Literatura 3ero Exámenes
Literatura 3ero Exámenes
Literatura 3ero Exámenes
a __ b __ c __ d __ e __ f __ g __ h __ i __ j __ k __ l __ m __
a) d) g)
b) e) h)
c) f) i)
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
3. Escribe al final de cada verso el número de sílabas métricas, así como la letra que corresponda según la
rima; señala las sinalefas; indica si la rima es consonante o asonante:
Luis de Góngora
4. Realiza el esquema métrico, señala si hay diéresis o sinéresis en algún verso, escribe el nombre de cada
estrofa y de todo el poema, y si hay rima consonante o asonante:
Garcilaso de la Vega
6
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
¡Abenámar, Abenámar, 2 Más claro cada vez el son se oía Por una senda van los hortelanos,
moro de la morería, que es la sagrada hora del regreso,
el día que tú naciste 3 de dos pastores que venían cantando con la sangre injuriada por el peso
tras el ganado, que también venía
grandes señales había! por aquel verde soto caminando, de inviernos, primaveras y veranos.
Estaba la mar en calma, y a la majada, ya pasado el día,
la luna estaba crecida, Vienen de los esfuerzos sobrehumanos
recogido le llevan, alegrando y van a la canción, y van al beso,
moro que en tal signo nace
4 las verdes selvas con el son suave, 5 y van dejando por el aire impreso
no debe decir mentira. haciendo su trabajo menos grave. un olor de herramientas y de manos.
b) En uno de los versos se da una diéresis. En otro, una sinéresis. Escríbelos y señala dónde se da dicha
licencia métrica.
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5: _______________________ 6: _____________________
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
2. Lee estos poemas y señala si pertenecen a la lírica culta o a la popular. Explica por qué. El de la lírica
popular, ¿es una jarcha (lírica mozárabe), una albada, alborada o maya (lírica tradicional castellana)? ¿Por
qué?
3. Escribe en cada recuadro si es poesía popular o culta, narrativa o lírica. Indica sus características
sobresalientes:
4. Lee atentamente este fragmento del Poema de Mio Cid y contesta a las preguntas:
c) ¿A través de qué procedimiento conocemos las voces de los personajes? ¿Quiénes intervienen?
d) Señala al menos cuatro elementos que aparezcan en el poema relacionados con la transmisión oral o
con el Mester de juglaría.
f) A partir del poema caracteriza al héroe como guerrero, padre y cristiano. ¿Aparece alguna mención en
el texto al Cid como vasallo?
5. Lee estos versos del Libro de Buen Amor y contesta las preguntas:
Otra vez hablaba el conde Lucanor con Patronio, su consejero, de este modo:
─Patronio, un pariente mío y, además amigo, en quien confío mucho y del que estoy seguro que me quiere de
corazón, me ha aconsejado que me arriesgue en un asunto que me asusta mucho. Pero él me dice que no tenga miedo,
que antes daría su vida que a mí me pasara algo. Os ruego me aconsejéis cómo he de actuar.
─Señor conde Lucanor ─dijo Patronio─, para este consejo me gustaría mucho que supieseis lo que le ocurrió a
un ciego con otro.
El conde le pidió que le contara qué había sucedido.
─Señor conde ─dijo Patronio─, había en la ciudad un hombre que perdió la vista. Estando así, ciego y pobre,
fue a su encuentro otro ciego que también vivía en la ciudad y le propuso que fuesen ambos a otra villa cerca de
aquella para pedir por Dios limosna con la que sustentarse y alimentarse. El primer ciego le replicó que el camino hacia
aquella villa estaba repleto de pozos y de barrancos y de senderos muy difíciles, y que temía mucho aquel viaje. El otro
ciego respondió que no temiese nada, que estaría con él en todo momento y que lo pondría a salvo. Tanto insistió y
tantos beneficios le aseguró que obtendrían de aquel viaje, que el ciego creyó al otro ciego y se marcharon juntos.
Cuando llegaron a los lugares duros y peligrosos, cayó el ciego que guiaba al otro, y no por eso dejó de caerse
también el ciego que temía el camino.
─Y vos, señor conde, si teméis que el asunto en cuestión sea peligroso, no os metáis en problemas, por mucho
que vuestro pariente y amigo os diga que antes morirá que vos os dañéis, pues de nada os servirá que él muera
primero si vos recibís el daño y morís después.
Y al conde le gustó este ejemplo, lo puso en práctica y le salió bien.
