Declaración XXVII Cumbre Andorra
Declaración XXVII Cumbre Andorra
Declaración XXVII Cumbre Andorra
21 de abril de 2021
DECLARACIÓN DE ANDORRA
Innovación para el Desarrollo Sostenible – Objetivo 2030.
Iberoamérica frente al reto del Coronavirus
TEXTO DE LA PRESIDENCIA
1. Manifestaron su pesar por los miles de víctimas que la pandemia está causando en la
Comunidad Iberoamericana, en especial entre las personas mayores. De igual manera, su
solidaridad hacia quienes siguen recuperándose de sus efectos o han perdido a seres
queridos.
2. Reconocieron la extraordinaria labor y los encomiables esfuerzos que realiza el personal de
salud para afrontar la crisis sanitaria generada por el COVID-19, tratando con gran calidad
humana a quienes han sido afectados por la pandemia. Cuidar de ellos y ellas es cuidar de
toda la ciudadanía.
3. Afirmaron que los efectos devastadores de la pandemia requieren una respuesta global,
coordinada, solidaria y mancomunada, que enfrente el gran reto de la reconstrucción
inclusiva y resiliente de nuestras economías, y afiance el desarrollo sostenible y
principalmente la lucha contra la pobreza y la desigualdad, garantizando a la población la
protección social en todos sus ámbitos.
La respuesta internacional
7. Abogaron por el fortalecimiento del multilateralismo por ser el instrumento más eficaz para
coordinar las acciones definidas por los Estados, así como para compartir experiencias y
encontrar las soluciones sanitarias, sociales, económicas y medioambientales, basadas en el
respeto de los derechos humanos y del derecho internacional, que permitan una mejor
recuperación en todos los países.
8. Urgieron a la comunidad internacional y a la industria farmacéutica a enfrentar la pandemia
global de forma más equitativa y solidaria, garantizando el derecho a la salud, permitiendo
que el acceso, la compra y la distribución de las vacunas, instrumentos preventivos, pruebas
de laboratorio, reactivos y materiales de apoyo, suministros médicos esenciales, nuevos
diagnósticos y medicamentos a precios accesibles sean universales, y evitando el
acaparamiento de las mismas por parte de los países que tienen mayor poder o influencia
económica, para que no prevalezcan, de este modo, los intereses financieros sobre la salud
pública.
9. Insistieron en que se propicie la distribución urgente y equitativa de vacunas seguras y
eficaces en el marco de los esfuerzos que lleva adelante la alianza de colaboración mundial
COVAX, en la que están comprometidos 190 países bajo el auspicio de la Organización
Mundial de la Salud (OMS) y otras organizaciones multilaterales, para lograr que sean un
bien público de cobertura universal.
10. Manifestaron su disponibilidad a tomar como referencia la Declaración de Doha de 2001
relativa al Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados
con el Comercio (ADPIC o TRIPS) y la Salud Pública, para desarrollar, frente a la crisis del
Coronavirus, propuestas flexibles de alcance global que permitan cuanto antes el acceso y
distribución equitativa a tecnologías, medicamentos y vacunas. Asimismo, tomaron nota de
la propuesta de los países del G7 para aumentar la producción de vacunas mediante la cesión
voluntaria de licencias.
11. Destacaron la importancia de reforzar el Sistema de preparación y respuesta ante
emergencias de Salud Pública de la OMS, fortalecer la implementación del Reglamento
Sanitario Internacional y saludaron las iniciativas multilaterales puestas en marcha por
algunos países iberoamericanos, que buscan mejorar la capacidad de respuesta frente a la
pandemia del COVID-19 y otras futuras amenazas epidemiológicas.
13. Reiteraron su voluntad de dar respuestas concretas y efectivas para enfrentar la crisis
multidimensional provocada por la pandemia y así mitigar y solucionar los problemas o
carencias que han surgido en los países iberoamericanos, como la disminución de la actividad
económica, el aumento de la desigualdad y de la exclusión social, la pobreza extrema o el
desempleo, para lograr lo antes posible la recuperación económica y social sostenible que
exige la ciudadanía y que solo podrá alcanzarse en un contexto de solidaridad global,
intrageneracional e intergeneracional.
