Belluscio Medidas Cautelares en Familia

Claudio A.
Belluscio
Medidas cautelares
en familia
según el Código Civil y
Comercial
Doctrina. Jurisprudencia. Modelos
***
Introducción a las medidas cautelares
Medidas cautelares en familia
Régimen patrimonial
Divorcio y nulidad del matrimonio
Alimentos
Régimen de comunicación
Cuidado personal del hijo
Violencia familiar
Vivienda familiar
BIBLIOTECA BELLUSCIO
Belluscio, Claudio Alejandro
Medidas cautelares en familia : según el Código Civil y Comercial / Claudio

Alejandro Belluscio. - 1a ed . - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : García
Alonso, 2018.
428 p. + CD-DVD ; 23 x 16 cm.
ISBN 978-987-1940-73-8
1. Medidas Cautelares. 2. Derecho de Familia . I. Título.
CDD 346.015
© 2018 Editorial García Alonso
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Editor a cargo: Joaquín García Alonso

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Impreso en junio de 2018 en La Imprenta Ya SRL,

Alferez Hipólito Bouchard 4283, Munro, Pcia. de Buenos Aires
Impreso en Argentina - Printed in Argentina
Hecho el depósito que marca la ley 11.723

PALABRAS PREVIAS
El Código Civil y Comercial de la Nación se introduce de lleno en el

ámbito procesal de familia en sus arts. 705 a 723.
Asimismo, este nuevo Código contempla otras cuestiones procesales
a lo largo de su articulado. Entre ellas, se destaca la especificidad de las
medidas cautelares que se podrán solicitar y fijar en los distintos proce-
sos de familia.
Es decir que este Código establece las medidas cautelares que regirán
en general en los procesos de familia y, asimismo, en cada proceso en
especial.
Estas medidas cautelares serán aplicables en todo el territorio de la
Nación Argentina (al ser un Código de fondo) y, por ende, se tendrán que
adaptar a ellas los respectivos Códigos de rito provinciales y sus proce-
dimientos en familia.
En consecuencia, será de suma importancia para el abogado litigante
conocer con exactitud cuál es la nueva normativa en este tema, ya que
surgen importantes innovaciones al respecto.
A ello apunta esta obra, amén del enfoque práctico que siempre nos
caracteriza.
El contenido de la presente obra se encuentra dividido nueve capítu-
los, a los cuales se agregan un apéndice jurisprudencial y otro de práctica
forense.
El primer capítulo introduce a las medidas cautelares en general.
En el segundo capítulo se señalan las particularidades que tienen es-
tas medidas cautelares en los procesos de familia.
En el tercero se tratan, específicamente, las que se podrán adoptar en
el régimen patrimonial del matrimonio y de las uniones convivenciales.
En el cuarto, a las que corresponde aplicar en los procesos de divorcio
y nulidad del matrimonio, ya sea antes de interponer la respectiva de-
manda, en el momento de iniciarlos o con posterioridad.
11
BELLUSCIO: MEDIDAS CAUTELARES EN FAMILIA
El quinto capítulo se dedica a las que se podrán imponer en los proce-

sos donde se reclamen alimentos, ya sea que estos alimentos estén desti-
nados a los hijos, a los parientes o a uno de los cónyuges.
El sexto, a las que atañen al régimen de comunicación paterno o ma-
terno filial, en especial cuando ese régimen se fija de forma provisional.
El séptimo, a las medidas cautelares en el cuidado personal del hijo y
la posibilidad de fijarlo provisionalmente.
En el octavo se analizan las que se refieren a la violencia familiar,
destacando la aplicación de aquellas cautelares genéricas que han sido
determinadas —en los últimos tiempos— por los jueces o tribunales de
familia, más allá de tratar las medidas tradicionales en este tema.
En el noveno —y último capítulo de la presente obra— se examinan
las que corresponde aplicar a la vivienda familiar, tanto cuando se trate
de uniones matrimoniales como de uniones convivenciales.
Este libro culmina con un apéndice de síntesis jurisprudencial que
abarca toda la temática tratada en los distintos capítulos y otro de mode-
los de escritos de práctica profesional.
El objetivo de la presente obra fue lograr un enfoque integral de la
temática referida a las medidas cautelares en los procesos de familia y,
asimismo, que sea de gran utilidad para el colega litigante.
Confiamos en haberlo logrado.
El autor
12
Capítulo I
INTRODUCCIÓN A LAS MEDIDAS
CAUTELARES
1. CONCEPTO Y DENOMINACIÓN
La prolongación que —por lo general— tienen los procesos judicia-
les, conlleva el riesgo de que al momento en que se dicte la sentencia, se
alteren las circunstancias fácticas existentes cuando la acción fue inicia-
da(1), tornando así en ilusorias(2) o ineficaces a las resoluciones judicia-
les(3) y resultando imposible, en consecuencia, que se aplique la norma
legal que sirve de fundamento a la petición y a la sentencia(4).
Es que el factor tiempo es una nota destacada en los procesos judi-
ciales(5), ya que la función jurisdiccional no tiende a un reconocimiento
abstracto del derecho que se pretende sino al reconocimiento efectivo
de aquel.
Ante ello, se impone el dictado de medidas cautelares para asegurar
los bienes y las personas, o para mantener el estado de hecho vigente.
(1) CCiv. y Com. Santa Fe, Sala I, 19/10/90, Juris, 87-33 y Zeus, 56-206, Sec. Juris-
prudencia.
(2) CNCiv., Sala I, 28/8/97, LL, 1997-C-832 y DJ, 1997-2-818; CNFed. Cont. Adm.,
Sala I, 28/4/98, LL, 1999-A-143 y DJ, 1999-1-571; CNPenal Económico, Sala B, 3/7/96,
LL, 1998-D-420; CFed. La Plata, Sala II, 6/5/99, LL, 2000-C-458 y DJ, 2000-2-669.
(3) CNFed. Cont. Adm., Sala IV, 16/2/95, LL, 1996-A-644.
(4) CNCiv., Sala A, 12/5/88, LL, 1988-E-573 (caso 5890); Quevedo Mendoza, Efrain
I.: Juicio de alimentos provisorios urgentes, JA, 1979-IV-722.
(5) Kielmanovich, Jorge L.: Tutela urgente y cautelar, JA, 1999-IV-1030; Ponce, Car-
los R.: Estudio de los procesos civiles. Tomo 3. Ejecución procesal forzada. Juicio ejecutivo.
Medidas cautelares, Editorial Ábaco de Rodolfo Depalma, Buenos Aires, 2000, p. 231;
CCiv., Com. y Lab. Posadas, Sala II, 13/2/97, LL Litoral, 1997-469.
13
Aunque, también, se las podrá usar para innovar en el estado de he-

cho vigente, de manera que la sentencia pueda resultar de cumplimien-
to posible.
A las medidas cautelares, se las puede conceptuar como aquellas que
—con su interposición— evitan que el derecho cuyo reconocimiento se
pretende obtener, pierda su virtualidad(6) o eficacia(7) durante el lapso
que media entre la iniciación del proceso en el cual se solicitan y su
finalización a través de la sentencia judicial(8).
Como explican los profesores Palacio(9) y Kielmanovich(10) a estas
medidas también se las ha denominado como “acciones cautelares o
asegurativas”, “medidas conservatorias”, “procesos cautelares”, “provi-
dencias cautelares”, “medidas precautorias”, “medidas urgentes”, “medi-
das provisionales”, “medidas de seguridad, “medidas de garantía”, etc.
En tanto, el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación las deno-
mina —para los procesos de divorcio y de nulidad matrimonial— como
medidas provisionales en sus arts. 721 y 722.
Desde ya adelantamos —siguiendo a una importante doctrina(11) y
jurisprudencia acorde(12)— que estas medidas cautelares constituyen
una tutela anticipada y provisional de la pretensión incoada en un pro-
ceso, siendo adoptadas para asegurar que la sentencia sea efectiva(13),
(6) ST Corrientes, 20/11/95, DJ, 1996-1-600; CJ Salta, 15/10/97, LL NOA, 1998-909.

(7) CNCiv., Sala A, 9/4/97, LL, 1997-E-1008 (39.775-S) y DJ, 1997-3-428; CJ Salta,
15/10/97, LL NOA, 1998-909.
(8) Martínez Botos, Raúl: Medidas cautelares, 4ª ed., Editorial Universidad, Buenos
Aires, 1999, p. 27; Ferreyra de De La Rua, Angelina: Medidas cautelares, LL Córdoba
2000-97; Ferreyra de De La Rua, Angelina: Medida autosatisfactiva en el procedimiento
de familia, LL, 1999-E-1295/6; C1ªCiv. y Com. Mar del Plata, Sala II, 20/5/03, LL Buenos
Aires, 2003-1170; CNCiv., Sala M (del voto en disidencia del Dr. Daray), 13/7/97, LL,
1998-B-39; C2a. Civ., Com. y de Minería San Juan, 9/8/84, ED, 111-549.
(9) Palacio, Lino E.: Derecho Procesal Civil, Lexis Nexis/Abeledo-Perrot, Buenos Ai-
res, 1992, pp. 1217-1218.
(10) Kielmanovich, Jorge L.: Medidas cautelares, Rubinzal-Culzoni Editores, Santa
Fe, 2000, p. 19; Kielmanovich, Jorge L.: Tutela...cit., p. 1030.
(11) Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., p. 31; Highton, Elena I., y Nabar, María J.:
Venta del inmueble embargado, LL, 1985-C-1193; Ferreyra de De La Rua, Angelina: Me-
didas...cit., p. 98. En similar sentido: De los Santos, Mabel: Resoluciones anticipatorias y
medidas autosatisfactivas, JA, 1997-IV-800.
(12) CNCiv., Sala A, 9/4/97, LL, 1997-E-1008 (39.775-S) y DJ, 1997-3-428.
(13) CFed. Córdoba, Sala B, 22/5/96, LL Córdoba, 1996-1045.
14
cap. i: introducción a las medidas cautelares
respecto de los bienes o personas de que se trata, o para la satisfacción

de las necesidades más urgentes de estas últimas.
2. FINALIDAD
Se dijo(14) —con acierto—que, dada la imposibilidad material de que
el proceso satisfaga en forma inmediata la pretensión del accionante, el
legislador debió arbitrar las denominadas medidas cautelares, con el fin
de asegurar el reconocimiento del derecho que se reclama en el proceso
en que aquellas se interponen.
Por ello, estas medidas tienden a la obtención de una resolución ju-
dicial que asegure el cumplimiento de una eventual sentencia de mérito
a dictarse en un proceso de conocimiento o ejecución(15).
En consecuencia, se ha dicho(16) que “si del examen de las medidas
cautelares solicitadas surge que mediante ellas no se asegurará la efec-
tividad de la sentencia, no resultan admisibles las quejas contra la reso-
lución del magistrado que las denegó”.
En similar sentido, se agregó(17) que, por ello, se requiere la existencia
de un derecho que con aquellas se intente proteger o garantizar, y —asi-
mismo— que tal derecho pueda ser válido y útilmente reconocido en la
sentencia a dictarse.
Podemos señalar que la finalidad de estas medidas es impedir que el
derecho cuyo reconocimiento se pretende obtener a través del proceso
pierda su eficacia durante el lapso que transcurre entre su iniciación y el
pronunciamiento de la sentencia definitiva(18), o dificulte o imposibilite
(14) Martínez Botos, Raúl: Medidas...cit., p. 27. En similar sentido: Palacio, Lino E.:
Manual de Derecho Procesal Civil, 4ª ed. act., 3ª reimp., Abeledo-Perrot, Buenos Aires,
1977, t. II, p. 272; Palacio, Lino E.: Derecho...cit., p. 1217.
(15) CNCiv., Sala G, 31/7/89, LL, 1989-E-529 y DJ, 1990-1-761.
(16) CNCiv., Sala C, 29/11/94, LL, 1996-A-821, caso 10.766.
(17) CNFed. Cont. Adm., Sala IV, 5/2/98, LL, 1998-D-708.
(18) CNCiv., Sala A, 12/5/88, LL, 1988-E-573, caso 5890; ídem, Sala B, 30/7/83, ED,
115-470, sum. 40; ídem, Sala M, 21/10/97, LL, 1998-C-197 y DJ, 1998-3-1128; CNFed.
Cont. Adm., Sala IV, 19/5/94, JA, 1994-IV-408; ídem, íd., 16/2/95, LL, 1996-A-644; ídem,
Sala II, 30/5/95, LL, 1996-C-54 y DJ, 1996-2-34; ídem, íd., 11/3/97, LL, 1997-C-832 y DJ,
1997-2-818; ídem, Sala V, 3/10/96, LL, 1997-A-294.
15
la ejecución forzada(19), o torne inoficiosos(20) o inoperantes los efectos

