Confianza y La Honestidad
Confianza y La Honestidad
Confianza y La Honestidad
Propósito:
En la actividad anterior argumentamos sobre la importancia de desarrollar relaciones asertivas y de consenso
como una forma de solucionar los conflictos y construir una sociedad más fraterna. Ahora, mediante citas bíblicas
y el Magisterio de la Iglesia, interiorizaremos la importancia de la confianza y la honestidad para fomentarlas
como medios que nos ayudan a cambiar nuestra realidad desde un marco ético y cristiano. Asimismo, plasmamos
nuestras propuestas en el desarrollo de nuestra infografía.
Ahora lee con atención el texto del Evangelio de : Lc 16, 1 – 8. 12 y el texto de Papa
Francisco: Con esta narración, Jesús “nos lleva a reflexionar sobre dos estilos de vida
contrapuestos: el mundano y el del Evangelio. (…) La mundanidad se manifiesta con
actitudes de corrupción, de engaño, de abuso (…).En cambio el espíritu del
Evangelio requiere un estilo de vida serio –¡serio pero alegre, lleno de alegría!–,
serio y de duro trabajo, basado en la honestidad, en la certeza, en el respeto de los
demás y su dignidad, en el sentido del deber. Y ¡esta es la astucia cristiana! (Papa Francisco)
ACTIVIDAD 2: Luego de haber leído y reflexionado, respondemos las preguntas que te presentamos:
1. ¿Cómo actuó el administrador cuando el dueño le pidió rendir cuentas?
2. En esta parábola ¿Qué virtud está ausente en la conducta del administrador? ¿Por qué?
3. ¿Qué relación tiene esta parábola con la conducta ética y cristiana que debe tener una persona?
4. ¿De qué manera la honestidad y la confianza ponen las bases para el disfrute de los bienes verdaderos,
ahora y después como lo señala Jesús?
5. Hay dos estilos de vida contrapuestos: la mundanidad y el espíritu del Evangelio ¿Por qué el mundo
actual necesita abrazar la vida desde el espíritu del Evangelio?
HONESTIDAD
La Honestidad es una forma de vivir congruente entre lo que se piensa y la conducta que se observa hacia el prójimo.
Honesto es, el que actúa siempre conforme a la voluntad divina y conforme a su propia conciencia
Fuente: encuentra.com
La honestidad es una de las cualidades que nos gustaría encontrar en las personas o
mejor aún, que nos gustaría poseer.
Si alguna vez debemos hacer un listado de las cualidades que nos gustaría encontrar en las
personas o mejor aún, que nos gustaría poseer, seguramente enunciaremos la Honestidad,
porque garantiza confianza, seguridad respaldo, confidencia, en una palabra integridad.
¿Qué es la honestidad?
La Honestidad es una forma de vivir congruente entre lo que se piensa y la conducta que se
observa hacia el prójimo, que junto a la justicia, exige en dar a cada quien lo que le es debido.
Podemos ver como actitudes deshonestas la hipocresía, aparentando una personalidad que no se tiene para ganarse
la estimación de los demás; el mentir continuamente; el simular trabajar o estudiar para no recibir una llamada de
atención de los padres o del jefe inmediato; el no guardar en confidencia algún asunto del que hemos hecho la
promesa de no revelarlo; no cumpliendo con la palabra dada, los compromisos hechos y la infidelidad.
Faltar a la honestidad nos lleva a romper los lazos de amistad establecidos, en el trabajo, en la familia y en el
ambiente social en el que nos desenvolvemos, pensemos que de esta manera la convivencia se hace prácticamente
imposible, pues ésta no se da, si las personas somos incapaces de confiar unos en otros.
ENSEÑAR A CONFIAR
La delincuencia creciente y omnipresente nos hace dar a los niños normas para comportarse ante desconocidos. Pero también
tenemos que enseñarles a confiar sanamente en los demás. Y aquí como siempre, los enseñamos a confiar teniendo confianza
en ellos. Confiamos en ellos cuando les creemos y les hacemos caso. Pero como están en formación, debemos comprender que
cuando fallen, no por eso les retiraremos nuestra confianza.
Ellos también deben confiar en sus padres y en las personas mayores, por eso procuremos no defraudarlos ni prometerles cosas
que no cumpliremos, porque a nosotros fácilmente se nos olvidan, pero ellos las recordarán toda su vida.
A veces llegan niños de otras parroquias a pedirme que les firme un librito de asistencias a Misa que les dan sus catequistas para
que en ellos se haga realidad eso de ir a misa por obligación. Con ellos mando un mensaje a su catequista pidiéndole que confíe
en la palabra del niño, que es digno de crédito y que no necesita llevar una firma para demostrar que sí cumplió. Si no confiamos
en ellos, ¿qué les estamos enseñando?
CONFIANZA EN DIOS
Una de las definiciones de la fe es: confiar en Dios. Ponemos nuestra confianza en la veracidad y en la bondad de Dios.
Pero también aquí hay exageraciones, como cuando el diablo tentó a Jesús y le pidió que se arrojara del pináculo del
templo y que los ángeles lo sostendrían para que no se hiciera daño. Jesús le recordó a Satanás que no hay que tentar
a Dios. (Mt 4, 7) Tentar a Dios es exponernos imprudentemente a un mal o a un peligro confiando en que Dios nos
salvará. Eso es abuso de confianza.
UN BUEN PROPÓSITO: