ENERGÍAS RENOVABLES IES

CONSABURUM GESTIÓN DEL MONTAJE DE PARQUES EÓLICOS

CURSO 2015/2016

TEMA 6:
SISTEMAS DE
GENERACIÓN

6.1 AEROGENERADORES DE VELOCIDAD FIJA

En estos tipos de aerogeneradores, para la conversión de la energía

mecánica extraída del viento en energía eléctrica se usan máquinas eléctricas
de inducción (también conocidas como máquinas asíncronas), empleadas
habitualmente como motores en muchas aplicaciones industriales. En los
aerogeneradores, en cambio, dichas máquinas eléctricas se utilizan como
generadores, en gran medida por su robustez y simplicidad constructiva, por
su bajo coste relativo y por la simplicidad de su conexión y desconexión de la
red (figura 6.1).
El estator de una máquina de inducción está constituido por bobinados
de cobre para cada fase, de forma análoga al estator de las máquinas
síncronas. En cambio, en los motores-generadores de rotor en cortocircuito (o
de jaula de ardilla), este no tiene bobinados, sino que está formado por una
serie de barras de cobre alojadas en ranuras en el núcleo magnético
laminado.
Algunas máquinas de inducción también pueden tener bobinados en el
rotor y en este caso se denominan de rotor bobinado. Son más caras y menos
robustas que las del tipo anterior y se utilizan en los aerogeneradores de
velocidad variable, como se verá mejor a continuación. Para su
funcionamiento, las máquinas de inducción requieren cierta cantidad de
potencia reactiva.
Esta potencia debe tomarse de la red o proveerse localmente mediante
un banco de condensadores, que debe dimensionarse adecuadamente para
evitar la autoexcitación del generador síncrono en caso de desconexión de la
red por avería. Además, estas máquinas necesitan una fuente externa de
frecuencia constante para generar el campo magnético rotativo y, por tanto,
se conectan a redes con una potencia de cortocircuito elevada capaz de
mantener la frecuencia.
En su funcionamiento como generador, el rotor eólico acelera la
máquina asíncrona hasta la velocidad de sincronismo y luego esta se conecta
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a la red, o bien primero se conecta a la red y arranca como motor hasta llegar
a la velocidad de régimen. Cuando se utiliza el primer método, el
aerogenerador debe ser necesariamente de arranque automático, por lo que
habitualmente dispone de control de ángulo de paso. El segundo método se
utiliza con aerogeneradores de control pasivo de la condición de pérdida. En
este caso, el sistema de control monitoriza la velocidad del viento y establece
el rango de velocidades para la puesta en marcha del aerogenerador.
Una vez alcanzada la velocidad de sincronismo, la potencia eólica
extraída hace que el rotor funcione en modo hipersíncrono, con deslizamiento
negativo, entregando potencia activa a la red. Dado que el deslizamiento tiene
un valor del orden del 2%, el desvío de la velocidad nominal resulta muy
limitado y es por ello que el uso de estas máquinas eléctricas condiciona el
funcionamiento del aerogenerador a velocidad constante. Para reducir la
corriente de arranque, generalmente se interpone un arrancador suave entre
la máquina asíncrona y la red.

6.2 AEROGENERADORES DE VELOCIDAD SEMIVARIABLE.

Añadiendo una resistencia variable externa en serie con los bobinados

del rotor de un generador asíncrono de rotor bobinado, se puede obtener una
variación del par electromagnético del generador y de la velocidad a la que
este se suministra.
Esto permite tanto funcionar en el punto óptimo en función del viento
como dejar que el rotor acelere cambiando de velocidad como respuesta a
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ráfagas de viento, aunque aumenten las pérdidas por efecto Joule en la

resistencia externa. Además, con velocidades del viento elevadas se puede
aumentar la resistencia total del rotor para mantener constante la corriente
que circula por él (y, por tanto, también en el estator) y con ello mantener la
potencia inyectada en la red cerca de la potencia nominal.
Así, el exceso de energía mecánica en el rotor se disipa en forma de
calor en la resistencia exterior. Mediante esta resistencia es posible obtener
una variación de la velocidad por encima de la de sincronismo en el rango 0-
10%.

6.3 AEROGENERADORES DE VELOCIDAD VARIABLE

Al menos en principio, existen varias soluciones que permiten al rotor

funcionar a velocidad variable, manteniendo al mismo tiempo la frecuencia
constante. Estas soluciones pueden ser de naturaleza mecánica y eléctrica,
aunque en la actualidad las más utilizadas son de tipo eléctrico, incorporando
alguna de las siguientes configuraciones:
• Generadores asíncronos de rotor bobinado con un convertidor
de potencia interpuesto entre el rotor y la red (configuración
doblemente alimentado)
• Generadores asíncronos con un convertidor electrónico de
potencia interpuesto entre el estator y a red (configuración de
convertidor total)
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• Generadores síncronos (alternadores) con un convertidor

electrónico de potencia interpuesto entre el estator y la red
(configuración de convertidor total).

6.3.1 CONFIGURACIÓN DOBLEMENTE ALIMENTADO

Para no perder la potencia disipada en forma de calor en la resistencia

añadida (generador asíncrono con resistencias rotóricas), se puede interponer
un convertidor electrónico de potencia entre el rotor devanado del generador
asíncrono y la red, que primero convierta a continua la potencia en corriente
alterna excedente en el rotor mediante un rectificador controlado, y luego la
reconvierta en alterna a la frecuencia nominal mediante un inversor,
inyectándola en la red.
De esta forma se puede alimentar el rotor con tensiones de amplitud y
frecuencia adecuadas proporcionadas por el convertidor electrónico, a fin de
compensar la diferencia de frecuencia entre la velocidad angular del campo
magnético rotativo del estator y la velocidad angular efectiva del rotor. El
término "doblemente alimentado" refleja el hecho de que la tensión del estator
se aplica desde la red, mientras que la del rotor proviene del convertidor
electrónico.
La potencia activa en el estator es siempre saliente e inyectada en la
red, independientemente de si se funciona en régimen hipersíncrono o
subsíncrono, mientras que el rotor consume potencia funcionando como
motor (subsincronismo) y la suministra cuando funciona como generador
(hipersincronismo).
Considerando que tanto las pérdidas del estator como las del rotor son
despreciables, la potencia del rotor Pr, gestionada por el convertidor, estará
relacionada con la potencia del estator Ps a través del deslizamiento según la
relación:

La potencia total Pred que la máquina proporciona a la red, consistente

en la suma algebraica de las potencias del estator y del rotor, viene
expresada como:
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con:
• s negativo funcionando en modo hipersíncrono;
• s positivo funcionando en modo subsíncrono.

Con este tipo de configuración, el generador eléctrico proporciona a la

red 2/3 de su potencia nominal mediante la conexión directa del estator y 1/3
mediante el rotor, conectado a través del convertidor. Por tanto, el convertidor
también puede dimensionarse para una potencia igual a 1/3 de la potencia
nominal del generador. Además es posible controlar la producción de potencia
reactiva, lo que permite la regulación de la tensión y la magnetización de la
máquina por el rotor, prescindiendo de la tensión de red.
Mediante la configuración doblemente alimentado es posible obtener
una variación de velocidad del 30% por encima o por debajo de la velocidad
de sincronismo. Por lo general, el generador asíncrono de rotor bobinado está
unido al eje del rotor mediante un multiplicador de tres etapas. La conexión de
los bobinados del rotor al convertidor se realiza a través de los anillos
giratorios y las respectivas escobillas.

6.3.2 GENERADOR ASÍNCRONO Y CONVERTIDOR

En los aerogeneradores de velocidad variable puede usarse un

generador asíncrono de jaula de ardilla interponiendo un convertidor
electrónico entre el generador y la red. Este convertidor desacopla y
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desvincula la frecuencia del campo magnético rotativo de la frecuencia de la

red; la frecuencia del campo magnético rotativo se modula para controlar la
velocidad de rotación del rotor.
De forma análoga a la configuración doblemente alimentado, se
dispone un sistema electrónico de potencia, pero esta vez conectado al
estator del generador. Por ello, y a diferencia de la configuración anterior, el
convertidor debe gestionar la totalidad de la potencia generada.
Al tratarse de un generador de inducción, seguirá necesitando
absorber potencia reactiva para funcionar, la cual puede ser aportada por el
propio convertidor.

6.3.3 GENERADOR SÍNCRONO Y CONVERTIDOR

Los generadores síncronos empleados en aplicaciones eólicas son

multipolo pudiéndose fabricar con polos bobinados o con imanes
permanentes.
En el primer caso, el rotor se alimenta de la corriente generada en el
estator a través de un rectificador.

Dado que la frecuencia a la salida del alternador depende de la

velocidad de rotación del rotor y del número de pares de polos, para poder
usar un generador síncrono en un aerogenerador de velocidad variable
manteniendo siempre constante la frecuencia en el lado de red hay que
interponer un convertidor de potencia de dos etapas que pueda gestionar toda
la potencia eléctrica generada:
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• En la primera etapa, un rectificador de puente de diodos o

controlado con tiristores convierte las magnitudes eléctricas
alternas de frecuencia variable a la salida del alternador en
magnitudes continuas;
• En la segunda etapa, mediante un enlace de continua, se
alimenta un inversor que reconvierte las magnitudes continuas
de tensión y corriente en magnitudes alternas a la frecuencia de
red.

En el caso de los generadores síncronos multipolo de imanes

permanentes, la configuración eléctrica es similar a excepción del circuito de
excitación del rotor que no lo necesita al ser este de imanes permanentes.
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6.4 INTERCONEXIÓN DEL AEROGENERADOR CON LA RED

La producción eléctrica a gran escala se realiza mediante la agrupación
de aerogeneradores en los denominados parques eólicos. En general, un
aerogenerador genera la electricidad en baja tensión (BT), es decir a una
tensión no superior a 1000V. La generación es trifásica, a 50Hz (en Europa) y
a tensión 690V entre fases. Se escoge la generación en BT porque requiere
menores niveles de aislamiento que si se realizase a tensiones superiores.
A la salida de BT del alternador se envía la energía eléctrica a un
transformador de baja a media tensión. En algunas ocasiones situado en la
propia góndola y otras en la base del aerogenerador.
En el siguiente esquema distinguimos los siguientes elementos con sus
correspondientes funciones:
 Generador eléctrico: accionado por la turbina eólica, genera
tensión en baja, generalmente trifásica a 690v entre fases.
 Protección frente a sobretensiones: en general de tipo varistor,
su función es proteger al generador eléctrico frente a
sobretensiones producidas por descargas atmosféricas o por
maniobras en la red.
 Arrancador suave: sistema formado por elementos de
electrónica de potencia tipo tiristor o IGBT que facilita el
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acoplamiento suave entre el generador y la red, evitando la

aparición de puntas de corriente y par.
 Condensadores: en particular en el caso de generadores
asíncronos se colocan baterías de condensadores para
suministro de energía reactiva al generador para la excitación
del mismo. En otros casos pueden utilizarse para regular la
energía reactiva.
 Interruptor automático: su función es proteger frente a
sobreintensidades y cortocircuitos. El principal, además separa
el circuito de generación del circuito de consumo exterior.
 Trafo BT/MT: eleva la tensión de 690V a niveles de MT (20-
30Kv) para enlazar con la red de MT del parque. Esta red en
media tensión recoge la producción de todo el conjunto de
generadores del parque para canalizarla a la estación
subtransformadora de media a alta tensión para su enlace con la
red exterior.
 Otros circuitos auxiliares: alimentación a motores de orientación
del rotor eólico, de regulación del paso de las palas y de
servicios auxiliares diversos.
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6.5. CONEXIÓN Y DESCONEXIÓN DE LA RED