de la resolución judicial(21).
En tal sentido, en materia de alimentos se ha manifestado(22) que de
nada servirá la imposición judicial de una cuota extraordinaria para pa-
gar la operación urgente a la que debe someterse el alimentado si éste
ya ha fallecido; o que, cuando se fije en sede judicial la cuota “definitiva”,
el obligado a su pago se haya insolventado con motivo de la libre dis-
posición que tenía sobre sus bienes(23) y/o hayan desaparecido varios de
ellos(24).
Como enseña el profesor Palacio(25), “a conjurar tales peligros obede-
ce la institución de las diversas medidas que pueden requerirse y dispo-
nerse dentro del llamado proceso cautelar”.
Por lo tanto, los remedios procesales que nos encontramos analizan-
do, tendrán por finalidad asegurar los bienes y personas involucradas
en un proceso judicial, mediante el mantenimiento de la situación(26), o
por el contrario, innovando sobre la situación existente, de manera que
la sentencia a dictarse pueda resultar de cumplimiento posible(27).
(19) CNFed. Cont. Adm., Sala III, 31/3/97, LL, 1997-E-507 y DJ, 1997-3-453; Juzg.
Fed. Nº 1 Córdoba, 3/3/99, LL, 1999-E-925; CNTrab., Sala III, 20/12/99, DJ, 2000-2-428
y DT, 2000-A-887.
(20) CNPenal Económico, Sala A, 10/7/98, DJ, 2000-1-59.
(21) Juzg. Fed. Nº 1 Córdoba, 3/3/99, LL, 1999-E-925; CNFed. Cont. Adm., Sala IV,
24/6/97, LL, 1998-D-173; CNTrab., Sala III, 20/12/99, DJ, 2000-2-428 y DT, 2000-A-887.
(22) Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., p. 14.
(23) CNCiv., Sala C, 7/11/83, LL, 1984-B-472 (36.616-S).
(24) Palacio, Lino E.: Derecho...cit., p. 1217; Palacio, Lino E.: Manual...cit., p. 272.
(25) Palacio, Lino E.: Manual...cit., p. 272; Palacio, Lino E.: Derecho...cit., p. 1217.
(26) CCiv. y Com. Santa Fe, Sala I, 19/10/93, Zeus, 56-206, Sec. Jurisprudencia.
(27) Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., pp. 15 y 31. En similar sentido: CNFed.
Cont. Adm., Sala II, 30/5/95, LL, 1996-C-54 y DJ, 1996-2-34
16
3. SU DIFERENCIA CON OTROS INSTITUTOS

PROCESALES: LOS PROCESOS “URGENTES” Y LA
MEDIDA “AUTOSATISFACTIVA”
a) Con los procesos “urgentes”

El legislador, ha establecido —para atender a la urgencia que ciertos
reclamos necesitan— procesos extremadamente acelerados en los que
se procura alcanzar la rápida satisfacción del derecho invocado, por lo
que se han contemplado en nuestra legislación determinados procesos
“urgentes”(28).
Respecto de los procesos urgentes —siguiendo a autorizada doc-
trina(29)— podemos decir que en ellos no se solicita ni se concede una
tutela anticipada, a diferencia de las medidas —o si se quiere procesos—
cautelares.
No hay pretensión posterior que deba ser resuelta, careciendo estos
procesos de instrumentalidad respecto de otro proceso o de otra peti-
ción(30).
Por ende, la resolución alcanzada en los procesos urgentes —tras
una evaluación profunda sobre la certeza del derecho que se aduce, y a
diferencia de las cautelares— obtiene el carácter de definitiva, por más
que luego pueda ser revisada en otros procesos.
Asimismo, no cabe igualar a estos procesos con las medidas —o pro-
cesos— cautelares, pues estas últimas se podrán interponer dentro de
aquellos(31).
A modo de ejemplo, Kielmanovich(32) cita a la medida de no innovar
que se interpone dentro de un amparo.
Por nuestra parte, podemos señalar a las cautelares que —en materia
de alimentos— se pueden interponer en una acción de amparo deduci-
(28) Kielmanovich, Jorge L.: Tutela...cit., p. 1030.

(29) Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., pp. 17-19; Kielmanovich, Jorge L.: Tute-
la...cit., p. 1030.
(30) Verdaguer, Alejandro C., y Rodríguez Prada, Laura: La ley 24.417 de protección
contra la violencia familiar como “proceso urgente”, JA, 1997-I-833.
(31) Kielmanovich, Jorge L.: Tutela...cit., p. 1030.
17
da para que el Estado —nacional, provincial o municipal— cumpla en

forma urgente con la responsabilidad que legalmente le compete.
No podemos negar que une a los procesos “urgentes” y a las medidas
cautelares la urgencia del reclamo y de su concesión.
Sin embargo, como ha sido expresado por la doctrina que venimos
siguiendo(33), en los primeros la tutela alcanzada será definitiva y allí se
agotará.
En tanto en las segundas dicha tutela será anticipada y provisional,
estando ligada a otro proceso del cual depende su existencia y su con-
tinuidad.
b) Con las medidas “autosatisfactivas”

Conforme nos ilustra Peyrano(34), estas medidas consisten en reque-
rimientos urgentes que se agotan con su despacho favorable(35), no sien-
do necesaria la iniciación de una ulterior acción principal(36) para evitar
su caducidad.
Por lo tanto, podemos observar la primera diferencia que tienen
con las medidas cautelares, atento a lo preceptuado en el art. 207 del
CPCCN.
Estas medidas tienen como objeto una tutela urgente, más no antici-
pada o cautelar, pues aquella se agota en forma definitiva y con autono-
mía respecto de otro proceso(37).
(33) Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., pp. 18-19 y 47.

(34) Peyrano; Jorge W.: La medida autosatisfactiva: Forma diferenciada de tutela
que constituye una expresión privilegiada del proceso urgente. Génesis y evolución, JA,
1998-III-652; Peyrano, Jorge W.: Una especie destacable del proceso urgente: la medida
autosatisfactiva, JA, 1999-III-829. En el mismo sentido: De los Santos, Mabel: Resolucio-
nes...cit., p. 800.
(35) CNCom., Sala B, 20/5/99, LL, 1999-E-751 (42.069-S); CCiv. y Com. 1ª Mar del
Plata, Sala II, 27/4/00, ED, 190-339, y Rep. LL, 2001-1419, sum. 97.
(36) Juz. Civ. y Com. N° 1 Pergamino, 27/9/98, LL Buenos Aires, 1998-1433.
(37) Peyrano, Jorge W.: Reformulación de la teoría de las medidas cautelares: Tutela
de urgencia. Medidas autosatisfactivas, JA, 1997-II-926; Peyrano; Jorge W.:Vademecum
de las medidas cautelares, JA, 1996-II-709 ; Peyrano; Jorge W.: La medida...cit., p. 829;
Pico I Junoy, Jean: De las medidas cautelares a las medidas autosatisfactivas: ¿Un avance
del derecho procesal?, JA, 2002-II-887; Ferreyra de De La Rua, Angelina: Medida...cit., p.
18
Por ello, lo que permite diferenciar a estas medidas de las cautelares,

es justamente los caracteres de instrumentalidad y provisionalidad de
que gozan las últimas y que se hallan ausentes en las primeras(38).
En el mismo sentido, el requisito de mera verosimilitud del derecho
que es propio de la admisibilidad de las medidas cautelares, no resulta
ser suficiente tratándose de las “autosatisfactivas”, pues éstas requieren
la comprobación de la certeza del derecho que les sirve de fundamen-
to(39).
Importante doctrina(40) agrega otra característica que las diferencia
de las cautelares: las medidas autosatisfactivas no es necesario que se
dicten “inaudita parte”(41), por lo cual, si el juez o tribunal lo deciden, se
correrá traslado de la petición a la otra parte.
También para la doctrina citada en párrafos anteriores(42), no será re-
quisito imprescindible para el que solicita una medida “autosatisfactiva”
prestar contracautela, a diferencia de lo que sucede con las cautelares.
Asimismo, se ha señalado —para diferenciar a las medidas caute-
lares de las “autosatisfactivas”— un requisito de admisibilidad que se
exige sólo a estas últimas: que con su concesión se evite un perjuicio
irreparable(43).
1296; Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., pp. 36-37; De los Santos, Mabel: Resolucio-
nes...cit., p. 800; JCiv. y Com. 1ª Nom. Rosario, 10/4/00, LL, 2000-C-766.
(38) Ponce, Carlos R.: Estudio...cit., p. 265; Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit.,
pp. 37-38; Ferreyra de De La Rua, Angelina: Medida...cit., p. 1296; De los Santos, Mabel:
Resoluciones...cit., p. 800; CCiv., Com., Lab. y Paz Curuzú Cuatiá, 13/5/99, LL Litoral,
2000-716.
(39) Ferreyra de De La Rua, Angelina: Medida...cit., p. 1296; Peyrano, Jorge W.: Re-
formulación...cit., p. 926; Peyrano; Jorge W.: Vademecum...cit., p. 709; Kielmanovich, Jor-
ge L.: Medidas...cit., p. 38; Ponce, Carlos R.: Estudio...cit., p. 265; De los Santos, Mabel:
Resoluciones...cit., p. 800; Pico I Junoy, Jean: De las medidas...cit., p. 887; CCiv., Com.,
Lab. y Paz Curuzú Cuatiá, 13/5/99, LL Litoral, 2000-716; JCiv. y Com. 1ª Nom. Rosario,
10/4/00, LL, 2000-C-766.
(40) Ponce, Carlos R.: Estudio...cit., p. 266.
(41) En contra: Peyrano; Jorge W.: Vademecum...cit., p. 709; CCiv., Com., Lab. y Paz
Curuzú Cuatiá, 13/5/99, LL Litoral, 2000-716; JCiv. y Com. 1ª Nom. Rosario, 10/4/00,
LL, 2000-C-766.
(42) Peyrano, Jorge W.: Reformulación...cit., p. 926; Peyrano; Jorge W.: Vademecum...
cit., p. 709; Ponce, Carlos R.: Estudio...cit., p. 266; De los Santos, Mabel: Resoluciones...
cit., p. 800.
(43) Juz. Civ. y Com. N° 1 Pergamino, 27/9/98, LL Buenos Aires, 1998-1433. En con-
tra, por entender que este requisito es el de peligro en la demora (aunque aumentado),
19
Una última diferencia consiste en que las medidas cautelares se en-

cuentran contempladas en nuestra legislación, mientras que las autosa-
tisfactivas —si bien, son reconocidas en general por la jurisprudencia(44)
y la doctrina— hasta el momento no han encontrado su recepción en
ese ámbito, lo cual no obsta a que, por ahora, —como acota con acierto
Peyrano(45)— su despacho se debe fundamentar en la medida cautelar
genérica del art. 232 del CPCCN.
4. MOMENTO EN QUE SE PUEDEN INTERPONER. FORMA

EN QUE SE INTERPONEN
Reza el art. 195 del CPCCN:
“Oportunidad y presupuesto. Las providencias caute-

lares podrán ser solicitadas antes o después de deducida
la demanda, a menos que de la ley resultare que ésta debe
entablarse previamente.
El escrito deberá expresar el derecho que se pretende
asegurar, la medida que se pide, la disposición de la ley en
que se funde y el cumplimiento de los requisitos que co-
rresponden, en particular, a la medida requerida”.
Del primer párrafo de la norma transcripta (al igual que lo establece

el art. 195 del CPCCBA), se deduce que las medidas cautelares podrán
solicitarse antes(46), en forma simultánea, o con posterioridad a la inter-
posición de la demanda.
En caso de que se deduzcan antes del proceso, habrá que tener en
cuenta lo establecido en el art. 207 del Código de rito nacional, como
asimismo, que surja del escrito en que se piden cuál es la acción a tute-
que se exige para la admisión de las medidas cautelares: Pico I Junoy, Jean: De las me-
didas...cit., p. 887; Gómez, Claudio D.: Una sensata contención al desborde del proceso
cautelar, LL, 2004-A-474.
(44) En contra de su adopción: JLab. 6ª Nom. Rosario, 24/12/97, LL Litoral, 2000-
929.
(45) Peyrano; Jorge W.: La medida...cit., p. 829.
(46) CNCom., Sala D, 5/9/97, LL, 1998-B-935, caso 12.623.
20
lar(47) (pues la traba de estas medidas está íntimamente vinculada con el

objeto de la litis(48)).
Algunas medidas cautelares no podrán deducirse con anterioridad
a la interposición de la demanda: la anotación de litis, la medida de no
innovar y la intervención judicial(49).
Por otra parte, las actuaciones referentes a las medidas cautelares
tramitarán por expediente separado, ya que deberán permanecer reser-
vadas hasta tanto se ejecuten esas medidas (conf. art. 197, párrafo 4º,
del Código de rito nacional).
En tal sentido, estas medidas se interpondrán en forma incidental,
“de modo que el escrito de inicio deberá bastarse a sí mismo, en parti-
cular a su contenido mediante el relato de los hechos y petición expresa
del derecho que se pretende asegurar”(50).
Si la interposición de la medida cautelar es posterior o contemporá-
nea a la demanda del proceso principal, deberá acompañarse la copia de
aquella, como así también la documentación que los vincule(51).
Asimismo, conforme lo establece el art 197 del CPCCN —lo mis-
mo que su homónimo del CPCCBA—, se agregarán a este expediente
incidental —que tramitará por separado— las copias de las pertinentes
actuaciones del principal.
En tanto, si se omitiere citar la norma legal en que se funda la pre-
tensión cautelar—conforme lo estipula la segunda parte del art. 195 del
CPCCN— o si su cita resulta ser errónea, entiende importante doctri-
na(52) que ello no da lugar a su rechazo en virtud del principio “iura novit
curia”.
(47) CNCiv., Sala C, 28/4/88, JA, 1988-IV-síntesis.

(48) CNCiv., Sala H, 31/3/97, LL, 1997-D-823 (39.598-S), y DJ, 1997-3-576.
(49) Ponce, Carlos R.: Estudio...cit., p. 248.
(50) Fenochietto, Carlos E.: Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, comen-
tado, anotado y concordado con los Códigos provinciales, 2da. ed. act. y ampl., Astrea,
Buenos Aires, 2001, tomo 1, p. 720.
(51) Fenochietto, Carlos E.: Código...cit., t. 1, p. 721.
(52) Martínez Botos, Raúl: Medidas...cit., p. 36.
21
Capítulo II
MEDIDAS CAUTELARES EN FAMILIA
1. SUS CARACTERÍSTICAS
Destacada doctrina(1) opina que, tratándose de procesos de familia,
las medidas cautelares adquieren un particular contorno en lo que hace
a su admisibilidad y ejecución, como así también, a su procedencia sin
que sea imprescindible la prestación de una adecuada contracautela, y
a su no sujeción a los términos de caducidad que establece el art. 207
del CPCCN(2).
Se ha expresado(3) que, el apartarse de ciertos principios que go-
biernan a las medidas cautelares, se debe a que en los procesos de fami-
lia aquellas están regidas en forma prioritaria por la legislación de fon-
do y no por la de rito, lo que implica que no se aplican —salvo en forma
subsidiaria, ante la ausencia de normas específicas— las disposiciones
contenidas sobre estas medidas en los Códigos de rito.
En ese sentido, la mayoría de estas medidas —en cuanto al Derecho
de Familia se refieren— se hallan insertas en el Código Civil y Comercial
de la Nación (v. gr., arts. 721, 722 y 723 del CCCN) aunque, también, en
(1) Ferreyra de De La Rúa, Angelina: Medida...cit., p. 1297; Kielmanovich, Jorge L.:

Procesos...cit., pp. 34 y 36; Guahnon, Silvia V.: Medidas cautelares en los procesos de fa-
milia, JA, 2002-I-1053; Guahnon, Silvia V.: Peculiaridades de las medidas cautelares en
los procesos de familia, en Derecho de Familia. Revista Interdisciplinaria de Doctrina y
Jurisprudencia, Lexis Nexis/Abeledo-Perrot, Buenos Aires, 2004, N° 28, p. 65; Guahnon,
Silvia V.: Medidas cautelares en el juicio de alimentos. Alimentos provisorios, JA, 2005-
III-929; Ponce, Carlos R.: Estudio...cit., p. 333.
(2) CNCiv., Sala I, 26/12/97, ED, 178-169.
(3) Guahnon, Silvia V.: Medidas...cit., p. 1053; Guahnon, Silvia V.: Peculiarida-
des..., cit., p. 65.
63
leyes complementarias (como ser la Ley de Violencia Familiar nacional

24.417 o sus similares de las distintas provincias de nuestro país).
Respecto de las medidas cautelares en los procesos de familia, se ha
dicho(4):
“Las medidas cautelares familiares no se hallan supe-

ditadas a la acreditación de la verosimilitud del derecho
con el alcance que se le asigna en las medidas cautelares
de orden patrimonial”.
“Basta la comprobación de ciertas circunstancias de-
mostrativas por sí mismas de la situación que se tiende a
proteger, para acceder a la protección que se solicita, como
así también el peligro en la demora no siempre debe ser es-
trictamente acreditado o verificado por los jueces pues por
regla general surge de la propia naturaleza de la situación
que se tiende a proteger”.
“Las medidas cautelares familiares que tienden a la
protección de la salud f ísica o moral de los involucrados,
se manifiestan como instrumentos con perfiles propios
que escapan de las pautas del derecho procesal dispositi-
vo dirigidas a la protección del patrimonio. Con la cautelar
innominada que establece el art. 232, CPCC de la Provincia
de Buenos Aires, estas cautelares de familia adquieren un
perfil propio que se refleja en sus condiciones de proceden-
cia, trámite y la posibilidad de que sean ordenadas de oficio”.
“Las medidas cautelares familiares se dictan con los
elementos que en principio surgen de la causa y que re-
sultan esencialmente variables, no resultando necesaria
la prueba plena de la existencia de un derecho o de una
circunstancias de hecho, sino su mera acreditación o apa-
riencia de que éste exista. En autos, se rechaza el recurso
de apelación y se confirma la decisión de primera instancia
que dispuso la restricción de acercamiento de la madre y
demás integrantes de la familia biológica, respecto de sus
tres hijos menores que fueron institucionalizados. Si bien
(4) CApel. Civ. y Com., Sala III, Mar del Plata, 8/10/13.
64
cap. ii. medidas cautelares en familia
asiste razón a la apelante en cuanto a que la medida, en

los términos en que fue dictada, resulta incompatible con
la normativa de la Ley 12569 de Violencia Familiar de la
Provincia de Buenos Aires, puesto que no establece un
límite temporal ni explica situación de “violencia” que la
justifique, la medida se mantiene con carácter de medida
cautelar genérica (arts. 232, 853 y cc., CPCC de la Provin-
cia de Buenos Aires). En este estadio procesal y en grado
de apariencia, se encuentra acreditada suficientemente la
verosimilitud del derecho como así también el peligro en
la demora para mantener la medida de restricción. En rela-
ción al agravio referido al plazo de duración de la cautelar,
atento a la variación de la normativa por la cual se la con-
firma (art. 232), se aclara que la recurrente podrá solicitar
la modificación de la cautela en cualquier oportunidad del
proceso (parte 2, art. 203, CPCC de la Provincia de Buenos
Aires), si aportase nuevos elementos de juicio (informes
de los profesionales intervinientes acerca del sostenimiento
de una terapia individual, etc.) que revelen cambios sustan-
ciales en cuanto a las posibilidades de que la progenitora
se acerque a los menores sin poner en riesgo la evolución
favorable que han experimentado a partir del momento en
que aquella dejó de irrumpir en el entorno de contención,
afecto y cuidado que los niños lograron hasta el momento”.
En consecuencia, las medidas cautelares en los procedimientos de

familia tienen características especiales, que las diferencian con las in-
terpuestas en otro tipo de procedimiento, a saber:
a) Inaplicabilidad de los plazos legales de caducidad

No procede computar el plazo de caducidad del art. 207 del Código
de rito(5) —10 días desde que se trabó la medida—, pues la legislación de
(5) Ponce, Carlos R.: Estudio...cit., p. 333; Ferreyra de De La Rúa, Angelina: Medida...
cit., p. 1297.
65
fondo no lo contempla, por lo que no puede la legislación de rito —de

jerarquía inferior—restringir derechos cuando la ley de fondo nada dice
al respecto(6).
Además, el instituto de la caducidad es inaplicable por analogía a un
caso no contemplado específicamente(7).
No obstante lo expresado, el juez puede fijar un plazo para la presen-
tación de la demanda, con expreso apercibimiento de disponerse el in-
mediato levantamiento de la medida cautelar en caso de incumplimien-
to, como lo señalan —con acierto— Kielmanovich(8) y Guahnon(9).
Es que, no sería lógico mantener indefinidamente los alimentos pro-
visorios o provisionales, como los denomina indistintamente el nuevo
Código, fijados sin que se inicie el juicio respectivo, o mantener de la
misma forma una inhibición general de bienes preventiva inmovilizan-
do de esa manera por tiempo indeterminado el patrimonio del afecta-
do(10).
b) Improcedencia de la contracautela
En las medidas cautelares solicitadas en los procesos de familia no es
necesario que se preste contracautela juratoria, real o personal(11), pues
(6) Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., pp. 70, 79 y 139; Guahnon, Silvia V.: Me-
didas...cit., p. 931; Guahnon, Silvia V.: Peculiaridades...cit., p. 70; Guahnon, Silvia V.:
Medidas...cit., p. 1055.
(7) CNCiv., Sala I, 7/11/00, JA, 2001-III-519, y Rep. LL, 2003-1427, sum. 244; ídem,
Sala G, 3/7/00, LL, 2001-B-110, y DJ, 2001-2-53; Martínez Botos, Raúl: Medidas...cit., p.
85; Fenochietto, Carlos E.: Código...cit., p. 744; Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., p.
104.
(8) Kielmanovich, Jorge L.: Procesos...cit., p. 38; Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...
cit., pp. 28, 70, 139 y 145; Kielmanovich, Jorge L.: Tutela..., cit., p. 1030.
(9) Guahnon, Silvia V.: Medidas...cit., p. 931.
(10) Guahnon, Silvia V.: Medidas...cit., p. 1055; Guahnon, Silvia V.: Peculiaridades...
cit., p. 71.
(11) Arazi, Roland: Derecho Procesal Civil y Comercial, Rubinzal-Culzoni, Buenos
Aires, 1999, t. II, p. 320; Novellino, Norberto J.: Los alimentos y su cobro judicial, Nova
Tesis, Rosario, 2002, p. 306; Ponce, Carlos R.: Estudio...cit., p. 333; Kielmanovich, Jorge
L.: Procesos...cit., p. 36; Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., p. 137; Ferreyra de De La
Rúa, Angelina: Medida...cit., p. 1297; Guahnon, Silvia V.: Medidas...cit., p. 930.
66
la ley de fondo (el CCCN) no lo contempla(12) siendo —por lo tanto—

suficiente, para que estas medidas sean admitidas, la acreditación del
peligro en la demora(13).
Al respecto, nos ejemplifica ello Fenochietto(14) al expresar que tan-
to la jurisprudencia(15) como la doctrina(16) vienen excepcionando de
este requisito al cónyuge que con la demanda de divorcio peticiona me-
didas precautorias sobre los bienes gananciales.
En materia de alimentos, esta característica se hace aún más visi-
ble, pues el art. 547 del Código Civil y Comercial de la Nación estipula
que el beneficiario de la prestación alimentaria no debe dar, para recibir
aquella, fianza o caución alguna.
c) Atenuación de los requisitos de verosimilitud del derecho

y peligro en la demora
Si bien hemos visto, con anterioridad, que estos requisitos de admisi-
bilidad de las medidas cautelares no requieren de una prueba fehacien-
te, sino que basta la comprobación sumaria de aquellos, tratándose de
los procesos de familia su acreditación se encuentra aún más atenuada.
En ese sentido, destacada doctrina(17) expresa que la verosimilitud
del derecho en las medidas cautelares que se soliciten en los procesos
de familia, surge —en la mayoría de los casos— de la propia naturaleza
de la petición, por lo que se presume dicho requisito de admisión con la
sola acreditación del vínculo.
(12) CNCiv., Sala H, 9/5/96, LL, 1996-E-288, y DJ, 1996-2-1295; Guahnon, Silvia V.:
Medidas...cit., p. 930.
(13) Ferreyra de De La Rúa, Angelina: Medida...cit., p. 1297; Guahnon, Silvia V.: Me-
didas...cit., p. 1054.
(14) Fenochietto, Carlos E.: Código...cit., pp. 732-733.
(15) CNCiv., Sala A, 19/10/78, ED, 84-409; ídem, Sala B, 27/6/94, LL, 1994-E-419.
(16) Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., p. 124; Martínez Botos, Raúl: Medidas...
cit., p. 53.
(17) Ferreyra de De La Rúa, Angelina: Medida...cit., p. 1297; Guahnon, Silvia V.: Pe-
culiaridades...cit., p. 68.
67
En congruencia con ello, la jurisprudencia(18) ha dicho que “en los

procesos de familia las medidas cautelares no se hallan supeditadas al
acreditamiento de la verosimilitud del derecho con el alcance que se le
asigna en las de orden patrimonial”.
Así, en virtud del art. 722 del CCCN, la verosimilitud del derecho en
el caso de las medidas provisionales (cautelares) solicitadas en el juicio
de divorcio o nulidad de matrimonio —respecto de los bienes—, en-
seña Fenochietto(19) y la jurisprudencia(20) que se ocupó del tema, que
aquella se encontraría cumplida con la presentación de la partida de
matrimonio.
En cuanto al peligro en la demora, se estima que este requisito sur-
ge de la urgencia de las propias circunstancias fácticas del planteo(21)
(v. gr., alimentos provisorios(22)), aunque su demostración resulta ser
necesaria cuando las medidas precautorias se solicitan antes de la inter-
posición de la demanda(23).
d) ¿Se decretan inaudita parte?

