1) Mini Curso Costura
1) Mini Curso Costura
1) Mini Curso Costura
básicos de
costura
Esta sección no pretende ser un
curso de costura. Es simplemente
una pequeña guía para que
entiendas mejor los tutoriales y no
te preocupes ante conceptos y
palabras desconocidas.
Encontraras cosas muy elementales,
como hacer un nudo al final
del hilo de forma sencilla (por
petición de un desesperado aprendiz
de sastre); conocimientos esenciales;
como tomar correctamente
las medidas, y pequeños trucos que, sin ser muy ortodoxos,
Facilitarán la confección de nuestras prendas para bebes.
Índice
1) Material imprescindible
• Cinta métrica
• Jaboncillo de marcar
• Alfileres
• Agujas
• Tijeras
• Dedales
• Hilos
4) Puntadas
• Coser a mano, como empezar si eres novato
• Ensanches o hilván flojo
• Hilván
• Pespunte
• Sobrehilado
• Punto de lado
• Punto escondido
• Punto escapulario
• Rizo o frunce
• Punto de ojal
5) Costuras
• Costura normal
• Abrir Costura normal
• Costura doble o francesa
• Atar hilos en costuras a máquina
6) Dobladillos
• Rectos
• Curvos
• Como coger la medida de un dobladillo
7) Mangas
• Tipos de mangas y sus patrones
• Como montar una manga
8) Pinzas
• Ajustar las pinzas a un vestido sencillo
9) Cierres
• Presillas de cordón
• Presillas de cinta
• Presillas de hilo
• Presillas de corchetes
• Cinta corchetera
• Ojales metálicos
• Ojales bordados
1) Material imprescindible
Cinta Métrica
De un metro y medio de largo y en
un material flexible, sirve tanto para
tomar medidas como para trasladarlas
a la hora de hacer patrones. Conviene
tener también una regla larga para trazar patrones. Se utilizan para
dibujar el contorno del patrón sobre la tela. Se venden en varios
colores ya que el trazo debe resaltar en el tejido. Para evitar que la
línea sea demasiado gruesa, conviene afilar el borde con un cuchillo
o el filo
de las tijeras.
Alfileres
Deben ser de punta afilada y estar
siempre muy limpios. Si alguno está oxidado, hay que tirarlo. Para
tejidos delicados venden alfileres especiales muy finos. Conviene
tener una caja con
espuma (ver foto) o una almohadilla para clavarlos y poder
agarrarlos con mayor facilidad.
Agujas
Hay de dos tipos, para coser a mano o para coser a
máquina. Hay que elegirlas con cuidado dependiendo del
tipo de tejido que vayamos a coser.
Las agujas de coser a mano van numeradas del 2 al 12,
siendo las del nº 2 las más gruesas y las del 12 las más finas. Hay
paquetes de agujas surtidas de varios grosores que son los más
prácticos.
Las agujas de coser a máquina también van numeradas según los
grosores e, igualmente, se venden paquetes en paquetes surtidos.
Además encontrareis agujas especiales para tejidos elásticos y para
cuero. Si nuestra tela es punto, lycra o terciopelo elástico, por
ejemplo, no intentes coserla a máquina con una aguja normal.
Utilizar siempre una aguja especial.
Hay que prestar una especial atención a la parte superior de las
agujas de coser a máquina: algunas son completamente cilíndricas
y otras tienen un lado plano. Hay que comprar de un tipo o de otro
dependiendo de nuestra máquina de coser. Las máquinas que
gastan agujas con un lado plano no pueden utilizar las cilíndricas y
las que usan agujas cilíndricas no pueden usar las agujas que
tienen un lado plano.
Tijeras
Es conveniente tener dos
tijeras: unas grandes para cortar la tela y otras más pequeñas para
cortar ojales, hilos y trabajar en la prenda.
Las tijera de manicura son útiles para quitar hilvanes. Siempre
deben estar bien afiladas.
Dedales
Los dedales sirven para proteger el dedo anular de la mano que
sujeta la aguja, ya que es con ese dedo con el que debemos
empujar la aguja a través de la tela. Se venden en varios
tamaños y materiales. Aunque al principio el dedal resulta una
molestia
más que una ayuda, es conveniente
acostumbrarse a usarlo, ya que de otra formar acabaras con el
dedo anular bastante maltrecho.
Hilos
El hilo de hilvanar es imprescindible.
De algodón, se vende en diferentes colores y es fácil de quitar una
vez cosida la prenda.
El hilo de coser se vende en carretes de diferentes tamaños. Para
prendas finas se suele usar el hilo de seda y para bordar ojales, el
de torzal.
Hay que comprar siempre hilos de buena calidad para evitar que la
prenda se vaya descosiendo con el uso al romperse el hilo.
¿Que es un biés?
"Un biés" es una tira de
tela que se utiliza para
rematar cuellos, sisas y
cualquier otra parte curva
de la prenda.
Esa tira de tela, de unos 4
centímetros de
ancho, se corta siguiendo la dirección "al biés" (de ahí su nombre).
Al coser la tira en curva,
esta cede ligeramente y se estira para
adaptarse. Así no forma arrugas. Vamos a
ver ahora como se corta un biés y como
se cose:
En ocasiones necesitamos un biés
muy largo pero no la tela no lo permite.
En este caso deberemos cortar varias
tiras en diagonal del mismo ancho y
paralelas. Después debemos
empalmarlas.
Para ello, debemos encarar las
tiras por el delantero de la tela y
coserlas a medio centímetro del
borde (ver dibujo). Después
abriremos la costura con la
plancha cuidadosamente y ya
tenemos el biés listo para coser.
Es posible que no tengamos tela
para hacer un biés aunque sea
a trozos o que prefiramos comprarlo ya hecho. Venden bieses de
muchos colores en algodón (mate) y raso (brillante) a muy buen
precio y de diferentes anchos, que pueden servir perfectamente
para rematar una prenda sin que se vean o para hacer un ribete
decorativo.
Derecho y contraderecho
En muchas explicaciones
para cortar cualquier
pieza, encontrareis la
expresión: "colocar el
patrón sobre la tela doble,
derecho contra derecho".
Es algo que tiene su lógica. Generalmente los patrones vienen
cortados por la mitad: medio delantero, media espalda, media
falda... Las mangas vienen enteras, pero solo tenemos un patrón y
tenemos dos brazos. Puesto que hay que cortar la otra mitad de la
pieza exactamente igual, es más sencillo colocar la tela doble y
cortar las dos a la vez (así nos aseguramos la igualdad) que cortar
una a una.
Siempre que vayamos a cortar una pieza, hemos de colocar la tela
por el revés, para que al dibujar el patrón con el jaboncillo de
marcar, no se vean luego las marcas. Si la tela debe ir doble, se
"encararán" los dos derechos. "Encarar" es un término que significa
eso, colocar las dos caras iguales de una pieza una contra otra.
Una vez cortado el patrón y sin separar las telas, pasaremos unos
ensanches por la línea que hemos dibujado según el patrón.
A veces es difícil distinguir cuál es derecho de una tela a simple
vista. En ocasiones es simple cuestión de gusto (ambos lados
pueden servir igual). Un pequeño truco es fijarse en los diminutos
agujeros que tiene en los bordes. Por un lado la tela será lisa y no
se notarán al tacto, pero por la otra, los agujeritos se notan rugosos.
Ese lado es el derecho.
Hay que prestar atención a este detalle ya que es muy importante.
Aunque ambos lados parezcan iguales, el brillo puede cambiar
ligeramente y eso se nota mucho cuando la prenda está terminada.
Para mayor seguridad, marcar mediante una línea uno de los lados,
que señalará el revés.
Revés contra revés es exactamente lo contrario: colocar la parte de
atrás de la telas una contra la otra.
4) Puntadas
Coser a mano, como empezar si eres nueva
Si es la primera vez que te animas a coser algo posiblemente
las cosas más sencillas resultarán una pesadilla para ti. Aquí tienes
explicadas algunas de las dudas más frecuentes.
Si vamos a coser una costura a mano, es importante utilizar la
puntada adecuada y asegurarnos de que la costura quede bien
fuerte tanto al principio como al final.
Lo primero que debemos hacer es elegir una aguja adecuada:
• Si la tela es gruesa (como la lana de abrigo), la aguja
debe ser fuerte y un poco grande, de forma que puedas
agarrarla bien al coser.
• Si la tela es muy fina (como la gasa o la seda), la aguja
debe ser pequeña y muy fina, para que no deje agujero.
• Las agujas, sean gruesas o finas deben estar
perfectamente afiladas. Si tienes agujas despuntadas u
oxidadas, tíralas, pueden estropearte la tela.
El siguiente paso es elegir el HILO:
• Debe ser de buena calidad, comprado en un sitio con
garantías. Los hilos de las tiendas de $1 suelen ser bastante malos
y tras unos lavados llegan a romperse en las costuras que soportan
presiones (lo sé por experiencia). Si no quieres estar
recosiendo tu traje, compra un hilo bueno, aunque sea
más caro.
• Debe ser hilo para coser, no para bordar ojales.
Asegúrate de comprar el correcto.
• El hilo ha de ser del color de la tela. La mejor forma de
acertar es cortar un trocito de tela (2 cm cuadrados) y
comparar el color en la tienda.
• En caso de que no esté el color exacto, es mejor
comprar uno similar pero ligeramente más oscuro que la
tela. Se verá menos que si es más claro que la tela.
EL NUDO
Para evitar que se salga el hilo al coser, hay
que hacer un nudo fuerte al final del hilo (Sí,
ya sé que parece una tontería explicarlo, pero
me lo han pedido varias personas).
La forma más sencilla es enrollar el hilo
alrededor del dedo índice sujetando un
extremo entre el índice y el pulgar.
Después solo hay que deslizar el índice
sobre el pulgar enrollando el hilo sobre sí mismo
Así se forma un rollito y estirar del rollito hasta hacer un nudo.
Ahora ya está listo/a para empezar a coser a mano. Si nunca lo has
hecho, conviene que hagas antes unas pequeñas prácticas.
Compra un metro de lienzo blanco (es una tela barata) y dedica
unos ratos a practicar las diferentes puntadas antes de ponerte a
hacer la ropita del bebe.
Te deseo mucha suerte (y no te pinches demasiado :D).
Puntadas
Aquí encontraras unas pequeñas explicaciones sobre los
puntos más utilizados en la confección de cualquier prenda, que
serán de mucha utilidad. Conviene practicar previamente en un
trozo de tela que no sirva. El trozo de hilo que utilice no debe ser
excesivamente largo para evitar que se enrede.
Ensanches o hilván flojo
Cuando dibujamos el patrón
sobre la tela doble con un
jaboncillo de marcar, nos
encontramos con
que solo tenemos el dibujo
exacto del patrón en una de las
caras. Para señalar la forma
exacta en las
otras tres usaremos este punto.
Utilizaremos hilo de hilvanar de
algodón de un color que contraste y
que se vea bien.
Las puntadas no deben ser muy
grandes y cada dos puntadas, se
debe dejar el hilo flojo tal y como aparece el dibujo.
Cuando se acabe el hilo, se remata dando varias puntadas en el
mismo sitio.
Una vez pasados los ensanches por todas las líneas del
patrón (pinzas incluidas), separamos las dos telas estirando los
hilos y cuidadosamente, los cortamos por la mitad. De esta forma
tenemos el contorno del patrón señalado con hilos en las dos telas y
por todas las caras. :)
Hilván
Una vez cortadas las piezas
hay que unirlas provisionalmente
para poder probar la prenda y
hacer las correcciones pertinentes.
Este punto no debe medir más de
un centímetro y los puntos deben
ser regulares. El hilo debe quedar
tenso pero no estirar de la tela.
Se suele utilizar un hilo especial de algodón llamado "de
hilvanar" de venta en cualquier mercería, generalmente en un color
que contraste con la tela para apreciarlo bien.
Pespunte
Es el punto que se utiliza
habitualmente para hacer las costuras.
Lo normal es hacerlo a máquina, más
rápidamente y más perfecto. Pero si
no tienes máquina de coser, esta es la
forma de coser una costura. Se cose
de derecha a izquierda. La aguja se clava al final del punto anterior
y se saca un poco más adelante. Los puntos deben ser pequeños y
regulares.
Sobrehilado
Este punto se utiliza para evitar
que las costuras se deshilachen. Los
puntos deben ser pequeños e iguales
entre sí y estar separados por unos 5
milímetros.
Punto de lado
Es el punto que se utiliza en
los dobladillos. Se hace un doblez
por el borde de la tela tal y como
aparece en el dibujo, y se coge una
puntada en la tela (solo un hilito,
para que no se note por el derecho)
y un poco más en el borde del
doblez. Las puntadas deben ser pequeñas. Para que quede más
fuerte, dar varias puntadas juntas en el doblez cada 10 centímetros.
Punto escondido
Este punto es similar al punto
de lado pero con una diferencia: en
lugar de hacer una doblez en el
borde
de la tela, se levanta un poco la
misma, de forma que el punto quede
oculto. Se debe coger primero un
hilito de la tela y luego un hilito del dobladillo, de forma que los
puntos apenas se perciban.
El borde del dobladillo hay que sobrehilarlo con antelación.
Punto escapulario
Este punto se utiliza para coser
los dobladillos en telas gruesas. El
dobladillo no lleva doblez para que
no sea demasiado abultado. Las
puntadas deben ser pequeñas y no
deben apreciarse por el derecho de
la tela. Con este punto no hace falta
sobrehilar previamente el borde.
5) Costuras
Costura normal
Una vez encarados las dos telas,
se pasa un hilván por donde tiene
que ir la costura y se hace el
pespunte a mano o a máquina
tomando el hilván como
guía.
Cuando esté cosida, se deben atar
los hilos y se quita el hilván con
cuidado.
Costura francesa
Si la parte interior de alguna costura se va ha ver, como la
central de las capuchas o la interior de las grandes mangas élficas,
es conveniente forrar la prenda.
Cómo eso no siempre es posible,
hay que intentar que la costura
quede lo más discreta posible y este
es el mejor sistema.
Se colocan las dos telas una sobre
otra, revés contra revés y se pasa un
pespunte cerca del borde de la tela.
Se vuelven las dos telas, de forma
que el derecho quede en el interior
y se pasa un segundo pespunte
por el revés,
cerca del borde que forma la
primera costura.
Si la tela lo admite, es preferible
planchar la costura antes del
segundo pespunte para facilitar el
trabajo. Si no se puede planchar, como el terciopelo, hilvanar la
costura antes de pasar el segundo pespunte.
Con la plancha se debe dejar plana la costura, cuidando de
no quemar la tela.
Recordar que tienes que atar los hilos de los extremos.
6) Dobladillos
Dobladillos rectos
Para hacer los dobladillos y bordes de las prendas antes se deben
doblar a la medida exacta, y eso puede suponer un serio problema,
sobre todo cuando hay que remeter el borde de la tela para
que quede oculto.
El mejor sistema es ayudarnos con
la plancha si la tela
lo permite (el terciopelo y la pana
no se planchan nunca). Para ello,
colocamos el borde de la tela sobre
la mesa de planchar y planchamos
un pequeño doblez de menos de un centímetro hacia dentro de la
prenda, de forma que se note la marca.
Una vez planchado todo el contorno se hace otro doblez un poco
más grande (2 ó 3 centímetros) que oculte el borde de la tela. Lo
sujetaremos con alfileres a medida que vayamos planchando.
Ya tenemos el dobladillo
preparado para hilvanar y coser
con un puntito de lado o un
pespunte.
Si lo que estamos preparando es
una vista, el segundo doblez debe
ser más ancho, como unos 6 ó 7
centímetros, para que cuando se abra la prenda quede más bonito.
Cuidado con la temperatura de la plancha. Hay telas
sintéticas que se funden si está demasiado caliente. Hacer siempre
una prueba en un trozo de tela que no sirva.
Si la tela es rebelde y no se queda la marca del doblez,
poner un trapo de algodón húmedo entre la plancha y la tela. Eso
ayuda a que se marque.
Dobladillos curvos
Algunas prendas, como las capa y las faldas al biés tienen
el bajo cortado en forma de curva, y deben coserse de forma
diferente.
Lo primero que hay que hacer es
recortar el bajo con cuidado,
eliminado todos los hilitos y
escalones que tenga. Debe
resultar una curva suave sin
dientes (cortar dejando un bajo de
unos dos centímetros). después, sobrehilar con unos puntos
pequeños utilizando siempre hilo del color de la tela.
El sistema correcto para coser un bajo curvo es este:
Se hilvana el bajo a un
centímetro del borde a la medida
adecuada y pasa un frunce por
el borde y se hace un frunce
muy pequeño. Se hilvana la
prenda con cuidado y se plancha
colocando un trapo húmedo
entre la tela y la plancha. De esta forma el vapor encogerá la tela y
desaparecerá el frunce.
Si la tela es fina, se cose con un punto escondido. Si es
gruesa, con punto escapulario.
Cuando la prenda no va forrada pero el bajo se va ha ver,
como en las capas, podéis
colgar una cinta de biés sobre el
borde sobrehilado, para que
cuando se abra quede más
bonito.
Estupendo, esta era la forma
correcta. Ahora vamos a ver el
sistema mas rápido.
Con la plancha, hacer una
prueba en un trozo de tela que
no sirva, para comprobar la
temperatura y si la tela se puede
planchar (el terciopelo no se
pancha).
Si se puede planchar, hacer un
doblez muy pequeño en la tela
(como medio centímetro) y
planchar todo el bajo. Se nos
marcarán unas arrugas en el
doblez, pero como hay prisa....
Volver a doblar el bajo
sobre si mismo, procurando
que quede lo más pequeño e
igualado posible y volver a
planchar, sujetándolo luego
con alfileres. No
tienen que quedar jorobas ni nada similar.
Hilvanar el bajo y coserlo a mano o a máquina. Quitar los
hilvanes y volver a planchar.
Este sistema no sirve ni para el terciopelo, ni para tejidos
que no admitan plancha ni para telas gruesas.
7) Mangas
Colocar las mangas puede ser algo complicado y frustrante,
así que lo ideal sería que contarais con ayuda experta. Si eso no es
posible... bueno, se hará lo que se pueda. Lo principal es mantener
la calma y sobre todo, hacerlo con tiempo. Aquí no valen las prisas
de último momento.
Leer las instrucciones un par de veces con cuidado antes de
empezar y marcar los puntos importantes. Las mangas es el toque
más importante de una prenda. Requieren paciencia y cuidado. Si
es necesario, hilvanarlas tantas veces como sea preciso hasta que
queden bien.
Para cortar las mangas utilizaremos un patrón
moderno de una sola pieza.
Si la manga es corta da igual, se alarga a mano.
MANGA ELFICA
Colocamos el patrón de
manga sobre un par de
hojas de papel para
patrones o de periódico
unidas con celo y
marcamos el contorno
superior con un rotulador,
desde el punto A al B. Es
muy importante que señaléis los "aplomos", esas pequeñas rayitas
que he dibujado en la parte superior y también la línea central, que
marca la dirección del hilo.
Luego dibujamos las "alas" de la manga, directamente sobre
el periódico, con ayuda de una regla, tan largas como queramos en
el sentido de las flechas, siempre recordando que el ancho de la
tela es el límite. Y ya tenemos el patrón de nuestra manga élfica.
Naturalmente, este es el patrón básico. Ahora las
modificaciones dependen de vosotros. Aquí tenéis algunos
ejemplos mas sencillos de hacer.
He de advertir una cosa: si son vuestras primeras mangas y
no tenéis ayuda experta, conviene que no se ciñan al brazo, como
en este modelo y en el anterior. Las mangas ajustadas requieren de
cierta práctica para queden bien.
uniformemente.
Vamos a colocar la manga derecha primero. Para ello, el cuerpo
de la prenda debe estar probado, ajustado, cosido a máquina y
planchado con las costuras abiertas.
Se coge la prenda y se vuelve del revés (con las costuras hacia
afuera).
La manga, del derecho, se coloca dentro y se saca la parte
superior de la manga por el hueco de la sisa, tal y como aparece en
el dibujo. Si no queda claro, coger una camisa o un vestido, volverlo
del revés y meter la manga hacia dentro para entender como se
debe colocar la manga.
Se sujeta la manga con alfileres arriba y
abajo (puntos verdes) de esta forma: Arriba, el
piquete central superior de la manga, que
señala el centro, se sujeta con la costura del
hombro. Abajo, la costura de la manga contra la
costura del costado) Los alfileres se colocan a
un centímetro del borde que hemos dejado de
costura.
Ahora, se pone piquete de la manga
contra piquete del vestido y se
sujeta con alfileres que se
colocarán perpendiculares al
borde. Se reparte el rizo con
ayuda de un alfiler y se colocan
más alfileres, separados entre sí
como dos centímetros.
El rizo no debe notarse, ya que su
objetivo era ajustar la manga a la sisa.
Aunque cueste una barbaridad no queda
más remedio que repartir el rizo y que no se
note. Para tener un ejemplo de como
debe quedar la manga, coger una camisa o
una chaqueta y mirar con cuidado como
están colocadas las mangas.
Supongo que a estas alturas los chalecos
han empezado a convertirse en una buena
idea... No desesperar.
Despacio y con tranquilidad, que el resultado valdrá la pena.
Una vez sujeta la manga con los alfileres, se hilvana
rápidamente a un centímetro del borde. Empezar por la costura del
hombro hacia delante, hasta la costura del lado. Y luego, otro hilván
desde el hombro por atrás hasta la costura del lado. De esa forma
no tendréis que desmontar toda la manga si un lado queda mal.
Si el frunce de la manga hace pliegues al hilvanar, repartirlos
un poquito chafándolos con el dedo (sí mi profesora de corte y
confección leyera esto, le daría un infarto seguro XD).
Una vez montada la manga, debéis probaros el vestido. Aquí
tenéis una relación de pequeños defectos y como corregirlos:
• La manga está caída sobre el brazo:. Poner un alfiler en
el sitio correcto de la costura del hombro como señal y
volver a montar la manga partiendo de esa señal.
• La manga entra dentro del hombro: montarla un poquito
más hacia fuera.
• La sisa es muy pequeña y la manga os aprieta en la
axila: recortar un poco la sisa por la parte de abajo y
volver a montar.
• No consigues disimular el rizo en la parte de arriba. Di
que lo has hecho adrede e inicia una nueva moda.
• La manga os tira de una forma extraña por
abajo cuando levantáis los brazos, como si
fuera pequeña o algo así. Cortar una
pequeña pieza en forma de rombo y
colocarla entre la sisa y la manga, como
aparece en el dibujo. El rombo debe ser
pequeño y no debe verse cuando se tiene
el brazo bajado.
8) Pinzas
Ajustar las pinzas a un vestido sencillo
El siguiente paso es centrar y ajustar las pinzas, tanto de la
espalda como del delantero si no están en el
lugar correcto.
