Hora Santa Por Las Familias

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HORA SANTA POR LAS FAMILIAS

CANTO DE ENTRADA
CANTO AL ESPIRITU SANTO

CANTO DE MEDITACION
LECTURA DEL EVANGELIO

SACERDOTE: Dios no es un ser solitario, es una Familia formada por el Padre y el Hijo y el
Espíritu Santo, y la Iglesia, Pueblo Santo de Dios, es la familia de Dios en la Tierra. La
familia, a su vez, es imagen de Dios, es una alianza de personas a las que se llega por
vocación amorosa del Padre que invita a los esposos a una «íntima comunidad de vida y
de amor», cuyo modelo es el amor de Cristo a su Iglesia.

La familia que se inicia con el amor del hombre y la mujer, surge radicalmente del misterio
de Dios. Esto corresponde a la esencia más íntima del hombre y de la mujer, y a su natural
y auténtica dignidad de persona. La familia misma es el gran misterio de Dios. Como
«Iglesia doméstica», es la esposa de Cristo. La Iglesia universal y dentro de ella cada Iglesia
particular, se manifiestan más inmediatamente como esposa de Cristo en la «Iglesia
doméstica», y en el amor paterno y materno, amor fraterno, amor de una comunidad de
personas y generaciones.

Por eso, hermanas y hermanos, vamos ahora a contemplar el Misterio de Cristo Esposo en
su humanidad eucarística, y por Él y en Él, contemplemos agradecidos el misterio de
nuestra familia. Con nuestros cantos y oraciones, aclamemos el misterio del amor de
Cristo, que ha querido quedarse con nosotros para caminar juntos por la vida; pidamos
perdón a Dios por las infidelidades a su plan de amor, démosle gracias a Dios por el don
del matrimonio y la familia, y alabémoslo por su misericordia. Participemos con gran fe y
alegría en este encuentro con Cristo vivo, camino de conversión, comunión y solidaridad
para nuestras familias.

EXPOSICION DE JESUS EUCARISTIA


CANTO PAN DE VIDA

SACERDOTE: En la Sagrada Eucaristía, Tú estás todo entero, todo vivo, mi bien amado
Jesús, tan plenamente como estabas en Betania. Como estabas en medio de los Apóstoles,
¡igual estás aquí, mi bien amado y mi todo! ¡Oh! No estemos jamás fuera de la presencia
de la Sagrada Eucaristía ni un solo instante. AMÉN.

Momento de silencio…
NAIN: La fe y la obediencia de José y María nos sirven de ejemplo para nuestras vidas.
¿Cuántas veces el Señor nos dice algo y no le hacemos caso? Queremos hacer nuestra
voluntad y no la de Él. Por nuestra fragilidad humana nos hemos apartado de su camino
sin darnos cuenta, y nuestra familia no es luz para la sociedad. Reconozcamos que no
hemos sabido cuidar esa obediencia y fe que nos enseñó la Sagrada Familia de Nazaret. En
presencia del Señor, reconozcamos en silencio nuestras fallas y nuestros pecados, porque
hemos permitido la desobediencia en nuestra familia, en nuestra mente, en nuestro
corazón. Pidamos perdón por nuestra falta de entusiasmo, de generosidad, de entrega en
la tarea de promover y defender a las familias.

CANTO: SOLO DEDES PERDONAR

SACERDOTE: Ahora, expresemos al Padre con sinceridad algunas cosas que en la vida de
nuestras familias y de nuestra sociedad han oscurecido el plan de Dios. Después de cada
petición, cantamos PERDÓN, PERDÓN, PERDÓNAME SEÑOR.

KENIA: Por las veces en que, como Iglesia, no hemos puesto especial atención a la
vocación y misión de la familia y no hemos promovido a sus integrantes a participar de
acuerdo al plan de Dios, en la vida eclesial, cultural, social, política y económica. PERDÓN,
PERDÓN, PERDÓNAME SEÑOR.

ANA: Por permitir que se pierda la riqueza que sólo las familias pueden aportar a la vida
de la Iglesia y de la sociedad, y por no valorar su papel decisivo en la defensa de la vida, en
la educación y en la formación de la sociedad. PERDÓN, PERDÓN, PERDÓNAME SEÑOR.

FRANCIS: Por las discriminaciones de las que son objeto las familias en dificultades o en
una situación irregular dentro de la Iglesia, sin tomar en cuenta que también son parte del
Pueblo de Dios y están llamadas a la salvación. PERDÓN, PERDÓN, PERDÓNAME SEÑOR.

MADELING: Por la falta de compromiso de las familias cristianas con el resto de la


sociedad, al no darle el ejemplo que deben, según el plan de Dios. PERDÓN, PERDÓN,
PERDÓNAME SEÑOR.

