humeral, fractura del cuello humeral sin desplazamiento, esguince
acromio-clavicular (grado I), subluxación acromio-clavicular (grado II) y
algunas fracturas de húmero.
Procedimiento:
Se realiza en cuatro tiempos: