0% encontró este documento útil (0 votos)
78 vistas30 páginas

Catedra Ing Javier Roscardi

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1/ 30

UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2

Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo


Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Detectores de Humo. Parte 1

Seguridad en emplazamientos con riesgo de incendio y explosión

Los detectores que se van a exponer en esta nota y que dispongan de dispositivos
electrónicos o eléctricos requieren la adopción de unas medidas de protección
especiales en el caso de que vayan a instalarse en atmósferas que puedan contener
gases, vapores, nieblas, polvos o fibras inflamables por el riesgo de explosión que
conllevan.

Ello obliga a utilizar unas técnicas especiales de protección de acuerdo con normas UNE
y otras, respaldadas por certificados extendidos por un laboratorio acreditado para ello.

Las técnicas de protección normalizadas en España están indicadas en la Instrucción


Complementaria MI BT 026 del Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión (BOE 26-
1-1988) y son las siguientes:

 Inmersión en aceite.
 Sobrepresión interna.
 Relleno pulverulento.
 Envolvente antideflagrante.
 Seguridad aumentada.
 Seguridad intrínseca.
 Encapsulado.

Esta normativa obliga a instalar un tipo determinado de protección según el tipo de


emplazamiento cuya clasificación también está indicada.

Página 1 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Detectores de humos. Componentes de un sistema de detección

Se activan con las partículas visibles e invisibles de la combustión. Por eso también se
les denomina detectores de productos de combustión.

Los componentes de un sistema convencional de detección están esquematizados en la


NTP-40-1983 y en esencia son:

 Unos detectores agrupados en zonas (planta de un edificio, sección, sector, etc.)


y conectados a la central de control y señalización por unos bucles (línea o
circuito eléctrico que une los detectores a la central).
 Una central de control y señalización que proporciona alimentación eléctrica a los
detectores, recibe información de los mismos y genera una señalización
adecuada a la información recibida. Una central de este tipo suele tener
capacidad para varias zonas (que también puede decirse para varias líneas,
grupos o bucles de detección).
 Una serie de elementos de actuación tales como:
o avisadores ópticos y acústicos
o elementos de control
o extinción automática, etc.

Los detectores son unos dispositivos que captan un determinado fenómeno (en nuestro
caso humo) y cuando el valor de ese fenómeno sobrepasa un umbral prefijado se genera
una señal de alarma que es transmitida a la central de control y señalización de una
forma muy simple, generalmente como cambio de consumo o tensión en la línea de
detección.

En un sistema convencional, la señal proporcionada por la central es común a todos los


detectores de una zona, no pudiéndose diferenciar la activación de uno u otro detector
del bucle, línea o circuito de detección. El usuario dispone de información de la zona
donde se ha producido el fuego, pero no del punto concreto. Para identificar
individualmente cada detector, se tendría que conectar un único detector porcada zona y
por lo tanto multiplicar el número necesario de zonas por lo que se incrementaría el
tamaño de la central y la complejidad del cableado.

Con la aparición del microprocesador se ha podido desarrollar la técnica de identificación


individual de cada detector con lo que se ha pasado al sistema de detección
direccionable que nos da la dirección de un detector activado. En los sistemas
direccionables, los detectores funcionan de forma análoga a los sistemas
convencionales, es decir, analizando un determinado parámetro y generando una señal
de alarma cuando el valor de la magnitud analizada sobrepasa un determinado umbral.

Un paso adelante en los sistemas de detección se ha dado con el desarrollo de


elementos sensibles que analizan la concentración de humo (el valor de la temperatura u
otro parámetro) y proporcionan una señal proporcional a esa concentración. Esta señal
que se transmite a la central es de naturaleza continua y en términos electrónicos se

Página 2 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

llama analógica. A esos elementos sensibles se les llama sensores y sistemas


analógicos al conjunto de estos sistemas de detección. También reciben el nombre de
"inteligentes" ya que se usan sensores cn comunicación con un procesador de datos, el
cual puede tomar decisiones de acuerdo con la información proporcionada por aquellos.
El nivel de inteligencia viene definido por la complejidad del algoritmo de tratamiento de
la información y en consecuencia del programa involucrado. Tal sistema distingue fuego,
no fuego, suciedad, polvo, autoverificación, etc. La decisión se transfiere del detector a la
central, a diferencia de los sistemas convencionales en que la decisión de alarma la
tomaba el detector.

Los sistemas analógicos tienen las ventajas de detectar el incendio de forma más rápida
y la capacidad de detectar una degradación del comportamiento de los sensores lo cual
permite un mantenimiento preventivo y la consiguiente disminución de las falsas
alarmas. Sus inconvenientes son el coste elevado y una dependencia del correcto
funcionamiento del microprocesador por lo que se deberán instalar los mecanismos
necesarios que avisen de los fallos y establezcan caminos alternativos para que una
alarma de incendio sea avisada en cao de fallo del microprocesador.

Página 3 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Clasificación

Los detectores de humos suelen clasificarse en seis grupos:

Fotoeléctricos

 De haz de rayos proyectados.


 De haz de rayos reflejados.

lónicos

 De partículas alfa.
 De partículas beta.

De puente de resistencia

De análisis de muestra

Combinados

Taguchi con semiconductor

Detectores fotoeléctricos de humos

También se les denomina detectores ópticos de humos.

Su funcionamiento se basa en el efecto óptico según el cual, el humo visible que penetra
en el aparato, afecta al haz de rayos luminosos generado por una fuente de luz, de forma
que varía la luz recibida en una célula fotoeléctrica, y se activa una alarma al llegar a un
cierto nivel.

Con este tipo de detección se han de evitar cambios en las condiciones de luz ambiental
que puedan afectar a la sensibilidad del detector. Esto se puede conseguir manteniendo
el detector en un receptáculo estanco a la luz o modula do la fuente de luz.

Existen diversos tipos que se describen a continuación.

Detectores de humos fotoeléctricos de haz de rayos proyectados

En este tipo, el humo visible oscurece el haz de rayos luminosos proyectado por el emisor
disminuyendo la luz recibida en la célula fotoeléctrica del receptor situado a distancia.

Consta de un emisor de luz y su receptor correspondiente de célula fotoeléctrica, situados

Página 4 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

ambos en los extremos de la zona a proteger. Su distancia puede llegar hasta 100 metros
con una anchura de 14 metros, lo que da protección para un máximo de 1.400 m2.

También reciben el nombre de detector óptico de humos lineal.

Aplicaciones

Salas muy grandes de techo elevado, compartimentos de gran valor, zonas de


almacenamiento, zonas de sobrepresión y conductos de ventilación, fábricas, hangares y
en lugares en que la estética es importante, como en iglesias, galerías de arte y edificios
históricos.

Ventajas

 Respuesta rápida ante fuegos con humos.


 Ahorro de montaje.

