(JM-T) Hensuki Volumen 9

Kawaiikereba hentai demo suki ni natte kuremasu ka?
Volumen 9
1|Página
Volumen 9
2|Página
Volumen 9
3|Página
Volumen 9
4|Página
Volumen 9
Prologo
“Kiryuu-kun necesito hablar contigo algo muy importante” le dijo Fujimoto Ayano mientras en su
rostro se mostraba una inusual seriedad. Además, justo ahora ella tenía puesto un Yukata que la
posada le había dado.
Ellos estaban en el porche de la posada en la que se estaban alojando durante su viaje escolar.
Encima de ellos había un hermoso cielo estrellado el cual no tenía ni una sola nube.
“Claro, ¿Qué sucede?”.
En el momento en que Keiki, quien estaba vestido con un Yukata similar, le respondió, Ayano
asintió nerviosamente mientras tenía sus dos manos hacia a atrás, al parecer había escondido algo
todo este tiempo, pero ahora ella comenzó a ponerlas hacia adelante. Y parecido al objeto que
Cenicienta la había dejado en aquella época, ella pretendía entregarle un par de panties de color
blanco como la nieve.
“¿Podríamos… intercambiar… nuestra ropa interior?”
“Nop”
Aquella palabra salió tan rápido y fácil como si estuviera respirando. La chica que estaba ahora con
él, era la vicepresidenta del consejo estudiantil, quien en realidad tiene un fetiche bastante
peculiar, ya que ella era adicta a los olores corporales. Y con todo lo que había sucedido hasta la
fecha, el había tenido que rechazarla en numerosas ocasiones, por lo que supo de inmediato que
era lo que ella le quería decir. Ya que en aquellas ocasiones ella le había pedido algo que anhelaba,
y era la ropa interior de él. Así que toda esta atmosfera de confesión siempre se había desviado a
la misma situación de siempre.
Pero, la respuesta que Ayano le había dado después de negarse, fue algo que lo tomo por
sorpresa.
“Está bien… renuncio a tener tu ropa interior Kiryuu-kun”.
“¿Eh?, tu nunca dirías algo como eso Fujimoto-san”.
Generalmente ella siempre se esforzaría aun después de ser rechazada, sin embargo, esta vez se
rindió al despertar una leve incomodidad en Keiki.
“A cambio de eso, quiero que Kiryuu-kun se ponga mis panties en su cabeza”.
“¿Disculpa… que acabas de decir?”.
“Últimamente… has estado muy cerca de Airi y de la presidenta del consejo estudiantil, por eso es
que te voy a castigar Kiryuu-kun”.
“¡¿Pero ese no es un castigo aún más fuerte que los de Yuika-chan?!”
5|Página
Volumen 9
Kiryuu-kun comenzó a sentir un incómodo escalofrió recorriendo toda su columna vertebral

cuando vio aquel comportamiento sádico de ella, lo cual era muy extraño de la vicepresidenta del
consejo estudiantil, por lo que intento huir de allí inmediatamente, sin embargo, no pudo hacerlo
cuando Ayano arrojo su bien formado cuerpo hacia él y lo hizo caer en el suelo.
“¡Espera Fujimoto-san!”
“Kiryuu-kun es un hombre para las chicas, por lo que lo único que tienes que hacer es usar estas
panties en tu cabeza y volverte ´Mascara pervertida´”.
“¡¿Mascara pervertida?!”.
Usar ropa interior en la cabeza, como si fuera un sombrero sin duda haría que la gente que lo viera
lo tachara como pervertido, y si esto sucediera, Keiki prefería no seguir existiendo más en este
cruel mundo.
“Fufufu…”
Mientras aún estaba acostada sobre su pecho, Ayano pasó sus pequeños dedos por el lugar donde
deberían entras las piernas y fue acercando lentamente la ropa interior hacia el rostro de Keiki.
“Y aquí… tienes”.
“Ugh… ¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHH!!”.
Extendiendo sus dos manos, en las cuales tenía la ropa interior, puso suavemente sobre el rostro
del chico aquella prenda íntima, y fue en ese instante, que un espeluznante grito resonó en toda la
posada…
***
“Nii-san… oye Nii-san, ya es de mañana”.
“Hmm… mm… no… por favor… no… tus panties…”
“¿Pero qué clase de sueño húmedo estas teniendo?, oye Nii-san si no te apuras, vas a llegar
tarde”.
“¿Mm…mmmm…?”.
Después de escuchar una voz suave y que sacudieran tiernamente sus hombros, Keiki abrió los
ojos y lo primero que pudo ver fue a su hermosa hermana menor, Mizuha.
“… ¿Eh…Mizuha?”.
Mirando con una expresión sombría a su alrededor, él pudo ver que estaba en su propia
habitación y que el reloj marcaba las 7 de la mañana. Además la luz del sol que pasaba por entre
las cortinas de la ventana iluminaba tenuemente su habitación.
“Gracias a dios… que todo fue un sueño”.
6|Página
Volumen 9
Últimamente el había soñado que Yuika le insertaba en su boca sus panties recién usadas, pero el
hecho de que ahora la chica que lo atacaba fuera Ayano fue una gran sorpresa. Mientras soltaba
un gran bostezo, Keiki se levantó lentamente mientras que Mizuha soltaba una leve risa como
respuesta.
“Buenos días Nii-san, amaneciste muy dormilonsito el día de hoy”.
“Buenos días Mizuha. Si… es que pase una mala noche… ¿Pero qué…?”
La última parte de lo que estaba diciendo se debía a que una cosa muy extrañaba estaba
sucediendo frente a él.
“¿Una enfermera…?”
Justo ahora, Mizuha tenía puesto su hermoso y seductor traje de enfermera. Este era un disfraz de
color blanco con una falda muy corta. Y sin mencionar que tenía un lindo gorrito de enfermera,
por lo que ahora mismo su hermana menor estaba haciendo cosplay en su propia habitación.
Podrá sonar como un cliché, pero después de frotarse sus ojos para saber si estaba viendo bien, lo
que estaba frente al no cambio, pero lo más extraño de toda esta situación era la tranquila
reacción de Keiki, que después de ver esto, dijo “Ya veo”, mientras asentía.
“Entonces aún estoy soñando eh”.
“Nop, esto no es un sueño”.
“Ha, como si una situación que siempre sucede en una novela ligera me fuera a suceder a mí”.
“¿Eh?, Nii-san estas huyendo de la realidad”.
“¿Si?, entonces pruébalo”.
“¿Qué te pruebo?”
“Pellízcame la mejilla a ver si es verdad”.
“¿Estás seguro?”, a pesar de que estaba un poco confundida, Mizuha extendió una de sus manos
hacia la mejilla de Keiki y lo pellizco suavemente. “¿Y bien?”
“Si… dolió”.
A pesar de que no lo había pellizcado tan fuerte, Keiki aun así sintió un dolor muy real, tan real que
fue allí cuando creyó que no era un sueño.
“Entonces, ¿Puedo saber por qué estas vestida así Mizuha?”
“Bueno, es porque quiero que Nii-san solo piense en mí y en nadie más”.
“Oye, ¿Podrías no ir con todo desde tan temprano en la mañana?”
“Jeje, fue una broma, en realidad quería que Nii-san se excitara”.
“¡¿Excitarme?!”.
7|Página
Volumen 9
Al parecer, su hermana menor quería que Keiki tuviera una erección apenas se despertara, pero
ignorando todo lo de excitación, al ver a Mizuha vestida de esa manera, toda sensación de
adormilamiento se fue por completo de su cuerpo.
“Estoy sorprendido de que tengas esa ropa ¿sabes?”
“Oye… y… ¿Me queda bien?”
“Que pregunta más tonta esa. Si en los hospitales hubieran enfermeras tan lidas como tú, lo más
seguro es que me rompería una pierna para que me hospitalizaran”.
“Gracias, hice este vestido, solo para ti Nii-san”.
“Oh, así que tú misma lo creaste ¿eh?”
“Bueno… aunque la verdad no soy tan buena en la confección de ropa como lo es Yuika-chan”.
A pesar de que ella había dicho esto, el disfraz parecía ser muy bien hecho para ser el trabajo de
una aficionada. Mizuha era una chica que era muy buena cocinando, además era obsesiva con la
limpieza y tenía habilidades muy altas con la costura, sin duda es una hermana perfecta.
“Si te sientes enfermo en algún momento, déjame darte un supositorio mientras tengo esto
puesto~”
“Em… ¿Por qué no me das medicina normal?”
Keiki no tenía ningún recuerdo de haber un usado un supositorio a excepción de cuando era un
niño muy pequeño, pero aquella vez, fue su madre quien le ayudaba en esos casos.
“Oye, ¿No estás un poco feliz por esto?”
“Bueno… es el día del viaje escolar, tu sabes…”
“Ahh…”
En ese instante el miro hacia su escritorio, allí había una mochila llena con su ropa, la cual
esperaba para ser recogida. Keiki había terminado de empacar todas sus cosas ayer, para no tener
que apurarse esta mañana.
“Deberíamos darnos prisa. El desayuno ya está listo, así que ve y lávate la cara”.
“Bien, y tu cámbiate ese uniforme”.
“Claro~”
Tal parece, que Mizuha quedo satisfecha con solo mostrarle el disfraz que había hecho ella misma,
por lo que después de eso, ella salió de su habitación sin decir una sola palabra. Después de
haberse despedido de ella, Keiki miro hacia su mochila nuevamente.
“El viaje escolar…”
8|Página
Volumen 9
Un viaje escolar es uno de los eventos más importantes en la vida de un estudiante en Japón. Y en
su escuela, únicamente los que asistían a segundo año iban a ir, por lo que su hermana menor, su
compañera de clase Mao y la vicepresidenta del consejo estudiantil, Ayano también iban a ir.
“Sería bueno si no pasa algo raro…” Keiki dijo eso para sí mismo.
En el pasado él había experimentado toda clase de situaciones, por lo que en toda situación en la
que se metía, siempre tenía la angustia de que no fuera a terminar del todo bien. Ya que hay una
alta probabilidad de que las chicas anteriormente mencionadas causen un gran alboroto. Una
Fujoshi, una exhibicionista, y una chica con un fetiche por los olores corporales… teniendo en
cuenta esto, sería muy extraño que algo no sucediera, ya que todas intentarían atacar a Keiki de
manera pervertida.
“Bueno… la verdad no creo que vaya a estar solo todo el tiempo”.
Para Keiki, toda esta situación con las chicas era un completo dolor de cabeza, pero, Keiki en
realidad había planeado siempre estar acompañado para evitar toda esta clase de sucesos.
“¡Durante este viaje, voy a progresar en mi plan de desperversion!, el cual fue suspendido
temporalmente”.
Hasta hace poco tiempo, él había acumulado muchas cosas por hacer, por lo que Keiki no pudo
dedicarse de lleno a su plan. Aquel plan tenía como idea principal convertir a todas las chicas
pervertidas en miembros respetables de la sociedad, y este viaje escolar era la oportunidad
perfecta para lograrlo. Así que no iba a dejar que se le pasara por nada del mundo.
9|Página
Volumen 9
Capítulo 1: Curry, después de aquello, Panties.

Un autobús lleno de estudiantes se dirigía a una lejana posada ubicada en medio de las montañas.
Keiki y Shouma estaban sentados en la última fila y parte izquierda del autobús conversando
tranquilamente al igual que sus compañeros de clase, quienes estaban vestidos de manera casual.
“Cada vez vemos menos edificios eh”.
“Si, de seguro nos estamos acercando a nuestro destino”.
Había pasado más o menos una hora desde que el autobús había partido de su escuela. Ya lejos de
las familiares vistas de la ciudad, ahora estaban rodeados de vegetación verde y fresca. Incluso ya
hubieran podido entrar a las montañas, ya que una interminable filas de árboles se podían ver
desde sus ventanas. Algunas veces pasaban por pequeños campos donde podían ver a los
granjeros trabajando, los cuales levantaban sus cabezas para ver el autobús, y tal como había
dicho Shouma, ya debían estar muy cerca de su destino.
“En un lugar alejado de toda civilización por dos noches y tres días, creo que no es un mal
momento para un descanso”. Dijo Keiki para sí mismo.
“¿Por qué?” le pregunto Shouma.
“Es muy posible que no tenga una oportunidad como esta en mucho tiempo, aunque tenía en
marcha el plan de des perversión”.
“Ah, así que aun estas intentando hacer eso eh”.
Shouma difícilmente podría ser culpado de olvidarse de algo así. Ya que el objetivo de Keiki era
encontrar una novia como él siempre la había soñado, pasar una juventud tranquila y alegre con
ella. Pero para hacer esto, tenía que convertir a las chicas pervertidas en seres normales, para que
así no intentaran separarlo de su futura pareja. Ese era el objetivo principal del plan de
desperversion. Desafortunadamente este plan no había hecho ningún progreso. Ya que desde que
él había ideado este plan, ninguna de las chicas había sido curada.
“Oye, sabes que soñé con Fujimoto-san anoche”.
“¿Y qué paso con ella?”.
“La verdad mucho, ya que ella estaba intentando obligarme a usar sus panties en mi cabeza”.
“Si, eso es un sueño bastante extraño”.
“Casi termino convirtiéndome en mascara pervertida. Sin embargo, la verdadera cuestión es que
esto podría suceder en la vida real”.
“Eh, ¿En serio?”.
En realidad el sentido común no funcionaba muy bien con esta clase de pervertidas. Y Keiki sabía a
la perfección esto. Hace un tiempo, su Kouhai había metido sus panties recién usadas en su boca,
lo cual casi hace que se ahogue. Por lo que no sería extraño que una chica lo obligara a usar sus
10 | P á g i n a
Volumen 9
panties en su cabeza. Todo esto podría sonar como una broma de mal gusto, pero Keiki sabía que
esto podría convertirse en realidad tarde o temprano.
“Al inicio pensé que podía hacer algo con las chicas del club de caligrafía, pero Fujimoto-san
también es parte del problema. Ya que aún ahora, ella todavía intenta quitarme mi ropa interior…”
Dejando de lado a Rintarou y Airi, quien era amante del Yuri. La Olfactofila Ayano también podría
interponerse en su futura vida amorosa.
“Tengo mis manos ocupadas con el club de caligrafía, sin embargo, ahora también tengo que lidiar
con el consejo estudiantil…”
“Al parecer tu situación está bastante difícil.”
Recientemente Keiki, que para su disgusto, descubrió que la presidenta del consejo estudiantil,
Takasaki Shiho, tenía un fetiche muy extraño con el NTR. Él había prometido no hablar con nadie al
respecto de esto, ni con Shouma. Pero también estaba preocupado por lo que ella podría estar
planeando en un futuro. En resumen, las chicas pervertidas que ahora lo acompañaban a las
montañas eran un manojo de problemas.
“Si me doy por vencido, todo esto terminara”. Dijo Keiki, mostrado una fuerte convicción”.
“Y ¿Tienes algún plan para poder cumplir tu meta?”.
“Nop, ninguno”.
“¿En serio?”.
“Sip, estoy otra vez en un callejón sin salida. Todas son pervertidas hasta los huesos y no puedo
encontrar ningún punto débil en su defensa y derrotarlas”.
“Suenas como si fueras un agente secreto en una misión”.
“Para mi es algo parecido, de todas maneras, ¿Tienes alguna idea?”.
“Pues nop”.
“Si, lo imagine”.
Después de haber intentado toda clase de cosas, nada había hecho un efecto significativo en sí. Él
no hubiera tenido tantos problemas si los planes directos funcionaran. Por lo que de seguro poder
curar la perversión de ellas, iba a requerir planes muy inteligentes y poco ortodoxos, fue allí
cuando Keiki recordó algo.
“Oh, ahora que recuerdo, Shouma, ¿Qué sucedió con Yuuhi-chan?”.
“¿Le paso algo a Yuki-nee?”.
“Bueno… no es algo importante, solo me preguntaba si ella está bien”.
11 | P á g i n a
Volumen 9
“¿Eh?, bueno creo que si… ella ha estado actuando como siempre, poniéndome nervioso todo el
tiempo. Asa-nee y ella me siguen acosando como siempre, así que creo que está de buen humor,
¿Por qué, que paso con ella?”.
“Nada, solo olvídalo”. Keiki se sintió aliviado después de haber escuchado eso.
Gracias a Dios que Yuuhi-san está bien.
A ella su novio la había dejado el mismo día que había ocurrido todo lo del festival cultural. Sin
embargo, en ese mismo día ella se había enamorado nuevamente. Keiki por su parte, había jugado
a ser el cupido y le ofreció sus consejos. Durante todo ese tiempo, el descubrió que Yuuhi, quien
siempre había presumido de su experiencia con los hombres, era en realidad virgen. Al final, el
chico que le gustaba parecía tener los ojos sobre otra chica, por lo que Yuuhi termino con el
corazón roto una vez más. En la última llamada telefónica que había tenido con ella. Le dijo.
“Disculpa por no haber podido hacer que funcionara después de tu ayuda”. Por lo que Keiki
obviamente estaba preocupado por ella.
Al parecer Yuuhi-san se fija muy mal en los hombres.
Según lo que pudo ver mientras él le daba consejos, Yuuhi era una chica muy tímida y linda, y al
parecer el chico del cual ella se enamoro estaba en el mismo año que Keiki. Que indecencia.
“Por cierto, Shouma, tener a dos hermosas hermanas mayores prestándote tanta atención, sin
duda debe ser una recompensa”.
“La verdad prefiero tener dos hermanitas de primaria, eso sería mucho más satisfactorio”.
“Su señoría, la sentencia de este lolicon es…”
Aquel Lolicon, Akiyama Shouma, saco un Smartphone de su bolsillo. Como fondo de pantalla el
tenía una foto de su linda novia. Esta foto era la que ella se había tomado en traje de bajo en la
habitación de Mizuha durante su última pelea. Shouma soltó un largo suspiro mientras miraba con
amor la foto de su novia.
“Estoy ansioso por este viaje escolar, pero el no poder ver a Koharu-chan por estos tres días será
algo muy difícil…”
“Si… bueno, en realidad el viaje escolar aún no ha empezado en sí”.
Ver a Shouma actuando de esa manera era bastante preocupando. Él era el tipo de bicho raro que
incluso podría contraer la enfermedad de “Deficiencia de Koharu-tan”.
“Me alegra ver que ustedes dos están tan bien como siempre”.
“Jajaja, todo esto sucedió porque tuve problemas para decidir entre ella y una niña de primaria”.
“Creo que lo mejor es que pienses sobre ello”.
“Koharu-chan es tan linda… quiero abrazarla ya mismo…”
“Por favor guárdate esas fantasías para ti, en serio, es desagradable”.
12 | P á g i n a
Volumen 9
Keiki se apartó un poco de Shouma quien empezó a emocionarse al ver la foto de la Loli Koharu en
traje de baño. Si Shouma no fuera su amigo, Keiki hubiera llamado a la policía en este mismo
instante.
“Espera, ¿Desagradable?”.
Por algún motivo, Keiki repitió lo mismo que él había dicho. Fue allí cuando se le ocurrió una idea.
“Ya veo, esa podría haber sido la solución en todo este tiempo…”
“¿Hm?, ¿De qué hablas?”.
“Creo que he encontrado la forma de curar las perversiones de ellas”.
“Oh, déjame oír tu plan”. Shouma parecía estar muy interesado, hasta el punto que quito la
mirada de su teléfono.
“Prácticamente lo que tengo que hacer es convertirme en un pervertido.
“……”
En ese instante la expresión de emoción de Shouma desapareció por completo y fue reemplaza
por una de total incertidumbre. Poco después, esa misma mirada se convirtió en una de lastima.
“Keiki… no creo que sea prudente intentar convertir a una chica en tu mascota y empezar a
golpearla…”
“No lo voy a hacer, te estás haciendo una idea equivocada. Así que deja de mirarme de esa
forma”.
Lo que más le dolía a Keiki era tener la mirada de un lolicon pervertido encima de él, por lo que
empezó a explicar rápidamente para no permitir que el malentendido no se volviera peor.
“Simplemente voy a actuar como si me hubiera convertido en un pervertido. Así asumiré los
fetiches de todas y me convertiré en alguien similar a ellas.
“¿Qué quieres decir con eso?”.
“Por ejemplo, ¿Tu que harías si a mí me atrajera el olor corporal y siempre estuviera intentando
quitarle la ropa interior a las chicas?”.
“No sería más tu amigo y trataría alejarme de ti lo más que… ¡Aaah, ya entiendo lo que quieres
decir!”.
“Al parecer captaste la idea”.
En realidad, esto no era algo tan difícil de entender. Todo lo que Keiki había estado pasando fue
porque él era la victima del grupo de pervertidos.
“Así que si empiezo a actuar como lo hace cada chica todo el tiempo, ellas se van a disgustar
¿verdad?, o bueno, me rechazarían y cuando esto suceda, de seguro reflexionaran sobre todo lo
13 | P á g i n a
Volumen 9
que han estado haciendo este tiempo y con suerte, encontraran la motivación para corregir su
comportamiento. En teoría me convertiré en el mal ejemplo del cual van a aprender”.
Cuando Yuika intento atarme hace unos días y resulto yo atándola a ella y le dije que pensara lo
que había hecho, parece que funciono. Así que eso significa que este plan podría funcionar.
Aunque ellas podrías estar acostumbradas a ser las pervertidas, ser la victima de uno podría ser
una experiencia mortal. Ya que tendrían que pasar por todo lo que Keiki tiene que pasar. Ser
acosadas sexualmente, aplastaría todas sus esperanzas y se darían cuenta de sus fechorías, y así,
se convertirían en chicas normales, sin duda era el plan perfecto,
“Ojo por ojo, pervertido por pervertido, ¡Voy a llamar esta operación, ´Plan del ejemplo
negativo´!”.
“Bueno, en realidad creo que el nombre del plan necesitara un replanteo, pero en si la idea creo
que podría funcionar”.
“Jejeje, ¿verdad?”.
“¿Pero en serio podrás actuar como un pervertido tan fácil?”.
“No tengo problema. Simplemente tengo que actuar como las chicas que me rodean”.
Keiki ya había sido víctima de las perversiones de las chicas en innumerables ocasiones, por lo que
tenía sus patrones de ataque memorizados a la perfección, así que actuar como uno de ellas no
debería representar ningún problema”.
“Jejeje, tengo muchas ganas de que este viaje escolar inicie”.
“Oye tu expresión hace parecer que tú eres el villano sabes”.
Keiki mostro una sonrisa que ningún protagonista haría. Y así unos minutos más tarde, el autobús
lleno de estudiantes de la clase 2b llego a su destino de manera segura.
***
Ubicada en lo profundo de las montañas. Había una edifico de cuatro pisos que parecía ser
bastante nuevo, especialmente porque estaba muy metido en el bosque. Este lugar era bastante
famoso por sus baños en la naturaleza. Dichos baños eran una especie de terapia natural para las
personas que caminaban por todo el bosque o los que acampaban por la zona. Sin embargo. Como
noviembre estaba llegando a su fin, el número de huéspedes en el hotel se había reducido
considerablemente, lo que permitió que la escuela pudiera alquilar este lugar sin problema
alguno.
Una vez se bajaron del bus y recogieron sus maletas, Keiki y Shouma optaron por llevar sus
pertenencias a su habitación.
“Sin duda, una habitación limpia y con un estilo tradicional japonés es lo mejor”.
Los dos habían sido asignados a una habitación con estilo japonés en el segundo piso. La
habitación media ocho esterillas de tatami, o mejor dicho, 13 metros cuadrados. Ambos siempre
14 | P á g i n a
Volumen 9
dormían en su cama tipo occidental, sin embargo, los fotones eran un buen cambio que era
gustoso realizar de vez en cuando.
“Somos muy afortunados del poder tener una habitación solo para nosotros dos”.
“Si, la verdad es mucho mejor esta habitación pequeña que estar con un montón de gente”.
Durante su estancia en la posada, Keiki y Shouma tendrían esta habitación para ellos no más.
Usualmente, las habitaciones se asignan para cuatro personas, pero como la cantidad de chicos de
la clase B, no era equitativa, se determinaron de esta manera las habitaciones. Por otro lado, las
habitaciones en el tercer piso y superiores estaban reservadas para las chicas, por lo que no se les
permitiría a los chicos ir hacia allá.
“Y sin mencionar que los otros chicos piensan que eres el rey de un Harem, así que si todo esto
hubiera sido diferente, hubiera podido terminar muy mal para ti”.
“Oye, tu sabes que ese rumor es falso”.
Como Kiryuu Keiki era el único chico en el club de caligrafía, el cual estaba lleno de hermosas
chicas, además, él estaba en muy buenos términos con todas ellas, por lo que muchas personas de
su escuela lo llamaron “Rey del Harem”. Sin embargo, todo esto era más un infierno que un
Harem, pero nadie aparte de el sabía que los extraños fetiches de cada una de ellas, por lo que
cada vez que salía los chicos a su alrededor lo miraban con envidia.
“Escuche que hay trucos y consejos para crear un harem de chicas normales… ojala alguien me los
pudiera enseñar”. Keiki murmuro para sí mismo.
“Yo también estoy interesado en eso, me gustaría crear un Harem lleno de lolis”. Shouma estuvo
de acuerdo.
“Le voy a decir a Koharu-senpai que tu dijiste eso”.
“Ahaha, era solo una broma”.
“Viniendo de ti, eso no suena como una broma Shouma”.
Teniendo en cuenta que Shouma había visto a una niña de primaria mientras estaba con su novia,
Keiki no estaba convencido de la excusa que el había dado.
“Bueno, ya hemos guardado nuestras pertenencias, es hora de salir”.
“Ah, claro, van a preparar curry para el almuerzo”.
Keiki se sentó en uno de los cojines que había en el piso mientras observaba la guía. Fue entonces,
cuando alguien golpeo la puerta.
“Oh, ¿Quién será?”.
“Shouma ¿puedes abrir?”.
“Claro”, mientras se paraba, Shouma mostro una sonrisa irónica al ver la pereza de Keiki.
15 | P á g i n a
Volumen 9
Después de un breve momento, Shouma abrió la puerta que daba al pasillo, hablo con alguien por
un segundo y luego regreso.
“Es para ti Keiki”.
“¿Para mí?”.
Quitando su vista de la guía, la persona que Keiki vio, no era otra que…
“¿Fujimoto-san?”.
“D-disculpen la intromisión”.
Quien había estado tocando era Fujimoto Ayano, quien tenía puesto unos pantalones cortos,
medias negras y una sudadera con una capucha sobre su cabeza. Aquella chica parecía estar un
poco nerviosa cuando hizo la reverencia.
“¿Qué sucede?”.
“Ah bueno…”
En el momento en que Keiki le pregunto, ella miro rápidamente a Shouma.
“Bien, creo que voy a ir a la cocina a comer algo”.
“Está bien, nos vemos allá”.
Entendiendo rápidamente el ambiente y también las intenciones de Ayano. Shouma se fue

rápidamente de la habitación, y una vez se despidió de él, Keiki empezó a hablar con la chica.
“¿Te quieres sentar?”.
“…Esta bien”. Asintiendo lentamente, Ayano se sentó en uno de los cojines del piso frente a Keiki.
Una vez ella se sentó, Keiki empezó a hablar “Y bien, ¿Qué te trae por acá?”.
“Bueno… es que necesito hablar algo muy importante con Kiryuu-kun…”
“¿Qué es?”.
“Es algo muy importante”.
“Ya veo…” fue en ese entonces cuando la intuición de Keiki le dijo que iba a suceder exactamente.
¡Con toda seguridad aquí es donde va a intentar llevarse mi ropa interior!
Su sexto sentido le había dicho exactamente que el tema importante del que ella quería hablar, sin
duda, era sobre su ropa interior. Sin embargo, ella no usaría una pastilla para dormirlo e intentar
quitarlo por la fuerza, esta vez sus intenciones era tan claras como el día. Ya que después de todo,
ella tenía un extraño fetiche con los olores, el cual le provocaba excitación al oler a un chico. Como
ella había venido, obviamente tenía un plan en mente para hacer realidad su plan.
¡Esta situación es la oportunidad perfecta para mí!
16 | P á g i n a
Volumen 9
Keiki y Ayano estaban en diferentes clases. Ella estaba en la clase A, por lo que obviamente no
tendrían muchas oportunidades para pasar algo de tiempo junto. Y él ya había estado pensando
en cual sería la mejor manera para acercarse a ella para así comenzar su plan, pero que el enemigo
hubiera venido directamente hacia él, fue un milagro.
¡Bien, debo comenzar a olerla cuando ella intente hacerme algo! ¡Te voy a dar una cucharada de
vergüenza al sentir a una persona del sexo opuesto oliéndote!
Quien atacara primero sería sin duda el ganador. Así que antes que Ayano le pidiera su ropa
interior, el hizo el primero movimiento.
“¡Fujimoto-san!”.
“¿Eh… que sucede?”.
“Antes que me digas eso, tengo un favor que pedirte”.
“¿Qué clase de favor…?”.
“¿Me podrías… dar tus panties Fujimoto-san?”.
“… ¡¿Eh?!”.
Por un segundo, Ayano quedo con una expresión que el jamás había visto de ella. Sus ojos se
abrieron de par en par cuando escucho aquellas palabras de la boca de Keiki. Y siendo incapaz de
entender el porqué de esto, su rostro se puso tan rojo como un tomate.
“¡¿Eeehhh?¡, ¡¿Mis Panties?! ¡¿Por qué?!”. La vicepresidenta le mostro una gran reacción, después
de haber gritado. En resumen, comenzó a entrar en pánico.
Obviamente esta era una reacción normal de una chica a quien le pidieron algo tan atrevido. Sin
embargo, Keiki aún no había terminado, debía aprovechar esta oportunidad, por lo que cerro
rápidamente la distancia entre ellos.
“¡Quiero oler tus Panties Fujimoto-san!”.
“¡¿…?!”
Cuando él dijo esto que sin duda era lo peor que le podrías decir a una chica. Ayano quedo sin
palabras. Y esta era la reacción que Keiki estaba esperando. Al parecer el plan del ejemplo
negativo estaba funcionando a la perfección. Estas chicas pervertidas estaban acostumbradas a
acosar sexualmente a alguien, pero no estaban acostumbradas a que alguien las acosara a ellas.
Así que al revertir los roles del chico y la chica, la frase ´Dame tu ropa interior´ era un crimen, pero
Keiki tenía que ignorar eso. Sin embargo, si alguien los viera sin duda seria denunciado ante la
policía. Este y otros pensamientos corrían por su cabeza y su corazón latía extremadamente
rápido.
“¿E-eso es un no…?”
“B-bueno… es que me lo preguntaste tan de repente…”
17 | P á g i n a
Volumen 9
“Pero, tú me preguntas lo mismo con bastante regularidad”.
“Es verdad pero…”
“Bien, ¿Qué te parece si hacemos un intercambio?”.
“¡¿Eh?!”.
“¿No me dijiste eso antes?, dijiste que no te importaba intercambiar mi ropa interior por tus
Panties”.
“Si, dije eso, pero…”
“¿Pero qué?”.
“Que alguien huela… mi ropa interior es un poco… vergonzoso…”
“……”
En realidad eso es lo que yo debo decir. Pensó Keiki para sí mismo ya que ser abrazado de la nada y
que alguien se meta casi entre tu pacho para olerte en todo momento es algo muy vergonzoso.
“Así que básicamente, no puedes cumplir mi petición ¿verdad?”.
Asiente, Asiente.
“Bueno, creo que no se puede evitar, entonces voy a renunciar a tus panties”.
“…Uf”.
“Pero, creo que mejor te voy a oler directamente”.
“… ¿Eh?”.
Justo ahora, Keiki entro en modo olfactofilo. Un verdadero pervertido jamás se detendría después
de que le negaran un par de Panties. Así que después de exigir el fresco olor de Ayano, Keiki se
levantó de su cojín, se acercó a ella, y uso el shock en el que ella estaba, para abrazarla.
“¡¿K-Kiryuu-kun?!”.
Sniff, Sniff, Sniff.
“¡¿~~~?!”
Cuando el empezó a pasar su nariz por el cuello de ella para olerla. Ayano soltó un grito inaudible.
Y a pesar de que intento separarse de el desesperadamente no pudo ganarle a la fuerza bruta de
un chico y solo pudo encogerse por el miedo mientras la olían.
“Hueles maravilloso Fujimoto-san”.
“N-no digas eso… ¡¿Hya?!”.
18 | P á g i n a
Volumen 9
Cada vez que su nariz tocaba su piel, su cuerpo se retorcía debido a las cosquillas. Si bien los
deseos sádicos le comenzaron a decir que siguiera, un poco de ansiedad molestaba en el interior
de su mente.
No me van a arrestar por hacer esto… ¿Verdad?
Un sentimiento de culpa e incomodidad comenzó a inundar su corazón, sin embargo, esto era algo
que la chica normalmente hacía con él. Esto no solo terminaba con un abrazo y una o dos veces
que ella lo olía. Además de eso, ahora que ya había llegado tan lejos, parar ya no era una opción,
por lo que el decidió seguir disfrutando del delicioso aroma que había frente a él.
“Fuhahahaha, ¡Esto carga mi energía muy bien!”.
“K-Kiryuu-kun… Deten…te…”
Keiki se metió aún más en su actuación, mientras que el mismo tiempo, Ayano a duras penas
podía pronunciar palabra. En el momento que su sudor empezó a acumularse en su cuello, el
atractivo erótico de Ayano se incrementó aún más, lo cual hizo que Keiki se diera cuenta en
realidad de lo que estaban haciendo.
Fujimoto-san se ve muy linda cuando se sonroja…
Al no quedar satisfecho con la expresión avergonzada de ella, su corazón empezó a latir más
rápido, a pesar de que el normalmente no era sádico. Y de que estaba consciente de que estaba
haciendo algo malo, el comenzó a sentirse cada vez peor, e incluso ya había empezado a sentir
pena por Ayano, sin embargo, no podía parar. El tenía que seguir hasta que ella se rindiera de su
fetiche con la ropa interior, así que para que eso suceda…
“¡Debo devolverte todos los problemas que me has dado, así que me tomare mi tiempo y te oleré
toda!”.
“¿Ah?, ¡Nooo!”.
Para asegurarse que su plan sería un éxito en su primer intento, él se pegó aún más a su cuello y
olía con más brusquedad. Él se había resignado que lo hecho hasta ahora, ya era irreversible.
¡Fuhahahaha!, ¡Ahora espero que te des cuenta que esto es lo que me has estado haciendo todo
este tiempo!, ¡Sufre lo que yo he sufrido!
Mientras creía que ya iba a obtener la victoria, Keiki se sintió cada vez más emocionado, sin
embargo, justo cuando iba a dar el último golpe…
“… ¿Qué haces?”.
“¿Eh?”.
La voz de una chica sonó en la habitación y no era la de Ayano. En el instante que se dio cuenta y
un poco reacio a apartarse de la chica, el vio una cola lateral de color rojiza. Allí había una chica,
vestida con jeans largo y blusa blanca. Al fijarse pudo notar que la mirada de Nanjou Mao era tan
fría como siempre.
19 | P á g i n a
Volumen 9
“Ummm… ¿Y qué te trae por estos lares Nanjou?”.
“Quería ver si tú y Akiyama coqueteaban, así que vine a mirar obviamente”.
“Oh ya tienes tus locas fantasías, pero, ¿Por qué haría eso con un chico?”.
“Si es verdad, al parecer prefieres a la vicepresidenta sobre Akiyama”.
“¡UUUUUOOOAAAAAAA!”
Después de que Mao dijo eso, Keiki inmediatamente soltó a Ayano. Después de haber sido
liberada de las perversas manos del pervertido, Ayano se dejó caer al suelo con su rostro
completamente rojo. Cuando Mao vio la reacción de la víctima, volvió a poner su fría mirada sobre
Keiki.
“Ya veo, así que oler chicas de esa manera es lo tuyo Kiryuu…”
“¡Estas equivocada!”.
“¿Y en que es en lo que me equivoco?, me gustaría escuchar como refutas eso”.
“B-bueno, sé que hay demasiadas pruebas en mi contra, pero por favor, ¡Escúchame primero!”.
Sin importar que dijera, era verdad que había estado oliendo a una chica. Por lo que aclarar este
malentendido era prácticamente imposible.
“…Si te gustan estas cosas… solo tienes que decirme y yo…”
“¿Eh, dijiste algo?”.
“¡No, olvídalo, ya no me importas Kiryuu!”. Con su tono de voz lleno de ira, Mao le dio la espalda.
Mientras que Keiki al intentar detenerla, extendió una de sus manos.
“Espera… ¡Nanjou espera un segundo!”.
“¡No te me acerques pervertido!”.
“¡¿Pervertido?!”.
Mientras decía estas palabras, su compañera salió de su habitación. Sus últimas palabras habían
sido un cuchillo que había entrado directamente en el pecho de Keiki, por lo que él se dejó caer al
suelo, tal y como Ayano lo había hecho.
“Ella… me dijo pervertido, Nanjou… me dijo pervertido…”
Al hacer caso omiso de las suplicas de la chica y forzándola a ella a dejarse oler, sin duda lo hacía
un pervertido total. Y aunque él había dicho que quería ser tachado como uno, pensar que se lo
dijeran directamente causaría mucho más daño de lo que él había previsto. El jamás había
imaginado que alguien lo fuera a tratar como un pervertido y menos una chica. Al mismo tiempo, y
recuperándose de la conmoción, Ayano se puso de pie temblorosamente.
“Yo…Yo me voy también…”
20 | P á g i n a
Volumen 9
“¡Ah, Fujimoto-san!”.
Mientras aún estaba sonrojada, ella arreglo rápidamente su ropa y salió corriendo de su
habitación. Una vez solo en su habitación, Keiki solo podía mirar a la puerta y murmurar
suavemente para sí mismo.
“… ¿Cómo termine así…?”.
Al final de todo, no tenía una excusa para su accionar. Ya que desde el punto de vista de Ayano,
ella había sido asaltada por un chico mientras la puerta estaba cerrada, y para el punto de vista de
Mao, él se había convertido en un pervertido que adoraba oler a las chicas. Como resultado, el
ahora tenía la ferviente ira de Mao y Ayano había escapado de él. Toda la confianza que él había
construido con trabajo duro, se había desmoronado por un simple error.
“…Creo que iré a comer curry”.
Gracias a esto, él tuvo que priorizar el aclarar el malentendido entre ellos lo más rápido posible. El
sabía muy bien lo que había pasado, pero ser tachado como un pervertido ya era demasiado para
él, por lo que por el momento, el prefirió evadir la realidad y escudarse con el curry, esperando
que la ira de Mao fue un poco menor para aquel entonces.
***
En un Camping cercano a la posada, donde habían preparado los alimentos. Todos los estudiantes
de segundo año y de todas las clases diferentes se habían agrupado con sus respectivos
compañeros y ahora estaban comiendo curry.
“Todos se están divirtiendo a pesar que está haciendo frio”.
“Así parece”.
Keiki y Shouma ahora estaban sentados frente al fuego hablando, mientras miraban de reojo a sus
compañeros de clase, quienes cortaban enérgicamente los ingredientes y lavaban el arroz. Como
ellos estaban bastante lejos de la civilización y en medio de las montañas, el aire era mucho más
frio. Sus otros compañeros de clase tenían abrigos para protegerse y las chicas tenían faldas con
medias. No había nadie lo suficiente fuerte y tonto como para caminar descalzo. Obviamente
Shouma y Keiki no eran la excepción.
“¡Oigan chicos del sexto grupo, muy buen trabajo ahí”.
La voz que comenzó a sonar desde un costado era de una chica de cabello largo.
“Ahh, Onizuka-san, ven a cenar”.
El nombre completo de aquella chica era Onizuka Megumi. Ella era una integrante de la clase 2B y
había sido asignada al mismo grupo que ellos en este evento. Ella tenía puesto un saco que le
quedaba a la perfección y una falda. Además, ella era un poco más baja que una estudiante de
segundo grado de preparatoria promedio. El sexto grupo mencionado anteriormente estaba
formado por Keiki, Shouma, Mao y Megumi. Megumi les mostro una linda sonrisa mientras
hablaba.
21 | P á g i n a
Volumen 9
“Como todo está yendo bien, vine a ver cómo les iba a ustedes muchachos”.
“Ya veo, pero, lo único que estamos haciendo es estar aquí pendientes del fuego”.
“Siendo sincero, me siento un poco mal al dejarle a ustedes chicas la responsabilidad de hacer
toda la comida”. Comento Shouma mientras tenía una sonrisa de incomodidad en su cara.
“Jajaja, bueno, la verdad no puedo ganar contra las habilidades culinarias de Nanjou-chan, ella es
asombrosa. Así que en vez de ayudarla, más bien siento que ella podría hacer todo mucho mejor
sola”.
“Si, en eso estoy de acuerdo”.
“Puede que no lo parezca, pero Nanjou tiene muy buenas habilidades si hablamos de la familia”.
Nanjou había crecido en una familia donde su madre era soltare. Ella misma le había contado a
Keiki que había aprendido a hacer todo ella misma. Incluso el Omurice que ella había hecho en el
22 | P á g i n a
Volumen 9
festival cultural, el cual había quedado asombroso. Por lo que si le dejaban la comida a Mao, sin
23 | P á g i n a
Volumen 9
duda el curry del sexto grupo seria delicioso. Mientras Keiki estaba esperando esto, Megumi se
paró a su lado y miro la expresión en su rostro”.
“Oye, Kiryuu-shi”.
“¿Hm?”.
“He pensado por un rato… ¿Acaso paso algo entre tú y Nanjou-chan?”.
“Ahh…”
“Yo también me pregunto lo mismo. Parece como si te estuviera evitando” Shouma hablo desde
un cierto punto de la fogata.
Megumi asintió de acuerdo a esto.
Al parecer los dos habían captado la extraña atmosfera que había entre Keiki y Mao mientras
trabajaban en el Curry.
“Bueno… la verdad sucedieron algunas cosas…”
Keiki no pudo decir en realidad lo que había sucedido (por claras razones), así que el poso su
mirada hacia el área de la cocina. Allí estaba Mao de pie con una expresión de enojo en su rostro y
poniendo las papas en una olla. En el instante que sus miradas se encontraron, ella la desvió e hizo
una expresión que quería decir Hmph…
Después de ver toda esta situación, Megumi comenzó a reírse.
“¿Acaso… esta es una pelea de novios?”.
“No, no lo es, en realidad Nanjou y yo no tenemos esa relación”.
“¿En serio?, siempre he visto que ustedes dos son muy cercanos…” los ojos de Megumi
parpadearon un par de veces como si no hubiera esperado esa respuesta de Keiki.
Si las personas que se llevaran bien fueran pareja, sin duda el mundo estaría invadido por ellas.
Keiki sabía que Mao simplemente lo veía como un amigo más.
“De todas formas, no ha pasado nada importante, así que no te preocupes por eso”.
“¿Hm?, bueno, si tú lo dices, pero sería bueno que se reconciliaran pronto, de lo contrario el viaje
escolar se tornara un poco incómodo”.
“Si, voy a hacer lo mejor que pueda”.
Eso había dicho el, pero hacer las paces con Mao era una tarea muy difícil, y hablarlo sería aún
más, considerando que ella ni siquiera quería hacer contacto visual con él, además de todo, el
único problema que el tenia no era solo Mao.
Fujimoto-san se escapó también…
24 | P á g i n a
Volumen 9
Cuando el intento llamarla con la esperanza de arreglar las cosas, ella simplemente salió corriendo
aún más rápido. Dicho esto, después de lo que había pasado, esta reacción era de lo más
apropiada, así que si él no explicaba rápidamente lo que había sucedido, seria tachado como un
pervertido.
***
Después de más o menos una hora, la comida por fin estaba lista. El arroz el cual estaba a cargo de
los chicos ya estaba listo y el Curry en el que Mao había trabajado sola también lo estaba. Así que
trasladándose a un salón, los seis grupos de cuatro personas se sentaron en sus respectivas mesas.
Junto a Keiki estaba Shouma y frente a cada uno estaba Megumi y Mao.
“Wow, ¡Se ve muy delicioso!” Los ojos de Megumi brillaron al ver la comida delante de ella.
“Mao-chan, eres muy buena cocinando eh”. Shouma dio una sincera felicitación a Mao.
“La verdad no, el curry es muy sencillo”. Respondió la chef Mao con un poco de humildad.
No era porque ella estuviera de mal humor, si no que ella actuaba así con cualquiera. Dejando de
lado a su amigo, e incluso a su compañera de clase Megumi. Hubo una persona que no dijo
palabras de elogio por la comida.
“……”
Con una expresión tranquila en su rostro, Kiryuu Keiki observo su comida. La razón de esto era
porque frente a él, y aunque su comida también había sido hecha por la chef Mao, había un gran
problema con ella.
“Um… Nanjou-san…. Mi Curry… bueno… ¿no se ve muy rojo?”.
La verdad había una gran diferencia entre su curry y el curry que los otros miembros de su equipo
tenían. Resumiendo, era rojo, no había otra manera para describirlo, sino rojo. Cualquiera que lo
observara y fuera ajeno a esta situación, estaría de acuerdo con que este curry era peligroso y
obviamente lo evitarían. En respuesta a Kiryuu, Mao abrió su boca con un rostro tan inexpresivo
como el de antes.
“Lo hice extra picante para Kiryuu”.
“Así que picante eh…” mirando nuevamente el Curry, el trago saliva por el miedo de solo pensar la
cantidad de especias que allí debía haber.
“Wow, tienes razón, tu arroz esta tan rojo como el infierno Kiryuu-shi”. Comento Megumi.
“¿Estás seguro que se puede comer?”.
Las expresiones de Megumi y Shouma se oscurecieron cada vez más después de ver más
detalladamente el curry.
“En realidad no soy muy bueno con el picante, pero…” Dijo Keiki.
“¿Entonces estas diciendo que no vas a comer MI curry?” Mao le respondió.
25 | P á g i n a
Volumen 9
“N-no… gracias por la comida…”
Comer todo lo que se le servía era un lema de la casa Kiryuu. Y este curry extra picante no era la
excepción. Así que sosteniendo la cuchara con una mano temblorosa, el tomo un poco de curry
con arroz y lo mando a su boca.
“Mm… ¡¡PICAAAAAAAAA!!”
El curry sabía exactamente a lo que él había visto. La comida en el interior de su boca, exploto en
una oleada de picante ardiente que le causó un gran dolor de inmediato. Sinceramente, esto no se
podría categorizar como comida. En ese instante la mano de Keiki la cual tenía la cuchara se
detuvo después de haber tomado la primera, luego de eso, tanto Megumi como Shouma le
consolaron.
“No te preocupes, me voy a encargar de todo una vez hayas partido”.
“Aunque solo fue por corto tiempo, disfrute tu compañía Keiki”.
“¿Eh, voy a morir?”.
¿Qué clase de broma era esta?, ¿acaso esta era su última comida? El sabía todo esto, sin embargo,
dejar algo en el plato, haría que la ira de Mao jamás se calmara.
“…Ugh… como sea, ¡Una vez entra un poco, entra todo!”.
Cualquiera que fuera el sabor, el curry no tenía la culpa. Los otros tres estaban comiendo
felizmente su curry mientras que al mismo tiempo Keiki les miro de reojo antes de obligarse a sí
mismo a seguir comiendo.
“… ¿Eh?, como ya me acostumbre a lo picante, en realidad no esta tan mal”.
O su cuerpo ya se había acostumbrado a la especia, o su sentido del gusto ya se había atrofiado

por completo, cualquiera que fuera el caso, el ahora incapaz de dejar de comer. Al inicio el creyó
que su boca quedaría envuelta en llamas, pero ahora, la especia se sentía como si le chuzaran
levemente la boca, por lo que podía comer sin prestar ninguna atención…
“Gracias por la comida…”
Mientras sudaba a mares debido al calor, Keiki por fin comió la última cuchara de curry.
“Fue una dura pelea… pero… creo que mi boca se está envuelta en llamas…”
“Oye, ¿Estas bien, quieres agua?”.
“Gracias Onizuka-san”. Keiki acepto la taza de Megumi y trago el agua de golpe.
Sin embargo, el picante no desaparecía y aun sentía que su boca estaba envuelta en llamas.
“…Esto no me ayuda, ni me pasa ni bebiendo agua”.
“¿En serio?, oye eso suena bastante duro”.
26 | P á g i n a
Volumen 9
Keiki ahora estaba de rodillas. Como el ya no tenía más opciones, decidió ir a comprar un juego.
“Voy a regresar a la posada para comprar algo de beber, deje mi billetera en mi habitación por lo
que me podría tomar algo de tiempo”.
“Claro, nosotros nos encargamos del resto”.
“Muchas gracias”.
Una vez les agradeció Keiki se fue de allí. Después de ver como se alejaba lentamente, Shouma se
volteo para mirar a Mao.
“¿Paso algo entre ustedes?, ¿Por qué hiciste el curry de Keiki de esa manera?”.
“No te voy a decir”.
“Bien, eso significa que algo sucedió”.
“……”
Mao quedo en completo silencio cuando se dio cuenta que ella misma había cavado su tumba.
Megumi también empezó a hablar.
“¿Acaso fue una pelea de novios o algo así?”.
“No, no es eso, Kiryuu y yo no tenemos esa clase de relación”.
Megumi le pregunto exactamente lo mismo que le había preguntado a Keiki a ella, por su parte,
Mao había dado la misma respuesta”.
“…No tenemos nada de eso”.
Murmurando para nadie, Mao termino de comer su propio curry y se puso de pie.
“Voy a vigilar por ahí”.
Después de decir esto, Mao se dirigió hacia la posada en la que se hospedaba, sin duda una actitud
típica de ella.
“…Oye Akiyama-shi”.
“¿Qué sucede Onizuka-san?”.
“¿Nanjou-chan acaso es una de estas ´Tsunderes´?”.
“Ah, ¿No lo sabias?”. Shouma soltó una leve risa. “Mao-chan es un ejemplo perfecto de una chica
tsundere”.
***
Al mismo tiempo, en la sede principal de la escuela secundaria momozawa, la cual quedaba

bastante lejos y donde carecía de todo estudiante de segundo año.
“Oye Bruja-senpai”.
27 | P á g i n a
Volumen 9
“¿No le ibas a decir algo gracioso a Yuika?”.
“¿Qué te parece si dijo algo gracioso sobre tus pechos?”.
“No sería nada divertido”.
En el salón del club de caligrafía, los únicos miembros que estaban presentes eran Tokihara Sayuki
y Koga Yuika, y ellas estaban completamente indecisas sobre como pasar el tiempo hasta la hora
del almuerzo.
“*Suspiro* es muy aburrido estar sin Keiki-senpai”.
“Por extraño que sea, estoy de acuerdo contigo”.
“Él debe estar disfrutando su viaje escolar”.
“Si, puede ser”.
“¿Por qué de todas las personas Yuika tiene que quedarse con Bruja-senpai?”.
“¿Y yo como lo puedo saber?, si me odias tanto, no tienes por qué venir aquí”. Sayuki frunció el
ceño ante las odiosas palabras de su Kouhai, pero rápidamente pensó en algo y continúo
hablando. “Bueno, la verdad no creo que tengas más amigos, así que es bueno que estés aquí, ya
que yo también estaría sola”.
“No puede ser, ¿Tú también estarías sola Bruja-senpai?”.
“No te lo puedo negar, las dos estamos pasando una vida escolar bastante solitaria ¿no crees?”.
“Oye, no juntes a Yuika con gente como tú. Yuika está sola sin Keiki-senpai, pero Yuika por lo
menos tiene planes para más tarde”.
“Por dios… cuanta arrogancia”.
Yuika siempre era así de arrogante con todos, pero, Sayuki pensaba que su orgullo y postura como
senpai estaba en juego, por lo que respondió con calma.
“Entonces, ¿Por qué no me dices que clase de maravillosos planes tienes?”.
“Jejeje, no te vayas a caer de la silla. ¡Yuika tiene una pijamada con Airi esta noche!”.
“¡¿Qué dijiste?!”.
Una pijamada. Sayuki no pudo contener su shock por la sorpresa cuando su Kouhai dijo eso.
“¿Te refieres a esa clase de pijamadas?, ¿Dónde te reúnes con tus amigos, juegas antes de
acostarte y hablar mientras estas en pijama?”.
“Exactamente. Vamos a ir de compras después de la escuela e incluso vamos a comer pasta de

muy alta calidad para la cena”.
28 | P á g i n a
Volumen 9
“¡¿Pasta de alta calidad?!”.
“Una pasta deliciosa y al dente”.
“¡Sin duda eso es muy elegante!”.
Dos chicas con pasta de alta calidad. Esas palabras por si solas fueron lo suficiente para estremecer
a Sayuki, quien nunca había hecho amigos.
“¿Desde cuándo son tan cerca…?”
“Ah, ¿Estas celosa?, Yuika no es una solitaria como Bruja-senpai…”
“Y-yo también tengo amigos, ¿de acuerdo?”.
“¿Oh, dime quién?”.
“B-bueno… ¿Qué tal Ootori-san?”.
“¿Por qué me preguntas a mí?”.
“C-cállate… además, antes de conocer a Nagase-san, tu tampoco tenías amigos, ¿no?”.
Una vez dicho todo esto, Sayuki sería una gran mentirosa si no dijera que no estaba celosa. Ya que
por razones de su familia, ella nunca había podido ir a una pijamada, por lo que era un mundo
completamente desconocido para ella.
“Bien, Yuika enviara algunas fotos más tarde, ¿está bien~?”
“¿Por qué presumes eso?, tu personalidad está empeorando cada vez más… ah, entonces viniste al
club solo para presumir ¿no?”.
“Jeje, si estas tan frustrada con eso, simplemente hazlo tú también”.
“Hmph… tan solo espera…”
Sayuki ya no podía ignorar la atrevida resolución de su Kouhai.
“¡Bien, voy a tener mi propia pijamada con Ootori-san!”.
Después de eso, Sayuki llamo a Koharu por teléfono, le explico lo que había pasado y así las dos
prometieron hacer una pijamada.
***
Y justo como Mao había dicho, ella regreso a la posada mientras seguía a Keiki.
“No está en el vestíbulo…”
Ella no había visto a su objetivo en ninguna máquina expendedora del primer piso, tampoco
estaba en la tienda de la posada. El menciono que él había dejado su billetera en su habitación,
por lo que de seguro iba a ir a recogerla, por ende, Mao opto por ir al piso donde se alojaban los
chicos.
29 | P á g i n a
Volumen 9
“Eso me molesto mucho… pero creo que fui demasiado lejos con el curry…”
Ella misma acepto que había sido bastante infantil. Ya que se puso demasiado nerviosa cuando los
había visto a él y a la vicepresidenta Ayano coqueteando, lo cual hizo que el arroz de Keiki hubiera
sido mucho más picante, ella había hecho esto de seguro para calmar su ira.
“Kiryuu parece que es muy cercano a la vicepresidenta ¿no?”.
Eso era justificable por el tiempo que permaneció como miembro temporal del consejo
estudiantil. Al principio, parecía que Ayano era muy apegada a él, pero después de su tiempo en el
consejo, el propio Keiki parecía que la buscaba de vez en cuando, o bueno, eso era lo que Mao
podía ver.
¿Acaso ellos están saliendo en secreto?, no, Kiryuu no es la clase de persona que escondería algo
así…
Entonces, ¿Cuál explicación podría haber para la situación en la que Mao los encontró? Si no
fueran novios, entonces, ¿Por qué Keiki la estaba abrazando así?
“…De seguro está en algo extraño otra vez”.
Keiki muy seguido se veía envuelto en situaciones un tanto extrañas. Por lo que era muy obvio, si
pensaba que él estaba rodeado de chicas pervertidas que sentían algo por él. Con esto en mente,
la vicepresidenta también podría estar ocultando algo. Mao pensó en preguntarle a Keiki mas
tarde. Ya que había algo más que despertó su interés.
“… ¿Acaso Keiki es una de esas personas que tiene un fetiche con los olores?”.
Esta era la pregunta que más resonaba en su cabeza. Él había dicho que le gustaban los pechos
grandes, sin embargo, la mayoría de los chicos jamás le cuentan a las chicas cuáles son sus gustos
y preferencias.
“Pero bueno… creo que este fetiche sería un poco aceptable…”
Mao pensó que estaría bien que aun si la persona que te gustaba tenía un fetiche con los olores. El
oler su ropa interior o su olor corporal después de la clase de educación física era demasiado, sin
embargo, el oler su cabello o su cuerpo en ciertas circunstancias no era algo que la asustara.
Si, el tener a la persona que me gusta con eso… puede que no sea del todo malo…
Mientras ella pensaba eso, Mao se sintió un poco celosa de que la vicepresidenta hubiera sido
olisqueda por Keiki.
“Después de ser pareja, el nivel de cercanía entre nosotros debería ser suficiente… Ah-ah… aun es
un poco temprano para hacer eso, pero….”
Mao agito sus manos y de solo pensar eso ya había perdido su compostura. Afortunadamente para
ella, todos los otros estudiantes estaban fuera, lo cual hizo que nadie la viera actuando como una
inocente doncella.
“Pero… quiero estar así con Keiki en un futuro cercano…”
30 | P á g i n a
Volumen 9
Claramente ella no quería deshacerse de su amistad en este momento. Pero su deseo de tener
una relación mucho más íntima con él era demasiado fuerte, así que para lograr eso, ella dijo que
haría un gran progreso en este viaje escolar.
Bien, me voy a disculpar por lo del curry y lo voy a escuchar, de seguro hay un malentendido, ¡Así
que simplemente tenemos que hacer las paces!
El viaje escolar había comenzado apenas. Ella no quería que su relación empeorara por lo que
fortaleció su resolución y se paró frente a su destino.
“¿Hm… la puerta está abierta?”.
En el momento que intento extender su mano para llamar a la puerta, se dio cuenta que esta
estaba un poco entreabierta. Y sin mencionar que podía escuchar una respiración agitada en el
interior de esta misma.
“……”
¿Qué demonios está pasando? Pensando que de seguro algo estaba mal, Mao abrió suavemente la
puerta siendo lo más silenciosa posible y así entro a la habitación. Después de quitarse sus zapatos
y entrar un poco más, llego hasta la sala de ocho tatamis. Lo que vio allí la dejo en estado de
shock.
“… ¿K-kiryuu?”.
Era una escena tan surrealista que ella inicialmente dudo lo que sus ojos verían. En las manos de
Keiki había un par de panties azules. Obviamente esta no era la ropa interior de un chico. Era un
par de panties que una chica normal usaría. Él las estaba frotando contra su nariz mientras que al
mismo tiempo las olfateaba profundamente.
El chico del que Mao estaba enamorada, estaba oliendo de una manera bastante exacerbada las
panties de otra chica.
31 | P á g i n a
Volumen 9
Capítulo 2: ¿Por qué están estas panties aquí?

Regresemos en el tiempo un poco.
Después de que terminara de comer el curry extra picante que Mao le había hecho, la boca de
Keiki gritaba por algo para beber. Así que el regreso a su habitación para coger su billetera.
“Uuu… aun me duele la boca, creo que voy a tomar un poco de té con leche”.
Toda sensación en su boca había desaparecido y él quería recuperar su sensibilidad y enfriarla un

poco con una buena dosis de azúcar. Así que él se acercó a su mochila que estaba en su habitación
y abrió la cremallera.
“…Hmm, ¿Dónde fue que puse mi billetera?”.
El recordó haberla puesto en la parte superior de su mochila, sin embargo no la pudo encontrar
cuando la busco. Pero el recordaba perfectamente que la había puesto ahí la noche anterior.
“De seguro está en la parte de atrás”.
Mientras estaba revisando entre su cambio de ropa, la cual iba a usar en su segundo día, vio su
billetera. Ahora por fin era capaz de sanar el interior de su incendiada boca. Por lo que no
queriendo perder el tiempo, el rápidamente metió la mano en su mochila, saco la billetera. En el
momento que lo hizo un objeto con boleros, vino acompañada con la billetera.
“… ¿Hm?, ¿Y esto?”.
Un objeto de color azul apareció en su campo de visión, sin embargo, el jamás recordó haberlo
puesto allí. Cuando lo levanto y se fijó que era, descubrió que era un tierno par de panties para
chicas.
“¿Por qué estas panties están aquí?”.
¿En serio algo como esto podría suceder?, además, ¿Quién encontraría unas panties en su propia
mochila? Bueno, puesto esto estaba pasando, sin importar como, Keiki la giro y la giro, algo que no
explicaría para nada como llegaron ahí.
“¿De quién serán estas panties…? no, ¿Cuándo fue que las pusieron en mi mochila…?”
Keiki no recordaba y tampoco tenía idea de cómo estas panties habían llegado hasta su mochila.
En realidad que un par de panties del sexo opuesto apareciese así jamás sucedería en realidad, por
lo que claramente no era un hecho cotidiano, sin embargo, Keiki a menudo experimentaba
situaciones un poco surrealistas como estas. Él había iniciado con las panties de cenicienta,
después una kouhai le había metido sus propias panties en la boca y además se había visto
obligado a ponerle las panties a su hermana menor, eso y otras cosas muy avergonzantes.
32 | P á g i n a
Volumen 9
A pesar de su poca experiencia saliendo con chicas, el contacto que había tenido con la ropa
interior del sexo femenino era extremadamente superior al de cualquier persona de su edad. Así
que mientras el príncipe de las panties se preguntaba qué era lo que sucedía…
“Bueno… creo que… solo en este momento…” *Sniff sniff*
El comenzó a oler las panties, él quería oler el olor de estas panties. Esta era una de las pocas
habilidades que había adquirido con todo el dilema de la cenicienta. Al inicio, él había dudado
sobre si hacerlo o no, pero ahora ya era una rutina para el cómo lavarse los dientes todas las
mañanas. Además no había nadie a su alrededor, sin embargo, al mismo tiempo este era el peor
momento para hacer su exhaustiva investigación.
“…Hmmm… lo único que puedo oler es el jabón…”
Eso significaba que este par de panties no era nuevo, ya que alguien lo había usado antes.
“Bueno, creo que lo oleré una vez más para asegurarme”.
Sin importar lo pervertido que fuera esto, el decidió revisarlo a fondo para asegurarse
completamente. Cuando él trabajaba en el consejo estudiantil, cada miembro revisaba dos veces
el documento en el que trabajaban, por ende él debía hacer esto una vez más.
*SNIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIF…*
Inspección completada. Aunque él no había recibido información nueva a la de la primera vez, era
mejor prevenir que lamentar.
“Obviamente Nanjou ya cree que soy un pervertido después de lo que paso con Fujimoto-san,
pero si me llega a ver así, todo terminara”.
“… ¿Kiryuu?”.
“Si, quien ¡EEEEEEEEEEEEEEEE……!”
Después de escuchar su nombre, Keiki se dio la vuelta lentamente mientras preguntaba quién era
y al mismo tiempo hablaba de la reina de roma, quien era Nanjou Mao.
“¿Nanjou?, ¿Por qué estás aquí?”.
“Vine a ver como estabas…” Mientras ella decía eso, su mirada se posó sobre las panties que
estaban en las manos de Keiki. “…Jamás espere verte en medio de tu sesión de oler panties de una
chica”.
“E-estas equivocada con respecto a esto, ¿sí?”.
“¡¿En qué sentido?! las estabas oliendo hasta el fondo, ¿no?, ¡Siempre tuviste un fetiche por los
olores Kiryuu!”.
“¡Esto es un malentendido!”.
“Y Además, ¿Por qué tienes esas panties?, ¿No las abras robado verdad?”.
33 | P á g i n a
Volumen 9
“¡No las robe!”
“Entonces, ¡¿De quién son?!”.
“¡Eso es lo que intento averiguar!”.
Si el supiera de quien eran las hubiera devuelto en ese mismo instante. Ya que poner algo algo
como eso en su mochila era muy peligroso, por lo que él quería quejarse con la persona que había
hecho eso.
“…Para estar seguros… ¿No son tuyas verdad Nanjou?”.
“¡Ja, como si lo fueran!”.
“Bueno… me lo imagine…”
“¡No lo puedo creer Kiryuu, haz caído muy bajo, eres un ladrón de panties!”.
“¡¡Yo no las robe!!”.
Esta era una situación muy peligrosa para Keiki.
De todas las veces que nos hemos visto, justo tenía que verme oliéndolas…
Si el no aclaraba este malentendido aquí, todo terminaría. Ser tachado como un pervertido sería
un dolor que no podría soportar, además, podría ser condenado por robo.
Cálmate… ¡Cálmate Kiryuu Keiki!
Mientras más entrara en pánico, mas parecería ser el autor de este robo. Así que él tuvo que
ordenar rápidamente sus pensamientos y con calma empezar a deducir lo que había pasado.
Bueno, la verdad no había mucho que deducir, simplemente una de las pervertidas que conocía
haría esto. Su mochila había estado en la habitación de la posada desde que habían llegado, por lo
que el periodo de tiempo en que alguien pudo hacer esto era muy limitado, lo que cual quería
decir que solo una persona pudo haber hecho esto.
Por lo que significa… estas panties deben ser de Mizuha.
No había ninguna duda, era Mizuha quien había puesto estas panties en su mochila esta mañana.
“…No… espera un momento, si estas son las panties de Mizuha…”
Fue entonces cuando Keiki tuvo una terrible premonición.
“No puede ser… ¿Ella no está usando panties ahora mismo?”.
Obviamente había una posibilidad de que ella estuviera usando un par de panties distinto. Sin
embargo, aunque Kiryuu Mizuha pareciera una chica linda y angelical en el exterior, ella era una
exhibicionista pervertida. Así que poner sus panties entre las pertenencias de su hermano mayor
era un acto de perversión que encajaría perfectamente en ella.
34 | P á g i n a
Volumen 9
No sería para nada extraño que ella no tuviera panties en este momento. Aunque esperaba que
ella usara un par cuando habían salido de la habitación, Keiki había aprendido con el día a día que
nada era seguro cuando se trataba de la perversión.
Además, Mizuha tiene una falda hoy…
Esta mañana cuando fueron juntos a la escuela, ella tenía puesto una falda con medias negras y un
suéter en la parte superior de su cuerpo. Aun si ella tuviera una falda y medias hasta la rodilla, su
defensa era casi inexistente.
“¡Lo siendo Nanjou, tengo una emergencia, te lo explicare más tarde!”.
“¿Eh?, ¡¡Espera Kiryuu!!”
Como su hermano mayor, Keiki no podía ignorar la posibilidad de que Mizuha estuviera afuera sin
ropa interior. Así que con una fuerte emoción brotando dentro de él y con el deseo de saberlo y
además de si era necesario hacerla usar panties, el inmediatamente salió corriendo de la
habitación.
“… ¿A dónde vas y por qué aun tienes esas panties en tu manos?”.
Mao se quedó atrás aún más confundida que antes.
***
Una falda, una prenda de vestir esencial para el Japón moderno, un objeto destinado para
proteger el lugar más importante de una chica, a pesar de ofrecer una defensa bastante baja, ya
que con la más mínima influencia, por ejemplo la de una ráfaga de viento, mostraría todo lo que
está debajo de esa delgada pieza de tela. Sin embargo, todo lo que sería visible en ese momento
seria ropa interior, pero a pesar de esto, no eran la opción más segura para proteger aquel lugar
tan importante que de algún modo seria revelado al público.
Una vez dicho esto, había una chica que de manera voluntaria cruzaba esa fatal línea con mucha
facilidad. Una estudiante de la escuela privada Momosawa y que pertenecía a la clase 2 E, Kiryuu
Mizuha.
La misma chica le había negado a el que usaba la prenda más importante de una chica, no, de la
humanidad, ya que dijo que era una pervertida que disfrutaba de la emoción de ir a la escuela sin
usar ropa interior. Obviamente ella no lo hacia todos los días. Ella lo hacía en un día que ella
misma había denominado como “Día sin Panties” que sucedía en ciertos días donde ella estaría
todo el día sin ropa interior. En este momento, en el primer día de viaje escolar, podría ser uno de
estos días. Ya que el había encontrado la ropa interior de una chica en sus pertenencias, fue
gracias a esto que empezó a dudar de si su hermana traía o no ropa interior.
En el caso que ella no estuviera usando panties, si su falda no cumplía su trabajo seria
extremadamente peligroso, por lo que él se apuró para ir a ver la situación actual de su hermana.
“¡Mizuha…!”
“Oh, ¿Nii-san?, ¿Por qué tienes tanta prisa?”
35 | P á g i n a
Volumen 9
“Te he estado buscando”.
Cuando finalmente Keiki pudo encontrar a su hermana menor, ella aún estaba ocupada con las
tareas de la cocina. Actualmente ella estaba lavando los platos y para fortuna de él no había otros
estudiantes cerca.
“Acompáñame un momento”.
“¿Eh?”.
Rápidamente el tomo la mano de su hermana y la llevo a un lugar más alejado. Después de un

momento ellos llegaron a un lugar rodeado de árboles donde podías fácilmente huir escondido
por la maleza, con esto se aseguró que nadie se toparía con ellos accidentalmente.
“Ya deberíamos estar lo suficientemente lejos…”
“¿Qué sucede Nii-san?”.
“Voy a ser directo, ¿Fuiste tú quien puso esto en mi mochila?”.
“Ah, ya lo descubriste”.
En el instante que Keiki le enseño a Mizuha las panties, ella inmediatamente confeso su culpa.
“¿Por qué haces algo así?”.
“Bueno… en resumen lo hice porque tengo un poco de frustración”.
“¿Frustración?”.
“Estaba excitada y excitada, pensando en cómo ibas a usar mis panties, si tal vez las ibas a oler, a
frotarte con ellas y esa clase de cosas”.
“¡Oye esa es una razón mucho peor de lo que espere!”.
En realidad él se maldijo a si mismo mentalmente de haber caído por haberlos olido.
“Nii-san, dijiste que ir a la escuela sin ropa interior estaba prohibido y a pesar que vivimos juntos,
jamás tratas de espiarme ni siquiera cuando me baño… así que he estado un poco estresada,
¿sabes?”.
“¿Pero qué clase de hermano mayor mira a su hermana bañándose?”.
“Eso me hubiera hecho feliz…”
Como exhibicionista, sin duda hubiera sido muy feliz, pero Keiki no tenía esa clase de perversión,
por lo que su lógica no funcionaba para nada en estos casos.
“…Bueno, creo que voy a ignorar eso por ahora, lo importante es concentrarnos en el tema
principal”.
“¿Y qué temas es?”.
36 | P á g i n a
Volumen 9
“Bien, para ser sincero, Mizuha, estas bajo sospecha de no usar panties”.
“¿Bajo sospecha?”.
“Así es, y como tu hermano mayor, estoy en el deber de verificar tu actual situación con respecto a
tu ropa interior”.
“Entonces ¿Quieres saber si justo ahora estoy usando ropa interior Nii-san?”.
“Así es, no voy a hacer nada malo, solo necesito que me respondas”.
Dependiendo de su respuesta, el sabría si darle un regaño o no. En el peor de los casos, él se vería
obligado a volverle a poner las panties.
“Hmm… es un secreto”.
“Vamos…”
“Si lo quieres saber, ¿Por qué no lo compruebas tú?”.
“¿Disculpa?”.
“A ver… levantar mi falda sería muy aburrido, así que graba con tu teléfono mientras me la subes
Nii-san”.
“¿De qué demonios hablas?”.
“Si no lo haces tú, no te lo voy a decir~”
“Ugh…”
Grabar como le sube la falda a su hermana será una acción que carecía completamente de razón. Y
aunque él había ideado varios métodos para lidiar con las acciones exhibicionistas de Mizuha, esta
vez su petición tenía un nivel demasiado alto. Pero si no lo hacía, se preguntaría por el resto del
viaje escolar si Mizuha tenía ropa interior o no, lo cual lo dejaría bastante inquiero.
¿Ella tiene puesta su ropa interior?, esta pregunta le causaría un terrible estrés a su cuerpo.
Pero… ¿Y si ella en realidad no tiene Panties?
Keiki terminaría grabando un video de la indefensa parte intima de su hermana menor con su
teléfono. Esta clase de cosas lo podrían llevar a los tribunales.
Pero aun así, ¿Qué clase de hermano mayor seria si ignoro la posibilidad de que mi hermana
menor camine sin ropa interior?, ¿No es responsabilidad mía cuidarla para que nadie la vea?
Después de pensarlo claramente, Keiki tomo una decisión.
“Bien, lo voy a hacer, ¡Siempre y cuando pueda aclarar mis dudas!”.
“Bien, déjame que me prepare rápido”.
“¿Prepararte para qué?”.
37 | P á g i n a
Volumen 9
Mientras su hermano mayor inclinaba su cabeza debido a la confusión, Mizuha subió levemente la
parte delantera de su suéter.
“¡Espera un segundo!”.
“¿Hmm?”.
“¡¿Por qué subes tu suéter así?!”.
“Para estar de humor cuando hagamos lo otro”.
“¡No tienes que estar de humor para eso!”.
Ella había subido su suéter hasta el punto que podía ver sus senos envueltos con un hermoso
brasier azul cielo quedara a la vista de Keiki. Su estómago completamente tonificado y visible daba
a esta incómoda situación un aire aún más erótico a que si estuviera completamente desnuda.
Dado que su brasier sea del mismo color que sus panties, así que eso significa que no está usando
ninguna… ¿no?
Obviamente el no podía inferir esto con solo el color. Aún existía la posibilidad de que fuera una
distracción. De cualquier modo, Keiki solo podía asegurarse esto al verlo.
“Una vez que empiece a levantarme la falda, puedes iniciar a grabar Nii-san”.
“E-está bien…”
El claramente no estaba de acuerdo con esto, pero renunciar a ya no era una opción. Así que el
saco su Smartphone de su bolsillo y lo puso en modo espera, listo para empezar a grabar. Con su
suéter enrollado y sus pechos a la vista, Mizuha puso sus dos manos sobre su falda.
“Bien, empecemos, tienes que mirarme bien ¿sí?”.
“S-si…”
Rodeado de enormes arboles por todos lados, empezó la anormal sesión de fotos.
“Mmm…” de forma lenta pero constante, Mizuha empezó a levantar su falda.
Al mismo tiempo, Keiki tenía su Smartphone listo.
“Nii-san me está grabando… hacer algo así hace que mi corazón se vuelva loco…”
“……”
La chica que aparecía en la pantalla del teléfono en este momento era su hermana. Y lo más
seguro era por vergüenza o peor aún por emoción, pero sus mejillas estaban completamente
rojas, a pesar de eso, sus labios se distorsionaban en una gran sonrisa mientras saboreaba la
sensación de ser filmada por su hermano mayor.
Una chica normal odiaría hacer algo como esto…
38 | P á g i n a
Volumen 9
Pero en el caso de Mizuha, ella estaba completamente feliz por esta situación ya que su expresión
estaba tan extasiada por el placer, mientras así seguía mirando el lente de la cámara.
“Mm… ¿Ya… puedes ver?”.
“Solo un poco más…”
El borde de la falda ya estaba llegando al límite de lo que esta podía cubrir. El lugar arriba de las
rodillas, ósea sus muslos ya estaban completamente revelados y mostrando su hermosa piel.
Solo un poco más… un poco más y la hermosa chica revelaría su lugar secreto con sus propias
manos.
39 | P á g i n a
Volumen 9
“……”
40 | P á g i n a
Volumen 9
Keiki empezó a tragar saliva debido a la ansiedad y nerviosismo al punto que inconscientemente él
puso más fuerza en la mano que sostenía su Smartphone. Al mismo tiempo Mizuha continúo
poniendo una sonrisa lujuriosa hacia la cámara que la apuntaba.
“¡Tada!, ¡Hoy si estoy usando!”.
“Uf… en verdad me preocupe por eso…”
En la parte inferior de su hermana menor, Keiki pudo ver un par de panties con el mismo diseño de
su brasier. Mizuha había jugado con el como si fuera un violín.
Y yo aquí propiciándole una situación pervertida, ¿Cómo fue que termine haciendo esto?
A pesar de todo, él ahora se sentía más aliviado al ver que su hermana menor si estaba usando
Panties.
“Fufú, gracias por jugar conmigo al rol de exhibicionista”.
“No hay ningún problema”.
“Ah y puedes usar ese video como quieras ¿sí?”.
“No lo voy a usar, más bien bájate la falda”.
Con su falda aun levantada, Keiki no sabía hacia qué lugar mirar, ya que cada parte de su hermoso
cuerpo era veneno para sus ojos. Sin embargo, en el momento que desvió la mirada sus ojos se
encontraron con los de Nanjou Mao, quien estaba de pie junto al tronco de un gran árbol.
“¡¿Eh Nanjou?!, ¡¿Por qué?!”.
“Te estaba buscando porque pensé que no volverías…”
Después de decir eso, Keiki se dio cuenta de que había dejado a Mao en la habitación. Y como él
había durado mucho tiempo aquí, era lógico que lo hubiera empezado a buscar.
“Jamás creí que fueras un pervertido que obligue a su hermana menor a levantarse su falda… e
incluso grabarla haciéndolo…”
“¡¡El malentendido empeoro aún más!!”.
“Seguí a ambos al bosque… y pensar que estaban haciendo esto…”
“No… ¿Nanjou-san…?”
“Lamento mucho haber interrumpido su diversión, así que tómense su tiempo”.
Con sus ojos completamente muertos, Mao rápidamente fue hacia la dirección de la que había
llegado.
“Otra vez tienes la idea equivocada…”
41 | P á g i n a
Volumen 9
No había ninguna duda. Ella estaba en un terrible malentendido. Era verdad que Keiki estaba
grabando el “striptease” de su hermana menor, pero él no lo estaba haciendo porque quisiera.
“Al parecer esto se ha convertido en algo demasiado problemático”. Dijo Mizuha.
“Ni que lo digas…”
En este punto, Keiki ya no tenía energías para decirle a Mizuha que ella era la causa principal de
esto. Lo único que él pudo hacer ahora era sostener su cabeza con sus manos y preguntarse una y
otra vez como fue que todo este lio había iniciado.
***
“Sucedió algo realmente malo, por eso el afecto de Nanjou hacia mi está a niveles históricamente
bajos”.
Más o menos a la hora en el que el día llegaba a su fin, ósea pasado las 7 de la noche, Keiki estaba
descansando su cuerpo en el baño al aire libre que había en la posada, después de dar un informe
rápido a Shouma quien dio una respuesta que denotaba bastante desinterés.
“Vaya, eso suena muy duro”.
“Sin duda lo es ¿sabes?, esta es la primera vez que el nivel de afecto que alguien siente hacia mi
cae tan rápido. Por lo que creo que este no es el momento adecuado para estar bañándome
tranquilamente”.
“Ella te ignoro durante la cena, ¿Ahora qué hiciste?”.
“…B-bueno, será mejor que no se lo cuentes a nadie”.
“No te preocupes, soy muy bueno guardando secretos”.
“Bueno, es algo complicado, pero…”
Fue allí cuando Keiki empezó a dar un breve resumen de lo que había pasado. Tener que contar
todo lo que había sucedido y en lo que Mao se había visto envuelta fue muy embarazoso, pero el
tenía que dejar salir todo el estrés que tenía.
“Ya veo, entonces Mao-chan te vio en medio de tus juegos pervertidos con Fujimoto-san y
Mizuha-chan”.
“Oye, no lo digas de esa manera”.
Allí podría haber otros chicos escuchándolos, por lo que Keiki ya estaría muerto si otras personas
supieran lo que sucedía.
“Le explique todo a Mao, incluido lo de las panties de Mizuha, pero ella no me quiere perdonar…”
“Primero que todo, ¿Ya sabes porque ella está enojada?”.
“Bueno, creo, he sido su amigo por mucho tiempo así que creo que lo puedo resolver hasta un
punto”.
42 | P á g i n a
Volumen 9
“Vaya, amigo, cuanta confianza tienes en ti mismo”.
“Puede ser que estoy actuando coqueto con otras personas que no son tu ¿verdad?, así que por
eso ella no tiene más material para su manga BL”.
“Aja, claro, no importa, jamás lo entenderás”.
“¿Eh?”
“Parece que Mao-chan es quien lo tiene difícil ahora”.
“Eh, ¿Por qué lo dices?”.
“Mao-chan se enojaría conmigo si te lo digo, así que no te lo diré”.
“¿Ehhh?”.
“Bueno, en verdad me gustaría ayudarte a reconciliarte con ella. Ya que me ayudaste cuando tuve
una pelea con Koharu-chan”.
“Eso sin duda seria de ayuda”.
Lo único que una persona necesita en la vida es alguien en quien confiar.
“El problema es que puedes hacer para arreglar el estado de animo de Mao-chan”.
“Necesito despejar este malentendido, eso es lo más importante. Pero ella no me escucha. O…
podría haber una manera para resolver esto”.
“Si le puedo dar una foto tuya y mía usando solo toalla, puede que ella me escuche…”
“Bueno… sé que dije que iba a ayudar, pero ofrecer mi cuerpo para eso es algo…”
El precio para tener una ventaja en esta lucha era considerablemente alto.
“Pero, será difícil hablar con ella si no uso la carta del BL…” dijo Keiki.
“Oye y ¿no sabes de algo aparte del BL que haga feliz a Mao-chan?”.
“¿Un juego?”.
Mao era la clase de persona que ocasionalmente jugaba uno que otro videojuego en casa. Y muy a
menudo ella frecuentaba el salón de juegos de la zona.
“Tengo un juego de móvil que algunas veces juego con ella, ¿Qué tal si la dejo ganar?”.
“Creo que aun así ella te ganaría”.
“Eso no es bueno, que tal si…”
“Y lo más seguro es que ella no acepte la invitación, lo mejor es que hagas las paces primero”.
“Por dios, eso no es para nada bueno…”
43 | P á g i n a
Volumen 9
Arreglar el pésimo estado de humor de una mujer puede ser sin duda algo muy difícil.
“Oye Keiki, ¿Tu qué opinas de Mao-chan?”.
“¿Por qué me preguntas eso?”.
“No tiene ningún sentido oculto o algo así, así que piénsalo ¿sí?”.
“Ah, está bien…”
A pesar de que la razón por la que Shouma le pregunto esto era un completo misterio para Keiki,
el prefirió seguir su juego.
“Cuando lo piensas claramente, Nanjou es muy sorprendente. Siempre se toma todo lo que le
gusta muy en serio y hasta hace los quehaceres del hogar que sus padres no pueden hacer, es de
confianza y muy amable…”
A pesar de a veces parece desconsiderada, en realidad ella siempre era muy amable y servicial con
todos en su entorno. Ella era la clase de chica maravillosa que se sentaba al lado de una cama
esperando que un amigo despertara después de un K.O por un pelotazo en el rostro.
“Como lo puedo decir… simplemente la respeto desde el fondo de mi corazón”.
“Entonces, ¿Qué tal si le dices eso a Mao-chan?”.
“Como si le pudiera decir eso frente a ella…”
La única razón por la que él pudo decir esto era porque la persona de la que hablaban no estaba
presente. Sin embargo, también había cosas que no podía decir si ella estuviera aquí presente.
“…Mas bien debería pensar en formas para salir y disculparme con ella, ¿verdad?”.
“Si, eso suena genial”.
Pensar demasiado en el corazón de una chica jamás funcionaba. Así que disculparse de manera
sincera era lo mejor para manejar esta situación”.
“Bien, ya está decidido…”
“Si, vámonos…”
Sus rostros ya estaban completamente rojo gracias al calor que había en el baño. Por ende, ellos
salieron de allí rápidamente. De lo contrario, Mao los podría encontrar y hacerse una idea
equivocada de lo que paso.
***
Después de ponerse los yukatas que la posada daba a sus clientes. Keiki y Shouma salieron hacia el
lobby principal y se encontraron con una chica bastante familiar que salía del baño de mujeres.
“Oh Nii-san y Shouma-kun. Qué casualidad”.
“Hola Mizuha-Chan”.
44 | P á g i n a
Volumen 9
“Entonces también te estabas bañando Mizuha… Y ¿Oh?”.
Detrás de Mizuha apareció una chica muy hermosa vestida también con Yukata.
“¿Fujimoto-san está contigo?”.
“Si, conocí a Kiryuu-san aquí, así que fuimos a bañarnos juntas”.
“Ya veo, es extraño verlas juntas eh”.
El verlas en Yukata era todo un espectáculo, pero él no las había visto juntas nunca antes. Lo más
seguro fue que durante el festival cultural se vieron muy pocas veces, así que esta vez fue la
primera vez en la que se pudieron ver en sí.
“Hablamos mucho sobre los desnudos con Fujimoto-san” Comento Mizuha.
“O-oh… ya veo…”
“Y hablamos mucho sobre Kiryuu-kun”. Menciono Ayano.
“¿De que hablaron exactamente?”.
Dijo Kiryuu un poco preocupado. Las dos eran la clase de personas que harían y dirían lo primero
que se les venía a la cabeza, por eso no era sorpresa si ambos hubieran hablado de sus respectivas
perversiones que habían pasado durante el día. Así que preocupado por eso, Shouma se le acercó
y le susurró al oído.
“Ver a dos chicas salir del baño es algo muy relajante, ¿no crees?”.
“Ni que lo digas”.
“Aunque sería mucho mejor si fueran niñas de primaria y no estudiantes del mismo año”.
“Lo lamento, pero no estoy de acuerdo con eso ultimo”.
Siendo sinceros, verlas a ellas dos en yukata, era una visión bastante atractiva.
“De todas maneras, ustedes dos se ven muy bien en Yukata”.
“Hehehe, Gracias”.
“…Gracias”.
En el instante que su hermano mayor elogio su apariencia, Mizuha se puso feliz y tímida al mismo
tiempo, por su parte, Ayano tuvo una reacción bastante linda, ya que sus mejillas se enrojecieron y
se escondió detrás de Mizuha mientras miraba con cautela a Keiki, parecía un gatito asustado. En
respuesta a su extraña y linda actitud, Mizuha parecía estar confundida.
“¿Qué sucede Fujimoto-san?”.
“Me estoy refugiando…”
“¿Refugiando…?” un nuevo signo de interrogación apareció sobre la cabeza de Mizuha.
45 | P á g i n a
Volumen 9
A pesar de que Mizuha estaba claramente confundida, su hermano mayor sabía muy bien porque
Ayano actuaba de esa manera.
Es verdad, Fujimoto-san aún cree que tengo un fetiche por los olores…
Gracias a todo lo que paso con Mao, a él se le había olvidado por completo esto. Pero obviamente
no podía aclarar este malentendido con Mizuha presente. Shouma quien había estado observando
desde un lado, hablo para salvarlo.
“Ya lo sé, ¿Qué les parece si ustedes dos vienen a nuestra habitación?, allí no hay nadie más, así
podremos hablar de lo que queramos”.
“¿En serio?, por mi estaría bien” le respondió Mizuha.
“B-bueno si Kiryuu-san va….”
Cuando Mizuha acepto su invitación, Ayano también acepto pero con un poco de cautela.
“¿Te parece bien Keiki?”.
“Por supuesto, aún tenemos algo de tiempo antes de ir a dormir”.
A pesar de que a los chicos no se les permitía ir al piso donde se alojaban las chicas, lo contrario
estaba permitido. Y como los chicos no tenían otros compañeros de cuarto, nadie se quejaría
sobre esto.
“¿Qué tal si también invitamos a Mao-chan?”.
“¿Eh?, ¿A Nanjou?”.
“Tú quieres hacer las paces con ella ¿no?”.
“Bueno, considerando su estado de ánimo, creo que empeorara todo, pero…”
Mizuha y Ayano las dos chicas con quienes ella lo había atrapado, estarían presentes. No había
una peor forma de empeorar las cosas.
“Pero ella se enojara aún más si se entera que la dejamos por fuera, ¿no?”.
“Si, eso tiene sentido”.
A pesar de que ella no lo admitiera abiertamente, Mao disfrutaba estar con ellos, como prueba,
ella había ayudado en el festival y además, iba constantemente al club de caligrafía.
“Bueno, voy a probar mi suerte entonces”.
Ya que obviamente ella ignoraría su llamada, Keiki decidió enviarle un mensaje rápido. El escribió
lo siguiente. Ńos vamos a reunir en mi habitación en este momento, si quieres unirte, ven.
Mizuha y Fujimoto-san también vienen´ de un segundo a otro, el recibió un rápido Ýa voy´.
“Bien, Nanjou está dentro”.
“Muy buen trabajo, sabía que lo conseguirías Keiki”.
46 | P á g i n a
Volumen 9
“Nii-san eres genial”.
“Cuando te lo propones, puedes hacerlo Kiryuu-kun”.
“¿Por qué parece como si me estuvieran lamboneando?”.
El no sabía porque todos habían empezado a alabarlo tan de repente, pero gracias a esto, fue que
su noche ahora estaría ocupada. Si este fuera otro grupo común de estudiantes de secundaria,
seguramente estarían ansiosos por tener chicas en yukata a su alrededor por tanto tiempo.
***
Después de todo eso, Keiki encendió la luz de su habitación e invito a Mizuha y Ayano adentro.
Como en el interior no tenían suficientes cojines para todos, esto hizo que se sentaran en el suelo.
Shouma por su parte reviso su Smartphone y luego hablo.
“Vaya recibí un mensaje de Koharu-chan”.
“¿Y qué dice?”.
“Al parecer está haciendo una pijamada con Tokihara-Senpai”.
“¿Una pijamada?”.
“Si, también me mando una foto”.
“Déjame ver”, Keiki observo detenidamente la pantalla del teléfono de Shouma.
Koharu, seguramente sin avisarle a Sayuki, ya que Koharu tenía un signo de paz en una de sus
manos y una hermosa sonrisa, mientras tanto Sayuki tenía una expresión de sorpresa en su rostro.
“Al parecer se divierten ¿no?”.
“Koharu se ve muy linda en pijama, me gustaría ir a abrazarla ya mismo… y lamerla por todos
lados…”
“¿Shouma?... eso es un poco…”
Su amigo lolicon empezó a decir cosas realmente espeluznantes. Pero como si estuvieran viendo
una escena totalmente diferente:
“Ootori-senpai sí que es amada por Shouma-kun”.
“Ayano-san esta celosa…”
“¿Eh?, ¿Yo soy aquí el extraño?”.
¿Tener a un chico lamiendo su cuerpo estaba bien para las chicas? Mientras Keiki estaba
sorprendido por las reacciones de ella, alguien llamo la puerta, de repente entraron dos chicas
vestidas con Yukata.
“Disculpen la intromisión”
47 | P á g i n a
Volumen 9
“Hola”
Una de ellas tenía una coleta al lado en su cabello rojizo, ella era Nanjou Mao, la otra era una chica
con el cabello largo y esponjoso, además había sido miembro de su grupo de almuerzo: Onizuka
Megumi.
“Oh, Onizuka-san también estas aquí”.
“Nanjou-chan y yo compartimos la misma habitación, ella dijo que iba a ir a la habitación de

ustedes, por eso pensé en venir con ella ya que sonaba interesante… ah, pero si quieren me puedo
ir”.
“Nah, no importa”.
“Lo mismo opino yo”.
Tanto Keiki como Shouma dieron permiso para que ella ingresara, Mizuha y Ayano asintieron
afirmando lo mismo.
“Muchas gracias, es bueno unirme a ustedes” con una amable sonrisa Megumi se unió al grupo.
Mientras tanto Keiki le hablo a Nanjou.
“Gracias por venir Nanjou”.
“…Como sea, si te dejo solo ¿Quién sabe qué cosas más podría pasar?”.
A pesar de sonar tan fría como siempre, era preferible que le respondiera así, a que no le
respondiera. Y así, las seis personas se sentaron en el interior del cuarto de ocho tatamis
formando un círculo. Keiki por su parte se sentó a espaldas de la ventana. A partir de él, y en
sentido a las manecillas del reloj estaban: Mizuha, Ayano, Mao, Megumi y Shouma.
Usualmente Fujimoto-san se sentaría a mi lado para poder captar la mayor cantidad de aroma
posible, pero de seguro aun desconfía de mí.
Ayano de seguro estaba usando a Mizuha como escudo entre ella y Keiki. Y a pesar que la
habitación era grande, ya estaba prácticamente llena por todos y como ambas chicas habían salido
del baño recientemente su dulce fragancia inundaba la habitación.
Debo decir que ver a chicas en yukata y que entren a mi habitación es algo maravilloso.
Aun si la mayoría de ellas fueran pervertidas, Keiki no podía evitar sentirse muy bien en este
momento. Justo ahora en medio de ellos, la única chica normal, Megumi los miraba a cada uno
fijamente.
“Um… a la única persona que no he conocido de aquí es a la hermana menor de Kiryuu-shi. Hola,
mi nombre es Onizuka Megumi y soy de la clase 2B, es un placer conocerte”.
“Kiryuu Mizuha, 2E, un placer”.
Como ellas no se conocían, ambas intercambiaron una rápida auto presentación. Al verlas, Keiki
sintió que algo más sucedía.
48 | P á g i n a
Volumen 9
“¿Entonces tú y Fujimoto-san ya se conocen?”.
“Así es, aunque hemos hablado más bien poco”.
“…Si, hemos hablado poco”.
Megumi hablo de una manera bastante alegre y Ayano estuvo de acuerdo con ella, pero…
¿Qué fue eso de ahora?
La voz de Ayano sonaba un poco más apagada de lo normal. Keiki tuvo una muy mala premonición
sobre esto cuando escucho eso sobre ellas, y aunque no tenía pruebas en sí, un cierto sentimiento
de incertidumbre lleno su pecho, pero este desapareció rápidamente después de que Shouma
hablara.
“Puede que sea aburrido, pero, ¿Qué les parece si jugamos cartas?, quiero jugar Daifugo”.
“Eso suena divertido, ¡Hagámoslo!” Rápidamente, Megumi dijo que estaba de acuerdo con
bastante efusividad.
“¿Qué les parece si agregamos un castigo al perdedor?, eso lo haría más emocionante”, Mao dijo
una parte fundamental de jugar esta clase de juegos entre amigos.
“¿Qué tal si el perdedor se tiene que desnudar? Mizuha ya tenía en su mente un castigo bastante
específico.
“Ajajaja, Mizuha-chan eres muy graciosa… hacer eso frente a los chicos sería muy problemático~”
menciono Megumi.
“Wow, por fin una opinión razonable” Keiki dudo si había escuchado eso o no.
“…Tsk… creo que por fin tenía el argumento para ver a cierto chico desnudándose”.
Keiki pensó que había escuchado una afirmación bastante parecida a la de cierta fujoshi, sin
embargo, decidió ignorarla debido a que estaba rodeado de pervertidas, sin embargo fue gracias a
Megumi que esta situación del desnudo termino evaporándose. De repente Ayano levanto su
mano en silencio.
“¿Qué tal si el perdedor tiene que pensar una confesión amorosa y tener que representarle?”.
“Oh, eso es un castigo bastante duro”.
Pretender confesarse románticamente, sin duda, esto sería un pasado oscuro que jamás podrías
olvidar”.
“Suena muy divertido, estoy dentro”.
“Por mi parte estoy bien”.
“Yo no tengo objeciones~”
“Bien entonces ya está decidido”.
49 | P á g i n a
Volumen 9
Tanto Mao como Megumi y Shouma estaban de acuerdo.
“¿En serio?, bien creo que solo tengo que ganar”.
“Oye Keiki te engañas a ti mismo con decir eso eh”.
Esto era obvio, la diosa de la suerte pensó que sería muy divertido que aquella maldición se hiciera
realidad, por lo que el joven recibió una derrota aplastante. Sin embargo, como sacar una
confesión tan embarazosa resulto ser más aburrido de lo que se había previsto, este castigo se
eliminó del juego y simplemente jugaron por diversión después de esto. Y como ya todos estaban
tan familiarizados entre sí, no pasó nada importante y solamente se divirtieron todos juntos.
Después de cambiar el juego al de Old Maid y después de sacar la carta perdedora, Megumi trajo
un nuevo tema a la conversación.
“Oye Kiryuu-shi, ¿Cómo le va al club de caligrafía en los temas del amor y eso?”.
“Vaya, que pregunta salida de la nada”.
“Bueno, es que veo que tienes a Nanjou-chan, Kiryuu-chan y a otras chicas muy hermosas allí, y
como eres el único chico, estoy sorprendida de que no sucediera algo”.
“Si… parece como si tuviera un Harem”. Keiki por fin lo admitió.
Primero que nada estaba la confesión de Mizuha. Y no podía negar que su vida se parecía mucho a
una comedia romántica, pero lamentablemente el salón del club estaba lleno de perversión en vez
de romance. Esa era la situación exacta del club de caligrafía.
“Bueno eso dices tú, pero debería haber una chica que te guste ¿no?”.
“”””¡¿…?!””””
Cuando Megumi menciono esas palabras con una gran sonrisa, las expresiones de las otras chicas
quedaron paralizadas.
“Oh, ¿Es en serio Keiki?”.
“Vamos… no le eches más leña al fuego Shouma…”
A pesar de que él quería cambiar rápidamente de tema, el grupo de chicas no lo iba a permitir, así
que siguiendo el mismo ejemplo de Megumi, las otras tres se acercaron a Keiki y le cortaron toda
vía de escape.
“Me gustaría saber quién es la persona que le gusta a Nii-san”.
“Ayano-san también está interesada”.
“¿Quién es Kiryuu?”.
Mizuha y Ayano insistían que Keiki continuara, mientras que Mao parecía estar un poco menos
interesada en esto.
50 | P á g i n a
Volumen 9
¿Que esta pasando?, ¿Por qué estoy sintiendo esta presión tan intensa este momento?
Las personas que ahora lo rodeaban emitían una fuerza abrumadora, lo que hacía que Keiki
pensara en huir ahora mismo.
“Nii-san…”
“Kiryuu-kun…”
“Kiryuu…”
Justo cuando el sudor frio empezaba a caer por la mejilla de Keiki, el teléfono de Megumi, el cual
había puesto sobre el escrito antes, comenzó a vibrar.
“Ah, perdón…”
Ella lo levanto y después de mirar la pantalla, bajo su cabeza como si se estuviera disculpando.
“Disculpen, recibí una llamada de mis compañeros del club, al parecer se van a reunir ya mismo”.
“No sabía que estuvieras en un club Onizuka-san”.
“Bueno, en realidad estoy en el club de investigación de manga, y soy la única chica allí, así que
prácticamente soy como la princesa otasa”.
“Es la primera vez que veo a alguien así” comento Keiki.
“¿Eh?, ¿Pero tú eres muy similar a mí no?, eres el Rey del harem del club de caligrafía”.
“No soy un rey del harem ¿sí?”.
“Ajaja, no creo que falte mucho para eso, pero… Bueno, creo que esta podría ser la oportunidad
perfecta para coquetear con las chicas que te rodean”.
“¿Eh?”.
“De todas formas, discúlpenme, debo irme”.
La autoproclamada princesa otasa salió rápidamente de la habitación.
Muchas gracias gente del club de investigación de manga.
Gracias a lo que había pasado, la presión que venía de Mao y las otras chicas había disminuido, por
lo que el encontró un modo para escapar de todo esto.
“Bien, creo que ya es hora de ir a dormir”.
“Ah, Nii-san está huyendo~”
“Kiryuu-kun es una mariquita”.
“Hmph…”
51 | P á g i n a
Volumen 9
A pesar de que cada una de las chicas expreso su descontento y como la propia Megumi ya no
estaba y como último punto, ya era muy tarde, estaba bien en decir que ya todo debía acabar
aquí.
“Buenas noches Nii-san, Akiyama-kun”.
“Muchas gracias por la invitación”.
Mizuha y Ayano se rindieron rápidamente, y en el momento que Mao fue a seguirlas, Keiki la
detuvo rápidamente.
“Nanjou, ¿Tienes un segundo?”.
“¿Kiryuu?”.
“Debemos hablar, ¿puedes venir conmigo?”.
***
Al mismo tiempo, Sayuki disfrutaba de su pijamada con Koharu, las dos estaban hablando de toda
clase de cosas entre la habitación de Sayuki.
“…Tienes que decirme cuando vayas a tomar una foto, gracias a eso hice una cara muy rara”
Koharu estaba sentada en un cojín, mientras que Sayuki quien se estaba quejando encima de su
cama.
“Ah, sobre esa foto, se la envié a Shouma-kun, así que Kiryuu-kun de seguro también la vio”.
“¡¡No puede ser!!”.
“No te preocupes, me asegure de tomar una linda foto”.
“Que me felicites por mi extraña expresión no me hace feliz ¿sabes?”.
Mirando ella misma la foto, Sayuki soltó un suspiro débil. Ella tenía una perfecta expresión de
sorpresa, lo que claramente indicaba que no esperaba que le tomaran una foto.
“Bueno, ya no más de la foto. De todas maneras disculpa por haberte invitado hoy a mi casa, sé
que debió haber sido una molestia”.
“No, no, estoy muy feliz de poder hablar contigo, Tokihara-san”.
Después de haber escuchado el presumido anuncio de Yuika, Sayuki llamo rápidamente a Koharu,
quien le respondió: “Por supuesto, una pijamada suena muy divertida”. Sin pensarlo dos veces,
una vez dicho esto, Sayuki aún se sentía un poco culpable por eso.
“Se debe sentir extraño que estemos así solas, ¿verdad?”.
“No lo creo, ya que hemos hablado mucho por mensajes y eso”.
“Pero todo ha sido sobre Akiyama-kun. Ah ahora que recuerdo, ¿No estas preocupada?, el está en
el viaje escolar, ¿Qué tal si te engaña?”.
52 | P á g i n a
Volumen 9
“Shouma-kun es un lolicon, así que ignora a las chicas de su edad y grado”.
“Esa razón para que confíes en él es bastante horrible la verdad…”
“Mis únicas rivales son las chicas de primaria, así que…” Dijo Ootori-san mientras sus ojos se
volvían cada vez más perturbados “Ya que yo solo me veo como una Loli… jamás le podre ganar a
una niña de primaria…”
“Mejor no hablemos de eso, creo que estamos tocando un tema que jamás debe tocarse”.
La Loli legal estaba a punto de caer en un abismo, por lo que Sayuki prefirió cambiar rápidamente
de tema.
“Bueno, suficiente de mí, ¿Qué hay de ti Tokihara-san?”.
“¿De mí?”.
“¿Es en serio que te quieres convertir en la mascota de Kiryuu-kun?”.
“¿Eh?, ¿Acaso yo alguna vez te dije eso?”.
“Ah… um… bueno… la verdad es que te escuche hablar con Kiryuu-kun sobre eso, así que…”
“¿En serio?, creo que debería tener más cuidado con eso”.
“…Uf”.
En realidad, Keiki supo sobre el fetiche de Sayuki gracias a que Keiki, le había contado esto hace
bastante tiempo, pero Sayuki no sabía nada de esto.
“Bueno… en realidad no he tenido ningún progreso con el plan de volverme su mascota”.
“¿Ningún progreso?, ¿Nada de nada?”.
“Hubo un festival cultural y después de todo eso, Keiki-kun ha estado ocupado, así que no me he
podido acercar a él”.
“La distancia entre ustedes dos podría hacerse cada vez más grande, así que, ¿En serio crees que
está bien sentarse y esperar?, Kiryuu-kun parece un chico muy popular, y nosotras que estamos en
tercer año, no tenemos mucho tiempo…”
“Si…”
Noviembre ya estaba llegando a su fin, y una vez empezara diciembre, su año escolar se podría dar
por terminado. Era una cuenta regresiva demasiado corta desde el final de los exámenes hasta su
graduación. Así que a Sayuki le quedaban pocos meses en el tercer año.
“Sería una gran mentira si dijera que no estoy en pánico. Todas las chicas del club de caligrafía son
mis rivales, y Fujimoto-san no es la única del consejo estudiantil. Takasaki-san también ha
empezado a tener cierto interés por Keiki-kun”.
“Kiryuu-kun tiene muchas amigas”.
53 | P á g i n a
Volumen 9
54 | P á g i n a
Volumen 9
55 | P á g i n a
Volumen 9
Y de hecho ella tenía razón, ya que tanto su senpai como su kouhai, su compañera de clase e
incluso su hermana mayor estaban detrás de él. Era una enorme cantidad que incluso era una
locura.
“Pero, no puedo evitar esto, Keiki-kun es alguien genial. Puede que al inicio el parezca poco
confiable, pero una vez alguien tiene problemas va en su ayuda y hace lo mejor que puede, sin
duda es un hombre maravilloso”.
“Tokihara-san…”
“Es por eso que debo ser más perra para llamar la atención de él”.
“Ah… ya veo, pensé que hablabas de aumentar su encanto femenino”.
“No es por ser pesimista pero aparte de la caligrafía y mis calificaciones, en realidad no tengo
muchas cosas de las que presumir”...
“Oye, ¿Y tú no quieres ser la novia de Kiryuu-kun?”.
“¡¿Novia?!”.
En ese instante el rostro de Sayuki se puso completamente rojo gracias a la repentina aparición de
esa palabra.
“P-pero, ¿Cómo podría?, solo sé que me podría convertirme en su mascota, eso es todo lo que
puedo pedir”.
“No es cierto, tu eres una chica muy encantadora Tokihara-san”:
“Ootori-san…”
“Y por mí, yo te estaré apoyando Tokihara-san”.
“Gracias, lo único que se necesita en la vida es un amigo en quien confiar”.
“Bueno, en realidad ya estoy apoyando a Nanjou-san y a Mizuha-san también”.
“¡Traidora!”.
“Oye, no puedo elegir, todas me caen bien después de todo”.
Koharu era una chica muy amable, por lo que era obvio que ya tuviera una relación cercana con
Mizuha y Mao.
“Keiki sin duda es el rey de un Harem, tener tantas chicas detrás de el…”
“Fufu, si, en realidad él podría construir un harem si quiere…”
“Pero él no puede hacer eso”.
“¿Tokihara-san?”.
56 | P á g i n a
Volumen 9
“…Yo quiero que el solo tenga ojos para mí”.
Y con estas palabras, Sayuki enterró su cara en la almohada que tenía en sus brazos. Mientras la
miraba fijamente, Koharu soltó una pequeña sonrisa. El querer gustarle al chico que te gusta, es
algo muy normal para una chica.
***
Mientras Sayuki estaba ocupada abriendo su corazón de doncella enamorada. Nagase Airi estaba
pasando la mejor noche de su vida.
“Ha, pensar que lograría hacer que Yuika viniera a mi casa”.
Ella se aseguró de planear esto el día del viaje escolar del segundo año, además también se
aseguró del día en que sus padres no volvían a casa por el trabajo. Ella había hecho un plan
perfecto para que Yuika viniera a pasar la noche con ella.
“Ella no se bañó conmigo porque estaba avergonzada con desnudarse y eso, pero cuando vi que
ella se bañaba en el baño que yo use… ¡No está para nada mal!”.
Después de cenar, Airi intento invitar a Yuika para que se bañaran juntas, pero su sueño fue
aplastado inmediatamente. Así que después de bañarse sola y triste, Airi con el cabello suelto y en
pijama estaba alistando los fotones de invitados.
“¡Perfecto!”.
La zona para acostarse a dormir ya estaba completamente lista para el regreso de Yuika, quien
llegó justo en ese momento.
“Gracias por prestarme el baño”.
“Ah, bienvenida de nuevo”.
No hace falta decir que Koga Yuika era una chica extremadamente linda. Su cabello dorado como
el oro y sus ojos verde esmeralda, todo de ella era tan hermoso que al verla te hacia suspira en
agradecimiento por ver algo así. Incluso Airi estaba encantada con su apariencia. Sin mencionar
que justo ahora Yuika había recién salido del baño. Con una leve humedad en su cabello y sus
mejillas ligeramente rosadas, todo hacía que la razón de Airi se perdiera cada vez más.
“…Um, ¿Yuika?”.
“¿Si?”.
“¿Puedo tocar tus pechos un segundo?”.
“Obviamente, no”.
Después de aquella inmediata respuesta, Yuika hizo un puchero e intento esconder sus pechos con
sus dos brazos.
“A veces suenas como un viejo pervertido Airi…”
57 | P á g i n a
Volumen 9
“Ehehe~”
“Eso no es un elogio…” Yuika miro de una manera bastante seria a su amiga quien caminaba por la
vía del acoso sexual.
Después de eso, ella se llevó una de sus manos a su boca y soltó un bostezo bastante tierno.
“Ya es bastante tarde, ¿Qué tal si nos acostamos a dormir?”, Airi comento.
“Si eso suena bien”.
“Puedes usar la cama Yuika, yo dormiré en el futon”.
“No, Yuika no puede dejarte hacer eso”.
“No te preocupes”, Dijo Airi. “Hoy eres mi invitada Yuika”.
“…Entonces… ¿Qué te parece si dormimos juntas?”.
“… ¿Eh?”.
¿Qué tan afortunada ella podría ser? Ella estaba muy feliz con solo tener una pijamada, ahora
tenía la oportunidad de dormir al lado de Yuika, ella no podría dejar pasar una oportunidad como
esta que jamás volvería a tener. Así que asegurándose de no darle oportunidad de
arrepentimiento a Yuika, ella se acurruco en la cama junto a ella.
“…Ahora está un poco estrecho ahora”.
“Creo que mejor deberías dormir en el futon, Airi”.
“Ehehe, no quiero~”
A pesar de que estaba estrecho, aun así podía sentir la temperatura corporal de Yuika y esto era la
felicidad pura que hacía que todo lo demás no importara.
“…Oye Yuika” Airi la llamo.
“¿Qué fue lo que hizo que Kiryuu-senpai te interesara?”.
“¿Eh?, ¿Por qué esa pregunta tan de repente?”.
“Bueno, hablar de cosas de chicas es algo normal en una pijamada ¿no?”.
“Ah sí, charla de chicas… Keiki-senpai no es más que un candidato a ser mi esclavo”.
“¿En serio?, ¿No tienes ningún sentimiento romántico hacia el?”.
“…P-por supuesto que n-no”
“Dudaste ¿sabes?”.
“¡Fue porque dijiste algo extraño!, ¡Keiki-senpai es solo un candidato a esclavo!”.
58 | P á g i n a
Volumen 9
“Fufu, mejor dejémoslo así”.
Airi había llegado demasiado lejos con sus burlas, lo que hizo que Yuika hinchara sus mejillas y
poner mala cara. Esa reacción fue extremadamente linda. Lo que hizo que Airi quisiera ver más
esta expresión, pero Yuika se podría enojar en el proceso, por lo que Airi prefirió detenerse.
“¿Y qué hay de ti Airi?”.
“¿De mí?”.
“Odiaste a Keiki-senpai en un inicio, pero ahora eres muy cercana a él.
“Mmm… bueno, en realidad no lo odio, mi relación con él es un poco más diferente a eso”.
“¿En serio?”.
“Sip, yo creo que él es una buena persona”.
A pesar de no querer admitirlo, Airi confiaba mucho en Keiki. Lo más seguro es que para ella, el
fuera el mejor chico de todos. Era amable y podía hablar muy fácil con él, por lo que ella lo
respetaba, sin embargo, ella no sentía nada parecido al amor.
“si quieres que él sea tu esclavo, tienes que apurarte y hacer algo, si no otra chica podría
llevárselo, tu sabes que él es bastante popular después de todo”.
“Ugh…”
“¿Qué tal si forma una relación con alguien de segundo año en su viaje escolar?”.
“Y-Yuika está segura que no va a pasar, Keiki-senpai no es esa clase de persona”.
“Quizás, pero, ¿Qué hay de las otras Senpai?”.
“¿Eh?”.
“Siempre está la posibilidad de que algunas chicas se puedan acercar a él por su propia cuenta…”
“¡¡No puede ser!!... ah, pero ahora que lo mencionas…”
Yuika tenía una idea clara de quien podría hacer avances.
“Fujimoto, puede que no lo haga, pero Mao-senpai seguramente si, y Mizuha-senpai ya admitió
abiertamente que le gusta Keiki-senpai”.
“Ah es verdad, Mizuha-senpai es adoptada ¿no?”.
59 | P á g i n a
Volumen 9
60 | P á g i n a
Volumen 9
Sus relaciones personales sin duda eran bastante complicadas. No solo las chicas de segundo año,
sino también las de tercer año apuntaban hacia él, sin duda era todo un playboy sin quererlo.
“B-bueno, Keiki-senpai es quien debe decidir a quién quiere, y a Yuika no le importa, incluso si no
logro que sea el, hay muchas personas que quieren ser esclavos de Yuika”.
“¿En serio?”.
“…No”, con una expresión como si fuera a llorar, Yuika dejo salir sus verdaderos sentimientos.
“Yuika quiere que Keiki-senpai la escoja”.
“Yuika…”
Su expresión era tan linda, que Airi tuvo que abrazarla.
“¿A-Airi?”.
“…Si pudiera reencarnar, me gustaría ser Keiki-senpai”.
“¿Eh?”.
Ella dijo eso no porque amara a Yuika, era solo que la joven Yuika era demasiado amable, lo cual
hizo sentirse celosa de la persona que había logrado que ella pusiera esa expresión en su rostro.
***
Llevando consigo a Mao quien tenía puesto un Yukata, Keiki compro dos latas de chocolate
caliente de una de las máquinas expendedoras que había en el lobby del segundo piso y le entrego
una ella. Después de eso los dos se sentaron y después de tomar un sorbo, Mao fue la primera en
hablar.
“Y bien, ¿De que querías hablar?”.
“Quiero aclarar el malentendido que hubo en el día”.
“Ya no estoy enojada por eso”.
“¿En serio?”.
“Fue Mizuha quien puso esas panties ahí ¿verdad?, ella me lo conto”.
“Si fue así”.
“Pero aun así no has despejado mis dudas sobre tu fetiche con el olor”.
“Bueno, ni si quiera yo puedo despejar mis dudas, en realidad tuve ciertos problemas con
Fujimoto-san que no te puedo decir justo ahora, pero créeme, no tengo un fetiche por los olores”.
En realidad la persona que tenía ese fetiche era Ayano, pero él no lo podía decir.
“Estoy sorprendida que intentes aclarar un malentendido con unos argumentos tan débiles”.
61 | P á g i n a
Volumen 9
“Uuu…”
“Bueno, como sé que siempre te ves envuelto en cosas extrañas. Si aceptas mi condición, te podría
creer”.
“¿Qué condición?”.
“Mañana en la noche… van a hacer la fogata ¿verdad?”.
“Ooh… ahora que lo mencionas si, van a hacerla”.
En la guía estaba escrito y ya mucha gente hablo sobre eso a lo largo del día.
“Al parecer, los que se inscribieron van a bailar mejilla con mejilla”.
“Ah, es verdad que es en parejas”.
“Baila conmigo”.
“¿Eh?”.
En el momento que Keiki miro a Mao sorprendido, ella tenía un puchero en su rostro.
“¿Qué?, ¿Acaso ya prometiste bailar con alguien más?, o acaso, ¿No quieres bailar conmigo?”.
“Estas equivocada en ambas cosas… es solo que… ¿No se supone que es un evento para parejas?”.
Ya sea de Parejas o parejas de amigos que son un poco menos que avances, cualquiera que quiera
dar un paso más en su relación, pediría a la otra persona bailar alrededor de la fogata mientras
escuchan música. Como si entendieran lo que Keiki pensó, Mao volvió a hablar con el rostro
ligeramente rojo.
“N-no te hagas un malentendido, ¿está bien?, si bailas conmigo, no me voy a tener que preocupar
de que bailes con otra chica, así mi inspiración de doujinshi no tendrá ningún percance, esto no
tiene ningún otro significado”.
“Ya veo, así que es por eso…”
Mao siempre había estado en contra de que Keiki pasara tiempo con otras chicas, ya que eso
siempre afectaba su rendimiento a la hora de tratarse de dibujar doujins BL, ella siempre
intentaría evitar que Keiki se acercara con intenciones románticas hacia otras chicas. Fue por esa
razón que también se unió al club de caligrafía. Y a pesar de que causara rumores extraños si
bailara con Mao, Keiki ya era considerado como el Rey de un Harem, así que ese rumor no podía
doler más.
“Bien, bailare contigo”.
¿Cuál sería el significado detrás de la acción de llevarse las manos a las mejillas por la felicidad
mientras se separaba rápidamente de el? Keiki no tenía ni idea, y siguió así durante toda la
primera noche del viaje escolar.
62 | P á g i n a
Volumen 9
Capítulo 3: ¿Qué haces aquí Heroína?

A comparación del primer día de viaje escolar, el segundo fue mucho más tranquilo. Después de
que se despertó y desayuno en la cafetería de la posada, hicieron una caminata por la montaña. Y
una vez llego la hora del almuerzo, comieron una comida gloriosa, pero…
“Creo que comí demasiado…”
El almuerzo fue una barbacoa al aire libre, después de separarse nuevamente en los mismos seis
grupos del anterior día y disfrutar su carne y verduras, Keiki tuvo que sentarse en uno de los
bancos cercanos para tomar un breve descanso. Su estómago estaba a punto de explotar, por lo
que se froto un poco y observo a los estudiantes disfrutar su propia comida. Fue allí cuando
Megumi se acercó con su hermoso cabello balanceándose de un lado a otro con cada movimiento.
“¿Ya no puedes comer más Kiryuu-shi?”.
“Mientras tomaba un descanso, Nanjou siguió poniendo cosas en mi plato”.
“Aajaja, ella hizo lo mismo conmigo. Nanjou-chan parece una madre ¿verdad?”. Mientras soltaba
una risa, Megumi se sentó en el banco al lado de Keiki.
Ella se sentó a una distancia, la cual no estaba ni muy lejos ni muy cerca de él, por otro lado, ella
tenía unos pantalones hoy, lo cual le daba un aspecto un poco infantil.
“Ahora que recuerdo, Hoy es el día de la fogata ¿no?” Añadió Megumi.
“Así es, la van a hacer por aquí”.
“Incluso planearon un baile, oye, ¿Tú vas a bailar con alguien más?”.
“Si, prometí hacerlo con Nanjou”.
“¿Eh?, ¿Con Nanjou-chan?, ¿Tú le pediste que bailara contigo?”.
“No, fue Nanjou quien lo hizo”.
“Oooh, así que fue Nanjou-chan, eso es inesperado”. Después de escuchar eso, una sonrisa
bastante picara se cruzó en el rostro de Megumi.
“… ¿Por qué me miras así?”.
“Por nada. Solo que es escuche una historia muy interesante en el club de investigación del
manga”.
“¿Qué historia?”.
“Bueno, la cosa es-“
Para mantener la historia entre ellos, Megumi se inclinó hacia Keiki y le susurró al oído.
63 | P á g i n a
Volumen 9
“-Los chicos y chicas que bailan juntos en este viaje tienen una muy alta probabilidad de terminar
juntos por siempre ¿sabes?”.
“Ah ya veo”. Le respondió Keiki un poco aburrido.
“¿Eh?, no esperaba esa reacción de ti”.
“Bueno, creo que esa clase de cosas seria mucho más sorprendente para las personas que han
conseguido en su vida aunque sea una pareja. Yo, en cambio jamás he tenido una novia”.
“Entonces toda esperanza está perdida ¿eh?”.
“A veces puedes ser bastante sincera Onizuka-san”.
Por otro lado, parecía que Megumi recibía bastantes invitaciones y tenía bastantes pretendientes.
“Pero si tú no tienes ningún interés en esa clase de cosas Kiryuu-shi, puede que no sea así para
Nanjou-chan”.
“Oh por favor, no seas tan pesado. Si Nanjou-chan sabe de este rumor y ella te invito a bailar, ¿no
quiere decir que tiene cierto interés en ti?”.
“¿Eh…?”
Por un segundo el tren del pensamiento de Keiki se detuvo.
“… ¿Es en serio lo que dices?”.
“Pues si lo piensas detenidamente tiene sentido”.
“Puede ser…”
Según Megumi, las parejas que bailaban juntas en la fogata tenían una alta probabilidad de
terminar juntos para siempre. El también había escuchado sobre el rumor de las panties rosas que
según dicen aumentaba las posibilidades de éxito en una confesión. Así que él no era para nada
nuevo en esta clase de cosas.
¿Así que Nanjou me pidió que bailara con ella porque sabía este rumor?, pero… ella me había dicho
que era para su material doujin…
Ella había dicho que lo invitaba como medida de seguridad para que ninguna otra chica le pidiera
bailar con él. Esto también fue para no perder inspiración para hacer Doujins ya que esa era su
única pasión, el manga BL, en el que Keiki se enamoraba de otro hombre. Por ende, él no podría
tener ningún interés romántico con otra chica.
Eso fue lo que él había pensado, pero, ¿en realidad era así?, ¿en realidad esa era la única razón por
la que lo había invitado al baile?, la pregunta de Megumi: “¿no quiere decir que tiene cierto interés
en ti?”. Continúo apareciendo en su cabeza.
64 | P á g i n a
Volumen 9
“Por lo que puedo ver, Nanjou-chan es la clase de persona que ofrece todo de sí a la persona que
le gusta”.
“¿En serio?”.
“Te puedo recomendarla a ella como una esposa, así que si quieres tener una, lo mejor será que
no la dejes escapar”.
“No, en realidad no estoy buscando una”.
Megumi parecía obstinada a unirlos a los dos o podría ser su imaginación por lo que decidió
ignorarla por ahora.
“Aun así creo que tener alguien con quien bailar es muy agradable”. Comento Megumi.
“¿Eso quiere decir que no tienes a nadie con quien bailar Onizuka-san?”.
“Si… es así, todas las personas que están en el club de investigación del manga me halagan y dicen
que soy la ´Princesa Otasa´, pero en realidad jamás he tenido un novio, así que soy una súper anti-
normie, ¿Tienes algún problema con que sea así?”.
“No, lo lamento”.
Después de tomar un respiro después de aquella inesperada revelación. Megumi fijo su mirada a
sus compañeros de clase que estaban en la mitad de su almuerzo. A lo lejos, había una pareja que
se alimentaba mutuamente con carne a la parrilla, fue allí que Megumi entrecerró sus ojos
mientras los miraba.
“…Estoy realmente celosa, ser así de cariñosos delante de otras personas”.
“¿Eh…?”
“Todas las parejas pueden explotar… son unos estúpidos…”
“¡¿Onizuka-san?!”.
“…Es broma~”
Después de decir unas palabras bastante macabras, Megumi se levantó del banco y actuó como si
nada hubiera pasado.
“Voy a regresar, como soy tan agresiva necesito comer carne ¿sabes?”.
“S-si… creo… que te voy a animar…”
Él se quedó observando como la depredadora mujer se alejaba hacia la barbacoa.
“Me pregunto si Onizuka-san tiene algún clase de odio hacia las parejas…”
Incluso el mismo Keiki pensó alguna vez: “Los Normies pueden morir en un incendio”, Pero el sintió
que el odio de Megumi hacia ellos era mucho más fuerte que el suyo. Fue justo en ese momento
que Mao se sentó en el mismo lugar que Megumi.
65 | P á g i n a
Volumen 9
“Hey~”
“Oh, ¿También viniste a descansar Nanjou?”.
“Algo así, ¿De qué hablabas con Onizuka?”.
“Sobre varias cosas, llegamos a la conclusión que los Normies deben explotar”.
“Ese tema está un poco más allá de mi comprensión pero está bien”.
¿Quién la podría culpar por eso?
“Kiryuu, ¿Recuerdas la promesa de esta noche verdad?”.
“¿Sobre el baile?, si lo haré”.
“Muy bien”. Con un tono un poco frio, Mao le dio la espalda y mirándolo por encima del hombro.
“Deberías regresar pronto Kiryuu, si no, ya no habrá carne”.
“Si, ya voy”.
“Ah y también~”
Al parecer como si hubiera recordado algo. Mao se dio media vuelta y con las manos detrás de la
espalda, miro a Keiki con una sonrisa burlona.
“¡Tengo muchas ganas de bailar esta noche contigo Kiryuu!”.
“¡¿Qué?!”.
Después de haber escuchado aquella declaración, que él no sabía si en realidad era una broma o
no, Keiki solo la pudo mirar estupefacto mientras regresaba a la barbacoa.
“…Eso de ahora fue injusto”.
Con el corazón a mil por minuto gracias al ataque sorpresa de Mao, Keiki recordó lo que Megumi
le había dicho. Sobre el rumor de que un chico y una chica estarían juntos si bailaban en la fogata.
¿Después de todo eso Mao lo sabía?, y si lo sabía, ¿Eso quería decir que ella sentía algo por Keiki
como Megumi le quería hacer pensar?
“No, no, no. Esto de seguro es el típico malentendido pervertido, nada más”.
Cada vez que Keiki tenía esperanza en algo, siempre terminaba convirtiéndose en algo pervertido.
Y aun mientras lo negaba asiduamente, su rostro se puso caliente, de seguro por el calor de la
barbacoa.
***
Y por fin, llego la noche. Keiki estaba haciendo nada junto a Shouma en el sofá del lobby al aire
libre, los maestros y algunos estudiantes estaban ocupados preparando la fogata, mientras que
otras estaban reunidos en el lobby esperando a que el evento iniciara. A mitad de la conmoción,
Shouma soltó un suspiro y miro al techo.
66 | P á g i n a
Volumen 9
“Están haciendo una fogata y no puedo estar junto a Koharu-chan”.
“Bueno estamos en años diferentes, así que no lo puedes evitar”.
“Oye ¿Y al fin ibas a bailar con Mao-chan?”.
“Así es, lo prometí”.
“Qué vergüenza y yo no puedo bailar con Koharu-chan”.
“Nanjou es la única feliz por eso ¿sabes?”.
Mientras ambos muchachos hablaban de manera ociosa, el Smartphone de Keiki que estaba en su
bolsillo vibro.
“Oh es Mizuha, ¿Qué querrá ahora…hmm?”.
En el instante que abrió el mensaje, había una imagen en la pantalla. Allí estaba Mizuha en ropa
interior, o mejor dicho, con nada más que su ropa interior de color gris. Debajo de la imagen había
un pequeño texto.
“Encontré un excelente lugar para desnudarme, voy a hacer un striptease aquí para celebrar”.
“¡¿Pero que está haciendo?!”
Mientras la cara del hermano mayor estaba petrificada debido a la sorpresa, llego otro mensaje,
parecía como si ella hubiera visto su reacción.
“¿Serias feliz si vienes a verme en vivo?”.
“¿Eh…?”
“Si no te apuras… tendré que quitarme todo… tú ya sabes…”
“¡¿Cómo demonios manda mensajes tan rápido?!”.
Los insinuosos y peligrosos mensajes de su hermana menor no paraban de llegar.
“¿Keiki que sucede?”.
“¡Paso algo urgente!”.
“¡¿Y qué va a pasar con la fogata?!”.
“¡Eso sigue adelante!”.
Con su teléfono en la mano, Keiki se paró rápidamente y salió corriendo del vestíbulo.
“¡Maldita exhibicionista…!”
Esto no terminaría bien si alguien la viera haciéndolo. Por lo que él tuvo que obligar a Mizuha a
ponerse su ropa antes de que todo empeorara. El lugar donde Mizuha le dijo que estaba, estaba
un poco alejado del edificio de la posada. Este sitio parecía ser un almacén abandonado. Así que
67 | P á g i n a
Volumen 9
una vez vio que la puerta estaba abierta, el entro rápidamente a una sala que era de un tamaño
muy parecido al de un salón.
“¡Mizuha!”.
“Ah Nii-san viniste”.
Cuando el paso por unos estantes llenos de cajas de cartón, Mizuha estaba allí esperándolo con el
mismo atuendo con el que le había mandado las fotos de antes. Cerca de ella estaba la ropa que
con seguridad estaba usando, estas prendas estaban cuidadosamente dobladas en una pila. Ella
miro a Keiki con sus mejillas completamente rojas, lo más seguro es que se sintiera un poco
avergonzada por su juego de rol exhibicionista.
“¿Recuerdas esto?, es la ropa interior que elegiste para mi Nii-san”.
“Si, es imposible que lo olvide”.
No era de extrañar que Keiki recordara con suma claridad esa ropa interior. Ya que el mismo la
había elegido para Mizuha en medio de su cita en las vacaciones de verano.
“Ehehehe Nii-san vio mi ropa interior de la suerte…”
“Tú eres la que la volvió así”.
“¿Qué hacemos ahora?, ¿Me desnudo?, ¿Me vas a ayudar Nii-san?”.
“Oye, ¿Por qué te obsesionas tanto con desnudarte?”.
Quitarse la ropa era algo completamente natural como si de respirar se tratara para su hermana
menor. Ella en este momento parecía tan excitada por solo usar brasier y panties, que si se llegara
a desnuda, ¿Quién sabe qué cosa podría hacer?
“Sin importar cuanto te guste el exhibicionismo, tiene que haber un límite para ello”:
“Jejeje, esa es mi forma de seducirte”.
“¿Seducirme?”.
“Escuche que planeabas bailar con Mao-chan en la fogata de esta noche”.
“Así es, ese es mi plan…”
“Yo también quiero bailar contigo”.
“¿Eh?”.
“Quiero que Nii-san baile conmigo también”.
Mientras ponía una mano en su pecho, Mizuha se repitió esto mismo con una expresión muy seria
en su rostro.
“¿Me llamaste para decirme eso?”.
68 | P á g i n a
Volumen 9
“No esperaba que Nii-san fuera a bailar con alguien más y no quiero que te detengas solo porque
soy tu hermana menor”:
“Mizuha…”
“Además de eso, te quiero declarar algo que he decidido y que quiero”.
“¿Decirme lo que quieres?”.
“Quiero que Nii-san sea solo mío”.
Invitar a una persona del sexo opuesto que te gusta a bailar alrededor de la fogata era una forma
muy común de decirles a los demás que aquella persona te pertenecía. Sin mencionar la
superstición sobre aquel baile. Así que para una doncella enamorada, se podría esperar una
reacción así.
“Si no aceptas mi petición, me veré obligada a hacer algo irreversible aquí y estoy preparada para
todo”.
“¡¿Qué planeas hacer?!”.
“¿Tu qué crees?”.
Mizuha puso su mano izquierda en el centro del brasier y su mano derecha entre sus panties y su
pie. Las dos manos estaban listas para actuar y estaban en espera. El más mínimo movimiento
podría revelar todo de ella.
“Bien Nii-san, ¡Si no quieres que tu hermana termine desnuda, promete bailar con ella!”.
“¡Oye eso no es seducción, eso es una amenaza!”.
El obviamente no iba a permitir que su hermana menor quedara completamente desnuda. Pero, si
aceptaba esta propuesta era como ceder al terrorismo y en el peor de los casos, Mizuha podría
usar esta misma técnica en el futuro.
Mizuha has llegado demasiado lejos hoy.
El no podía aceptar comportamientos de exhibicionista como este. Ya que el hecho de que ella
fuera a la escuela sin usar panties había afectado gravemente la salud mental de Keiki. Si ella
estuviera completamente desnuda en público sin duda lo llevaría al límite.
¡Este es el momento perfecto para poner en marcha el éjemplo negativo´!, ¡Es ahora o nunca!
Esta operación había tenido un gran efecto contra Ayano. Así que si Keiki se convirtiera en un
pervertido en este momento, le podría mostrar lo que se siente ser atormentado por una persona
exhibicionista.
“Bien, aquí no pasara nada”.
“… ¿Eh?, ¿N-Nii-san… que haces…?”
69 | P á g i n a
Volumen 9
¿Quién podría culpar a Mizuha por su reacción?, su propio hermano de repente empezó a quitarse
la chaqueta y la camisa. Una vez con toda la parte superior a la vista. Keiki puso sus dos manos en
los pantalones y empezó a quitárselos con un movimiento bastante fluido. Ahora él era un
pervertido de pie en ropa interior.
“¡Ahora graba esta imagen en tus ojos!”.
El casi le había revelado absolutamente todo a su hermana menor. Gracias a esto no había
absolutamente nadie en el planeta que no pensara que el fuera un pervertido. Sin embargo,
Mizuha no mostro arrepentimiento en su accionar, y su expresión era completamente opuesta a lo
que él había imaginado.
“…Nii-san… estas entrando en ambiente ¿eh?”.
“… ¿Mmm?”.
Su expresión de seriedad de repente se convirtió en una de expectativa, por lo que él empezó a

inquietarse.
“Iba a hacer esto si lo del baile salía bien, pero estoy perfectamente si lo hacemos primero…”
“¿Eh?”.
Por algún motivo, la nueva actitud pervertida de Keiki había generado el efecto contrario que él
quería.
“Yo quería que mi primera vez fuera en una cama, pero tampoco sería malo hacerlo aquí…”
“Eh… ¿Mizuha?”.
“Me prepare mentalmente para hoy, así que estoy lista para todo”.
“¿Pero que estas…?”
Aunque Keiki estaba totalmente perdido y confundido sobre lo que sucedía. El entendía
perfectamente lo que Mizuha quería decir.
“¿Eh?, querías tener sexo conmigo y por eso te desnudaste, ¿cierto?”. Mizuha le pregunto.
“¡¡EEEEEEEEEEEEHHHH!!”
“Esta posada tiene aguas termales y pensé que Nii-san podría también quiere. Así que intente
muchas cosas, que por lo que veo si funcionaron”.
“Un montón de cosas… ¿así que el traje de enfermera, las panties en mi mochila y lo de la falda
fue para eso?”.
“Así es, quería que estuvieras lo más excitado posible”.
“P-pero… ¿Cómo pudo pasar eso…?”.
70 | P á g i n a
Volumen 9
Cada uno de esos sucesos fue para que su hermano mayor se excitara sexualmente. En teoría eso
la convertía a ella en una depredadora sexual.
“Y ahora Nii-san, ¿Le harás cosas sexys a tu linda hermanita?”.
“¡¿Qué es esto?!”.
Él había olvidado todo esto debido a que Mizuha había estado tan tranquila recientemente, pero
en realidad era una chica muy caliente. A pesar de que el sentía el peligro en todo su cuerpo, no
podía escapar, ya que si alguien aparte de ellos la veía, la tendrían que transferir de escuela de
inmediato.
“Por favor Nii-san… ya no me puedo contener más… mi cuerpo está muy caliente…”
“¡¿Eeehh…?!”
Con los ojos llenos de lágrimas, Mizuha miro a Keiki fijamente, lo cual hizo que el caos entrara en
su mente.
Sin previo aviso, Mizuha salto hacia el rápidamente. Además de eso ella comenzó a frotar su suave
mejilla contra la de él. En una situación normal, este nivel de cercanía y contacto sería algo que
Keiki podría soportar, pero justo ahora. Los dos estaban en ropa interior y nada más. Ninguna
persona ajena a eso pensaría que ellos dos estaban aquí haciendo nada. Obviamente creerían que
iban a tener relaciones sexuales.
¿Esta increíble sensación en mi estómago es…?
Keiki sabía muy bien que ella estaba muy bien dotada, pero sentir sus pechos así de cerca era algo
extremadamente abrumador. Para cualquier otro chico, este sería el golpe final para caer en la
lujuria. Y aunque Keiki no era como ningún otro chico. Si las cosas seguían así. Mizuha lograría su
cometida. Así que justo cuando empezó a prepararse mentalmente para graduarse de su
virginidad…
“… ¿Eh?”.
Keiki noto inmediatamente que el comportamiento de Mizuha era muy extraño. Sin importar
cuanto tiempo pasara, ella no intento avanzar a más allá de su abrazo actual. Ella había sido tan
proactiva hace unos pocos segundos, pero ahora ella no se movía ni un solo centímetro.
Simplemente estaba apoyada contra su hermano mayor.
“¿Mizuha?”.
“……”
El no obtuvo respuesta, además de eso los ojos de ella estaban cerrados y su respiración era
demasiado irregular.
“¿Mizuha…?, ¿Oye Mizuha?”.
Tampoco hubo respuesta. Preso por el pánico, Keiki movió un poco el cuerpo de Mizuha y puso
una mano sobre su frente.
71 | P á g i n a
Volumen 9
“…Esta muy caliente”.
El calor que ella emitía era tan fuerte que le dolió la mano un poco.
***
En el interior de una habitación en el tercer piso de la posada. Había un futon en el piso y Mizuha
estaba acostada en ese futon vestida con un pijama. Justo ahora tenía sus dos ojos cerrados y ella
gemía levemente por el dolor, sus mejillas rojas daban a entender su alta temperatura corporal.
“Tiene fiebre, pero después de tomar el medicamente se debería sentir un poco mejor”.
“Ya veo…”
Sentada al lado de Keiki junto al futon, estaba Tachibana Kaori-sensei. Ella era la enfermera de la
escuela de 28 años que tenía un novio más joven que ella.
“Disculpa por molestarte con esto Tachibana-sensei”.
“No puedo permitir que te disculpes. Un onii-chan que quiere cuidar a su hermana enferma es lo
más tierno que puede haber”.
Después de lo sucedido anteriormente, Keiki vistió rápidamente a Mizuha y se contactó con

Shouma quien fue rápidamente a buscar la enfermera. Una vez con el permiso de Tachibana-
Sensei, Keiki llevo a Mizuha al tercer piso, pero como no se podían arriesgar a que los otros
estudiantes se contagiaran del resfriado, la llevaron a una habitación vacía. Una vez allí, Keiki le
pidió poder quedarse con Mizuha para cuidarla. Sin embargo, como la entrada a los chicos estaba
prohibida en ese piso, Tachibana-sensei le dio un permiso especial debido a la emergencia.
“De seguro ya lo sepas, pero no puedes entrar a ninguna otra habitación de este piso ¿de
acuerdo?”.
“No me apartare del lado de Mizuha”.
“Le voy a informar sobre esto a los encargados de la posada, una vez todo se calme un poco, ve a
bañarte si quieres ¿bien?”.
“Entendido”.
“Bien, voy a regresar a mi habitación, si sucede algo avísame inmediatamente”.
“Si, lo hare muchas gracias”.
Con una amable sonrisa, Kaori salió de la habitación. Una vez él se despidió de ella, Keiki miro a
Mizuha, quien se disculpó con él.
“Lo lamento Nii-san”.
“No te preocupes, no es tu culpa que tengas fiebre”.
“Pero… prometiste bailar con Mao-chan, ¿verdad?”.
72 | P á g i n a
Volumen 9
“Le envié un mensaje de texto, y le comente la situación, en otra ocasión se lo compensare”.
Justo ahora, el baile en la fogata debía estar en pleno apogeo. Y aunque él se sentía mal por no
poder participar con ella, la saludad de Mizuha era más importante.
No es de extrañar que le hubiera dado ese resfriado gracias a los actos exhibicionistas que ha
estado haciendo.
Pensándolo bien, ella había estado sometiendo su cuerpo a temperaturas muy bajas. Otra razón
más por la que Keiki quería que ella finalmente dejara su exhibicionismo.
“¿Cómo te sientes?”.
“…Me está palpitando la cabeza como loca”.
“Eso es por la fiebre… tsk… si tan solo pudiera ser yo el que está enfermo…”
“Eres todo un siscon Nii-san”.
Una pequeña sonrisa apareció en el rostro de Mizuha mientras ella bromeaba.
“… ¿Nii-san?”.
“¿Hm?”.
“Me quiero bañar…”
“No puedes, si lo haces te subirá la fiebre”.
“Pero el sudor me está haciendo sentir incomoda”.
“Voy a limpiar tu cuerpo, así que espera ¿sí?”.
“…Bueno”.
Debía ser muy duro para alguien con una obsesión por la limpieza como Mizuha soportar el sudor,
pero ahora tenía que esperar por la alta fiebre que tenía. Sin embargo, Keiki le quería ayudar para
que estuviera lo mas cómoda posible, así que el preparo un poco de agua caliente y una toalla
para limpiar su sudor.
“Bien, ya estoy listo, quítate la pijama”.
“Está bien…”
Aun acostada en el futon, Mizuha levanto lentamente la parte superior de su cuerpo. Y una vez se
sentó, ella le dio la espalda a su hermano mayor y empezó a desabotonar cada uno de los botones
de su pijama, dejando al descubierto y blanca espalda.
“…..”
Mizuha se había resfriado una gran cantidad de veces. Y como los dos permanecían solos la mayor
parte del tiempo, siempre se limpiaban el sudor si no podían bañarse.
73 | P á g i n a
Volumen 9
Jamás había pensado en esto…
Si fue así, ¿Entonces porque lo pensaba tanto ahora?, sus delgados hombros femeninos, su blanca
piel empapada en sudor… todo esto hizo que Keiki la viera como un ser del sexo opuesto, por lo
que el quedo obnubilado por la vista.
“… ¿Nii-san?”.
“¿Eh?”.
“Ah, lo lamento, no es nada”.
Este no era el momento ni el lugar para distraerse así. Mizuha estaba enferma, así que el tenía que
limpiar el sudor de ella antes de que su cuerpo se enfriara nuevamente.
74 | P á g i n a
Volumen 9
“Bien, Aquí voy”.

75 | P á g i n a
Volumen 9
“Si, por favor hazlo”.
Después de mojar la toalla en agua caliente, el la paso suavemente por la espalda de Mizuha.
“Au… eso hace cosquillas Nii-san”.
“Por favor aguanta un momento”.
La chica que estaba frente a él no estaba en buena forma por ahora, así que el tenía que tener
cuidado. Afortunadamente para él, no demoro demasiado, ya que era su espalda nada más.
“Bien, terminamos”.
“Gracias”. Después de agradecerle a Keiki, Mizuha continúo hablando con su tono burlón. “¿No
me vas a limpiar al frente?”.
“El frente límpiatelo tu misma”.
“Esta bieeeen”.
Una vez acepto la toalla que Keiki le ofreció, Mizuha se limpió lentamente la parte de su cuerpo,
esto debió ser debido a su condición actual. Una vez termino, ella dejo escapar un suspiro de
satisfacción. Ella se quería abrochar nuevamente los botones del pijama, pero tuvo problemas con
esto debido a su fiebre, por lo que Keiki decidió ayudarla.
“Y ya deberías estar”.
“Gracias”.
“No te preocupes, ahora acuéstate y descansa ¿sí?”.
“Está bien…”
Mizuha debió haber sentido un poco gracias a la posición vertical de su cuerpo, ya que una vez se
acostó, soltó un suspiro profundo.
“Nii-san…”
“¿Hmm?”.
“Hasta que me quede dormida… ¿Podrías sostener mi mano?”.
“Claro”.
Cada vez que Mizuha tenía un resfriado, siempre empezaba a actuar como una niña consentida.
Así que una vez que Keiki accedía a sus peticiones, ella parecía relajarse.
“Tienes que dormir mucho para que mañana estés bien”.
“Mmm… en realidad no me quiero dormir aun…”
“¿Por qué?”.
76 | P á g i n a
Volumen 9
“Si me quedo despierta, puedo seguir sosteniendo tu mano”.
“Solo duérmete ¿sí?”.
“Esta bieeeen…”
Después de responderle de una manera bastante infantil, Mizuha cerró sus ojos para dormir. Sus
respiraciones empezaron a salir también de su boca, lo cual indico que ya se había quedado
dormida.
“…Buenas noches Mizuha”.
Asegurándose de ser lo más gentil posible para que ella no se despertara, Keiki acaricio
suavemente su cabeza. La hermosa cara de su hermana mientras dormía era lo más parecido a un
ángel.
***
Keiki no sabía exactamente cuánto tiempo había pasado desde que Mizuha se durmió. Pero
cuando miro el reloj, las manecillas de este indicaban que ya había pasado después de la media
noche. Ya debió pasar cierto un buen rato desde que las luces se apagaron.
“Creo que me voy a dar un baño antes de acostarme”.
Él quería vigilar a Mizuha el mayor tiempo posible, pero si el mismo no dormía, el día siguiente la
pasaría muy mal. Así que él fue a su habitación del segundo piso, y asegurándose de hacer el
menor ruido posible para no despertar a Shouma, recogió sus artículos de aseo y bajo al primer
piso. Allí se quitó la ropa en el vestier vacío y se puso una toalla alrededor de su cintura, una vez
hizo eso entro al baño.
Después de lavar su cuerpo, él se dirigió hacia el baño al aire libre, allí él se hundió hasta los
hombros en la caliente y humeante agua, Keiki empezó a sentir como todo el cansancio
desaparecía de su cuerpo.
“Creo que me podría acostumbrar a esto…”
El Bañarse con amigos mientras conversaba era muy divertido, pero disfrutar del silencio mientras
se bañaba no era para nada malo. A pesar de que ya casi era diciembre y las montañas eran
bastante frías en este temporada y aun más en la noche, disfrutar de un baño de agua caliente era
algo que el tenía que disfrutar si o sí.
Mientras Keiki disfrutaba de su baño al aire libre…
“…… ¿Hm?”.
El escucho un ruido de traqueteo, después de unos segundos la puerta que conectaba con el
vestier se abrió lentamente.
“Oh, ¿Así que hay alguien más aquí?”.
77 | P á g i n a
Volumen 9
Ya las luces debían estar estar apagadas. Y como la escuela había reservado toda la posada para
los estudiantes. No debería haber personas ajenas a la escuela. Esto significaba que se trataría de
un estudiante o profesor que adoraba bañarse o incluso alguien que trabajaba en la posada.
“… ¿Eh?”.
Pero, todas sus suposiciones resultaron ser equivocadas. La persona que había aparecido en el
baño que estaba al aire libre, era una chica que él conocía. Ella tenía su habitual coleta de color
rojiza a un lado y una toalla envuelta alrededor de su cuerpo.
“¡¿Nanjou?!”.
“Hey~”
Una chica… había entrado al baño de hombres bajo su propia voluntad. La atmosfera tranquila y
relajante de antes cambio completamente. Y a pesar de que ella misma había venido, aun parecía
estar un poco avergonzada mientras sostenía la toalla alrededor de su pecho y cintura. Se veía
bastante linda sin mencionar que era una vista digna de los dioses. Pero ahora Keiki no se podía
dar el tiempo para quedarse mirando.
“Oye… ¿Sabes que este es el baño de hombres?, ¡¿Qué estás haciendo aquí?!”.
“Obviamente lo sé, te vi por casualidad entrando al baño, así que pensé que estaría bien unirme a
ti”.
“¡¿Pero qué haces?!, ¿Qué harás si alguien entra?”.
“Está bien, puse un letrero en la entrada el cual dice que el baño está en mantenimiento”.
“Eso fue un poco atrevido de tu parte…”
“Además todos están dormidos, así que está bien no es la gran cosa ¿verdad? Voy a entrar, está
haciendo bastante frio aquí afuera”.
“¿Eh?... ¡¿Espera?!”.
Sin responderle, Mao comenzó a meter su esbelto cuerpo al agua caliente. Y como si esto fuera
natural, ella se sentó justo al lado de Keiki.
“…Haaah, esto se siente muy bien…”
“S-si… estoy de acuerdo…”
De manera inconsciente, Keiki empezó a hablar de manera muy cortes. Esto fue porque la
sorpresa generada, lo cual hizo que su cabeza entrara en caos.
¿Qué demonios es esto?, ¿Por qué Nanjou se está bañando conmigo?
Sentarse en el mismo baño con una compañera de clase era algo extremadamente surrealista.
Además de que ya era medianoche, lo que significaba que los estudiantes y maestros ya deberían
estar completamente dormidos, pero él no entendía por qué ella vendría al baño de hombres.
78 | P á g i n a
Volumen 9
“…No me mires mucho. A pesar de tener una toalla aún estoy desnuda”.
“¿No es de mala educación entrar al baño mientras aun usas una toalla?”.
“¿Acaso dijiste algo?”.
“Nop, nada”.
Para Keiki sería mucho más problemático si ella no tuviera una toalla justo ahora. Sin embargo,
como estaban a la mitad de la noche, el no podía ver con claridad, pero aun así había suficiente luz
para ver las cosas importantes. Ya que si miraba hacia un lado, él podría ver su escote abierto, ya
que la toalla no tapaba demasiado. Por ende Keiki no se podía relajar en el más mínimo al tener a
una hermosa chica como Nanjou a su lado.
“…Ya te lo había dicho, pero este es el baño de los hombres, ¿Por qué viniste?, ¿Cuál es tu plan?”.
“No tengo ningún plan ni nada”.
“No puede ser… ¡¿Acaso planeas ver mi cuerpo desnudo para así tener algo de material?!”.
“Sinceramente, eso suena bastante bien”.
“¡Nanjou-san pervertida!”.
“¿Acaso eres idiota?, aunque bueno, no creo poder negar la acusación que me haces”.
“Entonces no lo vas a hacer…”
“Si no tuviera una pisca de perversión, no dibujaría Manga Bl”.
“Si eso tiene sentido”.
Una razón bastante comprensible.
“Ahora que recuerdo, ¿Cómo sigue Mizuha?”.
“Aún tiene fiebre, pero debería sentirse bien después de dormir un poco”.
“Ya veo…” Mao soltó un suspiro de alivio.
79 | P á g i n a
Volumen 9
80 | P á g i n a
Volumen 9
Ella sabía perfectamente lo que le había pasado a Mizuha por lo que estaba preocupada por ella.
“…Um, Nanjou”.
“¿Qué?”.
“Discúlpame por no haber cumplido nuestra promesa”.
“No te preocupes por eso, tu hermana se enfermó, así que es obvio que no la podrías dejar tirada
e ir a bailar”.
Una vez se aseguró que Mizuha estaba segura, Keiki se contactó con Mao para contarle lo que
había pasado. Allí él se disculpó por mensaje de texto y le dijo que no podría llegar al baile. Por su
parte ella le respondió amablemente como ahora.
“Aún era bastante divertido incluso sin poder bailar. Ya que no es muy común ver fogatas tan
grandes. Fue chistoso ver como Akiyama y Onizuka maldecían a todas las parejas”.
“Ya veo…”
“Bueno… aunque realmente quería bailar con cierta persona”.
“O-oh…”
“Lo único que pude hacer fue ver la fogata en silencio… fue bastante solitario”.
“Perdóname… ¿sí?”.
“Ahaha, es una broma, no estoy molesta para nada”.
“¿Segura?”.
Ella había estado furiosa con el casi todo el viaje, por lo que no podía confiar exactamente en esa
declaración.
“Te lo voy a compensar en otra ocasión” le dijo Keiki mientras tenía una sonrisa irónica en su
rostro.
“No te preocupes, no tienes que hacerlo”.
“No, lo voy a hacer, si no, no me podre perdonar”.
“Kiryuu… eres terco en las cosas más extrañas”.
A pesar de que parecía un poco harta por eso, había una hermosa sonrisa de felicidad en su rostro.
“Y ¿Qué te parece si bailamos ahora?”.
“¿Bailar… aquí?”.
“¿Y Por qué no?, no hay nadie de todas formas”.
81 | P á g i n a
Volumen 9
“Es verdad, pero, ¿No era una advertencia para las otras chicas para que no se me acercaran?”.
Ella no quería perder la inspiración que tenía al hacer sus mangas BL, por lo que ella no podía
permitir que Keiki saliera con alguien que no fuera un hombre. Así era la historia de Nanjou Mao,
ella ya había hecho esta clase de cosas para que el no tuviera a nadie más, así que si no habían
chicas alrededor para verlos bailar, la razón en si para hacerlo no existiría.
“En realidad no tengo una razón, pero… ¿No quieres bailar conmigo…?”
Justo cuando ella dijo eso mientras tenía una expresión de tristeza en el rostro, nadie, ni siquiera
Keiki era capaz de decirle que no.
“Bien, entonces bailemos”.
Y tal cual como la chica había dicho, el baño al aire libre ahora estaba reservado solo para los dos.
Así que no tenían que preocuparse de que nadie más entrara y se burlara de su absurda manera
de bailar.
“Ah, pero asegurare de tener la toalla puesta ¿sí?”.
“¡Obviamente!”.
A pesar de que antes se había convertido en un pervertido exhibicionista hace un momento, él

había protegido con su vida su ropa interior. Él no quería que lo acusaran de mostrar su
entrepierna desnuda a las otras chocas, por lo que se abrocho la toalla alrededor de la cintura. Los
dos se pusieron de pie y se pararon uno frente al otro con nada más que una toalla.
“N-no me miras demasiado… ¿si…?” Mao se retorcía un poco debido a los nervios.
“¿Y estas diciendo eso justo ahora?”.
“B-bien comencemos…”
“S-si…”
Los dos se tomaron de las manos y así empezaron a bailar.
“Es más difícil moverse ¿verdad?”, dijo Keiki.
“Pues claro, estamos en el baño”.
“¿Y nuestros pasos deben ir a la misma dirección?”.
“Simplemente baila… déjate llevar…~”
Mientras hablaban y bailaban a la vez, los dos igualaron sus pasos. A diferencia de la fogata. Ala no
había música que los acompañara. Además, ninguno de los dos tenía experiencia bailando, por lo
que debía haber sido un baile bastante incómodo para la vista, sin embargo…
“¿Pero que estamos haciendo a la mitad de la noche? jajá”.
82 | P á g i n a
Volumen 9
“Pero es muy divertido”.
“Es verdad”.
Si lo pensabas con calma, el bailar con una chica bajo el cielo estrellado era un evento bastante
surrealista. Pero no odiaba esta sensación de misterio. Mientras veía bailar a Mao torpemente y la
veía disfrutar el momento. Los latidos del corazón de Keiki comenzaron a acelerarse. Como si
estuviera disfrutando la felicidad pura.
“¿No crees que está bastante bien para ser nuestro primer baile?”.
“Obviamente no”.
En el momento que terminaron de bailar, los dos se separaron el uno del otro y tuvieron una
breve charla.
“Pero aun así… me sentí muy bien… hace un rato me sentía un poco triste…”
“Así que estabas melancólica”.
“Coqueteaste con mizuha y la vicepresidenta en el primer día del viaje ¿verdad? Así que hice todo
lo que estuvo a mi alcance para acercarme a ti, pero siempre estabas con otras chicas, era obvio
que me iba a frustrar”.
“… ¿Eh?”.
A pesar de que ella dijo eso como si no fuera nada, esto golpeo a Keiki en el pecho como si fuera
una bala. Sin embargo, antes de aclarar el significado de estas palabras, Mao presiono aún más.
“Creo que tú ya lo sabes, pero cuando dibujo mis mangas BL es cuando más me divierto. Así que
poder hacer lo que disfrutas es más que un lujo”.
“S-si…”
“Y… cuanto estoy contigo es cuando más me divierto Kiryuu”.
“¿En serio lo haces…?”
“¿Y tú que crees?”.
“¿Eh?”.
“¿Qué… piensas de mi Kiryuu?”.
Esta era la misma pregunta que Shouma le había hecho a en la noche anterior. Nanjou Mao era
una persona en la que Keiki podía confiar en los tiempos de crisis, una persona que daba todo de si
por las cosas que amaba y aunque era un poco dura a veces, siempre era amable. Y eso era lo que
la hacía increíblemente hermosa.
“Bueno… es difícil decirlo, pero…”
83 | P á g i n a
Volumen 9
Decir cosas así en voz alta era un poco vergonzoso. Pero él pensó que huir aquí no era algo que
haría un hombre, por lo que…
“Tu toalla está a punto de caerse Nanjou”.
“¿Eh…?” en ese instante los ojos de Mao se abrieron ante la inesperada respuesta de Keiki.
De seguro fue por el baile, ya que la toalla que protegía su cuerpo desnudo, parecía estar bastante
floja y a punto de caerse.
“¡¿……?¡”
Dándose cuenta de la situación, el rostro de Mao se puso completamente rojo en cuestión de

segundos mientras sostenía su toalla con una mano.
“¡Debiste haberlo dicho antes!”.
En ese momento ella empujo el pecho de Keiki con la otra mano que tenía libre.
“¿Eh?”.
Soltando una voz de sorpresa, Keiki se fue para atrás y aterrizo sobre su trasero.
“Ah, lo lamento… ¿Estas bien?”.
Mao dio un ligero paso para ayudarle a levantarse, sin embargo, sus pies se enredaron con los de
Keiki y así perdió el equilibrio.
“¡¿Kya?!”.
“¡¿Wow?!”.
¿El resultado de eso? Mao cayó también al suelo justo encima de Keiki, sin embargo, durante la
caída, ella perdió su toalla, por lo que sus cuerpos quedaron en contacto directo entre sí.
“……”
“……”
Keiki quedo congelado en su lugar e incapaz de mover un solo musculo. Al mismo tiempo que el
quedo como una estatua, el cuerpo de Mao quedo pegado al suyo. Y así, ambos desnudos
quedaron uno encima del otro. Los dos enormes bultos muy bien dotados de Mao estaban siendo
presionados contra el pecho de Keiki, por lo que él pudo sentir su tamaño, suavidad y calidez
perfectamente.
E-esto es malo…
El estímulo era el suficiente para arruinar por completo la capacidad de pensar de Keiki. O mejor
dicho, debido a los nervios, su parte íntima más preciada estaba entrando en posición de batalla.
“¡Nanjou discúlpame, pero… levántate ya mismo!”.
“Oye no te tienes porque enojar tanto… me levantare enseguida… ¿hm?”.
84 | P á g i n a
Volumen 9
“¡¿Haaaaauuu?!”.
En el instante en que Mao movió su mano para comenzar a separarse de Keiki, sucedió lo
impensable.
“… ¿Eh?, ¿Qué esta…extraña… sensación?”.
Con una extraña sensación en su mano, la chica frunció sus cejas. Ella tenía bien agarrado en su
mano un objeto duro y en forma de barra.
¡Es a mi hijo a quien tienes allí agarrado!
Al parecer la toalla de Keiki también salió volando por el impacto. Como resultado, los genitales
del ahora estaban siendo agarrados por la mano de Mao. Además de eso, ella no mostraba ningún
intención de soltarlo, si no que empezó a moverlo de arriba hacia abajo para saber qué era lo que
tenía agarrado.
“¡¡Nyauuuu!!”.
“¿Eh?, ¿Por qué haces esa voz tan extraña?”.
Experimentando un gran estímulo en su punto más débil. Keiki no pudo contener su voz. En el
momento que esto paso, Mao por fin se dio cuenta de lo que estaba agarrando.
“… ¿Eh?, ¿No me digas que esto… es… lo de Kiryuu…?”
¡100 puntos!, justo ahora ella estaba sosteniendo en su mano el miembro casi erecto de Keiki.
“Espera… ¿esto es una broma verdad?... ¿Está creciendo?, no, lo más importante… yo lo estoy…
¡¿Kiryuu?!”.
El cerebro de Mao no era capaz de comprender lo que sucedía en este instante. Así que alejándose
de Keiki como si fuera una bala, rápidamente agarro una toalla cercana y cubrió el frente de su
cuerpo mientras tenía el rostro más rojo como nunca lo había tenido. Con una mirada cautelosa,
ella miro cuidadosamente a Keiki.
“… ¿Qué haces?” ella le pregunto.
“Esto es una reacción normal de un chico normal… no puedo hacer nada contra eso…”
“¿Hmm?... ¿Entonces… te excitaste así por mi culpa…?”
“Bueno… creo que es obvio…”
“Ya veo…”
“Um... lo lamento...”
“…En realidad… no es tan grave…”
“¿Hm?”.
“Si es Kiryuu… en realidad no me disgusta…”
85 | P á g i n a
Volumen 9
“¿Eh?, ¿Qué quisiste decir con eso?”. Keiki estaba completamente sorprendido ante la repentina e
inesperada declaración de Mao.
Al mismo tiempo, Mao luchaba ante lo que iba a decir y no iba a decir.
¡¿Pero que estoy diciendo?!, ¡Prácticamente le dije que me gustaba!.
Con esta clase de pensamientos pasando por la mente de Mao, la confusión empezó a convertirse
en pánico. En medio de todo este revoltijo de emociones, ella llego a una conclusión.
¡Lo único que puedo hacer ahora es confesarme!, ¡Es ahora o nunca!, ¡Vamos, dilo, dilo!
Ella decidió que se iba a confesar aquí y ahora. Y como no se podía retractar de sus palabras. La
palabra te amo era la mejor opción. Así que ella empezó a reunir coraje y dio un paso hacia Keiki.
“Porque… yo… yo…”
Poniendo una mano sobre su pecho para sujetar su toalla fuertemente, ella miro hacia el chico
que amaba y expreso los sentimientos que tenía reprimidos hacia él.
“¡Yo… amo el p*ne de Kiryuu!”.
…Y si, ella lo arruino completamente. Una oportunidad que algunos solo tienen una vez en su vida
y en la que tenía que acertar si o si, se convirtió en esto. Era una confesión de amor mezclada con
la sorpresa de haber tocado el p*ne hace un momento. Mientras ella reunía el valor para
confesársele, no podía sacar de su cabeza al hijo de Keiki. Y así esos dos sentimientos se mezclaron
y formaron uno, lo cual hizo que ella dijera algo extraño.
¡¡LO ARRUINE SOY UNA TONTAAAAA!!
Aquel intento de confesión de Mao fracaso de manera astronómica. Decir Ámo tu p*ne´ la haría
parecer más a una pervertida. Obviamente la reacción de Keiki era la que se esperaba.
“N-Nanjou… ¿De que estas hablando…?”
“Bien, me voy”.
“¿Eh?”
La cabeza de Mao estaba a punto de explotar. Y justo ahora no tenía la confianza para poder
aclarar el malentendido así que lo único que pudo hacer fue huir.
***
¡¡AAAAAHHH REALMENTE LA EMBARREE!!
Más o menos diez minutos después de aquella tragedia. Mao estaba completamente envuelta en
su futon dentro de una habitación para cuatro personas en el segundo piso. Ella estaba
sumamente angustiada por lo que había pasado. Cuando vio a Mizuha y a Ayano atacando así a
Keiki en este viaje. Ella se dio cuenta que era la chica que estaba más atrás en todo esto. Todas
ellas tenían algo que ella no tenía.
86 | P á g i n a
Volumen 9
Y era una actitud agresiva para hacer lo necesario para lograr sus objetos. Sayuki, Yuika e incluso
Mizuha acosaban constantemente a Keiki, mientras que los avances de Mao eran muy escasos. Por
ende, ella había decidido probar algo de lo que llamaban seducción.
Mao se había despertado tarde en la noche y había salido hacia el baño. Fue allí cuando ella vio a
Keiki saliendo de la habitación de Mizuha, ella sabía que lo más seguro es que el fuera a ir al baño
de hombres, por lo que decidió actuar allí. El mismísimo infierno se habría desatado si un profesor
la hubiera atrapado, sin embargo una jovencita enamorada no estaría asustada por esa clase de
cosas. Hasta que finalmente ella reunió el coraje necesario para actuar.
Todo había salido de maravilla mientras seguían bailando en el baño, pero ella cometió un error
gigante al final.
Kiryuu de segundo piensa que soy una perra de esas de internet…
Mao de seguro es la primera persona que ha tocado a Keiki en ese lugar. Y en cierto sentido, eso la
ponía por delante de sus rivales.
Quiero que nuestra relación avance… pero no en ese sentido…
Ella jamás había buscado esa clase de desarrollo. Si ella pudiera retroceder en el tiempo, ella
cambiaria ese momento definitivamente.
Pero… Kiryuu… en realidad lo tiene bastante grande…
Mientras recordaba la sensación del miembro de Keiki en su mano, las mejillas de Mao empezaron
a ponerse completamente rojas nuevamente. Este era el primer miembro masculino que había
tocado y uno que se estaba poniendo erecto. Aún estaba falto de rigidez, debido a que a Keiki no
se le había parado por completo, sin embargo, esto demostró que Keiki se había excitado
sexualmente por ella.
“¡¡…!!”
Debido a la vergüenza, Mao empezó a mover sus piernas de arriba hacia abajo, de repente ella fue
regañada por la dormida Megumi quien le dijo “Cállate”.
***
“…No me puedo dormir.
Era la 1 de la madrugada. Y rodando en su futon en la habitación del segundo piso, Keiki gruño e
agonía. ¿Quién podría culparlo de estar así después de lo que había sucedido en el baño con Mao?
Justo ahora Shouma estaba completamente dormido y con una brillante sonrisa en su rostro. Era
claro que era lo que estaba soñando, ya que el dejaba salir frases como: “Koharu-chan… te amo”.
Las luces de la habitación estaban completamente apagadas, y la única fuente de luz era la de la
pantalla del teléfono de Keiki la cual estaba encendida.
“¿Qué... justo en un momento como este… Fujimoto-san?”.
87 | P á g i n a
Volumen 9
En el instante que levanto su cuerpo para revisar la pantalla del celular, pudo ver que tenía un
nuevo mensaje de Ayano el cual decía: “¿Estas despierto?”. Por un instante, él pensó que de
seguro era otra cosa pervertida, pero no pudo imaginar que ella hiciera algo como eso a la mitad
de la noche, así que debía ser una emergencia, por lo que el decidió responderle.
´Si lo estoy, ¿Qué sucede?´.
´Quiero hablar contigo, ¿Me podrías dar un minuto?´.
Ćlaro, ¿Dónde nos vemos?´
Y después de un breve periodo de tiempo, el recibió una respuesta. “Bien, nos vamos en el lobby
que está en el tercer piso´ Una vez acordado el lugar. Él se puso rápidamente un abrigo de color
marrón sobre su yukata y salió de manera silenciosa de la habitación, asegurándose de no
despertar a Shouma.
Sin duda, parecía que todas las personas de la posada parecían dormidas, ya que ni un solo sonido
se podía escuchar en el interior de la posada. En el momento que se dirigió al lobby Ayano lo
saludo con una ropa similar a la de Keiki. Después de haberse encontrado fueron juntos a la
terraza, la maravillosa vista del cielo invernal que el saludo era hermosa.
“Disculpa por llamarte tan tarde en la noche”.
“No te preocupes, tampoco podía dormir”.
“Qué bueno que estabas despierto, hay algo de lo que quería hablar contigo sin importar que”:
“Claro, ¿Qué sucede?”.
Ayano agrego.
“Tengo un favor que pedirte Kiryuu-kun. Quiero que me apoyes en las próximas elecciones al
consejo estudiantil”.
“¿Quieres que yo te apoye?”.
Keiki jamás espero que ella le fuera a pedir esta clase de favor, es más, él ni siquiera sabía que
habían elecciones.
“¿Eh?, ¿Pero no se había decidido ya que tu serias la nueva presidenta del consejo estudiantil?,
Takasaki-senpai me comento algo al respecto”.
El recordaba que ella había mencionado algo de la presidencia de la escuela.
“Si, pero al parecer surgieron nuevos candidatos este año”.
“Ah, así que es por eso”.
Ahora que ella lo había mencionado, Keiki recordó que Shiho había dicho al final “Claro, si no hay
más candidatos”. Por ende eso significaba que aparte de Ayano, otras personas también querían
ser presidentes del consejo.
88 | P á g i n a
Volumen 9
“Y bien, ¿Cuándo son las elecciones?”.
“Va a ser anunciado el próximo lunes, las votaciones pasaran el viernes”:
“¿Eh?, ¡Eso es demasiado rápido!”.
“Lo lamento, en realidad quería contarte esto antes…”
“……”
Fue en ese momento cuando Keiki lo entendió. Como él había escogido sobre el consejo
estudiantil, el estar en el club de caligrafía, por eso había dudado entre decirle o no.
“Necesito cinco personas para poder registrarme como candidata. Actualmente solo cuento con
los miembros actuales del consejo, incluida la chica que estaba antes de Mitani-kun”.
“Si, eso hace un total de cuatro personas, pero yo creo que podrías encontrar a alguien mucho
mejor para que te ayude”.
Fujimoto Ayano era una chica bastante popular, tenía las mejores calificaciones y siempre estaba
lista para ayudar a quien lo necesitaba. Obviamente debía haber una gran cantidad de personas
que la apoyarían sin dudarlo, pero, en ese momento Ayano sacudió su cabeza ante la respuesta de
Keiki.
“No quiero que nadie más a excepción de Kiryuu-kun me ayude. Sé que puede ser egoísta, pero
eres la persona en la que más confió”.
“Fujimoto-san…”.
Él nunca se arrepentio de haber escogido al club de caligrafía. Sin embargo, una parte muy
profunda de él, también quería haberse quedado en el consejo estudiantil…
“Está bien, te voy a ayudar hasta que las elecciones terminen”.
“¡¿En serio?!”.
“Así es, prometí ayudarte cuando lo necesitaras”.
“Gracias”. Ayano le mostro una hermosa sonrisa de alivio.
En el momento que vio eso, Keiki empezó a conectar ciertos puntos en su cabeza.
“Oye espera un momento, ¿Eso fue lo que querías hablar en el primer día del viaje?”.
“Si…”
“¿En serio?, yo pensé que ibas a pedirme mi ropa interior otra vez…”
“Si fuera a hacer eso, te pediría las que usaste en todo el día”.
“Bueno… eso si suena a algo que harías tu…”
89 | P á g i n a
Volumen 9
Por primera vez, Keiki se sintió muy mal después de lo que hizo. Pero aun así, justo cuando
pensaba eso, Ayano sorpresivamente puso sus manos en el borde de su yukata y con un ágil
movimiento se quitó sus panties.
“¡¿Qué haces?!”.
“Me quito mis panties”.
“¡¿Para qué?!”
“Parecía que te estabas excitando por el olor de una chica antes, así que pensé en darte esto como
agradecimiento”:
“Si, ahora que lo mencionas… ¡Olvide aclarar este malentendido!”.
Gracias al plan de mal ejemplo que el llevo a cabo el primer día del paseo, la chica una creía que
Keiki tenía un fetiche por los olores. Y era verdad que el la había olido a fondo y que le había
pedido sus panties, pero todo esto había sido parte del plan de desperversion que él había
pensado. Se supone que este plan consiste en que el actuaría como cada chica pervertida para
intentar curarlas.
¿Por qué demonios todas las chicas que están a su alrededor me quieren dar su ropa interior?
Por el momento Keiki se aseguró de explicarle lo que había hecho y le dijo que por favor se
volviera a poder su ropa interior.
“Bueno, creo que es mejor esto a ser convertido en mascara pervertida…” el murmuro.
“¿Mascara pervertida?”.
“No pasa nada”.
Él se refería a la pesadilla que había tenido hace unos cuantos días.
“Mejor regresemos al tema, sobre las elecciones al consejo estudiantil”.
A pesar de que él pensó que Ayano simplemente sucedería a Shiho como presidenta del consejo
estudiantil, alguien de repente se interpuso en su camino.
“¿Y quién es la candidata de la que hablas?”.
“Bueno, esa persona es-“
La persona que Ayano menciono en ese momento, era alguien que él conocía.
“¿En serio?”.
“Sip, es esa persona”.
“Vaya, eso fue bastante inesperado. En realidad jamás pensé que esa persona fuera esa clase de
persona”.
90 | P á g i n a
Volumen 9
“Si, al parecer va en serio con ello, y es obvio que yo no planeo perder”. Dijo ella con
determinación. “Nos vamos a asegurar que no gane”.
***
Era la última mañana del viaje escolar y el autobús ahora manejaba por las calles hacia la escuela.
Mao estaba sentada en la parte de atrás profundamente dormida.
“Ella se durmió justo cuando el autobús empezó a moverse”.
“Se ve tan genial y serena cuando esta despierta, pero cuando está dormida se ve tan linda~”
Desde el asiento que estaba al lado de ella, Megumi puso uno de sus delgados dedos en las
mejillas de Mao. A pesar de haberle hecho eso, ella ni siquiera mostraba signos de despertarse, de
seguro tenía mucho sueño.
“Al parecer no pudo dormir en toda la noche”. Comento Megumi.
“Ya veo…” le respondió Keiki casi de manera automática.
La razón de eso, solo podía ser por lo que había sucedido en el baño.
Aunque aún no lo tenía completamente erecto, ella lo toco cuando se estaba empezando a poner…
No sería para nada extraño que alguien desarrollara síndrome de estrés postraumático después de
eso.
Como algo aparte, los asientos del autobús se distribuyeron segundo los grupos que se hicieron en
el pase, así que Keiki y Shouma se sentaron junto a Mao y Megumi. Otros estudiantes aparte de
Mao también estaban dormidos, ya que debieron haberse cansado mucho durante el viaje. Y al
igual que Mao, el amigo lolicon de Keiki también había perdido la batalla contra el sueño.
“Akiyama-shi también está fuera de combate”.
“Si, estuvo hablando con su novia por teléfono hasta tarde”.
“Así que con la rumorada senpai loli legal ¿verdad?, estoy tan celosa de que sean tan amorosos”.
Mientras sonreía mirando a Shouma, Megumi nuevamente expreso sus celos hacia las parejas.
Justo al mismo tiempo, Keiki la miro fijamente.
“……”
Ella era una chica de baja estatura con el pelo largo y esponjoso y a pesar de que tenía los ojos
grandes, siempre tenía una expresión muy amable en su rostro, además de eso era una chica muy
linda con un aura muy tranquila a su alrededor.
“¿Kiryuu-shi, porque me miras así?”. La chica rápidamente noto la mirada de Keiki y así continuo.
“… ¿Ah?, ¿No me digas que te enamoraste de mi después de lo que hablamos?, me siento honrada
por eso, pero ya le he jurado a alguien que…”
“No, eso no es”.
91 | P á g i n a
Volumen 9
Gracias a que Megumi estaba a punto de crear un nuevo malentendido, Keiki lo negó
rápidamente.
“¿Entonces qué sucede?”.
“Bueno eso es…”
El dudo por un segundo, pero en realidad no había ninguna necesidad de ocultarlo. Así que
sintiéndose mal de poder despertar a los otros, el bajo la voz.
“Onizuka-san, ¿Es verdad que te registraste como candidata para las elecciones del consejo
estudiantil?”.
“¿Eh?”.
La expresión de Megumi se convirtió en una de sorpresa total, sin embargo su habitual sonrisa
regreso rápidamente.
“¿Fujimoto-chan te dijo eso?”.
“SI”.
“Hmmm, bueno en realidad no me importa. Pero cuando digo que me quiero convertir en la
presidenta del consejo estudiantil, es en serio. Así que una vez lleguemos empezare todos los
preparativos para las elecciones”.
“Ya veo…”
Anoche, la persona que Ayano le había dicho que también se había lanzado para ser presidenta del
consejo estudiantil, era Onizuka Megumi, y ahora, ella misma había admitido esto.
¿Por qué será que Fujimoto-san me dijo que no podemos dejar que Onizuka-san gane…?
Fujimoto Ayano no era la clase de personas que decía esas cosas sin razón.
“Oye Onizuka-san, dime, ¿Por qué te quieres convertir en la presidenta del consejo estudiantil?”.
“¿Qué?, ¿No me veo como la clase de persona que es buena para ese rol?”.
“Bueno…”
“Me lo imagine… bueno, en realidad hay algo que quiero que pase, sin importar que”.
“¿Y qué es?”.
“Cuando me convierta en presidenta del consejo estudiantil, voy a prohibir los noviazgos en la
escuela”.
“… ¿Eh?”.
Keiki tardo un segundo en comprender lo que ella dijo. Y Mientras su compañera de clase no
volvió a pronunciar palabra, de repente la amable sonrisa en su rostro desapareció y después lo
miro con ojos fríos.
92 | P á g i n a
Volumen 9
“Estoy planeando prohibir las relaciones románticas en la escuela”.
93 | P á g i n a
Volumen 9
Capítulo 4: Tú eres la vicepresidenta del consejo

estudiantil, y yo soy tu mayordomo.
El viaje escolar por fin había llegado a su fin y hoy era el primer lunes de diciembre. Mizuha se
recuperó rápidamente de su gripe. Y Keiki después de disfrutar el delicioso desayuno que Mizuha
le había hecho se dirigió a la escuela un poco más temprano que lo habitual. Una vez llego así, fue
directamente a la oficina del consejo estudiantil. Y cuando toco la puerta por la que había entrado
innumerables veces como miembro temporal del consejo estudiantil, el entro.
“Buenos días”.
El saludo a todos los que estaban allí. En total había cuatro personas presentes y sentadas
alrededor de una larga mesa. Allí la chica con dos coletas en ambos lados de su cabeza, Airi Nagase
inclino su cabeza confundida.
“Vaya, ¿Quién eres?”.
“¿Ya te olvidaste de mí?”.
“Nah, es obvio que es una broma, Buenos días Kiryuu-senpai”. Airi expreso una sonrisa amable
mientras lo saludaba.
En ese momento giro su cabeza para mirar a Ayano quien estaba a su lado.
“Por lo que veo pudiste reclutar a Keiki-senpai, Ayano-senpai”.
“…Sip, me las arregle para atraparlo”.
Ella dijo Átraparlo´ de un modo un poco nervioso, y juzgando por su reacción, Keiki estaba seguro
que había un doble sentido en esa palabra. Mientras estaba pensando en eso, Shiho lo llamo
desde el asiento que ocupaba la presidente.
“¿Qué te parece si tomas asiento Kiryuu-kun?”.
“Ah, sí claro” asintiendo con su cabeza, él se dirigió al asiento que daba de frente a Ayano.
El/la secretario/a del consejo estudiantil, Mitani Rin mostros una sonrisa. Actualmente el tenia
puesto el uniforme masculino así que Keiki debía llamarlo Rintarou y no Rinko.
“Buenos días Keikun-senpai, estoy muy feliz de que volvamos a trabajar juntos, oye, ¿Por qué no
unes al consejo estudiantil de manera oficial?”.
“Esa es una muy buena idea”, Shiho comento.
“Ayano también está de acuerdo”.
“Lo lamento, pero vine solo porque fui invitado” Keiki les respondió.
94 | P á g i n a
Volumen 9
Aun después de que Shiho y Ayano expresaran estar de acuerdo con la propuesta de Rintarou,
Keiki la rechazo de una manera cortes. Después de que el festival cultural finalizo, él había elegido
quedarse en el club de caligrafía en vez del consejo estudiantil y no iba a cambiar de opinión por
un capricho, además, el solo estaba aquí por la petición de una amiga.
“Kiryuu-kun”.
“¿Si?”.
“Gracias por venir”.
“Oye, te prometí ayudarte ¿verdad?”.
Ayano sonrió ante su respuesta. Después de saludarse, Shiho fue la que empezó a hablar.
“El tiempo ya casi se acaba, así que Airi-chan cuando quieras”
“Si”.
Respondiendo tranquilamente, Airi se levantó de su asiento y se paró al frente del tablero.
“Bien, me gustaría empezar la reunión para la operación electoral del consejo estudiantil. Yo
Nagase Airi, seré la que explique todo”.
“…Nagase-san parece que nació para este papel ¿verdad?”.
“Ella sería adecuada para trabajar como secretaria de una empresa privada”:
“Bien, empecemos recordando la información que ya tenemos”.
Airi hablo un poco más fuerte debido a los susurros de los dos únicos hombres en el salón.
“El anuncio de las votaciones, así como la presentación de los candidatos ocurre hoy en la escuela.
El periodo para las elecciones se extenderá desde hoy hasta el viernes, lo que nos da cinco días en
total. En cuanto a la votación y el recuento de votos, esto también se llevara a cabo el viernes”.
Mientras ella explicaba, escribió el horario en el tablero con una letra bastante clara.
“En cuanto a los candidatos que mencione antes, La vicepresidenta de nuestro consejo estudiantil,
Ayano-senpai, se va a postular a la presidencia del consejo estudiantil”.
En el momento que ella escucho su nombre, Ayano se puso de pie.
“Mi nombre es Fujimoto Ayano y me voy a postula para el cargo de presidenta del consejo
estudiantil. Voy a hacer todo lo posible para ganar, por favor cuiden de mi”.
Una vez la chica expreso cuál era su ambición, se inclinó ligeramente hacia las personas que
estaban presentes y se volvió a sentar. Airi continúo con su explicación.
“Y la candidata con la que Ayano-senpai va a competir…” Mientras ella seguía hablando, Airi puso
una foto sobre el tablero. “…Es Onizuka Megumi-san, actualmente ella cursa en la clase 2B y es
una compañera de clase de Kiryuu-senpai”.
95 | P á g i n a
Volumen 9
Keiki le devolvió la mirada a Airi con un movimiento de cabeza. De hecho, ella había estado en su
mismo grupo durante el viaje escolar, pero él no tenía ninguna información crucial sobre ella y que
pudiera compartir aquí mismo.
“De acuerdo con los documentos que hemos recibido, Onizuka-senpai está prometiendo que si es
elegida, va a prohibir las relaciones amorosas en la escuela”.
Keiki ya había escuchado sobre esto directamente de la fuente, Megumi.
“¿Tu ya conocías su objetivo Fujimoto-san?”. Keiki le pregunto.
“Hace un tiempo ella me mando una declaración de guerra”:
“¿Una declaración de guerra…?”
Así que no era su imaginación cuando vio a Ayano actuando con bastante cautela al momento de
referirse a Megumi en el viaje escolar.
“Creo que fue demasiado imprudente de su parte desafiar a la actual vicepresidenta Ayano-senpai,
ya que ella es bastante popular”.
“Si, pero tenemos que tener en cuenta que Onizuka-san debe tener algún as bajo la manga”.
Keiki estaba completamente de acuerdo con la opinión de Airi, ya que no había ninguna duda que
Megumi hablaba en serio. Megumi quien claramente no ganaría por su popularidad, de seguro
tendría un plan oculto para hacer que las elecciones resulten a su favor.
“Pero, ¿Por qué Onizuka-san quiere prohibir las relaciones amorosas?”.
Supuestamente Megumi era una estudiante normal y miembro del club de investigación del
manga. Ahora, de un momento para otro ella estaba tratando de volverse la presidenta del
consejo estudiantil. Debía haber una razón para este cambio tan repentino en sus aspiraciones.
“Fujimoto-san, ¿Tu estas en contra de su promesa de campaña?”.
“Quiero que todos puedan disfrutar de su vida escolar. Que estudian y estén en los clubes que más
les gustan. Pero, sin duda, tener una relación con la persona que amas también es parte
importante de ello”.
“Estoy totalmente de acuerdo”.
Keiki quería tener una linda novia y disfrutar plenamente su juventud. Y Keiki ciertamente no
estaba solo en esto. Todos los estudiantes hombres también tenían el mismo deseo y muy
seguramente también había muchas chicas que querían lo mismo, por lo que era claro que había
mucha gente que quería experimentar el amor. Así que no había forma alguna que Keiki pudiera
permitir que alguien cambiara las reglas de la escuela y arruinara los sueños de los demás así.
“Personalmente no estoy en contra de la prohibición de las relaciones amorosas, ya que eso