En este punto comienzan las discusiones doctrinarias, en cuanto a
si las medidas cautelares en familia se decretan inaudita parte, es decir
sin dar traslado a la parte contraria —a la cual afecta esa medida— antes
de ejecutarla por parte del órgano judicial, como se lo hace con las me-
didas cautelares en general o si en materia de familia se deberá de dar
traslado de tal medida.
El fundamento de no dar traslado a la contraria de las medidas cau-
telares en general, es que si se diera podría afectarse la efectividad de
esa medida.
(18) CNCiv., Sala M, 8/5/7, Derecho de Familia Revista Interdisciplinaria de Doc-

trina y Jurisprudencia, Lexis Nexis/Abeledo-Perrot, Buenos Aires, 2008, N° 39, p. 161.
(19) Fenochietto, Carlos E.: Código...cit., p. 733.
(20) CNCiv., Sala E, 9/3/94, LL, 1995-C-683, caso 10.347; ídem, Sala K, 29/11/01,
DJ, 2001-3-1180.
(21) CNCiv., Sala K, 29/11/01, DJ, 2001-3-1180.
(22) Guahnon, Silvia V.: Peculiaridades...cit., p. 68.
(23) Ferreyra de De La Rúa, Angelina: Medida...cit., p. 1297.
68
Ello, es lo que sucedería con el interventor judicial informante que,

por su propia naturaleza, requiere que la medida quede reservada en la
secretaría del juzgado o tribunal hasta tanto sea ejecutada.
En materia de alimentos, siempre hemos propugnado que la medida
cautelar goce de este carácter cuando se trate de los alimentos debidos
a los niños, niñas y adolescentes, por la urgencia con que se reclaman
estos alimentos para aquellos, debido a su constante desarrollo y a la
imposibilidad —en la inmensa mayoría de los casos—de procurarse los
alimentos por sí mismos.
Sin embargo, un sector de la doctrina opina que siempre deberá
darse traslado a la parte contraria sobre la que va a recaer la medida
tratándose de cuestiones de familia, pues ello hace al debido proceso
y, fundamentalmente a su derecho constitucional de defensa en juicio.
Consideramos que, como bien lo señala Guahnon(24), este derecho
de defensa no se halla suprimido sino —meramente— postergado hasta
el momento en que la medida cautelar se haga efectiva.
Asimismo, la persona sobre quien recae la medida cautelar tendrá los
remedios legales que los Códigos de rito le proporcionan (v. gr., la acción
por daños y perjuicios del art. 208 de Código Procesal Civil y Comercial
de la Nación) cuando la medida haya sido mal admitida y trabada.
e) Pueden ser decretadas de oficio en algunos procesos

Como se señalará al analizar, más en profundidad, los arts. 721, 722
y 723 del CCCN en los próximos Capítulos, en el caso de que el juez
decida decretar una de las medidas provisionales (cautelares) que se
enumeran en tales normas, aquellas podrán ser efectivizadas de oficio,
es decir, sin petición de parte.
Dicho ello, cabe aclarar dos cuestiones.
La primera es que el juez tiene la facultad de decretarlas de oficio,
pero no la obligación de hacerlo aunque se trate de asuntos que incum-
ban a los intereses de la parte más desprotegida, como ser los niños,
niñas y adolescentes.
(24) Guahnon, Silvia V.: Medidas cautelares y provisionales en los procesos de fami-
lia, La Rocca, Buenos Aires, 2016, p. 127.
69
La otra cuestión es que tal facultad deviene del principio de oficiosi-

dad regulado en el art. 709 del CCCN.
2. LAS MEDIDAS CAUTELARES EN FAMILIA EN EL

CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL DE LA NACIÓN
a) Medidas provisionales relativas a las personas en el di-

vorcio y en la nulidad de matrimonio
Establece el art. 721 del Código Civil y Comercial de la Nación:
“Deducida la acción de nulidad o de divorcio, o antes

en caso de urgencia, el juez puede tomar las medidas pro-
visionales necesarias para regular las relaciones persona-
les entre los cónyuges y los hijos durante el proceso.
Puede especialmente:
a) determinar, teniendo en cuenta el interés familiar,
cuál de los cónyuges ha de continuar en el uso de la vivien-
da familiar y, previo inventario, qué bienes retira el cónyu-
ge que deja el inmueble;
b) si corresponde, establecer la renta por el uso exclusi-
vo de la vivienda por parte de uno de los cónyuges;
c) ordenar la entrega de los objetos de uso personal;
d) disponer un régimen de alimentos y ejercicio y cui-
dado de los hijos conforme con lo establecido en el Título
VII de este Libro;
e) determinar los alimentos que solicite el cónyuge te-
niendo en cuenta las pautas establecidas en el artículo 433”.
Para especializada doctrina(25) las medidas que enumera el art. 721

del CCCN no son medidas cautelares típicas sino que, en realidad, se
trata de tutelas provisionales anticipadas.
(25) De los Santos, Mabel: La medidas provisionales de los procesos de familia en el

Proyecto de Código Civil y Comercial Unificado, en: Proyecto de Código Civil y Comer-
70
Una de las cuestiones más urgentes al comenzar a tramitarse el pro-

ceso de divorcio es la que señala el inc. a) del art. 721 del CCCN: cuál de
los cónyuges ha de continuar en el uso de la vivienda familiar, teniendo
en cuenta el interés familiar.
Dada la urgencia con que se deberá tomar una decisión al respecto,
ello justifica que se la tramite como una medida cautelar.
El principal parámetro para adjudicar la continuación en el uso de la
vivienda familiar a uno de los cónyuges, será atender a la convivencia de
ese cónyuge con los hijos del matrimonio.
Si no hubiere hijos, habrá que tener en consideración la salud de
cada cónyuge, la capacitación laboral y los ingresos con que cada uno
de ellos cuenta.
Esta atribución de la vivienda, en principio, deberá decretarse —por
parte del juez o tribunal— una vez deducida la acción de divorcio, pero
—también— se podrá conceder antes en caso de urgencia.
Lo mismo puede decirse para las restantes medidas cautelares que
faculta a adoptar el art. 721 del CCCN, a saber: régimen de alimentos y
cuidado de los hijos y los alimentos que solicite el cónyuge (teniendo en
cuenta las pautas establecidas en el artículo 433 del CCCN).
El inc. d) del art. 721 del CCCN permite que el juez fije de oficio los
alimentos provisionales cuando se trate de un hijo menor de edad, algo
a lo que no se hallaba facultado hasta el 01/08/15.
Es que, con anterioridad a la nueva legislación, sólo podía fijar esos
alimentos a instancias de la petición expresa del representante legal de
ese menor de edad.
Coincidimos con doctrina especializada(26) en que las medidas que
enumera el art. 721 del CCCN pueden ser impuestas de oficio por el
juez, conforme a la redacción del texto de esta norma.
Por otra parte, el art. 723 del CCCN dice que este art. 721 es aplica-
ble a las uniones convivenciales, en cuanto sea pertinente.
Es importante lo que establece este art. 723 del CCCN, ya que signi-
fica, en este punto, equiparar las medidas provisionales sobre las perso-
nas y los bienes en las uniones matrimoniales y en las convivienciales.
cial. Aspectos procesales, Rubinzal Culzoni, Santa Fe, 2013, Revista de Derecho Procesal,
N° 2013-1, pp. 173-194; Guahnon, Silvia V.: Medidas...cit., p. 105.
(26) De los Santos, Mabel: La medidas...cit., p. 184.
71
Equiparación que el Código Civil y Comercial de la Nación no efec-

túa en otras cuestiones, salvo en lo que se refiere a compensaciones
económicas (si bien, con una diferencia en la vigencia de éstas, una vez
que han sido fijadas).
b) Medidas provisionales relativas a los bienes en el divor-

cio y en la nulidad de matrimonio
En tanto, con relación a los bienes, el art. 722 del nuevo Código Civil
y Comercial de la Nación establece:
“Deducida la acción de nulidad o de divorcio, o antes en

caso de urgencia, a pedido de parte, el juez debe disponer
las medidas de seguridad para evitar que la administración
o disposición de los bienes por uno de los cónyuges pueda
poner en peligro, hacer inciertos o defraudar los derechos
patrimoniales del otro, cualquiera sea el régimen patrimo-
nial matrimonial.
También puede ordenar las medidas tendientes a indi-
vidualizar la existencia de bienes o derechos de los que los
cónyuges fuesen titulares.
La decisión que acoge estas medidas debe establecer
un plazo de duración”.
El texto de este art. 722 del Código Civil y Comercial ha variado

muy poco con relación al art. 233 del Código Civil derogado a partir del
01/08/15.
Lo mismo que en el art. 233 de la anterior legislación, en el art. 722
del nuevo Código aparece el requisito de la urgencia, más no el de la
verosimilitud del reclamo cautelar.
Esto último, como bien nos ilustra el profesor Falcón(27) se debe a
que ello está ínsito en tal reclamo.
(27) Falcón, Enrique M.: Las medidas cautelares y diligencias preliminares sobre
bienes en el divorcio, en la nulidad de matrimonio y en las uniones convivenciales, en
Procesos de familia, Rubinzal Culzoni, Santa Fe, 2015, Revista de Derecho Procesal N°
2015-2, p. 297.
72
Tampoco se exige la contracautela para hacer efectivas estas medi-

das, a diferencia de lo que establecen los Códigos de rito.
Es que, la propia legislación de fondo (el Código Civil y Comercial de
la Nación) no la exige en esta materia.
Al tratarse de verdaderas medidas cautelares, y en congruencia con
el art. 195 que las regula —en general— en el Código de rito nacional,
el art. 722 del CCCN faculta a solicitarlas al momento de interponer la
acción de nulidad o de divorcio, o antes de la interposición de la deman-
da en esos procesos.
Si bien en este último caso (que estas medidas se soliciten antes de la
interposición de la demanda en el proceso principal) el propio art. 722
del CCCN exige que ello será posible sólo en “caso de urgencia”.
Por lo cual, a tenor del propio texto la “urgencia” sólo se debería
demostrar cuando estas medidas se piden anticipadamente, pero no
cuando se solicitan en la demanda principal.
Siguiendo a Falcón(28) en este punto, consideramos que si no hay ur-
gencia en solicitar la medida (con basamento en el peligro en la demora)
ya sea antes o después de promovida la demanda en el proceso principal
(el de divorcio o nulidad matrimonial) no será necesaria esta medida.
Por ello no se comprende, y no se comparte, esta diferenciación que
hace (en cuanto a la acreditación de la “urgencia”) el art. 722 del CCCN,
en tanto la medida provisional se solicite antes, al momento, o con pos-
terioridad a la interposición de la demanda en el principal.
Por otra parte, no obstante que el propio art. 722 del CCCN faculta
a solicitar estas medidas provisionales “cualquiera sea el régimen patri-
monial matrimonial” su aplicación será, en la inmensa mayoría de los
casos, para aquellas uniones matrimoniales que conserven el régimen
de comunidad de bienes y, por lo general, sobre los bienes ganancia-
les(29).
Cabe subrayar que la última parte del art. 722 del CCCN limita la
decisión judicial que acoge estas medidas cautelares, en tanto se deberá
establecer un plazo de duración de las mismas.
Vencido este plazo, en principio, se procederá al levantamiento de
la medida si no se ha resuelto sobre el fondo de la cuestión, pudiendo el
(28) Falcón, Enrique M.: Las medidas...cit., p. 304.

(29) Azpiri, Jorge O.: Incidencias...cit., p. 72.
73
juez prorrogarlo si existen dilaciones atribuibles al obrar del demanda-

do o a las contingencias normales del proceso, pero no si obedecen a la
impericia o negligencia del propio beneficiario(30).
El establecimiento de este plazo es un acierto de la nueva legislación.
Viene a reafirmar el criterio por el cual se consideró que, aunque las
medidas cautelares en materia de familia no tuvieran que estar sujetas
al plazo de caducidad que establece el art. 207 del Código Procesal Civil
y Comercial de la Nación, no por ello podían tener una duración tem-
poral ilimitada (pudiendo dar lugar a un ejercicio abusivo), sino que el
juez debería fijar un plazo de validez de esa medida (tal como lo hace el
art. 722 del CCCN que estamos analizando).
Siguiendo autorizada doctrina(31) las medidas que se podrán plas-
mar para hacer efectiva la protección de los bienes a que tiende el art.
722 del CCCN serán las siguientes:
1º) El embargo.
2º) La intervención judicial recaudadora.
3º) El secuestro.
4º) El depósito.
5º) La intervención judicial administradora.
6º) La inhibición general de bienes.
7º) La anotación de litis.
8º) La prohibición de innovar.
9º) La prohibición de contratar.
10º) El inventario.
11º) El avalúo.
12º) La intervención judicial informante.
13º) El pedido de informes a diversos Registros de la Propiedad.
14º) La medida cautelar genérica que puede disponer el juez.
En tanto, el art. 723 del CCCN dice que este art. 722, que hemos
analizado, es aplicable a las uniones convivenciales en cuanto sea per-
tinente.
(30) De los Santos, Mabel: La medidas...cit., p. 191.