Inconvenientes

Dificultad de emplazamiento en locales con ventilación o aire acondicionado, ya que


impiden que el humo llegue en condiciones de activar el detector. Problema de pérdida de
alineación si se sitúa en estructura metálica, por lo que requiere mantenimiento. Resulta
más caro si no se aprovecha toda su longitud.

Detectores de humos fotoeléctricos de haz de rayos reflejados

También reciben el nombre de ópticos de humos puntual.

La fuente de luz y la unidad receptora se incluyen en un sólo receptáculo. Constan de


fuente de luz, célula fotoeléctrica que ha de estar en ángulo recto con la anterior y un
captador de luz frente a la fuente de luz. Estos componentes están dentro de una cámara
obscura. (Ver Fig. 1)

Página 5 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Fig. 1: Detector de humos fotoeléctrico de haz reflejado en ángulo recto

Cuando entra humo, el haz de luz procedente de la fuente de luz, una parte se refracta y
otra parte se refleja con las partículas de humo. La parte reflejada se dirige hacia la
célula fotoeléctrica. El aumento de intensidad de luz en la célula activa una señal que se
transmite al panel de control y hace sonar una alarma.

En ciertas aplicaciones se emplean sistemas de muestreo de aire con detector


fotoeléctrico. Disponen de una bomba de aspiración y tubería a lo largo de la zona a
proteger. El aire aspirado se canaliza en una cámara analizadora y si la concentración
de humo alcanza de 1,5 a 3% refleja la luz hacia la célula fotoeléctrica y hace actuar a la
alarma.

El de haz reflejado no discrimina humo de partículas de polvo. Si el humo es


completamente negro no lo detecta.

Una variante del mismo es el que se muestra en la figura y que se comercializa en


España con la denominación de detector fotoeléctrico por difusión de la luz. (Ver Fig. 2)

Fig. 2: Detector de humos fotoeléctrico de haz reflejado, por difusión de la luz

Es un detector óptico de humos en el que la fuente luminosa, la pantalla y el sensor de


luz están en el mismo eje y de tal forma que en condiciones normales (cuando no hay
humo) debido a la forma de la pantalla, la luz no puede alcanzar directamente el
elemento sensor y por tanto no se genera señal de alarma. Cuando entra humo en la
cámara de medición, la luz emitida por la fuente luminosa se dispersa en todas
direcciones en parte llega al sensor.
Detectores de Humo. Parte 2

Ventajas

 Es un detector apto para toda la gama de humos detectables.


 Estabilidad ante variaciones de presión, temperatura y corrientes de aire.

Página 6 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

 Permite una detección precoz y es el más universal de todos.

Inconvenientes

Da falsas alarmas en ambientes con aerosoles, polvo, aire en movimiento, humedad


elevada, concentración de humo de cigarrillos y variación del voltaje de la corriente.

Aplicaciones

Desde fuegos latentes (pirolisis, fuegos de combustión lenta) hasta fuegos abiertos de
llama viva. Para combustiones de sólidos y líquidos con humos visibles e invisibles (caso
de llamas vivas). Ejemplos de aplicación: plásticos, cables eléctricos, madera, lana, cuero,
gasolina, aceites.

Detectores iónicos de humos por partículas beta

Estos detectores se presentaron con posterioridad a los de partículas alfa y la fuente


radiactiva de partículas beta (electrones) en este caso, es el Niquel 63.

El principio de actuación es el mismo que los de partículas alfa.

La intensidad de la fuente de radiación es baja y el flujo de corriente en la cámara de


ionización también lo es.

Estos detectores han tenido éxito en la detección de las partículas procedentes de la


combustión de alcohol, las cuales no son detectadas por el detector con partículas alfa.

Este tipo de detectores no se comercializa en nuestro país.

Página 7 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Detectores de humos por puente de resistencia

Se basan en el principio del puente de resistencia.

Se activan ante una presencia de partículas de humo y humedad sobre una rejilla con
puente eléctrico. Esas partículas al caer sobre la rejilla aumentan su conductividad y se
activa una alarma.

Estos detectores reaccionan con cualquier gas o humo.

Son poco usuales y no están considerados en Normas UNE.

Inconvenientes

Se disparan por escapes de vapor de agua o por partículas en suspensión en el aire. Por
ejemplo en hilaturas dan falsas alarmas. Excesivamente sensibles. No discriminan entre
humos y partículas en suspensión.

Aplicaciones

Se emplea más como detector de monóxido de carbono.

Detectores de humos por análisis de muestra

Consisten en una tubería que parte de la unidad de detección y se extiende por la zona a
proteger. Una bomba extractora aspira una muestra de aire y la conduce a la unidad de
detección en la cual se analiza si el aire contiene partículas de humo.

Los detectores de humo con cámara de niebla son de este tipo y en ellos se mide la
densidad por el principio fotoeléctrico y si excede de un valor predeterminado se activa una
alarma.

Es un sistema de detección poco recomendable. Se empleaba en las bodegas de los


barcos.

Son caros por la instalación y por los analizadores poco usuales que llevan.

Actualmente es inusual y se considera un modelo histórico.

Página 8 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Detectores combinados de puente de resistencia e iónico para productos de


combustión

En estos detectores la cámara de ionización se activa por las partículas de la combustión y


la resistencia de rejilla se activa por el vapor de agua producido en la combustión.

La rejilla consta de dos óxidos metálicos conductores repartidos en un substrato de vidrio.


Esta rejilla disminuye la resistencia al entrar en presencia de vapor de agua.

El aparato lleva un circuito compensador electrónico que se ajusta a los cambios de


humedad ambiente.

Estos detectores actúan si se activa la cámara iónica y la rejilla del puente de resistencia,
por lo que son menos sensibles a falsas alarmas por polvo, aerosoles, aire en movimiento y
humedad. Igual que otros detectores de humos llevan circuitos y componentes para
detectar averías y una lamparita piloto para indicar que está activado.

Detectores de gases de combustión tipo Taguchi con semiconductor

Funcionan del siguiente modo: el cristal semiconductor del tipo n (negativo) lleva
embebidas dos resistencias calefactoras que mantienen el semiconductor a unos 250º C
para que aumente el número de electrones libres. Esa temperatura sirve también para
evitar la condensación de vapor de agua en la superficie del semiconductor.

La caja externa del semiconductor es generalmente dióxido de estaño con una superficie
muy porosa en la que están atrapadas moléculas de oxígeno. Cuando el sensor está
expuesto a una atmósfera que contenga un gas oxidable (reductor), sus moléculas
reaccionan con el oxígeno atrapado, originando una liberación de electrones en la
superficie conductora. Entonces diminuye la resistencia de esa superficie y se dispara una
alarma.

Según unos ensayos realizados por Bright, encontró que este tipo de detector se activó y
dio la alarma sólo 1 vez en 26 incendios de prueba.