El generador eólico incorpora sistemas de control, regulación y

protección para poder desconectarse de la red si aparece alguna anomalía,
tal como tensiones diferentes al valor nominal, frecuencia fuera de márgenes,
asimetría de tensiones, etc. Existen dos lazos de control básicos: uno sobre el
rotor y otro sobre el generador.
Mediante el primero se actúa sobre elementos del rotor como los frenos
aerodinámicos, variación del ángulo de pala etc., mientras que el segundo
actúa sobre los elementos del generador como las corrientes de excitación,
arrancador suave, alimentación del rotor, etc.
En esta maniobra influye principalmente el tipo de control (stall o pitch),
tipo de generador y régimen de giro del rotor (velocidad constante o variable).
La operación debe realizarse de forma suave para evitar las puntas de
tensión, de corriente y de par. Una conexión inadecuada, con varios intentos
fallidos para conectar el sistema a la red, afecta a la vida útil de los elementos
del aerogenerador, además de ocasionar perturbaciones sobre la red eléctrica
exterior.
El arranque se inicia una vez que el sistema de control ha verificado
todas las variables, el viento alcanza una velocidad mínima para poder iniciar
el arranque.
La secuencia que sigue la máquina es, como ya vimos en el tema
anterior, orientar el rotor, regular el paso de las palas, activar el arranque
suave cuando la velocidad del rotor es suficiente. Cuando la maniobra a
terminado, se puentea el arranque suave y se conecta las etapas de
compensación de reactiva.

6.6 PROBLEMAS EN LA INTERCONEXIÓN DEL

AEROGENERADOR CON LA RED ELÉCTRICA.

En la interconexión de una turbina eólica con la red eléctrica se pueden

producir diversas incidencias que pueden afectar tanto al funcionamiento de la
red como al propio aerogenerador. Las incidencias del aerogenerador sobre la
red son variaciones de tensión, frecuencia, potencia activa y reactiva,
armónicos, flicker o transitorios. Las incidencias de la red sobre la máquina
eólica son huecos y microcortes, desequilibrio de tensiones o armónicos de
tensión.
Como ya hemos visto en el punto anterior, la maniobra de arranque se
debe hacer de forma suave ya que si se hace de forma brusca, además del
consiguiente deterioro de los dispositivos de arranque, se producirán en la red
grandes caídas de tensión debidas a la gran cantidad de corriente
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magnetizante que el aerogenerador demanda, seguida de un gran pico de

corriente que el generador aporta a la red. Por tanto, en esta maniobra la red
se verá afectada por variaciones de tensión.
Una vez se ha producido el enganche a la red, se requiere que la
energía inyectada tenga parámetros similares a los de esta. La calidad de
onda de tensión generada requiere estabilidad en su valor y en su frecuencia,
debiendo mantenerlos dentro de los márgenes de tolerancia respecto a los
valores de referencia nominales.
Diversas causas, tales como la variabilidad del viento o el paso de las
palas frente a la torre puede favorecer las fluctuaciones de tensión y en
particular el efecto flicker. Este efecto consiste en variaciones de la tensión
lentas y de corta duración que provocan el parpadeo de las bombillas. Este
fenómeno se acentúa si el aerogenerador está conectado a una red de poca
potencia.
La presencia de equipos de electrónica de potencia favorecen la
aparición de armónicos y en consecuencia el fenómeno de distorsión
armónica de la onda, lo que obliga al establecimiento de unos límites de
distorsión armónica para evitar el efecto perjudicial de estos armónicos y al
uso de filtros adecuados para la eliminación de los mismos.
El islanding es un fenómeno que puede presentarse si una sección de
la red se desconecta de la red principal, como puede suceder en el caso de
un paro eléctrico o un cortocircuito. Si en la zona aislada quedan
aerogeneradores en funcionamiento existe la posibilidad de que se produzcan
desfases entre la red aislada y la principal. Si no se arbitran medidas de
protección, la reconexión de la red en isla a la red principal puede provocar la
aparición de sobreintensidades que podrían dañar los aerogeneradores y
perturbar la red eléctrica.
Los sistemas de control electrónicos del sistema eólico deben controlar
continuamente los valores de la tensión, frecuencia y secuencia de fases para
desconectar inmediatamente la turbina eólica de la red si se producen
desviaciones respecto a los valores de referencia de estos parámetros.

