DEPRESION
DEPRESION
DEPRESION
Definición
Enfermedad o trastorno mental que se caracteriza por una profunda tristeza, decaimiento
anímico, baja autoestima, pérdida de interés por todo y disminución de las funciones
psíquicas.
Ayudar a una persona con depresión puede ser todo un desafío. Si una persona cercana
sufre depresión, es posible que sientas impotencia y que te preguntes qué debes hacer.
Aquí te explicamos cómo brindar apoyo y comprensión, y cómo ayudar a que tu ser querido
reciba los recursos que necesita para afrontar la depresión. Puedes hacer lo siguiente:
Para muchas personas con depresión, los síntomas suelen ser lo suficientemente graves
para causar problemas evidentes en las actividades cotidianas, como el trabajo, la escuela,
las actividades sociales o las relaciones con otras personas. Otras personas pueden
sentirse infelices o tristes en general sin saber realmente por qué. Los niños y los
adolescentes pueden mostrar signos de depresión al estar irritables o malhumorados en
lugar de tristes
Promueve el tratamiento
Brinda apoyo
Recuerda que la depresión de tu ser querido no es culpa de nadie. No puedes solucionar la
depresión de la persona, pero tu apoyo y tu comprensión pueden ayudar.
Qué puedes hacer por tu ser querido:
* Fomenta que siga con el tratamiento. Si un familiar o un amigo tuyo están en tratamiento
para la depresión, ayúdales a recordar que tomen los medicamentos recetados y que
asistan a las consultas.
* Disponte a escuchar. Hazle saber a tu ser querido que deseas comprender cómo se
siente. Cuando la persona quiera hablar, escucha con atención, pero evita dar consejos u
opiniones o juzgarla. Tan solo escuchar y ser comprensible puede ser una poderosa
herramienta de curación.
* Brinda un refuerzo positivo. Las personas con depresión pueden juzgarse de forma severa
y encontrar errores en todo lo que hacen. Recuérdale a tu ser querido sus cualidades
positivas y cuánto significa esta persona para ti y para otros.
* Ofrece ayuda. Es posible que tu familiar o tu amigo no puedan ocuparse bien de ciertas
tareas. Dale sugerencias acerca de tareas específicas que estarías dispuesto a hacer o
pregunta si hay alguna tarea en particular de la que te podrías encargar.
* Ayuda a crear un entorno con poco estrés. Crear una rutina regular puede ayudarle a una
persona con depresión a sentir que tiene más control. Ofrécele hacer un horario para las
comidas, los medicamentos, la actividad física y el sueño, y ayúdale a organizar las tareas
del hogar.
* Busca organizaciones de ayuda. Varias organizaciones ofrecen grupos de apoyo,
asesoramiento psicológico y otros recursos para la depresión. Por ejemplo, la National
Alliance on Mental Illness (Alianza Nacional de Enfermedades Mentales), los programas de
asistencia para empleados y muchas organizaciones religiosas ofrecen ayuda para los
problemas de salud mental.
* Alienta la participación en prácticas espirituales si es adecuado. Para muchas personas, la
fe es un elemento importante para recuperarse de la depresión, ya sea a través de la
participación en una comunidad religiosa organizada o de creencias y prácticas espirituales
personales.
* Haz planes juntos. Pídele a tu ser querido que vayan juntos a dar un paseo, que vean una
película juntos o que realicen juntos algún pasatiempo u otra actividad que antes disfrutaba.
Sin embargo, no intentes obligar a la persona a que haga algo.
La persona que está deprimida no es capaz de disfrutar, ser «feliz» o animarse en esos
momentos. A alguien que no es capaz de levantarse, por ejemplo, por un problema físico,
no le dices que se levante porque sabes que no podrá. Le ayudas y le proporcionas el
apoyo para que pueda hacerlo.
La misma idea es válida para la depresión. La persona no decide sentirse «feliz» o «infeliz»,
ni tampoco desanimarse o dejar de disfrutar de las cosas. No es tan fácil como cambiar el
«chip» y volver a sentirse bien. Motiva y dale apoyo para que pueda retomar poco a poco la
vida que tenía antes.
Muchas personas que no se encuentran bien, ya sea por depresión o ansiedad, tratan de
poner buena cara y hacen un esfuerzo muy grande para que los demás no lo noten. Esto no
quiere decir que no estén sintiéndose mal emocionalmente. Puede ser un malestar invisible
para ti o para otras personas, pero ese malestar existe interiormente.
¿Por qué alguien con depresión quiere esconder su estado?, te preguntarás. La respuesta
puede estar en que tiene miedo a la incomprensión de los demás, que siente vergüenza o
culpabilidad, que está preocupado/a por la posibilidad de que los demás le vean como
incompetente (en el trabajo, en la vida en general…) o porque las personas cercanas
(amigos, pareja, compañeros de trabajo…) le puedan rechazar por estar así.