No discrimina bien entre gases o vapores de ciertas sustancias y humos.

Página 9 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Detectores de Humo. Parte 3

Principios básicos de instalación de detectores de humos

Si la temperatura en el techo supera los 37,8º C (100º F) asegurarse que el detector está
homologado para temperaturas superiores. Hoy día hay modelos con un campo de
temperaturas muy amplio.

No deberían instalarse en zonas que puedan causar falsas alarmas.

Estabilidad: Controlarlos al menos tres meses antes de su conexión definitiva al sistema


de alarma para desechar ciertas localizaciones que dan falsas alarmas.

Espaciado: Variable según modelos. Pueden hacerse ensayos. Las normas españolas
(Norma Básica de la Edificación, Proyecto de Norma UNE 23008/1, Regla técnica para
las instalaciones de detección automática de incendios de CEPREVEN y Norma
Tecnológica de la Edificación) indican los requisitos sobre este punto.

Los detectores instalados en los conductos de retorno de la ventilación o aire


acondicionado no reciben suficiente densidad de partículas de humo, debido al efecto de
dilución que se origina al aspirar aire de distintas dependencias. Es por lo que solo
sirven y con limitaciones como detectores de incendio en los propios conductos de
aireación, pero no en otras zonas abiertas.

Evitar instalarlos en zonas con barreras de calor, bajándolos por debajo de esa barrera.
Hay tablas y gráficos en la bibliografía que nos dan la distancia para contrarrestar este
efecto.

Si existe sistema de ventilación o aire acondicionado colocarlos junto al registro de


retorno o salida.

Se recomienda el montaje de los detectores una vez el local o edificio funciona con todas
sus instalaciones.

Existen Tablas que dan la distancia de espaciado de los detectores para alturas de
techos y fuegos determinados. Información que se suele suministrar por los fabricantes.

Los detectores de humos pueden emplearse hasta una velocidad del aire de 5 m/s salvo
que el certificado de aprobación indique un valor mayor.

Evitar su instalación en lugares sometidos a vibraciones.

El efecto de la humedad limitará su instalación en caso de formarse condensaciones.

El humo, el polvo o los aerosoles similares producidos por ciertas actividades pueden
provocar alarmas intempestivas si se instalan detectores de humos. En estos casos

Página 10 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

deberán instalarse detectores térmicos.

El empleo de detectores de humo en locales con una altura superior a 12 metros deberá
justificarse adecuadamente. Pueden emplearse en locales de gran altura combinados
con detectores de llamas.

Página 11 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Localización

En cuanto a la localización prevalece lo indicado en la Norma Básica de la Edificación


(Art. 4.2 apartado 4.2.1) que se complementa con lo recomendado en el Proyecto de
Norma UNE 23-008/1 y la Regla técnica para las instalaciones de detección automática
de incendios de CEPREVEN.

A título comparativo puede consultarse la Normativa norteamericana NFPA-72E-1 982


que puede servir de apoyo complementario para algunos aspectos de la normativa
anterior.

En general se recomienda un detector cada 60 m2. Hay factores correctores según la


altura de techo. A mayor altura deberían instalarse menos detectores por efecto del cono
de humo.

Un factor influyente es también el número de renovaciones de aire del local.

Los detalles en cuanto a densidad e implantación de los detectores automáticos de


incendio puntuales vienen en el apartado 3.4 del citado Proyecto de Norma UNE 23-
008/1. En él se especifica la instalación según los tipos de techos, corrientes de aire por
instalaciones de climatización y su distribución.

Calefacción, ventilación y aire acondicionado

En habitaciones, edificios, etc. en que exista una ventilación forzada, los detectores no se
deberán colocar en las zonas en que el aire de los difusores pueda diluir el humo antes de
que llegue al detector. Los detectores se colocarán de forma que les llegue la corriente de
aire que va hacia las aberturas de retorno. Esto puede requerir detectores adicionales, ya
que colocando detectores solo cerca de las aberturas de retorno de aire, puede dejar el
resto de la zona con protección inadecuada cuando se cierra el sistema de aire. Se debe
consultar a los fabricantes de los detectores.

En las zonas por encima de los techos que están diseñadas como retornos comunes para
los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado, el aire que circula por ellas
va a mayor velocidad que el de la habitación inferior. Por esta razón se reducirá la
separacíón entre detectores.

Los detectores situados en las zonas empleadas para conducir el aire ambiental no se
emplearán como sustitutos para proteger unas zonas abiertas porque:

El humo de un incendio puede que no penetre en la zona cuando el sistema de ventilación


se pare.

El detector será menos sensible ante una situación de incendio en la habitación origen del

Página 12 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

incendio, debido a la dilución con aire limpio.

Consideraciones especiales

La selección e instalación de detectores de humo tendrá en consideración las


características de diseño del detector y las zonas en que se van a instalar, de forma que
se eviten falsas alarmas o el no funcionamiento después de su instalación.

Los detectores del tipo de haz de rayos proyectado se deberán sujetar firmemente sobre
superficies estables para evitar un funcionamiento falso o errático debido a movimiento. El
haz de rayos será diseñado de forma que pequeños movimientos angulares no afecten al
funcionamiento normal con humo y que no causen falsas alarmas. Normalmente se
deberá tolerar un movimiento de 1/4 de grado, equivalente a 1/2 grado de ángulo circular
incluyendo ambos sentidos. Este tipo de detectores no accionan la alarma (pero sí una
señal de avería) cuando el camino del haz de rayos de luz queda interrumpido u
obscurecido, por lo que ese camino se debe mantener siempre libre de obstáculos
opacos.

Los detectores de humo que lleven un sensor de temperatura fija integrado se


seleccionarán en función de la temperatura máxima que pueda alcanzarse en el techo. El
fabricante debe indicar el apropiado para cada temperatura, el cual es recomendable lleve
un código de colores en función de las temperaturas esperadas.

Los detectores de humo no se deberán instalar en zonas donde la temperatura ambiente


normal pueda llegar a sobrepasar los 38º C o bajar de 0º C a menos que hayan sido
homologados para instalación a temperaturas superiores o inferiores.

En la instalación se tendrá en cuenta las fuentes normales que puedan producir humo,
tales como procesos de fabricación, de forma que se puedan evitar posibles falsas
alarmas.

En almacenamientos con estanterías altas será necesario considerar la instalación de

Página 13 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

detectores en varios niveles de las estanterías para asegurar una respuesta rápida en
caso de incendio.

Si estos detectores accionan un sistema de extinción se recomienda el seguimiento de la


norma NFPA 231 Standard for Rack Storage of Materials (Norma para almacenamiento
de materiales en estanterías).

La Regla Técnica de CEPREVEN (apartado 3.9) considera los almacenamientos en


estanterías con altura superior a 10 m., indicando las recomendaciones pertinentes.

Pruebas iniciales de la instalación y recepción de las instalaciones

La instalación de detectores se deberá probar en su lugar de operación, según las


instrucciones del fabricante.

Se deberá determinar la sensibilidad de los detectores y en caso de estar fuera del campo
homologado se reemplazarán. Si el detector es regulable, se ajustará a la sensibilidad
aceptada o se cambiará por otro.

La Regla Técnica de CEPREVEN dispone en el apartado 5.2 las recomendaciones


referentes a estos puntos.

Pruebas periódicas

Todos los detectores de humos se deberán probar al menos una vez al semestre.

Las recomendaciones de CEPREVEN sobre las verificaciones periódicas de las


instalaciones están en el apartado 5.3. de la citada Regla Técnica.

Página 14 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Limpieza y mantenimiento

Los detectores necesitan una limpieza periódica para quitar el polvo y suciedad
acumulada. La frecuencia de esta operación dependerá del tipo de detector y de las
condiciones ambientales del local. Para cada tipo de detector, la limpieza, verificación,
funcionamiento y ajuste de la sensibilidad se deberá hacer sólo después de consultar las
instrucciones del fabricante. Normalmente la sensibilidad debe ajustarse en laboratorio.

Este aspecto se trata en los apartados 6.1 de la Regla Técnica para las Instalaciones de
Detección Automática de Incendios de CEPREVEN y en el apartado de Mantenimiento,
de la Norma Tecnológica de la Edificación.

Pruebas posteriores a una alarma

Todos los detectores serán puestos en condiciones de servicio lo antes posible después
de cada prueba o alarma y se mantendrán en condiciones normales de funcionamiento.

Los detectores que requieran rearme o reposición se deberán rearmar o reponer, lo antes
posible después de cada prueba o alarma. Todos los detectores que han estado
expuestos a un incendio se deberán probar.

Página 15 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Detectores Térmicos - 1º Parte

Se han desarrollado en el mundo una serie de dispositivos mecánicos, eléctricos y


electrónicos para la detección de los cambios generados por el fuego para evitar la
propagación del mismo y principalmente para la protección de las personas.

Existen diferentes tipos de dectores automáticos en función del elemento generado por el
fuego que detectan. En este y en los capítulos siguientes se explicarán los diferentes tipos
y sus principios de funcionamiento.

DETECTORES TÉRMICOS

Los detectores térmicos son los más antiguos . Comenzaron a emplearse con el
desarrollo de rociadores automáticos. Un rociador es una combinación de un detector de
incendio activado por el calor y un dispositivo extintor; cuando el sistema rociador
incorpora indicadores de caudal de agua conectados al sistema de control de alarma de
incendio. Los indicadores de caudal detectan el flujo de agua por las tuberías o el
subsiguiente cambio de presión cuando el sistema actúa.

También existen detectores sin función extintora que simplemente hacen sonar una
alarma. Aunque este tipo de detectores es el más barato y es el que tiene el menor índice
de falsas alarmas del resto de los detectores, su respuesta es más lenta que el resto.

Sus mejores aplicaciones son la detección de fuegos en pequeños sectores restringidos;


donde pueden producirse fuegos con elevado desprendimiento de calor y rápido
desarrollo, en zonas donde las condiciones ambientales no permitan el empleo de otros
dispisitivos o donde la velocidad de detección no sea el objetivo prioritario.

Los detectores responden a la energía calorífica transportada por convección y


generalmente se sitúan en o cerca del techo. La respuesta se produce cuando el
elemento de detección alcanza una temperatura fija determinada o cuando se llega a una
velocidad específica de cambio de temperartura. Se diseñan para detectar un cambio
prederminado de una propiedad física o eléctrica de un material o de un gas.

Existen básicamente varios tipos: termostáticos, de compensación de velocidad,


termovelocimétricos, neumáticos en línea cerrado, combinados y de efecto termoélectrico.

DETECTORES TERMOSTÁTICOS

Se accionan para dar la alarma cuando la temperatura del elemento operacional alcanza
un valor específico. La temperatura del aire es generalmente mayor que la de regulación
debido a que se necesita un cierto tiempo para que el aire eleve la temperatura del
elemento hasta el valor prefijado. A este fenómeno se lo denomina inercia térmica. Estos

Página 16 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

detectores cubren una amplia gama de temperaturas de funcionamiento que va desde los
57 ºC en adelante.

Los metales eutécticos o las aleaciones de bismuto, plomo, estaño y cadmio, que funden
rápidamente a una temperatura prefijada, pueden emplearse como elementos operativos
para la detección de calor funcionando como un elemento fusible. Al fundirse el elemento,
se desprende la cubierta del orificio, el agua fluye en el sistema y se inicia la alarma.

También se emplea un metal eutéctico para activar un detector eléctrico de calor. El metal
se emplea frecuentemente como soldadura para asegurar un muelle en tensión. Cuando
el elemento se funde, la acción del resorte cierra los contactos y se inicia la alarma. Los
dispositivos que emplean metales eutécticos no pueden reponerse. El dispositivo o
elemento operativo debe reemplazarse luego de funcionar.

Como altermativa a la detección termóstática del tipo puntual, se desarrollaron varios


métodos de detección el línea. El detector emplea dos conductores de acero que se
mantienen separados por aislamiento termosensible en un circuito normalmente abierto.
Están bajo tensión y forman un cable único mediante una vaina trenzada. Caundo se
alcanza la temperatura de diseño, el aislamiento se funde, se cierra el circuito y se inicia
una alarma. Después de haber funcionado, la sección fundida del cable debe
reemplazarse para restaurar el sistema.

Otro elemento o dispositivo operativo de este tipo de detectores e la utilización de un


bimetálico. Cuando dos piezas metálicas con distintos coeficientes de dilatación están
adheridas y se calientan, la dilatación diferencial provoca una flexión hacia el metal de
menor coeficiente. De esta forma se cierra un circuito, abierto en condiciones normales. El
metal de menor dilatación más empleado es el invar, aleación del 36 % de niquel y 64 %
de hierro. Para el de mayor dilatación pueden emplearse aleaciones de
manganeso/cobre/níquel, níquel/cromo/hierro o acero inoxidable. Los bimetales se
emplean como elementos operativos de distintores detectores de temperatura fija.
Generalmente dichos detectores son de dos tipos: lámina bimetálica y disco bimetálico de
acción de resorte.

En los del tipo lámina bimetálica, cuando se calienta la lámina, esta se deforma en la
dirección del punto de contacto. Con un bimetal determinado, la amplitud del juego entre
contactos determina la temperatura de funcionamiento.

El segundo tipo emplea como elemento un disco bimetálico de forma cóncava en un


estado libre. Generalmente, se une un colector de calor a la armadura del detector para
acelerar la transmisión de calor desde el aire del reciento al bimetal. Cuando se calienta el
disco, se provocan esfuerzos que invierten la curvatura, la cual se transforma en convexa.
Esto genera una rápida acción que cierra los contactos de la alarma. El disco no forma
parte del circuito eléctrico.

Todos los dectectores de calor que emplean elementos bimetálicos se autorreponen


automáticamente después de funcionar, cuando la temperatura ambiente cae por debajo
del punto de funcionamiento.

Página 17 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Detectores Térmicos - 2º Parte

DETECTORES DE COMPENSACIÓN DE VELOCIDAD

Es un detector térmico que actúa cuando la temperatura que lo rodea alcanza un nivel
predeterminado, independietemente de la rapidez de subida de la misma.

Consiste en una envoltura tubular de un metal que se expande longitudinalmente a


medida que se calienta y un mecanismo de contacto que cierra cuando se alcanza una
cierta elongación. Un segundo elemento metálico en el interior del tubo ejerce sobre los
contactos una fuerza opuesta que tiende a matenerlos abiertos. Las fuerzas están
equilibradas de forma que, a bajas tasas de aumento de temperatura, se dispone de más
tiempo para que el calor se transmita al elemento interior, el cual impide que los contactos
se cierren hasta que todo el dispositivo se ha calentado al nivel de la temperatura
regulada. Pero si la velocidad de subida es rápida, no se dispone de tiempo para que el
calor penetre en el elemento interior, el cual ejerce un efecto menor, obteniéndose un
cierre de contactos cuando todo el dispositivo se ha calentado a un nivel inferior. De esta
forma se compensa la inercia térmica. Como en los casos anteriores estos detectores
también se autoreestablecen automáticamente.

DETECTORES TERMOVELOCIMÉTRICOS

Los detectores de temperatura fija no inician la alarma hasta que la temperatura del aire
cerca del techo no supera el punto de diseño. El detector de velocidad de aumento de
temperatura (termovelocimétrico) funciona cuando la velocidad de incremento excede un
valor prefijado, alrededor de 7.8 ºC por minuto. Se diseñan para compensar los cambios
normales en la temperatura ambiente que se producen en condiciones habituales.

En un detector neumático, el aire caliente en el interior de un tubo o cámara se dilata,


aumentando la presión . Esto ejerce una fuerza sobre un diafragma que cierra los
contactos de alarma. Si el tubo o cámara están herméticamente cerrados, pequeños
incrementos en la temperatura ambiente y/o una disminución de la presión barométrica
provocan que el detector actúe independientemente de la velocidad de aumento de la
temperatura. Para que esto no ocurra estos detectores tiene un pequeño orificio que libera
las sobrepresiones que se generan cuando se producen lentas subidas de temperatura o
caídas de la presión barométrica. Los respiraderos se dimensionan de forma que cuando
la temperatura cambia rápidamente, como en caso de incendio, la velocidad de dilatación
exceda la de venteo y la presión suba. Cuando la subida de temperatura excede 7-8 ºC
por minuto, la presión se transforma en acción mecánica mediantge un diagrama flexible.

Página 18 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

DETECTORES DE TIPO NEUMÁTICO EN LÍNEA CERRADO

Consiste en un tubo capilar que contiene una sala especial saturada de hidrógeno
gaseoso. A temperaturas normales la mayor parte del hidrógeno se mantiene en la sal
porosa y la presión en el tubo es baja. Cuando la temperatura, en cualquier punto del
tubo, aumenta, se libera hidrógeno de la sal, subiendo la presión intera y disparándose un
presostato de diafragma. Este sistema vigila la integridad del tubo capilar con una
segundo presostato que controla las bajas presiones presentes a temperaturas normales.

DETECTORES COMBINADOS

Tienen más de un elemento para responder al fuego. Se diseñan para actuar por medio
de cualquier elemento o mediante una combinación parcial o toale de ambos elementos.
Un ejemplo es un detecro térmico que funciona según los principios de temperatura fija y
de velocidad de aumento. La ventaja que presenta es que el elemento termovelocimétrico
actúa con prontitud a un fuego de rápido desarrollo y el termostático responde a otro de
lento desarrollo. El tipo más común emplea una cámara de aire hemisférica con venteo y
un diagrama flexibe, para la función de velocidad de subida, y una lámina bimetálica o una
ballestilla sujeta por un metal eutéctico, para la función de temperatura fija. Cuando el
elemento termostático alcanza el punto de funcionamiento, la lámina bimetálica flexa
hasta el punto de contacto o bien se funde el metal eutéctico, liberando el resorte que
cierra los contactos.

DETECTORES DE EFECTO TERMOELÉCTRICO

Este tipo de detectores es un dispositivo que utiliza un elemento sensor consist en uno o
más termistores que producen un cambio en la resistencia eléctrica como respuesta a un
aumento de temperatura. Este cambio de resistencia es detectado por un circuito
electrónico asociado y el detector responde cuando la resistencia varía a una velocidad
anormal (detector termovelocimétrico) o cuando la resistencia llega a un valor
preestablecido (detector termostático).

Los detectores termovelocimétricos de este tipo utilizan dos termistores, uno de ellos
expuesto a cambios de la temperatura ambiente. Cuando la temperatura cambia
rápidamente porque se ha producido un fuego, la del termistor expuesto aumenta más
rápidamente que la del interior de referencia, lo que genera un cambio en la resistencia
que hace que el detector dispare la alarma. La mayoría de los detectores
termovelocimétricos está diseñada con otra función de temperatura fija, de modo que
aunque la temperatura subiera más lentamente 8 ºC por minuto, el detector funcionaría
cuando el termistor externo alcanzara una temperatura dada.

Página 19 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Detectores Térmicos - 3º Parte

DETECTORES DE HUMO

Son detectores que actúan con mucha más rapidez que uno térmico en la mayoría de los
incendios. Estos detectores se clasifican según su principio de funcionamiento.
Encontramos los de ionización y los de fotoelectricidad. Los que funcionan según el
principio fotoeléctrico responden con más rapidez al humo generado por fuegos de baja
energía (rescoldos), ya que generalmente se producen partículas de mayor tamaño. Los
que actúan según el principio de ionización poseen una respuesta algo más rápida a
fuegos de alta energía (con llama), donde se producen elevadas cantidades de partículas
de menor tamaño.

DETECTORES DE IONIZACION

Son detectores de tipo puntual. Se constituyen de una pequeña cantidad de material


radiactivo que ioniza el aire en una cámara detectora, convirtiendo el mismo en conductor
y permitiendo que pase una corriente entre dos electrodos cargados. Esto proporciona a
la cámara una conductancia eléctrica bastante efectiva. Cuando las partículas de humo
entran en la zona de ionización, disminuyen la conductancia del aire, adhiriéndose a los
iones, causando una reducción en su movilidad. El detector responde cuando la
conductancia baja de un nivel prefijado.