6.7 COMPORTAMIENTO DEL AEROGENERADOR FRENTE A

HUECOS DE TENSIÓN

Un hueco de tensión es una disminución brusca de la tensión seguida

de su restablecimiento después de un corto lapso de tiempo. Se admite que la
duración de unos huecos está comprendida entre 10ms y 1minuto (tener en
cuenta que en redes de 50Hz el período de la onda es 20ms).
Dada su corta duración, la mayoría de veces pasan desapercibidos
para el observador, pero no así para los equipos electrónicos que pueden ver
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modificado su funcionamiento. Cuando la tensión llega a 0v en un hueco se

denomina microcorte.
Pueden aparecer por varias causas: sobretensiones por descargas
atmosféricas, maniobras de conexión y desconexión de interruptores,
cortocircuitos en la red etc.
Cuando aparece un hueco de tensión en la red a la que se conecta un
aerogenerador, este se ve afectado en principio en un aumento de velocidad
por no poder evacuar la energía obtenida del viento. El comportamiento de los
aerogeneradores frente a este fenómeno es diferente en función de la
tecnología utilizada. Por ejemplo:
 Generadores asíncronos de jaula de ardilla (JA) y rotor a
velocidad constante: Cuando la tensión en bornes
desciende, lo hace también el par resistente que
desarrolla el generador, lo que ocasiona que el rotor
eólico se acelere y aumente la corriente entregada a red,
se activen las protecciones del generador que lo paran y
desconectan. Al recuperarse la normalidad y volver a
conectarse, se demanda una gran cantidad de energía
reactiva que dificulta la recuperación de la tensión de la
red.
Este problema se puede suavizar cuando el sistema
dispone de una batería de condensadores para
compensar la reactiva.
 Generadores asíncronos con rotor doblemente
alimentado: Cuando se produce una falta de tensión, la
intensidad del rotor aumenta por el efecto transformador
entre el estator y el rotor de la máquina asíncrona. Esta
sobrecorriente puede dañar al convertidor.
Una manera de solucionar este problema es conectar al
rotor a través de un banco de tiristores con un grupo de
resistencias que disiparan la energía liberada en forma de
calor. Una vez recuperada la normalidad, se desconectan
las resistencias y se vuelve a conectar el convertidor.
 Generadores síncronos con rotor eólico a velocidad
variable y convertidor entre el generador y la red: Este tipo
de generadores es el que mejor comportamiento tiene
ante este tipo de situaciones ya que toda la energía que
intercambia con la red es gestionada por el convertidor.

Mientras la potencia eólica instalada en el sistema eléctrico nacional

fue pequeña, la desconexión de un grupo de aerogeneradores no afectaba
sensiblemente a la estabilidad del sistema. Dado que en los últimos años, la
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energía eólica posee una importante participación en la capacidad total

instalada, se han establecido un conjunto de requisitos que deben cumplir los
aerogeneradores para soportar huecos sin desconectarse y por lo tanto para
que no se produzcan desconexiones que puedan llegar a afectar la
estabilidad de todo el sistema eléctrico.

Estos requisitos están recogidos en el Procedimiento de Operación

P.O.12.3. Una producción de generación eólica debe seguir conectado
siempre que se produzcan regímenes transitorios de la tensión fase-tierra que
estén en el interior de la zona sombreada del hueco de tensión estándar de la
figura siguiente. Si la falta que origina el hueco es un cortocircuito bifásico
aislado de tierra, el área sombreada de hueco de tensión en la que no se
deberá producir la desconexión de la instalación será de forma semejante a
esta figura, estando el límite inferior de tensión en 0,6pu, en lugar de 0,2pu.