salvaría a las chicas de los depredadores hambrientos llamados chicos que corren por toda la
escuela hundiendo sus dientes en las pobres victimas que encuentran”. Dijo Airi.
96 | P á g i n a
Volumen 9
“Si, esperaba que fueras a decir eso Nagase-san”.
“Pero, aparte de eso, creo que Ayano-senpai es la más adecuada para ser la presidenta del consejo
estudiantil”.
Rintarou asintió como si respondiera las palabras de Airi. “Tampoco me agradan que imponen sus
valores por encima de los demás, además, si esta prohibición se cumple, no voy a poder salir con
ninguna de las onee-san de esta escuela y eso sería algo horrible”.
“Rintarou, creo que deberías esconder tus deseos un poco…”
“Dios mío… es justo por eso que Mitani es tan…” Airi lo miro fríamente como si estuviera viendo
basura a un costado del camino.
Sin embargo, Keiki estaba de acuerdo mentalmente con su opinión de que los pechos grandes
eran geniales.
“Ignoremos a Mitani por el momento… bien y esta es la situación actual, es suficiente información
¿verdad?”.
“Si, está bien”.
La tesorera Airi ahora se dirigió hacia la presidenta del consejo, Shiho, quien asintió con su cabeza.
“No nos queda mucho tiempo hasta el momento que debamos hacer el anuncio, por eso fue que
nos reunimos tan temprano en la mañana. Sin embargo, haremos el horario general de
operaciones durante el almuerzo y una vez se acaben las clases te lo daremos Kiryuu-senpai”.
“Entendido”.
Justo lo que se esperaba de una reunión del consejo estudiantil. Ellos habían planeado hasta el
más mínimo detalle.
“Bien, ahora debemos asignar los roles de todos aquí mientras nos preparamos para las
elecciones”.
“¿Roles para qué?”.
“Ya sea Como el director general o estratega de la campaña electoral… o tal vez el gerente de
relaciones públicas, creo que Kiryuu-senpai sería el indicado para ponerle un trabajo bien
extraño”.
“Trabajo extraño…”
“Ah por cierto, Mitani sería perfecto para ser el caballo que tira de un carruaje”.
“Ajajaja, entonces ya no soy ni siquiera un humano”.
Aunque la lengua venenosa de Airi pica con fuerza a Rintarou, aun así el logro mostrar una sonrisa
irónica.
“Um…”
97 | P á g i n a
Volumen 9
Fue allí cuando Ayano levanto su mano lentamente.
“Quiero que Kiryuu-kun sea mi secretario”.
“¿Tu secretario?”.
“Estarás conmigo todo el tiempo, para así poder recargarme cuando quiera”.
“¡Oye siento que hay motivos personales ahí!”.
Usualmente una secretaria no estaba allí para ser un suministro constante de olor para su
superior.
“Por mi suena bien, Ayano-senpai va a pelear de frente en las elecciones, así que si hay algo que
sirva para motivarla, es buena idea”.
“Keikun-senpai ahora tienes una enorme responsabilidad”.
“Keiki-kun vas a tener que demostrar tu hombría ¿sí?”.
“¿Ustedes disfrutan de mi sufrimiento verdad?”.
Pero justo ahora él se encontraba incapaz de rechazarla, ya que Ayano se lo había pedido
directamente a él.
“Está bien, seré tu secretario”.
De cualquier modo, el simplemente tenía que ir al salón del consejo estudiantil, así que era lo
mismo a ser voluntario para ayudar a Ayano como el pudiera. En teoría el trabajo que le pusieran
no importaba, lo único que importaba era que tenía que ayudar a Ayano a estar más cerca del
asiento de la presidencia del consejo estudiantil.
Después de eso, se decidieron las posiciones que todos iban a tener en su apoyo al partido de
Fujimoto.
Keiki era el secretario privado de Ayano.
Airi fue encargada como la directora general en la estrategia de la campaña electoral.
Rintarou era el director de las relaciones públicas y asuntos generales.
Y finalmente Shiho fue de alguna manera la líder del apoyo.
“Como Shiho-senpai se tiene que preparar para sus exámenes de ingreso y todo eso, así que en
general ella no va a ayudar mucho”.
“Si, ya casi va a ser el examen ¿verdad?”.
“Disculpa por no poderte ayudar tanto como quisiera”.
Como algo aparte, la secretaria anterior también estaba ocupado con los exámenes de ingreso,
por lo que fue llamado “patrocinado”.
98 | P á g i n a
Volumen 9
“Ahora que recuerdo, ¿Ya están listos los carteles electorales?” Keiki pregunto.
“Si, ya está todo listo, ¿Quieres ver?”.
“Así es”.
El año pasado no hubo necesidad de hacer elecciones, y el prácticamente no había visto un cartel
electoral de alguien conocido. Y como Ayano había hecho todo en su propia computadora, el resto
del consejo estudiantil se agrupo frente a la pantalla con Ayano sentada en la silla y todos mirando
desde atrás.
“Pero… es algo un poco vergonzoso”.
“Déjame verlo…”
Ayano abrió rápidamente el archivo, este archivo era el poster que ella había creado.
“”””………””””
Cuando todos lo vieron, hubo un sepulcral silencio. La persona que aparecía en el poster, sin duda
era la vicepresidenta del consejo estudiantil Fujimoto Ayano. Y como siempre, se veía muy linda,
con su ojo escondido detrás de su flequillo, si, sin duda era muy hermosa… lo es… pero…
“La expresión de Fujimoto-san… es completamente… blanca…”
Ayano tenía una cara completamente seria en la imagen.
“Ayanon-senpai… creo que esto es…” La expresión que tenía Rintarou antes cambio por completo,
ahora parecía vacía.
“Si… en realidad le falta una sonrisa…” Shiho menciono eso mientras tenía una sonrisa irónica en
su rostro.
“Y sin mencionar que el eslogan dice: Ćrea sonrisas junto con Fujimoto Ayano´, pero ella no está
sonriendo para nada”. Airi dio la puntada final.
“Espera, creo que el eslogan está bien, el problema es la foto de ella ¿verdad?”. Keiki dio su
opinión.
A pesar de sentirse un poco mal por Ayano, como su secretario, el no podía aceptar el diseño de
este poste.
“Creo que tenemos que tomar una nueva”.
Y así fue como decidieron que iban a tomar una nueva foto.
***
Cuando la reunión termino y Keiki estaba a punto de irse con los demás, Shiho le llamo.
“Oye Keiki-kun, ¿Tienes un momento?”.
“Ah sí, dime”.
99 | P á g i n a
Volumen 9
Una vez dicho esto, la primera clase de la mañana estaba a punto de empezar, así que a pesar de
haberle dicho esto, en realidad no disponía de mucho tiempo. Y Shiho parecía haberse dado
cuenta de esto, ya que seguía hablando mientras se levantaba del asiento.
“Muchas gracias por todo… por la ayuda con las elecciones y eso…”
“Está bien, estoy de acuerdo con ustedes de que Fujimoto-san es la candidata más indicada para
ser la presidenta del consejo estudiantil de todas maneras”.
Ella tenía excelentes calificaciones y siempre estaba dispuesta a ayudar a quien lo necesitara. Los
profesores siempre confiaban en ella. Y Airi y Rin la admiraba. Aparte de todo eso, Keiki sabía muy
bien como era su trabajo gracias al tiempo que había pasado allí como miembro temporal del
consejo estudiantil, además de cuanto amaba a cada estudiante de la escuela, así como a la
mismísima escuela. Gracias a ese encanto que ella tenía, fue que él quiso ayudarla en todo lo
posible.
“Sin duda eres un muy buen chico Keiki-kun. Deja que esta Onee-san te de una recompensa”.
“¿Eh?, ¿Qué?”.
Shiho repentinamente estiro sus dos manos y las envolvió alrededor de la cabeza de Keiki y lo
atrajo directamente hacia su pecho.
“¿T-Takasaki-senpai…?”
En el momento que su mejilla toco algo extremadamente suave, su corazón dio un brinco.
“Te encargo a Ayano-chan ¿sí? Ya que en esta ocasión no puedo ayudar tanto como aquella vez”.
“Si…”
100 | P á g i n a
Volumen 9
101 | P á g i n a
Volumen 9
Después de decir eso con voz suave, Keiki se dio cuenta de algo. Aunque ella no podía participar
en las actividades porque estaba ocupada con sus exámenes de ingreso. Eso es lo que Airi había
dicho, por eso fue que le dio el rol de “Líder de apoyo” que en realidad fue algo muy vago. De
seguro fue porque Shiho quería ayudar pero no podía.
“Si, no te preocupes deja conmigo a Fujimoto-san”.
“Cuento contigo”.
Después de soltar a su Kouhai, Shiho le sonrió, parecía una bella flor en pleno florecimiento.
“Creo que Ayano-chan va a estar bien aun sin mi preocupación”.
“Ajajaja, puedes estar segura”:
“Ah y también…”
“¿Hubo algún avance con Ayano-chan o con las otras chicas del club de caligrafía en tu viaje
escolar? En estos últimos días no he dejado de fantasear con que avances con ellas y con eso me
engañes”.
“No pasó nada que te hiciera feliz senpai”.
“¿Eh?”.
“Vamos, no luzcas tan feliz con eso”.
La actual presidenta del consejo estudiantil, quería ser víctima de NTR. Ya que ella feliz haciendo
NTR o que la persona que lo sufriera fuera ella misma.
“Si te reúnes con Ayano-chan en medio de las elecciones, ¿me avisas?, el simple hecho de robarle
el secretario-kun a Ayano-chan se debe sentir muy inmoral”.
“Eso solo pasaría si hay un tipo de confesión”.
Keiki en este instante no sabía cómo responderle después de semejante espectáculo de sexualidad
tan directa. Fue allí cuando él pensó que era una muy buena idea eliminar rápidamente cualquier
poder político de esta pervertida lo más rápido posible.
***
A partir de este momento Kiryuu Keiki tenía dos enormes problemas de los cual estaba
preocupado.
El primero de ellos era las elecciones del consejo estudiantil que se acercaban rápidamente y con
Onizuka Megumi como adversaria.
102 | P á g i n a
Volumen 9
Y el segundo era la consecuencia del accidente que había pasado en el interior del baño al aire
libre del paseo escolar. En resumen, Mao lo evitaba en todo momento. Si él quería acercarse a
ella, ella salía corriendo y huía de él, y si el la miraba, ella evitaba tener contacto visual. El motivo
de esto era la declaración de que ella amaba los p*nes.
Y sin mencionar que según por la reacción de Mao, el hijo de Keiki que estaba en su entrepierna,
parecía estar bastante bien. Ya que después de buscar por internet para saber si su tamaño era
algo por lo que estar feliz o triste, aún estaba un poco dudosa entre ambos.
Shouma, preocupado por la situación actual entre Keiki y Mao, llamo a Keiki para preguntarle qué
había pasado.
“Oye, pensé que ustedes se habían arreglado, ¿Por qué empeoro de repente?”.
“Bueno… en realidad no estamos peleando como aquella vez”.
“¿Qué tal si me dices para que te desahogues?”.
“Gracias por la oferta, pero por el bien de Nanjou voy a esperarla por hoy”
“Oye en serio, ¿Qué paso…?”
Shouma ha de estar muy curioso con esto, pero retroceder cuando estaba a punto de tocar un
tema sensible era algo que él conocía muy bien.
“Solo no voy a pensar en Nanjou por el momento y más bien concentrarme en las elecciones”.
“Ah Fujimoto-san y Onizuka-san se van a enfrentar ¿verdad?”.
“Si, eso lo vamos a anunciar hoy después de clases”. Le respondió Keiki mientras su mirada estaba
pegada en Megumi.
Mientras hablaba alegremente con las otras chicas de su misma clase, en realidad no parecía una
persona que quisiera prohibir las relaciones amorosas. Pero, él no podía relajarse al ver ella como
se comportaba.
“Y una vez dicho eso, voy a tomar prestada a Koharu-senpai en el almuerzo”.
“¿A Koharu-chan?, ¿Por qué?”.
En el instante que la reunión en el consejo estudiantil había finalizado, Keiki ya le había mandado
un mensaje y le había mandado un mensaje para reunirse con ella. La fuerza de ella era necesaria
para ganar las elecciones.
***
Más tarde, durante el descanso para el almuerzo, después de que Keiki comió el delicioso Bento
que su hermana menor Mizuha le había preparado. Se encontró con Ayano, quien también había
terminado de comer su almuerzo. Los dos se dirigieron hasta el tercer piso de la escuela y fueron
al salón del club de astronomía, allí Ootori Koharu, representante del club, se reunió con ellos. En
ese instante Koharu tenía puesto una sudadera con capucha sobre su uniforme.
103 | P á g i n a
Volumen 9
“Ya veo, entonces por eso fue que viniste a pedir ayuda”.
“No hay nadie más aquí que pueda ganar en la habilidad con la cámara”.
A pesar de que fue un favor salido de la nada, ella acepto sin queja alguna. Los carteles eran algo
fundamental para hacer una muy buena campaña electoral, por lo que Keiki le pidió ayuda a la ex
acosadora. Ayano por su parte estuvo de acuerdo, ya que dejarlo en las manos de Koharu en vez
de Keiki quien era un novato en estos temas era una muy buena idea.
“No tenemos mucho tiempo, comencemos ya mismo”.
“”Muchísimas gracias””.
Los dos Kouhais se inclinaron mostrando respeto a su Senpai, quien les mostro una tierna sonrisa
cuando empezó a dirigirse hacia Ayano.
“Fujimoto-san por favor párate ahí”.
“Está bien”.
De manera inesperada, el lugar donde Ayano se encontraba actualmente parecía un genuino

estudio de fotos profesional. Incluso se podía sentir como si aquí hubieran tenido algunas sesiones
de foto de idols. Obviamente el presupuesto del club no era lo suficiente para tener eso, sin
embargo, teniendo en cuenta que Koharu era la hija rica de un magnate de la construcción, el
dinero para hacer esto era el menor de sus problemas.
“Hice esto para tener una sesión de fotos con Shouma-kun, así que me alegro que también lo
podamos usar para esto”.
“Koharu-senpai eres completamente sorprendente”.
Cual sea la razón de esto, Keiki estaba muy agradecido por esto. El equipo que había aquí instalado
era de muy alta calidad, y su habilidad con la cámara no era algo para desconfiar. Todo lo que el
tenía que hacer era tomar una hermosa foto de Ayano, así el poster estaría completo.
“Fufu, el tema de esta vez será realmente lindo, esto me esta emocionando completamente”:
“Ahora pareces un viejo pervertido…”
“Bien, ahora mira hacia aquí~”
Y Ahora bajo la guía de Koharu, dio inicio la sesión de fotos. Ayano se paró frente a la pared
completamente blanca y el obturador de la cámara hizo click en varias ocasiones.
“Hmm…”
Koharu lentamente fue separando su cuerpo de la cámara mientras hacia un breve murmullo.
Desde un costado, Keiki sabía perfectamente porque no estaba satisfecha.
“Fujimoto-san tu expresión… está un poco rígida…”
“¿No… es buena?”.
104 | P á g i n a
Volumen 9
“No es que este mal, pero…”
“Tu expresión puede parecer un poco fría… tu sabes”.
“Uu…” Ayano bajo su cabeza. “Es que cuando hay una cámara apuntando hacia mí, me pongo un
poco nerviosa y no puedo expresarme bien…”
“Si, es algo entendible”.
Ayano jamás había mostrado una variedad muy notable de expresiones. En otras palabras, si
hablaras con ella de manera normal, ella te mostraría una que otra sonrisa de vez en cuando, y su
expresión burlona era realmente linda. Incluso la expresión que ella tenía siempre era linda, pero,
necesitaban una muy buena expresión para usar en el poster, Por lo que no había necesidad de
explicar que una sonrisa era mucho mejor que un rostro inexpresivo como el que tenía en el
anterior afiche.
“Fujimoto-san” dijo Koharu.
“A ti te gusta hacer dulces ¿cierto?”.
“Así es, pero…”
“¿Y hay uno que sepas hacer extremadamente bien?”.
“Um… creo que el pastel de manzana”.
“Oh pastel de manzana, eso suena fantástico. Bien, ahora imagina que acabas de hacer el mejor
pastel de manzana en todo el mundo y que se lo vas a dar de regalo a alguien que te gusta.
“¿A-alguien que me gusta?”.
“Puede ser cualquiera, tu familia, a tus amigos o incluso a la persona por quien sientes algo”.
“O-ok…”
“Aquella persona empieza a comer ese delicioso pastel de manzana, te mira, se sonríe y te dice
que estaba fantástico, ¿Eso te haría muy feliz verdad?”.
“……Si”.
De repente un cambio empezó a ocurrir en la expresión de Ayano, de seguro por estar imaginando
esta escena, parecía como si la tensión en todo su cuerpo hubiera desaparecido, ya que ahora
estaba más tranquila. Y como si esto fuera una señal, el obturador de la cámara, empezó a actuar.
“Y muchas gracias por esa maravillosa expresión~”
“Eh, ¿Pero cuando…?”
105 | P á g i n a
Volumen 9
En el instante que se dio cuenta que habían tomado la foto, Ayano dejo salir un breve quejido por
la sorpresa. Sin embargo, esta era la habilidad de Koharu: No perder ni la más mínima
oportunidad.
106 | P á g i n a
Volumen 9
107 | P á g i n a
Volumen 9
“Fufu, todo un éxito”.
“Muy bien hecho Koharu-senpai”.
En momentos así, en realidad se demostraba que ella era una estudiante de último año en quien
se podía confiar.
“Ah por cierto, ¿En quién pensaste Fujimoto-san?”.
“¡E-es muy vergonzoso, no te puedo decir!”.
Ver como Ayano se avergonzaba sin duda fue algo realmente lindo, por lo que Keiki decidió grabar
esto en su mente.
***
“Bien, ahora le voy a dar a alguien que conozco esto, para que vaya a imprimir los carteles. Me voy
a asegurar de que estén a tiempo”.
“Muchas gracias por todo”.
Después de que la sesión de fotos finalizara, Keiki y Ayano dejaron atrás la sala del club de
astronomía. Ellos pudieron haber usado la impresora del club, pero como era algo de suma
importancia, Koharu ofreció que le iba a hacer que un profesional se encargara de ellas, por lo que
ahora sentían que estaban en deuda con ella.
“Debemos pagarle de algún modo”.
“Si, le voy a hacer un delicioso pastel de Manzana”. Comento Ayano.
“Eso sería genial, tu pastel de manzana es extremadamente delicioso”.
“¿E-en serio…?”
“Si, el que hiciste hace un tiempo, era muy delicioso”.
“…E-entonces te voy a hacer a ti también Kiryuu-kun”, dijo feliz Ayano mientras ellos seguían
caminando.
Sin duda alguna, Koharu se sentiría muy feliz de recibir un pastel hecho por Ayano.
“Senpai ya se encargó de los carteles, entonces lo único que tenemos que ocuparnos por ahora es
en el anuncio que se hará después de clases”.
“Si”.
En este momento, los preparativos iban avanzando sin problemas, sin embargo aún les faltaba
poner los carteles en los tablones de anuncios de la escuela, presentar el discurso y otras cosas
más, pero con el ritmo que llevaban todo debía estar bien. Así que con eso en mente, Keiki y
108 | P á g i n a
Volumen 9
Ayano fueron hacia el primer piso del edifico de la escuela. Una vez allí, se encontraron con
Megumi.
“Oh, ¿Kiryuu-shi y Fujimoto-chan?”.
“Onizuka-san ¿Qué haces por aquí?”.
“Bueno, tuvimos una breve reunión en el salón del club de investigación del manga, así que todos
me ayudan con las elecciones, ¿si ven?”.
“Ya veo”.
Aunque solo fuera para obtener un cargo de un consejo estudiantil en la secundaria, el hecho de
batirse en duelo para unas elecciones era algo bastante difícil. Además estaba la regla de que
tenían que haber mínimo cinco ayudantes, y al igual que Ayano, ella también tenía personas que la
apoyaban para ir al consejo estudiantil. Por ende Megumi debía contar con el apoyo del club de
investigación del manga.
“¿Kiryuu-shi, porque estas con Fujimoto-chan?”.
“Mientras estén las elecciones voy a ser su secretario”.
“Oh eso lo explica, antes eras un miembro temporal del consejo estudiantil, ¿verdad?”.
Por eso mismo era que no era nada extraño que un miembro temporal del consejo estudiantil
ayudara a la vicepresidenta actual. De repente, Ayano, quien había permanecido callada en todo
este tiempo, se paró frente a Keiki y miro fijamente a Megumi.
“Onizuka-san”.
“¿Q-que sucede?”.
“Yo, no voy a perder”.
“…Hmph, eso jamás se sabrá hasta que termine el conteo de los votos”-
Aunque las dos fueron bastantes educadas, aun así se podían ver las chispas saliendo de entre las
dos. Sus ambiciones podían ser diferentes, pero aun así las dos trabajaban muy duro para ser las
presidentas del consejo estudiantil, bajo sus propias creencias.
“Bien, entonces tengamos una pelea justa”.
Y con esta declaración, Megumi se dio media vuelta y se dirigió hacia el salón de su club, mientras
que Ayano se quedó ahí de pie observando cómo se iba, en ese instante Keiki pudo notar cierta
tristeza en los ojos de Ayano.
“…Onizuka-san parece que sufre”.
“¿Sufre?”.
“Si, Onizuka-san también esta dudosa sobre esto. Así que si ella tiene algún tipo de problema
especial, o algo no la deja disfrutar de su vida escolar, quiero ayudarla en lo que más pueda”.
109 | P á g i n a
Volumen 9
“Fujimoto-san…”
Esta repentina hacia el enemigo después de declararle la guerra tomo a Keiki por sorpresa. Claro
algunos dirían que Ayano era un poco blanda para asumir el papel de líder del consejo estudiantil.
Pero, ese rasgo de ella fue lo que logro que Keiki aceptara ayudarla, fue eso lo que lo hizo pensar a
el que Ayano y nadie más eran dignos de tener el puesto de la presidencia.
Allí, ambos de pie, Keiki empezó a consentir a la actual candidata a la presidencia del consejo
estudiantil en la cabeza.
“Bien, entonces tenemos que ganar las elecciones”.
“Sip, voy a hacer lo mejor que pueda”.
Justo como Megumi había dicho, iban a luchar justamente.
***
Y justo después de que las clases habían finalizado, se hizo el anuncio oficial de que se iban a hacer
las elecciones para la presidencia del consejo estudiantil. De manera rápida y sorpresiva la noticia
se dispersó por toda la escuela. Incluso hicieron una transmisión por el intercomunicador escolar.
En la mitad de eso, Keiki y las demás empezaron a moverse. Y aunque no tenían demasiado
tiempo, ya que la votación era el viernes de la misma semana, todos y cada uno de los miembros
del consejo estudiantil trabajaron lo que más pudieron. Y aunque carecían de mano de obra, todo
el trabajo finalizo justo a tiempo, eso daba a entender la gran habilidad que tenían, esto
claramente fue porque la cantidad de trabajo que ellos hacían día a día. Y fue así como todas las
preparaciones se hicieron sin ningún problema. Y fue en especial gracias a Airi, cuyo trabajo en la
campaña electoral fue impecable. Incluso ella había sido capaz de darle órdenes a sus senpais
como si fuera un general en primera fila.
Hace unos minutos, Airi le había dicho a Keiki que fuera a colgar los carteles donde el pudiera. Una
vez fue echado del salón del consejo estudiantil, con los carteles de Ayano en sus manos, ahora
estaba haciendo este trabajo en el segundo piso de la escuela acompañado de Shouma.
“Lamento haberte dicho que me ayudes con esto Shouma”.
“No te preocupes”. Le respondió Shouma mientras presionaba los chinches a través de un anuncio
para pegarlo en el tablón.
Hacer esta clase de trabajo puede parecer simple, sin embargo, Keiki tenía una absurda cantidad
de carteles, por lo que le pidió ayuda a Shouma.
“Después de todo me preocuparía demasiado si Onizuka-san llega a ganar”.
“Ah sí, ya no podrías coquetear con Koharu-chan acá en la escuela ¿verdad?”.
“Exacto, aunque la verdad no creo que nos tengamos que preocupar tanto por eso. Sin embargo, a
pesar de todo me siento un poco mal por Onizuka-san, ya que la reputación de Fujimoto-san es
muy difícil de superar”.
110 | P á g i n a
Volumen 9
“Si, yo tampoco puedo ver a Ayano perdiendo”.
La gran mayoría de los estudiantes tenían una alta estima por Ayano, esto fue por todo el arduo
trabajo que ella había hecho por ellos. Y aunque podrá sonar un poco duro, un candidato común y
corriente como Megumi no debería tener ninguna posibilidad contra ella. Y sin mencionar que la
promesa principal de su campaña era prohibir las relaciones románticas en la escuela. Era claro
que un enorme porcentaje de los estudiantes normales no iban a permitir esto. Por eso aunque no
lo dijeran en voz alta, muchos estudiantes ya pensaban que esto ni siquiera iba a hacer una
batalla.
“A pesar de todo lo sucedido, el trabajo de Koharu-senpai es digno de poner en una exposición

para ser admirado”.
Después de pegar uno de los posters en un tablón de anuncios, Keiki lo miro fijamente. El eslogan
de este seguía siendo Ćrea sonrisas junto a Fujimoto Ayano´, pero la foto de ella ahora era mucho
mejor que la de antes. Esa simple sonrisa sin duda le iba a garantizar una gran cantidad de votos.
“Oh Fujimoto-san y las demás están repartiendo volantes afuera”.
“Si, tienes razón”.
De píe al lado de Shouma y mirando por una de las ventanas. El vio justo lo que Shouma había
mencionado. Incluso la mismísima Airi y Rinko estaban ayudándole.
“Ya veo, ahora veo porque me dejaron a mí lo de los posters…”
“Si, ya que la mayoría de la gente le gusta más recibir volantes de una chica que de un chico”.
“Oye, pero una de ellas en realidad no es una chica”.
En el caso de Rinko, su aspecto actual podría atraer varios fanáticos, por lo que Keiki guardo su
verdadera imagen en el fondo de su mente para el futuro.
“Hace demasiado frio afuera, aun así están trabajando muy duro”.
“Si…”
En este instante, Ayano estaba luchando por cada sonrisa de cada estudiante. Y Keiki también
quería hacer lo mejor que pudiera para ayudarla.
“Hagamos lo mejor que podamos también”.
“¡Si!”.
Tan solo mirar a Ayano trabajando, le dio una gran motivación a Keiki, mientras él seguía
colocando los posters en silencio, vieron a otro grupo haciendo lo mismo en uno de los tablones
de anuncios en el edificio.
“Al parecer la gente del club de investigación del manga también pone sus carteles”.
“Si, eso parece”.
111 | P á g i n a
Volumen 9
Según la información que habían recibido de la jefe de campaña electoral Airi, el club de
investigación del manga, tenía cuatro miembros, incluida Megumi. Y tal como lo había
mencionado antes, al parecer solo había chicos a excepción de ella claramente.
“Megu-chan, ¡Ya los termine de colgar aquí!”.
“¡Megu-shi, Megu-shi yo también he terminado!”.
“¡Megu-senpai… también acabe…!”
Uno de ellos era bastante alto, tenía cabello tizado y un flequillo tan largo que no se podían ver
sus ojos, él era Inooka.
El otro era delgado y tenía gafas, él era Shikagawa.
Y finalmente el último de los chicos era tranquilo y bastante pequeño, él era Chouno.
Como algo aparte, Inooka era de tercer año, Shikagawa de tercer año y Chouno era de primer año.
“Muchas gracias, bien, ¡Pasemos a la siguiente ubicación!”.
“”” ¡Si!”””
Mientras expresaba una sonrisa de confianza hacia el grupo de tres, Megumi empezó a alejarse
mientras los demás la siguieron. Por la forma en la que había actuado, sin duda parecía ser una
princesa.
“Parece que Onizuka-san también está haciendo un buen trabajo”.
“Si, su forma para poner los posters fue bastante refinada”.
Inooka y los demás se habían divertido bastante mientras ponían los posters electorales y por lo
que parecía, los otros miembros del club la tenían en una muy alta estima.
“Oye pero creo que hay algo más importante de lo que me he estado preguntando hace un
tiempo”.
“¿Qué es?”.
“¿No es esa Tokihara-senpai?”.
“¿Eh…?”
Cuando vio hacia el lugar que Shouma estaba señalando, pudo ver a una hermosa chica de cabello
negro que ocultaba la mitad de su cuerpo en una de las esquinas del edificio y estaba fijamente
mirándolo a él. En el instante en que sus miradas se encontraron, ella rápidamente se movió para
atrás, para asomarse nuevamente casi al instante. Lo que hacía muy obvio que ella lo estaba
mirando.
“… ¿Pero qué hace?”.
112 | P á g i n a
Volumen 9
“¿Tal vez quiera hablar contigo sobre algo?, ya acabe de poner los posters aquí, así que no te
preocupes yo seguiré adelante”.
“Está bien, gracias por la ayuda”.
Una vez Keiki le agradeció, Shouma le mostro una sonrisa y se alejó de él.
“…Y bien”.
Su amigo había sido lo suficientemente amable como para darle algo de tiempo. Por lo que Keiki
levanto su voz mientras caminaba hacia el individuo que lo estaba espiando.
“¿Qué haces Sayuki-senpai?”.
“Ara, pero que coincidencia encontrarte aquí Keiki-kun”.
“Bueno, me estabas mirando desde hace un rato, así que no cuenta como coincidencia”.
“Que frio eres, incluso me tratas así después de que no nos hemos visto en días”. Sayuki empezó a
hablar con un puchero en su boca mientras salía de una esquina.
Ella no lo había visto desde antes de iniciar el viaje escolar, sin embargo, sus pechos seguían
siendo igual de grandes que siempre.
“Y bien, ¿Qué haces?”.
“Como últimamente no habías venido al club, iba caminando por la escuela buscándote, fue
cuando te vi colgando los posters electorales de Fujimoto-san. Oye el viaje escolar ya término, y
justo cuando pensé que podría volver a verte, terminaste ayudándole al consejo estudiantil.
¿Sabes que me he sentido bastante sola mientras espero a que mi Maestro regrese?”.
“Ah, eso explica el resentimiento en tu mirada”.
A pesar que no le importaba mucho, Keiki la respetaba por decir todo esto sin tartamudear una
sola vez.
“¿Qué si contactas conmigo de vez en cuando?”.
“Lo lamento, olvide hacerlo”.
“¡Oye que tan cruel puedes ser…! Ah, pero parece que me abandonas y tampoco se siente tan
mal…”
“¿Sera que te puedes dejar de excitar por cada pequeña cosa?”.
Sayuki ya estaba empezando con su masoquismo a solo segundos de empezar la conversación.
“Oye, ¿Por qué ayudas en las elecciones?”.
“Fujimoto-san me pidió ayuda, así que seré su secretario hasta que acaben las elecciones”.
“¿Su secretario dices?”.
113 | P á g i n a
Volumen 9
Cuando Keiki le dio una breve explicación de lo sucedido, Sayuki reacciono sobre todo a la palabra
Secretario.
“¿Hablas de las secretarias que a menudo se encuentran con los presidentes de las empresas y los
políticos?”.
“Bueno, algo así”.
“¿Secretarias las cuales están las 24 horas del día, los 7 días de la semana y tienen que permanecer
al lado de su Amo, apoyarlos en su trabajo, darles café y entregar sus cuerpos todas las noches?”.
“Bueno, lo último no, pero lo otro más o menos”.
Keiki sabía muy bien que la descripción que ella había dado coincidía en la gran mayoría con lo que
hacía. Así que después de asentir con la cabeza, Sayuki inflo sus mejillas en señal de enfado.
“¡Eso es injusto!, ¡Si logro hacer que Keiki-kun sea mi secretario, entonces también voy a participar
en estas elecciones!”.
“¿Oye si sabes lo que dices?, los estudiantes que están en tercer año no pueden participar”.
“No puede ser…”
Y aquí había una chica de tercer año de secundaria que estaba muy frustrada por el hecho de que
ya no se podía postular para la presidencia del consejo estudiantil.
“…Oye, ¿Pero no habías cortado ya todos los lazos con el consejo estudiantil?”. Sayuki le pregunto.
“No puedo ignorar a Fujimoto-san cuando me pide ayuda”.
“Hmph…”
“De todas formas, no voy a poder ir al club en estos días”.
“…Ya entiendo, haz lo que quieras”.
“Eh, veo que te rendiste con mucha facilidad”.
En realidad Keiki había esperado un poco de más resistencia de ella.
“Oye no me gusta que me quiten a Keiki-kun, pero teniendo en cuenta la promesa de su

campaña…”
Los nombres de los postulados y las promesas en su campaña habían sido ya publicados, y Sayuki
había oído sobre ellas, al parecer.
“Si las relaciones amorosas van a prohibirse, también las relaciones inmorales, ¿verdad?, eso
significaría que no podría hacer esto y aquello con Keiki-kun en la escuela”.
“¿Qué planeabas hacerme exactamente Sayuki-senpai…?”
“Es muy vergonzoso para decirlo en voz alta…”
114 | P á g i n a
Volumen 9
“Me lo imagino”.
“Entonces, ¿Quieres que te enseñe que te iba a hacer en el salón del club?”.
“Me niego con toda la amabilidad que me tengo”.
Inmediatamente supo que iba a perder algo precioso si aceptaba acompañarla, además que las
relaciones inmorales ya estaban prohibidas.
“En todo caso, creo que no es el mejor momento para bajar la guardia. Acabe de ver a Onizuka-san
y a sus seguidores haciendo un muy buen trabajo, quien sabe, tal vez resulte un oponente muy
duro”.
“Ella tiene una gran habilidad manipulando a los hombres que la rodean para lograr lo que quiere.
Creo que Fujimoto-san debería aprender algo de su arrogancia”.
“Fujimoto-san no es esa clase de persona”.
“Pero el convertirte en la presidenta del consejo estudiantil, significa que se va a convertir en una
líder ¿no? Ella tiene que mantener a sus subordinados juntos, por lo que un poco de egoísmo no le
hace daño a nadie…”
“Si, eso puede ser cierto…”
Incluso la presidenta del consejo estudiantil actual, Takasaki Shiho tenía momentos en los que era
un poco más agresiva de lo normal. Por lo que en cierto sentido, esto demostraba que Megumi
tenía un buen potencial para ser una líder.
“Y esto va para ti Keiki-kun. Si no aprender a usar a todas las mujeres a tu alrededor, tu título
como rey del Harem perderá todo su significado”.
“Bueno, eso no suena para nada mal para mí, siendo sincero”.
“¡¿Eso quiere decir que estas bien solo conmigo como tu mascota?!, ¡Estoy muy feliz!”.
“Que tan optimista puedes llegar a ser eh…”
Si fuera posible, a Keiki le gustaría poder aprender un poco de su impresionante fortaleza mental.
“De todas maneras, solo ve y dale a Fujimoto-san el apoyo que ahora necesita”.
“Muchas gracias”.
“Pero de una vez te digo que si no me visitas, tal vez me busque a otro maestro ¿sabes?”.
“Claro, adelante”.
“¡¡Que cruel eres!! al menos demuestra un poco de preocupación ¿sí?, ¡Fue difícil para mí decir
eso!”.
O eso creía ella.
115 | P á g i n a
Volumen 9
“¡Keiki-kun, idiota, idiota!, ¡Me voy a buscar otro maestro!”.
Mientras decía idiota una y otra vez y después nombraba a Keiki, Sayuki empezó a gritar y con los
hombros temblando por la ira, se fue rápidamente de allí.
“Hoy Sayuki-senpai sí que está enojada…”
De seguro debía estar frustrada ya que Keiki no había pasado tiempo con ella. Pero aun así, el no
molestarlo durante de las elecciones era una gratificante manera de pensar sobre su futura vida
estudiantil, o bueno, al menos lo que quedaba. Y en realidad no era como si él quisiera probar los
juegos de rol SM con Sayuki, pero el prohibir cualquier clase de relación de chicos con chicas era
muy estricto para él, por lo que Keiki se negaba rotundamente a permitir que el collar de las
relaciones amorosas prohibidas fuera puesto en su cuello.
***
Era el segundo día de la semana electoral y durante el almuerzo del martes. Como también
miembro del comité de la biblioteca, era su turno para ocuparse de ella, así que Keiki estaba
sentado en el mostrador de esta, atendiendo a los clientes que se acercaran. Una vez obtuvo el
permiso del bibliotecario principal de la escuela. Keiki pego varios posters en la parte posterior de
esta. Y sentada junto a Keiki estaba Koga Yuika quien balanceaba sus piernas de atrás hacia
adelante.
“Oh Keiki-senpai”.
“¿Hm?”.
“¿Es verdad que eres el secretario de Fujimoto-senpai?”.
“Si, ella me pidió ayuda mientras duren las elecciones”.
“… ¿Hmm?”.
“¿Por qué, estas triste por eso?”.
“En realidad no~”
Eso dijo ella, pero en realidad ya estaba haciendo pucheros.
“Yuika pensó que no querías ser su esclavo, pero cuando esa chica te dijo, aceptaste
inmediatamente ser su secretario”.
“Oye solo voy a ser su secretario hasta que se acaben las elecciones”.
“Keiki-senpai pervertido…”
“¡¿Por qué?!”.
“No has dejado de mirar los muslos de Yuika”.
“¡Me descubriste!”.
116 | P á g i n a
Volumen 9
Las miradas furtivas de Keiki hacia las piernas de Yuika habían sido descubiertas por ella. Gracias a
que ella movía sus piernas de arriba hacia abajo, la piel que estaba entre su falda y calcetines
hasta las rodillas era visible, por lo que el no pudo evitar mirarla. Si llegaba a haber algo erótico,
los ojos de los hombres obviamente lo seguirán. Así es como los seres humanos funcionan. Así que
mientras su senpai entro en pánico por ser descubierto, Yuika en cambio mostro una gran sonrisa
mientras lo miraba.
“Si te gustan tanto, Yuika no le importa masajear tu espalda con ellos”.
“No lo mire precisamente porque quería ser pisado…”
“Hmph… no eres para nada honesto~”
“No, en realidad ese fue el comentario más honesto que he hecho desde el fondo de mi corazón”.
En realidad Keiki no quería ella lo hiciera ver como un pervertido que pedía a gritos un castigo. El
simplemente disfrutaba tranquilamente de los muslos de la chica.
“Bueno, dejando de lado tu fetiche por los muslos…”
“Intenta encontrar a una persona que no le gusten los muslos”.
“No hicimos elecciones el año pasado ¿verdad?, ¿Ahora porque tenemos que hacer este año?”.
“Bueno normalmente es la presidenta actual quien elige a su sucesor, el plan era que Fujimoto-san
reemplazara a Takasaki-senpai, pero Onizuka-san se postuló como candidata también”.
“Ah, entonces es por eso”. Yuika asintió comprendiendo la situación.
Al parecer esto despertó cierto interés hacia las elecciones.
“Todos los que están en la misma clase de Yuika hablan y hablan de las elecciones. Y aunque la
mayoría piensan que Fujimoto-san es la mejor opción, Onizuka-san también es muy hermosa, así
que unos chicos se han ido a su lado”.
“En realidad no me gusta decir cosas así, pero la primera impresión de un candidato siempre es un
factor fundamental que influirá mucho en las elecciones”.
Al parecer este era el caso en estas elecciones. Sin embargo, algunas personas no solo se fijaban
en su aspecto, ya que ambas eran candidatas bastante hermosas.
“Por cierto, ¿Por quién vas a votar Yuika-chan?”.
“Bueno, si Keiki-senpai se vuelve el esclavo de Yuika, tal vez ella vote por Fujimoto-senpai”.
“Es un voto muy importante, pero no creo que pueda arriesgar mi vida por eso”.
“Si no estás de acuerdo con esa oferta, ¿Qué tal si recibes el voto de Yuika y algo de esto?”.
Mientras ella decía eso, Yuika iba levantando lentamente el dobladillo de su falda.
Sus dos hermosos muslos aparecieron a la vista… si tan solo subiera un poco más su falda, sus
panties aparecerían a la vista.
117 | P á g i n a
Volumen 9
118 | P á g i n a
Volumen 9
“¡¿Pero qué haces…?!”
“Este es un servicio especial para Keiki-senpai. Hace un momento hiciste una expresión como de
querer ver unas panties”
“¡¿Pero qué clase de cara es esa?!, ¡Además no pensé en panties ni por un segundo!”.
“Pero Yuika tiene puestas unas muy lindas”.
“Baja tu falda”.
“Tsk…”. Yuika chasqueo su lengua, mientras que al mismo tiempo obedecía lo que Keiki le dijo.
Luego de eso regresaron al tema original.
“Bueno, Yuika conoce más a la vicepresidenta de todas formas. Además no le gusta la idea de que
alguien prohíba de esa manera las relaciones amorosas, por lo que ella votara por Fujimoto-
senpai”.
“Ya veo”.
Al parecer, el punto de vista de Yuika era muy parecido al de Sayuki.
“Pero aun así hay personas que apoyan a Onizuka-senpai”. Menciono Yuika.
“Si, no creo que todos piensen de la misma manera”. Keiki lo admitió.
“Es verdad, es parecido a cuando los chicos se dividen entre quienes les gustan los pechos
pequeños y los grandes”.
“¿Por qué usas un ejemplo así ahora?”.
“Yuika solo piensa que las chicas con pechos grandes deberían compartir un poco con las que los
tienen pequeños~”
“Ahora dices cosas aterradoras con una hermosa sonrisa…”
Keiki pensó que todo mejoraría si cambiaba rápidamente el tema.
“Oh es verdad, te tengo que preguntar algo Yuika-chan”.
“Quería saber si podría dejar el trabajo del club que hay después de clases para ti”.
“Aha, ¿Entonces le das todo tu trabajo a Yuika mientras vas a ir a encontrarte con otra chica?”.
“¿Por qué siempre piensas lo peor?”.
“Pero según eso, Yuika no obtiene ningún beneficio ¿verdad?”.
“¿Y cuál es el deseo de mi señora?”.
119 | P á g i n a
Volumen 9
“¿Hasta dónde estarías dispuesto a llegar?, ¿Acaso Yuika podría incluir un juego de roles donde se
incluya la cera de esa vela?”.
“La verdad no, así que por favor pídeme algo razonable”
“Bien, entonces deberías invitar a Yuika a comer un Parfait, en algún momento”.
“Si eso es todo…”
Y así, el contrato estaba hecho. Pagar un parfait para que ella lo ayudara, era un pequeño precio a
pagar.
“—Oh, pero si es Kiryuu-kun”.
“¿Eh?”.
Keiki levanto su cabeza cuando alguien lo llamo repentinamente por su nombre, la persona que lo
había saludado fue un estudiante de pie en el mostrador que tenía un brillo en sus ojos. Su
flequillo era liso y sus rasgos eran bastantes atractivos. Esa persona llevaba consigo una caja de
lápices en forma de tubo y varios libros. Al parecer iba a estudiar en la biblioteca.
“¿Así que es tu turno en la biblioteca?, buen trabajo”.
“…Ah, si… gracias”. Mientras forzaba una sonrisa, Keiki le respondió bastante seco.
Aun con una mirada fulminante, aquel estudiante parecía una persona bastante tranquila.
Después de eso dirigió su mirada hacia Yuika.
“Los he visto juntos mucho, ¿Acaso eres la novia de Kiryuu-kun?”.
“Oh no, en realidad…”
“Ajaja, no tienes por qué ser humilde… bien, creo que ya los he molestado mucho, ahora iré a
estudiar”.
“Ah claro, tómese su tiempo”.
Tomando ese malentendido, el chico se dirigió hacia una de las mesas que había en la parte de
atrás.
“¿Es un conocido tuyo Keiki-senpai?”.
“Creo que si… pero… ¿Quién era?”.
Aquella persona hablo normalmente con Keiki, sin embargo, Keiki estaba un poco dudoso sobre si
conocía a esa persona o no. No había duda alguna que esa persona era un conocido suyo por la
forma que le hablo. Además viéndolo ahora, esa persona no debía ser fácil de olvidar, teniendo en
cuenta su aspecto y mirada.
“…Por cierto senpai”.
“¿Hm?”.
120 | P á g i n a
Volumen 9
“Yuika se está preguntando si parecemos novios~”
“Quien sabe…”
Keiki en realidad creía que no se parecían en absolutamente nada parecido.
“En realidad no somos novios, si no ama y esclavo ¿verdad?”. Yuika insistió aún más.
“Nop, estas equivocada en eso también”.
Yuika se rio suavemente ante la esperada respuesta de Keiki. Sin embargo, Keiki no se pudo evitar
preguntar si algo estaba mal en este mundo por hacer una chica tan hermosa, tan sádica.
***
Después de clases, Keiki estaba ocupado haciendo unos trámites en el salón del consejo
estudiantil. Algunas veces, él tomaba un sorbo de café, después calculaba el costo de las
elecciones, ordenaba algunos cupones. Pero fue en ese momento que Airi y Ayano regresaron de
repartir los volantes.”
“Regresamos…”
“Estoy tan cansada…”
Airi parecía estar igual que siempre, sin embargo, Ayano parecía estar bastante cansada. Keiki al
verlas, respondió con un incómodo “H-hola…” ya que nunca las había visto así.
“¿Qué sucede Fujimoto-san?, te ves muy cansada”.
“Estaba haciendo una sesión de apretón de manos”.
“¿Y qué paso?”.
Fue en ese instante cuando Airi se puso al frente y respondió a la pregunta de Keiki.
“una vez entregamos todos los volantes, pensamos que podríamos probar algo nuevo”.
“Ya veo…”
En realidad las habilidades de Ayano no estaban centradas en relacionarse con la gente cara a
cara. Por eso mismo era que tenía un ojo escondido por su flequillo. Por lo que la sesión de
apretón de manos debió haber sido realmente un desafío para ella.
“Bueno Fujimoto-san es realmente mala con esta clase de cosas”.
“Si, estoy realmente cansada…”
Justo como ella había dicho, ni siquiera tenía fuerza en sus palabras. Ella ahora parecía una
asalariada cerca de su jubilación regresando a casa después de un viaje en tren. Keiki comenzó a
sentirse bastante mal por ella, por lo que sus preguntas fueron ahora para la jefa de la campaña
electoral.
“¿En serio tenemos que presionar a Fujimoto-san?”
121 | P á g i n a
Volumen 9
“Incluso yo no quería que le diera las manos a esos inmundos seres llamados chicos, pero todo es
válido para ganar las elecciones”.
“Oye eres como una sargento feroz”.
“¡¿Quién es una sargento feroz?!”. Las dos coletas de Airi se balancearon en el instante en que ella
movió su cara.
O eso había pensado Keiki, pero después de eso, el volvió a su postura original mientras soltaba
una leve risa.
“Pero a pesar de todo, el apretón de manos fue toda una sensación ¿verdad?”.
“Bueno, Fujimoto-san es muy linda, así que cualquier chico estaría encantado de darle la mano”.
“Interesante…”
Reaccionando a las palabras que el había dicho, Ayano camino rápidamente hacia Keiki y
rápidamente tomo una de sus manos entre las suyas.
“Um… ¿Fujimoto-san?”.
“Kiryuu-kun, ¿Estas encantado por esta clase de cosas?”.
“Ah… bueno… creo que si…”
En realidad Keiki estaba un poco perdido sobre lo que estaba sucediendo, pero verla mirándolo así
y preguntándole era algo muy lindo, por lo que sufrió un K.O inmediato. Después de todo esto ir a
una sesión de apretón de manos con una chica como ella, en realidad no sonaba tan mal.
“¿Kiryuu-kun?”.
“¿Hm?”.
“Te voy a pedir un favor, como mi secretario”.
“Oh claro… dispara”.
“¿Puedes dejar que Ayano-san se cargue?”.
Justo antes de darle una oportunidad para responder. Ayano hizo su movimiento. Mientras Keiki
aún estaba sentado en la silla, Ayano avanzo y lo abrazo, mientras hacía esto frotaba su cabeza
contra su pecho mientras tomaba grandes bocanadas de aire.
“Haaah…Haaaah… ha pasado tanto tiempo… creo que estoy volviendo a la vida…”
“Oh, es verdad, no me haz olido recientemente”.
“Algo te pasa Kiryuu-kun… ahora emites un aroma tan dulce”.
“Bueno, eso es por lo extraño de esta situación y tu fetiche Fujimoto-san”.
122 | P á g i n a
Volumen 9
Mientras Ayano seguía disfrutando de todo esto, Airi mientras los miraba de una manera bastante
fría a los dos.
“…Kiryuu-senpai aprovechado”.
“Oye es obvio que no he hecho nada”.
“¿No deberías estar un poco más feliz porque Ayano-senpai te está abrazando así?”.
“Oye, ¿Por qué que alguien me huela de esta manera me debe hacer feliz?.. Ah Fujimoto-san,
¿Puedes dejarme?, Nagase-san me está mirando muy feo”.
“Bueno, creo que no se podría evitar”.
Después de que Keiki le pidió el favor, el logro que la pervertida se separara de él. Una vez se
separó, la piel de Ayano parecía más brillante gracias a la recarga que había hecho.
“Por el momento, la prioridad son las elecciones. La sesión de apretón de manos fue un gran éxito,
y yo, no esperaba menos de Ayano-senpai, quien es respetada por mucha gente”.
“En cambio, por parte de la facción Onizuka, no hubieron avances, por lo que podríamos ganar a
este paso”.
Era tan claro como el agua, que Ayano con su alta popularidad y respeto, podría ganar esto. En
términos simples estas elecciones eran una batalla de popularidad, y cuanta más gente supiera de
ti, más probabilidades habrían de ganar. Después de lo sucedido hoy muchas personas sabían
sobre la vicepresidenta Ayano y su amable personalidad, por ende, todos los que estaban viendo
las elecciones desde un lado, no podían imaginar como Onizuka podría salir adelante, esto
también era algo que nadie se atrevía a decir en voz alta.
Pero, una gran molestia surgió después.
“—¡T-tenemos un gran problema!”.
De un momento a otro, la puerta se abrió de par en par y Rinko entro corriendo al salón del
consejo estudiantil.
“¿Qué sucede Rinko?, si sigues corriendo así, alguien podría ver tu ropa interior”.
“¡No le prestes atención a eso!”.
“Bueno, en realidad no lo hice…”
“¡Mira esto!”.
Al parecer el tenía mucha prisa, por lo que ignorando a Keiki, el dejo un documento sobre la mesa.
“¿Esto es… el resultado del índice de aprobación para las elecciones del consejo estudiantil?”.
“Si, el club de periodismo reunió los datos, ¡Me los dieron mientras estaba repartiendo los
volantes!”.
123 | P á g i n a
Volumen 9
“Pero… esto no quiere decir que…”
“Si… de acuerdo con esto, ¡Ayano-senpai y Onizuka-senpai están muy parejas!”.
En uno de los gráficos se mostraba el resultado de la investigación antes mencionada. Según el,
Ayano tenía un índice de aprobación del 55% contra Megumi que tenía el 38%, mientras que a el
7% no le importaba estas elecciones. Mirando los números, Ayano aún seguía ganando, pero la
diferencia debería hacer sido mucho mayor. O bueno, eso era lo que todos esperaban. Lo cierto es
que nadie sabía cómo Megumi había logrado tener un índice de aprobación de casi el 40% sin
tener tanta popularidad como Ayano.
De cualquier modo, estos resultados mostraron que no era tiempo para relajarse, ya que aún
existía la probabilidad de que la situación empeore.
124 | P á g i n a
Volumen 9
Capítulo 5: Amor, elecciones y un corazón roto.

Desde que empezó a ir a la escuela primaria, Megumi había sido llamada Óniko´. Ya que el
apellido de la familia Onizuka era un poco extraño, por eso también le decían cosas como Oni-san
esto, oni-san lo otro. Pero pensándolo bien, no era gran cosa, solo era un apodo bastante especial
que se originó debido al apellido de su familia, pero a pesar de la poca importancia de eso,
Megumi detestaba que lo hicieran
[N.T: Oniko: Niño/a demonio]
Ella no había elegido ese nombre, y no podía hacer nada para remediarlo, simplemente no era
lindo. Por ende, cada vez que la gente la llamaba así, ella les respondía: ´”¡No soy Oniko!”, y eso
era lo peor que podía hacer, ya que enojarse por eso, era la reacción que todos querían ver. Por
ende, Megumi al tiempo de pasar eso, dejo de responder aun si le llamaban con ese detestable
apodo. Sin embargo, en ese momento, un valiente príncipe había aparecido frente a ella.
Aquel príncipe se había mudado a su vecindario y él se las había arreglado para lograr que el resto
de niños que la molestaban dejaran de hacerlo. Él no era para nada fuerte, pero siendo un Año
mayor que ella, su cuerpo era obviamente un poco más grande y mejor constituido, eso era todo,
pero a pesar de eso, él era un héroe para la joven Megumi.
“Llamarte Oniko es lo más grosero que he visto”.
Estas fueron las palabras del príncipe una vez acudió en su ayuda y logro salvarla.
“Tú no eres un demonio. Más bien eres una princesa Megumi-chan”.
“¿Una princesa?”.
“Así es, eres bastante linda después de todo”.
“……”
Esta era la primera vez que un chico le había dicho algo así. Después de haberla salvado, él había
dicho que era una princesa. Sin duda ella no podría estar más feliz. Fue en ese momento que las
lágrimas que no había soltado cuando se burlaban de ella empezaron a bajar por sus mejillas. En
respuesta a esto, el chico tuvo una expresión bastante extraña en su rostro y no fue hasta unos
años después cuando por fin se dio cuenta que él había sido su primer y único amor.
***
Solamente habían pasado unos cuantos minutos desde que Rinko trajo consigo el resultado de la
investigación de aprobación de las elecciones al futuro consejo estudiantil, y ahora, el salón tenía
una atmosfera bastante pesada. Los miembros del consejo estudiantil ahora rodeaban la mesa,
todos y cada uno de ellos tenía una expresión nublada en su rostro, hasta que la jefa de campaña
Airi rompió el sepulcral silencio.
125 | P á g i n a
Volumen 9
“Esto es muy malo… jamás creí que Onizuka-senpai tuviera tanto apoyo”.
“Es verdad, jamás espere esa clase de apoyo hacia una candidato no reconocida…”
“Yo pensé que iba a haber una mayor diferencia entre ellas”.
“……”
Keiki y Rinko tenían opiniones muy parecidas, mientras que Ayano miraba fijamente el papel en
silencio. Actualmente el índice de apoyo hacia Megumi era increíblemente alto. Ya que tenía el
38%, y dado que este era solamente el segundo día de la semana electora, muy seguramente ella
superaría el 40% en algún momento. Sin duda algo estaba fuera de lugar para Ayano la actual
vicepresidenta, ya que ella debería tener una mayor ventaja.
¿Acaso está haciendo algo que no sabemos?
¿Cuál era el motivo por el que Megumi tuviera tanto apoyo a pesar de no ser conocida? Si el
pudiera saberlo, podría tomar alguna contramedida contra eso.
“Um, ¿Qué tan confiable es esa investigación del club de periodismo?, ¿Y si hay una posibilidad de
que le preguntaran solo a las personas que seguían a Onizuka?”.
“No creo que sea eso”.
“Si, yo tampoco lo creo”.
Tanto Rinko como Airi rechazaron completamente la hipótesis de Keiki, y Airi apoyo ese mismo
rechazo.
“Nuestro club de periodismo siempre se esfuerza por brindar la información más precisa posible.
Los periodistas son excelentes. Así que creo que los porcentajes son bastante precisos”.
“Entonces, ¿Qué tal si hay gente que apoya a Onizuka-san en el club de periodismo?”.
“No hay posibilidad de eso. El actual presidente del club odia cuando los medios influyen hacia un
lado de las votaciones. Así que tiene una política que siempre se tiene que publicar la verdad”.
“Ya veo…”
Entonces eso significaría que el presidente del club no iba a caer ante sobornos ni otro tipo de
artimañas. Juzgando eso, se podía confiar en que ese resultado si era verídico. Mientras Keiki
pensaba eso, Rinko empezó a hablar.
“Pero, ¿Cómo fue que Onizuka-senpai pudo obtener tantos votos? Ya que todos parecen estar en
contra de prohibir las relaciones amorosas”.
“Si, ¿Por qué será eso?”.
La opinión de él era exactamente la misma que la de Keiki. Megumi había anunciado abiertamente
en sus posters que planeaba prohibir las relaciones amorosas. Así que, ¿Por qué demonios todos
los estudiantes de secundaria que se supone están en el mejor momento de su vida estaban de
acuerdo con ella? El simple hecho de enamorarse de una persona del sexo opuesto era algo
126 | P á g i n a
Volumen 9
maravilloso, pasar tiempo de felicidad con aquella persona… sin duda la vida escolar que todos
admiraban seria desperdiciado si esto seguía así.
“¿Qué… pasaría si fuera todo lo contrario?” Airi pregunto.
“¿Lo contrario?”.
“Mirándolo a una escala mucho más grande, hay muy pocos estudiantes que en si formaron una
pareja y lo expresan abiertamente ¿no? La mayoría de los estudiantes están solteros y por ende
solos, y como no pueden tener pareja, ¿Qué tal si están intentando interferir con los que si
alcanzaron la felicidad?”.
“Ya veo… entonces es resentimiento…”
Keiki también pensó que esto era posible, ya que el también sentía este mismo resentimiento por
las parejas.
“yo opino lo mismo. Cuando veo a las parejas coqueteando de manera tan abierta, a veces me dan
ganas de que exploten”.
“Kiryuu-senpai… eres lo peor”.
“Oye solo soy humano”.
Aun cuando su amigo Shouma y la novia de él coqueteaban frente a él, había momentos en que él
pensaba “Hagan eso en casa”. Típico de una persona amargada que no puede encontrar la
felicidad.
“Si no puedes encontrar novia, entonces quieres que todos no la tengan ¿eh?”.
“La promesa principal de la campaña de Onizuka-san puede estar llegando a las personas que se
sienten solas”.
Tanto Rinko como Keiki reflexionaron una vez más sobre esa idea. Mientras que al mismo tiempo,
Airi entrecerró sus ojos como si hubiera llegado a una pregunta muy difícil.
“Aun si asumimos que ese es el caso, sigue siendo una gran hazaña el obtener tantos votos en tan
poco tiempo. Por ende ella debe ser una persona que sabe entender que es lo que los demás
desean”.
“Así es, ella no se llama a sí misma Princesa otasa por nada”.
Megumi sabía lo impopulares que se sentían los chicos, lo cual la hacía una oponente demasiado
fuerte.
“Debido a eso no podemos subestimarla ¿verdad?”.
Los resultados de la encuesta de aprobación fueron un golpe demasiado duro para el equipo de
Ayano, a pesar de que aun así iban ganando, en cualquier momento un cambio repentino podría
suceder, por lo que tenían que tener mucho cuidado por eso.
“De cualquier modo, debemos tener algunas contramedidas y ahora más que nunca”.
127 | P á g i n a
Volumen 9
***
Todos y cada uno de los miembros de la campaña de Ayano decidieron tomar un descanso antes
de hacer la reunión de contramedidas de emergencia. Keiki decidió salir un momento del salón del
consejo estudiantil para tomar algo dulce, por lo que rápidamente a una de las máquinas
expendedoras cercanas, inserto su dinero y pidió su orden. A pesar que tenían café y té en el salón
del consejo estudiantil, el en realidad quería salir de allí.
“—Kiryuu-kun”.
“¡Ah!... ah… solo eres tu Fujimoto-san”.
En el instante que se inclinó para sacar lo que había pedido de la máquina, alguien detrás de él lo
llamo.
“¿También viniste para beber algo?”.
“No”. Ayano sacudió su cabeza. Después de eso abrió la boca y hablo en un tono suave. “Quiero
hablar contigo Kiryuu-kun”.
“¿Conmigo?”.
Como ella se había tomado la molestia de seguirlo hasta aquí, tal vez le quería decir algo que no
podía decir en el salón del consejo estudiantil. Sin embargo, Keiki no tenía la más remota idea de
que era lo que quería hablar.
En ese momento, Ayano bajo su cabeza en manera de disculpa. “Lo lamento, sé que no soy muy
confiable y aun así sigo causándote problemas…”
“Ah…”
El finalmente lo entendió todo.
“¿Te refieres al resultado del índice de aprobación?”.
“……” con una expresión de tristeza, Ayano simplemente asintió.
Ahora que él lo pensaba, Ayano no había mencionado absolutamente nada en todo el tiempo que
habían hablado sobre esto. Y al parecer la charla la había preocupado mucho más de lo que
parecía.
“No creo que hubieras hecho algo mal Fujimoto-san. Solo no anticipamos que la otra parte fuera
un poco más fuerte, pero aun así tenemos la ventaja”.
“Kiryuu-kun…” Ayano levanto lentamente su cabeza.
Pero, su expresión de tristeza aún seguía en su rostro.
“No pude decir nada mientras todo hablaban de eso… eso hizo que diera cuenta que no soy una
buena candidata para la presidencia del consejo estudiantil… y por eso no creo que todos me
acepten…”
128 | P á g i n a
Volumen 9
“Bueno…”
Si no hubiera elección, esta duda nunca hubiera aparecido. Sin embargo, al momento de aparecer
una rival como Megumi, quien de un momento a otro estaba siendo comparada con ella, y además
de eso, le estaba haciendo dudar sobre ser o no la presidenta del consejo estudiantil. Aquel
resultado del índice de aprobación terminaron pareciéndose a como la gente pensaba de esa
persona, y ella ahora lo estaba proyectando sobre sí misma. Esta clase de presión de seguro no era
fácil de manejar.
“Creo que deberías ser un poco más terca y segura”.
“¿Terca?”.
“Si, Sayuki-senpai me lo comento hace un momento. Un líder debe ser un poco más agresivo y
arrogante. Si crees que no puedes dar órdenes, le puedes dejar eso a Nagase-san. Estoy seguro
que Rintarou estaría mucho más feliz si tiene que hacer los quehaceres y trabajos ocasionales, por
lo que no creo necesario que tenga que cargar con tanto peso. Incluso Takasaki-senpai usa a las
personas para que la ayuden a que el trabajo sea mucho más eficiente”.
“Ah…”
“Si aún estas preocupada, estas elecciones te ayudaran a ver tu propio potencial. Ya que si le
ganas a Onizuka-san, eso significa que estas mejor preparada que ella para ser la presidenta del
consejo estudiantil, ¿no?”.
Keiki acabo de decir eso con una enorme sonrisa. Mientras que Ayano estaba estupefacta con eso,
sin embargo, no duro mucho, ya que después de eso ella también mostro una sonrisa.
“Kiryuu-kun, creo que estas siendo muy simplista”.
Obviamente era cierto esto, pero esos eran sus verdaderos sentimientos. Desde el fondo de su
corazón, Keiki creía que tanto su vida estudiantil como la de los demás, sería mucho más divertida
si Ayano fuera la presidenta del consejo estudiantil.
“Pero gracias a ti, siento que mis dudas se han aclarado”.
“Cuando lo necesites, ven a pedirme ayuda, ya que después de todo soy tu secretaria”.
“Entonces tengo algo que pedirte…”
“Dime”.
En vez de responderle, Ayano abrazo a Keiki.
“¿Me dejarías… recargar?”.
“¿En un momento así?... bueno. La verdad no me importa”.
Que alguien te esté oliendo constantemente en si era bastante extraño, pero si le ayudaba a
mejorar su estado de ánimo, seguirle el juego estaría bien.
“Además, cuando gane las elecciones por favor dame tu ropa interior”.
129 | P á g i n a
Volumen 9
“Rechazo amablemente la oferta”.
Pero a pesar de todo, el rechazo esta solicitud inmediatamente.
***
Todos ya habían decidido que era lo que iban a hacer durante las elecciones. Primero, iban a
colocar aún más posters para ser aún más famoso el nombre de Ayano. Después de eso, venia su
imagen pública. Ellos le iban a dar a todos la oportunidad de conocerla a todos, para que así todos
la apoyaran.
En ese sentido, la idea de la sesión de apretón de manos había sido muy afectiva, ya que estrechar
la mano de una linda chica como Ayano haría muy felices a muchos chicos. Se comentaba a
menudo que había personas dispuestas a pagar grandes cantidades de dinero por solo darle un
apretón de mano a su idol favorita. Así que después de reunir esta información, empezaron las
contramedidas.
“¡Lo que quieren los chicos de hoy es emoción y motivación!, ¡Quieren algo nuevo!”.
El breve descanso había llegado a su fin y después de que todos los miembros— a excepción de
Shiho, quien estaba ocupada— habían ocupado sus asientos, en la oficina del consejo estudiantil.
Rinko continúo.
“¡Debemos hacer algo nuevo que creer un gran impacto y que recupere los votos que tiene la
facción de Onizuka!”.
“Esa es una buena idea teniendo en cuenta que vino de Mitani…”
“¿Y qué es lo que vamos a hacer?”.
“¡Hagamos que Ayanon-senpai se vista como un hombre!, ¡¿A poco no es una buena idea?!”.
Mitani golpeo con violencia su mano contra el escritorio.
Airi y Keiki soltaron suspiros de decepción al mismo tiempo. Y aunque todos los miembros del
consejo estudiantil eran excelentes con respecto al trabajo, ninguno de ellos había experimentado
algo como esto antes. Así que ninguno sabía que hacer al respecto.
“En realidad no tenemos idea alguna sobre qué hacer con esto del índice de aprobación…”
“Si, las elecciones son muy difíciles”.
Keiki resumió en pocas palabras, lo que todos pensaban, y Ayano estuvo de acuerdo con él.
“pero aun así, ¿En serio tenemos que entrar en pánico?”. Airi continuo mientras el entusiasmo de
todos se iba apagando. “Aún estamos a la cabeza de las encuestas y si cambiamos drásticamente
nuestras decisiones, tal vez empeoremos las cosas, además no creo que la facción anti-relación
amorosas crezca aún más”.
“Si, también es verdad que aquellas personas que tienen pareja están en contra de Onizuka-san”.
130 | P á g i n a
Volumen 9
Obviamente la Loli legal y su novio lolicon ahora estaban en contra de Onizuka. Ya que no quería
que nadie les quitara el precioso tiempo que podían compartir juntos. Por ende, todas las parejas
que había en la escuela le ofrecerían su apoyo a Ayano. Además de eso, como ya era bastante
popular, Ayano también tenía sus propios seguidores, por lo que era claro que Megumi estaba en
desventaja desde todos los frentes.
“Entonces eso quiere decir que podemos continuar como lo hemos venido haciendo…”
“Pero Keikun-senpai, la contra parte pudo tener un apoyo brutal en poco tiempo, ¿No crees que
tengan un plan oculto para ganar?”.
“Hmm…”
El argumento de Rinko era muy válido. Ya que el exceso de confianza era un asesino silencioso y
brutal.
“Yo quiero hacer todo lo que este en mis manos”.
“Fujimoto-san…”
Como la vicepresidenta había mencionado eso, Keiki también estaba de acuerdo, pero como su
secretario él debía pensar en algo más.
“El problema en realidad es cómo podemos atraer a nuevos votantes. Creo que hacer más
discursos y eso no cambiara mucho la cosa”.
“Creo que tengo una idea… ¿Qué les parece si convertimos a Ayanon-senpai en una idol?”.
“¿Quieres que ella sea una Idol?”.
Nuevamente a Rinko se le ocurrió algo sin precedentes.
“Las elecciones en si tratan de cuan popular es un candidato ¿no? Entonces si uno de los
candidatos es una idol, su índice de favorabilidad aumentara ¿no creen?”.
“Pero, ¿Cómo vamos a hacer eso?”.
“Los Idols y las personas famosas suelen subir fotos a sus redes sociales ¿no? Solo tenemos que
usar el internet para mostrar los encantos de Ayanon-senpai”.
“Ya veo, creo que también podríamos publicarlo en la página del consejo estudiantil”.
En este punto, la humanidad ya había progresado a la era del internet. Así que después de
anunciar las elecciones, muchas más personas empezarían a ver la página de inicio y por ende las
fotos y otras cosas que ayudaría a ganar más votos.
“Si necesitamos tomar fotos, le podemos pedir prestada la cámara a Koharu-senpai”.
“Fufu, no hay necesidad de eso Kiryuu-senpai”.
Por algún motivo, Airi se levantó de su silla y continuo hablando mientras enseñaba la pantalla de
su teléfono a todos.
131 | P á g i n a
Volumen 9
“¡Tengo una gran cantidad de fotos de nuestra querida Ayano-senpai!, ¡Cada una de estas fotos
hará que su corazón se acelere por la ternura!”.
“¿Por qué tienes esas fotos Airi?”.
“Las he estado tomando en secreto cuando veo la oportunidad”.
“¡No hagas eso!”.
“Justo ahora van a hacer muy útiles, ya que tomar fotos puede tomar algo de tiempo”.
Tal y como Rinko había dicho, el tiempo ahora era algo muy precioso, por lo que después de
interrogar a Airi sobre la existencia de esas fotos. Todos se reunieron alrededor de ella y
empezaron a seleccionar las imágenes que ellos podrían usar. Su colección era bastante grande y
las fotos iban desde Ayano distraída en el patio hasta fotos de ella bebiendo un poco de juego,
también fotos de ella tomando una siesta en el salón del consejo estudiantil.
“Ah, esa de aquí es bastante linda”.
“Esta foto de Ayano-senpai sacando su lengua como un gatico es muy linda ¿cierto?”.
Algunas de estas fotos eran de Ayano sacando la lengua después de probar un poco de ramen
caliente que vendían en la cafetería de la escuela. Todas y cada una de ellas tenía un alto potencial
para ser de una idol.
“Esta de aquí también es muy adorable. Ella está dándole la mano a un gatico callejero”.
“Oh, pero que buen ojo Mitani”.
“Nagase-san esto…”
“…Creo que me voy a morir de vergüenza”.
Ayano estaba sufriendo un enorme daño mientras todos miraban las fotos de sus momentos más
vergonzosos. Y así mientras los cuatro estaban completamente distraídos. La líder de apoyo Shiho
entro al salón.
“…Oh, ¿Qué hacen?”.
Airi y Rinko se giraron al mismo tiempo para responderle.
“Estamos mirando que fotos de Ayano-senpai vamos a subir a la página web”.
“¡Así vamos a lograr tener muchos más votos!”.
“¿Eh?, ¿Pero no es peligroso subir tu nombre y foto a internet…?”
“””””Ah…””””
La única pregunta que Shiho había hecho, logro que todo el plan de la idol se desmoronara
completamente. Al final decidieron que iban a hacer una segunda sesión de apretón de manos.
***
132 | P á g i n a
Volumen 9
“Estoy en casa…”
“Bienvenido Nii-san”.
Ya eran más de las 7 de la noche cuando Keiki por fin regreso a su casa después de todo el trabajo
con las elecciones. Mizuha estaba sentada en el sofá leyendo un libro.
“Ah, ¿Qué lees?”.
“¿Esto?, bueno la gente del club de investigación del manga lo estaba dando”.
“¿Lo dio el club de investigación del manga?”.
En el instante que Mizuha lo acepto y lo miro, este parecía ser un manga corto que había sido
creado por el mismo club de investigación del manga. Tenía más o menos 20 páginas y la portada
era un poco simple. Su título era: “La historia de amor imposible de la noche”.
“Es muy interesante. A pesar que es un poco triste”. Mizuha menciono.
“Oh… ¿Me lo prestas?”.
“Por supuesto, ya lo he leído muchas veces”.
Keiki regreso rápidamente a su habitación y empezó a leerlo. Mientras pasaba cada página, el
descubrió que esta era la historia de amor de una mujer soltera. El lugar, era un país de Europa
durante la edad media. Los personajes principales de la historia eran un chico y una chica que se
querían mucho, pero que no podían estar juntos porque no lo permitían, lo cual lo llevo a su
desgracia.
A pesar de ser corto, era de excelente calidad y además le mostraba al lector los pros y los contras
del ámor puro´. En contraste a los protagonistas, también había una pareja casada que eran
amigos de ellos. Esta pareja vivía una pacífica y feliz vida, hasta el punto que hacía pensar al lector:
´Los normies deben explotar´ Mientras leían.
“Así que este es el motivo por el que el índice de aprobación de Onizuka-san resulto ser tan alto…”
Aquel manga era la razón del movimiento anti-relaciones amorosas que estaba surgiendo. Era una
manga original que el club había hecho con todo su esfuerzo. Además de eso, para quien no había
podido conseguir una copia física, también lo subieran a la página web del club de investigación
del manga.
“Incluso tienen una versión web en línea… y si no recuerdo mal, ellos hicieron unos doujinshi en el
festival cultura, el cual fue bastante popular, por lo que de seguro pudieron conseguir varios
admiradores con eso”.
Eso explicaba por qué Megumi estaba en un lugar tan alto en las encuestas. Ellos habían logrado
reunir votos con un método fascinante. Además de eso, en la contraportada se podía ver que esta
era una historia original escrita por Onizuka Megumi.
“Ya veo, así que esto se le ocurrió a Onizuka-san”.
133 | P á g i n a
Volumen 9
Los chicos del club al parecer ayudaron con el dibujo y lo demás. Cuando Keiki miro su teléfono y
dijo que el manga había sido publicada en la página web del club alrededor de una semana antes.
Eso quería decir que escribir la historia y dibujar el manga debió haber tomado mucho tiempo, por
ende Megumi había planeado todo esto desde hace un buen tiempo.
Los dibujos eran muy buenos y la historia también. Siendo sinceros era mucho mejor que varias
mangas que había visto en las tiendas.
“Incluso Mizuha disfruto de esto también”.
Ver películas era uno de los pasatiempos de Mizuha, por lo que ella resulto ser una chica muy
difícil de complacer en esos temas, así que si ella alababa eso, debía ser algo especial.
¿Pero porque estará tan decidida a prohibir las relaciones amorosas?
La facción de Onizuka se estaba tomando las elecciones muy en serio. Y este manga era una
prueba fehaciente de ello, pero eso no explicaba la razón de la principal promesa de la campaña
de Megumi.
“…Me parece que tendré que investigar un poco más sobre esto”.
El en realidad no planeaba intentar encontrar una debilidad para usarla en su contra. Simplemente
tenía curiosidad de saber por qué ella había prometido semejante cosa y además por qué escribió
esa historia.
***
Era miércoles, por lo que ya era el tercer día de la semana electora. Para descubrir el porqué de los
planes de Megumi, Keiki la había estado observando toda la mañana. Ella tenía amigos en su clase
y cada vez que era hora del descanso, iba a hablar con ellos. Durante la clase, ella hacia sus
trabajos muy responsablemente y cuando iba al baño, otra chica siempre la acompañaba.
“Hmm… no encuentro un buen momento para hablar con ella”.
Por ende, el descanso para almorzar llego sin el poder realizar ningún avance. Una vez termino el
descanso, Megumi dejo atrás el salón de clases, pero esta vez lo hizo sola.
¡Bien, esta es mi oportunidad!
Cuando por fin él tuvo la oportunidad, se levantó rápidamente de la silla y siguió a Megumi. Pero
en el instante en que había empezado a seguirla se dio cuenta que ella había avanzado bastante y
que ella se apuraba en ir a bajar las escaleras. Aunque se las arregló para ir detrás de ella, de
repente una marea de personas que iba regresando de la cafetería los rodeo, lo cual hizo que el
perdiera su objetivo durante el proceso.
“¿A dónde se fue…?”
Momentos así son los cuales le hacían desear haber intercambiado números con ella durante el
viaje escolar. Así que mientras caminaba por el primer piso maldiciendo sus malas habilidades de
comunicación…
134 | P á g i n a
Volumen 9
“… ¿Hm?, ese pelo esponjoso de allá…”
Afuera del edificio de la escuela, el vio a una chica bastante familiar parada bajo el frio viento de
diciembre en el patio, ella estaba mirando algo con bastante interés. Y aunque estaba a espaldas
de Keiki, solo podía haber una persona con un pelo tan singular.
“¿Qué es lo que mira?”.
A pesar de poder verla desde donde él estaba, él no podía ver que era en lo que ella estaba tan
interesada. Como ella no mostraba intención de moverse, Keiki decidió allí mismo confrontarla.
“¿Onizuka-san?”.
“¡Waaaahhaaa!”
En el instante que la llamo, ella pego un brinco en el aire como si fuera un gatico asustado.
“¡¿Quién…?! Ah, eres tu Kiryuu-shi…”
En el momento que vio que la persona era un compañero de su clase, una expresión de enojo
lleno su rostro.
“Oye no me asustes de esa manera”.
“Lo lamento, no creí que te fueras a asustar así”.
El mismo Keiki se sorprendió un poco por su exagerada reacción.
“¿Qué haces Onizuka-san?”.
“…Nada”.
“¿No estabas mirando hacia una de las ventanas de la escuela?”.
“¡Por supuesto que no!... ¡Y si no tienes nada más que hablar conmigo, me iré entonces!”.
“¡E-espera un segundo!”.
“¡¿Eh?!, ¡¿Por qué pareces estar en pánico?!”.
Megumi intento volver rápidamente al edificio de la escuela, sin embargo hablo un poco más
fuerte que de costumbre, por lo que Megumi estaba un poco sorprendida.
“Necesito que me escuches… Onizuka-san, si regresas a la escuela, las cosas para ti serán un poco
problemáticas”.
“¿Por qué dices eso?”.
“Bueno, es un poco difícil de decir, pero… tu falda esta doblada en un lado”.
“¡¿Fuwah?!”.
De seguro cuando salto antes por el susto, su falda se debió haber enredado con el blazer de su
uniforme. Gracias a eso, si ella hubiera regresado a la escuela de esa manera, su ropa interior de
135 | P á g i n a
Volumen 9
color amarillo hubiera estado a la vista de cualquiera que estuviera detrás de ella. Así que después
de arreglarla, ella le hizo una rápida reverencia a Keiki.
“…M-muchas gracias me salvaste”.
“No te preocupes”.
Keiki se alegró en el fondo de su corazón de poder haber evitado una tragedia.
“Pero me hubiera gustado que me lo dijeras un poco antes”.
“Lo voy a tener en cuenta para la próxima vez”.
“¡No va a haber próxima vez!”. Dijo Megumi un poco exaltada. “…Bien, voy a regresa a mi salón
ahora”.
“Espera, ¿Tienes un minuto?”.
“¿Para qué?, ¿Acaso esto es una confesión?”.
“Nop, simplemente quiero hablar”.
“…Bueno, me ayudaste hace un momento, así que está bien”.
Como estaba haciendo demasiado frio como para quedarse afuera, ellos decidieron que entrarían
nuevamente. Keiki fue a una de las máquinas expendedoras y compro dos latas de café calienta y
le dio una a Megumi.
“Yo invito”.
“Gracias”. Megumi acepto la lata agradecida.
Mientras apoyaba la espalda contra la pared, ella sostuvo la lata en su mano sin abrirla.
“¿No eres actualmente el secretario de Fujimoto-chan?, ¿Qué pasaría si rumores extraños

empezaran a circular al vernos tan cerca?”.
“Solo hablo con una compañera de clase, es algo normal ¿no?”.
“Si, tiene sentido”.
Megumi por fin abrió la lata y tomo un sorbo, después de eso volvió a mirar a Keiki de manera
cautelosa.
“Y bien, ¿De qué quieres hablar?”.
“Hay una cosa que te quiero preguntar Onizuka-san”.
“¿Qué es?”.
“¿Por qué estás tan interesada en prohibir las relaciones amorosas?”.
Ella quería cambiar las reglas de la escuela, por lo que debía haber algo con lo que ella no
estuviera satisfecha. Actualmente el consejo estudiantil estaba trabajando arduamente para que
136 | P á g i n a
Volumen 9
cada uno de los estudiantes pudiera tener una vida estudiantil agradable. Y en si el ambiente
general de la escuela era bastante agradable, y a Keiki le gustaba eso. Por ese motivo no
encontraba una razón válida por la que Megumi quisiera llegar tan lejos.
“¿Por qué…?” la voz de Megumi ahora era un poco temblorosa, ya que parecía que sus emociones
estuvieran a punto de salir.” Es porque lastimaron a Nao-kun”.
“¿Nao-kun…?”
“Tu debiste conocerlo hace un tiempo Kiryuu-shi. Él fue engañado por el actual miembro del
consejo estudiantil Mitani Rin, además fue rechazado. Él era el presidente del comité del festival
escolar”.
“¿El presidente… del comité?”.
En el momento que escucho esas palabras, pudo recordar a cierto individuo que se ajustaba a
aquella descripción.
“No puede ser que… ¿Fue el a quien Rintarou rechazo?”.
Así era, a mediados de octubre hubo una tragedia que había acontecido durante el festival
cultural. El presidente del comité, quien tenía aspecto de intelectual, confundió a Rin, quien en ese
momento tenía ropa de chica, y como resultado de su confesión, obviamente Rin termino
rechazándolo.
“Exactamente, el presidente del comité del festival cultural, Inui Naoya, él es mi amigo de la
infancia”.
“No tenía la más remota idea…”
Pensar que aquel incidente iba a estar relacionado con esto. Sin duda el mundo era como un
pañuelo a veces.
“Pero, ¿Por qué eso hizo que te registraras como candidata para las elecciones del consejo
estudiantil?”.
“Después de que Mitani-shi lo rechazo, Nao-kun entro en una gran depresión. Bueno, ¿Quién lo
podía culpar?, estaba enamorado de un chico que simplemente estaba travestido”.
“Si, tiene sentido”.
Nunca nadie esperaría estar enamorado de un chico travestido. Sin duda algo como eso haría que
la mayoría de personas estuvieran encerradas por un mes.
“Hice todo lo que estuvo a mi alcance para animarlo, pero el no intento superarlo. Solo me miro
con los ojos muertos y me dijo: “No voy a volver a amar a nadie más”. Parecía un cantante
japonés, tu entiendes”.
“O-ok…”
137 | P á g i n a
Volumen 9
“Mientras estaba sumido en la depresión, él tuvo que ver a todas esas parejas coqueteando en la
escuela, ¿Tu qué crees que él pudo sentir ese momento?”.
“Bueno… eso debió ser…”
Sin pensarlo ni dos veces, el pensaría que “Los normies deben explotar”. Así que después de
escuchar sus sentimientos, Incluso Keiki pudo entender los sentimientos de Megumi.
“Por eso quiero separar a todas las parejas de la escuela. Quiero convertirme en la presidenta del
consejo estudiantil y prohibir cualquier relación amorosa”.
“Ya veo…”
El había entendido la razón de Megumi para esto. Ya que estaba tratando de cambiar la escuela
por el bien de su amigo de la infancia.
En teoría, esta situación es por culpa de Rintarou.
Sin embargo, el decidió posponer ese problema. Antes de decidir qué hacer, había algo que Keiki
quería aclarar con su compañera de clase que estaba frente a él.
“Onizuka-san, ¿En serio estás de acuerdo con lo que vas a hacer?”.
“Bueno, después de oírte, al parecer te gusta Inui-senpai ¿no?”.
“¡¿Funya?!”.
En el instante que le pregunto eso, el rostro de Megumi se puso completamente rojo. Esa reacción
era respuesta suficiente.
138 | P á g i n a
Volumen 9
139 | P á g i n a
Volumen 9
“¡¿H-Hay algo malo con eso?!”.
“No, por supuesto que no, pero…”
“¿Pero qué?”.
“Si vas a prohibir las relaciones amorosas, no vas a poder salir con Inui-senpai ¿sabes?”.
Digamos que Megumi ganara las elecciones, y que ella pudiera hacer de esta una regla real en la
escuela. Dicha regla de no parejas no aplicaría solo a los estudiantes. Obviamente también
aplicaría en la misma Megumi, así que eso significaba que aun si lograra confesarle sus
sentimientos a Inui, ellos no podrían salir.
O eso es lo que Keiki había pensado, pero en realidad la reacción de Megumi fue bastante simple.
“Ah, así que de eso hablabas…”
“¿Hmm…?”
“Es verdad que me ha gustado Nao-kun desde que éramos niños, pero jamás he podido reunir la
valentía para confesarme a pesar de todo este tiempo”.
“……”
“Pensé que le podría confesar mis verdaderos sentimientos después de empezar la escuela, pero
cada vez que veía una oportunidad, me daba miedo…”
Poder confesar tus sentimientos a la persona que más amas es algo muy difícil.
“Pero entonces no pude ver más a Nao-kun y nos distanciamos un poco por eso… a veces parecía
que me evitaba y luego de eso, el quedo completamente enamorado de Mitani-shi… solo para ser
rechazado…”
“Si, te pido disculpas a nombre de Mitani…”
Gracias a su pasatiempo de travestirse había arruinado la vida de Megumi.
“…Mis compañeros de clase siempre se burlaban de mí. Ya que mi apellido es Onizuka, ellos me
decían Oniko, y odiaba que me dijeran así, bueno quiero decir, ¿tú sabes que es un Oni, sabes?,
son esas criaturas horribles de las historias”.
“Si, ya veo porque no te gustaba”.
Los Onis y demonios que aparecían en las imágenes de las historias jamás emitían una buena
vibra. Y burlarse de ella por solo el apellido debió haber sido muy difícil.
“En ese entonces, Nao-kun se mudó a mi vecindario y se encargó de los chicos que me
molestaban. Después como fuimos a la misma escuela, terminamos pasando más tiempo juntos,
después íbamos a las casa de los demás niños… y no fue hasta un tiempo después que me di
cuenta que me gustaba”.
140 | P á g i n a
Volumen 9
Ella se dio cuenta de que sentía algo por el hasta pasado un tiempo de estar en la escuela. Sin
embargo, a pesar de saber de sus sentimientos, nunca pudo confesarse y así pasaron tiempo como
amigos de la infancia.
“Y como no pude salir con Nao-kun, termine siendo llamada la princesa Otasa”.
“Eh, ¿Entraste al club de investigación del manga por eso?”.
“Bueno, tener a otakus adulándote en todo momento en realidad no es tan malo ¿sabes?”.
“Wow…”
Sin duda Onizuka-shi es una persona bastante particular.
“En realidad no me importan mis sentimientos, lo único que quiero es que Nao-kun pueda
disfrutar de su vida estudiantil… lo único que quiero… es verlo sonreír”.
“Onizuka-san…”
En el caso de Ayano ella era una candidata completamente normal para la presidencia del consejo
estudiantil. En cambio Megumi, era completamente anormal, ya que a diferencia de Ayano quien
quería que TODOS pudieran tener una vida escolar agradable, Megumi trabajaba solamente por el
bien de una sola persona.
“Lo lamento Onizuka-san…”
El entendió completamente su objetivo, la razón del porque quería prohibir las relaciones
amorosas, y porque quería ganar de cualquier modo esta elección.
Pero—
“No puedo dejar que seas la presidenta del consejo estudiantil”.
“Ya veo…” después de decir eso, Megumi miro a Keiki con una sonrisa de tristeza. “Creo que
vamos a resolver esto mediante las urnas”.
***
Ese día después de clases, los cuatro miembros del consejo estudiantil, excluyendo a Shiho se
reunieron en el salón del consejo estudiantil.
“Wow, entonces eso me hace ver como el chico malo”.
“Oh por favor, ¿Ahora cómo vas a compensar el daño?”.
“Mejor pensemos en tu castigo más tarde. Es Inui-senpai la verdadera victima aquí”.
“Si, me siento mal por el…”
Después de que las clases finalizara, Keiki fue al salón del consejo estudiantil y les conto todo lo
que Megumi le había dicho. El dudo un poco en contarle lo que ella sentía por Inui, pero como
Rintarou estaba involucrado, también lo estaba todo el consejo.
141 | P á g i n a
Volumen 9
“Pero, ¿No fue su culpa por equivocarse?”. El chico quien aún tenía una falda puesta, hizo un
puchero. “Jamás dije que fuera una chica después de todo”.
“Cualquier persona pensaría que eres una chica cuando estas vestido así”.
“Ahh, es verdad que también te excitaste al ver mi cuerpo ¿verdad?, bueno, lo hacías al inicio”.
“Aun quiero morirme por eso, no me lo recuerdes”. Keiki le respondió.
Keiki quería golpearse a sí mismo por sentir cierta clase de atracción hacia un chico como Rintarou,
sin duda fue uno de los peores momentos de su vida, el cual quería olvidar para siempre.
“Me sorprende que Nagase-san sienta lastima también”.
Airi odiaba con pasión desenfrenada a los hombres. Pero aun así, ella parecía estar sintiendo
simpatía por el hombre que ya no podía amar después de lo que había pasado.
“Keikun-senpai, creo que podrías disfrutar el vestir como chica si lo pruebas ¿sabes?”.
“Jamás hare eso”.
“Pero Kiryuu-senpai, tú ya has usado un traje de conejita antes ¿no?”.
“¿Cómo sabes eso?”.
“Bueno, Yuika me mostro una foto mientras estábamos en una pijamada”.
“¡YUIKA-CHAAAAAAAAA!”.
¡¿Pero que le estaba mostrando Yuika a otras personas?! Cuando por fin Keiki estaba superando
aquel trauma, este nuevamente salió a la luz. De seguro este era uno de sus tres peores
momentos que prefiria olvidar.
“Yo quiero ver”. Ayano dijo.
“No lo vas a ver… definitivamente no lo harás…”
Keiki prefería que ella lo oliera antes de dejarla ver algo así.
“Bueno, lo mejor sería centrarnos en las elecciones por ahora”.
“Si, perder el tiempo de esta manera no es una buena idea”.
Actualmente el tiempo que tenían era muy limitado. Así que en vez de culpar a Rinko, ellos más
bien deberían centrarse en terminar sus preparativos para las elecciones. Además mientras Keiki
le daba vueltas al problema, Ayano hablo en su dirección.
“Así que Onizuka-san está intentando cambiar la escuela por la persona que le gusta ¿no?”.
“Sip, eso es lo que dijo”.
“Bueno si esa es su razón, entonces no podemos perder”.
“Es verdad…”
142 | P á g i n a
Volumen 9
Ayano quería que cada uno de los estudiantes disfrutara al máximo de su vida estudiantil. Era su
deseo y su impulso para seguir. El estudiar y forjar relaciones en los clubes era muy importante,
pero pasar tiempo con la persona a la que amas también era una parte muy importante en el
desarrollo de una persona. Y aunque podían entender los sentimientos de Megumi, el hecho de
sacrificar la felicidad de muchos por solo una persona no era opción.
Así que con esta resolución, quedaban dos días.
***
Después de todo eso, Airi le encargo a Keiki que reuniera información para hacer un discurso, por
lo que él fue rápidamente a la biblioteca, tomo varios libros y se sentó junto a una de las ventanas
y empezó a revisar cada uno de ellos, asegurándose de tomar notas importantes. Así que mientras
estaba concentrado en su trabajo, una voz lo llamo desde la mesa del lado.
“Hola Kiryuu-kun, nos volvemos a encontrar”.
“…Ah, hola”.
Cuando el levanto la cabeza, pudo ver al mismo chico de mirada aguda que había visto hace unos
días a otras. El parecía ser un estudiante de primer año, sin embargo, Keiki aún no podía recordar
donde lo había visto antes.
“Umm… lo lamento, pero, ¿Nos conocemos?”.
“Oh, ¿no recuerdas?, trabajamos juntos en el festival cultural.
“¿En el festival cultural…?”
De repente algo apareció en su mente, pero no era nada claro.
“Hmm… aun no recuerdo”.
“¿Eh…?”
Aun cuando el empezó a revisar la carpeta del festival cultural en su mente, la persona que estaba
frente a él, no estaba allí. Su principal característica era su mirada aguda, por lo que era imposible
olvidarlo.
“Ah, ¿Me recordarías si hago esto?”.
Junto al libro que estaba leyendo, el saco un estuche, lo abrió y se puso sus gafas. La forma de
estas era redondas, lo cual hizo que Keiki recordara.
“¡¡AAAAAAAHHH!!”.
El por fin recordó.
“¡¿Eres el presidente del comité del festival cultural?!”.
“Al parecer ya lo recordaste, mi nombre es Inui Naoya, y fui el presidente del comité del festival
cultural”.
143 | P á g i n a
Volumen 9
Como él no había estado usando las gafas, Keiki no lo pudo reconocer. Aquel muchacho era el
protagonista de la tragedia que había ocurrido en el festival cultural: él era la persona que
Rintarou rechazo cuando estaba vestido de mujer.
“Inui-senpai, ¿Llevas gafas por moda o algo así?”.
“Siempre me han dicho que tengo una mirada desagradable. Así que por eso no he sido muy
popular con las chicas, así que me puse estas gafas cuando estaba en último año de primaria”.
“P-ero eso es tan…”
Y una vez revelo su identidad a Keiki, el estudiante de último año se quitó sus gafas nuevamente.
Sí, es verdad que se ve un poco aterrado sin esas gafas…
Pero, después de hablar con él, Keiki supo que él era una persona con un buen corazón.
“Sin embargo, recientemente me empecé a sentir como un idiota. Como si estuviera fingiendo ser
alguien que no soy”.
“Si, creo que te ves mejor así”.
“Gracias… ahora que recuerdo, ¿Tú eras miembro del consejo estudiantil verdad Kiryuu-kun?”.
“Bueno, fui un miembro temporal durante el festival cultura, no pertenezco oficialmente a ellos”.
“Entonces tú debes saber cómo fue que Mitani-kun me rechazo ¿verdad?”.
“Solo conozco cosas superficiales…”
Después de responderle con sinceridad, el chico mostro una expresión de indiferencia.
“En realidad me gustaba Mitani-kun, pero los dioses de arriba pueden ser un poco horribles. Ya
que hacer que un chico como él se vea tan lindo…”
“Lo lamento… por eso…”
“Ajaja, no te tienes por que disculpar Kiryuu-kun”.
“Escuche de un amigo que fue todo un shock para ti”.
“Oh, me pregunto quién te habrá dicho eso… pero, si estuve en shock después de que me
rechazaran. Además me dio una depresión la cual incluso me hizo pensar que no importaba estar
con el aun si él fuera lindo nada más…”
“Oye eso suena a enfermedad terminal”.
Sin importar lo lindo que el fuera, Mitani aún era un chico. Tenía cierta barra de carne colgando
entre sus piernas, y aun si esta fuera oculta por una falda en lugar de pantalones.
“Sin embargo, pensé que no podía estar así para siempre, por lo que empecé a estudiar como loco
para lidiar mi depresión”.
144 | P á g i n a
Volumen 9
“¿Es así?... ¿Hm?”.
Fue allí cuando Keiki recordó cierto detalle.
“Oye Inui-senpai, ¿Has venido a estudiar últimamente aquí en la biblioteca, específicamente en

este asiento?”.
“¿Hm?, así es, suelo venir a estudiar justo aquí”.
“Y ¿Viniste ayer durante el almuerzo?”.
“Si, me sorprende mucho que lo sepas”.
“……”
Allí fue cuando todo cobro sentido.
Ya veo… entonces eso era lo que Onizuka-san estaba mirando ayer…
Aunque él no sabía la razón exacta, Megumi y Naoya se habían distanciado. Así que el hecho de
verse era un poco incómodo, por lo que ella debió haber estado mirándolo desde lejos. Cuando se
dio cuenta de esto, Keiki pensó que su manera de actuar era muy linda.
“¿Qué lees Kiryuu-kun?”.
“Es un libro sobre cómo hablar en público”.
“¿Hablar en público?”.
“Soy el secretario de la candidata Fujimoto-san para las elecciones del consejo estudiantil”.
“Ah, eso por eso”. Naoya asintió en respuesta. “Y hablando de las elecciones, la otra candidata,
Onizuka Megumi en realidad es mi amiga de la infancia”.
“Oh, ¿en serio?”.
Cuando el nombre de Megumi apareció en la conversación, Keiki fingió actuar como si esta fuera
la primera vez que oía hablar de ella.
“Me sorprendió mucho saber que ella se postuló para la presidencia del consejo estudiantil.
Megumi-chan no es la clase de persona que le gusta hablar en público”.
Cuando escucho eso, Keiki estaba seguro de algo.
Inui-senpai no sabe por qué fue que Onizuka-san se había postulado como candidata.
Bueno, Keiki también imagino que Megumi solo le había contado muy superficial esto.
¿Debería decirle que Onizuka-san siente algo por el?
Como ellos eran amigos de la infancia, Naoya al menos debería caerle bien Megumi, y así podrían
empezar a salir, con esto Megumi podría perder la motivación de ser la presidenta del consejo
estudiantil.
145 | P á g i n a
Volumen 9
…No, no puedo hacerlo, no le puedo decir los sentimientos de Onizuka-san sin permiso de ella.
Keiki no se perdonaría a si mismo si lo hiciera. Decirle los verdaderos sentimientos de la chica con
la cual él había estado cerca por tantos años, era algo que él no podía hacer, ni porque se trata del
bien común.
…Espera… Pero, ¿Qué pasaría si los animo a que sean cercanos otra vez?
Jugar a ser cupido debería ser lo más seguro que él podría hacer. Además él ya había hecho esto
con Ootori Koharu y Akiyama Shouma antes, así que tenía cierto conocimiento de cómo hacerlo.
Y ahora que lo había decidido, empezó con su rol.
“Bueno, la cuestión es que Onizuka-san es una compañera de clase”.
“¿En serio?, que gran coincidencia”.
“Ustedes dos deben ser muy cercanos ya que son amigos de la infancia ¿no?”:
“En realidad… no nos hemos visto mucho últimamente”.
“¿Por qué?”.
“Bueno… es un poco complicado de decir, pero…” Naoya continuo mientras se rascaba su mejilla.
“Hace un tiempo Megu-chan encontró las revistas porno que escondía en mi habitación”.
“¿Perdón?”. Keiki no pudo esconder su sorpresa.
“Y bueno… eran revistas un poco pervertidas…”
“¿Eh… un poco…?”.
“Megu-chan solo me miro con una sonrisa en su rostro y me perdono, pero verla a los ojos
después de eso, ha sido muy incómodo…”
“¿Eeehh?”.
Ellos no estaban muy unidos últimamente por algo tan simple. Debido a eso Keiki tuvo problemas
para comprender lo que pasa.
¿Es por eso que ellos se alejaron entre sí?
Tanto Megumi como Naoya habían dicho lo mismo, que creían que la otra persona los evitaba, sin
embargo, Keiki jamás pensó que era por algo tan tonto como unas revistas porno, que de seguro
era algo que a Megumi no le importaba en nada. Por eso era que ella estaba preocupada por él y
su corazón roto.
“Megu-chan fue la primera persona en hablar conmigo después del festival cultura, ella es una
chica amable y estoy seguro que intento animarme”.
“Si, yo también lo creo”.
146 | P á g i n a
Volumen 9
O mejor dicho, él había escuchado eso de la misma Megumi, por lo que era imposible que no lo
supiera. Según todo esto ella debía ser una chica muy amable, si esto fuera lo contrario, ella no
intentaría hacer la escuela un lugar mejor para el chico que le gustaba.
“Y siendo honesto… me gusta Megumi-chan”.
“Oh, ¿en serio?”.
……
………
…………
“… ¡¿Eh?!”.
Su reacción se demoró mucho más de lo que sería normalmente.
“¿Me dijiste que te gusta Onizuka-san?”.
“Así es, pero después de un tiempo ella empezó a evitarme y se unió al club de investigación del
manga. Después empezó a ser muy amable con los chicos de allí, por lo que no me pude confesar…
así que estaba en busca de un nuevo amor…”
“Ah, entonces por eso es que…”
Ellos se habían extrañado mutuamente. Prácticamente esta era la historia del manga que hizo el
club de investigación del manga. Así que si tan solo uno de los dos se confesara, esto tendría un
final feliz.
“Así que es por eso que te enamoraste de Rintarou”.
“Exacto. Quería renunciar a Megumi-chan, pero viendo lo que se preocupaba por mí y lo mucho
que intentaba animarme… como lo digo…”
“Te enamoraste aún más de ella”.
“Bueno… si eso es…”
“Inui-senpai, eres inesperadamente sencillo”.
“Lamento ser un senpai tan sencillo ¿sí?”.
“Hmm…”
En este instante había recibido tanta información que Keiki tuvo problemas para procesarla.
Así que en teoría… ambos se gustan… ¿verdad?
Este había sido un desarrollo bastante inesperado, sin embargo, él no podía dejar pasar esta
oportunidad, ya que su trabajo era ser el cupido de ellos.
“¡Bien, entonces ve ya mismo y confiésale tus sentimientos a Onizuka-san!”.
147 | P á g i n a
Volumen 9
“Eh… pero…”.
“¡Debes apurarte!, ¡Onizuka-san es una chica muy linda, así que cualquier otro chico puede
conquistarla si no te apuras!”.
“Pero… yo intente enamorarme de otra chica… por eso fui rechazado por un travesti… no hay
duda que soy lamentable…”
“¡Eso es lo de menos ahora!, ¡Ya lo sé!, ¿Qué te parece si practicamos cuando te toque hacerlo
más adelante?”.
“Kiryuu-kun… ¿Por qué insistes tanto en eso…?”
“¡Lo hago porque quiero que ustedes son sean felices!”.
Claramente ninguno de los dos sabía sobre la otra parte, pero tanto Megumi como Naoya estaban
enamorados el uno del otro. Así que si uno de los dos se confesara, sin duda no sería rechazado. Y
si su amor se volviera realidad, entonces no habría ninguna necesidad de prohibir las relaciones
amorosas, y Ayano podría sin problema alguno convertirse en la presidenta del consejo
estudiantil. Era como matar dos pájaros de un tiro.
Y para que eso suceda, necesito que Inui-senpai de el primer pasó.
La clave de la felicidad para toda la escuela estaba en las manos del chico con una mala mirada en
sus ojos.
“… ¿Esta… bien para mi confesar mis sentimientos a Megumi-chan…?”
“¡Claro que sí!, ¡El amor es lo mismo a libertad!”.
“El amor… es… libertad…”
Mientras tenía una expresión de Seriedad, Keiki intento dar un discurso inventado para convencer
a Naoya.
“¡Bien, ahora lo entiendo Kiryuu-kun!, ¡Me voy a confesar a Megumi-chan!”.
“¡Si, hazlo!”.
“Pero… si fuera posible, ¿Me podrías ayudar?”.
“¡Claro!”.
Finalmente el presidente del comité decidió ponerse serio al respecto. Para fortuna de ellos, nadie
estaba usando la biblioteca en ese momento. Así que no iban a molestar a los otros estudiantes
hablando a ese volumen. Así que en ese momento, los dos se pusieron de pie y se miraron
fijamente.
“¡Bien, empecemos!”.
“¡S-si!... ¡Tu… tú me gustas!”.
148 | P á g i n a
Volumen 9
“No eso no es bueno… ¿No quieres demostrar todo tu amor?, ¡Dilo una vez más!”.
“¡Me gustas!”.
“¡Dilo más fuerte!, ¡Suelta todos tus sentimientos!”.
“¡Yo… yo en verdad…!” Naoya respiro profundamente y… “¡TE AMOOOOOOOO!”
Reuniendo los bellos sentimientos que tenía en palabras, el grito más fuerte que nunca. Al verlo
así, Keiki vio que esta confesión fue perfecta.
“¡Muy bien!”. Keiki levanto al aire el puño de su mano.
“¿Eh?”. Repentinamente la voz de Nanjou Mao se pudo escuchar.
“¿Eh Nanjou?, ¡¿Qué haces aquí?!”.
Ella estaba sosteniendo algunos libros de gramática y parecía que los iba a devolver a la biblioteca,
pero justo se encontró con ellos en el peor momento posible.
“¿K-Kiryuu… se siente atraído por un Ikemen… con una mirada fría?”.
“¡¿Quién?!”.
Como si de respirar se tratara, la Fujoshi entendió todo desde su punto de vista Yaoi. Pero siendo
sincero, cualquiera pensaría que esta clase de suceso de confesión de chico a chico estaba
sucediendo. Desde lo ocurrido en el viaje escolar, los ojos de Mao parecían apagados, pero justo
ahora estaban llenos de energía.
“¡Oh diablos, necesito hacer un manuscrito de esto ya…!”
“¡Espera!”.
“¡MUCHAS GRACIAS!”.
Ahora Mao parecía un pez que por fin regresaba al agua después de haber encallado en la playa.
Después de recibir un material tan maravilloso, Mao salió corriendo rápidamente de la biblioteca.
“¿Cómo carajos fue que paso esto…?”
Mao había recibido una fuente de inspiración mucho más peligrosa desde que sucedió la
confesión de Rintarou.
“Esa chica era amiga tuya ¿verdad Kiryuu-kun?, lo lamento, creo que le dimos a entender algo que
no es”.
“No, en realidad es mi culpa, mejor olvidémonos de Nanjou y sigamos con la práctica”.
“No, no hay necesidad de seguir Kiryuu-kun”.
“¿Inui-senpai?”.
149 | P á g i n a
Volumen 9
“Pensándolo bien, creo que no tengo ningún derecho a confesarle mis sentimientos a Megumi-
chan, eso sonaría muy forzado, ya que recientemente fui rechazado por Mitani-kun”.
“No, eso no es…”
“Me siento un poco mal por molestarte así, pero creo que mejor me voy a rendir, Megumi-chan y
yo no vamos a ser una buena pareja”. La sonrisa que el mostraba mientras decía eso, le dolió a
Keiki en lo profundo de su pecho.
“—Nao-kun y yo no hacemos buena pareja?”.
“¿Eh?”.
Tal vez porque tenía que hacer algo en la biblioteca, o porque tal vez escucho el grito de Naoya.
Pero de alguna manera, cuando los dos chicos se dieron la vuelta, Megumi estaba allí de pie
mirando hacia abajo.
“¿M-Megumi-chan…?”
“Si… tiene sentido… en realidad no nos complementamos… alguien como yo y como Nao-kun
jamás… no es posible… ¿verdad?”. Su voz estaba temblorosa y enormes lagrimas empezaron a
caer por sus mejillas.
Justo como estaban pasando las cosas ahora, ella tenía un gran malentendido.
“¡Onizuka-san eso no es lo que…!”
Ella ni siquiera se detuvo después de que el la hubiera llamado, por lo que ella salió rápidamente
de la habitación.
“¿Cómo demonios llegamos a esto?”.
Si el verdadero cupido se enterara de esto, sin duda estaría muy decepcionado de Keiki. Ya que en
lugar de ayudarlos a encontrar el amor, él había hecho algo innecesario y había logrado que su
relación se volviera mucho más incómoda.
150 | P á g i n a
Volumen 9
Epilogo
La campaña electoral había continuado con total normalidad hasta el penúltimo de la semana: El
jueves, Keiki y Mizuha iban caminando tranquilamente hacia la escuela como siempre.
“Hoy hace demasiado frio”.
“Bueno, ya estamos en diciembre”.
El tiempo había pasado tan rápido como siempre y ya solo quedaba un mes para fin de año.
Después que las elecciones llegaran a su fin, darían inicio los exámenes finales. Y después de eso
sería navidad, noche vieja y vacaciones de invierno. Hoy, el cielo estaba un poco más gris que de
costumbre, incluso parecía que fuera a llover. En este instante Mizuha tenía puesto un abrigo
delgado sobre su uniforme y sus mejillas se habían puesto un poco rojas después de salir de casa.
“¿Crees que este año caiga nieve?” Mizuha pregunto.
“Tal vez”. Keiki le dio una vaga respuesta.
Ellos habían estado viviendo desde hace mucho tiempo en la ciudad, pero casi nunca había
nevado. Y si lo hacía, solo pasaba una o dos veces por año, y según lo mencionado anteriormente,
esta misma nieve se derretía al poco tiempo.
“Al parecer está nevando muy fuerte por la casa del abuelo”.
“Si, lo vi en las noticias, las nevadas están empeorando a cada año”.
“Apuesto que no podrías vivir allí Mizuha, eres muy sensible al frio”.
“Ajaja, seguramente no”.
Con una leve sonrisa, Mizuha cambio de tema.
“Oye Nii-san, ¿Vas a ayudar hoy en las elecciones?”.
“Si, ese es el plan”.
“Si lo supuse, mañana son las votaciones después de todo”.
El día siguiente a este sería el último día de la semana de elecciones. El plan era que cada
candidato diera un discurso en el gimnasio, después de eso, todos irían a votar.
“Haz tu mejor esfuerzo ¿sí?, te voy a estar apoyando”.
“Gracias”.
Obviamente Keiki planeaba ayudar a Ayano a que ganara, pero aun había algo en su mente.
¿Onizuka-san estará bien?
151 | P á g i n a
Volumen 9
Él había intercambiado números con Inui-senpai, pero al parecer Inui no había podido contactar
con Megumi. Ella había evitado toda clase de comunicación, parecía como si tuviera la intención
de ignorarlo completamente. Esta clase de cosas harían mucho más difícil a Keiki el acercarse a ella
para aclarar todo esto, además que era solo él, el que sabía que los dos estaban enamorados
mutuamente y a pesar de haber hecho lo posible para unirlos, él había fallado en proporciones
épicas. En todo caso, ahora estaban mucho más distantes que antes y él debía asumir la
responsabilidad de eso.
Actualmente él no podía permitir que Megumi se convirtiera en la presidenta del consejo

estudiantil con esta clase de malentendido. Así que tenía que ayudarlos a descubrir lo que sentían
por el otro mientras que a la vez tenía que ayudar a guiar a Fujimoto a la victoria.
“Creo que no tengo más remedio que pasar todo el ultimo día ocupado ¿eh?”.
El día anterior, el club de periodismo había publicado otra encuesta de aprobación. Esta no había
cambiado mucho a la revelada el lunes. Y tal como Airi sospechaba, la idea anti-amor no había
progresado mucho. Así que si lograban llegar hasta el discurso del viernes, con toda seguridad
Ayano ganaría las elecciones y se convertiría en la próxima presidenta del consejo estudiantil.
En cuanto a Megumi, él tendría que explicar lo que había pasado con calma.
“… ¿Hmm?, ¿Qué está sucediendo?”.
“Hay demasiada gente reunida”.
Cuando el llego a la escuela acompañado de Mizuha, se encontraron con una enorme cantidad de
personas mirando el tablero que había en la entrada.
“¡Kiryuu-senpai tenemos problemas!”.
“¿Nagase-san?”.
“¡Ven mira esto!”.
Airi tomo rápidamente de la muñeca a Keiki y lo guio hacia el tablero.
“¡Mira!”.
“… ¿Eh?”.
Allí había dos fotos colgadas, estas fueron puestas cubriendo el poster electoral de Ayano.
“¿Qué demonios… es esto…?”
En la imagen de la derecha estaba Keiki siendo abrazado por Ayano al lado de una máquina
expendedora. En la de la izquierda, estaba Shiho tomando de la cabeza a Keiki y pegándolo contra
sus pechos.
Y debajo de ambas imágenes, había un título en negrilla.
´ ¡Kiryuu Keiki de la clase 2B tiene dos relaciones al tiempo!´
152 | P á g i n a
Volumen 9
Palabras del autor

*Esta sección contiene spoilers, así que para quienes no han leído la historia, por favor proceder
con precaución.
¡Muchas gracias por leer este noveno volumen de Hensuki!
Después de bastante tiempo, por fin tenemos a una nueva personaje, ella es la compañera de
clase onizuka-san, ¿Ella te agrado? Siempre había querido escribir una versión así de la princesa
otasa, así que estoy muy feliz de haber encontrado la oportunidad para hacerlo. Sus puntos más
encantadores son obviamente su largo y rizado cabello, dignos de una princesa, además de su
manera bastante franca de hablar. Ella es una chica bastante imprudente, al punto de haberse
postulado para la presidencia del consejo estudiantil…
Además de todo eso, pudimos presenciar la reaparición del presidente del comité del festival
cultural. Sí, aquel quien paso por una horrible tragedia en el festival cultural. Además de eso, Mao
obtuvo nuevo material para sus mangas BL. Oh pobre tipo desafortunado. Incluso se hizo una
ilustración de el en el séptimo volumen, así que quienes estén interesados, pueden volver a ese
volumen para verlo. (Es el chico que tiene gafas)
Este noveno volumen fue más bien una combinación de viaje escolar y elecciones al consejo
estudiantil. Mizuha hizo un show de striptease y Keiki y Nanjou se acercaron aún más (toma eso
con múltiples significados). Esta vez hubo contenido un poco más pesado siendo sincero si lo digo
yo mismo y Como Yuika-chan y Sayuki-senpai no tuvieron mucho tiempo de protagonismo, quiero
que lo tengan en el próximo volumen.
Las elecciones al consejo estudiantil, así como los problemas amorosos de Megumi van a
continuar en el próximo volumen. En si la serie principal ahora está ubicada en diciembre, por lo
que voy a escribir algunos eventos de aquella temporada, por favor espéralos.
Voy a hacer todo lo posible para hacer que la historia siga interesante en un futuro, así que por
favor, les pido que me sigan apoyando. Bien, nos vemos en el décimo volumen
Hanama Tomo
153 | P á g i n a

(JM-T) Hensuki Volumen 9

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

(JM-T) Hensuki Volumen 9

Cargado por

Información del documento

Título original

Derechos de autor

Formatos disponibles

Compartir este documento

Compartir o incrustar documentos

Opciones para compartir

¿Le pareció útil este documento?

¿Este contenido es inapropiado?

Copyright:

Formatos disponibles

(JM-T) Hensuki Volumen 9

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

Kawaiikereba hentai demo suki ni natte kuremasu ka?

“Claro, ¿Qué sucede?”.

“¿Podríamos… intercambiar… nuestra ropa interior?”

“Está bien… renuncio a tener tu ropa interior Kiryuu-kun”.

“¿Eh?, tu nunca dirías algo como eso Fujimoto-san”.

“A cambio de eso, quiero que Kiryuu-kun se ponga mis panties en su cabeza”.

“¿Disculpa… que acabas de decir?”.

“¡¿Pero ese no es un castigo aún más fuerte que los de Yuika-chan?!”

Kiryuu-kun comenzó a sentir un incómodo escalofrió recorriendo toda su columna vertebral

“Nii-san… oye Nii-san, ya es de mañana”.

“Hmm… mm… no… por favor… no… tus panties…”

“Gracias a dios… que todo fue un sueño”.

“Buenos días Nii-san, amaneciste muy dormilonsito el día de hoy”.

“Entonces aún estoy soñando eh”.

“Nop, esto no es un sueño”.

“¿Eh?, Nii-san estas huyendo de la realidad”.

“¿Si?, entonces pruébalo”.

“Pellízcame la mejilla a ver si es verdad”.

“Entonces, ¿Puedo saber por qué estas vestida así Mizuha?”

“Bueno, es porque quiero que Nii-san solo piense en mí y en nadie más”.

“Oye, ¿Podrías no ir con todo desde tan temprano en la mañana?”

“Jeje, fue una broma, en realidad quería que Nii-san se excitara”.

“Estoy sorprendido de que tengas esa ropa ¿sabes?”

“Oye… y… ¿Me queda bien?”

“Gracias, hice este vestido, solo para ti Nii-san”.

“Oh, así que tú misma lo creaste ¿eh?”

“Em… ¿Por qué no me das medicina normal?”

“Oye, ¿No estás un poco feliz por esto?”

“Bueno… es el día del viaje escolar, tu sabes…”

“Bien, y tu cámbiate ese uniforme”.

“El viaje escolar…”

“Bueno… la verdad no creo que vaya a estar solo todo el tiempo”.

Capítulo 1: Curry, después de aquello, Panties.

“Cada vez vemos menos edificios eh”.

“Si, de seguro nos estamos acercando a nuestro destino”.

“¿Por qué?” le pregunto Shouma.

“Ah, así que aun estas intentando hacer eso eh”.

“Oye, sabes que soñé con Fujimoto-san anoche”.

“¿Y qué paso con ella?”.

“Si, eso es un sueño bastante extraño”.

“Eh, ¿En serio?”.

“Al parecer tu situación está bastante difícil.”

“Y ¿Tienes algún plan para poder cumplir tu meta?”.

“Suenas como si fueras un agente secreto en una misión”.

“Para mi es algo parecido, de todas maneras, ¿Tienes alguna idea?”.

“Oh, ahora que recuerdo, Shouma, ¿Qué sucedió con Yuuhi-chan?”.

“¿Le paso algo a Yuki-nee?”.

“Bueno… no es algo importante, solo me preguntaba si ella está bien”.

Gracias a Dios que Yuuhi-san está bien.

Al parecer Yuuhi-san se fija muy mal en los hombres.

“Su señoría, la sentencia de este lolicon es…”

“Si… bueno, en realidad el viaje escolar aún no ha empezado en sí”.

“Creo que lo mejor es que pienses sobre ello”.

“Koharu-chan es tan linda… quiero abrazarla ya mismo…”

“Por favor guárdate esas fantasías para ti, en serio, es desagradable”.

“¿Hm?, ¿De qué hablas?”.

“Creo que he encontrado la forma de curar las perversiones de ellas”.

“Prácticamente lo que tengo que hacer es convertirme en un pervertido.

“¿Qué quieres decir con eso?”.