DETECTORES FOTOELÉCTRICOS

El principio utilizado para este tipo de detectores es aquel que se da cuando la presencia
de partículas de humo en suspensión generadas durante el proceso de combustión,
afecta a la propagación de un haz luminoso a través del aire. Esto nos permite detectar la
presencia de un fuego de dos formas: por oscurecimiento de la intensidad luminosa a
medida que pasa el haz y por dispersión del haz luminoso.

* Principio de oscurecimiento
Los detectores que operan según este principio incorporan una fuente luminosa , un
sistema de colimación del haz de luz y un dispositivo fotosensible. Cuando las partículas
de humo penetran en el haz, la luz que alcanza el dispositivo fotosensible se reduce y la
alarma se activa. La fuente generalmente es un diodo emisor de luz. Constituye una
fuente fiable y duradera que funciona con baja intensidad de corriente. Los diodos
pulsadores pueden generar suficiente corriente para su uso en equipos detectores,
funcionando a niveles de energía aún más bajos.

En la práctica , la mayoría de los detectores de oscurecimiento de luz son del tipo haz
luminoso y se emplean para la protección de grandes espacios abiertos. Se instalan con
la fuente luminosa en un extremo de la zona que hay que proteger y el receptor (fotocélula

Página 20 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

o relé) en el otro extremo. En algunas aplicaciones, se emplean espejos para determinar


la zona de cobertura, dirigiendo el haz según la trayectoria deseada. Por cada espejo
empleado, la longitud nonimal del haz debe reducirse progresivamente en un tercio. Los
detectores de haz proyectados se instalan generalmente cerca del techo.

* Principio de dispersión
Cuando las partículas de humo penetran en el haz, se produce dispersión de la luz. Los
detectores que emplean este principio son generalemente puntuales. Contienen una
fuente luminosa y un dispositivo fotosensible, dispuestos de tal forma que los rayos
luminosos no inciden, normalmente, en el segundo. Cuando las partículas entran en la
luz, ésta se dispersa sobre el dispositivo fotosensible, provocando la respuesta del
detector.

* Principio de la cámara de niebla


Un detector según este principio generalmente es del tipo de muestreo. Una bomba de
aire aspira una muestra de este, de la/s zona/s protegida/s hacia una cámara de alta
humedad dentro del detector. Una vez elevada la humedad de la muestra de aire a un
elevado valor, la presión baja ligeramente. Si las partículas están presentes, la humedad
se condensa sobre ellas formando niebla en la cámara. La densidad de dicha niebla se
mide según un principio fotoeléctrico. Cuando dicha densidad es mayor que un valor
prefijado, se produce la respuesta del detector.

DETECTORES DE GAS

Se producen muchos cambios en el contenido gaseoso ambiente durante un incendio. En


ensayos de incendio se observó que los niveles detectables de gas se alcanzan después
que los de humo y antes que los de calor. Se emplean dos principios de funcionamiento,
semiconductor y elemento catalítico.

PRINCIPIO DEL SEMICONDUCTOR

Funciona respondiendo a la oxidación o reducción de los gases que generan sus cambios
eléctricos en un semiconductor. El cambio de conductividad provoca la activación de la
alarma.

PRINCIPIO DEL ELEMENTO CATALÍTICO

Estos detectores contienen un material que permanece sin cambio, pero acelera la
oxidación de los gases combustibles. El siguiente cambio de temperatura del elemento
inicia la alarma.

DETECTORES DE LLAMA

Estos detectores reaccionan ante la aparición de la energía radiante visible para el ojo
humano (aproximadamente entre 4000 y 7000 angströms) o a la energía radiante que
está fuera del campo de visión humana. Estos detectores son sensibles a las brasas

Página 21 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

incandescentes y a las llamas que radian energía de suficiente intensidad y naturaleza


espectral para motivar la reacción del detector.

Debido a su respuesta detectora rápida, suelen emplearse generalmente en zonas


altamente peligrosas, tales como plataformas de carga de combustibles, áreas de
procesos industriales, cámaras hiperbáricas, áreas con techos altos y atmósferas
propensa a explosiones o fuegos rápidos. Debido a que deben ser capaces de ver el
fuego, pueden ser bloqueados por objetos situados frente a ellos, aunque el detector de
infrarrojos posee cierta capacidad para detectar la radiación reflejada de las paredes.

DETECTOR DE INFRARROJOS

Consiste básicamente en un sistema de filtro y lentes que se emplea para apantallar


longitudes de onda indeseables y focalizar la energía incidente en una célula fotovoltaica
o fotorresistiva sensible a la energía infrarroja. Reaccionan al componente total de
infrarrojos de la llama, sola o en combinación con el parpadeo de la llama en la banda de
frecuencia de 5 a 30 Hz.

El mayor problema en el empleo de este detector que recibe la radiación total del IR es la
posibilidad de interferencia de la radiación solar en la regió del IR. Si se sitúan en zonas
de sombra solar, no es necesario filtrar o apantallar los rayos del sol.

DETECTOR DE ULTRAVIOLETRAS

Emplea generalmente como elemento sensible un dispositivo de estado sólido, carburo de


silicio o nitruro de aluminio, o um tubo lleno de gas. Es insensible a la luz solar y artificial.

Detectores Térmicos - 4º Parte

CONDICIONES AMBIENTALES QUE INFLUYEN EN LA RESPUESTA DE LOS


DETECTORES

Existen condiciones ambientales que condicionan la selección, localización y capacidad


de respuesta de los detectores. La elección o emplazamiento inadecuados de un tipo de
detector puede crear problemas, que van desde la ausencia de alarma hasta excesivas
falsas alarmas.

Página 22 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

AMBIENTE CIRCUNDANTE

Cuando se elige un detector para un lugar específico se debe tener en cuenta el ambiente
al que va a estar expuesto en condiciones normales. Por ejemplo un detector de IRA o UV
que se emplee en lugares donde se lleven a cabo operaciones de soldadura con arco o
autógena, puede generar falsas alarmas debido a la presencia de energía radiante.
Además, los detectores que responden a partículas de humo son especialmente
propensos a falsas alarmas, de fuentes tales como humos de cocina, cigarrillos o escapes
de automóviles.

CALEFACCIÓN, VENTILACIÓN Y AIRE ACONDICIONADO

En habitaciones, edificios, etc donde existe ventilación forzada, no deben colocarse en


lugares donde el aire de los difusores pueda diluir el humo antes de alcanzar al detector.
Deben colocarse de forma que favorezcan el flujo de aire hacia las aberturas de retorno.
Esto puede que exija detectores adicionales, puesto que si sólo se sitúan cerca de las
aberturas de retorno, el equilibrio de la zona puede quedar inadecuadamente protegido
cuando se detenga el sistema de aire forzado.