14. Reconocieron la importancia del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), desarrollado por
el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Universidad de Oxford,
como herramienta para orientar políticas públicas dirigidas a reducir la pobreza en todas sus
formas y dimensiones, atendiendo a la necesidad de identificar los impactos diferenciados
producidos por la pandemia y la dificultad de medirlos únicamente con instrumentos basados
en el nivel de ingreso, que no toman en cuenta las múltiples carencias que enfrentan las
personas en condición de pobreza.
15. Consideraron que los organismos multilaterales de financiamiento para el desarrollo deben
ser fortalecidos para lograr un mayor impacto ante las crisis multidimensionales, y contribuir
de forma decidida, transparente y eficiente al desarrollo sostenible, a través del acceso justo
e inclusivo a mecanismos innovadores y efectivos de financiación y otras modalidades de
cooperación, que estén ligados a estrategias de transformación tecnológica y productiva y
de desarrollo social, así como a políticas medioambientales de medio y largo plazo.
16. Señalaron que es necesario mantener el diálogo con los mercados y las instituciones
financieras internacionales con el fin de flexibilizar los criterios de elegibilidad, los
mecanismos y procesos de desembolso y de pagos, e implementar medidas para el
tratamiento de la deuda externa, en periodos de crisis sistémicas y establecer medidas de
ayuda adicionales sin tomar en cuenta la clasificación de los países de acuerdo con su nivel
de renta, así como promover el cumplimiento de los compromisos internacionales de Ayuda
Oficial al Desarrollo y evaluar la mejor manera de ampliar los instrumentos para incrementar
la asistencia financiera, técnica y tecnológica.
17. Exhortaron a la comunidad internacional a intensificar medidas coordinadas para mantener
la estabilidad de los mercados financieros y las cadenas mundiales de suministro mediante
la eliminación de las barreras innecesarias al comercio internacional, especialmente para los
productos alimenticios, farmacéuticos y médicos relacionados con el COVID-19, conforme a
las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), a fin de facilitar un flujo comercial
sin obstáculos y promover la recuperación económica alineada a los Objetivos de Desarrollo
Sostenible.
18. Se comprometieron a continuar promoviendo un sistema multilateral de comercio basado en
reglas, abierto, inclusivo, no discriminatorio y equitativo en el marco de la OMC, con el
objetivo de alcanzar acuerdos comprehensivos y efectivos en la 12ª Conferencia Ministerial
de la OMC en 2021.
La Cooperación Iberoamericana
21. Manifestaron que la crisis sanitaria provocada por la pandemia del COVID-19 ha evidenciado
la vulnerabilidad de las sociedades iberoamericanas ante el aumento de eventos externos
bruscos, disruptivos y de gran impacto, reiterando la urgencia de acelerar una transformación
vital hacia el desarrollo sostenible. La Agenda 2030 y su compromiso de no dejar a nadie
atrás emergen como una gran herramienta acordada entre todos, que nos compromete en
favor de la cooperación a escala global y, en este sentido, subrayaron la importancia de la
Cooperación Iberoamericana para acelerar la recuperación y la salida de esta crisis.
22. Animaron a la SEGIB a continuar los esfuerzos de concienciación, sensibilización y formación
de todos los actores de la Conferencia Iberoamericana, sobre los retos de la sociedad global.
En este sentido, aprobaron la creación de la Iniciativa sobre Ciudadanía Global para el
Desarrollo Sostenible que formará parte de los esfuerzos nacionales y de Iberoamérica
para la consecución de los ODS.
23. Celebraron la evolución de la Cooperación Iberoamericana durante los últimos 30 años,
consolidada como un espacio eficaz de articulación y diálogo intergubernamental, horizontal,
multiactor, multinivel y multisectorial, que ha fortalecido principalmente el sistema de
Programas, Iniciativas y Proyectos Adscritos Iberoamericanos, impulsando a la vez políticas
públicas innovadoras, sinergias y alianzas con las diferentes redes iberoamericanas, otros
foros y actores, fomentando ayudas solidarias y eficientes.
24. Aprobaron el Programa de Acción de la XXVII Cumbre Iberoamericana de Andorra
que recoge mandatos, propuestas y acciones concretas en materia de Cooperación
Iberoamericana.
25. Destacaron el papel de la Cooperación Sur-Sur y Triangular, internacionalmente reconocidas
como herramientas eficaces de apoyo para la consecución de los ODS, en respuesta a los
desafíos de las crisis multidimensionales, tal y como reconoce el Documento final de Buenos
Aires de la Segunda Conferencia de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre la Cooperación
Sur-Sur (2019).
26. Sostuvieron que la enfermedad de Chagas, constituye todavía un serio problema sanitario y
social tanto en áreas endémicas como en áreas en que la misma es emergente. Por ello,
decidieron aprobar la Iniciativa sobre Chagas congénito: “Ningún bebé con Chagas:
el camino hacia nuevas generaciones libres de Chagas”, dirigido a detectar la
enfermedad en el embarazo o en el recién nacido, mediante controles prenatales y
Medio Ambiente
35. Reconocieron que más de cinco años después de la adopción de la Agenda 2030 para el
Desarrollo Sostenible y del Acuerdo de París sobre el cambio climático, los datos demuestran
que es necesario intensificar el esfuerzo global para alcanzar los Objetivos de Desarrollo
Sostenible, una respuesta internacional coordinada y un mayor impulso en los compromisos
en materia de mitigación, adaptación y en los medios de implementación, así como un
incremento sustantivo en los recursos financieros concesionales, transferencia de tecnologías
y fomento de las competencias, según el principio de las responsabilidades comunes pero
diferenciadas y capacidades respectivas, a la luz de las diferentes circunstancias nacionales,
teniendo en cuenta las limitaciones para el desarrollo de los países sin litoral y de los países
insulares.
36. Manifestaron que la pandemia del COVID-19 ha evidenciado la relación entre las crisis
sanitarias y la crisis medioambiental. El manejo inadecuado de los hábitats naturales, el
comercio ilegal de especies y la pérdida de biodiversidad aumentan el riesgo de epidemias
provenientes del reino animal y la fauna silvestre. La disminución de superficie de los
ecosistemas naturales, así como los efectos de la contaminación y el cambio climático,
representan un enorme coste social, económico y sanitario.
37. Afirmaron que la recuperación económica de la crisis generada por el COVID-19 debe integrar
la dimensión medioambiental sin que el impacto de la pandemia frene la capacidad de los
Gobiernos y de los demás actores relevantes, incluyendo el sector privado, para asignar
recursos a la promoción de un desarrollo sostenible inclusivo y catalizador de inversiones,
especialmente en infraestructura sostenible y tecnologías limpias e innovadoras.
38. Manifestaron su satisfacción por la realización, 11 años después, de la X Conferencia
Iberoamericana de Ministras y Ministros de Medio Ambiente, llevada a cabo en setiembre de
2020, y por la decisión de impulsar la Agenda Medioambiental Iberoamericana,
comprometida con el proceso multilateral para hacer frente a las causas y los efectos
adversos del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la degradación de los suelos.
39. Sostuvieron que el acceso al agua potable y al saneamiento básico es un derecho esencial
por lo que es necesario garantizar su prestación y distribución en el marco de una gestión
integrada de los recursos hídricos para contribuir al logro del ODS 6: Agua limpia y
saneamiento y enfrentar la propagación del COVID-19.
48. Destacaron que la igualdad de género y la violencia contra la mujer en todas sus formas
siguen siendo dos de los mayores desafíos de Iberoamérica, para lo que se requiere potenciar
políticas públicas, aumentar recursos y garantizar la participación significativa, el liderazgo y
la autonomía de las mujeres, en toda su diversidad, en la respuesta a la pandemia y en el
proceso de recuperación económica y social de nuestras sociedades. Expusieron, asimismo,
la necesidad de visibilizar el impacto que los cierres de emergencia han tenido en los países,
resultando en un aumento desproporcionado del trabajo doméstico y de cuidados no
remunerados realizados por mujeres y niñas.
49. Reconocieron el impacto diferenciado y desproporcionado de las crisis sanitarias y
socioeconómicas sobre las mujeres, que incrementa las barreras para el pleno disfrute de
sus derechos humanos, profundiza las brechas de desigualdad y aumenta el riesgo de sufrir
violencia por motivos de género, especialmente en el ámbito doméstico. En este sentido,
aprobaron la Iniciativa Iberoamericana para Prevenir y Eliminar la violencia contra
las mujeres, que buscará fortalecer las respuestas nacionales para combatir y erradicar
todas las formas y tipos de violencia contra las mujeres como requisito indispensable para el
logro de la igualdad de género y el desarrollo sostenible en Iberoamérica.
50. Saludaron los esfuerzos realizados por la SEGIB y ONU Mujeres para promover una
participación plena de las mujeres en la economía y en la recuperación económica en
Iberoamérica, incluyendo la adopción de leyes y marcos regulatorios que garanticen la
autonomía de las mujeres. Respaldaron, asimismo, la Coalición Iberoamericana para el
Empoderamiento Económico de las Mujeres, con el objetivo de sumar esfuerzos en torno a
la Coalición de Acción de Justicia y Derechos Económicos del Foro Generación Igualdad que
se impulsa en el marco de la conmemoración de Beijing +25.
51. Apoyaron los esfuerzos multilaterales, la eficacia de la cooperación y el impacto de las
acciones interinstitucionales, para promover el liderazgo y la participación igualitaria de las
mujeres en todos los niveles de la toma de decisiones, particularmente en el ámbito local,
para dar respuestas más inclusivas, plurales y representativas en la mitigación de la crisis y
la consecución de los ODS.
52. Reiteraron el compromiso con el respeto por los derechos humanos de las personas
migrantes, cualquiera que sea su condición migratoria, personas refugiadas y solicitantes de
asilo, expuestos a situaciones de mayor vulnerabilidad, particularmente mujeres, así como
niños, niñas y adolescentes, personas mayores y personas con discapacidad, para que tengan
acceso universal y equitativo a la atención médica y a la prevención y respuesta en
emergencias sanitarias como la actual, y garantizaron la implementación de políticas que
permitan acoger, proteger, promover e integrar a las comunidades migrantes.
53. Reafirmaron los principios establecidos en la Convención de Naciones Unidas sobre los
Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD) y su protocolo facultativo, abogando por
la construcción de sociedades más inclusivas, en las que las personas con discapacidad y sus
necesidades específicas sean tomadas en consideración, se respete su dignidad, autonomía
e independencia y estén presentes de forma transversal en todas las políticas públicas,
considerando que la accesibilidad es un pilar fundamental para el ejercicio de sus derechos.
54. Reconocieron los trabajos realizados por el Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas
de América Latina y el Caribe (FILAC) sobre la evolución de la pandemia del COVID-19 y su
impacto en los pueblos indígenas y las comunidades locales, destacando las buenas prácticas
que desarrollan ante la pandemia, y reiteraron el compromiso de acordar las medidas de
prevención, atención, mitigación sanitaria y recuperación económica, con pleno respeto a su
entorno cultural.
55. Destacaron también la contribución de la medicina tradicional de los pueblos indígenas en la
respuesta a la enfermedad causada por el COVID-19.
56. Reafirmaron el compromiso de los Estados de la Conferencia Iberoamericana con la adopción
de medidas nacionales para enfrentar el flagelo del racismo, de la discriminación racial, de la
xenofobia y de las distintas manifestaciones de intolerancia, acentuadas por la crisis sanitaria.