En el delantero, señalaremos con alfileres
la altura de los pezones (líneas blancas
horizontales). Las pinzas delanteras deben
quedar a 1 centímetro debajo del alfiler y
completamente paralelas al centro del vestido
(pinza A).
La pinza B es como debe quedar una vez
hilvanada. Ambas pinzas deben ser igual de largas y
paralelas entre si.
Si las pinzas no están así, hay que
descoserlas y volverlas a coser correctamente.
Hilvanaremos las pinzas con puntadas
pequeñas, de un centímetro aproximadamente para
que no se abra cuando nos probemos el vestido.
Las pinzas deben terminar en puntas muy finas
para evitar las bolsas.
Si la pinzas que hemos hilvanado no
están donde debieran (debajo del pezón) o no
son completamente rectas y paralelas entre
sí, hay que deshacerlas y volverlas a hilvanar
de forma correcta tantas veces como sea
necesario hasta que queden bien.
Con las pinzas de la espalda debemos
hacer lo mismo: deben ser paralelas a la
abertura y quedar centradas entre la sisa y la
abertura de la
espalda.
Donde estén las pinzas del pecho
dependerá del patrón que hayamos utilizado,
pero ya estén en la sisa(a) o en la costura
lateral (b) deben apuntar al pezón, pero
sin llegar a este por uno o dos
centímetros.
Hilvanar las pinzas con puntadas
pequeñitas para que al
probar no se abran. Las dos pinzas
deben quedar EXACTAMENTE
IGUALES, tanto en inclinación como en
tamaño.
Como verás, para ajustar las pinzas hay que seguir el método
del "ensayo y error". Al principio puede que te cueste un poco, pero
no hay que desesperar. Si las pinzas están en su sitio y son
paralelas entre sí, ajustarlas solo es cuestión de meter un poquito
aquí y alargar o acortar otro poquito allá.
Hay otros problemas que pueden ser arreglados retocando
las costuras de los hombros. Lee con atención a ver si tienes alguno
de estos problemas:
• Te hace arrugas y bolsas en las sisas: posiblemente el cuerpo
sea demasiado largo, estirando de las
telas por el lado exterior del hombro hacia arriba hasta
eliminar las arrugas . Marca con alfileres por donde debe ir la
nueva costura. Repite la operación en el otro hombro y vuelve
a hilvanar. Naturalmente, las dos costuras deben ser iguales.
• Te hace arrugas en la parte delantera de los hombros:
Descose la costura del hombro y cógela de nuevo pero esta
vez sube un poco la costura por la parte del escote.
• Se forman bolsas en la parte inferior de la espalda: El cuerpo
es demasiado largo, sube la costura del hombro por detrás
hasta que desaparezcan las bolsas.
9) Cierres
Presillas de cordón
Una presilla es un semicírculo hecho de hilo, cordón o
cinta cosido a la tela por el que se puede pasar un cordón
o abrochar un
botón. Veamos como se hacen las diferentes presillas:
Yo utilizo un cordón que aquí, en Córdoba, se llama "cola de ratón".
Es cilíndrico y fino. Se vende en muchos colores y es barato.
Hay que formar "ondas" con el cordón y coserlas
con puntadas pequeñas y fuertes al borde de la
tela sin que se vean por el derecho. Para eso en el
borde habremos hecho previamente una vista y
coseremos el cordón solo a la capa interior de la
vista.
Las presillas deben ser del mismo tamaño y estar
colocadas a intervalos regulares. Con un jaboncillo de
marcar y un metro haz pequeñas marcas en la tela
señalando donde deben ir las presillas y que tamaño
deben
tener. Si las presillas son visibles intenta que
todas asomen
lo mismo.
Hay que asegurarse de que son lo bastante grandes para pasar sin
dificultad el cordón elegido o los botones que
queramos abrochar.
Si son para acordonar la prenda, las presillas
pueden ser
visibles o pueden quedar ocultas debajo de la tela.
