3.2 Óptica Geométrica
3.2 Óptica Geométrica
3.2 Óptica Geométrica
Rayos luminosos.- El concepto básico con que opera la óptica geométrica es el rayo luminoso,
que, como veremos, da solo una descripción aproximada del camino que la luz sigue en el
espacio, pero para muchos fines prácticos esa aproximación es suficiente.
Se llama reflexión al rechazo que experimenta la luz cuando incide sobre una determinada
superficie. Toda superficie que tenga la propiedad de rechazar la luz que incide en ella se llama
superficie reflectora; lo contrario de una superficie reflectora es una superficie absorbente; estas
superficies capturan la luz que incide sobre ellas transformándola en otras formas de energía,
generalmente energía calorífica.
La reflexión se produce de acuerdo con ciertas leyes que llamamos leyes de la reflexión. Para
enunciarlas, haremos uso de los conceptos de rayo incidente, normal, rayo reflejado, ángulo de
incidencia y ángulo de reflexión.
El rayo incidente es un rayo luminoso que se dirige hacia la superficie reflectora.
La normal es una línea perpendicular a la superficie reflectora trazada en el punto en que ésta
es intersectada por el rayo incidente (punto de incidencia).
El rayo reflejado es el rayo que emerge de la superficie reflectora.
Los ángulos de incidencia y de reflexión son los formados por el rayo incidente y el reflejado
con la normal.
Espejos planos.-
se denomina espejo plano a una superficie reflectora que forma imágenes y está contenida en
un plano. Determinaremos la posición de la imagen de un punto en un espejo plano.
Supongamos que una fuente puntual esta emitiendo rayos luminosos en todas direcciones y
que parte de éstos se reflejan en un espejo plano. Usando las leyes de la reflexión se podría
seguir la trayectoria de gran cantidad de rayos luminosos; en rigor, podríamos seguir la
trayectoria de todos los rayos luminosos, pero, siendo infinitos en número, esto resulta
imposible. Interesa saber si nuestro espejo forma una imagen, es decir.
Si los rayos que salen de un punto luminoso convergen después de reflejados a un solo punto,
para ello basta con seguir la trayectoria de dos rayos como los dibujados en la figura. 2.1.2
Espejos curvos.- Cuando una superficie especular no puede estar contenida en un plano se
denomina espejo curvo. El estudio de la formación de imágenes en espejos curvos es más
laborioso. Sin embargo, debe tenerse presente que el fenómeno que interviene en este caso
sigue siendo el de la reflexión y sus leyes se cumplen en todo momento.
Por razones de producción y de costos, la mayoría de las superficies especulares curvas con
que se trabajan son esféricas. Por este motivo, la teoría que vamos a exponer se refiere a este
tipo de superficies. Estos espejos se llaman espejos esféricos. Un espejo esférico puede ser
cóncavo o convexo, según cual sea la cara reflectante.
En la Figura. 2.1.4 (A) está representado un espejo convexo. Conviene imaginar un espejo
convexo como un casquete de esfera metálica muy pulida o de vidrio, plateado en su interior.
El punto C es el centro de la esfera de la cual se ha obtenido el espejo; el punto F está a una
distancia. R/2 del centro de la esfera y O es el punto donde se intersecta el espejo en el eje
principal. En lo sucesivo llamaremos a C centro geométrico, a F foco y a O centro óptico del
espejo.