57. Afirmaron que el conocimiento científico y tecnológico debe tener un papel central en las
políticas. La pandemia ha demostrado la necesidad de fortalecer los sistemas nacionales de
ciencia, tecnología e innovación, asegurando la inversión en Innovación y Desarrollo (I&D),
impulsando la cooperación entre ellos y la transferencia de conocimiento y tecnologías
innovadoras hacia los países en desarrollo.
58. Saludaron la aprobación de la Estrategia Iberoamericana de Innovación, que permitirá
promover, a través de la ciencia, la tecnología y la innovación, la recuperación
socioeconómica y el alcance de las metas previstas en la Agenda 2030 para el Desarrollo
Sostenible.
59. Agradecieron la realización de la Reunión extraordinaria de Alto Nivel sobre “Ciencia,
Tecnología e Innovación contra la crisis del COVID-19”, donde se decidió instar a la SEGIB a
establecer un mecanismo de conocimiento compartido de las principales líneas de actuación
que los países iberoamericanos están emprendiendo para combatir la pandemia del COVID-
19 y sus efectos sanitarios, económicos y sociales.
61. Consideraron que la pandemia ha afectado fuertemente a los sistemas educativos, que se
han visto obligados a cerrar centros y unidades, y a procurar la continuidad de la educación
mediante la enseñanza y el aprendizaje a distancia, tratando de llegar al máximo número
posible de estudiantes y mitigar la deserción escolar. La reapertura de los centros educativos
sigue siendo un reto ante la compleja situación sanitaria que seguimos atravesando.
62. Afirmaron que todo el alumnado debe poder beneficiarse del gran potencial inclusivo y
compensador de la educación virtual, disminuyendo las brechas sociales acumuladas como
la falta de electricidad o el acceso a internet, facilitando la conectividad, los medios y las
herramientas necesarias y fortaleciendo políticas públicas afirmativas de educación, con
enfoque diferenciado, teniendo en cuenta, entre otras, las especificidades culturales y
patrimoniales de la población rural, afrodescendiente y pueblos indígenas.
63. Respaldaron los trabajos para la formulación e implementación de la propuesta de
Estrategia Iberoamericana para la Transformación Digital de la Educación
Superior, acordada en La Habana en febrero de 2020, así como la promoción, en ese marco,
de líneas de acción dirigidas a aquellos aspectos que se han revelado como estratégicos en
la respuesta académica a la crisis del COVID-19. Para ello, es importante abogar por el
aseguramiento y uso libre de los recursos financieros para la educación universitaria previstos
por cada uno de los Estados.
64. Destacaron la convocatoria por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la
Ciencia y la Cultura (UNESCO) de la Conferencia Mundial de Educación Superior, en Barcelona
(España), así como la importancia de promover la participación de nuestros gobiernos,
Universidades e Instituciones de Educación Superior, solicitando a la SEGIB y al Consejo
Universitario Iberoamericano (CUIB), que apoyen la participación de la Comunidad
Iberoamericana y su acervo universitario.
65. Sostuvieron que la recuperación económica y social posterior a la pandemia ofrece una
oportunidad para acelerar las reformas en educación y formación profesional y técnico-
profesional, especialmente en competencias digitales y fortalecer su resiliencia, mediante
actuaciones que permitan una adaptación más ágil a los cambios y a las necesidades del
mercado laboral.
66. Saludaron los debates encaminados a la puesta en marcha del Plan 3.0 promovido por el
Organismo Internacional de Juventud para Iberoamérica (OIJ) en el período 2021-2024 como
base para que cada país seleccione los elementos aplicables en función de las prioridades de
los países, que puedan contribuir a la recuperación postpandemia, la transformación digital
de los servicios públicos de juventud y al empoderamiento de las personas jóvenes en la
formación y manejo de competencias digitales, en particular en el marco del proceso y de la
aplicación por las partes del Tratado Internacional de Derechos de las Personas Jóvenes.