Hemorragia Digestiva
Hemorragia Digestiva
Hemorragia Digestiva
Definiciones:
Hemorragia digestiva: La hemorragia digestiva se define como la extravasación de sangre a
cualquier nivel del aparato digestivo, que alcanza la luz esófago-gástrica, intestinal o
colónica. Cuando el sangrado ocurre en cantidad suficiente para ser detectada
macroscópicamente se configura el cuadro de hemorragia digestiva aguda, la cual, por su
magnitud o persistencia, puede poner en peligro la vida del paciente.
Hematemesis: Vómito de sangre de color rojo.
Melanemesis: Vómito de sangre de color negro.
Hematoquezia: Deposiciones con sangre de color rojo.
Melenas: Deposiciones con sangre de color negro.
1.- TOPOGRAFICA:
a. Hemorragia digestiva alta o superior, aquella que sucede entre el ángulo duodeno-
yeyunal (Treitz) y la boca.
b.- Hemorragia digestiva baja o inferior, aquella que sucede entre el ano y la válvula
ileocecal.
c.- Hemorragia digestiva de origen oscuro, aquella que sucede entre el ángulo duodeno-
yeyunal (Treitz) y la válvula ileocecal. (Llamada así por la dificultad para el diagnóstico.)
a.- Aguda
b.- Crónica.
4.- SEGÚN SU VISIBILIDAD: Puede ser visible u oculta.
b.-Hemorragia oculta. Son generalmente hemorragias de poca magnitud, donde los métodos
de rutina son negativos. Frecuentemente la causa está en lesiones de intestino delgado.
También se consideran como ocultas las que no son evidentes para el paciente y o el
médico, sino por exámenes de laboratorio.
a.- Grado I o leve. La pérdida de sangre es menor al 15% (hasta 750 CC.) de la volemia. No
hay cambios hemodinámicos o son mínimos. El pulso y la presión sanguínea normal. De no
continuar la pérdida estos pacientes se equilibran con la ingesta líquida oral o la
administración de 500 ml. de solución salina isotónica.
b.- Grado II o moderada- La pérdida de la volemia está entre 15 a 30% (750 a 1500 cc.).
Esto trae repercusión hemodinámica, aumento de la frecuencia cardíaca (> 100 X minuto),
con pulso de amplitud disminuida y la presión arterial por mecanismos compensadores está
dentro de cifras normales. Frecuencia respiratoria aumentada entre 20 y 30 por minuto y la
diuresis algo disminuida (20 a 30 ml/hora). Paciente ansioso y con mareo al pasar a la
posición ortostática.
c.- Grado III o grave. La pérdida es del 30 a 40% de la volemia (1500 a 2000cc.). El
paciente está ansioso o confuso, en decúbito, con palidez de piel y mucosas, y aumento de
la frecuencia respiratoria (>a 30 /minuto). La frecuencia cardíaca aumentada (> a 120 X
minuto), presión arterial disminuida (Caída de 40 mm. Hg. o más de su presión normal o
menos de 100 mm. Hg.), taquifigmia con pulso de amplitud disminuída. El relleno capilar
es lento.
Etiología: Son muchas las causas de la hemorragia digestiva, para poderlas estudiar, se
dividen en alta, bajas y oscuras, como ya fue mencionado y las del tubo digestivo alto se
subdividen en variceal y no variceal.
A) Hemorragia crónica, cuando el paciente tiene un lesión que sangra el pequeña cantidad
unos cuantos mililitros por hora o por día, si el ritmo de la pérdida de sangre es menor al
ritmo de la reposición sanguínea, en esas condiciones el paciente referirá cansancio fácil,
palidez, disnea de medianos esfuerzos, taquicardia, edema de miembros inferiores, anorexia
etc.
C) En la hemorragia masiva, cuando se pierde más del 20% del volumen circulante, el
paciente experimenta datos de choque hipovolémico (hipotensión arterial, taquicardia,
palidez extrema, oliguria, lipotimias, palpitaciones, pudiendo llegar al estado de coma),
además de la hematemesis. La melena o inclusive enterorragia.