(31) Falcón, Enrique M.: Las medidas...cit., pp. 306-320; Azpiri, Jorge O.: Inciden-
cias...cit., pp. 73-74.
74
Al respecto, el art. 723 del Código Civil y Comercial de la Nación

complementa las facultades que se conceden a las uniones convivencia-
les en los arts. 511 a 528 del mismo Código.
c) Medidas provisionales en la indivisión postcomunitaria

El art. 483 del CCCN determina medidas provisionales durante la
indivisión postcomunitaria.
Art. 483: “En caso de que se vean afectados sus intere-

ses, los partícipes pueden solicitar, además de las medidas
que prevean los procedimientos locales, las siguientes:
a) la autorización para realizar por sí solo un acto para
el que sería necesario el consentimiento del otro, si la ne-
gativa es injustificada;
b) su designación o la de un tercero como administra-
dor de la masa del otro; su desempeño se rige por las facul-
tades y obligaciones de la administración de la herencia”.
El enunciado del art. 483 del CCCN determina que —durante el pe-
ríodo de indivisión— cuando un cónyuge pueda ver afectado su interés
respecto de los bienes gananciales que le corresponderían, podrá a so-
licitar las medidas cautelares que prevean los Códigos de rito a fin de
inmovilizarlos e impedir la disposición por el cónyuge que los tenga
registrados a su nombre.
Es una protección que tiene el cónyuge que no es titular de un bien
ganancial para proteger esa ganancialidad y que el otro cónyuge no pue-
da disponer de ese bien.
d) Medidas cautelares relativas a los alimentos

El Código Civil y Comercial de la Nación se ocupa, de forma ex-
plícita, de las medidas cautelares en alimentos, algo que no hacen los
diferentes Códigos de rito locales. Es decir que en materia de medidas
cautelares en alimentos subsana la falencia que tienen los distintos Có-
digos procesales de las diversas jurisdicciones del país.
75
Al respecto, el art. 550 del CCCN permite la adopción de la traba de

medidas cautelares para asegurar el pago de alimentos definitivos (fija-
dos por sentencia o convenidos) e, inclusive, para asegurar alimentos
provisionales y futuros.
Muy explícitamente, determina este art. 550: “Puede disponerse la
traba de medidas cautelares para asegurar el pago de alimentos futuros,
provisionales, definitivos o convenidos. El obligado puede ofrecer en
sustitución otras garantías suficientes”.
En consecuencia, esta norma legal da por terminada la discusión
(jurisprudencial y doctrinaria) sobre la posibilidad de imponer medidas
cautelares sobre los alimentos provisorios y, lo más importante, sobre
las cuotas alimentarias futuras.
Al respecto, cabe señalar que la primera parte del art. 550 del nuevo
Código está tomada del texto del art. 628 del Proyecto de Código Civil
Unificado de 1998 (finalmente, no sancionado), que expresaba: “puede
disponerse la traba de medidas cautelares para asegurar el pago de ali-
mentos futuros, provisionales, definitivos o convenidos”.
Como hemos enunciado “ut supra”, la jurisprudencia en general —
con anterioridad a la entrada en vigencia del nuevo Código— tenía en-
tendido que, tratándose de estos alimentos futuros, determinadas me-
didas cautelares —las más gravosas— se deberán imponer con carácter
restrictivo, ya que serían procedentes siempre que se acreditaran cier-
tas circunstancias: incumplimientos anteriores reiterados(32), o temor
fundado a que no se cumpla con el pago de la cuota y que la misma no
pueda ser cobrada mediante la vía ejecutoria (v. gr., cuando se constate
o haya indicios suficientes, de que el alimentante se encuentra realizan-
do actos para insolventarse fraudulentamente o para reducir su patri-
monio, a fin de eludir el pago de la cuota(33)).
Este criterio restrictivo obedecía a que tales medidas precautorias
(embargo e inhibición preventiva, secuestro de bienes, e intervención
judicial recaudadora), son las que más restringen el poder de dispo-
(32) CNCiv, Sala B, 10/7/98, ED,187-701; CApel. Concepción del Uruguay, Sala Civ.
y Com., 16/5/89, DJ, 1990-1-379 y Rep. DJ, 1990-1996, p. 109, sum. 175.
(33) CNCiv., Sala G, 27/5/86, ED, 119-194; ídem, íd., 31/7/89, LL, 1989-E-529, DJ,
1991-1-761 y Rep. DJ, 1990-1996, p. 109, sum. 172; ídem, Sala B, 10/7/98, ED,187-701;
ídem, CNCiv., Sala F, 16/3/83, LL, 1983-C-146, Rep. ED, 20-A-214, sum. 363 y Rep. LL,
1983-158, sum. 116.
76
sición del demandado sobre sus bienes o, al menos, sobre una parte
sustancial de ellos.
El nuevo Código innova en cuanto a la posibilidad de imponer estas
medidas cautelares a los alimentos futuros.
Efectivamente, adviértase que el art. 550 del nuevo Código Civil y
Comercial no impone condición alguna para su aplicación.
En consecuencia, para la imposición de medidas cautelares sobre
cuotas futuras (es decir, aquellas que todavía no se han devengado) no
se requiere —a partir de la vigencia del nuevo Código— que se hayan
cumplido determinadas circunstancias como requisito previo a su apli-
cación (v. gr., reiterados incumplimientos de la cuota alimentaria, opor-
tunamente, fijada).
Por ende, se podrá solicitar y fijar un embargo o retención sobre el
sueldo, haberes, jubilación, pensión u otros ingresos regulares del ali-
mentante, sin que éste haya incumplido —con anterioridad— la cuota
alimentaria.
La aplicación práctica de lo que hemos enunciado en los últimos
párrafos es que quien interponga una demanda por la fijación de cuota
alimentaria podrá solicitar desde el inicio que se le embarguen o reten-
gan el sueldo, haberes, jubilación, pensión u otros ingresos regulares del
alimentante, desde el momento en que se ha fijado la cuota mediante
sentencia condenatoria.
77
Capítulo III
MEDIDAS CAUTELARES EN EL
RÉGIMEN PATRIMONIAL
1. UNIONES MATRIMONIALES
La finalidad de estas medidas cautelares en materia de régimen pa-
trimonial del matrimonio está dada por la protección de aquellos bienes
que conforman la masa ganancial, a repartir al momento de la liquida-
ción del régimen o el derecho a la recompensa que tenga uno de los
cónyuges sobre esa masa.
En consonancia con ello, se estableció(1):
“Las medidas precautorias que se dictan en el marco

de la disolución y liquidación de una sociedad conyugal
no tienden a asegurar cautelarmente la efectividad de una
eventual sentencia de condena por una determinada suma
de dinero, sino que -por el contrario- su objeto es procurar
la integridad del derecho propio y la mitad de los ganan-
ciales, cuyo reconocimiento proviene de la ley, aun cuando
se encuentre pendiente de determinación el quantum de
estos últimos.”
La jurisprudencia(2) es clara al respecto:
(1) CApel. Civ. y Com. Mar del Plata, Sala II, 29/4/03, Rubinzal Online – RC J
2631/04.
(2) CApel. Civ., Com. y Minería San Juan, Sala 1, 29/11/00, Rubinzal Online – RC
J 6382/07.
79
“Las medidas precautorias en el juicio de divorcio tien-

den a asegurar los derechos de los cónyuges, hasta tanto se
decida y efectivice la liquidación de la sociedad conyugal”
Cam Nac. Civil Sala G 27/02/89 Sumario Nº C0004526.
La amplitud y generosidad con que aparecen autorizadas
las medidas cautelares en juicios como el presente, con-
fieren al juez un amplio margen de apreciación, tanto al
momento de juzgar su procedencia como respecto a las
modalidades de su traba. Así pues a los efectos de la traba
de tales medidas, la verosimilitud del derecho queda acre-
ditada con la partida de matrimonio, por cuanto el “fumus
bonis iuris”, que constituye el primer requisito de aquellas,
emerge directamente de la ley de fondo en cuanto al peli-
gro en la demora, si la medida cautelar se solicita entabla-
da la demanda, no es necesario acreditarlo, ya que éste se
presume.”
Si bien, en principio, estas medidas están orientadas a gobernar en

el régimen de comunidad de bienes nada impide que sean aplicadas al
de separación de bienes(3).
a) Medidas protectorias en la etapa de la indivisión postco-

munitaria
El art. 483 del CCCN determina medidas protectorias durante la
indivisión postcomunitaria.
Dice este art. 483: “En caso de que se vean afectados sus intereses,
los partícipes pueden solicitar, además de las medidas que prevean los
procedimientos locales, las siguientes:
a) la autorización para realizar por sí solo un acto para el que sería
necesario el consentimiento del otro, si la negativa es injustificada;
b) su designación o la de un tercero como administrador de la masa
del otro; su desempeño se rige por las facultades y obligaciones de la
administración de la herencia”.
(3) Solari, Néstor: Derecho...cit., p. 218.
80
cap. iii: medidas cautelares en el régimen patrimonial
Es decir que, en caso de que se vean afectados sus intereses, los cón-
yuges pueden solicitar, además de las medidas que prevean los procedi-
mientos locales, las siguientes:
a) la autorización para realizar por sí solo un acto para el que sería
necesario el consentimiento del otro, si la negativa es injustificada;
b) su designación o la de un tercero como administrador de la masa
del otro; su desempeño se rige por las facultades y obligaciones de la
administración de la herencia”.
El enunciado del art. 483 del CCCN determina que —durante el pe-
ríodo de indivisión— cuando un cónyuge pueda ver afectado su interés
respecto de los bienes gananciales que le corresponderían, podrá a so-
licitar las medidas cautelares que prevean los Códigos de rito a fin de
inmovilizarlos e impedir la disposición por el cónyuge que los tenga
registrados a su nombre.
Es una protección que tiene el cónyuge que no es titular de un bien
ganancial para proteger esa ganancialidad y que el otro cónyuge no pue-
da disponer de ese bien.
b) Medidas provisionales ante la extinción del régimen,

cuando se tramita un proceso de divorcio o nulidad del
matrimonio
Uno de los cónyuges podrá solicitar las medidas provisionales que
establece el art. 722 del Código Civil y Comercial de la Nación para el
caso de divorcio o nulidad del matrimonio.
Al respecto, cabe recordar que, con relación a los bienes, el art. 722
del nuevo Código Civil y Comercial de la Nación establece:
“Deducida la acción de nulidad o de divorcio, o antes en

caso de urgencia, a pedido de parte, el juez debe disponer
las medidas de seguridad para evitar que la administración
o disposición de los bienes por uno de los cónyuges pueda
poner en peligro, hacer inciertos o defraudar los derechos
patrimoniales del otro, cualquiera sea el régimen patrimo-
nial matrimonial.
81
Capítulo V
MEDIDAS CAUTELARES EN
ALIMENTOS
1. MEDIDAS CAUTELARES EN ALIMENTOS: SUS

CARACTERÍSTICAS Y ADMISIBILIDAD
Las medidas cautelares que se solicitan en el juicio de alimentos tie-
nen características propias, sobre todo en lo que respecta a su admisibili-
dad cuando lo que se quiere asegurar es el cumplimiento de lo acordado
o de la sentencia que condena al pago de los alimentos. En consecuencia,
atento que el derecho a los alimentos podría verse frustrado si no se cum-
pliera con la prestación en forma voluntaria y el deudor se insolventara
durante el juicio, el deudor alimentario debe ser tratado como un deudor
común en cuanto a la aplicación de las medidas cautelares. Por lo tanto,
se podrán aplicar sobre los bienes o ingresos de aquél tanto el embargo
preventivo como otras medidas cautelares a que faculte el Código Proce-
sal, por cuanto de no ser así la decisión o convenio que impone su pago,
podría verse reducida a una simple declaración carente de virtualidad(1).
Además de participar de las particularidades de las medidas caute-
lares que se interponen en los procesos de familia, las que se solicitan
en el juicio de alimentos tienen características propias, sobre todo en la
que respecta a su admisibilidad, cuando lo que se quiere asegurar —du-
rante su trámite— es la ejecución forzada de la sentencia que condena
al pago de los alimentos, pues en tal caso se tratará de alimentos no de-
vengados (futuros) sobre los cuales no pesa una obligación cierta para
el demandado al momento de solicitarse la medida.
(1) CNCiv., Sala M, 3/9/15, Rubinzal Online – RC J 5969/15.
121
Lo mismo sucede con posterioridad a la sentencia condenatoria,

cuando lo que se pretende proteger —a través de medidas precautorias
que restringen la disposición de los bienes del demandado— son las
cuotas alimentarias futuras, o sea, aquellas que aún no se devengaron y
que —por lo tanto— no son todavía exigibles
Determinada doctrina(2) entendía que las medidas cautelares po-
dían ser aplicadas no sólo para asegurar los alimentos que se deben al
momento de la sentencia condenatoria(3) (v. gr., alimentos devengados
entre la interposición de la demanda y la sentencia, alimentos provi-
sorios atrasados), sino también para garantizar los alimentos futuros,
es decir, los que se devenguen con posterioridad, siempre que se den
determinadas circunstancias.
Las medidas cautelares que tienen por finalidad asegurar la ejecu-
ción forzada de la sentencia a dictarse —en cuanto atañen a los alimen-
tos que todavía no se han devengado— o, con posterioridad a aquella
sobre las cuotas alimentarias que —al momento de la solicitud de me-
didas que restringen la libertad de disposición de los bienes del alimen-
tante— aún no han vencido, eran concedidas con carácter restrictivo
por los jueces o tribunales.
Por lo cual, su admisión dependía de que se acreditara determinada
circunstancia fáctica que habilitara la petición (v. gr., cuando existía un
cierto riesgo de que el obligado enajenara sus bienes para eludir el pago
de la cuota alimentaria(4)).
En consecuencia, la jurisprudencia —en general— tenía entendi-
do que, tratándose de estos alimentos futuros, determinadas medidas
cautelares —las más gravosas— se deberán imponer con carácter res-
trictivo, ya que serían procedentes siempre que se acreditaran ciertas
circunstancias: incumplimientos anteriores reiterados(5), o temor fun-
dado a que no se cumpla con el pago de la cuota y que la misma no pue-
da ser cobrada mediante la vía ejecutoria (v. gr., cuando se constate o
(2) Lombardi, César A.: La prestación alimentaria: su protección, JA, 1991-II-684.

(3) CApel. Concepción del Uruguay, Sala Civ. y Com., 16/5/89, DJ, 1990-1-379 y Rep.
DJ, 1990-1996, p. 109, sum. 175.
(4) CNCiv., Sala F, 16/3/83, LL, 1983-C-146, Rep. LL, 1983-158, sum. 116 y Rep. ED,
20-A-214, sum. 363.
(5) CNCiv, Sala B, 10/7/98, ED,187-701; CApel. Concepción del Uruguay, Sala Civ. y
Com., 16/5/89, DJ, 1990-1-379 y Rep. DJ, 1990-1996, p. 109, sum. 175.
122
cap. v: medidas cautelares en alimentos
haya indicios suficientes, de que el alimentante se encuentra realizando

actos para insolventarse fraudulentamente o para reducir su patrimo-
nio, a fin de eludir el pago de la cuota(6)).
En cuanto a la aplicación de las medidas cautelares sobre los alimen-
tos ya devengados, si bien ninguna norma legal autorizaba la traba de
medidas cautelares —pues el art. 648 del CPCCN no contempla un su-
puesto de embargo preventivo sino ejecutorio— igualmente resultaban
viables en los términos del art. 195 del Código de rito nacional, siempre
que se acreditaran los extremos que tornaban procedentes esas medi-
das: verosimilitud del derecho y peligro en la demora.
Tales requisitos de admisibilidad, se desprendían —respectivamen-
te— del título en virtud del cual se los reclamaba y de las impostergables
necesidades que los alimentos tienden a cubrir(7).
Pero, tratándose de alimentos futuros, a esos extremos de admisibi-
lidad se le debía agregar algunas de las siguientes situaciones fácticas:
que existiere el riesgo de que el obligado enajenara sus bienes para elu-
dir el pago de las cuotas futuras(8), o cuando ante las reiteradas faltas
de cumplimiento del alimentante(9) cabía presumir que éste incumpli-
rá nuevamente(10).
También, autorizaba la interposición de esa clase de medidas por
alimentos futuros, el hecho de que el demandado —antes de que se fije
la cuota o con posterioridad— viajara al exterior con el propósito de
radicarse allí.
1983-158, sum. 116.
(8) CNCiv., Sala G, 27/5/86, LL, 1987-B-584 (37.577-S); ídem, Sala C, 23/4/93, JA,
1995-I-55; ídem, Sala F, 16/3/83, LL, 1983-C-146.
(9) CApel. Concepción del Uruguay, Sala Civ. y Com., 16/5/89, DJ, 1990-1-379.
(10) CNCiv, Sala B, 10/7/98, ED, 187-701; ídem, Sala C, 23/4/93, JA, 1995-I-55.
123
Así lo había entendido alguna jurisprudencia(11).

En la actualidad, el Código Civil y Comercial de la Nación se ocupa,
de forma explícita, de las medidas cautelares en alimentos.
Al respecto, el art. 550 del CCCN permite la adopción de la traba de
medidas cautelares para asegurar el pago de alimentos definitivos (fija-
dos por sentencia o convenidos) e, inclusive, para asegurar alimentos
provisionales y futuros.
Muy explícitamente, determina este art. 550: “Puede disponerse la
traba de medidas cautelares para asegurar el pago de alimentos futuros,
provisionales, definitivos o convenidos. El obligado puede ofrecer en
sustitución otras garantías suficientes”.
En consecuencia, esta norma legal da por terminada la discusión
(jurisprudencial y doctrinaria) sobre la posibilidad de imponer medidas
cautelares sobre los alimentos provisorios y, lo más importante, sobre
las cuotas alimentarias futuras.
Al respecto, cabe señalar que la primera parte del art. 550 del nuevo
Código está tomada del texto del art. 628 del Proyecto de Código Civil
Unificado de 1998 (finalmente, no sancionado), que expresaba: “puede
disponerse la traba de medidas cautelares para asegurar el pago de ali-
mentos futuros, provisionales, definitivos o convenidos”.
Como hemos enunciado “ut supra”, la jurisprudencia en general
—con anterioridad a la entrada en vigencia del nuevo Código— tenía
entendido que, tratándose de estos alimentos futuros, determinadas
medidas cautelares —las más gravosas— se deberán imponer con ca-
rácter restrictivo, ya que serían procedentes siempre que se acreditaran
ciertas circunstancias: incumplimientos anteriores reiterados(12), o te-
mor fundado a que no se cumpla con el pago de la cuota y que la mis-
ma no pueda ser cobrada mediante la vía ejecutoria (v. gr., cuando se
constate o haya indicios suficientes, de que el alimentante se encuentra
realizando actos para insolventarse fraudulentamente o para reducir su
patrimonio, a fin de eludir el pago de la cuota(13)).
(11) CNCiv., Sala G, 31/7/89, LL, 1989-E-528, y DJ, 1990-1-761.

(12) CNCiv, Sala B, 10/7/98, ED,187-701; CApel. Concepción del Uruguay, Sala Civ.
y Com., 16/5/89, DJ, 1990-1-379 y Rep. DJ, 1990-1996, p. 109, sum. 175.
124

El nuevo Código innova en cuanto a la posibilidad de imponer estas
medidas cautelares a los alimentos futuros.
Efectivamente, adviértase que el art. 550 del nuevo Código Civil y
Comercial no impone condición alguna para su aplicación.
En consecuencia, para la imposición de medidas cautelares sobre
cuotas futuras (es decir, aquellas que todavía no se han devengado) no
se requiere —a partir de la vigencia del nuevo Código— que se hayan
cumplido determinadas circunstancias como requisito previo a su apli-
cación (v. gr., reiterados incumplimientos de la cuota alimentaria, opor-
tunamente, fijada).
Por ende, se podrá solicitar y fijar un embargo o retención sobre el
sueldo, haberes, jubilación, pensión u otros ingresos regulares del ali-
mentante, sin que éste haya incumplido —con anterioridad— la cuota
alimentaria.
La aplicación práctica de lo que hemos enunciado en los últimos
párrafos es que quien interponga una demanda por la fijación de cuota
alimentaria podrá solicitar desde el inicio que se le embarguen o reten-
gan el sueldo, haberes, jubilación, pensión u otros ingresos regulares del
alimentante, desde el momento en que se fije la cuota mediante senten-
cia condenatoria.
En otro orden, las medidas cautelares que tienen por objeto mante-
ner una determinada situación fáctica, o la tutela de la integridad f ísica
de las personas y la satisfacción de sus necesidades más urgentes, tra-
tándose de lo que atañe a la prestación alimentaria son receptadas en
forma amplia por la jurisprudencia(14).
Ello es lo que ocurre, por ejemplo, con la designación de un inter-
ventor judicial informante (cuya misión será informar sobre el caudal
económico que posee el demandado, y/o cualquier modificación que se
1983-158, sum. 116.
125
pretenda efectuar sobre aquel durante el transcurso del proceso), o la

fijación de los alimentos provisionales como los denomina el nuevo Có-
digo, (en este caso, estando autorizada en forma específica su fijación
por la ley: arts. 544 y 721 incs. d y e del CCCN).
Asimismo, el criterio amplio deberá ser aplicado cuando se soliciten
medidas cautelares que, si restrinjan la disponibilidad de los bienes de-
mandado, lo hagan para asegurar el cobro de cuotas devengadas y no
abonadas al momento de dictarse la sentencia(15) (alimentos provisio-
nales impagos o cuotas suplementarias), exigiéndose en tales supuestos
—como ya lo hemos expresado— tan sólo la verosimilitud del derecho
y el peligro en la demora, que surgirán —respectivamente— del título
ejecutorio (la sentencia condenatoria) y de la propia naturaleza de la
prestación alimentaria.
2. ALIMENTOS PROVISIONALES
El nuevo Código Civil y Comercial denomina como alimentos “pro-
visionales” en su art. 544 a los que el Código anterior denominaba como
alimentos “provisorios” en su art. 375.
La finalidad de los alimentos provisionales es atender sin demoras
las necesidades más urgentes e impostergables(16) de aquel que los re-
clama, durante el lapso que demande el proceso(17).
Los alimentos provisionales tienen por objeto subvenir sin demoras
las necesidades de quien los solicita, ya que la espera hasta la finali-
(15) CNCiv., Sala K, 11/4/89, LL, 1989-E-94; ídem, Sala F, 24/11/88, LL, 1989-D-575
(38.109-S).
(16) CNCiv., Sala A, 17/12/84, LL, 1986-B-621 (37.247-S) y Rep. LL, 1986-116, sum.
25; ídem, Sala I, 23/5/00, LL, 2000-D-618; ídem, íd., 12/2/02, LL, 2002-D-213; ídem, Sala
D, 7/6/83, LL, 1984-A-103, ED, 117-298, sum. 289, Rep. ED, 20-A-210, sum. 321 y Rep.
LL, 1984-144, sum. 87; ídem, Sala E, 1/9/00, ED, 192-608.
(17) CNCiv., Sala I, 23/5/00, LL, 2000-D-618 y ED, 191-332; ídem, Sala A, 26/7/84,
LL, 1985-B-575, caso 5403 y Rep. LL, 1985-114, sum. 33; ídem, íd., 3/12/81, LL, 1982-A-
495 y Rep. LL 1982-143, sum. 41; íd., Sala G, 16/9/83, LL, 1984-C-637, caso 5244 y Rep.
LL, 1984-144, sum. 83; ídem, Sala C, 11/10/89, LL, 1990-A-354 y LL, 1995-D-854, sum.
118; ídem, íd., 20/6/83, ED, 117-298, sum. 286.; ídem, Sala K, 13/2/92, LL, 1993-B-463,
caso 8985; CCiv. y Com. San Isidro, Sala I, 3/7/90, DJ, 1991-1-42; CCiv., Com. y Minería
San Juan, Sala I, 9/10/01, LL Gran Cuyo, 2002-576.
126
zación del juicio, por breve que éste sea, puede privarla de los rubros
esenciales de su vida(18).
En concordancia con ello, un reciente fallo provincial(19) manifestó:
“La fijación de esta cuota obedece a una necesidad inmediata para la
supervivencia que no tolera la espera del trámite de todo el proceso por
los cánones corrientes. Por eso esta norma propone que la persona con
derecho a alimentos no sufra privaciones por la tardanza o la mala vo-
luntad del obligado. De esta manera se contempla un procedimiento de
urgencia, a fin de obtener la rápida satisfacción de la prestación. Aun-
que no hace referencia al trámite que debe seguirse, se lo ha ubicado
como una típica medida cautelar, despachada inaudita parte, tendien-
te a evitar el perjuicio a la persona necesitada de auxilio jurisdiccional
cuando el tiempo necesario para sustanciar la pretensión podría tornar
ilusorio su derecho”.
Estos alimentos podrán ser fijados de acuerdo a lo que a primera
vista(20) surja de las presentaciones efectuadas en el expediente y de los
elementos aportados al mismo(21).
La determinación de estos alimentos, no implica prejuzgamiento
sobre el fondo del asunto(22), pues los mismos tienen naturaleza cau-
telar(23).
En cuanto al monto a fijar por estos alimentos, en principio, la juris-
prudencia más numerosa determinó(24) que sólo debe cubrir los gastos
imprescindibles(25) de quien los reclama.
(18) CCiv., Com. y Familia, Río Cuarto, 13/2/07, LL Córdoba, 2007-437.

(19) Juzg. Familia N° 1 Tigre, 23/10/15 (Sentencia firme), elDial.com - AA92A6.
(20) CNCiv., Sala A, 17/12/84, LL, 1986-B-621 (37.247-S) y Rep. LL, 1986-116, sum.
22; ídem, Sala E, 17/2/93, LL, 1993-C-60 y DJ, 1993-2-155; ídem, Sala I, 23/5/00, ED,
191-332.
(21) CNCiv., Sala I, 12/2/02, LL, 2002-D-213.
(22) CApel. Concepción del Uruguay, Sala Civ. y Com., 22/4/94, JA, 2005-III-1459,
sum. 50.
(23) CNCiv., Sala F, 12/3/85, LL, 1985-E-395; ídem, íd., 27/2/79, LL, 1979-B-503.
(24) CNCiv., Sala F, 17/10/84, Rep. ED, 20-A-210, sum. 319; ídem, Sala A, 8/3/94, JA,
2005-III-1459, sum. 49; ídem, íd., 6/11/90, LL, 1992-D-641, caso 8170, y ED, 140-645;
ídem, Sala D, 7/6/83, Rep. ED, 20-A-210, sum. 321; ídem, Sala C, 20/6/83, Rep. ED, 20-
A-210, sum. 323; CApel. Concepción del Uruguay, Sala Civ. y Com., 22/4/94, JA, 2005-
III-1459, sum. 50.
(25) CNCiv., Sala F, 12/8/85, LL, 1996-C-190 y Rep. LL, 1986-116, sum. 21; ídem, Sala
A, 26/7/84, LL, 1985-B-575, caso 5403 y Rep. LL, 1985-114, sum. 33; ídem, íd., 3/12/81,
127
En este mismo orden, se decidió(26) que los alimentos provisiona-

les deben cubrir las necesidades imprescindibles de los beneficiarios
y su cuantía depende de la valoración de los elementos de juicio in-
corporados al momento de su determinación, hasta tanto se llegue a
la sentencia definitiva, oportunidad en que cesan —o se transforman
en definitivos— por haberse cumplido la condición a la que estaban
subordinados.
Asimismo, se estableció(27) que el “quantum” de la cuota provisional
debe fijarse en una suma que permita afrontar los gastos imprescindi-
bles durante el breve lapso del proceso, teniendo en cuenta la prueba
aportada, las necesidades de quien los demanda y las posibilidades del
demandado, sin perjuicio de su justa valoración al dictarse el pronun-
ciamiento definitivo.
a) Momento en el que se pueden solicitar

El art. 544 del nuevo Código contempla los alimentos provisionales,
y reitera lo preceptuado en la segunda parte del art. 375 del anterior
Código Civil que se refiere a los alimentos provisorios.
Dice el art. 544 del CCCN: “Desde el principio de la causa o en el
transcurso de ella, el juez puede decretar la prestación de alimentos
provisionales, y también las expensas del pleito, si se justifica la falta de
medios”.
Por ello, un reciente fallo provincial(28) estableció: “El art. 544 del
Código Civil y Comercial regula que desde el principio de la causa, o en
el transcurso de ella, el Juez, puede decretar la prestación de alimentos
provisionales”.
LL, 1982-A-495 y Rep. LL, 1982-143, sum. 41; ídem, íd., 27/10/87, ED, 128-337; ídem,
íd., 22/10/90, ED, 140-328; ídem, Sala E, 18/10/82, LL, 1983-C-602 (36.408-S) y Rep.
LL, 1983-150, sum. 42; ídem, íd, 17/11/82, Rep. ED, 17-128, sum. 333; ídem, íd., 1/9/00,
ED, 192-608; ídem, Sala C, 2/6/82, Rep. ED, 20-A-210, sum. 320; ídem, íd., 11/10/89, LL,
1990-A-354 y LL, 1995-D-854, sum. 118; TCol. Familia Rosario N° 5, 3/5/96, JA, 1998-
IV-47, sum. 53.; Méndez Costa, María J.: Visión jurisprudencial de los alimentos, Ru-
binzal-Culzoni, Santa Fe, 2000, p. 66; Novellino, Norberto J.: Los alimentos...cit., p. 304.
(26) CNCiv., Sala C, 24/2/04, LL, 2004-E-281.
(27) CNCiv., Sala A, 8/3/94, JA, 2005-III-1459, sum. 49.
(28) Juzg. Familia N° 1 Tigre, 23/10/15 (Sentencia firme), elDial.com - AA92A6.
128
El texto del art. 544 adolece de la misma falla del art. 375 del an-
terior Código Civil: no contempla la posibilidad de solicitar este tipo
de alimentos antes de interponer la acción principal (v. gr., juicio de
alimentos o de divorcio).
No obstante, considerando que estos alimentos provisionales se en-
cuadran dentro de las medidas cautelares genéricas que contempla el
Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, es de aplicación el art.
195 de ese Código de rito y, por lo tanto, este tipo de alimentos podrán
solicitarse antes del principio de la causa.
Recordemos que el art. 195 del CPCCN, en su parte pertinente, dice:
“Las providencias cautelares podrán ser solicitadas antes o después de
deducida la demanda, a menos que de la ley resultare que ésta debe
entablarse previamente”.
b) Posibilidad de que el juez los imponga de oficio

Esta es otra de las novedades de este nuevo Código: la posibilidad de
que el juez pueda imponer de oficio una cuota de alimentos provisoria,
siempre que las circunstancias fácticas así lo aconsejen.
Asimismo, es otra de las normas que, en materia de alimentos, deja
su aplicación al arbitrio del juez
El art. 544 del nuevo Código faculta al juez a imponer una cuota
provisoria (cuando haya motivos para ello) pero no lo obliga, como hace
alguna legislación extranjera.
En ese sentido, el art. 5° de la ley 19.741 de Chile establece que el
juez “deberá decretar los alimentos provisorios que correspondan, una
vez transcurrido el término de diez días contados desde la fecha de la
notificación de la demanda”.
Vemos con sumo agrado esta innovación legislativa (y ya la había-
mos propuesto hace algunos años) pues, tratándose de menores de
edad en que sus necesidades alimentarias no pueden esperar —por lo
general— a la terminación de un proceso, en la práctica observamos
que, muchas veces, la representante legal de aquellos no insta judi-
cialmente a la fijación de una cuota alimentaria con la cual solventar,
aunque sea, las necesidades más básicas e imprescindibles de esos me-
nores.
129
Esta innovación que impone la nueva legislación en cuanto a que el

juez o tribunal puedan imponer los alimentos provisionales de oficio,
deriva de los arts. 544 y 721 incs. d y e del CCCN.
c) Características y requisitos de los alimentos provisionales

Recientemente, se sentenció(29) respecto de estos alimentos:
“En el instituto de los alimentos provisorios subyace

una medida cautelar anticipatoria porque brindan a quien
se encuentra necesitado de obtener los medios de subsis-
tencia, un anticipo de jurisdicción que le permite acceder
a lo imprescindible para la vida en tiempo oportuno, sin
las dilaciones que es de esperar ocurran mientras se susci-
ta el debate de la cuota definitiva. Específicamente el art.
586, Código Civil y Comercial, contempla que durante el
proceso de reclamación de la filiación o incluso antes de
su inicio, el juez puede fijar alimentos provisorios contra
el presunto progenitor, de conformidad a lo establecido en
el Título VII del Libro Segundo. Así las cosas, el planteo
del alimentante recurrente, según el cual, la fijación de una
cuota del tipo no era procedente por la ausencia de firme-
za de la sentencia declarativa de filiación, es desacertado y
prescindente de dicho aval normativo.”
Se determinó(30) que, aún, cuando se hayan desestimado —por parte

del órgano judicial— los alimentos provisionales, esa circunstancia no
obsta a la procedencia de un nuevo reclamo, siempre que se funde en
situaciones diferentes a las invocadas con anterioridad y que exista de-
mora en el dictado de la sentencia del proceso principal.
Se estableció(31) que, en virtud de la finalidad de la cuota provisoria
—satisfacción de necesidades actuales y urgentes e imprescindibles—
(29) CApel. Civ. y Com. Gualeguaychú, Sala I, 27/9/17, Rubinzal Online – RC J

406/18.
(30) CNCiv., Sala C, 24/3/81, LL, 1981-C-458 y Rep. LL, 1981-184, sum. 47.
(31) CNCiv., Sala E, 17/11/82, Rep. ED, 17-128, sum. 334.
130
ÍNDICE GENERAL
Cómo instalar y usar el CD-ROM......................................................... 7

Palabras preliminares............................................................................... 11
Capítulo I
INTRODUCCIÓN A LAS MEDIDAS CAUTELARES
1. Concepto y denominación.................................................................. 13
2. Finalidad................................................................................................. 15
3. Su diferencia con otros institutos procesales: los procesos
“urgentes” y la medida “autosatisfactiva”........................................ 17
a) Con los procesos “urgentes”......................................................... 17
b) Con las medidas “autosatisfactivas”............................................ 18
4. Momento en que se pueden interponer. Forma en que se in-
terponen................................................................................................ 20
5. Sus características................................................................................. 22
a) Se diferencian de la pretensión de fondo................................... 22
b) Son instrumentales........................................................................ 24
c) Son provisionales............................................................................ 26
d) Son mutables, flexibles o modificables...................................... 29
e) Se disponen “inaudita parte”........................................................ 33
f ) Están sujetas al plazo de caducidad............................................. 38
g) No requieren mediación en forma previa a su interposi-
ción................................................................................................... 40
6. Requisitos para su admisión............................................................... 41
a) Verosimilitud del derecho............................................................. 41
b) Peligro en la demora...................................................................... 45
c) Contracautela.................................................................................. 47
1) Contracautela real.................................................................... 51
2) Contracautela personal............................................................ 51
3) Contracautela juratoria........................................................... 52
417
7. Criterios jurisprudenciales en cuanto a su admisión.................... 53

8. Competencia.......................................................................................... 55
9. Clasificación........................................................................................... 57
a) Las que tienen por objeto tutelar la integridad f ísica de las
personas y sus necesidades más urgentes................................ 58
b) Las que tienden a la comprobación del caudal económico
que posee una persona y a su preservación............................. 60
c) Las que tienden a asegurar la ejecución forzada de una
sentencia......................................................................................... 60
d) Las que tienden a dar publicidad a un litigio............................ 60
10. Las medidas cautelares en el nuevo Código Civil y Comercial
de la Nación.......................................................................................... 60
Capítulo II
MEDIDAS CAUTELARES EN FAMILIA
a) Inaplicabilidad de los plazos legales de caducidad................... 65
b) Improcedencia de la contracautela............................................. 66
c) Atenuación de los requisitos de verosimilitud del derecho y
peligro en la demora..................................................................... 67
d) ¿Se decretan inaudita parte?........................................................ 68
e) Pueden ser decretadas de oficio en algunos procesos............. 69
2. Las medidas cautelares en familia en el Código Civil y Comer-
cial de la Nación.................................................................................. 70
a) Medidas provisionales relativas a las personas en el divor-
cio y en la nulidad de matrimonio............................................. 70
b) Medidas provisionales relativas a los bienes en el divorcio y
en la nulidad de matrimonio....................................................... 72
c) Medidas provisionales en la indivisión postcomunitaria....... 75
d) Medidas cautelares relativas a los alimentos............................ 75
Capítulo III
RÉGIMEN PATRIMONIAL
1. Uniones matrimoniales........................................................................ 79
418
índice general
a) Medidas protectorias en la etapa de la indivisión postco-

munitaria......................................................................................... 80
b) Medidas provisionales ante la extinción del régimen, cuan-
do se tramita un proceso de divorcio o nulidad del matri-
monio............................................................................................... 81
1) Embargo..................................................................................... 85
2) Intervención judicial recaudadora........................................ 89
3) Secuestro de bienes.................................................................. 91
4) Inhibición general de bienes................................................... 94
5) Intervención judicial informante........................................... 99
6) Prohibición de innovar............................................................ 101
7) Prohibición de contratar......................................................... 105
8) Anotación de litis...................................................................... 107
9) Inventario................................................................................... 108
10) Administración judicial......................................................... 110
11) La medida cautelar genérica que pueda disponer el juez. 111
12) Intervención judicial de una sociedad a la cual perte-
nece uno de los cónyuges....................................................... 111
2. Uniones convivenciales........................................................................ 112
a) Equiparación con las uniones matrimoniales........................... 112
b) Requisito para poder peticionar estas medidas....................... 113
Capítulo IV
DIVORCIO Y NULIDAD DEL MATRIMONIO
1. Medidas provisionales relativas a las personas en el divorcio y

en la nulidad de matrimonio............................................................. 115
2. Medidas provisionales relativas a los bienes en el divorcio y en
la nulidad de matrimonio.................................................................. 118
Capítulo V
MEDIDAS CAUTELARES
EN ALIMENTOS
1. Medidas cautelares en alimentos: sus características y admisi-

bilidad.................................................................................................... 121
419
2. Alimentos provisionales...................................................................... 126

a) Momento en el que se pueden solicitar...................................... 128
b) Posibilidad de que el juez los imponga de oficio...................... 129
c) Características y requisitos de los alimentos provisionales... 130
1) Se conceden “inaudita parte”................................................. 132
2) Verosimilitud del derecho y peligro en la demora............. 133
3) Instrumentalidad...................................................................... 134
4) Provisionalidad.......................................................................... 134
5) Se encuentran exentos de la mediación en forma previa
a su solicitud............................................................................. 135
6) No se exige contracautela....................................................... 135
7) Momento desde el cual son exigibles................................... 136
d) Diversos procedimientos en los cuales se pueden reclamar
alimentos provisorios................................................................... 136
1) En el juicio por alimentos....................................................... 136
i) Entre cónyuges..................................................................... 136
ii) De los hijos menores de edad, matrimoniales y extrama-
trimoniales reconocidos.................................................. 139
iii) De los hijos mayores de edad, entre 18 y 21 años....... 140
iv) Entre parientes................................................................... 140
2) En el proceso por violencia familiar..................................... 140
4) En el proceso por filiación extramatrimonial..................... 142
5) En el juicio sucesorio............................................................... 148
3. Embargo preventivo............................................................................. 149
a) El embargo preventivo, por cuotas devengadas y no abona-
das al momento de dictarse la sentencia (cuotas alimenta-
rias atrasadas)................................................................................. 151
b) El embargo preventivo, por cuotas alimentarias futuras........ 152
4. Intervención judicial. Interventor judicial informante................. 158
a) Intervención judicial...................................................................... 158
b) Interventor judicial informante................................................... 166
5. Intervención judicial recaudadora..................................................... 171
6. Prohibición de innovar........................................................................ 172
7. Prohibición de contratar..................................................................... 183
8. Inhibición general de bienes............................................................... 185
9. Anotación de litis.................................................................................. 188
420
índice general
Capítulo VI
RÉGIMEN DE COMUNICACIÓN
1. Régimen de comunicación.................................................................. 191

2. Modificación del régimen de comunicación................................... 193
a) Denegación...................................................................................... 193
b) Modificación................................................................................... 196
c) Suspensión....................................................................................... 199
d) Cese................................................................................................... 207
e) Restablecimiento y revinculación................................................ 209
3. Régimen de comunicación provisorio como medida cautelar.... 217
a) El régimen de comunicación provisorio.................................... 217
b) El régimen de régimen de comunicación provisorio como
medida cautelar............................................................................. 220
1) Se diferencia de la pretensión de fondo............................... 221
2) Es instrumental......................................................................... 222
3) Es provisional............................................................................ 223
4) Es modificable........................................................................... 224
5) No requiere mediación en forma previa a su interposi-
ción............................................................................................. 225
6) Requisitos para su interposición y procedencia. Su dife-
rencia respecto de las medidas cautelares en general...... 226
i) Inaplicabilidad de los plazos legales de caducidad........ 226
ii) Improcedencia de la contracautela................................. 227
iii) Atenuación de los requisitos de verosimilitud del derecho
y peligro en la demora...................................................... 227
4. El régimen de comunicación como medida autosatisfactiva....... 228
5. El régimen de contacto virtual establecido cautelarmente.......... 230
Capítulo VII
CUIDADO PERSONAL DEL HIJO
1. El cuidado personal del hijo en el Código Civil y Comercial de

la Nación............................................................................................... 235
a) Concepto.......................................................................................... 235
b) Clases................................................................................................ 236
c) Cuidado personal compartido...................................................... 237
1) Modalidades del cuidado personal compartido................. 237
421
2) El cuidado personal compartido con la modalidad

indistinta. Principio rector establecido en la nueva
legislación................................................................................. 238
3) El cuidado personal compartido con la modalidad alter-
nada............................................................................................ 239
4) Parámetros para determinar si el cuidado personal
compartido se tendrá que fijar con la modalidad indis-
tinta o la alternada................................................................... 240
5) Proximidad o distancia geográfica entre el domicilio de
los progenitores....................................................................... 241
6) Edad del hijo.............................................................................. 241
7) Similares hábitos diarios......................................................... 242
d) Cuidado personal unilateral......................................................... 242
1) Situaciones a contemplar........................................................ 242
2) Criterios de atribución............................................................ 242
3) La prioridad del progenitor que facilite el derecho a
mantener un trato regular con el otro................................. 243
4) Edad del hijo.............................................................................. 245
5) La opinión del hijo.................................................................... 246
6) El mantenimiento de la situación existente......................... 250
7) El respeto del centro de vida del hijo.................................... 255
8) Derecho y deber de colaboración.......................................... 256
9) Derecho y deber de comunicación con el hijo.................... 256
2. Cuidado del hijo establecido de forma provisional........................ 262
Capítulo VIII
VIOLENCIA FAMILIAR
1. Ley 14.417 aplicable a la Ciudad de Buenos Aires......................... 269

2. Ley 14.509 aplicable a la Provincia de Buenos Aires..................... 274
4. Sus requisitos de admisión.................................................................. 276
a) Verosimilitud del derecho............................................................. 276
b) Urgencia en la demora................................................................... 277
5. Medidas innovadoras por parte de la jurisprudencia.................... 278
6. Incumplimiento de las medidas cautelares decretadas................. 280
422
índice general
Capítulo IX
VIVIENDA FAMILIAR
1. La vivienda familiar en las uniones matrimoniales........................ 283

2. La vivienda familiar en las uniones convivenciales........................ 286
a) Protección de la vivienda familiar o convivencial y de los
muebles indispensables de ésta.................................................. 286
b) Atribución del uso de la vivienda familiar a uno de los
convivientes.................................................................................... 287
c) Prórroga de la locación para el conviviente no locatario........ 288
d) Derecho real de habitación para el conviviente supérstite.... 289
e) Afectación de la vivienda.............................................................. 290
3. La atribución provisoria de la vivienda familiar como medida
cautelar.................................................................................................. 291
Apéndice I
JURISPRUDENCIA
1. Guarda. Familias solidarias................................................................. 297

2. Personas con discapacidad.................................................................. 298
3. Violencia familiar.................................................................................. 300
4. Divorcio y nulidad del matrimonio................................................... 310
5. Sucesiones.............................................................................................. 313
6. Alimentos............................................................................................... 314
7. Protección de personas........................................................................ 319
8. Régimen de comunicación.................................................................. 320
9. Cuidado del hijo.................................................................................... 325
10. Abuso de menores.............................................................................. 327
11. Vivienda................................................................................................ 328
12. Comunidad de bienes........................................................................ 330
13. Uniones convivenciales..................................................................... 331
Apéndice II
MODELOS DE ESCRITOS
1. Con relación a los bienes..................................................................... 335

a) Medidas provisionales con relación a los bienes anteriores
a la interposición de la demanda de divorcio.......................... 335
423
b) Interventor judicial informante................................................... 337

c) Embargo preventivo....................................................................... 339
1) Se trabe embargo preventivo.................................................. 339
2) Solicita se trabe embargo preventivo con anterioridad a
la demanda................................................................................ 342
3) Pedido de que se deje sin efecto el embargo preventivo... 345
d) Secuestro de bienes........................................................................ 347
e) Anotación de litis............................................................................ 347
1) Modelo I..................................................................................... 347
2) Modelo II.................................................................................... 350
2. Con relación a las personas................................................................ 352
a) Alimentos provisorios.................................................................... 352
1) Alimentos provisionales reclamados en un proceso de
divorcio para el cónyuge......................................................... 352
2) Alimentos provisionales reclamados para los hijos junto
con la demanda de divorcio................................................... 355
3) Alimentos provisorios reclamados con la demanda de
alimentos................................................................................... 359
4) Alimentos provisorios solicitados antes de interponer la
demanda.................................................................................... 363
5) Alimentos provisorios solicitados con posterioridad a la
interposición de la demanda................................................. 366
6) Alimentos provisorios para los nietos menores solicita-
dos conjuntamente con la demanda.................................... 367
7) Alimentos provisorios para los nietos menores solicita-
dos con posterioridad a la interposición de la demanda. 370
b) Régimen de comunicación........................................................... 372
1) Régimen de comunicación provisional para los hijos
solicitado en el trámite del proceso de divorcio................ 372
2) Progenitor no conviviente con sus hijos (fruto de una
unión convivencial) que solicita se fije un régimen de
comunicación provisional...................................................... 374
c) Atribución provisoria de la vivienda........................................... 376
1) Cónyuge que solicita la atribución provisoria de la
vivienda familiar...................................................................... 376
2) Solicitud de que se fije una renta provisoria por el uso
de la vivienda familiar............................................................. 379
d) Cuidado personal del hijo solicitado provisionalmente......... 381
424
índice general
1) Padre que solicita el cuidado personal unilateral del

hijo, de forma provisional...................................................... 381
2) Padre que solicita el cuidado personal unilateral y
provisional de sus hijos, a causa del impedimento de
contacto..................................................................................... 384
3) Abuelos que solicitan se fije un régimen de comunica-
ción provisorio para sus nietos............................................. 387
e) Violencia familiar............................................................................ 389
1) Violencia familiar por parte del padre hacia su hijo.
Exclusión del padre del inmueble que habita con la
familia (Modelo I, conforme la ley nacional 24.417)........ 389
Exclusión del padre del inmueble que habita con la
familia (Modelo II, conforme la ley provincial 14.509).... 391
Prohibición de acercamiento (Modelo I, conforme a la
ley 24.417)................................................................................. 394
Prohibición de acercamiento (Modelo II, conforme a la
ley 14.509)................................................................................. 396
5) Violencia familiar por parte del progenitor a su hijo me-
nor. Exclusión del hogar conyugal del agresor. Reinte-
gro de las víctimas al inmueble sede del hogar conyugal
(Modelo I, conforme a la ley 24.417)................................... 399
6) Violencia familiar por parte por parte del progenitor
a su hijo menor . Exclusión del hogar conyugal del
agresor. Reintegro de las víctimas al inmueble sede del
hogar conyugal (Modelo II, conforme a la ley 14.509).... 402
7) Violencia familiar por parte del padre hacia su hijo. So-
licita medidas cautelares por violencia familiar (Mode-
lo I, conforme la ley 24.417).................................................. 405
8) Violencia por parte del padre hacia su hijo. Solicita
medidas cautelares por violencia (Modelo II, conforme
la ley 14.509)............................................................................. 407
Bibliografía............................................................................................ 411
Antecedentes del Dr. Claudio A. Belluscio............................ 415
425

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Claudio A.

Medidas cautelares en familia : según el Código Civil y Comercial / Claudio

428 p. + CD-DVD ; 23 x 16 cm.

1. Medidas Cautelares. 2. Derecho de Familia . I. Título.

© 2018 Editorial García Alonso

Lavalle 1282, PB «6» Buenos Aires

Editor a cargo: Joaquín García Alonso

Impreso en junio de 2018 en La Imprenta Ya SRL,

Impreso en Argentina - Printed in Argentina

Hecho el depósito que marca la ley 11.723

El Código Civil y Comercial de la Nación se introduce de lleno en el

El quinto capítulo se dedica a las que se podrán imponer en los proce-

Aunque, también, se las podrá usar para innovar en el estado de he-

(6) ST Corrientes, 20/11/95, DJ, 1996-1-600; CJ Salta, 15/10/97, LL NOA, 1998-909.

respecto de los bienes o personas de que se trata, o para la satisfacción

la ejecución forzada(19), o torne inoficiosos(20) o inoperantes los efectos

3. SU DIFERENCIA CON OTROS INSTITUTOS

a) Con los procesos “urgentes”

(28) Kielmanovich, Jorge L.: Tutela...cit., p. 1030.

da para que el Estado —nacional, provincial o municipal— cumpla en

b) Con las medidas “autosatisfactivas”

(33) Kielmanovich, Jorge L.: Medidas...cit., pp. 18-19 y 47.

Por ello, lo que permite diferenciar a estas medidas de las cautelares,

Una última diferencia consiste en que las medidas cautelares se en-

4. MOMENTO EN QUE SE PUEDEN INTERPONER. FORMA

“Oportunidad y presupuesto. Las providencias caute-

Del primer párrafo de la norma transcripta (al igual que lo establece

lar(47) (pues la traba de estas medidas está íntimamente vinculada con el

(47) CNCiv., Sala C, 28/4/88, JA, 1988-IV-síntesis.

(1) Ferreyra de De La Rúa, Angelina: Medida...cit., p. 1297; Kielmanovich, Jorge L.:

leyes complementarias (como ser la Ley de Violencia Familiar nacional

“Las medidas cautelares familiares no se hallan supe-

asiste razón a la apelante en cuanto a que la medida, en

En consecuencia, las medidas cautelares en los procedimientos de

a) Inaplicabilidad de los plazos legales de caducidad

fondo no lo contempla, por lo que no puede la legislación de rito —de

la ley de fondo (el CCCN) no lo contempla(12) siendo —por lo tanto—

c) Atenuación de los requisitos de verosimilitud del derecho

En congruencia con ello, la jurisprudencia(18) ha dicho que “en los

d) ¿Se decretan inaudita parte?

(18) CNCiv., Sala M, 8/5/7, Derecho de Familia Revista Interdisciplinaria de Doc-

Ello, es lo que sucedería con el interventor judicial informante que,

e) Pueden ser decretadas de oficio en algunos procesos

La otra cuestión es que tal facultad deviene del principio de oficiosi-

2. LAS MEDIDAS CAUTELARES EN FAMILIA EN EL

a) Medidas provisionales relativas a las personas en el di-

“Deducida la acción de nulidad o de divorcio, o antes

Para especializada doctrina(25) las medidas que enumera el art. 721

(25) De los Santos, Mabel: La medidas provisionales de los procesos de familia en el

Una de las cuestiones más urgentes al comenzar a tramitarse el pro-

Equiparación que el Código Civil y Comercial de la Nación no efec-

b) Medidas provisionales relativas a los bienes en el divor-

“Deducida la acción de nulidad o de divorcio, o antes en

El texto de este art. 722 del Código Civil y Comercial ha variado

Tampoco se exige la contracautela para hacer efectivas estas medi-

(28) Falcón, Enrique M.: Las medidas...cit., p. 304.

juez prorrogarlo si existen dilaciones atribuibles al obrar del demanda-

(30) De los Santos, Mabel: La medidas...cit., p. 191.

Al respecto, el art. 723 del Código Civil y Comercial de la Nación