ELECCIÓN DEL DETECTOR

Al planificar un sistema de detección de incendios, los detectores deben elegirse teniendo


en cuenta los siguientes factores:

 Tipo de fuegos potenciales que puedan producirse


 Tipo y cantidad de combustible presente
 Posibilidad de fuentes de ignición
 Condiciones ambientales
 Valor de la propiedad a proteger

En general, los detectores térmicos poseen el más bajo costo y tasa de falsas alarmas,
pero son los más lentos de respuesta. Debido a que el calor generado por pequeños
fuegos tiende a disiparse rápidamente, los detectores térmicos tienen su mejor aplicación
en la protección de espacios confinados o directamente a las distancias recomendadas o
con separaciones inferiores para obtener una respuesta más rápida. La temperatura de
funcionamiento de un detector térmico debe ser al menos 14 ºC superior a la máxima
temperatura ambiente esperada en la zona protegida.

Los detectores de humo son más costosos que los térmicos, pero responden más
rápidamente a los incendios. Son más adecuados para la protección de grandes espacios
abiertos porque el humo no se disipa con tanta rapidez como el calor en un espacio de las
mismas dimensiones. Se instalan según una disposición en rejilla, o según las
condiciones que prevalezcan en función de las corrientes de aire.

Los detectores de humo por ionización son útiles cuando se producen incendios con
llama. Los detectores de humo fotoeléctricos tienen una mejor utilización en lugares que

Página 23 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

tengan posibilidad de ser afectados por incendios de rescoldos o incendios que afecten al
aislante de cable de pirólisis a baja temperatura (PVC).

Los detectores de llama ofrecen una respuesta extremadamente rápida, pero se activa
con cualquier fuente de radiación dentro de su campo de sensibilidad. Si se aplican
inadecuadamente, las tasas de falsas alarmas pueden ser elevadas. Debido a que son
dispositivos que necesitan ver el fuego, debe cuidarse que no sean bloqueados
accidentalmente por equipos o materiales almacenados. Su sensibilidad va en función del
tamaño de la llama y distancia de ésta al detector. Aunque son relativamente caros, son
idóneos para proteger áreas con presencia de polvos o vapores explosivos o inflamables,
debido a que normalmente está dotados de carcasas a prueba de explosiones.

INSTALACIÓN DE DETECTORES

Una vez elegido el detector más adecuado, el siguiente paso es instalarlo en la zona que
hay que proteger. Los del tipo puntual se emplazan generalmente no más de 10 cm del
techo o paredes.

Cuando se instalan detectores térmicos a las distancias certificadas, los tiempos de


detección son aproximadamente equivalentes al tiempo de funcionamiento de los
rodicadores normalizados de 74 ºC del tipo de palanca y varilla. Si se desea una
respuesta más rápida, se debe reducir la separación del detector. También, cuando los
techos sean altos, o cuando su construcción no sea lisa, la separación debe reducirse
adecuadamente. La norma NFPA 72 E- Norma para los detectores automáticos de
incendio- establecen mayor información específica sobre la instalación de detectores.

SEPARACIÓN DE DETECTORES TÉRMICOS EN TECHOS ALTOS

Debido a que el aire al ascender durante el incendio es diluido por el aire frío, se ha creído
siempre que los detectores térmicos deberían ser instalados muy juntos en techos altos
para conseguir el mismo tiempo de respuesta que el que proporcionarían en un techo de
2,5 a 3 metros de altura. Los datos de múltiples ensayos demuestran que los detectores
térmicos deberían estar más juntos, cuando se instalan en un techo alto, para alcanzar el
mismo tiempo de respuesta que si estuvieran en techos de 3 metros. La norma NFPA 72
E exige la reducción de la separación cuando los detectores de calor están montados en
techos de más de 3 metros de altura.

Cuande se instale cualquier tipo de detector térmico, deben tenerse en cuenta las fuentes
de calor en el espacio protegido que podrían causar falsas alarmas. Por ejemplo, los
detectores térmicos deberían situarse apartados de unidades calefactoras y hornos, de
donde se espera salgan oleadas de aire caliente.

La instalación adecuada para los detectores de humo es más importante que la de los
detectores térmicos, debido a que en un incendio de rescoldos, el transporte de humo
está fuertemente influenciado por la corriente de aire convectiva en la zona protegida. A
pesar de que se pueda instalar una parrilla, como punto de arranque, debe tenerse

Página 24 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

cuidado en colocar adecuadamente los registros de suministro de calor y los de retorno


del aire. Los detectores de humo deberían colocarse aparte de las turbulencias
producidas por las salidas de aire caliente. Su colocación debería favorecer el aire de
retorno, debido a que el aire de retorno dirigirá el humo hacia el detector, y que la
velocidad del aire de regreso, tiende a ser menor.

APLICACIONES ESPECIALES

Los detectores de humo de conductos de aire se instalan en los conductos de retorno de


los sistemas HVAC (calefacción, ventilación y aire acondicionado), procedente de un
fuego en el edificio. Detectado el incendio, el sistema de control asociado detiene los
sopladores de circulación, o los invierte a situación de escape de humos.

Se emplean también dispositivos activados por humo para cerrar automáticamente


puertas contra incendios en edificios, a fin de limitar la propagación del humo en caso de
incendio. Esto puede conseguirse con detectores montados en el techo de los corredores,
conectados a dispositivos de apertura situados en las puertas y activados eléctricamente,
o mediante detectores de humo integrados en las propias puertas.

Cuando se instalen detectores de humo, debe considerarse también la estratificación del


humo. El humo puede estratificarse debajo del techo, debido a grandientes de
temperatura, o a corrientes de aire a lo largo del techo. La instalación de detectores de
gas es similar a la de los de humo puesto que los gases del incendio tienden a circular
con el humo y se ven afectados de forma similar por las corrientes de convección en el
espacio protegido. Deben emplazarse también lejos de fuentes de gases o vapores
oxidables, tales como por ejemplo, disolventes hidrocarbonados o rociadores de aerosol,
que podrían causar falsas alarmas.

Los requerimientos de los detectores de llama son distintos a los de calor o humo, que las
distancias de separación no son importantes para los dispositivos de línea de
visualización. Deben emplearse de forma que puedan ver la radiación luminosa que
emane de cualquier punto del espacio protegido. Debido a que el cono de visión varía
según el diseño del detector , deben seguirse las recomendaciones del fabricante para la
cobertura de la zona. Necesitan apantallarse o situarse de forma que lo vean fuentes de
energía radiante que no procedan de fuegos y puedan provocar falsas alarmas.