Diagnostico:
Laboratorio:
Tratamiento:
De la hemorragia activa:
Reposición de la volemia:
1.-UCI, PVC
2.- Sonda gastroesofágica y enemas
3.- Concentrado globular y expansores de plasma
4.- Medicamentos:
- Antibióticos
- Vasopresina: 0,4 Ud. por minuto
- Los IBP (omeprazol, pantoprazol, lansoprazol, rabeprazol,
esomeprazol) tiene un efecto antisecretor más potente que los antagonistas de los
receptores H2 de la histamina y un efecto beneficioso en el tratamiento de la
hemorragia por ulcera de alto riesgo, el tratamiento adyuvante con omeprazol por
vía iv 8pulso de 80 mg seguidos de perfusión continua a 8 mg/h durante 3 días) o
por vía oral (40 mg/ 12horas durante 5 días) reduce las recidivas y las necesidades
de intervención quirúrgica y retratamiento endoscópico comparado con controles
con solo tratamiento endoscópico.
5.- Taponamiento esofágico
6.- Escleroterapia por vía endoscópica
Prevenir la recidiva:
1.- Propanolol: Dosis de 40 mg V.O orden diaria (debe tomarse en cuenta que se ha
demostrado que el propanolol, disminuye la incidencia del primer sangrado, pero
luego su utilidad disminuye)
Tratamiento profiláctico:
1.-Con propanolol
2.-Escleroterapia profiláctica
Quirúrgico:
1.-Cuando no hay hemostasia
2.-Cuando se compromete la vida del paciente
3.- Cuando no mejora con tratamiento médico.
Tratamiento Endoscópico:
Hay varias pruebas diferentes que pueden ayudar a localizar el sitio de la hemorragia:
El manejo del paciente con hemorragia digestiva baja masiva tiene tres objetivos:
1.-reanimar al paciente
3.-detener la hemorragia.
Hasta hace poco más de una década se consideraba que, cuando la hemorragia no se detenía
espontáneamente, era indispensable la intervención quirúrgica. Esto significaba muchas
veces una colectomía a ciegas, procedimiento de elevada mortalidad y morbilidad. Esta
circunstancia fue un estímulo para el desarrollo de la infusión arterial mesentérica de
vasopresina, la que se ha demostrado efectiva para el control de la hemorragia y ha
permitido que la intervención quirúrgica sea electiva o, muchas veces, innecesaria. La
infusión selectiva intraarterial de vasopresina, aprovechando el mismo catéter de la
angiografía, logra detener el sangramiento en alrededor del 80 % de los pacientes en
quienes se demuestra extravasación del medio de contraste.
Mucho más frecuentes, y también difíciles, son los problemas que surgen en relación a las
indicaciones del tratamiento quirúrgico en pacientes mayores de 50 años con hemorragia
digestiva baja de origen colónico. El reconocimiento de la angiodisplasia y los divertículos
como las causas más frecuentes de HDB y que a menudo coexisten, ha obligado a
considerar críticamente las indicaciones de colectomías ciegas, totales o segmentarias. La
alta mortalidad (30-40 %) y recurrencia de hemorragia (33 %) después de colectomías
segmentarias ciegas, y la elevada mortalidad operatoria de la colectomía total (más de 10
%), han constituido un estímulo para limitar la resección sólo al segmento de colon en que,
según la arteriografía, se localiza la lesión sangrante, ya sea divertículo o angiodisplasia.
Esta posición puede ser discutible cuando el divertículo sangrante se ubica en el colon
derecho, como sucede a menudo en pacientes con sangramiento de origen diverticular, ya
que si todo el resto del colon presenta divertículos, especialmente en el colon izquierdo,
éstos también pueden ser causa de hemorragias posteriores. Sin embargo la experiencia
acumulada ha demostrado que la resección segmentaria del colon que incluye el divertículo
sangrante, raramente se complica de recurrencia del sangramiento.
Finalmente, pese al uso de modernos procedimientos diagnósticos, siempre queda una cifra
de alrededor de un 10 % de pacientes en quienes no es posible determinar el sitio ni la
causa del sangramiento en la HDB masiva.