Y como a don Juan le pareció que este ejemplo era bueno, lo hizo escribir en este libro e inventó los versos
siguientes:
Por mucho que tu amigo te asegure
no acudas donde la vida no te dure.
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
A C
2. Rodea con un círculo las letras de las explicaciones que consideres correctas:
ElD pensamiento renacentista se apoya en una El nuevo espíritu renacentista surge en un momento en
C
mentalidad teocéntrica, en una literatura que se producen importantes descubrimientos para la
esencialmente oral, en medio de una sociedad humanidad.
estamental.
El David, de Leonardo da Vinci, podría sintetizar las
E El Renacimiento italiano sirvió de modelo a los demás F principales ideas renacentistas: equilibrio y armonía; se
países europeos. contempla la belleza a través de la perfección técnica;
el ser humano es el centro del universo.
4. ¿A qué famoso poema visto en clase te recuerda este soneto? ¿Cuál es su tópico literario? Señala las principales
figuras retóricas e intenta explicar el conjunto del poema a través de sus principales rasgos renacentistas y
petrarquistas:
En tanto que el color de nieve y grana
adorna vuestro alegre rostro bello,
y que el gallardo error del rubio vello
esmalta vuestra frente soberana;
5. ¿Cuál de los dos poemas es renacentista y cuál es barroco? Escribe qué características te han ayudado a
distinguirlos.
Hermosas ninfas*, que en el río metidas, Miré los muros de la patria mía,
contentas habitáis en las moradas si un tiempo fuertes, ya desmoronados,
de relucientes piedras fabricadas de la carrera de la edad cansados,
A y en columnas de vidrio sostenidas, por quien caduca ya su valentía. B
ahora estéis labrando embebecidas** Salíme al campo, vi que el sol bebía
o tejiendo las telas delicadas, los arroyos del hielo desatados,
ahora unas con otras apartadas y del monte quejosos los ganados,
contándoos los amores y las vidas: que con sombras hurtó su luz al día.
dejad un rato la labor, alzando Entré en mi casa, vi que amancillada*
vuestras rubias cabezas a mirarme, de anciana habitación era despojos;
y no os detendréis mucho según ando, mi báculo** más corvo y menos fuerte.
que o no podréis de lástima escucharme, Vencida de la edad sentí mi espada
o convertido en agua aquí llorando, y no hallé cosa en que poner los ojos
podréis allá despacio consolarme. que no fuese recuerdo de la muerte.
6.
a) ¿Es barroco o renacentista este poema? ¿Por qué?
b) ¿A qué autor lo atribuirías? ¿Por qué?
c) Pon un título.
d) Explica en una o dos oraciones el tema del poema.
e) Di de qué composición poética se trata. ¿Por qué?
a) ¿Cuál es el tema del poema? ¿Cómo se llama este tipo de temas? ¿A qué poema del mismo autor,
estudiado en la unidad, te recuerda?
b) ¿Encuentras alguna antítesis en el poema?
c) ¿Qué simboliza el día, la luz, en este poema?
d) ¿Qué cuatro partes de la cabeza de María aparecen mencionadas en el poema?
e) Haz el análisis métrico: número de versos, tipo de rima, tipo de estrofas, tipo de poema.
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
8. Lee estos poemas y coloca en su lugar correspondiente la letra que los encabeza:
A B
(...)
Cual suele el ruiseñor con triste canto 1. ¡Oh llama de amor viva,
quejarse, entre las hojas escondido, que tiernamente hieres
del duro labrador que cautamente de mi alma en el más profundo centro!
le despojó su caro y dulce nido Pues ya no eres esquiva,
de los tiernos hijuelos, entre tanto acaba ya, si quieres;
que del amado ramo estaba ausente, ¡rompe la tela de este dulce encuentro!
y aquel dolor que siente
con diferencia tanta
2. ¡Oh cautiverio suave!
por la dulce garganta
¡Oh regalada llaga!
despide, y a su canto el aire suena,
¡Oh mano blanda! ¡Oh toque delicado,
y la callada noche no refrena
que a vida eterna sabe,
su lamentable oficio y sus querellas,
y toda deuda paga!
trayendo de su pena
Matando, muerte en vida la has trocado.
al cielo por testigo y las estrellas;
C D
(...)