DIANA: Por la esterilización, a veces programada, de hombres y mujeres, sobre todo de


las más pobres y marginados, que es practicada a menudo de manera engañosa. PERDÓN,
PERDÓN, PERDÓNAME SEÑOR.
ORADORA 1: Por las veces en que el hombre y la mujer han optado por vivir su amor fuera
del matrimonio, sin aceptar el plan de Dios para los esposos y para la familia. PERDÓN,
PERDÓN, PERDÓNAME SEÑOR.

ORADORA 2: Por el pecado de tantos adulterios y divorcios, que rompen la unidad del
matrimonio y destruyen la vida y la paz de los hijos y de las familias. PERDÓN, PERDÓN,
PERDÓNAME SEÑOR.

ORADORA 3. Por el rechazo y el menosprecio a la maternidad de la mujer y las veces en


que se le ha abandonado y dejado sola con su maternidad; por el pecado del aborto y de
la anticoncepción, a los que a veces es orillada. PERDÓN, PERDÓN, PERDÓNAME SEÑOR.

ORADORA 4: Por el pecado del abandono de los hijos, del maltrato de ellos y la falta de
amor a los padres, que no tienen la conciencia de ese gran regalo que Dios les da.
PERDÓN, PERDÓN, PERDÓNAME SEÑOR.

TERMINACION DEL CANTO PERDÓN

SACERDOTE: El deber de santificación de la familia cristiana, tiene su primera raíz en el


Bautismo y su expresión máxima es la Eucaristía, a la que está íntimamente unido el
Matrimonio cristiano». Volver a encontrar y profundizar tal relación es del todo necesario
si se quiere comprender y vivir con mayor intensidad la gracia y las responsabilidades del
matrimonio y de la familia cristiana. La Eucaristía es la fuente misma del matrimonio
cristiano. En efecto el Sacrificio Eucarístico representa la alianza de amor de Cristo con la
Iglesia, en cuanto sellada con la sangre de la Cruz, y en este sacrificio de la Nueva y Eterna
Alianza, los cónyuges cristianos encuentran la raíz de la que brota, que configura
interiormente y vivifica desde dentro, su alianza conyugal.

NAIN: Que la Sagrada Familia, imagen y modelo de toda familia humana, nos ayude a cada
uno a caminar con el espíritu de Nazaret; que ayude a cada núcleo familiar a profundizar
su misión en la sociedad y en la iglesia mediante la escucha de la Palabra de Dios, la
oración y la fraterna comunión de vida. ¡Que María, Madre del Amor hermoso, y José,
custodio del Redentor, nos acompañen a todos con su incesante protección!
Como familia, tenemos en la asamblea dominical un lugar privilegiado de unidad. En dicha
asamblea, las familias cristianas viven una de las manifestaciones más cualificadas de su
identidad y de su «misterio» de «Iglesias domésticas», cuando los padres participan con
sus hijos en la única mesa de la Palabra y del Pan de Vida. Unidos a Jesús, agradezcamos
en silencio a Dios Padre este don que nos une más como familia.

Momento de silencio…

SACERDOTE: Llenos de agradecimiento, expresemos algunas de las muchísimas cosas con


las que Dios ha bendecido a la humanidad por medio de las familias. Demos gracias al
Señor por su designio sobre la vocación y la misión de las familias, y por lo que
representan en la vida de la humanidad y de la sociedad.
Respondemos diciendo: TE DAMOS GRACIAS, PADRE.

KENIA: Padre, Hijo y Espíritu Santo, Familia Divina: te damos gracias por brindarnos hoy la
oportunidad de contemplar tu imagen en la familia, por todo lo que nos permites ver de ti
en ella.
TODOS: TE DAMOS GRACIAS, PADRE.

ANA: Te damos gracias porque los esposos forman una sola carne al unirse en
matrimonio, convirtiéndose en los padres que orientan y educan a sus hijos, para que
lleguen a ti en el camino de la vida, mediante la oración, la participación en la Eucaristía y
el ejemplo de fe, esperanza y amor a Dios.
TODOS: TE DAMOS GRACIAS, PADRE.

FRANCIS: Te damos gracias por las familias que saben acoger con amor a sus hijos, por su
esfuerzo en educarlos y guiarlos hacia ti.
TODOS: TE DAMOS GRACIAS, PADRE.

MADELING: Te damos gracias, por la mujer-esposa y el hombre-esposo que unen


irrevocablemente su destino, en una relación de recíproca entrega al servicio de la
comunidad de la vida.
TODOS: TE DAMOS GRACIAS, PADRE.

CANTO AGRADECIMIENTO

DIANA: Te damos gracias por las familias que viven fieles a ti, en medio del sufrimiento y
la separación de sus miembros.
TODOS: TE DAMOS GRACIAS, PADRE.
ORADOR 1: Te damos gracias por las familias que rezan el Rosario para bien propio y de la
humanidad, que saben que en María tienen a una Madre corredentora que los guía hacia
su hijo Jesús.
TODOS: TE DAMOS GRACIAS, PADRE.

ORADOR 2: Te damos gracias por las familias que ejercen su apostolado en la Iglesia, por
sentirse cuerpo de Cristo y que son objeto y sujeto de evangelización progresiva y
permanente TODOS: TE DAMOS GRACIAS, PADRE.

ORADOR 3: Te damos gracias por haber elegido a nuestras familias para vivir el don de tu
gracia y así alimentados por ti, poner los cimientos de una nueva primavera para las
familias del tercer milenio.
TODOS: TE DAMOS GRACIAS, PADRE

CANTO AGRADECIMIENTO

SACERDOTE: ORAR CON MARÍA POR LAS FAMILIAS comencemos nuestro caminar bajo la
protección de la Santísima Virgen. Invoquémosla diciendo:
TODOS: ESCÚCHANOS, SANTA MADRE DE DIOS.

SACERDOTE: Santa Madre de Dios y Madre nuestra: te pedimos para que nuestras familias
sean verdaderas Iglesias domésticas y santuarios en donde la vida sea acogida con amor y
generosidad.
TODOS: ESCÚCHANOS, SANTA MADRE DE DIOS.

CANTO CUANTAS VECES

SACERDOTE: Intercede por las familias desintegradas, divididas, en situaciones difíciles e


irregulares, para que vuelvan a ser comunidad de vida y amor, se acerquen lo más posible
al plan de Dios para la vida familiar, y se reconcilien y sanen.
TODOS: ESCÚCHANOS, SANTA MADRE DE DIOS.

SACERDOTE: Por los hijos huérfanos de padres vivos, para que encuentren por tu gracia el
amor de sus padres y crezcan en el seno de la familia unida.
TODOS: ESCÚCHANOS, SANTA MADRE DE DIOS.

SACERDOTE: Intercede por los jóvenes, para que consagren su amor a Dios y no teman
comprometerse en el sacramento del Matrimonio, fundando así familias sanas y fuertes.
TODOS: ESCÚCHANOS, SANTA MADRE DE DIOS.
CANTO CUANTAS VECES

SACERDOTE: Por todas las familias no cristianas, para que, con tu ayuda, algún día
reconozcan a Jesús como único Señor y Salvador.
TODOS: ESCÚCHANOS, SANTA MADRE DE DIOS.

SACERDOTE: Te pedimos que nos ayudes a difundir la grandeza del don de la vida
concebida, a luchar contra la mentalidad y la práctica anticonceptiva y abortiva. Intercede
por las mujeres que han abortado y haznos mensajeros del amor de Dios para ellas.
TODOS: ESCÚCHANOS, SANTA MADRE DE DIOS.

SACERDOTE: por nuestros hermanos cristianos perseguidos que han perdido a sus seres
queridos en esta lucha, por los que huyendo han perdido la vida, tengan el eterno
descanso y paz para seguir con fe y humildad el seguimiento a Cristo.
TODOS: ESCÚCHANOS, SANTA MADRE DE DIOS.

CANTO CUANTAS VECES

Momento de silencio

SACERDOTE: ORACIÓN POR LAS FAMILIAS


Dios, Trino y Uno, en quien encuentra origen y fundamento toda relación familiar,
conserva y fortalece en el amor a la familia mexicana, y aparta de ella los signos de muerte
y destrucción que la amenazan, para que promueva siempre los dones de la vida, la
justicia y la paz. Haz que todos nosotros favorezcamos siempre la institución familiar,
reforzando su estabilidad y tutelando sus derechos, para que, mediante el amor y el
trabajo, seamos los nuevos hombres y mujeres del México nuevo que anhelamos. Señor:
concede que cada una de nuestras familias sea una comunidad de vida y amor, mediante
la escucha de la Palabra, la oración, la comunicación y la ayuda mutua, a ejemplo de la
Sagrada Familia. Que nuestra Madre Santísima María de Guadalupe, nos acompañe en el
empeño de hacer de nuestras familias lo que Tú quieres y nosotros deseamos. Por
Jesucristo nuestro Señor. Amén.

HIMNO A LA FAMILIA

Voz de José: Hijitos que se encuentran ante Jesús en la Sagrada Hostia, realmente vivo,
escucha cada latido de su corazón y sabe sus pensamientos…arde de amor por cada uno
de vosotros pequeños y ruega al Padre Eterno por todas sus súplicas al estar ante Su
presencia, yo soy padre también y padre de sus familias, soy poderoso intercesor. ¿No se
olviden de mi…busquen el silencio, el silencio fue mi compañía en la tierra y por eso fui
protector y custodio de los Sagrados Corazones de Jesús y María, así ustedes también
serán protectores de la vida sobrenatural y divina de su alma, y para la de sus seres
queridos, lo comprenden hijitos?

HIMNO A LA FAMILIA

¡JESÚS JOSÉ Y MARÍA OS DOY EL CORAZON Y EL ALMA MIA!

BENDICION CON JESÚS SACRAMENTADO

CANTO DE SALIDA: ERES MADRE.

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