Desde el punto de vista de la respuesta a huecos de tensión, las

configuraciones menos fiables son las de velocidad fija con generadores
asíncronos JA. Los sistemas de velocidad variable con generador asíncrono
doblemente alimentado tienen mejor respuesta que las anteriores siendo los
sistemas de velocidad variable con generador síncrono los que mejor se
comportan frente a este tipo de faltas.
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6.8 ORGANIZACIÓN DEL SISTEMA ELÉCTRICO

El sistema eléctrico debe cumplir en cada momento la igualdad entre la

demanda y la generación de energía eléctrica, ya que no dispone de
capacidad de acumulación de energía eléctrica. Para lograr este equilibrio, en
los centros de operación se controla la generación en diversas escalas de
tiempo, desde minutos hasta días.
Los parámetros básicos a controlar son: frecuencia, tensión en los
nudos del sistema, niveles de carga de líneas y estaciones de transformación
y estado de la aparamenta asociada.
El suministro eléctrico requiere:
 Mantener el equilibrio entre generación y demanda en
cada instante.
 La regulación de la frecuencia, tensión, potencia activa y
reactiva.
 Calidad y continuidad del suministro.

En el gráfico se muestra los días de máxima demanda de los últimos

años.
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En este gráfico podemos ver la demanda real, prevista y programada

por el operador eléctrico REE (podemos consultar la demanda a tiempo real
en https://demanda.ree.es/movil/peninsula/demanda/total ):

Si analizamos la curva real de demanda (amarilla) vemos dos tipos de

variaciones: por un lado variaciones lentas (de subida por la mañana y de
bajada por la noche) a las que se superponen variaciones pequeñas y
rápidas. El sistema debe reaccionar a estas variaciones para mantener el
equilibrio entre generación y demanda.

Cuando este equilibrio se rompe, lo primero que ocurre es que los

generadores tienden a acelerarse (si la demanda cae) o a ralentizarse (si la
demanda sube), lo que ocasiona aumento o disminución de la frecuencia de
red.

Las variaciones lentas se cubren mediante la entrada o salida de los

grupos de generación más adecuados, tanto técnica como económicamente,
mientras que las variaciones rápidas se cubrirán mediante ciertos
generadores que están en trabajando a carga parcial y pueden absorberlas
rápidamente a través de una rápida variación de su índice de carga.
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6.9 INTEGRACIÓN DE LA ENERGÍA EÓLICA EN EL SISTEMA

ELÉCTRICO

La introducción de energías renovables con un elevado grado de

variabilidad y aleatoriedad como puede ser la energía eólica o la solar
fotovoltaica supone un factor adicional de riesgo para la estabilidad del
sistema eléctrico.
Hasta hace algunos años, cuando la participación de la producción
eólica era pequeña, la generación eólica era tratada por el operador como
pequeñas unidades de generación que se debían sacar del sistema en el
caso de una incidencia para que no dificultasen la recuperación del mismo o
también por la demanda de reactiva que se producía al recuperar la tensión
después de una falta.
La normativa establecía la obligatoriedad de desconexión ante una
caída de tensión que situase la tensión a un valor del 85% de la nominal. Esta
obligación provocaba la desconexión de un número elevado de
aerogeneradores cuando se producía la aparición de un hueco de tensión.
A medida que fue creciendo la presencia de la eólica en el sistema
eléctrico, la desconexión de parques frente a huecos de tensión empezó a ser
problemática por la sustancial pérdida de potencia de generación.
En la actualidad se exige que los aerogeneradores soporten huecos de
tensión normalizados sin desconectarse y por otra parte deben participar en la
regulación de tensión a través del control de reactiva.
Con el fin de optimizar la explotación, se hace trabajar a los
aerogeneradores a la máxima potencia según el potencial eólico disponible
sin dejar margen para colaborar en la regulación de la frecuencia del sistema.
Se deja esta función a otro tipo de generación como la hidráulica o el gas.
Otro aspecto importante es el relativo a la predicción de producción con
antelaciones de 24 y 48 horas que realiza el operador eléctrico. A pesar de
que este aspecto es difícil en generación eólica, existen modelos de
predicción que proporcionan resultados muy satisfactorios.
Como ocurre con el comportamiento ante huecos de tensión de los
distintos aerogeneradores, las turbinas a velocidad variable, con regulación
activa y generador síncrono acoplado con la red a través de un convertidor de
frecuencia son los sistemas eólicos que mejor se integran en la red. Por el
contrario las que peor se integran son las antiguas máquinas a velocidad
variable, regulación por pérdida aerodinámica y generadores asíncronos con
rotor en jaula de ardilla.