Si son para
abrochar botones, deben ser visibles.
En mercerías venden presillas ya hechas en tira,
de color
blanco o negro.
Hay que tener cuidado con ellas, ya que están
pensadas para abrochar botones y para que todas
las presillas soporten la misma presión.
Presillas de cinta
En este caso, para hacer las presillas
utilizaremos un pedazo de cinta fina
doblado sobre sí mismo y cosido fuertemente a la tela.
Al igual que antes, deberemos coser las
presillas por dentro a la parte interior de la vista y deberán ser lo
suficientemente largas
para pasar la cinta por ellas.
Estas presillas sí recomiendo que se vean,
pero deben ser de tamaño regular, así que
hay que hacerlas con cuidado.
Presillas de hilo
Si solo necesitas una o dos presillas para
abrochar unos botones, a veces es más
cómodo hacerlas de hilo. Conviene
practicar un poco antes de hacerlas en la
prenda.
En el borde de la prenda ya
convenientemente rematado con
un dobladillo o vista, haremos una
presilla con varias lazadas de
hilo. La presilla deberá ser lo
suficientemente grande para abrochar
el botón pero no para que este se salga.
Presillas de corchetes
Una forma rápida de hacer presillas para
acordonar una prenda es utilizar la parte hembra
de los corchetes.
Debéis marcar cuidadosamente donde
deben ir y coserlos sólo por las anillas
pequeñas, dejando libre el cuerpo para poder
pasar el cordón. Hay que tener cuidado de
que no se vean ni las puntadas ni los
corchetes por el derecho.
Cinta corchetera
Si tienes mucha prisa o una prenda que es
muy delicado, la cinta corchetera puede ser
una buena solución para acordonarlo. En
realidad son dos cintas: una lleva cosidas las
partes machos de los corchetes y la otra las
partes hembras, que son pequeñas presillas
metálicas de forma cuadrada.
Solo hay que hacer una vista en el borde de la
prenda y coser la cinta sin que se vean las
presillas.
Tiene como inconveniente que la cinta es algo
cara y que las presillas metálicas son pequeñas, así que deberemos
usar un cordón fino.
Ojales metálicos
Todos los hemos visto en las zapatillas de
deportes o en botas militares. Los ojales son
unas pequeñas piezas metálicas que se colocan
en la tela mediante un aparato especial de venta
en ferreterías. Este aparato suele venir
acompañado de una bolsita con ojales de varios
colores: plata, oro, cobre, blanco, negro, rojo....
Para colocarlos la tela debe ser resistente y
estar reforzada con entretela o los ojales la
desgarrarán.
Hay que marcar muy cuidadosamente el lugar exacto y la
distancia entre ellos ya que si nos equivocamos no hay arreglo
posible.
Si quieres conseguir un efecto más realista, en
lugar de colocar ojales metálicos borda el agujero a
punto de ojal. Es algo más laborioso pero queda mucho
mejor.
Cierres dentados
En casi todos nuestros cursos necesitamos de colocar cierres tanto
para bolsos, mantas, ropas, etc.
Primero colocamos el cierre cerrado sobre
el lugar en donde ira. Recodemos que
tiene que haber un apertura en la tela o por
lo menos que sea la unión entre dos trozos
de tela. Siempre tengamos en cuenta que
la costura se hará en el lado contrario a la
vista.
Hilvanaremos alrededor del cierre para
sujetarlo a la tela. Y procederemos a coser
por todo a la redonda.
Luego daremos vuelta la tela y
tendremos colocado nuestro cierre.
Cierres de Velcro
En muchos casos no nos es posible
poner cierres u ojales o trabas
metálicas ya que pueden ser dañinas
para salud de nuestro bebe.
En estos casos se usa velero. El velcro es un sistema de apertura y
cierre muy rápido. Cuenta en un lado con unos ganchitos
microscópicos de plástico y de otro lado tiene muchas fibras
enmarañadas.