Hacemos La Cama

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¿Hacemos la cama?

1. La cama debe de prepararse cuando se da el alta a un paciente, por un nuevo

ingreso, un paciente enfermo que puede levantarse y pacientes que están en

cama permanentemente.

MATERIALES:

Dos sabanas, una bajera y una encimera.

Mantas de algodón y lana.

Colcha

Almohada y funda.

Funda para el colchón

Bolsa para la ropa sucia.

Guantes desechables.

PROCEDIMIENTO:

Se lavan las manos con agua y jabón y colocaremos los guantes, colocar el

material en orden en una silla, ubicando la cama en posición horizontal,

quitar la colcha y la manta, si se van a volver a utilizar se doblarán para

colocarlas posteriormente, si no es así se enrollarán hacía adentro para evitar

la diseminación de microorganismos en el ambiente. Las sábanas sucias se

pondrán en una bolsa. Extender la sábana bajera procurando que no queden

arrugas ni pliegues que puedan afectar en la comodidad del paciente.

Colocar entremetidas y hules si fuera necesario.

Colocar la sábana encimera desde la cabecera hasta los pies. Meter la sábana

en los pies y efectuar la técnica de las esquinas.

Extender la manta en la cama y hacer las esquinas para facilitar la movilidad

del paciente, colocar la colcha sobre la manta y doblar las esquinas. Efectuar
el dobladillo o embozo de la sábana encimera sobre la manta y la colcha,

procurando que quede una altura suficiente para cubrir los hombros del

paciente, colocar la funda de almohada y cerrar la cama (algunas veces

puede dejarse abierta).

2. La habitación del paciente debe de estar con unas condiciones higiénicas

óptimas, limpia, aireada, soleada, espaciosa, tranquila y ordenada. En

algunas ocasiones las habitaciones son compartidas intentando siempre que

tengan patologías similares para tener una estancia más tranquila y facilitar

los cuidados de enfermería, médico y dietas.

Luminosidad:

La más importante la luz solar, de ahí la importancia de tener ventanas

grandes y amplias. La iluminación eléctrica es un complemento debe ser

indirecta y uniforme, también dispondremos de lámparas auxiliares.

Mientras duermen los pacientes debe de haber una luz piloto que sirva de

referente para la vigilancia nocturna de los pacientes.

Temperatura:

Debe de oscilar entre los 20 y 22 grados, esto se logrará con radiadores, aires

acondicionados que se regulen con termostatos fiables. Con ellos

conseguiremos adecuar la temperatura, según la estación, lograremos

también una determinada humedad relativa del aire y un ambiente libre de

polvo, gases y bacterias.

Ventilación:

Es muy importante mantener las habitaciones aireadas para evitar malos

olores y renovar el aire viciado, debe hacerse en tramos cortos durante el

día,, preferiblemente cuando el paciente no este en la habitación, pero en


caso contrario es conveniente taparlo con una sabana para evitar que se

resfríe

Otro sistema de ventilación es el aire acondicionad, que proporciona un aire

controlado en cuanto a velocidad, humedad y temperatura.

Ruido.

Debe de ser una habitación donde haya calma y tranquilidad. Los ruidos

pueden provocar que el paciente se ponga irritable y nervioso( televisión y

radios con mucho volumen, caída de objetos, hablar muy alto.) Para evitar

debemos decir a las visitas que hablen en voz baja y llevar zapatos que no

causen ruido.

3. Debemos ser muy cautelosos con el orden de la habitación, siendo el

sanitario el responsable, pero motivando a los pacientes a que tomen y

conserven la iniciativa para mantener sus pertenencias en orden en todo

momento dando herramientas para la autonomía de los mismos.

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