Una situación o un problema puede parecerte una nimiedad a ti, pero para una persona con
depresión puede ser una montaña enorme que superar. Cuando la depresión acecha uno
no es capaz de afrontar las situaciones o los problemas que van apareciendo de la misma
forma que lo podrías hacer tú o igual que lo hacía la misma persona antes.
4. «Estás así porque quieres», «No tienes razón para estar deprimido» o «Si lo tienes todo,
¿por qué estás así?»
La depresión no se elige. Uno no escoge sentirse así. Se trata de una condición que sin un
tratamiento no va a mejorar. Hay una serie de factores que hacen que una persona acabe
padeciendo una depresión: genéticos o biológicos (una predisposición que conjuntamente
con experiencias vitales pueden disparar su aparición) y ambientales (eventos o situaciones
en la vida, como por ejemplo la pérdida de un ser querido).
En ocasiones puede parecer que una persona con depresión está muy pendiente de sus
pensamientos y se preocupa mucho sobre su vida. Aunque así lo parezca y dé la sensación
de que no se preocupa por los demás, nada más lejos de la realidad. La persona sigue
preocupándose por otras personas, pero se siente mal, sin fuerzas y sin motivación. Decirle
este tipo de cosas aumentará su culpa y vergüenza y sentirá que se está minimizando su
dolor.
Este tipo de frases o comentarios no ayudan a una persona que está con depresión, ya que
pretende dar una visión optimista pero no es así en la realidad. La persona siente que está
superada por el presente y su percepción del futuro es oscura. Tampoco es tan sencillo si la
persona ha perdido a un ser querido o ha vivido una situación traumática. No «pasará»
como si nada ni será fácil sobreponerse a ello. Es posible hacerlo, pero se necesita ayuda
psicológica para conseguirlo.
No, las personas no nos deprimimos a veces. Todos podemos estar tristes o desmotivados
en algún momento, pero no es lo mismo a deprimirse. La depresión es algo mucho más
serio y engloba más síntomas que la pura tristeza.
No hay una única forma (ni ninguna perfecta) de responder a alguien que te explica que
tiene depresión. Algo tan simple como escuchar y tratar de comprender sus sentimientos,
manteniendo la mente abierta sin juzgar, puede ser de mucha ayuda. Algunas ideas básicas
que puedes tener en cuenta para saber qué decir a alguien con depresión las encontrarás a
continuación:
Puedes apoyar y ofrecerle tu comprensión a esa persona, pero reconoce que no puedes
darle la solución a su depresión. Ya es muy importante que le muestres tu preocupación por
él, mostrarle que no está solo/a y que te gustaría poder ayudarle (de la forma en la que
él/ella lo necesite).
Estar ahí significa escuchar, prestar atención a lo que te explica, no juzgar y mostrar
empatía (asentir, reflejar sus sentimientos…). El hecho de mostrarle tu disposición a hablar,
también implica ponerte en contacto con esa persona (pregúntale cómo está, si quiere
hablar…), ya que si lo tiene que hacer ella le costará mucho y puede que finalmente no lo
haga.
Es posible que pienses que puedes ayudarle de una forma determinada. Quizás para ti es
una buena ayuda, algo positivo. Sin embargo, puede que no sea lo que necesita la persona
que está deprimida. Pregunta antes cómo puedes ayudar para saber exactamente qué
puedes hacer.
4. «He visto que últimamente estás _____ (triste, decaído…). ¿Hay algo de lo que te
gustaría hablar? o ¿Hay algo que te preocupa?»
Muéstrale que te preocupas, que percibes que no está bien y ofrécele un espacio para
hablar si así lo desea.
5. «Tengo la sensación de que algo te preocupa y de que estás pasando por un momento
difícil. ¿Quieres compartirlo conmigo y hablamos un rato?»
Abre la puerta a que pueda compartir contigo sus sentimientos, sus preocupaciones y su
dolor. Dándole muestras de que estás pendiente de él/ella y de que te interesas por lo que
le pasa es un primer paso para que se sienta más cómodo/a al hablar de su depresión.
6. «Me preocupa verte así y me gustaría poder ayudarte. ¿Estarías dispuesto a hablar con
un _____ (psicólogo/a, médico…) sobre lo que te está pasando?»
Motívale a que busque ayuda profesional para poder mejorar los síntomas de su depresión.
Para poder mejorar el estado de ánimo, superar la apatía, el cansancio y el desinterés o la
incapacidad para disfrutar, es necesario seguir un tratamiento adecuado para la depresión.