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
(...) Solía poner a su lado un jarrillo de vino cuando comíamos; yo lo cogía con rapidez, le daba un par de besos
callados y luego lo devolvía a su lugar. Pero mi dicha duró poco, pues al beber se dio cuenta de que faltaba vino, y,
para mantener a salvo el jarro, lo tenía agarrado por el asa y ya no se separaba de él ni un instante. Pero no existía
imán capaz de atraer tanto como yo atraía al vino con una paja larga de centeno que me había fabricado con urgencia
para la ocasión: la introducía en la boca del jarro, chupaba el vino y lo dejaba a buenas noches. Pero, como el traidor
era tan astuto, creo que me sintió, y desde entonces en adelante cambió de idea: asentaba su jarro entre las piernas y
lo tapaba con la mano, así bebía seguro.
Yo, como me había acostumbrado a beber vino, moría por él, y viendo que aquel remedio de la paja ya no me
servía ni valía, decidí hacer en la base del jarro una fuentecilla y un agujero sutil, y taparlo delicadamente con una
delgadísima tortita de cera; y a la hora de comer, fingiendo tener frío, me colocaba entre las piernas del triste ciego a
calentarme en la pobrecilla lumbre que teníamos; y la poca cera que había se derretía al calor de la lumbre, y
comenzaba la fuentecilla a destilarme en la boca, situada de tal manera que maldita la gota que se perdía. Cuando el
pobrecillo iba a beber, no hallaba nada. Se desconcertaba, maldecía, y como no sabía qué había sucedido daba al
diablo el jarro y el vino.
-No diréis que me lo bebo yo –decía–, pues no le quitáis al jarro la mano de encima.
Le dio tantas vueltas y tientos al jarro, que acabó por hallar la fuente y descubrió la burla; pero disimuló como si
nada hubiera notado. Y al día siguiente, cuando el jarro rezumaba como solía, me senté como de costumbre, sin
sospechar el daño que me estaba destinado ni que el mal ciego me sentía; cuando estaba recibiendo aquellos dulces
tragos, mi cara puesta hacia el cielo, un poco cerrados los ojos para gustar mejor el sabroso licor, el maldito ciego
sintió que había llegado la hora de vengarse, y con toda su fuerza, alzando con las dos manos aquel dulce y amargo
jarro, lo dejó caer violentamente sobre mi boca, de manera que al pobre Lázaro, que nada de esto se esperaba, antes
al contrario, estaba descuidado y gozoso como otras veces, en verdad le pareció que el cielo, con todo lo que hay en él,
le había caído encima.
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
Fue tal el golpecillo, que me turbó y me dejó sin sentido, y tan grande el jarrazo, que los pedazos se me metieron
por la cara, rompiéndomela por muchas partes, y me quebró los dientes, sin los que me quedé hasta hoy día. Desde
aquel suceso quise mal al mal ciego, y, aunque me quería y me mimaba y me curaba, entendí que se había alegrado
del cruel castigo. Me lavó con vino los cortes que me había hecho con los pedazos del jarro, y, sonriéndose, decía:
–¿Qué te parece Lázaro? Lo que te enfermó te sana y da salud.
Y soltaba otras ocurrencias por el estilo, que a mí no me hacían ninguna gracia. (...)
honrado:
hábil:
veraz:
bribón:
tunante:
trabajador:
4. Lee este fragmento de Don Quijote de la Mancha y resúmelo en cinco líneas. Ayudándote del texto,
explica estos aspectos presentes en la obra de Cervantes:
a) El contraste entre la apariencia y la realidad.
b) La relatividad de las cosas: ¿por qué crees que aparecen tanto las palabras ojos, vista o el verbo ver?
c) Don Quijote como antihéroe.
d) El contraste entre don Quijote y Sancho.
-–Acudid, señores, presto y socorred a mi señor, que anda envuelto en la más reñida y trabada batalla
que mis ojos han visto. ¡Vive Dios, que ha dado una cuchillada al gigante enemigo de la señora
princesa Micomicona, que le ha tajado la cabeza cercen a cercen, como si fuera un nabo!
–¿Qué decís, hermano? –dijo el Cura, dejando de leer lo que de la novela quedaba–. ¿Estáis en vos,
Sancho? ¿Cómo diablos puede ser eso que decís?
En esto, oyeron un gran ruido en el aposento, y que don Quijote decía a voces:
–¡Tente, ladrón, malandrín, follón; que aquí te tengo, y no te ha de valer tu cimitarra!
Y parecía que daba grandes cuchilladas por las paredes. Y dijo Sancho:
–No tienen que pararse a escuchar, sino entren a departir la pelea, o a ayudar a mi amo; aunque ya
no será menester, porque, sin duda alguna, el gigante está ya muerto, y dando cuenta a Dios de su
pasada y mala vida; que yo vi correr la sangre por el suelo, y la cabeza cortada y caída a un lado, que
es tamaña como un gran cuero de vino.
–Que me maten –dijo a esta sazón el ventero– si don Quijote o don diablo no ha dado alguna
cuchillada en alguno de los cueros de vino tinto que a su cabecera estaban llenos, y el vino derramado
debe de ser lo que le parece sangre a este buen hombre.
Y con esto, entró en el aposento, y todos tras él, y hallaron a don Quijote en el más extraño traje del
mundo. Estaba en camisa, la cual no era tan cumplida, que por delante le acabase de cubrir los
muslos, y por detrás tenía seis dedos menos; las piernas eran muy largas y flacas, llenas de vello y no
nada limpias; tenía en la cabeza un bonetillo colorado grasiento, que era del ventero; en el brazo
izquierdo tenía revuelta la manta de la cama, (...) y en la derecha, desenvainada la espada, con la
cual daba cuchilladas a todas partes, diciendo palabras como si verdaderamente estuviera peleando
con algún gigante. Y es lo bueno que no tenía los ojos abiertos, porque estaba durmiendo y soñando
que estaba en batalla con el gigante; (...) y había dado tantas cuchilladas en los cueros, creyendo que
las daba en el gigante, que todo el aposento estaba lleno de vino. Lo cual visto por el ventero, tomó
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
tanto enojo, que arremetió con don Quijote, y a puño cerrado le comenzó a dar tantos golpes, que si
Cardenio y el Cura no se le quitaran, él acabara la guerra del gigante; y, con todo aquello, no
despertaba el pobre caballero, hasta que el Barbero trujo un gran caldero de agua fría del pozo, y se
le echó por todo el cuerpo de golpe, con lo cual despertó don Quijote. (...)
Andaba Sancho buscando la cabeza del gigante por todo el suelo, y como no la hallaba, dijo:
–Yo ya sé que todo lo desta casa es encantamento; que la otra vez en este mesmo lugar donde ahora
me hallo, me dieron muchos mojicones y porrazos, sin saber quién me los daba, y nunca pude ver a
nadie; y ahora no parece por aquí esta cabeza, que vi cortar por mis mismísimos ojos, y la sangre
corría del cuerpo como de una fuente.
–¿Qué sangre ni qué fuente dices, enemigo de Dios y de sus santos? –dijo el ventero–. ¿No ves,
ladrón, que la sangre y la fuente no es otra cosa que estos cueros que aquí están horadados y el vino
tinto que nada en este aposento, que nadando vea yo el alma, en los infiernos, del que los horadó?
–No sé nada –respondió Sancho–: sólo sé que vendré a ser tan desdichado, que, por no hallar esta
cabeza, se me ha de deshacer mi condado como la sal en el agua.
Y estaba peor Sancho despierto que su amo durmiendo: tal le tenían las promesas que su amo le
había hecho. (...)
Tenía el Cura de las manos a don Quijote, el cual, creyendo que ya había acabado la aventura, y que
se hallaba delante de la princesa Micomicona, se hincó de rodillas delante del Cura, diciendo:
–Bien puede la vuestra grandeza, alta y famosa señora, vivir, de hoy más, segura que le pueda hacer
mal esta mal nacida criatura; y yo también, de hoy más, soy quito de la palabra que os di, pues, con el
ayuda del alto Dios y con el favor de aquella por quien yo vivo y respiro, tan bien la he cumplido.
–¿No lo dije yo? –dijo oyendo esto Sancho–. Sí que no estaba yo borracho: ¡mirad si tiene puesto ya
en sal mi amo al gigante! ¡Ciertos son los toros: mi condado está de molde!
¿Quién no había de reír con los disparates de los dos, amo y mozo?
a. ¿Qué característica
se asocia con el Barroco? Luz Equilibrio Desmesura
¿QUÉ?
b. ¿Qué autor pertenece al Barroco? Garcilaso Tirso Fray Luis
de la Vega de Molina de León
obras escritas
b. ¿Por qué en el teatro de Calderón
se refuerza la intensidad dramática? Los elementos secundarios
giran en torno al personaje principal.
2. Coloca en sus casilleros correspondientes las siguientes obras de teatro (busca información si es
necesario):
3. Las siguientes palabras están relacionadas con honor y honra. Todas son sinónimas o antónimas.
Localízalas.
Pundonor, afrenta, respeto, celebridad, estima, ultraje, ignominia, dignidad, distinción, deshonor,
indignidad, vileza, decencia, honestidad, pudor, recato, renombre, agravio, fama, menoscabo,
reputación.
Sinónimas:
Antónimas:
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
4. Lee el siguiente fragmento de la obra de Lope de Vega Fuenteovejuna. Responde a las preguntas:
a) ¿Fuenteovejuna es un drama de honor o una comedia de capa y espada? ¿Por qué?
b) Resume en cinco líneas el argumento y sitúa este fragmento en el conjunto de la obra.
c) ¿Cómo se comporta el Comendador con Laurencia? ¿Es agresivo desde el principio?
d) ¿Cómo se comporta Frondoso? ¿Es prudente o temerario?
e) ¿Te parece que el tema del honor ocupa un espacio importante en este fragmento? Pon ejemplos.
COMENDADOR
No es malo venir siguiendo
un corcillo temeroso,
y topar tan bella gama1.
LAURENCIA
Aquí descansaba un poco
de haber lavado unos paños;
y así, al arroyo me torno,
si manda su señoría.
COMENDADOR
Aquesos desdenes toscos2
afrentan, bella Laurencia,
las gracias que el poderoso
cielo te dio, de tal suerte,
que vienes a ser un monstruo.
Mas si otras veces pudiste
huir mi ruego amoroso,
agora no quiere el campo,
amigo secreto y solo;
que tú sola no has de ser
tan soberbia que tu rostro
huyas al señor que tienes,
teniéndome a mí en tan poco.
¿No se rindió Sebastiana,
mujer de Pedro Redondo,
con ser casadas entrambas,
y la de Martín del Pozo,
habiendo apenas pasado
dos días del desposorio?
LAURENCIA
Ésas, señor, ya tenían,
de haber andado con otros,
el camino de agradaros,
porque también muchos mozos
merecieron sus favores.
Id con Dios, tras vueso corzo;
que a no veros con la cruz,
os tuviera por demonio,
pues tanto me perseguís.
1
corzo, corcillo y gama: mamíferos rumiantes que suelen perseguir los cazadores.
2
desdén tosco: señal grosera de desprecio o indiferencia.
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
COMENDADOR
¡Qué estilo tan enfadoso!
Pongo la ballesta en tierra,
.....................
y a la práctica de manos
reduzco melindres3.
LAURENCIA
¡Cómo!
¿Eso hacéis? ¿Estáis en vos?
(Sale FRONDOSO y toma la ballesta.)
COMENDADOR
No te defiendas.
FRONDOSO (Aparte.)
Si tomo
la ballesta, ¡vive el cielo
que no la ponga en el hombro!
COMENDADOR
Acaba, ríndete.
LAURENCIA
¡Cielos,
ayudadme agora!
COMENDADOR
Solos
estamos; no tengas miedo.
FRONDOSO
Comendador generoso,
dejad la moza, o creed
que de mi agravio y enojo
será blanco vuestro pecho,
aunque la cruz me da asombro.
COMENDADOR
¡Perro, villano!...
FRONDOSO
No hay perro.
Huye, Laurencia.
LAURENCIA
Frondoso,
mira lo que haces.
FRONDOSO
Vete.
(Vase.)
3
melindre: delicadeza excesiva en acciones o palabras.
MATERIAL SUPLEMENTARIO LITERATURA 3º E.S.O.
COMENDADOR
¡Oh; mal haya el hombre loco,
que se desciñe la espada!
que, de no espantar medroso4
la caza, me la quité.
FRONDOSO
Pues, pardiez, señor, si toco
la nuez5, que os he de apiolar6.
COMENDADOR
Ya es ida. Infame, alevoso7,
suelta la ballesta luego.
Suéltala, villano.
FRONDOSO
¿Cómo?
Que me quitaréis la vida.
Y advertid que amor es sordo,
y que no escucha palabras
el día que está en su trono.
COMENDADOR
Pues ¿la espalda ha de volver
un hombre tan valeroso
a un villano? Tira, infame,
tira y guárdate; que rompo
las leyes de caballero.
FRONDOSO
Eso no. Yo me conformo
con mi estado, y pues me es
guardar la vida forzoso,
con la ballesta me voy.
COMENDADOR
¡Peligro extraño y notorio!
Mas yo tomaré venganza
del agravio y del estorbo.
¡Que no cerrara con él!
¡Vive el cielo, que me corro8!
4
medroso: miedoso, temeroso
5
nuez: pieza de la ballesta con la que se dispara
6
apiolar: matar
7
alevoso: traidor, malvado.
8
correrse: avergonzarse.