Gabriel García Márquez
Gabriel García Márquez
Gabriel García Márquez
(Aracataca, Colombia, 1927 - México D.F., 2014) Novelista colombiano, premio Nobel
de Literatura en 1982 y uno de los grandes maestros de la literatura universal. Gabriel
García Márquez fue la figura fundamental del llamado Boom de la literatura
hispanoamericana, fenómeno editorial que, en la década de 1960, dio proyección
mundial a las últimas hornadas de narradores del continente.
En todos ellos era palpable la superación del realismo y una renovación de las técnicas
narrativas que entroncaba con la novela europea y estadounidense de entreguerras
(Kafka, Joyce, Proust, Faulkner); García Márquez sumó a ello su portentosa fantasía y
sus insuperables dotes de narrador, patentes en la obra que representa la culminación
del realismo mágico: Cien años de soledad (1967).
Tras una temporada en París, Gabriel García Márquez se instaló en Barcelona en 1969,
donde entabló amistad con intelectuales españoles, como Carlos Barral, y
sudamericanos, como Mario Vargas Llosa. Su estancia allí fue decisiva para la
concreción de lo que se conoció como el Boom de la literatura hispanoamericana, que
supuso el descubrimiento internacional de los jóvenes y no tan jóvenes narradores del
continente: el peruano Mario Vargas Llosa, los argentinos Jorge Luis Borges, Ernesto
Sábato y Julio Cortázar, los cubanos José Lezama Lima y Guillermo Cabrera Infante, los
mexicanos Juan Rulfo y Carlos Fuentes y los uruguayos Juan Carlos Onetti y Mario
Benedetti, entre otros. En 1972 obtuvo el Premio Internacional de Novela Rómulo
Gallegos, y pocos años más tarde regresó a América Latina para residir
alternativamente en Cartagena de Indias y en Ciudad de México, debido sobre todo a
la inestabilidad política de su país.
Con anterioridad a Cien años de soledad, García Márquez había esbozado el mundo de
Macondo en novelas como La hojarasca (1955) y El coronel no tiene quien le
escriba (1961), y también en colecciones de relatos como Los funerales de la Mamá
Grande (1962). Después de Cien años su narrativa, despojada en mayor o menor media
de elementos fantásticos, mantuvo un altísimo nivel; es el caso de novelas como El
otoño del patriarca (1975), que somete a alucinante tratamiento el tema del dictador
hispanoamericano; Crónica de una muerte anunciada (1981), relato de un crimen de
honor basado en sucesos reales que sobresale por su perfección constructiva y ha sido
considerado su segunda obra maestra; y El amor en los tiempos del cólera (1985),
extraordinaria historia de un amor que, nacido en la adolescencia, no llega a
consumarse hasta 53 años después, ya en la vejez de los personajes.
Obras
Novelas
La hojarasca (1955)
El coronel no tiene quien le escriba (1961)
La mala hora (1962)
Cien años de soledad (1967)
El otoño del patriarca (1975)
Crónica de una muerte anunciada (1981)
El amor en los tiempos del cólera (1985)
El general en su laberinto (1989)
Del amor y otros demonios (1994)
Memoria de mis putas tristes (2004)
Cuentos
Inspirado por un sueño durante su travesía en la selva, José Arcadio Buendía decide
quedarse en ese punto del camino y fundar Macondo, pueblo que crece poco a poco.
El pueblo recibe con frecuencia las visitas de los gitanos. Su líder, Melquíades, trae
siempre artefactos y objetos que obsesionan a José Arcadio Buendía.
A Macondo llega la peste del insomnio, la cual trae consigo la del olvido. Un brebaje de
Melquíades pone fin a la peste. El éxito es tal que el gitano se queda a vivir en
Macondo, tiempo en el cual escribe unos pergaminos que solo serán descifrados
muchos años después.
Arcadio había sido el fruto de una relación de amantes entre José Arcado hijo y Pilar
Ternera, regente de un prostíbulo. Fue criado en casa de sus abuelos a condición de
que se le ocultara su origen. Creció pensando ser hijo del gran patriarca. Cuando es
nombrado jefe de Macondo, Arcadio se vuelve un dictador y tiraniza el pueblo. Muere
fusilado por los conservadores.
Durante su actividad como líder de los liberales, el coronel Aureliano Buendía enfrenta
un total de 32 batallas, de las cuales sale siempre perdedor. Cansado, pronto el
coronel comprende que la lucha armada no tiene sentido.
Con el tiempo, Aureliano firma un tratado de paz, tras el cual intenta suicidarse.
Regresa a Macondo, donde pasará el resto de su vida haciendo y rehaciendo
pescaditos de oro.
Pasan los años y poco a poco el pueblo se va vaciando. Aureliano Babilonia, que se
caracterizaba por ser sabio, pasa la vida descifrando los pergaminos que había escrito
Melquíades.
Entre tanto, regresa de Europa su tía Amaranta Úrsula, casada con Gastón. Sin saber
de su parentesco, ambos se enamoran, Gastón se va, pero ella queda embarazada.
Durante el parto, en el que ella muere, da a luz a un niño con cola de cerdo. Aureliano
intenta buscar ayuda, pero al no encontrar más que a un cantinero, se emborracha y
se queda dormido. Cuando despierta y regresa, el niño ha sido devorado por las
hormigas.