Página 25 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Ejercicio práctico

PREVENCIÓN DE INCENDIO

1. Complete el triángulo de fuego

2. Una con flechas según corresponda

Clases de fuego Tipos de materiales

Madera
A
Corcho

Nafta
B
Algodón

Aceite
C
Aluminio

Tablero eléctrico
D

Página 26 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

3. Marque con una cruz verdadero o falso

Verdadero Falso
El matafuego de agua es muy
1 eficiente para apagar fuegos de tipo
C.
Siempre se debe atacar el fuego en
2
dirección al viento.
Es preferible usar varios extintores
3
juntos, en vez de uno tras otro.
Para los fuegos del tipo D se puede
4
utilizar cualquier matafuego.
Antes de dar aviso a los bomberos,
5
verifique si alguien ya lo ha hecho.
Al ver fuego corra, contra la pared,
6
con el cuerpo más erguido posible.
Descienda siempre, nunca ascienda.
7
Utilice siempre la escalera.
El agua actúa principalmente por
8
enfriamiento
El matafuego tipo BC es efectivo
9
para exteriores
El extintor más efectivo para fuegos
10
de origen eléctrico es el tipo BC
El dióxido de carbono, luego de ser
11
utilizado, no deja residuo.
Cuando se utilizan matafuegos BC
12 en interiores es importante tener en
cuenta la falta de oxígeno.
Las espumas son muy eficientes
13
para fuegos de clase B.
El polvo químico es conductor de la
14
energía eléctrica.
El polvo químico es corrosivo pero
15
no genera residuo luego de utilizarlo.
Los polvos químicos no son aptos
16
para equipos delicados ni costosos.
Los halones son extintores eficaces
17
para los tres tipos de fuegos (A;B;C)

Página 27 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Sistemas de detección de incendio convecional y direccionado

La diferencia fundamental entre los dos tipos de sistemas radica en la habilidad de


identificar la ubicación específica de cualquier detector. En un sistema convencional el
panel de control solamente identifica la zona donde se genera la alarma; en un sistema
direccionable cada detector y módulo tienen una dirección única . La elección entre estos
dos tipos de sistemas es relativamente sencilla y cae en los dos extremos siguientes:

 En pequeñas instalaciones la selección adecuada es la de sistemas


convencionales mientras que en grandes areas protegidas la utilización de
sistemas análogos direccionables es la norma o estandard.
 Cuando se trata de seleccionar que sistema utilizar en instalaciones medianas la
cosa se complica ya que la tendencia no está bien definida y cualquiera de los dos
tipos de sistemas se puede utilizar. A medida que el costo de la tecnología de la
computación ha ido cayendo la tecnología análoga direccionable se ha vuelto mas
económica situandola en una opción viable en cuanto a costo para sistemas mas
pequeños.
 En el pasado reciente los fabricantes de sistemas concentraron todos sus
esfuerzos en desarrollar mas su linea de detección análoga direccionable, la cual
ofrece distintas ventajas por sobre la linea convencional, particularmente en
grandes y complejas instalaciones en donde los instaladores, ocupantes del
edificio y brigada contra incendio se benefician de la inherente sofisticación y
consecuente mejora funcional y habilidad de los sistemas análogos direccionables.

A través de los años nuestro conocimiento de los incendios mejoró sustancialmente de


forma que actualmente entendemos mejor el comportamiento del mismo asi como la
energía que libera y los identificadores o firmas del fuego. Todos los fabricantes han
concentrado sus esfuerzos en encontrar tecnologías que permitan mejorar la velocidad de
detección sin que se incrementen las falsas alarmas.

El costo de implementación de sistemas de detección de incendio es altamente


dependiente del tamaño de la instalación. Como regla general en sistemas de mas de seis
zonas, los análogos direccionables se vuelven la mejor opción económica, debido a que el
sobre costo pagado por la utilización de detectores análogos direccionables y paneles
mas sofisticados se amortiza mediante la reducción de los costos de instalación y
mantenimiento..

Actualmente los fabricantes de sistemas han desarrollado sistemas basados en la


tecnología de redes “peer to peer” que mediante la utilización de nodos de red (que en su
mínima expresión funcionan como paneles autónomos), que hacen posible que se
reduzca la longitud de trayectorias y cantidad de conductores que traen como
consecuencia la reducción de los costos de implementación de los sistemas
ademas de mejorar la funcionalidad de los mismos. Con este tipo de sistemas la
conectividad e integración a otros sistemas del edificio tales como los sistemas de control
de acceso, iluminacion y de aire acondicionado calefacción y ventilación asi como de
iluminación se facilita y mejora notablemente.

Página 28 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Transferencia tecnológica

Al haberse incrementado la cantidad de unidades fabricadas de detectores análogos


direccionables y con la reducción de costos alcanzada por la industria de los
microprocesadores se ha logrado que cada detector cuente con un microprocesador en
donde se le cargan algoritmos tales como compensación automatica de ensuciamiento,
suavisado o recorte de señales y ajuste de sensibilidad que permiten mejorar la velocidad
de respuesta y reducir las falsas alarmas, logrando mayor inteligencia en los detectores.

Está tecnología hasta hace dos años solo estaba disponible en los detectores análogos
direccionables; históricamente los detectores convcencionales no eran mas que un
interruptor de dos estados con un nivel de sensibilidad pre establecido en fabrica.

Aprovechando la reducción de costos de los microprocesadores los fabricantes lideres


decidieron adicionarles a cada detector convencional un microprocesador con los mismos
algoritmos que antes únicamente estaban disponibles en los detectores análogos
direccionables, con lo cual se lográ reducir sustancialmente la brecha tecnologica que
existia entre ambos sistemas mejorando radicalmente el comportamiento de los sistemas
convencionales.

Actualmente en el mercado de la detección convencional es factible contar con detectores


inteligentes con reporte convencional, que distingan entre alarmas reales y alarmas
espureas provenientes de perturbaciones transitorias. Esta nueva generación de
detectores convencionales tambien transmiten una señal de alerta de mantenimiento a los
paneles o modulos de zona de los mismos ademas de que tambien se puede ajustar en
forma individual la sensibilidad de cada detector en forma remota mediante el uso de un
control remoto.

Actualmente en esta nueva generación de detectores inteligentes con reporte


convencional ya estan disponibles tambien los detectores multicriterio en los que se
analiza en forma simultanea la firma o identidad del fuego correspondiente al humo y la
identidad correspondiente a la señal de calor generado en un incendio permitiendo que el
detector en forma dinámica ajuste su sensibilidad en forma automática en función de las
condiciones ambientales propias del área protegida.

Este proceso se conoce como algoritmo de aclimatación del detector.

Conclusión

En conclusión la brecha tecnológica entre las dos tecnologías dominantes en los sistemas
de detección de incendio se ha reducido permitiendo que la velocidad de respuesta y la
inmunidad a las alarmas espureas o falsas sea de la misma calidad en ambos sistemas.
Con esto tanto pequeñas como medianas y grandes instalaciones pueden ser protegidas
con sistemas de detección confiables y de alta calidad.

Página 29 de 30
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES INSTALACIONES 2
Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo
Carrera de Arquitectura CATEDRA ING. JAVIER ROSCARDI

Página 30 de 30

También podría gustarte