SER SEMEJANTE A JESÚS

Hoy en Día la humanidad está turbada, está en problemas, esta estresada

angustiada, desesperada y todos buscan una solución desde sus distintos campos
de conocimientos o desde sus gustos o entretenimientos, nosotros tenemos una
solución real y verdadera.

JUAN 14:1-3 No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en

mí.  2  En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo
hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.  3  Y si me fuere y os
preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo
estoy, vosotros también estéis.

Aquí Dios nos dice principalmente que no nos turbemos, que no nos angustiemos,
Dios sabía en que condición estaría la humanidad en este tiempo y para ella
manda este consuelo y está promesa esperanzadora.
Esta es la mayor promesa hecha a la humanidad, después de que se cumplió la
primera promesa que era “un redentor para la humanidad caída”, la segunda es
que “vendrá a buscar a todos los que salvó para que reinemos con Él para
siempre”, pero esté texto tiene algo muy particular y es que Jesús viene y dice “os
tomaré a mi mismo” es decir que tomará a personas que se parezcan a él en
carácter. Es decir que mientras esperamos la llegada de nuestro salvador
debemos de transformar nuestro carácter pecaminoso por un carácter que sea
semejante al de Jesús.

FILIPENSES 3:20 Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también
esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo;

Como ciudadanos del cielo nuestro comportamiento aquí en la tierra debe ser
marcado por un carácter diferencial con respecto a las personas que no han
conocido a Dios. Cuando en la calle vemos a personas extranjeras, gringo
japonenses, personas que hablan otro idioma o que se vean diferentes a nosotros,
a nosotros nos causa cierta curiosidad, porque son personas que se diferencian
de notros por su estatura, sus rasgos faciales, o porque hablan un idioma que no
entendemos.

A Pedro lo reconocieron por la manera en que hablaba, vieron que Pedro hablaba
como Jesús y por eso reconocieron que era un seguidor de Jesús, de esta manera
todos los que decimos seguir a Jesús deberíamos ser un espectáculo para el
mundo en el sentido que nos caractericemos por ser diferentes porque nos
parecemos a Jesús y no al mundo. Pero muchas veces somos como el pueblo de
Israel que a pesar de tener al Dios todo poderoso como rey, quisieron tener como
rey a un humano solo porque las otras naciones así lo tenían. Nuestras
preocupaciones no deben ser tener lo que el mundo tiene, sino ser como Jesús
es, eso es lo que debe marcar nuestro estilo de vida y lo que debe estar en
nuestros pensamientos cada día.
Pero mientras esperamos nuestra llegada al cielo y mientras tratamos de tener
características a los ciudadanos del cielos, tenemos muchas situaciones que
enfrentar aquí en la tierra, como el hambre, la enfermad, la contienda, la sociedad,
los desastres naturales, en fin tantas cosas que demos enfrentar día a día, que
nos están probando en cada momento, eso sin mencionar que estamos viviendo
en los últimos días y que el enemigo anda como león rugiente buscando a quien
devorar y que sus principales objetivos somos los que tratamos de hacer la
voluntad de Dios guardando sus mandamientos. Esto pone para nosotros un
panorama más difícil y aterrador, pero real. Pero gracias a Dios tenemos una
promesa muy esperanzadora.

MATEO 11:28-30 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os

haré descansar.  29  Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy
manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas;  30  porque
mi yugo es fácil, y ligera mi carga.

Pero nos cuesta creerle a Dios, nos cuesta mucho poner en practica lo que dice la
biblia, queremos trabajar con nuestras fuerzas y no dejamos que la gracia de Dios
se manifieste en nuestras vidas. Nos preocupa tanto nuestra vida y nuestros
problemas tanto que no sentimos confianza en dejarlos abandonados en Jesús y
ocuparnos de la obra que Él nos encomendó. Decimos “si me ocupo de los demás
y de lo que los demás necesitan aprender y de lo que puedo hacer por los demás,
¿Quién se ocupa de mi? Y lo peor es que no agradecen” ese, hermanos es un
pensamiento anticristiano, porqué los seguidores de Cristo deben seguir su
ejemplo.

JUAN 8:44-45 Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro
padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido
en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla;
porque es mentiroso, y padre de mentira.  45  Y a mí, porque digo la verdad, no me
creéis. 

AQUÍ JESÚS LES ESTÁ HABLANDO A UNOS JUDÍOS QUE HABIAN CREIDO
EN ÉL. En realidad no habían creído en Jesús, su creencia en Jesús era
superficial, simplemente no se querían perder, no querían morir en sus pecados,
era una creencia por conveniencia, y Dios conoce las intenciones del corazón.

Pensamos que creer en Dios es solamente proferirlo de palabras, pero que

nuestras vidas muchas veces nos demuestran lo contrario, creer en Dios no es
hablar de Dios, es actuar conforme a su voluntad de Dios.

SANTIAGO 2:18-19  Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame
tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.  19  Tú crees que Dios es
uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan. 
Esto quiere decir que nuestras vidas deben llevar un sello del carácter de Jesús
que nuestros actos deben reflejarlo a Él, por eso es que Pablo dice que
procuremos nuestra salvación con temor y temblor, no temor en las pruebas o en
las tribulaciones sino en que tengamos un carácter conforme a la voluntad de Dios
porque no debemos creer que somos salvos simplemente porque proferimos con
palabras lo que no hacemos en acciones, debemos pedirle a Dios un corazón
genuino un corazón sincero

LUCAS 6:46 ¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que digo?

Dios no se agrada de las personas que le dicen padre, señor, todo poderoso pero
que les cuesta hacer la voluntad de Dios porque estás son contrarias a sus
propósitos en la vida, muchas veces tenemos las buenas intenciones de hacer la
voluntad de Dios pero dejamos que las necesidades y circunstancias marquen el
camino de la desobediencias por la falta de FE

HEBROS 11:13-16 Conforme a la fe murieron todos estos sin haber recibido lo

prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que
eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra.  14  Porque los que esto dicen,
claramente dan a entender que buscan una patria;  15  pues si hubiesen estado
pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de
volver.  16  Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se
avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad.

Dios está preparando una ciudad para todo aquel que actúa por medio de la FE,
que hacen conforme a lo que dice la palabra de Dios, aún cuando está sea
opuesta a la voluntad propia, debemos tener presente que como hijos Dios la
manera de demostrar en quien hemos creído es como resolvemos las situaciones
que se nos presentan, cada prueba que se nos presenta es una oportunidad para
aumentar nuestra FE.

JOB antes de recibir las mayores pruebas de su vida, Dios lo describió como un
hombre recto, justo apartado del mal. Se podría decir que JOB confiaba
plenamente en Dios, pero después que paso la prueba, el dijo: “Antes de oídas te
había oído, más ahora mis ojos te ven”. Es decir que después de pasar por la
prueba y obtener la victoria con la ayuda de Dios, el pudo experimentar una FE
más real, más viva, porque había podido sentir en su propia vida el poder de Dios,
así pasa en nuestras vidas cuando en medio de las pruebas no tomamos
decisiones apresuradas conforme a lo que creemos y muchas veces a expensas
de desobedecer a Dios, sino que somos pacientes y esperamos en Él y no solo
eso sino que pedimos fielmente su dirección para que nos ayude en esa situación
difícil que tiene como propósito moldear un carácter como hijos de Dios.

Hermanos, cuando estamos en una prueba nuestro objetivo no debe ser, salir a
toda costa de esa necesidad como sea, sino poder entender el propósito de está
en nuestras vidas y que el objetivo de Dios se pueda cumplir en nuestras vidas,
cuando está se haya superado. Si enfrentamos la situaciones difíciles a nuestra
manera no se podrá cumplir el propósito de Dios y pueda que mas adelante
tengamos que pasar por una situación similar o peor.

1 JUAN 4:8-10 8  El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es

amor.  9  En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a
su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él.  10  En esto consiste el amor:
no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y
envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.

El carácter de Dios es el amor, el carácter de Jesús es el amor, pero el carácter de

nosotros no es el amor, es el egoísmo, esa es la mancha del pecado en la
humanidad, para poder amar tenemos que conocer a Dios, para poder amar
tenemos que pasar mucho tiempo con Dios, para poder amar tenemos que dejar
de mirarnos a nosotros mismos y mirar a Dios, como no sabemos amar y como
somos egoístas, Dios nos dejó una ley que al cumplirla tendremos un carácter de
amor, porque está ley refleja el carácter de Jesús. Y no se trata de guardar la ley
para poder amar a Dios, se trata de amar a Dios para poder guardar la ley, cada
día nuestra oración deber ser: “Señor quiero amarte con todas la fuerzas de mi
corazón, ayúdame a amar a mi prójimo para poder cumplir lo que me mandas en
tu palabra”.

HE AQUÍ LOS QUE DUERMEN EN EL SEÑOR DESCANSAN PORQUE SUS

OBRAS CON ELLOS SIGUEN